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2007-06-01 |
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la
República del 15 de junio de 2007
El 15 de junio de 2007 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de
la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia de todos sus miembros:
doctor Óscar Iván Zuluaga Escobar, Ministro de Hacienda y Crédito Público, doctor
José Darío Uribe Escobar, Gerente General y los Codirectores, doctores Carlos Gustavo
Cano Sanz, Juan José Echavarría Soto, Juan Mario Laserna Jaramillo, Fernando Tenjo
Galarza y Leonardo Villar Gómez, en la cual se discutió la situación inflacionaria y se
tomaron decisiones relacionadas con las tasas de interés de intervención del Banco. A
continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en la reunión.
1. Antecedentes
a. Desarrollos recientes de la inflación
En el mes de mayo la inflación anual al consumidor se situó en 6,23%, por fuera
del rango meta establecido por la Junta Directiva del Banco para diciembre de este año
(3,5% - 4,5%). Ello, a pesar de que se interrumpió la tendencia ascendente de la
inflación, tanto en el grupo de alimentos como en el índice de precios al consumidor
(IPC) sin alimentos. Si bien el promedio de los tres indicadores de inflación básica (sin
alimentos, núcleo 20 y sin alimentos ni regulados) se redujo de 5,29% en abril a 5,21%
en el último mes, también se ubicó por encima del rango meta de inflación.
La inflación anual de transables se mantuvo alrededor del 2% a lo largo del año
a pesar de una apreciación de 13% en el año corrido, mientras que la de no transables
sin alimentos ni regulados presentó nuevamente un ligero repunte, al situarse en 5,1%.
Los aumentos se observaron principalmente en arriendos pero también en otros
subgrupos relacionados con la vivienda y la salud. Desde septiembre, mes en el que
2
alcanzó un punto mínimo, la inflación anual de no transables sin alimentos ni regulados
ha aumentado cerca de 90 puntos básicos.
El comportamiento de los alimentos explica cerca del 77% de lo ocurrido con el
índice global de precios al consumidor en lo corrido del año, y por ello es necesario
sopesar la importancia relativa de elementos transitorios o permanentes en la evolución
de sus precios.
Los alimentos cerraron el mes con una inflación anual de 10%, muy cercana a la
del mes de abril, debido al comportamiento de los alimentos perecederos (tubérculos,
hortalizas, frutas y legumbres). Se trata de un patrón anticipado, al ceder los efectos del
fenómeno de El Niño.
Sin embargo, los incrementos en los precios de otros grupos de alimentos
podrían ser menos transitorios. De hecho, el precio de los alimentos procesados,
incluyendo carne y comidas fuera del hogar, continuó aumentando, tal y como lo viene
haciendo desde marzo del año pasado. Los aumentos recayeron principalmente en la
carne de res y sus sustitutos, lo cual sugiere que se mantienen los efectos de la mayor
demanda venezolana y el proveniente de la fortaleza de la demanda interna. También se
presentaron aumentos en la inflación de comidas fuera del hogar. Dentro del rubro de
alimentos procesados se registró un buen comportamiento en los precios de los
alimentos importados y/o más directamente afectados por precios externos.
b. Contexto externo, crecimiento y variables financieras
Los mercados externos mostraron una mayor volatilidad, como consecuencia del
incremento en la percepción de riesgo asociado a posibles presiones inflacionarias, tanto
en los Estados Unidos como en la mayoría de países desarrollados. El repunte del riesgo
se debió en parte a los mejores indicadores en la industria, el comercio y el empleo en
las últimas semanas, junto con los incrementos en los precios de la gasolina y los
alimentos. A este hecho se sumaron los ajustes recientes en las tasas de interés por parte
de varios bancos centrales, lo que afectó el desempeño de los mercados de activos y de
divisas y produjo un repunte de las tasas de interés en los mercados internacionales. La
3
economía mundial muestra una fortaleza superior a la esperada y la probabilidad de
incrementos en las tasas de interés externas ha aumentado.
A pesar de lo anterior, los factores fundamentales como términos de intercambio
y crecimiento de los socios comerciales son ahora más favorables para Colombia. Así
mismo, no se esperan cambios importantes en los flujos de capital de largo plazo hacia
el país.
Los indicadores disponibles sobre industria, construcción y comercio confirman
un muy buen desempeño de la economía colombiana en el primer trimestre del año. Lo
anterior, sumado al dinamismo de los sectores agropecuario y de servicios del gobierno
y a la información que divulgó el Departamento Administrativo Nacional de Estadística
(DANE) sobre el crecimiento de obras civiles en el primer trimestre de 2007 (42,7%),
llevó a que el equipo técnico del Banco estime que el crecimiento para el primer
trimestre podría estar por encima del 7%. Por el lado de la demanda, la contribución de
la inversión y el consumo de los hogares es similar. El consumo estaría creciendo
alrededor del 8%, un ritmo semejante al observado en la segunda mitad de 2006.
Factores como el crecimiento del crédito y las cifras preliminares de importaciones
hacen pensar que el dinamismo se ha mantenido en estos meses.
La cartera total del sistema financiero en mayo continuó creciendo a un ritmo
anual del 34%, con signos parciales de moderación reciente, principalmente en el
crédito ordinario. En los últimos dos meses las entidades financieras continuaron
fondeándose con captaciones y con liquidación de TES. Respecto a la cartera en
moneda extranjera, las cifras a mayo muestran una menor expansión a la observada un
mes atrás (de US$ 115 millones frente a US$ 565 millones).
La Junta ha incrementado paulatinamente las tasas de interés REPO desde abril
del año pasado, pero la tasa DTF a 90 días y otras tasas activas y pasivas han crecido
mucho menos; varias de ellas han incluso descendido en términos reales y las tasas
reales activas se mantienen en niveles históricamente bajos. Hay convicción de que el
incremento en las tasas REPO comenzará a sentirse con más fuerza sobre las demás
4
tasas de la economía en los próximos meses.
Las tasas de interés nominales pasivas se mantuvieron sin cambios en mayo, en
tanto que las tasas activas aumentaron. El incremento en el caso de las de consumo y
tarjetas puede estar vinculado al reajuste en la tasa de usura.
Las condiciones propicias para el crecimiento de la demanda agregada continúan
vigentes. Por su parte, la demanda externa se mantiene fuerte y los términos de
intercambio continúan siendo favorables. Estos elementos han mitigado el efecto de la
apreciación sobre los sectores transables.
2. Discusión y opciones de política monetaria
En desarrollo de la discusión, se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo
anual de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas
por el Banco; (ii) el comportamiento de la inflación de los bienes no transables sigue sin
mostrar una tendencia hacia la baja; (iii) el equipo técnico del Banco ha elevado su
proyección de crecimiento del PIB para el año, reflejando la importante dinámica que
viene registrando la demanda agregada que supera las proyecciones iniciales; (iv) las
proyecciones del equipo técnico del Banco sugieren una probabilidad no despreciable
de que la inflación se sitúe por encima del rango meta fijado por la Junta, a pesar de que
la inflación probablemente disminuirá en el segundo semestre del año; y (v) la
apreciación de la tasa de cambio no se ha reflejado en los precios de los bienes
transables.
Se destacó que la economía colombiana sigue mostrando una importante
dinámica que llevó al equipo técnico a ajustar al alza sus proyecciones para el
crecimiento del PIB en el primer trimestre del año. Los indicadores disponibles
muestran que la inversión y el consumo siguen comportándose favorablemente y que no
se han presentado cambios importantes en el contexto internacional que afecten de
manera negativa los términos de intercambio. Se estima que continúa presente el riesgo
de presiones inflacionarias de demanda, si bien en el segundo semestre se espera que se
5
hagan más evidentes los efectos de los aumentos de las tasas de interés.
Se destacó que el crédito continúa mostrando un crecimiento importante, con
alguna moderación en las últimas semanas.
Los principales puntos de divergencia entre los miembros de la Junta se refieren
a los siguientes aspectos: (i) las posibilidades de reversión de los precios de los
alimentos en lo restante del año; (ii) el comportamiento de los precios de los bienes
transables y el efecto de la revaluación del peso; y (iii) la duración del mecanismo de
transmisión de aumentos anteriores en las tasas de interés de intervención sobre las tasas
de interés de mercado y la conveniencia de hacer ajustes adicionales en la presente
sesión.
Algunos directores expresaron su preocupación por la situación del crecimiento
de los precios de los alimentos y la posibilidad de que la caída prevista para el segundo
semestre sea menor que la inicialmente proyectada al concentrarse exclusivamente en
los precios de los alimentos perecederos. Esto debido a que tanto el efecto de la
demanda de alimentos procedente de Venezuela como el de los altos precios
internacionales pueden ser más duraderos. En contraste, otros directores destacaron que
los precios de algunas materias primas de los biocombustibles, han venido cediendo
terreno a nivel internacional, como es el caso del azúcar, lo cual sería de prever que
pueda ocurrir con el resto más adelante. Algo similar puede ocurrir con el precio del
maíz, dado el volumen esperado de la cosecha de este producto en Estados Unidos.
Estos elementos pueden tener un efecto importante en términos de la reducción de la
inflación de alimentos.
Algunos directores señalaron que debe estudiarse cuidadosamente el
comportamiento de los precios de los bienes transables, los cuales no han reducido su
tasa de crecimiento anual a pesar del comportamiento de la tasa de cambio, situación
que puede presentarse con mayor intensidad en el segundo semestre del año. Otros
señalaron que este hecho es evidencia de la gran dinámica que registra en el momento la
demanda agregada.
6
Un grupo de directores manifestó la conveniencia de no incrementar las tasas de
interés de intervención en esta reunión y revisar de nuevo el tema en la próxima, en
espera a que las medidas ya adoptadas en este y otros frentes de política monetaria
muestren sus resultados en registros más favorables de inflación. Destacaron que si bien
las medidas tomadas por la Junta han mostrado un mayor rezago en los mecanismos de
transmisión dado el cambio de la estructura de fondeo de los establecimientos de crédito
que han estado liquidando inversiones en TES a favor de la cartera, algunas tasas
pasivas vienen reaccionado al alza. Llamaron la atención sobre los posibles efectos que
se pueden presentar en la tasa de cambio, al estimular mayores entradas de capital del
exterior. También advirtieron que apretar en exceso la política monetaria cuando el PIB
y el empleo vienen creciendo de manera satisfactoria desde hace cuatro años, y la
inflación convergiendo hacia su meta de largo plazo, podría frustrar la expansión de la
economía.
Otros directores recordaron que a pesar de ajustes recientes, las tasas de interés
de mercado en términos reales están en niveles históricamente bajos y algunas de ellas
han disminuido desde que esta Junta inició el incremento de tasas en abril de 2006.
Adicionalmente, subrayaron la importancia de las proyecciones de inflación y la
necesidad de estabilizar las expectativas de inflación como condición para que la tasa de
inflación converja hacia las metas de largo plazo. Finalmente, destacaron que en el
momento el balance de riesgos indica más peligros de mayor inflación que de menor
crecimiento.
3. Decisión de política
La Junta Directiva acordó por mayoría de votos aumentar en 25 puntos básicos
las tasas de interés de intervención del Banco de la República.
Bogotá D.C., 29 de junio de 2007
|
2007-07-01 |
1
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
27 de julio de 2007
El 27 de julio de 2007 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la
Junta Directiva del Banco de la República, con la presencia del Ministro de Hacienda y
Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Dario Uribe y los Directores
de dedicación exclusiva Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarria, Juan Mario Laserna,
Fernando Tenjo y Leonardo Villar, en la cual se discute la situación inflacionaria y se
toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un
resumen de la discusión.
1.
Antecedentes
a.
Desarrollos recientes de la inflación
En el segundo trimestre del año, la inflación total al consumidor quebró la tendencia
ascendente que traía desde finales de 2006, cerrando junio en 6,0% (22 p.b. por debajo del
nivel alcanzado en abril). Este comportamiento también se observó en todos los indicadores
de inflación básica.
La inflación anual de alimentos en junio (9,7%), disminuyó 30 p.b. frente al nivel
registrado en abril. Como se esperaba, en el segundo trimestre las presiones alcistas
generadas por la aparición del fenómeno de “El Niño” empezaron a ceder, en especial en
los precios de los productos perecederos. Sin embargo, la inflación de alimentos procesados
siguió aumentando, aunque a un ritmo cada vez menor, principalmente por el incremento
en el precio de la carne, el cual siguió impulsado por la fuerte demanda interna y externa.
Se espera que la inflación de alimentos siga disminuyendo en el tercer trimestre en la
medida en que la situación climática se normalice.
La reducción de la inflación sin alimentos y de los otros indicadores de inflación
básica en los dos últimos meses refleja el comportamiento de los precios de los bienes
regulados y transables. En el caso de regulados, la disminución se concentró en algunos
servicios públicos, como gas domiciliario. Esta disminución se produjo a pesar de ajustes
importantes en los precios de los combustibles y en las tarifas del transporte público.
Respecto a los precios de los bienes transables sin alimentos ni regulados, la apreciación
también habría incidido en ajustes relativamente bajos en los dos últimos meses que, en
buena parte, recogen caídas en precios de bienes como electrodomésticos y automóviles.
2
Sin embargo, hay que señalar que dada la magnitud de la apreciación – 14,8% año corrido
– la reacción de la inflación de transables a la tasa de cambio continúa siendo pequeña.
Por su parte, la inflación de no transables sin alimentos ni regulados cerró el
trimestre con una inflación anual de 5,1%, cifra superior al registro de marzo (4,9%) y al de
diciembre (4,8%). El incremento se concentró en arriendos (4,3%), rubro que ha presentado
aumentos relativamente importantes en los tres últimos meses.
b.
Crecimiento
En el primer trimestre de 2007 el crecimiento del PIB fue 8,0%, levemente inferior al
observado en el cuarto trimestre de 2006, pero superior al observado en años anteriores. El
dinamismo económico continuó siendo impulsado por la demanda interna que aceleró su
crecimiento a 11,0%. Sobresale el fuerte aumento de la inversión pública y de la inversión
privada representada en maquinaria y equipo y en edificaciones de vivienda. El consumo de
los hogares por tercer trimestre consecutivo creció a tasas superiores al 7,0%, mientras el
consumo público cayó 0,5%.
La demanda externa neta continuó siendo negativa (-7,9% del PIB) por el mayor
dinamismo de las importaciones, las cuales crecieron en el primer trimestre a una tasa real
anual de 21,8 %. Las exportaciones lo hicieron al 9,4%.
El crecimiento anual del 26% observado en las importaciones de bienes de capital, la
fuerte expansión de las licencias de construcción a mayo y la aceleración de los
desembolsos de crédito hipotecario reflejan el gran dinamismo observado en la inversión.
Para el resto del año se prevé que continúe el buen desempeño de la inversión pública y
privada, con un crecimiento conjunto de 21%. La dinámica del consumo privado se ha
desacelerado levemente en los últimos meses, pero para 2007 se espera un crecimiento
similar al observado en 2006. Las diversas medidas de utilización de la capacidad
productiva siguen en niveles históricamente altos, aunque muestran una ligera reducción en
los últimos meses.
c.
Costos y salarios
El ritmo de crecimiento anual en los costos de las materias primas muestra una
importante desaceleración en el segundo trimestre del año al pasar de 4,8% en marzo a
0,3% en junio. En buena parte, esto es el resultado de la reducción en la inflación del IPP
de productos importados. En lo corrido de 2007 los ajustes salariales en la industria y el
comercio han sido similares o levemente inferiores a los que tuvieron lugar en 2006. Para
el segundo semestre no se prevén presiones inflacionarias en el mercado laboral.
d.
Contexto internacional
3
Durante el segundo trimestre de 2007 la coyuntura internacional estuvo marcada por
un crecimiento de la economía mundial y precios de los productos básicos “commodities”
mayores a lo previsto hace unos meses. La inflación en varios países ha retomado una
tendencia ascendente que puede llevar a aumentos en las tasas de interés y a una reducción
de la liquidez internacional, principalmente en el 2008. Se considera, sin embargo, que
estas alzas serán moderadas y harán parte de una normalización de la situación de liquidez
en los mercados internacionales.
El contexto externo para la economía colombiana seguirá siendo favorable. La
coyuntura actual permite esperar mejores términos de intercambio, en parte por los
recientes aumentos del precio del petróleo. Por otro lado, se estima que la demanda de
nuestros socios comerciales continuará mostrando una gran fortaleza, especialmente en
Venezuela. Igualmente se espera que continúe el flujo de inversión extranjera al país.
e.
Variables financieras
En los últimos meses se ha moderado el crecimiento anual de los agregados monetarios.
Así, mientras en abril el agregado M3 aumentó a una tasa anual de 21%, en junio su ritmo
de crecimiento fue de 17% aproximadamente. El grueso de la desaceleración se originó en
el comportamiento de la demanda por efectivo, la cual ha venido creciendo a tasas cada vez
menores desde mediados del año pasado. Por su parte, los depósitos en el sistema
financiero se desaceleraron en los últimos dos meses después de varios meses de
aceleraciones continuas.
En los últimos meses parece haberse disminuido el proceso de recomposición del activo
de las entidades financieras desde TES hacia cartera. De consolidarse esta nueva tendencia,
podría significar menores recursos para la expansión de cartera, permitiendo una más
rápida transmisión de la política monetaria al crédito y a las tasas de interés de mercado.
En el segundo trimestre se observó una leve desaceleración en el ritmo de crecimiento
del crédito, el cual se mantuvo sin embargo a tasas nominales muy altas. Mientras en marzo
el crecimiento anual de la cartera bruta total fue 31,2%, en junio dicha tasa fue 29,5%. La
desaceleración ha sido más importante en la cartera comercial y en menor medida en la
cartera de consumo, pero ha sido compensada por la aceleración de la hipotecaria. No
obstante, las tasas de crecimiento de la cartera comercial y de consumo siguen siendo altas
tanto en términos anuales (25,1% y 44,2% respectivamente), como en términos mensuales
anualizados (18% y 38%).
Las tasas de interés vienen mostrando un comportamiento al alza. En efecto, la tasa
promedio de los CDT se situó en 8,35% en junio frente a 7,79% en mayo. Por su parte, la
tasa activa promedio se situó en 15,3% frente a 14,8% en mayo, parcialmente gracias al
aumento de las tasas de usura. La tasa promedio de los CDT acumuló un incremento de
220 p.b. desde abril del año pasado. Frente a abril de 2006 las tasas de consumo y ordinario
4
presentan menores aumentos (71 p.b. y 151 p.b.) que la tasa de política, mientras que las de
crédito preferencial y de tesorería (357 p.b. y 409 p.b.) han subido más.
2.
Discusión y opciones de política
En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo anual de
crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas por el Banco.
Lo anterior, a pesar del quiebre observado en la tendencia ascendente de la inflación, que
había sido proyectado por la Junta; (ii) el comportamiento de la inflación de los bienes no
transables sigue sin mostrar una tendencia a la baja; (iii) el equipo técnico del Banco ha
elevado su proyección de crecimiento del PIB para el año, lo cual incide en el tamaño de la
brecha del producto; (iv) la apreciación del peso no se ha reflejado de manera significativa
en los precios de los bienes transables; y (v) las expectativas de inflación, si bien se han
reducido, todavía se sitúan por encima de la meta.
No obstante, la Junta consideró que los aumentos en las tasas de interés de
intervención y la modificación en los encajes han empezado a mostrar los efectos esperados
en el comportamiento de los precios, la dinámica del crédito y los agregados monetarios.
Esto indica que la transmisión de las tasas de interés del Banco al resto de la economía se
ha acelerado. Algunos factores como la recomposición que empieza a observarse de
inversiones de los bancos hacia TES y el mayor espacio que ahora permite la tasa de usura,
podrían generar una transmisión aún mayor de las tasas en los próximos meses.
Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron en
los siguientes aspectos: (i) la velocidad e intensidad con la cual se manifiestan los efectos
de las medidas de política monetaria adoptadas hasta el momento; (ii) la incertidumbre
sobre el comportamiento de la inflación para lo que resta del año y la posibilidad de que la
disminución de la misma pueda ser menor a lo previsto inicialmente; (iii) el
comportamiento de la cuenta corriente y, en especial, la posibilidad de que cambios en el
contexto internacional produzcan alteraciones abruptas en la demanda agregada y el
crecimiento del producto; y (iv) el impacto de la brecha del producto en la inflación.
Algunos directores destacaron que los factores que explican la alta tasa de
crecimiento de la economía continúan vigentes. Las tasas de interés reales se mantienen
bajas en términos históricos, la demanda externa continúa fuerte, los términos de
intercambio siguen siendo favorables y el crédito crece aún a tasas elevadas.
Adicionalmente, el incremento de los precios de la vivienda puede reforzar el crecimiento
del gasto. En conjunto, estos factores conforman un escenario en el que la demanda
agregada continuará expandiéndose a ritmos elevados.
La mayoría de la Junta consideró que el balance de riesgos de los factores antes
reseñados justifica un aumento de las tasas de interés de intervención. Igualmente, que esta
acción es coherente con el propósito de hacer sostenible el crecimiento de la economía y
garantizar la convergencia de la inflación hacia la meta de largo plazo.
Otros directores propusieron hacer en esta ocasión una pausa y posponer una
eventual decisión sobre un nuevo reajuste en las tasas de intervención del Banco hasta la
5
próxima reunión en el mes de agosto, con el objeto de contar con mayor y mejor
información sobre los reales efectos de las medidas hasta ahora tomadas. Al respecto,
señalaron que se pueden estar subestimando los efectos de las medidas de política
monetaria adoptadas a lo largo del último año, las cuales han sido reforzadas por decisiones
tales como el recorte del gasto público, el aumento de las tasas de interés de usura y las
mayores provisiones para la cartera comercial derivadas de la aplicación del SARC por el
sector financiero. Manifestaron que el crecimiento esperado del producto no
necesariamente genera presiones inflacionarias dado el gran aumento de las inversiones y la
productividad en la economía, y de las importaciones de bienes de capital y de bienes
intermedios, el cual indica un excelente comportamiento reflejado en la ampliación de la
capacidad instalada. Además no se observan cuellos de botella ni presiones inflacionarias
en el mercado laboral.
3.
Decisión de política
La Junta Directiva acordó por mayoría de votos aumentar en 25 puntos básicos las tasas
de intervención del Banco de la República.
Bogotá D.C., 10 de agosto de 2007
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2007-08-01 |
1
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 24 de
agosto de 2007
El 24 de agosto de 2007 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria
de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de
Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga Escobar, el Gerente General, José
Dario Uribe y los directores de dedicación exclusiva Carlos Gustavo Cano, Juan José
Echavarria, Juan Mario Laserna, Fernando Tenjo y Leonardo Villar, en la cual se
discute la situación inflacionaria y se toman decisiones relacionadas con la política
monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en
dicha reunión.
1.
Antecedentes
a.
Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor se redujo en julio, por tercer mes consecutivo,
cerrando en 5,77%, 26 puntos básicos (pb) por debajo de la del mes anterior y 49 pb
menor que su nivel máximo reciente alcanzado en abril.
Este comportamiento favorable también se observó en todos los indicadores de
inflación básica utilizados por el Banco de la República. El promedio de esos
indicadores pasó de 5,1% a 5,0% entre junio y julio, continuando el proceso de
reducción que se venía observando desde el mes de abril cuando llegó a 5,3%.
La inflación anual de alimentos siguió disminuyendo, como se esperaba,
principalmente por la normalización del clima y su efecto en la caída en los precios de
los alimentos perecederos. También se observó una disminución en la inflación de los
alimentos procesados, explicada por una pequeña caída en el precio de la carne.
La inflación de bienes transables diferentes de alimentos bajó de 1,76% en junio
a 1,62% en julio, manifestando una caída que es, sin embargo, pequeña frente a la
apreciación acumulada del peso del último año.
La inflación de no transables, sin alimentos ni regulados, continuó creciendo,
comportamiento que viene presentándose desde el mes de abril, y se situó en 5,45%,
frente a 5,1% en el mes anterior. Dentro de este grupo se destacan los arriendos, cuya
inflación anual a julio se situó en 4,8%, frente a 4,6% en junio. Para el subgrupo
“Resto” que excluye arriendos, la inflación anual subió 43 pb y se situó en 6,3%, debido
fundamentalmente al aumento del rubro de “diversión, cultura y esparcimiento”.
2
La inflación de regulados disminuyó. Estos precios están atados parcialmente al
índice de precios al productor (IPP) y han resultado favorecidos por la caída absoluta
que se observa en este indicador, muy vinculada al comportamiento de la tasa de
cambio. El ritmo de inflación correspondiente al grupo de bienes y servicios regulados
del índice de precios al consumidor (IPC) se redujo de 7,4% en junio a 6,6% en julio, a
pesar de presiones al alza provenientes del precio de los combustibles y del transporte
público.
b.
Crecimiento, contexto externo y variables financieras
La información disponible continúa mostrando una dinámica fuerte en el
crecimiento económico interno. El DANE informó que en junio la producción
industrial creció 11,9% y las ventas del comercio aumentaron 9,2% frente al mismo mes
del año anterior. En la industria, el total de obreros contratados creció 4,2% y en el
comercio el aumento fue de 6,6%. Así mismo, el desempeño de las licencias de
construcción al mes de junio (aumentaron 39%) anticipa un crecimiento alto para esta
actividad económica en la segunda mitad del año.
Las exportaciones a mayo siguieron aumentado con un crecimiento en el acumulado
de los últimos doce meses del 15%. Este desempeño se explica tanto por el
comportamiento de las exportaciones tradicionales como de las no tradicionales,
destacándose las exportaciones a Venezuela que crecieron 47%.
El fuerte crecimiento de las importaciones a junio (26% para el acumulado a 12
meses) no muestra cambios importantes frente a las tendencias que se observaban en
meses anteriores. Las importaciones de bienes de consumo en dólares crecieron en este
mes a una tasa superior al 30%. En este mismo período, las importaciones de bienes de
capital y de bienes intermedios aumentaron a una tasa cercana al 25%, reflejando la
buena dinámica de la industria manufacturera
Contexto internacional
Los mercados han exhibido mayor volatilidad que en meses anteriores como
consecuencia de la crisis del sector hipotecario “subprime”. La incertidumbre sobre sus
efectos, además de los elevados niveles de apalancamiento de los inversionistas, se ha
reflejado en un menor apetito por activos riesgosos y una importante disminución de la
liquidez de los mercados.
El efecto de esta coyuntura sobre los mercados emergentes se ha dado a través
de un aumento en la prima de riesgo (medida por el EMBI+), que, sin embargo, ha sido
menor a la observada en los bonos especulativos del mercado americano. La reacción
del tipo de cambio fue más alta en Colombia que en los demás países de la región, pero
la pérdida de valor del mercado bursátil fue moderada. Otros activos nacionales como
los TES de largo plazo también experimentaron pérdidas.
3
Variables Financieras
Los agregados monetarios continuaron desacelerándose en julio, en parte como
resultado de un menor ritmo de crecimiento del efectivo. Respecto a los pasivos sujetos
a encaje, su ritmo de expansión también se ha moderado recientemente aunque a julio
seguía siendo alto. En los últimos meses se ha notado una recuperación relativa de las
captaciones de los CDT frente a las cuentas corrientes.
El crédito también se desaceleró nuevamente en julio. La cartera total creció a
un ritmo anual de 28,5% frente a 29,5% en el mes anterior. La moderación en el
crecimiento se observó en todos los tipos de crédito excepto en el hipotecario el cual ha
continuado ganando impulso: su crecimiento anual pasó de 17,3% en junio a 19,4% en
julio. En el último mes, la cartera de consumo se expandió a una tasa anual de 23,4%,
que corresponde a un crecimiento trimestral anualizado de 31%.
La tasa de interés interbancaria (TIB) se situó en promedio en 9% en junio,
aumentando 20 pb en el último mes y 310 pb desde abril de 2006 cuando la Junta
Directiva del Banco de la República comenzó a incrementar sus tasas de interés de
intervención. Las tasas de interés nominales pasivas aumentaron levemente en julio
(entre 16 pb y 21 pb), acumulando un aumento desde abril de 2006 de alrededor de 180
pb (240 pb para CDT solamente). El ajuste fue mayor en el caso de las tasas activas,
especialmente en consumo y tarjetas de crédito, las cuales se han acercado a las de
usura. Entre abril de 2006 y julio de 2007 las tasas de crédito preferencial y de tesorería
acumulan un aumento de 424 y 457 pb, respectivamente. En dicho período el aumento
en las tasas de crédito ordinario, de consumo y con tarjetas ha sido mucho menor: 183,
230 y 280 pb, respectivamente. Respecto a las tasas reales, estas se encuentran cerca de
los niveles históricos promedio observados para la década en la mayoría de casos,
excepto en el crédito preferencial y de tesorería en donde ya lo superan.
2.
Discusión y opciones de política
En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) las cifras de
julio confirmaron el quiebre de la tendencia ascendente en el ritmo anual de crecimiento
de los precios que ya se había detectado en los dos meses anteriores; (ii) a pesar de lo
anterior, la inflación se mantiene por encima de las metas establecidas por el Banco;
(iii) el comportamiento de la inflación de los bienes no transables, sin alimentos ni
regulados, sigue mostrando una tendencia al alza; (iv) la demanda agregada mantiene un
fuerte dinamismo; (v) la apreciación de la tasa de cambio no se ha reflejado plenamente
en los precios de los bienes transables; y (vi) todas las expectativas de inflación han
bajado: las de mediano plazo se ubican por debajo del 4% aunque las de corto plazo se
mantienen por encima de la meta.
Se destacó que los factores que explican la alta tasa de crecimiento de la
economía continúan vigentes. La demanda externa se conserva fuerte, los términos de
intercambio siguen siendo favorables y el crédito sigue creciendo a tasas elevadas. En
4
conjunto, estos factores conforman un escenario en el que la demanda agregada
continuará expandiéndose, impulsando el crecimiento de corto plazo de la economía.
La Junta consideró que los aumentos en las tasas de interés de intervención y la
modificación en los encajes continúan mostrando los efectos esperados en el
comportamiento de los precios, la dinámica del crédito y en los agregados monetarios.
Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron
en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política monetaria dado el
rezago de las mismas; (ii) la incertidumbre sobre el comportamiento inflacionario para
lo que resta del año y la posibilidad de que la disminución en el ritmo de crecimiento de
los precios pueda ser mayor a lo previsto un mes atrás; (iii) el impacto del crecimiento
en la brecha del producto; (iv) el comportamiento de la cuenta corriente y, en especial,
que modificaciones en el contexto internacional pudieran llevar a ajustes futuros en la
disponibilidad de financiamiento externo, y en las tasas de cambio y de interés
relevantes para las economías emergentes; y (v) la incertidumbre generada por la alta
volatilidad de los mercados internacionales y la incidencia que puede tener en la
economía colombiana.
La mayoría de la Junta consideró oportuno hacer una pausa en el incremento de
las tasas de interés de intervención del Banco de la República con el fin de obtener
mayor información para evaluar las posibles consecuencias que podrían presentarse por
la volatilidad de los mercados externos y los efectos de la política monetaria sobre la
demanda agregada y las perspectivas inflacionarias. A este respecto se destacó que la
información disponible muestra que la transmisión de la política monetaria a las tasas de
interés de la economía se está reflejando con mayor rapidez, lo cual se aprecia en los
aumentos de las tasas de interés de la economía y en la caída del ritmo de crecimiento
de los agregados monetarios y el crédito.
Otros directores señalaron su preferencia en continuar con los aumentos de las
tasas interés de intervención. En particular, destacaron el alto dinamismo de la demanda
agregada, el comportamiento al alza de los precios de los bienes no transables, sin
alimentos ni regulados, y que los crecimientos de los agregados monetarios y del crédito
siguen en niveles altos. Expresaron su preocupación de que, si bien la inflación y las
expectativas de inflación vienen mostrando una tendencia a la baja, su disminución ha
sido menor a la esperada, lo cual dificulta la convergencia de las mismas a las metas de
inflación futuras. Finalmente, consideraron que posponer el incremento en las tasas
podría hacer necesarias tasas de interés más altas en el futuro.
3.
Decisión de política
La Junta Directiva acordó por mayoría mantener inalteradas las tasas de
intervención del Banco de la República.
Bogotá D.C., septiembre 7 de 2007
|
2007-09-01 |
1
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 21 de
septiembre de 2007
El 21 de septiembre de 2007 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión
ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro
de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga Escobar, el Gerente General, José
Dario Uribe y los directores de dedicación exclusiva Carlos Gustavo Cano, Juan José
Echavarria, Juan Mario Laserna y Leonardo Villar, en la cual se discute la situación
inflacionaria y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. El director
Fernando Tenjo estuvo ausente por razón justificada. A continuación se hace un
resumen de los principales temas tratados en dicha reunión.
1.
Antecedentes
a.
Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor se redujo en agosto, por cuarto mes
consecutivo, cerrando en 5,2% (55 p.b. por debajo de la del mes anterior). Este
comportamiento también se observó en todos los indicadores de inflación básica.
La inflación anual de alimentos continuó disminuyendo, como se esperaba,
principalmente por la normalización del clima. La reducción se presentó tanto en
alimentos procesados como en los perecederos, destacándose los precios de la carne y la
papa.
La inflación de no transables, sin alimentos ni regulados, se situó en 5,56%,
frente a 5,45% en el mes anterior. Desde octubre del año pasado este indicador ha
presentado una tendencia al alza de manera ininterrumpida. Se destaca el rubro de
arriendos que en el mes de agosto se incrementó, situándose en 4,9%.
En el último mes se presentó una caída en la inflación de transables sin alimentos ni
regulados. Aunque en agosto se mantuvo estable la inflación de regulados (6,6%), los
resultados se ubicaron por encima de lo esperado.
b.
Crecimiento, contexto externo y variables financieras
En cuanto al crecimiento económico interno, la información disponible continúa
mostrando que mantiene una dinámica fuerte. El DANE informó que el PIB aumentó el
segundo trimestre del año en 6,87% impulsado por la inversión y la aceleración del
2
consumo de las familias. Para lo que resta del año se prevé un comportamiento positivo,
como lo sugieren el crecimiento de la industria en julio y los buenos resultados del
indicador de confianza de los consumidores.
Durante el segundo trimestre se estabilizó el crecimiento de las exportaciones
totales alrededor del 15%. Entre abril y junio las exportaciones tradicionales han crecido
en promedio 12,8% mientras que las no tradicionales alcanzaron a junio un crecimiento
anual de 21,8%. Se destaca que las exportaciones a los Estados Unidos han disminuido,
lo cual ha sido compensado parcialmente por aumentos a Venezuela y a otros países.
Con cifras a agosto, las importaciones mantuvieron un ritmo de crecimiento alto
(26,8% frente al período enero agosto de 2006), aunque se evidencia un dinamismo
menor al de los primeros meses del año (30% para el período enero-abril). La
desaceleración es particularmente notoria en las importaciones de bienes de capital y
bienes de consumo.
Contexto internacional
En el ámbito externo, los mercados continúan mostrando una alta incertidumbre
como consecuencia de la crisis hipotecaria en los Estados Unidos. Dicha situación
aumentó la percepción de riesgo a nivel mundial y generó restricciones en la liquidez en
varios mercados, lo que motivó la intervención de algunos bancos centrales. El Banco
de la Reserva Federal de los Estados Unidos redujo su tasa de política en 50 p.b.,
dejándola en 4,75%, en procura de moderar el impacto de la caída en el precio de la
vivienda en ese país.
Los efectos de los cambios recientes en la coyuntura internacional sobre la
economía colombiana son inciertos. Por un lado, el riesgo de que la turbulencia
financiera se traduzca en un menor crecimiento en los Estados Unidos ha aumentado, si
bien los analistas internacionales no vislumbran una recesión en ese país. Por otra parte,
los precios de varios productos básicos de exportación de Colombia, tales como el
petróleo y el café, han aumentado recientemente, lo que puede tener efectos expansivos
sobre la demanda agregada. Adicionalmente, el aumento en el precio de algunos bienes
agrícolas importados como el trigo puede generar presiones inflacionarias.
Variables Financieras
Los agregados monetarios continuaron desacelerándose en agosto como
resultado de un menor ritmo de crecimiento del efectivo. Respecto a los pasivos sujetos
a encaje (PSE), su ritmo de expansión también se ha moderado aunque su dinámica
sigue siendo alta y se mantiene la recuperación relativa de los CDT frente a las cuentas
corrientes.
El crédito también se desaceleró nuevamente en agosto. La cartera bruta total
en moneda nacional creció a un ritmo anual de 24%, inferior en 145 puntos básicos a la
registrada el mes anterior. La moderación en el crecimiento se observó en todos los
3
tipos de crédito excepto en el hipotecario, el cual continúa ganando impulso: su
crecimiento anual pasó de 19% en julio a 19,8% en agosto.
La tasa de interés interbancaria (TIB) se mantuvo levemente por encima de la
tasa de intervención del Banco. Aunque esta última se mantuvo inalterada, las tasas de
interés de los CDT y las tasas promedio de colocación aumentaron en el mes de agosto.
2.
Discusión y opciones de política
En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) a pesar de la
notable reducción en el ritmo anual de inflación que se observó en agosto, el ritmo anual
de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas por el
Banco; (ii) la apreciación del peso se ha reflejado de manera limitada en los precios de
los bienes transables; (iii) el comportamiento de la inflación de los bienes no transables,
sin alimentos ni regulados, sigue mostrando una tendencia al alza; (iv) los indicadores
disponibles sugieren que el dinamismo de la demanda agregada se mantiene en niveles
muy altos; y (v) las expectativas de inflación se han reducido pero todavía se sitúan por
encima de las metas establecidas por el Banco.
La Junta consideró que distintos indicadores muestran que las medidas de
política monetaria adoptadas (aumentos en las tasas de interés de intervención y
modificación en los encajes) han moderado el crecimiento de los agregados monetarios
y la dinámica del crédito.
Por otra parte, se destacó que los factores que explican la alta tasa de
crecimiento de la economía continúan vigentes. La demanda externa continúa fuerte, los
términos de intercambio siguen siendo favorables, destacándose en las últimas semanas
aumentos en los precios del petróleo y del café, y el crédito sigue creciendo a tasas
elevadas. En conjunto, estos factores conforman un escenario en el que la demanda
agregada continúa expandiéndose rápidamente, impulsando el crecimiento de corto
plazo de la economía.
Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron
en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política monetaria dado el
rezago de las mismas; (ii) la incertidumbre sobre el comportamiento inflacionario para
lo que resta del año; (iii) el comportamiento de la cuenta corriente y, en especial, el que
cambios en el contexto internacional pudieran llevar a ajustes futuros en la tasa de
cambio; (iv) el impacto del crecimiento en la brecha del producto; y (v) la incertidumbre
generada por la alta volatilidad de los mercados internacionales y la incidencia que
puede tener en la economía colombiana.
La Junta de manera unánime consideró oportuno mantener la pausa en el
incremento de sus tasas de interés de intervención con el fin de obtener mayor
información para evaluar las posibles consecuencias que podrían presentarse por la
crisis externa y los efectos de la política monetaria sobre la demanda agregada y las
perspectivas inflacionarias. Se destacó que dado el contexto internacional existe un alto
grado de incertidumbre en las proyecciones de inflación y crecimiento económico. Por
una parte, existe la posibilidad de que el crecimiento de la demanda interna retorne más
lentamente de lo esperado a tasas que sean coherentes con el logro de las metas de
4
inflación y unas cuentas externas sostenibles, lo que llevaría a futuros aumentos en la
tasa de intervención. Por otra, la solución de la crisis del mercado hipotecario en los
Estados Unidos puede ser más lenta y tener mayor efecto en el crecimiento de la
economía mundial que lo inicialmente previsto. Para la economía colombiana esto
puede afectar la demanda, los precios de los productos de exportación y el acceso futuro
al mercado internacional de capitales.
3.
Decisión de política
La Junta Directiva acordó por unanimidad mantener inalteradas las tasas de
intervención del Banco de la República.
Bogotá D.C., octubre 5 de 2007
|
2007-10-01 |
1
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 26 de
octubre de 2007
El 26 de octubre de 2007 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria
de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de
Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga Escobar, el Gerente General, José
Dario Uribe y los directores de dedicación exclusiva Carlos Gustavo Cano, Juan José
Echavarria, Juan Mario Laserna, Fernando Tenjo Galarza y Leonardo Villar, en la cual
se discute la situación inflacionaria y se toman decisiones relacionadas con la política
monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en
dicha reunión.
1.
Antecedentes
a.
Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor se redujo en septiembre, por quinto mes
consecutivo, cerrando en 5,01%, inferior a lo que se esperaba y 21 puntos básicos por
debajo de la del mes anterior. Este comportamiento también se observó en todos los
indicadores de inflación básica.
Como se preveía, luego del choque negativo de oferta generado por el fenómeno
del Niño, la inflación anual de alimentos continuó disminuyendo y explica en buena
parte la caída de la inflación. La reducción se presentó tanto en alimentos procesados
como en los perecederos.
La inflación de no transables, sin alimentos ni regulados, se situó en 5,55%, cifra
similar a la del mes anterior. Se destaca, sin embargo, que este indicador sigue sin
mostrar una tendencia descendente.
En el último mes se presentó una caída en la inflación de transables sin alimentos ni
regulados acorde con el comportamiento de la tasa de cambio. Por su parte, el índice de
precios al productor (IPP) total mostró, por cuarto mes consecutivo, un crecimiento
anual negativo (0,91%), lo cual también ha influido en la inflación de regulados.
b.
Crecimiento, contexto externo y variables financieras
El crecimiento económico interno continúa mostrando una fuerte dinámica. Aunque,
el crecimiento del PIB estimado para el segundo trimestre (6,9%) fue menor al del
2
primer trimestre (8,1%), la información disponible permite prever que el resultado a
final del año será similar al del año anterior.
Las cifras de empleo del periodo junio a agosto muestran que la tasa de desempleo
de las 13 principales áreas metropolitanas se ubicó en 11%, cifra inferior en 1,5 puntos
porcentuales a la observada en el mismo trimestre del año anterior. Otros indicadores
disponibles del mercado laboral indican que el empleo en la industria y comercio siguen
creciendo, como lo señala el registro de julio con variaciones anuales de 2,9% y 6,2%,
respectivamente.
El dinamismo de las exportaciones (crecimiento de 15,3% en dólares) se explica en
gran parte por las mayores ventas de productos no tradicionales que aportaron cerca del
64% del incremento del valor exportado. Venezuela continúa siendo el socio de mayor
crecimiento con un aumento anual de exportaciones acumuladas entre enero y julio de
73,1%. En el mismo periodo las exportaciones hacia Estados Unidos se redujeron en
6,4%.
Por su parte, las importaciones mantuvieron un ritmo de crecimiento alto, aunque se
evidencia un dinamismo menor al de los primeros meses del año, particularmente en lo
que hace referencia a bienes de capital y bienes de consumo.
Contexto internacional
En los mercados financieros mundiales continúa la incertidumbre sobre el
tamaño y la duración de la recesión en el mercado de vivienda norteamericano y su
impacto sobre el crecimiento de las economías desarrolladas.
Las estimaciones de crecimiento económico de algunos de nuestros principales
socios comerciales han sido revisadas a la baja. Por otra parte, se espera que los precios
de la mayoría de los productos básicos de exportación continúen en niveles altos, lo cual
permitiría mantener unos términos de intercambio favorables.
Variables Financieras
El ritmo de crecimiento de los agregados monetarios ha venido registrando una
tendencia descendente, a pesar de que ésta no se observó en el mes de septiembre. La
variación anual del M3, la base monetaria y el efectivo fueron en su orden: 16,4%,
11,8% y 8,1%. Los pasivos sujetos a encaje mantuvieron la recuperación relativa de los
CDT frente a las cuentas corrientes.
En septiembre, el crédito mantuvo un crecimiento anual de 27%, cifra superior a
la presentada en agosto. La cartera de consumo creció 39,4% anual con un ligero
descenso frente a la del mes anterior. Por el contrario, el crecimiento de la cartera
comercial mostró un repunte de 20,5% a 22,2% y la cartera hipotecaria mantuvo su
ritmo de crecimiento anual en 19,2%.
3
La tasa de interés interbancaria (TIB) se ubicó levemente por encima de la tasa
de intervención del Banco de la República. En términos reales, las tasas de interés DTF
y de colocación mostraron un incremento importante en el tercer trimestre. Aunque si se
comparan con las que han predominado durante períodos más recientes de más baja
inflación, sus niveles resultarían superiores.
2.
Discusión y opciones de política
En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) a pesar de la
notable reducción en la inflación anual a septiembre, el ritmo de crecimiento de los
precios se mantiene por encima de las metas establecidas por la Junta; (ii) el
significativo peso de los alimentos en la reducción reciente de la inflación; (iii) la
apreciación del peso se ha reflejado de manera limitada en los precios de los bienes
transables; (iv) el comportamiento de la inflación de los bienes no transables, sin
alimentos ni regulados, sigue sin mostrar una tendencia descendente; (v) los indicadores
disponibles sugieren que el dinamismo de la demanda agregada se mantiene en niveles
altos; y (vi) las expectativas de inflación se han reducido pero todavía se sitúan por
encima de las metas establecidas.
La Junta consideró que distintos indicadores muestran que las medidas de política
monetaria adoptadas (aumentos en las tasas de interés de intervención y modificación en
los encajes) han resultado eficaces frente a los objetivos buscados de moderar el
crecimiento de los agregados monetarios y la dinámica del crédito. En los últimos
meses dichas medidas han fortalecido los canales de transmisión de la política
monetaria, generando incrementos importantes en las tasas de interés activas, lo cual las
ha llevado a niveles más coherentes con una moderación de la demanda agregada. A
pesar de ello, se destacó que en el último mes se registró un aumento en algunas
componentes del crédito y de las tasas de crecimiento de los agregados monetarios.
Por otra parte, la demanda externa sigue fuerte, los términos de intercambio
siguen siendo favorables e, incluso, han mejorado recientemente, y el crédito mantiene
tasas elevadas de crecimiento. En conjunto, estos factores conforman un escenario en el
que la demanda agregada continúa expandiéndose.
Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron
en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política monetaria dado el
rezago de las mismas; (ii) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para
lo que resta del año y el 2008; (iii) el comportamiento de la cuenta corriente y, en
especial, el que cambios en el contexto internacional pudieran llevar a ajustes futuros en
la tasa de cambio; (iv) el impacto de la brecha del producto sobre los precios; (v) la
incertidumbre generada por la alta volatilidad de los mercados internacionales y la
incidencia que puede tener en la economía colombiana; y (vi) la posible desaceleración
del crecimiento de la demanda agregada como efecto de las medidas de política
monetaria hasta ahora aplicadas.
La Junta de manera unánime consideró oportuno mantener la pausa en el
incremento de sus tasas de interés de intervención con el fin de obtener mayor
información para evaluar las consecuencias que podrían presentarse por la crisis externa
y los efectos remanentes de la política monetaria sobre la demanda agregada y las
4
perspectivas inflacionarias. Se destacó, que dado el contexto internacional, existe un
alto grado de incertidumbre en las proyecciones de inflación y crecimiento económico.
Por una parte, existe la posibilidad de que el crecimiento de la demanda interna retorne
más lentamente de lo esperado a tasas que sean coherentes con el logro de las metas de
inflación y unas cuentas externas sostenibles, lo que podría llevar a futuros aumentos en
la tasa de intervención. Por otra, la solución de la crisis del mercado hipotecario en los
Estados Unidos puede ser más lenta y tener mayor efecto en el crecimiento de la
economía mundial que lo inicialmente previsto. Para la economía colombiana esto
tendría efectos sobre la demanda, los precios de los productos de exportación y el
acceso futuro al mercado internacional de capitales.
La Junta destacó que con una inflación y expectativas de inflación ancladas en
las metas de mediano y largo plazo, la autoridad monetaria tendría mayores grados de
libertad para ejecutar una política anticíclica en caso de que, en el futuro, se presente un
escenario desfavorable para la economía colombiana.
3.
Decisión de política
La Junta Directiva acordó por unanimidad mantener inalteradas las tasas de
intervención del Banco de la República.
Bogotá D.C., noviembre 9 de 2007
|
2007-11-01 |
1
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 23 de
noviembre de 2007
El 23 de noviembre de 2007 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión
ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro
de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga Escobar, el Gerente General, José
Dario Uribe y los directores de dedicación exclusiva Carlos Gustavo Cano, Juan José
Echavarria, Juan Mario Laserna, Fernando Tenjo Galarza y Leonardo Villar, en la cual
se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas,
y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un
resumen de los principales temas tratados en dicha reunión.
1.
Antecedentes
a.
Desarrollos recientes de la inflación
En el mes de octubre, el índice de precios al consumidor se mantuvo
prácticamente inalterado, con una variación de 0,01%. Sin embargo, debido a la caída
que se había presentado en ese índice en octubre de 2006, la inflación anual interrumpió
la tendencia decreciente que traía desde mayo, cerrando en 5,16%, 15 puntos básicos
por encima del dato de septiembre. Este aumento de la inflación se concentró en la
inflación sin alimentos, en especial en los bienes transables y, en menor medida, en los
regulados. Este comportamiento también se observó en la mayoría de los indicadores de
inflación básica.
La variación anual de los precios de los alimentos, que venía cayendo desde
abril de este año, dejó de hacerlo en octubre y se mantuvo en 7%. La inflación de los
alimentos perecederos continuó disminuyendo, pero la de alimentos procesados
aumentó levemente. El incremento en los precios de los cereales y oleaginosas,
vinculados con los precios internacionales y la tasa de cambio, fue la principal causa
para que se diera una interrupción de la tendencia decreciente.
La inflación de no transables sin alimentos ni regulados se redujo a 5,3%, cifra
inferior en 26 puntos básicos a la del mes anterior. Se destaca la caída de arriendos por
segundo mes consecutivo y del subgrupo de diversión cultura y esparcimiento.
2
En octubre se presentó un aumento en la inflación anual de transables diferentes
de alimentos como consecuencia de una base de comparación muy baja en el mismo
mes del año pasado, cuando se efectuaron importantes rebajas en las tarifas de telefonía.
Los precios de los regulados también contribuyeron a acelerar la inflación anual
en octubre, destacándose incrementos en servicios públicos, como gas domiciliario y, en
menor medida, energía.
b.
Crecimiento, contexto externo y variables financieras
El crecimiento económico interno continúa mostrando una fuerte dinámica,
aunque alguna información disponible sugiere que se está moderando. Los indicadores
sobre crecimiento industrial muestran una desaceleración paulatina desde el primer
trimestre. Las ventas al por menor según el DANE crecieron en términos reales 9,4% en
septiembre, cifra similar a la observada desde el segundo trimestre del año pero inferior
a la del mismo mes del 2006. Por su parte, el indicador de confianza de los
consumidores sigue presentando niveles similares a los de la misma fecha del año
pasado. Todo lo anterior es consistente con los pronósticos de crecimiento del PIB que
se divulgaron en el Informe sobre Inflación del Banco de la República correspondiente a
Septiembre del 2007, en los cuales se suponía que el dinamismo del segundo semestre
sería inferior al de la primera mitad del año.
Las exportaciones a agosto siguieron creciendo a un ritmo alto y similar al de
meses anteriores (de 16% en dólares), en gran parte por las mayores ventas de productos
no tradicionales. Venezuela continúa siendo el mercado de mayor crecimiento y ha
compensado en el mismo periodo la caída en las exportaciones hacia Estados Unidos.
Contexto internacional
Se mantiene la incertidumbre sobre la magnitud y la duración de la recesión en
el mercado de vivienda norteamericano y su impacto sobre el crecimiento de la
economía mundial.
Varios indicadores líderes sugieren que la economía norteamericana se estaría
debilitando, lo que se une a la persistencia de los problemas que muestra el sector
hipotecario y varias entidades financieras. El consumo privado podría estar
resintiéndose, en parte por los aumentos en el precio de los combustibles, pero también
por la disminución en los precios de los activos (finca raíz y acciones). A las señales de
desaceleración se suma el surgimiento de nuevas presiones inflacionarias por los altos
precios del petróleo y de los alimentos.
Por otra parte, se espera que los precios internacionales de la mayoría de los
productos básicos de exportación continúen en niveles altos, lo cual permitiría mantener
unos términos de intercambio favorables para Colombia.
3
Variables Financieras
Las principales variables monetarias observaron un aumento en octubre. Se
destaca el crecimiento de M3 a una tasa anual de 17,3%, mayor que la de agosto
(15,7%) y por encima del crecimiento del PIB nominal.
Por su parte, el crecimiento anual de la cartera total del sistema financiero en
moneda legal continuó desacelerándose frente al último mes, pasando de 27% en
septiembre a 25% en octubre. Este fenómeno se observó en especial en la cartera de
consumo, que pasó de crecer 39,4% en septiembre a 36,7% en octubre. Las carteras
comercial e hipotecaria también perdieron dinamismo pero en menor medida. Para
octubre se expandieron a tasas de 20,3% y 18,8% frente a tasas de 22,2% y 19,2% en el
mes anterior, respectivamente.
En octubre, aumentaron las tasas nominales de ahorro y de crédito de consumo
y de tarjetas. Las demás tasas disminuyeron, sobresaliendo el descenso de la DTF (en
30 puntos básicos) y la de crédito ordinario (en 24 puntos básicos).
2.
Discusión y opciones de política
En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo de
crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas por la
Junta; (ii) el significativo peso de los alimentos en el comportamiento futuro de
inflación; (iii) el comportamiento de la inflación de los bienes no transables, sin
alimentos ni regulados, que en el mes de octubre se redujo pero sigue por encima de la
inflación total; (iv) los indicadores disponibles sugieren que el dinamismo de la
demanda agregada se mantiene en niveles altos frente a la producción, aunque muestra
síntomas de moderación; (v) la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de la
economía mundial y de nuestros principales mercados de exportación (Venezuela y
Estados Unidos); y (vi) las implicaciones para la política monetaria de las metas de
inflación fijadas por la Junta y del comportamiento de las expectativas de inflación
frente a esas metas.
La Junta consideró que, a pesar de los resultados de octubre, distintos
indicadores muestran que los aumentos en las tasas de interés de intervención y
modificación en los encajes, han resultado eficaces frente a los objetivos buscados de
moderar el crecimiento de la demanda agregada y la dinámica del crédito. En los
últimos meses dichas medidas han fortalecido los canales de transmisión de la política
monetaria, lo cual ha llevado las tasas de interés hacia niveles más coherentes con
aquellos objetivos. A manera de ejemplo, entre mayo de 2006 y octubre de 2007, la
DTF aumentó de 5,97% a 8,59%, y la tasa activa promedio de 12,89% a 17,24%.
4
Por otra parte, la demanda externa sigue fuerte, los términos de intercambio
siguen siendo favorables e, incluso, han mejorado recientemente, y el crédito mantiene
tasas elevadas de crecimiento. Así mismo, la demanda interna continúa expandiéndose a
un ritmo superior al de la producción nacional, aunque declinante.
Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron
en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política monetaria dado el
rezago de las mismas; (ii) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para
lo que resta del año y el 2008; (iii) la ampliación del déficit de la cuenta corriente que
refleja un crecimiento de la demanda superior al de la producción nacional; (iv) el que
cambios en el escenario internacional puedan llevar a ajustes futuros en la tasa de
cambio en un contexto de fuerte crecimiento de la demanda interna; (v) la incertidumbre
generada por la alta volatilidad de los mercados internacionales y la incidencia que
puede tener en la economía colombiana; y (vi) la necesidad de fortalecer la credibilidad
de la autoridad monetaria como estrategia para anclar las expectativas de inflación ante
las tendencias de incrementos de precios que vienen enfrentando cada vez más otros
países.
La Junta de manera unánime juzgó que el logro de las metas de inflación
establecidas para el 2008 (rango entre 3,5% y 4,5%, con 4% como meta puntual para
efectos legales) y el 2009 (meta puntual entre 3% y 3,5%) requerían de un ajuste
adicional en las tasas de interés de intervención. Por tal razón, decidió incrementar en
25 p.b. sus tasas de intervención de 9,25% a 9,50%. Lo anterior teniendo en cuenta un
entorno caracterizado por un crecimiento aún fuerte de la demanda agregada y el
crédito, alta utilización de la capacidad instalada y un contexto internacional de
desaceleración moderada de la economía mundial.
Sobre el particular, algunos directores señalaron que el nuevo nivel de tasa de
interés es consistente con una política monetaria contraccionista a la manera de ‘seguro’
que selle la credibilidad del mercado y ancle sus expectativas en el cumplimiento de las
metas de inflación fijadas para 2008 y 2009. Que después del nuevo aumento de 25
puntos básicos las necesidades de incrementos adicionales desaparecen. Y que,
dependiendo del comportamiento de los niveles internos de precios y del empleo, y de
la evolución de las condiciones externas, en especial de Estados Unidos y Venezuela,
eventualmente se podría regresar a una postura más neutral.
Otros directores manifestaron que resulta muy difícil predecir decisiones futuras
sobre la senda de tasas de interés de intervención y consideraron que no se pueden
descartar incrementos adicionales si la información que se reciba en los meses venideros
sugiere que ello es aconsejable para garantizar el cumplimiento de las metas de
inflación establecidas y maximizar la tasa de crecimiento económico sostenible. Por
esta razón, la Junta estará atenta a la nueva información y sus implicaciones sobre la
inflación proyectada.
Con la información disponible, los miembros de la Junta consideran que el
9,50% de tasa de interés se encuentra alrededor del nivel coherente con el logro de las
metas de inflación anunciadas. Adicionalmente, estima que este nivel de tasa sería
consistente con el máximo crecimiento sostenible de la economía.
5
3.
Decisión de política
La Junta Directiva acordó por unanimidad aumentar en 25 puntos básicos de
9,25% a 9,50% las tasas de intervención del Banco de la República
Bogotá D.C., diciembre 7 de 2007
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2007-12-01 |
1
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 14 de
diciembre de 2007
El 14 de diciembre de 2007 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión
ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro
de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Dario
Uribe y los directores de dedicación exclusiva Carlos Gustavo Cano, Juan José
Echavarria, Juan Mario Laserna, Fernando Tenjo y Leonardo Villar, en la cual se
discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y
se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un
resumen de los principales temas tratados en dicha reunión.
1.
Antecedentes
Desarrollos recientes de la inflación
En noviembre, la variación anual del índice de precios al consumidor se situó en
5,41%, veinticinco puntos básicos por encima del resultado de octubre (5,16%). El
aumento se concentró en los precios de los alimentos y, en menor medida, de los bienes
transables y los regulados, en particular las tarifas de energía y los precios de los
combustibles. Este comportamiento también se observó en la mayoría de los
indicadores de inflación básica.
La variación anual de los precios de los alimentos se debió al fuerte aumento
tanto en alimentos perecederos como en procesados. Se destaca el incremento de las
hortalizas, como consecuencia del invierno, y de los cereales y aceites, estrechamente
vinculado con el comportamiento de los precios internacionales.
La inflación anual de no transables sin alimentos ni regulados se redujo a 5,27%
desde un nivel de 5,33% en octubre. Se destaca la caída por tercer mes consecutivo del
rubro de arriendos y del subgrupo de servicios bancarios, que compensó el aumento en
diversión, cultura y esparcimiento.
Crecimiento, contexto externo y variables financieras
El crecimiento económico interno continúa mostrando una fuerte dinámica. La
poca información nueva disponible, como el indicador de confianza de los
consumidores y las cifras del mercado laboral, es consistente con los pronósticos de
crecimiento del PIB que se divulgaron en el Informe de Inflación del Banco de la
2
República. En dicho informe, correspondiente a septiembre de 2007, se indica que el
dinamismo del segundo semestre sería inferior al de la primera mitad del año.
Las exportaciones continuaron creciendo a un buen ritmo. En lo corrido del año
hasta agosto, las ventas totales al exterior en dólares aumentaron 18,5% anual. Las de
mayor dinamismo fueron las destinadas a Venezuela con un incremento del 76,8%, con
lo cual ese mercado representó el 14,9% del total de las exportaciones colombianas.
Contexto internacional
En el último mes se mantuvo la incertidumbre sobre la magnitud y duración de
la recesión en el mercado de vivienda norteamericano y su impacto sobre el crecimiento
de la economía mundial.
Varios indicadores líderes de la industria y de sectores no industriales sugieren
que la economía de los Estados Unidos se estaría debilitando, lo que se une a la
persistencia de los problemas que muestran el sector hipotecario y varias entidades
financieras. La Reserva Federal redujo su tasa de referencia en 25 p.b. en su reunión del
11 de diciembre y, conjuntamente con otros Bancos Centrales ofreció una mayor
liquidez al mercado con el fin de atenuar los problemas de liquidez de algunas entidades
financieras.
Estas dudas sobre la economía norteamericana han extendido los temores de
desaceleración a otras economías desarrolladas, a lo que se suma el surgimiento de
nuevas presiones inflacionarias por los altos precios del petróleo y de los alimentos y la
incertidumbre sobre el comportamiento futuro de las exportaciones colombianas a
Venezuela.
Por otra parte, se espera que los precios de la mayoría de los productos básicos
de exportación continúen en niveles altos, lo cual permitiría mantener unos términos de
intercambio favorables para Colombia.
Variables Financieras
La cartera bruta total en moneda legal del sistema financiero continuó
moderando su ritmo de crecimiento, al pasar de incrementos anuales de 25,1% en
octubre a 24,1% en noviembre. Igual dinámica se observó en la cartera de consumo, con
tasas anuales de 36,7% y 35% para las mismas fechas. Las carteras comercial e
hipotecaria también perdieron dinamismo, aunque en menor medida. Para noviembre se
expandieron en 19,6% y 17,8%, frente a tasas de 20,3% y 18,3% en el mes anterior,
respectivamente.
3
En noviembre las tasas de interés pasivas volvieron a mostrar una tendencia
ascendente, en particular la tasa promedio de los CDT. La tasa activa promedio se
redujo en 11 p.b frente al mes anterior situándose en 16,7%.
2.
Discusión y opciones de política
En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo de
crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas por la
Junta; (ii) el significativo peso de los alimentos en el comportamiento de la inflación en
un contexto internacional de presiones al alza; (iii) el comportamiento de la inflación de
los bienes no transables sin alimentos ni regulados, que siguió reduciéndose pero sigue
por encima de niveles compatibles con las metas establecidas; (iv) los indicadores
disponibles sugieren que el dinamismo de la demanda agregada se mantiene en niveles
altos frente a la producción, aunque muestra síntomas de moderación; (v) la
incertidumbre sobre el comportamiento futuro de la economía mundial y de nuestros
principales mercados de exportación, en particular de Venezuela; y (vi) las
implicaciones para la política monetaria de las metas de inflación fijadas por la Junta y
del comportamiento de las expectativas de inflación frente a esas metas.
La Junta consideró que distintos indicadores muestran que los aumentos en las
tasas de interés de intervención y modificación en los encajes, han resultado eficaces
frente a los objetivos buscados de moderar la dinámica del crédito. En los últimos meses
se han fortalecido los canales de transmisión de la política monetaria. En todo caso, el
crédito mantiene tasas elevadas de crecimiento. Así mismo, la demanda interna continúa
expandiéndose a un ritmo superior al de la producción nacional, aunque declinante.
Por otra parte, la demanda externa continúa fuerte, los términos de intercambio
siguen siendo favorables e, incluso, siguen mejorando.
Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron
en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política monetaria dado el
rezago de las mismas; (ii) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para
el 2008; (iii) la ampliación del déficit de la cuenta corriente que refleja un crecimiento
de la demanda interna superior al de la producción nacional; (iv) el que cambios en el
escenario internacional, en un contexto de déficit de cuenta corriente, puedan llevar a
ajustes futuros en la tasa de cambio; (v) la incertidumbre generada por la alta volatilidad
de los mercados internacionales y la incidencia que puede tener en la economía
colombiana y (vi) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria
como estrategia para anclar las expectativas de inflación ante las tendencias de
incrementos de los precios que vienen enfrentando los países.
Los miembros de la Junta resaltaron que la actual coyuntura se caracteriza por
una gran incertidumbre, lo cual hace difícil predecir decisiones sobre la tasa de interés
de intervención.
Algunos de los directores destacaron que, a pesar de las medidas de política
adoptadas a lo largo del año, la inflación sigue mostrando una preocupante tendencia al
alza que la aleja de la meta de largo plazo definida en la sesión anterior, lo cual se ha
manifestado parcialmente en el comportamiento de las expectativas. Al mismo tiempo,
no descartaron que en el futuro sean necesarios incrementos adicionales si la
4
información sugiere que ello es aconsejable para garantizar el cumplimiento de las
metas de inflación y maximizar la tasa de crecimiento económico sostenible.
Otros miembros reiteraron su postura planteada durante la reunión de la Junta
del 23 de noviembre pasado, en el sentido de que la tasa de interés vigente es
consistente con una política monetaria contraccionista. Por tanto, destacaron que la
información disponible no sugiere la necesidad de aumentos futuros en la tasa de
intervención; que la política monetaria viene logrando los objetivos buscados para
moderar el crecimiento y el crédito y anclar las expectativas hacia el logro de las metas
de inflación; y que, dependiendo de la evolución de las condiciones externas y de los
niveles internos de precios y empleo, cabría regresar a una postura más neutral.
La Junta, de manera unánime, mantuvo inalterada su tasa de intervención en
9,50% y estimó necesario seguir haciendo un cuidadoso seguimiento del efecto que
pueda tener la situación económica internacional sobre el crecimiento, así como, de las
presiones inflacionarias provenientes de los precios internacionales de los alimentos y
combustibles.
3.
Decisión de política
La Junta Directiva acordó por unanimidad mantener inalteradas las tasas de
intervención del Banco de la República.
Bogotá D.C., diciembre 28 de 2007
|
2008-01-01 |
1
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 25 de
enero de 2008
El 25 de enero de 2008 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de
la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda
y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Dario Uribe y los
directores de dedicación exclusiva Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarria, Juan
Mario Laserna y Leonardo Villar, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y
de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la
política monetaria. El director Fernando Tenjo no estuvo presente. A continuación se
hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión.
1.
Antecedentes
a.
Desarrollos recientes de la inflación
La inflación al consumidor cerró el año en 5,69%, 119 p.b. por encima del techo
del rango meta fijado por la Junta Directiva del Banco de la República y mayor en 121
p.b. al resultado de diciembre de 2006.
El aumento de la inflación en diciembre se explica fundamentalmente por el
comportamiento de los precios de los alimentos y de los regulados. En el mes, la
inflación anual de no transables sin alimentos ni regulados no aumentó y se situó en
5,2%, cayendo por cuarto mes consecutivo luego de haber alcanzado un máximo de
5,57% en agosto.
El promedio de los indicadores de la inflación básica al final del año se situó
alrededor del 5%. En el caso específico de la inflación sin alimentos, el resultado de
diciembre de 2007 fue 4,4%, similar al de noviembre.
En lo que se refiere a los alimentos, la variación anual de sus precios (8,51%) se
explica por diversos factores. Por una parte, fenómenos climáticos como El Niño en los
primeros meses del año y la Niña en el segundo semestre de 2007 impactaron el
abastecimiento de varios alimentos (hortalizas, frutas y tubérculos). Por otra, la mayor
demanda y producción de biocombustibles presionó los precios internacionales de
algunos alimentos e insumos agrícolas, mientras que los altos precios del petróleo
incrementaron los fletes del transporte y los precios de varios agroquímicos.
Adicionalmente, esta situación ha inducido el desplazamiento de materias primas
agrícolas, antes destinadas a alimentos, para su utilización en la elaboración de
biocombustibles. Finalmente, el aumento de la demanda de Venezuela por algunos
alimentos y la fortaleza de la demanda interna también presionaron los precios al alza.
2
b. Crecimiento, contexto externo y variables financieras
El crecimiento económico interno continúa mostrando una fuerte dinámica. El
crecimiento anual registrado para el PIB en el tercer trimestre de 2007 fue de 6,6%. Con
esta nueva información se corrobora que el crecimiento para todo el año estará
alrededor del 7,0%
Para 2008 se prevé una desaceleración cuya magnitud dependerá de la situación
internacional. A pesar de ello, estudios técnicos del Banco muestran que el crecimiento
del PIB para este año se mantendrá vigoroso, alrededor del promedio del último lustro.
Lo anterior es consistente con el buen desempeño de las exportaciones, que
continúan creciendo a un buen ritmo, de la inversión y del dinamismo en el empleo. En
el comercio, de acuerdo con la encuesta sectorial, el empleo a noviembre creció a una
tasa del 6,7% anual y completó 2 años expandiéndose por encima del 5% anual. El
empleo en la industria, aunque con registros menos altos, también completó seis
trimestres creciendo a tasas superiores al 2%, mostrando en noviembre un crecimiento
del 2,5% anual.
c. Contexto internacional
Distintos
indicadores
confirman
la
desaceleración
de
la
economía
norteamericana. El mercado de vivienda no muestra señales de recuperación, las
restricciones crediticias han aumentado y las ventas, los permisos de construcción y el
desarrollo de nuevos proyectos habitacionales continúan deteriorándose. Ello permite
esperar caídas mayores en los precios de la vivienda en los próximos meses e
implicaciones importantes sobre la solidez financiera de ese país y de otros países
desarrollados. Adicionalmente, a diciembre la tasa de desempleo aumentó de 4,7% a 5%
y la generación de empleo se desaceleró sustancialmente, algo que no sucedía desde la
anterior recesión en 2001. Así mismo, las expectativas de producción para la industria
obtenidas de encuestas se han reducido a niveles que no se observaban desde 2001. El
consumo de los hogares, que hasta hace poco mostraba una gran solidez, podría estar
resintiéndose a juzgar por la contracción de las ventas al por menor en diciembre (-4,3%
mensual anualizado) y por el comportamiento de las encuestas de consumo.
Estas dudas sobre la economía norteamericana han extendido los temores de
desaceleración a otras economías desarrolladas y en desarrollo, a lo que se suma el
surgimiento de nuevas presiones inflacionarias por los altos precios del petróleo y de los
alimentos y la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de las exportaciones
colombianas a Venezuela.
d. Variables financieras
La base monetaria cerró el año con un crecimiento de 19,4% frente a 15,3% en
noviembre y 10,9% un trimestre atrás. La tendencia de la base guarda relación con la
recuperación de la demanda por efectivo y con una mayor demanda por reserva bancaria
3
asociada con el aumento del encaje marginal a mediados del 2007. Por su parte, el M3
creció en diciembre a una tasa anual de 17,8%, también mayor que la observada en
meses anteriores. Se destaca un aumento en la participación de los CDT en detrimento
de las cuentas de ahorro.
En el mismo período, el crecimiento de la cartera del sistema financiero continuó
moderándose y a diciembre era de 23,6%. El crédito comercial muestra signos de
aceleración confirmados por los mayores desembolsos. Parte de este aumento podría
ser explicado por la sustitución de créditos externos por crédito interno a raíz del
restablecimiento de los depósitos sobre endeudamiento externo. Por su parte, el
crecimiento anual del crédito de consumo y de la cartera total se redujo.
En el mes de diciembre las tasas pasivas, excepto la DTF, tendieron a disminuir
y algo similar sucedió con las tasas activas de consumo, comercial y microcrédito, y con
el promedio de la tasa activa. Con ese comportamiento de las tasas nominales y dado el
aumento de la inflación de los últimos meses, las tasas reales tendieron a reducirse en el
cuarto trimestre, interrumpiendo la tendencia ascendente que se observaba desde
comienzos de 2007.
2.
Discusión y opciones de política
En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo de
crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas por la
Junta; (ii) el significativo peso de los alimentos en el comportamiento de la inflación en
el 2008 y 2009 en un contexto internacional de presiones al alza; (iii) el comportamiento
de la inflación de los bienes no transables sin alimentos ni regulados que, si bien siguió
reduciéndose, continúa por encima de niveles compatibles con las metas establecidas;
(iv) los indicadores disponibles sugieren que el dinamismo de la demanda agregada se
mantiene en niveles altos frente a la producción, aunque muestra síntomas de
moderación; (v) la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de la economía
mundial y de nuestros principales mercados de exportación, en particular de Venezuela
y (vi) las implicaciones para la política monetaria de las metas de inflación fijadas por la
Junta y del comportamiento de las expectativas de inflación las cuales aumentaron en el
último mes por el resultado de la inflación en el 2007.
La Junta consideró que distintos indicadores muestran que los aumentos en las
tasas de interés de intervención y modificación en los encajes, han tenido impacto sobre
las tasas de interés activas y pasivas y han resultado eficaces frente a los objetivos
buscados de moderar la dinámica del crédito. En todo caso, el crédito mantiene tasas
elevadas de crecimiento. Así mismo, la demanda interna continúa expandiéndose a un
ritmo superior al de la producción nacional, aunque declinante.
Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron
en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política monetaria dado el
rezago de las mismas; (ii) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para
el 2008; (iii) la ampliación del déficit de la cuenta corriente que refleja un crecimiento
de la demanda interna superior al de la producción nacional; (iv) el que cambios en el
escenario internacional, en un contexto de déficit de cuenta corriente, puedan llevar a
4
ajustes futuros en la tasa de cambio; (v) la incertidumbre generada por la alta volatilidad
de los mercados internacionales y la incidencia que puede tener en la economía
colombiana y (vi) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria
como estrategia para anclar las expectativas de inflación ante las tendencias de
incrementos de los precios que vienen enfrentando los países.
Los miembros de la Junta resaltaron de manera unánime que la actual coyuntura
se caracteriza por una gran incertidumbre. En especial, las posibles implicaciones en el
crecimiento de la economía colombiana por un menor crecimiento de la economía
mundial aconsejan que sea mejor esperar a nueva información antes de tomar decisiones
sobre la tasa de interés de intervención. En efecto, este menor crecimiento de la
economía mundial podría afectar el desempeño de la economía colombiana, lo cual
dependerá de la magnitud de la desaceleración en esos países y su incidencia sobre las
exportaciones, los precios de los bienes básicos, los flujos de capital y las remesas.
Algunos de los directores destacaron que la inflación sigue mostrando una
preocupante tendencia al alza que la aleja de la meta de largo plazo definida en la sesión
anterior, lo cual se ha manifestado en el comportamiento de las expectativas. Al mismo
tiempo, no descartaron que en el futuro sean necesarios incrementos adicionales en la
tasa de intervención si la información sugiere que ello es aconsejable para garantizar el
cumplimiento de las metas de inflación y maximizar la tasa de crecimiento económico
sostenible.
Otros miembros reiteraron que la tasa de interés vigente es consistente con una
política monetaria contraccionista y que la información disponible no sugiere la
necesidad de aumentos futuros en la tasa de intervención. A su juicio, la política
monetaria viene logrando los objetivos buscados para moderar el crecimiento y el
crédito y anclar las expectativas hacia el logro de las metas de inflación. Dependiendo
de la evolución de las condiciones externas y de los niveles internos de precios y
empleo, cabría regresar a una postura más neutral.
La Junta de manera unánime mantuvo inalterada su tasa de intervención en
9,50% y estimó necesario seguir haciendo un cuidadoso seguimiento del efecto que
pueda tener la situación económica internacional sobre el crecimiento, así como, de las
presiones inflacionarias provenientes de los precios internacionales de los alimentos y
combustibles.
3.
Decisión de política
La Junta Directiva acordó por unanimidad mantener inalteradas las tasas de
intervención del Banco de la República.
Bogotá D.C., febrero 8 de 2008
|
2008-02-01 |
1
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República
del 22 de febrero de 2008
El 22 de Febrero de 2008 se celebró en la ciudad de Bogotá la
reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la
presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga,
el Gerente General, José Dario Uribe y los directores de dedicación
exclusiva, Fernando Tenjo, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarria,
Juan Mario Laserna y Leonardo Villar, en la cual se discuten las
situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y
se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación
se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión.
1.
Antecedentes
a.
Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual en enero aumentó por cuarto mes consecutivo al
cerrar en 6,0%. Este nivel supera en 31 p.b. el registro del mes anterior y en
150 p.b. el rango superior de la meta para 2008.
El aumento de la inflación en enero se explica fundamentalmente por
el comportamiento de los precios de los alimentos. En el mes, la inflación
anual de no transables sin alimentos ni regulados se mantuvo estable
alrededor de 5,2%.
Los distintos indicadores de inflación básica se mantuvieron
alrededor de 5%. El indicador de inflación sin alimentos aumentó de 4,4%
en diciembre a 4,5% en enero.
Respecto a los alimentos, el grupo de perecederos, encabezados por
la papa, hortalizas y huevos, fue responsable del fuerte aumento de la
inflación en enero. La inflación de procesados, por su parte, se contrajo
levemente. A pesar de ello, la inflación anual de este subgrupo continúa
exhibiendo un alto nivel (9,7%). Los procesados estarían siendo afectados
por los precios internacionales altos, los cuales a su vez han sido golpeados
2
por el desplazamiento de la oferta agrícola hacia la producción de
biocombustibles y por la gran demanda de China, la India y de otras
economías emergentes.
b. Crecimiento interno
El crecimiento económico interno continúa mostrando una fuerte
dinámica, lo que permite mantener las estimaciones realizadas por el
equipo técnico del Banco que sitúan el crecimiento del PIB alrededor del
7% en el 2007 y del 5% para el 2008.
Las cifras de producción industrial arrojaron un crecimiento alto, de
7,7% en promedio entre octubre y noviembre, aunque menor que el
observado en el tercer trimestre (8,5%). Algo similar se observa en el
crecimiento de las ventas del comercio al por menor.
Por su parte, el indicador de confianza del consumidor de la encuesta
de Fedesarrollo se situó en el último trimestre de 2007 en niveles
históricamente altos.
Las importaciones crecieron 24,5%, sobresaliendo la aceleración de las
de bienes de capital. Esto sugiere que la inversión conservó una dinámica
importante hacia finales de año. En el caso de las importaciones de bienes
de consumo, su crecimiento fue 28,4%, pero con una ligera desaceleración
desde abril de 2007.
Las exportaciones tradicionales y no tradicionales, continuaron
creciendo en octubre y noviembre. En el caso de las tradicionales, su
dinámica obedece a un aumento en los precios internacionales, mientras
que en las no tradicionales sobresale el dinamismo que exhibieron las
ventas a Venezuela, las cuales crecieron a un ritmo anual de 84%, frente a
70% a finales del tercer trimestre (acumulado a 12 meses). Las
exportaciones no tradicionales a Venezuela ya representan el 8,44% del
PIB.
c. Contexto internacional
En enero y lo corrido de febrero, las noticias sobre la economía de
EEUU apoyan los menores pronósticos de crecimiento. En efecto, la
generación de empleo fue negativa en enero, por primera vez desde
3
mediados de 2003. El indicador líder del sector de servicios sufrió un
retroceso importante en ese mismo mes, algo que no se veía desde el
anterior período recesivo en 2001, mientras que el sentimiento de los
consumidores cayó en febrero a niveles no vistos desde comienzos de la
década pasada. Por otro lado, las cifras para el mercado de vivienda a
noviembre de 2007 sugieren que el deterioro se acentuó a finales del año
pasado.
Respecto a las tasas de interés de la FED, el mercado espera
reducciones en los próximos meses de alrededor de 75 p.b., lo que situaría
la tasa de referencia sobre los fondos federales en junio en 2,25%,
aproximadamente. No obstante, el dato relativamente alto de inflación
básica al consumidor para enero en EEUU (2,5% en términos anuales)
podría frenar en algo estas disminuciones.
El menor crecimiento en EEUU aún no ha tenido efectos evidentes
en la demanda mundial ni en los precios de las materias primas. De hecho,
estos últimos continuaron aumentando a comienzos de año y se sitúan en
niveles máximos históricos. Los aumentos han sido significativos en el
caso de los productos agrícolas, incluido el café, y en otros bienes
exportados por Colombia como carbón y oro.
c. Variables Financieras
Desde septiembre, el M3 crece alrededor de 18%. Se desataca la
aceleración de las captaciones a través de CDT, que en enero crecían a una
tasa cercana al 35%.
El crecimiento de la cartera del sistema financiero continuó
desacelerándose. En enero, el crédito total creció a una tasa anual de
23,5%, menor que la de diciembre (24,5%) y que la de septiembre (28,2%),
aunque todavía por encima del crecimiento esperado del PIB nominal. El
crédito de consumo es el que más rápidamente se ha desacelerado en los
últimos seis meses, aunque su ritmo sigue siendo el más alto (31%
aproximadamente).
La tasa de interés interbancaria (TIB) se mantuvo alrededor de
9,40%, ligeramente por debajo de la tasa de referencia del Banco de la
República. La mayoría de las otras tasas nominales tendieron a aumentar en
4
enero, destacándose lo sucedido con las de tarjetas de crédito, las de crédito
de consumo y las de crédito ordinario.
Si bien el diferencial de las tasas de interés de la FED y las tasas del
BR se han incrementado en 125 p.b., la caída de las tasas de interés
relativas en los Estados Unidos fue compensada por el aumento de la prima
de riesgo colombiana.
2.
Discusión y opciones de política
En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i)
el ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas
establecidas por la Junta; (ii) el significativo peso de los alimentos en el
comportamiento de la inflación en un contexto internacional de presiones al
alza; (iii) el comportamiento de la inflación de los bienes no transables sin
alimentos ni regulados frenó la tendencia descendente que traía en meses
anteriores; (iv) los indicadores disponibles sugieren que el dinamismo de la
demanda agregada se mantiene en niveles altos frente a la producción,
aunque muestra síntomas de moderación; (v) la incertidumbre sobre el
comportamiento futuro de la economía mundial y de nuestros principales
mercados de exportación y, en particular de Venezuela, y; (vi) el
comportamiento de las expectativas de inflación, las cuales aumentaron en
el último mes ubicándose por encima de las metas fijadas por la Junta.
La Junta consideró que distintos indicadores muestran que los
aumentos en las tasas de interés de intervención y modificación en los
encajes, han tenido impacto sobre las tasas de interés activas y pasivas y
han resultado eficaces frente a los objetivos buscados de moderar la
dinámica del crédito. En todo caso, el crédito mantiene tasas elevadas de
crecimiento. Así mismo, la demanda interna continúa expandiéndose a un
ritmo superior al de la producción nacional, aunque desacelerándose.
Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se
centraron en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política
monetaria, dado el rezago de las mismas; (ii) los elementos que afectan las
proyecciones de inflación para el 2008; (iii) la pertinencia de adoptar
medidas de política monetaria en un contexto de alza de precios
internacionales de los alimentos y combustibles; (iv) la ampliación del
déficit de la cuenta corriente que refleja un crecimiento de la demanda
interna superior al de la producción nacional; (v) el que cambios en el
escenario internacional, en un contexto de déficit de cuenta corriente,
puedan llevar a ajustes futuros en la tasa de cambio; (vi) la incertidumbre
5
generada por la alta volatilidad de los mercados internacionales y la
incidencia que puede tener en la economía colombiana, y; (vii) la necesidad
de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria como estrategia para
anclar las expectativas de inflación ante las tendencias de incrementos de
los precios que vienen enfrentando los países.
La mayoría de la Junta consideró necesario elevar en 25 p.b. las tasas
de interés de intervención para garantizar el cumplimiento de las metas de
inflación y maximizar la tasa de crecimiento económico sostenible,
teniendo en cuenta los siguientes elementos: (i) Si bien la demanda
agregada ha moderado su ritmo de crecimiento gracias a las decisiones de
política monetaria, la información disponible muestra que continúa fuerte.
Lo mismo sucede con el crecimiento del crédito que, aunque muestra una
tendencia decreciente, sigue estando por encima de sus promedios
históricos; (ii) los distintos indicadores de expectativas de inflación a
horizontes de uno y más años muestran que estas han aumentado en los
últimos meses haciendo más costosa la reducción futura de la inflación;
(iii) los altos incrementos en los precios de los alimentos y combustibles
pueden ser persistentes manteniendo la inflación total en niveles elevados,
más aún cuando algunas alzas internas podrían aún no haberse incorporado
al comportamiento de los precios internos; (iv) no hay aún evidencia de que
la desaceleración de la economía en Estados Unidos y Europa haya
afectado la economía colombiana. Los términos de intercambio se
encuentran en niveles históricamente altos, los flujos comerciales
mantienen su dinámica positiva y la confianza de los inversionistas
internacionales se refleja en los crecientes flujos de inversión extranjera
directa; (v) las entradas netas de capital de la balanza de cambiaria se
explican por la dinámica de inversión extranjera directa y no por flujos de
capital de corto plazo inducidos por diferenciales de tasas de interés entre
Colombia y el exterior, y; (vi) el aumento de la tasa de intervención
apuntala la credibilidad de la política monetaria y facilita la política
anticíclica en el futuro.
Otros miembros de la Junta, por el contrario, estimaron que no debía
aumentarse la tasa de interés de intervención por las siguientes razones: (i)
Como resultado de los reajustes de la tasa de intervención del Banco, uno
de los más altos de toda la región en los últimos dos años, las tasas de
interés de colocación también han subido, y subirán aún más a lo largo de
este año por los efectos remanentes del rezago natural entre las medidas
tomadas y sus impactos, entre año y medio y dos años; (ii) inclusive según
los modelos, aunque la brecha del producto es positiva desde hace dos
años, ha comenzado a corregirse por efecto de las alzas en las tasas de
interés; (iii) la economía colombiana se encuentra afrontando los efectos de
un choque externo muy severo de precios de alimentos y combustibles, lo
6
que se refleja en las expectativas de inflación; (vi) la economía en 2008 se
desaceleraría a una tasa de crecimiento del 5%, suponiendo un crecimiento
de la norteamericana del 0,8%. Sin embargo, pronósticos recientes indican
que ésta apenas se incrementará cerca de 0,5%; (v) es ostensible la
reducción de la utilización de la capacidad instalada de la industria; la caída
de su índice de confianza; la desaceleración de la demanda de energía, de
bienes de consumo durable y de vivienda; la tendencia descendente de la
demanda de crédito de los hogares; y la descolgada de la cartera, en
especial de la de consumo; (vi) la formación interna bruta de capital fijo
continúa en niveles históricos record, al haber llegado al 27% sobre el PIB;
(vii) la inflación básica sin alimentos, que es a la cual debería reaccionar la
política monetaria a través de las tasas de interés, aún se ubica dentro del
rango meta; (viii) el diferencial entre las tasas de referencia de Colombia y
EU ha aumentado en 200 p.b desde septiembre del año anterior, el cual, de
seguir ampliándose, provocaría una mayor revaluación del peso, cuya
magnitud durante el último lustro es una de las más altas del mundo, y
causaría graves perjuicios para los sectores transables y la generación de
empleo.
Teniendo en cuenta lo anterior, la Junta de manera mayoritaria
decidió aumentar su tasa de intervención a 9,75% y estimó necesario seguir
haciendo un cuidadoso seguimiento del efecto que pueda tener la situación
económica internacional sobre el crecimiento, así como, de las presiones
inflacionarias provenientes de los precios internacionales de los alimentos y
combustibles.
3.
Decisión de política
La Junta Directiva acordó por mayoría aumentar las tasas de interés de
intervención del Banco de la República en 25 p.b.
Bogotá D.C., marzo 7 de de 2008
|
2008-03-01 |
1
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República
del 28 de marzo de 2008
El 28 de Marzo de 2008 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión
ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia
del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el
Gerente General, José Dario Uribe y los directores de dedicación exclusiva,
Fernando Tenjo, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Juan Mario
Laserna y Leonardo Villar, en la cual se discuten las situaciones
inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman
decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace
un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión.
1.
Antecedentes
a.
Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual en febrero aumentó por quinto mes consecutivo al
cerrar en 6,35%. Este nivel supera en 35 p.b. el registro del mes anterior y
en 185 p.b. el rango superior de la meta para 2008.
El aumento de la inflación en febrero se explica fundamentalmente
por el comportamiento de los precios de los alimentos. En el mes, la
inflación sin alimentos se mantuvo estable en 4,47% y algunos de los
indicadores de inflación básica se redujeron ligeramente. Por su parte, la
inflación anual de no transables sin alimentos ni regulados se mantuvo
estable alrededor de 5,2%.
Respecto a los alimentos, su inflación pasó de 9,4% en enero a
10,5% en febrero. El aumento se debió al grupo de perecederos y, en
particular, al comportamiento de los precios de la papa. La inflación de
procesados, por su parte, se mantuvo en un nivel similar al de enero. A
pesar de ello, la inflación anual de este subgrupo continúa exhibiendo un
alto nivel (9,5%).
2
A febrero el IPP continuó acelerándose y registró una inflación anual
de 3,9%, mientras que los indicadores de salarios muestran aceleraciones
importantes en todos los sectores en los que se dispone de información.
b. Crecimiento interno
Los resultados del crecimiento del PIB para el 2007 (7,52%) y del
último trimestre del año (8,14%) fueron superiores a los esperados y
confirman que la economía colombiana sigue creciendo a un ritmo fuerte.
Las exportaciones en dólares registraron una importante aceleración
en noviembre y, especialmente, en diciembre. El buen desempeño se
presentó tanto para las tradicionales como para las no tradicionales y se
explica por una mejoría en los precios de exportación y un aumento en los
volúmenes exportados. Las exportaciones a Venezuela mostraron un
crecimiento de más de 90% para el acumulado a 12 meses en diciembre.
Las exportaciones tradicionales a Estados Unidos repuntaron en los últimos
meses de 2007 y las no tradicionales dejaron de caer.
El crecimiento de la industria en enero según el DANE fue de 5,6%,
mientras que las cifras de la ANDI señalan un crecimiento para la industria
de 7,5%.
Las ventas al por menor, por su parte, presentaron una caída
explicada por las ventas de alimentos. Otros indicadores de gasto privado
como el sentimiento de los consumidores medido por Fedesarrollo indican
que este se mantuvo en un nivel alto.
El ritmo de crecimiento de las importaciones se aceleró en enero
frente a diciembre, particularmente en bienes de consumo durable y bienes
de capital.
En materia de empleo, las cifras del DANE y las encuestas
sectoriales en enero muestran que ha seguido creciendo a un ritmo alto.
c. Contexto internacional
La actividad económica en los EEUU continuó deteriorándose. El
comportamiento de diversos indicadores en febrero y marzo sugiere que el
crecimiento ya habría entrado en terreno negativo en el primer trimestre del
año. El sentimiento de los consumidores en marzo cayó a niveles similares
3
o incluso inferiores a los observados en la pasada recesión de 2001-2002,
reflejándose en un pobre desempeño de las ventas al detal y en una caída de
la producción industrial.
Por otro lado, la crisis en el sector de finca raíz continúa: el precio de
la vivienda sigue descendiendo, los inventarios aún no se reducen y los
incumplimientos hipotecarios y los embargos de vivienda aumentan, según
la última información disponible a diciembre.
El sistema financiero ha sido afectado por las noticias anteriores y las
dudas sobre su solidez han seguido creciendo, lo que se confirma con la
difícil situación de varios bancos internacionales.
Todo lo anterior hace presagiar una recesión en EEUU más fuerte y
duradera de lo que inicialmente se esperaba. Los pronósticos de
crecimiento para 2008 de los diferentes analistas se han reducido desde
niveles de 1,5% hacia niveles cercanos a 0,5%. Se anticipa para 2009 tasas
de crecimiento inferiores al 1%.
Estos resultados, de confirmarse, estarían sugiriendo un desempeño
económico en ese país por debajo del observado en las últimas dos décadas,
lo que podría terminar afectando el crecimiento mundial. Por esta razón, las
perspectivas económicas para otras economías desarrolladas también están
siendo revisadas a la baja.
Los precios de las materias primas han presentado gran volatilidad
como resultado del aumento en la incertidumbre en EEUU. No es claro
hasta qué punto los altos niveles que exhiben hoy en día estos precios
obedecen a excesos de la demanda mundial o a movimientos especulativos
asociados con el debilitamiento del dólar. Esto último aumenta el riesgo de
que se presenten cambios con reducciones más pronunciadas que las
observadas en los últimos días.
Las monedas de los países emergentes, en especial de América
Latina, continuaron apreciándose. Por otro lado, en las últimas semanas, las
primas de riesgo de estas economías han tenido una reacción relativamente
moderada al deterioro del contexto internacional.
4
d. Variables Financieras
Los agregados monetarios se desaceleraron nuevamente en febrero.
El M3 creció a una tasa anual de 16,9%, el efectivo lo hizo al 11,3% y los
pasivos sujetos a encaje (PSE) al 17,8%. En el mes continuó la aceleración
de las captaciones a través de CDT.
El crecimiento de la cartera del sistema financiero también continuó
desacelerándose. El crédito total creció a una tasa anual de 23,1% frente
24,6% en diciembre. Cuando se observa el crecimiento marginal utilizando
la serie de promedios móviles de orden 13 se aprecia una desaceleración
más pronunciada en los últimos meses sobre todo en el crédito de consumo
y en el comercial.
Las tasas de interés nominales continuaron incrementándose y las
diferentes tasas reales, tanto activas como pasivas, están en sus promedios
históricos.
2.
Discusión y opciones de política
En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i)
el ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas
establecidas por la Junta; (ii) el significativo peso de los alimentos en el
comportamiento de los precios en un contexto internacional de presiones al
alza; (iii) el comportamiento de la inflación de los bienes no transables sin
alimentos ni regulados frenó la tendencia descendente que traía en meses
anteriores; (iv) los indicadores disponibles sugieren que el dinamismo de la
demanda agregada se mantiene en niveles altos frente a la producción,
aunque muestra síntomas de moderación; (v) la incertidumbre sobre el
comportamiento futuro de la economía mundial y de nuestros principales
mercados de exportación y, en particular de Venezuela, (vi) el efecto de la
reciente revaluación del peso sobre la inflación y las perspectivas de
crecimiento de los sectores transables y (vii) el comportamiento de las
expectativas de inflación, las cuales continuaron aumentando, ubicándose
por encima de las metas fijadas por la Junta, y que podrían estar
reflejándose en las negociaciones salariales.
La Junta consideró que distintos indicadores muestran que los
aumentos en las tasas de interés de intervención y modificación en los
encajes, han tenido impacto sobre las tasas de interés activas y pasivas y
han resultado eficaces frente a los objetivos buscados de moderar la
5
dinámica del crédito. En todo caso, la demanda interna continúa
expandiéndose a un ritmo superior al de la producción nacional, aunque
desacelerándose.
Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se
centraron en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política
monetaria dado el rezago de las mismas; (ii) los elementos que afectan las
proyecciones de inflación para el 2008 y 2009; (iii) la pertinencia de
adoptar medidas de política monetaria en un contexto de alza de precios
internacionales de los alimentos y combustibles; (iv) el déficit de la cuenta
corriente que refleja un crecimiento de la demanda interna superior al de la
producción nacional; (v) el que cambios en el escenario internacional, en
un contexto de déficit de cuenta corriente, puedan llevar a ajustes futuros
en la tasa de cambio; (vi) la incertidumbre generada por la alta volatilidad
de los mercados internacionales y la incidencia que puede tener en la
economía colombiana, y (vii) la necesidad de fortalecer la credibilidad de
la autoridad monetaria como estrategia para anclar las expectativas de
inflación ante las tendencias de incrementos de los precios que vienen
enfrentando los países.
La mayoría de la Junta consideró conveniente mantener inalterada la
tasa de interés de intervención, a pesar de la persistencia de las presiones
inflacionarias reseñadas y en especial del aumento en las expectativas de
inflación de los agentes en la economía. Lo anterior, con el fin de acopiar
mayor información para evaluar los posibles efectos sobre el crecimiento
de una recesión más profunda y prolongada en los Estados Unidos, así
como del impacto de las medidas de política monetaria adoptadas en el
pasado.
Unos miembros de la Junta señalaron la importancia de tener la
inflación y las expectativas de inflación ancladas a las metas, para lo cual
consideran necesario mantener una postura de la política monetaria
restrictiva, que facilite en el futuro una política contracíclica en el manejo
monetario. Lo anterior, a pesar de las perspectivas de menor crecimiento de
la economía, en especial por el efecto de la recesión en los Estados Unidos.
Un miembro de la Junta estimó que debería disminuirse la tasa de
interés de intervención, por las siguientes razones: (i) Las medidas tomadas
por la Junta han tenido y seguirán teniendo los efectos buscados por la
política monetaria. Lo anterior se refleja ya en la reducción de la utilización
de la capacidad instalada de la industria, la caída de su índice de confianza,
la desaceleración de la demanda de energía y de bienes de consumo durable
y de vivienda, el aumento de las tasas de interés y la tendencia descendente
de la demanda de crédito de los hogares y la descolgada de la cartera, en
6
especial de la de consumo; (ii) La información disponible sugiere que se
presentará una corrección importante en los próximos meses de los precios
internos de los alimentos perecederos; (iii) La dinámica de la economía
colombiana en los años 2008 y 2009 se va a afectar por el deterioro del
crecimiento de la economía norteamericana y mundial a lo cual se suman
los posibles problemas futuros que afecten a Venezuela; (iv) Una
disminución de la tasa de intervención conduciría a que no se siga
ampliando el diferencial de las tasas internas y externas y a una menor
presión sobre la revaluación del peso, cuya magnitud durante el último
lustro es una de las más altas del mundo, y causaría graves perjuicios para
los sectores transables y la generación de empleo.
Teniendo en cuenta lo anterior la Junta de manera mayoritaria
decidió mantener inalterada su tasa de intervención en 9,75% y estimó
necesario seguir haciendo un cuidadoso seguimiento del efecto que pueda
tener la situación económica internacional sobre el crecimiento, así como,
de las presiones inflacionarias provenientes de los precios internacionales
de los alimentos y combustibles.
3.
Decisión de política
La Junta Directiva acordó por mayoría mantener inalterada las tasas de
interés de intervención del Banco de la República en 9,75%.
Bogotá D.C., abril 11 de 2008
|
2008-04-01 |
1
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República
del 25 de abril de 2008
El 25 de Abril de 2008 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión
ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia
del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el
Gerente General, José Dario Uribe y los directores de dedicación exclusiva,
Fernando Tenjo, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Juan Mario
Laserna y Leonardo Villar, en la cual se discuten las situaciones
inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman
decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace
un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión.
1.
Antecedentes
a.
Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual en marzo se situó en 5,93%, 42 p.b. por debajo de
la observada un mes atrás. El descenso se dio luego de cinco meses de
aumentos consecutivos.
La desaceleración de la inflación en marzo se explica por el
comportamiento de los precios de los alimentos (8,6% en marzo frente a
10,5% en febrero) y, en especial, de los perecederos. A pesar de ello, la
inflación anual de este subgrupo continúa exhibiendo un alto nivel (9,6%).
La inflación sin alimentos se incrementó en el mes de marzo
alcanzando 4,67% frente a 4,47% del mes anterior, lo cual obedeció
fundamentalmente al comportamiento de los regulados, cuyos precios
mostraron incrementos anuales de 6,57% a febrero y 7,7% a marzo.
Algunos indicadores de inflación básica aumentaron después de
permanecer cuatro meses estables.
La inflación anual de no transables sin alimentos ni regulados, la cual
suele ser un buen indicador de las presiones inflacionarias del lado de la
demanda, disminuyó al pasar de 5,3% en febrero a 5,1% en marzo. Se
destaca el menor ajuste de los servicios bancarios y la estabilidad de la
2
inflación anual de arriendos. Esta última se ha mantenido alrededor de
4,3% en los últimos cuatro meses.
Los precios de los bienes transables sin alimentos ni regulados
mostraron incrementos superiores a los de un mes atrás a pesar de la
notoria caída que se observó en la tasa de cambio del peso con respecto al
dólar.
A marzo, el ritmo de crecimiento del IPP se redujo levemente y
registró una inflación anual de 3,4%.
b. Crecimiento interno
Los resultados del crecimiento del PIB para el 2007 (7,52%) y del
último trimestre del año (8,14%) fueron superiores a los esperados y
confirman que la economía colombiana sigue creciendo a un ritmo fuerte.
El crecimiento para el 2007 es uno de los más altos de los últimos
cincuenta años.
La inversión y el consumo de los hogares fueron los componentes de
la demanda que más contribuyeron al crecimiento durante el 2007. Desde
una perspectiva sectorial, los mayores crecimientos se observaron en la
construcción, el transporte, la industria manufacturera y el comercio.
La información del cuarto trimestre del 2007 confirmó el fuerte
dinamismo de las exportaciones con crecimiento real de 9,2% frente a 7,7%
del trimestre anterior. Para todo el 2007 el crecimiento fue de 7,5%.
El promedio del primer trimestre del indicador de confianza al
consumidor de FEDESARROLLO se mantuvo en un nivel alto y las
exportaciones de bienes en los primeros meses del año crecieron a tasas
superiores a las observadas a finales del año pasado. Por su parte, el fuerte
crecimiento de las importaciones de bienes de capital sugiere que la
inversión privada continúa firme.
El tipo de cambio presentó una apreciación promedio anual de 14%
durante el primer trimestre del año como efecto, principalmente, de las
inversiones extranjeras directas orientadas a los sectores petrolero y
minero.
En materia de empleo, las cifras del DANE y las encuestas
sectoriales muestran que ha seguido creciendo a un ritmo alto.
3
c. Contexto internacional
La actividad económica en los EEUU continuó deteriorándose. Los
indicadores relativos a los sectores de servicios e industria, a la percepción
de los consumidores sobre su situación económica, a las ventas minoristas
(reales) al mes de marzo y a la creación de empleos, han sido negativos.
Por esa razón los analistas internacionales prevén una contracción del
producto de EEUU en la primera mitad del año. Para el resto de 2008 y
para el 2009 se esperan bajas tasas de crecimiento.
En los últimos meses también ha continuado el deterioro del mercado
de la vivienda. Los permisos de construcción y la construcción de vivienda
nueva siguieron cayendo y los inventarios se mantienen muy altos (a
febrero). La presión bajista sobre los precios de la vivienda muy
probablemente continuará hacia el futuro. Esta situación está dificultando
los pagos de hipotecas y ha aumentado los embargos. Adicionalmente, se
han observado incrementos en la morosidad, que son más pronunciados en
los créditos otorgados recientemente y que no solo se circunscriben a la
cartera subprime.
El sistema financiero ha sido afectado por las noticias anteriores y se
mantienen las dudas sobre su solidez, lo que se confirma con las
importantes pérdidas incurridas por varios bancos internacionales.
d. Variables Financieras
Los agregados monetarios mantuvieron la desaceleración que se
observa desde noviembre del año pasado. El M3 creció a una tasa anual de
15,2%, el efectivo lo hizo al 9,8% y los pasivos sujetos a encaje (PSE) al
16,05%. En el mes continuó el proceso de recomposición de las
captaciones a favor de CDT.
El crecimiento de la cartera del sistema financiero también continuó
desacelerándose. El crédito en pesos creció en marzo 21,9% frente a 24,6%
en diciembre anterior. La cartera de consumo es el segmento que muestra
una desaceleración más fuerte en los últimos meses con un crecimiento de
26,1% frente a 32,6% en diciembre.
En el mes de marzo las tasas nominales activas y pasivas
aumentaron, con excepción de las de crédito de consumo y las de crédito
hipotecario, que se redujeron ligeramente. La tasa DTF se situó en 9,6%
4
frente a 9,3% en febrero y 9,0% en diciembre. Dicha tasa se encuentra al
mismo nivel que la TIB, después de dos años de registros inferiores a ella.
Por su parte, la tasa activa promedio se encuentra en 16,9% frente a 16,6%
en febrero y diciembre. El alza en las tasas reales ha sido menor por el
aumento de la inflación en lo corrido del año. La tasa real activa promedio
(11,7%) se encuentra entre el promedio calculado desde 1986 (12,5%) y el
computado a partir de 2001 (9,8%).
2.
Discusión y opciones de política
En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i)
el ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas
establecidas por la Junta; (ii) el significativo peso de los alimentos en el
comportamiento de los precios en un contexto internacional de presiones al
alza; (iii) la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de los precios de
los regulados dados los mecanismos de indexación incorporados en la
determinación de tarifas; (iv) los costos de producción de las empresas
muestran incrementos importantes tanto por materias primas como en los
componentes laborales; (v) los indicadores disponibles sugieren que el
dinamismo de la demanda agregada se mantiene en niveles altos frente a la
producción; (vi) la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de la
economía mundial y de nuestros principales mercados de exportación y, en
particular de Venezuela; (vii) el efecto de la reciente revaluación del peso
sobre la inflación y las perspectivas de crecimiento de los sectores
transables y (viii) el comportamiento de las expectativas de inflación, que
continúan ubicándose por encima de las metas fijadas por la Junta.
La Junta consideró que los aumentos en las tasas de interés de
intervención que se vienen haciendo desde abril de 2006 y la modificación
en los encajes realizada a mediados de 2007 han tenido impacto sobre las
tasas de interés activas y pasivas y han resultado eficaces frente a los
objetivos buscados de moderar la dinámica del crédito. No obstante, la
demanda interna continúa expandiéndose a un ritmo superior al de la
producción nacional.
Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se
centraron en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política
monetaria dado el rezago de las mismas; (ii) los elementos que afectan las
proyecciones de inflación para el 2008 y 2009; (iii) la necesidad de
fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria como estrategia para
anclar las expectativas de inflación ante el riesgo de los efectos colaterales
de los precios internacionales de alimentos y combustibles; (iv) la
pertinencia de adoptar medidas de política monetaria en un contexto de alza
5
de precios internacionales de los alimentos y combustibles; (v) el déficit de
la cuenta corriente que refleja un crecimiento de la demanda interna
superior al de la producción nacional; (vi) la posibilidad de que cambios en
el escenario internacional, en un contexto de déficit de cuenta corriente,
puedan llevar a ajustes futuros en la tasa de cambio; (vii) la incertidumbre
generada por la alta volatilidad de los mercados internacionales y la
incidencia que puede tener en la economía colombiana y; (viii) los efectos
de la apreciación de la tasa de cambio.
Algunos miembros de la Junta subrayaron la existencia de presiones
inflacionarias a nivel mundial y la postura más restrictiva que han adoptado
recientemente muchos bancos centrales. Señalaron que, ante las
proyecciones de inflación para los próximos meses, es importante tener la
inflación y sus expectativas ancladas a las metas, para lo cual consideraron
necesario mantener una postura restrictiva de la política monetaria que
facilite en el futuro un manejo monetario contra cíclico ante una eventual
desaceleración de la economía, que contribuya a que esta alcance el
máximo crecimiento sostenible. Destacaron que la información disponible
indica que continúan los excesos de demanda en la economía y existen
riesgos inflacionarios que pudieran llevar en el futuro a que sea necesario
aumentar las tasas de interés de intervención. Consideraron que, aunque
existe gran incertidumbre sobre el desempeño futuro de la economía
mundial y su efecto sobre la economía colombiana, hasta el momento el
contexto externo sigue siendo favorable al crecimiento colombiano a juzgar
por el aumento reciente en los términos de intercambio, las exportaciones y
las entradas de inversión extranjera directa. Finalmente expresaron que si
bien existe un diferencial de tasas de interés entre Colombia y los Estados
Unidos, la apreciación del peso se explica fundamentalmente por las fuertes
presiones globales sobre la devaluación del dólar y el comportamiento de
los términos de intercambio y la inversión extranjera directa.
Otros miembros de la Junta estimaron que, excepto en el caso de
presentarse graves perturbaciones no previstas, no sería necesario elevar
las tasas de interés de intervención debido a que las medidas de política
monetaria tomadas hasta ahora han tenido y seguirán teniendo los efectos
buscados en materia de freno de la demanda interna y la consiguiente
desaceleración de la economía. A lo anterior, se suma la importante
corrección a la baja de la inflación de los alimentos perecederos y de los
no transables sin alimentos ni regulados, y los posibles efectos adversos de
la recesión norteamericana y la crisis mundial sobre el crecimiento de la
economía colombiana, aparte de la gran incertidumbre en torno de la suerte
y la sostenibilidad de la evolución económica de Venezuela. Por tales
razones insistieron en la necesidad de emprender en breve un proceso
gradual de normalización de la política monetaria. Dicho proceso a su turno
6
contribuiría a evitar que se siga ampliando el diferencial entre las tasas de
interés internas y externas, y la consiguiente presión adicional sobre la
revaluación del peso, cuya magnitud durante el último lustro ha sido una de
las más altas en todo el mundo.
Teniendo en cuenta lo anterior la Junta decidió mantener inalterada
su tasa de intervención en 9,75% y estimó necesario seguir haciendo un
cuidadoso seguimiento del efecto que pueda tener la situación económica
internacional sobre el crecimiento, así como, de las presiones inflacionarias
provenientes de los precios internacionales de los alimentos y
combustibles.
3.
Decisión de política
La Junta Directiva acordó mantener inalteradas las tasas de interés de
intervención del Banco de la República en 9,75%.
Bogotá D.C., mayo 09 de 2008
|
2008-05-01 |
1
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República
del 23 de mayo de 2008
El 23 de Mayo de 2008 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión
ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia
del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el
Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva,
Fernando Tenjo, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Juan Mario
Laserna y Leonardo Villar, en la cual se discuten las situaciones
inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman
decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace
un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión.
1.
Antecedentes
a.
Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual en abril se situó en 5,73%, 20 p.b. por debajo de la
observada un mes atrás. El descenso se dio por segundo mes consecutivo,
luego de haber alcanzado su máximo reciente en febrero pasado (6,35%).
La desaceleración de la inflación en abril se explica por el comportamiento
de los precios de los alimentos (7,82% en abril frente a 8,61% en marzo) y,
en especial, de los perecederos. Los alimentos procesados (8,75%) también
descendieron gracias a las carnes y sus sustitutos.
La inflación sin alimentos se incrementó en el mes de abril
alcanzando 4,74% frente a 4,67% del mes anterior, lo cual obedeció,
fundamentalmente, al comportamiento de los regulados, cuyos precios
mostraron incrementos anuales de 7,7% a marzo y 8,10% a abril. Algunos
indicadores de inflación básica aumentaron y se mantienen por encima de
la meta de inflación.
La inflación anual de no transables sin alimentos ni regulados, que
suele ser un buen indicador de las presiones inflacionarias del lado de la
demanda, disminuyó al pasar de 5,1% en marzo a 5,05% en abril. Se
destaca el menor ajuste de los servicios bancarios y el incremento de la
2
inflación de arriendos (4,65%) después de varios meses de estabilidad
alrededor de 4,3%.
Los precios de los bienes transables sin alimentos ni regulados
reportaron el mismo crecimiento anual de un mes atrás.
El grupo de regulados aumentó de 7,7% en marzo a 8,1% en abril,
destacándose las tarifas de servicios públicos (gas 9,8% y energía 9,4%).
A abril, el ritmo de crecimiento del IPP se aceleró pasando de una
inflación anual de 3,4% a 3,8%.
b. Crecimiento interno
La información disponible relacionada con el comportamiento de la
demanda agregada muestra lo siguiente:
-
En el primer trimestre de 2008 las importaciones de consumo
duradero crecieron 13,7% en dólares y 1,7% en volumen respecto al primer
trimestre de 2007, mientras que las importaciones de bienes de consumo no
duradero lo hicieron 18,3% en dólares, aunque registran caídas en
volúmenes (25,4%). Los productos alimenticios, las bebidas y el vestuario
fueron los rubros que presentaron mayores disminuciones en volumen.
-
La variación anual de las ventas de comercio al por menor disminuyó
nuevamente. En marzo se ubicó en 0%.
-
La Encuesta de Consumo de Fedesarrollo a abril muestra unas
perspectivas de los consumidores elevadas.
-
La inversión, medida a través de las importaciones de bienes de
capital a marzo de 2008, continúa a un buen ritmo de crecimiento. Las
importaciones de capital para la agricultura crecen 46% y para la industria
23%. Los volúmenes registraron aumentos importantes.
-
Las exportaciones continuaron con una buena dinámica. Las
exportaciones tradicionales aumentaron 32,1% y las no tradicionales
alcanzaron una tasa de crecimiento anual de 27,3%. Venezuela continúa
siendo el principal receptor de exportaciones no tradicionales. Estados
Unidos, por su parte, sigue siendo el principal receptor de exportaciones
tradicionales que presentaron un crecimiento importante (21,2%).
3
Por su parte la información asociada a la producción muestra lo
siguiente:
-
Las importaciones de bienes intermedios para la industria crecieron
13,5% en el acumulado a marzo de 2008.
-
En marzo, el Indice de Producción Industrial (IPI) sin trilla de café
cayó 9,4%. Ajustando la serie por días hábiles, el indicador crecería 2,4%.
Una estimación del efecto de la huelga de Cerromatoso es de 2 pp. De esta
forma, excluyendo estos efectos, el IPI sin trilla habría crecido 4,4%.
-
Descomponiendo el IPI por subsectores (ajustados por días hábiles),
el 58% de estos está creciendo por encima del promedio histórico (1980-
2008). De estos subsectores los subgrupos “industrias básicas de hierro y
acero; fundición de metales” y “equipos y aparatos de radio, televisión y
comunicaciones” son los que presentan unas caídas atípicas desde 2001.
-
En la Encuesta de Opinión Empresarial de Fedesarrollo, las
preguntas asociadas a actividad productiva y a pedidos presentaron las
reducciones más importantes en los resultados desde que se lleva a acabo la
encuesta (1980).
-
Las importaciones de materias primas para la agricultura crecieron
62% en dólares a marzo de 2008.
-
El comercio presentó una desaceleración según la encuesta de
Fedesarrollo. Las preguntas asociadas a variación en ventas con respecto al
mes anterior y al mismo mes en el año anterior, son las que presentan los
cambios más importantes desde que se lleva a cabo la encuesta (Junio de
1980).
-
El indicador de licencias de construcción continúo desacelerándose y
a marzo de 2008, su tasa de crecimiento acumulado 12 meses fue de 7,6%.
La producción de cemento también mostró menores tasas de crecimiento.
-
El Indice Mensual de Actividad de Colombia (IMACO) estimado
hasta agosto de 2008, muestra una desaceleración, lo que indicaría
disminución en los niveles de crecimiento del PIB durante los dos primeros
trimestres de este año.
De variables asociadas al ingreso se encuentra lo siguiente:
4
-
Aunque se presentó una caída en las tasas de desempleo, el empleo
asalariado continúa desacelerándose y a marzo muestra una importante
disminución (2,5%).
-
En marzo, la creación de empleo en la industria y el comercio se
desaceleró, pero sigue mostrando tasas de crecimiento positivas.
-
El crecimiento de los salarios reales durante el 2007 fue inferior al de
2006, cuando alcanzó un nivel alto. En particular, los salarios reales de la
industria (deflactados con el IPC total) muestran crecimientos negativos en
2007. En 2008 se mantienen estas tendencias.
-
La carga financiera de los hogares se ha incrementado debido,
principalmente, a los costos asociados a los créditos de consumo.
La apreciación enero-abril de este año con respecto al mismo período
del año pasado se ubicó en 15%. Continúan entradas importantes de
inversión extranjera directa, las cuales a abril se ubican en US$3.070
millones, de éstas US$1.901 millones corresponden a petróleo y minería y
US$1.169 millones al resto de sectores.
En materia de empleo, las encuestas sectoriales a marzo si bien
muestran tasas de crecimiento positivas también reflejan una moderación
en el crecimiento.
c. Contexto internacional
La información disponible sobre los EEUU muestra una economía
débil pero mejor que la esperada por los analistas internacionales. El dato
preliminar sobre el crecimiento para el primer trimestre del año (0,6%)
estuvo por encima de lo proyectado. Sin embargo, cifras como la de
indicadores líderes de la industria y el sector servicios continuaron
mostrando una menor dinámica, al igual que las ventas minoristas y la
confianza de los consumidores.
Aunque este menor ritmo de crecimiento estaría permitiendo una
estabilidad en la inflación básica, los altos precios del petróleo han
generando un fuerte aumento en las expectativas de inflación futura. Bajo
este escenario, el mercado espera que la FED mantenga sus tasas de interés
inalteradas, e incluso se proyectan posibles aumentos para finales de año.
Los mercados financieros mostraron mayor calma en el último mes.
Se presentó una menor presión de liquidez en los mercados interbancarios y
una disminución de la aversión al riesgo internacional. Esto se reflejó en
5
una ligera recomposición del portafolio de inversionistas internacionales en
búsqueda de activos con mayor rentabilidad y riesgo de mercado.
A pesar de la caída en algunos precios de bienes básicos, estos se
mantienen en niveles elevados. En el caso de nuestros principales
productos de exportación, algunos de ellos continuaron aumentando al mes
de abril, como es el caso del petróleo y carbón.
d. Variables Financieras
Los agregados monetarios, con excepción de la base monetaria,
mantuvieron la desaceleración que se observa desde noviembre del año
pasado. El M3 creció a una tasa anual de 13,9%, el efectivo lo hizo al
7,51% y los pasivos sujetos a encaje (PSE) al 14,8%. En el mes continuó el
proceso de recomposición de las captaciones a favor de CDT.
El crecimiento de la cartera del sistema financiero en moneda legal
creció en marzo 21,65% frente a 24,6% en diciembre anterior. Este
comportamiento se debió a la cartera de consumo que muestra una
desaceleración más fuerte en los últimos meses con un crecimiento de
23,7% frente a 32,6% en diciembre, mientras que la cartera comercial se
incrementó (21,5%) y la hipotecaria se mantuvo.
En el mes de abril las tasas de interés nominales activas y pasivas
aumentaron con excepción de las del crédito consumo y preferencial. La
tasa de interés activa real se aproxima a su promedio histórico (12,3%
observado vs 12,5% promedio) mientras que la DTF real ya lo alcanzó
(4,8%).
2.
Discusión y opciones de política
En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i)
el ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas
establecidas por la Junta; (ii) el significativo peso de los alimentos en el
comportamiento de los precios en un contexto internacional de presiones al
alza; (iii) la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de los precios de
los regulados dados los mecanismos de indexación incorporados en la
determinación de tarifas; (iv) los costos de producción de las empresas que
muestran incrementos importantes tanto por materias primas como en los
componentes laborales; (v) la incertidumbre sobre el comportamiento
6
futuro de la economía mundial y de nuestros principales mercados de
exportación y, en particular de Venezuela; (vi) el efecto de la reciente
revaluación del peso sobre la inflación y las perspectivas de crecimiento de
los sectores transables; y (vii) el comportamiento de las expectativas de
inflación, que continúan ubicándose por encima de las metas fijadas por la
Junta.
La Junta consideró que los aumentos en las tasas de interés de
intervención que se vienen haciendo desde abril de 2006 y la modificación
en los encajes realizada a mediados de 2007 han tenido impacto sobre las
tasas de interés activas y pasivas y han resultado eficaces frente a los
objetivos buscados de moderar la dinámica del crédito y la demanda
interna.
Igualmente destacó que la información disponible muestra una
moderación más acentuada en el crecimiento de la economía que la
inicialmente esperada. Diversos indicadores de demanda y de producción
presentan comportamientos en este sentido, en especial los datos de
comercio y de algunos sectores de la industria. Sin embargo, las
importaciones de bienes de capital sugieren que la inversión sigue con un
buen dinamismo y la Encuesta de Opinión al Consumidor mantiene el
indicador de confianza en niveles altos, a lo que se suma el incremento de
las exportaciones.
Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se
centraron en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política
monetaria dado el rezago de las mismas; (ii) los elementos que afectan las
proyecciones de inflación para el 2008 y 2009; (iii) la necesidad de
fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria como estrategia para
anclar las expectativas de inflación ante el riesgo de los efectos colaterales
de los precios internacionales de alimentos y combustibles; (iv) la
pertinencia de adoptar medidas de política monetaria en un contexto de alza
de precios internacionales de los alimentos y combustibles; (v) el déficit de
la cuenta corriente que refleja un crecimiento de la demanda interna
superior al de la producción nacional; (vi) la posibilidad de que cambios en
el escenario internacional, en un contexto de déficit de cuenta corriente,
puedan llevar a ajustes futuros en la tasa de cambio; (vii) la incertidumbre
generada por la alta volatilidad de los mercados internacionales y la
incidencia que puede tener en la economía colombiana; (viii) el balance de
riesgo entre crecimiento e inflación frente a la nueva información
disponible y (ix) los efectos de la apreciación de la tasa de cambio.
Algunos miembros de la Junta subrayaron que persisten presiones
inflacionarias a nivel mundial y que dadas las proyecciones de inflación
7
para los próximos meses, es importante tener la inflación y sus expectativas
ancladas a las metas. Para lograr ese objetivo, estimaron necesario una
postura de la política monetaria que facilite en el futuro un manejo
monetario contra cíclico ante una eventual desaceleración de la economía.
Señalaron que conducir la inflación hacia la meta de largo plazo es
fundamental para evitar en el futuro un período de dificultades económicas
y que la moderación en el crecimiento de la demanda interna y el crédito
reduce las presiones inflacionarias y permite el crecimiento sostenible de la
economía. Destacaron que la información disponible muestra que la
industria y el comercio, dos sectores altamente sensibles de la demanda
interna, crecieron en el mes de marzo a una tasa inferior a los pronósticos
del Banco y que las últimas encuestas sugieren también un menor
crecimiento de la demanda. A este respecto consideraron necesario obtener
mayor información para establecer los riesgos de inflación y de un menor
crecimiento de la economía para este año y, en especial, en el 2009, antes
de modificar la postura de la política monetaria. No obstante, resaltaron
que, aunque existe gran incertidumbre sobre el desempeño futuro de la
economía mundial, hasta el momento el contexto externo sigue siendo
favorable al crecimiento colombiano a juzgar por el aumento reciente en
los términos de intercambio, las exportaciones y las entradas de inversión
extranjera directa. Finalmente expresaron que, si bien existe un diferencial
de tasas de interés entre Colombia y los Estados Unidos, la apreciación del
peso se explica fundamentalmente por las fuertes presiones globales sobre
la devaluación del dólar y el comportamiento de los términos de
intercambio y la inversión extranjera directa.
Otros miembros de la Junta estimaron que la evolución reciente de
los indicadores económicos sugiere que continúa el proceso de
desaceleración de la economía que se inició desde finales del año anterior,
tanto desde la oferta como de la demanda y que esta desaceleración es más
rápida de lo previsto inicialmente, aún descontando los efectos de la
Semana Santa y de la huelga en Cerromatoso. A lo anterior se suma el
efecto negativo de la revaluación en algunos sectores y en el ingreso
disponible de los hogares vía menores ingresos de remesas. Destacaron que
Colombia está enfrentando, al igual que otros países, un choque de oferta
sobre la inflación liderado por los precios de los alimentos y cuestionaron,
por esta razón, la pertinencia de mantener una política monetaria
restrictiva. Indicaron que las medidas tomadas por la Junta en el pasado han
tenido y seguirán teniendo los efectos buscados de moderar el crédito y que
ya se presenta una importante corrección a la baja de la inflación de los
alimentos perecederos y de los no transables sin alimentos ni regulados.
Deben considerarse, adicionalmente, los posibles efectos adversos de la
recesión norteamericana y la crisis mundial sobre el crecimiento de la
economía colombiana, aparte de la gran incertidumbre en torno de la suerte
8
y la sostenibilidad de la evolución económica de Venezuela. Por tales
razones propusieron disminuir la tasa de interés de intervención en 25 p.b
lo cual contribuiría a reducir el diferencial entre las tasas de interés
internas y externas, y la consiguiente presión adicional sobre la revaluación
del peso, cuya magnitud durante el último lustro ha sido una de las más
altas en todo el mundo.
3.
Decisión de política
La Junta Directiva, por mayoría, acordó mantener inalteradas las
tasas de interés de intervención del Banco de la República y estimó
necesario seguir haciendo un cuidadoso seguimiento del efecto que pueda
tener la situación económica internacional sobre el crecimiento, así como,
de las presiones inflacionarias provenientes de los precios internacionales
de los alimentos y combustibles.
Bogotá D.C., junio 6 de 2008
|
2008-06-01 |
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
20 de junio de 2008
El 20 de junio de 2008 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria
de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro
de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José
Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Fernando Tenjo, Carlos
Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Juan Mario Laserna y Leonardo Villar,
en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico
y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política
monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas
tratados en dicha reunión.
1. Antecedentes
a.
Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor en mayo se situó en 6,39%, 66 pb por
encima de la observada en abril, luego de haber caído durante los dos meses
anteriores. La inflación acumulada en los cinco primeros meses del año
ascendió a 5,1%, nivel que supera en 70 pb el registro de igual período del año
pasado. Todos los indicadores de inflación básica aumentaron en mayo y
algunos se mantienen por encima de la meta de inflación.
La aceleración de la inflación durante mayo se explica, principalmente,
por el comportamiento del precio de los alimentos (incremento de 9,7% en
mayo frente a 7,8% de abril). En especial, de los perecederos (papa y otras
hortalizas y tubérculos) y de los importados.
La inflación sin alimentos fue 4,8%, levemente superior al 4,7% de
abril. El aumento obedeció al grupo de no transables sin alimentos ni
regulados cuya inflación se situó en 5,25% frente a 5,05% en abril. La
inflación anual de arriendos (4,7%) se mantuvo en un nivel cercano al
observado el mes pasado y se presentó una nueva alza de los servicios
bancarios.
El grupo de regulados pasó de 8,1% en abril a 8,3% en mayo. Desde
septiembre del año pasado la inflación de esta canasta viene aumentando
como resultado de los incrementos de los precios de los combustibles y de los
servicios públicos.
El único grupo cuya inflación disminuyó fue el de transables sin
alimentos ni regulados al pasar de 2,4% en abril a 2,2% en mayo. Dentro de
este grupo se destaca el comportamiento a la baja de los precios de los
vehículos (-4,6% de inflación anual). En general, el precio de los bienes de
consumo durable se viene reduciendo, probablemente por el efecto de la
apreciación acumulada.
Las expectativas de inflación a un año, medidas por las encuestas a
analistas y los precios de los papeles de deuda interna, aumentaron y se
situaron por encima de 5,5%.
A mayo, el índice de crecimiento del IPP pasó de una inflación anual de
3,8% en abril a 5,4%.
b.
Crecimiento Interno
La información disponible relacionada con el comportamiento de la
producción, la demanda agregada y el ingreso, muestra lo siguiente:
-
El indicador de confianza de los hogares de la encuesta de Fedesarrollo,
entre enero y mayo mostró una caída frente a 2007, aunque mantiene niveles
relativamente altos.
-
En abril, la producción industrial sin trilla de café creció a una tasa
anual de 9,8%. Este crecimiento contrasta con la caída de 9,4% registrada en
marzo y que, en su momento, se explicó principalmente como resultado de
menores días hábiles en ese mes y de la huelga en Cerromatoso. Para el
bimestre marzo-abril el crecimiento anual fue de -0,2%. Año corrido a abril el
crecimiento anual fue de 3,5%.
-
Las cifras del DANE indican que las ventas al por menor crecieron en
abril 1,2%, tasa superior a la de un mes atrás pero baja con respecto a lo
observado a finales de 2007 y comienzos de 2008. Por sectores, el peor
desempeño se observó en las ventas de alimentos (-3,5%). Otros sectores
como calzado y textiles también mostraron cifras negativas.
-
Las exportaciones en dólares mantuvieron su dinamismo en el primer
trimestre del año. Las exportaciones totales acumuladas a 12 meses crecieron
a una tasa cercana al 30%, similar a la de comienzo de año y superior a la
observada en 2007.
-
El aumento en los precios de varios productos primarios de exportación
unido a un mayor volumen exportado, explica la aceleración de las
exportaciones tradicionales en lo corrido del año (34% en marzo para el
acumulado a 12 meses en dólares).
-
Las exportaciones no tradicionales presentaron a marzo un crecimiento
cercano al 25%. En el último mes se observó una desaceleración de las
exportaciones dirigidas hacia Venezuela. Este fenómeno puede haber
ocurrido debido a las restricciones fronterizas que se presentaron en marzo y
a la presencia de Semana Santa en ese mes. No obstante, el menor
crecimiento fue, en parte, compensado por un aumento de las exportaciones
no tradicionales hacia EEUU.
-
Las importaciones mostraron en abril una recuperación frente al
desempeño de marzo, lo que sugiere que la presencia de Semana Santa en este
segundo mes generó algún efecto estadístico. Para el acumulado a 12 meses
las importaciones totales se mantuvieron en tasas del orden del 24%, similar a
las que se observan desde 2006. En el caso de las importaciones de bienes de
consumo se observa una moderación en su crecimiento, particularmente de los
bienes durables.
-
El indicador de inversión en obras civiles publicado por el DANE
muestra una caída de 30% anual con respecto al primer trimestre de 2007.
Esta caída, muy superior a la esperada, puede obedecer al relevo de gobiernos
locales.
-
Las menores cifras de crecimiento para industria, comercio y obras
civiles en el primer trimestre habrían sido parcialmente compensadas por un
mejor desempeño de los sectores agropecuario, minero y financiero.
-
Las cifras de la Encuesta de Hogares a abril sigue mostrando caídas en
la tasa de desempleo en todos los dominios, aunque de menor magnitud en
comparación con las de los últimos meses. Las tasas de desempleo trimestrales
se ubicaron en 11,3% y 12,1% para el total nacional y las 13 principales áreas
urbanas respectivamente, indicando caídas de 0.5 pp. y 0.3 pp. con respecto al
mismo trimestre del año anterior.
-
El descenso en la tasa de desempleo se explica por el mayor dinamismo
de la creación de empleo con respecto a la oferta laboral, pues el número de
ocupados creció 4,5% anual a nivel nacional.
c.
Contexto externo
Los indicadores de la actividad económica de los EEUU en abril y mayo
mostraron un desempeño mejor que lo esperado por los analistas
internacionales. Esto es especialmente cierto en industria y servicios. Las
exportaciones, impulsadas por el debilitamiento del dólar, podrían explicar en
parte este resultado.
A pesar de que las políticas de estímulo monetario y fiscal adelantadas en
EEUU han empezado a amortiguar la caída de la economía, el consumo de los
hogares sigue afectado por las fuertes restricciones de crédito, el
debilitamiento del mercado laboral, el efecto en el ingreso disponible del
aumento de los precios energéticos y la caída del precio de la vivienda.
La inflación en EEUU se ha mantenido alta y es probable que continúe
aumentando con las recientes alzas en el precio internacional del petróleo. La
mayor inflación ha aumentado las expectativas de los agentes que se
incrementaron de manera importante en los dos últimos meses.
Los analistas internacionales esperan un crecimiento en EEUU en lo que
resta del año de 0,8% y un desempeño por debajo del promedio histórico para
2009 de 1,2%.
Los aumentos en la inflación y en las expectativas de inflación se
presentaron no solo en EEUU sino también en un buen número de economías
tanto emergentes como algunas desarrolladas, siendo el caso más importante
el de la zona del euro. Esta situación ha conducido a aumentos en tasas de
interés o anuncios de posibles aumentos hacia el futuro por parte de varios
bancos centrales, incluso a pesar de que las perspectivas de crecimiento han
disminuido.
d. Variables Financieras
El crecimiento de los agregados monetarios más amplios continuó
desacelerándose en mayo. El M3 creció a una tasa anual de 13,5%, por debajo
de la del mes anterior (13,9% ). El comportamiento de los pasivos sujetos a
encaje (PSE) fue similar. En los últimos dos meses se siguió observando una
recomposición de los PSE a favor de los CDT.
La cartera del sistema financiero viene creciendo en lo corrido del año a
una tasa anual cercana al 20%. La cartera en pesos sigue siendo la que exhibe
mayor dinamismo aunque presenta una tendencia hacia la desaceleración
desde hace cerca de un año.
La cartera de consumo sigue moderándose más rápidamente que la
comercial y la hipotecaria. Para mayo su crecimiento anual fue de 22,4%. La
cartera comercial y la hipotecaria han mantenido un crecimiento más estable
en lo corrido del año de alrededor de 20,5% y 16,4% respectivamente.
En el mes de mayo las tasas de interés nominales diminuyeron. El descenso
fue más fuerte en las tasas de colocación, principalmente en las de consumo
(92 pb), preferencial (72 pb) y ordinario (49 pb). Las tasas de captación
incluida la DTF cayeron alrededor de 20 pb
El descenso de las tasas fue un poco mayor en términos reales dado el
aumento de la inflación sin alimentos en el último mes. La tasa activa
promedio real se encuentra un poco por debajo de su media histórica (desde
1986). La tasa real de consumo se encuentra por debajo de esta media pero
también por debajo del promedio observado desde 2001.
La apreciación enero-mayo de este año en promedio con respecto al mismo
período del año pasado se ubicó en 14%. Continuaron presentándose entradas
importantes de inversión extranjera directa, en especial en los sectores de
petróleo y minería.
2. Discusión y opciones de política
En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo
de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas
establecidas por la Junta; (ii) el significativo peso de los alimentos en el
comportamiento de los precios en un contexto internacional de presiones al
alza; (iii) la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de los precios de
los regulados dados los mecanismos de indexación incorporados en la
determinación de las tarifas y de la inflación de no transables; (iv) los costos
de producción de las empresas que muestran incrementos importantes tanto
por materias primas como en los componentes laborales; (v) la incertidumbre
sobre el comportamiento futuro de la economía mundial y de nuestros
principales mercados de exportación y, en particular, de Venezuela; (vi) el
efecto de la revaluación del peso sobre la inflación y las perspectivas de
crecimiento de los sectores transables; (vii) el comportamiento de las
expectativas de inflación, que continúan ubicándose por encima de las metas
fijadas por la Junta y (viii) el fuerte impacto en el crecimiento del PIB del
primer trimestre de la caída de la inversión en obras civiles y la incertidumbre
por sus posibles efectos en el crecimiento futuro.
La Junta consideró que los aumentos en las tasas de interés de intervención
realizadas a partir de abril de 2006 y la modificación a los encajes a mediados
de 2007 han tenido impacto sobre las tasas de interés activas y pasivas y han
resultado eficaces frente a los objetivos buscados de moderar la dinámica del
crédito y la demanda interna. El comportamiento de los indicadores de
inflación básica y de las expectativas de inflación confirman que la expansión
de la demanda hacía necesaria su moderación con el fin de reducir las
presiones inflacionarias y evitar un crecimiento insostenible de la economía.
Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se
centraron en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política
monetaria dado el rezago de las mismas; (ii) los elementos que afectan las
proyecciones de inflación para el 2008 y 2009; (iii) la pertinencia de adoptar
medidas de política monetaria en un contexto de alza de precios
internacionales de los alimentos y los combustibles; (iv) el comportamiento de
la inflación de los bienes no transables sin alimentos ni regulados que sigue
mostrando una tendencia al alza; (v) el déficit de la cuenta corriente que
refleja un crecimiento de la demanda interna superior al de la producción
nacional; (vi) los efectos de la apreciación de la tasa de cambio; (vii) la
posibilidad de que cambios en el escenario internacional, en un contexto de
déficit de cuenta corriente puedan llevar a ajustes futuros en la tasa de cambio:
(viii) la incertidumbre generada por la alta volatilidad de los mercados
internacionales y la incidencia que puede tener en la economía colombiana;
(ix) la dificultad para evaluar la información disponible en una coyuntura en la
cual hay un quiebre en el ciclo sostenido de crecimiento; (x) el balance de
riesgo entre crecimiento e inflación en un contexto de expectativas de
inflación al alza y de desaceleración de la economía y (xi) la necesidad de
fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria como estrategia para anclar
las expectativas de inflación ante el riesgo de los efectos colaterales de los
precios internacionales de los alimentos y de los combustibles.
La Junta destacó que persisten presiones inflacionarias a nivel mundial y
que dadas las proyecciones de inflación para los próximos meses, es
importante tener la inflación y sus expectativas ancladas a las metas. A pesar
de que las condiciones externas continúan siendo favorables al crecimiento
económico, los indicadores disponibles en el último mes sugieren una
importante moderación en el crecimiento de la demanda interna y el producto.
Por lo anterior, consideró que con el nivel actual de las tasas de interés de
intervención se está dando la moderación requerida en el crecimiento de la
demanda y es prudente, por lo tanto, mantener la actual postura de la política
monetaria.
La Junta Directiva de manera unánime decidió mantener inalteradas las
tasas de interés de intervención del Banco de la República en 9, 75% y estimó
necesario seguir haciendo un cuidadoso seguimiento del efecto que pueda
tener la situación económica internacional sobre el crecimiento, así como de
las presiones inflacionarias de los precios internacionales de los alimentos y
combustibles.
Adicionalmente,
acordó
intensificar
la
acumulación de
reservas
internacionales en lo que resta de 2008 con el fin de hacer frente a un eventual
deterioro del entorno internacional, aprovechando niveles de la tasa de cambio
inferiores a los sostenibles. Para compensar los efectos monetarios de esta
medida se decidió modificar a partir del 1 de septiembre el esquema de encaje,
eliminando el encaje marginal y estableciendo un encaje promedio ordinario
del 10% (11,5% para cuentas corrientes y de ahorro y 6% para CDT) y, si
fuera necesario, abrir sus ventanillas de contracción.
3.
Decisión de Política
La Junta Directiva acordó de manera unánime mantener inalteradas las
tasas de interés de intervención del Banco de la República en 9,75%
Bogotá D.C., julio 04 de 2008
|
2008-07-01 |
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
25 de julio de 2008
El 25 de julio de 2008 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria
de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro
de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José
Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Fernando Tenjo, Carlos
Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Juan Mario Laserna y Leonardo Villar,
en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico
y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política
monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas
tratados en dicha reunión.
1.
ANTECEDENTES
a.
Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor en junio se situó en 7,18%, 79 pb por
encima de la observada en mayo. La inflación acumulada en los seis primeros
meses del año ascendió a 6%. Algunos de los indicadores de inflación básica
aumentaron en junio y se mantienen por encima de la meta de inflación.
La aceleración de la inflación durante junio se explica por el
comportamiento del precio de los alimentos (incremento de 12% en junio
frente a 9,7% de mayo), en especial, de la papa y el arroz. Otros alimentos,
tanto perecederos como procesados, siguen mostrando ajustes anuales de
precios muy altos y crecientes.
La inflación anual sin alimentos fue 4,9%, levemente superior al 4,8%
de mayo. La de los subgrupos de bienes transables y no transables sin
alimentos ni regulados permanecieron estables frente a mayo.
La inflación del grupo de regulados pasó de 8,3% en mayo a 8,8% en
junio como resultado de aumentos en las tarifas de energía y gas y en los
precios de los combustibles.
Las expectativas de inflación a uno, cinco y diez años, medidas por las
encuestas a analistas y los precios de los papeles de deuda interna, aumentaron
y se situaron por encima de 5,5%.
El incremento anual en el índice de crecimiento del IPP pasó de 5,4%
en mayo a 8%.
b.
Crecimiento interno
La información disponible relacionada con el comportamiento de la
producción, la demanda agregada y el ingreso, muestra lo siguiente:
-
El DANE dio a conocer el crecimiento en la producción para 2007 a
partir de la nueva base 2000. De acuerdo con esta información, en 2007 la
economía colombiana (sin cultivos ilícitos) se expandió a un ritmo de 8,2% y
no de 7,6% como se había señalado inicialmente. La mayor tasa de
crecimiento se presentó en el primer trimestre (9,1%), pero el cuarto trimestre
también presentó una variación anual muy alta (8,4%). Con la nueva base,
2007 es el año de mayor expansión de la actividad económica de las últimas
cinco décadas.
-
Las cifras del DANE para el crecimiento del PIB en el primer trimestre
señalan un registro de 4,1%. La desaceleración del crecimiento fue el
resultado de diversos factores, tanto de oferta como de demanda, algunos de
ellos de naturaleza puntual. El más importante corresponde al impacto directo
de la caída de las obras civiles que, como se ha señalado en otras ocasiones,
pudo obedecer al cambio de administraciones públicas locales y regionales.
Un segundo factor fue el menor número de días hábiles en el trimestre debido
a que la Semana Santa cayó en marzo. La huelga de Cerromatoso y la
reducción de las exportaciones de automóviles a Venezuela también afectaron
de manera importante el crecimiento del PIB.
-
La economía colombiana, al igual que la mundial, enfrenta desde hace
varios trimestres un encarecimiento importante de los costos de producción y
de transporte, como consecuencia de las fuertes alzas en los precios del
petróleo y de algunas materias primas. Estas circunstancias afectan
negativamente el producto y elevan los precios.
-
Por el lado de la demanda, los aumentos en los precios de los
combustibles y de los alimentos afectan el ingreso real disponible de los
hogares, frenando el consumo presente y el consumo futuro, esto último
especialmente a través de una pérdida en la confianza de los consumidores.
-
Las cifras del DANE muestran que la formación bruta de capital fue el
componente que registró mayor desaceleración, asociada más con la caída de
la inversión en obras civiles realizadas por el sector público, que con un
deterioro de la inversión privada.
-
El consumo de los hogares también se desacelero, pasando de crecer
5,6% en el cuarto trimestre de 2007 a 3,9% en el primero de 2008. De acuerdo
con la nueva serie (base 2000), el consumo habría empezado a desacelerarse a
partir del segundo trimestre de 2007, lo que contrasta con la información
previa, la cual no mostraba una desaceleración importante durante el año
pasado
-
Las exportaciones totales aumentaron 15% en pesos reales a comienzos
de año. Esta expansión se dio pese a la apreciación del tipo de cambio y
obedece a la fuerte demanda venezolana por productos manufactureros y
alimentos y al aumento de la producción de productos mineros como el
carbón.
-
La demanda final interna creció a un ritmo de 5,4% anual durante el
primer trimestre, lo que implicó una desaceleración frente a lo observado en
2007, pero aún por encima del promedio histórico. Por su parte, el crecimiento
anual de la demanda agregada a marzo fue 6,7%, frente a 11,1% del cuarto
trimestre de 2007 y de 10,3% de todo el año pasado.
-
El comportamiento de indicadores de producción industrial, de ventas
de comercio al por menor y de confianza de los consumidores a mayo
sugieren nuevamente un crecimiento menor para el segundo trimestre, que el
observado en 2007.
-
Todas estas circunstancias llevaron a una reducción por parte del equipo
técnico del Banco en la proyección de crecimiento para 2008 a un rango entre
3,3% y 5,3%, frente al anterior que estaba entre 4,0% y 6,0%.
-
Los indicadores disponibles de salarios no muestran una tendencia
homogénea por sectores. Mientras que a junio los salarios promedio de la
construcción pesada se aceleraban, registrando reajustes elevados, los
crecimientos anuales de los salarios de la industria y del comercio se
mantuvieron estables alrededor de tasas de 5,3% y 7,5% respectivamente.
c.
Contexto externo
En los Estados Unidos, durante los últimos meses el empleo continuó
cayendo, una señal de que la actividad productiva se encuentra debilitada.
Simultáneamente, el sector de vivienda no muestra indicios de recuperación y,
por el contrario, su situación podría estarse deteriorando aún más. Como
resultado del aumento en la morosidad del crédito hipotecario y de los
embargos de vivienda, los precios de la vivienda continuaron reduciéndose en
abril y podrían seguir haciéndolo en los próximos trimestres.
Aunque durante el segundo trimestre se observó una mejoría en las
condiciones financieras en los Estados Unidos, esta tendencia no se ha
mantenido en las últimas semanas. La crisis hipotecaria siguió golpeando a las
instituciones financieras, siendo afectadas en esta oportunidad las dos mayores
entidades respaldadas por el gobierno que cubren el sector de créditos de
vivienda. (Fannie Mae y Freddie Mac). A raíz de estos problemas han surgido
nuevamente presiones de liquidez en el mercado interbancario de ese país
como lo registra el incremento del diferencial entre el costo del
endeudamiento del tesoro y de los bancos comerciales. Igualmente, se han
producido descensos significativos en los índices accionarios, que ya no solo
se circunscriben a las empresas financieras sino que también se extienden a las
del sector real (excluyendo las de energía).
El crecimiento también ha perdido impulso fuera de los Estados Unidos,
siendo el caso más evidente Europa en donde ya se observa un deterioro
importante en la confianza de consumidores y empresarios. En algunos países
emergentes de la región como Venezuela, Ecuador, Chile y México también
se observó una desaceleración del crecimiento para el primer trimestre. A
pesar de ello, la tasa de crecimiento para la región en su conjunto sigue siendo
relativamente alta. Para Venezuela, en particular, el crecimiento del primer
trimestre fue 4,8%, reduciéndose frente al observado en 2007 (8,5%). La
demanda interna perdió impulso por una fuerte desaceleración del consumo y
la inversión privada.
No obstante el menor dinamismo de la economía mundial, los precios
internacionales de los productos básicos, en particular del petróleo,
continuaron en niveles altos, lo que siguió impulsando la inflación a nivel
mundial. En los Estados Unidos en particular, la inflación total al consumidor
continuó aumentando y en junio se situó en 5%, por encima de las
expectativas de los analistas.
Se espera que los precios de los productos básicos se mantengan en niveles
altos. Aunque podrían existir comportamientos especulativos, es probable que
factores fundamentales relacionados con el balance de oferta y demanda
expliquen el auge de estos precios. En esas condiciones, un retroceso
significativo de los precios de las materias primas y del petróleo quizá sea
posible solo si se presenta una desaceleración fuerte en la demanda mundial,
más allá de la prevista por el mercado.
Los aumentos en la inflación y en las expectativas de inflación se
presentaron no solo en los Estados Unidos sino también en un buen número de
economías emergentes y desarrolladas, siendo el caso más importante el de la
zona del euro. Esta situación ha conducido a aumentos en tasas de interés o
anuncios de posibles aumentos hacia el futuro, por parte de un buen número
de bancos centrales, a pesar de que las perspectivas de crecimiento han
disminuido.
d. Variables financieras
El crecimiento de los agregados monetarios más amplios se ha estabilizado
en el último trimestre en niveles superiores al crecimiento del PIB nominal
estimado para el presente año. A la segunda semana de julio, el M3 crecía a
una tasa anual de 12,5% y los pasivos sujetos a encaje (PSE) aumentaron
13,3%. Se sigue observando una recomposición en los PSE a favor de los
CDT.
La cartera del sistema financiero viene creciendo en lo corrido del año a
una tasa anual cercana al 18,9% frente a 20% del mes pasado. La cartera en
pesos sigue siendo la que exhibe mayor dinamismo aunque presenta una
tendencia hacia la desaceleración desde hace cerca de un año.
La cartera bruta en moneda nacional continuó desacelerándose, aunque a
un menor ritmo. A junio esta variable creció 18,9%, mientras que un mes atrás
lo hacía a 20%. El mayor descenso en la tasa anual de crecimiento lo continúa
registrando la cartera de consumo (incluye microcrédito) con variaciones a
doce meses de 20,6%, seguida de la comercial 19,7% y la hipotecaria 16,1%.
Diferentes medidas de tendencia de cartera sugieren que su crecimiento
terminaría al finalizar el año en alrededor de 18%.
Las tasas promedio nominales de interés de captación (9,7% - DTF) y
colocación (17,1% - metodología BR) aumentaron levemente en junio. Estos
niveles son similares a los registrados en abril pasado. En términos reales, la
tasa promedio de crédito ha tenido un comportamiento decreciente desde
octubre de 2007, interrumpido únicamente en abril del presente año, y su
actual nivel se encuentra por debajo del promedio histórico calculado desde
1986. Este último comportamiento se explica por el descenso en la tasa real de
créditos ordinarios y, en menor medida, por la menor tasa de interés real de
consumo.
La apreciación enero-junio de este año en promedio con respecto al mismo
período del año pasado fue 13,5%.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo
de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas
establecidas por la Junta; ii) el significativo peso de los alimentos en el
comportamiento de los precios en un contexto internacional de presiones al
alza; iii) la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de los precios de los
regulados dados los mecanismos de indexación incorporados en la
determinación de las tarifas y de la inflación de no transables; iv) los costos de
producción de las empresas que muestran incrementos importantes tanto por
materias primas como en los componentes laborales; (v) la incertidumbre
sobre el comportamiento futuro de la economía mundial y de nuestros
principales mercados de exportación y, en particular, de Venezuela; vi) el
efecto de la revaluación del peso sobre la inflación y las perspectivas de
crecimiento de los sectores transables; vii) el comportamiento de las
expectativas de inflación, que continúan ubicándose por encima de las metas
fijadas por la Junta y viii) el fuerte impacto en el crecimiento del PIB del
primer trimestre de la caída de la inversión en obras civiles y la incertidumbre
por sus posibles efectos en el crecimiento futuro.
Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se
centraron en los siguientes aspectos: i) el efecto de las medidas de política
monetaria dado el rezago de las mismas; ii) los elementos que afectan las
proyecciones de inflación para el 2008 y 2009; iii) las malas proyecciones de
inflación a corto plazo; iv) la pertinencia de adoptar medidas de política
monetaria en un contexto de alza de precios internacionales de los alimentos
y los combustibles; v) el comportamiento de la inflación de los bienes no
transables sin alimentos ni regulados que sigue mostrando una tendencia al
alza; vi) las menores proyecciones de déficit de la cuenta corriente ; vii) los
efectos de la apreciación de la tasa de cambio; viii) la posibilidad de que
cambios en el escenario internacional, en un contexto de déficit de cuenta
corriente, puedan llevar a ajustes futuros en la tasa de cambio: ix) la
incertidumbre generada por la alta volatilidad de los mercados internacionales
y la incidencia que puede tener en la economía colombiana; x) la dificultad
para evaluar la información disponible en una coyuntura en la cual hay un
quiebre en el ciclo sostenido de crecimiento; xi) el balance de riesgo entre
crecimiento e inflación en un contexto de expectativas de inflación al alza y de
desaceleración de la economía y xii) la necesidad de fortalecer la credibilidad
de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación ante el riesgo
de los efectos colaterales de los precios internacionales de los alimentos y de
los combustibles.
La mayoría de la Junta consideró que la presente coyuntura es particularmente
delicada y amerita un análisis con una explícita perspectiva de mediano y
largo plazo. Si bien la economía presenta claras señales de desaceleración, y el
balance de riesgos indica que el crecimiento este año será menor que en los
años recientes, los riesgos de una inflación que ponga en peligro el
crecimiento en el mediano plazo son considerables. Contrario a lo observado
en 2007, durante el primer semestre del 2008 la economía ha recibido
plenamente, el impacto del choque de precios de alimentos, combustibles y
metales que viene afectando a la economía mundial, sumado al producido por
factores climáticos locales. De hecho, el diagnóstico de las razones que
explican la desaceleración de la economía indica que los altos niveles de
inflación, dada su relación con estos choques de precios relativos, están
generando presiones de costos que afectan negativamente la oferta de varios
sectores productivos, entre ellos la industria manufacturera. Adicionalmente,
la inflación de alimentos y regulados viene erosionando el poder de compra de
los consumidores por otros bienes de la canasta familiar. De aquí se desprende
que la naturaleza de la inflación explica buena parte del menor crecimiento
económico reciente.
De otro lado, las expectativas de inflación a corto, mediano y largo plazo han
venido subiendo, lo que constituye un serio obstáculo para los propósitos de la
autoridad monetaria y la mayor efectividad de las decisiones de política
adoptadas y por adoptar. Esto es particularmente peligroso en momentos en
que las medidas de difusión de la inflación alcanzan valores cercanos al 70%,
indicando que la mayor inflación de alimentos y bienes regulados ha
alcanzado ya a contaminar parte de la canasta familiar. Y cuando los recientes
incrementos en las tasas de interés de intervención han sido absorbidos por la
mayor inflación que se ha registrado este año, así esta refleje en parte
aumentos transitorios de precios. Es indispensable entonces evitar que la
política monetaria valide los choques de precios relativos de carácter temporal
y permita que éstos se conviertan en una inflación, mayor y de naturaleza
permanente, con enormes costos económicos y sociales.
De lo anterior se deduce que en el momento no existe realmente una
disyuntiva entre inflación y crecimiento. El dilema de la autoridad monetaria
es entre buscar una mayor dinámica de la economía en el muy corto plazo,
probablemente de carácter temporal y que va a ser erosionada por una
inflación desbordada y, por el otro lado, consolidar las condiciones de un
crecimiento sostenido de la producción y el empleo, retomando una senda
sensata de la inflación hacia las metas de largo plazo. Para esto es necesario
incrementar las tasas de intervención del Banco.
Algunos directores advirtieron que en esta ocasión un incremento adicional de
la tasa de interés resultaría inconveniente e inoportuno habida cuenta de las
siguientes razones: i) La reciente evolución de los indicadores económicos
confirma que la economía se está desacelerando desde finales del año anterior
de una manera mucho más rápida de lo que inicialmente habían previsto las
autoridades económicas. El mismo equipo técnico del Banco se ha visto
obligado a ir reduciendo los pronósticos sobre el crecimiento de la economía
en 2008, primero de 5,2% anual al 4,7%, y, de acuerdo con su último
ejercicio, del 4,7% al 4,3%. ii) Colombia está enfrentando, al igual que otros
países, un choque de oferta sobre la inflación por el aumento de precios de los
alimentos. En la región, Colombia registra un incremento de la inflación total
y básica relativamente moderado. El cambio de postura de la política
monetaria desde inicios de 2006 y las medidas adicionales de control de la
inflación ha permitido que dicha postura en términos reales no se haya
erosionado por cuenta del aumento en la tasa de inflación. iii) El gobierno
anunció un recorte al presupuesto de 2008 de $1.5 billones, equivalente al
0,4% del PIB el cual tiene como uno de sus objetivos fundamentales aliviar la
presión sobre la política monetaria derivada del incremento de la inflación.
Esta medida ajusta las cuentas fiscales y tiene un efecto importante sobre el
crecimiento de la demanda pública y el crecimiento económico en general y,
por tanto, sobre el comportamiento de la inflación. iv) Cabe destacar que la
política monetaria adoptada por la Junta desde abril de 2006 ha demostrado
por sus resultados que ha ido en la dirección correcta, Además, no se debe
olvidar que más de la mitad de los 15 incrementos de la tasa de interés de
intervención del Banco tuvo lugar hace menos de año y medio, lo cual indica,
debido al rezago natural existente entre estas medidas y su impacto sobre la
demanda interna y el crédito, que aún existe un tramo muy considerable de
efectos remanentes que aún no se han sentido, y v) Un aumento adicional de la
tasa de interés ampliaría aún más el ya significativo diferencial existente entre
las tasas internas y externas, y agudizaría por tanto la presión hacia la
revaluación del peso y el consiguiente perjuicio sobre el empleo de los
sectores transables de la economía.
La Junta Directiva de manera mayoritaria decidió aumentar en 25 pb las
tasas de interés de intervención del Banco de la República y estimó necesario
seguir haciendo un cuidadoso seguimiento del efecto que pueda tener la
situación económica internacional sobre el crecimiento, así como de las
presiones inflacionarias de los precios internacionales de los alimentos y
combustibles.
3.
DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva acordó por mayoría aumentar en 25 pb las tasas de
interés de intervención del Banco de la República que pasaran de 9,75% a
10%.
Bogotá D. C., agosto 08 de 2008.
|
2008-08-01 |
1
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 15 de
agosto de 2008
El 15 de agosto de 2008 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la
Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y
Crédito Público, Óscar Iván Zuluaga, el gerente general, José Darío Uribe y los
directores de dedicación exclusiva, Fernando Tenjo, Carlos Gustavo Cano, Juan José
Echavarría, Juan Mario Laserna y Leonardo Villar, en la cual se discuten las situaciones
inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones
relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los
principales temas tratados en dicha reunión.
1.
ANTECEDENTES
a.
Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor en junio se situó en 7,52%, incrementándose
por tercer mes consecutivo. La inflación acumulada en los cinco primeros meses del año
asciende a 6,5%, 181 puntos base (pb) por encima del registro del año pasado. Algunos
de los indicadores de inflación básica aumentaron en junio y se mantienen por encima
de la meta de inflación.
La aceleración de la inflación durante junio se explica por el comportamiento del
precio de los alimentos, siendo el arroz y los aceites los que ejercieron la mayor presión
alcista. La inflación de regulados pasó de 8.8% en junio a 9.5% en julio, principalmente
por combustibles y transporte.
La inflación de transables y no transables sin alimentos ni regulados se redujo en
el último mes. En particular, el IPC de no transables sin alimentos ni regulados fue
5,1% en julio frente a 5,3% en junio.
Las expectativas de inflación a mediano y largo plazo implícitas en el
comportamiento del mercado de TES se redujeron con posterioridad a la sesión de la
Junta del 25 de julio, lo cual constituye un punto de quiebre en la tendencia al alza que
se venía presentando desde abril. Adicionalmente, entre el 25 de julio y el 12 de agosto
se observó una reducción en las tasas de los TES de mediano (59 pb) y largo plazo (90
pb).
A julio, la inflación al productor medida por el IPP total se aceleró nuevamente,
pasando de 8% en junio a 9,6%, el más alto desde 2003.
b.
Crecimiento interno
2
La información disponible no sugiere cambios en la proyección de crecimiento
del PIB del equipo técnico del Banco para este año, que está entre 3,3% y 5,3%,
La información de la industria en los últimos dos meses indica que el sector
continuó reduciendo su dinamismo y que esto ha sucedido a un ritmo mayor que el
esperado. De acuerdo con la Encuesta de Opinión Conjunta de la ANDI, la producción
industrial presenta un crecimiento anual año corrido a junio de 1,2%, menor que el
registrado en abril y mayo (2,8% y 1,9% respectivamente). Los indicadores de
confianza de los industriales y el nivel de existencias y de pedidos a junio corroboran
estas tendencias.
Los indicadores de comercio no son concluyentes acerca de las tendencias del
sector. La información proveniente de los balances de las encuestas de opinión de
Fenalco sugiere que las ventas han continuado perdiendo impulso, aunque a un ritmo
menor que en el primer trimestre. Por otro lado, diferentes indicadores de Fedesarrollo
como el de situación económica actual para el sector y el de expectativas de situación
económica a seis meses no presentan un deterioro adicional para los últimos dos meses.
Las últimas cifras en materia de exportaciones muestran que éstas mantienen un
fuerte dinamismo al registrar un crecimiento en dólares de 42,4% y de 22,9% para las
exportaciones no tradicionales.
Las cifras sobre demanda de energía a junio y julio mostraron mejoría luego de
registros bajos en meses anteriores. En julio, por ejemplo, el crecimiento anual fue de
2,8%, superior al observado en lo corrido del año a junio (2,1%). Por su parte, los
recaudos de IVA interno mostraron tasas de crecimiento nominal durante todo el primer
semestre superior a los dos dígitos, habiéndose acelerado en junio a 35,7%.
c.
Contexto externo
En los últimos meses la inflación mundial se ha acelerado como consecuencia de
los altos precios de los alimentos y bienes energéticos. A su vez, se ha presentado un
menor ritmo de crecimiento económico. Este fenómeno ha sido más profundo en Japón,
Inglaterra y la Zona Euro, economías que ya han empezado a sentir el efecto de los altos
precios de las materias primas y de la desaceleración de los Estados Unidos.
En el caso de los Estados Unidos, durante el segundo trimestre se observó un
crecimiento anual de 1,9%. Sin embargo, esto no modifica las perspectivas
desfavorables para éste y el próximo año. Los analistas han revisado a la baja las
proyecciones de crecimiento de ese país para 2008 y 2009.
En la Zona Euro los índices de confianza de los consumidores y el índice de
producción manufacturera han disminuido fuertemente en los últimos meses,
debilitando las proyecciones de crecimiento del PIB para 2008 y 2009. Estos
indicadores han sido aún más desfavorables para el caso del Japón y Reino Unido. Lo
mismo ha sucedido con algunos países emergentes de la región como Venezuela,
Ecuador, Chile y México en donde se sigue observando una desaceleración del
crecimiento.
3
En ese contexto, el dólar se ha fortalecido frente a un gran número de monedas.
Esta situación, junto con las perspectivas de una demanda mundial más débil, ha
conducido a una caída de los precios de las materias primas en las últimas semanas, en
especial, del petróleo.
d.
Variables financieras
El crecimiento anual de los principales agregados monetarios en julio se redujo
en el último mes y medio. Entre junio y julio, por ejemplo, el crecimiento de M3 pasó
de 14,5% a 11,5%. Las captaciones del sistema financiero siguen efectuándose, en
buena parte, a través de CDT.
La cartera del sistema financiero en pesos mantuvo, en julio, un crecimiento de
19,4%, muy similar al observado en el mes anterior. Cuando se examina el
comportamiento de los últimos meses no se observa una tendencia hacia la
desaceleración de este agregado. La moderación de la cartera de consumo (crece 18,4%
en julio) ha continuado siendo compensada por una aceleración de la cartera ordinaria
(20,4% en julio) y, en las últimas tres semanas, por un crecimiento mayor de la cartera
hipotecaria (16,5% en julio)
La mayoría de tasas de interés nominal disminuyeron en el último mes. La
reducción más grande se presentó en las de tarjetas de crédito (40 pb). Cabe señalar que
la tasa de usura también se redujo en este período cerca de 60 pb.
La tasa de cambio mostró entre julio 14 y agosto 14 una devaluación de 4,2%.
2.
DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: i) el ritmo de
crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas por la
Junta, si bien algunos rubros de la canasta han empezado a mostrar aumentos menores
de precios, como es el caso del IPC sin alimentos ni regulados; ii) la incertidumbre
sobre el comportamiento de los precios internacionales de los alimentos y del petróleo,
que en las últimas semanas han tenido una tendencia a la baja, y sobre sus efectos en la
inflación total; iii) la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de los precios de los
regulados dados los mecanismos de indexación incorporados en la determinación de las
tarifas y de la inflación de no transables; iv) los costos de producción de las empresas,
que muestran incrementos importantes; v) la incertidumbre sobre el comportamiento
futuro de la economía mundial y de nuestros principales mercados de exportación y, en
particular, de Venezuela; vi) el efecto de la tasa de cambio sobre la inflación y las
perspectivas de crecimiento de los sectores transables y vii) el comportamiento de las
expectativas de inflación, que continúan ubicándose por encima de las metas fijadas por
la Junta, aunque disminuyeron en el último mes.
Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron en
los siguientes aspectos: i) el efecto de las medidas de política monetaria dado el rezago
de las mismas; ii) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para 2008 y
2009; iii) la pertinencia de adoptar medidas de política monetaria en un contexto de
4
altos precios internacionales de los alimentos y los combustibles; iv) el comportamiento
de la inflación de los bienes no transables sin alimentos ni regulados que en el mes de
julio presentó una disminución frente al mes anterior; v) las menores proyecciones de
déficit de la cuenta corriente ; vi) los efectos de la apreciación acumulada de la tasa de
cambio y de la devaluación observada en las últimas semanas; vii) la posibilidad de que
cambios en el escenario internacional, en un contexto de déficit de cuenta corriente,
puedan llevar a ajustes futuros en la tasa de cambio; viii) la incertidumbre generada por
la alta volatilidad de los mercados internacionales y la incidencia que puede tener en la
economía colombiana; ix) la dificultad para evaluar la información disponible en una
coyuntura en la cual hay un quiebre en el ciclo sostenido de crecimiento; x) el balance
de riesgo entre crecimiento e inflación en un contexto de expectativas de inflación al
alza y de desaceleración de la economía y xi) la necesidad de fortalecer la credibilidad
de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación ante el riesgo de los
efectos colaterales de los precios internacionales de los alimentos y los combustibles.
En la reunión se destacó que la inflación continúa aumentando en muchos países y
cómo varios bancos centrales han incrementado sus tasas de interés. Los precios
internacionales del petróleo, alimentos y otros productos básicos han caído
recientemente, pero sus niveles se mantienen históricamente altos. En Colombia, las
expectativas de inflación a varios plazos, medidas a partir del mercado de títulos de
deuda pública TES, disminuyeron significativamente desde la decisión de la Junta
Directiva pasada de aumentar en 25 pb su tasa de intervención. Sobresale, además, la
reciente disminución en las tasas de interés de largo plazo y el descenso en la inflación
de no transables sin alimentos ni regulados en julio.
La información disponible muestra que al igual que en otros países, en Colombia se
ha moderado el crecimiento de la demanda interna y el producto, aunque se mantiene la
proyección de crecimiento entre 3,3% y 5,3%. Condiciones financieras menos amplias y
el efecto de los mayores precios de los alimentos y los combustibles sobre el ingreso
disponible real han restringido la expansión de la demanda. A su vez, la oferta se ha
visto afectada negativamente por los mayores costos de producción, los cuales reducen
el crecimiento de la producción al tiempo que elevan los precios.
Es de esperar que en 2008 la inflación anual se mantenga alta en los próximos meses
por los elevados precios de los alimentos y los combustibles. Posteriormente, tanto la
inflación total como los indicadores de inflación básica podrán disminuir de manera
gradual, siempre y cuando las expectativas de inflación continúen a la baja y el
crecimiento salarial sea moderado. El compromiso de la autoridad monetaria con las
metas de inflación de largo plazo promueve las condiciones de un crecimiento sostenido
de la producción y el empleo.
Conforme a lo anterior, la Junta Directiva de manera unánime decidió mantener
inalterada las tasas de interés de intervención del Banco de la República y estimó
necesario seguir haciendo un cuidadoso seguimiento del efecto que pueda tener la
situación económica internacional sobre el crecimiento, así como de las presiones
inflacionarias de los precios internacionales de los alimentos y combustibles.
5
3.
DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva acordó por unanimidad dejar inalteradas las tasas de interés de
intervención del Banco de la República.
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2008-09-01 |
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
19 de Septiembre de 2008
El 19 de Septiembre de 2008 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión
ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del
Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente
General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Fernando
Tenjo, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Juan Mario Laserna y
Leonardo Villar, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de
crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas
con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los
principales temas tratados en dicha reunión.
1. ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor en agosto se situó en 7,87%,
incrementándose por cuarto mes consecutivo. La inflación acumulada en los
ocho primeros meses del año asciende a 6,74%. La inflación básica anual
promedio alcanzó niveles de 5,1% y 5,8% para cinco y tres indicadores,
respectivamente. Por primera vez en lo corrido del año estos indicadores
disminuyeron levemente (seis puntos básicos en los dos casos).
La aceleración de la inflación durante agosto se explica por el
comportamiento del precio de los alimentos, siendo las hortalizas, las frutas,
los tubérculos y la leche los que ejercieron la mayor presión alcista. Los
precios de los regulados presentaron un crecimiento anual de 9,4%, similar a
la del mes anterior. En este rubro los precios de los combustibles y los
servicios públicos continuaron presionando el alza.
La inflación de transables aumentó de 2,1% en julio a 2,3% en agosto.
Los no transables sin alimentos ni regulados se redujeron por segundo mes
2
consecutivo, pasando de 5,1% en julio a 5% en agosto. En el último año, este
rubro de la canasta acumula un descenso de 60 pb.
Las diferentes medidas de las expectativas de inflación resultantes de
los papeles de deuda pública (a 1, 5 y 10 años) se siguieron moderando,
aunque aún se sitúan muy por encima de la meta de inflación de largo plazo.
La inflación anual al productor, medida por el IPP total, se redujo de
9,6% en julio a 9% en agosto.
b. Crecimiento interno
La información disponible sugiere que la economía colombiana viene
creciendo a un ritmo menor al esperado. Para el tercer trimestre, el
comportamiento de la industria y el comercio (a julio), así como las encuestas
de opinión empresarial, confirman la desaceleración del crecimiento, en
especial en lo que hace a la industria textil, de confecciones y calzado y de
vehículos y material de transporte. En estas ramas de la producción, la pérdida
de dinamismo coincide con una reducción en el volumen de exportaciones a
Venezuela y Estados Unidos.
En el mercado de trabajo, el empleo asalariado está cayendo, mientras
que los llamados cuenta propia continúan creciendo a buen ritmo.
c. Contexto externo
La crisis financiera internacional se agudizó en el último mes, en
especial en los Estados Unidos. La declaratoria de quiebra de Lehman
Brothers y los temores de que otras entidades financieras corrieran igual suerte
aumentaron la incertidumbre de los mercados financieros.
Estos acontecimientos llevaron a una caída de los índices bursátiles en
todo el mundo y a la recomposición de los portafolios de inversión hacia
títulos más seguros, como los bonos del tesoro de corto plazo de los Estados
Unidos. Lo anterior aceleró el fortalecimiento del dólar frente a la mayoría de
monedas.
3
Las perspectivas de crecimiento de los países avanzados se han
deteriorado. Lo mismo ha sucedido en algunas economías latinoamericanas,
aunque países como Perú, Brasil y Venezuela mantienen niveles altos de
crecimiento.
La información disponible sugiere que la inflación en los países
desarrollados y en algunos emergentes como China, podría estar empezando a
ceder, lo cual ha llevado a que los bancos centrales de un buen número de
países interrumpan las alzas en sus tasas de interés que estaban llevando a
cabo en los meses anteriores.
En cuanto a las economías emergentes, la crisis financiera ha reducido
el acceso y aumentado el costo de financiación. Adicionalmente, la caída en el
precio internacional de la mayoría de los productos básicos podría contribuir
al descenso de la inflación en la región, pero también afecta los términos de
intercambio, en especial para países exportadores de petróleo, como lo son
Colombia y sus principales socios comerciales en la región.
d. Variables financieras
El crecimiento anual de los principales agregados monetarios se aceleró
en el último mes. Entre julio y agosto, por ejemplo, el crecimiento de M3 pasó
de 11,5% a 16,3%.
En agosto, la cartera del sistema financiero en pesos mantuvo un
crecimiento de 19%, muy similar al observado en el mes anterior. El
comportamiento de este agregado en los últimos meses no muestra una
tendencia hacia la desaceleración. La moderación de la cartera de consumo
(crecimiento de 16,8% en agosto) sigue siendo compensada por el dinamismo
de la cartera comercial (21,4% en agosto). En los últimos tres meses la cartera
hipotecaria ha crecido, en promedio, alrededor de 15,8%.
Las tasas de interés pasivas se incrementaron, al igual que las de crédito
ordinario e hipotecario, mientras que las de consumo presentaron un leve
descenso. En términos reales, las tasas promedio de crédito calculadas por el
Banco de la República y la DTF se ubicaron a niveles cercanos a sus
promedios históricos calculados desde 1986.
4
La tasa de cambio mostró una devaluación de 15,4% desde la última
reunión de la Junta Directiva, como resultado de la incertidumbre presentada
en los mercados internacionales.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el
ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas
establecidas por la Junta; (ii) algunos rubros de la canasta continúan
mostrando aumentos menores de precios, como es el caso del IPC sin
alimentos ni regulados; (iii) los precios internacionales de los alimentos, las
materias primas y el petróleo siguen mostrando una tendencia a la baja, lo
cual podría tener un efecto importante en la inflación total; (iv) los
indicadores de inflación básica disminuyeron levemente por primera vez en lo
corrido del año; (v) la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de los
precios de los regulados dados los mecanismos de indexación incorporados en
la determinación de las tarifas y de la inflación de no transables; (vi) los costos
de producción de las empresas, que muestran incrementos importantes, si bien
el ritmo de crecimiento del IPP se redujo en el último mes; (vii) la
incertidumbre sobre el comportamiento futuro de la economía mundial y de
nuestros principales mercados de exportación y, en particular, de Venezuela;
viii) el efecto de la tasa de cambio sobre la inflación y las perspectivas de
crecimiento de los sectores transables y ix) el comportamiento de las
expectativas de inflación de mediano y largo plazo, que continúan ubicándose
por encima de las metas fijadas por la Junta, aunque disminuyeron en el
último mes.
Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se
centraron en los siguientes aspectos: i) el efecto de las medidas de política
monetaria dado el rezago de las mismas; ii) los elementos que afectan las
proyecciones de inflación para 2008 y 2009; iii) el comportamiento de la
inflación de los bienes no transables sin alimentos ni regulados que en el mes
de agosto cayó por segundo mes consecutivo; iv) las proyecciones de déficit
de la cuenta corriente; v) los efectos de la volatilidad de la tasa de cambio y
de la devaluación observada en las últimas semanas; vi) la posibilidad de que
cambios en el escenario internacional, en un contexto de déficit de cuenta
corriente, puedan llevar a ajustes futuros en la tasa de cambio; vii) la
incertidumbre generada por la crisis financiera mundial en los mercados
internacionales y la incidencia que puede tener en la economía colombiana;
viii) la dificultad para evaluar la información disponible en una coyuntura en
5
la cual se ha dado un quiebre en el ciclo de crecimiento; ix) el balance de
riesgo entre crecimiento e inflación en un contexto de expectativas de
inflación al alza y de desaceleración de la economía y x) la necesidad de
fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de
inflación ante el riesgo de los efectos colaterales de los precios internacionales
de los alimentos y los combustibles.
Los miembros de la Junta resaltaron la bondad de las decisiones de
política monetaria adoptadas a partir de abril de 2006, dirigidas a eliminar los
excesos de demanda y crédito en la economía, a controlar las entradas de
capital extranjero especulativo, a fortalecer la posición de reservas
internacionales y a mitigar los efectos sobre las expectativas de inflación de
los mayores precios internacionales de los productos básicos.
Adicionalmente, destacaron que la información disponible apunta a un
crecimiento de la actividad económica menor al esperado, tanto en Colombia
como en la gran mayoría de países. En el último mes se agudizó la crisis
financiera internacional afectando los precios de algunos activos en Colombia,
en especial de la tasa de cambio del peso frente al dólar, la cual mostró una
gran volatilidad en el pasado reciente. Todo hace prever que la incertidumbre
continúe y se desconocen los efectos precisos sobre el crecimiento económico
mundial y sobre la disponibilidad de recursos para las economías emergentes.
Por último, señalaron que las proyecciones de inflación presentadas en
el Informe de junio pasado, y que indican que esta variable probablemente
mostrará una tendencia descendente a partir del cuarto trimestre del año, muy
seguramente se consolidará con los nuevos datos sobre precios internacionales
y de alimentos.
Algunos directores subrayaron que, de lo anotado en el párrafo anterior,
no se desprende que por ahora sea oportuno revisar la postura de política
monetaria con bajas en las tasas de interés de intervención. Lo anterior por dos
factores. Por un lado, el choque de precios relativos ha hecho de la inflación
una de las principales causas de la desaceleración de la economía, dado su
efecto sobre el ingreso disponible de los hogares y los costos de las empresas.
Por el otro, si bien algunas presiones inflacionarias han disminuido
recientemente, existen aún elementos que elevan el riesgo de mayores
incrementos del nivel general de precios. Entre estos se destacan las
expectativas de inflación, las cuales permanecen en niveles altos, la
incertidumbre sobre el comportamiento de la tasa de cambio y sus efectos
6
sobre los precios y las perspectivas de incrementos salariales a decidirse en los
próximos meses. En estas condiciones y con la información disponible, no
puede esperarse que mayor inflación lleve a mayor crecimiento sino que, por
el contrario, demore la reactivación del mismo.
Adicionalmente, estos directores consideraron que el compromiso de la
autoridad monetaria con las metas de inflación de largo plazo promueve las
condiciones de un crecimiento sostenido de la producción y el empleo. Así
mismo, que en la actual coyuntura, un cambio prematuro de la política
monetaria podría llevar a un incremento en las expectativas de inflación, con
lo cual se elevarían las tasas de interés de mediano y largo plazo, con efectos
negativos cobre la actividad económica, y se reduciría la capacidad de la
política monetaria de actuar de manera anti-cíclica en el futuro.
Otra posición dentro de la Junta consideró que, frente a la caída de la
inflación de bienes no transables sin alimentos ni regulados; la caída del
promedio de los indicadores de inflación básica; la fuerte desaceleración del
crecimiento, superior a la esperada desde el inicio del endurecimiento de la
política monetaria; la reducción del empleo asalariado en más del 8% durante
el trimestre mayo-julio; la declinación del clima de los negocios y del ánimo
inversionista de los empresarios según la última encuesta del Banco; los
efectos de la crisis financiera internacional en Colombia y en nuestros
principales socios comerciales; y habida cuenta de que la política monetaria
tiene que mirar hacia adelante en un horizonte de tiempo no inferior al rango
entre un año y medio y dos, lo indicado es iniciar hoy su proceso de
normalización con una reducción de la tasa de interés de intervención del
Banco en 25 puntos básicos, de suerte que con posterioridad no nos veamos
forzados a efectuar recortes abruptos de magnitud inusual.
Finalmente, los miembros de la Junta señalaron que es necesario hacer
un seguimiento a la situación financiera internacional y adoptar
oportunamente las medidas de política monetaria que sean necesarias para
enfrentar los efectos de la misma.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva acordó por mayoría dejar inalteradas las tasas de
interés de intervención del Banco de la República.
Bogotá D. C., octubre 03 de 2008.
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2008-10-01 |
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
24 de Octubre de 2008
El 24 de Octubre de 2008 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión
ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del
Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente
General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos
Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Juan Mario Laserna, Fernando Tenjo y
Leonardo Villar, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de
crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas
con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los
principales temas tratados en dicha reunión.
1. ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor en septiembre se situó en 7,57%,
disminuyendo 30 pb frente al mes de agosto. La inflación acumulada en los
nueve primeros meses del año asciende a 6,5%, mientras que en el último mes
los distintos indicadores de inflación básica aumentaron.
La reducción de la inflación durante septiembre se explica por el
comportamiento del precio de los alimentos, siendo las hortalizas, las frutas,
los tubérculos y la leche, los que ejercieron una menor presión alcista. Los
precios de los regulados presentaron un crecimiento anual de 10,5% versus
9,4% del mes anterior. En este rubro, los precios de los combustibles y los
servicios públicos, en especial gas y energía, continuaron presionando el alza.
La inflación de transables se redujo de 2,3% en agosto a 2,2% en
septiembre. La de no transables sin alimentos ni regulados se situó en 5,1%
luego de haber caído en agosto a 5%. Este aumento se concentró en
2
arrendamientos y en servicios relacionados con la diversión y el
entretenimiento.
Las diferentes medidas de las expectativas de inflación resultantes de
los papeles de deuda pública (a 1, 5 y 10 años) se siguieron moderando,
aunque aún se encuentran por encima de la meta de inflación de largo plazo.
La inflación anual al productor, medida por el IPP total, aumentó al
pasar de 9% en agosto a 9,8% en septiembre.
b. Crecimiento interno
La información disponible muestra que:
-
El crecimiento anual del PIB para el primero y segundo trimestre fueron
de 4,5% y 3,7%, respectivamente. Con esto, el crecimiento para la primera
mitad del año fue de 4,1%.
-
El debilitamiento de la demanda interna fue el factor que más
contribuyó a la disminución del crecimiento económico entre el primero y
segundo trimestres. Se destaca la desaceleración y bajo crecimiento del
consumo de los hogares (3,1% en el segundo trimestre). Por su parte, la
inversión en obras civiles cayó nuevamente cerca de un 14% en el segundo
trimestre. La inversión sin obras civiles fue el componente más dinámico de la
demanda interna, creciendo a un alto ritmo en el segundo trimestre, cercano al
17% y muy similar al del trimestre anterior.
-
Para el tercer trimestre, los diferentes indicadores disponibles sugieren
que la economía continuó desacelerándose como se puede apreciar en las
cifras de crecimiento industrial para el mes de agosto, -8,8% respecto a igual
mes de 2007 (-0,8% año corrido a agosto), en las ventas al pormenor que
también cayeron en agosto (-0,7%) y en el sentimiento de los consumidores
que volvió a decrecer en ese mes.
-
Durante el período enero-agosto, las importaciones totales del país,
mostraron un crecimiento anual de 22,7% alcanzando un valor de US$ 25,785
m (CIF). Lo anterior evidencia una tendencia hacia la desaceleración, si se
compara con igual período de 2007, cuando crecían a una tasa del 26,8%
anual.
3
-
El menor ritmo de crecimiento de las importaciones ha sido provocado
por la reducción en las de bienes de consumo, cuya variación anual en los
primeros 8 meses de 2008 fue de 11% frente al 31,7% del mismo periodo de
2007.
-
Entre enero y agosto las compras externas de materias primas y de
bienes de capital registraron aumentos anuales de 29,1% y 21,5%
respectivamente. El crecimiento en dólares de las materias primas, en
particular aquellas destinadas a la actividad industrial (20%), podría estar
reflejando los aumentos en los precios internacionales de productos básicos ya
que la información muestra caídas en las cantidades importadas por este
concepto.
-
En lo corrido del año a agosto, las exportaciones totales del país
alcanzaron un valor en dólares de US$26,142 millones, con un crecimiento
anual de 41%. Este crecimiento ha estado liderado por las ventas de productos
tradicionales, que a esa fecha aumentaban 61% anual, favorecido
principalmente por las altas cotizaciones internacionales, principalmente de
petróleo y carbón. Por su parte, las exportaciones de productos no
tradicionales aumentaron 22% anual entre enero y agosto del presente año.
-
Por países, en lo corrido del año a agosto las exportaciones a Estados
Unidos representan el 39% de las exportaciones totales y el 21% de las no
tradicionales. Las exportaciones a este destino han conservado su dinamismo,
registrando un crecimiento del 54%, por efecto en gran medida de las ventas
de petróleo y derivados. Se destaca que las ventas de no tradicionales a ese
país han mantenido su tendencia a la recuperación, ya observada desde finales
de 2007. En lo corrido del año a agosto crecen 9,8% anual sin oro no
monetario.
-
Las ventas a Venezuela continúan desacelerándose y a agosto su tasa de
crecimiento anual para el año corrido es de 31%, inferior a la registrada a
igual fecha de 2007 (75%) como consecuencia principalmente de unas
menores ventas en materiales de transporte.
-
Las ventas externas al resto del mundo, se han mantenido dinámicas
(35% anual a agosto), explicado tanto por las ventas de productos
tradicionales (50%) como de no tradicionales (18%). Utilizando la
información más desagregada, se encuentra que, año corrido a julio, las
4
ventas de productos industriales hacia destinos diferentes a Estados Unidos,
Venezuela y Ecuador, crecían a tasas del 18% anual.
-
En el mercado de trabajo, el empleo asalariado está cayendo, mientras
que los llamados cuenta propia continúan creciendo.
c. Contexto externo
Los acontecimientos del último mes en el plano internacional han
revelado una crisis financiera más profunda, generando problemas en el
financiamiento para un amplio número de economías desarrolladas y
emergentes, lo cual puede tener efectos duraderos sobre el desempeño
económico global. Los planes de salvamento adoptados por las autoridades
económicas de EEUU y Europa han tenido resultados parciales y no han
logrado restablecer plenamente los canales crediticios ni disminuir los costos
de endeudamiento.
En ese entorno, las perspectivas de crecimiento de la economía mundial
se han reducido fuertemente. Algunos indicadores ya muestran un deterioro
importante, que lleva a pensar que economías como las de EEUU y Europa se
encuentran en recesión. Los índices de confianza de los consumidores y el
índice de producción manufacturera han disminuido fuertemente en los
últimos meses. Igualmente, el crédito comercial en EEUU ha empezado a
contraerse a un ritmo similar al observado en recesiones anteriores.
Esta situación puede agravar los problemas del sistema financiero en
muchos países y comprometer la estabilidad de las finanzas públicas en la
medida en que sus gobiernos han anunciado avales para garantizar los
depósitos en el sistema financiero.
A la par con los menores pronósticos de crecimiento mundial, los precios
de los productos básicos han presentado caídas pronunciadas en las últimas
semanas.
Con la caída observada y esperada en los precios de las materias primas y
el menor crecimiento mundial, los riesgos de inflación en el mundo están
cediendo de manera considerable. Por lo tanto, es muy probable que los
Bancos Centrales de países desarrollados reduzcan sus tasas de intervención
en los próximos trimestres. De hecho, a comienzos de octubre, los bancos
5
centrales de las economías desarrolladas actuaron coordinadamente y bajaron
sus tasas de interés de referencia para afrontar los problemas ocasionados por
la crisis. A pesar de lo anterior, en algunos países las tasas de interés de los
mercados monetarios de corto plazo superaron ampliamente las tasas de
intervención de los bancos centrales.
A esta situación se unió un aumento de las tasas de interés de los créditos,
en especial en los papeles comerciales en EEUU y Europa, lo cual está
ejerciendo presiones sobre las tasas de interés relevantes para países
emergentes.
d. Variables financieras
El crecimiento anual de los principales agregados monetarios disminuyó
en el último mes, en particular el M3 pasó de 16,3% a 14,6%.
En septiembre continúo la moderación de la dinámica de la cartera. En
las últimas ocho semanas, la tasa de crecimiento anual en pesos disminuyó de
19,9% a 18,2%. La comercial, por su parte, se desaceleró en el último mes
revirtiendo la tendencia que se observaba desde mayo. La de consumo para el
3 de octubre crecía a una tasa anual de 15,5% nominal frente a 16,4% de
finales de agosto. Finalmente, la hipotecaria siguió creciendo alrededor del
16%.
Las tasas de interés pasivas se mantuvieron en niveles cercanos a los
observados en agosto. En términos reales, las tasas promedio de crédito
calculadas por el Banco de la República y la DTF se ubicaron por debajo de
los niveles promedio históricos calculados desde 1986.
El peso se devalúo 8 % frente al dólar desde la última reunión de la
Junta Directiva, como resultado de la incertidumbre presentada en los
mercados internacionales.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el
ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas
establecidas y la disminución presentada en el último mes se debió
principalmente a la caída de los precios de los alimentos; (ii) los precios
internacionales de los alimentos, las materias primas y el petróleo siguen
6
disminuyendo, lo cual podría tener un efecto importante en la inflación total
dentro de unos pocos meses, dependiendo del comportamiento de la tasa de
cambio; (iii) los precios de los regulados siguieron aumentando dados los
mecanismos de indexación incorporados en la determinación de las tarifas y
de la inflación de no transables; (iv) en contraste con meses anteriores, el IPC
sin alimentos ni regulados dejó de caer en el mes de septiembre; (v) la
actividad económica continúa debilitándose; (vi) los costos de producción de
las empresas muestran incrementos importantes, como lo refleja el aumento en
el ritmo de crecimiento del IPP; (vii) la incertidumbre sobre el
comportamiento futuro de la economía mundial y de nuestros principales
mercados de exportación, en particular, de Venezuela y Ecuador; viii) el
efecto de la tasa de cambio sobre la inflación y el crecimiento de los sectores
transables y ix) el comportamiento de las expectativas de inflación de mediano
y largo plazo, que continúan ubicándose por encima de las metas fijadas por la
Junta, aunque disminuyeron en el último mes.
Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se
centraron en los siguientes aspectos: i) el efecto de las medidas de política
monetaria dado el rezago de las mismas; ii) los elementos que afectan las
proyecciones de inflación para 2009; iii) el comportamiento de la inflación de
los bienes no transables sin alimentos ni regulados; iv) las proyecciones de
déficit de la cuenta corriente; v) los efectos de la volatilidad de la tasa de
cambio y de la devaluación observada en las últimas semanas; vi) la
incertidumbre generada por la crisis financiera mundial en los mercados
internacionales y su incidencia en la economía colombiana; vii) la dificultad
para evaluar la información disponible en una coyuntura en la cual se ha dado
un quiebre en el ciclo de crecimiento; viii) el balance de riesgos entre
crecimiento e inflación en un contexto en el que se mantienen expectativas de
inflación por encima de las metas y de desaceleración de la economía y ix) la
necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las
expectativas de inflación.
Los miembros de la Junta resaltaron la bondad y eficacia de las
decisiones de política monetaria adoptadas a partir de abril de 2006, dirigidas
a eliminar los excesos de demanda y crédito en la economía, a controlar las
entradas de capital extranjero especulativo, fortalecer la posición de reservas
internacionales y mitigar los efectos sobre las expectativas de inflación de los
mayores precios internacionales de los productos básicos.
7
Destacaron que en el último mes se ha presentado un marcado deterioro
del contexto internacional que acentuó la restricción del crédito a nivel
mundial y el menor crecimiento de nuestros principales socios comerciales.
Adicionalmente, la información disponible muestra que el sector productivo
colombiano está sintiendo los efectos negativos del aumento en los costos y la
caída de la demanda, lo cual se refleja en una menor dinámica del crecimiento
del PIB.
La crisis internacional ha conducido a que los precios de los activos
continúen mostrando una gran volatilidad y a que se incrementen las primas
de riesgo y las tasas de interés externas para todas las economías emergentes.
Lo anterior se ha reflejado en Colombia en la devaluación del peso, en la caída
del precio de las acciones y el aumento de las tasas de interés de los TES de
largo plazo.
Los precios de los alimentos, la devaluación del peso y, eventualmente,
los mayores costos salariales, podrían mantener alta la inflación total en los
próximos meses. Sin embargo, se espera que la debilidad de la demanda y la
reciente reducción en los precios internacionales de los principales productos
básicos se conviertan en menores presiones inflacionarias en el futuro.
Algunos directores subrayaron que, de lo anotado en el párrafo anterior,
no se desprende que por ahora sea oportuno revisar la postura de política
monetaria con bajas en las tasas de interés de intervención. Si bien algunas
presiones inflacionarias han disminuido, aún existe el riesgo de mayores
incrementos del nivel general de precios. Igual sucede con las expectativas de
inflación que todavía permanecen en niveles altos. En especial hay
incertidumbre sobre el comportamiento de la tasa de cambio y sus efectos
sobre los precios y las perspectivas de incrementos salariales a decidirse en los
próximos meses.
Adicionalmente, estos directores consideraron que el compromiso de la
autoridad monetaria con las metas de inflación de largo plazo promueve las
condiciones de un crecimiento sostenido de la producción y el empleo. Así
mismo, que en la actual coyuntura, un cambio prematuro de la política
monetaria podría llevar a un incremento en las expectativas de inflación, con
lo cual se elevarían las tasas de interés de mediano y largo plazo, con efectos
negativos sobre la actividad económica y el precio de los títulos de deuda
pública. Actuar sin la cautela necesaria reduciría la capacidad de la política
monetaria de actuar de manera anti-cíclica en el futuro.
8
Otra posición dentro de la Junta consideró que dado el deterioro de la
economía mundial y la caída de los precios de los productos básicos, así como
la consecuente reducción de las presiones inflacionarias, resulta oportuno un
cambio de postura de la política monetaria. Indicaron además que, en el
ámbito interno, la información muestra la continuación de la caída en el
crecimiento del producto; la disminución de la producción del sector industrial
en 8,8% en agosto y en lo que va corrido del año en 0,8%; la continuación de
la elevación de sus existencias y la disminución del nivel de sus pedidos; el
deterioro de los índices de confianza; el aumento de la capacidad ociosa; el
marchitamiento de las expectativas de inversión y el deterioro del sentimiento
de los consumidores; el debilitamiento del sector comercial; el aumento de la
tasa nacional de desempleo y la caída del empleo asalariado en 6,9%, entre
otras manifestaciones de la desaceleración de la economía. Situación que bien
podría agudizarse dependiendo de cómo la crisis internacional afecte a
nuestros principales socios comerciales. Habida cuenta de que la política
monetaria tiene que mirar hacia adelante en un horizonte de tiempo no inferior
al rango entre un año y medio y dos, lo indicado es iniciar un proceso de
normalización con una reducción de la tasa de interés de intervención del
Banco. Sobre el particular, dentro de este grupo hubo dos opiniones. La
primera en el sentido de que dicha reducción debería ser de 25 puntos básicos,
y la segunda en el sentido de que debería ser de 50 puntos básicos.
Los miembros de la Junta discutieron un paquete de medidas tendientes
a facilitar el buen funcionamiento de los mercados monetario y de crédito y la
debida irrigación de la liquidez. Las medidas buscan evitar aumentos en las
tasas de interés por encima de las de intervención como ha sucedido en otros
países.
Finalmente, señalaron que es necesario hacer un seguimiento a la
situación financiera internacional y adoptar oportunamente las medidas de
política monetaria que sean necesarias para enfrentar los efectos de la misma.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva acordó, por mayoría, dejar inalteradas las tasas de
interés de intervención del Banco de la República.
Igualmente acordaron de manera unánime:
9
-
Reducir el encaje bancario de las cuentas corrientes y de ahorro, de
11,5% a 11% y de los depósitos a término a plazos menores a 18 meses de 6%
a 4,5%. La medida tendrá efectos a partir de la bisemana de cálculo requerido
de encaje que se inicia el 19 noviembre.
-
Ampliar de dos a tres semanas el cómputo del encaje para el cierre del
año.
-
Otorgar liquidez transitoria con operaciones repo de plazos de 14 y 30
días. Comprar TES de manera definitiva por un monto de $ 500 mil millones,
a los cuales se adicionará el equivalente en pesos de la venta de divisas
realizadas con el sistema de opciones de volatilidad.
-
Cerrar temporalmente a partir del próximo lunes las subastas de
contracción mediante depósitos remunerados no constitutivos de encaje y
mantener abierta la ventanilla “lombarda” de contracción.
Bogotá D. C., noviembre 07 de 2008.
|
2008-11-01 |
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
21 de Noviembre de 2008
El 21 de Noviembre de 2008 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión
ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del
Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente
General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos
Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Juan Mario Laserna, Fernando Tenjo y
Leonardo Villar, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de
crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas
con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los
principales temas tratados en dicha reunión.
1. ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor en octubre se situó en 7,94%,
aumentando 37 pb frente a septiembre, mes en el que había presentado un
descenso. La inflación acumulada en los diez primeros meses del año asciende
a 6,9% y en el último mes los distintos indicadores de inflación básica
aumentaron.
La inflación de no transables sin alimentos ni regulados, se situó en
5,7% frente a 5,1% en septiembre. Este aumento se concentró en
arrendamientos y en servicios bancarios y relacionados con la diversión y el
entretenimiento. Por su parte, la inflación de transables sin alimentos ni
regulados, aumentó de 2,2% en septiembre a 2,3% en octubre.
La inflación de alimentos en octubre aumentó 38 pb respecto al mes
anterior, situándose en 13,2%. Las presiones al alza se originaron en los
precios de la carne de res y sus sustitutos y en los de cereales (en particular
2
arroz y maíz), aceites y otros. De esta forma los aumentos en los precios de los
alimentos explican un 67,97% de la aceleración de la inflación en el año
corrido.
Los precios de los bienes regulados presentaron en octubre un
crecimiento anual de 10,8%, superior en 33 pb al del mes anterior,
destacándose los precios del gas y los combustibles.
Las diferentes medidas de las expectativas de inflación resultantes de
los papeles de deuda pública (a 1, 5 y 10 años) se mantienen por encima de
las metas fijadas por la Junta.
La variación anual de los precios al productor (IPP) aumentó de 9,8%
en septiembre a 11,8% en octubre.
b. Crecimiento interno
La información disponible muestra que:
-
La producción industrial de acuerdo con el DANE se contrajo en el mes
de septiembre a una tasa anual de 3,3%, lo que arroja un resultado de -1,1%
para el año corrido. Con esta nueva cifra, el crecimiento industrial del tercer
trimestre es de -3,4%. Indicadores de confianza de los industriales y el nivel
de existencias y de pedidos de Fedesarrollo a septiembre corroboran esta
tendencia.
-
La ventas al por menor se contrajeron a una tasa anual de 2,5% en
septiembre, con lo cual el crecimiento del trimestre habría sido nulo. La
información proveniente de los balances de las encuestas de opinión de
Fenalco a octubre confirman la pérdida de impulso de las ventas en los
últimos seis meses. Algo similar sugieren indicadores de Fedesarrollo para el
sector como el de situación económica actual y el de expectativas de situación
económica a seis meses.
-
Las cifras sobre demanda de energía a septiembre y octubre mostraron
mejoría luego de un registro bajo en agosto. En octubre por ejemplo, el
crecimiento anual fue de 3,8%, superior al observado en lo corrido del año a
septiembre (2,1%). No obstante, este incremento podría obedecer más a la
alta demanda proveniente del sector minero que a una recuperación
generalizada de la economía.
3
-
Para el cuarto trimestre situaciones como la huelga de los corteros de
caña y la parálisis de los ingenios se suman al desempeño débil que trae la
demanda. Adicionalmente hay que tener en cuenta las posibles consecuencias
que pueda tener la caída de las pirámides en el consumo de varias regiones.
-
En el mercado de trabajo, el empleo asalariado está cayendo, mientras
que los llamados cuenta propia continúan creciendo.
c. Contexto externo
La crisis financiera ha tenido consecuencias sobre la actividad real. En
Estados Unidos, el crecimiento del PIB durante el tercer trimestre entró en
terreno negativo (según cifras preliminares) de -0,3% (t/t), mientras que en la
zona del euro se completaron dos trimestres consecutivos de caídas (de -0,2%
t/t cada una), con lo cual dicha economía podría encontrarse técnicamente en
recesión. Algo similar sucede en el Reino Unido y Japón, donde también el
crecimiento ha sido nulo o negativo en dos trimestres. En China, aunque la
expansión sigue siendo importante, en los últimos meses se ha observado una
importante desaceleración.
Ante este escenario, las autoridades económicas en EEUU reformularon
su plan de salvamento, haciendo énfasis en la recapitalización del sistema
financiero y en la creación de mecanismos para impulsar el crédito. En
Europa, aunque se espera un programa económico conjunto, varios países
como Alemania y España han decidido actuar individualmente. Por su parte,
China anunció un plan para fortalecer su economía el cual asciende a 17% del
PIB de 2007 (4 billones de yuanes), que se ejecutaría en los próximos tres
años.
Las políticas adelantadas por las autoridades económicas en EEUU y
Europa han permitido reducir los problemas de liquidez, aunque la situación
aún no se ha normalizado plenamente. Al mismo tiempo, la aversión al riesgo
se mantiene alta y los inversionistas siguen refugiándose en los activos más
seguros.
En las dos primeras semanas de noviembre, las primas de riesgo de las
economías emergentes se redujeron desde los altos niveles alcanzados a
mediados de octubre, pero se mantienen altas frente a lo observado hace dos o
4
tres meses. Estas primas podrían resultar afectadas por la situación
particularmente vulnerable de varios países de Europa del Este.
Los precios de los productos básicos han descendido rápidamente. En el
caso del petróleo, la caída entre julio y la segunda semana de noviembre ha
sido del 60%, dejando el precio alrededor de 55 dólares el barril, nivel que no
se veía desde 2005.
Para las economías desarrolladas y para muchos países importadores de
materias primas, estos menores precios deberán traducirse en un descenso de
su inflación en el corto plazo. Sin embargo, para los países exportadores de
materias primas como los de la región, la situación inflacionaria es más
compleja ya que la caída de los precios tenderá a ir acompañada de una
depreciación de sus monedas. En Latinoamérica aún no se observa un
descenso de la inflación, al tiempo que varias monedas de la región se han
depreciado en los últimos meses.
Dado lo anterior, el panorama de la política monetaria es bastante diverso.
Por un lado, los bancos centrales de economías grandes (EEUU, Zona euro,
China) han reducido sus tasas ante la percepción de menores riesgos
inflacionarios y por la preocupación existente en cuanto al crecimiento. Por
otro lado, algunas economías emergentes de Europa del Este han subido sus
tasas, mientras que en Latinoamérica éstas se mantienen inalteradas.
d. Variables financieras
Los principales agregados monetarios mantuvieron tasas de expansión
similares a las observadas en meses anteriores. El M3 y los pasivos sujetos a
encaje crecieron a tasas anuales de 15,5% y 16,4%, respectivamente.
En octubre continúo la moderación de la dinámica de la cartera. La
cartera total en moneda legal del sistema financiero mostró un crecimiento
anual de 18,5%, frente a 19,1% un mes atrás. La cartera comercial creció
20,6% frente a 19,8% en septiembre, mientras que la de consumo lo hizo a
una tasa de 14,9%, menor que la del mes anterior (17,6%). La cartera
hipotecaria también se desaceleró levemente.
La mayoría de las tasas activas y pasivas disminuyeron en octubre, tanto
en términos nominales como reales. En octubre, la tasa promedio de captación
de CDT descendió 16 pb y se ubicó en 10,3%. La DTF y la tasa de ahorro
5
aumentaron levemente (10pb y 4pb respectivamente) situándose en 10% y
5%. Por su parte, la tasa activa promedio calculada por el Banco de la
República disminuyó 26pb frente al mes pasado, situándose en 17,1%. Así
mismo, las tasas de interés de crédito a hogares disminuyeron: la de consumo
29 pb y la de tarjeta 24 pb. Este movimiento estuvo acompañado de una caída
de la tasa de usura por 73pb. Las tasas de cartera comercial tuvieron un
comportamiento mixto, descendiendo para el crédito ordinario (51 pb),
aumentando para el crédito de tesorería (24 pb) y manteniéndose en el caso de
la tasa preferencial.
El peso se mantuvo estable frente al dólar desde la última reunión de la
Junta Directiva.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el
ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas
establecidas; (ii) el aumento presentado en el último mes debido
principalmente a los precios de los no transables; (iii) los precios
internacionales de los alimentos, las materias primas y el petróleo siguen
disminuyendo, lo cual podría tener un efecto importante en la inflación total
dentro de unos pocos meses, dependiendo del comportamiento de la tasa de
cambio; (iv) los precios de los regulados siguieron aumentando, dados los
mecanismos de indexación incorporados en la determinación de las tarifas y
de la inflación de no transables; (v) la actividad económica continúa
debilitándose; (vi) los costos de producción de las empresas muestran
incrementos importantes, como lo refleja el aumento en el ritmo de
crecimiento del IPP; la mayor depreciación del peso observada podría
manifestarse en presiones adicionales; (vii) la incertidumbre sobre el
comportamiento futuro de la economía mundial y de nuestros principales
mercados de exportación, en particular, de Venezuela y Ecuador; viii) el
efecto de la tasa de cambio sobre la inflación y el crecimiento de los sectores
transables y ix) el comportamiento de las expectativas de inflación de mediano
y largo plazo, que continúan ubicándose por encima de las metas fijadas por la
Junta .
Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se
centraron en los siguientes aspectos: i) el efecto de las medidas de política
monetaria dado el rezago de las mismas; ii) los elementos que afectan las
6
proyecciones de inflación para 2009 y 2010; iii) el comportamiento de la
inflación de los bienes no transables sin alimentos ni regulados; iv) el efecto
que puede tener el comportamiento de corto plazo de la inflación sobre la
formación de precios y salarios en el 2009; v) las implicaciones sobre la
inflación observada y sobre las expectativas de inflación que tiene la política
actual de restricción a las importaciones de algunos productos agropecuarios,
cuyo impacto sobre la canasta familiar es significativo; vi) las proyecciones de
déficit de la cuenta corriente; vii) los efectos de la volatilidad de la tasa de
cambio y de la devaluación observada en los últimos meses; viii) la
incertidumbre generada por la crisis financiera mundial en los mercados
internacionales y su incidencia en la economía colombiana; ix) la dificultad
para evaluar la información disponible en una coyuntura en la cual se ha dado
un quiebre en el ciclo de crecimiento; x) el balance de riesgos entre
crecimiento e inflación en un contexto en el que se mantienen expectativas de
inflación por encima de las metas y de desaceleración de la economía y xi) la
necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las
expectativas de inflación.
Los miembros de la Junta resaltaron la bondad y eficacia de las
decisiones de política monetaria adoptadas a partir de abril de 2006, dirigidas
a eliminar los excesos de demanda y del crecimiento del crédito, controlar las
entradas de capital extranjero especulativo, fortalecer la posición de reservas
internacionales y mitigar los efectos sobre las expectativas de inflación de los
mayores precios internacionales de los productos básicos.
Destacaron que continúa el deterioro internacional lo que ha causado
restricciones en el crédito a nivel mundial y un menor crecimiento de nuestros
principales socios comerciales. Adicionalmente, la información disponible
muestra que el sector productivo colombiano sigue sintiendo los efectos
negativos del aumento en los costos y la caída de la demanda, lo cual se
refleja en una menor dinámica del crecimiento del PIB.
La crisis internacional también ha conducido a que los precios de los
activos continúen mostrando una gran volatilidad y a que se incrementen las
primas de riesgo y las tasas de interés externas para todas las economías
emergentes.
Los precios de los alimentos, la devaluación del peso y, eventualmente,
los mayores costos salariales, podrían mantener alta la inflación total en los
próximos meses. Sin embargo, se espera que la debilidad de la demanda y la
7
reciente reducción en los precios internacionales de los principales productos
básicos se conviertan en menores presiones inflacionarias en el futuro.
Algunos directores subrayaron que, de lo anotado en los párrafos
anteriores, se desprende que aún no es oportuno revisar la postura de política
monetaria con bajas en las tasas de interés de intervención. Si bien algunas
presiones inflacionarias han disminuido, todavía no hay evidencia de que se
encuentren suficientemente controladas. Igual sucede con las expectativas de
inflación las cuales permanecen en niveles altos. En especial hay
incertidumbre sobre el comportamiento de la tasa de cambio y sus efectos
sobre los precios y las perspectivas de incrementos salariales a decidirse en los
próximos meses. Los riesgos de la crisis internacional sobre el financiamiento
de la balanza de pagos constituyen un argumento adicional para tener cautela
en la adopción de la política monetaria.
Adicionalmente, estos directores consideraron que el compromiso de la
autoridad monetaria con las metas de inflación de largo plazo promueve las
condiciones de un crecimiento sostenido de la producción y el empleo. Así
mismo, que en la actual coyuntura, un cambio prematuro de la política
monetaria podría llevar a un incremento en las expectativas de inflación, con
lo cual se elevarían las tasas de interés de mediano y largo plazo, con efectos
negativos sobre la actividad económica y el precio de los títulos de deuda
pública. Actuar sin la cautela necesaria reduciría la capacidad de la política
monetaria de operar de manera anti-cíclica en el futuro.
Otra posición dentro de la Junta consideró que dado el deterioro de la
economía mundial y la caída de los precios de los productos básicos, así como
la consecuente reducción de las presiones inflacionarias y las expectativas,
resulta oportuno un cambio de postura de la política monetaria. Indicaron
además que, en el ámbito interno, la nueva información sigue mostrando una
caída pronunciada en el crecimiento del producto. El comportamiento
negativo de la industria y el comercio, el aumento de sus existencias y la
disminución del nivel de sus pedidos, así como el deterioro de los índices de
confianza, el marchitamiento de las expectativas de inversión y del
sentimiento de los consumidores confirman lo anterior. Esta disminución en la
dinámica productiva sigue reflejándose en el aumento de la tasa nacional de
desempleo y la caída del empleo asalariado. Este grupo de directores señaló
que la situación bien podría agudizarse dependiendo de cómo la crisis
internacional afecte a nuestros principales socios comerciales. Habida cuenta
de que la política monetaria tiene que mirar hacia adelante en un horizonte de
8
tiempo no inferior al rango entre uno y dos años, lo indicado es iniciar un
proceso de reducción de la tasa de interés de intervención del Banco. Sobre el
particular, dentro de este grupo hubo dos opiniones. La primera en el sentido
de que dicha reducción debería ser de 25 puntos básicos, y la segunda en el
sentido de que debería ser por lo menos de 50 puntos básicos.
Por otra parte, la Junta, de manera unánime, fijó la meta de inflación
para el año 2009 en el rango entre 4,5% y 5,5%, con 5% como meta puntual
para efectos legales. Así mismo, fijó en 4% el punto medio del rango-meta de
inflación para el año 2010 y sus miembros expresaron confianza en que la
inflación estará en el rango-meta de largo plazo (3% +/- 1 punto porcentual)
en el año 2011.
La nueva senda de inflación toma en cuenta los efectos del fuerte
aumento en los precios de los alimentos y los bienes y servicios regulados
observados este año. Estos choques de precios, que se presentaron en todas la
economías del mundo, produjeron un aumento sustancial de la inflación y
llevaron al incumplimiento de las metas.
Las decisiones de política monetaria están encaminadas a retomar una
senda de inflación convergente hacia la meta de largo plazo. Para 2009 se
espera que la reversión o moderación de estos choques de precios relativos, así
como el efecto acumulado de los ajustes de política monetaria efectuados
desde 2006, produzcan una reducción significativa de la inflación anual al
consumidor. El anuncio de las nuevas metas muestra el compromiso de la
Junta con el logro de la meta de largo plazo. Constituye además un criterio
fundamental para guiar las decisiones sobre precios y salarios en la economía.
Finalmente, reiteraron que su compromiso de suministrar la liquidez
requerida por la economía para el final del año y la necesidad de continuar con
el seguimiento a la situación financiera internacional con el fin de adoptar
oportunamente las medidas de política monetaria que sean necesarias para
enfrentar los efectos de la misma.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva acordó, por mayoría, dejar inalteradas las tasas de
interés de intervención del Banco de la República.
9
Por otra parte, la Junta, de manera unánime, fijó la meta de inflación
para el año 2009 en el rango entre 4,5% y 5,5%, con 5% como meta puntual
para efectos legales y en 4% el punto medio del rango-meta de inflación para
el año 2010.
Bogotá D. C., diciembre 05 de 2008
|
2008-12-01 |
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
19 de Diciembre de 2008
El 19 de Diciembre de 2008 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión
ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del
Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente
General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos
Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Juan Mario Laserna, Fernando Tenjo y
Leonardo Villar, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de
crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas
con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los
principales temas tratados en dicha reunión.
1. ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor en noviembre se situó en 7,73%,
disminuyendo 21 pb frente a octubre. La inflación acumulada en los once
primeros meses del año asciende a 7,2% y en el último mes los distintos
indicadores de inflación básica cayeron.
La inflación de no transables sin alimentos ni regulados se situó en
5,2% frente a 5,7% en octubre. Esta disminución se concentró en diversión,
cultura y esparcimiento. Por su parte, la inflación de transables sin alimentos
ni regulados se redujo de 2,3% en octubre a 2,2% en noviembre.
La inflación de alimentos disminuyó ligeramente, de 13,2% en octubre
a 13% del mes anterior. La reducción se concentró en alimentos perecederos.
Los cereales (en particular arroz), aceites y otros presentaron alzas en sus
precios.
2
Los precios de los bienes regulados registraron en noviembre un
crecimiento anual de 10,9%, destacándose el aumento de los precios de la
energía eléctrica y el transporte público urbano.
Los diferentes indicadores de las expectativas de inflación medidas con
los papeles de deuda pública (a 1, 5 y 10 años) disminuyeron, aunque se
mantienen por encima de las metas fijadas por la Junta.
La variación anual de los precios al productor (IPP) disminuyó de
11,8% en octubre a 10,9% en noviembre.
b. Crecimiento interno
La mayoría de indicadores disponibles al tercer trimestre muestran que
el crecimiento económico continuó desacelerándose. Por el lado de la
demanda, sobresale una menor expansión de las exportaciones en pesos reales
y un consumo débil de los hogares. Esto último se refleja en el poco
crecimiento que muestran las importaciones de bienes de consumo en pesos y
la desaceleración de las ventas al por menor a septiembre. La caída del
indicador de consumo de Fedesarrollo en octubre y noviembre también
anticipa un bajo comportamiento del gasto de consumo durante el cuarto
trimestre.
Las importaciones de bienes intermedios y bienes de capital continúan
mostrando un dinamismo importante, lo que permite prever un crecimiento
todavía alto para la inversión en la segunda mitad del año. Este pronóstico es
reforzado por la recuperación de 8,7% en las obras civiles para el tercer
trimestre del año, según lo muestra el censo del DANE.
Por el lado de la oferta, la industria y el comercio tuvieron un
desempeño menor al esperado. La industria se contrajo 3,3% en el tercer
trimestre, en parte como resultado de los choques negativos de oferta
(aumento de costos, huelgas en el sector azucarero y paro camionero, entre
otros) pero también debido al estancamiento de la demanda externa,
especialmente de Venezuela.
La contracción de la industria parecería estar acentuándose para el
cuarto trimestre según la información más reciente del DANE, que reporta un
crecimiento año corrido a octubre de -1,9% frente a -1,2% un mes atrás. Para
el mes de octubre únicamente, las cifras del DANE muestran una contracción
3
de la producción industrial de 7,5% anual. Durante el cuarto trimestre se
deterioraron marcadamente varios indicadores de expectativas de industriales
y comerciantes.
En el mercado de trabajo, el empleo asalariado está cayendo, mientras
que los llamados cuenta propia continúan creciendo.
c. Contexto externo
Pese a las intervenciones de los gobiernos y bancos centrales de las
economías desarrolladas, no se ha logrado reestablecer el canal crediticio a
nivel internacional. La crisis financiera en EEUU continúa y sus efectos sobre
la actividad real muestran una contracción en ese país. La situación es similar
en otras economías desarrolladas, con resultados de crecimiento que han sido
más débiles de lo esperado.
En EEUU, la caída del precio de la vivienda y las acciones, junto con un
endurecimiento de los mercados de crédito, están teniendo un gran impacto en
el gasto de los consumidores. La producción industrial se está contrayendo a
tasas de más de 5% y el sentimiento de los empresarios se ha desplomado. El
deterioro económico se ha propagado al mercado laboral, en donde para
noviembre las peticiones de seguro de desempleo aumentaron a 573 mil, dato
que no se observaba desde 1983. Así, en lo corrido del año la destrucción de
puestos de trabajo asciende a 1,9 millones, lo que ha elevado la tasa de
desempleo en ese país a 6,7% en noviembre.
En Europa la crisis también se siente con gran intensidad, como lo
sugiere el deterioro de los indicadores de confianza de los consumidores y de
sentimiento de los empresarios. En China la producción industrial se ha
debilitado más rápidamente de lo previsto y las exportaciones han comenzado
a contraerse.
Ante esta situación las autoridades monetarias de las economías
desarrolladas han continuado bajando sus tasas de referencia. En cuanto a las
economías emergentes, las tasas de intervención se redujeron recientemente en
varios países de Europa Oriental y en algunos países asiáticos. En los países
latinoamericanos estas tasas se han mantenido inalteradas.
En EEUU, la política monetaria actual ya se enmarca dentro de un
contexto de tasas de interés de 0% y posiblemente otros bancos centrales
4
lleguen a esta situación en el corto plazo. Cada vez se hace más evidente la
efectividad de los instrumentos de política monetaria. Varios gobiernos han
empezado a realizar programas fiscales.
Los efectos de la crisis internacional comienzan a sentirse en el
crecimiento de algunos países de la región. Al mismo tiempo, la inflación ha
continuado en ascenso, aunque se espera un alivio para el próximo año.
La mayoría de las monedas de la región, incluido el peso colombiano,
se han apreciado en las últimas dos semanas.
d. Variables financieras
Los principales agregados monetarios moderaron su crecimiento. El M3
y los pasivos sujetos a encaje crecieron a tasas anuales de 14,4% y 15,5%,
respectivamente, por debajo de lo observado en octubre.
En noviembre, el crédito del sistema financiero en moneda local
aumentó 18,6% anual, similar a lo observado en octubre. La cartera de
consumo creció 13,5% frente a un crecimiento de 15% el mes anterior. El
crédito comercial se mantuvo estable y la cartera hipotecaria continuó
expandiéndose a una tasa de 16%, tal y como lo viene haciendo desde hace
varios meses.
Durante la última quincena de noviembre las tasas de interés activas
nominales aumentaron. El incremento fue importante en el caso de los
créditos de tesorería, preferencial y ordinario: 131 pb, 83 pb y 60 pb
respectivamente. Las tasas pasivas, por el contrario, se mantuvieron
relativamente estables.
Entre noviembre y comienzos de diciembre se presentaron reducciones
importantes en las tasas de los TES, en particular las de los plazos más largos.
Para los títulos con vencimiento en 2020 las caídas acumularon 224 pb en
esas seis semanas.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el
ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas
establecidas; (ii) los precios internacionales de los alimentos, las materias
5
primas y el petróleo siguen disminuyendo, lo cual podría tener un efecto
importante en la inflación total dentro de unos meses, dependiendo del
comportamiento de la tasa de cambio y de la política comercial, en especial de
la importación de alimentos; (iii) la variación anual de los precios de los
regulados sigue aumentando, dados los mecanismos de indexación
incorporados en la determinación de las tarifas y de la inflación de no
transables; (iv) la actividad económica continúa debilitándose; (v) los costos
de producción de las empresas siguen siendo altos a pesar de la caída en el
último mes del ritmo de crecimiento del IPP; (vi) la incertidumbre sobre el
comportamiento futuro de la economía mundial y de nuestros principales
mercados de exportación, en particular, de Venezuela y Ecuador; (vii) el
efecto de la tasa de cambio sobre la inflación y el crecimiento de los sectores
transables y (viii) el comportamiento de las expectativas de inflación de
mediano y largo plazo, que descendieron desde la reunión anterior pero
continúan ubicándose por encima de las metas fijadas por la Junta.
Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se
centraron en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política
monetaria dado el rezago de las mismas; (ii) los elementos que afectan las
proyecciones de inflación para 2009 y 2010; (iii) el comportamiento de la
inflación de los bienes no transables sin alimentos ni regulados que aunque
disminuyó continúa siendo alto; (iv) el efecto que puede tener el
comportamiento de corto plazo de la inflación sobre la formación de precios y
salarios en el 2009; (v) las implicaciones sobre la inflación observada y sobre
las expectativas de inflación que tiene la política actual de restricción a las
importaciones de algunos productos agropecuarios, cuyo impacto sobre la
canasta familiar es significativo; (vi) las proyecciones de déficit de la cuenta
corriente; vii) la incertidumbre generada por la crisis financiera mundial en los
mercados internacionales y su incidencia en la economía colombiana; ( viii)
la estabilidad del mercado cambiario en las últimas semanas; (ix) la mejora
presentada en las últimas semanas en el acceso de la región al financiamiento
externo, la reducción de las tasas de interés de largo plazo y la dinámica de la
cartera del sistema financiero; x) el balance de riesgos entre crecimiento e
inflación en un contexto en el que se mantienen expectativas de inflación por
encima de las metas y de desaceleración de la economía y xi) la necesidad de
fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de
inflación.
Los miembros de la Junta resaltaron la bondad y eficacia de las
decisiones de política monetaria adoptadas a partir de abril de 2006, dirigidas
6
a eliminar los excesos de demanda y del crecimiento del crédito, controlar las
entradas de capital extranjero especulativo, fortalecer la posición de reservas
internacionales y mitigar los efectos sobre las expectativas de inflación de los
mayores precios internacionales de los productos básicos.
Destacaron que la economía mundial está experimentando una fuerte
caída que se refleja en una contracción de la mayoría de las economías
desarrolladas. Los países emergentes, si bien todavía muestran crecimientos
positivos, también se están desacelerando. En la medida que la economía
mundial crezca por debajo de su tendencia de largo plazo y los precios
internacionales de los productos básicos caigan, la inflación mundial se
reducirá significativamente en 2009. Si la tasa de cambio se mantiene estable
y se sigue una apropiada política comercial, en especial en la importación de
alimentos, es de esperar que esta menor inflación internacional se transmita
relativamente pronto a los precios al consumidor en Colombia.
Resaltaron, igualmente, la caída de las tasas de interés de largo plazo y
de las expectativas de inflación desde la última reunión de la junta directiva,
así como la reducción de la tasa de cambio observada en las últimas semanas y
una mejora en el acceso de los países emergentes a la financiación externa.
La nueva información disponible confirma el debilitamiento de la
actividad productiva, en especial de la industria y el comercio. La confianza
de las familias y de las empresas se ha visto afectada por factores internos y
externos, con lo cual es de esperar un bajo crecimiento de la demanda interna.
A esta situación se unen las dificultades de los principales socios comerciales
y la caída en los precios internacionales de nuestros principales productos de
exportación. Un crecimiento más débil de la demanda y el producto reduce las
presiones inflacionarias.
Conforme a lo anterior, la Junta Directiva de manera unánime decidió
reducir en 50 pb su tasa de intervención. Con esta reducción se consolida un
cambio en la postura de la política monetaria que se venía preparando desde
hace varios meses. La posibilidad de seguir relajando la política monetaria en
el 2009 dependerá críticamente del comportamiento esperado de la inflación y
de las expectativas frente a las metas.
Finalmente, reiteraron su compromiso de suministrar la liquidez
requerida por la economía para el final del año y la necesidad de continuar con
el seguimiento a la situación financiera internacional con el fin de adoptar
7
oportunamente las medidas de política monetaria que sean necesarias para
enfrentar los efectos de la misma.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva acordó, por unanimidad, reducir en 50 pb las tasas de
interés de intervención del Banco de la República. De esta manera su tasa de
intervención será de 9,50%
Bogotá D. C., enero 05 de 2009.
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2009-01-01 |
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
30 de Enero de 2009
El 30 de Enero de 2009 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria
de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro
de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José
Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano,
Juan José Echavarría, Juan Mario Laserna, Fernando Tenjo y Leonardo
Villar, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento
económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la
política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales
temas tratados en dicha reunión.
1. ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor en diciembre se situó en 7,67%,
disminuyendo 6 pb frente a la de noviembre. De esta manera, el registro de
fin de año superó el techo de la meta de inflación fijada para el 2008. En
diciembre se presentó un comportamiento mixto en los indicadores de
inflación básica.
La inflación de alimentos aumentó de 13% en noviembre a 13, 2% en
diciembre. El repunte de los precios de los alimentos a finales de año es
atribuible tanto a los alimentos procesados como a los perecederos.
Los precios de los bienes regulados registraron en diciembre un
crecimiento anual de 9,45% inferior a 10,9% de noviembre, destacándose una
disminución en los precios de la gasolina y los servicios de gas a domicilio.
La inflación de no transables sin alimentos ni regulados se situó en
5,25% frente a 5,2% en noviembre. Se destaca el rubro de arriendos (5,21%)
que ha mostrado una tendencia al alza en los últimos cuatro meses. Por su
2
parte, la inflación de transables sin alimentos ni regulados pasó de 2,2% en
noviembre a 2,4% en diciembre.
Los diferentes indicadores de las expectativas de inflación medidas con
los títulos de deuda pública (a 1, 5 y 10 años) disminuyeron, aunque se
mantienen por encima de las metas fijadas por la Junta.
La variación anual de los precios al productor (IPP) disminuyó de
10,9% en noviembre a 9% en diciembre.
b. Crecimiento interno
La actividad económica interna se desaceleró durante la segunda mitad
de 2008 más rápidamente de lo previsto por el equipo técnico del Banco de la
República. El DANE dio a conocer en diciembre las cifras de crecimiento para
el tercer trimestre (3,1%) y revisó las cifras para el segundo trimestre de 3,7%
a 3,8%. De esta forma, el crecimiento en los tres primeros trimestres del año
ascendió a 3,8%, por debajo del resultado de 2007 (7,5%).
Las cifras del tercer trimestre muestran que el consumo privado
continuó debilitándose, especialmente en lo que corresponde al consumo de
bienes durables. De igual manera, se observó una importante desaceleración
de las exportaciones en pesos reales, en buena parte como consecuencia de
caídas en los volúmenes exportados de café y carbón y de menores
exportaciones no tradicionales (textiles, confecciones, plásticos y maquinaria)
dirigidas especialmente a EEUU y Venezuela. El bajo desempeño de estos dos
agregados explica el menor crecimiento en el tercer trimestre frente al
segundo. La inversión, por el contrario, continuó mostrando un ritmo de
expansión elevado, incluso mayor que el observado en la primera mitad del
año, lo que obedeció a la recuperación de las obras civiles. La inversión en
edificaciones también tuvo un crecimiento significativo y algo similar sucedió
con el resto de inversión privada a juzgar por el alto crecimiento de las
importaciones de bienes de capital hasta esa fecha (23,9% en dólares).
Los indicadores disponibles para el cuarto trimestre también muestran
resultados por debajo de lo previsto y con tendencia decreciente. El caso más
evidente es el de la industria, que en octubre y en noviembre presentó fuertes
contracciones frente a los mismos meses del año anterior (7,5% y 13,3%
respectivamente). Los sectores que reportan mayores caídas son material de
transporte y textiles y confecciones, lo cual está asociado con una menor
3
demanda tanto interna como externa (Venezuela). En comercio también se
presentó una caída de las ventas al por menor en noviembre (2,9%) en buena
medida concentrada en vehículos.
Las encuestas de opinión realizadas a empresarios confirman el
debilitamiento de la actividad económica observado en los indicadores
sectoriales, y además muestran que los encuestados son muy pesimistas
respecto al desempeño de sus sectores en el primer semestre de 2009.
En el sector externo, a noviembre de 2008 las importaciones continuaron
creciendo a buen ritmo, comportamiento que se explica principalmente por
aquellas destinadas a bienes de capital. En el mismo mes, las compras externas
de materias primas registraron por primera vez en el año un descenso
significativo en su valor, mientras que las de consumo continuaron con su
desaceleración, aunque todavía en niveles históricamente altos.
A octubre de 2008 las exportaciones totales siguieron desacelerándose,
pero aún siguen creciendo a tasas anuales elevadas. La caída en el precio del
petróleo y de otros productos mineros registrada desde mediados de 2008, ha
hecho que disminuya el valor de las ventas externas mensuales de estos bienes
básicos. Por su parte, el valor mensual de las exportaciones no tradicionales
que había mostrado menores niveles en agosto y septiembre, volvió a
incrementarse en octubre, explicado principalmente por el aumento de las
ventas externas a Venezuela y a Ecuador.
Las últimas cifras de empleo mostraron destrucción de puestos de
trabajo, situación que se atenuó gracias al aumento de los ocupados cuenta
propia. No obstante, este último rubro se viene desacelerando desde mediados
de 2008. Aunque se ha presentado un descenso en la oferta laboral, la caída en
el número de ocupados ha sido mayor, situación que generó un aumento en la
tasa de desempleo.
c. Contexto externo
En el último mes se confirmó la profundidad de la crisis financiera
internacional y la recesión en EEUU y Europa. Las políticas fiscales y
monetarias adoptadas por los países desarrollados en el cuarto trimestre no
han evitado el contagio de la crisis hipotecaria y financiera hacia el consumo y
la inversión no residencial. Igualmente el empleo está seriamente afectado.
En Estados Unidos aumentó la tasa de desempleo a 7,2% en diciembre.
4
Por otra parte, la producción industrial en Europa y Asia se contrajo
fuertemente en octubre y noviembre. Aunque algunos de estos países ya han
anunciado paquetes de medidas para afrontar la crisis, al igual que en Estados
Unidos la incertidumbre sobre la capacidad de los estímulos fiscales para
ayudar a la economía es alta.
Respecto a Latinoamérica, en el último mes y medio se han hecho más
evidentes los signos de desaceleración económica. Indicadores como la
producción industrial y las ventas al por menor muestran una contracción con
datos a noviembre para países como Brasil, Chile, Colombia y México.
Todo lo anterior se ha traducido en una contracción del comercio
internacional. En EEUU, por ejemplo, el valor en dólares de las
exportaciones se contrajo en 1,6% a/a en noviembre, en las principales
economías de Europa el descenso osciló entre 15% y 20% a/a y en economías
como Japón y China la contracción fue de 14% en noviembre y 2% a/a en
diciembre, respectivamente. En cuanto a Latinoamérica, ya se sienten los
efectos de la desaceleración mundial en sus exportaciones en la mayoría de
países.
De otro lado, la crisis en el sistema financiero en las economías
desarrolladas no ha sido contenida. Los problemas del Bank of America y de
los bancos ingleses en lo corrido de enero son una prueba de ello. Aunque las
condiciones de liquidez han mejorado en los mercados interbancarios, el estrés
financiero en estos mercados continúa.
A nivel de las economías emergentes, hasta las primeras semanas de enero
la situación era más alentadora. El deterioro de los indicadores de riesgo
(EMBI y CDS) se detuvo, aunque en niveles más altos que los observados a
comienzos de septiembre. Brasil, Colombia y México lograron colocar deuda
en dólares a comienzos de enero a tasas no muy altas y con emisiones sobre
demandas lo que sugiere que los mercados de capitales siguen abiertos para
los emisores soberanos emergentes.
Recientemente, en el mercado cambiario se han presentado algunos
movimientos alcistas en la tasa de cambio relacionados con aumentos en la
aversión al riesgo internacional y perspectivas de menores tasas de interés de
referencia en la región.
5
El deterioro de la demanda mundial y la caída de precios de los
productos básicos han venido acompañados de una rápida disminución de la
inflación en economías desarrolladas y varios países emergentes. Como
respuesta a lo anterior, los Bancos Centrales de algunas economías
latinoamericanas y emergentes, incluida Colombia, han empezado a reducir
sus tasas de referencia.
Dado todo lo anterior, se han disminuido las estimaciones de
crecimiento para nuestros socios comerciales. En 2009 se espera para EEUU
un crecimiento entre -1,6% y -2,5%, para Europa entre -1,3% y -2,3% y para
Venezuela entre 0% y 2,5%.
A la par con los menores pronósticos de crecimiento mundial también
se disminuyeron las proyecciones para los precios de los productos básicos,
esperándose para el petróleo WTI niveles entre US$35 y US$50 el barril.
d. Variables financieras
Los principales agregados monetarios se aceleraron en los dos últimos
meses. Con corte al 23 de enero, la base monetaria creció 15,3% anual y el M3
17,6%.
La cartera bruta total en pesos continuó desacelerándose y a enero 23 su
crecimiento anual se situó en 16,7%. El mejor dinamismo lo presenta la
cartera comercial con aumentos anuales de 20,2%, mientras que la hipotecaria
creció 15,2% y la de consumo 11,6%.
Entre noviembre y lo corrido de enero, el sector real y el sector
financiero emitieron títulos de deuda y bonos por montos importantes a tasas
ligeramente superiores a las de los papeles de deuda publica.
En los últimos dos meses, la TIB se ha ubicado en promedio 50 pb por
debajo de la tasa de política, situación que se ha dado en un contexto en que el
Banco de la República fue temporalmente deudor neto del sistema financiero.
El 23 de enero, la tasa activa promedio ponderada (metodología BR) se
situó en 15,9%, mostrando una reducción mensual de 93 pb. Las tasas de
interés de crédito de consumo, vivienda y microcrédito no presentaron
6
descensos. Por su parte, la tasa de interés promedio de CDT se situó en 10,1%,
cifra menor en 8 pb al observado un mes atrás.
La DTF real promedio se ubicó en 4,8% y la tasa activa promedio
(metodología BR) en 12%, cifras similares a sus promedios históricos
calculados desde 1986, y superiores a las medias efectuados desde el 2001.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el
ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas
establecidas; (ii) los precios internacionales de los alimentos, las materias
primas y el petróleo siguen disminuyendo, lo cual podría tener un efecto
importante en la inflación total dentro de unos meses, dependiendo del
comportamiento de la tasa de cambio y de la política comercial, en especial de
la importación de alimentos; (iii) la variación anual de los precios de los
regulados ha empezado a disminuir a pesar de que la caída de los precios
internacionales del petróleo no se ha transmitido a los precios internos de la
gasolina; (iv) la actividad económica continúa debilitándose más rápidamente
de lo previsto por el equipo técnico del Banco; (v) los costos de producción
de las empresas siguen siendo altos a pesar de la caída en el último mes del
ritmo de crecimiento del IPP; (vi) el bajo desempeño de la economía mundial
y de nuestros principales mercados de exportación, en particular, de Estados
Unidos, Venezuela y Ecuador; (vii) el efecto de la tasa de cambio sobre la
inflación y el crecimiento de los sectores transables y (viii) el comportamiento
de las expectativas de inflación de mediano y largo plazo, que continúan
ubicándose por encima de las metas fijadas por la Junta.
Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se
centraron en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política
monetaria dado el rezago de las mismas; (ii) los elementos que afectan las
proyecciones de inflación para 2009 y 2010; (iii) el efecto que puede tener el
comportamiento de corto plazo de la inflación sobre la formación de precios y
salarios en 2009; (iv) el hecho de que algunos indicadores de la inflación
básica no disminuyan; (v) las proyecciones de déficit de la cuenta corriente;
(vi) la incertidumbre generada por la crisis financiera mundial en los mercados
internacionales y su incidencia en la economía colombiana; (vii) la
depreciación del peso frente al dólar presentado en las últimas semanas; (viii)
la mejora presentada en las últimas semanas en el acceso de la región al
financiamiento externo, la reducción de las tasas de interés de largo plazo y la
7
dinámica de la cartera del sistema financiero; (ix) el balance de riesgos entre
crecimiento e inflación en un contexto en el que se mantienen expectativas de
inflación por encima de las metas y una desaceleración de la economía mayor
a lo esperada; y (x) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad
monetaria y anclar las expectativas de inflación.
Los miembros de la Junta destacaron que si bien la inflación al
consumidor en diciembre de 2008 fue de 7,67%, situándose por encima de la
meta fijada por la Junta Directiva para ese año, se espera que la debilidad de la
demanda interna y externa y la caída en los precios internacionales de los
productos básicos se traslade en menores presiones inflacionarias a lo largo de
2009. La Corporación confía en que la inflación al consumidor se sitúe este
año dentro del rango meta (5% +/- medio punto porcentual) y continúe su
senda descendente hacia su objetivo de mediano y largo plazo (3% +/- 1 punto
porcentual).
También resaltaron que el comportamiento de la economía mundial
continúa siendo negativo a pesar de las políticas fuertemente expansivas de los
países. La mayoría de las economías desarrolladas están mostrando una
contracción en su crecimiento, mientras que las de los países emergentes se
están desacelerando, en algunos casos de manera drástica. En la medida que la
economía mundial crece por debajo de su tendencia de largo plazo y los
precios internacionales de los productos básicos caen, la inflación mundial se
reducirá significativamente en 2009. Si la tasa de cambio se mantiene estable
y se sigue una apropiada política comercial, es de esperar que esta menor
inflación internacional se transmita relativamente pronto a los precios al
consumidor en Colombia.
La nueva información disponible confirma el debilitamiento de la
actividad productiva en Colombia. Los últimos datos de la industria y el
comercio muestran una caída superior a la esperada por la Junta en la reunión
anterior. A esta situación se unen los efectos que tiene en la actividad
productiva el mayor deterioro de la actividad mundial vía menores
exportaciones y términos de intercambio, deterioro en los niveles de confianza
y flujos de capital más costosos.
La Junta Directiva consideró que hay condiciones para continuar con la
reducción de la tasa de intervención y consolidar el cambio en la postura de la
política monetaria que se inició en el último trimestre del año anterior. La
oportunidad y velocidad a la que se pueda seguir flexibilizando la política
8
monetaria en el 2009 dependerá del comportamiento esperado de la inflación
y de las expectativas frente a las metas.
El grupo mayoritario de la Junta Directiva estimó que en una coyuntura
caracterizada por la inestabilidad de los mercados financieros internacionales
y locales, la reducción de la tasa de interés de intervención del Banco debe
hacerse de tal forma que le apunte a la credibilidad y la confianza de los
agentes económicos. De esta manera se asegura que en el futuro la autoridad
monetaria pueda seguir usando de manera contracíclica las herramientas de
política a su cargo. La cautela se hace particularmente importante ante los
siguientes hechos: la inflación básica ha sido renuente a bajar; la caída en los
precios internos de alimentos y regulados ha sido menor a lo que sería
consistente con el comportamiento de los mercados internacionales; y, la tasa
de cambio ha tenido aumentos particularmente pronunciados en las dos
últimas semanas, lo que podría generar menor confianza en el peso
colombiano. En ese contexto una disminución de 50 pb se consideró
adecuada.
El grupo minoritario de la Junta Directiva estimó que las condiciones
macroeconómicas permiten y aconsejan una reducción más ambiciosa de la
tasa de interés de intervención sin poner en riesgo el cumplimiento de las
metas de inflación fijadas por la Junta. Una reducción de 100 pb daría una
señal contundente al sector productivo en circunstancias en donde hay
expectativas de crecimiento e inflación a la baja.
Finalmente, la Junta reiteró la necesidad de continuar con el
seguimiento a la situación financiera internacional con el fin de adoptar
oportunamente las medidas de política monetaria que sean necesarias para
enfrentar los efectos de la misma.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva acordó, por mayoría, reducir en 50 pb las tasas de
interés de intervención del Banco de la República. De esta manera su tasa de
intervención será de 9%.
Bogotá D. C., febrero 13 de 2009.
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2009-02-01 |
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
27 de Febrero de 2009
El 27 de Febrero de 2009 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión
ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del
Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente
General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos
Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Juan Mario Laserna, Fernando Tenjo y
Leonardo Villar, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de
crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas
con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los
principales temas tratados en dicha reunión.
1. ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor en enero se situó en 7,18%,
disminuyendo 49 pb frente a la de diciembre y cayendo por tercer mes
consecutivo. Durante el mes, la mayoría de indicadores de inflación básica se
comportaron a la baja.
La inflación de alimentos disminuyó de 13,2% en diciembre a 12, 2%
en enero. La caída se presentó tanto en los alimentos perecederos como en
algunos importados.
Los precios de los bienes regulados registraron en enero un crecimiento
anual de 8,5%, inferior a 9,45% de diciembre, destacándose una disminución
en los servicios públicos (gas y acueducto), transporte y combustibles.
La inflación de no transables sin alimentos ni regulados se redujo de
5,25% en diciembre a 5,1% en enero. Se destaca el rubro de arriendos que
sigue mostrando una tendencia al alza en los últimos cinco meses debido en
2
buena medida a las cláusulas de indexación incorporadas en los contratos. Por
su parte, la inflación de transables sin alimentos ni regulados no tuvo
modificaciones y se situó en 2,4%.
Los diferentes indicadores de las expectativas de inflación medidas con
los títulos de deuda pública a 5 y 10 años disminuyeron por debajo del 5%,
mientras que las obtenidas con los TES a un año se ubicaron en 5,6%,
ligeramente por encima del techo del rango meta fijado por la Junta.
La variación anual de los precios al productor (IPP) disminuyó por
tercer mes consecutivo pasando de 9% en diciembre a 6,2% en enero. Su
variación mensual fue de -1,5%, la caída mensual más grande de la historia de
la serie desde 1970.
b. Crecimiento interno
La actividad económica interna continuó desacelerándose más
rápidamente de lo previsto por el equipo técnico del Banco de la República.
La información disponible muestra que para diciembre la industria tuvo un
crecimiento anual del mes de -9,2%. El DANE, por su parte, reveló que las
ventas totales al pormenor del comercio se contrajeron 3,4% en diciembre
frente al mismo mes del año anterior.
Los pocos indicadores disponibles para comienzos de año muestran que
la economía sigue perdiendo dinamismo:
-
La demanda de energía del sector industrial a enero presentó un
decrecimiento de 9,5%, mayor que el de un mes atrás.
-
El indicador de ventas al por menor de Fenalco, que descuenta la
estacionalidad del comercio, mostró una caída en enero respecto a noviembre
y diciembre.
-
La demanda total de energía, tanto para consumo como para
producción, creció solamente un 1% en enero frente al mismo mes de 2008.
-
El indicador de Fedesarrollo sobre sentimiento de los consumidores
presentó un pequeño repunte en enero, que de todas maneras lo deja por
debajo de los niveles observados en los últimos 5 años.
3
En el sector externo, las exportaciones totales en dólares entre enero y
noviembre de 2008 aumentaron a una tasa anual de 30,8%, con un crecimiento
mayor para las tradicionales (48,3%) que para las no tradicionales (9,0%). En
el caso de las exportaciones no tradicionales, las ventas a Venezuela crecieron
17,2% en el año corrido a noviembre, exhibiendo una menor dinámica
respecto al año anterior. Las exportaciones a Ecuador aumentaron a una tasa
anual de 15,4% mientras que las exportaciones a Estados Unidos presentaron
una caída (0,6% enero - noviembre 2008 sin oro), con disminuciones en el
valor de las exportaciones en los últimos tres meses. Finalmente, las
exportaciones no tradicionales para el resto del mundo registraron un
incremento del 5,3% para el mismo período.
Las importaciones registraron entre enero y diciembre de 2008 un ritmo
de crecimiento importante de 20,6%. Sin embargo, se evidencia una dinámica
menor en las compras al exterior, liderada por los bienes de consumo, que
pasó de tasas de crecimiento cercanas al 25,1% año corrido a febrero a 11,5%
en el año completo. Al mismo tiempo, los bienes de capital, que crecieron
20,6% a diciembre, mostraron un menor ritmo de crecimiento frente a su
máximo a febrero, cuando aumentaban 35,4%.
Las últimas cifras de empleo mostraron importantes incrementos
anuales en la tasa de desempleo al ubicarse la total nacional en 14,2%. Lo
anterior, se debió principalmente a un aumento de la tasa de participación
respecto al mismo mes del año anterior, mientras que la tasa de ocupación se
mantuvo relativamente estable.
c. Contexto externo
En los últimos meses, la economía mundial se deterioró a una velocidad
creciente y mayor que la esperada. La contracción de la demanda que se inició
en EEUU y en algunas economías europeas se extendió a otras regiones del
mundo. En febrero ya era clara una profunda contracción de la actividad
económica en Japón, la Unión Europea, varios países de Europa Oriental y
Asia, mientras que en otras grandes economías emergentes como China e
India se evidenció una fuerte desaceleración.
En América Latina el impacto también es evidente. Economías como la
mexicana muestra una contracción del PIB del cuarto trimestre de 1,6% (en
términos anuales). Otros países como Brasil y Chile también presentaban en
4
diciembre una caída de la producción industrial (en términos anuales) de
15,5% y 5,6%, respectivamente.
El fuerte debilitamiento de la demanda ha hecho que el comercio
mundial se contraiga aceleradamente. En diciembre, las exportaciones
nominales en dólares de las economías desarrolladas de Europa cayeron a una
tasa anual de entre 15% y 20%, mientras que en Estados Unidos lo hicieron
en 9%.
El deterioro de la confianza en los mercados financieros y la parálisis
del crédito continúan afectando en mayor medida a los países desarrollados.
En las economías emergentes, sobretodo en Colombia y otros países de
América Latina como Perú, Chile y Brasil, los bancos permanecen solventes y
el canal crediticio continúa abierto. En estos países, la trasmisión de la crisis
internacional se está dando principalmente a través de un menor flujo de
capitales y la caída del comercio exterior.
Por otro lado, la debilidad de la demanda mundial y la caída de los
precios de las materias primas han venido acompañadas de una caída
importante de las presiones inflacionarias en economías desarrolladas y
emergentes. Ante este escenario, los bancos centrales de América Latina
optaron por bajar sus tasas de referencia para estimular la economía.
Finalmente, en el último mes las tasas de cambio de la región se
depreciaron. La tendencia fue más marcada en Colombia y México en donde
la pérdida en valor de las monedas en las últimas cuatro semanas terminadas
el 20 de febrero fue de 14,5% y de 7,8%, respectivamente.
d. Variables financieras
En las últimas dos semanas los agregados monetarios se desaceleraron,
luego de presentar una tendencia ascendente en diciembre y enero.
La cartera total del sistema financiero creció a un ritmo anual de 16,6%
en enero frente a 18,4% registrado tres meses atrás (aislando el efecto del tipo
de cambio en la de dólares). La caída en el nivel de la cartera se ha observado
tanto en moneda extranjera (- US$ 615 m desde octubre) como en moneda
legal (-$2,4 b en las últimas 8 semanas).
5
La cartera en moneda legal sigue presentando disminuciones en su
ritmo de crecimiento. La comercial registró una tasa anual de crecimiento de
18% a comienzos de febrero, frente a cerca de 22% de finales de diciembre.
Por su parte, la de consumo pasó de 11,6% en diciembre a 10% en la primera
semana de febrero.
Los indicadores de calidad de cartera se deterioraron especialmente en
el crédito de consumo en donde el porcentaje de cartera vencida ascendía a
diciembre en 7,2% frente a un mínimo de 4,2% a finales de 2004. El leasing y
el microcrédito también presentaron un aumento en la cartera vencida.
En las últimas semanas el sistema bancario destinó los fondos obtenidos
por captaciones y por Repos a constituir inversiones en moneda nacional y
extranjera y no a una ampliación de la cartera. Por su parte, el sector real se
mantuvo activo en la colocación de títulos como mecanismo para financiar sus
actividades.
En enero la TIB y el Indicador Bancario de Referencia se nivelaron con
la tasa de política, algo que no sucedía desde finales de octubre. Esto ocurrió
en un contexto en el que el BR volvió a ser prestamista neto del sistema
financiero. Respecto a las demás tasas de interés de mercado, las de CDT y
DTF descendieron 131pb y 125pb, respectivamente desde el 19 de diciembre,
cuando la Junta Directiva inició el actual proceso de reducción de la tasa de
referencia. De igual manera, en estos últimos dos meses todas las tasas de
interés para créditos comerciales han disminuido, lo mismo que la tasa para
tarjetas de crédito, aunque en este último caso se encontraría relacionado con
la reducción de la tasa de usura.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el
ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas
establecidas, aunque se observa una tendencia a la baja; (ii) los precios
internacionales de los alimentos, las materias primas y el petróleo siguen
disminuyendo, lo cual podría tener un efecto importante en la inflación total,
dependiendo del comportamiento de la tasa de cambio y de la política
comercial; (iii) la variación anual de los precios de los regulados sigue
disminuyendo, a pesar de que la caída de los precios internacionales del
petróleo no se ha transmitido a los precios internos de la gasolina; (iv) la
actividad económica continúa debilitándose más rápidamente de lo previsto
6
por el equipo técnico del Banco; (v) la cartera total del sistema financiero
continuó perdiendo dinamismo en el último mes; (vi) el bajo desempeño de la
economía mundial y de nuestros principales mercados de exportación, en
particular, de Estados Unidos, Venezuela y Ecuador; (vi) el efecto de la tasa
de cambio sobre la inflación y el crecimiento de los sectores transables y (vii)
las expectativas de inflación de mediano y largo plazo se ubican dentro del
rango de las metas fijadas por la Junta.
Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se
centraron en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política
monetaria dado el rezago de las mismas; (ii) los elementos que afectan las
proyecciones de inflación para 2009 y 2010; (iii) el efecto que puede tener el
comportamiento de corto plazo de la inflación sobre la formación de precios y
salarios en 2009; (iv) las proyecciones de déficit de la cuenta corriente; (v) la
incertidumbre generada por la crisis financiera mundial en los mercados
internacionales y su incidencia en la economía colombiana; (vi) la
depreciación del peso frente al dólar presentada en las últimas semanas; (vii)
el acceso de la región al financiamiento externo, la reducción de las tasas de
interés de largo plazo y la baja dinámica de la cartera del sistema financiero;
(viii) el balance de riesgos entre crecimiento e inflación en un contexto de
desaceleración de la economía mayor a lo esperada; y ix) la necesidad de
fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de
inflación.
La Junta destacó la caída de la inflación al consumidor por tercer mes
consecutivo. Este descenso, mayor al esperado, se dio en la gran mayoría de
los componentes de la canasta familiar y, en especial, del grupo de alimentos.
En el mes también cayeron los indicadores de inflación básica y las
expectativas de inflación se ubicaron dentro del rango meta fijado por la Junta
(5%+/- 1/2 punto porcentual).
La disminución de la inflación y las expectativas de inflación ratifican
que la debilidad de la demanda interna y externa y la caída en los precios
internacionales de los productos básicos se están reflejando en menores
presiones inflacionarias. La Junta tiene ahora una mayor confianza en que la
inflación anual continuará cayendo en los meses siguientes y terminará dentro
del rango meta a final del año.
La información disponible muestra que la economía mundial continúa
mostrando un panorama negativo a pesar de las políticas fuertemente
7
expansivas de los países. Igualmente, confirma el debilitamiento de la
actividad productiva en Colombia. Los últimos datos de la industria y el
comercio siguen mostrando caídas importantes, a lo que se unen los efectos
que tiene en la actividad productiva el mayor deterioro de la actividad mundial
vía menores exportaciones y términos de intercambio, deterioro en los niveles
de confianza y flujos de capital más costosos.
La Junta Directiva consideró que la actual coyuntura caracterizada por
una caída en la inflación y en sus expectativas, así como del debilitamiento de
la economía, permite reducir la tasa de intervención a un ritmo más rápido del
empleado en los dos meses anteriores sin que se afecte la credibilidad de la
política monetaria. Destacó que la pérdida de dinamismo de la actividad
productiva, que se refleja en un aumento del desempleo, es mayor a la
esperada y que otros bancos centrales de la región están también adoptando
políticas monetarias expansivas para apoyar la demanda y el crecimiento
futuro de sus economías.
Algunos directores, aunque estuvieron de acuerdo con la disminución
de la tasa de interés de intervención, alertaron sobre los riesgos asociados con
un movimiento de la tasa de política a un ritmo más rápido del adoptado por la
Corporación en las reuniones pasadas. Consideraron que dada la
inestabilidad de los mercados financieros internacionales y locales, la
reducción de la tasa de interés de intervención del Banco debe hacerse de tal
forma que apunte a la credibilidad y la confianza de los agentes económicos.
Una disminución en las tasas que no sea creíble podría tener efectos en el
mercado cambiario, en el mercado de deuda pública y en las expectativas
futuras de la inflación, todo lo cual podría dificultar que la Junta continúe con
una política monetaria anticíclica.
No obstante lo anterior, los miembros de la Junta decidieron por
consenso reducir la tasa de intervención a un ritmo más rápido del empleado
en reuniones pasadas, sin que ello signifique reducciones similares en el
futuro. De esta manera, la política monetaria y la devaluación del peso, en la
medida que no comprometa el logro de las metas de inflación, servirán para
apoyar la demanda y el crecimiento futuro de la economía.
Finalmente, la Junta reiteró la necesidad de continuar con el
seguimiento a la situación financiera internacional con el fin de adoptar
oportunamente las medidas de política monetaria que sean necesarias para
enfrentar los efectos de la misma.
8
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva acordó reducir en 100 pb las tasas de interés de
intervención del Banco de la República. De esta manera su tasa de
intervención será de 8%.
Bogotá D. C., marzo 13 de 2009.
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2009-03-01 |
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
20 de Marzo de 2009
El 20 de Marzo de 2009 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria
de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro
de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José
Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano,
Juan José Echavarría, Fernando Tenjo y Juan Pablo Zárate, en la cual se
discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus
perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A
continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha
reunión.
1. ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor en febrero se situó en 6,47%,
disminuyendo 71 pb frente a la de enero y cayendo por cuarto mes
consecutivo. La mayoría de indicadores de inflación básica aumentaron
después de presentar una tendencia decreciente durante cuatro meses.
La inflación anual de alimentos disminuyó de 12,2% en enero a 9,5%
en febrero. La caída se presentó tanto en los alimentos perecederos como en
algunos importados.
Los precios de los bienes regulados registraron en febrero un
crecimiento anual de 9,0% superior al 8,5% de enero. Las mayores alzas
provinieron de los servicios de acueducto y gas y del transporte urbano.
La inflación de no transables sin alimentos ni regulados aumentó de
5,1% en enero a 5,4% en febrero. Se destacan el rubro de arriendos que sigue
2
mostrando una tendencia al alza y el de servicios de educación que también
aumentó.
Por su parte, la inflación de transables sin alimentos ni regulados
disminuyó pasando de 2,4% en enero a 2,3% en febrero.
Los diferentes indicadores de las expectativas de inflación medidas con
los títulos de deuda pública a 1, 5 y 10 años se ubicaron entre 4% y 5% en la
primera semana de marzo. Este es el resultado más bajo desde mediados de
2006.
La variación anual de los precios al productor (IPP) dejó de caer y se
mantuvo en un registro igual al de enero de 6,2%.
b. Crecimiento interno
La información disponible muestra que la actividad económica interna
continuó desacelerándose más rápidamente de lo previsto por el equipo
técnico del Banco de la República:
-
Los datos del DANE para producción industrial muestran una caída
anual en el mes de enero de 10,7%.
-
La demanda de energía disminuyó en febrero 3,2% (una vez se ajusta
por días hábiles el dato es +0,8%).
-
La producción de cemento cayó en el primer bimestre alrededor del
20%, generando dudas sobre la recuperación de las obras civiles.
-
Los pedidos y las existencias de la industria según Fedesarrollo
continuaron deteriorándose en el primer mes del año.
-
El indicador de sentimiento de los consumidores cayó nuevamente en
febrero, alcanzando un valor negativo por primera vez desde 2003.
-
Las ventas al por menor en enero reportadas por el DANE cayeron a
una tasa anual de 4,5%, continuando con la tendencia decreciente que se inició
a mediados de 2008.
3
En cuanto a la demanda externa, las exportaciones totales en dólares
aumentaron 25,5% anual en 2008, con un crecimiento de las tradicionales de
40,8% y de las no tradicionales de 8,3% anual. En las primeras, sobresalen las
de petróleo y derivados, carbón y café, con tasas anuales de 67%, 44% y
9,9%, respectivamente. Las exportaciones a Venezuela mostraron un
crecimiento anual de 16,9%, con una dinámica sobresaliente en las ventas de
carne (94,3%), hilados y tejidos (93,8%) y metales comunes (81,1%). Por el
contrario, los sectores de confecciones (-11,5%) y material de transporte (-
68,4%) presentaron una importante caída. Las ventas totales a Estados Unidos
registraron una tasa anual de 34,8%. Las exportaciones no tradicionales a ese
país (excluyendo oro), crecieron 1,1% anual. Las ventas de maquinaria y
equipo, metales comunes, alimentos, banano, textiles y confecciones se
recuperaron respecto a las caídas observadas durante el 2007.
En el cuarto trimestre, las exportaciones en dólares cayeron cerca de 6%
frente a igual período de 2008. La caída fue más fuerte en el caso de las
exportaciones tradicionales (9%) debido a la reducción de los precios
internacionales de las materias primas exportadas por el país. En las no
tradicionales también se observó una reducción importante del orden del 6%
anual. Para el caso de las ventas no tradicionales a EEUU, la caída fue de
13,5%, mientras que la de las exportaciones de este tipo de bienes a Venezuela
fue de 3%.
En enero de 2009 las importaciones totales disminuyeron a un ritmo
anual de 5,2%. Este agregado se está desacelerando desde septiembre de 2008
cuando su variación anual fue de 39%. El análisis por tipo de bienes
(clasificación CUODE) muestra que dicha desaceleración ha sido liderada
tanto por el grupo de bienes de consumo, que pasó de tasas de crecimiento
anual mensual cercanas al 25,0% en abril de 2008 a -9,1% en enero de 2009,
como por los bienes intermedios que registraron una tasa máxima mensual de
47,0% anual en septiembre de 2008 y una caída del 25,7% anual en enero de
este año. Por su parte, las compras de bienes de capital registraron un aumento
de 22,0% anual.
Los promedios trimestrales a enero muestran aumentos anuales de la
tasa de desempleo para todos los dominios de la encuesta, aunque de mayor
magnitud en el caso de las 13 ciudades principales. Las tasas de desempleo
para dicho periodo se ubicaron en 11,9% y 12,1% para el total nacional y las
13 ciudades principales respectivamente, indicando incrementos de 1,1 y 1,6
pp con respecto al mismo trimestre del año anterior.
4
c. Contexto externo
Las intervenciones realizadas por las autoridades económicas en EEUU
y Europa han permitido que las condiciones de liquidez se normalicen y
retornen a los niveles observados antes de septiembre. Sin embargo, el canal
crediticio en las economías desarrolladas sigue sin restablecerse. Las
restricciones al otorgamiento de préstamos se mantienen elevadas lo que ha
llevado a una fuerte desaceleración del crédito comercial y de consumo.
La crisis financiera ha golpeado de manera fuerte al sector real. La
segunda revisión del PIB de Estados Unidos para el cuarto trimestre de 2008
muestra una contracción de 6,2% trimestre anualizado, la más alta desde
comienzos de los ochenta. El consumo y la inversión en ese país presentaron
una caída de 4,3% y 20,8%, respectivamente, mientras que las exportaciones
que se habían mantenido en terreno positivo, se contrajeron en 23,6% al
finalizar el año. Los indicadores de confianza y sentimiento del consumidor
siguieron deteriorándose en enero y febrero
Por otro lado, la producción industrial en Estados Unidos se contrajo a
una tasa anual de 11% en febrero, la caída más profunda desde la década de
los setenta. En otras economías desarrolladas la situación es similar.
En cuanto a las economías emergentes incluyendo Latinoamérica, la
actividad económica se ha desacelerado fuertemente. En la región, el
crecimiento de Brasil durante el cuarto trimestre fue 1,3% frente a 6,8% en el
trimestre inmediatamente anterior. En México se presentó una contracción de
1,6% a diciembre. Para Chile no se cuenta con información del PIB del último
trimestre pero indicadores como la producción industrial muestran una fuerte
contracción de la actividad durante el último trimestre y comienzos de 2009.
La disminución de las presiones inflacionarias y los bajos pronósticos
de crecimiento siguen permitiendo que los bancos centrales reduzcan sus tasas
de referencia.
Las monedas de la región, que se habían depreciado en los últimos 6
meses, han revertido esta tendencia en la segunda semana de marzo. Este es el
caso de Colombia y México en donde se presentaron apreciaciones de
alrededor de 4%, mientras que en Brasil y Chile la apreciación ha sido de
alrededor de 2,5%. A pesar de este repunte reciente de las monedas locales,
5
frente a diciembre de 2008 los tipos de cambio de Colombia, México y Perú
muestran una depreciación.
d. Variables financieras
En las últimas semanas de febrero, los agregados monetarios retomaron
una tendencia ascendente. A finales del mes, el crecimiento anual de M3 fue
de 19,4% y el del efectivo fue de 11,2%.
Las captaciones del sistema financiero de CDT y de bonos continuaron
aumentando. Los CDT crecen desde hace varios meses a tasas cercanas al
45% anual. En lo corrido del año, los fondos captados por el sistema bancario
se han destinado principalmente a inversiones en moneda nacional y
extranjera.
En febrero, el crédito se siguió desacelerando, tanto en la cartera en
pesos como en la de moneda extranjera. En las últimas 8 semanas el saldo de
la cartera en moneda nacional no ha crecido (crecimiento anual de 15,8% a
finales de febrero frente a 18,5% en diciembre).
Por tipo de crédito, la cartera comercial con leasing (en pesos) creció a
una tasa anual de 17,3% a finales de febrero, lo que muestra una fuerte
desaceleración. El crecimiento mensual anualizado de la serie suavizada
(promedio de 13 semanas) es cercano al 0% en febrero, lo que sugiere que la
cartera comercial no se está expandiendo en el margen. En el caso de la de
consumo, se presenta un fenómeno similar. El crecimiento anual a finales de
febrero es de 9% frente a 11,6% en diciembre y el crecimiento mensual
anualizado de la serie suavizada está en terreno negativo (-2,2%). La
desaceleración menos marcada se presenta en la cartera hipotecaria, cuyo
crecimiento anual a febrero fue de 15% y el mensual anualizado fue de 8,8%.
Respecto a los créditos en dólares, en lo corrido del año la cartera en
moneda extranjera se redujo en US$323 m (9,2%). Simultáneamente, el
endeudamiento externo directo del sector privado empezó a reducirse desde
diciembre (en US$ 41 millones) y en enero disminuyó US$59 m.
Desde que el Banco comenzó a reducir su tasa de referencia el 19 de
diciembre del año pasado, se ha observado una rápida disminución de la
mayoría de tasas de interés de mercado. En particular, entre esa fecha y el 11
de marzo, la TIB y el Indicador Bancario de Referencia (IBR) han acumulado
6
una disminución de 130pb, nivelándose con la tasa de referencia que se
encuentra en 8%.
Por su parte, desde el 19 de diciembre y hasta comienzos de marzo el
promedio ponderado de las tasas de los CDT y de la DTF han descendido 193
pb y 160 pb, respectivamente. Desde mediados de diciembre y hasta finales
de febrero también se observó una reducción significativa de todas las tasas de
interés para créditos así: el preferencial en 120pb, el de tesorería en 107 pb, el
ordinario en 120 pb y el de construcción en 60 pb. La transmisión más lenta se
ha dado para las tasas de crédito a los hogares, pero incluso a este nivel se
observaron caídas, específicamente en las de crédito para adquisición de
vivienda, las cuales disminuyeron 50pb en las dos últimas semanas de febrero.
Las tasas de interés reales (deflactadas por el IPC sin alimentos)
también presentaron una reducción generalizada en enero y sobretodo en
febrero. Esto sucedió por la combinación de menores tasas nominales y por el
incremento de la inflación sin alimentos en el último mes.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el
ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas
establecidas, aunque se observa una tendencia a la baja; (ii) la inflación sin
alimentos ni regulados continúa sin mostrar una reducción importante; (iii) los
precios internacionales de los alimentos, las materias primas y el petróleo
siguen disminuyendo, lo cual podría tener un efecto importante en la inflación
total, dependiendo del comportamiento de la tasa de cambio y de la política
comercial; (iv) la caída de los precios internacionales del petróleo no se ha
transmitido a los precios internos de la gasolina; (v) la actividad económica
continúa debilitándose más rápidamente de lo previsto por el equipo técnico
del Banco; (vi) la cartera total del sistema financiero continuó perdiendo
dinamismo en el último mes y la mayoría de las tasas de interés de mercado
disminuyó rápidamente respondiendo a la baja de la tasa de referencia del
Banco; (vii) el bajo desempeño de la economía mundial y de nuestros
principales mercados de exportación, en particular, de Estados Unidos,
Venezuela y Ecuador; (viii) el efecto de la tasa de cambio sobre la inflación y
el crecimiento de los sectores transables y (ix) las expectativas de inflación de
mediano y largo plazo se ubican dentro del rango de las metas fijadas por la
Junta.
7
Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se
centraron en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política
monetaria dado el rezago de las mismas; (ii) los elementos que afectan las
proyecciones de inflación para 2009 y 2010 y, en especial, los de los
mecanismos de indexación incorporados en algunos precios; (iii) la
incertidumbre generada por la crisis financiera mundial en los mercados
internacionales y su incidencia en la economía colombiana; (iv) la apreciación
del peso frente al dólar presentada en las últimas semanas; (v) el acceso de la
región al financiamiento externo y la baja dinámica de la cartera del sistema
financiero; (vi) el balance de riesgos entre crecimiento e inflación en un
contexto de desaceleración de la economía mayor a lo esperada y caída en las
expectativas de inflación y vii) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la
autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación.
Los miembros de la Junta destacaron la caída de la inflación al
consumidor por cuarto mes consecutivo. La disminución de la inflación y las
expectativas de inflación ratifican que la debilidad de la demanda interna y
externa y la caída en los precios internacionales de los productos básicos se
están reflejando en menores presiones inflacionarias. Lo anterior hace prever
que la inflación anual continuará cayendo en los meses siguientes y terminará
2009 en el rango meta.
Destacaron, así mismo, que la economía mundial continúa mostrando
un panorama negativo. Durante el mes, organismos internacionales como el
FMI y el Banco Mundial proyectaron crecimientos negativos de la economía
mundial en 2009. Esta caída ha llevado a que en América Latina se presente
una fuerte desaceleración en el crecimiento económico y a que muchos bancos
centrales reduzcan sus tasas de referencia. La devaluación de las monedas de
la región registrada entre enero y febrero se corrigió parcialmente en el mes de
marzo, en especial en Colombia en donde la reciente devaluación del peso
había sido mayor que la observada en otros países.
La economía colombiana ha mostrado resistencia a la crisis mundial
pese a la caída de la demanda externa que se refleja en una menor dinámica de
las exportaciones y en el consecuente debilitamiento del crecimiento. Los
últimos datos de la industria y el comercio señalan caídas fuertes. En estas
condiciones, y teniendo en cuenta el bajo nivel de capacidad utilizada, es de
esperar que la inflación en el país siga cayendo.
8
Dado lo anterior, los miembros de la Junta de manera unánime
decidieron reducir en 100 pb la tasa de intervención del Banco de la
República, pasando a 7%. Los 300 pb de disminución acumulada de la tasa de
interés de intervención desde diciembre de 2008 impulsan el crecimiento
económico. Estas decisiones de política se han podido hacer rápidamente
teniendo en cuenta que los desarrollos recientes en Colombia y el mundo
crean un balance de riesgos a la baja, tanto en la actividad económica como en
la inflación.
Finalmente, la Junta reiteró la necesidad de continuar con el
seguimiento a la situación financiera internacional con el fin de adoptar
oportunamente las medidas de política monetaria que sean necesarias para
enfrentar los efectos de la misma.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva acordó reducir en 100 pb las tasas de interés de
intervención del Banco de la República. De esta manera su tasa de
intervención será de 7%.
Bogotá D. C., abril 03 de 2009.
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2009-04-01 |
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
30 de Abril de 2009
El 30 de Abril de 2009 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria
de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro
de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José
Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano,
Juan José Echavarría, Cesar Vallejo y Juan Pablo Zárate, en la cual se discuten
las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y
se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. El director
Fernando Tenjo no asistió a la reunión por razón justificada. A continuación
se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión.
1. ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor en marzo se situó en 6,14%, cayendo
por quinto mes consecutivo. La mayoría de indicadores de inflación básica
disminuyeron, retomando la tendencia decreciente que se había observado
desde noviembre del año pasado y que se había interrumpido en febrero.
La inflación anual de alimentos disminuyó de 9,5% en febrero a 8,7%
en marzo. La caída se presentó en los alimentos procesados mientras que los
perecederos mostraron aumentos.
Los precios de los bienes regulados pasaron de 9,0% en febrero a 8,1%
en marzo, principalmente por el comportamiento de los servicios públicos,
gas domiciliario y gasolina.
La inflación de no transables sin alimentos ni regulados fue similar a la
de un mes atrás situándose en 5,36%. Lo anterior, debido a varios precios
indexados como son la educación, la salud y los arriendos.
2
Por su parte, la inflación de transables sin alimentos ni regulados
aumentó pasando de 2,4% en febrero a 2,5% en marzo.
Los diferentes indicadores de las expectativas de inflación medidas con
los títulos de deuda pública a 1, 5 y 10 años se ubicaron entre 3,5% y 4,7% a
comienzos de abril. Este es el resultado más bajo desde mediados de 2006.
La variación anual de los precios al productor (IPP) aumentó de 6,2%
en febrero a 6,8% en marzo.
b. Crecimiento interno
La información disponible muestra que la actividad económica interna
continuó desacelerándose más rápidamente de lo previsto un trimestre atrás
por el equipo técnico del Banco de la República:
-
Los datos del DANE para producción industrial muestran una caída
anual en el mes de febrero de 12,8%.
-
Si bien la demanda de energía mostró una recuperación y creció 5%,
una vez se ajusta por días hábiles disminuyó 5,1%.
-
Los pedidos y las existencias de la industria según Fedesarrollo
continuaron deteriorándose en los dos primeros meses del año.
-
El indicador de sentimiento de los consumidores de Fedesarrollo cayó
nuevamente en marzo.
-
La encuesta sobre el estado de las ventas del comercio de Fenalco
mostró alguna recuperación en el mes pero desde un nivel bajo. Por su parte,
el indicador de expectativas de actividad económica que resulta de la encuesta
realizada por esa entidad gremial se situó en niveles históricamente bajos.
-
Las ventas al por menor en febrero reportadas por el DANE cayeron a
una tasa anual de 4,1%, continuando con la tendencia decreciente que se inició
a mediados de 2008.
3
-
Las licencias de construcción siguieron cayendo, así como la
producción de cemento.
En cuanto a la demanda externa, las exportaciones totales en dólares a
enero cayeron 13,2% respecto a igual mes del año anterior. La caída de las no
tradicionales (14,8%) fue un poco mayor que la de las tradicionales (13,6%).
Dentro de las tradicionales, solo el carbón registró un aumento (de 88% anual)
gracias a mayores volúmenes vendidos. Los menores valores exportados en
los otros productos (petróleo y ferroníquel) obedecen a la caída en sus precios.
En el caso de las exportaciones no tradicionales, por destino, las ventas
a Venezuela exhibieron una menor dinámica en todos los rubros respecto al
mismo mes del año anterior: en conjunto se contrajeron a una tasa anual de
20% en enero. Las exportaciones a Ecuador aumentaron a una tasa anual de
1,7%, impulsadas por las del sector industrial, particularmente alimentos y
bebidas, material de transporte y artes gráficas. El otro gran comprador,
EEUU, también presentó un bajo desempeño (-43% en enero de 2009 sin oro),
con disminuciones en el valor de todas las ventas, excepto para el banano.
Finalmente, para el caso de las exportaciones no tradicionales para el resto del
mundo se registró un incremento de 0,4%.
Respecto a las importaciones en dólares, entre enero y febrero de 2009
registraron una contracción de 11,7% frente al mismo período de 2008. El
análisis por tipo de bienes (clasificación CUODE) muestra que dicha caída ha
sido liderada por el grupo de bienes intermedios (-26,9% anual). Los bienes de
consumo registraron tasas anuales de -9,5% a febrero mientras los de bienes
de capital crecieron 4,0%.
Con cifras mensuales a marzo, las tasas de desempleo para el total
nacional y las 13 principales áreas urbanas registraron incrementos anuales: la
del total nacional se ubicó en 12,0% y la de 13 áreas en 13,5%, 0.8 pp y 1.5 pp
superiores a las registradas en el mismo periodo del año anterior,
respectivamente. Al igual que en febrero, en marzo los aumentos se explican
principalmente por crecimientos de la oferta laboral (medida a través de la tasa
global de participación).
c. Contexto externo
4
La economía y el comercio mundial sufrieron una fuerte contracción
durante el primer trimestre de 2009 que se suma a la del cuarto trimestre del
año pasado. Estos resultados confirman los temores sobre una recesión
acentuada y mayor a la prevista en la economía global.
La producción industrial en EEUU se contrajo a una tasa anual de 12,8%
en marzo de 2009 llegando a niveles equivalentes a los de 1999. Caídas muy
fuertes se han observado también en la producción industrial del resto de
economías desarrolladas. El caso más extremo ha sido Japón en donde la
producción industrial ha caído a una tasa anual de más de 45% en febrero y en
donde el nivel correspondiente a ese mes era inferior a cualquier valor
observado en las últimas dos décadas.
El comercio mundial también ha sufrido un golpe fuerte. La variación
anual de las exportaciones nominales en dólares se contrajo a tasas anuales de
25% en enero y febrero, tanto en la Zona Euro como en Estados Unidos,
respectivamente. Para esta variable la caída también es más dramática en
Japón, en donde la contracción es de alrededor de 48% anual en febrero. El
efecto de este desplome ha hecho que el PIB de las economías desarrolladas se
contraiga fuertemente.
En síntesis, la situación actual en las economías desarrolladas puede
caracterizarse como la de una pérdida generalizada en la confianza de
consumidores e inversionistas que ha reducido fuertemente los niveles de
gasto y que ha sido reforzada por un aumento notable en las restricciones
crediticias. Lo anterior no mostró un giro durante el primer trimestre como lo
sugiere la caída adicional de los indicadores de confianza de los
consumidores. Los indicadores de confianza empresarial han presentado un
comportamiento un poco menos desfavorable en los últimos dos meses,
aunque la percepción sobre la situación económica sigue siendo bastante
negativa. Dado lo anterior, se redujeron los pronósticos de crecimiento de
EEUU y de otras economías desarrolladas.
Las economías emergentes también han resultado fuertemente golpeadas.
En América Latina es un hecho la contracción de la producción industrial en
los principales países al igual que la de las exportaciones. En consecuencia,
los pronósticos de crecimiento e inflación para la región se han revisado a la
baja. Pese a las menores perspectivas de crecimiento, las tasas de cambio de
los países latinoamericanos no siguieron debilitándose, por el contrario en el
5
último mes la mayoría de monedas se apreció. A su vez, la percepción de
riesgo ha disminuido, vista tanto con el EMBI+ como con los CDS a 5 años.
d. Variables financieras
En las últimas siete semanas terminadas el 10 de abril, el crecimiento de
los agregados monetarios se desaceleró como efecto del aumento de los
depósitos de la Tesorería General de la Nación en el Banco de la República.
Durante la primera semana del mes, M3 crecía a una tasa anual cercana al
17% y algo similar sucedía con los PSE. El sistema financiero sigue dando
prioridad a las captaciones a través de CDT y Bonos, las cuales crecen a tasas
anuales de 40%.
Respecto al crédito, la cartera bruta total en moneda nacional dejó de
desacelerarse en el último mes y medio y a comienzos de abril crecía a una
tasa anual de 15,2%. En términos reales, el crecimiento de la cartera total es
de 9,4%, que es superior al promedio observado desde 1970 (6,4%).
Por destino de la cartera, en las últimas seis semanas sobresale la
aceleración de la cartera comercial (de 17,0% a 18,4%), lo que se dio
simultáneamente con una reducción de la cartera de consumo. A comienzos de
abril esta última crecía a una tasa anual de 6,5%. Por su parte, la cartera
hipotecaria siguió creciendo a una tasa anual de alrededor del 14%.
En enero y febrero, el endeudamiento externo del sector privado
disminuyó en US259 m. Esto se dio por la contracción de la cartera en
moneda extranjera de los intermediarios del mercado cambiario. El
endeudamiento directo aumentó levemente (en US$ 63 millones) pero no
alcanzó a compensar la caída de la cartera en moneda extranjera.
Las tasas de interés continuaron reduciéndose de manera rápida
siguiendo la tasa de referencia del Banco de la República. Frente al 19 de
diciembre, fecha del primer ajuste en esta tasa y hasta el 17 de abril, la tasa de
los CDT ha caído un total de 324 pb mientras que la DTF lo hizo en 283 pb.
Por el lado de las tasas activas, las disminuciones acumuladas también son
significativas en los créditos comerciales: 342 pb para el preferencial y 298 pb
para el de tesorería. En cuanto al crédito dirigido a los hogares, sus tasas han
caído menos y en medio de mayor volatilidad: 85 pb para adquisición de
6
vivienda, 65 pb para financiación de consumo y cerca de 100 pb en el caso de
los otorgados a través de tarjetas.
La caída en las tasas nominales ha permitido una reducción de las tasas
reales en los últimos meses incluido marzo. Las tasas reales de crédito
preferencial y de tesorería se mantienen por encima de sus promedios
históricos (calculados desde 1998 y 2001), las de crédito comercial están ya
por debajo y las de consumo han fluctuado alrededor de sus promedios.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el
ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas
establecidas, aunque se observa una tendencia a la baja; (ii) la inflación de no
transables sin alimentos ni regulados continúa sin reducirse ; (iii) los precios
internacionales de los alimentos, las materias primas y el petróleo han
disminuido frente al alto nivel del 2008 y podrían tener un efecto importante
en la inflación total, dependiendo del comportamiento de la tasa de cambio y
de la política comercial; (iv) la caída de los precios internacionales del
petróleo no se ha transmitido a los precios internos de la gasolina; (v) la
actividad económica continúa debilitándose más rápidamente de lo previsto
por el equipo técnico del Banco; (vi) la cartera total del sistema financiero
dejó de desacelerarse y la mayoría de las tasas de interés del mercado
disminuyó rápidamente respondiendo a la baja de la tasa de referencia del
Banco; (vii) el crecimiento negativo de los Estados Unidos y el menor
crecimiento de Venezuela y Ecuador; (viii) el efecto de la tasa de cambio
sobre la inflación y el crecimiento de los sectores transables; (ix) el
comportamiento a la baja de los precios de los títulos de deuda pública; y (ix)
las expectativas de inflación de mediano y largo plazo se ubican dentro del
rango de las metas fijadas por la Junta.
Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se
centraron en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política
monetaria dado el rezago de las mismas; (ii) los elementos que afectan las
proyecciones de inflación para 2009 y 2010 y, en especial, los de los
mecanismos de indexación incorporados en algunos precios; (iii) la
incertidumbre generada por la crisis financiera mundial en los mercados
internacionales y su incidencia en la economía colombiana; (iv) el acceso de la
región al financiamiento externo y las causas de la baja dinámica de la cartera
7
del sistema financiero; (v) el balance de riesgos entre crecimiento e inflación
en un contexto de desaceleración de la economía mayor a la esperada y caída
en las expectativas de inflación y (vi) la necesidad de fortalecer la credibilidad
de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación.
Los miembros de la Junta destacaron la caída de la inflación al
consumidor por quinto mes consecutivo. La disminución de la inflación y las
expectativas de inflación ratifican que la debilidad de la demanda interna y
externa y la caída en los precios internacionales de los productos básicos se
están reflejando en menores presiones inflacionarias.
Resaltaron, así mismo, que la economía mundial se deterioró más de lo
esperado en el primer trimestre de 2009. Si bien algunos países
industrializados muestran signos de estabilización, es de esperar que los
efectos negativos de la crisis mundial se mantengan a lo largo del año. En
América Latina es un hecho la contracción generalizada de la producción
industrial y la caída de la inflación. Se destaca que la fuerte devaluación de las
monedas latinoaméricanas registrada al principio de 2009 se ha corregido.
La información disponible muestra un comportamiento similar de la
economía colombiana con una menor dinámica de las exportaciones y el
consecuente debilitamiento del crecimiento. Los últimos datos de la industria
y el comercio señalan caídas fuertes. No obstante, el sistema financiero sigue
mostrando un comportamiento saludable. En estas condiciones, y teniendo en
cuenta el bajo nivel de capacidad utilizada, es de esperar que la inflación en el
país siga cayendo en los próximos meses y podrá terminar el 2009 por debajo
del punto medio del rango meta.
Dado lo anterior, los miembros de la Junta de manera unánime
decidieron reducir en 100 pb la tasa de intervención del Banco de la
República, pasando a 6%. Los 400 pb de disminución acumulada de la tasa de
interés de intervención desde diciembre de 2008 impulsan el crecimiento
económico. Los desarrollos recientes en Colombia y el mundo crean un
balance de riesgos a la baja, tanto en la actividad económica como en la
inflación, lo que permite que la Junta continúe adoptando una política de
disminuir sus tasas de intervención.
Finalmente, la Junta reiteró la necesidad de continuar con el
seguimiento a la situación financiera internacional con el fin de adoptar
8
oportunamente las medidas de política monetaria que sean necesarias para
enfrentar los efectos de la misma.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva acordó reducir en 100 pb las tasas de interés de
intervención del Banco de la República. De esta manera su tasa de
intervención será de 6%.
Bogotá D. C., mayo 15 de 2009.
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2009-05-01 |
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
29 de Mayo de 2009
El 29 de Mayo de 2009 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria
de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro
de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José
Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano,
Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, Cesar Vallejo y Juan Pablo Zárate, en
la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y
sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria.
A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha
reunión.
1. ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor en abril se situó en 5,73% cayendo
por sexto mes consecutivo. En los cuatro primeros meses del año se acumuló
una inflación de 2,3%, muy por debajo del mismo registro del año pasado
(4,2%). La mayoría de indicadores de inflación básica disminuyeron a un
ritmo mayor que a comienzos de año o a finales de 2008.
La inflación anual de alimentos disminuyó de 8,7% en marzo a 7,9% en
abril. La caída se presentó principalmente en los alimentos procesados.
Debido al comportamiento de los combustibles, los precios de los
bienes regulados pasaron de 8,1% en marzo a 7,6% en abril.
La inflación de no transables sin alimentos ni regulados pasó de 5,36%
a 4,8% en abril. Lo anterior, debido principalmente al rubro de
arrendamientos. Se destaca que desde marzo de 2007 este indicador no se
situaba por debajo del 5%.
2
Por su parte, la inflación de transables sin alimentos ni regulados
aumentó de 2,5% en marzo a 2,6% en abril.
Los diferentes indicadores de las expectativas de inflación medidas con
los títulos de deuda pública a 1, 5 y 10 años continuaron descendiendo y se
ubicaron entre 3,2% y 4,0% a comienzos de mayo. Este es el resultado más
bajo desde mediados de 2006.
La variación anual de los precios al productor (IPP) disminuyó de 6,8%
en marzo a 6,6% en abril.
b. Crecimiento interno
La información disponible confirma que la debilidad de la actividad
económica interna se mantiene:
-
Los datos del DANE para producción industrial muestran un
crecimiento en marzo de 0,4% frente al mismo mes del año anterior, que
ajustado por días hábiles corresponde a una caída anual de 7,2%. Para el
primer trimestre, el DANE reporta una disminución de 7,5%.
-
La demanda de energía cayó a una tasa anual de 5% que al corregirse
por días hábiles creció 3%.
-
El indicador de sentimiento de los consumidores de Fedesarrollo
disminuyó nuevamente en abril, mientras que el indicador de consumo
registró una caída a niveles similares a los registrados a mediados de 2002.
-
Las ventas al por menor en febrero reportadas por el DANE cayeron a
una tasa anual de 7,1%, continuando con la tendencia decreciente que se
inició a mediados de 2008. Lo anterior coincide con la reducción que registra
el indicador de ventas de Fenalco para el mes de abril.
-
Las licencias de construcción siguieron disminuyendo, así como la
producción de cemento.
En cuanto a la demanda externa, en lo corrido del año a febrero de
2009, las exportaciones totales en dólares registraron una caída de 15,3%
frente a un crecimiento de 51,9% para el mismo período de 2008. Este hecho
se vio reflejado tanto en las exportaciones tradicionales (-21,4% en 2009 Vs.
3
74,8% en 2008) como en la ventas de los productos no tradicionales sin oro (-
14 % en 2009 Vs. 16 % en 2008). En el grupo de tradicionales, el único
producto que mostró una tasa anual positiva fue carbón, en tanto que
ferroníquel, petróleo y derivados y café presentaron reducciones originadas en
la caída de sus precios implícitos y no en los volúmenes exportados (excepto
para café).
Excepto para banano, las exportaciones no tradicionales (sin oro) hacia
Estados Unidos continuaron disminuyendo en valor de -30,1% en 2009 frente
a 9,9% en 2008. Las exportaciones a Venezuela también exhibieron una
menor dinámica en todos los rubros respecto al mismo período del año
anterior, al pasar de una tasa anual de 86 % en 2008 a una de -12 % en 2009.
Sin embargo, sectores como el agrícola, industria química, hilados y tejidos,
metales comunes y maquinaria y equipo mostraron incrementos anuales
respecto al mismo período de 2008. Así mismo, para los países diferentes a
Estados Unidos, Venezuela y Ecuador, las ventas de productos no
tradicionales presentaron una caída de 10% en lo corrido a febrero (16,4% a
febrero de 2008), debido principalmente a la contracción de las exportaciones
industriales de 0,9% (14% a febrero de 2008) y, en particular, al
comportamiento de los sectores de confecciones, alimentos y bebidas y
maquinaria y equipo.
Por el contrario, las exportaciones no tradicionales hacia Ecuador
presentaron una tasa de crecimiento anual positiva de 3,5% frente a una caída
de 0,1% registrada en el mismo período de 2008.
Finalmente, entre enero y marzo de 2009 las importaciones totales
registraron una contracción de 10,2% frente al mismo período de 2008. Por
tipo de bienes (clasificación CUODE), dicha desaceleración ha sido, en parte,
liderada por el grupo de bienes intermedios que pasaron de crecer 18,3% en lo
corrido a marzo de 2008 a -22,0% anual para el mismo período de 2009. Al
mismo tiempo, los bienes de consumo registraron una reducción anual de
6,3% a marzo de 2009 frente a un crecimiento anual de 15,7% en 2008. Por su
parte, los bienes de capital crecieron 1,1% en 2009, mostrando un menor ritmo
de crecimiento frente a su máximo a febrero de 2008 cuando aumentaban
35,4%.
Con cifras mensuales a abril, las tasas de desempleo para el total
nacional y las 13 principales áreas urbanas registraron incrementos anuales: la
del total nacional se ubicó en 12,1% y la de 13 áreas en 12,9%, 1 pp y 1,6 pp
4
superiores a las registradas en el mismo periodo del año anterior. Al igual que
en marzo, en abril los aumentos en las tasas de desempleo se explican
principalmente por los altos crecimientos de la oferta laboral (medida a través
de la tasa global de participación). En este mes, se observó un ligero
incremento en las tasas de ocupación.
c. Contexto externo
Durante el primer trimestre de 2009 la economía estadounidense se
contrajo 6,1% trimestre anualizado (t/a). Esta es la tercera caída consecutiva
del PIB en ese país, que había presentado una contracción de 6,3% en el
cuarto trimestre del año pasado. En la zona euro y el Reino Unido la caída
también fue considerable en el primer trimestre, 9,8% t/a y 7,4% t/a,
respectivamente. El caso más dramático fue el japonés en donde la caída del
PIB fue de 15,2% t/a. Pese a lo anterior, se observó en los mercados
financieros una recuperación del optimismo que se reflejó en un aumento en
los indicadores bursátiles y de la confianza de consumidores e inversores y en
la caída de las primas de riesgo.
Las economías emergentes se han visto fuertemente golpeadas y para el
primer trimestre la actividad económica se contrajo en muchas de ellas. En
Latinoamérica, por ejemplo, el PIB de México cayó a una tasa anual de 8,2%,
mientras que en Perú se desaceleró aunque presentó una expansión (3,1%
anual). En Chile y Brasil no se cuenta con información del PIB del primer
trimestre, pero indicadores como la producción industrial muestran una fuerte
contracción de la actividad en dicho período.
Algunas
economías
emergentes
se
están
beneficiando
del
comportamiento de los precios de los bienes básicos que se han recuperado,
así mismo países como China y Corea muestran signos de recuperación. De
igual forma, las exportaciones de China, Hong Kong y Corea que habían
descendido fuertemente, registraron niveles positivos en marzo y abril.
En el último mes y medio, varios bancos centrales redujeron
nuevamente su tasa de referencia. El Banco Central Europeo (BCE) bajó su
tasa 25 pb, llevándola a 1%. En Latinoamérica, los movimientos más recientes
son los de los bancos centrales de Chile y Perú, con reducciones de 50 pb y
100 pb, respectivamente. En estos países, las tasas quedaron en 1,25% y
4,00%.
5
En América Latina, el comportamiento del mercado cambiario se ha
revertido desde marzo siguiendo la caída en la percepción de riesgo. Desde
dicho mes el fortalecimiento de las monedas de la región frente al dólar ha
sido marcado y generalizado. Una tendencia similar se ha observado en el
caso del euro frente al dólar y de otras monedas de Asia y Europa Oriental.
d. Variables financieras
En abril, la base monetaria redujo su ritmo de crecimiento anual. Igual
comportamiento presentó el M3 por la desaceleración de los pasivos sujetos a
encaje (PSE), lo cual estuvo relacionado con el mayor monto de fondos del
gobierno en el BR a finales de abril y comienzos de mayo para atender los
vencimientos de TES.
En el último mes y medio, la cartera nominal en moneda nacional del
sistema financiero dejó de caer y su crecimiento se estabilizó alrededor del
15% anual. Por tipo de crédito, el mayor dinamismo se centró en el comercial,
con un crecimiento anual de 19,6% en la primera semana de mayo frente a
17% en marzo. Los desembolsos más dinámicos en las últimas semanas
fueron los de crédito preferencial, con crecimientos cercanos al 100% anual.
Por otro lado, los desembolsos de crédito ordinario mantuvieron su
dinamismo con tasas cercanas al 40%. En lo corrido del año se nota un
aumento de los plazos a los cuales se están otorgando los nuevos créditos
comerciales, en especial los ordinarios.
En los últimos dos meses la cartera de consumo presentó un crecimiento
anualizado negativo en términos nominales, acompañado de un mayor
deterioro en su calidad y de mayores provisiones. Algo más de la mitad de las
provisiones acumuladas en este año por cartera en moneda nacional obedecen
a créditos de consumo.
Por su parte, el endeudamiento externo siguió desacelerándose en marzo
y abril. Esta tendencia se explica por una reducción de la cartera en moneda
extranjera pues el endeudamiento directo del sector privado aumentó (en
marzo) un 5% respecto a igual mes del 2008.
Dado todo lo anterior, la tasa anual de crecimiento del endeudamiento
total (moneda nacional más moneda extranjera) en marzo fue 12,9%, inferior
a la de febrero (13,5%) y a la de finales de 2008.
6
Estudios preparados por el equipo técnico del Banco muestran que el
crédito ha sido afectado por factores tanto de oferta como demanda. En el caso
de la cartera de consumo, las restricciones de oferta parecen imperar. En la
cartera hipotecaria se observa que además de las restricciones de oferta, la
demanda por este tipo de crédito se ha desacelerado. La cartera comercial, por
su parte, es la menos sujeta a restricciones de oferta.
En materia de tasas de interés, en abril y comienzos de mayo continuó
la rápida transmisión de los descensos de la tasa de política hacia las tasas de
mercado, en especial hacia las pasivas y las activas para crédito comercial.
Durante abril, las tasas de CDT y DTF se redujeron un poco más de 100pb
respecto al mes anterior y las activas para crédito ordinario, preferencial y de
tesorería lo hicieron en cerca de 130 pb. Entre el 19 de diciembre y finales de
abril, las tasas pasivas cayeron alrededor de 300pb y las de crédito comercial
entre 260 pb y 390 pb. La trasmisión hacia las tasas de interés para el crédito
dirigido a los hogares ha sido mucho más lenta, aunque en el último mes
tendió a acelerarse en el caso de las de crédito de consumo. Desde mediados
de diciembre de 2008 y hasta abril las caídas en las tasas de consumo, tarjetas
y crédito hipotecario habían sido de 85 pb, 101 pb y 142 pb, respectivamente.
Desde finales de marzo y hasta mediados de abril todas las tasas de
interés de los TES descendieron de manera importante.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el
ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas
establecidas, aunque se observa una tendencia sostenida a la baja; (ii) la
inflación de no transables sin alimentos ni regulados presentó durante el mes
una caída debido al rubro de arriendos; (iii) los precios internacionales de los
alimentos, las materias primas y el petróleo han disminuido frente al nivel más
alto del 2008 y podrían tener un efecto importante en la inflación total,
dependiendo del comportamiento de la tasa de cambio y de la política
comercial; (iv) la información disponible confirma que la actividad
económica continúa debilitándose; (v) la cartera total del sistema financiero
dejó de desacelerarse y la mayoría de las tasas de interés del mercado
disminuyó rápidamente respondiendo a la baja de la tasa de referencia del
Banco; (vi) el crecimiento negativo de los Estados Unidos y el menor
crecimiento de Venezuela, Ecuador y otros socios comerciales; (vii) el efecto
de la tasa de cambio sobre la inflación y el crecimiento de los sectores
7
transables; (viii) el comportamiento a la baja de las tasas de interés de los
títulos de deuda pública; y (ix) las expectativas de inflación de mediano y
largo plazo se ubican dentro de las metas fijadas por la Junta para el largo
plazo.
Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se
centraron en los siguientes aspectos: (i) los elementos que afectan las
proyecciones de inflación para 2009 y 2010 y, en especial, los de los
mecanismos de indexación incorporados en algunos precios; (ii) el efecto
rezagado de las medidas de política monetaria sobre la producción y los
precios; (iii) el impacto que puede tener en la inflación el precio interno de la
gasolina;(iv) la incertidumbre generada por la crisis financiera mundial en los
mercados internacionales y su incidencia en la economía colombiana; (v) el
acceso de la región al financiamiento externo, los flujos de inversión directa y
las causas de la baja dinámica de la cartera del sistema financiero; (vi) el
balance de riesgos entre crecimiento e inflación en un contexto de
desaceleración de la economía mayor a la esperada y caída en las expectativas
de inflación y (vii) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad
monetaria y anclar las expectativas de inflación alrededor de la meta de largo
plazo.
Los miembros de la junta destacaron la caída de la inflación anual al
consumidor que en abril cayó por sexto mes consecutivo. Este descenso se
presentó tanto en los precios de alimentos como en otros rubros de la canasta
familiar, destacándose la desaceleración de los precios de los bienes no
transables y de los regulados. En el mes continuaron disminuyendo los
indicadores de inflación básica y las expectativas de inflación se aproximan al
rango meta de mediano y largo plazo (3%+/- un punto porcentual).
Lo anterior ratifica que la debilidad de la demanda interna y externa, la
reducción de las expectativas de inflación y la caída en los precios
internacionales de los productos básicos frente al nivel máximo alcanzado en
2008, se están reflejando con fuerza en menores presiones inflacionarias. La
Junta considera que la inflación anual continuará cayendo en los próximos
meses y podrá terminar el año por debajo del punto medio del rango meta
(5%).
En la medida que se conocen datos sobre el crecimiento del producto de
los países en el primer trimestre del año, se confirma la contracción de la
economía mundial. Sin embargo, en las últimas semanas hay signos de
8
estabilización de la economía de los Estados Unidos y de una recuperación
importante de China. Así mismo, en algunas economías industrializadas y
emergentes, los precios de los activos han tenido un comportamiento positivo.
En América Latina, la fuerte devaluación de las monedas registrada al
principio de 2009 se ha corregido y las primas de riesgo han disminuido.
En Colombia, la crisis internacional se ha transmitido principalmente a
través del deterioro en la confianza de los consumidores y productores y de
una menor dinámica de las exportaciones y las remesas. Los últimos datos de
la industria, el comercio y la construcción señalan caídas fuertes una vez se
ajustan por días hábiles. No obstante, el sistema financiero sigue mostrando un
comportamiento saludable.
Dado lo anterior, los miembros de la Junta de manera unánime
decidieron reducir en 100 pb la tasa de intervención del Banco de la
República, pasando a 5%. Destacaron que la tasa de interés de intervención se
ha reducido 500 puntos básicos en cerca de cinco meses, y que su nivel actual
es claramente expansivo. Se espera que continúen cayendo las tasas de interés
de préstamo para las empresas y las familias aunque en algunos casos, estas se
verán afectadas por primas de riesgo. El impulso monetario, un ambiente
externo menos negativo y la expectativa del mayor dinamismo de la inversión
pública, permiten esperar una recuperación gradual del crecimiento
económico a partir del segundo semestre de este año. Con la información
disponible hasta el momento, la Junta prevé que cualquier eventual reducción
de su tasa de interés en el futuro sería menor que las observadas
recientemente.
Finalmente, la Junta reiteró la necesidad de continuar con el
seguimiento a la situación financiera internacional con el fin de adoptar
oportunamente las medidas de política monetaria que sean necesarias para
enfrentar los efectos de la misma.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva acordó reducir en 100 pb las tasas de interés de
intervención del Banco de la República. De esta manera su tasa de
intervención será de 5%.
Bogotá D. C., junio 12 de 2009.
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2009-06-01 |
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
19 de Junio de 2009
El 19 de Junio de 2009 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión
ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del
Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente
General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos
Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan
Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de
crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas
con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los
principales temas tratados en dicha reunión.
1. ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor en mayo se situó en 4,77% cayendo
por séptimo mes consecutivo. En los cinco primeros meses del año se acumuló
una inflación de 2,3%, muy por debajo del mismo registro del año pasado
(5,12%). Los indicadores de inflación básica continuaron disminuyendo.
La variación anual de los precios de los alimentos cayó de 7,9% en
abril a 5,5% en mayo, principalmente por los precios de los alimentos
perecederos que pasaron de un crecimiento anual del 14,5% en abril a 4% en
mayo.
El incremento anual de precios de los bienes regulados disminuyó de
7,6% en abril a 6,5% en mayo, debido al comportamiento de los combustibles
y del gas domiciliario.
Igualmente, el de los bienes no transables sin alimentos ni regulados
pasó de 4,9% en abril a 4,7% en mayo. Se destaca la reducción en el
crecimiento anual de los rubros con “baja indexación”, en especial el de
2
servicios personales. La variación de los ítems con “alta indexación”
(servicios financieros, médicos y educativos) también mostró una reducción
pero se mantiene en niveles superiores al 7%. El rubro de arrendamientos, por
su parte, completó tres meses de caídas consecutivas y se situó en 4,7%.
El aumento anual de precios de bienes transables sin alimentos ni
regulados pasó de 2,6% en abril a 2,8% en mayo.
Los indicadores de las expectativas de inflación medidas con los títulos
de deuda pública aumentaron en las últimas semanas, en particular para los
horizontes de 5 y 10 años. .
La variación anual de los precios al productor (IPP) disminuyó de 6,6%
en abril a 5,3% en mayo.
b. Crecimiento
El DANE reveló un crecimiento anual de 19,4% en obras civiles para el
primer trimestre de 2009. Se destaca la contribución que presentó el subsector
de vías de aguas, puertos, represas y otras obras portuarias, que creció 54,6%
respecto al mismo trimestre del año anterior, y el subsector de construcciones
para la minería, cuya variación anual fue de 93,5%.
Por su parte, la información disponible muestra que aunque la debilidad
de la actividad económica interna se mantiene, las expectativas de los
empresarios y consumidores revelan signos de recuperación:
-
Los datos del DANE para producción industrial a abril muestran un
crecimiento de -14,5% para ese mes. La fuerte caída se debió, en parte, al
menor número de días hábiles en abril de 2009 respecto al año anterior, por la
presencia de Semana Santa.
-
La Encuesta de Opinión Empresarial –EOE- de Fedesarrollo para la
industria, muestra en abril un deterioro de los indicadores de pedidos e
inventarios frente a los niveles del mes anterior.
-
Las ventas al por menor en abril según el DANE cayeron 7,1% en
términos anuales, caída similar a la observada en marzo, pero mayor a la del
primer trimestre (-5,5%). En mayo, la información de Fenalco sobre comercio
no sugiere quiebres importantes en estas tendencias.
3
-
La producción de cemento año corrido a mayo registró una caída anual
de 15,1%. Sin embargo, ésta fue menor que la registrada año corrido a abril
(-16,6%). La producción de cemento puede estar relacionada tanto con la
construcción nacional como con los pedidos del exterior
-
La EOE de Fedesarrollo para la industria y comercio, en abril, muestra
que los empresarios de estos sectores mejoraron sus expectativas de
producción y ventas a tres meses, lo que ocasionó un quiebre de las tendencias
decrecientes de dichas variables.
-
El Indicador de Confianza del Consumidor de Fedesarrollo presentó un
importante incremento en mayo y se recuperó del muy bajo nivel alcanzado
en abril.
La balanza comercial en el primer trimestre de 2009 fue deficitaria en
USD11 m, en contraste con el superávit de USD342 m registrado un año
atrás, debido a una caída de las exportaciones de 13,2% superior a la de las
importaciones (-9,5%).
El descenso anual del valor exportado (USD1,144 m) en los primeros
tres meses se explica principalmente por las menores ventas de petróleo y
derivados al mercado de Estados Unidos. Las ventas a dicho mercado, que
representan el 31% de las totales, cayeron 26,8%. Por su parte, las
exportaciones con destino a Venezuela, que representan cerca del 20% de las
totales, crecieron 4,1% debido a las mayores ventas de carne de bovino,
combustible y calderas.
Entre enero y abril, las importaciones FOB totalizaron USD 10,058 m y
disminuyeron anualmente 12,5%. En términos CIF, éstas sumaron USD
10,640 m y cayeron -13,3%. La disminución más importante en las compras
totales se presentó en los bienes intermedios y materias primas adquiridos en
Estados Unidos, en especial de productos mineros, químicos y farmacéuticos.
c. Contexto externo
Después del profundo deterioro de la economía mundial observado en
los últimos meses, algunos indicadores del sentimiento de los hogares y las
empresas muestran señales de mejoría. Así mismo, la fuerte reducción de los
4
inventarios observada en el PIB de EE.UU. sugiere un cambio en el
comportamiento de la actividad económica para el segundo semestre.
En las economías emergentes, la recuperación de la producción industrial
de China e India, al igual que algunos signos de reactivación de las
exportaciones de otros países asiáticos, han incentivado las compras de bienes
básicos y generado un mejor sentimiento en los mercados de capitales. Sin
embargo, el deterioro de la actividad económica de la mayoría de países ha
continuado. En América Latina, en particular, durante el primer trimestre de
2009 se observó una fuerte caída en México y una contracción menos fuerte
en Brasil y Chile. Perú habría crecido, pero a una tasa muy inferior a la
registrada el año anterior.
En la región, la caída de la demanda y los menores precios de los productos
básicos frente a los niveles alcanzados un año antes han contribuido al
descenso de la inflación. Esta reducción ha sido más notoria en los casos de
Chile, Colombia y Perú. Esto a su vez, unido a las mejores expectativas de
inflación, ha facilitado reducciones adicionales de tasas de interés por parte de
los bancos centrales. No obstante, algunas tasas de mercado, especialmente las
de consumo, aún no han reaccionado en línea con el estímulo monetario.
En los últimos tres meses las principales monedas de la región se han
apreciado frente al dólar, y frente al euro están llegando a los niveles de un
año atrás. Con esto se ha corregido la depreciación registrada entre enero y
febrero. El fortalecimiento de las principales monedas latinoamericanas se ha
dado en un contexto de un dólar debilitado frente a las otras referencias más
duras y de una menor percepción de riesgo de los países emergentes.
d. Variables financieras
En mayo, el M3 y los pasivos sujetos a encaje (PSE) retomaron un
ritmo de crecimiento de 16% anual después de la desaceleración transitoria
que se observó en abril. La desaceleración y el posterior repunte estuvieron
relacionados con la acumulación de depósitos de la Tesorería General de la
Nación (TGN) en el Banco de la República en abril y su giro en mayo 15 para
atender vencimiento de TES por $4 billones. Para julio, se esperan
nuevamente vencimientos de TES por $6 billones.
La cartera en moneda nacional en mayo creció a un ritmo anual de 15%,
similar al que se observó en los tres meses anteriores. Por tipo de crédito, se
5
mantuvo la desaceleración de la cartera de consumo, cuyo crecimiento
nominal anual en el mes fue de 3,9%. Sin embargo, el saldo del crédito de
consumo se estabilizó alrededor de $39,4 billones desde el mes de marzo de
este año. El menor crecimiento del crédito de consumo contrasta con un
mayor dinamismo en el crédito comercial. La cartera comercial creció a una
tasa cercana al 21% anual en mayo, observándose un dinamismo
particularmente importante en los desembolsos de los créditos ordinario,
preferencial y de tesorería.
En lo corrido del año hasta mayo, la cartera en moneda extranjera con
intermediarios locales disminuyó en US$1,087 m. Por su parte, el crédito
externo directo hasta el mes de abril había aumentado US$279 m.
La reducción de las tasas de interés del Banco de la República (500 pb)
se ha transmitido de manera rápida al mercado interbancario, al de depósitos y
al de crédito comercial, pero de una forma lenta en el caso del crédito dirigido
a los hogares. Al finalizar mayo la tasa interbancaria (6,00%) y la IBR
(6,04%) estaban en línea con la tasa de de interés de referencia. De igual
forma, desde el inicio de la reducción de la tasa de política (diciembre 19 de
2008) y hasta la última semana de mayo de 2009, la tasa DTF se redujo 408
pb y se situó en 6,11%. En las mismas fechas, el descenso también ha sido
significativo en el caso de las tasas de crédito comercial ordinario (-443 pb), al
pasar de 17,75% a 13,32%. En el mismo período, las tasas de interés de
créditos de consumo y adquisición de vivienda se redujeron -134 pb y -159 pb
y se situaron al finalizar mayo en 24,20% y 15,73%, respectivamente.
Al restarle a las tasas de interés de ahorro y crédito la inflación sin
alimentos, los resultados también muestran una reducción importante. Entre
diciembre pasado y mayo de 2009, las tasas de interés reales promedio DTF y
activa (según metodología Banco de la República) disminuyeron 305 pb y
362 pb, respectivamente. En mayo éstas se situaron en 1,72% y 8,38%.
La tasa de interés de los TES de corto plazo se redujo a un ritmo similar
que la tasa de interés de referencia. Las de los TES a plazos más largos han
presentado un menor descenso. Entre diciembre 19 de 2008 y mayo 29 de
2009, la curva cero cupón de los TES registró un descenso de 395 pb, 228 pb
y 162 pb, en el tramo de 1, 5 y 10 años, respectivamente.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
6
En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el
ritmo de crecimiento de los precios y su tendencia sostenida a la baja; (ii) la
caída en la inflación de los alimentos y de los no transables sin alimentos ni
regulados; (iii) los precios internacionales de los alimentos, las materias
primas y el petróleo que podrían tener un efecto importante en la inflación
total, dependiendo del comportamiento de la tasa de cambio y de la política
comercial; (iv) la mejora en las expectativas a pesar de la debilidad de la
actividad económica; (v) la cartera del sistema financiero en moneda legal
creció impulsada por la cartera comercial y, en menor medida, por la
hipotecaria; (vi) la rápida disminución de la mayoría de las tasas de interés del
mercado en respuesta a la baja de la tasa de referencia del Banco; (vii) el
crecimiento negativo de los Estados Unidos y el menor crecimiento de
Venezuela, Ecuador y otros socios comerciales; (viii) el efecto de la tasa de
cambio sobre la inflación y el crecimiento de los sectores transables; (ix) el
comportamiento al alza de las tasas de interés de los títulos de deuda pública;
y (x) el comportamiento de las expectativas de inflación de mediano y largo
plazo.
Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se
centraron en los siguientes aspectos: (i) los elementos que afectan las
proyecciones de inflación para 2009 y 2010, incluyendo los mecanismos de
indexación incorporados en algunos precios; (ii) el efecto rezagado de las
medidas de política monetaria sobre la producción y los precios; (iii) la
incertidumbre generada por la crisis financiera mundial en los mercados
internacionales y su incidencia en la economía colombiana; (iv) el acceso de la
región al financiamiento externo, los flujos de inversión directa y las causas de
la baja dinámica de la cartera del sistema financiero; (v) el balance de riesgos
entre crecimiento e inflación en un contexto de desaceleración de la economía
y caída de la inflación; (vi) la pertinencia de continuar reduciendo la tasa de
intervención ante la última información disponible; (vii) el reciente aumento
de las expectativas de inflación de mediano y largo plazo; y (viii) la necesidad
de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas
de inflación alrededor de la meta de largo plazo.
Los miembros de la Junta destacaron la caída de la inflación anual al
consumidor (4,77%) por séptimo mes consecutivo. Este descenso se presentó
nuevamente en los precios tanto de los alimentos como de los bienes no
transables y los regulados. Los indicadores de inflación básica continuaron
disminuyendo.
7
El comportamiento de los precios ratifica que la debilidad de la
demanda interna y externa, las expectativas de inflación y la caída en los
precios de los productos básicos frente al nivel máximo alcanzado en 2008, se
está reflejando en menores presiones inflacionarias. La Junta espera que la
inflación anual caiga de manera apreciable en el mes de junio y termine el año
por debajo del punto medio del rango meta (5%).
Algunos indicadores de expectativas en las economías industrializadas
registran cambios positivos, lo cual sugiere que podrían estar estabilizándose.
La recuperación de la producción de China e India, al igual que la reactivación
de las exportaciones en otros países asiáticos, han incentivado las compras de
productos básicos y un mejor comportamiento de los mercados de capitales.
Sin embargo, es de esperar que los efectos negativos de la crisis mundial se
mantengan a lo largo del año. En la mayoría de economías de América Latina
se confirmó la contracción en el crecimiento del producto en los primeros
meses del año, así como una caída pronunciada de la inflación. La fuerte
devaluación de las monedas de América Latina registrada al principio de 2009
se ha corregido en un contexto de debilitamiento del dólar y menor percepción
de riesgo de los países emergentes.
En Colombia, la crisis internacional se ha transmitido principalmente
por el deterioro en las expectativas de los consumidores y productores y de
una menor dinámica de las exportaciones y remesas. Aunque la debilidad de la
actividad económica se mantiene, las expectativas de los empresarios y
consumidores revelan signos de recuperación para el segundo semestre. El
crédito sigue creciendo a buen ritmo, impulsado especialmente por la cartera
comercial, y el sistema financiero sigue mostrando un comportamiento
saludable. La Junta Directiva espera que las tasas de interés de préstamos para
las empresas y las familias continúen cayendo.
Algunos directores indicaron su preferencia por mantener inalterada o
disminuir 25 pb la tasa de interés de intervención, a partir de las siguientes
consideraciones. La economía colombiana no sufre de una crisis financiera
que justifique, como en otros países, medidas extremas de política y tasas de
interés anormalmente bajas. Por otro lado, dado el importante peso que
factores externos tienen en la explicación de la desaceleración del crecimiento
en el país, menores tasas de interés probablemente no tengan un efecto
positivo importante sobre la actividad productiva. Adicionalmente, las
expectativas de inflación de mediano y largo plazo registraron en el último
8
mes un incremento que, de ser persistente, exigiría una reacción de política
monetaria.
Otros directores indicaron su preferencia por una disminución de 50 pb
en la tasa de interés de intervención y comunicar que, con la información
disponible, no se esperan modificaciones a la tasa de interés en el futuro
cercano. Esto último teniendo en cuenta los efectos rezagados de una
reducción acumulada de 550 pb en la tasa de intervención sobre el
crecimiento económico en lo que resta del año y el 2010; el comportamiento
reciente de las expectativas de inflación de mediano y largo plazo y el hecho
de que parte de la reducción de la inflación es el resultado de un choque
temporal en los precios de los alimentos.
Los directores coincidieron en que la fuerte expansión monetaria, la
menor variación en los precios de los alimentos y regulados, un ambiente
externo menos negativo y un mayor dinamismo en las obras civiles permiten
esperar una recuperación gradual del crecimiento económico a partir del
segundo semestre del año. Así mismo, en que la postura de la política
monetaria permite la consolidación de la reducción de la inflación hacia sus
metas de largo plazo.
Dado lo anterior, los miembros de la Junta decidieron reducir en 50 pb
la tasa de intervención del Banco de la República, pasando a 4,5%.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva acordó reducir en 50 pb las tasas de interés de
intervención del Banco de la República y comunicar que, con la información
disponible hasta el momento, no se esperan modificaciones en la tasa de
interés de intervención en el futuro cercano. De esta manera la tasa de interés
de intervención del Banco será de 4,5%.
Bogotá D. C., julio 03 de 2009.
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2009-07-01 |
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
24 de Julio de 2009
El 24 de Julio de 2009 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión
ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del
Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente
General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos
Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan
Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de
crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas
con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los
principales temas tratados en dicha reunión.
1. ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor en junio se situó en 3,81% cayendo
por octavo mes consecutivo. En lo corrido del año hasta junio se acumuló una
inflación de 2,22%, muy por debajo del mismo registro del año pasado
(6,02%). Los indicadores de inflación básica continuaron disminuyendo.
La variación anual de los precios de los alimentos cayó de 5,5% en
mayo a 2,8% en junio, principalmente por los precios de los alimentos
perecederos y, en menor medida, por los cereales, aceites y otros alimentos
importados.
El incremento anual de precios de los bienes regulados disminuyó de
6,5% en mayo a 5,9% en junio, debido al comportamiento de los
combustibles.
La variación anual de los precios de los bienes no transables sin
alimentos ni regulados se mantuvo en 4,7% en junio. A diferencia del mes
anterior, la mayor presión alcista la ejercieron los rubros con baja indexación
(4,2%). La variación anual de precios de los rubros de alta indexación
2
continuó cayendo lentamente, pero se mantiene en niveles superiores al 7%.
El rubro de arrendamientos, por su parte, completó cuatro meses de caídas
consecutivas y se situó en 4,5%.
El aumento anual de precios de bienes transables sin alimentos ni
regulados fue de 2,78%, ligeramente menor al 2,84% de mayo.
Los indicadores de las expectativas de inflación obtenidas de los TES se
ubican por debajo del punto medio de la meta de inflación para este año: entre
1,55% (TES negociados a un año) y 4,1% (TES a 10 años). Sin embargo, las
de TES a 10 años se encuentran por encima de la meta de largo plazo
anunciada por la Junta (2% - 4%).
La variación anual de los precios al productor (IPP) disminuyó de 5,3%
en mayo a 2,7% en junio.
b. Crecimiento
Según el DANE, el crecimiento del PIB en el primer trimestre de 2009
frente al mismo periodo del año anterior, fue de -0,6%. La contracción
obedeció a la caída de la demanda interna (-0,5%) y de las exportaciones en
pesos reales (-0,5%). Dado que las importaciones cayeron en una magnitud
similar (en pesos reales, -0,5%), la demanda externa neta se contrajo menos (-
0,4%) y su contribución al retroceso del PIB fue muy pequeña.
En cuanto a la demanda interna, la inversión en obras civiles fue el
componente más dinámico, en tanto que el resto del gasto en inversión, que en
buena parte corresponde a inversión privada, fue el que más cayó. El consumo
de los hogares, por su parte, presentó un crecimiento anual ligeramente
negativo (-0,5%), mientras que el consumo público se expandió 0,2%.
Por el lado de la oferta, los sectores con desempeño más pobre durante
el primer trimestre fueron industria (-7,9%), construcción de edificaciones (-
14,1%) y comercio (-2,7%). Sus caídas contrastan con una expansión
significativa en los sectores de construcción de obras civiles (21,2%),
financiero (4,7%) y de minería (10,6%).
Lo anterior ratifica que, al igual que sucede con otras economías de la
región, la contracción del PIB en Colombia desde el cuarto trimestre del año
pasado está relacionada con la crisis externa. El colapso del comercio
3
mundial ha afectado el desempeño de las exportaciones, especialmente de las
no tradicionales dirigidas a EE.UU. y a otros países diferentes de Ecuador y
Venezuela, las cuales se resintieron fuertemente desde el cuarto trimestre del
año pasado (en dólares y en volumen).
La información disponible muestra que aunque se mantiene la debilidad
de la actividad económica interna, las expectativas de los empresarios y
consumidores revelan signos de recuperación:
-
Los datos del DANE para producción industrial a mayo muestran una
caída anual de 6,5%. El crecimiento anual para el acumulado de los cinco
primeros meses fue de -8,8%, levemente mejor que el registrado en los
primeros cuatro meses del año (-9,3%).
-
La Encuesta de Opinión Empresarial –EOE- de Fedesarrollo para la
industria no muestra en mayo un mayor deterioro pero tampoco una
recuperación clara de la actividad empresarial.
-
Las ventas anuales al por menor en abril según el DANE cayeron 3,5%,
registro mejor que el del mes anterior (-7,1%). Este indicador sigue afectado,
principalmente, por la fuerte caída en las ventas de vehículos. Cuando se
excluyen éstos, el índice de ventas alcanza a crecer 0,3% anual en mayo. En
los 5 primeros meses, las ventas totales al por menor completaron una caída
anual de 5,2%.
-
La demanda de energía total, creció 0,8% en junio frente a 1,6% en
mayo. Para el total del segundo trimestre su crecimiento anual fue de 0,3%,
menor que el observado en el primer trimestre (0,8%).
-
El Indicador de Confianza del Consumidor de Fedesarrollo en mayo
mejoró por segundo mes consecutivo, luego de haber alcanzado el menor
nivel en abril.
La balanza comercial en lo corrido del año a mayo fue superavitaria en
US$300 m, inferior en US$448 m a lo registrado un año atrás. Esto se debió a
una caída de las exportaciones de 17,7%, superior a la de las importaciones
(-15,5%).
El total de exportaciones en lo corrido del año hasta mayo fue de
US$2.719 m frente al mismo período del año anterior. Dicho comportamiento
4
estuvo explicado, principalmente, por las menores ventas de petróleo y
derivados al mercado de Estados Unidos. Las ventas a dicho mercado a mayo,
que representan el 33% de las totales cayeron 27,5%. Las exportaciones con
destino a Venezuela, que representan el 18% de las exportaciones totales, se
redujeron en 0,8%. Por otro lado, las exportaciones industriales a Estados
Unidos cayeron 31,7% durante los primeros meses del año frente a igual
período de 2008. De igual manera, las exportaciones industriales a Venezuela
cayeron 17% en esos mismos meses, en particular debido a las menores
ventas de confecciones, vehículos, cueros y muebles.
Entre enero y mayo, las importaciones FOB totalizaron US$12.383 m y
disminuyeron anualmente 15,5%. En términos CIF, éstas sumaron US$13.088
m y cayeron 16,3%. La disminución más importante en las compras totales se
presentó en los bienes intermedios y materias primas adquiridos en Estados
Unidos, en especial de productos mineros y farmacéuticos.
De acuerdo con la gran encuesta integrada de hogares (GEIH), el
empleo creció entre enero y mayo de 2009 a una tasa promedio del 2,1% en el
total nacional, y de 1,5% en las 13 áreas metropolitanas. Sin embargo, la
oferta laboral (TGP) aumentó a un mayor ritmo, probablemente como
consecuencia de un deterioro de los ingresos de los hogares. Esto condujo a un
aumento de la tasa de desempleo que se ubicó en el trimestre móvil terminado
en mayo en 11,9% en el total nacional y 12,9% en las 13 áreas. Estos
incrementos anuales son similares a los que se observaron en el trimestre
móvil terminado en marzo.
c. Contexto externo
Si bien en el segundo trimestre la economía mundial continuó
contrayéndose, algunos indicadores de confianza, de crédito, de ganancias de
las empresas y de inventarios y pedidos en las economías industriales
permiten ser más optimistas con respecto al fin de la recesión. La Reserva
Federal incrementó las estimaciones de crecimiento de EE.UU. y en Europa
las expectativas de aumento del PIB real del presente y siguiente año no han
cambiado significativamente.
El comercio externo de algunas economías asiáticas (China e India)
muestra señales de recuperación, mientras que los precios de los productos
básicos se mantienen en niveles cercanos a los registrados en 2007. Todo lo
5
anterior hace esperar una recuperación del crecimiento de la economía en el
mundo durante 2010.
Las primas de riesgo de varios países de la región se han reducido y de
nuevo se ha registrado una apreciación de las principales monedas frente al
dólar, situación a la cual no ha sido ajena Colombia.
De todos modos, persiste preocupación en varias economías desarrolladas
respecto a: i) el ingreso de los consumidores que podría disminuir si se da un
incremento de la inflación debido a un aumento en los precios de la energía;
ii) la debilidad de las industrias de bienes de capital y de bienes durables
(automóviles) y de la actividad de la construcción; y iii) el fuerte
endeudamiento de los bancos, las grandes empresas multinacionales, los
hogares y el sector público.
d. Variables financieras
El comportamiento de los agregados monetarios ha estado afectado en
el último mes y medio por una recomposición en la captación de depósitos lo
que ha conducido a una aceleración en el ritmo de crecimiento de la reserva
bancaria desde una tasa anual de 16% en mayo a una de 21,9% en junio. Por
consiguiente, la base monetaria también registró un aumento en su ritmo de
crecimiento (a 14,7% en junio). En el agregado monetario más amplio (M3),
sin embargo, no se observó cambios importantes en su tendencia y su tasa de
crecimiento anual al cierre del semestre fue de 16%.
Para julio y agosto se espera que se presente un aumento en la liquidez
permanente en el mercado como efecto de la redención de TES de $6
billones. Lo anterior, eventualmente hará que el Banco de la República sea
deudor neto de manera temporal.
El crecimiento de la cartera comercial al 15 de julio fue de 18,5% en
términos nominales, disminuyendo frente al presentado en mayo y junio. Por
su parte, la cartera de consumo se desaceleró y a comienzos de julio presentó
una tasa de crecimiento de 2,8% nominal. La cartera hipotecaria también
disminuyó ligeramente su ritmo de crecimiento en junio (13,7%). Dado lo
anterior, la cartera total en pesos del sistema financiero creció a una tasa de
14% a mediados de julio frente a 15,5% a finales de mayo.
6
A mayo. la tasa anual de crecimiento del endeudamiento externo del
sector privado, es decir, aquella contratada con entidades financieras del
exterior, fue de -3,5%. En junio, la cartera en moneda extranjera del sistema
financiero siguió cayendo.
A junio las tasas de interés pasivas siguieron disminuyendo, mientras
que en julio se frenó el descenso que traía la tasa DTF (5,7%). Por su parte, las
tasas de crédito preferencial y de constructores siguieron descendiendo. En
este contexto, las tasas reales han seguido cayendo y en junio todas se
encontraban por debajo de sus promedios históricos (calculados desde 1986 o
desde 2001). Las tasas más bajas frente a estos promedios eran las de DTF y
crédito ordinario.
La curva de los TES registró un movimiento a la baja de 95 pb, 45pb y
40 pb en el tramo corto, medio y largo, respectivamente. La curva presentó un
aplanamiento en el tramo medio y largo, mientras se empinó en la de corto
plazo.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el
ritmo de crecimiento de los precios y su tendencia sostenida a la baja; (ii) la
continua caída en el crecimiento anual del precio de los alimentos; (iii) el
efecto sobre la inflación total que podrían provocar los precios internacionales
de los alimentos, las materias primas y el petróleo, dependiendo del
comportamiento de la tasa de cambio; (iv) la mejora en la confianza de
productores y consumidores a pesar de la debilidad de la actividad económica;
(v) la cartera del sistema financiero en moneda legal que continua creciendo
por encima del PIB nominal, aunque a un ritmo menor al de otros meses,
impulsada por la cartera comercial y, en menor medida, por la hipotecaria; (vi)
la rápida disminución de la mayoría de las tasas de interés del mercado en
respuesta a la baja de la tasa de referencia del Banco; (vii) el crecimiento
negativo de los Estados Unidos y el menor crecimiento de Venezuela, Ecuador
y otros socios comerciales; (viii) el efecto de la tasa de cambio sobre la
inflación y el crecimiento de los sectores transables; (ix) el comportamiento a
la baja de las tasas de interés de los títulos de deuda pública; y (x) el
comportamiento de las expectativas de inflación de mediano y largo plazo.
Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se
centraron en los siguientes aspectos: (i) los elementos que afectan las
7
proyecciones de inflación para 2009 y 2010, en especial un eventual repunte
en los precios de los alimentos; (ii) el efecto rezagado de las medidas de
política monetaria sobre la producción y los precios; (iii) la incertidumbre
generada por la crisis financiera mundial en los mercados internacionales y su
incidencia en la economía colombiana; (iv) el acceso de la región al
financiamiento externo, los flujos de inversión directa y las causas de la baja
dinámica de la cartera del sistema financiero; (v) el balance de riesgos entre
crecimiento e inflación en un contexto de desaceleración de la economía y
caída de la inflación; (vi) la pertinencia de continuar reduciendo la tasa de
intervención ante la última información disponible; (vii) el comportamiento de
la tasa de cambio en las últimas semanas; y (viii) la necesidad de fortalecer la
credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación
alrededor de la meta de largo plazo.
Los miembros de la Junta destacaron la caída de la inflación anual al
consumidor (3,81%) por octavo mes consecutivo. Este descenso, mayor al
esperado, se presentó nuevamente en los precios de los alimentos y los bienes
regulados. Los indicadores de inflación básica continuaron disminuyendo y las
expectativas de inflación de mediano y largo plazo se sitúan cerca del límite
superior del rango meta de largo plazo fijado por la Junta (3%+/- un punto
porcentual).
El comportamiento de los precios indica que la debilidad de la demanda
interna y externa, las menores expectativas de inflación y la caída en los
precios de los productos básicos frente al nivel máximo alcanzado en 2008, se
están reflejando en menores presiones inflacionarias. La Junta prevé que la
inflación anual termine el año por debajo del límite inferior del rango meta
(4,5%).
La economía mundial se está estabilizando. Algunos indicadores
económicos de Estados Unidos sugieren un quiebre en la tendencia negativa
del crecimiento del producto en ese país. Las condiciones económicas en
Europa todavía se están debilitando. El crecimiento de China se ha fortalecido
considerablemente con impacto favorable sobre los precios de los productos
básicos y las economías asiáticas. La mayoría de economías de América
Latina continúan mostrando una reducción moderada en su crecimiento y una
caída de la inflación.
Las primas de riesgo de varios países de América Latina se han
reducido y de nuevo se ha registrado una apreciación de las principales
8
monedas de la región frente al dólar. El peso colombiano no ha sido ajeno a
esta situación y se ha fortalecido más de lo esperado, impulsado además por la
colocación exitosa de bonos de empresas colombianas en el mercado
internacional para financiar proyectos de inversión. La Junta Directiva es
conciente de los riesgos asociados a la apreciación del peso en un ambiente de
demanda externa débil, y continuará revisando cuidadosamente la situación
del mercado cambiario.
En Colombia, la nueva información disponible sigue mostrando mejoras
en los indicadores de opinión y confianza de las empresas y de los
consumidores para el segundo semestre. Las exportaciones y las
importaciones en dólares registran tasas anuales negativas de crecimiento, y
los términos de intercambio se encuentran en niveles cercanos a los
registrados a mediados de 2007. Así mismo, las remesas del exterior han
venido cayendo a lo largo del año.
Gracias a la disminución de la tasa de intervención del Banco de la
República, las tasas activas y pasivas han caído persistentemente. La Junta
Directiva espera que esta disminución continúe y estimule el crecimiento
económico. El sistema financiero muestra un comportamiento saludable.
Algunos directores indicaron su preferencia por mantener inalterada la
tasa de interés de intervención, a partir de las siguientes consideraciones: (i) la
fuerte expansión monetaria, la menor variación en los precios de los alimentos
y regulados, un ambiente externo menos negativo y un mayor dinamismo en
las obras civiles permiten esperar una recuperación gradual del crecimiento
económico a partir del segundo semestre del año; (ii) el descenso de la
inflación al consumidor durante lo corrido del año obedece, en parte, a
factores temporales que pueden revertirse en el futuro; (iii) el importante peso
de factores externos en la explicación de la desaceleración del crecimiento en
el país, hace probable que menores tasas de interés no tengan un efecto
positivo importante sobre la actividad productiva; (iv) la economía
colombiana no sufre de una crisis financiera que justifique, como en otros
países, medidas extremas de política y tasas de interés anormalmente bajas;
(v) las cifras de crecimiento de cartera sugieren que su dinámica no está
afectada por problemas de liquidez sino en la insuficiente demanda de crédito.
En opinión de los directores, la actual postura de la política monetaria permite
la consolidación de la reducción de la inflación hacia sus metas de largo plazo.
9
Otro de los directores pidió evaluar el impacto de las distintas
modalidades de intervención cambiaria y propuso una reducción de 50 puntos
básicos de la tasa de interés de intervención del Banco. Lo anterior teniendo
en cuenta los siguientes hechos sobrevinientes: (i) una brecha del producto
crecientemente negativa, reflejada en la continuación del deterioro de la
economía y del aumento del desempleo; (ii) los crecientes riesgos de índole
comercial para Colombia de parte de Venezuela y Ecuador; (iii) la acentuada
revaluación del peso, una de las más altas de la región y superior a la de
nuestros principales competidores y; (iv) un índice de inflación a junio que es
el más bajo de los últimos 47 años, y que seguirá reduciéndose en los
siguientes meses hasta hallarse al final de 2009 muy por debajo de límite
interior del rango meta.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva acordó por mayoría mantener inalterada la tasa de
intervención del Banco de la República. De esta manera, la tasa de interés de
intervención del Banco será de 4,5%.
Bogotá D. C., agosto 06 de 2009.
|
2009-08-01 |
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
28 de Agosto de 2009
El 28 de Agosto de 2009 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión
ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del
Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente
General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos
Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan
Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de
crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas
con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los
principales temas tratados en dicha reunión.
1. ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor en julio se situó en 3,28% cayendo
por noveno mes consecutivo. En lo corrido del año hasta julio se acumuló una
inflación de 2,18%, muy por debajo del mismo registro del año pasado
(6,53%). Los indicadores de inflación básica continuaron disminuyendo.
La variación anual de los precios de los alimentos cayó de 2,8% en
junio a 1,58% en julio, principalmente por los precios de los alimentos
perecederos.
El incremento anual de precios de los bienes regulados disminuyó de
5,9% en junio a 4,7% en julio, debido al comportamiento de los combustibles.
La variación anual de los precios de los bienes no transables sin
alimentos ni regulados se ubicó en 4,68% en julio, cifra similar a la de junio.
Lo anterior, fundamentalmente por los rubros con baja indexación y los
arriendos. La variación anual de precios de los rubros de alta indexación
2
mantuvo niveles superiores al 7%. El rubro de arrendamientos, por su parte,
completó cinco meses de caídas consecutivas y se situó en 4,43%.
El aumento anual de precios de bienes transables sin alimentos ni
regulados pasó de 2,78% en junio a 3,0% en julio.
Los indicadores de las expectativas de inflación obtenidas de los TES se
encuentran por debajo del punto medio de la meta de inflación para este año:
entre 1,46% (TES negociados a un año) y 4,37 % (TES a 10 años). Sin
embargo, las de TES a 10 años están por encima de la meta de largo plazo
anunciada por la Junta (2% - 4%).
La variación anual de los precios al productor (IPP) disminuyó de 2,7%
en junio a 1,4% en julio.
b. Crecimiento
La información disponible sugiere que la actividad económica en el
segundo trimestre mostró una contracción anual cercana a la observada en el
primero, en línea con lo proyectado por el equipo técnico del Banco. Al igual
que en el mes pasado, las expectativas de los empresarios y consumidores
revelan signos de recuperación:
-
Los datos del DANE para producción industrial a junio muestran una
caída anual de 6,6%. Para el segundo trimestre, la caída anual fue de 9,4%
mayor que la registrada en el primer semestre de 7,4%.
-
La Encuesta de Opinión Empresarial –EOE- de Fedesarrollo para la
industria muestra que la actividad continúa débil. Sin embargo, la confianza
de los industriales se siguió recuperando por mayores expectativas de
producción en los próximos tres meses.
-
Las ventas anuales al por menor en abril según el DANE cayeron 4,5%,
registro peor que el del mes anterior (-3,5%) pero mejor que el observado en
lo corrido del año. En los 6 primeros meses, las ventas totales al por menor
completaron una caída anual de 5,1%, tasa similar a la observada en el
trimestre anterior (-5,3%)
-
La encuesta de Fenalco en julio continúa reflejando una contracción en
las ventas, pero con expectativas a seis meses al alza.
3
-
La demanda de energía no regulada cayó en julio a una tasa anual de
1,0%, cuando se corrige por días hábiles el crecimiento fue de 3,0%.
-
El Indicador de Confianza del Consumidor de Fedesarrollo en junio
mejoró por tercer mes consecutivo y se situó por encima de los promedios del
primer y segundo trimestre del año.
-
Las licencias de construcción para el mes de junio, tanto las dirigidas a
vivienda como a otros destinos, siguieron con caídas anuales, superiores al
20%. La producción de cemento registró una caída anual en ese mismo mes de
15%. A pesar de la fuerte contracción en el mes, el crecimiento anual de este
indicador en el segundo trimestre (-14,2%) fue mejor que el del primero (-
17,5%).
En lo corrido del año a julio, el promedio de los términos de
intercambio ha sido superior que el de los años anteriores. Desde marzo, los
precios de los bienes exportados en dólares han aumentado a un mayor ritmo
que los precios de los bienes que se importan. Para lo que resta del año, es
factible que dicha tendencia continúe. Por otra parte, los niveles de
exportación e importación acumulados en el primer semestre de 2009 han sido
menores a los registrados en el mismo periodo de 2008, pero superiores a los
observados entre enero y junio de 2007.
Entre enero y junio de 2009, las exportaciones totales en dólares se
redujeron 19,1% respecto al mismo período de 2008, con una contracción de
las tradicionales de 23,2% y de las no tradicionales de 15,0%. El descenso en
el valor exportado de las tradicionales (US$2.690m) estuvo explicado
principalmente por café (-22,5%), crudo y derivados (-40,0%) y ferroníquel (-
39,4%). En el caso del café, su caída obedeció al menor volumen exportado,
mientras que para los otros productos el descenso obedeció principalmente a
menores precios. La mayor desaceleración del valor de las exportaciones
tradicionales se originó en el mercado de EE.UU.
En lo corrido del año a junio las exportaciones no tradicionales en
dólares hacia Venezuela, que representan el 36% del total no tradicional,
registraron un descenso de 4 %, que se explica por una caída de las ventas del
sector industrial de 13,6%. Por otra parte, las ventas a Estados Unidos, que
representan el 17% del total de las exportaciones no tradicionales (sin oro),
disminuyeron 25,6%.
4
Entre enero y junio de 2009 las importaciones (CIF) ascendieron a
US$15.574 m, disminuyendo anualmente 17,7%. La caída más importante fue
registrada por las importaciones de bienes intermedios (28,3%), en particular
las provenientes de los Estados Unidos. La reducción de las importaciones
totales también se presentó en los bienes de consumo y los bienes de capital (-
13,1% y -7,3%, respectivamente). En volúmenes, todas las importaciones
exhibieron caídas.
En el primer semestre de 2009 las remesas en dólares cayeron 10%
anual.
c. Contexto externo
Los resultados de las principales economías desarrolladas han llevado a
que los analistas esperen una recuperación mundial lenta en el segundo
semestre de 2009 y en el 2010 superior al proyectado. Esta mejora en el
crecimiento permitió que los precios internacionales de los productos básicos
siguieran con su fase de recuperación iniciada tres meses atrás.
En las economías emergentes las señales son mixtas. China, India y
Corea muestran mejores indicadores de producción, comercio interno y
exportación. Sin embargo, México y Chile registraron una gran contracción en
su actividad económica en el segundo trimestre. Para el resto de economías de
la región, las expectativas del mercado sugieren una reducción menos
marcada.
En EE. UU., la zona Euro y el Reino Unido, las restricciones de crédito
podrían retardar la recuperación y reducir la eficacia de los estímulos
macroeconómicos. A esto se agrega una tasa de desempleo que continúa
aumentando. En estas condiciones, la recuperación del consumo puede verse
afectada, a pesar de la reducción de la inflación.
d. Variables financieras
La base monetaria y M3 siguió creciendo a tasas cercanas a tres veces el
aumento del PIB nominal estimado para 2009.
La variación anual en agosto 7 de la cartera en moneda legal se situó en
11,8%, como resultado de la desaceleración de la cartera comercial, que para
5
las mismas fechas pasó de crecer 20,6% a 15,3%. Estos menores niveles de
cartera comercial han sido compensados en parte por mayores colocaciones de
deuda del sector privado. A junio de 2009, la suma de los saldos de bonos del
sector real ($ 10,2 b) y de la cartera comercial crecía 19,1% en términos
anuales. En julio, la cartera comercial cayó $ 1 b, mientras que la emisión de
bonos del sector real aumentó $ 0,5 b. En los días transcurridos de agosto, las
nuevas emisiones de deuda del sector real ya superaron el billón de pesos.
En julio la cartera de consumo continuó con crecimientos bajos (1,8%
anual) y la hipotecaria se estabilizó en aumentos cercanos a 12,5% anual. Sin
embargo, los crecimientos anualizados de las últimas trece semanas sugieren
que ambas modalidades están en una fase de recuperación.
Las tasas de interés pasivas y activas de mercado continuaron
descendiendo. Al 14 de agosto, la DTF se situó en 5,04%, cifra inferior en 28
pb a la registrada un mes atrás y menor en 515 pb que el registro del 19 de
diciembre de 2008. En cuanto a las tasas de interés activas, el descenso se ha
dado con mayor intensidad en las de créditos a las empresas, grupo en el cual
sus modalidades (tesorería, preferencial, ordinario y construcción) han
presentado desde diciembre de 2008, caídas en las tasas de interés cercanas a
550 pb.
En la primera semana de agosto, la tasa de interés de créditos de
consumo e hipotecarios se situaron en 22,4% y 14,7% respectivamente, cifras
inferiores en su orden en 39 pb y 23 pb a las del mes pasado y menores en 344
pb y 265 pb que las registradas el pasado 19 de diciembre .
En términos reales, las tasas de interés promedio activas y pasivas se
situaron cerca de sus mínimos históricos de la última década.
La curva de los TES registró un movimiento al alza de 25 pb, 38 pb y
73 pb en el tramo corto, medio y largo, respectivamente. La curva presentó un
empinamiento, reflejado en la diferencia entre el tramo largo y el tramo corto.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el
ritmo de crecimiento de los precios y su tendencia sostenida a la baja; (ii) la
continua caída en el crecimiento anual del precio de los alimentos; (iii) el
efecto sobre la inflación total que podrían provocar los precios internacionales
6
de los alimentos, las materias primas y el petróleo, dependiendo del
comportamiento de la tasa de cambio; (iv) la continua mejora en la confianza
de productores y consumidores a pesar de la debilidad de la actividad
económica; (v) la cartera del sistema financiero en moneda legal que sigue
creciendo por encima del PIB nominal, aunque en las últimas semanas
presentó una desaceleración; (vi) las importantes emisiones de bonos que han
complementado la financiación del sector real; (vii) la rápida disminución de
la mayoría de las tasas de interés del mercado en respuesta a la baja de la tasa
de referencia del Banco; (viii) el comportamiento del mercado interbancario
de crédito; (ix) el crecimiento negativo de los Estados Unidos y el menor
crecimiento de Venezuela, Ecuador y otros socios comerciales; (x) el efecto de
la tasa de cambio sobre la inflación y el crecimiento de los sectores transables;
(xi) el comportamiento de las tasas de interés de los títulos de deuda pública; y
(xii) el comportamiento de las expectativas de inflación de mediano y largo
plazo.
Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se
centraron en los siguientes aspectos: (i) los elementos que afectan las
proyecciones de inflación para 2009 y 2010, en especial un eventual repunte
en los precios de los alimentos; (ii) el efecto rezagado de las medidas de
política monetaria sobre la producción y los precios; (iii) la incertidumbre
generada por la crisis financiera mundial en los mercados internacionales y su
incidencia en la economía colombiana; (iv) el acceso de la región al
financiamiento externo, los flujos de inversión directa y las causas de la
reciente baja dinámica de la cartera comercial del sistema financiero; (v) el
balance de riesgos entre crecimiento e inflación en un contexto de
desaceleración de la economía y caída de la inflación; (vi) la pertinencia de
continuar reduciendo la tasa de intervención ante la última información
disponible; (vii) el comportamiento de la tasa de cambio en las últimas
semanas; y (viii) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad
monetaria y anclar las expectativas de inflación alrededor de la meta de largo
plazo.
Los miembros de la Junta destacaron la caída de la inflación anual al
consumidor por noveno mes consecutivo que se ubicó en julio en 3,28%. Este
descenso se presentó nuevamente en los precios de los alimentos y los bienes
regulados mientras que los indicadores de inflación básica continuaron
disminuyendo.
7
Estas menores presiones inflacionarias continúan como resultado de
varios factores tales como: la debilidad de las demandas interna y externa, las
menores expectativas de inflación que se sitúan cerca del límite superior del
rango meta de largo plazo fijado por la junta (entre 2% y 4%) y la disminución
en los precios de los productos básicos frente al nivel máximo alcanzado en
2008. En consecuencia, la Junta prevé que la inflación anual termine el año
por debajo del límite inferior del rango meta (4,5%).
La economía mundial se está estabilizando. Se espera una lenta
recuperación económica en el segundo semestre y han mejorado las
proyecciones de crecimiento para 2010. La mayoría de economías de
América Latina continúan mostrando una reducción moderada en su
crecimiento y una caída de la inflación.
Gracias a la disminución de la tasa de intervención del Banco de la
República y a la menor demanda de crédito, las tasas de interés de captación y
colocación han descendido persistentemente. La Junta Directiva espera que
esta disminución continúe y estimule el crecimiento económico. Por su parte,
el sistema financiero presenta un comportamiento saludable y se destacan las
grandes emisiones de bonos por parte del sector real que han complementado
el crédito otorgado por el sector financiero.
A lo anterior se suma que los indicadores de opinión y confianza de las
empresas y los consumidores siguen mostrando mejoras para el segundo
semestre. Por otra parte, los últimos resultados de la industria, comercio y la
construcción se encuentran en línea con las proyecciones de crecimiento
realizadas por el equipo técnico para fin de año.
Algunos directores indicaron su preferencia por mantener inalterada la
tasa de interés de intervención, a partir de las siguientes consideraciones: (i) la
postura de la política monetaria es expansionista; (ii) la economía colombiana
no sufre de una crisis financiera que justifique, como en otros países, medidas
extremas de política y tasas de interés nominales anormalmente bajas (iii)
parte del descenso de la inflación al consumidor, en particular la caída de la
variación anual de los alimentos, puede tener elementos temporales; (iv) el
importante peso de factores externos en la explicación de la desaceleración del
crecimiento en el país, hace probable que menores tasas de interés no tengan
un efecto positivo importante sobre la actividad productiva; (v) las cifras de
crecimiento de cartera sugieren que su comportamiento no está afectada por
problemas de liquidez sino por la baja dinámica del mercado crediticio; y (vi)
8
la actual postura de la política monetaria hace compatible la estabilidad de las
tasas de interés con la consolidación de la reducción de la inflación hacia sus
metas de largo plazo.
Otros directores propusieron una reducción de 25 o 50 puntos básicos
de la tasa de interés de intervención del Banco. Lo anterior teniendo en cuenta
que las proyecciones de inflación para este año muestran que ésta se situará
por debajo del límite inferior del rango meta para el 2009, mientras que para el
2010 tendrá una caída superior a la prevista inicialmente. Uno de estos
directores enfatizó que la medida se justifica también en que: (i) hay una
brecha del producto crecientemente negativa, reflejada en la continuación del
deterioro de la economía y del aumento del desempleo; (ii) los crecientes
riesgos de índole comercial para Colombia de parte de Venezuela y Ecuador;
y (iii) la acentuada revaluación del peso, una de las más altas de la región y
superior a la de nuestros principales competidores.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva acordó por mayoría mantener inalterada la tasa de
intervención del Banco de la República De esta manera la tasa de interés de
intervención del Banco será de 4,5%.
Bogotá D. C., septiembre 11de 2009.
|
2009-09-01 |
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
25 de Septiembre de 2009
El 25 de Septiembre de 2009 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión
ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del
Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente
General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos
Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan
Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de
crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas
con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los
principales temas tratados en dicha reunión.
1. ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor en agosto se situó en 3,13%, cayendo
por décimo mes consecutivo. En lo corrido del año hasta agosto se acumuló
una inflación de 2,23%, muy por debajo del mismo registro del año pasado
(6,74%). Los indicadores de inflación básica continuaron disminuyendo.
La variación anual de los precios de los alimentos cayó de 1,5% en
julio a 1,46% en agosto.
El incremento anual de precios de los bienes regulados disminuyó de
4,7% en julio a 3,5% en agosto, debido al comportamiento de todos sus
componentes (combustibles, servicios públicos y transporte)
La variación anual de los precios de los bienes no transables sin
alimentos ni regulados subió de 4,7% en julio a 4,9% en agosto. Los rubros
con baja indexación y los arriendos pasaron de 4,4% a 4,6%. La variación
anual de precios de los rubros de alta indexación se mantuvo en niveles del
7%.
2
El aumento anual de precios de bienes transables sin alimentos ni
regulados cayó de 3% en junio a 2,8% en agosto.
Los indicadores de las expectativas de inflación obtenidas de los TES
aumentaron y se encuentran entre 2,4% (TES negociados a un año) y 4,58 %
(TES a 10 años), este último por encima de la meta de largo plazo anunciada
por la Junta (2% - 4%).
La variación anual de los precios al productor (IPP) disminuyó de
1,4% en julio a 1% en agosto.
b. Crecimiento
El crecimiento anual del PIB para el segundo trimestre del año fue -
0,5%. Comparado con el primer trimestre, el segundo registró un aumento de
0,7%.
La contracción anual del segundo trimestre obedeció principalmente a
una caída de la demanda interna (de 2,1% anual). Las exportaciones netas en
pesos reales (exportaciones menos importaciones) tuvieron una contribución
positiva.
La inversión en obras civiles fue el componente más dinámico de la
demanda interna (crecimiento anual de 40,6%), en tanto que la inversión en
maquinaria y equipo disminuyó (-18,4%). El consumo de los hogares cayó
más que en el primer trimestre por efecto del consumo de bienes durables (-
7,2%) y no durables (- 2,0%). El consumo público se expandió 0,9%.
Los sectores que más contribuyeron al crecimiento anual del PIB
del segundo trimestre fueron el financiero (4,3%), la minería (10,2%) y la
construcción de obras civiles (40,5%). La industria fue el sector que más se
contrajo (-10,2%) completando un año de crecimientos anuales negativos
consecutivos. Otros sectores que contribuyeron a la caída del PIB fueron
comercio (cuya variación anual fue -3,9%), construcción de edificaciones (-
9,9%) y, en menor medida, transporte (-1,2%) y agricultura (-1,8%).
En cuanto al tercer trimestre, los indicadores sectoriales disponibles
muestran lo siguiente:
3
-
Los datos del DANE para producción industrial a julio indican una
caída anual de 6,5%, asociada de manera importante con el subsector de hierro
y acero.
-
La Encuesta de Opinión Empresarial –EOE- de Fedesarrollo para la
industria muestra que la actividad continúa débil. Sin embargo, la confianza
de los industriales se siguió recuperando por mayores expectativas de
producción en los próximos tres meses.
-
Las ventas anuales al por menor en julio según el DANE cayeron 3,7%
frente a una disminución de 4,5% del mes anterior.
-
La encuesta de Fenalco en agosto continúa reflejando una contracción
en las ventas, pero con expectativas a seis meses al alza.
-
La demanda de energía no regulada creció en agosto a una tasa anual de
1%.
-
El Indicador de Confianza del Consumidor de Fedesarrollo en agosto
mejoró por cuarto mes consecutivo y se situó en niveles similares a los
observados a finales de 2008 y comienzos de 2009.
-
Las licencias de construcción para el mes de agosto, tanto las dirigidas a
vivienda como a otros destinos, siguieron con caídas anuales superiores al
25%. La producción de cemento registró una caída anual en ese mismo mes de
12,5%. Sin embargo, la contracción de este indicador es menor que la del
primer y segundo trimestres (17,4% y 14,2%, respectivamente).
Las exportaciones totales a julio cayeron 10% anual en el acumulado
de doce meses. Aunque en lo corrido del año (enero-julio) disminuyeron
19,2% anual, los niveles son superiores a los del mismo período de 2007. Para
este mismo lapso de tiempo (enero-julio), el valor de las exportaciones en
dólares de todos los sectores (agropecuario, minero e industrial) cayó en
términos anuales, mientras que en volúmenes los sectores agropecuario y
minero registraron crecimientos anuales. La mayor caída por nuestras
exportaciones se presentó en el mercado de Estados Unidos.
En el acumulado de doce meses, las importaciones totales a julio de
2009 cayeron 3,2 % (en términos anuales) y en lo corrido del año (enero-julio)
16,2% (anual). Esto último por las importaciones de bienes intermedios (-
4
27%). El valor en dólares de las importaciones totales en el mes de julio
(US$3,178m) fue mayor al del mes anterior (US$2,486m) pero menor al
observado en julio de 2008 (US$3,447m).
El valor de las exportaciones e importaciones en 2009 podría ser similar
al registrado en 2007. Esto implicaría, con respecto a los niveles alcanzados en
2008, una reducción de las exportaciones totales de 20% y de las
importaciones de 17%. Lo anterior es consistente con una caída anual de las
exportaciones a Venezuela de 20%.
En el trimestre móvil terminado en julio, el aumento de la tasa de
desempleo a nivel nacional se dio en un contexto de incremento de la
participación (la cual subió 2,8pp) mayor que el incremento de la ocupación
(que subió 2,1pp). De esta manera, el desempleo se ubicó en 11,9%, 0,5pp por
encima del mismo período de 2008.
Según la GEIH, el empleo en julio creció 6,4% a nivel nacional y 4,2%
en las 13 áreas metropolitanas frente al mismo periodo del año anterior. Por
ramas de actividad, se observó un fortalecimiento de la ocupación en
construcción y transporte durante el segundo trimestre, hecho que podría estar
asociado al dinamismo de las obras civiles.
c. Contexto externo
Los resultados de las principales economías desarrolladas han llevado a
que los analistas esperen una recuperación mundial lenta en el segundo
semestre de 2009 y en el 2010 superior al proyectado. Esta mejora en el
crecimiento permitió que los precios internacionales de algunos productos
básicos siguieran con su fase de recuperación iniciada tres meses atrás.
La industria automotriz, apoyada por subvenciones estatales, ha
impulsado la recuperación. Japón, Alemania y Francia registraron un
crecimiento positivo en el segundo trimestre, mientras que en E.E.U.U. los
indicadores señalan la estabilización de su economía. En cuanto a las
economías emergentes, las señales son mixtas: algunos países asiáticos se han
recuperado en el último trimestre mientras que países de Europa Oriental y
América Latina continúan contrayéndose.
La corrección de los desbalances macroeconómicos estructurales de las
economías desarrolladas es necesaria para restablecer una dinámica sostenida
5
del crecimiento en dichos países y en el mundo. Mientras ello no ocurra, las
mayores necesidades de financiamiento de las economías industrializadas
podrían generar un incremento en las tasas de interés mundiales. En la misma
línea, es poco probable que en un mediano plazo el comercio mundial retorne
a los niveles registrados previos a la crisis.
d. Variables financieras
El crecimiento del M3 se desaceleró pero presenta aumentos anuales
superiores al incremento del PIB nominal estimado para el presente año.
Entre junio 19 y septiembre 4, la tasa de crecimiento de la cartera en
moneda legal cayó de 15,6% a 9,9% por el comportamiento de la cartera
comercial. En las mismas fechas, la tasa de crecimiento de la cartera comercial
cayó de 21,2% a 12,4%. Las colocaciones de bonos han compensado esta
caída con un aumento en lo corrido del año de $1,8 b.
El crédito a los hogares muestra una desaceleración de la cartera de
consumo y un buen comportamiento de la hipotecaria. En septiembre 4, la tasa
de crecimiento anual de la cartera de consumo se ubicó en 0,3%, cuando un
mes atrás lo hacía a un ritmo de 1,8%. Por su parte, la cartera hipotecaria
entre el 7 de agosto y el 4 de septiembre, pasó de crecer 12,4% anual a 13,2%
anual, respectivamente.
En las últimas semanas se detuvo la tendencia descendente de todas las
tasas de interés. Desde finales de julio, la tasa de captación DTF se ha situado
alrededor de 5%. Por su parte, las tasas de interés de consumo se estabilizaron
en 22%, las de tarjetas de crédito en 28% y las de crédito de vivienda en
14,5%. La pausa en las tasas también se ha dado en los créditos de tesorería,
grupo que presenta una tasa cercana al 8,5%. Al 4 de septiembre, los créditos
ordinarios y preferenciales han incrementado levemente su tasa, con valores
de 12,5% y 9,4%, respectivamente.
La curva de los TES registró un movimiento al alza de 27 pb y 6 pb en
el tramo corto y medio de la curva mientras que en el tramo largo presentó un
movimiento a la baja de 22 pb.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
6
En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el
ritmo de crecimiento de los precios y su tendencia sostenida a la baja; (ii) la
caída en el crecimiento anual del precio de los alimentos; (iii) el efecto sobre
la inflación total que podrían provocar los precios internacionales de los
alimentos, las materias primas y el petróleo; (iv) la continua mejora en la
confianza de productores y consumidores ; (v) la cartera del sistema financiero
en moneda legal que presentó una desaceleración aunque sigue creciendo por
encima del PIB nominal; (vi) las emisiones de bonos que han complementado
la financiación del sector real; (vii) el comportamiento de las tasas de interés
del mercado en respuesta a la baja en la tasa de referencia del Banco; (viii) el
crecimiento negativo de los Estados Unidos y el menor crecimiento de
Venezuela, Ecuador y otros socios comerciales; (ix) el efecto de la tasa de
cambio sobre la inflación y el crecimiento de los sectores transables; (x) el
comportamiento de las tasas de interés de los títulos de deuda pública; y (xi)
el comportamiento de las expectativas de inflación de mediano y largo plazo.
Los principales puntos de análisis entre los miembros de la Junta se
centraron en los siguientes aspectos: (i) los elementos que afectan las
proyecciones de inflación para 2009 y 2010, en especial un eventual repunte
en los precios de los alimentos y regulados; (ii) el efecto rezagado de las
medidas de política monetaria sobre la producción y los precios; (iii) los
resultados del PIB para el segundo trimestre, en especial de la demanda
interna más débil que la proyectada; (iv) el efecto de las restricciones
comerciales impuestas a productos colombianos; (v) el comportamiento de la
tasa de cambio en las últimas semanas; (vi) la reciente baja dinámica de la
cartera comercial del sistema financiero; (vii) el balance de riesgos entre
crecimiento e inflación en un contexto de desaceleración de la economía y
caída de la inflación; (viii) la pertinencia de continuar reduciendo la tasa de
intervención ante la última información disponible; y (ix) la necesidad de
fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de
inflación alrededor de la meta de largo plazo.
Los miembros de la Junta destacaron la caída de la inflación anual al
consumidor por décimo mes consecutivo y los posibles efectos de las
restricciones comerciales y de la revaluación del peso, en las proyecciones de
inflación y crecimiento. Así mismo, señalaron el debilitamiento de la demanda
de crédito.
Con el fin de afianzar la recuperación de la economía y reducir posibles
efectos negativos de las restricciones que se han presentado al comercio y de
7
la apreciación del peso, la Junta Directiva de manera unánime acordó reducir
50 puntos básicos la tasa de intervención. Los miembros de la Corporación
esperan estabilidad de la tasa de intervención en el futuro cercano.
Esta disminución de la tasa de referencia continúa con la política
monetaria expansiva adelantada desde finales del año pasado que ha permitido
una disminución persistente de las tasas de interés de captación y colocación.
La Junta Directiva espera que ésta tendencia continúe estimulando el
crecimiento económico en un ambiente caracterizado por un sistema
financiero saludable, en línea con la mejora de los indicadores de confianza de
los consumidores y empresarios.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva acordó disminuir 50 pb la tasa de intervención del
Banco de la República. De esta manera la tasa de interés de intervención del
Banco será de 4%.
Bogotá D. C., octubre 09 de 2009.
|
2009-10-01 |
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
23 de Octubre de 2009
El 23 de Octubre de 2009 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión
ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del
Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente
General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos
Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan
Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de
crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas
con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los
principales temas tratados en dicha reunión.
1. ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor en septiembre se situó en 3,21%, con
un incremento de 8 pb con respecto al mes de agosto. En lo corrido del año
hasta septiembre se acumuló una inflación de 2,12%, muy por debajo del
mismo registro del año pasado (6,53%). Los indicadores de inflación básica
continuaron disminuyendo.
La variación anual de los precios de los alimentos aumentó de 1,46%
en agosto a 2,2% en septiembre.
El incremento anual de precios de los bienes regulados disminuyó de
3,5% en agosto a 2,5% en septiembre, debido al comportamiento de los
combustibles y los servicios públicos.
La variación anual de los precios de los bienes no transables sin
alimentos ni regulados bajó de 4,9% en agosto a 4,8% en septiembre. Se
destaca la caída de los rubros con baja indexación y de los arriendos. La
2
variación anual de precios de los rubros de alta indexación se mantuvo en
niveles del 7%.
El aumento anual de precios de bienes transables sin alimentos ni
regulados cayó de 2,8% en agosto a 2,7% en septiembre.
Con datos preliminares al 20 de octubre, las expectativas de inflación
derivadas de las negociaciones de deuda pública para 1, 5 y 10 años,
presentaron variaciones de 88 pb, 1 pb y -50 pb frente a los datos promedio de
septiembre, ubicándose en 3,71%, 4,55% y 4,58%, respectivamente.
La variación anual de los precios al productor (IPP) disminuyó de 1%
en agosto a -1,5% en septiembre.
b. Crecimiento
Durante el tercer trimestre del año, la mayoría de los indicadores de
actividad real mostraron menores caídas anuales, pero no evidenciaron
crecimientos importantes en sus niveles.
-
La producción de la industria en el mes de agosto, según información
del DANE, cayó 3,3% frente a agosto del año pasado, lo cual se compara
favorablemente con lo que sucedió en los meses anteriores.
-
En niveles, la producción industrial (ajustada por estacionalidad)
decreció en agosto frente a julio. Sin embargo, la misma serie ajustada por
días hábiles mostró un resultado mayor en agosto frente a julio.
-
La ANDI reportó que el crecimiento año corrido a agosto del IPI (-
7,5%) se habría deteriorado aunque su nivel es mejor que el registrado a julio
(-8,1%). Cabe comentar que en el pasado han existido grandes discrepancias
entre las series del DANE y de la ANDI tanto en tasas de crecimiento año
corrido como en tendencias.
-
La demanda de energía total (regulada y no regulada) creció en
septiembre 3,0% en términos anuales. Para el tercer trimestre, este indicador
creció 2,2% anualmente, registro mejor que el del primero y segundo
trimestres (0,8% y 0,3%, respectivamente).
3
-
Las licencias de construcción mostraron un aumento en niveles durante
julio y agosto.
-
A partir de mayo y hasta agosto, las ventas reales del comercio al por
menor aumentaron en niveles y el ritmo de decrecimiento anual ha disminuido
(-0,9% anual en agosto frente a -3,7% en julio).
-
El indicador de confianza del consumidor de Fedesarollo disminuyó
levemente en septiembre con respecto al mes anterior pero el promedio del
tercer trimestre supera el del trimestre anterior.
En lo corrido del año al mes de agosto de 2009, la balanza comercial fue
superavitaria en US$874 m, inferior en US$1,112 m a lo registrado un año
atrás. Esto se debió a una caída de las exportaciones de 19,4% superior a la de
las importaciones (-16,5%). En agosto la balanza comercial fue superavitaria
en US$260 m como consecuencia de superávit comerciales con Estados
Unidos, Venezuela y Ecuador.
Año corrido a agosto de 2009 las exportaciones totales en dólares
(clasificación CIIU) se redujeron 19,4% respecto al mismo período del año
2008. La industria se contrajo 22,1%, el sector minero -17,2% y el
agropecuario -12,1%. A pesar de dichas caídas, los niveles estuvieron
cercanos a los del mismo período de 2007, excepto en el caso del sector
minero que muestra una mejoría respecto a dicho año.
Las exportaciones totales en dólares a Venezuela, que representan el
16%, registraron una caída de 9,8% año corrido. Esto se explicó,
principalmente por las ventas del sector industrial, -12,5%. Las ventas a
Venezuela durante agosto cayeron frente al mismo mes del año anterior -
45,7%, más de lo que venía sucediendo en meses anteriores.
Las ventas a los Estados Unidos, que representa el 38% del total de las
exportaciones, exhibieron un descenso, año corrido a agosto, de 22,5%. Dicha
contracción se originó en las menores ventas en dólares del sector minero
(26,2%) y del sector industrial (19,7%).
En lo corrido del año al mes de agosto de 2009 las importaciones (CIF)
ascendieron a US$21,293 m y disminuyeron anualmente 17,4%. La
disminución más importante fue registrada por las importaciones de bienes
4
intermedios (28,8%), en particular las compras realizadas a los Estados
Unidos.
De acuerdo con la gran encuesta integrada de hogares (GEIH), el
empleo creció en el trimestre móvil junio - agosto de 2009 a una tasa anual de
6,6% en el total nacional, y de 3,6% en las 13 áreas. Sin embargo, la oferta
laboral (TGP) aumentó a un mayor ritmo, conduciendo a un aumento de la
tasa de desempleo (TD), la cual se ubicó en el trimestre móvil terminado en
agosto en 11,9% en el total nacional y 13% en las 13 áreas.
c. Contexto externo
Las condiciones económicas en los países desarrollados han mejorado
en los últimos meses gracias a las acciones emprendidas por los gobiernos y
bancos centrales. Estas medidas han permitido: (i) mejorar las condiciones de
liquidez y estabilizar los mercados interbancarios, disminuyendo la percepción
de riesgo; (ii) fortalecer las expectativas de consumidores y empresarios y (iii)
evitar una mayor caída de la actividad económica.
Las economías emergentes también muestran signos de recuperación, en
especial las economías asiáticas. En China se espera un crecimiento de 8,5%
para este año y de 9,0% para 2010. Para nuestros principales socios
comerciales de la región se espera mejoría en 2010, aunque en el caso de
Venezuela y Ecuador los pronósticos son menos optimistas.
La recuperación de China y de algunas otras economías asiáticas ha
reactivado la demanda por bienes básicos en lo corrido del año. Lo anterior
con el debilitamiento del dólar, ha permitido sostener los precios de los
productos básicos, lo cual favorece los términos de intercambio de los países
latinoamericanos.
En cuanto al comportamiento de las monedas de Latinoamérica,
continúa la tendencia a la apreciación, con mayor intensidad en Brasil y
Colombia. Desde marzo de 2009, el peso colombiano se ha apreciado frente a
la mayoría de monedas.
d. Variables financieras
La base monetaria creció en septiembre a una tasa nominal anual de
6,1% comparado con una tasa anual de 15,3% un mes atrás. Esta
5
desaceleración se explicó por una caída en el crecimiento de la reserva
bancaria, debido a un efecto estadístico relacionado con el fuerte crecimiento
en septiembre del año anterior por el aumento del encaje bancario y la mayor
percepción de riesgo en el sistema financiero que suscitó la quiebra de
Lehman Brothers.
Los pasivos sujetos a encaje también cayeron en los últimos meses. El
descenso en los PSE puede estar asociado con la menor actividad económica y
con una reasignación de portafolio de los agentes a favor de títulos de deuda
pública. Como consecuencia de lo anterior, el agregado monetario más amplio
– M3 – también mostró una desaceleración que se ha acentuado en los
primeros días de octubre. Entre inicios de agosto y octubre 9, el crecimiento
anual de M3 pasó de 13,2% a 9,7%, mientras que el crecimiento de los PSE
pasó de 14,0% a 10,2%.
La cartera bruta en moneda nacional del sistema financiero continuó
desacelerándose. Al 9 de octubre, el crecimiento anual de este agregado fue
de 7,3% frente a 9,5% un mes atrás. No obstante, los saldos se estabilizaron en
las últimas semanas.
El crecimiento anual de la cartera comercial a septiembre fue 8,4%
frente a 12,4% del mes anterior. El crédito de consumo mantuvo un
crecimiento anual muy bajo (0,2%) y el crédito hipotecario tendió a acelerarse
(pasó de 11,9 en agosto a 12,9% en octubre 9).
En agosto, el endeudamiento externo total (crédito directo del sector
privado real más cartera en moneda extranjera de los bancos) cayó 8,1% en
términos anuales (frente a 6,2% un mes atrás). A pesar de las tasas anuales
negativas, en agosto el saldo del endeudamiento externo directo aumentó
respecto al nivel del mes de julio. Así mismo, en septiembre se observó un
aumento en el saldo de la cartera en moneda extranjera del sistema financiero
respecto a agosto.
En 2009 la colocación de bonos se consolidó como un instrumento
complementario de financiación del sector real. En lo corrido del año hasta
comienzos de octubre, el sector real emitió deuda por $6,2 billones, con un
incremento del saldo entre enero y agosto por $2,8 billones.
En el último mes se observó una caída en todas las tasas de interés
nominales promedio mensuales, tanto pasivas como activas. El recorte de la
6
tasa de política por 50 pb efectuado por la JDBR el 25 de septiembre se
trasmitió en su totalidad a la tasa del mercado monetario (TIB). También
disminuyeron las tasas de captación y de los créditos comerciales, de consumo
e hipotecarios. Adicionalmente, la disminución de la tasa de usura llevó a una
caída en la tasa de tarjetas de crédito. Pese a las caídas en las tasas nominales,
las tasas reales aumentaron debido a la reducción de la inflación sin alimentos.
La curva de los TES registró movimientos a la baja de 42 pb, 47 pb y 49
pb en el tramo corto, medio y largo, respectivamente.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el
ritmo de crecimiento de los precios y su tendencia a la baja; (ii) la variación de
los precios de los alimentos que continua siendo baja; (iii) el efecto sobre la
inflación total que podrían provocar los precios internacionales de los
alimentos, las materias primas y el petróleo; (iv) el efecto que podría tener
sobre el crecimiento de los precios el fenómeno del Niño; (v) la confianza de
productores y consumidores que sigue estando por encima de los registros del
primer semestre; (vi) la caída de los agregados monetarios y, en especial, del
M3; (vii) la cartera del sistema financiero en moneda legal que aunque sigue
cayendo crece por encima del PIB nominal; (viii) las emisiones de bonos que
han complementado la financiación del sector real; (ix) el comportamiento de
las tasas de interés del mercado en respuesta a la baja en la tasa de referencia
del Banco; (x) el crecimiento negativo de los Estados Unidos y el menor
crecimiento de Venezuela, Ecuador y otros socios comerciales; (xi) la
apreciación reciente de la tasa de cambio (xii) el efecto de la tasa de cambio
sobre la inflación y el crecimiento de los sectores transables; (xiii) el
comportamiento de las tasas de interés de los títulos de deuda pública; y (xiv)
el comportamiento de las expectativas de inflación de mediano y largo plazo.
Los principales puntos de análisis entre los miembros de la Junta se
centraron en los siguientes aspectos: (i) los elementos que afectan las
proyecciones de inflación para 2009 y 2010, en especial un eventual repunte
en los precios de los regulados y de los alimentos debido al fenómeno
climático del Niño; (ii) el efecto rezagado de las medidas de política monetaria
sobre la producción y los precios; (iii) las proyecciones de crecimiento de la
economía para lo que resta del año y del 2010 con una demanda interna más
débil que la proyectada y un menor impulso fiscal el año entrante; (iv) la
fuerte caída que se presentó en los últimos meses de las exportaciones a
7
Venezuela; (v) el comportamiento de la tasa de cambio en las últimas
semanas; (vi) la caída de los agregados monetarios y sus posibles efectos en la
reactivación económica; (vii) la reciente baja dinámica en la cartera comercial
del sistema financiero y las causas de la misma; (viii) la necesidad de otorgar
la liquidez de fin de año y la conveniencia de hacerlo de manera permanente;
(ix) el balance de riesgos entre crecimiento e inflación en un contexto de
desaceleración de la economía y caída de la inflación; (x) la pertinencia de
continuar reduciendo la tasa de intervención ante la última información
disponible; y (xi) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad
monetaria y anclar las expectativas de inflación alrededor de la meta de largo
plazo.
La Junta Directiva del Banco de la República acordó fijar como meta de
inflación para el 2010 el rango entre 2% y 4%, con 3% como meta puntual
para efectos legales. Este rango corresponde a la meta de largo plazo fijado
años atrás por la Junta Directiva. Los miembros de la Junta consideraron que
las condiciones de la economía permiten que en lo sucesivo la inflación se
mantenga en el rango meta de largo plazo, lo cual contribuye a anclar las
expectativas de inflación. Una inflación baja y estable es la mejor contribución
que puede hacer la política monetaria al crecimiento sostenido de la economía
y el empleo y a la competitividad nacional.
La meta de inflación adoptada tiene en cuenta:
•
El resultado de la inflación a fin de año, cercano al 3%. Lo anterior,
como resultado de la caída en los precios de los productos básicos en 2009 y
el marcado debilitamiento de la demanda interna y externa causada por la
crisis financiera internacional.
•
Las expectativas de lento crecimiento de la economía mundial en el
2010 y 2011 y el comportamiento a la baja de la inflación global.
•
La reciente evolución de los precios internacionales de los productos
básicos, la demanda de nuestros principales productos de exportación en un
contexto de bajo crecimiento de los socios comerciales y posibles choques
futuros de oferta en los precios de alimentos y regulados.
•
El efecto rezagado de la política monetaria expansionista seguida por la
Junta Directiva, las proyecciones de los modelos de inflación y las
expectativas de inflación de los agentes.
Por otra parte, la Junta decidió mantener inalterada la tasa de interés
base para las subastas de expansión, que continuará en 4% y estima que la
8
meta de inflación fijada para el 2010 se podrá cumplir sin presiones al alza de
la tasa de interés de intervención en el futuro cercano.
Así mismo decidió dar una mayor proporción de liquidez permanente
para atender las necesidades de liquidez que aumentan tradicionalmente en el
fin de año. Para estos efectos comprará TES en el mercado secundario y
divisas por un monto de tres millones de millones de pesos.
Algunos directores expresaron su preocupación por la caída de los
agregados monetarios y del crédito y su posible relación con el
comportamiento de la actividad económica. Señalaron que el comportamiento
de los agregados monetarios y crediticios puede estar reflejando un
incremento en la percepción de riesgo por un debilitamiento de la actividad
productiva mayor al previsto. En consecuencia, advirtieron sobre la necesidad
de realizar un cuidadoso seguimiento de los agregados monetarios y del
crédito y su posible incidencia en la postura de la política monetaria.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva acordó mantener inalterada la tasa de intervención
del Banco de la República. De esta manera la tasa de interés de intervención
del Banco será de 4%.
Bogotá D. C., noviembre 06 de 2009.
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2009-11-01 |
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
23 de Noviembre de 2009
El 23 de Noviembre de 2009 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión
ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del
Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente
General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos
Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan
Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de
crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas
con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los
principales temas tratados en dicha reunión.
1. ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor en octubre se situó en 2,72%, con una
disminución de 49 pb con respecto al mes de septiembre. En lo corrido del año
hasta octubre se acumuló una inflación de 1,98%, muy por debajo del mismo
registro del año pasado (6,9%). Los indicadores de inflación básica
continuaron disminuyendo.
La variación anual de los precios de los alimentos descendió de 2,2%
en septiembre a 1,6% en octubre.
El incremento anual de precios de los bienes regulados disminuyó de
2,5% en septiembre a 1,7% en octubre, debido al comportamiento de todos los
subgrupos que la componen y, en especial, de los servicios públicos.
La variación anual de los precios de los bienes no transables sin
alimentos ni regulados bajó de 4,8% en septiembre a 4,6% en octubre. Se
destaca la caída de los rubros con baja indexación y de los arriendos. La
2
variación anual de precios de los rubros de alta indexación se mantuvo en
niveles del 7%.
El aumento anual de precios de bienes transables sin alimentos ni
regulados cayó de 2,7% en septiembre a 2,1% en octubre.
Con datos preliminares al 13 de noviembre, las expectativas de
inflación derivadas de las negociaciones de deuda pública para 1, 5 y 10 años,
presentaron variaciones de -31 pb, -57 pb y -31 pb frente a los datos promedio
de octubre, ubicándose en 2,78%, 3,59% y 4,09%, respectivamente.
La variación anual de los precios al productor (IPP) disminuyó de -
1,5% en septiembre a -4,7% en octubre.
b. Crecimiento
La mayoría de los indicadores de actividad real no muestran una
profundización en la caída de la actividad económica, pero tampoco señalan
un crecimiento generalizado.
-
La variación anual del índice de producción industrial sin trilla de café
en septiembre fue de -3,8%. Con esta cifra, la contracción anual de la
producción industrial del tercer trimestre se situó en 4,6%, caída que se
compara favorablemente con las de los anteriores tres trimestres.
-
En niveles, la producción industrial (ajustada por estacionalidad)
muestra un aumento pequeño en septiembre frente a agosto.
-
El indicador de existencias de la industria de la Encuesta de Opinión
Empresarial (EOE) de Fedesarrollo de septiembre muestra una disminución
leve respecto al nivel observado meses atrás. Por su parte, el indicador de
pedidos de la misma encuesta se encuentra estancado desde hace varios meses.
-
La variación anual de las ventas en septiembre fue de -7,3%. Al
desestacionalizar la serie, las ventas del comercio cayeron en septiembre a
niveles de mediados de 2006.
El Indicador de Confianza del Consumidor de Fedesarrollo disminuyó
ligeramente en los meses de septiembre y octubre.
3
-
El recaudo de IVA real al tercer trimestre también mostró una
recuperación frente al segundo.
-
Las ventas al por menor de agosto cayeron a una tasa anual de 3,9%,
que resulta menor que la observada en el segundo trimestre (-4,8%).
En lo corrido del año hasta el mes de septiembre de 2009, la balanza
comercial fue superavitaria en US$1.054 millones, inferior en US$500 m al
del mismo período del año anterior.
Año corrido a septiembre de 2009 las exportaciones totales en dólares
(clasificación CIIU) se redujeron 18,5% respecto al mismo período del año
2008. Por origen, todas mostraron reducciones: -21,7% las industriales, -
16,2% las mineras y -7,2% las del sector agropecuario.
Las exportaciones en dólares a Venezuela, que representan el 15% del
total, registraron una caída de 14,2% año corrido. Las ventas a Venezuela
durante septiembre cayeron frente al mismo mes del año anterior 49,5%, más
de lo que venía sucediendo en meses anteriores.
Las ventas a los Estados Unidos, que representa el 38% del total de las
exportaciones, exhibieron un descenso, año corrido a septiembre, de 20,3%.
Dicha contracción se originó en las menores ventas en dólares del sector
minero (-23,6%) y del sector industrial (-19%).
En lo corrido del año al mes de septiembre de 2009, las importaciones
(CIF) ascendieron a US$24,039m, disminuyendo anualmente 18,7%. La
disminución más importante fue registrada por las importaciones de bienes
intermedios (29%), en particular las compras realizadas a los Estados Unidos.
De acuerdo con la Gran Encuesta Integrada de Hogares (GEIH), el
empleo creció en el trimestre móvil junio a septiembre de 2009 a una tasa
anual de 5,1% en el total nacional, y de 2,6% en las 13 áreas. Sin embargo, la
oferta laboral (TGP) aumentó a un mayor ritmo, conduciendo a un aumento de
la tasa de desempleo (TD), la cual se ubicó en el trimestre móvil terminado en
agosto en 12,2% en el total nacional y 13% en las 13 áreas.
c. Contexto externo
4
Las condiciones económicas de los países desarrollados han mejorado
en los últimos meses. Para el tercer trimestre de 2009, la mayoría de
economías desarrolladas presentaron un crecimiento del PIB. En el caso de
EEUU, el PIB creció 3,5% (t/a) en dicho período, siendo el consumo y la
inversión las variables que más aportaron a este resultado. El sentimiento
empresarial también ha continuado mejorando en los países industrializados,
así como algunos indicadores de la actividad real, tales como las
exportaciones y las ventas al por menor. Igualmente, los mercados financieros
internacionales continuaron recuperándose, sobresaliendo las condiciones de
liquidez y el comportamiento bursátil.
Estas mejores perspectivas han llevado a que los analistas
internacionales modifiquen sus pronósticos de crecimiento al alza, en
particular los de EEUU, para 2010.
Pese a lo anterior, existe todavía
incertidumbre sobre el devenir económico de estos países. En particular, el
débil mercado laboral y las restricciones al crédito bancario podrían atenuar la
recuperación del consumo y la inversión en los próximos trimestres.
En cuanto a los países emergentes, el comportamiento de la actividad
económica ha sido bastante heterogéneo. En el caso de los países asiáticos,
China ha consolidado su recuperación y muchos de sus indicadores reales
muestran repuntes significativos, también liderados por gasto fiscal. Por su
parte, el desempeño de India también es positivo aunque con una recuperación
menos marcada.
Para América Latina las señales son mixtas. Las exportaciones en
algunos países de la región han mejorado en el último trimestre. En Brasil y
Chile hay una recuperación de la actividad industrial, mientras que para el
resto de los países de la región las señales son menos claras.
En el caso de la economía venezolana, el PIB real presentó una
contracción anual de 4,5% durante el tercer trimestre de 2009, mientras el
mercado esperaba contracciones anuales cercanas al 1,5% para el mismo
periodo. Aunque el gasto del gobierno mantuvo su dinámica, el consumo
privado y la formación bruta de capital fijo presentaron importantes
retrocesos. Lo anterior ha llevado a que se proyecte una caída de 2% para el
2009.
Las monedas de la región han mantenido una tendencia de apreciación
en lo corrido del año. Sin embargo, en el último mes en la mayoría de países la
5
tasa de cambio se estabilizó e incluso se depreció, excepto por Chile, que ha
continuado apreciándose.
d. Variables financieras
La tasa de crecimiento anual de M3, que se había desacelerado hasta
mediados de octubre, se estabilizó alrededor de 10% en las últimas tres
semanas (del 16 octubre al 6 de noviembre). Lo anterior se explica
principalmente por los pasivos sujetos a encaje –PSE-. Por su parte, la
variación anual del efectivo que crecía 0,7% anual en octubre, mostró una leve
recuperación y a noviembre 6 se ubicó en 3,7%. En términos reales
(deflactando por el IPC sin alimentos), en octubre las tasas de crecimiento de
los promedios de M3, los PSE y el efectivo se ubicaron en 6,5%, 7,2% y
1,7%, respectivamente
La cartera bruta en moneda nacional continuó desacelerándose. En
noviembre 6, la tasa de crecimiento anual se ubicó en 5,1%, cuando un mes
atrás lo hacía a un ritmo de 7,3%. La cartera bruta comercial fue la que
presentó la mayor caída en el ritmo anual de crecimiento, al pasar de 8,4% en
octubre 9 a 6,3% en noviembre 6. En cuanto a la cartera de consumo, ésta se
mantuvo a lo largo del mes en niveles similares a los observados un año atrás.
Por su parte, la cartera hipotecaria siguió consolidando su aceleración entre
octubre 6 y noviembre 9 pasó de crecer 12,9% a 15,7% en términos anuales.
De ésta manera, en términos reales (con IPC sin alimentos), a noviembre 6 el
crecimiento de la cartera en moneda nacional se ubicó en 2%, el de la
comercial en 3,1%, el de la hipotecaria en 12,3% y el de la de consumo en -
3,2%
Parte de la desaceleración en la cartera comercial se explica por la
emisión de deuda de las empresas. Con información a septiembre, la cartera
comercial más bonos crecía 13,4%, cifra superior en 320 pb al crecimiento de
la cartera comercial. Otro factor detrás de la desaceleración de la cartera en
moneda nacional está asociado con el mayor ritmo de castigos de cartera, que
durante los últimos 12 meses pasó de $5.5 a $7.5 b.
En materia de tasas de interés, el recorte de 50 pb en la tasa de política
(25 de septiembre) se reflejó en su totalidad en las tasas del mercado
monetario y se ha transmitido rápidamente a las tasas de captación y de
créditos comerciales (exceptuando construcción). Adicionalmente, la
6
reducción de la tasa de usura a partir del 1 de octubre (206 pb) aceleró el
descenso de las tasas de crédito con tarjeta.
La reducción de las tasas nominales promedio en octubre fue similar a
la desaceleración de la inflación sin alimentos y, por tal motivo, en términos
reales las tasas de interés permanecieron relativamente estables (con
excepción de la tasa de tarjeta de crédito, -116 pb y de consumo, -33 pb).
Entre el 23 de octubre al 13 de noviembre de 2009, la curva de los TES
registró movimientos a la baja de 45 pb, 111 pb y 70 pb en el tramo corto,
medio y largo, respectivamente.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) la
profunda y rápida caída en el ritmo de crecimiento de los precios durante el
mes, no esperada por el mercado ni por los trabajos técnicos del Banco; (ii) la
continua disminución en los indicadores de inflación básica y de las
expectativas de inflación que se sitúan en el rango meta fijado por la Junta
Directiva para el año entrante; (iii) la reducción generalizada del crecimiento
de los precios, frente a otros meses en los cuales las reducciones se debieron
básicamente a bajas en alimentos y regulados; (iv) el efecto transitorio que
podría tener sobre el crecimiento de los precios el fenómeno del Niño; (v) el
estancamiento en el crecimiento de los indicadores de confianza de
productores y consumidores; (vi) la recuperación del M3 y , en especial, de
los pasivos sujetos a encaje; (vii) la cartera del sistema financiero en moneda
legal que, aunque sigue cayendo, crece por encima del PIB nominal; (viii) las
emisiones de bonos que han complementado la financiación del sector real;
(ix) el comportamiento de las tasas de interés del mercado en respuesta a la
baja en la tasa de referencia del Banco; (x) la contracción del crecimiento de la
economía venezolana para este año y sus perspectivas para el 2010; (xi) el
efecto de la tasa de cambio sobre la inflación y el crecimiento de los sectores
transables; y (xiii) el comportamiento de las tasas de interés de los títulos de
deuda pública.
Los principales puntos de análisis entre los miembros de la Junta se
centraron en los siguientes aspectos: (i) los elementos que afectan las
proyecciones de inflación para 2009 y 2010, en especial un eventual repunte
en los precios de los regulados y de los alimentos debido al fenómeno
climático del Niño; (ii) el efecto rezagado de las medidas de política monetaria
7
sobre la producción y los precios; (iii) las proyecciones de crecimiento de la
economía para lo que resta del año y del 2010 con una demanda interna más
débil que la proyectada y un menor impulso fiscal el año entrante; (iv) la
fuerte caída que se presentó en los últimos meses de las exportaciones a
Venezuela y en el producto de ese país; (v) el comportamiento de la tasa de
cambio en las últimas semanas; (vi) el comportamiento de los agregados
monetarios y sus posibles efectos en la reactivación económica; (vii) la baja
dinámica reciente en la cartera comercial del sistema financiero y las causas
de la misma; (viii) el balance de riesgos entre crecimiento e inflación en un
contexto de desaceleración de la economía y caída de la inflación; (ix) la
pertinencia de continuar reduciendo la tasa de intervención ante la última
información disponible; y (x) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la
autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación alrededor de la meta
de largo plazo.
La Junta Directiva destacó lo siguiente sobre el comportamiento de la
inflación durante el mes: (i) la inflación anual al consumidor disminuyó en
octubre más rápido de lo esperado; (ii) los indicadores de inflación básica
continuaron cayendo; (iii) las expectativas de inflación siguen disminuyendo;
(iv) si bien el comportamiento a la baja de la inflación ha estado liderado por
los precios de los alimentos y los regulados, las reducciones mensuales en
precios han sido más generalizadas abarcando una amplia variedad de bienes y
servicios y (v) las proyecciones para fin de año muestran que la inflación se
ubicará por debajo del punto medio del rango meta de largo plazo (3%).
En cuanto al contexto externo, se señaló que éste ha mejorado en los
últimos meses, lo que ha llevado a que los analistas internacionales aumenten
sus pronósticos de crecimiento económico para el 2010 en la mayoría de los
países y, en particular, en los Estados Unidos. No obstante, las proyecciones
de crecimiento para Venezuela muestran una caída importante del PIB tanto
para este año como para 2010 lo que, conjuntamente con las mayores
restricciones al comercio, afectará las exportaciones colombianas a ese país.
Por otra parte, la información disponible a septiembre no refleja nuevas
caídas en los niveles de actividad económica en el país, pero tampoco una
reactivación vigorosa. A lo anterior se suma que la cartera en moneda nacional
se sigue desacelerando.
La política monetaria expansiva ha permitido una disminución
persistente de las tasas de interés de captación y colocación. La Junta
8
Directiva espera que esta tendencia continúe estimulando el crecimiento
económico en un ambiente caracterizado por un sistema financiero saludable.
La mayoría de los miembros de la junta consideraron que una reducción
de 50 puntos básicos de la tasa de intervención afianzará la recuperación de la
economía y reducirá los efectos negativos de la caída del comercio con
Venezuela. Esta reducción de la tasa de interés de intervención corrige el
aumento de la tasa de interés real causado por la reducción de la inflación y
sus expectativas y es coherente con la meta de inflación fijada para el 2010.
Otros directores manifestaron su temor sobre la extemporaneidad de la
medida debido al rezago natural entre la misma y sus efectos plenos sobre la
demanda, y señalaron que una nueva disminución de las tasas de interés
podría dificultar el cumplimiento de la meta de inflación para el 2010 y, en
consecuencia, que la Junta tenga que aumentar su tasa de intervención en una
coyuntura en la cual no se haya consolidado la recuperación de la economía.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva por mayoría acordó reducir en 50 pb la tasa de
intervención del Banco de la República. De esta manera la tasa de interés de
intervención del Banco será de 3,5%.
Bogotá DC, diciembre 04 de 2009.
|
2009-12-01 |
MINUTAS DE LA REUNIÓN DE LA JUNTA DIRECTIVA DEL
BANCO DE LA REPÚBLICA DEL 18 DE DICIEMBRE DE 2009
El 18 de diciembre de 2009 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de
la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del ministro de Hacienda y
Crédito Público, Óscar Iván Zuluaga, el gerente general, José Darío Uribe y los directores
de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo,
César Vallejo y Juan Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de
crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la
política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en
dicha reunión.
1.
ANTECEDENTES
a.
Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor en noviembre se situó en 2,37%, con una disminución de
35 puntos básicos (pb) con respecto al mes de octubre. En lo corrido del año hasta
noviembre se acumuló una inflación de 1,92%, muy por debajo del mismo registro del año
pasado (7,2%). Los indicadores de inflación básica continuaron disminuyendo.
La variación anual de los precios de los alimentos descendió de 1,6% en octubre a 0,7% en
noviembre.
El incremento anual de precios de los bienes regulados disminuyó de 1,7% en octubre a
1,5% en noviembre, destacándose la caída del transporte público.
La variación anual de los precios de los bienes no transables sin alimentos ni regulados bajó
de 4,6% en octubre a 4,5% en noviembre. Se destaca la caída de los arriendos que pasó de
4,4% a 4,2%. La variación anual de precios de los rubros de alta indexación disminuyó
ubicándose en 6,8%, mientras que la de los menos indexados pasó de 3,6% en octubre a
3,8% en noviembre.
El aumento anual de precios de bienes transables sin alimentos ni regulados cayó de 2,1%
en octubre a 1,94% en noviembre.
2
Las expectativas de inflación para diciembre derivadas de las negociaciones de deuda
pública para 1, 5 y 10 años, presentaron variaciones de -1 pb, -23 pb y -32 pb frente a los
datos promedio de noviembre, ubicándose en 2,57%, 3,17% y 3,67%, respectivamente.
La variación anual de los precios al productor (IPP) fue de -3,9%, ligeramente mayor que la
del mes pasado (-4,1%).
b.
Crecimiento
La información disponible a noviembre muestra que los niveles trimestrales del PIB se
siguen recuperando, aunque con tasas anuales de crecimiento bajas:
•
La información para el tercer trimestre muestra que sectores como el minero y las
obras civiles, siguen jalonando el crecimiento de la economía. Sin embargo, otras
actividades importantes como la industria, las edificaciones, el comercio y el
transporte continúan con una baja dinámica, pero con señales de recuperación.
•
La producción industrial medida por la ANDI del año corrido a octubre fue de -6,9%
frente al registrado año corrido a septiembre (-7,3%).
•
El indicador de existencias de la industria de la Encuesta de opinión empresarial
(EOE) de Fedesarrollo de octubre muestra una disminución leve respecto al nivel que
venía observando, mientras que el indicador de pedidos de la misma encuesta se
recuperó frente a lo ocurrido meses atrás.
•
El crecimiento anual de la demanda de energía para el mes de noviembre fue de
3,3%, superior al de octubre y al del promedio del tercer trimestre (1,2% y 2,2%,
respectivamente).
•
El indicador de confianza del consumidor de Fedesarrollo creció significativamente
en noviembre y se ubicó en el nivel más alto desde septiembre de 2008, cuando se
presentó la quiebra de Lehman Brothers. El aumento en este índice se debe
principalmente a la mejor percepción de los hogares sobre las condiciones
económicas actuales. Al promediar los registros de octubre y noviembre, se observa
un aumento en el indicador en el cuarto trimestre con relación al del tercer trimestre.
•
De acuerdo con el Comité de la Industria Automotriz Colombiana, la caída anual en
las ventas de automóviles particulares, utilitarios y pick ups disminuyó en los últimos
dos meses y, en niveles, muestran una ligera recuperación.
•
Las importaciones de bienes de capital en pesos constantes continuaron cayendo en el
cuarto trimestre.
3
A nivel mensual, en octubre la balanza comercial (FOB) registró un superávit de US$134
millones (m). En el año corrido (enero-octubre) continúa registrando un saldo positivo de
US$1.188 m, nivel similar al del mismo periodo del año anterior.
En octubre las exportaciones totales continuaron registrando una caída con respecto al
mismo mes del año anterior (-5,5%), especialmente las de origen industrial. En lo corrido
del año (enero-octubre) las exportaciones totales disminuyeron 17,3% con respecto al
mismo período del año anterior. Sin embargo los niveles de 2009 son cercanos a los de
2007, con excepción de las del sector minero cuyo valor ha sido mayor. Para el mismo
período, todos los sectores exhibieron caídas en valores, en tanto que en volúmenes sólo el
sector industrial mostró una reducción.
En lo corrido de 2009 (enero- octubre), las exportaciones a los Estados Unidos son las que
han presentado la mayor caída en valores absolutos (US$ 2.089 m). Por su parte, en
términos porcentuales las mayores caídas se han registrado en las ventas a Venezuela: en
octubre 73,3% con respecto al mismo mes del año anterior y entre enero y octubre 22%
anual.
En octubre el valor de las importaciones CIF fue menor en 20% al del mismo mes del año
anterior, destacándose la caída de las importaciones de bienes intermedios. En lo corrido
del año las importaciones totales cayeron 18,9%.
c.
Contexto externo
La mayoría de economías desarrolladas presentó una expansión económica en el tercer
trimestre respecto al segundo, con excepción del Reino Unido donde el PIB se contrajo
nuevamente. A lo anterior se suma el resultado positivo en el mercado laboral de los
Estados Unidos que, de acuerdo con varios analistas, puede marcar un quiebre en la
tendencia. Sin embargo, otros indicadores disponibles para el cuarto trimestre sugieren un
crecimiento lento para finales de año en varios países industrializados, incluso menor al del
tercer trimestre. Algunos indicadores de producción y ventas que venían creciendo,
mostraron algunos retrocesos.
Durante el último mes y medio, las primas de riesgo de la deuda soberana de dichos países
aumentaron, especialmente en el caso de los Estados Unidos y Japón, algo que podría
guardar relación con el gran incremento que registra la deuda pública de muchas de estas
economías en un entorno de bajo crecimiento.
Respecto a las economías de América Latina, los resultados del PIB para el tercer trimestre
muestran una contracción anual menor que la del segundo en países como Brasil, Perú,
Chile y México. Una excepción es Venezuela en donde el crecimiento fue de -4,5%, frente
a -2,4% en el segundo trimestre. Las monedas de la región no presentaron cambios
relevantes frente al dólar y tendieron a estabilizarse en noviembre y lo corrido de
diciembre. Lo mismo ocurrió con las primas de riesgo, las cuales se han estabilizado en
4
niveles previos a la crisis, destacándose que el impacto de la declaración de moratoria de
Dubai fue mínimo. En materia de precios, el descenso de la inflación ha continuado de
manera significativa, sobre todo en el caso de Chile, Perú y Colombia.
d.
Variables financieras
El crecimiento anual del M3 que venía desacelerándose desde mediados de agosto, se
estabilizó en noviembre a una tasa promedio cercana a 9,4%. La misma tendencia
presentaron los pasivos sujetos a encaje (PSE) que en el mismo mes crecieron 10,2% en
promedio. En términos reales (descontando inflación sin alimentos), los PSE aumentaron
anualmente 7% en noviembre.
La cartera bruta en moneda nacional (M/N) continuó desacelerándose, principalmente a
causa de la comercial. Entre finales de octubre y noviembre, la variación anual de la cartera
bruta total (M/N) pasó de crecer 6,7% a 5,3%. En las mismas fechas, la cartera comercial se
desaceleró de 6,1% a 4,8%, mientras que la hipotecaria subió de 13,9% a 14,5%. En cuanto
a la cartera de consumo, desde el último trimestre de 2008, su nivel se ha mantenido
alrededor de $40 billones (b), y al 27 de noviembre de 2009 presentó un crecimiento anual
de 0,8%. En términos reales, en noviembre las tasas de crecimiento anual de la cartera
fueron: total 2,7%, comercial (incluye leasing) 3,0%, consumo -2,9%, hipotecaria ajustada
11,0% y microcrédito 33,1%.
El sector real continuó aumentando su financiación con emisión de títulos. Estimaciones
hechas por el equipo técnico del banco con información de la Superintendencia Financiera
muestran que la cartera comercial más bonos del sector real se ubicó en niveles cercanos a
$100,5 b.
En cuanto a las tasas de interés, la última reducción en la tasa de política se transmitió con
mayor intensidad a las tasas del mercado monetario y a las de crédito comercial y de
consumo. La condición de deudor neto del Banco de la República con el sistema financiero
observada desde finales de noviembre contribuyó para que las tasas del mercado monetario
(TIB e IBR) se mantuvieran en niveles inferiores (15 pb en promedio) a la de expansión del
Banco de la República.
Entre octubre 30 y el 4 de diciembre, la tasa DTF disminuyó 10 pb y presentó un promedio
de 4,4%. En el mismo período, la tasa de CDT total descendió 44 pb y se ubicó al inicio de
diciembre en 4,42%. Con excepción de las tasas de interés para la construcción, de
adquisición de vivienda y de tarjeta de crédito, las demás tasas siguen recibiendo la
transmisión plena de la reducción de la tasa de política. Entre octubre 30 y noviembre 27
las tasas de créditos ordinarios, preferenciales, de tesorería y de consumo descendieron en
su orden, 90 pb, 75 pb, 33 pb y 46 pb En las mismas fechas las tasas de interés de la
construcción subieron 45 pb y la de adquisición de vivienda disminuyó 8 pb. Las de tarjeta
continúan acotadas por la tasa de usura.
5
En términos reales, la tasa activa promedio a noviembre (metodología BR) se situó en
7,12%, nivel más bajo desde junio de 2000 e inferior a su promedio histórico calculado
desde 1986.
La curva de los TES entre el 24 de noviembre y el 11 de septiembre registró movimientos a
la baja de 26 pb, y 11 pb en el tramo corto y medio, respectivamente. El tramo largo
aumentó 14 pb, llevando a un empinamiento de la curva.
2.
DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: i) la caída en el ritmo de
crecimiento de los precios durante el mes, superior a lo esperado por el mercado y los
trabajos técnicos del Banco; ii) la continua disminución en los indicadores de inflación
básica y de las expectativas de inflación que se sitúan en el rango meta fijado por la Junta
Directiva para el año entrante; iii) la reducción del crecimiento de los precios nuevamente
fue generalizada; iv) el efecto transitorio que podría tener sobre el crecimiento de los
precios el fenómeno del Niño; v) la mejora en el crecimiento de los indicadores de
confianza de productores y consumidores; vi) la recuperación del M3 y, en especial, de los
pasivos sujetos a encaje; vii) la cartera del sistema financiero en moneda legal que, aunque
sigue cayendo, crece por encima del PIB nominal; viii) las emisiones de bonos que han
complementado la financiación del sector real; ix) el comportamiento de las tasas de interés
del mercado en respuesta a la baja en la tasa de referencia del Banco; x) la contracción del
crecimiento de la economía venezolana para este año y sus perspectivas para 2010; xi) el
efecto de la tasa de cambio sobre la inflación y el crecimiento del producto de los sectores
transables; y xii) el comportamiento de las tasas de interés de los títulos de deuda pública.
Los principales puntos de análisis entre los miembros de la Junta se centraron en los
siguientes aspectos: i) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para 2009 y
2010, en especial un eventual repunte en los precios de los regulados y de los alimentos
debido al fenómeno climático de El Niño; ii) el efecto rezagado de las medidas de política
monetaria sobre la producción y los precios; iii) las proyecciones de crecimiento de la
economía para lo que resta del año y 2010 con una demanda interna más débil que la
proyectada, aunque recuperándose y un menor impulso fiscal el año entrante; iv) la fuerte
caída que se presentó en los últimos meses de las exportaciones a Venezuela y en el
producto de ese país; v) el comportamiento de los agregados monetarios y sus posibles
efectos en la reactivación económica; vi) la dinámica reciente en la cartera comercial del
sistema financiero ; vii) el balance de riesgos entre crecimiento e inflación en un contexto
de desaceleración de la economía y caída de la inflación; y viii) la necesidad de fortalecer la
credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación alrededor de la
meta de largo plazo.
La Junta Directiva destacó lo siguiente sobre el comportamiento de la inflación durante el
mes: i) la inflación anual al consumidor en el mes de noviembre mantuvo la tendencia
descendente que viene observando a lo largo del año; ii) los indicadores de inflación básica
6
y las expectativas de inflación continuaron disminuyendo; iii) la caída generalizada de los
precios de los distintos rubros que componen la canasta, abarcando así una amplia variedad
de bienes y servicios; iv) la inflación a fin del año se ubicará por debajo del punto medio
del rango meta de largo plazo (3%) y cercana al 2%.
Si bien el contexto externo ha mejorado en los últimos meses, la recuperación económica
de los países desarrollados sigue siendo lenta. Las perspectivas de mediano y largo plazo
para las economías de la región y de otros países emergentes son más favorables. No
obstante, las proyecciones de crecimiento para Venezuela muestran una caída importante
del PIB tanto para este año como para 2010.
La información disponible muestra que los niveles trimestrales del PIB se siguen
recuperando con tasas anuales de crecimiento bajas. Se destaca que el indicador de
confianza del consumidor de Fedesarrollo creció significativamente en noviembre.
La Junta Directiva considera que la política monetaria expansiva ha permitido una
disminución persistente de las tasas de interés de captación y colocación y que el actual
nivel de la tasa de referencia continúe estimulando el crecimiento económico en un
ambiente caracterizado por un sistema financiero saludable. En consecuencia se acordó
mantener inalterada la tasa de intervención del Banco en los niveles actuales.
3.
DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva acordó mantener inalterada la tasa de intervención del Banco de la
República en 3,5%.
Bogotá D. C., 30 de diciembre de 2009
|
2010-01-01 |
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
29 de Enero de 2010
El 29 de Enero de 2010 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión
ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del
Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente
General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos
Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan
Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de
crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas
con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los
principales temas tratados en dicha reunión.
1. ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor en diciembre se situó en 2%, con una
disminución de 37 pb respecto al mes de noviembre. Por su parte, la inflación
mensual (0,08%) fue positiva por primera vez en tres meses. Los indicadores
de inflación básica continuaron disminuyendo.
La variación anual de los precios de los alimentos descendió de 0,7%
en noviembre a -0,3% en diciembre.
El incremento anual de precios de los bienes regulados pasó de 1,5% en
noviembre a 2,6% en diciembre, debido a aumentos en los servicios públicos.
La variación anual de los precios de los bienes no transables sin
alimentos ni regulados bajó de 4,5% en noviembre a 4,4% en diciembre. Se
destaca la variación anual de los arriendos que pasó de 4,2% a 3,9% en el mes.
La de los de alta indexación se mantuvo en 6,8%, mientras que la de los
menos indexados pasó de 3,8% en noviembre a 3,7% en diciembre.
2
El aumento anual de precios de bienes transables sin alimentos ni
regulados cayó de 1,9% en noviembre a 1,4% en diciembre.
Las expectativas de inflación derivadas de las negociaciones de deuda
pública para 1, 5 y 10 años, se ubicaron en 3,07%, 4,17% y 4,47%,
respectivamente, con variaciones de 111 pb, 69 pb y 33 pb frente a los datos
promedio de diciembre.
La variación anual de los precios al productor (IPP) fue de -2,2% frente
a -3,9% del mes pasado.
b. Crecimiento
A finales de diciembre, el DANE dio a conocer el crecimiento anual del
PIB de -0,2% para el tercer trimestre del año pasado. Comparado con el del
segundo trimestre, el PIB del tercero aumentó 0,2%, completando tres
períodos sucesivos de expansión lenta del PIB en términos trimestrales.
En variaciones anuales, la contracción del PIB en el tercer trimestre de
2009 estuvo asociada con la caída en la inversión. El DANE registró un
descenso en la formación bruta de capital, que se explica por una fuerte
disminución de la inversión diferente a obras civiles. El otro componente de
la demanda interna, el consumo (público más privado) contribuyó
positivamente a la variación anual del PIB en este periodo. En el consumo
privado específicamente, el crecimiento anual fue nulo, lo que sin embargo
implica una mejora frente a las caídas de los dos trimestres anteriores y, en
niveles, resulta ligeramente superior al de estos. En cuanto al consumo del
gobierno, en el tercer trimestre se registró el mayor crecimiento anual en lo
corrido del año.
En lo que respecta a la demanda externa, las exportaciones
disminuyeron en términos anuales debido a menores ventas de café por la
caída en su producción y a las exportaciones a Venezuela, lo que se sumó a la
contracción de la demanda externa por cuenta de la crisis internacional. Por
otro lado, las importaciones volvieron a caer más que las exportaciones, esto
hizo que la demanda externa realizara un aporte positivo al crecimiento anual
del PIB.
Por ramas de actividad económica, los sectores que explicaron la caída
anual del PIB fueron, en su orden: industria, comercio, construcción de
3
edificaciones y transporte. Los sectores que más contribuyeron de manera
positiva a la variación anual del PIB del tercer trimestre fueron construcción
de obras civiles y minería.
Para el cuarto trimestre de 2009, la mayoría de los indicadores
disponibles muestran una expansión de la actividad económica en términos de
crecimientos anuales.
-
La variación anual a noviembre del índice de producción industrial (IPI)
sin trilla de café publicada por el DANE fue de 2,0%, el mejor registro para un
crecimiento anual de un mes desde abril de 2008.
-
En los últimos tres meses a noviembre, se observaron signos de
reactivación en cerca de la mitad de ramas industriales, dentro de las que se
encuentran sustancias químicas, muebles, tabaco y productos metálicos. Sin
embargo, otras ramas como prendas de vestir, papel, derivados del petróleo,
vidrio, cemento y aparatos eléctricos entre otros, siguieron sin mostrar señales
de recuperación. Algunas de estas industrias estarían siendo afectadas por las
restricciones comerciales de Venezuela.
-
La demanda total de energía (regulada y no regulada) creció a una tasa
anual de 3,4% en diciembre y de 2,6% en todo el último trimestre, siendo el
registro más alto desde finales de 2007.
-
El Índice de Confianza del Consumidor de Fedesarrollo (ICC) con datos
trimestralizados aumentó en el cuarto trimestre, a pesar de la caída que se
observó en el dato mensual de diciembre.
-
Las ventas al por menor en noviembre crecieron 2,0% en términos
anuales. En niveles, las ventas desestacionalizadas mostraron un aumento
frente a meses anteriores, con excepción de alimentos y bebidas
-
A diferencia del consumo, la inversión (por lo menos la que no incluye
obras civiles ni construcción de edificaciones) mantuvo crecimientos estables
a finales de 2009.
De acuerdo con la balanza de pagos observada al tercer trimestre de
2009, el déficit en cuenta corriente fue de US$3.456 millones (m) (2,1% del
PIB), menor en US$737 m al déficit registrado en el mismo período de 2008.
4
Dicha reducción se originó por una caída mayor en los egresos corrientes (-
US$7.019 m) que la de los ingresos corrientes (-US$6.282 m).
Dicho déficit se financió con entradas de capital por US$ 4.894 m (3
% del PIB), que provinieron principalmente de recursos del sector público
(incluido Ecopetrol) por US$ 6.165 m. El superávit de la cuenta de capital y
financiera es menor en US$ 2.166 m que el registrado durante el mismo
período de 2008, lo cual se explica por una disminución en los flujos netos de
capital por inversión extranjera directa (-US$ 2.410 m), mayores pagos de
deuda y constitución de inversiones de colombianos en el exterior.
En noviembre de 2009, las exportaciones totales en dólares
presentaron un crecimiento de 25,9% anual, principalmente por un aumento de
61,6% en las exportaciones con destino a Estados Unidos. Dicho
comportamiento se debe en gran parte a un efecto base, dado el bajo nivel
alcanzado por las exportaciones en el mes de noviembre de 2008 (un poco
mas de US$ 2.000 millones). Por su parte, en el mismo mes, las exportaciones
mensuales a Venezuela cayeron 71,5% en términos anuales.
Aunque entre enero y noviembre de 2009 las exportaciones totales en
dólares cayeron 14,4% anual, los niveles son superiores a los del mismo
período de 2007 (US$29.660 m en 2009 vs US$ 26.815 m en 2007). Durante
este período, la caída acumulada de las ventas externas a Estados Unidos fue
12,7%, a Venezuela 28,2% y a Ecuador 17%. En valores todos los sectores
exhibieron caídas (industrial -21%, minero -7,2% y agropecuario -1,6%), en
tanto que en volúmenes sólo el sector industrial mostró una reducción (-
19,4%).
En lo corrido del año al mes de noviembre de 2009, las importaciones
(CIF) ascendieron a US$ 29.836 m, disminuyendo 18,5% en términos anuales.
La importación de bienes intermedios se redujo en -27,6%, las de bienes de
consumo -12,5% y de capital -10,2%. En volúmenes las importaciones totales
también disminuyeron 7,6% en el acumulado a noviembre. A nivel mensual,
en noviembre de 2009 el valor de las importaciones fue inferior con respecto
al registrado en el mismo período del año anterior (-14,2%), principalmente
por una caída de las importaciones de bienes de capital de 21,6%.
La gran encuesta integrada de hogares (GEIH) muestra un aumento del
empleo para el trimestre móvil septiembre - noviembre de 2009 de 4,3% anual
en las 13 principales áreas urbanas. Al analizar las series desestacionalizadas
5
se observa un aumento en los niveles de ocupación en la segunda mitad de
2009 frente al primer semestre. Sin embargo, este aumento se concentró en los
trabajadores no asalariados toda vez que el empleo asalariado se mantuvo
estancado a lo largo del año.
c. Contexto externo
Durante el cuarto trimestre de 2009, la economía mundial continuó
recuperándose gracias al dinamismo de los países del Asia. Esta reactivación
se reflejó desde mediados de año en un crecimiento del comercio
internacional, que alcanzó en algunos países niveles similares a los de 2007.
Los principales analistas consideran que la economía mundial en el 2010
seguirá siendo liderada por Asia, lo que favorecerá los términos de
intercambio en Colombia y otros países de la región. Pese a ello, los riesgos en
las economías desarrolladas siguen siendo altos, por lo que todavía se espera
una recuperación lenta en 2010. Por esta razón, los pronósticos de crecimiento
solo se aumentaron levemente, en especial para EEUU.
En materia de precios, si bien la inflación anual aumentó en los últimos
meses en los países industrializados, esto se explica por efectos de una menor
base en la segunda mitad de 2008 (por la caída en los precios de la energía).
Sin embargo, la inflación básica se ha mantenido estable y en algunos casos ha
disminuido. En vista de ello y del débil crecimiento previsto, no se esperan
presiones inflacionarias importantes durante los próximos trimestres: los
analistas proyectan una inflación para EEUU de 2,1% en 2010 y de 2% en
2011
En cuanto a las economías emergentes, la recuperación económica ha
sido liderada por los países del Asia, en particular China e India. China
reportó un crecimiento anual de 10,7% en el cuarto trimestre, con lo cual
dicha economía creció 8,7% en 2009. Respecto a América Latina, algunos
países como Brasil y Chile muestran claros signos de recuperación y en el
tercer trimestre, varios países de la región alcanzaron los niveles de PIB de
2008.
Durante el último trimestre de 2009 la mayoría de monedas de la región
se apreciaron. Sin embargo en las últimas cuatro semanas terminadas el 25 de
enero el comportamiento fue mixto: mientras que Brasil y Chile se han
depreciado, Colombia y Perú han reportado apreciaciones. Adicionalmente, en
Venezuela el gobierno decretó una importante devaluación del bolívar. Las
6
primas de riesgo han permanecido estables y se ubican en niveles anteriores a
la quiebra de Lehman Brothers
d. Variables financieras
El M3 pasó de crecer 16,4% anual en julio de 2009 a 10,3% en
septiembre del mismo año y a 7,3% en enero 15 de 2010. El comportamiento
de los Pasivos Sujetos a Encaje –PSE-, especialmente de los CDT, explica la
mayor parte de la desaceleración de M3. No obstante lo anterior, el M3
continúa aumentando más que la actividad económica y la relación M3/ PIB
se encuentra en el nivel máximo calculado desde diciembre de 1989.
En el mercado del crédito, tanto en los datos como en las expectativas
sobre la evolución de la cartera bruta total se observan señales de
estabilización. En algunas modalidades como la cartera hipotecaria y la de
consumo, se registran signos de recuperación. En el caso de la cartera
comercial, su desaceleración ha sido compensada por el incremento en la
colocación de bonos emitidos por grandes empresas.
En septiembre de 2009 la cartera bruta total creció 8,1% anual, mientras
que a diciembre y lo corrido de enero del presente año, lo hizo a un ritmo de
4,9% y 5,3%, respectivamente. Por modalidades, la más dinámica ha sido la
hipotecaria que pasó de un crecimiento anual de 14,6% en septiembre a 18,3%
anual en lo corrido de enero. En las mismas fechas el ritmo de aumento anual
de la de consumo pasó de 0,6% a 1,5% y la comercial de 9,3% a 4%.
Parte de la desaceleración de la cartera comercial se explica por la
emisión de bonos de las empresas. Al sumar bonos corporativos más cartera
comercial su saldo se mantuvo estable en el último trimestre de 2009, con
crecimientos nominales y reales de 5,3% y 2,9%, respectivamente.
Con respecto a la disponibilidad de crédito, la última encuesta trimestral
realizada por el Banco de la República a empresarios, comerciantes,
transportadores, analistas financieros, académicos y sindicatos, muestra que
en su mayoría los agentes de la economía la perciben como alta, tendencia que
ha sido creciente desde el primer trimestre de 2009. Por el lado de la oferta de
crédito ganó terreno la preferencia hacia el otorgamiento de crédito,
especialmente a las empresas que producen para el mercado interno y a las
empresas con inversión extranjera. En la misma encuesta se observa que el
sistema financiero está más dispuesto a atender las solicitudes de crédito y no
7
contempla aumentar los requerimientos de aprobación, con la posibilidad
incluso de que los disminuyan.
En materia de tasas de interés, las del mercado interbancario a 1 día se
acercaron a la tasa de referencia del Banco y las activas y pasivas continuaron
descendiendo. Al 22 de enero, la DTF se situó en 4,10%, cuando cuatro y
trece semanas atrás eran 4,14% y 4,45% respectivamente. En el caso de
créditos comerciales, en enero 15 las tasas de interés de préstamos ordinarios
fueron 10,56%, la de crédito preferencial 7,63%, y la de tesorería 7,12%. En
su orden, estas cifras fueron menores en 4 pb, 15 pb y 2 pb a las de un mes
atrás. En el trimestre y en el mismo orden, los descensos fueron de 60 pb, 57
pb y 67 pb. En los créditos a los hogares también se presentaron caídas en las
tasas de interés. Para el consumo, los registros a octubre 16, diciembre 11 y
enero 15 fueron 21,20%, 20,43% y 19,98%, respectivamente. En las mismas
fechas para los créditos de vivienda las observaciones fueron 14,14%, 13,84%
y 13,66%.
La curva de los TES entre el 21 de diciembre y el 26 de enero registró
movimientos al alza de 63 pb, 91 pb y 34 pb en el tramo corto, medio y largo
respectivamente.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el
resultado de la inflación a fin de año y la caída en el ritmo de crecimiento de
los precios durante el mes, que fue nuevamente generalizada; (ii) la
disminución en los indicadores de inflación básica; (iii) el efecto transitorio
que podría tener sobre el crecimiento de los precios el fenómeno del Niño; (iv)
la mejora en el crecimiento de los indicadores de confianza de productores y
consumidores; (v) el comportamiento del M3 y, en especial, de los pasivos
sujetos a encaje; (vi) la cartera del sistema financiero en moneda legal que
sigue creciendo por encima del PIB nominal; (vii) las emisiones de bonos que
han complementado la financiación del sector real; (viii) el comportamiento
de las tasas de interés del mercado en respuesta a la baja en la tasa de
referencia del Banco; (ix) el efecto de la tasa de cambio sobre la inflación y el
crecimiento del producto de los sectores transables; y (x) el comportamiento
de las tasas de interés de los títulos de deuda pública.
8
Los principales puntos de análisis entre los miembros de la Junta se
centraron en los siguientes aspectos: (i) los elementos que afectan las
proyecciones de inflación para 2010, en especial un eventual repunte
transitorio en los precios de los regulados y de los alimentos debido al
fenómeno climático del Niño; (ii) el efecto rezagado de las medidas de política
monetaria sobre la producción y los precios; (iii) las proyecciones de
crecimiento de la economía para 2010; (iv) la fuerte caída que se presentó en
los últimos meses de las exportaciones a Venezuela y en el producto de ese
país; (v) el comportamiento de los agregados monetarios y sus posibles
efectos en la reactivación económica; (vi) la dinámica reciente en la cartera
comercial del sistema financiero; (vii) el balance de riesgos entre crecimiento
e inflación en un contexto de desaceleración de la economía y caída de la
inflación; y (viii) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad
monetaria y anclar las expectativas de inflación alrededor de la meta de largo
plazo.
La Junta Directiva destacó lo siguiente sobre el comportamiento de la
inflación durante el mes: (i) la inflación anual al consumidor cerró el año con
un registro de 2%; (ii) los indicadores de inflación básica (aquella que excluye
los precios de los productos más volátiles como los alimentos) continuaron
cayendo, mientras que las expectativas de inflación a un año siguen en el
rango meta fijado por la Junta, que coincide con el de largo plazo (entre 2% y
4%) y; (iii) durante el mes de diciembre se observó de nuevo una caída
generalizada de los precios de los distintos rubros que componen la canasta,
abarcando así una amplia variedad de bienes y servicios.
La economía mundial continuó recuperándose, en especial gracias al
dinamismo de los países del Asia. Esta reactivación se refleja en un
incremento del comercio internacional y de los precios de productos básicos,
lo que ha llevado a que los pronósticos de crecimiento aumentaran para el
2010. Por su parte, las perspectivas de mediano y largo plazo para las
economías de la región y de otros países emergentes siguen siendo favorables.
No obstante, las proyecciones de crecimiento para Venezuela fueron revisadas
nuevamente a la baja.
La información disponible muestra que los niveles trimestrales del PIB
se siguen recuperando. A lo anterior se suman señales de recuperación de la
demanda agregada como son: la mejoría en el indicador de confianza de los
consumidores y de los sectores industriales vinculados con la construcción de
9
obras civiles, la estabilización de los indicadores de capacidad instalada y la
recuperación de los niveles de importación de materias primas.
La Junta Directiva considera que la política monetaria expansiva ha
permitido una disminución persistente de las tasas de interés de captación y
colocación y que el actual nivel de la tasa de referencia continúe estimulando
el crecimiento económico en un ambiente caracterizado por un sistema
financiero saludable. En consecuencia se acordó mantener inalterada la tasa de
intervención del Banco en los niveles actuales.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva acordó mantener inalterada la tasa de intervención
del Banco de la República en 3,5%.
Bogotá DC, febrero 12 de 2010.
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2010-02-01 |
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
26 de Febrero de 2010
El 26 de Febrero de 2010 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión
ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del
Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente
General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos
Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan
Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de
crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas
con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los
principales temas tratados en dicha reunión.
1. ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor en enero se situó en 2,1%, 10 pb más
que en diciembre. La inflación mensual fue de 0,69% y los indicadores de
inflación anual básica aumentaron por primera vez desde comienzos del 2009.
La variación anual de los precios de los alimentos descendió de -0,3%
en diciembre a -0,5% en enero. Si bien el grupo de productos perecederos
mostró aumentos en sus precios, estos fueron más que compensados por el
mejor comportamiento de los no perecederos y las comidas fuera del hogar.
El incremento anual de precios de los bienes regulados pasó de 2,6% en
diciembre a 3,9% en enero, debido a aumentos en todos los componentes de
esta subcanasta, especialmente gas domiciliario y transporte público.
La variación anual de los precios de los bienes no transables sin
alimentos ni regulados se mantuvo estable en 4,4%. Se destaca la variación
mensual de los arriendos que aumentaron 0,4%, por encima de lo registrado
en el mismo mes en otros años.
2
El aumento anual de precios de bienes transables sin alimentos ni
regulados cayó de 1,4% en diciembre a 1,2% en enero, lo que refleja la
apreciación de la tasa de cambio acumulada en los últimos meses y la
estabilidad en los precios internacionales de los productos industriales.
Con datos preliminares para febrero, las expectativas de inflación
derivadas de las negociaciones de deuda pública para 1, 5 y 10 años, se
ubicaron en 4,26%, 4,89% y 5,05%, respectivamente, con variaciones de 57
pb, 64 pb y 65 pb frente a los datos promedio de enero.
Las expectativas de inflación de la encuesta mensual realizada por el
Banco de la República a comienzos de febrero aumentaron levemente, pero se
mantienen dentro del rango meta de largo plazo fijado por la Junta Directiva.
La variación anual de los precios al productor (IPP) fue de 0,5% frente a
-2,2% del mes pasado.
b. Crecimiento
La información disponible sobre la actividad real en diciembre y enero
indica que la recuperación de la economía mantuvo una dinámica débil,
afectada por la caída de las ventas a Venezuela. Si bien los indicadores de
consumo presentan una recuperación leve, los de industria y comercio no
muestran una tendencia clara.
Algunos indicadores relevantes son los siguientes:
-
De acuerdo con el DANE, el crecimiento de la producción industrial del
mes de diciembre fue 2,0%, mejor que el previsto por el equipo técnico del
Banco.
-
Las preguntas sobre pedidos y existencias de la Encuesta de Opinión
empresarial de FEDESARROLLO de diciembre sugieren que la industria se
demoraría en volver a los niveles de actividad económica previos a la crisis,
ya que la dinámica que exhiben estos indicadores, cuando son depurados
estadísticamente, es baja.
3
-
La demanda de energía no regulada industrial cayó en términos anuales
2,6% en enero, deteniendo la recuperación que se presentó en el cuarto
trimestre del año pasado.
-
Las expectativas de los empresarios relacionadas con la actividad
industrial de la Encuesta de Opinión Empresarial de FEDESARROLLO de
noviembre y diciembre son optimistas. En particular, en los dos últimos meses
del 2009 las expectativas de producción a tres meses muestran una tendencia
creciente, con niveles superiores a los observados en 2008 y en el primer
semestre de 2009.
-
La Encuesta de Opinión Empresarial para comercio con datos a
diciembre señala que los empresarios esperan una recuperación económica a
comienzos de 2010. La encuesta de FENALCO con información a enero prevé
un crecimiento en ventas bajo frente a lo observado en años anteriores.
-
La demanda de energía total creció 2,5% en términos anuales, tasa
inferior a la registrada en los dos meses anteriores.
-
La producción de café en enero cayó 40%, comparada frente al mismo
mes del año anterior, según estimaciones de la Federación Nacional de
Cafeteros.
Los indicadores disponibles por el lado de la demanda con información a
enero muestran que el consumo privado está recuperándose a un ritmo
moderado:
-
El Índice de Confianza del Consumidor (ICC) de FEDESARROLLO,
con datos a enero, indica que la confianza de los agentes se mantiene en los
niveles alcanzados en el tercero y cuarto trimestres del año anterior. Dada la
alta correlación de dicho indicador con el consumo total de los hogares, el
dato de enero indica que esta demanda estaría expandiéndose todavía a una
tasa menor que la del promedio histórico.
-
El Comité Automotor Colombiano y la firma Econometría reportaron
que las ventas de vehículos en enero mostraron un crecimiento anual de 6,8%.
Las ventas de automóviles han estado altamente correlacionadas con el
consumo de bienes durables según lo mide el DANE en cuentas nacionales.
4
Las exportaciones totales en dólares ascendieron en 2009 a US$ 32.849
millones (m) con una reducción de 12,7% anual. Dicha caída se explica
principalmente por las menores ventas a Estados Unidos (-8,2%) y Venezuela
(-33,5%). En valores, todos los sectores presentaron caídas (industrial -20,3%,
minero -3,4% y agropecuario -2,5%), en tanto que en volúmenes sólo el sector
industrial mostró una reducción (-17,6%).
Las exportaciones totales en diciembre de 2009 aumentaron 7,6% con
respecto al mismo mes del año 2008, hecho que se explica principalmente por
el crecimiento de 51,7% de las exportaciones mineras. Por su parte, las ventas
externas agropecuarias e industriales en dólares cayeron a tasas anuales de
12,8% y 13,4%, respectivamente.
Así mismo, se observó en diciembre de 2009 un aumento importante de
las exportaciones con destino a los Estados Unidos (50,9% anual), el cual se
explicó principalmente por las ventas de petróleo y derivados. Por su parte, las
exportaciones mensuales a Venezuela cayeron 77,6% en términos anuales.
En el 2009 las importaciones (CIF) fueron de US$ 32.897 m,
disminuyendo 17,1% en términos anuales. La reducción más importante se
observó en las importaciones de bienes intermedios (-25,4%), seguida por las
de bienes de consumo (-11,9%) y por las de bienes de capital (-9,62%). En
volúmenes, todas las importaciones cayeron, acumulando una disminución de
6,6% en el total. A nivel mensual, en diciembre de 2009 el valor total de las
importaciones fue similar al registrado en el mismo mes de 2008 (menor en
0,1%).
c. Contexto externo
La recuperación de la economía mundial continuó a finales de 2009,
aunque el desempeño de los países no fue homogéneo. Para comienzos de
2010 la información disponible muestra que esta recuperación continúa. En
efecto, la producción industrial de EE.UU. siguió expandiéndose y presenta un
crecimiento anual positivo, mientras que el sentimiento empresarial mejoró
moderadamente en diciembre y enero en la mayoría de países y se mantiene
en niveles que indican expansión de la actividad económica.
Pese a este entorno favorable, en el último mes se presentaron
dificultades relacionadas con los problemas de endeudamiento público de
5
Grecia. Esto ha generado un aumento en la percepción de riesgo hacia éste y
otros países altamente endeudados como España, Portugal e Irlanda, lo cual se
reflejó en el incremento de los márgenes de los bonos soberanos de esos
países. Esta situación llevó a presiones sobre el Euro, que se debilitó frente al
dólar y golpeó la confianza de los inversionistas y el desempeño de los
mercados bursátiles de las economías desarrolladas.
En cuanto a las economías emergentes, los problemas de la deuda
pública en Europa han tenido un impacto bajo. Si bien las primas de riesgo de
los países de la región se incrementaron un poco en el último mes, en la última
semana esto se revirtió parcialmente. Varias de las monedas incluyendo el
peso colombiano permanecieron estables, y otras como el real y el peso
chileno presentaron una depreciación de 7% entre enero y la primera semana
de febrero.
En materia de crecimiento, en la región algunos países como Brasil y
Chile ya muestran claros signos de recuperación, los cuales se aprecian en
indicadores como la producción industrial y las exportaciones. En general, las
perspectivas de mediano plazo para los países en vía de desarrollo son más
favorables que para las economías avanzadas.
d. Variables financieras
El crecimiento anual de los principales agregados monetarios durante
las últimas 9 semanas se estabilizó en torno a tasas entre el 5,0% y 8,0%. En el
caso de M3, la estabilidad en la tasa de crecimiento fue el resultado de una
aceleración de los ahorros y una desaceleración de la captación a plazo.
La cartera bruta total creció a una tasa anual nominal de 5,8% a
comienzos de febrero, ligeramente mayor que la de finales de 2009 (4,9%).
Aunque la cartera destinada al consumo creció poco (2,3% nominal), los
desembolsos continuaron fortaleciéndose y aumentaron 26,6% anual. En la
cartera hipotecaria el crecimiento del saldo es mucho más alto (18,1%) y los
desembolsos aumentaron 48%. Por su parte, la cartera comercial creció 4,5%
frente a 3,5% de finales de 2009, mientras que los desembolsos se debilitaron
en enero, en especial los dirigidos a los constructores para financiación de
vivienda. En los últimos tres meses se muestra una aceleración del crédito
hipotecario y de consumo.
6
Durante el mes de enero y comienzos de febrero, las tasas interbancarias
(TIB e IBR) se acercaron a la tasa de política. El descenso generalizado de las
demás tasas de interés que caracterizó el cuarto trimestre de 2009 se mantuvo
hasta mediados de enero, pero se interrumpió en las últimas dos semanas de
ese mes, excepto para las tasas de interés de crédito de tesorería. En términos
reales, todas las tasas de interés promedio se redujeron en enero.
Los títulos de deuda pública presentaron un comportamiento mixto
durante enero, con una desvalorización en los títulos de mediano plazo (24
pb), una valorización en los de corto plazo (-35 pb) y estabilidad en los de
largo plazo (2 pb).
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el
resultado de la inflación a enero que fue menor que la proyectada por el
equipo técnico del Banco de la República, especialmente por el buen
comportamiento de los precios de los alimentos; (ii) el aumento en los
indicadores de inflación básica; (iii) el efecto transitorio que podría tener
sobre el crecimiento de los precios el fenómeno del Niño; (iv) el optimismo
en los indicadores de confianza de productores y consumidores; (v) el
crecimiento de los agregados monetarios, que se situó en torno a tasas entre el
5% y el 8%; (vi) la cartera del sistema financiero en moneda legal que sigue
creciendo por encima del PIB nominal; (vii) el comportamiento de las tasas de
interés del mercado en respuesta a la baja en la tasa de referencia del Banco;
(viii) el efecto de la tasa de cambio sobre la inflación y el crecimiento del
producto de los sectores transables; y (ix) las tasas de interés de los títulos de
deuda pública, que mostraron un comportamiento mixto en los diferentes
tramos.
Los principales puntos de análisis entre los miembros de la Junta se
centraron en los siguientes aspectos: (i) los elementos que afectan las
proyecciones de inflación para 2010, en especial un eventual repunte
transitorio en los precios de los regulados y de los alimentos debido al
fenómeno climático del Niño; (ii) el efecto rezagado de las medidas de política
monetaria sobre la producción y los precios; (iii) las proyecciones de
crecimiento de la economía para 2010; (iv) la fuerte caída que se prevé en las
exportaciones a Venezuela; (v) el comportamiento de los agregados
monetarios y sus posibles efectos en la reactivación económica; (vi) la
dinámica reciente en la cartera comercial e hipotecaria del sistema financiero;
7
(vii) el aumento en las expectativas de inflación; (viii) el balance de riesgos
entre crecimiento e inflación en un contexto de una economía que muestra
todavía una dinámica débil y una inflación que se ubica dentro del rango de
largo plazo fijado por la Junta Directiva; y (ix) la necesidad de fortalecer la
credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación
alrededor de la meta de largo plazo.
La Junta Directiva destacó lo siguiente sobre el comportamiento de la
inflación durante el mes: (i) la inflación anual al consumidor en enero fue de
2,1% frente al 2% con que cerró en diciembre; (ii) los indicadores de inflación
básica aumentaron levemente al igual que las expectativas de inflación a un
año que, sin embargo, siguen en el rango meta fijado por la Junta, que
coincide con el de largo plazo (entre 2% y 4%); (iii) el comportamiento de la
inflación anual en enero se debió fundamentalmente al aumento de los bienes
regulados; (iv) los alimentos, a pesar de la presencia del fenómeno del Niño,
continuaron disminuyendo; (v) si bien los productos perecederos presentaron
alzas en los precios, éstos fueron más que compensados por los no
perecederos y las comidas fuera del hogar; (vi) las proyecciones de inflación
del Banco incorporan aumentos transitorios en los precios de los alimentos
como consecuencia del fenómeno del Niño, aumentos que se espera se
reviertan en el segundo semestre del año.
La economía de los Estados Unidos, principal mercado de exportación,
mostró en el cuarto trimestre de 2009 y en lo corrido del año un crecimiento
mayor al esperado por los analistas internacionales. Las perspectivas de
mediano y largo plazo para las economías de la región y de otros países
emergentes siguen siendo favorables.
La información disponible muestra que los niveles trimestrales del PIB
se siguen recuperando lentamente. Se destaca que las expectativas de los
empresarios han tenido una evolución favorable y que el consumo privado
muestra una mayor dinámica.
La Junta Directiva considera que la política monetaria expansiva ha
permitido una disminución persistente de las tasas de interés de captación y
colocación y que el actual nivel de la tasa de referencia continúa estimulando
el crecimiento económico en un ambiente caracterizado por un sistema
financiero saludable. En consecuencia, se acordó mantener inalterada la tasa
de intervención del Banco en los niveles actuales.
8
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva acordó mantener inalterada la tasa de intervención
del Banco de la República en 3,5%.
Bogotá DC, marzo 12 de 2010.
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2010-03-01 |
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
26 de Marzo de 2010
El 26 de Marzo de 2010 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión
ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del
Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente
General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos
Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan
Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de
crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas
con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los
principales temas tratados en dicha reunión.
1. ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor en febrero se situó en 2,09%, 1 pb
menos que en enero. La inflación mensual fue de 0,83% y todos los
indicadores de inflación anual básica disminuyeron.
La variación anual de los precios de los alimentos pasó de -0,5% en
enero a -0,1% en febrero, pero estuvo por debajo de las proyecciones del
equipo técnico.
En lo corrido del año, los precios de los alimentos perecederos han
tenido alzas como consecuencia del fenómeno del Niño. Sin embargo, otros
componentes de la canasta han disminuido por los siguientes factores: (i)
caída en el precio de la carne por la debilidad de la demanda interna y el cierre
de las exportaciones hacia el mercado venezolano, (ii) ajustes moderados en
los precios de las comidas fuera del hogar, también por la debilidad de la
demanda interna y el ajuste moderado en el salario mínimo y (iii) estabilidad
en los precios de los alimentos importados.
2
El incremento anual de precios de los bienes regulados pasó de 3,9% en
enero a 4,2% en febrero, debido a aumentos autorizados por el Gobierno en
los precios de la gasolina y el ACPM.
La variación anual de los precios de los bienes no transables sin
alimentos ni regulados cayó de 4,4% en enero a 3,9% en febrero,
consolidándose la tendencia decreciente que se observa desde septiembre del
año pasado.
El aumento anual de precios de bienes transables sin alimentos ni
regulados cayó de 1,2% en enero a 1% en febrero, determinado, en parte, por
la apreciación del peso frente al dólar acumulada en los últimos meses.
Con datos preliminares para marzo, las expectativas de inflación
derivadas de las negociaciones de deuda pública para 1, 5 y 10 años
disminuyeron, situándose en 3,87%, 4,71% y 4,46%, con caídas de 39 pb, 18
pb y 60 pb, respectivamente.
Las expectativas de inflación de la encuesta mensual realizada por el
Banco de la República a comienzos de marzo disminuyeron y se ubican dentro
del rango meta de largo plazo fijado por la Junta Directiva.
La variación anual de los precios al productor (IPP) fue de -0,4%, frente
a 0,5% del mes pasado.
b. Crecimiento
El DANE dio a conocer el crecimiento anual del PIB del cuarto
trimestre del año pasado y de todo 2009. La economía colombiana creció
0,4% en todo 2009 y 2,5% anual el cuarto trimestre, resultados superiores a
los previstos por las proyecciones del equipo técnico. Comparado con el PIB
del tercer trimestre, el del cuarto registró un aumento de 1,1% (4,7% trimestral
anualizado). De esta manera, los niveles del PIB aumentaron en los cuatro
trimestres del año y la única caída en niveles se presentó en el cuarto trimestre
de 2008.
Por el lado de la demanda, el crecimiento del PIB en 2009 estuvo
impulsado por la inversión en obras civiles, el consumo público y, en menor
medida, por el consumo de los hogares. El consumo privado presentó caídas
anuales leves en el primer semestre del año pero mostró una recuperación en
3
la segunda mitad del año, superando en el cuarto trimestre el nivel máximo
observado en 2008.
Las exportaciones netas contribuyeron también positivamente al
crecimiento anual del PIB para todo 2009, debido a que la fuerte caída de las
importaciones compensó el descenso observado en las ventas externas.
Finalmente, la inversión diferente de obras civiles mostró en 2009 una
fuerte caída anual. La contracción en este tipo de gasto estuvo asociada con la
menor inversión en maquinaria y equipo del sector industrial.
Por ramas de actividad económica, los sectores que más contribuyeron
al crecimiento anual del PIB tanto en todo 2009 como en el cuarto trimestre,
fueron las obras civiles, la minería y el sector financiero. Las obras civiles
registraron un crecimiento anual por encima de 40% en el segundo semestre.
El sector minero estuvo impulsado por el PIB petrolero, que mantuvo una
permanente expansión a lo largo de todo el año, creciendo siempre a tasas
anuales superiores al 10%.
Los sectores con mayores caídas en 2009 fueron la construcción de
edificaciones y la industria. Para el primer sector, las cifras del cuarto
trimestre aún no arrojan señales claras de reactivación. En el caso del PIB
industrial, sin embargo, se observó una ligera recuperación en sus niveles
durante el segundo semestre del año. Otro sector que también registró
contracciones durante todo 2009 fue el transporte, mientras que el comercio
solo tuvo un crecimiento anual débil en el cuarto trimestre del año.
Los indicadores disponibles de actividad económica para enero y
febrero de 2010, en especial el de las ventas al por menor y el de la demanda
por energía, dan indicios de que la recuperación del primer trimestre podría
ser más rápida que la anticipada. En adición a ello, las expectativas de los
empresarios (tanto industriales como comerciantes) sobre el desempeño de la
economía en los próximos meses se mantienen en niveles relativamente altos.
Algunos indicadores relevantes son los siguientes:
-
En enero la variación anual del índice de producción industrial fue de
1,6%, registro mayor que el proyectado por el equipo técnico.
4
-
La encuesta de opinión empresarial de Fedesarrollo muestra que los
industriales mantienen unas altas expectativas para la producción de los
siguientes tres meses.
-
La percepción positiva de la situación económica actual y a 6 meses por
parte de los comerciantes en enero siguió aumentando, de acuerdo con la
encuesta de Fedesarrollo.
-
Los indicadores de Fenalco con información a febrero revelan un
repunte de las ventas del sector, aunque todavía en niveles bajos.
-
La demanda de energía total (regulada y no regulada excluidas las
exportaciones) creció en febrero 5,6% en términos anuales, el mejor
comportamiento desde febrero de 2008.
-
La cantidad de pasajeros en vuelos nacionales en enero se mantuvo muy
dinámica (creciendo más del 30% anual), mientras que el transporte aéreo de
carga se recuperó frente a lo observado en diciembre.
-
El Índice de Confianza del Consumidor (ICC) de Fedesarrollo, con
datos a febrero, muestra que la confianza de los agentes creció por segundo
mes consecutivo, aunque aún se ubica en niveles relativamente bajos.
-
Las ventas al por menor mostraron un importante crecimiento anual en
el mes de enero (8,8%), jalonado principalmente por las ventas de
automóviles, que presentaron un crecimiento anual de 30,6%. De acuerdo
con la información del Comité Automotor Colombiano, dichas ventas
habrían crecido en febrero a una tasa también alta (10%) y
-
Las importaciones de bienes de capital en pesos constantes continuaron
mostrando crecimientos negativos en enero.
En enero de 2010, las exportaciones totales en dólares ascendieron a
US$ 2.913 millones (m) con un crecimiento de 15,3% anual. Dicho
crecimiento se explica principalmente por las mayores ventas a Estados
Unidos (80%) y Asia (112%). En valores, los sectores minero y agropecuario
exhibieron crecimientos anuales de 45,8% y 23,8%, respectivamente. Las
exportaciones industriales registraron una reducción de 9,1%. Al excluir de las
exportaciones industriales el café, el ferroníquel, el oro y los derivados del
petróleo, se observa una reducción en el valor en dólares de 21,6% anual. Por
5
su parte, los volúmenes de todos los sectores mostraron una reducción (-
13,7%).
La recuperación de las exportaciones totales durante el mes de enero,
con respecto al mismo mes de 2009, se dio, principalmente, por las ventas de
crudo y derivados a los mercados de Estados Unidos y Asia. Así mismo, se
observó un aumento importante de las exportaciones industriales (sin café,
derivados del crudo, oro y ferroníquel) con destino a los Estados Unidos de
28% anual, el cual se originó, principalmente, en las ventas de alimentos y
bebidas. Por su parte, las exportaciones en enero a Venezuela cayeron 77% en
términos anuales, destacándose los productos de origen industrial (-68%) y
agropecuario (-100%)
En enero de 2010, las importaciones (CIF) ascendieron a US$ 2.697 m,
disminuyendo 3,1% en términos anuales. Dicha reducción se origina en la
contracción de las importaciones de bienes de capital (-17,8% anual). En
volúmenes, las importaciones aumentaron en 24,6% anual debido al
comportamiento registrado por las cantidades de bienes intermedios (39,1%).
En el trimestre móvil terminado en enero, la tasa de desempleo (TD)
nacional se ubicó en 12,3% y la de 13 áreas en 13,2%. Corrigiendo por
estacionalidad, la TD se redujo levemente en ambos dominios frente a
diciembre de 2009, lo que sugiere que este indicador habría dejado de
deteriorarse por primera vez desde finales de 2007.
c. Contexto externo
La información disponible muestra que la economía de los EE.UU.
creció en el cuarto trimestre 5,9% (trimestral anualizado) y que habría
continuado expandiéndose a comienzos de 2010. La producción industrial y
las ventas al por menor en ese país siguieron aumentando en enero y febrero,
así como el crédito de consumo que presentó en enero un repunte después de
20 meses de caídas continuas. En contraste, los países europeos parecen
mostrar un estancamiento en su crecimiento.
La economía venezolana se contrajo 5,8% en el cuarto trimestre y
durante todo el año decreció 3,3%. Para 2010 los analistas esperan un
crecimiento negativo de -0,4%, lo que junto con las restricciones comerciales
mantendría las ventas de productos colombianos hacia ese país en niveles muy
bajos.
6
El crecimiento en los países desarrollados y emergentes y, en particular,
el acelerado crecimiento de las economías de China e India, siguen
sosteniendo los precios de los productos básicos en niveles relativamente
altos. Si este impulso en la demanda mundial continúa como se espera, los
precios tenderían a conservar los actuales niveles. Por su parte, los indicadores
de actividad económica de Brasil, Chile y Perú mostraron una tendencia
ascendente en el cuarto trimestre del año pasado y en lo corrido de 2010.
En este entorno, la inflación total se ha incrementado en la mayoría de
economías desarrolladas por el efecto de los energéticos. Sin embargo, esto no
parece obedecer a una tendencia de largo plazo pues la inflación básica se
mantiene baja (excepto en Reino Unido), e incluso ha disminuido.
Los mercados siguen exhibiendo nerviosismo en torno a la deuda
soberana de Europa, en particular de Portugal y Grecia. Por esta razón, el euro
continuó debilitándose frente al dólar. Los problemas de la deuda pública en
Europa han tenido un impacto relativamente leve en las economías emergentes
incluida América Latina. Aunque las primas de riesgo para la región habían
aumentado un poco en febrero, esto se revirtió en lo corrido de marzo. Las
monedas de la región se apreciaron frente al dólar, excepto por el peso
chileno.
d. Variables financieras
En los últimos dos meses, las variaciones anuales de los pasivos sujetos
a encaje (PSE) y del M3 han permanecido relativamente estables. Durante las
últimas 13 semanas, el crecimiento anual de dichos agregados se ubicó en
7,8% y 7,4%, respectivamente. Para febrero de 2010, el crecimiento real de
M3 se situó en 4,2%, similar al registrado en enero del mismo año.
El crédito total en M/N creció a una tasa anual nominal de 6,0% a
comienzos de marzo, ligeramente mayor que el de un mes atrás (5,5%).
Aunque la cartera destinada al consumo sigue aumentando poco (3,4%
nominal a comienzos de marzo), se presentó un repunte frente al crecimiento
observado el mes anterior (2,3%) como resultado del fortalecimiento de los
desembolsos (26,1% anual). En la cartera hipotecaria ajustada, el crecimiento
del saldo es mucho más alto (16,7%) y los desembolsos se expanden al 54%.
Por su parte, la cartera comercial creció 4,7% frente a 4,5% observado un mes
atrás.
7
Al agregar el crédito comercial y la colocación de bonos ($445 mm), el
saldo resultante a febrero es de $100.7 b, con un incremento en lo corrido del
año de 1,3% y anual de 8,2%. En marzo ya se realizaron colocaciones de
bonos por $234 mm.
Durante comienzos de marzo, las tasas interbancarias (TIB e IBR) han
continuado acercándose a la tasa de política. A partir de marzo 16 se ubicaron
en promedio 5 pb por debajo de este indicador. Con datos mensuales a
febrero, las tasas nominales activas han registrado disminuciones moderadas
con respecto a enero, mientras que las pasivas se mantuvieron estables. En
términos reales, todas las tasas de interés promedio de febrero aumentaron,
con excepción de las de tesorería y consumo.
Los títulos de deuda pública de mediano y largo plazo, se valorizaron -
22pb y -36 pb, respectivamente, en las últimas cuatro semanas terminadas el
16 de marzo.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el
resultado de la inflación a febrero, que fue menor que la proyectada por el
equipo técnico del Banco de la República y por el mercado, en un buen
número de las subcanastas que conforman el índice de precios al consumidor;
(ii) la caída en los indicadores de inflación básica luego del aumento
presentado en enero; (iii) el efecto transitorio que podría tener sobre el
crecimiento de los precios el fenómeno del Niño; (iv) el resultado del
crecimiento para todo el 2009 y en el último trimestre, superior a lo
proyectado por el equipo técnico; (v) los indicadores disponibles de actividad
económica para enero y febrero de 2010, en especial el de las ventas al por
menor y el de la demanda por energía, que sugieren una recuperación del
primer trimestre más rápida que la anticipada; (vi) las expectativas de los
industriales y los comerciantes sobre el desempeño de la economía para los
próximos meses, que se mantienen en niveles altos; (vi) el crecimiento de los
agregados monetarios, que se situó entre el 7% y el 8%; (vii) la cartera del
sistema financiero en moneda legal que sigue creciendo por encima del PIB
nominal; (viii) el comportamiento de las tasas de interés del mercado en
respuesta a la baja en la tasa de referencia del Banco; (ix) el efecto de la tasa
de cambio sobre la inflación y el crecimiento del producto de los sectores
8
transables; y (x) las tasas de interés de los títulos de deuda pública, que
mostraron una caída en los tramos medio y largo.
Los principales puntos de análisis entre los miembros de la Junta se
centraron en los siguientes aspectos: (i) los elementos que afectan las
proyecciones de inflación para 2010, en especial un eventual repunte
transitorio en los precios de los regulados y de los alimentos debido al
fenómeno climático del Niño; (ii) el efecto rezagado de las medidas de política
monetaria sobre la producción y los precios; (iii) las proyecciones de
crecimiento de la economía para 2010 que sugieren una recuperación más
rápida de lo previsto; (iv) el mal desempeño de las exportaciones a Venezuela
frente a las del 2009; (v) el comportamiento de los agregados monetarios y sus
posibles efectos en la reactivación económica; (vi) la dinámica reciente en la
cartera del sistema financiero; (vii) la caída en las expectativas de inflación;
(viii) el balance de riesgos entre crecimiento e inflación en un contexto de una
economía que muestra todavía una dinámica débil y una inflación que se ubica
dentro del rango de largo plazo fijado por la Junta Directiva; y (ix) la
necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las
expectativas de inflación alrededor de la meta de largo plazo.
La Junta Directiva destacó lo siguiente sobre el comportamiento de la
inflación durante el mes: (i) la inflación anual al consumidor en febrero fue de
2,09%, inferior en 1 punto básico al resultado de enero, siendo mejor a la
esperada por el mercado y los estudios técnicos del Banco de la República. (ii)
Los indicadores de inflación básica disminuyeron, situándose dentro del rango
meta de inflación fijado por la Junta (entre 2% y 4%) y; (iii) las proyecciones
de inflación del Banco incorporan aumentos transitorios en los precios de
algunos alimentos como consecuencia del fenómeno del Niño, aumentos que
se espera se reviertan en el segundo semestre del año.
La economía de los Estados Unidos, nuestro principal socio comercial,
mostró en lo corrido del año incrementos en la producción industrial y en las
ventas al por menor, mientras que China e India siguen con un crecimiento
acelerado que ha permitido que los precios de los productos básicos se
ubiquen en niveles altos. Los países de América Latina, por su parte, muestran
una recuperación en su crecimiento.
El DANE informó que el aumento anual del PIB para el 2009 fue de
0,4% y el del cuarto trimestre de 2,5% anual. Estos resultados confirman la
solidez de la economía colombiana para enfrentar choques externos.
9
Los indicadores disponibles de actividad económica para lo corrido del
año, en especial el de las ventas al por menor y de demanda de energía,
también sugieren una mayor dinámica de la economía. Esto se corrobora con
los resultados de las expectativas de los empresarios que se mantienen en
niveles relativamente altos. Todo lo anterior indica que la economía se
encuentra en una senda de franca recuperación.
La Junta Directiva considera que la política monetaria expansiva ha
permitido una disminución persistente de las tasas de interés de captación y
colocación y que el actual nivel de la tasa de referencia continúa estimulando
el crecimiento económico en un ambiente caracterizado por un sistema
financiero saludable. En consecuencia, se acordó mantener inalterada la tasa
de intervención del Banco en los niveles actuales.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva acordó mantener inalterada la tasa de intervención
del Banco de la República en 3,5%.
Bogotá DC, abril 09 de 2010.
|
2010-04-01 |
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
30 de Abril de 2010
El 30 de Abril de 2010 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión
ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del
Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente
General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos
Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan
Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de
crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas
con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los
principales temas tratados en dicha reunión.
1. ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor en marzo se situó en 1,84%, 25 pb
menos que en febrero. La inflación mensual fue de 0,25% y todos los
indicadores de inflación anual básica disminuyeron.
La variación anual de los precios de los alimentos pasó de -0,1% en
febrero a 0,34% en marzo, por debajo de las proyecciones del equipo técnico.
En lo corrido del año, los precios de los alimentos perecederos han
tenido alzas como consecuencia del fenómeno del Niño aunque en una menor
intensidad de la esperada. Sin embargo, otros componentes de la canasta han
disminuido por los siguientes factores: (i) caída en el precio de la carne por la
debilidad de la demanda interna y el cierre de las exportaciones hacia el
mercado venezolano, (ii) ajustes moderados en los precios de las comidas
fuera del hogar, también por la debilidad de la demanda interna y el ajuste
moderado en el salario mínimo y (iii) estabilidad en los precios de los
alimentos importados como efecto de la revaluación del peso frente al dólar.
2
El incremento anual de precios de los bienes regulados pasó de 4,2% en
febrero a 3,4% en marzo, debido al menor crecimiento anual en el IPC de
servicios públicos y de transporte público.
La variación anual de los precios de los bienes no transables sin
alimentos ni regulados cayó de 3,9% en febrero a 3,8% en marzo,
consolidándose la tendencia decreciente que se observa desde septiembre del
año pasado.
El aumento anual de precios de bienes transables sin alimentos ni
regulados cayó de 1% en febrero a 0,3% en marzo. Este nivel es el más bajo
desde que se llevan registros para ese indicador. La caída está determinada,
entre otras, por la apreciación del peso frente al dólar acumulada en los
últimos meses, una demanda interna que continúa débil y una demanda
externa menor a la proyectada por el equipo técnico.
Con datos preliminares para abril, las expectativas de inflación
derivadas de las negociaciones de deuda pública para 1, 5 y 10 años
disminuyeron, situándose en 2,61%, 3,91% y 4,18%, con caídas de 105 pb, 78
pb y 29 pb, respectivamente.
Las expectativas de inflación de las encuestas trimestral y mensual
realizadas por el Banco de la República a comienzos de abril disminuyeron y
se ubican dentro del rango meta de largo plazo fijado por la Junta Directiva.
La variación anual de los precios al productor (IPP) fue de -0,17%
frente a -0,4%, del mes pasado.
b. Crecimiento
Los indicadores disponibles para el primer trimestre de 2010
mostraron una expansión de la actividad económica y una aceleración de las
tasas de crecimiento anuales. En particular, los relacionados con la demanda
apuntan a que el consumo privado continuó con la dinámica favorable
observada desde hace dos trimestres. Los indicadores asociados a la formación
bruta de capital fijo diferentes de obras civiles y construcción, todavía
muestran crecimientos anuales negativos.
Algunos indicadores relevantes son los siguientes:
3
-
El Índice de Confianza del Consumidor (ICC) de Fedesarrollo, con
datos a marzo muestra que la confianza de los agentes creció por tercer mes
consecutivo y se ubica en su mayor nivel desde 2008. El aumento se explica
por una mejoría en las expectativas de los hogares sobre la situación
económica en el corto y mediano plazo.
-
Las ventas del comercio al por menor a febrero mantuvieron la
tendencia creciente que se observa desde mediados del año pasado. La alta
correlación del crecimiento de las ventas del comercio con el consumo interno
de los hogares permite confiar en una aceleración de este tipo de gasto durante
el primer trimestre de 2010.
-
Las ventas al por menor de vehículos para consumo de los hogares a
marzo crecieron a una tasa anual de 28,3%.
-
La variación anual del índice de producción sin trilla de café fue de
3%, mayor que la esperada por el equipo técnico del Banco (2,5%).
-
El sector de la construcción de edificaciones muestra signos de
crecimiento. Las licencias de construcción en enero y febrero crecieron a una
tasa cercana al 8% anual, con lo cual el número de licencias se mantuvo en
registros similares a los de hace 5 años
-
La demanda de energía total (regulada y no regulada, que excluye
exportaciones) creció a una tasa anual de 7,2% en marzo, la mayor tasa en
toda la década. En el primer trimestre, su crecimiento anual fue de 5,1%,
superior a la tasa registrada en el cuarto trimestre del año pasado (2,6%).
-
Las importaciones de bienes de capital en dólares y en pesos reales
están cayendo (-21% anual a febrero), lo que sugiere que este gasto
continuará exhibiendo una contracción en términos anuales durante el primer
trimestre.
En febrero de 2010 las exportaciones totales en dólares registraron un
crecimiento de 22,9% con respecto al mismo mes del año anterior. Lo anterior
por el incremento de las exportaciones del sector minero (94,6%) y del sector
agropecuario (7,6%). Las exportaciones del sector industrial cayeron en
febrero 7,9% anual. Al descontar los principales productos de exportación
4
(café, ferroníquel, derivados del petróleo y oro), las exportaciones industriales
se redujeron 26,3%.
En el mes de febrero, las exportaciones colombianas a los diferentes
países de destino presentaron niveles mayores a los observados un año atrás,
excepto las dirigidas a Venezuela las cuales registraron una caída anual de
73,2%. Las ventas externas a los Estados Unidos y al resto de países (sin
Venezuela y Estados Unidos) crecieron anualmente 47,2% y 49,1%,
respectivamente. Las exportaciones a Asia aumentaron 233% y a la Unión
Europea 55,6%, destinos que sumados representan cerca del 30% de las
exportaciones totales de febrero.
En lo corrido del año a febrero, el valor de las exportaciones totales en
dólares creció 19% respecto a las observadas en el mismo período del año
anterior, dadas las mayores exportaciones del sector minero (65%) y del sector
agropecuario (14,5%). Por su parte, las exportaciones del sector industrial
registraron una caída anual de 8,5% y de 19,8% al descontar los principales
productos. En volúmenes, las del sector minero presentaron un pequeño
incremento (1,3% anual) debido a las mayores exportaciones de crudo (33%).
En cuanto a las importaciones, en febrero el valor CIF en dólares
(US$ 2.793 millones) se incrementó en 10,5% con respecto al mismo mes del
año anterior. Sin embargo, su nivel sigue siendo inferior al promedio
registrado en el año 2008 (US$ 3.306 millones). Las importaciones de
materias primas y las de bienes de consumo registraron, en febrero,
incrementos anuales de 37,2% y 12,8%, respectivamente. Por su parte, las
importaciones de bienes de capital siguen cayendo (disminuyeron 11,9% en
febrero).
El déficit en cuenta corriente de la balanza de pagos observada para el
año 2009 fue de 2,2% del PIB (US$ 5.146 m). Las mayores entradas de capital
del sector público y de Ecopetrol (US$ 7.275 m) financiaron la menor
inversión extranjera directa neta (ésta se redujo de US$ 8.329 m en 2008 a
US$ 4.177 m en 2009).
En el trimestre móvil terminado en marzo, la tasa de desempleo (TD)
nacional se ubicó en 13% y la de 13 áreas en 13,7%. .
c. Contexto externo
5
El crecimiento mundial siguió acelerándose durante el primer
trimestre por el mejor comportamiento de las economías emergentes y de los
EEUU. Se espera que la economía mundial siga siendo liderada por Asia, lo
que mantendría los precios de los bienes básicos en los niveles actuales o un
poco más altos y continuaría favoreciendo los términos de intercambio en
Colombia y otros países de la región.
En el caso de EEUU, los analistas internacionales prevén un
crecimiento inferior al 3% dada la debilidad del mercado laboral, el alto nivel
del endeudamiento de los hogares y las restricciones al crédito bancario. En
cuanto a las economías emergentes se destaca el crecimiento del PIB de la
China de 11,9% en el primer trimestre de 2010.
Los países latinoamericanos y, en particular Brasil, mostraron una
recuperación importante. Venezuela presentó una caída en la actividad
económica al finalizar el año lo que, junto con las restricciones comerciales,
continuó debilitando nuestro comercio con ese país que redujo su
participación de una manera marcada.
En este entorno de crecimiento, los precios de los productos básicos se
han comportado mejor de lo esperado por el equipo técnico. En general, estos
precios se han mantenido en niveles altos y se espera que ello continúe en el
resto de 2010.
En materia de inflación anual al consumidor, esta aumentó en los
últimos meses en los países industrializados. Sin embargo, este repunte no
parece ser de naturaleza permanente como lo sugieren las disminuciones que
se presentaron en la inflación básica en EEUU y la zona del Euro.
En cuanto a las monedas, el dólar se ha fortalecido en lo corrido del año
frente al Euro y la Libra y las primas de riesgo de los países emergentes han
permanecido estables ubicándose en niveles similares a los que se observaron
antes de la quiebra de Lehman Brothers.
d. Variables financieras
Durante marzo y comienzos de abril el crecimiento nominal de los
agregados monetarios continuó exhibiendo estabilidad. El M3 y los Pasivos
Sujetos a Encaje (PSE) crecieron a tasas entre 7,0% y 8,0% en la primera
semana de abril.
6
La cartera bruta total en moneda nacional (con leasing) creció en el
mismo período a una tasa anual de 5,2%, en términos nominales. Esta tasa es
menor que la observada en marzo, dado a los cambios transitorios en la
estacionalidad de la serie por la presencia de Semana Santa a comienzos de
abril.
Por tipo de cartera, la ligera desaceleración de las últimas semanas se
concentró en la cartera comercial, la cual se vio afectada por prepagos de
grandes empresas y por la emisión de bonos del sector real. Si se incluye la
colocación de bonos, en marzo, el crédito comercial ($100.9 b) se mantuvo
cerca del observado en febrero ($100.8 b). En marzo las colocaciones de
bonos del sector real ascendieron a $900 mm, monto superior en 525 mm al
observado en febrero.
En marzo y comienzos de abril, la cartera hipotecaria continuó
creciendo a un buen ritmo (18,6% nominal) y la cartera de consumo mantuvo
una lenta recuperación, con aumentos anuales de 4,6%.
A marzo, la cartera en moneda extranjera del sistema financiero
ascendió US$2,532 millones frente a US$2,388 millones de febrero. De otro
lado, el endeudamiento directo del sector privado en febrero, último mes para
el cual hay información, fue de US$13,965 millones, US$ 158 millones más
que el presentado en diciembre de 2009. Pese a lo anterior, a febrero, la suma
de ambos tipos de recursos crecía todavía a una tasa anual negativa de -3,9%.
En las últimas semanas, las tasas interbancarias se nivelaron con la tasa
de política. Las tasas de interés de consumo y, en menor medida, las de
Tesorería, continúan descendiendo. Las otras tasas activas tienden a
estabilizarse. Con el descenso de la inflación sin alimentos, todas las tasas de
interés aumentaron en términos reales
Entre el 26 de marzo y el 28 de abril, los títulos de deuda pública
registraron variaciones negativas de 9pb, 31pb y 35 pb en los tramos corto,
medio y largo, respectivamente.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el
resultado de la inflación a marzo, menor que la proyectada por el equipo
7
técnico del Banco de la República y por el mercado, en todas las subcanastas
que conforman el índice de precios al consumidor; (ii) la nueva caída en los
indicadores de inflación básica ; (iii) la disminución en las expectativas de
inflación; (iv) el menor efecto sobre el crecimiento de los precios por el
fenómeno de El Niño; (iv) la recuperación de la economía durante el primer
trimestre más rápida de la esperada; (vi) las mejoras en las expectativas de los
empresarios y consumidores; (vi) el crecimiento de los agregados monetarios
entre el 7% y el 8%; (vii) la cartera del sistema financiero en moneda legal
creciendo por encima del PIB nominal; (viii) el comportamiento de las tasas
de interés del mercado en respuesta a la baja en la tasa de referencia del
Banco; (ix) el efecto de la tasa de cambio sobre la inflación y el crecimiento
del producto de los sectores transables; (x) las tasas de interés de los títulos
de deuda pública, que mostraron una caída en el mes y (xi) la recuperación de
la economía mundial y la fuerte incertidumbre generada por la crisis de
Grecia.
Los principales puntos de análisis entre los miembros de la Junta se
centraron en los siguientes aspectos: (i) las proyecciones de inflación para el
2010 y 2011 ; (ii) la disminución de los riesgos al alza en la inflación por
efecto de un menor impacto del fenómeno de El Niño sobre el precio de los
alimentos; (iii) la reducción en la variación de los precios de los bienes
transables debido a la apreciación del peso frente al dólar; (iv) el efecto
rezagado de las medidas de política monetaria sobre la producción y los
precios; (v) las proyecciones de crecimiento de la economía para 2010 que
sugieren una recuperación más rápida de lo previsto; (vi) la dinámica
reciente en la cartera del sistema financiero; (vii) la caída en las expectativas
de inflación; (viii) el balance de riesgos entre crecimiento e inflación en un
contexto de una economía recuperándose y una inflación que se ubica
levemente por debajo del rango meta de largo plazo; (ix) el posible impacto de
la crisis griega; y (x) la necesidad de mantener la credibilidad de la autoridad
monetaria y anclar las expectativas de inflación alrededor de la meta de largo
plazo.
La Junta Directiva destacó lo siguiente sobre el comportamiento de la
inflación durante el mes: (i) la inflación anual al consumidor en marzo fue de
1,84%, 25 pb menos que en febrero, resultado significativamente mejor al
esperado por el mercado y por los estudios técnicos del Banco de la
República; (ii) los indicadores de inflación básica continuaron disminuyendo
y están en la parte baja del rango meta de inflación de largo plazo fijado por
la Junta (3% más o menos 1%); (iii) la disminución de la inflación sin
8
alimentos; (iii) las expectativas de inflación que siguieron cayendo; (iv) las
nuevas proyecciones realizadas por el equipo técnico muestran que, con un
alto grado de confianza, la inflación se situará dentro del rango meta de largo
plazo en 2010 y 2011; (iv) los riesgos al alza en la inflación han disminuido
debido a un menor impacto del fenómeno de El Niño sobre el precio de los
alimentos y a que la apreciación del peso ha reducido la variación en los
precios de los bienes transables y; (vi) este buen comportamiento de la
inflación y de las expectativas confirman la credibilidad en la política
monetaria por parte de la sociedad colombiana, que está incorporando en sus
decisiones la meta de largo plazo establecida por la Junta.
La información recibida en las últimas semanas indica que la economía
se viene recuperando más rápidamente de lo esperado, sin generar presiones
inflacionarias. Factores tales como el mayor crecimiento de la economía
mundial, las mejoras en la confianza de los agentes y el dinamismo de varios
indicadores líderes, muestran la fortaleza del crecimiento.
Los trabajos técnicos indican que pese al mayor crecimiento de la
economía, se mantiene una brecha negativa que, en conjunto con el buen
comportamiento de la inflación y de las expectativas, permite una política
monetaria aún más expansiva sin comprometer las metas de inflación y la
estabilidad macroeconómica
La Junta analizó las siguientes alternativas relacionada con la postura de
la política monetaria:
(i) Reducir la tasa de referencia del Banco teniendo en cuenta que el análisis
técnico muestra que una política monetaria más expansiva contribuirá a la
recuperación de la economía sin poner el riesgo el logro de la meta de
inflación en 2010 y 2011.
(ii) Postergar la decisión anterior para el mes siguiente, con el fin de esperar
que el mercado incorpore en sus expectativas las nuevas proyecciones de
inflación y, de esta manera, facilitar la transmisión de la política monetaria.
(iii) Mantener inalterada la tasa de intervención a la espera de información
que confirme las nuevas proyecciones, anunciando que la Junta no avizora
aumentos en el futuro cercano en la tasa de interés de referencia.
Hubo un consenso entre los miembros de la Junta en reducir 50 pb la tasa de
intervención y comunicar de manera detallada las razones que motivaron la
9
decisión. Se destacó que el banco no tiene temores sobre la recuperación
económica y que el nuevo nivel de tasas es el adecuado sin que ello genere
presiones al alza en la inflación.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva acordó reducir 50 pb la tasa de intervención del
Banco de la República que quedará en 3%.
Bogotá DC, mayo 14 de 2010.
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2010-05-01 |
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
27 de Mayo de 2010
El 27 de Mayo de 2010 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión
ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del
Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente
General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos
Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan
Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de
crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas
con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los
principales temas tratados en dicha reunión.
1. ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor en abril se situó en 1,98%, 14 pb más
que en marzo. La inflación mensual fue de 0,46% y todos los indicadores de
inflación anual básica disminuyeron.
La variación anual de los precios de los alimentos pasó de 0,34% en
marzo a 0,93% en abril debido al aumento de los alimentos perecederos.
El incremento anual de precios de los bienes regulados pasó de 3,4% en
marzo a 3,9% en abril. Esto como consecuencia de los ajustes que se hicieron
en combustibles y energía.
La variación anual de los precios de los bienes no transables sin
alimentos ni regulados fue de 3,9% en abril frente a 3,8% en marzo.
2
El aumento anual de precios de bienes transables sin alimentos ni
regulados cayó de 0,3% en marzo a -0,3% en abril. Esta tasa es la más baja
desde que se llevan registros para ese indicador.
Con datos preliminares al 19 de mayo, las expectativas de inflación
derivadas de las negociaciones de deuda pública para 1, 5 y 10 años
disminuyeron, situándose en 1,87%, 3,56% y 4,09%, respectivamente.
Las expectativas de inflación de las encuestas trimestral y mensual
realizadas por el Banco de la República a comienzos de mayo siguen
mostrando descensos y se ubican dentro del rango meta de largo plazo fijado
por la Junta Directiva.
En abril, la inflación anual de los precios al productor (IPP) fue de
0,3%, 45 pb mayor que la de marzo. El IPP aumentó principalmente por los
precios de los bienes importados.
b. Crecimiento
Los indicadores disponibles muestran que la recuperación del
consumo se está dando a un ritmo más rápido que el previsto, sobre todo en el
caso de los bienes durables. Los indicadores asociados a la formación bruta de
capital fijo diferentes de obras civiles y construcción, todavía muestran
crecimientos anuales negativos.
Algunos indicadores relevantes son los siguientes:
-
El Índice de Confianza del Consumidor (ICC) de Fedesarrollo, con
datos a abril sigue mostrando una mejoría en las expectativas de los hogares
sobre la situación económica en el corto y mediano plazo.
-
Las ventas del comercio medidas por el DANE terminaron el trimestre
con un crecimiento superior al observado en los últimos dos años. La alta
correlación del crecimiento de las ventas del comercio con el consumo interno
de los hogares permite confiar en una aceleración de este tipo de gasto durante
el primer trimestre de 2010.
-
La variación anual del índice de producción industrial fue de 6,4%,
registro similar al esperado por el equipo técnico del Banco.
3
-
La demanda de energía total regulada y no regulada, sin incluir
exportaciones, creció 4,6% en términos anuales en abril, lo que se suma a un
crecimiento de 5,1% anual en el promedio del primer trimestre.
-
Las ventas totales de la industria según el DANE crecieron 3,2%
anualmente en el primer trimestre.
Las exportaciones totales del mes de marzo registraron un aumento
anual de 19,4%, y en año corrido 19,1%. Las mineras crecieron 33%, las
agropecuarias 25% y las industriales 9,4%, con respecto al mismo mes del año
anterior. Sin embargo, al descontar de las exportaciones del sector industrial
los productos principales como café, ferroníquel, derivados del petróleo y oro,
se observa una caída anual de 8,1%.”
Los principales productos de exportación (café, carbón, ferroníquel,
petróleo y derivados, los cuales representaron en el mes de marzo el 57% del
total de las ventas externas), presentaron un crecimiento anual de 39,8% en
dólares y una disminución de 5,8% en volúmenes.
Por país de destino, la mayor demanda de nuestras exportaciones
totales es Estados Unidos, que representó 44% del total de las ventas en el mes
de marzo. Venezuela disminuyó su participación al pasar de 18,2% en marzo
de 2009 a 4,7% en el mismo mes de este año. Los otros destinos (excepto la
Unión Europea) han ganado participación en el total exportado por Colombia.
En particular, las mayores ventas a Asia, las cuales pasaron de representar el
5,6% en marzo del año anterior al 12,2% en marzo de 2010. Las mayores
ventas registradas a los Estados Unidos, India y China obedecen
principalmente al aumento de las exportaciones de petróleo y sus derivados,
de carbón y de oro.
Las menores exportaciones del sector industrial sin principales
productos se explican por la caída de las ventas a Venezuela, que en marzo
disminuyeron 68% anual. Estas ventas aumentaron en términos anuales hacia
los otros destinos: las dirigidas a los Estados Unidos lo hicieron en 46% y al
resto de países en 36%.
En marzo, el valor en dólares de las importaciones totales (CIF) creció
24,7% con respecto al observado en el mismo mes del año anterior y 19% en
relación al registrado en febrero de 2010. El aumento de las importaciones se
originó por las mayores compras de bienes de consumo, particularmente de
4
bienes duraderos (31,4% anual) y las de bienes intermedios (29% anual). Las
importaciones de bienes de capital crecieron 16,5% anual.
En el trimestre móvil terminado en marzo, la tasa de desempleo (TD)
nacional se ubicó en 13% y la de 13 áreas en 13,7%.
c. Contexto externo
Los diferentes indicadores de actividad real en EE.UU. y en países
emergentes de Asia y América Latina confirman que la economía mundial
sigue recuperándose.
Los mercados financieros mundiales presentaron un aumento
importante en los niveles de incertidumbre y volatilidad debido a los
crecientes problemas de la deuda soberana en varios países europeos. Esta
situación llevó a un aumento en la percepción de riesgo global, a pesar de las
medidas de apoyo adoptadas por la Unión Europea y el FMI a los países más
endeudados (PIIGS) por 750 mil millones de euros. En ese entorno, se han
presentado fuertes caídas en los mercados bursátiles en los países
desarrollados, especialmente en Europa, y el euro continúa depreciándose
frente al dólar y otras monedas (con cifras al viernes 21 de mayo).
Pese a lo anterior, las economías de Latinoamérica no han resultado
afectadas de manera importante por la turbulencia financiera. Las primas de
riesgo soberano presentaron aumentos pequeños comparados con episodios de
crisis anteriores. Las monedas de la mayoría de países se depreciaron en el
último mes, siendo mucho más fuerte esta tendencia en Brasil y México. En
estos últimos, la depreciación del último mes fue alrededor de 7%, mientras
que en Colombia ha sido de alrededor de 2%.
El impacto principal de la crisis europea se ha visto en los precios de los
productos básicos, en particular en el petróleo. De mantenerse esta tendencia,
perjudicaría especialmente a países exportadores de materias primas, al afectar
sus términos de intercambio y, por esta vía, al PIB. Sin embargo, todavía es
prematuro hablar sobre cuál será el impacto a la economía global por la crisis
en Europa.
d. Variables financieras
5
El M3 y los Pasivos Sujetos a Encaje, que en lo corrido del año hasta
abril habían registrado un crecimiento anual estable cercano a 7%, se
aceleraron en la primera semana de mayo a tasas algo superiores a 9%. Este
comportamiento, de carácter transitorio, se explicó por menores depósitos del
Gobierno en el Banco.
En abril y la primera semana de mayo de 2010, el crecimiento anual de
la cartera bruta total (M/N) se estabilizó en una tasa cercana a 5%. Por
modalidades, la desaceleración de la cartera comercial ha sido compensada
con los mayores ritmos de aumentos en la cartera hipotecaria y de consumo.
Aunque en lo corrido del año el saldo de la cartera comercial ha estado
relativamente estable, cuando se le suman los bonos emitidos por el sector real
su comportamiento es más favorable. En abril este agregado de crédito llegó a
$ 101,6 b, cifra mayor en $ 683 mm a la observada un mes atrás y superior en
$ 2 b a la registrada el pasado diciembre.
En materia de desembolsos, los destinados a cartera comercial se
aceleraron en el margen (entre abril y mediados de mayo), pero sus niveles
son similares a los registrados un año atrás. Los desembolsos de créditos para
los hogares (consumo e hipotecarios) continúan con fuertes aumentos tanto en
el margen como en términos anuales
Luego de la reducción de la tasa de referencia del Banco de la
República en 50 pb, las tasas pasivas descendieron y las activas tuvieron un
comportamiento mixto. Las tasas de consumo, que también habían presentado
un descenso en abril, cayeron 28 pb en la primera semana de mayo. En este
último periodo, las tasas de interés comerciales de tesorería y preferenciales
descendieron 54 pb y 26 pb, respectivamente. Por su parte, las de crédito de
vivienda, tanto para construcción como para adquisición se incrementaron.
En materia de precios de activos, similar a lo ocurrido en otros países de
la región, el Índice General de la Bolsa de Colombia (IGBC) que alcanzó su
máximo histórico a inicios de mayo, presentó una leve desvalorización a raíz
de la crisis en la Unión Europea. En el caso de renta fija, el impacto negativo
ha sido muy bajo.
Entre el 30 de abril y el 24 de mayo, las tasas de los títulos de deuda
pública registraron variaciones negativas de 59pb, 36pb y 13pb en los tramos
corto, medio y largo, respectivamente.
6
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el
resultado de la inflación a abril que se ubicó dentro de las proyecciones
realizadas por el equipo técnico del Banco de la República; (ii) la variación
anual de los bienes transables sin alimentos ni regulados que volvió a
descender reforzando la tendencia que se viene registrando desde agosto de
2009; (iii) la nueva caída en los indicadores de inflación básica y en las
expectativas de inflación; (iv) la recuperación de la economía durante el
primer trimestre más rápida de la esperada; (v) las mejoras en las expectativas
de los empresarios y consumidores; (vi) el crecimiento estable de los
agregados monetarios ; (vii) el crecimiento de la cartera del sistema financiero
en moneda legal en niveles similares al aumento estimado del PIB nominal
para 2010; (viii) el comportamiento reciente de los precios de los activos; (ix)
el comportamiento de las tasas de interés del mercado en respuesta a la
reducción de la tasa de referencia del Banco; (x) el efecto de la tasa de cambio
sobre la inflación y el crecimiento del producto de los sectores transables;
(xi) las tasas de interés de los títulos de deuda pública, que mostraron una
caída en el mes y (xii) la recuperación de la economía mundial y la fuerte
incertidumbre generada por la crisis de algunos países europeos.
Los principales puntos de análisis entre los miembros de la Junta se
centraron en los siguientes aspectos: (i) las proyecciones de inflación para el
2010 y 2011 ; (ii) la reducción en la variación de los precios de los bienes
transables debido a la apreciación del peso frente al dólar; (iii) el efecto
rezagado de las medidas de política monetaria sobre la producción y los
precios; (iv) las proyecciones de crecimiento de la economía para 2010 que
sugieren una recuperación más rápida de lo previsto; (v) la dinámica reciente
en la cartera del sistema financiero y de los precios de los activos; (vi) la caída
en las expectativas de inflación; (vii) el balance de riesgos entre crecimiento e
inflación en un contexto de una economía recuperándose y una inflación que
se ubica levemente por debajo del rango meta de largo plazo; (viii) la
incertidumbre generada por la crisis europea en la economía mundial; y (ix)
la necesidad de mantener la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las
expectativas de inflación alrededor de la meta de largo plazo.
La Junta Directiva destacó lo siguiente sobre el comportamiento de la
inflación durante el mes: (i) la inflación anual al consumidor en abril fue de
1,98%, ligeramente mayor que en marzo (14 pb), pero dentro de las
proyecciones realizadas por el equipo técnico del Banco de la República; (ii)
7
los indicadores de inflación básica continuaron disminuyendo y están en la
parte baja del rango meta de inflación de largo plazo fijado por la Junta; (iii)
las expectativas de inflación siguieron cayendo; (iv) el resultado de la
inflación en el último mes está en línea con las proyecciones realizadas por el
equipo técnico que muestran, con un alto grado de confianza, que la inflación
se situará dentro del rango meta de largo plazo en 2010 y 2011.
La información recibida en las últimas semanas indica que la economía
se viene recuperando más rápidamente de lo esperado, sin generar presiones
inflacionarias. Factores tales como las mejoras en la confianza de los agentes
y el dinamismo de varios indicadores líderes, confirman el mayor crecimiento.
La recuperación de la economía mundial se ha visto afectada por la
crisis de la deuda pública en Grecia y su posible contagio a otros países
europeos. Los efectos de estas crisis aún son inciertos. Se destaca, sin
embargo, que Asia, Estados Unidos y las economías de América Latina
muestran una recuperación cada vez más fuerte.
La Junta considera que la política monetaria expansiva adoptada,
incluyendo la reciente disminución de 50 pb en su tasa de referencia,
contribuye al crecimiento de la economía en un ambiente caracterizado por un
sistema financiero saludable.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva acordó mantener inalterada la tasa de intervención
del Banco de la República que seguirá en 3%.
Bogotá DC, junio 11 de 2010
|
2010-06-01 |
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
18 de Junio de 2010
El 18 de Junio de 2010 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión
ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del
Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente
General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos
Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan
Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de
crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas
con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los
principales temas tratados en dicha reunión.
1. ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor en mayo se situó en 2,07%, 9 pb más
que en abril. La inflación mensual fue de 0,10% y algunos de los indicadores
de inflación anual básica dejaron de caer.
La variación anual de los precios de los alimentos pasó de 0,93% en
abril a 1% en mayo, debido al aumento de las comidas fuera del hogar. El
precio de los perecederos cayó por primera vez en el año, mientras que el de
procesados se mantuvo estable.
El incremento anual de precios de los bienes regulados pasó de 3,9% en
abril a 4,6% en mayo. Esto como consecuencia de los ajustes que se hicieron
en el precio de la gasolina.
La variación anual de los precios de los bienes no transables sin
alimentos ni regulados se mantuvo estable durante mayo en 3,9%.
2
El aumento anual de precios de bienes transables sin alimentos ni
regulados cayó de -0,3% en abril a -0,5% en mayo. Esta tasa es la más baja
desde que se llevan registros para ese indicador.
Con datos preliminares para junio, las expectativas de inflación
derivadas de las negociaciones de deuda pública para 1, 5 y 10 años
disminuyeron, situándose en 1,49%, 3,5% y 3,88%, respectivamente.
Las expectativas de inflación de las encuestas trimestral y mensual
realizadas por el Banco de la República a comienzos de junio siguen
mostrando descensos y se ubican dentro del rango meta de largo plazo fijado
por la Junta Directiva.
En mayo, la inflación anual de los precios al productor (IPP) fue de
1,3%, frente a una variación anual de 0,3% en abril. El IPP aumentó
principalmente por una caída en la base de comparación en mayo del año
anterior.
b. Crecimiento
La información de las últimas semanas indica que la economía
colombiana crecerá a un mayor ritmo de lo esperado. Algunos indicadores
relevantes son los siguientes:
-
El índice de confianza de la industria en abril, que reúne las preguntas
de pedidos, existencias y expectativas y que tiene una alta correlación con el
crecimiento anual de la producción industrial, siguió mostrando una tendencia
ascendente. El comportamiento reciente de este indicador lo explican las
preguntas referentes a existencias y los pedidos de la industria, contrario a lo
que sucedía hace algunos meses, cuando aumentaba solamente la pregunta
sobre la dinámica de las expectativas de producción.
-
La demanda de energía total creció en mayo 4,4% en términos anuales,
mostrando incrementos respecto al cuarto trimestre de 2009 y a los primeros
meses de 2010.
-
El indicador de confianza del consumidor de Fedesarrollo aumentó en
mayo nuevamente. Tal como ocurrió en el mes anterior, el aumento en la
confianza de los hogares estuvo impulsado por mejores expectativas para el
corto y mediano plazo así como por una más favorable percepción de las
3
condiciones económicas actuales. Asimismo, se destaca la mejoría gradual en
la disponibilidad para comprar bienes durables y para la adquisición de
vivienda durante lo corrido de 2010.
Las exportaciones totales del mes de abril sumaron US$3.491 millones,
registrando un incremento de 43,8% con respecto al mismo mes del año
anterior. Dicho comportamiento se explica por el aumento de las
exportaciones en dólares del sector minero (73,6%) y del sector industrial
(30,8%). En volúmenes, las ventas al exterior de dichos sectores también
presentaron incrementos (18,0% y 43,7%, respectivamente). Por su parte, las
exportaciones del sector industrial sin café, derivados del petróleo, ferroníquel
y oro registraron en abril niveles similares a los observados durante el mismo
mes de 2009, con un crecimiento anual de 1,3%.
Frente al mes de marzo de 2010 las exportaciones totales en dólares
crecieron 4,4% debido principalmente al aumento que registraron las ventas
externas del sector minero (15,7%).
Los principales productos de exportación (café, carbón, ferroníquel,
petróleo y derivados), los cuales representaron el 64% del total de las ventas
externas del mes de abril, presentaron un crecimiento anual de 86% en valores
y de 23% en volúmenes.
En abril, las ventas a Venezuela del sector industrial sin principales
productos (café, derivados del petróleo, ferroníquel y oro) se contrajeron en
términos anuales 65%, mientras que a Estados Unidos y al resto de países
aumentaron 43% y 42% anual, respectivamente. Se destaca el comportamiento
de las ventas a Ecuador, las cuales crecieron en abril 49,3% con respecto al
mismo mes del año anterior. Aunque países como Estados Unidos, Brasil,
Chile y Ecuador han venido ganando participación como destino de nuestras
exportaciones industriales sin principales productos, los niveles promedio
mensuales de estas ventas en lo corrido de 2010 (US$840 m) siguen siendo
inferiores a los registrados en el mismo período de 2007 (US$903 m).
Las importaciones totales (CIF) del mes de abril sumaron US$3.182
millones, valor mayor en 19,3% al registrado en el mismo mes del año
anterior, pero inferior en 4,2% respecto al de marzo de 2010. El aumento de
las importaciones durante el mes de abril se originó principalmente por las
mayores compras de bienes de consumo (particularmente de bienes duraderos)
y de bienes intermedios (específicamente para la industria). Las compras de
4
bienes de capital, por su parte, registraron en el mes de abril una disminución
de 13,8% con respecto al mismo mes del año anterior, debido a las menores
importaciones de equipo de transporte (-47,7%) y a pesar de que las
importaciones de bienes de capital para la industria crecieron a una tasa anual
de 16,9%.
c. Contexto externo
En mayo y a comienzo de junio, los mercados continuaron exhibiendo
una alta volatilidad. A los problemas de deuda de los denominados PIIGS
(Portugal, Italia, Irlanda, Grecia y España) se sumaron los de Hungría. Esta
situación llevó a un aumento en los indicadores de riesgo global que, sin
embargo, no han golpeado fuertemente a los países emergentes de la región
incluyendo Colombia.
Como consecuencia de lo anterior, se mantuvieron las fuertes caídas en
las bolsas internacionales, sobre todo de los países desarrollados, en donde se
perdió una parte significativa de las valorizaciones ganadas en el último año.
Asimismo, el euro continúo depreciándose frente al dólar.
El efecto en América Latina y otras economías emergentes ha sido leve.
Las primas de riesgo de la región se han elevado relativamente poco en las
últimas semanas. Así mismo, el impacto sobre las monedas no ha sido fuerte,
siendo el efecto más notorio en Brasil y Chile donde las monedas se han
depreciado desde comienzos de mayo. En el caso del peso colombiano esta
tendencia ha sido mucho menos marcada y en los últimos 20 días se ha
presentado una apreciación. Los mercados bursátiles de la región han caído,
pero no tan fuertemente como en los países desarrollados. La bolsa de
Colombia es de las más estables.
En materia de crecimiento, los datos reales del primer trimestre confirman
la recuperación de la actividad productiva. En este período se observó una
expansión importante del PIB en algunos países de la región como Brasil y
Perú y de otros emergentes de Asia.
El impacto principal de la mayor incertidumbre externa se ha visto en los
precios de los productos básicos, en particular en el petróleo. De mantenerse
esta tendencia, perjudicaría especialmente a países exportadores de materias
primas, al afectar sus términos de intercambio y, por esta vía, al PIB.
5
d. Variables financieras
Durante mayo no se presentaron cambios en las tendencias de los
principales agregados monetarios. El M3 creció a una tasa anual de 8,0% y
algo similar sucedió con los pasivos sujetos a encaje (8,0% anual) y con el
efectivo (8,6% anual). En pesos constantes, el M3 creció a una tasa anual de
5,3%.
La cartera total del sistema financiero en pesos a finales de mayo creció
a un ritmo anual de 4,6%, menor que lo registrado en abril (5,0%). La
desaceleración se concentró en la cartera comercial.
Si bien la cartera comercial presenta un ritmo de crecimiento anual bajo,
cuando se tienen en cuenta las emisiones de bonos del sector real, el crédito
dirigido al sector comercial registra un aumento anual estimado de 4,0% en
mayo.
En pesos constantes, el crecimiento anual de la cartera hipotecaria es de
17% y presenta una tendencia ascendente que acumula más de seis meses. Por
su parte, la cartera de consumo real se expandió en mayo a un ritmo anual de
3,6%, presentando también una tendencia positiva desde diciembre del año
pasado.
Las reducciones de la tasa de interés de banco se siguieron trasmitiendo
a las tasas de mercado en mayo. En el caso de la DTF, en mayo su nivel fue
3,6% frente a 3,9% de abril. La mayoría de otras tasas pasivas también
presentaron reducción de magnitud similar durante las últimas cinco semanas.
Por el lado de las tasas activas, todas excepto las del crédito a constructores,
presentaron disminuciones.
Entre el 26 de mayo y el 16 de junio, las tasas de los títulos de deuda
pública registraron variaciones negativas de 2pb, 23pb y 4pb en los tramos
corto, medio y largo, respectivamente.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el
resultado de la inflación a mayo que se ubicó por debajo de lo esperado por el
mercado y el equipo técnico del Banco de la República; (ii) los indicadores de
6
inflación básica que si bien dejaron de caer se encuentran dentro del rango
meta fijado por la Junta; (iii) las expectativas de inflación que continuaron
reduciéndose; (iv) la recuperación de la economía durante el primer trimestre
más rápida de la esperada; (v) las mejoras en las expectativas de los
empresarios y consumidores; (vi) el crecimiento estable de los agregados
monetarios ; (vii) el crecimiento de la cartera del sistema financiero en
moneda legal en niveles similares al aumento estimado del PIB nominal para
2010; (viii) el comportamiento reciente de los precios de los activos; (ix) el
comportamiento de las tasas de interés del mercado en respuesta a la
reducción de la tasa de referencia del Banco; (x) el efecto de la tasa de cambio
sobre la inflación y el crecimiento del producto de los sectores transables;
(xi) las tasas de interés de los títulos de deuda pública, que mostraron una
caída en el mes y (xii) la recuperación de la economía mundial y la fuerte
incertidumbre generada por la crisis de algunos países europeos.
Los principales puntos de análisis entre los miembros de la Junta se
centraron en los siguientes aspectos: (i) las proyecciones de inflación para el
2010 y 2011 ; (ii) la reducción en la variación de los precios de los bienes
transables debido a la apreciación del peso frente al dólar; (iii) el efecto
rezagado de las medidas de política monetaria sobre la producción y los
precios; (iv) las proyecciones de crecimiento de la economía para 2010 que
sugieren una recuperación más rápida de lo previsto; (v) la dinámica reciente
en la cartera del sistema financiero y de los precios de los activos; (vi) la caída
en las expectativas de inflación; (vii) el balance de riesgos entre crecimiento e
inflación en un contexto de una economía recuperándose y una inflación que
se ubica levemente por debajo del rango meta de largo plazo; (viii) la
incertidumbre generada por la crisis europea en la economía mundial; y (ix)
la necesidad de mantener la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las
expectativas de inflación alrededor de la meta de largo plazo.
La Junta Directiva destacó lo siguiente sobre el comportamiento de la
inflación durante el mes: (i) la inflación anual al consumidor en mayo fue de
2,07%, ligeramente mayor que en abril (9 pb), pero por debajo de lo esperado
por el mercado y por el equipo técnico del Banco de la República; (ii) la
mayoría de los indicadores de inflación básica continúan en la parte baja del
rango meta de inflación de largo plazo fijado por la Junta (3% más o menos
1%). (iii) las expectativas de inflación siguieron cayendo y (iv) el resultado de
la inflación en el último mes está en línea con las proyecciones realizadas por
el equipo técnico que muestran, con un alto grado de confianza, que la
inflación se situará dentro del rango meta de largo plazo en 2010 y 2011.
7
La Junta destacó que la información recibida en las últimas semanas
indica que la economía colombiana crecerá a un mayor ritmo de lo esperado,
sin generar presiones inflacionarias. El crecimiento de las exportaciones,
impulsado por la recuperación de la dinámica de la economía global y mejores
términos de intercambio; el aumento en la confianza de consumidores y
productores; el dinamismo de varios indicadores líderes y la solidez del
sistema financiero, confirman el fortalecimiento de la economía colombiana.
Los mercados internacionales han mostrado una gran volatilidad como
consecuencia de la crisis de la deuda pública en algunos países europeos.
Hasta la fecha siguen siendo inciertos los efectos de esta crisis. Se destaca, sin
embargo, que las economías de América Latina muestran una recuperación
cada vez más fuerte acompañada del fortalecimiento de sus monedas.
La Junta considera que la política monetaria expansiva adoptada
contribuye al crecimiento de la economía, en un ambiente caracterizado por un
sistema financiero saludable.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva acordó mantener inalterada la tasa de intervención
del Banco de la República que seguirá en 3%.
Bogotá DC, julio 2 de 2010
|
2010-07-01 |
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
23 de Julio de 2010
El 23 de Julio de 2010 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión
ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del
Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente
General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos
Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo y Juan Pablo Zárate, en
la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y
sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria.
El director César Vallejo no asistió por razón justificada. A continuación se
hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión.
1. ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor en junio se situó en 2,25%, 18 pb más
que en mayo. La inflación mensual fue de 0,11% y los indicadores de
inflación básica volvieron a descender.
La variación anual de los precios de los alimentos pasó de 1% en mayo
a 1,5% en junio, debido básicamente al precio de los perecederos.
El incremento anual de precios de los bienes regulados pasó de 4,6% en
mayo a 5,1% en junio. Esto como consecuencia de los ajustes que se hicieron
en el precio de los combustibles.
La variación anual de los precios de los bienes no transables sin
alimentos ni regulados se redujo de 3,9% en mayo a 3,8% en junio.
El aumento anual de precios de bienes transables sin alimentos ni
regulados se mantuvo estable en -0,5% en junio.
2
Con datos preliminares para julio, las expectativas de inflación
derivadas de las negociaciones de deuda pública para 1, 5 y 10 años se
situaron en 1,44%, 3,85% y 4,31%, con variaciones de -3 pb, +21 pb y +23 pb
respectivamente, frente al promedio del mes anterior.
Las expectativas de inflación de las encuestas trimestral y mensual
realizadas por el Banco de la República a comienzos de junio siguen
mostrando descensos y se ubican dentro del rango meta de largo plazo fijado
por la Junta Directiva.
En junio, la inflación anual de los precios al productor (IPP) fue de
2,1% frente a un registro de 1,3% en mayo. El IPP aumentó principalmente
por una caída en la base de comparación del año anterior.
b. Crecimiento
A finales de junio el DANE dio a conocer el crecimiento anual del PIB
para el primer trimestre del año, calculado con un nuevo año base de
referencia y modificaciones metodológicas importantes. El resultado fue
4,4%, mayor que lo previsto en la última proyección por parte del equipo
técnico del Banco de la República (3,4%). Comparado con el del trimestre
inmediatamente anterior, el PIB del primer trimestre aumentó 1,5%, cifra que
corresponde a una tasa anualizada de 6,2%. De esta manera, se completaron
cinco períodos sucesivos de expansión del PIB en términos trimestrales.
El consumo de los hogares fue el rubro de gasto que contribuyó en
mayor medida al crecimiento del PIB en el primer trimestre de 2010. Este
agregado completó cuatro trimestres con crecimientos anuales positivos,
siendo la expansión del primer trimestre de 2010 (3,5%) superior a la del
trimestre anterior.
La inversión en capital fijo fue el segundo rubro de gasto con mayor
contribución al crecimiento. En los primeros tres meses del año este agregado
aumentó a una tasa anual alta (8%) y estuvo impulsado por la construcción de
obras civiles. Es importante destacar que con la nueva base 2005 la formación
bruta de capital fijo se expandió durante todo el 2009.
Las exportaciones netas (exportaciones menos importaciones), por su
parte, presentaron una contribución negativa al crecimiento. Mientras las
3
importaciones aumentaron a una tasa anual positiva por primera vez desde el
cuarto trimestre de 2008, las exportaciones siguieron contrayéndose en
términos anuales, aunque a un ritmo menor que el observado el año pasado.
La recuperación de las importaciones estuvo impulsada principalmente por la
compra de bienes de consumo.
Por ramas de actividad económica, los sectores que explicaron el
crecimiento anual del PIB fueron, en su orden, construcción (por obras
civiles), minería, servicios, industria y comercio, todos con crecimientos
anuales mayores a 3%. En el caso de los servicios se destaca el buen
desempeño de los ofrecidos por el gobierno. El único sector que mostró una
caída anual de su actividad económica fue la agricultura, hecho que obedeció
a una contracción del PIB del sector pecuario y a que la producción cafetera
siguió mostrando niveles bajos respecto al año anterior.
Para el segundo trimestre de 2010 la mayoría de los indicadores
disponibles sugiere que la expansión anual de la actividad económica
continuó a un ritmo más dinámico que el observado durante el primer
trimestre del año. Algunos indicadores relevantes muestran lo siguiente:
-
La Encuesta de Opinión al Consumidor de Fedesarrollo que mide el
índice de confianza de los hogares, aumentó en abril, mayo y junio y se acercó
este último mes a sus máximos niveles históricos. El Índice de Confianza del
Consumidor durante lo corrido de 2010 ha estado impulsado principalmente
por las mejores expectativas que tienen los hogares sobre el comportamiento
futuro de la economía y, en menor medida, por una mejor percepción de las
condiciones económicas actuales. El mejoramiento en la confianza de los
consumidores va de la mano de una mayor disponibilidad para comprar bienes
durables, vivienda y carro.
-
Las ventas al por menor reportadas por el DANE crecieron durante los
meses de abril y mayo, en términos reales a una tasa anual de 8% y 13,1%,
respectivamente. La expansión de las ventas del comercio al por menor en
mayo, sin tener en cuenta automóviles, fue de 7,9%.
-
En mayo, la variación anual del índice de producción industrial (IPI) sin
trilla de café fue de 7,5%, inferior al del mes de abril (7,9%). A pesar de que
en mayo el nivel del IPI desestacionalizado retrocedió levemente, la serie
mantiene una tendencia ascendente sólida.
4
Con base en la información disponible, el equipo técnico realizó el
pronóstico de crecimiento anual del PIB para el segundo trimestre del año. El
resultado del ejercicio arroja un intervalo de pronóstico entre 4,3% y 5,5%,
con 4,9% como cifra más probable. Para todo el 2010, el equipo técnico
estima que el PIB crecería en un rango entre 3,5% y 5,5%, con un escenario
más probable de 4,5%.
Las exportaciones totales en dólares del mes de mayo sumaron
US$3.510 millones, registrando un incremento de 28% con respecto al mismo
mes del año anterior. Dicho comportamiento se explica por el aumento de las
exportaciones del sector minero (42%) y del sector industrial (21%). En
volúmenes, las ventas al exterior de dichos sectores también presentaron
incrementos (31% y 13%, respectivamente). Por su parte, las exportaciones
del sector industrial sin café, derivados del petróleo, ferroníquel y oro
registraron en mayo niveles similares a los observados en el mismo mes de
2009, con un crecimiento anual de 1%.
Los principales productos de exportación (café, carbón, ferroníquel,
petróleo y derivados), que representaron el 61% del total de las ventas
externas en el mes de mayo, registraron en dicho período un crecimiento anual
de 51% en valores y de 31% en volúmenes.
En mayo, las ventas a Venezuela del sector industrial sin principales
productos (café, derivados del petróleo, ferroníquel y oro) se contrajeron en
términos anuales 68%, mientras que a Ecuador, Estados Unidos y al resto de
países aumentaron 42%, 27% y 57% anual, respectivamente. A pesar de que
países como Estados Unidos, Brasil, Chile, China y Ecuador han venido
ganando participación como destino de nuestras exportaciones industriales sin
principales productos, en lo corrido de 2010 los niveles promedio mensuales
de las ventas totales de estos productos (US$867 m) siguen siendo inferiores a
los registrados en el mismo período de 2007 (US$947 m).
Las importaciones totales (CIF) del mes de mayo sumaron US$3.184
millones, valor mayor en 30,1% al registrado en el mismo mes del año
anterior. Dicho aumento se originó principalmente en las mayores compras de
bienes de consumo (particularmente de bienes duraderos) y de bienes
intermedios (específicamente combustibles y bienes para la industria). Por su
parte, las importaciones de bienes de capital registraron durante el mes de
mayo un aumento de 14,4% con respecto al mismo mes del año anterior,
debido a las mayores compras de bienes para la industria (36,6%).
5
En el período marzo - mayo, la tasa de desempleo para el total nacional
fue de 12%. En las 13 principales ciudades disminuyó, pasando de 12,9% en
el mismo período de 2009 a 12,5% en 2010. Al analizar las series
desestacionalizadas se observa que a lo largo del trimestre la tasa de
desempleo se redujo frente a los niveles observados a finales de 2009 y a
principios de 2010. Lo anterior fue posible gracias a una menor presión de la
tasa global de participación, la cual ha dejado de expandirse al ritmo en que lo
había hecho a finales de 2009.
c. Contexto externo
Durante el segundo trimestre, la economía mundial continuó creciendo,
gracias al mejor comportamiento de las economías emergentes y de EEUU.
Los países en desarrollo continúan liderando la reactivación de la demanda
mundial, en particular por los asiáticos, aunque también en Latinoamérica se
ha observado un repunte significativo.
Pese a este panorama favorable, la crisis de deuda pública en Europa ha
generado temores sobre la sostenibilidad de la recuperación mundial y, en
particular, la de los países desarrollados.
Adicionalmente, las economías desarrolladas siguen enfrentando
problemas que pueden limitar su crecimiento en los próximos trimestres. Los
más serios son la debilidad que exhibe el mercado laboral, el alto nivel de
endeudamiento de los hogares y las restricciones al crédito bancario que
permanecen vigentes.
En cuanto a las economías emergentes, un hecho sobresaliente en el
último mes fue la leve desaceleración del PIB de China, que creció 10,3% en
el segundo trimestre de 2010, luego del 11,9% observado en el trimestre
anterior. Este fenómeno se atribuye al cambio en la postura de política
económica adoptado en ese país hace unos meses para enfriar la economía.
Pese a esto, se espera que el crecimiento de China y del resto de Asia seguirá
siendo fuerte el resto del año.
En América Latina se observaron crecimientos dinámicos durante el
primer trimestre. Sobresalen los casos de Brasil y Perú, con tasas anuales de
9% y 6%, respectivamente.
6
Por su parte, los precios de los productos básicos, aunque presentaron
fuertes caídas por la turbulencia financiera, tendieron a recuperarse,
manteniéndose en niveles históricamente altos. Para lo que resta del año y
para 2011 no se esperan cambios sustanciales en sus niveles con lo cual los
términos de intercambio para países exportadores de materias primas como
Colombia seguirían siendo favorables.
En materia de inflación al consumidor, tanto la total como la básica
permanecen en niveles bajos en la mayoría de países industrializados. Por ello
y por la débil situación del crecimiento y del empleo, se espera que los bancos
centrales de estas economías mantengan sus tasas de interés en niveles
cercanos a cero durante 2010 con algunas notables excepciones como las de
Canadá y Australia.
En América Latina, a excepción de Argentina y Venezuela, la inflación
parece estar bajo control, en niveles relativamente bajos. Pese a ello, el fuerte
crecimiento económico ha inducido ajustes de la política monetaria en varios
países de la región.
En cuanto a las monedas, el dólar se ha fortalecido en lo corrido del año
frente al Euro y la Libra, aunque en el caso de las divisas de las economías
emergentes el comportamiento ha sido mixto. El peso colombiano, en
particular, se ha apreciado en lo corrido del año alrededor de 8%. Finalmente,
las primas de riesgo han permanecido estables o han decrecido levemente para
las economías emergentes, especialmente para los países latinoamericanos
d. Variables financieras
En los últimos meses, el crecimiento anual del efectivo se ha acelerado.
De acuerdo con los datos más recientes de comienzos de julio, su crecimiento
se ubica en 11,5%, 6 puntos porcentuales más que lo registrado a comienzos
del año.
Por su parte, M3 y los pasivos sujetos a encaje, que habían presentado
tasas de crecimiento nominal relativamente estables, aumentaron su
volatilidad como consecuencia del comportamiento de los depósitos
fiduciarios, principalmente. En términos reales, la tasa promedio de
crecimiento de M3 de junio fue 4,4%.
7
Con respecto al crédito, el crecimiento anual de la cartera en M/N
nominal se recuperó frente a mayo. La cartera comercial detuvo su tendencia
decreciente y las carteras hipotecaria y de consumo consolidaron su
aceleración. Al 2 de julio, las tasas de crecimiento anual fueron 0,9%, 22,2% y
8,9% respectivamente. La cartera total en M/N creció 5,6%.
Durante el segundo semestre es posible que se presente un mejor
desempeño del crédito de acuerdo con las encuestas realizadas al sector
financiero por parte del Banco de la República, que capturan aspectos de
oferta. De acuerdo con dichos resultados, las entidades de crédito muestran
una mayor disposición a otorgar préstamos frente a lo que se observó a finales
de 2009 y comienzos de 2010. Por el lado de la demanda, la encuesta de
Fedesarrollo indica que los consumidores han aumentado la disposición para
comprar inmuebles y bienes durables que requieren financiación.
Respecto de las tasas de interés, las interbancarias han permanecido
ajustadas a la de política desde mediados de abril. Las reducciones de la tasa
de interés de intervención del Banco de la República se siguieron trasmitiendo
a las tasas de mercado en junio. En el caso de la DTF, su nivel fue 3,5% en
este último mes frente a 3,6% de mayo. Por el lado de las tasas activas, todas
presentaron disminuciones en junio que oscilaron entre 9 pb (para consumo) y
los 38 pb (para hipotecaria). En términos reales también se presentó una
reducción, en particular en las de crédito hipotecario.
Con respecto al precio de los activos las acciones retomaron su
tendencia a la valorización. También aumentaron de precio los títulos de
deuda pública con plazo mayor a un año. El índice de precios de la vivienda
usada se encuentra en niveles históricamente altos.
Entre el 18 de junio y el 21 de julio, las tasas de los títulos de deuda
pública registraron variaciones negativas de 10pb, 51pb y 65pb en los tramos
corto, medio y largo, respectivamente.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el
resultado de la inflación a junio que fue menor al esperado por el equipo
técnico del Banco de la República; (ii) los indicadores de inflación básica que
retomaron la senda descendente y se encuentran dentro del rango meta fijado
8
por la Junta; (iii) las expectativas de inflación que continuaron reduciéndose;
(iv) la información del DANE sobre crecimiento del PIB en el primer
trimestre que confirma una recuperación de la economía más rápida de la
esperada; (v) las mejoras en las expectativas de los empresarios y
consumidores; (vi) el crecimiento estable de los agregados monetarios ; (vii)
el crecimiento de la cartera del sistema financiero en moneda legal en niveles
similares al aumento estimado del PIB nominal para 2010; (viii) el
comportamiento reciente de los precios de los activos; (ix) el comportamiento
de las tasas de interés del mercado en respuesta a la reducción de la tasa de
referencia del Banco; (x) el efecto de la tasa de cambio sobre la inflación y el
crecimiento del producto de los sectores transables; (xi) las tasas de interés
de los títulos de deuda pública, que mostraron una caída en el mes y (xii) la
recuperación de la economía mundial y la fuerte incertidumbre generada por
la crisis de algunos países europeos.
Los principales puntos de análisis entre los miembros de la Junta se
centraron en los siguientes aspectos: (i) las proyecciones de inflación para el
2010 y 2011 ; (ii) la reducción en la variación de los precios de los bienes
transables debido a la apreciación del peso frente al dólar; (iii) el efecto
rezagado de las medidas de política monetaria sobre la producción y los
precios; (iv) las proyecciones de crecimiento de la economía para 2010 que
sugieren una recuperación más rápida de lo previsto y que llevó al equipo
técnico a aumentar su pronóstico para el año ; (v) la dinámica reciente en la
cartera del sistema financiero y el alto nivel en los precios de los activos; (vi)
la caída en las expectativas de inflación; (vii) el comportamiento reciente de
los flujos de capital; (viii) el balance de riesgos entre crecimiento e inflación
en un contexto de una economía recuperándose y una inflación que se sitúa en
el rango meta de largo plazo y; (ix) la necesidad de mantener la credibilidad
de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación alrededor de la
meta de largo plazo.
La Junta Directiva destacó lo siguiente sobre el comportamiento de la
inflación durante el mes: (i) la inflación anual al consumidor en junio fue de
2,25%, mayor que en abril (18 pb) pero por debajo de lo esperado por el
equipo técnico del Banco de la República; (ii) la mayoría de los indicadores de
inflación básica volvieron a caer y continúan en la parte baja del rango meta
de inflación de largo plazo fijado por la Junta (3% más o menos 1%); (iii) las
expectativas de inflación también siguieron disminuyendo; (iv) el resultado de
la inflación en el último mes está en línea con las proyecciones realizadas por
9
el equipo técnico que muestran, con un alto grado de confianza, que la
inflación se situará dentro del rango meta de largo plazo en 2010 y 2011.
La Junta destacó que la información recibida en las últimas semanas
indica que la economía colombiana está creciendo a un mayor ritmo de lo
esperado, sin generar presiones inflacionarias. El crecimiento de las
exportaciones, impulsado por la recuperación de la dinámica de la economía
global y mejores términos de intercambio; el aumento en la confianza de
consumidores y productores; el dinamismo de varios indicadores líderes y la
solidez del sistema financiero, confirman el fortalecimiento de la economía
colombiana. Dado lo anterior, el equipo técnico del Banco de la República
aumentó su pronóstico de crecimiento del PIB para 2010, señalando que este
se ubicará dentro de un rango entre 3,5% y 5,5%, con un escenario más
probable de 4,5%.
Durante el segundo trimestre, la economía mundial continuó creciendo
debido al mejor comportamiento de las economías emergentes y de USA,
destacándose una recuperación cada vez mayor de las economías de América
Latina. Los mercados internacionales, por su parte, se estabilizaron luego de la
crisis financiera en Europa. Todo lo anterior llevó a una disminución de las
primas de riesgo y a la apreciación de varias monedas de la región, incluido el
peso colombiano.
La Junta considera que la política monetaria expansiva adoptada,
contribuye al crecimiento económico de corto plazo.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva acordó mantener inalterada la tasa de intervención
del Banco de la República que seguirá en 3%.
Bogotá DC, agosto 6 de 2010
|
2010-08-01 |
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
20 de Agosto de 2010
El 20 de Agosto de 2010 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión
ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del
Ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry, el Gerente
General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos
Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan
Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de
crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas
con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los
principales temas tratados en dicha reunión.
1. ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor en julio se situó en 2,24%, 1 pb menos
que en junio. La inflación mensual fue de -0,04% y los indicadores de
inflación básica volvieron a descender.
La variación anual de los precios de los alimentos pasó de 1,5% en
junio a 1,71% en julio, debido básicamente al precio de los perecederos.
El incremento anual de precios de los bienes regulados pasó de 5,1% en
junio a 5,23% en julio. Esto como consecuencia de los ajustes que se hicieron
en las tarifas de energía eléctrica.
La variación anual de los precios de los bienes no transables sin
alimentos ni regulados se redujo de 3,8% en junio a 3,78% en julio.
El aumento anual de precios de bienes transables sin alimentos ni
regulados pasó de -0,5% en junio a -0,77% en julio.
2
Con datos preliminares para julio, las expectativas de inflación
derivadas de las negociaciones de deuda pública para 1, 5 y 10 años se
situaron en 1,12%, 3,81% y 4,33%, con variaciones de -51 pb, -4 pb y +2 pb
respectivamente, frente al promedio del mes anterior.
Las expectativas de inflación de las encuestas trimestral y mensual
realizadas por el Banco de la República a comienzos de julio siguen
mostrando descensos y se ubican dentro del rango meta de largo plazo fijado
por la Junta Directiva.
En julio, la inflación anual de los precios al productor (IPP) fue de 1,8%
frente a un registro de 2,1% en junio.
b. Crecimiento
Los indicadores disponibles señalan que el dinamismo de la demanda
interna observado al comienzo del año se habría mantenido para el segundo
trimestre y, aunque con una menor evidencia, en lo corrido del tercero.
Los indicadores sobre la evolución del consumo de los hogares y sus
determinantes sugieren que éste sigue expandiéndose. El promedio del Índice
de Confianza del Consumidor para el segundo trimestre, muestra que el
consumo de los hogares continuó creciendo a buen ritmo. También, las
importaciones de bienes de consumo, especialmente de durables, apoyada en
los bajos precios internacionales y la evolución de la tasa de cambio, siguen
mostrando la aceleración del gasto de los hogares en este rubro. En la misma
dirección apuntan los indicadores de la actividad comercial. En junio, la EOE
también registró señales de recuperación para el comercio, confirmadas con
un crecimiento de las ventas al por menor de 15,4% anual, de acuerdo con el
registro reciente divulgado por el DANE.
El comportamiento del empleo también ha contribuido al desempeño
del consumo. En el segundo trimestre, el empleo volvió a incrementarse tanto
en términos anuales como frente al primer trimestre. El aumento se dio
principalmente en los empleados asalariados urbanos.
Sobre la inversión se destacan dos aspectos en la información reciente.
El primero es la recuperación lenta pero sostenida de las importaciones de
bienes de capital, dirigidas especialmente a la industria. La segunda es la
aceleración del área aprobada de licencias registrada en mayo, que indica que
3
la construcción diferente a obras civiles está retornando a una tendencia
creciente
Por el lado de la oferta, la actividad industrial se está expandiendo a un
buen ritmo pero algo más lento que el esperado. Para el mes de junio, el
DANE reportó un crecimiento de la actividad industrial de 8,5% anual, cifra
inferior a la proyectada por el equipo técnico (9,8%).
La información de las encuestas de opinión también es favorable. A
junio, la EOE de Fedesarrollo muestra que los pedidos de la industria
continuaron mejorando, mientras que las expectativas de producción a tres
meses se estabilizan en niveles altos.
Para el tercer trimestre la información es limitada. Dentro de los pocos
indicadores disponibles se encuentra la confianza de los consumidores, la cual
se mantuvo en niveles relativamente altos en el mes de julio, con lo cual se
prevé que el consumo podría mantener el ritmo observado en el segundo
trimestre. Dentro de esa misma encuesta, la disposición a comprar vivienda y
bienes durables se mantiene más alta que la de comienzos de año. Las ventas
observadas de vehículos confirman esa percepción, ya que para el mes de julio
continuaron creciendo a un ritmo importante
Los nuevos datos a junio mostraron una desaceleración de las
exportaciones en dólares. A junio las ventas externas totales crecieron 11,7%
anual, cuando un mes atrás lo habían hecho a un ritmo de 30% anual. Este
menor ritmo de crecimiento se observó en las principales categorías según el
origen de los bienes. Las ventas externas de los principales productos (café,
carbón, petróleo ferroníquel y sus derivados) aumentaron en junio 30%, cifra
menor en 24,9 pp a la observada en mayo. Por su parte, las exportaciones
agropecuarias crecieron 0,8% anual y las industriales sin principales productos
-19,7% anual, cifras menores en 0,5 pp y 18 pp a los registros de mayo.
c. Contexto externo
La última información disponible sobre el panorama externo sugiere una
recuperación económica mundial que se puede dar de una forma más lenta que
la esperada por el mercado. Lo anterior, por la desaceleración observada en
Estados Unidos, nuestro principal socio comercial, que en el segundo trimestre
de 2010 creció 2,4% (t/a), luego de haberlo hecho a un ritmo de 3,7% (t/a) al
inicio del año. La mayor sorpresa se dio en el consumo de los hogares, cuyo
4
crecimiento en el primer trimestre fue revisado a la baja y con un aumento aún
menor para el segundo trimestre. Los nuevos datos del mercado laboral, de
confianza del consumidor, de ventas al por menor, de crédito de consumo y de
inicios de vivienda siguen reflejando la debilidad de la demanda interna en
dicho país.
Por su parte, la reciente información de Europa sigue mostrando una
recuperación lenta, a pesar de la aceleración observada en Alemania e
Inglaterra. Los países asiáticos, en cambio, mantienen buenos ritmos de
crecimiento y se espera que continúen por esta senda.
Con excepción de Venezuela, nuestros principales socios comerciales en
Latinoamérica continúan mostrando una aceleración en su economía. Se
destacan los altos crecimientos en el Perú, Brasil y Chile. En lo que resta del
año es factible que esta dinámica continúe y que en 2011 se presente un
crecimiento aún mayor del PIB.
En el caso de Venezuela, tanto el crecimiento observado para el primer
trimestre (-5,8% anual) como el que se proyecta para todo el 2010 son reflejo
de una economía en recesión que ha disminuido fuertemente sus compras
externas. Otros factores como la devaluación del bolívar fuerte y la pérdida de
confianza de los exportadores colombianos hacia dicho país, no permiten ser
optimistas en el crecimiento de las exportaciones en el caso de que se
restablezcan plenamente las relaciones comerciales.
A pesar del menor crecimiento de algunos países industrializados, se
espera que los términos de intercambio se mantengan en los actuales niveles,
los cuales se pueden considerar como favorables.
d. Variables financieras
En julio el promedio de las tasas nominales de los créditos de consumo
y ordinario se situaron en 17,9% y 12,9% respectivamente, con descensos en
el mismo orden de 31 pb y 18 pb respecto al mes anterior. Las tasas para
créditos hipotecarios se mantuvieron estables en 12,9%. De esta forma, las
tasas de interés de los préstamos a los hogares y a las empresas se encuentran
en niveles históricamente bajos.
A julio el crecimiento anual de la cartera bruta total promedio fue 5,4%,
cuando un mes atrás lo había hecho a un ritmo de 4,6%. Las carteras más
5
dinámicas continúan siendo la hipotecaria, 18,8% anual, y la de consumo,
9,3% anual, cifras superiores en su orden en 90 pb y 170 pb que los registros
de junio. En julio el crecimiento anual de la cartera comercial se aceleró 60 pb
y se situó en 1,4%.
Entre el 23 de julio y el 18 de agosto, las tasas de los títulos de deuda
pública registraron variaciones negativas de 5pb, 27pb y 35pb en los tramos
corto, medio y largo, respectivamente.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el
resultado de la inflación a julio que fue menor al esperado por el equipo
técnico del Banco de la República y el mercado, encontrándose dentro del
rango meta fijado por la Junta; (ii) los indicadores de inflación básica que
siguen cayendo y también se encuentran dentro del rango meta fijado por la
Junta; (iii) las expectativas de inflación que continuaron reduciéndose; (iv) la
información disponible que sigue mostrando una recuperación de la economía
rápida y sostenida; (v) las mejoras en las expectativas de los empresarios y
consumidores; (vi) el crecimiento de la cartera del sistema financiero en
moneda legal en niveles similares al aumento estimado del PIB nominal para
2010; (vii) el comportamiento de las tasas de interés del mercado en respuesta
a la reducción de la tasa de referencia del Banco; (viii) el efecto de la tasa de
cambio sobre la inflación y el crecimiento del producto de los sectores
transables; (ix) las tasas de interés de los títulos de deuda pública, que
mostraron una caída en el mes y (x) la posibilidad de que la recuperación de la
economía mundial sea más lenta de lo esperado.
Los principales puntos de análisis entre los miembros de la Junta se
centraron en los siguientes aspectos: (i) las proyecciones de inflación para el
2010 y 2011 ; (ii) la reducción en la variación de los precios de los bienes
transables debido a la apreciación del peso frente al dólar; (iii) el efecto
rezagado de las medidas de política monetaria sobre la producción y los
precios; (iv) las proyecciones de crecimiento de la economía para 2010 que
sugieren una recuperación más rápida de lo previsto y que llevó al equipo
técnico a aumentar su pronóstico para el año ; (v) la dinámica reciente en la
cartera del sistema financiero y el comportamiento de los precios de los
activos; (vi) la caída en las expectativas de inflación; (vii) el comportamiento
reciente de los flujos de capital; (viii) el balance de riesgos entre crecimiento e
6
inflación en un contexto de una economía recuperándose y una inflación que
se sitúa en el rango meta de largo plazo y; (ix) la necesidad de mantener la
credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación
alrededor de la meta de largo plazo.
La Junta Directiva destacó lo siguiente sobre el comportamiento de la
inflación durante el mes: (i) la inflación anual al consumidor en julio fue de
2,24%, por debajo de lo esperado por el mercado y el equipo técnico del
Banco de la República;(ii) los indicadores de inflación básica volvieron a caer
y continúan en la parte baja del rango meta de inflación de largo plazo fijado
por la Junta; (ii) las expectativas de inflación se mantienen en niveles bajos; y
(iv) el resultado de la inflación en el último mes está en línea con las
proyecciones realizadas por el equipo técnico que muestran, con un alto grado
de confianza, que la inflación se situará dentro del rango meta de largo plazo
en 2010 y 2011.
La Junta resaltó que la información recibida en las últimas semanas
sigue indicando que la economía colombiana está creciendo a un mayor ritmo
de lo esperado, sin generar presiones inflacionarias. El aumento en la
confianza de consumidores y productores; el dinamismo de varios indicadores
líderes y la solidez del sistema financiero, confirman el fortalecimiento de la
economía colombiana.
La economía mundial continuó creciendo aunque a un paso más lento
de lo ocurrido en el primer semestre. Lo anterior debido a la desaceleración en
USA. Sin embargo, se aprecia una recuperación cada vez mayor de las
economías de América Latina. Los mercados internacionales, por su parte, se
estabilizaron luego de la crisis financiera en Europa.
La Junta considera que la economía colombiana para lo que resta del
año y comienzos de 2011, podrá tener términos de intercambio favorables,
mayores flujos de capital, tasas de interés internacionales bajas y una demanda
externa por nuestros productos no tradicionales con una recuperación débil.
La Junta considera que la política monetaria expansiva adoptada,
contribuye al crecimiento de la economía.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
7
La Junta Directiva acordó mantener inalterada la tasa de intervención
del Banco de la República que seguirá en 3%.
Bogotá DC, septiembre 3 de 2010
|
2010-09-01 |
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
24 de Septiembre de 2010
El 24 de Septiembre de 2010 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión
ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del
Ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry, el Gerente
General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos
Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan
Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de
crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas
con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los
principales temas tratados en dicha reunión.
1. ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor en agosto se situó en 2,31%
(0,11% mensual) frente 2,24% registrado en julio. De esta manera, la inflación
acumulada es 2,54%.
Como viene sucediendo desde hace varios meses, la principal presión al
alza de la inflación anual proviene del comportamiento de los precios de los
regulados y de los alimentos. El incremento anual de precios de los bienes
regulados pasó de 5,23% en julio a 5,69% en agosto. Esto como consecuencia
de los ajustes que se hicieron en las tarifas de acueducto y gas domiciliario. La
variación anual del IPC de alimentos en agosto se ubicó en 1,80% frente a
1,71% registrado el mes anterior.
Por su parte, la variación anual de los precios de los bienes no
transables sin alimentos ni regulados se redujo de 3,78% en julio a 3,69% en
agosto. El aumento anual de precios de bienes transables sin alimentos ni
regulados se mantuvo constante en -0,77% entre julio y agosto.
2
En cuanto a los indicadores de inflación básica, estos se mantuvieron
prácticamente estables en el último mes, y se situaron por debajo del 3%. El
registro más bajo se sigue presentando en el IPC sin alimentos ni regulados
con 1,7% anual.
Con datos preliminares para lo corrido de septiembre, las expectativas
de inflación derivadas de las negociaciones de deuda pública para 1, 5 y 10
años se situaron en 2,43%, 3,67% y 3,98%, con variaciones de +74 pb, -2 pb y
-9 pb respectivamente, frente al promedio del mes anterior.
Las expectativas de inflación de la encuesta mensual realizadas por el
Banco de la República a comienzos de septiembre siguen mostrando
descensos y se ubican dentro del rango meta de largo plazo fijado por la Junta
Directiva.
Respecto a las presiones de costos no salariales, cabe mencionar que el
comportamiento del IPP a la fecha sugiere que ellas no son significativas. La
variación anual del IPP en agosto fue de solo 2,0%, con un ligero aumento
debido a una base de comparación muy baja.
b. Crecimiento
De acuerdo con el DANE, el PIB creció a una tasa anual de 4,5% en el
segundo trimestre. Con las nuevas cifras, el consumo de los hogares siguió
recuperándose, favorecido por las bajas tasas de interés, los altos niveles de
confianza y la baja inflación. Su crecimiento anual pasó de 3,5% en el primer
trimestre a 3,9% en el segundo.
En julio la tasa de desempleo dejo de caer como consecuencia del
incremento de la oferta de trabajo (12,6% para el total nacional y 13,3 para las
13 ciudades). En el caso de jefes de hogar la tasa de ocupación se mantiene en
niveles superiores al 74%.
En general, la economía siguió jalonada por la demanda interna,
incluida la inversión total y el consumo público. En el segundo trimestre, la
contribución negativa de la demanda externa neta fue más acentuada que en el
primero debido al dinamismo que ganaron las importaciones y al lento
crecimiento de las exportaciones.
3
El crecimiento para el primer trimestre de 2010 se revisó a la baja,
situándose en 4,2% frente a 4,4% de la estimación inicial. Con este dato el
PIB creció durante la primera mitad del año a una tasa anual promedio de
4,3%.
Para el tercer trimestre, los indicadores disponibles sobre la oferta han
tenido comportamientos mixtos y sugieren que el crecimiento económico
podría moderarse en varias ramas como el transporte, la energía, gas y agua y
la industria, en este último caso según lo muestran las encuestas de la ANDI y
Fedesarrollo y la información del DANE a julio.
Por el lado de la demanda hay información más favorable,
especialmente en el consumo de los hogares, el cual estaría creciendo a un
ritmo elevado según lo muestran las encuestas de opinión del mes de agosto y
las cifras recientes de comercio.
La inversión de las empresas se estaría fortaleciendo, de acuerdo con
algunos indicadores como la inversión extranjera, las importaciones de bienes
de capital para la industria y la producción local de maquinaria y equipo. El
incremento en las licencias de construcción y el buen desempeño del crédito
hipotecario también sugiere alguna recuperación en edificaciones.
c. Contexto externo
La última información disponible sobre el panorama externo sugiere un
menor crecimiento en EE.UU. y Japón. En Estados Unidos, nuestro principal
socio comercial, el PIB del segundo trimestre de 2010 fue revisado a la baja
de 2,4%(t/a) a 1,6%(t/a), principalmente por un menor ritmo de aumento de la
inversión y de las exportaciones. Para el tercer trimestre, los nuevos datos del
mercado laboral, de sentimiento de la industria, de ventas al por menor, de
crédito de consumo y de inicios de vivienda sugieren que el crecimiento del
segundo semestre de 2010 podría ser menor que el estimado previamente por
los analistas.
Por su parte, la reciente información sobre el PIB de Europa fue mejor al
esperado, hecho que hizo revisar al alza los pronósticos para todo el 2010 por
parte del mercado. No obstante, la nueva información del tercer trimestre
muestra que este dinamismo está perdiendo fuerza. En julio, la producción
industrial de la zona del Euro creció 7,1% (se esperaba 8%), cuando un mes
atrás lo hacía a un ritmo de 8,3%. En Alemania, país que ha sido el de mayor
4
crecimiento de la zona, el indicador de sentimiento económico de los analistas
(ZEW) de septiembre entró en terreno negativo (-4,3 puntos y se esperaba 14
puntos) y alcanzó su nivel más bajo en los 19 meses.
Con excepción de Venezuela, nuestros principales socios comerciales en
Latinoamérica mostraron altos crecimientos en el segundo trimestre de 2010,
aunque para el resto del año se espera que dichos ritmos se moderen.
En el caso de Venezuela, el crecimiento del PIB del segundo trimestre de
2010 (-1,9% anual), mostró que esta economía continúa en recesión, aunque
menos fuerte que la prevista por los analistas. En el mismo periodo su
demanda interna se contrajo 0,9% anual, explicado principalmente por la caída
en consumo de los hogares (-2,5% anual).
d. Variables financieras
En agosto, el promedio de las tasas de interés nominal de los créditos
de consumo y ordinario se situaron en 17,6% y 9,8% respectivamente, con
descensos en el mismo orden de 32 pb y 6 pb respecto al mes anterior. Las
tasas para créditos hipotecarios se mantuvieron estables en 12,9%. De esta
forma, las tasas de interés de los préstamos a los hogares y a las empresas se
encuentran en niveles históricamente bajos.
En agosto el crecimiento anual de la cartera bruta total promedio fue
6,6%, cuando un mes atrás lo había hecho a un ritmo de 4,4%. Las carteras
más dinámicas continúan siendo la hipotecaria, 19,3% anual, y la de consumo,
10,6% anual, cifras superiores en su orden en 50 pb y 130 pb a los registrados
en julio. En agosto el crecimiento anual de la cartera comercial aumentó con
respecto a julio en 110 pb y se situó en 2,5%.
Entre finales de agosto y el 17 de septiembre de 2010, las tasas de los
títulos de deuda pública registraron caídas de 10pb y 15pb para los títulos a
uno y cinco años. Los títulos a 10 años se ubicaron en la misma fecha en
7,79%, 4 pb más que lo registrado al cierre del mes anterior.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el
resultado de la inflación a agosto; (ii) los indicadores de inflación básica; (iii)
5
las expectativas de inflación; (iv) la información disponible sobre el
crecimiento de la economía; (v) los indicadores de confianza de productores y
consumidores; (vi) el desarrollo de la cartera del sistema financiero en moneda
legal; (vii) el comportamiento de las tasas de interés del mercado en respuesta
a la tasa de referencia del Banco; (viii) el efecto de la tasa de cambio sobre la
inflación y los precios de los sectores transables; (ix) el comportamiento de los
títulos de deuda pública; y (x) los datos de crecimiento de la economía
mundial, especialmente los datos de crecimiento de Estados Unidos.
Los principales puntos de análisis entre los miembros de la Junta se
centraron en los siguientes aspectos: (i) las proyecciones de inflación para el
2010 y 2011; (ii) la reducción en la variación de los precios de los bienes
transables debido a la apreciación del peso frente al dólar; (iii) el efecto
rezagado de las medidas de política monetaria sobre la producción y los
precios; (iv) las proyecciones de crecimiento de la economía para 2010 que
sugieren una recuperación a un menor ritmo que el esperado; (v) el aumento
de la confianza de los consumidores y el comportamiento de la inversión; (vi)
la dinámica reciente en la cartera del sistema financiero; (vii) el incremento
del precio de los activos financieros y de la vivienda; (viii) la caída en las
expectativas de inflación; (ix) el comportamiento reciente de los flujos de
capital; (x) el comportamiento de los títulos de deuda pública que muestran
valorización en el tramo corto de la curva y desvalorización en el tramo largo
de la curva; (xi) el balance de riesgos entre crecimiento e inflación en un
contexto de una economía recuperándose y una inflación que se sitúa en el
rango meta de largo plazo y; (xi) la necesidad de mantener la credibilidad de
la autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación alrededor de la
meta de largo plazo.
La Junta Directiva destacó los siguiente aspectos sobre el
comportamiento de la inflación durante el mes: (i) la inflación anual al
consumidor en agosto fue de 2,31%, ligeramente superior a lo esperado por el
mercado y el equipo técnico del Banco de la República; (ii) los indicadores de
inflación básica volvieron a caer; (iii) las expectativas de inflación se
mantienen en niveles bajos; y (iv) el resultado de la inflación en el último mes
está en línea con las proyecciones realizadas por el equipo técnico que
muestran, con un alto grado de confianza, que la inflación se situará dentro del
rango meta de largo plazo en 2010 y 2011.
La Junta resaltó que la información recibida indica que la economía
colombiana está creciendo al ritmo previsto sin generar presiones
6
inflacionarias. La economía sigue jalonada por la demanda interna, incluida la
inversión total y el consumo público.
La economía mundial continuó creciendo aunque más lentamente de lo
ocurrido en el primer semestre. Sin embargo, se aprecia buen ritmo de
crecimiento en las economías de Asia y una recuperación cada vez mayor de
las economías de América Latina.
La Junta considera que para el resto del año y comienzos de 2011 la
economía colombiana podrá tener términos de intercambio favorables,
mayores flujos de capital, tasas de interés internacionales bajas y una demanda
externa con una recuperación débil.
La Junta considera que la política monetaria expansiva adoptada,
contribuye al crecimiento de la economía sin poner en riesgo el cumplimiento
de las metas de inflación.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva acordó mantener inalterada la tasa de intervención
del Banco de la República que seguirá en 3%.
Bogotá DC, octubre 8 de 2010
|
2010-10-01 |
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
29 de Octubre de 2010
El 29 de Octubre de 2010 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión
ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del
Ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry, el Gerente
General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos
Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan
Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de
crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas
con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los
principales temas tratados en dicha reunión.
1. ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor en septiembre se situó en 2,28%
(mensual de -0,14%), 3 puntos básicos (pb) menos que en agosto.
El menor registro frente a agosto se debió a la presión bajista de
alimentos perecederos, no transables sin alimentos ni regulados, y de los
regulados. La variación anual de los precios de los alimentos pasó de 1,80%
en agosto a 1,72% en septiembre, impulsada por los alimentos perecederos
que registraron una inflación anual de 4,43% en septiembre frente a 6,24% en
agosto. Por su parte, la variación anual de los precios de los bienes y servicios
no transables sin alimentos ni regulados se redujo de 3,69% en agosto a 3,58%
en septiembre. Finalmente, los precios de los bienes regulados registraron un
aumento anual de 5,62% en septiembre inferior al registro para agosto de
5,69%.
Por su parte, la variación anual de los precios de los bienes transables
sin alimentos ni regulados pasó de -0,77% en agosto a -0,62% en septiembre.
2
En cuanto a los indicadores de inflación básica, éstos se mantuvieron
prácticamente estables en el último mes, y se situaron por segundo mes
consecutivo por debajo del 3%. El registro más bajo se sigue presentando en
el IPC sin alimentos ni regulados con 1,67% anual.
Con datos para octubre, las expectativas de inflación derivadas de las
negociaciones de deuda pública para 1, 5 y 10 años se situaron en 0,8%, 3,5%
y 3,8%, con variaciones de -174pb, -14pb y- 27pb respectivamente, datos
inferiores al promedio del mes anterior.
Las expectativas de inflación de las encuestas trimestral y mensual
realizadas por el Banco de la República a comienzos de octubre siguen
mostrando descensos y se ubican dentro del rango meta de largo plazo fijado
por la Junta Directiva.
Las presiones de costos no salariales continúan en niveles bajos. No se
perciben presiones significativas por dicho frente a pesar del incremento
registrado en el último mes. La variación anual de los precios al productor
(IPP) fue de 2,3% frente a un registro de 2,0% en agosto.
b. Crecimiento
La información para el tercer trimestre sugiere que en términos
generales la demanda interna mantuvo el comportamiento observado en la
primera mitad del año, caracterizado por dinamismo del consumo de los
hogares y recuperación sostenida de la inversión.
Para el tercer trimestre, los indicadores disponibles de oferta han tenido
comportamientos mixtos y sugieren que el crecimiento económico en varias
ramas como la industria, la energía, gas y agua y el transporte podría
moderarse. Según la más reciente información del DANE, la industria estaría
exhibiendo una tasa de expansión anual de 4,4% en agosto.
Sin embargo, otros sectores muestran un comportamiento más
destacado, como es el caso del comercio que según el DANE se expandía a
una tasa anual de 12,7% en agosto. Este último registro concuerda con el
buen comportamiento exhibido en los indicadores de confianza de los
consumidores para el tercer trimestre.
3
En cuanto al mercado laboral, en septiembre la tasa de desempleo se
ubica en 10,6% para el total nacional y 11,5% para las 13 ciudades, cifras
inferiores a las presentadas el año pasado.
Se espera que la inversión aumente en el tercer trimestre. Esta previsión
se apoya en el incremento de las importaciones de bienes de capital, el buen
comportamiento de la inversión extranjera directa y la producción local de
maquinaria y equipo. A su vez, el incremento de las licencias de construcción
y el dinamismo en el crédito hipotecario también sustentan un mejor
desempeño de la construcción.
En cuanto al comercio exterior, con datos a agosto las exportaciones
totales en dólares mostraban una variación anual de 22,3%, impulsadas
principalmente por el sector minero con una variación anual de 30,4%. En
cuanto al comercio exterior, con datos a agosto las exportaciones totales en
dólares mostraban una variación anual de 22,3% impulsadas principalmente
por el sector minero con una variación anual de 30,4%. Cifras superiores a los
registros de los meses de julio y junio. Por otra parte, las importaciones
totales en dólares mostraron una aceleración en agosto con una tasa de
crecimiento anual acumulada 12 meses de 5,0% frente al registro un mes atrás
de -0,5%. La aceleración se exhibió en los tres grupos: consumo, materias
primas y bienes de capital.
c. Contexto externo
La última información disponible sobre el panorama externo sugiere una
recuperación económica mundial que se puede dar de una forma más lenta y
desigual que la esperada por el mercado.
En particular, Estados Unidos, nuestro principal socio comercial, muestra
signos de desaceleración más marcados que lo esperado por el mercado. En el
segundo trimestre de 2010 creció 1,6% (t/a), luego de haberlo hecho a un
ritmo de 3,7% (t/a) al inicio del año. Esto lo confirman indicadores del tercer
trimestre como: los nuevos datos del mercado laboral, el sentimiento de la
industria, las ventas al por menor, el crédito de consumo y los inicios de
vivienda. En conjunto, la desaceleración en esta economía, la fuerte inyección
monetaria y las expectativas de mayores estímulos a la economía por parte de
la Reserva Federal, han continuado debilitando el dólar frente a la mayoría de
las monedas.
4
Por su parte, la más reciente información de Europa sigue mostrando una
recuperación lenta, a pesar de la aceleración observada en Alemania y Francia
en el primer y segundo trimestres. Los países asiáticos, en cambio, mantienen
buenos ritmos de crecimiento y se espera que continúen por esta senda.
En las economías emergentes de la región, a excepción de Venezuela, las
políticas monetarias y las medidas fiscales, los niveles de endeudamiento, los
flujos de capitales, los términos de intercambio y la confianza, siguen
favoreciendo el crecimiento, especialmente de la demanda interna. Ello, en
conjunto con las perspectivas futuras, ha llevado a que en algunas de ellas
(Perú, Brasil y Chile) los bancos centrales comiencen a normalizar sus
políticas monetarias con incrementos de sus tasas de interés.
En el caso de Venezuela, los distintos analistas proyectan una caída del PIB
para el presente año cercana al 2% en línea con los registros del segundo
trimestre (-1,9%), y una recuperación muy incipiente para 2011.
A pesar del menor crecimiento de algunos países industrializados, se
espera que los términos de intercambio se mantengan históricamente altos.
d. Variables financieras
En septiembre el promedio de las tasas nominales de los créditos de
consumo y ordinario se situaron en 17,5% y 9,7% respectivamente, con
descensos de 3 pb y 10 pb respecto al mes anterior. Las tasas para créditos
hipotecarios se mantuvieron estables en 12,9%. De esta forma, las tasas de
interés de los préstamos a los hogares y a las empresas se encuentran en
niveles históricamente bajos.
En septiembre el crecimiento anual de la cartera bruta total promedio
fue 9,3% cuando el mes pasado había sido de 6,6%. Las carteras más
dinámicas continúan siendo la hipotecaria, con una variación anual de 22,5%,
y la de consumo, con una variación anual de 12,3%, cifras superiores en 300
pb para el caso de la cartera hipotecaria y 182 pb para la cartera de consumo a
los datos registrados en agosto. En septiembre el crecimiento anual de la
cartera comercial aumentó con respecto a agosto en 353pb y se situó en 6,1%.
Entre el 30 de septiembre y el 29 de octubre de 2010, las tasas de los
títulos de deuda pública registraron caídas de 20 pb y 28 pb para los títulos a
5
uno y cinco años. Los títulos a 10 años se ubicaron en la misma fecha en
7,49%, 40 pb menos que lo registrado al cierre del mes anterior.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el
resultado de la inflación a septiembre; (ii) los indicadores de inflación básica;
(iii) las expectativas de inflación; (iv) la información disponible sobre el
crecimiento de la economía; (v) los indicadores de confianza de productores y
consumidores; (vi) el desarrollo de la cartera del sistema financiero en moneda
legal; (vii) el comportamiento de las tasas de interés del mercado en respuesta
a la tasa de referencia del Banco; (viii) La evolución reciente de la tasa de
cambio su efecto sobre la inflación y los sectores productivos; (ix) el
comportamiento de los títulos de deuda pública; y (x) los datos de crecimiento
de la economía mundial.
Los principales puntos de análisis entre los miembros de la Junta se
centraron en los siguientes aspectos: (i) las proyecciones de inflación para el
2010 y 2011; (ii) la variación de los precios de los bienes transables; (iii) el
efecto rezagado de las medidas de política monetaria sobre la producción y los
precios; (iv) las proyecciones de crecimiento de la economía y del empleo
para 2010 y 2011 que sugieren un crecimiento similar al observado en 2010;
(v) el aumento de la confianza de los consumidores y el comportamiento de la
inversión; (vi) la dinámica reciente en la cartera del sistema financiero; (vii) el
incremento del precio de los activos financieros y de la vivienda; (viii) la
caída en las expectativas de inflación; (ix) el comportamiento reciente de los
flujos de capital; (x) el comportamiento de los títulos de deuda pública que
muestran valorización en todos los tramos; (xi) el balance de riesgos entre
crecimiento e inflación en un contexto de una economía recuperándose y una
inflación que se sitúa en la mitad inferior del rango meta de largo plazo y; (xii)
la necesidad de mantener la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las
expectativas de inflación alrededor de la meta de largo plazo.
La Junta Directiva destacó los siguientes aspectos sobre el
comportamiento de la inflación durante el mes: (i) la inflación anual al
consumidor en agosto fue de 2,28%, inferior a lo esperado por el mercado y el
equipo técnico del Banco de la República; (ii) los indicadores de inflación
básica siguen mostrando niveles bajos y estables; (iii) las expectativas de
inflación se mantienen en niveles bajos; y (iv) el resultado de la inflación en el
6
último mes está en línea con las proyecciones realizadas por el equipo técnico
que muestran, con un alto grado de confianza, que la inflación se situará en la
mitad inferior del rango meta de largo plazo en 2010 y 2011.
La Junta resaltó que la información recibida indica que la economía
colombiana está creciendo al ritmo previsto un par de meses atrás sin generar
presiones inflacionarias. La economía sigue jalonada por la confianza de los
consumidores, los altos términos de intercambio, el fortalecimiento de la
inversión de las empresas y la recuperación de la cartera del sistema
financiero.
En Europa y Estados Unidos las perspectivas de crecimiento en el corto
plazo siguen siendo modestas. En contraste, Asia y América Latina muestran
mejores ritmos y perspectivas de crecimiento.
La Junta considera que la política monetaria expansiva adoptada,
contribuye al crecimiento de la economía sin poner en riesgo el cumplimiento
de las metas de inflación.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva acordó mantener inalterada la tasa de intervención
del Banco de la República que seguirá en 3%.
Bogotá DC, noviembre 12 de 2010
|
2010-11-01 |
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
19 de Noviembre de 2010
El 19 de Noviembre de 2010 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión
ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del
Ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry, el Gerente
General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos
Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan
Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de
crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas
con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los
principales temas tratados en dicha reunión.
1. ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor en octubre se situó en 2,33% (mensual
de -0,09%), 5 puntos básicos (pb) más que en septiembre.
El mayor registro frente a septiembre se debió a la presión alcista de los
regulados y de los transables sin alimentos ni regulados. La variación anual
de los precios de los regulados pasó de 5,62% en septiembre a 5,94% en
octubre, impulsada por los servicios públicos y combustibles. Por su parte, la
variación anual de los precios de los bienes transables sin alimentos ni
regulados pasó de -0,62% en septiembre a -0,57% en octubre.
Por su parte, la variación anual de los precios de los bienes y servicios
no transables sin alimentos ni regulados se redujo por cuarto mes consecutivo
y se ubicó en 3,52% en octubre frente a 3,58% en septiembre. De otro lado,
los precios de los alimentos mostraron una caída de 3 pb de 1,72% en
septiembre a 1,69% en octubre.
2
En cuanto a los indicadores de inflación básica, estos se mantuvieron
estables con respecto al mes anterior y su promedio se situó en 2,3%. El
registro más bajo se sigue presentado en el IPC sin alimentos ni regulados con
1,67% anual.
Con datos disponibles al 10 de noviembre, las expectativas de inflación
derivadas de las negociaciones de deuda pública para 1, 5 y 10 años se
situaron en 1,47%, 3,46% y 3,72%, con variaciones de 58 pb, -7 pb y -6 pb
respectivamente, frente al promedio del mes anterior.
Las expectativas de inflación de la encuesta mensual realizada por el
Banco de la República a comienzos de noviembre siguen mostrando descensos
y se ubica dentro del rango meta de largo plazo fijado por la Junta Directiva.
Las presiones de costos no salariales continúan en niveles bajos. No se
perciben presiones significativas por dicho frente a pesar del incremento
registrado en los últimos meses. La variación anual de los precios al productor
(IPP) fue de 2,7% frente a un registro de 2,3% en septiembre, con una
variación mensual de -0,3%.
b. Crecimiento
La información para el tercer y cuarto trimestres sugiere que la demanda
interna exhibe una expansión ligeramente superior a la registrada en el primer
semestre, caracterizada por el dinamismo del consumo de los hogares y
recuperación sostenida de la inversión.
La información de confianza del consumidor de FEDESARROLLO
muestra una leve caída en octubre frente a los registros más recientes. Sin
embargo, sus niveles continúan siendo elevados y claramente superiores al
promedio observado en la primera mitad del año. Ello se ha visto reflejado
también en los indicadores de comercio del DANE. A septiembre las ventas
del comercio al por menor crecían a una tasa anual de 18,6%.
Se espera que la inversión continúe recuperándose en el tercer y cuarto
trimestres. Esta previsión se apoya en el incremento de las importaciones de
bienes de capital, el buen comportamiento de la inversión extranjera directa y
la producción local de maquinaria y equipo. A su vez, el incremento de las
licencias de construcción y el dinamismo en el crédito hipotecario también
sustentan un mejor desempeño de la construcción. Para el cuarto trimestre y
3
en particular para 2011 a los factores mencionados anteriormente se suma el
impulso positivo que puede tener la política de reducción arancelaria para
bienes de capital primordialmente.
En cuanto al comercio exterior, con datos a septiembre las
exportaciones totales en dólares mostraban una variación anual de 15,0%
impulsadas principalmente por el sector minero, con una variación anual de
21,5%. Por otra parte, el crecimiento de las importaciones totales en dólares
mostró un leve incremento en septiembre, con una variación anual de 43%
frente a un registro en agosto de 41,9%. En esta oportunidad la aceleración en
las importaciones se debió al comportamiento en las importaciones de bienes
de capital que presentaron una tasa de expansión anual de 54,9%. Los otros
dos grupos mostraron menores tasas de crecimiento que las observadas un mes
atrás (de 40,3% a 34,5% para las de bienes intermedios y de 51,4% a 13,5%
para las de consumo).
Para el tercer trimestre, los indicadores disponibles de oferta han tenido
comportamientos mixtos y sugieren que el crecimiento económico en varias
ramas como la industria, la energía, gas y agua y el transporte podría
moderarse. Según la más reciente información del DANE, la industria crece a
una tasa de 2,8% anual en septiembre. En contraste, el comportamiento del
sector minero y el comercio ha sido favorable.
En el mercado laboral, los datos disponibles indican que la tasa de
desempleo fue de 10,6% para el total nacional y 11,5% para las 13 ciudades,
cifras inferiores a las del año anterior.
c. Contexto externo
En el último mes, el evento de mayor importancia en el contexto externo
fue el anuncio por parte de la FED de la puesta en marcha de un nuevo
programa de compra de títulos por un valor total entre 850 y 900 miles de
millones de dólares (con una partida directa de 600 miles de millones y el
restante como reinversión de recursos de paquetes anteriores).
Al tiempo, los eventos recientes en Europa han aumentado la percepción
de riesgo en los mercados internacionales. La crisis en Irlanda ha revivido los
temores de contagios en la región sobre economías más grandes como España
e Italia y pone en duda la capacidad de la Unión Europea para hacer frente a
una crisis más marcada en estos últimos.
4
En cuanto a Estados Unidos, el crecimiento de 2,0% (t/a) para el tercer
trimestre de 2010 fue ligeramente superior al registrado en el segundo
trimestre del mismo año, de 1,7% (t/a). En Europa se observa de igual forma
una desaceleración marcada con un crecimiento para el tercer trimestre de
1,5% (t/a), registro muy inferior al 3,9% (t/a) del segundo trimestre.
Adicionalmente, los pocos datos del cuarto trimestre no permiten esperar una
aceleración del crecimiento para las economías mencionadas.
Las economías emergentes de la región también sintieron los efectos del
incremento del riesgo, aunque sus niveles siguen bajos. Así, en las últimas
semanas se observó una caída en los principales índices accionarios de la
región unido a una depreciación de sus monedas frente al dólar. De todos
modos, el buen desempeño económico, las aún bajas primas de riesgo y el
favorable nivel de los precios de algunos productos básicos deberían seguir
contribuyendo a la entrada de capitales hacia las economías emergentes.
A pesar del menor crecimiento de algunos países industrializados, se
espera que los términos de intercambio se mantengan históricamente altos.
d. Variables financieras
En octubre el promedio de las tasas nominales de los créditos de
consumo y ordinario se situaron en 16,9% y 9,4% respectivamente, con
descensos de 62 pb y 34 pb respecto al mes anterior. La tasa para crédito
hipotecario se situó en 12,1% inferior en 11pb al registro de septiembre. De
esta forma, las tasas de interés de los préstamos a los hogares y a las empresas
se encuentran en niveles históricamente bajos.
En octubre el crecimiento anual de la cartera bruta total promedio fue
10,7% cuando un mes atrás lo había hecho a un ritmo de 9,2%. Las carteras
más dinámicas continúan siendo la hipotecaria, con una variación anual de
19,8%, y la de consumo, con una variación anual de 13,7%, cifra menor en
276 pb para el caso de la cartera hipotecaria y mayor en 134 pb para la cartera
de consumo a los datos registrados en septiembre. En octubre, el crecimiento
anual de la cartera comercial aumentó con respecto a septiembre en 178 pb y
se situó en 7,8%.
Entre el 29 de octubre y el 19 de noviembre de 2010, las tasas de los
títulos de deuda pública aumentaron 26 pb y 13 pb para los títulos a uno y
5
cinco años. Los títulos a 10 años se ubicaron en la misma fecha en 8,06 %, 57
pb más que lo registrado al 29 de octubre.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
Los principales puntos de discusión y análisis entre los miembros de la
Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) las proyecciones de inflación
para el 2010 y 2011; (ii) la variación de los precios de los bienes transables;
(iii) el efecto rezagado de las medidas de política monetaria sobre la
producción y los precios; (iv) las proyecciones de crecimiento de la economía
y del empleo para 2010 y 2011 que sugieren un crecimiento similar al
observado en 2010; (v) el aumento de la confianza de los consumidores y el
comportamiento de la inversión; (vi) la dinámica reciente en la cartera del
sistema financiero; (vii) el incremento del precio de los activos financieros y
de la vivienda; (viii) la caída en las expectativas de inflación; (ix) el
comportamiento reciente de los flujos de capital; (x) el comportamiento de los
títulos de deuda pública; (xi) el balance de riesgos entre crecimiento e
inflación en un contexto de una economía recuperándose y una inflación que
se sitúa en la mitad inferior del rango meta de largo plazo y; (xii) la necesidad
de mantener la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas
de inflación alrededor de la meta de largo plazo; (xiii) los datos de crecimiento
y proyecciones de la economía mundial.
La Junta Directiva destacó los siguientes aspectos sobre el
comportamiento de la inflación durante el mes: (i) la inflación anual al
consumidor en agosto fue de 2,33%, mayor que lo observado un mes atrás
pero inferior a lo esperado por el mercado; (ii) los indicadores de inflación
básica siguen mostrando niveles bajos y estables; (iii) las expectativas de
inflación se mantienen en niveles bajos; y (iv) el resultado de la inflación en el
último mes está en línea con las proyecciones realizadas por el equipo técnico
que muestran, con un alto grado de confianza, que la inflación se situará en la
mitad inferior del rango meta de largo plazo en 2010 y 2011.
La Junta resaltó que la economía colombiana sigue mostrando señales
de fortalecimiento impulsado por la confianza de los consumidores, los altos
términos de intercambio, el fortalecimiento de la inversión de las empresas y
la recuperación de la cartera del sistema financiero. Para 2011 se espera un
crecimiento similar al observado en 2010, cercano al 4,5%.
6
La información disponible sobre el comportamiento de las economías
de los Estados Unidos, Europa y Japón en el tercer trimestre muestra un
crecimiento débil, aunque con diferencias importantes entre países. Las
economías Asiáticas, y una parte importante de las de América Latina están
creciendo a tasas altas. Los precios internacionales de los productos básicos
más relevantes para Colombia permanecen en niveles históricamente altos a
pesar del descenso reciente en las cotizaciones de algunos de ellos.
En las últimas semanas han surgido eventos en Europa y Asia que han
afectado el comportamiento de los mercados, aumentando la percepción de
riesgo en el mundo. América Latina no ha sido la excepción. En consecuencia,
recientemente se observó una caída en los principales índices accionarios de la
región unido a una depreciación de sus monedas frente al dólar.
La Junta Directiva considera que la postura de la política monetaria ha
contribuido al crecimiento de la economía sin comprometer el logro de la meta
de inflación.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva acordó mantener inalterada la tasa de intervención
del Banco de la República que seguirá en 3%.
Bogotá DC, diciembre 03 de 2010
|
2010-12-01 |
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
17 de Diciembre de 2010
El 17 de Diciembre de 2010 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión
ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del
Ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry, el Gerente
General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos
Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan
Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de
crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas
con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los
principales temas tratados en dicha reunión.
1. ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor en noviembre fue de 2,59% (mensual
de 0,19%), 26 puntos básicos (pb) más que en octubre. De esta manera la
inflación acumulada es 2,51%.
El mayor registro frente a octubre se debió a la presión alcista de bienes
y servicios regulados y alimentos. La variación anual de los precios de los
regulados pasó de 5,94% en octubre a 6,29% en noviembre, impulsada por los
servicios públicos. La variación anual de los precios de los alimentos pasó de
1,69% en octubre a 2,40% en noviembre. El incremento en los precios se
observó en alimentos procesados y perecederos.
La variación anual de los precios de los bienes y servicios no transables
sin alimentos ni regulados se incrementó marginalmente luego de completar
cuatro meses consecutivos de caídas y se ubicó en 3,54% en noviembre frente
a 3,52% en octubre. De otro lado, los precios de los bienes transables sin
2
alimentos ni regulados mostraron un ligero incremento de 3 pb de -0,57% en
octubre a -0,54% en noviembre.
En cuanto a los indicadores de inflación básica, su promedio pasó de
2,34% en octubre a 2,41% en noviembre. El registro más bajo se sigue
presentado en el IPC sin alimentos ni regulados con 1,69% anual.
Con datos disponibles al 14 de diciembre de 2010, las expectativas de
inflación derivadas de las negociaciones de deuda pública para 1, 5 y 10 años
se situaron en 2,4%, 3,9% y 4,2%, con incrementos de 68pb, 28pb y 24pb
respectivamente frente al promedio del mes anterior.
Las expectativas de inflación de la encuesta mensual realizada por el
Banco de la República a comienzos de diciembre se ubican dentro del rango
meta de largo plazo fijado por la Junta Directiva.
La variación anual de los precios al productor (IPP) fue de 3,7% en
noviembre frente a un registro de 2,7% en octubre, con una variación mensual
de 1,2%.
b. Crecimiento
La información para el tercero y cuarto trimestres sugiere que la
demanda interna habría disminuido su dinámica y que su crecimiento para los
últimos trimestres del año sería inferior al observado en la primera mitad de
2010. El consumo de los hogares se mantiene alto pero la inversión se afectó
negativamente por la construcción tanto privada como pública.
Los indicadores de confianza del consumidor se mantienen altos y
explican el desempeño del consumo. Este hecho se refleja en el
comportamiento de los indicadores de comercio y las importaciones de
consumo del DANE. Sin embargo, los indicadores de confianza según
encuesta de FEDESARROLLO han retrocedido.
Por otra parte, la inversión durante el tercer trimestre presenta un
comportamiento mixto. Las importaciones de bienes de capital al tercer
trimestre muestran tasas de expansión elevadas lo que implicaría un buen
desempeño de la inversión en equipo de transporte, maquinaria y equipo. La
construcción registra una contracción en los indicadores de obras civiles del
3
DANE de 17,7% y poco dinámismo en edificaciones, con excepción de la
destinada a la inversión en vivienda de interés social.
En cuanto al comercio exterior, a octubre las exportaciones totales en
dólares mostraban una variación anual de 20,3% impulsadas principalmente
por el sector miniero energético y café, con una variación anual de 29,7%.
Para el acumulado de 12 meses el crecimiento de las exportaciones totales es
de 20,5%. Las importaciones totales en dólares mostraron una variación anual
en octubre de 22,2%. Para el acumulado de 12 meses el crecimiento de las
importaciones totales es de 15,8%.
Para el tercer trimestre, los indicadores disponibles sobre la oferta han
tenido comportamientos mixtos y sugieren que el crecimiento económico en
varias ramas como la industria, la energía, gas y agua y el transporte podría
moderarse. En contraste, la información proveniente de la encuesta de opinión
empresarial de FEDESARROLLO muestra que los pedidos siguen en niveles
elevados y las existencias han caído, ambos indicadores asociados con un
comportamiento favorable de la industria.
En el mercado laboral, la tasa de desempleo muestra una tendencia
decreciente en octubre, principalmente en el total nacional. Los datos a
octubre muestran una fuerte creación de empleo, especialmente no asalariado,
tanto en las trece áreas metropolitanas como en el total nacional.
c. Variables financieras
En noviembre el promedio de las tasas de interés nominales de los
créditos de consumo y ordinario se situaron en 16,8% y 9,2% respectivamente,
con descensos en el mismo orden de 13 pb y 21 pb respecto al mes anterior.
La tasa para créditos hipotecarios se situó en 12,2% inferior en 7 pb al registro
de octubre. De esta forma, las tasas de interés de los préstamos a los hogares y
a las empresas se encuentran en niveles históricamente bajos.
El crecimiento anual de la cartera bruta total en moneda legal en
noviembre fue de 11,9% mientras que el mes anterior su crecimiento fue de
10,7%. Las carteras más dinámicas continúan siendo la hipotecaria, con una
variación anual de 20,0%, y la de consumo, con una variación anual de 14,5%.
En noviembre el crecimiento anual de la cartera comercial fue de 9,6%.
4
Entre el 30 de noviembre y el 16 de diciembre de 2010, las tasas de los
títulos de deuda pública aumentaron 56 pb y 31 pb para los títulos a uno y
cinco años. Los títulos a 10 años se ubicaron en la misma fecha en 8,25%, 4
pb más que lo registrado al 30 de noviembre.
d. Contexto externo
En el contexto externo se destaca el incremento en la percepción de
riesgo producto de los problemas fiscales y financieros en Europa, que se ha
trasmitido a mayores primas de riesgo en Grecia, Irlanda, Portugal, España y
en menor medida Italia. En Europa se observa una desaceleración marcada en
la actividad económica con un crecimiento para el tercer trimestre de 1,5%
(t/a), registro muy inferior al 3,9% (t/a) del segundo trimestre. Sin embargo, el
comportamiento es diverso con Alemania y Francia mostrando una actividad
económica en recuperación.
En Estados Unidos, la información de la actividad económica continúa
mostrando señales mixtas. Mientras se ha revisado al alza el crecimiento para
el tercer trimestre de 2010 a 2,5% (t/a), con un desempeño favorable del
consumo, hay señales de debilidad considerando que la tasa de desempleo
sigue siendo alta por más de un año.
Las economías emergentes de la región también sintieron los efectos del
incremento del riesgo y algunas de sus monedas se han devaluado frente al
dólar. El buen desempeño económico, las aún bajas primas de riesgo y el
favorable nivel de los precios de algunos productos básicos, probablemente
seguirán contribuyendo a la entrada de capitales en estos paises.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
Los principales puntos de discusión y análisis entre los miembros de la
Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) las proyecciones de inflación
para el 2010 y 2011; (ii) la variación de los precios de los bienes transables;
(iii) el efecto rezagado de las medidas de política monetaria sobre la
producción y los precios; (iv) las proyecciones de crecimiento de la economía
y del empleo para 2010 y 2011; (v) el comportamiento de la confianza de los
consumidores y el desempeño de la inversión; (vi) la dinámica reciente en la
cartera del sistema financiero; (vii) el incremento del precio de los activos
financieros y de la vivienda; (viii) las expectativas de inflación; (ix) el
5
comportamiento reciente de los flujos de capital; (x) el comportamiento de los
títulos de deuda pública; (xi) el balance de riesgos entre crecimiento y una
inflación que se sitúa en la mitad inferior del rango meta de largo plazo ; (xii)
la necesidad de mantener la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las
expectativas de inflación alrededor de la meta de largo plazo; y (xiii) los datos
de crecimiento y proyecciones de la economía mundial.
La Junta Directiva destacó los siguientes aspectos sobre el
comportamiento de la inflación durante el mes: (i) la inflación anual al
consumidor en noviembre fue de 2,59%, mayor que lo observado un mes atrás
y superior a lo esperado por el equipo técnico del Banco y el mercado; (ii) los
indicadores de inflación básica (aquella que excluye los precios de los
productos más volátiles como los alimentos) aumentaron levemente y siguen
cerca o por debajo del punto medio del rango meta; (iii) las expectativas de
inflación tuvieron un comportamiento similar; y (iv) el incremento en la
inflación, explicado principalmente por el aumento en los precios de los
alimentos como consecuencia del fenómeno climático será de carácter
transitorio.
La Junta resaltó que la economía colombiana sigue impulsada por el
dinamismo de la demanda interna y términos de intercambio favorables. Los
niveles elevados de confianza, un mercado laboral en recuperación, la
dinámica del crédito y tasas de interés reales a niveles históricamente bajos
han incidido favorablemente en la recuperación del consumo de los hogares y
de la inversión. No obstante lo anterior, un indicador de obras civiles
significativamente menor al esperado y el fenómeno climático pueden
moderar los datos de la actividad económica a tasa inferior a las previstas en el
mes anterior de 4,5%.
En el último mes, las estimaciones de crecimiento mundial para 2010 no
cambiaron de forma significativa. Sin embargo, en promedio los analistas del
mercado y algunas entidades multilaterales continúan pronosticando una
desaceleración de la economía mundial en 2011. Adicionalmente, la
percepción de riesgo en Europa sigue en niveles elevados y ha afectado el
comportamiento de los mercados depreciando sus monedas frente al dólar.
Los precios internacionales de los productos básicos más relevantes
para Colombia permanecen en niveles históricamente altos. Por su parte, el
índice de la Bolsa de Valores Colombia que había descendido en parte por el
6
incremento de la percepción de riesgo mundial, ha retomado la tendencia
creciente.
La Junta Directiva considera que la postura de la política monetaria ha
contribuido al crecimiento de la economía sin comprometer el logro de la meta
de inflación.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva acordó mantener inalterada la tasa de intervención
del Banco de la República que seguirá en 3%.
Bogotá DC, diciembre 30 de 2010
|
2011-01-01 |
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
31 de Enero de 2011
El 31 de Enero de 2011 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión
ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del
Ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry, el Gerente
General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos
Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan
Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de
crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas
con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los
principales temas tratados en dicha reunión.
1. ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor en diciembre fue de 3,17% (mensual de
0,65%), 58 puntos básicos (pb) más que en noviembre, cifra que se ubicó en
el rango meta definido por la Junta Directiva para 2010 (2% - 4%).
El mayor registro frente a noviembre se debió a la presión alcista de los
precios de los alimentos y de los regulados así como al comportamiento
menos favorable de los bienes transables sin alimentos ni regulados. La
variación anual de los precios de los alimentos pasó de 2,4% en noviembre a
4,1% en diciembre, impulsada tanto por perecederos como por procesados. La
variación anual de los regulados pasó de 6,3% en noviembre a 6,6% en
diciembre y se concentró en combustibles. Por último, la variación anual de
los precios de los bienes transables sin alimentos ni regulados pasó de -0,5%
en noviembre a -0,3% en diciembre.
2
La variación anual de los precios de los bienes y servicios no transables sin
alimentos ni regulados se ubicó en 3,5% en diciembre, luego de haberse
incrementado en noviembre.
En cuanto a los indicadores de inflación básica, su promedio pasó de 2,4% en
noviembre a 2,5% en diciembre. El registro más bajo se sigue presentado en el
IPC sin alimentos ni regulados con 1,8% anual. La variación anual de los
precios al productor (IPP) fue de 4,4% en diciembre frente a un registro de
3,7% en noviembre, con una variación mensual de 1,6%.
Las expectativas de inflación a un año aumentaron y se situaron en la mitad
superior del rango meta de 2011. Las de largo plazo (cinco a diez años),
medidas con los papeles de deuda pública, superaron el techo del mismo.
b. Crecimiento
En el tercer trimestre el PIB creció a una tasa anual de 3,6%, inferior a la
esperada por el mercado y el Banco. Dicho comportamiento fue explicado
principalmente por la contracción en la construcción de edificaciones y obras
civiles y, en menor medida, por un bajo crecimiento en carbón y un
desempeño menos favorable que el esperado en café.
Por el lado de la demanda el menor registro correspondió a un bajo
crecimiento en la inversión, en particular la destinada a la construcción y en
un desempeño menor al esperado de las exportaciones, estas últimas afectadas
por efectos climáticos. El consumo de los hogares mostró un buen desempeño
y se aceleró frente a los registros del primer semestre. El mayor consumo y
una fuerte inversión en maquinaria y equipo y en equipo de transporte
sustentaron unas importaciones elevadas.
Para el último trimestre de 2010 se espera un desempeño de la economía
similar al registrado en el tercer trimestre, liderado principalmente por la
demanda interna. El invierno que se intensificó hacia finales de año, pudo
haber tenido efectos negativos importantes no solo en la agricultura, sino
también en la Formación Bruta de Capital Fijo y en ciertas exportaciones de
origen minero, las cuales no pudieron ser realizadas por problemas de
extracción y/o de transporte.
El indicador de confianza del consumidor se mantuvo alto para el cuarto
trimestre a pesar de presentar caídas en los últimos meses. Esto indicaría que
3
en el cuarto trimestre el consumo de los hogares conservó un buen
desempeño. Lo anterior se refleja a su vez en el comportamiento de los
indicadores de comercio, que según el último registro del DANE mostraban
una tasa de expansión anual a noviembre de 21,4%, y las importaciones de
consumo, que se expandían a una tasa de 51,3% en dólares al mismo mes.
Por otra parte, los indicadores de inversión presentaron un comportamiento
mixto durante el cuarto trimestre. Las importaciones de bienes de capital en
dólares a noviembre muestran tasas de expansión elevadas. Sin embargo, la
construcción aún no mostraría un desempeño favorable, en parte por los
efectos del clima y los problemas de contratación y ejecución de las obras.
En cuanto al comercio exterior, a noviembre las exportaciones totales en
dólares mostraban una variación anual de 19,5% impulsadas principalmente
por el sector minero energético y café, con una variación anual de 30,0%. Para
el acumulado de 12 meses el crecimiento de las exportaciones totales es de
20,0%. Las importaciones totales en dólares mostraron una variación anual en
noviembre de 34,5%. Para el acumulado de 12 meses el crecimiento de las
importaciones totales es de 20,8%.
Para el cuarto trimestre, los indicadores disponibles sobre la oferta han tenido
comportamientos mixtos y sugieren que el crecimiento económico en varias
ramas como la industria, la energía, gas, agua y el transporte podría
moderarse. En contraste, la información proveniente de la encuesta de opinión
empresarial de FEDESARROLLO muestra que los pedidos de la industria
siguen en niveles elevados y las existencias han caído, ambos indicadores
asociados con un comportamiento favorable del sector. Sin embargo, en dicha
encuesta también se destaca una caída de las expectativas de producción y
ventas a tres meses.
El crecimiento del empleo formal para los más educados estaría implicando un
incremento en sus ingresos, lo que podría estar en parte detrás de la
recuperación del consumo. El empleo formal mostró cierta recuperación en lo
corrido de 2010 hasta diciembre, especialmente en la última parte del año.
Las tasas reales y nominales de interés de crédito en niveles históricamente
bajos, junto a una cartera de consumo e hipotecaria que se aceleró a lo largo
del último semestre de 2010 son factores que han contribuido al crecimiento, y
que permiten esperar un consumo más dinámico y una recuperación de la
4
inversión en edificaciones en el último trimestre. La aceleración de la cartera
comercial también ha sido importante.
c. Variables Financieras
En Diciembre el promedio de las tasas de interés nominales de los créditos de
consumo y ordinario se situaron en 16,9% y 9,3% respectivamente, con
aumentos de 6 pb y 11 pb respecto al mes anterior. La tasa para créditos
hipotecarios se situó en 12,2% sin variación respecto al registro de
Noviembre.
El crecimiento anual de la cartera bruta total en moneda legal en diciembre fue
de 14,1% mientras que el mes anterior su crecimiento fue de 11,9%. Las
carteras más dinámicas continúan siendo la hipotecaria, con una variación
anual de 21,3% y la de consumo, con una variación anual de 15,5%. En
diciembre el crecimiento anual de la cartera comercial fue de 12,8%.
Entre el 3 de enero y el 28 de enero de 2011, las tasas de los títulos de deuda
pública aumentaron 11 pb y 41pb para los títulos a uno y cinco años. Los
títulos a 10 años se ubicaron en la misma fecha en 8,5%, 19 pb más que lo
registrado al 3 de enero.
d. Contexto Externo
En el contexto externo en el último mes se destacan los registros de
desempeño favorables en algunas economías desarrolladas como Estados
Unidos con un crecimiento en el año de 2,9% y Alemania con una expansión
de la economía de 3,5%. Aun así, Europa sigue mostrando una importante
desaceleración para el segundo semestre del año frente al primero, producto de
un desempeño poco favorable de las economías de la periferia europea.
En el caso de las economías europeas con problemas fiscales, los mercados
habrían tomado como una señal positiva las colocaciones de deuda realizadas
el mes pasado por Portugal, España e Italia, hecho que se ha reflejado
parcialmente en una reducción de la percepción de riesgo medida a través de
los CDS así como en la tasa de sus títulos a 5 y 10 años.
Los mejores indicadores de actividad económica para Estados Unidos, en
conjunto con la aprobación de los planes fiscales del mes pasado, han hecho
que mejoren las perspectivas para 2011 para esta economía y en general para
5
la economía mundial. Sin embargo, los analistas todavía ven con
preocupación que el mercado laboral no muestre claros signos de
recuperación.
En 2011, las economías emergentes de la región han vuelto a experimentar
presiones hacia la apreciación, luego de un corto periodo de calma. La solidez
de sus fundamentales y su buen desempeño económico esperado en 2011, así
como los precios altos de los productos básicos y las bajas primas de riesgo,
seguirán contribuyendo, probablemente, a la entrada de capitales a estos
países.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
Los principales puntos de discusión y análisis entre los miembros de la
Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) las proyecciones de inflación
en 2011; (ii) la variación de los precios de los bienes transables; (iii) el efecto
rezagado de las medidas de política monetaria sobre la producción y los
precios; (iv) las proyecciones de crecimiento de la economía y del empleo
2011; (v) el comportamiento de la confianza de los consumidores y el
desempeño de la inversión; (vi) la dinámica reciente en la cartera del sistema
financiero; (vii) el incremento del precio de los activos financieros y de la
vivienda; (viii) las expectativas de inflación; (ix) el comportamiento reciente
de los flujos de capital; (x) el comportamiento de los títulos de deuda pública;
(xi) el balance de riesgos entre crecimiento e inflación; (xii) la necesidad de
mantener la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de
inflación alrededor de la meta de largo plazo; y (xiii) los datos de crecimiento
y proyecciones de la economía mundial.
La Junta Directiva destacó los siguientes aspectos sobre el
comportamiento de la inflación durante el mes: (i) En 2010, la variación anual
del índice de precios al consumidor fue 3,17%, cifra superior a lo esperado por
el equipo técnico del Banco y el mercado. El incremento en la inflación,
explicado principalmente por el aumento en los precios de los alimentos como
consecuencia del fenómeno climático será de carácter transitorio; (ii) Los
indicadores de inflación básica también aumentaron, pero a un menor ritmo y
aún se encuentra por debajo del punto medio del rango meta; (iii) Las diversas
medidas de expectativas de inflación a un año se incrementaron y se ubicaron
en la mitad superior del rango meta de inflación.
6
El crecimiento de la economía colombiana en el segundo semestre de 2010 fue
inferior a lo pronosticado hace unos meses. Esto se explica, fundamentalmente
por el comportamiento de la inversión en las obras civiles y los efectos del
fenómeno de La Niña sobre la producción agrícola, la producción minera y el
transporte. En contraste, el consumo y el endeudamiento de los hogares
crecen a tasas altas, así como el endeudamiento de las empresas y la inversión
en maquinaria y equipo. Esto último es consecuencia, en parte, de tasas de
interés nominales y reales históricamente bajas.
Las economías de nuestros principales socios comerciales están creciendo un
poco más de lo esperado antes, si bien persiste un alto nivel de incertidumbre
sobre el comportamiento futuro de algunas de ellas. Al mismo tiempo, países
de Asia y América Latina muestran fuerte crecimiento y presiones de precios,
y algunos de sus bancos centrales han iniciado cambios en la postura de la
política monetaria. Los precios internacionales de los productos básicos se
encuentran en niveles históricamente altos.
Los co-directores analizaron las condiciones para que, dentro de los escenarios
probables de los próximos meses, sea necesario introducir cambios en la
postura de la política monetaria, reduciendo en algún grado su carácter
expansivo. Los puntos que se destacaron como fundamento para un eventual
aumento de la tasa de interés de intervención serían, entre otros, las crecientes
expectativas de inflación al alza por encima del rango meta, la importante
dinámica de la demanda interna, los altos precios de los activos y el
crecimiento acelerado de la cartera. De otra parte, a favor del mantenimiento
de la actual tasa, se subrayaron los bajos niveles de inflación básica y la
relativa estabilidad reciente de los precios de los bienes no transables sin
alimentos y regulados, el posible carácter transitorio de los incrementos en los
precios de los alimentos, la inestable situación de la deuda soberana de
algunos países europeos y la falta de certeza sobre las proyecciones de
inflación y crecimiento para los próximos meses.
Finalmente, los codirectores consideraron que en el caso en que la economía
continúe la senda expansiva esperada, o las expectativas de inflación
mostraren señales de desviarse de las metas, se darían las condiciones
apropiadas para retirar gradualmente el estímulo monetario con el fin de
afianzar el crecimiento sostenido de la producción y el empleo.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
7
La Junta Directiva acordó mantener inalterada la tasa de intervención del
Banco de la República que seguirá en 3%.
Bogotá DC, febrero 14 de 2011
|
2011-02-01 |
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
25 de Febrero de 2011
El 25 de Febrero de 2011 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión
ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del
Ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry, el Gerente
General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos
Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan
Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de
crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas
con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los
principales temas tratados en dicha reunión.
1. ANTECEDENTES
a.
Desarrollos recientes de la inflación:
La inflación anual al consumidor de enero fue 3,4% (mensual 0,91%),
13 puntos básicos (pb) más que en diciembre.
El mayor registro frente a diciembre se debió a la presión alcista de los
precios de los alimentos y de los regulados. La variación anual de los precios
de los alimentos pasó de 4,1% en diciembre a 4,8% en enero, impulsada en
esta oportunidad principalmente por los alimentos transables y la carne de res.
A pesar de que la inflación anual de los alimentos perecederos afectados por el
invierno continúa siendo alta, su contribución a la aceleración de la inflación
en esta oportunidad fue menor que en meses anteriores. Por su parte, la
variación anual de los regulados pasó de 6,6% en diciembre a 7,0% en enero y
se concentró en combustibles.
Por el contrario, la variación anual de los precios de los bienes y
servicios no transables sin alimentos ni regulados se redujo de 3,5% en
diciembre, a 3,4% en enero. La variación anual de los precios de los bienes
2
transables sin alimentos ni regulados se mantuvo estable pero todavía en
terreno negativo.
En cuanto a los indicadores de inflación básica, su promedio en enero se
mantuvo estable en 2,5%. El registro más bajo se sigue presentando en el IPC
sin alimentos ni regulados con 1,7% anual. De otro lado, la variación anual de
los precios al productor (IPP) fue 4,3%, ligeramente inferior a lo registrado en
diciembre (4,4%). En cuanto a su composición, se registra un incremento en la
variación anual del componente importado y una caída en la del componente
nacional.
En enero las expectativas de inflación para finales de 2011 se
mantuvieron en el mismo nivel del mes anterior (3,6%). Algo similar ocurrió
con las expectativas a un año y las de más largo plazo (5 y 10 años) derivadas
del mercado de papeles de deuda pública. Para estas últimas, su nivel se
encuentra por fuera del rango meta de largo plazo (2% - 4%).
b.
Crecimiento
La información disponible para finales de 2010 permite prever un
crecimiento del PIB en el cuarto trimestre del año similar al registrado en el
tercero, con lo cual la economía colombiana habría crecido a una tasa cercana
al 4,0% para todo el año. Dicho comportamiento estaría fundamentado en la
dinámica de la demanda interna, impulsada principalmente por el consumo de
los hogares y la formación bruta de capital fijo.
Si bien la confianza de los consumidores mostró un retroceso en los
últimos cuatro meses de 2010, su nivel a enero según lo mide el indicador de
Fedesarrollo, no es bajo en términos históricos. A ello se suma un crédito de
consumo que continuó expandiéndose a tasas altas en diciembre y enero y las
ventas al por menor que creció 12,4% anual en diciembre. Por anterior sigue
siendo razonable esperar un buen crecimiento para el consumo privado en el
cuarto trimestre de 2010 y el primero de 2011.
El comportamiento de las importaciones de bienes de capital, con un
crecimiento fuerte a finales de año, sugiere que la inversión en bienes de
capital mantiene un buen dinamismo. Así mismo, el crecimiento de las
licencias de construcción en noviembre, al igual que el de las ventas de
cemento en diciembre, anticipa un mejor dinamismo en la construcción de
vivienda en 2011.
3
En cuanto al comercio exterior, a diciembre las exportaciones totales en
dólares mostraban una variación anual de 20,1% impulsadas principalmente
por el sector minero energético y café, con una variación anual de 30,4%.
Para el acumulado de 12 meses el crecimiento de las exportaciones totales es
de 21,1%. Las importaciones totales en dólares mostraron una variación anual
en diciembre de 30,1%. Para el acumulado de 12 meses el crecimiento de las
importaciones totales es 23,7%.
En general, las condiciones macroeconómicas continúan señalando una
expansión económica importante en 2011. En particular se sigue esperando
una demanda mundial en expansión, unos términos de intercambio altos y que
aumentarán frente a 2010, unos flujos de IED elevados, la recuperación del
empleo y condiciones crediticias internas amplias, con tasas de interés reales
relativamente bajas. Por ello, se espera que el PIB en 2011 muestre un
desempeño favorable y se sitúe alrededor del 4,5%. Sin embargo, cabe señalar
que sobre esta estimación existe una incertidumbre elevada, producto de los
diferentes riesgos económicos y sociopolíticos que enfrenta el mundo, así
como el nivel del crecimiento del gasto público en Colombia.
c.
Variables Financieras
En enero el promedio de las tasas de interés nominales de los créditos
de consumo y ordinario se situaron en 17,5% y 10,1% respectivamente, con
aumentos en el mismo orden de 65pb y 77pb respecto al mes anterior. La tasa
para créditos hipotecarios se situó en 12,1% inferior en 11pb al registro de
diciembre.
El crecimiento anual de la cartera bruta total en moneda legal en enero
fue de 14,9% mientras que el mes anterior su crecimiento fue de 14,1%. Las
carteras más dinámicas continúan siendo la hipotecaria, con una variación
anual de 21,9% y la de consumo, con una variación anual de 16,7%. En
enero el crecimiento anual de la cartera comercial fue 13,3%.
Entre el 28 de enero y el 25 de febrero de 2011, las tasas de los títulos
de deuda pública a uno y cinco años aumentaron 37pb y 46pb. A 10 años se
ubicaron en 8,9%, 42pb más que lo registrado al 28 de enero.
d.
Contexto Externo
4
En el contexto externo se destacan los efectos que sobre la situación
económica mundial comienzan a tener las turbulencias políticas en algunos
países. En el corto plazo el efecto ha sido un incremento significativo del
precio del petróleo y una caída en las bolsas mundiales.
En cuanto al crecimiento mundial, éste se sigue dando a dos
velocidades. Por una parte, los desarrollados con un crecimiento moderado,
aunque los resultados de la economía de los Estados Unidos mostraron un
mejor comportamiento al esperado. Por otra, los emergentes continúan
creciendo a ritmo alto, impulsados por Asia y América Latina.
El mejor desempeño que el esperado de los Estados Unidos en el cuarto
trimestre de 2010 (2,8% trimestre anualizado -t/a-) estaría explicado por el
impulso del consumo de los hogares y de las exportaciones netas. Sin
embargo, persisten varios riesgos sobre la recuperación en esta economía. En
primer lugar el desempleo continúa en niveles elevados y su duración se ha
incrementado. En segundo lugar, el crédito tanto a hogares como a empresas,
continúa en niveles bajos y no se vislumbra una reactivación pronta. En tercer
lugar el incremento en los precios del petróleo podrían comprometer las
ganancias en ingreso disponible de los hogares y frenar el consumo.
La zona Euro por su parte, creció a una modesta tasa de 1,2% (t/a) con
Alemania exhibiendo tasas de crecimiento elevadas y la periferia con tasas de
crecimiento bajas o incluso contracciones en algunos casos. A pesar que en el
último mes se ha reducido el riesgo en la zona medido a partir de los CDS a 5
años de la deuda soberana, persiste la incertidumbre sobre la solvencia de las
economías de la periferia europea y no se debe descartar un posible
recrudecimiento de la turbulencia en la zona Euro.
De otro lado, en los últimos meses, los precios internacionales de los
bienes básicos se han incrementado debido a factores de oferta y demanda.
Por el lado de demanda, el buen desempeño de las economías emergentes y
una mayor utilización de productos agrícolas para la producción de
biocombustibles, han presionado al alza el precio de varios de estos bienes.
Con respecto a la oferta, los problemas climáticos presentes desde mediados
del año anterior, y los recientes acontecimientos políticos han contribuido al
incremento de estos precios. En este contexto, es probable que el choque
climático se diluya en el transcurso del año. En el caso de los de demanda, su
duración puede ser mayor ya que obedecen a factores estructurales asociados
con el buen desempeño esperado de las economías emergentes.
5
En este contexto de un buen crecimiento mundial (impulsado
principalmente por las economías emergentes) y elevados precios de bienes
básicos, algunos Bancos Centrales, principalmente de economías emergentes,
han comenzado a reducir el estímulo monetario incrementando sus tasas de
interés con el objetivo de evitar desbordes inflacionarios.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
La Junta Directiva destacó los siguientes aspectos sobre el
comportamiento de la inflación durante el mes: (i) En enero la inflación anual
al consumidor fue de 3,40%, cifra similar a la esperada por el mercado, y 23
puntos básicos superior al dato de diciembre. Al igual que lo observado en los
dos meses anteriores, las principales presiones provinieron de los precios de
los alimentos y de los regulados, especialmente de los combustibles; (ii) Los
indicadores de inflación básica se mantuvieron estables, y su promedio
permanece en la mitad inferior del rango meta; (iii) Las expectativas de
inflación han aumentado en los últimos tres meses, comportamiento que
continuó en febrero pese a que el resultado de inflación del mes anterior fue
anticipado por el mercado. Mientras las expectativas de inflación a un año se
situaron en la mitad superior del rango meta, las del intervalo entre dos y diez
años, medidas con los títulos de deuda pública, completaron dos meses
consecutivos por encima del límite superior de dicho rango.
Por su parte en cuanto al crecimiento económico, destacó: (i) para 2011
se proyecta un crecimiento económico cercano al 4,5%, luego de que la
moderación del crecimiento en el segundo semestre de 2010, debido en alguna
medida a factores de oferta, llevara el crecimiento de ese año a una tasa
cercana al 4%; (ii) La demanda interna muestra un importante dinamismo,
tanto la asociada al consumo de los hogares, como a la inversión en
maquinaria y equipo; (iii) La contribución del gasto público se espera que sea
mayor este año que en el anterior, coherente con lo observado en períodos
previos de terminación de los gobiernos locales y con los programas de
reconstrucción de los daños producto de la ola invernal; (iv) Los pronósticos
del crecimiento mundial en 2011 y 2012 han sido revisados al alza, a tasas que
continúan por encima del crecimiento promedio de largo plazo, impulsado por
principalmente por el crecimiento de las economías emergentes. Esto último
se manifiesta en niveles históricamente altos de los términos de intercambio
de los países productores de bienes básicos como Colombia.
6
Los miembros de la Junta evaluaron la oportunidad de incrementar en
esta reunión las tasas de interés de intervención, en línea con lo anunciado en
la reunión anterior sobre la conveniencia de retirar gradualmente el estímulo
monetario de los meses anteriores, con el objeto de hacer sostenible en el
tiempo la mayor dinámica que ha adquirido la economía colombiana y
mantener la inflación dentro de su rango meta de largo plazo. Destacaron en
particular, los siguientes puntos: (i) La existencia de una tasa de interés de
intervención históricamente baja tanto en términos nominales como reales; (ii)
Los riesgos que unas tasas de interés muy bajas por un periodo excesivamente
prolongado de tiempo pueden terminar generando sobre la estabilidad
financiera, el crecimiento y la inflación futura; (iii) La proyección del equipo
técnico del Banco que indica que la economía retorna a niveles cercanos a su
capacidad en el segundo semestre de este año; (iv) Que la política monetaria
actúe con rezago; (v) El dinamismo que ha estado mostrando en el pasado
reciente la demanda interna, el crédito y el incremento de tiempo atrás en los
precios de la vivienda; (vi) La incoherencia que puede llegar a tener una tasa
de interés excepcionalmente baja con un crecimiento esperado en 2011 y 2012
cercano al de tendencia y una inflación proyectada cerca del punto medio del
rango meta de largo plazo; (vii) Las expectativas de inflación a más de un año
por encima de la meta; y (viii) La estabilidad en la tasa de cambio de las
últimas semanas y los resultados favorables del programa de compra de
divisas.
Así mismo, se consideraron los riesgos en la economía mundial. En
particular, continúa la incertidumbre por la situación fiscal en algunos países
industrializados y en semanas pasadas ha subido fuertemente el precio
internacional del petróleo como consecuencia de la inestabilidad política en el
medio oriente. Además, factores climáticos y el gran dinamismo de las
economías emergentes han intensificado las presiones inflacionarias en esos
países, en especial por el reciente incremento en los precios de los productos
básicos.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva acordó incrementar en 25 puntos básicos la tasa de
interés de intervención del Banco de la República que será de 3,25%.
Bogotá DC, marzo 11 de 2011
|
2011-03-01 |
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
18 de Marzo de 2011
El 18 de Marzo de 2011 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión
ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del
Ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry, el Gerente
General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos
Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan
Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de
crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas
con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los
principales temas tratados en dicha reunión.
1. ANTECEDENTES
a.
Desarrollos recientes de la inflación:
La inflación anual al consumidor en febrero fue 3,17% (mensual de
0,60%), 23 puntos básicos (pb) menos que en enero.
El menor registro frente a enero se debió a variación de los precios de
los alimentos y regulados. La variación anual de los precios de los alimentos
pasó de 4,8% en enero a 4,4% en febrero, explicada en esta oportunidad
principalmente por los alimentos perecederos. Por su parte, la variación anual
de los regulados pasó de 7,0% en enero a 6,3% en febrero. El menor registro
obedeció a una menor variación anual en el precio de la gasolina que no fue
ajustado en febrero. Por último, la inflación de transables sin alimentos ni
regulados se hizo más negativa en febrero.
La variación anual de los precios de los bienes y servicios no transables
sin alimentos ni regulados se incrementó ligeramente, ubicándose en 3,42% en
febrero frente a 3,37% en enero.
2
En cuanto a los indicadores de inflación básica, su promedio se
mantuvo estable en 2,5% en febrero. El registro más bajo se sigue presentando
en el IPC sin alimentos ni regulados con 1,7% anual. De otro lado, la
variación anual de los precios al productor (IPP) fue de 4,6% en febrero,
superior a la registrada en enero (4,3%). En cuanto a su composición se
registra un incremento en la variación anual del componente importado.
La encuesta mensual de expectativas de inflación del Banco de la
República con datos a febrero indica que para finales de 2011 la inflación se
ubicará en 3,5%, registro levemente inferior en el mes anterior de 3,6%. Para
las expectativas de más largo plazo (5 y 10 años), basados en los títulos de
deuda pública, la reducción fue más clara pero aún se encuentran por encima
del techo del rango meta de largo plazo (2% - 4%).
b.
Crecimiento
La información disponible para finales de 2010 permite prever un
crecimiento del PIB en el último trimestre del año superior al registrado en el
tercero y al pronosticado previamente por el Banco, con lo cual la economía
colombiana se habría expandido a una tasa cercana al 4,2% para todo el año.
Este mejor comportamiento del esperado se debe principalmente al buen
desempeño del indicador de obras civiles y de la producción de café.
En lo corrido del año, la actividad económica mantiene el dinamismo de
finales de 2010 con un desempeño favorable de la demanda interna, tanto en
consumo como en inversión. En el primer caso, la confianza de los
consumidores en febrero aumentó y quebró la tendencia. A ello se le suma un
crédito de consumo que continuó expandiéndose a tasas altas en enero y
febrero, unas ventas al por menor que en enero crecieron 12,3% anual y un
mercado laboral que muestra signos de mejoría. Por todo ello, sigue siendo
razonable esperar un buen crecimiento para el consumo privado para el primer
trimestre de 2011.
En materia de inversión, el comportamiento de las importaciones de
bienes de capital, con un crecimiento importante a finales de año, sugiere que
este gasto mantiene un buen nivel. Así mismo, el fuerte crecimiento de las
licencias de construcción en noviembre, al igual que el de las ventas de
cemento en diciembre, anticipa una mejoría en la construcción de vivienda
para comienzos de 2011 de la mano de un mejor dinamismo en obras civiles.
3
En cuanto al comercio exterior, a enero las exportaciones totales en
dólares mostraban una variación anual de 29,5% impulsadas principalmente
por el sector minero energético y café, con una variación anual de 30%. Para
el acumulado 12 meses el crecimiento de las exportaciones totales es de
22,3%. Las importaciones totales en dólares mostraron una variación anual en
diciembre de 39,8%. Para el acumulado 12 meses el crecimiento de las
importaciones totales es de 27,3%.
Por el lado de la oferta, los diferentes indicadores reales de expectativas
y de confianza de la industria muestran que este sector continúa por el camino
de la recuperación. Según la Muestra Mensual Manufacturera del DANE, el
crecimiento anual de la industria a enero de 2011 fue 6,2%, tasa superior a lo
acumulado en todo el 2010 y similar a lo reportado por la ANDI. Con fuente
Fedesarrollo, en enero el indicador de volumen de pedidos de este sector
continúa creciendo, aunque de forma lenta y con registros aún lejanos a sus
máximos históricos. Por el contrario, la medida de existencias (contra cíclica)
ya se acerca a su mínimo histórico. Las expectativas de producción a tres
meses de los industriales retornaron a un nivel alto y el indicador de confianza
(que reúne pedidos, expectativas y existencias) volvió a aumentar.
Para 2011, las condiciones macroeconómicas continúan apoyando una
expansión económica importante. En particular se sigue esperando una
demanda mundial en expansión, unos términos de intercambio altos y que
aumentaran frente a 2010, unos flujos de IED importantes, que continúe la
recuperación del empleo y unas condiciones crediticias internas amplias, con
tasas de interés reales relativamente bajas. Por ello, se espera que el PIB en
2011 muestre un desempeño favorable y se sitúe alrededor del 4,5%. Sin
embargo, cabe señalar que sobre esta estimación existe una incertidumbre
elevada producto de los diferentes riesgos económicos y sociopolíticos que
enfrenta el mundo.
c.
Variables Financieras
En febrero los promedios de las tasas de interés nominales de los
créditos de consumo y ordinario se situaron en 17,5% y 9,8% respectivamente,
con aumentos de 4pb para el crédito de consumo y una caída en la tasa de
crédito ordinario de 27pb respecto al mes anterior. La tasa para créditos
hipotecarios se situó en 12,4%, mayor en 7pb al registro de enero.
4
El crecimiento anual de la cartera bruta total en moneda legal en febrero
fue 15,5% mayor al 14,9% del mes anterior. Las carteras más dinámicas
continúan siendo la hipotecaria y de consumo, con una variación anual de
20,9%, y 17,5% respectivamente. En febrero el crecimiento anual de la cartera
comercial fue de 13,5%.
Entre el 25 de febrero y el 18 de marzo de 2011, las tasas de los títulos
de deuda pública aumentaron 12pb para los títulos a un año y disminuyeron
23pb para los títulos a cinco años. Los títulos a 10 años se ubicaron en la
misma fecha en 8,7%, 20pb menos que lo registrado al 25 de febrero.
d.
Contexto Externo
En el contexto externo se destaca el impacto que ha tenido el terremoto
en Japón sobre esta economía y en general sobre los mercados internacionales.
Desde hace una semana, los mercados bursátiles y de productos básicos han
mostrado desvalorizaciones importantes que han puesto freno, al menos de
manera parcial, a la escalada en los precios internacionales de los productos
básicos y han acentuado las caídas ya registradas en las bolsas, producto de las
tensiones en Oriente Medio y el Norte de África. En particular, el precio del
petróleo cayó luego del fuerte incremento registrado con el advenimiento de la
crisis en Oriente Medio y el Norte de África.
En cuanto al crecimiento mundial, éste se sigue dando a varias
velocidades. Por una parte, dentro de los principales países desarrollados se
destacan Estados Unidos y Alemania que han mostrado un mejor
comportamiento al esperado. Por otra, los países de la periferia europea y
Japón con crecimientos bajos o incluso contracciones y finalmente los
emergentes que continúan creciendo a buen ritmo, impulsados por Asia y
América Latina.
En lo corrido de 2011 los Estados Unidos han continuado consolidando
su recuperación económica con un crecimiento lento de la industria
manufacturera y una dinámica más fuerte de la esperada en las ventas del
comercio. Así mismo, el mercado laboral ha comenzado a mostrar signos de
recuperación, como lo sugieren los indicadores de enero y febrero. A pesar de
lo anterior, todavía persisten algunos obstáculos para la recuperación plena.
En primer lugar, los altos niveles de la deuda de los agentes y la aún elevada
percepción de riesgo no han permitido la reactivación del crédito. En segundo
5
lugar, el mercado de vivienda continúa rezagado y el déficit fiscal es elevado.
Estos hechos pueden limitar el crecimiento del consumo y la inversión.
En el caso de la zona euro, la situación es menos clara y muestra
tendencias diferentes para sus estados miembros. Por una parte, Alemania ha
mostrado una fuerte recuperación de la mano de las exportaciones y ha
logrado reducir de manera importante el desempleo. Por otra, la periferia
europea continua mostrando un crecimiento poco alentador y el desempleo
sigue siendo una de las principales preocupaciones. Finalmente, para el Japón,
antes del terremoto la actividad económica no evidenciaba un buen
desempeño y ello probablemente se verá acentuado en los próximos meses.
Sin embargo, en un plazo más largo se puede esperar un crecimiento más
dinámico por los esfuerzos de reconstrucción.
De otro lado, a pesar de las recientes caídas en los precios
internacionales de las materias primas, sus niveles todavía son elevados y
pueden trasmitirse a la inflación tanto en las economías desarrolladas como las
emergentes. Adicionalmente, aún persisten varios de los factores que
presionan de manera estructural dichos precios al alza y a ellos se les ha
sumado la preocupación sobre la seguridad de la energía nuclear y las
limitaciones a su uso decretadas en algunos países alrededor del mundo.
En el contexto de buen crecimiento mundial (impulsado principalmente
por las economías emergentes) y de elevados precios de bienes básicos, es de
esperarse que los bancos centrales de las economías emergentes y algunas
desarrolladas exportadoras de productos básicos continúe el ciclo de
incremento de tasas. Para las principales desarrolladas, a pesar de que los
excesos de capacidad instalada son amplios, ya se han comenzado a observar
traspasos de los altos precios internacionales de los bienes básicos a la
inflación. Por estas razones no se descarta que el Banco Central Europeo y el
de Inglaterra incrementen sus tasas en el segundo trimestre de 2011. Para
Estados Unidos, por el contrario, no se esperan cambios en la postura
monetaria en el corto plazo.
Por último, en cuanto a la percepción de riesgo, los CDS para las
economías europeas de la periferia se han vuelto a incrementar en las últimas
semanas y Moody’s redujo las calificaciones a la deuda de España y Portugal.
Para América Latina las primas de riesgo continúan en niveles bajos y en el
caso particular de Colombia Standard and Poor’s le otorgó el grado de
inversión a la deuda pública en moneda extranjera.
6
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
Los miembros de la Junta evaluaron la oportunidad de incrementar en
esta reunión las tasas de interés de intervención, en línea con lo anunciado en
la reunión anterior sobre la conveniencia de retirar gradualmente el estímulo
monetario de los meses anteriores, con el objeto de hacer sostenible en el
tiempo la mayor dinámica que ha adquirido la economía colombiana y
mantener la inflación dentro de su rango meta de largo plazo. Destacaron en
particular, los siguientes puntos: (i) Las tasas de interés se encuentran en
niveles históricamente bajos en términos nominales y reales y han mostrado
estabilidad en el último mes; (ii) Los riesgos que unas tasas de interés muy
bajas por un periodo excesivamente prolongado de tiempo pueden terminar
generando sobre la estabilidad financiera, la sostenibilidad del crecimiento y
la inflación futura; (iii) El fortalecimiento de las razones para esperar que la
economía alcance niveles cercanos a su potencial en el segundo semestre del
año basado en: el crédito de consumo que continuó expandiéndose a tasas
altas; la mejora en el mercado laboral; el fuerte crecimiento de las licencias de
construcción y un mejor dinamismo en obras civiles. (iv) La incoherencia que
puede llegar a tener una tasa de interés excepcionalmente baja con un
crecimiento esperado en 2011 y 2012 cercano al de tendencia y una inflación
proyectada cerca del punto medio del rango meta de largo plazo; (v) Que la
política monetaria actúa con rezago; (vi) Las expectativas de inflación a más
de un año por encima de la meta; y (vii) La estabilidad en la tasa de cambio de
las últimas semanas y los resultados favorables del programa de compra de
divisas.
En materia de riesgos, aunque todavía es prematuro dimensionar el
impacto pleno que tendrá el terremoto y posterior tsunami que afectaron al
Japón, los primeros análisis señalan que la recuperación de la economía de los
países desarrollados podría hacerse más lenta, pero esto no aliviaría la presión
sobre los precios del petróleo y otros bienes básicos. Adicionalmente, continúa
la incertidumbre por la situación fiscal en algunos países industrializados y
sobre el precio internacional del petróleo como consecuencia de la
inestabilidad política en el medio oriente y norte de África. Además, los
precios internacionales del petróleo, de los alimentos y de otros productos
básicos están en niveles históricamente altos y han llevado a aumentos en los
precios al consumidor en muchos países. Los bancos centrales de algunos
7
países de América Latina y otras partes del mundo han subido sus tasas de
interés.
Teniendo en cuenta todos estos factores y los rezagos con los que las
acciones de política monetaria afectan el gasto agregado y la inflación, la
Junta consideró apropiado y prudente continuar reduciendo de manera gradual
el estímulo monetario. El nivel de la tasa de interés de intervención del Banco
de la República sigue apoyando el crecimiento de corto plazo del producto y
el empleo. Los aumentos en la tasa de intervención en febrero y marzo
servirán para afianzar la sostenibilidad del crecimiento del producto y el
empleo, mantener la inflación dentro del rango meta este año y el siguiente, y
preservar la estabilidad del sistema financiero. Así mismo, es de esperar que
estas acciones anticipadas de política monetaria reduzcan el nivel al cual la
tasa de interés de intervención deba subir en relación con niveles observados
en ciclos económicos anteriores.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva acordó incrementar en 25 puntos básicos la tasa de
interés de intervención del Banco de la República que será de 3,5%.
Bogotá DC, abril 01 de 2011
|
2011-04-01 | 1
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
29 de Abril de 2011
El 29 de Abril de 2011 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión
ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del
Ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry, el Gerente
General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos
Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan
Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de
crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas
con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los
principales temas tratados en dicha reunión.
1. Antecedentes
a.
Desarrollos recientes de la inflación:
La inflación anual al consumidor en marzo fue 3,19% (mensual de
0,27%), 2 puntos básicos (pb) más que en febrero.
Al alza presionaron la variación anual de precios de los regulados con
una inflación de 6,9% en marzo frente a 6,2% en febrero y los transables sin
alimentos ni regulados con un registro en marzo de -0,2% frente a -0,3% de
febrero. A la baja presionó la variación anual de precios de los alimentos que
se ubicó en marzo en 3,9% frente a 4,4% en febrero. En este grupo la principal
contribución a la desaceleración provino de los alimentos perecederos,
devolviéndose en parte el choque al alza ocasionado por de la primera ola
invernal. Finalmente, la variación anual de precios de los no transables sin
alimentos ni regulados se mantuvo prácticamente estable en 3,4% (reducción
de 2pb en marzo frente a febrero).
El promedio de los indicadores anuales de inflación básica, aumentó de
2,59% en febrero a 2,65% en marzo. El registro más bajo se sigue presentando
2
en el IPC sin alimentos ni regulados con 1,8%. La variación de los precios al
productor (IPP) fue de 4,9% en marzo, superior a la registrada en febrero
(4,6%). En cuanto a su composición se registra un incremento tanto en la
variación anual del componente importado como del componente de
producidos y consumidos.
La encuesta mensual de expectativas de inflación del Banco de la
República con datos a marzo sugiere que para finales de 2011 la inflación se
ubicaría en 3,3%, registro inferior al del mes anterior (3,5%). Para las
expectativas de más largo plazo (5 y 10 años), basadas en los títulos de deuda
pública, la reducción fue más clara pero aún se encuentran por encima del
techo del rango meta (4%).
b. Crecimiento
En el cuarto trimestre de 2010 el PIB creció 4,6%. Con este dato, el PIB
creció 4,3% en todo 2010. Por tipo de gasto, la mayor contribución al
crecimiento provino del consumo de los hogares, especialmente de bienes
durables y semi-durables. El consumo del Gobierno y la inversión también
contribuyeron al crecimiento. En este último agregado, todos los componentes
presentaron crecimientos anuales positivos, excepto la inversión destinada a
edificaciones. Así, en 2010 la tasa de inversión sobre PIB se situó en 25,6%
medida en términos reales. Por otra parte, las exportaciones netas
contribuyeron negativamente a la expansión del PIB en 2010.
La información disponible para el primer trimestre de 2011 sugiere que la
actividad económica crece vigorosamente, impulsada por el dinamismo de la
demanda interna. El consumo privado continúa favorecido por unas tasas de
interés (de consumo y de tarjeta de crédito) que permanecen por debajo de sus
promedios históricos, una fuerte expansión del crédito a los hogares y un
empleo de mejor calidad. Esta mejor perspectiva sobre el consumo de los
hogares está siendo refrendada por la información que se conoce sobre las
ventas del comercio al por menor medidas por el DANE. Estas crecieron
13,2% en febrero impulsadas por la venta de vehículos (la expansión de las
ventas fue 5,5% sin tener en cuenta este factor). Así las cosas, estas
condiciones favorables parecen estarse reflejando en la confianza de los
consumidores como se desprende del repunte registrado en la medición de la
confianza de los consumidores de Fedesarrollo.
3
Por el lado de la inversión, el comportamiento de las importaciones de
maquinaria y equipo a febrero sugieren que ésta mantiene un alto dinamismo.
En la misma dirección apunta la información sobre licencias de construcción,
las cuales mostraron crecimientos importantes a finales del año pasado,
impulsadas principalmente por las de vivienda de interés social. Esta
información es compatible con las altas tasas de crecimiento de la cartera
hipotecaria real a marzo (15%).
Por el lado de la oferta, el crecimiento anual de la industria de febrero de
2011 fue 2,4%. Esta tasa, baja frente a la observada en enero y a la esperada
por el equipo técnico, se explica por la caída de la producción en la rama de
hierro y acero, consecuencia de un cierre parcial en Cerro Matoso que se
mantendría hasta agosto. En la mayoría de las otras ramas se observa un buen
desempeño que coincide con la evolución favorable de otros indicadores
asociados al sector (pedidos, existencias, demanda de energía no regulada,
crédito y expectativas de producción).
En cuanto al comercio exterior, a febrero las exportaciones totales en
dólares mostraban una variación anual de 37,2% impulsadas principalmente
por el sector minero energético y café, con una variación anual de 49,8%. Para
el acumulado 12 meses el crecimiento de las exportaciones totales es de
23,6%. Las importaciones totales en dólares mostraron una variación anual en
febrero de 35,1%. Para el acumulado 12 meses el crecimiento de las
importaciones totales es de 29,2%.
Para 2011, el equipo técnico elevó el rango de pronóstico de crecimiento
para 2011 en 50pb, a un intervalo entre 4,0% y 6,0%. Esta estimación tiene en
cuenta el efecto negativo que puede tener sobre la actividad económica el
recrudecimiento del fenómeno invernal. Con estas proyecciones, se
incrementó la probabilidad de que el nivel del producto se encuentre cercano a
su potencial en el segundo semestre del año.
c.
Variables Financieras
En marzo, el promedio de las tasas de interés nominales de los créditos
de consumo y ordinario se situaron en 17,6% y 10 % respectivamente, con
aumentos de 5pb para consumo y 25pb para ordinario respecto al mes anterior.
La tasa para créditos hipotecarios se situó en 12,5%, mayor en 15pb al registro
de febrero.
4
El crecimiento anual de la cartera bruta total en moneda legal en marzo
fue de 16%, mientras que en el mes anterior fue de 15,5%. Las carteras más
dinámicas continúan siendo la hipotecaria y de consumo, con una variación
anual de 18,4% y de 19% respectivamente. En marzo el crecimiento anual de
la cartera comercial fue de 13,8%.
Durante abril, las tasas de los títulos de deuda pública aumentaron 5pb
para los títulos a un año y disminuyeron para los títulos a cinco y diez años en
31pb y 15pb respectivamente.
d.
Contexto Externo
Durante el primer trimestre de 2011 los indicadores del sector real para
las economías desarrolladas mostraron un comportamiento mixto. Por un lado,
el desempeño de EEUU ha sido relativamente bueno pese al crecimiento de
1,8% en el primer trimestre de 2011 (menor al esperado). Por otro, la
recuperación en la Zona Euro continúa siendo modesta, liderada
principalmente por Alemania, mientras que en Japón su recuperación se ve
amenazada en el corto plazo por el desastre natural y la emergencia nuclear.
Los resultados positivos de la economía estadounidense se apoyan en
factores internos y externos, los cuales se resumen en una mejora del mercado
laboral, un consumo de los hogares creciente y un comercio exterior dinámico,
con unas exportaciones que se encuentran en niveles pre-crisis. Sin embargo,
aún permanecen latentes algunos riesgos sobre la economía de EE.UU. los
cuales pueden llevar a retardar su recuperación en el corto y mediano plazo.
Como la misma FED advierte, la recuperación ocurre a "paso moderado” por
las dificultades que se presentan. Dentro de ellas se destacan: i) un elevado
déficit fiscal que limita el accionar del gobierno federal, ii) los mayores
precios del petróleo y de los alimentos que podrían castigar su crecimiento y
el del resto mundo; iii) la creación de empleo no es robusta y, iv) el mercado
de la vivienda sigue rezagado, aunque los últimos datos han sido favorables.
Por lo anterior, y teniendo en cuenta que las expectativas de inflación no
se han incrementado, pese a aumentos en los precios internacionales, la FED
en su reunión del miércoles 27 de abril decidió dejar inalterada la tasa de
interés de referencia. De igual forma, mantuvo su política de compra de títulos
del Tesoro (US$600 mm) hasta finalizar el segundo trimestre de 2011, como
lo habían anunciado inicialmente. Por el contrario, y producto de los mayores
precios internacionales y el buen crecimiento en las principales economías
5
europeas, la inflación anual de la Zona Euro se ha acelerado y continúa por
encima de la meta. Ello, en parte, llevó al Banco Central Europeo, en su
reunión de abril, a aumentar la tasa de interés de intervención en 25pb.
El nerviosismo de los mercados en cuanto a la sostenibilidad de la
deuda de los países de la periferia europea ha vuelto a aumentar en las últimas
semanas, consecuencia de la inestabilidad política en Portugal, la falta de
credibilidad de algunos programas de austeridad fiscal y la posible
reestructuración de la deuda pública de Portugal y Grecia. A pesar de esto, los
analistas han mejorado sus pronósticos sobre el crecimiento de la Zona Euro
para el presente año; entre ellos el FMI, por ejemplo, incrementó su pronóstico
de 1,5% a 1,6%.
Los países emergentes mantienen una dinámica favorable y cerraron el
2010 con un crecimiento alto. Los datos disponibles al primer trimestre del
2011 sugieren que el crecimiento continuará durante el año pero a un ritmo
más moderado. Los mayores precios internacionales han comenzado a afectar
la inflación de algunos países, en especial de los asiáticos y de Brasil, lo cual
ha llevado a la mayoría de las autoridades monetarias a subir sus tasas de
intervención. Para lo que resta del año se espera que esta estrategia continúe,
dadas las presiones inflacionarias y la disminución de las brechas del
producto.
Como consecuencia del buen desempeño de las economías de la región,
de sus bajas primas de riesgo y las bajas tasas de interés en los países
desarrollados, persiste el flujo de capitales hacia América Latina. A raíz de
esto, sus monedas se han apreciado.
Se espera que los precios internacionales de bienes básicos continúen en
niveles elevados en 2011. El buen desempeño de las economías emergentes y
los diferentes problemas de oferta han impulsado los términos de intercambio
de Colombia a niveles históricamente altos lo que apoyaría las exportaciones y
una mejora en el ingreso de los colombianos.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
Los miembros de la Junta evaluaron la oportunidad de incrementar en
esta reunión las tasas de interés de intervención, continuando con el retiro
gradual del estímulo monetario.
6
Destacaron los siguientes puntos: (i) Las tasas de interés se encuentran
en niveles históricamente bajos en términos nominales y reales; (ii) todos los
componentes del crédito siguen creciendo a ritmos importantes junto a unas
tasas reales de interés de préstamos en niveles bajos y la deuda de los hogares
también se ha acelerado; (iii) El crecimiento de 4,3% del PIB en 2010 fue
mayor al esperado y a información del primer trimestre del año sugiere que el
dinamismo de la economía continúa; (iv) Los términos de intercambio siguen
mejorando y se encuentran en niveles históricamente altos y contribuye al
crecimiento del ingreso nacional; (v) Las expectativas del consumidor han
aumentado y la inversión en maquinaria y equipo continúa dinámica y se cree
que lo mismo ocurre con las obras civiles; (vi) El equipo técnico elevó el
rango de pronóstico de crecimiento para 2011 en 50 pb, a un intervalo entre
4% y 6%. La parte baja de este rango tiene en cuenta el efecto negativo que
puede tener sobre la actividad económica el recrudecimiento del fenómeno
invernal; (vii) Los mejores indicadores en el mercado laboral; (viii) La mayor
probabilidad de que el nivel del producto se encuentre cercano a su potencial;
(ix) Los diferentes indicadores de precios de la vivienda siguen aumentando y
ya se encuentran en niveles cercanos a sus máximos registros históricos y; (x)
La apreciación reciente del peso.
En materia de riesgos se observó que: (i) Los precios internacionales de
los bienes básicos, incluyendo los del petróleo y los alimentos, han subido en
meses recientes como consecuencia del fuerte dinamismo de la demanda en
las economías emergentes y choques negativos de oferta; (ii) El aumento de
presiones inflacionarias en muchos países y el incremento de la tasa de interés
de algunos bancos centrales de América Latina y Asia, así como el Banco
Central Europeo; (iii) Unas tasas de interés muy bajas por un periodo
excesivamente prolongado de tiempo pueden terminar generando riesgos
sobre la estabilidad financiera, la sostenibilidad del crecimiento y la inflación
futura; (iv) Una tasa de interés excepcionalmente baja puede ser inconsistente
con un crecimiento esperado en 2011 y 2012 cercano al potencial y una
inflación proyectada cercana al punto medio del rango meta de largo plazo; y
(v) Las expectativas de inflación a más de un año se sitúan por encima de la
meta.
Teniendo en cuenta todos estos factores y los rezagos con los que las
acciones de política monetaria afectan el gasto agregado y la inflación, la
Junta consideró que el ajuste hacia una política monetaria menos expansiva
debe continuar. El nuevo nivel de la tasa de interés de intervención del Banco
7
de la República sigue apoyando el crecimiento de corto plazo del producto y
el empleo.
Los aumentos en la tasa de intervención servirán para mantener la
inflación dentro del rango meta de este año y el siguiente y contribuyen a
evitar futuros desequilibrios financieros. Así mismo, las acciones anticipadas
de política monetaria, junto con una posición fiscal austera, reducirían el nivel
al cual la tasa de interés de intervención debe subir en relación con niveles
observados en ciclos económicos anteriores.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva acordó incrementar en 25 puntos básicos la tasa de interés
de intervención del Banco de la República que será de 3,75%.
Bogotá DC, mayo 13 de 2011
|
2011-05-01 | 1
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
30 de Mayo de 2011
El 30 de Mayo de 2011 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión
ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del
Ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry, el Gerente
General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos
Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo y César Vallejo, en la
cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus
perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A
continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha
reunión.
1. Antecedentes
a.
Desarrollos recientes de la inflación:
La inflación anual al consumidor en abril fue 2,84% (mensual de
0,12%), 35 puntos básicos (pb) menos que en marzo.
A la baja presionaron la variación anual de precios de los regulados, con
una inflación de 6,4% en abril frente a 6,9% en marzo, y los alimentos, con un
registro en abril de 2,8% frente a 3,9% de marzo. Para el primer caso, la
menor inflación se debió principalmente al comportamiento de combustibles y
servicios públicos, mientras que para los alimentos las menores presiones
provinieron principalmente de perecederos y, en menor medida, de
procesados. Al alza, por el contrario, presionaron la variación anual de los
precios de los no transables y de transables sin alimentos ni regulados, que se
ubicaron en 3,45% y -0,06% en abril frente a 3,4% y -0,17% en marzo,
respectivamente.
El promedio de los indicadores anuales de inflación básica permaneció
estable en abril frente al registro de marzo. El más bajo sigue siendo el IPC sin
alimentos ni regulados con 1,9%. La variación de los precios al productor
2
(IPP) fue de 4,7% en abril, menor a la registrada en marzo (4,9%). En cuanto a
su composición, la menor inflación se debe principalmente al componente
importado.
La encuesta mensual de expectativas de inflación del Banco de la
República con datos a abril sugiere que para finales de 2011 la inflación se
ubicaría en 3,1%, registro inferior al del mes anterior (3,3%). Para las
expectativas de más largo plazo (5 años) basadas en los títulos de deuda
pública, la reducción fue más clara y se encuentran dentro del rango meta.
b. Crecimiento
Los diferentes indicadores reales disponibles para el primer trimestre del
año apuntan a que la actividad económica se mantuvo dinámica. Este buen
desempeño estaría apoyado por una expansión importante de la demanda
interna, pero también por un buen comportamiento de las ventas al exterior.
El consumo de los hogares mantiene un dinamismo importante a juzgar por
el buen desempeño de las ventas al por menor, que a marzo crecieron a una
tasa anual de 14,6%. Esta demanda ha continuado impulsada principalmente
por el gasto en bienes durables, como se desprende del fuerte crecimiento de
las ventas de vehículos y de las importaciones de bienes de consumo durable.
Ello ha sido posible gracias a que las condiciones en el mercado laboral están
mejorando, en particular la calidad del empleo, a que las tasas de interés que
enfrentan los consumidores siguen siendo históricamente bajas, y a que el
crédito de consumo crece a tasas altas (20,5% nominal promedio mes de abril)
y con tendencia a acelerarse.
En el primer trimestre, el componente de los registros de importaciones de
bienes de capital destinada a maquinaria y equipo de transporte sugieren un
buen desempeño. Por su parte, para la inversión en construcción, tanto en
edificaciones como en obras civiles, también se espera un alto crecimiento
según lo indican las ventas de cemento y las licencias de construcción para
marzo. A estos indicadores también se suman unas tasas de interés
comerciales bajas que estarían apoyando la expansión de la inversión en lo
que resta del año.
Para la demanda externa, los resultados disponibles en dólares para marzo
apuntan a un buen desempeño en exportaciones, aún mayores a las esperadas.
Esto es válido no sólo para las ventas de productos básicos sino también para
3
las de productos manufacturados. Por destinos, en marzo las ventas
industriales dirigidas a los países de la región mostraron un incremento
importante y las que se dirigieron a Estados Unidos, aunque aún exhiben
crecimientos anuales negativos, tuvieron una recuperación en niveles.
Simultáneamente, las importaciones continúan exhibiendo una tasa de
expansión elevada a marzo, por lo que aún no se espera una contribución
positiva al crecimiento por parte de la demanda externa neta.
Por el lado de la oferta, la producción industrial creció en marzo a una tasa
de 5,2% anual. Los sectores más dinámicos fueron vehículos, minerales no
metálicos y refinación de petróleo, mientras que la producción de hierro y
acero volvió a caer por cuenta del cierre temporal de las operaciones de Cerro
Matoso por reparación. Con el registro de marzo, el crecimiento de la industria
se aceleró en el primer trimestre respecto al de finales del año pasado. Su
evolución coincide con la de otros indicadores asociados al sector: pedidos y
existencias (de Fedesarrollo), crédito comercial y demanda de energía no
regulada.
Para el segundo trimestre la información disponible es escasa. La más
relevante corresponde al indicador de confianza de los consumidores de
Fedesarrollo, que a abril registró una caída importante y se ubicó por debajo
de su promedio histórico. Sin embargo, estos resultados pueden estar
afectados, entre otros, por fenómenos como el invierno.
c.
Variables Financieras
En abril, el promedio de las tasas de interés nominales de los créditos de
consumo y ordinario se situaron en 17,5% y 10,1% respectivamente, con una
caída de 10pb para consumo y un aumento de 7pb para ordinario respecto al
mes anterior. La tasa para créditos hipotecarios se situó en 12,5%, menor en
7pb al registro de marzo.
El crecimiento anual de la cartera bruta total en moneda legal en abril
fue de 17,7% nominal promedio, mientras que en el mes anterior fue de 16%.
Las carteras más dinámicas continúan siendo de consumo y la hipotecaria y,
con una variación anual nominal promedio de 20,5% y de 18,8%
respectivamente. En abril el crecimiento anual de la cartera comercial fue de
15,6% nominal promedio.
4
Durante mayo, las tasas de los títulos de deuda pública aumentaron 9pb
para los títulos a un año y disminuyeron para los títulos a cinco y diez años en
20pb y 31pb respectivamente.
d.
Contexto Externo
Las novedades más importantes que se registran en el frente externo
provienen del mundo desarrollado. La recuperación económica de los Estados
Unidos es menos vigorosa que lo esperado, al tiempo que las dificultades
financieras de la periferia europea continúan agravándose. A este complejo
panorama de los países desarrollados se suma el aumento de las presiones
inflacionarias, en especial en la zona Euro. De otro lado, en las economías
emergentes se mantiene un elevado ritmo de crecimiento, junto con presiones
inflacionarias que han llevado a cambios en la postura de la política monetaria
de los bancos centrales.
El crecimiento de la economía de Estados Unidos en el primer trimestre
fue inferior al observado al final del año 2010. La desaceleración fue causada
por la contracción en el gasto del Gobierno y las lluvias del inicio del año. El
incremento de los precios de la energía afectó la dinámica de crecimiento del
consumo de los hogares. Los indicadores coyunturales disponibles muestran
que la actividad industrial y la inmobiliaria no repuntan en el segundo
trimestre. En contraste, aunque la información del mercado laboral señala que
éste continúa holgado, la reducción por segunda semana consecutiva de las
solicitudes de subsidio de desempleo puede estar anticipando un mejoramiento
de las condiciones laborales.
Por otra parte, los datos sobre crecimiento durante el primer trimestre
para la Zona Euro nuevamente reportaron un contraste entre el desempeño de
dos grupos de países: mientras que Alemania y Francia registran un buen
crecimiento, los países de la periferia no muestran señales claras de
recuperación. Portugal completó dos trimestres seguidos contrayéndose y
España continuó creciendo a tasas apenas superiores a cero.
La percepción de riesgo en los países de la periferia de la Zona Euro
siguió aumentando. Las tasas de interés de los títulos de la deuda pública de
Grecia permanecen en máximos históricos, y los temores sobre su
sostenibilidad cada vez son mayores. Se esperan nuevas medidas de ajuste
fiscal, especialmente en Grecia y Portugal.
5
Por su parte, la inflación en los países desarrollados muestra una
tendencia ascendente, especialmente en la Zona Euro en donde las presiones
inflacionarias han comenzado a trasladarse a la inflación básica. A pesar de
esto en Estados Unidos aún no se esperan aumentos de la tasa de interés de
intervención, mientras que para la Zona Euro la situación es menos clara. En
abril el BCE subió la tasa para controlar las presiones inflacionarias, y en
mayo decidió mantenerla inalterada para no perjudicar a las economías de la
periferia.
Las economías emergentes continúan creciendo a tasas elevadas, lo cual
ha reforzado las presiones inflacionarias en estos países. Para el caso de
América Latina, la inflación en Brasil y Perú sigue aumentando.
En las últimas semanas los precios del petróleo y otras materias primas
han
presentado
caídas
asociadas
con
la
incertidumbre
sobre
el
comportamiento de los países desarrollados y con un aumento en los
inventarios. Para los próximos meses no se esperan caídas adicionales, aunque
sí aumentos en la volatilidad.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
Los miembros de la Junta evaluaron la oportunidad de incrementar en
esta reunión las tasas de interés de intervención, continuando con el retiro
gradual del estímulo monetario.
Destacaron los siguientes puntos: (i) Las tasas de interés se encuentran
en niveles históricamente bajos en términos nominales y reales; (ii) todos los
componentes del crédito siguen creciendo a ritmos importantes y la deuda de
los hogares también se ha acelerado; (iii) La nueva información sugiere que
entre enero y marzo la tasa de expansión de la actividad económica podría
situarse en la parte superior del rango proyectado (3.9% a 5.5%); (iv) Los
términos de intercambio siguen mejorando y se encuentran en niveles
históricamente altos, contribuyendo al crecimiento del ingreso nacional; (v) El
desempeño del consumo sigue siendo positivo y la inversión en maquinaria y
equipo continúa dinámica y se espera que lo mismo ocurra con las obras
civiles; (vi) Los mejores indicadores de calidad del empleo en el mercado
laboral; (vii) La mayor probabilidad de que el nivel del producto se encuentre
cercano a su potencial; (viii) Las expectativas de inflación de corto y mediano
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plazo han corregido a la baja y se ubican dentro del rango meta y; (ix) La
apreciación reciente del peso.
En materia de riesgos se observó: (i) Si bien el precio internacional de
del petróleo ha presentado reducciones se estima que su precio se mantendrá
alto; (ii) Los altos precios internacionales de los alimentos siguen
representando un riesgo de inflación internacional. (iii) Continúan las
presiones inflacionarias en muchos países y los incrementos de la tasa de
interés de algunos bancos centrales de América Latina y Asia y; (iv) Tasas de
interés reales muy bajas por un periodo excesivamente prolongado de tiempo
pueden terminar generando riesgos sobre la estabilidad financiera. Además, la
tasa puede ser inconsistente con un crecimiento esperado en 2011 y 2012
cercano al potencial y una inflación proyectada cercana al punto medio del
rango meta de largo plazo.
Teniendo en cuenta todos estos factores y los rezagos con los que las
acciones de política monetaria afectan el gasto agregado y la inflación, la
Junta consideró que el ajuste hacia una política monetaria menos expansiva
debe continuar. El nuevo nivel de la tasa de interés de intervención del Banco
de la República sigue apoyando el crecimiento de corto plazo del producto y
el empleo.
Los aumentos en la tasa de intervención servirán para mantener la
inflación dentro del rango meta de este año y el siguiente y contribuyen a
evitar futuros desequilibrios financieros. Así mismo, las acciones anticipadas
de política monetaria, junto con una posición fiscal austera, reducirían el nivel
al cual la tasa de interés de intervención debe subir en relación con niveles
observados en ciclos económicos anteriores.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva acordó incrementar en 25 puntos básicos la tasa de interés
de intervención del Banco de la República que será de 4.0%.
Bogotá DC, junio 10 de 2011
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2011-06-01 |
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
17 de Junio de 2011
El 17 de junio de 2011 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión
ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del
Ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry Garzón, el
Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los directores de dedicación
exclusiva, Carlos Gustavo Cano Sanz, Juan José Echavarría Soto, Fernando
Tenjo Galarza, César Vallejo Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo, en la cual
se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus
perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A
continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha
reunión.
1. ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación:
La inflación anual al consumidor en mayo fue 3,02% (mensual de
0,28%), 18 puntos básicos (pb) más que en abril. Esta cifra estuvo en línea con
la proyección del equipo técnico del Banco, pero fue menor a lo esperado por
el mercado.
Las principales presiones alcistas se dieron en los precios de los
alimentos, tanto de los perecederos como de los procesados. A mayo la
variación anual de los alimentos fue 3,6%, registro que corrige una
desaceleración no esperada de este grupo en el mes de abril.
La inflación sin alimentos (2,81%), al igual que el promedio de todos
los indicadores de inflación básica, permaneció relativamente estable. La
variación anual de los precios de los no transables sin alimentos ni regulados
se incrementó en 5 pb y se situó en mayo en 3,5%. Por el contrario, la de los
precios de los regulados y la de los transables sin alimentos ni regulados
descendieron en su orden en 26 pb y 4 pb, al ubicarse en 6,15% y -0,10% en
mayo.
Las expectativas de inflación a dos y tres años volvieron a desacelerarse
y se encuentran dentro del rango meta. Para fin de año, la encuesta mensual de
expectativas aplicada a analistas sugiere que la inflación se ubicaría en 3,2%,
cifra levemente mayor a la que se obtuvo en abril (3,1%).
La variación anual de los precios al productor (IPP) fue de 4,8% en
mayo frente a 4,7% en abril. Las alzas se han concentrado en los bienes de
origen agropecuario.
b. Crecimiento
Para el primer trimestre, los últimos indicadores de actividad sugieren
que el ritmo de crecimiento anual de la economía puede estar levemente por
debajo del observado al finalizar el 2010. Esta desaceleración se explica
principalmente por una caída no prevista en la construcción, especialmente de
obras civiles. El aporte de la demanda externa neta sería negativo, ya que las
importaciones reales aumentaron más rápido que las exportaciones.
Por el lado del gasto, en el primer trimestre de este año el PIB habría
sido impulsado por la demanda interna, tanto por la inversión diferente a la
construcción como por el consumo de los hogares. Al igual que en el 2010, en
el pasado trimestre la mayor dinámica dentro del consumo privado se habría
dado en el de bienes semi-durables y durables (v.g. automóviles), favorecida
por las bajas tasas de interés y la amplia disponibilidad de crédito.
Respecto a la inversión, el pobre resultado de las obras civiles implicará
una desaceleración importante de la inversión en capital fijo. Sin embargo, los
demás componentes de este rubro, como la inversión en maquinaria y en
equipo de transporte, habrían mostrado crecimientos importantes tal como lo
reflejan las importaciones de bienes de capital.
Para el segundo trimestre de 2011, los escasos indicadores disponibles
no permiten considerar una desaceleración importante en el crecimiento. Las
ventas de vehículos siguieron creciendo a buen ritmo, sugiriendo que el
consumo durable se mantiene alto. Esto estaría siendo confirmado por la
dinámica de las importaciones de consumo (crecimiento anual a abril 30,5%)
el crecimiento del crédito de consumo (22,4% a mayo), y la percepción de los
comerciantes sobre sus ventas actuales.
En abril los indicadores del mercado laboral reflejaron una mejora en la
cantidad y calidad del empleo. La generación de empleo se concentró en el
trabajo asalariado y la tasa de desempleo ajustada por estacionalidad
descendió frente a la observada en marzo y en febrero. Estos hechos pueden
continuar impulsando la dinámica del consumo de los hogares.
La tendencia favorable en los indicadores de gasto de los hogares
descritos anteriormente no ha estado en línea con el comportamiento del
índice de confianza del consumidor calculado por Fedesarrollo. En abril y
mayo este índice se deterioró, especialmente por las caídas en la disposición a
comprar vivienda o bienes durables.
En abril las ventas externas en dólares de productos colombianos
continuaron creciendo a un ritmo elevado (34,6% anual en valor y 2,5% en
volumen), aunque por debajo de lo observado en el mes anterior (46,4% y
7,4% respectivamente). Las exportaciones fueron nuevamente impulsadas por
el buen desempeño en los mercados internacionales de productos como café,
carbón, ferroníquel, oro, petróleo y derivados. El resto de las ventas externas
en dólares crecen 9,1% y con destinos distintos a Venezuela crecen 12,8%.
En lo referente a las importaciones, su crecimiento continúa dinámico
(32,2%). Se estima que en lo corrido del año el crecimiento real de las
importaciones supere el de las exportaciones por lo que el aporte de la
demanda externa neta al producto continuaría en terreno negativo.
Los indicadores asociados con la oferta continuaron mostrando un buen
desempeño. Por ejemplo, la demanda de energía total a mayo volvió a crecer
en términos anuales; en particular la demanda de energía no regulada de la
industria mostró un importante dinamismo.
En la industria, los indicadores de pedidos y de existencias siguieron
mostrando un buen comportamiento. Sin embargo, el balance sobre las
expectativas de producción a tres meses cayó, aunque dicho retroceso no
implicó un quiebre en el componente tendencial del indicador.
El posible carácter transitorio del comportamiento de las obras civiles,
así como la poca información disponible del segundo trimestre no permite
considerar un cambio importante en el pronóstico de crecimiento de 2011. Por
tal razón se mantiene el rango de crecimiento para 2011 entre 4% y 6%.
c. Variables Financieras.
El crédito total en moneda nacional (MN) y extranjera (ME) continuó
acelerándose. A mayo todas las modalidades de crédito, tanto a los hogares
como a las empresas, registran crecimientos muy superiores al estimado del
PIB de 2011. Esto se ha dado en un contexto de tasas reales de interés
históricamente bajas.
A mayo, el crédito total (MN y ME) se incrementó en 22,4% anual,
cifra superior en 93 pb al registro de abril. La cartera de consumo y la
comercial (MN y ME) registraron aumentos en mayo de 22,4% y 22,8%,
datos superiores en 122 pb y 81 pb respectivamente a lo observado un mes
atrás. La hipotecaria se desaceleró en 91 pb y se ubicó en el mes en 17,6%.
En mayo las tasas de interés reales (descontando el IPC sin alimentos)
para créditos de consumo, hipotecario y comercial se situaron en 14,6%, 9,7%
y 7,1%, cifras inferiores a sus promedios históricos desde 1998.
d. Contexto Externo.
En el segundo trimestre de 2011, la economía mundial ha confirmado la
recuperación iniciada en 2009. Sin embargo, esta recuperación podría ser más
lenta, ya que la última información disponible muestra que los países
desarrollados todavía no han superado totalmente las consecuencias de la
pasada recesión. También podrían estar enfrentando una desaceleración
temporal asociada a las dificultades que enfrenta Japón. En esas condiciones,
el impulso actual de la economía mundial se explica en buena medida por el
desempeño de los países emergentes.
En Estados Unidos, en particular, la recuperación continúa a un ritmo
moderado y la nueva información sobre los indicadores de actividad
económica sugiere que el crecimiento del segundo trimestre podría estar
desacelerándose. Esta evolución se explica principalmente por un menor
dinamismo de la demanda interna, afectada por los recortes en el gasto público
y por los altos precios de los combustibles. Adicionalmente, en mayo la tasa
de desempleo volvió a aumentar y el número de puestos de trabajo que se
crearon fue menor que el de meses anteriores. En contraste, las exportaciones
continuaron creciendo en términos nominales y reales, y su tasa de expansión
durante los primeros cuatro meses del año ha sido superior a la de las
importaciones, lo cual ha permitido reducir el déficit comercial.
Por otra parte, la crisis de la deuda en los países más frágiles de la Zona
Euro (Grecia, Irlanda, Portugal y España), ha aumentado el nivel de alerta
sobre la sostenibilidad fiscal de esas economías. La ausencia de una solución
definitiva de la situación en Grecia está impactando las bolsas de valores en
todo el mundo, ante el temor que se puedan ver afectados bancos
estadounidenses y europeos.
Para el caso del Japón, el índice de producción industrial evidenció
cierto repunte en abril después de la fuerte caída por el desastre natural. Se
espera que en el segundo semestre la actividad comience a recuperarse de
manera más clara.
Los precios internacionales de los alimentos y del petróleo siguen
siendo históricamente altos, pese a algunas reducciones en los últimos meses.
Estas caídas obedecen al aumento en la incertidumbre acerca del
comportamiento de los países desarrollados y a que la oferta parece estar
cubriendo las necesidades actuales.
En cuanto a las economías emergentes los índices de producción
industrial continúan mostrando un comportamiento favorable, salvo en el caso
de Brasil, en donde se presentó una ligera caída. De otro lado, en China e
India la inflación se aceleró en mayo evidenciando que las presiones sobre los
precios siguen presentes. Esta situación continuará afectando las decisiones de
política monetaria y debe llevar a una moderación del ritmo de crecimiento de
esas economías.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
Los miembros de la Junta destacaron los siguientes puntos: (i) La fuerte
caída en el primer trimestre de la inversión en obras civiles. Este descenso no
fue esperado y probablemente es de carácter transitorio; (ii) La incertidumbre
internacional debido al descenso de los indicadores de actividad de los
Estados Unidos y a la crisis de deuda de la Zona Euro; (iii) El nivel
históricamente bajo de la tasa de interés de intervención del Banco y de buena
parte de las tasas de interés real, y su posible efecto futuro sobre la solidez del
sistema financiero, si se mantienen por un período excesivamente prolongado;
(iv) El crecimiento, cada vez mayor, de todos los componentes del crédito y
de la deuda de los hogares; (v) El nivel históricamente alto de los términos de
intercambio y su contribución al crecimiento del ingreso nacional; (vi) El
dinámico desempeño de la demanda privada, tanto en el consumo como en la
inversión en maquinaria y equipo; (vii) Los mejores indicadores de calidad del
empleo en el mercado laboral; (viii) La alta probabilidad de que el nivel del
producto se encuentre cercano a su potencial en el segundo semestre del año;
(ix) Las expectativas de inflación de corto y mediano plazo que han corregido
a la baja y se ubican dentro del rango meta; (x) La apreciación reciente del
peso; (xi) La presión de los precios de los alimentos y del petróleo sobre la
inflación internacional; (xii) Las presiones inflacionarias en muchos países,
acompañadas por incrementos de la tasa de interés de algunos bancos centrales
de América Latina y Asia.
Algunos miembros de la Junta manifestaron que la tasa de intervención
del Banco debía ser incrementada en 25 pb, por las siguientes razones: (i) si
bien se ha introducido cierta incertidumbre al crecimiento del PIB, en especial
por los riesgos externos y la ejecución de las obras civiles, la información
disponible muestra un fuerte dinamismo de la demanda interna, tanto de la
inversión diferente a la construcción como del consumo de los hogares. Esto
último parece estar confirmado por el crecimiento anual de 22,4% en el
crédito de consumo y por el dinamismo mostrado por las ventas al por menor
en lo corrido del año. (ii) La tasa real vigente está por debajo de su probable
equilibrio de largo plazo, y es inconsistente con un crecimiento esperado en
2011 y 2012 cercano al potencial y una inflación proyectada cercana al punto
medio del rango meta de largo plazo. (iii) El incremento consecutivo y
temprano de la tasas de interés del Banco contribuye a preservar la inflación
dentro del rango meta y reduce riesgos de desequilibrios financieros que
lleven luego a una volatilidad innecesaria de las tasas de interés, del producto
y el empleo.
En opinión de este grupo de miembros de la Junta, la postura monetaria
correspondiente a una tasa de interés de intervención de 4,25% nominal
continúa siendo expansiva.
Otro miembro de la Junta también estimó apropiado elevar la tasa de
intervención del Banco en 25 puntos básicos con el fin de asegurarle un nivel
positivo en términos reales. Sin embargo, advirtió que en la fase actual del
ciclo económico, este debería ser el último movimiento como quiera que los
indicadores demuestran que tanto la inflación total como la básica y las
expectativas están controladas y ancladas a la meta. Consideró además que no
se debe ampliar aún más la diferencia con relación a las tasas de nuestro
principal socio, Estados Unidos, cuya autoridad monetaria, debido al
estancamiento de su economía y a los temores sobre una recaída,
probablemente no las elevará antes del fin del próximo año. La evolución de la
cartera en moneda extranjera, resultante de ese diferencial, es alarmante al
haber pasado su crecimiento anual del 134% en marzo al 170% en mayo. Ante
lo cual, en adelante, en vez de sobre-utilizar la tasa de interés, se deben
contemplar medidas complementarias de regulación macro-prudencial.
Finalmente observó que el auge exportador y de inversión extranjera está
concentrado en el sector minero-energético, el cual explica el 80% de la
dinámica de las primeras y el 85% del tamaño de la segunda. En tanto, que
apenas genera 200.000 empleos. Inequívoco síntoma de enfermedad
holandesa.
Otro miembro de la Junta consideró que no es conveniente incrementar
las tasas de interés del Banco en esta oportunidad. Los diferentes indicadores
de inflación se encuentran en el rango meta de 3% +/- 1 punto porcentual, el
crecimiento del PIB es cercano a su nivel histórico, y las encuestas de
confianza al consumidor, a los industriales y a los comerciantes muestran
caídas preocupantes. Además, la economía internacional ha mostrado
síntomas de desaceleración en los meses recientes. Este escenario justifica
esperar hasta la próxima reunión de la Junta Directiva para contar con una
información más sólida sobre tasas de interés.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva acordó, por mayoría, incrementar en 25 puntos
básicos la tasa de interés de intervención del Banco de la República que será
de 4,25%.
La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo de la situación
internacional, del comportamiento y proyecciones de la inflación, el
crecimiento, el comportamiento de los mercados de activos y reitera que la
política monetaria dependerá de la nueva información disponible.
Bogotá DC, 1 de julio de 2011
|
2011-07-01 | 1
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
29 de Julio de 2011
El 29 de Julio de 2011 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión
ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del
Ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry, el Gerente
General, José Darío Uribe, y los directores de dedicación exclusiva, Carlos
Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, Juan Pablo Zárate y
César Vallejo, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de
crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas
con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los
principales temas tratados en dicha reunión.
1. ANTECEDENTES
a.
Desarrollos recientes de la inflación:
La inflación anual al consumidor en junio fue 3,23% (mensual 0,32%),
21 puntos básicos (pb) más que en mayo. Esta cifra superó la proyección del
equipo técnico del Banco y fue mayor a lo esperado por el promedio del
mercado.
Las principales presiones alcistas se dieron en los precios de los
alimentos, en particular en los perecederos y más afectados por el clima y, en
segundo lugar, los de origen importado. A junio la variación anual de
alimentos fue 4,1%. En el caso de los importados, las alzas de los precios
internacionales de finales de 2010 siguieron transfiriéndose de manera lenta y
moderada a los precios internos. La apreciación acumulada del peso habría
compensado parcialmente estas presiones externas. Respecto a los
perecederos, los aumentos en precios se han concentrado en hortalizas y frutas
y pueden ser el resultado de la intensa temporada de lluvias de marzo y abril,
así como del ciclo normal de la oferta de estos productos.
2
La inflación sin alimentos (2,91%), al igual que el promedio de todos
los indicadores de inflación básica, presentaron aumentos. La variación anual
de los precios de los no transables sin alimentos ni regulados se incrementó en
33 pb y se situó en junio en 3,83%. La variación anual del IPC de no
transables ni regulados viene acelerándose lentamente desde marzo, incluso
después de descontar el efecto de diversión, cultura y esparcimiento de junio.
Por el contrario, la variación de los precios de los regulados y del
subgrupo de transables sin alimentos ni regulados descendió 19 pb y 5 pb
respectivamente, al ubicarse en 5,96% y -0,13% en junio.
La variación de los precios al productor (IPP) se redujo en junio y se
ajustó a una tasa anual de 4,7% frente a 4,8% en mayo. Las reducciones se
concentraron en el componente importado del indicador.
Las diferentes medidas de expectativas de inflación (expectativas del
mercado y expectativas calculadas con base en los papeles de deuda pública)
se situaron dentro del rango meta de largo plazo (2% a 4%).
b. Crecimiento
El PIB en el primer trimestre de 2011 creció 5,1% en términos anuales y
aumentó 1,9% respecto al trimestre inmediatamente anterior. El consumo de
los hogares fue el agregado que más contribuyó a la expansión del PIB.
Durante el primer trimestre creció a una tasa superior al promedio de la
última década, impulsado sobre todo por las compras de bienes durables y
semidurables.
La contribución de la inversión total fue igualmente importante, pues
registró una tasa de crecimiento mayor a la promedio del año pasado y
completó un año y medio de expansiones continuas. Por otro lado, las
exportaciones netas continúan aportando negativamente al PIB ya que si bien
las exportaciones crecieron a buen ritmo, las importaciones lo hicieron a una
tasa mayor.
Por el lado de la oferta se destacaron las importantes expansiones que
registraron los sectores de comercio, minería y agricultura, todos a tasas
anuales superiores al 7%. Sin embargo, el sector de servicios financieros fue el
que más contribuyó al crecimiento, por su mayor peso en el PIB. En el primer
trimestre, el PIB de la industria creció 5,1%. Sólo los sectores de construcción
(por obras civiles) y electricidad, gas y agua registraron contracciones anuales.
3
Para el segundo trimestre de 2011 los indicadores de actividad económica
sugieren que el crecimiento sería similar al del primero. Por tipo de gasto, el
consumo de los hogares habría mostrado un dinamismo incluso superior al
que se observó en el primer trimestre según lo sugieren: el índice de confianza
de los consumidores, que se recuperó después de las caídas de abril y mayo;
las ventas del comercio al por menor, que mostraron un crecimiento promedio
en los meses de abril y mayo de 17%, las importaciones de bienes de consumo
que en dólares a mayo se expandieron en 35% anual; y el crecimiento del
crédito de consumo que presenta una tasa real de crecimiento anual de 19%.
Para la inversión también se espera un buen desempeño en el segundo
trimestre como se infiere del comportamiento de las importaciones de bienes
de capital, que crecieron 59% en el promedio de abril y mayo. La inversión
habría seguido apoyada por el dinamismo del crédito comercial en un contexto
de tasas de interés bajas. A junio las tasas de créditos ordinarios y
preferenciales se ubicaron en 7,4% y 4,6% respectivamente, cifras inferiores a
los promedios desde 1998 (11,8% y 7,5% respectivamente). Asimismo, en
junio la cartera comercial a precios constantes mantuvo un crecimiento anual
de alrededor de 19%, igual al de los dos meses anteriores. Este
comportamiento resulta similar al de la cartera total.
Por el lado de la oferta igualmente se destaca que si bien el crecimiento de
la producción industrial en mayo (4,3%) resultó menor al esperado, su
tendencia sigue positiva. En la construcción, las licencias mostraron un fuerte
aumento en los meses de abril y mayo con una tasa de crecimiento promedio
anual de 86%.
En cuanto al comercio exterior, las exportaciones colombianas en dólares
crecieron en lo corrido del año a mayo a una tasa anual de 36%. El aumento
de las exportaciones se explica fundamentalmente por un crecimiento de 48%
de los productos básicos (petróleo y sus derivados, ferroníquel, carbón, café,
oro, banano y flores). Para este mismo periodo las demás exportaciones
aumentaron 6%. Las importaciones totales en dólares mostraron una
variación anual en mayo de 55%. Para el acumulado de 12 meses el
crecimiento de las importaciones totales es de 33,9%.
Se espera que el crecimiento del PIB en el segundo semestre de 2011 esté
impulsado principalmente por la demanda interna y, en menor medida, por la
demanda mundial. En el frente interno debe presentarse una mejoría en el
desempeño del consumo público y de la inversión en obras civiles que se
sumará a un buen comportamiento de la demanda privada. En el contexto
4
externo, de no profundizarse la crisis en los países desarrollados no se
anticipan cambios en los factores que afectan el desempeño de la actividad
económica: altos términos de intercambio, crecimiento de los socios
comerciales relativamente bueno y flujos de capital abundantes, en particular
de inversión extranjera directa. Así, se espera que el crecimiento del PIB para
todo 2011 esté dentro de un rango entre 4,5% y 6,5%, siendo 50 pb mayor al
rango presentado en el Informe sobre Inflación pasado.
c.
Variables Financieras
El crédito total en moneda nacional (MN) y extranjera (ME) continuó
acelerándose. A junio todas las modalidades de crédito, tanto a los hogares
como a las empresas, registran crecimientos muy superiores al estimado para
el PIB en 2011. Esto se ha dado en un contexto de tasas reales de interés
históricamente bajas.
A junio, el crédito total (MN y ME) se incrementó en 22,5% anual, cifra
superior en 20 pb al registro de mayo. La cartera de consumo (MN y ME)
mostró un aumento de 164 pb con respecto al mes anterior, ubicándose para el
mes de junio en 24,0%. La hipotecaria y la comercial presentaron una
variación anual de 16,7% y 22,4% moderándose en 24 y 42 pb,
respectivamente, con relación a los datos del mes de mayo.
En junio las tasas reales de interés (descontando el IPC sin alimentos)
para créditos de consumo, hipotecario y comercial ordinario se situaron en
14,9%, 9,7% y 7,4%, cifras inferiores a los promedios observados desde 1998.
d.
Contexto Externo
Desde el pasado informe trimestral la actividad de la economía mundial
se ha deteriorado como consecuencia de diferentes choques que la impactaron
como el alza en el precio del petróleo, el desastre natural del Japón y el
deterioro de la confianza asociado con los problemas de deuda en Estados
Unidos y Europa. Para lo que resta del año y para 2012, las economías
desarrolladas enfrentan perspectivas de crecimiento limitadas. El ritmo de
expansión probablemente se mantendrá por debajo de su promedio histórico
afectado por los altos niveles de endeudamiento y por costos financieros
crecientes. Las necesidades de ajuste fiscal en Europa y en Estados Unidos
afectarán el desempeño de la demanda en esos países y pueden complicar aún
más el panorama laboral. En contraste, los países emergentes continúan
creciendo a buen ritmo.
5
En Estados Unidos los indicadores de actividad económica están
mostrando un desempeño mediocre y menor que el esperado hace tres meses.
Los mercados de trabajo y de vivienda permanecen estancados. En la Zona
Euro, por su parte, se profundizan las diferencias entre los países con bajo
nivel de endeudamiento que crecen bien, liderados por Alemania, y los países
con alto nivel de endeudamiento, que están virtualmente estancados. En los
últimos meses se recrudecieron los problemas de sostenibilidad en la periferia
europea. En Japón comienza a observarse una recuperación después del
desastre natural de marzo. Dicho choque afectó a otras economías del Asia y
probablemente a Estados Unidos. El restablecimiento de la cadena de
suministros podría ayudar al crecimiento mundial.
La moderación reciente de los precios del petróleo y de los bienes
básicos es un efecto colateral de la reducción de la dinámica de la economía
global. Este desempeño de los precios puede actuar positivamente sobre la
capacidad de compra de los consumidores y reducir las presiones
inflacionarias.
En cuanto a las economías emergentes, China está creciendo más de lo
previsto y el aterrizaje está siendo muy lento. Hasta el momento, el apretón de
la política monetaria no ha tenido efectos importantes sobre la actividad
económica. Para otras economías asiáticas (India, Corea del sur y Taiwán) hay
indicios de desaceleración en el segundo trimestre, pero el ritmo de
crecimiento sigue siendo alto. Por su parte, las economías de la región
continúan expandiéndose a tasas elevadas.
Es de esperar que con la reducción de las presiones inflacionarias las
tasas de interés internacionales sigan siendo bajas. De esta forma, la elevada
liquidez en los países desarrollados, junto con el diferencial de rentabilidad y
la baja percepción de riesgo de América Latina, continuarán estimulando los
flujos de capitales hacia la región.
En cuanto al crecimiento de los socios comerciales de Colombia hay
que destacar que el menor crecimiento en Estados Unidos ha sido compensado
por un mejor desempeño en América Latina y en especial Ecuador, país que
viene creciendo aceleradamente (8,6% anual a marzo 2011). Los pronósticos
suponen un mayor ritmo de crecimiento de Estados Unidos en el segundo
semestre del año, y una desaceleración moderada en China, como
consecuencia de la postura restrictiva de la política monetaria.
6
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
Los miembros de la Junta destacaron los siguientes puntos: (i) el
crecimiento del PIB en el primer trimestre; (ii) la incertidumbre internacional
debida a los problemas de deuda pública y sistemas bancarios en algunos
países industrializados; (iii) los malos indicadores de actividad económica de
los Estados Unidos; (iv) el nivel históricamente bajo de la tasa de interés de
intervención del Banco y de buena parte de las tasas de interés real, y su
posible efecto futuro sobre la solidez del sistema financiero, si se mantienen
por un período excesivamente prolongado; (v) el crecimiento, cada vez mayor,
de todos los componentes del crédito y de la deuda de los hogares; (vi) el nivel
históricamente alto de los términos de intercambio y su contribución al
crecimiento del ingreso nacional; (vii) el dinámico desempeño de la demanda
privada, tanto en el consumo como en la inversión en maquinaria y equipo;
(viii) los mejores indicadores de calidad del empleo en el mercado laboral; (ix)
la alta probabilidad de que el nivel del producto se encuentre cercano a su
potencial en el segundo semestre del año; (x) las expectativas de inflación de
corto y mediano plazo que han corregido a la baja y se ubican dentro del rango
meta; (xi) La apreciación reciente del peso; (xii) los altos precios
internacionales del petróleo y de los alimentos en muchos países y los
incrementos de las tasas de interés de política en algunos de ellos y; (xiii) la
importancia para la economía de medidas que contribuyan a consolidar la
estabilidad financiera.
Algunos miembros de la Junta manifestaron que, a pesar del
comportamiento adecuado de la inflación y sus expectativas, la tasa de
intervención del Banco debía ser incrementada en 25 pb, teniendo en cuenta
las siguientes razones: (i) el dinamismo de la economía colombiana liderado
en especial por el consumo de los hogares y de la inversión diferente a las
obras civiles; (ii) la reciente información relacionada con la actividad
económica, tanto del lado de la oferta como de la demanda, así como las
expectativas del consumidor y de la industria, que indican que el crecimiento
del PIB del segundo trimestre podría ser similar al registrado al inicio del año.
Para el segundo semestre, el equipo técnico espera que la actividad económica
se acelere y por ello elevó su rango de pronóstico de crecimiento para éste año
y el siguiente a un intervalo entre 4,5% a 6,5%, en parte influido por los
buenos términos de intercambio; (iii) la información disponible hasta el
momento, incluyendo el dato de crecimiento del PIB (5,1%), sugiere el cierre
7
de la brecha del producto en el segundo semestre del año; (iv) el crecimiento
del crédito continuó acelerándose. Todos sus componentes, tanto el dirigido a
las empresas como a los hogares, presentan tasas reales de crecimiento
significativamente superiores al aumento del PIB. Esta situación ocurre en un
contexto en que buena parte de las tasas de interés reales se encuentran en
niveles históricamente bajos; (v) el hecho que a marzo los precios de la
vivienda usada continuaron ascendiendo y se acercaron a su nivel máximo
observado en 1995. El indicador de precio de vivienda nueva también se
incrementó en el primer trimestre; (vi) la tasa real vigente está por debajo de
su probable equilibrio de largo plazo, y es inconsistente con un crecimiento
esperado en 2011 y 2012 cercano al potencial y una inflación proyectada
cercana al punto medio del rango meta de largo plazo; (vii) El incremento
consecutivo y temprano de la tasas de interés del Banco que contribuye a
preservar la inflación dentro del rango meta reduciendo los riesgos de
desequilibrios financieros que lleven luego a una volatilidad innecesaria de las
tasas de interés, del producto y el empleo.
Otro miembro de la Junta consideró que no es conveniente incrementar
las tasas de interés del Banco en esta oportunidad, como quiera que a junio los
indicadores de inflación al consumidor, total y básica y las expectativas de
inflación a uno, dos, tres y cinco años se hallan anclados a la meta. El aumento
acumulado del IPC es muy similar al del mismo período de 2010. La inflación
sin alimentos ni regulados se sitúa muy cerca del piso del rango meta. Y los
salarios han tenido reajustes compatibles con el mismo. La concentración de
las exportaciones y la IED en petróleo y minería continúa en ascenso. Ambos
alcanzan el 80% de la dinámica de las primeras y el 85% de la última, aunque
sólo generan 200.000 empleos. En contraste, las exportaciones industriales se
hallan estancadas. La autoridad monetaria de nuestro principal socio, Estados
Unidos, bajo el acoso del estancamiento, los temores sobre una recaída y el
persistente y alto desempleo, seguramente no empezará a elevar sus tasas
antes de 2013.
Y finalmente agregó que la sensibilidad de la demanda interna ante las
condiciones externas es hoy mucho más alta vía la cuenta de capital y sus
efectos sobre la liquidez y el crédito. De suerte que la expansión de la
demanda en buena parte es una contraparte de las entradas de capital, las
cuales vienen obstaculizando la transmisión de los reajustes de las tasas del
Banco a las tasas activas. Por tanto, alzas adicionales atraerían mayores flujos
y oferta crediticia, lo cual entorpecería aún más la transmisión de la política
monetaria. Así podríamos terminar alimentando lo que queremos controlar: la
8
inflación. En consecuencia, lo que ahora resulta apropiado es la adopción de
medidas de regulación macro-prudencial concertadas con el Gobierno.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva acordó, por mayoría, incrementar en 25 puntos
básicos la tasa de interés de intervención del Banco de la República que será
de 4,5%.
La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo de la situación
internacional, en especial de los riesgos asociados al manejo de los problemas
de deuda en un buen numero de economías avanzadas; del comportamiento y
proyecciones de la inflación, el crecimiento, el comportamiento de los
mercados de activos y reitera que la política monetaria dependerá de la nueva
información disponible.
Bogotá DC, agosto 12 de 2011
|
2011-08-01 | 1
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
19 de Agosto de 2011
El 19 de Agosto de 2011 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión
ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del
Ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry, el Gerente
General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos
Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, Juan Pablo Zárate y
César Vallejo, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de
crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas
con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los
principales temas tratados en dicha reunión.
1.
ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación:
La inflación anual al consumidor en julio fue 3,42% (mensual 0,14%),
19 puntos básicos (pb) más que en junio. Esta cifra estuvo en línea con la
proyección del equipo técnico del Banco y similar a lo esperado por el
promedio del mercado.
Las principales presiones alcistas se dieron en los precios de los
alimentos perecederos. Se observaron mayores aumentos de precios en
algunas hortalizas y frutas que se explican por el efecto rezagado del pasado
evento de La Niña sobre este grupo de alimentos. A julio la variación anual
del precio de los alimentos fue 4,8%.
La inflación sin alimentos se mantuvo estable (2,9%). En esta canasta
no se presentaron cambios inesperados y las variaciones en sus diferentes
grupos se compensaron. Los transables (-0,02%) mostraron una variación
menos negativa (frente a -0,13% en junio) y fue el componente que ejerció la
mayor presión al alza en el IPC sin alimentos (por utensilios del hogar y
2
compra de celulares). La variación de los precios de no transables se mantuvo
en el mismo nivel de junio (3,8%). A pesar de la estabilidad del último mes,
este grupo viene mostrando una tendencia al alza desde marzo explicada
principalmente por el comportamiento de los arriendos. En julio, el aumento
de los precios de los arriendos (6 pb respecto al nivel de junio) fue
compensado por la disminución de los precios de los otros ítems que
componen esta canasta.
Los regulados (5,7%), por su parte, registraron una caída en julio de 26
pb explicada principalmente por el descenso en la variación anual del IPC de
combustibles que compensó el aumento en los precios de la energía.
Las medidas de inflación básica (con excepción de la inflación sin
alimentos) continuaron con su tendencia creciente. Este comportamiento, lento
pero continuo, ha sido común a todas las medidas de inflación básica desde
mediados de 2010. De esta forma, el promedio de las cuatro medidas que se
publican ya supera el punto medio del rango meta.
Las diferentes medidas de expectativas de inflación (expectativas del
mercado y expectativas calculadas con base en los papeles de deuda pública)
se situaron dentro del rango meta de largo plazo (de 2% a 4%).
La variación de los precios al productor (IPP) presentó un leve repunte
en julio y se ajustó a una tasa anual de 4,8% frente a 4,7% en junio. Los
aumentos se concentraron en el componente importado del indicador.
b. Crecimiento
Los indicadores de actividad disponibles para el segundo trimestre
confirman que la economía colombiana habría mantenido un buen ritmo de
crecimiento en ese periodo. Al igual que en los primeros tres meses de 2011,
el crecimiento del segundo trimestre habría estado impulsado por la demanda
interna, en particular por el consumo de los hogares.
En el segundo trimestre, el consumo privado habría continuado
favorecido por las mejorías en el mercado laboral. Durante el periodo la tasa
de desempleo siguió cayendo y para las 13 áreas se ubicó en 11,5%. Este
descenso estuvo acompañado de un aumento por segundo mes consecutivo de
la TGP. Lo anterior estuvo más que compensado por el incremento de la tasa
de ocupación y por ello la tasa de desempleo descendió.
3
Las importaciones también confirmaron el dinamismo de la demanda
interna en el segundo trimestre. Las compras externas en dólares crecieron en
junio 46% anual, impulsadas por las de bienes de capital (58%) y de materias
primas (45%). Por su parte, las importaciones de bienes de consumo crecieron
31% anual.
En materia de exportaciones, los nuevos resultados mostraron una
aceleración de las ventas externas en dólares. En junio, las exportaciones en
dólares crecieron 54% anual, cifra superior al registro de mayo (34%). Este
aumento se explicó por mayores ventas de productos básicos de origen minero
(petróleo crudo y sus derivados, carbón, oro y ferroníquel) que aportaron el
82% del crecimiento total.
En lo que respecta a los sectores productivos, los indicadores
divulgados por la ANDI y Fedesarrollo sugieren que el sector industrial
mantuvo el dinamismo observado en el primer trimestre. La producción
medida por la ANDI registró una expansión de 6,4% anual para el año corrido
a junio. Los indicadores de pedidos y existencias de Fedesarrollo mostraron
algún retroceso en junio, pero continuaron en niveles favorables. El indicador
de expectativas de producción a tres meses de Fedesarrollo se mantuvo en
niveles altos.
En cuanto a la construcción, durante el segundo trimestre la producción
de cemento registró un crecimiento de 17% anual. Asimismo el
comportamiento dinámico de las licencias de construcción en lo corrido del
año a mayo indicaría un buen desempeño de la actividad edificadora en los
meses posteriores.
La nueva información disponible para el segundo trimestre es coherente
con el pronóstico de crecimiento anual del PIB de dicho período entre 4,2% y
5,6%. La escasa información disponible sugiere que el crecimiento anual del
tercer trimestre sería superior al estimado en la primera mitad del año. Así lo
señalan los indicadores de confianza de los consumidores, de crédito
destinado a las familias y a las empresas y de la demanda total de energía
eléctrica.
En conclusión, si la situación externa no se deteriora abruptamente, el
crecimiento de todo 2011 se ubicará dentro del rango proyectado (entre 4,5%
y 6,5%).
c. Variables Financieras.
4
El crédito total continúa acelerándose. A julio todas las modalidades de
crédito, tanto a los hogares como a las empresas, registran crecimientos muy
superiores al crecimiento estimado del PIB de 2011. En particular, el
crecimiento anual fue 24,8% para la cartera de consumo; 22,9%, para la
comercial y 17,4%, para la hipotecaria, niveles superiores al mes anterior en
78 pb, 53 pb y 67 pb, respectivamente.
Lo anterior se ha dado en un contexto de tasas reales de interés
históricamente bajas. En julio las tasas reales de interés (descontando el IPC
sin alimentos) se situaron en 15,1%para créditos de consumo; 9,9% para
crédito hipotecario; y en 7,5%, para crédito comercial ordinario, cifras
inferiores a los promedios observados desde 1998.
A julio, el crédito bancario (MN y ME) se incrementó en 23,2% anual,
cifra superior en 63 pb al registro de junio.
d. Contexto Externo.
Durante las últimas semanas la probabilidad de una recaída de la
economía global ha aumentado significativamente como resultado de los
problemas económicos que actualmente afectan a las economías desarrolladas.
Estos problemas se han agudizado debido al lento crecimiento económico, el
elevado endeudamiento público, la pérdida de confianza de los mercados y el
menor margen de maniobra de la política macroeconómica en esas economías,
que han colocado en entredicho la viabilidad de la recuperación en los países
avanzados, complicando indirectamente el panorama económico para los
países emergentes.
Las cifras conocidas recientemente sobre el desempeño de los Estados
Unidos durante el segundo trimestre del año fueron desalentadoras. El
crecimiento trimestral anualizado entre marzo y junio de 2011 fue de 1,3%,
por debajo de lo que esperaba el mercado (2,3%) e inferior tanto al
crecimiento del mismo trimestre del año pasado (3,8%) como al de todo 2010
(3%). El débil crecimiento del segundo trimestre en parte se explica por una
recaída del consumo personal, que después de alcanzar un crecimiento de
2,0% en 2010, ha venido decayendo en lo corrido del presente año, al punto
que en el segundo trimestre presentó un crecimiento casi nulo. Del mismo
modo, el gasto del gobierno se ha venido contrayendo durante los últimos tres
trimestres, acentuando la contracción de la demanda interna. Los únicos
componentes de demanda que han mostrado algún dinamismo son las
exportaciones, estimuladas por la depreciación del dólar, y la inversión fija no
residencial, en respuesta a las bajas tasas de interés. No obstante, el mejor
5
desempeño de estos renglones no es suficiente para compensar la caída en los
demás componentes de demanda.
El panorama económico en la Zona Euro es igualmente preocupante.
Entre el primero y el segundo trimestres de 2011 su crecimiento económico se
redujo de un nivel ya bajo de 0,8% a 0,2%, lo que en la práctica muestra una
economía totalmente estancada. La desaceleración fue significativa en casi
todos los países. Alemania, por ejemplo, que crecía al 1,3% en el primer
trimestre, sólo creció 0,1% en el segundo. Algo similar ocurrió en Francia,
cuyo crecimiento decayó de 0,9% a 0% en el mismo periodo. En el caso del
Reino Unido las noticias no son mejores. De un pobre crecimiento de 0,5% en
el primer trimestre se pasó a un crecimiento de apenas 0,2% entre marzo y
junio pasados. Por su parte, los países de la periferia de la Zona Euro –Grecia,
Portugal y España- permanecen estancados o contrayéndose.
La combinación de lento crecimiento y elevada deuda pública en los
países desarrollados plantea dudas sobre la sostenibilidad de esta última. Ello
se explica por el círculo vicioso tan complejo en el que algunos de estos países
han caído, en el cual el elevado endeudamiento no deja crecer a la economía, y
el mismo hecho de no crecer no permite pagar la deuda. En tales condiciones
aumenta el peligro de insostenibilidad de la deuda, lo que se refleja en un
incremento de la volatilidad real, una mayor fragilidad financiera, y una
pérdida de dinamismo económico. Los mercados financieros han percibido
claramente este peligro, lo que explica la fuerte caída de las bolsas durante las
últimas semanas y el fuerte incremento de las primas de riesgo, principalmente
en los países de la periferia de la Zona Euro.
En estas condiciones, las perspectivas de la economía mundial son cada
vez más inciertas. Los mercados empiezan a temer una doble caída que haga
perder los progresos que se venían obteniendo con la lenta recuperación
iniciada en el segundo semestre de 2009. Este pesimismo no es infundado. La
desaceleración de las economías avanzadas y el efecto negativo que esto
representa para la expansión de las economías emergentes, han comenzado a
minar la confianza de consumidores y empresarios, que reaccionan
restringiendo sus planes de consumo e inversión, debilitando la demanda y
con ello las posibilidades de recuperación. Esta situación es particularmente
notoria en el caso de los Estados Unidos, donde el índice de sentimiento del
consumidor que calcula la Universidad de Michigan ha caído durante los
últimos meses al mismo nivel que se observó entre finales de 2008 y
principios de 2009, lo que ha llevado a un estancamiento del consumo
personal, según se anotó atrás. De otra parte, el elevado desempleo que se
6
registra en los Estados Unidos y en algunos países de Europa como España y
Grecia, es otro factor que deprime la confianza, el consumo y la demanda,
creando un círculo vicioso que acentúa la contracción de la actividad
económica.
La incertidumbre se acentúa ante las dudas sobre la capacidad de los
gobiernos de las economías avanzadas de poder llevar a cabo políticas
macroeconómicas contracíclicas suficientemente efectivas que logren revertir
las tendencias negativas y retornar la confianza a los mercados. Se percibe que
en varias de estas economías la capacidad de respuesta se ha reducido
drásticamente, sino se ha agotado ya. En el caso de los Estados Unidos el
elevado endeudamiento del Gobierno, que se aproxima a 100% del PIB, el
tamaño del déficit fiscal que alcanza el 10% del PIB, y las restricciones que
impone el techo de endeudamiento, no dejan espacio para un papel activo de
la política fiscal similar al que tuvo durante la crisis de 2009. Por su parte, la
política monetaria en ese país está restringida por el límite cero de tasa de
interés, aunque aún podría llevarse a cabo un tercer relajamiento cuantitativo.
No obstante, los riesgos de mayores presiones inflacionarias, que se han
venido registrando en esa economía durante los últimos meses, podrían
impedir expansiones cuantitativas tan fuertes como las que se produjeron para
sortear la crisis anterior. En el caso de las economías europeas ocurre otro
tanto, debido a la complicación que implica el manejo de una economía con
diversidad de países, algunos de los cuales han alcanzado la insostenibilidad
de la deuda pública y otros están expuestos a un contagio que los puede
colocar en la misma situación.
Entretanto, las economías emergentes continúan siendo el motor del
crecimiento mundial, aunque sin estar exentas de riesgo. En una economía
globalizada hay múltiples canales de contagio, como bien lo demostró la
experiencia de la crisis de 2009. Uno de ellos es el precio de los
"commodities". Hasta el momento se ha observado que el precio del petróleo
ha empezado a descender, lo que sin duda afectará a los países exportadores
del mismo, entre ellos Colombia. Los precios de otros "commodities", como
cereales y aceites, aún no registran caídas, aunque sí interrumpieron la
tendencia ascendente que mostraron durante 2010, lo que es un síntoma de
debilitamiento de la demanda mundial. Otro canal de contagio es el de la
confianza, que actúa mucho más rápidamente, como lo demuestra sin
excepción la caída de las bolsas en los mercados emergentes, replicando lo
que ocurre en las economías desarrolladas. En este ambiente de mayor
incertidumbre las economías emergentes de Asia y América Latina han
empezado a perder dinamismo, aunque la mayoría continúa creciendo a tasas
7
elevadas. La pregunta por responder es hasta cuándo podrán sostener ese
crecimiento, si los mercados de las economías avanzadas -que absorben la
mayor parte de las exportaciones de los países emergentes-, continúan
debilitándose.
2.
DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
Los miembros de la Junta destacaron los siguientes puntos: (i) El
incremento de la incertidumbre en los mercados financieros internaciones; (ii)
el crecimiento del PIB en el segundo trimestre; (iii) el dinámico desempeño de
la demanda interna, reflejado tanto en el incremento del consumo como de la
inversión privada; (iv) los mejores indicadores de calidad del empleo en el
mercado laboral; (v) la aceleración del crédito a los hogares y a las empresas,
en un contexto de tasas de interés reales que han aumentado pero que
presentan niveles inferiores a sus promedios históricos; (vi) el nivel
históricamente bajo de la tasa de interés de intervención del Banco y de buena
parte de las tasas de interés real, y su posible efecto futuro sobre la toma de
riesgos de la economía, si se mantienen por un período excesivamente
prolongado; (vii) el alto nivel de los términos de intercambio y su contribución
al crecimiento del ingreso nacional; viii) la inflación anual de julio, que
aumentó por tercer mes consecutivo (3,42%), en especial por el
comportamiento de los precios de los alimentos. Por su parte, el promedio de
las medidas de inflación básica volvió a incrementarse y superó el punto
medio del rango meta (3% +/- 1 punto porcentual); ix) las expectativas de
inflación a distintos plazos y las proyecciones de inflación a finales de 2011 y
2012 se encuentran dentro del rango meta; (x) la alta probabilidad de que el
nivel del producto se encuentre cercano a su potencial en el segundo semestre
del año; xi) la política monetaria de otros países; (xii) la caída de los precios
internacionales del petróleo; xiii) el comportamiento de la tasa de cambio.
La Junta Directiva del Banco de la República decidió mantener
inalterada la tasa de interés de intervención en 4,5%, teniendo en cuenta
principalmente lo siguiente:
i) Desde la pasada reunión, los eventos en el frente externo ha
aumentado la incertidumbre acerca de la economía global. Al reciente
desplome de las bolsas, originado en parte por la reducción de la calificación
de la deuda de Estados Unidos y por las dificultades fiscales de algunos países
de la zona euro, se sumó un menor crecimiento en el segundo trimestre para
las principales economías desarrolladas (Estados Unidos, Alemania, Francia,
8
Japón). En Asia y América Latina, regiones fuertemente dinámicas, el
crecimiento se ha desacelerado por factores de oferta o por acciones de
política dirigidas a evitar el recalentamiento de sus economías. En
consecuencia, los riesgos de un menor crecimiento de la economía mundial se
han elevado. ii) Los problemas de deuda soberana en Europa y el debate sobre
el techo de endeudamiento en los Estados Unidos incrementaron fuertemente
la incertidumbre y la volatilidad en los mercados financieros internacionales.
El cambio en el contexto internacional es aún muy reciente y sus
consecuencias son todavía difíciles de precisar. Si bien es claro que la
desaceleración mundial impactaría negativamente el ingreso y la demanda
externa del país, hay gran incertidumbre sobre su tamaño y duración. En
contraste, se resaltó que: i) los indicadores de actividad económica disponibles
confirman que la economía colombiana mantiene un buen ritmo de
crecimiento, impulsado principalmente por la fortaleza del consumo de los
hogares; ii) los indicadores de confianza de los consumidores y de la industria
continúan en niveles elevados; y iii) el crédito a las empresas y a las familias
siguió acelerándose, con aumentos muy superiores al incremento del PIB
nominal estimado para el presente año. Ello en un contexto de tasas reales de
crédito inferiores a sus promedios históricos.
Haciendo un balance, la Junta consideró prudente realizar una pausa en
los incrementos de tasas de interés, en especial teniendo en cuenta la alta
incertidumbre en los mercados financieros internacionales y su potencial
efecto negativo sobre el crecimiento de la economía mundial en general, y de
la colombiana en particular.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva acordó, por unanimidad, mantener inalterada la tasa
de interés de intervención en 4,5%.
La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo de la situación
internacional, en especial de los riesgos asociados al manejo de los problemas
de deuda en un buen número de economías avanzadas; del comportamiento y
proyecciones de la inflación, el crecimiento, el comportamiento de los
mercados de activos y reitera que la política monetaria dependerá de la nueva
información disponible.
Bogotá DC, septiembre 02 de 2011
|
2011-09-01 | 1
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
30 de Septiembre de 2011
El 30 de Septiembre de 2011 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión
ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del
Ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry, el Gerente
General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos
Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, Juan Pablo Zárate y
César Vallejo, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de
crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas
con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los
principales temas tratados en dicha reunión.
1.
ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación:
La inflación anual al consumidor en agosto fue 3,27% (mensual de -
0,03%), 15 puntos básicos (pb) menos que en julio. Esta cifra fue inferior a la
proyección del equipo técnico del Banco y a lo esperado por el promedio del
mercado. Para el año corrido a agosto el IPC acumuló un aumento de 2,64%
que es un poco mayor al registrado en igual período del año anterior.
Los precios de los alimentos por su parte, registraron un
comportamiento favorable en agosto que se tradujo en una disminución de la
variación anual del IPC respectivo a 4,6% desde 4,8% un mes atrás.
Respecto a la inflación sin alimentos, el resultado en agosto fue 2,76%
frente a 2,90% de julio. El descenso se debió a la disminución en la variación
anual de las canastas de regulados y de no transables sin alimentos ni
2
regulados. En el caso de los no transables sin alimentos ni regulados, se
presentó una disminución significativa de 40 pb frente al registro de julio. Esta
caída corresponde, en buena parte, a la reversión del alza que se presentó en
junio. Sin embargo, aún descontado este fenómeno, se observó alguna
disminución en el ritmo de ajustes de no transables.
En el caso de la canasta de regulados, la variación de los precios fue
5,6% (7 pb menos que en julio). La variación anual del IPC de regulados ha
disminuido gradualmente desde marzo de este año debido a los bajos ajustes o
incluso reducciones que se presentan en las tarifas de energía eléctrica. A ello
se suman ajustes en los precios de los combustibles, un poco menores que los
observados el año pasado.
Dentro del IPC sin alimentos, las presiones alcistas provinieron en esta
oportunidad del IPC de transables sin alimentos ni regulados. La variación
anual del indicador se situó en terreno positivo (0,12%) por primera vez desde
principios del año pasado. Rubros como automóviles, electrodomésticos,
aparatos electrónicos y de comunicación continuaron presentando bajas en sus
precios, pero de menor magnitud que el año anterior. Así mismo, otros rubros
relacionados con el aseo del hogar y el vestuario han comenzado a mostrar
algunas alzas. Es posible que este comportamiento obedezca a que la
apreciación acumulada del peso cedió en los meses anteriores.
Todas las medidas de inflación básica presentaron reducciones en
agosto, con lo cual se interrumpió la tendencia creciente que estos indicadores
mostraban desde finales de 2010.
Las expectativas de inflación medidas a través de las encuestas no
presentaron cambios de relevancia y muestran un resultado cercano al 3,2%
para finales de año y para los próximos doce meses. Por su parte, las derivadas
de los TES a diferentes plazos continuaron disminuyendo, manteniéndose
dentro del rango meta.
La variación de los precios al productor (IPP) presentó un repunte en
agosto y se ajustó a una tasa anual de 5,2% frente a 4,8% en julio. Los
aumentos se concentraron en el componente importado del indicador.
b. Crecimiento
En el segundo trimestre de 2011, el PIB colombiano creció 5,2% anual.
El consumo de los hogares fue el agregado que más contribuyó a la expansión
del PIB en este período, impulsado principalmente por las compras de bienes
durables y semidurables.
3
La inversión en capital fijo también se aceleró durante este periodo,
presentando la mayor tasa de expansión en cuatro años y un promedio de
crecimiento mayor al de la década pasada. Por componentes se destaca el
fuerte dinamismo de la inversión en maquinaria y en equipo de transporte. La
construcción contribuyó negativamente debido a la caída en la inversión en
obras civiles que no fue compensada por la expansión en edificaciones.
Simultáneamente, en el segundo trimestre se registró una fuerte acumulación
de inventarios, con lo cual el crecimiento anual de la inversión total fue de
21,1%.
La demanda interna en el segundo trimestre creció 9,1% anual y se
mantiene como el principal soporte del crecimiento de la economía
colombiana. El ritmo anual de crecimiento de la demanda privada fue 11,7%.
Por otro lado, las exportaciones netas contribuyeron negativamente al
crecimiento del PIB. Esto en razón de un crecimiento de las importaciones tres
veces mayor que el de las exportaciones.
Por el lado de la oferta se destacaron los crecimientos anuales
superiores al 7% que registraron los sectores de minería, comercio y
transporte. Sin embargo, por su mayor peso en el PIB, la rama de servicios
financieros e inmobiliarios fue la que más contribuyó al crecimiento. El PIB
de la industria creció 2,1% en términos anuales, y se contrajo frente al primer
trimestre. El sector de la construcción, por la caída de las obras civiles, fue el
único que registró un retroceso anual.
Las exportaciones totales en dólares crecieron a una tasa anual de 55%.
Este aumento fue impulsado tanto por los mayores precios como por las
cantidades producidas de petróleo crudo y derivados y, en menor medida, por
las exportaciones de carbón y de algunos productos industriales. Por su parte,
las exportaciones de productos básicos agrícolas (café, banano y flores)
registraron una caída de 6,6% anual. En el caso de las exportaciones
industriales (Sin derivados del petróleo, ferroníquel, oro y café), durante el
mes de julio, se observó una recuperación tanto en precios (20% anual) como
en cantidades (20% anual).
Las importaciones totales en dólares mostraron una variación anual de
33% en julio. Las mayores contribuciones al crecimiento anual de las compras
externas durante el mes de julio se concentraron en bienes para la industria,
equipo de transporte, combustibles y bienes de consumo no duradero. En
particular, las importaciones de bienes de consumo crecieron 21% anual, las
de bienes intermedios 29% anual y las de bienes de capital 46% anual.
4
Con respecto al tercer trimestre de 2011 la mayoría de indicadores de
actividad disponibles sugieren que la economía habría mantenido un buen
desempeño. Por tipo de gasto, el crecimiento del tercer trimestre habría
seguido impulsado por el consumo de los hogares como se infiere del
comportamiento de la confianza de los consumidores, del crédito de consumo
a agosto, el buen dinamismo de las importaciones de bienes de consumo y del
comportamiento de las ventas minoristas a julio que continúan mostrando una
tendencia positiva.
La evolución reciente del mercado laboral también apoyaría la dinámica
favorable del consumo privado. En el trimestre móvil a julio, el mayor
crecimiento de la tasa de ocupación con respecto a la tasa global de
participación permitió que la tasa de desempleo continuara con su tendencia
decreciente. A pesar de que en junio y julio la generación de empleo se
concentró más en trabajadores no asalariados que en asalariados, el subempleo
siguió disminuyendo por lo que la calidad del empleo no parece haberse
deteriorado. Se espera que el mercado laboral siga comportándose
favorablemente durante el resto del año.
Por el lado de la oferta, algunas variables asociadas con la industria
manufacturera, como el índice de producción industrial del DANE, el
indicador de pedidos de Fedesarrollo (ambas a julio) y la demanda de energía
del sector (a agosto), sugieren un relativo estancamiento de la actividad
productiva. Sin embargo, aún es prematuro predecir un deterioro del sector, si
se tiene en cuenta que el indicador de expectativas de los industriales sobre su
producción en tres meses se mantiene en niveles bastante altos. Otros
indicadores sectoriales sugieren que el comercio, la construcción, la minería y
los servicios, serán las actividades de mayor contribución al crecimiento del
PIB en el tercer trimestre. Así, es probable que el ritmo de expansión del
tercer trimestre sea superior al del segundo.
Dado todo lo anterior, es probable que la economía acelere su
crecimiento. Adicionalmente, es factible que la coyuntura internacional menos
favorable no golpee de manera relevante la economía colombiana en el tercer
trimestre.
Hacia el cuarto trimestre podría darse un efecto adverso sobre la
economía interna si se confirma el deterioro de la situación externa. Bajo el
supuesto de que el cuarto trimestre no crezca respecto al tercero, el PIB del
año completo podría crecer cerca de 5,2%, cifra que se encuentra dentro del
5
rango de pronóstico establecido en el informe trimestral de junio (4,5% a
6,5%).
c. Variables Financieras.
El crédito total en moneda nacional (MN) y extranjera (ME) se
estabilizó en altas tasas de crecimiento. A agosto todas las modalidades de
crédito, tanto a los hogares como a las empresas, registran crecimientos muy
superiores al crecimiento estimado del PIB de 2011. Esto se ha dado en un
contexto de tasas reales de interés históricamente bajas.
En julio y agosto, el crédito bancario (MN y ME) se estabilizó en una
tasa de crecimiento promedio de 23,2% anual. Igualmente, por modalidad de
cartera en estos dos meses el crecimiento anual promedio fue de: 25,0% para
consumo, 23,1% para comercial y 17,3% para hipotecaria.
En julio las tasas de interés reales (descontando el IPC sin alimentos)
para créditos de consumo, hipotecario y comercial ordinario se situaron en
15,5%, 10,0% y 8,0%, cifras inferiores a los promedios observados desde
1998.
En cuanto a cartera, las tasas de crecimiento anual están sostenidas por
el endeudamiento en pesos, dado que el crecimiento anual en moneda
extranjera viene disminuyendo por cuanto el saldo desde mayo se ha
mantenido alrededor de US$ 6850 millones.
d. Contexto Externo.
En
las
últimas
semanas
el
contexto
internacional
continuó
deteriorándose. Los temores sobre los problemas de deuda soberana en Europa
han crecido y los pronósticos de crecimiento de Estados Unidos y Europa en
2011 y 2012 han sido revisados a la baja.
La alta volatilidad y las fuertes pérdidas en los mercados accionarios se
han asociado, en gran parte, con la elevada incertidumbre sobre la situación
fiscal de algunas economías desarrolladas. Los mercados cada vez son más
escépticos sobre la capacidad que tienen los países con problemas fiscales en
estabilizar su deuda pública.
En el caso de la Zona del Euro, se incrementaron las dudas sobre la
solvencia de algunos bancos comerciales de la región, que tienen altas
inversiones en bonos soberanos de países con problemas fiscales. De hecho,
6
en los últimos dos meses surgieron señales que indican un posible aumento en
las restricciones de liquidez en las economías desarrolladas, sobre todo en
Europa. En este continente, el diferencial entre la tasa Libor y la tasa
interbancaria continúa subiendo. Adicionalmente, se observan restricciones
para el fondeo de mediano plazo que puede limitar el otorgamiento de crédito.
La percepción de riesgo sobre el negocio bancario en estas economías se está
incrementando nuevamente, alcanzando los niveles de 2008 y de 2009.
Los anuncios y medidas que han hecho recientemente los gobiernos y
las autoridades económicas de estos países para enfrentar el problema fiscal
no han sido eficaces para aumentar la confianza de los agentes. Los mercados
bursátiles globales han presentado drásticas caídas que no solamente se
limitan a las acciones bancarias. La ausencia de decisiones de fondo al
problema de la deuda soberana en Europa impone riesgos cada vez mayores
sobre la estabilidad financiera internacional. A lo anterior se suma la
incertidumbre fiscal en Estados Unidos, por la falta de acuerdo entre los
partidos políticos sobre las medidas necesarias para alcanzar una deuda
sostenible.
Ante este panorama la recuperación de la demanda interna de las
economías desarrolladas puede complicarse aún más, como de hecho algunos
indicadores de actividad real tanto en Europa y Estados Unidos ya lo
muestran.
En la Zona Euro, se observó una contracción de la actividad
manufacturera. En Alemania y Francia, que son los motores de crecimiento
en la región, se ha visto una desaceleración de las exportaciones. Dicho
componente de la demanda ha sido el más dinámico en los últimos dos años.
El mercado laboral tampoco muestra signos de recuperación, haciendo prever
un consumo muy débil para el tercer trimestre del año. En las economías de la
periferia europea, los programas de ajuste fiscal continuarán deprimiendo las
perspectivas de recuperación de la demanda interna en el corto plazo. De esta
forma, los pronósticos de crecimiento para la Zona Euro se han reducido. Por
ejemplo, para 2011 y 2012 el FMI los redujo desde 2,0% y 1,7% a 1,6% y
1,1% respectivamente.
En Estados Unidos durante los últimos dos meses diversos indicadores
de actividad real se deterioraron. Desde el mes de abril, tanto el consumo
personal como las ventas al por menor muestran muy poco crecimiento,
explicado en parte por las condiciones del mercado laboral y por la menor
7
confianza de los consumidores. Los altos niveles de endeudamiento de los
hogares no se han reducido significativamente, hecho que seguirá siendo un
factor negativo para la reactivación de su demanda interna. Por otra parte, el
deterioro de la situación económica y financiera en Europa y los efectos que
esto tenga en la demanda mundial puede limitar sus exportaciones. Así, el
FMI disminuyó el pronóstico de crecimiento para 2011 y 2012 desde 2,5% y
2,7% a 1,6% y 1,9% respectivamente. Todas las proyecciones de analistas
consultadas por el equipo técnico también se revisaron a la baja.
En las economías emergentes se ha dado una moderación en el
crecimiento observado y esperado. Esto explicado en parte por políticas
monetarias más restrictivas, por la eliminación de los estímulos fiscales y por
la desaceleración de la demanda mundial. Los mercados siguen de cerca
especialmente a China e India, en donde algunos indicadores señalan una
desaceleración, y a Brasil, en donde esta tendencia es más evidente.
En cuanto a los precios de los productos básicos, la desaceleración de la
actividad industrial a nivel mundial ha reducido la demanda por estos bienes,
de tal forma que en las últimas semanas se ha observado una disminución en
la cotización internacional de los precios de algunos de ellos, en particular
petróleo, cobre y carbón. Los precios de otros productos básicos de origen
agrícola como cereales y aceites interrumpieron su tendencia alcista y se
estabilizaron en niveles altos.
La turbulencia en los mercados financieros internacionales se está
empezando a sentir con fuerza en América Latina, sobre todo en los mercados
de divisas y en las bolsas. Las primas de riesgo de los países de la región están
subiendo y las monedas se han depreciado contra el dólar, alcanzando niveles
que no se veían desde finales de 2009.
De complicarse la situación en Estados Unidos y Europa, es probable
que el crecimiento de los países de la región se vea afectado negativamente
por distintos canales. Uno de ellos sería la pérdida de confianza, variable que
jugó un rol importante en la crisis pasada. Otro sería el menor ingreso
nacional, ya que una demanda externa deprimida puede generar disminuciones
adicionales en los precios de los bienes básicos, caídas en las exportaciones y
una alta volatilidad en los flujos de capital. No obstante, las principales
economías de América Latina pueden tener un mayor espacio para amortiguar
una eventual caída por medio de políticas (fiscales y monetarias) contra-
cíclicas que las economías desarrolladas.
8
Los pronósticos de crecimiento de las economías emergentes han
comenzado a reducirse pero de manera menos pronunciada que los de las
economías desarrolladas. En el caso de China el FMI revisó sus pronósticos
para 2011 de 9,6% a 9,5% y para 2012 de 9,5% a 9%. De todas maneras se
espera que las economías emergentes sigan impulsando el crecimiento
mundial, entre otras razones, porque el consumo de los hogares en estos países
será más dinámico que en las economías desarrolladas.
2.
DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
Los miembros de la Junta destacaron los siguientes puntos: (i) el
incremento de la incertidumbre en los mercados financieros internaciones; (ii)
el crecimiento del PIB en el segundo trimestre; (iii) el dinámico desempeño de
la demanda interna, reflejado tanto en el incremento del consumo como de la
inversión privada; (iv) los mejores indicadores de calidad del empleo en el
mercado laboral; (v) la estabilización de la tasa de crecimiento del crédito en
niveles altos, tanto para los hogares como para las empresas; (vi) el contexto
de bajas tasa de interés reales que, aunque han aumentado, presentan niveles
inferiores a sus promedios históricos, y su posible efecto futuro sobre la toma
de riesgos de la economía, si se mantienen por un período excesivamente
prolongado; (vii) el alto nivel de los términos de intercambio, a pesar de la
caída de algunos precios de las exportaciones, como los del petróleo; (viii) la
inflación anual de agosto, que disminuyó más que lo previsto (3,27%), en
especial por el comportamiento de los no transables y regulados. Por su parte,
el promedio de las medidas de inflación básica se encuentra dentro del rango
meta (3% +/- 1 punto porcentual); (ix) las expectativas de inflación a distintos
plazos se reducen y se mantienen las proyecciones de inflación a finales de
2011 y 2012; (x) la política monetaria de otros países; y (xi) el
comportamiento de la tasa de cambio.
La Junta Directiva del Banco de la República decidió mantener
inalterada la tasa de interés de intervención en 4,5%, teniendo en cuenta
principalmente lo siguiente:
El contexto internacional se ha deteriorado en las semanas posteriores a
la Junta Directiva pasada. Los temores sobre los problemas de deuda soberana
han crecido y los pronósticos de crecimiento de Estados Unidos y Europa en
2011 y 2012 han sido revisados a la baja. En algunas de las economías de Asia
y América Latina, la nueva información apunta hacia una moderación en el
9
crecimiento. Los precios internacionales de los productos básicos han
descendido, aun que permanecen en niveles altos. Además, se ha
incrementado la volatilidad de los mercados financieros.
Por su parte, se resaltó que en Colombia: i) los datos del primer
semestre mostraron una actividad económica expandiéndose a buen ritmo
(5%), similar a lo proyectado. El crecimiento ha sido impulsado por el fuerte
dinamismo de la demanda interna, en especial la proveniente del sector
privado la cual creció en el segundo trimestre a una tasa anual de 11,7%. Para
el tercer trimestre, la nueva información disponible sugiere que el crecimiento
podría ser superior al registrado en el primer semestre. De esta forma, el rango
de pronóstico de crecimiento para 2011 (entre 4,5% - 6,5%) continúa teniendo
una alta probabilidad; ii) el crecimiento anual del crédito bancario se
estabilizó en una tasa elevada, en un entorno de tasa de interés real que
aumentó y siguen por debajo de su promedio históricos. La cartera más
dinámica continúa siendo la de consumo, con aumentos superiores en casi tres
veces el crecimiento del PIB nominal estimado para 2011 y; iii) el índice de
precios de la vivienda nueva siguió aumentando y en julio alcanzó el máximo
registro de la serie, calculada desde 1997.
En este contexto, el balance de riesgos no se modificó sustancialmente
frente al mes anterior. Mientras los factores externos reflejaron mayores
riesgos e incertidumbre, la economía colombiana mantiene una fuerte
dinámica.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva acordó, por unanimidad, mantener inalterada la tasa
de interés de intervención en 4,5%. Así mismo, estima que el actual nivel de
tasa la mantiene en una buena posición para responder a la nueva información
sobre la economía mundial y nacional.
La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo de la situación
internacional, del comportamiento y proyecciones de la inflación, el
crecimiento, el comportamiento de los mercados de activos y reitera que la
política monetaria dependerá de la nueva información disponible.
Bogotá DC, octubre 14 de 2011
|
2011-10-01 | 1
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
28 de Octubre de 2011
El 28 de Octubre de 2011 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión
ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del
Ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry, el Gerente
General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos
Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, Juan Pablo Zárate y
César Vallejo, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de
crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas
con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los
principales temas tratados en dicha reunión.
1.
ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación:
La inflación anual al consumidor en septiembre fue 3,73% (mensual de
0,31%), 46 puntos básicos (pb) más que en agosto. El ajuste de precios
acumulado en lo corrido del año es 2,95%, mayor al registrado en igual
período del año pasado (2,40%).
Durante agosto, las presiones alcistas más importantes provinieron de
los alimentos. La variación anual de esta canasta ascendió en septiembre a
5,7%, experimentando el alza mensual más fuerte en lo corrido del año (110
pb). El grueso del aumento de la inflación de alimentos en este último mes es
atribuible al grupo de perecederos y en especial al precio de la papa, cuyas
alzas acumulan 41% desde junio. Dichas alzas son de carácter transitorio y
obedecerían a los efectos rezagados de la temporada de lluvias y al ciclo
2
normal de la oferta de estos productos. En esta medida, estas variaciones de
precios tenderán a revertirse cuando se normalice el ciclo de producción.
En lo que se refiere a la variación del IPC sin alimentos (3%), el
incremento más fuerte se concentró en la canasta de regulados (de 5,6% a
6,5%) y fue ocasionado por aumentos en las tarifas de la energía eléctrica en
algunas regiones del país. Los otros componentes de regulados (combustibles,
transporte público y otros servicios públicos) presentaron aumentos más
moderados. Respecto al IPC de transables sin alimentos ni regulados, se
destaca una leve tendencia ascendente en la variación anual (0,16%) que
coincide con una depreciación del tipo de cambio en los últimos dos meses.
En cuanto a los no transables sin alimentos ni regulados, los datos de
septiembre (3,5%) no cambiaron de manera relevante frente al mes anterior.
La inflación básica también subió en el último mes, aunque en una
magnitud menor que la inflación total. Si bien todos los indicadores
aumentaron, se mantuvieron dentro del rango meta.
Las expectativas de inflación registraron un leve aumento en las
mediciones más recientes. La encuesta mensual del Banco muestra que la
inflación esperada por los operadores del mercado financiero para fin de año
está en 3,4%, frente a 3,2% de la encuesta anterior. La inflación esperada a
doce meses también está en 3,4% cuando hace un mes se encontraba en 3,3%.
La información obtenida a partir de los títulos TES sugiere un
comportamiento similar, con aumentos en la inflación esperada a todos los
horizontes.
La variación de los precios al productor (IPP) se incrementó en
septiembre a una tasa anual de 6,6% frente a 5,2% en agosto. Los aumentos se
concentraron en el componente importado del indicador.
b. Crecimiento
Los diferentes indicadores disponibles para el tercer trimestre de 2011
confirman que la economía colombiana habría continuado expandiéndose a
una alta tasa. Al igual que en la primera mitad del año, el crecimiento del
tercer trimestre habría estado impulsado por la demanda interna.
Por tipo de gasto, el consumo de los hogares continuaría creciendo en
agosto a tasas altas según lo sugieren los indicadores de ventas del comercio al
por menor (9.7% anual) y las importaciones de bienes de consumo (30%
anual). De igual forma, la cartera real de crédito de consumo en el tercer
trimestre de 2011 creció a una tasa promedio de 21,6% (en el trimestre
3
anterior lo hizo a una tasa de 18,9%). En el mes de septiembre la confianza de
los hogares medida por Fedesarrollo disminuyó nuevamente pero su nivel
continúa siendo alto, con un promedio similar al registrado en 2007 cuando el
consumo creció a una tasa superior al 7%.
Con respecto a la inversión las perspectivas también son favorables.
Esto se puede inferir del crecimiento que se ha venido observando en las
importaciones de bienes de capital, tanto en su componente de maquinaria
como de equipo de transporte. Adicionalmente, la producción nacional de
estos bienes continúa mostrando tasas de crecimiento positivas impulsadas por
el buen desempeño previsto de la economía colombiana. La cartera comercial
sigue creciendo a tasas cercanas al 20% anual.
Por el lado de la oferta, para el tercer trimestre los indicadores de la
industria y de la construcción se mantienen dinámicas. En la industria se
destacó la expansión de la producción de 9,5% en agosto. La Encuesta de
Opinión Empresarial de Fedesarrollo muestra igualmente buenas perspectivas
de producción para el sector.
En la construcción el dinamismo fue positivo en el tercer trimestre,
como lo sugiere el comportamiento de la producción de cemento y sus
despachos nacionales, los cuales registraron en agosto crecimientos anuales de
9,6% y 22,2% respectivamente. Las tendencias del sector para el mediano
plazo también son favorables como lo indica el área aprobada para construir
según licencias, que en agosto siguió creciendo, impulsada principalmente por
la destinada al segmento residencial.
En contraste, se espera una reducción de la producción del sector
agrícola para el tercer trimestre debido al impacto de factores climáticos
especialmente en la cosecha cafetera.
Las exportaciones totales en agosto aumentaron a una tasa de 50%
anual. Este crecimiento se originó en las mayores ventas de petróleo crudo y
derivados, carbón y productos industriales. El impulso en las exportaciones de
origen minero se explica tanto por el comportamiento de los precios como de
las cantidades, cuyos índices registraron aumentos anuales de 38% y 22%,
respectivamente. Las exportaciones de bienes básicos de origen agrícola
tuvieron una variación anual menor (4,2% anual) en agosto, pero mostraron
una recuperación leve con respecto al mes anterior. Los índices de precios y
cantidades calculados sugieren que el aumento es explicado más por los
precios (13% anual). En agosto las ventas externas sin productos básicos
(bienes industriales y otros productos agrícolas) mostraron un crecimiento
4
anual también significativo (41%). El aumento se observó tanto en los precios
(14%) como en las cantidades (26%).
Con relación al empleo, la información del DANE a agosto sugiere que
la demanda por fuerza de trabajo mostró un crecimiento mayor que la oferta
laboral, lo que permitió que durante los últimos meses las tasas de desempleo
y de subempleo siguieran cayendo.
Teniendo en cuenta todo lo anterior los diferentes modelos de
pronóstico arrojaron un intervalo de crecimiento para el PIB del tercer
trimestre comprendido entre 6% y 7%.
Para lo que queda del año los modelos no vislumbran un cambio
importante en las tendencias de las variables macroeconómicas y para todo
2011 pronostican un crecimiento del PIB de entre 5% y 6%.
Con respecto a 2012 los modelos sugieren un crecimiento algo menor
con relación al esperado para 2011. Estos resultados se derivan de las menores
proyecciones que se tienen para variables clave como el precio de las materias
primas y el crecimiento mundial.
c. Variables Financieras.
El crédito total en moneda nacional (MN) y extranjera (ME) se mantuvo
en altas tasas de crecimiento superior al estimado para el PIB nominal de
2011.
A septiembre, el crédito total (MN y ME) se incrementó a una tasa
anual de 23,5% anual, superior en 38 pb a la observada en agosto. La cartera
de consumo registró la mayor tasa de crecimiento, 25,8%, mayor en 88 pb con
respecto al mes anterior. Por su parte la cartera comercial mostró una tasa de
crecimiento anual de 23%, mayor en 18 pb a la registrada en el mes de agosto,
mientras que la cartera hipotecaria se mantuvo en la tasa de crecimiento anual
del mes anterior, 17,3%.
En septiembre las tasas reales de interés (descontando el IPC sin
alimentos) para créditos de consumo, hipotecario y comercial ordinario se
situaron en 15,1%, 10,0% y 8,0%, cifras inferiores a los promedios observados
desde 1998.
d. Contexto Externo.
5
La crisis de la deuda en Grecia y la vulnerabilidad de los países de la
periferia europea a la posibilidad de un contagio han continuado afectando a
los mercados, ante los riesgos sistémicos que amenazan la estabilidad de la
Zona Euro y el débil crecimiento de los Estados Unidos. En la Zona Euro la
probabilidad de una recesión se ha incrementado considerablemente, forzando
a un descenso en los pronósticos de crecimiento. Por su parte los indicadores
más recientes (septiembre) sobre la actividad manufacturera y de servicios se
están contrayendo, y las exportaciones presentan una menor dinámica.
En Estados Unidos la confianza del consumidor alcanzó niveles muy
bajos en los últimos tres meses (octubre), lo cual se está reflejando en un
crecimiento moderado del consumo. Los indicadores de oferta también
señalan desaceleración pero sin mostrar aún retrocesos en sus niveles. Por otra
parte, el deterioro de la situación económica y financiera en Europa y los
efectos que esto tenga en la demanda mundial pueden seguir siendo un
limitante para sus exportaciones. El crecimiento económico para el tercer
trimestre de 2011 de Estados Unidos alcanzó 2,5%, cifra superior a la
incorporada en las proyecciones de demanda externa.
Las economías emergentes continúan expandiéndose pero a un ritmo
menor. En China el PIB se desaceleró en el tercer trimestre y podría seguir
decayendo en lo que resta del año, dado el debilitamiento que se prevé para su
demanda externa. En el caso de Brasil, a septiembre se anticipa una fuerte
desaceleración en la actividad industrial y una reducción importante del
crecimiento del PIB durante el segundo semestre del año.
Dado todo lo anterior, el equipo técnico redujo los pronósticos de
crecimiento de este año para las principales economías desarrolladas. No
obstante, el crecimiento del PIB del conjunto de socios comerciales de
Colombia se mantuvo, debido a que se revisó al alza el de algunos países
como Ecuador dadas sus tendencias recientes.
Para el próximo año se redujeron de manera significativa los
pronósticos de crecimiento de las economías desarrolladas, al igual que los de
los emergentes. En conjunto, se espera que en 2012 el crecimiento de nuestros
principales socios sea menor, pero positivo. En esta estimación se asume que
las autoridades económicas adoptarán medidas creíbles para aliviar los
problemas de deuda soberana, para garantizar la solidez de sus sistemas
financieros y así restablecer la confianza de los agentes.
Ante las menores perspectivas de crecimiento mundial, también se
redujeron los pronósticos de los precios internacionales de los bienes básicos
6
que exporta Colombia, especialmente para 2012. Las proyecciones tienen en
cuenta las tendencias recientes que mostraron estas cotizaciones en los últimos
tres meses.
La reducción esperada en los precios de los bienes básicos y en el
crecimiento mundial, llevará a una contención de las presiones inflacionarias
en las economías desarrolladas, con lo cual la postura holgada de política
monetaria debería mantenerse por un tiempo mayor al previsto anteriormente.
En particular se espera que las tasas de referencia en Estados Unidos y Europa
se mantengan en niveles muy bajos por lo menos hasta mediados de 2013. En
el caso de las economías emergentes, las presiones sobre precios pueden ceder
más lentamente, por lo que resulta más difícil pronosticar caídas en las tasas
de interés.
En conclusión, el crecimiento de la demanda externa para el siguiente
año es incierto e involucra riesgos elevados. Si en la Unión Europea se tiene
éxito para detener los temores de insolvencia fiscal, es probable que en 2012
se consiga un crecimiento mundial moderado. De lo contrario, si se complica
la situación en Europa y en Estados Unidos no se ratifica la tendencia de
crecimiento del pasado trimestre, el escenario de crecimiento es menos
favorable e incluiría una recesión en la zona del Euro. En este último
escenario, la confianza de los consumidores e inversionistas en las economías
emergentes se puede reducir, afectando con ello su demanda interna y el
mercado de capitales. También se puede dar una reducción en el ingreso
nacional, ya que una demanda externa deprimida generara disminuciones en
los precios de los bienes básicos que exporta nuestro país. De llegar a
presentarse esta última situación, el mayor impacto negativo debería darse en
el 2012.
2.
DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
Algunos miembros de la Junta manifestaron que la tasa de intervención
del Banco debía ser incrementada en 25 pb, teniendo en cuenta las siguientes
razones: (i) La inflación anual al consumidor en septiembre fue 3,73%
(mensual de 0,31%), 46 puntos básicos (pb) más que en agosto; (ii) Los
pronósticos de corto plazo indican que la inflación se situará por encima del
punto medio del rango meta al finalizar 2011. Las medidas de inflación básica
y las expectativas de inflación repuntaron de nuevo; (iii) La nueva
información disponible continúa reflejando una demanda interna muy
dinámica, impulsada tanto por el consumo privado como por la inversión. Si la
7
confianza y los precios internacionales de los principales productos de
exportación continúan en niveles altos, sería de esperar que el fuerte
dinamismo en la demanda se prolongue hacia los próximos trimestres y genere
presiones de capacidad; (iv) Si bien el crecimiento anual del crédito bancario
se estabilizó, lo hizo a una tasa elevada. La cartera más dinámica es la de
consumo, con aumentos superiores en casi tres veces al crecimiento del PIB
nominal estimado para 2011. Los índices de precios de la vivienda nueva y
usada alcanzaron los máximos registros de las series. El fuerte dinamismo de
estos indicadores financieros, que usualmente se identifica con excesos de
demanda y riesgo de desbalances, puede estar explicado en parte por tasas de
interés reales que aún se encuentran en niveles bajos; (v) El incremento
oportuno de la tasas de interés del Banco contribuye a preservar la inflación
dentro del rango meta y reduce los riesgos de desequilibrios financieros que
lleven luego a una volatilidad innecesaria del producto y el empleo; (vi) La
incertidumbre sobre la evolución de la economía mundial no debe demorar
decisiones necesarias para la estabilidad de la economía colombiana.
Otros miembros de la Junta compartieron la preocupación señalada por
el grupo anterior, pero consideraron apropiado mantener la tasa de interés
inalterada teniendo en cuenta los factores externos que reflejan mayores
riesgos e incertidumbre. Sin embargo, si la confianza internacional tiende a
restablecerse y si los indicadores reales internos siguen con el dinamismo
actual y no se observa mayor contagio de la situación externa, es probable
que la economía requiera menor estímulo monetario.
Otros miembros de la Junta consideraron que es conveniente mantener
las tasas de interés del Banco teniendo en cuenta que: (i) Con respecto a 2012
los modelos indican un crecimiento menor al esperado para 2011. Estos
resultados se derivan de las proyecciones que se tienen para variables clave
como el precio de las materias primas y el crecimiento mundial. En términos
generales, el panorama interno de mediano plazo se ve menos favorable como
consecuencia de los posibles efectos de la baja dinámica en las economías
desarrolladas; (ii) El acuerdo firmado en la madrugada del día 27 de octubre
en Bruselas para conjurar la profunda crisis europea, dejó grandes vacíos y
preguntas sin respuesta, como la indefinición sobre la delicada situación de
Italia y la progresiva elevación del costo de su deuda, la capitalización de los
bancos de la Zona del Euro, y las modalidades de vinculación de las más
grandes economías emergentes al financiamiento del fondo de rescate, entre
otros; iii) Se han deteriorado fuertemente los pronósticos recientes sobre el
8
crecimiento de los Estados Unidos; (iv) Una economía mundial menos
dinámica reduciría el incremento excesivo de los precios de los activos y el
crecimiento del crédito en el próximo futuro; (v) Si bien el registro de la
inflación aumentó, el incremento parece transitorio y obedece a los efectos
rezagados de la temporada de lluvias y al ciclo normal de la oferta de
alimentos perecederos. Además el equipo técnico del banco pronostica
descensos de la inflación en los próximos 6 meses; (vi) Las medidas de
inflación básica no cambiaron de manera importante frente al mes anterior, lo
cual sugiere que las presiones de demanda sobre los precios han sido
moderadas. En general, todos los indicadores de inflación se mantuvieron
dentro del rango meta; (vii) La dinámica del crédito y el creciente valor de los
activos podría obedecer a factores estructurales y no sólo a baja tasa de
interés; (viii) De todas formas se justifica pensar en medidas de regulación
prudencial adicionales a la tasa de interés; (ix) Las tasas de interés de mercado
han subido recientemente, lo cual sugiere que no existe un nivel de liquidez
excesivo en la economía.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva acordó, por mayoría, mantener inalterada la tasa de
interés de intervención en 4,5.
La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo de la situación
internacional, del comportamiento y proyecciones de la inflación, el
crecimiento, el comportamiento de los mercados de activos y reitera que la
política monetaria dependerá de la nueva información disponible.
Bogotá DC, noviembre 11 de 2011
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2011-11-01 | 1
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
25 de Noviembre de 2011
El 25 de Noviembre de 2011 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión
ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del
Ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry, el Gerente
General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos
Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, Juan Pablo Zárate y
César Vallejo, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de
crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas
con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los
principales temas tratados en dicha reunión.
1.
ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación:
La inflación anual al consumidor en octubre fue 4,02% (mensual de
0,19%), 29 puntos básicos (pb) más que en septiembre. El ajuste de precios
acumulado en lo corrido del año es de 3,15%, mayor al registrado en igual
período del año pasado (2,31%).
Al igual que en septiembre, durante octubre, las presiones alcistas más
importantes provinieron de los alimentos. La variación anual de esta canasta
ascendió en octubre a 6,6%, frente a 5,7% en septiembre. La aceleración se
concentró en los precios de los alimentos perecederos, especialmente la papa,
como se observa desde hace varios meses. Igualmente hubo alzas en alimentos
menos perecederos. Utilizando la desagregación de la canasta de alimentos en
alimentos afectados por el clima, importados y resto, se observó que los
productos afectados por el clima lideraron el repunte de los precios de la
2
canasta con un registro de 15,1% en octubre frente a 12,2% en septiembre,
mientras que los alimentos importados (6,5%) no presentaron aumentos
importantes respecto al mes anterior. El resto de alimentos (4,7%) aumentó 70
pb respecto al registro de septiembre. Problemas de oferta asociados a las
fuertes lluvias de la primera mitad del año, así como el ciclo normal de los
precios y la producción explicarían estos registros.
La inflación sin alimentos en octubre fue 3,03%, con un aumento leve
(5 pb) respecto al dato de septiembre. Desde octubre de 2009, el indicador no
se situaba por encima del punto medio del rango meta.
El comportamiento en octubre de las sub canastas del IPC sin alimentos
fue dispar. Hubo un aumento importante en la variación anual del IPC de
transables sin alimentos ni regulados. Este indicador, con un registro de 0,4%
en el mes, parece estar consolidándose en terreno positivo después de 16
meses consecutivos de mostrar cifras negativas. Ello en parte está relacionado
con la depreciación del tipo de cambio en los últimos meses. La variación
anual de no transables sin alimentos ni regulados se mantuvo en 3,5%. Los
arriendos presentan una variación anual estable desde hace algunos meses y
cercana al 3%, que compensa registros más altos en servicios de educación y
salud. En cuanto a la variación anual de la canasta de regulados (6,3%), se
presentó un descenso por las tarifas de energía que, sin embargo, fue mucho
menor que el previsto. En octubre continuaron los aumentos de los precios del
gas domiciliario debido a las alzas de los precios internacionales de los
combustibles de la primera mitad del año.
Los indicadores de inflación básica continuaron mostrando una
tendencia ascendente durante el último mes. El promedio de los tres
indicadores divulgados por el Banco de la República fue de 3,27%, 14 pb más
que hace un mes. Si bien todos los indicadores aumentaron, aún se mantienen
dentro del rango meta.
El aumento de la inflación afectó los indicadores de expectativas. Las
obtenidas a partir de los TES aumentaron a todos los horizontes, con las de
diez años superando un poco el techo del rango meta. Las mediciones a través
de encuestas presentan aumentos menos pronunciados. Por ejemplo, según la
encuesta mensual la inflación esperada a diciembre de 2011 es de 3,6% y a
doce meses es de 3,4%. En la encuesta trimestral, la expectativa a doce meses
está en 3,7%.
La variación de los precios al productor (IPP) continuó ascendiendo en
octubre y se ajustó a una tasa anual de 7,9% frente a 6,6% en septiembre. Los
3
aumentos, como en los meses anteriores, se concentraron en el componente
importado del indicador.
b. Crecimiento
El crecimiento del tercer trimestre, al igual que en la primera mitad del
año, seguiría impulsado por la demanda interna como se infiere de la
información más reciente de las ventas del comercio al por menor, medidas
por el DANE, cuyo crecimiento anual en septiembre fue de 7,2%. Además, las
importaciones en dólares de bienes de consumo crecieron en septiembre a una
tasa anual de 26% y la cartera de crédito de consumo registró en el mes de
septiembre un crecimiento anual de 25,8%.
Por su parte, la inversión también habría mostrado un buen
comportamiento en el tercer trimestre. Al respecto, el crecimiento registrado
por las importaciones de bienes de capital en septiembre (25%) sugiere que el
gasto en maquinaria y equipo seguía dinámico. En la misma dirección apunta
la evolución de la cartera de crédito comercial, la cual se expandió en el
mismo mes a una tasa de 22,2%. Por su parte, la inversión en construcción
habría continuado creciendo, de acuerdo con la evolución de las licencias de
construcción.
Por el lado de la oferta, en septiembre la variación anual del índice de
producción industrial fue de 5,2%. El crecimiento anual de la producción de
todo el tercer trimestre fue alto (6,2%), jalonado principalmente por el registro
de agosto. Los indicadores asociados con la industria manufacturera, como los
de pedidos y existencias de Fedesarrollo, se mantienen estables a septiembre y
aún en niveles que sugieren un ritmo de expansión importante para el sector.
En cuanto a las ventas externas, hasta septiembre el efecto del contexto
externo más débil no ha sido importante. Así, las exportaciones totales en
dólares aumentaron a una tasa anual de 36%. Este crecimiento se originó en
las mayores ventas de petróleo crudo y derivados, carbón y oro. El impulso en
las exportaciones de origen minero, tanto por el comportamiento de los
precios (32%) como por el de las cantidades (4%). Las exportaciones de
bienes básicos de origen agrícola no evidencian una recuperación. En efecto,
éstas registraron una caída anual de 4,1% en septiembre. Los índices de
precios y cantidades calculados sugieren que dicha disminución fue explicada
por la contracción registrada en las cantidades (-16% anual), la cual no fue
compensada por el aumento en los precios (12% anual). La caída en las
cantidades se originó en las menores ventas externas de café (-21%) y flores
(-19%). Finalmente, las ventas externas de bienes industriales y otros
4
productos agrícolas (sin productos básicos) mostraron un crecimiento anual de
4,3% en septiembre. El aumento se observó sólo en precios (9%) mientras que
las cantidades registraron una contracción (-5%).
Con relación al mercado laboral, la tasa de desempleo continuó en
septiembre con su tendencia decreciente. Su reducción respondió nuevamente
a un crecimiento de la demanda laboral (medida por la tasa de ocupación)
mayor al de la oferta (medida por la tasa global de participación). Tanto para
las 13 áreas como para el total nacional, el número de ocupados siguió
aumentando a tasas cercanas al 5%, en línea con lo registrado durante todo el
2011.
Los indicadores mencionados anteriormente con información al tercer
trimestre confirmaron los pronósticos presentados en el último Informe sobre
Inflación, cuando se proyectó una expansión anual de la economía entre 6% y
7% para dicho periodo.
Para el cuarto trimestre del año, los pocos indicadores disponibles
sugieren alguna desaceleración del consumo privado con respecto al tercero,
concentrada en el componente de bienes durables. Esto se deduce de la
reducción por cuarto mes consecutivo de la confianza de los consumidores
observada en el mes de octubre (junto con sus componentes de disposición a
comprar carro y vivienda) y por la desaceleración para el mismo mes de las
ventas del sector automotriz. Este comportamiento, sin embargo, está en línea
con lo esperado en las estimaciones del informe anterior, donde el crecimiento
de la economía para todo 2011 estaría en un intervalo entre 5% y 6%.
Respecto a la situación del crédito y las finanzas del sector real, los
indicadores agregados calculados con base en reportes de los intermediarios al
tercer trimestre de 2011 no muestran aún claros indicios de exceso, pese a que
la cartera mantiene un alto ritmo de crecimiento real. Sin embargo,
información de algunos segmentos, como el del crédito de consumo, señalan
un aumento importante del endeudamiento de los hogares y un ligero deterioro
de las últimas cosechas (según los datos más recientes disponibles en la
Superintendencia Financiera).
c. Variables Financieras.
El crédito total en moneda nacional (MN) y extranjera (ME) se
mantiene en altas tasas de crecimiento, con una leve moderación en octubre.
Todas las modalidades de crédito, tanto a los hogares como a las empresas,
continúan registrando crecimientos muy superiores al de la actividad
5
económica. Esto se ha dado en un contexto de tasas reales de interés
históricamente bajas.
A octubre, el crecimiento del crédito total (MN y ME) registró una tasa
anual de 22,7%, inferior en 118 pb a la observada en septiembre. La cartera de
consumo presentó la mayor tasa de crecimiento, 25,4%, menor en 32 pb con
respecto al mes anterior. Por su parte la cartera comercial mostró una tasa de
crecimiento anual de 22,0%, menor en 113 pb a la registrada en el mes de
septiembre, mientras que la cartera hipotecaria se mantuvo en una tasa de
crecimiento de 17,3% anual, como se ha venido observando desde agosto.
En octubre las tasas de los intereses reales (descontando el IPC sin
alimentos) para créditos de consumo, hipotecario y comercial ordinario se
situaron en 14,9%, 10,0% y 8,1%, cifras inferiores a los promedios observados
desde 1998.
d. Contexto Externo.
En el tercer trimestre de 2011 las principales economías desarrolladas
registraron un crecimiento del PIB mejor al esperado. No obstante, la
probabilidad de que se presente una recesión en Europa aumentó mientras que
el consenso del mercado es que la economía de los Estados Unidos se expanda
a una tasa moderada por un período prolongado. Ante este panorama y con los
grandes países emergentes creciendo a tasas cercanas a su potencial, el
pronóstico para 2012 indica que la actividad mundial continuaría
desacelerándose pero sin llegar a una situación de recesión.
El mejor resultado de crecimiento observado en los principales países
desarrollados podría estar asociado con el restablecimiento de las condiciones
de producción en Japón y con una reducción en el precio de los combustibles.
En Alemania, Francia y Japón, el crecimiento del tercer trimestre se aceleró
respecto a lo registrado entre marzo y junio. Algo similar sucedió en Estados
Unidos a pesar de la revisión del PIB de ese país de 2,5% a 2,0% que se dio a
conocer recientemente. Pese a lo anterior, los mercados internacionales
continuaron exhibiendo una alta aversión al riesgo debido a la situación en
Europa.
En Estados Unidos la poca información disponible del cuarto trimestre
muestra que la actividad real sigue creciendo pero lentamente, lo cual aleja los
temores de una posible recesión en el corto plazo. Sin embargo, los riesgos se
mantienen a la baja, y un detrimento en la situación europea podría afectar
6
considerablemente el crecimiento de este país. En este contexto se mantiene el
pronóstico presentado en el Informe Sobre Inflación de septiembre para este
país de un crecimiento moderado por un período prolongado.
En Europa los indicadores de actividad económica continúan
deteriorándose, especialmente en los países de la periferia. Adicionalmente,
los acuerdos y medidas dirigidas a solucionar los problemas de deuda pública
y del sistema financiero no han tenido hasta el momento el impacto esperado.
Todo esto ha repercutido en un deterioro en la confianza de los consumidores
e inversionistas y ha contagiado a las economías más grandes y estables de la
región. Dado esto es probable que el pronóstico de crecimiento de 2012 para
la Zona Euro se reduzca frente a lo presentado en el informe anterior.
Las economías emergentes continúan perdiendo dinamismo. En China,
la actividad real se ha seguido desacelerando lo cual ha sido confirmado con
los últimos datos de industria. Algo similar ocurre en India y Brasil, aunque en
estos países los indicadores se han deteriorado de manera más pronunciada.
Los mercados financieros han permanecido atentos a la evolución del
manejo de la deuda pública de la periferia europea. En las últimas semanas los
spreads de tasas de interés de los bonos soberanos de Italia y España
aumentaron. El contagio también está alcanzando a Francia y Alemania. En
las economías de América Latina, las primas de riesgo no han aumentado
significativamente y sus tasas de cambio han tendido a depreciarse
moderadamente respecto al dólar.
La débil demanda externa y las menores perspectivas de crecimiento
global han reducido las presiones sobre los precios internacionales de los
alimentos, los cuales cedieron un poco en los últimos meses. En el caso del
petróleo, a pesar de las alzas del WTI observadas en los últimos dos meses,
sus niveles aún son inferiores a los alcanzados en abril de 2011. A partir de
esta última fecha, la cotización del Brent ha tenido un comportamiento
decreciente. Todo lo anterior ha permitido una reducción de las presiones
inflacionarias en las economías desarrolladas y varias economías emergentes
(con excepción de India).
La política monetaria sigue siendo muy laxa en los países desarrollados.
El Banco Central Europeo redujo en 25 puntos básicos su tasa de intervención
en su reunión de noviembre, mientras que los bancos centrales de Japón e
Inglaterra mantuvieron sus tasas de referencia cercanas a cero. Por el lado de
7
las economías emergentes, salvo en el caso de la India, los bancos centrales
tendieron a mantener sus tasas de política.
Las cotizaciones internacionales de los principales bienes básicos que
exporta Colombia también se han visto afectadas pero moderadamente. Sin
embargo, sus niveles siguen altos y continúan impulsando el ingreso nacional.
La anterior situación puede explicar en parte el comportamiento de las
exportaciones en dólares a septiembre, las cuales crecieron a tasas elevadas
especialmente por las de origen minero. En las ventas externas industriales se
observó alguna desaceleración pero aún es temprano para concluir si ello
obedeció a una menor demanda externa.
2.
DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
Algunos miembros de la Junta manifestaron que la tasa de intervención
del Banco debe incrementarse en 25 pb, teniendo en cuenta las siguientes
razones: (i) Si bien la situación externa se ha deteriorado, el escenario central
de pronóstico es que la actividad económica en Europa siga debilitándose pero
sin que ocurra una evolución desordenada o colapso. Al mismo tiempo, el
consenso del mercado es que la economía de los Estados Unidos se expanda a
una tasa moderada por un periodo prolongado. (ii) Si bien la situación externa
se ha deteriorado y algunos indicadores internos muestran moderación, desde
el último informe, la inflación y las expectativas de inflación aumentaron, lo
cual puede llegar a poner en riesgo la meta y la credibilidad de la política
monetaria en un contexto en el cual la tasa de interés de política parece reflejar
una política monetaria expansiva. Las decisiones sobre salarios y otros precios
de comienzos de 2012 se tomarán en el contexto de un choque de oferta, con
la inflación por debajo pero cerca de 4% y con un mercado laboral apretado.
Además, la depreciación del peso parece estar afectando los precios de los
transables. (iii) El deterioro de las condiciones externas y la moderación de
algunos indicadores internos no parecen suficientes para compensar una
dinámica interna caracterizada por excesos de demanda que eventualmente
podría amenazar la meta de inflación y la estabilidad del producto, incluso a
mediano plazo por consideraciones de desbalances financieros. A pesar de la
desaceleración en algunos indicadores, estos se mantienen en niveles altos y
otros se mantienen altos y no se desaceleran. (iv) El crédito bancario continúa
creciendo a una tasa anual elevada. La cartera más dinámica es la de consumo
de los hogares, los cuales parecen estar elevando significativamente su grado
de apalancamiento. Los índices de precios de la vivienda nueva y usada están
8
en sus máximos registros. El crédito bancario a una tasa de interés más
elevada contribuye a una medición apropiada de los riesgos. (v) Las
decisiones de política deben siempre ponderar los riesgos y costos de
equivocarse. Dados los rezagos de la política monetaria, no hacer nada si la
economía continúa fuerte, implicaría riesgos sobre la credibilidad o reputación
de la propia política y podría llevar a crear una volatilidad innecesaria de las
tasas de interés y el PIB. Dados los mismos rezagos, aumentar las tasas hoy
podría no traer un costo muy grande si la situación externa se deteriora
súbitamente en el futuro cercano, lo cual es fácilmente detectable, y la política
se revierte.
Teniendo en cuenta el pronóstico central descrito antes, y los riesgos de
desequilibrios financieros, se considera prudente aumentar 25 puntos básicos
la tasa de interés de intervención y cree que con ese movimiento se alcanza
una postura monetaria que contribuye a maximizar el crecimiento del producto
y el empleo coherente con el logro de las metas futuras de inflación. Esta
decisión incorpora además la posibilidad de detectar a tiempo un cambio
sustancial en las condiciones externas de la economía y de reaccionar
rápidamente ante el mismo.
Otros miembros de la Junta consideraron que es conveniente mantener
estables las tasas de interés del Banco teniendo en cuenta que: (i) Si bien es
cierto que la inflación anual a octubre tocó el techo del rango meta, la causa se
concentra en un choque de oferta de alimentos transitorio por razones
climáticas. En efecto, el incremento de precios de los alimentos fue 6,63%, en
contraste con 1,69% y 1,64% en igual período de 2009 y 2010
respectivamente. Y los de los más afectados por el clima crecieron 15%, o sea
tres veces más que los de los importados y los del resto de origen nacional.
Además, el IPC sin alimentos ha estado en el punto medio del rango meta
(3,05%, 2,57% y 3,03% en 2009, 2010 y 2011 respectivamente). En tanto que
la inflación de no transables sin alimentos ni regulados, que refleja más
fielmente posibles presiones de demanda, ha venido reduciéndose: 4,57%,
3,53% y 3,49% a octubre de 2009, 2010 y 2011 respectivamente. Además, el
equipo técnico del banco continúa pronosticando descensos de la inflación en
los próximos 6 meses. (ii) En Europa los acuerdos y medidas dirigidas a
solucionar los problemas de deuda pública y del sistema financiero no han
tenido el impacto esperado, y la situación ha continuado deteriorándose en
forma marcada desde la última reunión de la Junta. Las agencias calificadoras
de riesgo han reducido la calificación de varios países de la zona, los spreads
de deuda han crecido en forma marcada, y ni siquiera Alemania ha sido
9
inmune a los temores de los mercados. Varios analistas proyectan una recesión
en diferentes países europeos en 2012 y no descartan el fracaso del modelo
que llevó a la creación del Euro. (iii) En los Estados Unidos fracasó el "Super
Comité" formado por demócratas y republicanos para presentar una propuesta
tendiente a reducir el déficit fiscal durante los próximos 10 años, y los
pronósticos de crecimiento también se han reducido en forma sustancial
durante el último año. (iv) China continuará creciendo a tasas altas, pero las
noticias no han sido excepcionalmente alentadoras en los últimos meses. Hay
síntomas de contracción de la industria, los precios de la vivienda acusan
fuertes caídas, y lo mismo sucede con el crecimiento de la construcción. Al
punto de que su autoridad monetaria ha comenzado una nueva fase de medidas
monetarias expansivas. (v) En América Latina la industria ha perdido
dinamismo y varias de las economías se han enfriado. El Banco Central de
Brasil ha reducido tasas en los últimos meses, y los de México, Chile y Perú
las han mantenido, con anuncios de sesgos a la baja si las condiciones de la
economía mundial continúan deteriorándose. Por qué habría de ser Colombia
diferente al resto del mundo excepto la India o Islandia? (vi) La tasa real de
interés repo en Colombia está por debajo de su media histórica, pero lo mismo
sucede en la mayoría de países del mundo. (vii) Diferentes variables han
comenzado a mostrar una menor dinámica en los meses recientes,
posiblemente como resultado de la situación internacional: las expectativas al
consumidor de la encuesta de Fedesarrollo han caído cuatro meses
consecutivos; la dinámica industrial se redujo desde 9,7% en agosto a 5,2% en
septiembre; la tasa de crecimiento anual de las ventas externas sin productos
básicos en septiembre fue de 4,3% que se desaceleró frente al registro de
agosto que fue de 41%; y el crédito de consumo se viene desacelerando de
34.1% en junio de 2011, a 23.4% en noviembre, cuando se consideran las
variaciones anualizadas de las últimas 13 semanas. (viii) La dinámica del
crédito y el creciente valor de los activos podría obedecer a factores
estructurales y no sólo a baja tasa de interés; (ix) De todas formas se justifica
pensar en medidas de regulación prudencial adicionales a la tasa de interés; los
modelos disponibles en el Banco sugieren que un incremento de 25 puntos en
la tasa de interés disminuyen la dinámica del crédito en forma marginal. (x)
Las tasas de interés de mercado han subido recientemente, lo cual sugiere que
no existe un nivel de liquidez excesivo en la economía.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
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La Junta Directiva acordó, por mayoría, aumentar 25 puntos básicos la
tasa de interés de intervención que quedará en 4,75.
La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo de la situación
internacional, del comportamiento y proyecciones de la inflación, el
crecimiento, el comportamiento de los mercados de activos y reitera que la
política monetaria dependerá de la nueva información disponible.
Bogotá DC, diciembre 09 de 2011
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2011-12-01 | 1
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
16 de Diciembre de 2011
El 16 de diciembre de 2011 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión
ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro
de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry, el Gerente General, José Darío
Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José
Echavarría, Fernando Tenjo, Juan Pablo Zárate y César Vallejo, en la cual se discuten
las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se
toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un
resumen de los principales temas tratados en dicha reunión.
1.
ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación:
La inflación anual al consumidor en noviembre fue 3,96% (mensual de 0,14%), 6
puntos básicos (pb) menos que en octubre. El ajuste de precios acumulado en lo
corrido del año es de 3,29%, mayor al registrado en igual período del año pasado
(2,51%).
La caída de la inflación total durante el mes se explica principalmente por la
desaceleración de la variación de los precios de los alimentos. El IPC sin alimentos, por
su parte, se mantuvo en 3,03%. Esto fue el resultado de un descenso en la variación
anual del IPC de regulados que compensó el aumento de los IPC de transables y no
transables (sin alimentos ni regulados).
Para el IPC de alimentos, la variación anual pasó de 6,6% en octubre a 6,4% en
noviembre, con lo que se interrumpe la tendencia ascendente que ya acumulaba seis
meses. En términos de variaciones anuales, los descensos se concentraron en
alimentos perecederos al pasar de 17,6% en octubre a 14,6% en noviembre. Para la
mayoría de los otros subgrupos de la canasta se observó una aceleración de la
variación anual. En el caso de la papa y de las frutas, se han observado caídas
absolutas en precios que ocurren después de un período de alzas importante, lo que
sugiere que los movimientos recientes están asociados con el ciclo normal de la oferta
de estos productos. Hasta la fecha, las intensas lluvias ocasionadas por el fenómeno de
La Niña no habían provocado una interrupción en la cadena de suministros de
alimentos, excepto por el caso de la leche y los huevos. Los precios de los alimentos
importados han registrado pocos aumentos en los últimos meses, pese a la
depreciación del peso. Esto puede estar ligado a algunos descensos que se han
observado en los precios internacionales.
La desaceleración en la canasta de regulados (caída de 48 pb frente a octubre)
obedece a una corrección en las tarifas de energía eléctrica en la ciudad de Cali
después del fuerte aumento que se registró dos meses atrás. En el caso del precio
interno de la gasolina y de las tarifas de transporte público no se presentaron cambios
significativos en noviembre, pero sí hubo un incremento importante en el precio del
2
gas domiciliario, siendo este el rubro que más presiones alcistas ejerce en esta sub
canasta.
El IPC de transables sin alimentos ni regulados, por su parte, se situó en 0,6%
(variación anual) frente a 0,4% del mes anterior. Desde hace varios meses, este grupo
presenta aumentos que estarían relacionados con la depreciación del tipo de cambio
en la segunda mitad del año.
Respecto a los no transables sin alimentos ni regulados la variación anual en
noviembre fue de 3,6%. Los arriendos, el principal componente de esta canasta,
presenta una ligera tendencia ascendente que sin embargo no implica aún reajustes
anuales muy por encima del 3% (3,3% en noviembre).
Pese al descenso de la inflación total, la inflación básica continuó aumentando en
noviembre. El promedio de los tres indicadores monitoreados por el Banco de la
República se situó en 3,34%, 7 pb más que el mes anterior. Si bien todos los
indicadores aumentaron, aún se mantienen dentro del rango meta.
Las expectativas de inflación no presentaron cambios importantes en el último mes.
Las obtenidas con la encuesta mensual a diciembre de este año están en 3,6%, igual
que hace un mes y las de doce meses se encuentran en 3,4%, ligeramente por encima
de las obtenidas en octubre. Las expectativas obtenidas a partir de los TES
presentaron una leve caída después del aumento registrado el mes anterior; todas
excepto las de diez años se mantuvieron entre 3,5% y 4,0%.
En noviembre se presentó una reducción importante en la variación anual en el IPP (a
6,8% desde 7,9% el mes pasado). La desaceleración se dio tanto en el grupo de bienes
importados como en el de producidos y consumidos.
b. Crecimiento
Los últimos indicadores de actividad económica para el tercer trimestre de 2011
confirmaron que el ritmo de crecimiento anual de la economía se aceleró respecto al
observado en la primera mitad del año, y que la economía colombiana continúa siendo
impulsada principalmente por la demanda interna.
Entre la información divulgada recientemente la más sobresaliente fue el dato de
obras civiles para el tercer trimestre. Según el DANE el indicador aumentó 22,8% en
términos anuales. La mayor expansión dentro del rubro se dio en la construcción de
obras asociadas con el sector minero. También fue divulgado el censo de edificaciones
con aumentos del área en el tercer trimestre cercanos al 10% anual. Por su parte,
otros indicadores trimestrales asociados al sector servicios (hoteles, agencias de
viajes) y al pecuario (sacrificio de ganado) también mostraron comportamientos
favorables en el tercer trimestre.
La dinámica de la demanda interna en el período se produce en un marco de tasas de
interés reales relativamente bajas, alta disponibilidad de crédito e incremento de la
ocupación. En esas condiciones el consumo de los hogares habría continuado
3
mostrando un fuerte dinamismo en especial en el relacionado con las compras de
bienes durables. La inversión habría sido impulsada por la construcción de obras
civiles, por las compras de maquinaria y equipo de transporte y por la expansión de la
vivienda.
Por ramas de actividad, los sectores que habrían registrado mayores tasas de
crecimiento serían la construcción y la minería.
Los pocos indicadores disponibles para el cuarto trimestre de 2011 muestran alguna
desaceleración en el ritmo de crecimiento anual aunque su dinamismo continúa alto.
Las ventas de vehículos continuaron aumentando en noviembre en unidades. La
confianza de los consumidores luego de mostrar caídas durante los tres meses
anteriores se recuperó en noviembre. El nivel de este indicador aún puede
considerarse alto (se encuentra por encima de su promedio desde 2001). La cartera
de crédito de consumo sigue expandiéndose a tasas cercanas al 25%.
Con respecto a la oferta, la mayor parte de indicadores asociados al sector industrial
se mantiene estable (pedidos, existencias, demanda de energía, etc.). Así mismo la
ANDI reveló que el crecimiento de la producción industrial para el año corrido a
octubre fue de 6%, registro similar al que había señalado un mes atrás (6,1% para el
año corrido a septiembre).
En octubre las exportaciones totales en dólares registraron un valor de US$ 4.713
millones y crecieron anualmente 32,6%. Este aumento se explicó principalmente por
las exportaciones mineras. Por su parte, las ventas externas de los bienes básicos
agrícolas (café, banano y flores) disminuyeron 5,3% con respecto al mismo mes del
año anterior. Este comportamiento se originó en la caída de las cantidades
despachadas principalmente de café (20% anual) y de flores (15,5% anual). El resto
de las exportaciones sin productos básicos registraron un crecimiento anual de 8,1%,
impulsadas principalmente por alimentos, bebidas y productos químicos.
En el mercado laboral, la tasa de desempleo continúa con una tendencia decreciente.
La cifra mensual a octubre fue de 9,0% para el total nacional y 10,2% para las trece
ciudades principales. Para el caso del total nacional, es la cifra más baja en la última
década. Nuevamente el mayor crecimiento de la demanda laboral (medida por la tasa
de ocupación) en comparación al crecimiento de la oferta (medida por la tasa global
de participación), explicó la caída en la tasa de desempleo.
Los comportamientos reseñados están en línea con lo contemplado en el Informe
sobre Inflación de septiembre dónde se tiene un rango de crecimiento del producto
para todo el año entre 5% y 6%.
c. Variables Financieras.
El crédito total en moneda nacional (MN) y extranjera (ME) mantiene altas tasas de
crecimiento. Todas las modalidades de crédito, tanto a los hogares como a las
empresas, continúan registrando crecimientos muy superiores al de la actividad
económica.
4
En noviembre las tasas de los interés reales (descontando el IPC sin alimentos) para
créditos de consumo, hipotecario y comercial se situaron en 14,9%, 9,9% y 8,3%
respectivamente, cifras inferiores a los promedios observados desde el año 1998.
d. Contexto Externo.
Las medidas para superar la crisis de la deuda en Europa luego de la reunión de
diciembre 7 en el Banco Central Europeo y los líderes de la Unión Europea, parecen
haber sido consideradas insuficientes por los mercados. Así lo demuestra el reciente
incremento de los intereses de los bonos italianos y españoles a 10 años y la caída del
Euro a US$ 1,30, el nivel más bajo desde enero del presente año. Como consecuencia,
los mercados financieros continúan con altos niveles de volatilidad.
La nueva información disponible sugiere que la economía mundial se deteriora a un
ritmo mayor al esperado. En la Zona Euro, para el último trimestre de 2011 y el
primero de 2012, se proyecta un crecimiento muy bajo, con un riesgo elevado de que
se ubique en terreno negativo. En particular, el marcado deterioro de las expectativas
de los empresarios y los consumidores, al igual que el menor ritmo de expansión de
las economías más grandes de la región (Alemania y Francia), hacen prever un
desempeño mediocre durante 2012. Adicionalmente, las restricciones de liquidez de
los bancos europeos, a pesar de la rebaja de la tasa de interés de referencia (de 1,25%
a 1%) y de las nuevas facilidades de liquidez aprobadas por el Banco Central Europeo,
amenazan con un estrangulamiento de crédito. A esto se agrega la rigidez del ajuste
fiscal que impone la nueva regla, que limita el déficit estructural a 0.5% del PIB para
los países miembros de la Unión Europea. Esto podría acentuar la desaceleración de la
actividad económica en el corto plazo. En EEUU los mejores indicadores de actividad
económica de las últimas semanas han mitigado los temores de una doble recesión.
Sin embargo, los riesgos externos asociados a Europa o una fuerte desaceleración en
China, podrían limitar su ritmo de crecimiento.
En las economías emergentes los datos de los últimos meses muestran una
desaceleración más fuerte que la estimada en el escenario central del Informe sobre
Inflación de septiembre como consecuencia de factores internos y externos. En China
y Brasil se han empezado a implementar políticas monetarias y fiscales menos
restrictivas con el fin de incentivar la demanda interna y contrarrestar los efectos de
un menor crecimiento externo. En China la caída en los precios de la vivienda ha
comenzado a generar preocupaciones. Durante los últimos años la construcción ha
sido el principal motor de crecimiento de esta economía y una crisis en dicho sector
podría implicar una fuerte desaceleración.
En términos de política monetaria, las economías avanzadas mantienen una posición
laxa y algunas economías emergentes, como Brasil y Tailandia, han empezado a
reducir sus tasas de intervención. Para los próximos meses los analistas esperan que
más economías se unan a esta tendencia y ayuden a estimular la demanda interna en
cada país.
5
Las cotizaciones internacionales de los principales bienes básicos han descendido
moderadamente. En particular, el precio internacional del petróleo se encuentra en la
parte superior del rango estimado en el pasado informe trimestral. De esta forma, el
nivel de los términos de intercambio sigue alto y continúa impulsando el ingreso
nacional.
El mayor riesgo de los pronósticos centrales de crecimiento es un ajuste desordenado
en Europa. De materializarse, la economía mundial crecería considerablemente menos
de lo esperado, los precios internacionales de los bienes básicos podrían caer y la
aversión global al riesgo exacerbase, lo que afectaría adversamente la economía
colombiana. Existe gran incertidumbre sobre la magnitud de dicha contracción y sus
efectos.
2.
DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
La mayoría de la Junta expresó la conveniencia de mantener inalteradas las tasas de
interés de intervención con base en el balance de la situación externa e interna,
balance que de todas formas resulta altamente sensible a la nueva información
disponible.
La Junta consideró que en el frente externo debe tenerse en cuenta que: (i) Los
mercados financieros internacionales continúan mostrando altos niveles de
volatilidad, como consecuencia de los problemas de deuda soberana en Europa. Es
probable que las economías de la zona‐Euro se contraigan en el último trimestre de
2011 y en la primera mitad de 2012, aun cuando existe gran incertidumbre sobre la
magnitud de la contracción y sobre sus efectos; (ii) De materializarse un ajuste
desordenado en Europa la economía mundial crecería considerablemente menos de lo
esperado, los precios internacionales de los bienes básicos podrían caer y la aversión
global al riesgo podría exacerbase, todo lo cual afectaría adversamente la economía
colombiana; (iii) La economía de los Estados Unidos se expande a una tasa moderada
y se espera que continúe así por un período prolongado; (iv) Varias economías
emergentes han mostrado signos recientes de desaceleración.
En el contexto interno debe tenerse en cuenta que: (i) Los precios internacionales de
los productos básicos permanecen en niveles altos y estimulan el ingreso nacional de
los países productores; (ii) La información más reciente sobre el comportamiento de
la actividad económica sugiere que el crecimiento del PIB en el tercer trimestre
superará el 6%; (iii) El crédito bancario crece a una tasa alta y pareciera estar
acelerándose. El comportamiento del crédito de consumo sugiere que los hogares han
elevado considerablemente su grado de apalancamiento; (iv) Los índices de precios de
la vivienda nueva y usada siguen en sus máximos registros; (v) Las medidas de
inflación básica continúan subiendo y la mayoría supera el 3%; (vi) La información
disponible muestra que con ocasión de los incrementos en la tasa de interés de
intervención y del comportamiento de otras variables internacionales y locales, las
expectativas de inflación obtenidas a partir de los TES dejaron de subir, e incluso
presentaron una ligera caída; (vii) Señales de que, si bien la economía colombiana
6
sigue dinámica, este impulso se puede estarse moderando. Las expectativas y los
pronósticos de inflación se hallan crecientemente dominados por las expectativas y
pronósticos sobre el clima, ante el cual la política monetaria carece de herramientas
apropiadas para responder y; (viii) El probable impacto de decisiones salariales y
normas laborales sobre las expectativas de inflación y el funcionamiento del mercado
laboral.
Un miembro de la Junta opinó que debía incrementarse la tasas de interés de
intervención en 25 p.b. teniendo en cuenta que: (i) El contexto interno de la economía
colombiana señalados indican la necesidad de un incremento de la tasa de
intervención. Como se mencionó antes, el crecimiento excesivo del crédito y la
persistencia de tasas de interés bajas podrían ser fuente de desequilibrios financieros,
mientras las expansiones excesivas en la demanda o los aumentos en los costos
laborales pueden elevar las expectativas de inflación y reducir la credibilidad de la
política monetaria en un contexto en el que los indicadores de inflación básica siguen
creciendo y; (ii) Si bien los mercados financieros internacionales continúan con altos
niveles de volatilidad como consecuencia de las dificultades relacionadas con los
problemas de deuda soberana en Europa, el nivel de incertidumbre no ha cambiado
en relación con el mes anterior y es poco probable un ajuste financiero desordenado.
Además la economía de los Estados Unidos se expande a una tasa positiva.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva acordó, por mayoría, mantener inalterada la tasa de interés de
intervención.
La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo de la situación internacional, del
comportamiento y proyecciones de la inflación, el crecimiento, el comportamiento de
los mercados de activos y reitera que la política monetaria dependerá de la nueva
información disponible.
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2012-01-01 | 1
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
30 de Enero de 2011
El 30 de Enero de 2012 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión
ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del
Ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry, el Gerente
General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos
Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, Juan Pablo Zárate y
César Vallejo, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de
crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas
con la política monetaria.
A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha
reunión.
1. ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación:
La inflación anual al consumidor en diciembre fue 3,73% (mensual de
0,42%), 23 puntos básicos (pb) menos que en noviembre. Este valor superó el
3%, punto central del rango meta de largo plazo definido por la Junta
Directiva del Banco (3% +/-1 punto porcentual). Adicionalmente, el dato
estuvo por encima de lo previsto y aumentó 56 pb respecto de la cifra
observada un año atrás.
La caída de la inflación durante el mes se explica principalmente por la
desaceleración de la variación de los precios de los alimentos. El IPC sin
alimentos, por su parte, se situó en 3,13%, 10 pb más que en noviembre y 31
pb superior al de diciembre del año anterior. Esto fue el resultado de un
aumento de los precios de las canastas de transables y no transables una vez se
excluyen alimentos y regulados.
Para el IPC de alimentos, la variación anual pasó de 6,4% en noviembre
a 5,3% en diciembre. Como el mes anterior, la variación de los precios de los
2
productos perecederos fueron los que más contribuyeron a este descenso, con
papa y frutas mostrando caídas absolutas en precios. Este comportamiento
sugiere que las condiciones de oferta de alimentos no procesados han seguido
normalizándose luego de los choques recibidos por las condiciones climáticas.
La depreciación del peso en meses anteriores y los precios internacionales
tampoco habrían generado presiones alcistas importantes toda vez que el IPC
de alimentos procesados disminuyó levemente. La variación de los precios de
comidas fuera del hogar se mantuvo estable pero por encima del techo del
rango meta, lo que puede obedecer al dinamismo de la demanda interna.
Dentro del IPC sin alimentos sobresale el aumento en la variación anual
del IPC de transables (sin regulados) a 0,80% en diciembre. Desde septiembre
de 2011 este indicador ha venido aumentando hecho que puede ser asociado
con la depreciación del tipo de cambio entre septiembre y diciembre y
probablemente también con el auge de la demanda interna.
En diciembre también se observaron aumentos en la variación anual de
no transables sin alimentos ni regulados. Este indicador ha aumentado en los
últimos seis meses lo que podría ser resultado del dinamismo de la demanda
interna y la ampliación de la brecha del producto. Los aumentos se han
concentrado sobre todo en rubros de servicios de salud y en arriendos.
La variación anual del IPC de regulados se mantuvo en 5,8%. No
obstante, el registro sigue siendo alto impulsado por el precio de la gasolina y
del transporte público.
La inflación básica continuó aumentando en diciembre, por cuarto mes
consecutivo. El promedio de los tres indicadores monitoreados por el Banco
de la República se situó en 3,41%, 7 pb más que el mes anterior.
Las expectativas de inflación aumentaron a comienzos de enero de
2012, una vez conocido el dato de diciembre. Las obtenidas de la encuesta
mensual a 12 meses están en 3,56% frente a 3,44% del mes pasado. En la
misma encuesta se espera una inflación de 3,55% para diciembre de 2012. Las
mediciones derivadas de los TES también se incrementaron a diversos los
plazos.
En materia de salarios, a finales de año no se habrían generado
presiones importantes sobre los precios al consumidor toda vez que los ajustes
reportados se sitúan alrededor del 4%, tanto para la industria, como para el
comercio y para la construcción. Todo lo anterior sugiere que los costos de
producción no habrían sido fuente de presiones importantes sobre los precios
3
al consumidor en el cuarto trimestre de 2011. Esta situación, sin embargo
puede que no se mantenga para 2012 debido a la estrechez del mercado
laboral y a que el ajuste del salario mínimo de 5,8%, fue superior en 2,8
puntos porcentuales a la meta de inflación largo plazo de 3%.
b. Crecimiento
De acuerdo con el DANE en el tercer trimestre de 2011 el PIB
colombiano creció 7,7% en términos anuales (1,7% trimestralmente). Esta tasa
de expansión, junto con la registrada en el cuarto trimestre de 2006, representa
la mayor desde 1979.
A diferencia de los trimestres anteriores, en el tercer trimestre la mayor
contribución al crecimiento por tipo de gasto provino de la inversión en capital
fijo (FBKF), en donde el aporte de la inversión destinada a la industria fue
importante. La FBKF aumentó 20% anual y desplazó al consumo de los
hogares como principal motor de crecimiento. No obstante, el desempeño del
consumo de los hogares también fue importante (7,3%).
En el tercer trimestre se presentó una desaceleración en el crecimiento
anual de las importaciones desde 24,9% en junio a 18,8%. Pese a este menor
ritmo, el nivel real de las importaciones es históricamente alto. Las
exportaciones repuntaron y volvieron a registrar una tasa de crecimiento de
dos dígitos (10,5%).
Por el lado de la oferta, los sectores que más crecieron fueron minería
(18,4%) y construcción (18,1%). Los servicios financieros se expandieron
6,6% pero contribuyeron de manera importante a la dinámica del PIB dada su
importancia en el total. En el tercer trimestre todos los sectores registraron
crecimiento en términos anuales.
Para el cuarto trimestre, la información más reciente sugiere que la
economía colombiana continuó mostrando un buen dinamismo, creciendo
incluso a una tasa superior a la registrada en el primer semestre del año.
Por tipo de gasto el crecimiento continúa siendo impulsado por el
consumo de los hogares, lo cual puede inferirse del comportamiento dinámico
de las ventas del comercio (variación anual promedio de 3,7% a noviembre), y
de las importaciones de bienes de consumo en dólares en los meses de octubre
y noviembre (17% en promedio anual), así como también de los datos de
cartera correspondientes a este rubro (en el cuarto trimestre el crecimiento
anual del saldo de crédito de consumo fue de cerca de 22%).
4
Adicionalmente, es de prever que en el cuarto trimestre el consumo
privado se haya visto favorecido por el continuo descenso registrado en la tasa
de desempleo. Esta reducción se dio fundamentalmente por el aumento de la
demanda laboral y por el dinámico incremento en el número de ocupados
tanto a nivel nacional como en las 13 áreas metropolitanas. En el cuarto
trimestre se observaron tasas de desempleo de un solo dígito, similares (e
incluso menores) a las observadas en el año 2007.
La conjunción de los anteriores factores, junto con una mejoría en las
expectativas, ha propiciado un repunte en la confianza de los consumidores a
finales de 2011. Según Fedesarrollo, la confianza de los consumidores en
diciembre creció significativamente y se ubicó no sólo por encima del
promedio de la serie sino también en el nivel más alto para todo el año.
Con respecto a la inversión, a pesar de contar con menos información,
el escenario también habría sido favorable. En primer lugar, las importaciones
de bienes de capital en dólares crecieron 40,5% en promedio en octubre y
noviembre y, en segundo lugar, en noviembre la producción de cemento
mantuvo un comportamiento dinámico con crecimientos anuales superiores al
10%.
Por el lado de la oferta, se destacó el comportamiento de la producción
industrial. En noviembre el IPI creció a una tasa anual de 6,5%. La
información disponible sobre pedidos y existencias sugiere que el sector
podría crecer en diciembre a tasas similares a las observadas en los últimos
tres meses (5,5%).
Las ventas externas de Colombia continuaron creciendo. En noviembre,
las exportaciones totales en dólares crecieron 42,5% anual, hecho explicado
principalmente por un incremento de 52,1% en las ventas externas de los
principales productos de origen minero (petróleo, carbón, oro, Ferroníquel).
Así mismo, las exportaciones industriales aumentaron 31,5% y las de origen
agrícola lo hicieron en 8,4%. Por destinos, las exportaciones industriales a
Venezuela crecieron 69,1%, a Ecuador 28,1% y al resto de la ALADI 26,9%.
En términos generales en 2011 se habría tenido un importante
crecimiento del consumo de los hogares (duplicando su promedio de
crecimiento de la última década) y una fuerte aceleración en el crecimiento de
la inversión. En el sector externo las exportaciones en términos reales habrían
registrado la tasa de expansión más alta en veinte años (cerca de 11%). Las
importaciones también habrían presentado una tasa elevada de crecimiento
(22,1%) y compensarían la dinámica de las ventas externas, con lo cual la
5
contribución de la demanda externa al crecimiento del PIB sería negativa. Los
sectores de mejor desempeño en 2011 habrían sido la minería, el transporte y
el comercio. La anterior información puede indicar que el crecimiento para el
2011 podría ser superior a 5,5%.
Para 2012 la información disponible sugiere un intervalo de crecimiento del
producto entre 4,0% y 6,0%.
c. Variables financieras
El crédito total en moneda nacional (MN) y extranjera (ME) mantiene
altas tasas de crecimiento, con una leve moderación en diciembre. Todas las
modalidades de crédito, tanto a los hogares como a las empresas, continúan
registrando crecimientos muy superiores al de la actividad económica. Esto se
ha dado en un contexto de tasas reales de interés históricamente bajas.
A diciembre, el crecimiento del crédito total (MN y ME) registró una
tasa anual de 21,1%, inferior en 22 pb a la observada en noviembre, con
moderación en todas sus modalidades. Las tasas de crecimiento fueron: 25,0%
para consumo, 19,5% para comercial y 17,2% para hipotecaria.
En diciembre las tasas de interés reales (descontando el IPC sin
alimentos) para créditos de consumo, hipotecario y comercial ordinario se
situaron en 15,4%, 9,6% y 8,2% respectivamente, cifras inferiores a los
promedios observados desde el año 1998 (exceptuando la de crédito
hipotecario cuyo promedio es calculado desde mayo 2002).
d. Contexto externo
Para el último trimestre de 2011 las cifras de actividad económica
mundial muestran que la economía mundial se ha debilitado como resultado
de los síntomas de recesión en la Zona Euro, que obligaron a una revisión a la
baja del crecimiento mundial para todo 2012.
En la Zona Euro, los problemas de la deuda pública y de fondeo de los
bancos privados han afectado la actividad económica y han deteriorado
fuertemente la confianza de empresarios y consumidores en la región. A la
amenaza de contagio de las crisis de deuda soberana de Grecia e Irlanda a
países como España e Italia, se suma el riesgo todavía no disipado de que
Grecia no pague su deuda. De no lograrse un acuerdo en las negociaciones
entre el sector financiero, las autoridades europeas y Grecia, la probabilidad
de una crisis financiera es elevada dada la alta exposición de algunos bancos
6
europeos a la deuda de ese país. Pese a las medidas tomadas por el Banco
Central Europeo para evitar las restricciones de crédito, no se ven signos de
revitalización del crédito por parte de la banca privada. Las autoridades
europeas han seguido avanzado en temas como la reducción del gasto público,
la integración fiscal y el fortalecimiento del sistema financiero para enfrentar
la crisis. De todos modos, las medidas parecen ser insuficientes para
solucionar los desbalances de la región en términos de crecimiento económico
y competitividad. Todo esto se ha visto reflejado en un comportamiento volátil
de los mercados financieros y ha incrementado la probabilidad de una recesión
económica en la Zona Euro que se extendería al primer semestre de 2012.
En Estados Unidos el contagio de la situación externa parece ser
limitado y la economía ha seguido mostrando una dinámica positiva, apoyada
en una recuperación del consumo y de la actividad manufacturera. Las últimas
cifras de empleo fueron mejores que las estimadas por el promedio del
mercado y la industria continuó mostrando signos de recuperación. Con la
inflación en niveles bajos, las principales preocupaciones de la FED continúan
siendo los mercados de vivienda y de trabajo. En su reunión del miércoles 25
de enero la FED anunció que mantendría su tasa de interés de intervención en
niveles cercanos a cero hasta 2014. Según los analistas, este anuncio busca
mantener las tasas de largo plazo en niveles bajos, con el fin de reducir el
costo de la deuda hipotecaria. Pese a los buenos datos recientes, se prevé que
en los próximos trimestres el crecimiento de Estados Unidos continúe siendo
moderado como consecuencia de las dificultades estructurales que aún
perduran.
En Japón la cadena de suministros parece haberse recuperado en un alto
porcentaje después del desastre natural de marzo de 2011. Sin embargo, la
economía ha empezado a mostrar síntomas de debilitamiento, especialmente
en sus exportaciones como consecuencia de la reducción de la demanda
global.
Las principales economías emergentes han seguido desacelerándose, en
línea con lo previsto en el informe anterior. En China las cifras recientes sobre
crecimiento económico y actividad industrial sugieren una disminución leve
del crecimiento y el debilitamiento del mercado de vivienda representa un
riesgo adicional a la caída de la demanda global. Los recientes anuncios de las
autoridades de dicho país dan a entender que en los próximos meses vendrán
mayores estímulos fiscales y monetarios. En las economías de Latinoamérica
la tendencia es hacia la moderación en el crecimiento. En el caso de Brasil por
7
ejemplo, desde la segunda mitad del año se han empezado a aplicar medidas
de estímulo fiscal y monetario, con el fin de atenuar los choques externos.
El menor crecimiento económico global y las bajas presiones
inflacionarias darían una mayor holgura a la política monetaria alrededor del
mundo. Por ello, en las economías avanzadas no se esperan aumentos en las
tasas de interés; por el contrario, la política monetaria seguirá siendo
expansiva y no se descartan rondas adicionales de inyecciones de liquidez en
Europa. Por su parte, en la mayoría de economías emergentes se espera
estabilidad o disminución en las tasas de interés.
Los precios internacionales de los bienes básicos han disminuido desde
los máximos alcanzados en el primer semestre de 2011, pero aún se
encuentran en niveles históricamente altos. Para 2012 se espera que las
cotizaciones internacionales de los principales bienes básicos exportados por
Colombia se mantengan en niveles relativamente altos pese al menor
crecimiento esperado para la demanda mundial. En el caso del petróleo las
proyecciones aumentaron frente a lo que se tenía previsto hace tres meses por
las diversas tensiones geopolíticas. De esta forma, el nivel de los términos de
intercambio se mantendría alto y continuaría impulsando el ingreso nacional.
Los últimos datos de la balanza cambiaria para Colombia muestran que
la inversión extranjera directa sigue dinámica, especialmente la dirigida a la
minería. Si la situación internacional no se deteriora aún más, se prevé que
este comportamiento continúe durante 2012.
Hasta el momento el incremento en las primas de riesgo y la reducción
en la calificación de algunos países europeos no han tenido efectos
significativos sobre las primas de riesgo del país. De hecho, en lo corrido del
presente año la tasa de cambio se apreció después de haber registrado una
tendencia alcista a finales de 2011.
Pese al deterioro del panorama externo, los buenos resultados del
crecimiento interno, de las ventas externas, de la inversión extranjera y de la
confianza de los consumidores e inversionistas muestran que el contagio de la
situación internacional a la economía colombiana no se ha producido.
2.
DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
La Junta Directiva expresó por unanimidad la conveniencia de
incrementar las tasas de interés de intervención.
8
La Junta consideró que en el frente externo debe tenerse en cuenta que:
(i) En Europa la crisis de deuda pública de algunos países de la región y las
dudas sobre la solvencia de ciertos bancos continúan afectando la confianza de
los hogares y de los empresarios. La recesión en Europa probablemente será
mayor a la anticipada meses atrás. (ii) Se espera que la economía de los
Estados Unidos en 2012 crezca a una tasa positiva pero algo inferior a la de su
potencial. (iii) Los precios internacionales de los productos básicos
permanecen en niveles altos y estimulan el ingreso nacional de los países
productores. (iv) El mayor riesgo de los pronósticos centrales de crecimiento
sigue siendo un ajuste desordenado en Europa. De materializarse dicho riesgo,
la economía mundial crecería considerablemente menos de lo esperado, los
precios internacionales de los bienes básicos podrían caer y la aversión global
al riesgo exacerbase, todo lo cual afectaría adversamente la economía
colombiana.
En el contexto interno debe tenerse en cuenta: (i) En Colombia, al
tercer trimestre de 2011 el PIB creció 7,7% anual, cifra históricamente alta y
superior a la esperada. El crecimiento anual de la demanda interna (9,4%) se
explicó por el fuerte aumento de la inversión y del consumo de los hogares.
(ii) La información más reciente sugiere que en el cuarto trimestre la
economía colombiana continuó mostrando un fuerte dinamismo. En el balance
externo tanto las exportaciones como las importaciones continuaron creciendo
a tasas altas en noviembre. Con todo ello, el equipo técnico estima un
crecimiento económico para 2011 superior a 5,5%. Para 2012 el intervalo de
pronóstico siguió entre 4% y 6%. (iii) El crédito bancario continuó
incrementando a tasas altas. El comportamiento del crédito de consumo
sugiere que los hogares están elevando significativamente su grado de
endeudamiento. Los índices de precios de la vivienda nueva y usada siguen en
niveles históricamente altos. (iv) El promedio de las medidas de inflación
básica volvió a subir y la mayoría de ellas supera el 3%. Las expectativas de
inflación aumentaron. (v) La confianza del consumidor sigue en niveles altos.
(vi) Los pronósticos sobre empleo prevén presiones crecientes en el mercado
laboral para el 2012. (vii) El impacto de la tasa de cambio sobre las
proyecciones de la inflación y el crecimiento. (viii) Los niveles de las distintas
tasas de interés, salvo las de tarjeta de crédito, se encuentran en valores
inferiores a los promedios de los últimos 15 años. (ix) El principal riesgo
sobre la inflación proviene de expansiones excesivas en la demanda o
aumentos en los costos superiores a los previstos, con efectos fuertes y
perdurables sobre las expectativas y la credibilidad de la política monetaria.
9
En un horizonte de tiempo más largo, un crecimiento excesivo del crédito y la
persistencia de tasas de interés real bajas podrían ser fuente de desequilibrios
financieros con consecuencias negativas sobre la sostenibilidad del
crecimiento económico.
Un miembro de la Junta consideró apropiado complementar el
incremento de la tasa con alguna medida macro-prudencial que tenga como
propósito acelerar la transmisión de la tasa de interés sobre la dinámica del
crédito de consumo.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
De acuerdo con la evaluación del balance actual de estos riesgos, los
cuales dan más peso a las condiciones internas de la economía, la Junta
Directiva decidió incrementar la tasa de interés de intervención del Banco de
la República en 25 puntos básicos.
La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo de la situación
internacional, del comportamiento y proyecciones de la inflación, el
crecimiento, el comportamiento de los mercados de activos y reitera que la
política monetaria dependerá de la nueva información disponible.
Bogotá DC, febrero 10 de 2012
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2012-02-01 | 1
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del
24 de Febrero de 2012
El 24 de febrero de 2012 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la
reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la
presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry,
el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva,
Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, Juan Pablo
Zárate y César Vallejo, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de
crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas
con la política monetaria.
A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha
reunión.
1. ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor en enero fue 3,54% (mensual de
0,73%), 19 puntos básicos (pb) menos que en diciembre.
La disminución de la inflación durante el mes fue el resultado de
menores presiones en las canastas de transables sin alimentos ni regulados, de
regulados y de alimentos. La canasta de no transables sin alimentos ni
regulados (3,6%) no presentó cambios frente a lo observado en diciembre de
2011.
En el caso particular de los precios de la canasta de transables sin
alimentos ni regulados, se observó una disminución de 8 pb frente al resultado
de diciembre (0,8%), interrumpiendo la tendencia al alza que se presentaba
desde septiembre de 2011. Este hecho puede sugerir que la apreciación del
peso desde enero de 2012 estaría teniendo algún efecto en esta variable.
2
Por su parte, la variación anual en los precios de los regulados pasó de
5,8% en diciembre a 5,2% en enero, una caída mayor que la esperada. Esto fue
posible gracias a que a comienzos de este año no se presentaron reajustes en
las tarifas de Transmilenio en Bogotá, a diferencia de lo que aconteció el año
pasado. Por el lado de servicios públicos, sin embargo, sí se presentaron
ajustes importantes en las tarifas de energía eléctrica y gas domiciliario que se
suman a las observadas en meses anteriores. En el caso del gas, desde hace un
tiempo se están presentando insuficiencias en la capacidad de transporte que
han dificultado la atención de la demanda en la Costa Caribe principalmente.
Respecto a los precios de los alimentos, la caída de enero en la
variación anual fue importante de 5,3% en diciembre a 4,9% en enero. La
normalización de la producción de varios productos
perecederos,
especialmente de la papa, permitió la caída en precios y la reducción de la
variación anual de este subgrupo. También se presentaron pocos ajustes en los
precios de productos como aceites y esto puede obedecer a la apreciación del
peso más que a movimientos en precios internacionales, los cuales no han
descendido. Gracias a ello, la variación anual del IPC de alimentos procesados
también disminuyó en este mes. Los anteriores cambios más que compensaron
una nueva subida en comidas fuera del hogar (de 5,6% en diciembre a 5,9% en
enero).
La variación anual de los precios de la canasta de no transables sin
alimentos ni regulados se mantuvo estable en 3,6%. Sin embargo, en el caso
de arriendos, su componente de más peso, en enero nuevamente se presentó un
aumento registrando una cifra de 3,5% en enero frente a 3,4% en diciembre.
Este rubro presenta una tendencia ascendente ininterrumpida que acumula
nueve meses.
Todos los indicadores de inflación básica se redujeron levemente
presentando una pausa en la tendencia ascendente que tenían desde hace cinco
meses. El promedio de los tres indicadores monitoreados por el Banco de la
República se situó en 3,3%, una disminución de 15 pb respecto al mes
anterior.
Pese a la caída de la inflación total al consumidor, las expectativas no se
modificaron sustancialmente. Las obtenidas de la encuesta mensual a
diciembre y a doce meses se mantuvieron en 3,6% en ambos casos. Aquellas
derivadas de los TES a diversos plazos permanecieron cerca de 4%.
3
Aunque hasta diciembre los ajustes salariales tendieron a ser
compatibles con la meta de inflación, el incremento del salario mínimo en
5,8% para 2012 aumenta los riesgos de que surjan presiones de costos
salariales. A esto se suma el hecho de que se espera un mercado laboral menos
holgado en 2012. El aumento en el precio de las comidas fuera del hogar y de
los servicios de salud para enero de este año por encima del registro del año
pasado, pueden ser síntomas de ambos fenómenos.
Por el contrario, los costos no salariales mostraron en enero un retroceso
si se tiene en cuenta la importante disminución de la variación anual del IPP a
3,7% frente a 5,5% en diciembre. Este indicador completa tres meses de
caídas, que en enero en particular, obedecieron a la apreciación del peso y a
las mejores condiciones de la oferta agrícola.
b. Crecimiento
La más reciente información indica que la demanda interna continuó
expandiéndose a un buen ritmo al finalizar el 2011 y tuvo un comienzo de año
dinámico.
El desempeño favorable del consumo de los hogares en el cuarto
trimestre del año pasado fue confirmado por la evolución de las importaciones
y del empleo en diciembre. En este mes las importaciones de bienes de
consumo en dólares crecieron 9,6% en términos anuales, una tasa alta aunque
menor que la de meses anteriores. Por su parte, el mercado laboral continuó
mostrando avances en materia de creación de puestos de trabajo y reducción
del desempleo, con lo cual el efecto sobre el consumo debe ser positivo. En
diciembre se observaron incrementos en el número de ocupados a nivel
nacional y en las 13 áreas metropolitanas. Si bien en este mes se registró un
ligero aumento en la tasa de desempleo de las 13 áreas metropolitanas, con la
poca información disponible es aún prematuro sugerir un quiebre en la
tendencia decreciente observada durante 2011.
La información a diciembre de las importaciones también permite
esperar buenos resultados para la inversión. En el último mes de 2011 las
importaciones de bienes de capital en dólares se expandieron en 36,6% con
respecto al mismo mes del año anterior y muy por encima de su promedio
desde 1994 (12,7%).
4
Por el lado de la oferta, se destacó el dato de la producción industrial
divulgado por la ANDI la cual creció 5,9% en 2011. Se espera igualmente que
otros sectores como el comercio, el transporte y la construcción hayan
continuado con un buen dinamismo a finales de 2011. Por ejemplo, la
encuesta regional del Banco de la República (que se aplica a empresarios de
varios sectores) registró para diciembre una percepción muy favorable sobre
los crecimientos de las ventas. Así mismo, la producción de cemento en
diciembre siguió creciendo, sugiriendo un buen comportamiento de la
construcción.
Las ventas externas en diciembre continuaron creciendo. El valor de las
exportaciones en dólares volvió a registrar un elevado incremento (43%
anual), explicado principalmente por las exportaciones de origen minero
(petróleo, carbón, ferroníquel y oro) que aumentaron 55,3% anual. Las ventas
externas de los principales bienes de procedencia agrícola (café, banano y
flores) se redujeron 8,3% anual, debido a la mala cosecha de café. El resto de
exportaciones se aceleró en diciembre y aumentó 43% anual.
Para el primer trimestre de 2012, la poca información disponible apunta
a un comportamiento de la producción similar al que se habría observado a
finales del año anterior. De acuerdo con Fedesarrollo, en enero de 2012 la
confianza de los hogares creció por tercer mes consecutivo ubicándose cerca
de los máximos históricos de la serie (desde 2001). Por su parte, las ventas de
automóviles crecieron a una tasa anual de 13% en enero lo que representó una
aceleración por segundo mes consecutivo y un nuevo récord de ventas para el
mes. De igual manera, la encuesta de Fenalco a enero muestra que la
percepción sobre las ventas de los comerciantes continuó siendo alta, en tanto
que las expectativas a seis meses son aún mejores.
Adicionalmente, los hogares en enero continuaron contando con una
tasa de interés real de consumo inferior al promedio desde 1998, por lo que se
espera que el consumo de los hogares continúe con una buena tendencia.
Con respecto a la inversión, es posible esperar un buen crecimiento,
aunque un poco menor al esperado para la segunda mitad de 2011. Lo anterior
se infiere de la evolución de la cartera comercial, que en el primer mes de
2012 aumentó a una tasa anual de 17,2% en moneda nacional y de 36,5% en
moneda extranjera. Así mismo, los empresarios siguieron contando con tasas
de interés reales menores a sus promedios desde 1998 a pesar del aumento del
último mes (40 pb).
5
Dado todo lo anterior, se mantiene el pronóstico de crecimiento para el
cuarto trimestre de 2011 en un rango entre 5% y 6,2%. Con esas estimaciones
sigue siendo factible que el crecimiento en 2011 se ubique en el intervalo de
pronóstico de 5,6% a 6%.
Para el primer trimestre de 2012 la escasa información apunta a un
crecimiento similar o levemente inferior al del cuarto trimestre de 2011.
c. Variables Financieras
El crédito total en moneda nacional (MN) y extranjera (ME) se
mantiene en altas tasas de crecimiento, con una leve moderación a partir de
julio de 2011. Todas las modalidades de crédito, tanto a los hogares como a
las empresas, continúan mostrando crecimientos muy superiores al de la
actividad económica. Esto se ha dado en un contexto de tasas reales de interés
históricamente bajas.
A enero, el crédito total (MN y ME) registró un incremento anual de
20,9%, inferior en 27 pb con respecto a diciembre y en 247 pb frente a julio.
Dinámica establecida por el comportamiento de la cartera comercial, cuyo
crecimiento se sitúo en 19,1%, tasa menor en 40 pb a la del mes anterior, con
lo cual acumula una reducción de 425 pb en los últimos seis meses. Por su
parte las carteras de consumo e hipotecaria observaron tasas de crecimiento
de 24,8% y 17,3%, respectivamente, niveles cercanos a sus promedios desde
julio de 2011 (25,1% y 17,2%).
En enero las tasas de interés real (descontando el IPC sin alimentos)
para créditos de consumo, hipotecario y comercial ordinario se situaron en
16,9%, 10,2% y 8,8% respectivamente, cifras inferiores a los promedios
observados desde el año 1998 (exceptuando la de crédito hipotecario cuyo
promedio es calculado desde mayo de 2002).
d. Contexto Externo
Los nuevos datos de actividad económica mundial muestran una
desaceleración de la demanda externa en línea con lo esperado como resultado
de dos factores importantes: de una parte, los elevados niveles de deuda
pública y, de otra el desapalancamiento bancario que está en proceso, lo cual
limita el acceso a crédito en las economías avanzadas, afectando la dinámica
6
del consumo y la inversión del sector privado. En este contexto, los
pronósticos para 2012 prevén un crecimiento económico negativo en Europa,
mientras que en Estados Unidos se podría registrar una tasa algo inferior a la
de su potencial. En los países emergentes también se presentaría un menor
ritmo de actividad económica como resultado del debilitamiento de la
demanda mundial. Por lo anterior, es probable que en el presente año el
crecimiento promedio de nuestros socios comerciales sea menor al observado
en 2011.
En el caso particular de Estados Unidos, el crecimiento del producto se
aceleró en el último trimestre del año, al pasar de 1,8 % (t/a) en septiembre a
2,8% (t/a) en diciembre. El mercado laboral sigue mejorando y la actividad
industrial continúa expandiéndose. No obstante, la desaceleración en las
exportaciones y el debilitamiento en el gasto de los hogares indicarían que la
economía aún no encuentra una senda de crecimiento sostenible. Para 2012 se
espera que el crecimiento económico de este país sea menor que el de su
promedio histórico.
Por su parte, en la Zona Euro el debilitamiento de la actividad real fue
generalizado y, con excepción de Francia, sus economías más grandes se
contrajeron en el último trimestre de 2011. En este período el producto se
contrajo 1,3% (t/a), comportamiento que incluso podría extenderse hasta el
primer semestre del 2012. Sin embargo, en lo corrido del presente año se han
observado algunas señales que sugieren que el deterioro no continuará
acentuándose y que estará en línea con lo previsto. En primer lugar, el
incremento en los apoyos de liquidez por parte del Banco Central Europeo
contribuyó a reducir las tasas de interés de la deuda pública de España e Italia.
La liquidez interbancaria y la percepción de riesgo también mejoraron. En el
caso de Alemania, los indicadores de confianza de empresarios y de
consumidores mostraron alguna recuperación en enero. Con respecto a Grecia,
el nuevo paquete de rescate fue aprobado por las autoridades económicas
europeas. Pese a todo lo anterior, la incertidumbre sobre la profundidad y la
duración de la recesión en Europa sigue siendo alta. El crédito continúa
restringido, las tasas de desempleo en algunos países de la región, ya de por sí
históricamente altas, han continuado aumentando. Además, persiste el riesgo
de que malos resultados de la actividad económica vuelvan a incrementar los
indicadores de riesgo y pongan en duda la estabilidad del Euro.
En Japón, en el cuarto trimestre de 2011 el PIB se redujo como
consecuencia de la caída de las exportaciones y las mayores importaciones de
7
energía. La desaceleración en la demanda mundial y la interrupción en la
cadena de suministros tailandesa, generada por las inundaciones de octubre,
parecerían estar afectando la recuperación de esta economía. Por otro lado, la
actividad real en las economías de Asia emergente, salvo en el caso de
Indonesia, continuó desacelerándose a un ritmo moderado, en respuesta al
menor dinamismo de la demanda mundial y a los ajustes de la política
monetaria de 2010 y comienzos de 2011.
En algunos países de América Latina, como Brasil, México, Perú y
Venezuela, los indicadores de actividad real mejoraron en los últimos meses
de 2011.
El menor dinamismo de la demanda mundial ha aliviado las presiones
inflacionarias tanto en los países desarrollados como en los emergentes. No
obstante, recientes choques de oferta, como las sequías en América del Sur y
México, al igual que el incremento en las tensiones geopolíticas, han
aumentado los precios de algunos alimentos y del petróleo.
En conclusión, los nuevos datos muestran una demanda global que se
desacelera en línea con lo estimado, y una inflación mundial que ha cedido.
Esta nueva información contribuirá a mantener las tasas de interés externas en
niveles bajos por un periodo largo de tiempo. Hasta el momento, el menor
ritmo de actividad económica de los socios comerciales de Colombia no se ha
visto reflejado en una disminución del valor de las exportaciones. Por el
contrario, las ventas externas industriales, excluyendo los bienes básicos de
origen minero y agrícola, se aceleraron. Adicionalmente, el incremento en el
precio del petróleo podría llevar a que los términos de intercambio se
mantengan en niveles altos, superiores al promedio estimado para el presente
año.
2.
DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
El grupo mayoritario de miembros consideró apropiado incrementar la
tasa de interés de política teniendo en cuenta los siguientes factores:
(i) Información reciente indica que en el cuarto trimestre de 2011 la
economía colombiana continuó mostrando un fuerte dinamismo y que este
comportamiento se ha mantenido en lo corrido del año, tal como lo reflejan las
exportaciones, las importaciones de bienes de capital, las ventas al por menor,
entre otros. (ii) La brecha del producto probablemente se encuentra aún en
8
terreno positivo. (iii) El índice de confianza de la industria mantiene niveles
elevados, mientras que la confianza de los consumidores continúa una
tendencia ascendente de varios meses y muestra uno de los niveles históricos
más altos. (iv) Algo similar ocurre con los términos de intercambio (en buena
medida alimentados por el precio del petróleo), los cuales alcanzan también
registros sin precedentes. (v) Si bien la inflación ha mostrado recientemente
un comportamiento más en correspondencia con la meta de largo plazo, y las
mediciones de inflación básica descendieron en enero por primera vez en
varios meses, ni las proyecciones ni las expectativas de inflación muestran aún
una clara convergencia al punto medio del rango meta en el horizonte de
política. (vi) La incertidumbre sobre la evolución futura de la tasa de cambio
dificulta estimar su impacto sobre los registros de inflación en el futuro. (vii)
Si bien la transmisión de anteriores ajustes de la tasa de interés de política a
las de mercado ha sido adecuada, la leve desaceleración reciente de la cartera
de crédito no necesariamente elimina los riesgos de un peligroso episodio de
auge, en especial en el crédito de consumo. (viii) Los puntos anteriores hacen
necesario asegurar que las tasas de interés de mercado continúen su
movimiento hacia unos niveles de largo plazo que permitan suavizar tanto la
dinámica del crédito como la del PIB y evitar así riesgos de inestabilidad
financiera con altos costos en términos de producción y empleo. (ix) Si bien se
mantienen los riesgos de un eventual ajuste desordenado de la situación de la
zona euro, medidas adoptadas recientemente en dicha región permiten dar un
mayor peso en la decisión de política a las condiciones locales de la economía
colombiana, marcadas por los factores que han mostrado hasta el momento
poco contagio de la situación de las economías avanzadas.
Otros miembros no consideraron apropiado incrementar en esta
oportunidad la tasa de interés de intervención por las siguientes razones:
(i) El cambio de postura de la Junta para reducir el estimulo monetario
iniciado a partir de febrero de 2011 ha tenido los efectos esperados; dichos
efectos se extenderán, debido a su rezago natural, a lo largo del resto de este
año y del próximo, por lo que ajustes adicionales de la tasa de interés de
intervención podrían resultar extemporáneos. (ii) En diciembre de 2011 la
inflación anual de Colombia (3,73%), aunque se situó en la parte superior del
rango meta, fue la más baja entre las principales economías de la región. En
enero de 2012 la inflación terminó en 3,54%, totalizando tres meses
consecutivos de caída. Todos los indicadores de inflación básica cayeron por
primera vez en cinco meses. La inflación sin alimentos cayó 13 pb hasta
situarse en 3%. La inflación de no transables sin alimentos ni regulados se
9
mantuvo sin variación. Hay evidencia de menores presiones en los costos no
salariales, dado que en enero continuaron su caída iniciada hace tres meses.
(iii) Se estima que la participación de la inversión en el PIB, en 2011, pudo
haber alcanzado el record histórico del 30%, lo cual permite inferir que el PIB
potencial igualmente se ha expandido por encima de su tendencia histórica y
es coherente con la actual dinámica de la economía. (iv) La demanda global
continúa desacelerándose. Europa entró en recesión; la lenta recuperación de
Estados Unidos mantiene a su economía por debajo de su PIB potencial. La
inflación mundial sigue descendiendo. Los dos factores anteriores han llevado
a la adopción generalizada de políticas monetarias laxas, caracterizadas por
tasas de interés históricamente muy bajas y durante períodos prologados. (v)
Factores geopolíticos han comenzado a provocar notorias alzas en los precios
del petróleo, que podrían llegar a afectar en sentido negativo el
comportamiento de la economía norteamericana, y provocar una secuela
recesiva adicional sobre el resto del mundo.
Finalmente, un codirector propuso la aplicación de medidas macro
prudenciales para acelerar la transmisión de la política monetaria a la
demanda.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
De acuerdo con la evaluación presente del balance de estos riesgos, la
Junta Directiva decidió incrementar la tasa de interés de intervención del
Banco de la República en 25 puntos básicos.
Con los recientes incrementos en la tasa de interés de intervención se
espera que las tasas de mercado se aproximen más rápidamente a sus niveles
históricos promedio y que las expectativas de inflación converjan hacia el
punto medio del rango meta.
La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo de la situación
internacional, del comportamiento y proyecciones de la inflación, el
crecimiento, el comportamiento de los mercados de activos y reitera que la
política monetaria dependerá de la nueva información disponible.
Bogotá DC, marzo 09 de 2012
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2012-03-01 |
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Minutas de la reunión de la JDBR del 23 de marzo de 2012
El 23 de Marzo de 2012 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la
Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito
Público, Juan Carlos Echeverry, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación
exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, Juan Pablo Zárate y César
Vallejo, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus
perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria.
A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión.
1. ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación
En febrero la inflación anual al consumidor fue 3,55%, similar al registro del mes anterior y por
debajo del dato de diciembre. En términos de variaciones mensuales, el resultado fue 0,61%, en
línea con lo previsto por el equipo técnico inferior a las proyecciones del mercado en promedio
(0,78%).
La caída de la inflación anual durante este mes fue explicada principalmente por una nueva
reducción de la variación anual del IPC de alimentos, que pasó de 4,9% en enero a 4,7% en febrero.
Por su parte, dentro del IPC sin alimentos (3,1%) se observó un aumento de 10 puntos básicos (pb)
frente al registro de enero.
Dentro de la canasta de alimentos se dieron descensos en las variaciones anuales en todas las
categorías influenciados por condiciones favorables de oferta y por la apreciación del tipo de
cambio. En comidas fuera del hogar, pese a las disminuciones, los ajustes anuales (del 5,7%)
siguen siendo altos y superiores a los del año pasado.
En el IPC sin alimentos, las presiones alcistas continuaron concentradas en los precios de los
servicios regulados. La variación anual de los precios de esta canasta aumentó 31 pb frente al
anterior registro. Por una parte, el precio de la gasolina se ajustó a una tasa anual en febrero de 5,7%
que podría estar asociada en parte a los altos precios internacionales de los combustibles. De igual
manera, continuaron las alzas en las tarifas de energía que se ajustaron a una tasa anual de 8,9% en
este último mes. En el IPC de gas domiciliario, aunque en febrero hubo una reducción frente a
enero, los aumentos acumulados de los meses anteriores todavía mantienen la variación anual por
encima del 17%.
El IPC de transables y no transables sin alimentos ni regulados no se presentaron cambios de
importancia en el último mes. En el primer caso la variación anual se mantuvo en 0,7%, un poco
por debajo de la de diciembre. El freno en la tendencia ascendente de este indicador en los últimos
dos meses puede ser atribuido en parte a la apreciación del tipo de cambio. Respecto a los no
transables, la variación anual fue 3,70% frente a 3,64% el mes anterior. En este caso, se mantiene
una tendencia ascendente muy gradual que está de acuerdo con el dinamismo de la demanda
interna. Los arriendos han seguido acelerándose y al último mes su variación anual es de 3,5%. En
servicios de educación el reajuste en las matrículas de febrero superó el 4,5%, por encima de lo
esperado. Estos dos grupos fueron parcialmente compensados por caídas en los servicios de
diversión cultura y esparcimiento y por leves alzas relativas en los servicios financieros.
Los indicadores de inflación básica tampoco presentaron cambios de importancia en el último mes.
El promedio de los tres indicadores monitoreados por el Banco de la República se situó en 3,27%
similar a 3,26% observado en enero. Esta cifra es inferior a la de diciembre del año pasado.
Así las cosas, en lo corrido del año la demanda estaría ejerciendo algunas presiones alcistas junto
con los precios de los combustibles.
Las expectativas de inflación disminuyeron en el último mes. Según la encuesta mensual a
operadores de mercado, la inflación total esperada a diciembre y a febrero de 2013 estaría en 3,5%
aproximadamente, 10 pb menos que hace un mes. La reducción fue un poco mayor (alrededor de 30
pb) en el caso de las obtenidas a partir de las tasas de los TES. Estas últimas se situaron en 3,4% a
diferentes horizontes.
b. Crecimiento
De acuerdo con el DANE, en el cuarto trimestre de 2011 el PIB colombiano creció 6,1% en
términos anuales. Esto, junto con las leves revisiones en los datos de los otros trimestres del año,
implicó un crecimiento para todo 2011 de 5,9%.
La expansión de la economía el año pasado estuvo marcada por un favorable desempeño de la
demanda interna. Este agregado creció 8,8% lo que significó una aceleración de algo más de 3
puntos porcentuales con respecto a la tasa que se observó en 2010 y es similar a la registrada en
2006 y 2007, ambos periodos de auge económico. A pesar de registrar una desaceleración, la
demanda interna tuvo un importante dinamismo con un crecimiento anual de 7,9% frente al 9,8%
del tercer trimestre.
El consumo de los hogares fue el componente de la demanda que más contribuyó a la expansión del
PIB. En todo 2011 fue 6,5%, mayor al registrado en 2010, impulsado principalmente por la
adquisición de bienes durables y semidurables cuyos crecimientos fueron 20% en promedio en el
año. Los bienes no durables y los servicios mostraron un desempeño relativamente menor (con
crecimientos cercanos al 5%) pero de todas formas superiores a su promedio desde 2000. Durante el
cuarto trimestre, el consumo privado (6,1%) mostró un comportamiento similar al del resto del año.
Respecto al consumo del Gobierno la expansión fue 3%.
El segundo componente en orden de contribución al crecimiento fue la inversión en capital fijo la
cual aumentó 16,6%, la segunda mayor tasa desde 2000 sólo superada por aquella de 2006. El gasto
en bienes de capital mostró una leve desaceleración en el cuarto trimestre del año, explicada en
buena medida por una alta base de comparación, y, al igual que durante todo el año, recibió un gran
impulso de las compras de equipo de transporte y de maquinaria y equipo. La inversión en
construcción de edificaciones y de obras civiles superó el 6%. Mientras en el primer semestre cayó
4,4% en el segundo mostró un crecimiento de 13,3%.
En 2011 se registraron tasas de crecimiento récord para las importaciones y para las exportaciones.
Con respecto al primer agregado, el año pasado su expansión fue de 21,5% impulsada, en su orden,
por las compras de bienes de capital, de materias primas y de bienes de consumo. De igual forma,
las ventas externas mostraron un dinamismo importante al crecer 11,4%, sobre todo gracias al
comportamiento de las exportaciones tradicionales (café, petróleo y derivados, carbón y
ferroníquel). Las ventas del resto de productos también presentaron un comportamiento
satisfactorio. En el cuarto trimestre, se observó una aceleración de las exportaciones totales (15,8%)
frente a los tres trimestres anteriores del año.
Por el lado de la oferta se destacó el buen desempeño a lo largo de todo 2011 de los sectores de
minería y transporte y telecomunicaciones. El primero estuvo impulsado tanto por la expansión de
la producción petrolera como por el importante aumento que tuvo la de carbón en el segundo
semestre del año. En el segundo caso, los buenos resultados obedecieron al notable desempeño del
transporte aéreo y del sector de telecomunicaciones. Otros sectores con crecimientos dinámicos
fueron el comercio, la construcción y los servicios financieros, mientras que la rama de actividad
con desempeño más débil en todo el año fue la de electricidad, gas y agua, aunque presentó un
crecimiento positivo. En la rama de actividad agropecuaria se observó en el último trimestre de
2011, una caída de la producción de -2%, lo que implicó un crecimiento en todo el año de 2,2%,
siendo así el sector con la segunda menor tasa de expansión en 2011. En el caso de la industria, el
crecimiento en el año completo fue 3,9%.
Con respecto a la situación económica para el primer trimestre de 2012, la información disponible
permite prever un buen desempeño. El consumo de los hogares sigue favorecido por la confianza de
los consumidores medida por Fedesarrollo que continúa en niveles relativamente altos, pese a la
disminución observada en febrero. El crecimiento anual del crédito a los hogares en febrero (25%
para el crédito de consumo y 17% para el hipotecario) sugiere un buen dinamismo para el consumo
privado. La evolución del mercado laboral también indicaría que el consumo podría mantener el
dinamismo pues la tasa de desempleo (TD) registrada en enero de 2012 fue la menor de la década
reciente con respecto a aquellas registradas para el mismo mes. Esta cifra confirma la tendencia
decreciente que se ha observado en la TD desde mediados del año pasado.
A lo anterior se suma una expansión de las ventas al por menor de 4,9% en enero que aunque menor
que la del año pasado, es cercana al crecimiento promedio (6%) desde 2000. Por su parte, según el
Comité Automotor Colombiano, en febrero las ventas de vehículos crecieron 7,2% anual.
En enero el valor de las exportaciones en dólares registró un incremento de 24% anual, hecho
explicado principalmente por las exportaciones de origen minero energético (29,9% anual); e
industriales (14,9% anual), en tanto que las ventas externas de los principales bienes de procedencia
agrícola se redujeron 19,2% anual, debido a la caída de las exportaciones de café y banano.
Por el lado de la oferta, algunos indicadores sugieren un buen dinamismo para el comienzo de 2012.
Por un lado, en febrero la demanda de energía total aumentó 6,3% anualmente, una tasa alta que no
se registraba desde 2010 que puede ser explicada en parte por una baja base de comparación el año
pasado atribuida al mantenimiento de Cerro Matoso. Por otra parte, en enero las importaciones de
materias primas se aceleraron fuertemente (a 19%) compensando la caída del mes anterior y
sugiriendo que los empresarios de diferentes sectores esperan un aumento de la producción.
Finalmente, en la industria, la encuesta de opinión empresarial de Fedesarrollo con datos a enero
continuó mostrando niveles de pedidos altos y expectativas de aumento de la producción
importantes. Sin embargo, las cifras de producción industrial dadas a conocer por el DANE para
este último mes arrojaron una tasa de 2,4%, igual al registro de diciembre e inferior al promedio
observado en 2011 (4,8%).
c. Variables Financieras
El crédito total (MN y ME) registró en febrero un incremento anual de 20,4%, inferior en 46 pb al
de enero y 292 pb al de julio de 2011. El comportamiento es dominado por la cartera comercial,
cuyo crecimiento se sitúo en 18,8%, tasa 30 pb menor a la del mes anterior y que suma una
desaceleración en los últimos siete meses de 455 pb. En tanto la dinámica de las carteras de
consumo e hipotecaria se ha estabilizado, con variaciones anuales a febrero de 24,7% y 17,4%,
respectivamente, tasas de crecimiento alrededor de los promedios observados desde julio de 2011
(25,1% y 17,3%).
Por su parte, las tasas de interés real (descontando el IPC sin alimentos) en febrero para créditos de
consumo, hipotecario y comercial ordinario, en su orden, se ubicaron en 15,8%, 10,1% y 8,7%,
tasas menores a sus promedios respectivos calculados desde 1998 (excluyendo la de crédito
hipotecario cuyo promedio se mide a partir de mayo 2002).
d. Contexto Externo
Los nuevos datos de actividad económica mundial muestran una demanda externa débil pero algo
mejor a lo proyectado a finales del año pasado. Pese a ello, el crecimiento promedio de los socios
comerciales de Colombia en el presente año seguiría siendo menor al observado en 2011.
En Europa, las últimas medidas tomadas por sus autoridades frente al problema de la deuda pública
en los países de la periferia han restablecido parcialmente la confianza de los mercados financieros
internacionales y han disminuido la probabilidad de que la crisis financiera en la región se
profundice aún más. Los resultados de las dos economías más grandes de la zona del euro, Alemana
y Francia han sido más favorables y ello podría indicar que la recesión que se proyecta en dicha
zona sea más leve de lo inicialmente esperado. De igual forma, en las últimas semanas las
autoridades europeas aprobaron un nuevo plan de rescate para Grecia, situación que estuvo seguida
por un recorte voluntario de los títulos de deuda pública por parte del sector privado. Los apoyos
masivos de liquidez por parte del Banco Central Europeo a la banca comercial de la región han
permitido aliviar las necesidades de liquidez de corto plazo de los bancos y han apoyado las
emisiones de deuda pública de España e Italia, países cuyas primas de riesgo se han reducido en los
últimos meses. De todos modos, aún no se ha observado un incremento en el otorgamiento de
crédito, ya que los bancos comerciales se mantienen renuentes a entregar recursos al sector privado.
En Estados Unidos, la nueva información mejor a la esperada, llevo a que la mayoría de analistas
incrementara el pronóstico de crecimiento para 2012 de ese país, aunque a una tasa todavía inferior
a la de su potencial. La economía continuó recuperándose a un ritmo mejor que el esperado,
apoyada en el mayor dinamismo del sector manufacturero y en un mejor comportamiento del
mercado laboral. Pese a las señales positivas recientes, existen riesgos que podrían afectar
negativamente este dinamismo en los próximos meses como es la posibilidad de que el aumento
reciente en los precios del petróleo se prolongue. En Japón, a pesar de la desaceleración de las
exportaciones a finales de 2011, la producción industrial a enero del presente año mostró señales de
recuperación.
En cuanto a las economías emergentes, en el último trimestre de 2011 los crecimientos observados
fueron cercanos a los de largo plazo y es probable que en 2012 este comportamiento se mantenga.
La información disponible apunta a una desaceleración moderada que estaría en línea con lo
previsto. En China, por ejemplo, el Gobierno decidió disminuir la meta de crecimiento para 2012 de
8% a 7,5%. En América Latina, los datos del cuarto trimestre ratificaron una disminución en el
ritmo de crecimiento económico. Sin embargo, el incremento en el precio de las materias primas, el
dinamismo de la demanda interna y el mejor comportamiento de la economía mundial sugieren
que esta tendencia no se profundizaría. Por otra parte, en el último mes disminuyeron levemente las
primas de riesgo soberano en esta región y sus monedas se fortalecieron. Si estos niveles de riesgo y
la abundante liquidez mundial se mantienen, los flujos de capitales podrían continuar hacia las
economías de la región y las monedas se fortalecerían aún más.
En cuanto a los precios de los bienes básicos, las tensiones en Oriente Medio y el Norte de África
han contribuido al incremento de los precios internacionales del petróleo, los cuales han superado
los niveles máximos de 2011. El precio de otros productos básicos como el trigo, el maíz y la soya,
entre otros, también han aumentado en los primeros meses del año, debido principalmente a factores
climáticos.
En conclusión, la más reciente información indica que la demanda mundial sigue débil, aunque algo
menos que lo esperado. Sin embargo, los altos precios del petróleo y otros bienes básicos
observados en las últimas semanas podrían afectar negativamente las perspectivas de recuperación
de las economías desarrolladas. A pesar de los riesgos inflacionarios por cuenta del incremento de
los precios de los bienes básicos, se espera que los bancos centrales del mundo continúen con una
política monetaria holgada para impulsar el crecimiento económico.
Hasta el momento, los distintos canales por los cuales la crisis en Europa y el menor crecimiento
mundial podrían transmitirse a Colombia siguen sin mostrar evidencia de contagio. En materia de
confianza, los últimos indicadores para la industria y los consumidores siguen en niveles elevados.
Respecto al canal comercial, las exportaciones a enero siguieron creciendo a buen ritmo,
especialmente las de origen minero. Por otra parte, los últimos datos de la balanza cambiaria
reflejan una inversión extranjera directa que sigue dinámica, especialmente la destinada a la
minería.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
La Junta Directiva por unanimidad consideró apropiado mantener inalterada la tasa de interés de
política teniendo en cuenta los siguientes factores:
(i) En febrero la inflación anual (3,55%) se mantuvo estable con respecto al mes anterior y ha
venido descendiendo desde octubre del año pasado. El promedio de las medidas de inflación básica
continuó cerca del 3%. Lo anterior y las recientes acciones de política monetaria contribuyeron para
que las expectativas de inflación disminuyeran. Es de esperar que estas últimas sigan convergiendo
hacia el punto medio del rango meta; (ii) El crecimiento económico del cuarto trimestre de 2011
(6,1%) al igual que el de todo el año (5,9%) ratifican el crecimiento robusto de la economía. La
dinámica de la demanda interna, que había presentado una tendencia creciente trimestre a trimestre,
se desaceleró a final de año y registró una tasa de 7,9%, igual a la observada a comienzo de 2011. El
alto rimo de crecimiento del gasto agregado desde hace varios trimestres ha llevado a que la
demanda esté copando la capacidad instalada en varios sectores de la economía; (iii) La reciente
desaceleración del crecimiento de la industria manufacturera y algunos otros datos conocidos en el
primer trimestre de 2012 sugieren que el crecimiento en dicho periodo puede ser menor que el
registrado a final de 2011. La nueva información permitirá establecer con mayor certeza si la
dinámica de la demanda interna es coherente con el crecimiento sostenible de la economía y el
cumplimiento de la meta de inflación; (iv) El crecimiento del crédito permanece alto, especialmente
el de consumo. Ello indica que los hogares han elevado significativamente su grado de
endeudamiento; (v) Las tasas de interés nominales y reales de crédito, si bien han subido en los
últimos 12 meses, siguen en niveles inferiores a sus promedios calculados desde el 2000,
exceptuando las de tarjetas de crédito; (vi) En el contexto externo, los pronósticos para 2012
sugieren un crecimiento económico negativo en Europa, mientras que en Estados Unidos se podría
registrar una tasa algo inferior a la de su potencial. Los países emergentes podrían crecer a un
menor ritmo pero a una tasa cercana a la del largo plazo. Por lo anterior, es probable que en el
presente año el crecimiento promedio de nuestros socios comerciales sea menor al observado en
2011; (vii) El precio internacional del petróleo siguió aumentando y las cotizaciones de los otros
productos básicos que exporta Colombia se mantienen en niveles elevados. En consecuencia, los
términos de intercambio están históricamente altos y estimulan el crecimiento del ingreso nacional.
Por su parte, la apreciación del peso puede estar afectando el comportamiento de algunos sectores
transables; (viii) El riesgo de una fuerte recesión en Europa con impactos negativos y significativos
sobre la actividad económica de Colombia continúa, pero su probabilidad de ocurrencia ha
disminuido en las últimas semanas; (ix) Los riesgos sobre la inflación, provenientes de las
expectativas, se han moderado. Los que pueden surgir del comportamiento de la demanda o el
crédito siguen vigentes.
Unos codirectores señalaron que, con la información disponible en el momento, y aún teniendo en
cuenta la tendencia reciente de la inflación, las presiones inflacionarias continúan teniendo peso en
el balance de riesgos lo cual podría requerir ajustes adicionales en la política monetaria.
Otros consideraron que ya se habría alcanzado el rango neutral de la tasa de intervención del Banco,
y dado el rezago existente en los movimientos de tasas de interés y sus efectos plenos sobre la
demanda, estimaron que en el futuro próximo las presiones inflacionarias subsistentes estarían
controladas con las medidas ya tomadas.
Finalmente, un codirector reiteró la necesidad de establecer, como complemento de los
movimientos ya adelantados de la tasa de intervención del Banco de la República un encaje al
crédito de consumo.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
De acuerdo con la evaluación presente del balance de estos riesgos, la Junta Directiva decidió
mantener inalterada la tasa de interés de intervención del Banco de la República. La nueva
información permitirá establecer nuevas acciones de política monetaria a seguir.
La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo de la situación internacional, del
comportamiento y proyecciones de la inflación, el crecimiento, el comportamiento de los mercados
de activos y reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible.
Bogotá, D. C.
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2012-04-01 |
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Minutas de la reunión de la JDBR del 30 de abril de 2012
El 30 de Abril de 2012 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta
Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público,
Juan Carlos Echeverry, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación
exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, Juan Pablo Zárate y César
Vallejo, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus
perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria.
A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión.
1. ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor en marzo se situó en 3,4%, 15 puntos base (pb) por debajo del
dato del mes anterior. La caída de la inflación anual al consumidor fue explicada por el descenso en
la variación anual de alimentos, por el menor registro en la variación de precios de la canasta de
regulados y de la canasta de transables sin alimentos ni regulados.
En alimentos la variación fue de 4,56%, 14 pb menos que el registro de febrero. Se presentaron
caídas tanto en las variaciones anuales de los perecederos como de los procesados. Por el contrario,
en el grupo de comidas fuera del hogar, la variación anual se siguió acelerando y alcanzó en marzo
5,87% (22 pb más que en febrero).
El IPC sin alimentos, mostró un descenso de 3,10% en febrero a 2,95% en marzo, que se explica
por la desaceleración de los ajustes en precios de las canastas de regulados y de transables y a que
los de la canasta de no transables permanecieron relativamente estables.
La variación anual del IPC de regulados presentó una reducción significativa en el último mes (de
5,6% a 4,9%), debido sobre todo a una alta base de comparación en marzo del año pasado. Dentro
de esta canasta, se mantuvieron los incrementos por encima del promedio del IPC en tarifas de gas,
combustibles y servicios de transporte urbano. <7p>
Respecto a la variación anual de transables sin alimentos ni regulados, el registro en marzo de
0,68% fue 5 pb menor que en febrero. La leve caída puede estar asociada a la apreciación del tipo
de cambio observada desde comienzos del año.
Por su parte, los no transables sin alimentos ni regulados se mantuvieron en 3,7%. Esta tasa anual
que ha venido ascendiendo lentamente, es reflejo del hecho de que la brecha del producto se estima
en niveles positivos.
Los indicadores de inflación básica disminuyeron en el último mes aunque de manera muy leve. El
promedio de los tres indicadores monitoreados por el Banco estuvo en 3,23% (4 pb por debajo del
mes anterior).
A la par con el descenso de la inflación al consumidor, en el último mes se dio nuevamente una
disminución de la variación anual del IPP a 1,5%, desde 2,6% en febrero. Una parte importante de
la disminución puede seguir siendo atribuida a la apreciación del peso, como lo sugiere la caída más
fuerte del IPP importado, cuya variación anual en marzo se situó en -2,1%.
Las expectativas de inflación a diferentes horizontes volvieron a disminuir en marzo. Las obtenidas
con la encuesta mensual a operadores de mercado se situaron en 3,27% para diciembre de este año y
en 3,45% para marzo de 2013. En el caso de la encuesta trimestral a empresarios, sindicatos y
expertos, los resultados fueron 3,54% y 3,49% respectivamente. Las expectativas derivadas de los
TES horizontes de 2, 3 y 5 años convergieron hacia 3%.
b. Crecimiento
La información disponible para el primer trimestre de 2012 apunta a que el consumo privado podría
haber mantenido una dinámica similar a la observada a final del año pasado. Por una parte, las
ventas minoristas (medidas por el DANE) crecieron en el primer bimestre a una tasa anual de 7%
frente a 5% anual en el cuarto trimestre del año pasado mientras que las ventas sin vehículos
mostraron un crecimiento anual a febrero de 10,7%. Por otra parte, las importaciones de bienes de
consumo crecieron alrededor de 23% en los dos primeros meses del año, frente a 15% del cuarto
trimestre. De la misma manera, los comerciantes consultados por Fenalco volvieron a señalar en
marzo una percepción favorable de la situación actual de sus ventas. De otro lado, la cartera de
consumo continuó expandiéndose a tasas reales cercanas al 20% en términos anuales. Finalmente,
disminuyó la tasa de desempleo observada en los primeros tres meses del año. Los buenos
desempeños reseñados para los diferentes indicadores asociados al consumo se confirman con el
nivel alto que mantiene la confianza de los consumidores medida por Fedesarrollo. Pese a caídas del
indicador en febrero y marzo, los niveles siguen siendo relativamente altos.
Respecto a la inversión, es posible prever una desaceleración en el crecimiento anual en el primer
trimestre de 2012 al tener en cuenta que las importaciones en dólares de bienes de capital, pasaron
de crecer a un promedio de 39% en el último trimestre de 2011 a 16,5% en promedio entre enero y
febrero de este año. De la misma manera, el crecimiento de la producción nacional de este tipo de
bienes no mostró mayor variación con respecto a lo observado a finales del año pasado.
Las exportaciones colombianas registraron en febrero un valor de US$4.836 millones y crecieron
22,5% anual, tasa inferior al promedio de los últimos seis meses (42%). El crecimiento de las
exportaciones de este mes, se debió principalmente a incrementos de las ventas de productos
básicos de origen minero (33% anual). Las exportaciones agrícolas se redujeron 23% en febrero de
2012, comportamiento que se explica por una caída en las ventas de café y flores de 29% y 17%
respectivamente. Las exportaciones sin productos básicos crecieron anualmente 13%.
Por ramas de actividad, se destaca que las producciones de café y petróleo fueron afectadas por
choques de oferta transitorios que repercutirán en menores ritmos de expansión de los sectores
agrícola y minero en el primer trimestre del año. La producción trimestral de café cayó al nivel más
bajo de los últimos 40 años mientras que la de petróleo retrocedió en términos trimestrales por
primera vez desde 2003. Para la industria, el crecimiento anual de la producción en febrero
divulgada por el DANE (4,5%) confirma la evolución que ha venido mostrando el sector durante los
últimos trimestres con una expansión lenta y menor que la de la economía en su conjunto. El nivel
satisfactorio que presentan los indicadores de pedidos y existencias de Fedesarrollo a febrero
permite prever una tendencia similar para marzo y abril. En resumen, la estimación de crecimiento
del PIB para el primer trimestre de 2012 indicaría una desaceleración frente al cuarto trimestre del
año pasado en términos anuales. Esta situación se explica por un menor ritmo de inversión y de
exportaciones. En el consumo privado sin embargo, la información disponible sugiere un buen
comportamiento durante los primeros meses del año.
Para todo 2012 los modelos no sugieren cambios con respecto a los pronósticos que se tenían un
trimestre atrás. Así las cosas, el PIB de todo el año crecería entre 4,0% y 6,0% con 5,0% como cifra
más probable.
c. Variables Financieras
El crédito total (MN y ME) registró en marzo un incremento anual de 19,7%, inferior en 73 pb al de
febrero y en 365 pb frente al de julio de 2011. El comportamiento es dominado por la cartera
comercial, cuyo crecimiento se sitúo en 17,5%, tasa 130 pb menor a la del mes anterior y que suma
una desaceleración en los últimos ocho meses de 585 pb. En tanto la dinámica de las carteras de
consumo e hipotecaria se ha estabilizado, con tasas de crecimiento anual cercano a los promedios
observados desde julio de 2011.
Por su parte, las tasas de interés real (descontando el IPC sin alimentos) en marzo para créditos de
consumo, hipotecario y comercial ordinario, en su orden, se ubicaron en 15,9%, 10,3% y 9,0%,
tasas menores a sus promedios respectivos calculados desde 1998 (excluyendo la de crédito
hipotecario cuyo promedio se mide a partir de mayo 2002).
d. Contexto Externo
Las perspectivas sobre el crecimiento global para 2012 han mejorado ligeramente respecto a lo que
se esperaba al principio del año, entre otras cosas gracias a la mejoría de las condiciones de liquidez
en Europa debido a las acciones tomadas por sus autoridades económicas y a que el contagio de la
recesión en ese grupo de países sobre el resto de economías del mundo ha sido limitado. Sin
embargo, los riesgos se mantienen en tanto que la situación europea no se ha solucionado del todo y
los precios del petróleo continúan en niveles altos.
En Europa la información para el primer trimestre de 2012 indica que la economía continúa en
recesión. Sin embargo, el deterioro en la actividad real ha sido modesto y dista de parecerse a lo
evidenciado en la crisis financiera internacional de 2008-2009 cuando el Producto Interno Bruto
(PIB) se contrajo 5,6%. Un escenario de una recesión moderada y de corta duración en Europa para
2012 se daría siempre y cuando las acciones de las autoridades europeas logren reactivar el crédito
y la demanda.
Por su parte, en Estados Unidos los indicadores de actividad real para el primer trimestre de 2012
muestran que la economía ha seguido expandiéndose a un ritmo moderado, pero un poco mejor que
el esperado, gracias al mayor dinamismo del consumo y de la actividad industrial. Pese a ello, las
cifras de marzo y abril ponen aún en duda la fortaleza de la recuperación puesto que el mercado
laboral sigue mostrando síntomas de debilidad y algunos índices de actividad real crecieron menos
de lo esperado. Adicionalmente, el mercado de vivienda permanece estancado y la información
reciente sobre ventas de viviendas nuevas y usadas no sugiere una pronta recuperación.
Respecto de las economías emergentes, se destaca que durante el primer trimestre de 2012 el PIB de
China se desaceleró según lo previsto, pasando de crecer 8,9% anual en el cuarto trimestre de 2011,
a 8,1%. Sin embargo, el dinamismo de la demanda interna continúa. En febrero, la producción
industrial y el índice de confianza en el sector manufacturero sorprendieron al alza.
Para el resto de las economías de Asia emergente se han visto algunos repuntes en la actividad
industrial y en las exportaciones asociados con la normalización de la cadena de suministros de
Tailandia y las mayores compras provenientes de China.
Las economías de América Latina han seguido creciendo a una tasa algo menor a la de su potencial.
La información disponible para el primer trimestre del año muestra que la producción industrial se
aceleró en varios países de la región, al igual que los índices de confianza. El aumento en los
precios del petróleo que se ha observado desde finales de 2011, estaría mejorando el ingreso
nacional de los países productores como Ecuador y Venezuela lo que tendría un efecto positivo
sobre el producto del primer trimestre.
En cuanto a los precios de los bienes que exporta Colombia, las cotizaciones del petróleo al igual
que otros productos agrícolas volvieron a aumentar. De esta forma, los términos de intercambio se
mantienen en niveles históricamente altos y estimulan el ingreso nacional. Para el resto del año,
podría darse alguna reducción en los términos de intercambio pero sus niveles seguirían siendo
elevados.
Los bancos centrales de las principales economías desarrolladas han mantenido una política
monetaria laxa. Las perspectivas actuales y los anuncios de las autoridades monetarias implicarían
que las tasas de interés de estos países continuarán bajas por un buen tiempo, mientras la inflación
doméstica lo permita. En relación con las economías emergentes, la mayoría de bancos centrales
han mantenido inalteradas sus tasas de intervención.
Las primas de riesgo de los países de América Latina han permanecido relativamente estables como
consecuencia del buen momento por el que pasa la región. Lo anterior ha reducido la fluctuación de
las tasas de cambio de estos países.
En resumen, en el contexto externo los pronósticos para 2012 sugieren un crecimiento económico
levemente negativo en Europa, mientras que en Estados Unidos se podría registrar un crecimiento
superior al previsto inicialmente, aunque inferior a su potencial. Los países emergentes podrían
crecer a un menor ritmo pero a una tasa cercana a la del largo plazo. Por lo anterior, es probable que
en el presente año el crecimiento promedio de nuestros socios comerciales sea menor al observado
en 2011 y con ello una demanda externa que continuaría débil.
Cabe señalar que los riesgos a un menor crecimiento siguen siendo importantes. Desde comienzos
de abril, la incertidumbre retornó a los mercados financieros internacionales como consecuencia del
incumplimiento de la meta fiscal española para 2011 y de las dudas sobre la recuperación actual de
su economía. A esto se suma el estancamiento que aún muestra el crédito en la región a pesar de las
acciones del Banco Central Europeo y el hecho de que los mercados de deuda pública de los demás
países de la periferia se están debilitando de nuevo.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
La Junta Directiva por unanimidad consideró apropiado mantener inalterada la tasa de interés de
política teniendo en cuenta los siguientes factores:
(i) En el contexto externo, los pronósticos para 2012 sugieren un crecimiento económico levemente
negativo en Europa, mientras que en Estados Unidos se podría registrar una tasa inferior a la de su
potencial. Los países emergentes podrían crecer a un menor ritmo pero a una tasa cercana a la del
largo plazo. Por lo anterior, es probable que en el presente año el crecimiento promedio de nuestros
socios comerciales sea menor al observado en 2011. (ii) El precio internacional del petróleo siguió
alto y las cotizaciones de los otros productos básicos que exporta Colombia se mantienen en niveles
elevados. En consecuencia, los términos de intercambio están históricamente altos y estimulan el
crecimiento del ingreso nacional. Por su parte, la apreciación del peso colombiano puede estar
afectando el comportamiento de algunos sectores transables. (iii) En Colombia, se espera que el
crecimiento económico en 2012 se sitúe entre el 4% y 6%. La principal fuente de este crecimiento
continuará siendo el dinamismo de la demanda privada, tanto del consumo de los hogares como de
la inversión. La información disponible a lo largo del año sugiere una moderación en el crecimiento
del consumo de los hogares y de la inversión, coherente con la proyección de crecimiento para todo
el año. (iv) El aumento de la cartera comercial se desaceleró, explicado por la menor dinámica de
los préstamos en moneda extranjera. El crecimiento del crédito a los hogares permanece alto,
especialmente el de consumo, lo que indica que los hogares han elevado significativamente su
grado de endeudamiento. Lo anterior se ha dado en un contexto de tasas reales de interés de créditos
ordinarios y de consumo (exceptuando tarjetas de crédito) que se encuentran por debajo de sus
promedios históricos. (v) En marzo la inflación anual (3,40%) se desaceleró a un ritmo mayor al
proyectado por el equipo técnico y por el mercado. El promedio de las medidas de inflación básica
continuó cerca del 3%. Las expectativas de inflación volvieron a descender y se espera que sigan
convergiendo hacia el punto medio del rango meta. (vi) El riesgo de una fuerte recesión en Europa
con impacto negativo significativo sobre la actividad económica de Colombia continúa, pero su
probabilidad de ocurrencia pareciera haber disminuido. (vii) Los riesgos sobre la inflación
provenientes de las expectativas se han moderado. Los que pueden surgir del comportamiento del
crédito de consumo, siguen vigentes.
Unos codirectores señalaron que, con la información disponible en el momento, y aún teniendo en
cuenta la tendencia reciente de la inflación, persisten riesgos al alza provenientes de un dinamismo
de la demanda interna mayor al esperado por cuenta de la inversión pública, el consumo y
reducción del desempleo.
Otros consideraron que ya se habría alcanzado el rango neutral de la tasa de intervención del Banco,
y dado el rezago existente entre los movimientos de tasas de interés y sus efectos plenos sobre la
demanda, estimaron que en el futuro próximo las presiones inflacionarias subsistentes estarían
controladas por las medidas ya tomadas.
Finalmente, los codirectores reiteraron la necesidad de continuar con un cuidadoso monitoreo al
crédito de consumo que exhibía a marzo una tasa de crecimiento real anual alrededor del 22%, casi
cuatro veces el crecimiento real del PIB de 2011. 3.
DECISIÓN DE POLÍTICA
De acuerdo con la evaluación presente del balance de estos riesgos, la Junta Directiva decidió
mantener inalterada la tasa de interés de intervención del Banco de la República. La nueva
información permitirá establecer nuevas acciones de política monetaria. La Junta seguirá haciendo
un cuidadoso monitoreo de la situación internacional, del comportamiento y proyecciones de la
inflación, el crecimiento, el comportamiento de los mercados de activos y reitera que la política
monetaria dependerá de la nueva información disponible.
Bogotá, D. C.
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2012-05-01 |
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Minutas de la reunión de la JDBR del 28 de mayo de 2012
El 28 de Mayo de 2012 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta
Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público,
Juan Carlos Echeverry, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación
exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, Juan Pablo Zárate y César
Vallejo, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus
perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria.
A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión.
1. Antecedentes
a. Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor en abril se situó en 3,43%, 3 puntos base (pb) por encima del dato
del mes anterior. Este resultado se explica en buena medida por un aumento de la variación anual
del IPC de alimentos, que pasó de 4,56% en marzo a 5,01% en abril.
En el IPC de alimentos, las alzas provinieron de las sub canastas de alimentos procesados (arroz
entre otros) y de las comidas fuera del hogar. En este último caso, la variación anual ya asciende a
5,9%, lo que probablemente obedece al fuerte crecimiento de la demanda interna. La variación
anual de perecederos por su parte, siguió disminuyendo, lo que sugiere que las condiciones de la
oferta agropecuaria han tendido a normalizarse.
Por su parte el IPC sin alimentos registró un leve caída es su variación anual explicada por una
desaceleración importante en la variación anual del IPC de regulados (desde 4,9% a 3,8%) que se
concentró en las tarifas de energía. Adicionalmente, el freno en el alza de la cotización internacional
del petróleo desde finales de febrero ha hecho posible ajustes menores en el precio interno de los
combustibles.
Respecto a la variación anual del precio de transables sin alimentos ni regulados, se presentó una
aceleración no anticipada (a 0,9% desde 0,7% en marzo) que está relacionada a un reajuste fuerte en
las tarifas de telefonía y a la menor apreciación del peso en abril frente a meses anteriores. Cabe
señalar que el peso dejó de apreciarse desde mediados de marzo y desde mediados de mayo se
devaluó. Por su parte, la variación anual del IPC de no transables sin alimentos ni regulados subió 6
pb en el mes, finalizando cerca al 3,8%. Los
arriendos continuaron acelerándose progresivamente, como viene sucediendo desde hace 12 meses,
y se situaron en 3,6%.
Los indicadores de inflación básica aumentaron después de dos meses de no presentar cambios de
importancia. El promedio de los tres indicadores monitoreados por el Banco de la República cerró
en 3,3%, 7 pb más que en el mes anterior.
En abril, la variación anual del IPP permaneció en 1,6%, con lo cual se consolidó la caída de meses
anteriores. En el caso del IPP de importados, la apreciación acumulada del peso mantuvo la
variación anual en terreno negativo, aunque en ascenso, mientras que el IPP local siguió
desacelerándose apoyado en un menor ritmo de ajuste de los precios agropecuarios.
Las expectativas de inflación derivadas de los TES a diferentes horizontes aumentaron levemente en
el último mes y se encuentran por encima del 3,0%. Las obtenidas a partir de la encuesta mensual
no presentaron cambios relevantes: la inflación esperada a diciembre es 3,3% y a doce meses es de
3,5%.
b. Crecimiento
Los indicadores más recientes sobre el comportamiento de la economía en el primer trimestre de
2012 muestran señales mixtas. Por un lado, el consumo de los hogares se habría acelerado con
respecto al registro de finales del año pasado, mientras que por otro lado, la industria creció muy
poco en el período.
El buen comportamiento previsto para el consumo privado en el primer trimestre se fundamenta en
la dinámica de las ventas del comercio con un crecimiento de 5,1% (según el DANE), que
continúan mostrando una tendencia ascendente. Adicionalmente, en marzo las importaciones en
dólares de bienes de consumo crecieron 10,3% impulsadas principalmente por las de bienes no
durables. De igual manera, el consumo privado se habría favorecido por las buenas condiciones en
el mercado laboral, pues la tasa de desempleo siguió disminuyendo y el empleo total y asalariado
presentan tasas de crecimiento anual positivas relativamente altas (alrededor del 5%).
Respecto a los indicadores de oferta a las caídas en la producción de petróleo y café de los meses
anteriores, se suma el comportamiento bastante modesto del sector manufacturero, el cual se
contrajo 0,9% en términos anuales en marzo. Con este registro, la producción de la industria creció
1,7% anualmente en el primer trimestre, la cifra más baja para todo un trimestre desde 2009. Buena
parte de la caída de la producción industrial en marzo se debió a los fuertes retrocesos de los
subsectores de refinación de petróleo y otros químicos que pesan el 19% del total. Al analizar la
producción por subsectores, cerca de la mitad de ellos se encuentran estancados o inclusive cayendo
tendencialmente.
En la construcción, la producción de cemento retrocedió en el primer trimestre frente al trimestre
anterior, aunque aún señala crecimientos anuales importantes (del orden del 8%). Además, el área
aprobada según las licencias de construcción registró una fuerte contracción anual en el primer
trimestre (18%). Si bien esta caída se debe a que se está comparando el actual registro con los
niveles altos del año pasado, se nota también cierto estancamiento en el indicador.
En cuanto a las exportaciones colombianas, en marzo crecieron 16,1% anual (en dólares). Dicho
comportamiento se explica por el incremento de las ventas externas de bienes básicos de origen
minero, principalmente las mayores ventas de petróleo crudo y de carbón. Por su parte, las
principales exportaciones agrícolas se redujeron 15% en términos anuales, dada la caída en las
ventas de café y de banano. El resto de exportaciones disminuyó 1,5% anual, debido a un efecto de
base de comparación, ya que el valor de éstas aumentó significativamente respecto a los dos meses
anteriores.
Al incorporar la información reseñada anteriormente, se sigue proyectando una desaceleración en el
crecimiento del PIB en el primer trimestre de 2012 frente al cuarto trimestre del año pasado en
términos anuales. El comportamiento negativo de la industria se habría visto compensado por el
dinamismo del sector comercio.
Para el segundo trimestre la escasa información apunta a una desaceleración del consumo de los
hogares. Por un lado, las ventas de vehículos crecieron 2,4%, menos de la mitad de lo que se
observó en el primer trimestre (5,6%). Cabe señalar que en los trimestres anteriores dichos bienes
impulsaron en buena medida la expansión del gasto de los hogares. Por otro
lado, en mayo se notó una leve moderación en el crecimiento de la cartera de consumo con una tasa
de crecimiento anual de 23,3% (a mayo 4), frente al 25% registrado en marzo.
La encuesta de opinión empresarial de Fedesarrollo para abril mostró un buen desempeño para
varios indicadores (pedidos, existencias, expectativas de producción, etc.). En lo corrido del año, los
estos comportamientos se han dado al tiempo con unos niveles tendenciales de crecimiento de la
industria estancados. Así, ello podría sugerir que en el segundo trimestre dicha tendencia, podría
continuar.
Dado lo anterior, las proyecciones para todo 2012 presentadas en el Informe sobre Inflación de
marzo no se modificaron. El intervalo de pronóstico de crecimiento se mantiene entre 4,0% y 6,0%.
c. Variables Financieras
El crédito total (MN y ME) registró en abril un incremento anual de 18,3%, inferior en 135 pb al de
marzo y en 499 pb al de julio de 2011. Este comportamiento fue determinado por la cartera
comercial, cuyo crecimiento se sitúo en 15,9%, tasa 160 pb menor a la del mes anterior y que suma
una desaceleración en los últimos nueve meses de 745 pb. En cuanto al crédito a los hogares, el
destinado a consumo, que se había estabilizado en un crecimiento de 25% entre julio de 2011 y
marzo de 2012, observó una leve moderación en las últimas semanas, disminuyendo de 25% en
marzo a 23,3% a mayo 4. De otro lado, la cartera hipotecaria presentó un crecimiento anual en abril
de 16,9%, dato cercano al promedio desde julio de 2011 (17, 2%).
Por su parte en abril, las tasas de interés real (descontando el IPC sin alimentos) para créditos de
consumo, hipotecario y comercial ordinario, en su orden, se ubicaron en 16,3%, 10,3% y 9,3%,
tasas menores a sus promedios respectivos calculados desde 1998 (excluyendo la de crédito
hipotecario cuyo promedio se mide a partir de mayo 2002).
d. Contexto Externo
Los últimos datos de actividad económica mundial muestran para el primer trimestre del año un
crecimiento mejor al esperado de algunas economías desarrolladas (Alemania, Japón y en menor
medida Estados Unidos), unos registros inferiores a lo previsto en ciertos países de la periferia
europea (España e Italia) y una mayor desaceleración a la pronosticada en algunas economías
emergentes (China y Brasil).
En Estados Unidos la producción siguió expandiéndose lentamente y los indicadores de actividad
real a abril sugieren que dicha tendencia ha continuado. En la zona del euro, aunque la producción
se estancó en el primer trimestre del año, fue superior a lo esperado por los analistas y por el equipo
técnico del Banco. La mayor expansión de la economía alemana con relación a la del resto de la
región, evitó que esta última entrara en recesión. Si se excluye la producción de dicho país el
resultado es un crecimiento de la zona euro que lleva tres trimestres en terreno contractivo.
Datos más recientes a abril, como la confianza de los consumidores y empresarios en los sectores
manufactureros y de servicios en EEUU, se han sostenido en niveles bajos. En el caso de la zona
euro la confianza se ha deteriorado un poco más frente a meses anteriores, al igual que algunos
indicadores de actividad real, lo cual sugiere, como se tiene previsto, que el
crecimiento del segundo trimestre sería negativo.
Respecto a las economías emergentes, los efectos de la crisis europea ya han comenzado a afectar
las principales economías de Asia Emergente. Así, las exportaciones y la producción industrial han
seguido desacelerándose y en algunos se ha contraído.
En las economías de América Latina las señales son mixtas. Por un lado la actividad real ha seguido
desacelerándose en Brasil, a pesar de los esfuerzos de las autoridades económicas por reactivar la
economía del país. De otra parte, economías como México, Chile, Ecuador, Perú y Venezuela,
continúan creciendo a un buen ritmo, aunque algunas de ellas con aumentos inferiores al de su
potencial. La mayor percepción de riesgo ha incrementado la volatilidad en los mercados
internacionales de capital y se ha traducido en un ligero aumento de las primas de riesgo de las
economías de la región y en una depreciación de sus monedas respecto al dólar de Estados Unidos.
En relación con los precios internacionales del petróleo, las menores tensiones en Oriente Medio y
el Norte de África, los elevados inventarios del crudo en Estados Unidos, y los mayores temores de
una recesión en Europa, han permitido la disminución de estos precios. Pese a ello, los niveles
continúan siendo favorables para las economías exportadoras.
En este contexto, la política monetaria en las economías avanzadas continúa siendo laxa y no se
esperan endurecimientos en los próximos trimestres. Por el contrario, de deteriorarse más el entorno
global, los bancos centrales de este grupo de países implementarían mayores medidas de estímulo.
En resumen, los resultados a marzo sugieren que en 2012 el PIB de los socios comerciales del país
puede crecer a una tasa positiva pero menor a la observada en 2011. Las escasas cifras de actividad
real mundial de abril continúan apuntando hacia un escenario de desaceleración global.
El mercado financiero internacional está a la expectativa de los resultados de las elecciones que se
llevarán a cabo en Grecia el 17 de junio. Existe una buena probabilidad de que un nuevo gobierno
electo liderado por el partido de izquierda Syriza esté inclinado a renegociar o incluso echar para
atrás las medidas de reformas estructurales y compromisos fiscales que el gobierno predecesor
aceptó como condición para acceder al segundo rescate financiero a principios de este año. El
incumplimiento de estos compromisos pararía el flujo de los fondos de rescate y de financiación
externa, lo que implicaría para el país, entre otras cosas, el no pago de la deuda soberana, una crisis
bancaria y, con ello, la inminente salida del Euro. Este escenario podría tener consecuencias graves
para las economías de toda la zona euro en cuanto el no pago de la deuda griega oficial y privada
traería cuantiosas pérdidas
tanto para los gobiernos como para el sistema bancario europeo.
Asimismo la posible salida de Grecia de la zona euro podría contagiar otros países de la región. El
no pago de la deuda por parte de Grecia, aumentaría la presión sobre la deuda soberana de otras
economías de la periferia europea en problemas, castigando aún más el costo de la deuda de estos
países al percibirla como más riesgosa. Si países más grandes como España o Italia llegaran a esta
situación, los fondos de rescate del BCE y FMI podrían ser insuficientes para proveer un alivio.
El sistema bancario europeo se encuentra ya en una situación precaria por lo que un choque
financiero importante, como el que se puede dar si Grecia no permanece en el euro, podría afectarlo
aún más, con repercusiones muy fuertes en el sector real. Incluso se han empezado a contemplar
escenarios de posibles corridas bancarias en los bancos de la periferia europea ante el temor del
público de la insolvencia de estos sistemas financieros.
En las últimas semanas los mercados financieros han estado igualmente atentos a la evolución del
sistema bancario en España. A mediados de abril el gobierno español se vio en la necesidad de
intervenir Bankia, uno de los principales bancos comerciales por activos del país, como
consecuencia de la alta exposición de la entidad al sector inmobiliario que ha incrementado la
cantidad de créditos incobrables. La capitalización de Bankia deja al descubierto la débil situación
de la banca española y su alta exposición al sector inmobiliario. Aunque los otros grandes bancos
del país no presentan estos problemas, no es posible afirmar lo mismo de otras entidades de menor
tamaño. Ante esta situación, no es del todo descartable que el gobierno español tenga que intervenir
nuevos bancos, lo cual comprometería aún más su situación fiscal.
Ante el temor de que esta situación se pueda generalizar en otros países, la Comisión Europea ha
planteado que el fondo de rescate de la región pueda ser utilizado para capitalizar los bancos que
necesiten dichos recursos. Sin embargo, esta idea no ha contado con el respaldo de Alemania y
aunque logre aprobarse, se necesitan muchos debates y consenso político que podrían ser muy
demorados para la actual situación de la banca europea.
El aumento en la percepción de riesgo y el deterioro en la confianza de los consumidores e
inversionistas de la región provocado por estos hechos recientes, de prolongarse, afectaría
negativamente el dinamismo de la zona euro, ya de por sí débil, aumentando el riesgo de una
recesión fuerte en un entorno en el cual sus economías tienen escaso espacio fiscal y monetario para
enfrentarla y un sistema financiero frágil.
Si bien aún no se cuenta con la información para evaluar el efecto de estos últimos acontecimientos
sobre el sector real mundial, si la incertidumbre aumenta y los niveles de riesgo permanecen
elevados, ello podría afectar la confianza a nivel mundial, con consecuencias negativas sobre el
consumo, la inversión, el crédito y el comercio global en general. Adicionalmente, si se materializa
una salida de Grecia de la zona del euro, la posibilidad de una crisis financiera que lleve a una
nueva recesión global podría incrementarse. Bajo este último escenario, los efectos negativos sobre
la actividad económica de Colombia podrían llegar a ser fuertes.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
La Junta Directiva por unanimidad consideró apropiado mantener inalterada la tasa de interés de
política teniendo en cuenta los siguientes factores:
(i) En el contexto externo, el un crecimiento de la economía alemana en el primer trimestre más que
compensó las caídas del PIB en el resto. En el mismo periodo, Japón y en menor medida Estados
Unidos, registraron crecimientos mayores a los proyectados. En las economías emergentes grandes,
como China, Brasil e india se ha dado una desaceleración mayor a la
prevista;
(ii) En mayo aumentó significativamente la incertidumbre sobre la permanencia de Grecia en la
zona del euro. Esto, junto a otros hechos financieros y políticos en Europa, elevó las primas de
riesgo internacional, afectó negativamente los mercados de valores y debilitó las monedas de las
economías emergentes, incluyendo el peso colombiano;
(iii) Los recientes acontecimientos de Europa aumentaron el riesgo de una fuerte recesión en ese
continente, en un entorno en el cual sus economías tienen escaso espacio fiscal y monetario para
enfrentarla, y un sistema financiero frágil. El incremento en la probabilidad de este escenario elevó
la incertidumbre de los pronósticos centrales del crecimiento para Colombia;
(iv) El precio internacional del petróleo disminuyó por debajo de lo esperado un mes atrás. Pese a
ello, los términos de intercambio continúan elevados y estimulan el crecimiento del ingreso
nacional;
(v) En Colombia se espera que el crecimiento económico en 2012 se sitúe entre el 4% y 6%. La
principal fuente de este crecimiento continuará siendo el dinamismo de la demanda privada, tanto
del consumo de los hogares como de la inversión. Sin embargo la información disponible a lo largo
del año sugiere una moderación en el crecimiento del consumo de los hogares y de la inversión,
coherente con la proyección de crecimiento para todo el año;
(vi) El aumento de la cartera comercial se desaceleró, explicado por la menor dinámica de los
préstamos en moneda extranjera. El crecimiento del crédito a los hogares permanece alto,
especialmente el de consumo. La calidad de esta última modalidad de cartera se ha deteriorado;
(vii) En abril la inflación anual (3,43%) fue algo menor a lo estimado y similar al registro de un mes
atrás. Los promedios de las medidas de inflación básica y de las expectativas de inflación
aumentaron levemente, aunque los riesgos sobre la inflación son moderados.
Unos codirectores resaltaron el buen desempeño de la economía colombiana, impulsado por el
comportamiento dinámico del consumo de los hogares y sus altos niveles de confianza, el
dinamismo de los flujos de inversión extrajera directa; los favorables términos de intercambio
observados hasta el momento, y el dinamismo de la mayoría de sectores productivos. Todo lo
anterior permite pensar que, con los niveles actuales de tasas de interés, en nuestro escenario central
el crecimiento de la economía se encuentra cercano a su potencial y las proyecciones de inflación
cercanas a la meta de 3%.
Sin embargo, enfatizaron el alto y creciente grado de incertidumbre que enfrenta la economía
colombiana, producto de los problemas de deuda pública y de la debilidad del sistema financiero en
algunas economías de la zona euro. De materializarse estos riesgos, podrían afectarse de manera
considerable los precios de los principales productos de exportación y la confianza. De todas formas
el Banco de la República cuenta con el marco de política monetaria para enfrentarlos, y con las
herramientas y recursos suficientes para atender las necesidades de liquidez en moneda local y
extranjera, y aquellas que pudieran aparecer en un ambiente de turbulencia financiera internacional.
Adicionalmente, los codirectores reiteraron la necesidad de continuar con un cuidadoso monitoreo
al crédito de consumo que, aunque mostró una leve moderación en las últimas semanas, mantiene
una tasa de crecimiento real anual elevada en relación con el crecimiento real del PIB.
Finalmente, un codirector, después de sumarse a la decisión de dejar inalterada la tasa de interés de
referencia, manifestó que, en su opinión, Europa ya entró en recesión y, en contracción si se excluye
a Alemania. Considera que la situación de España es especialmente difícil y que China, India y
Brasil se están desacelerando más de lo esperado. Aunque las
exportaciones colombianas en dólares siguen aumentando, constata que las agrícolas e industriales
han perdido dinamismo, mientras que las minero energéticas crecen en forma vigorosa. En la
actividad económica interna ve indicios de desaceleración y le inquieta el pobre comportamiento de
la industria. Dado que una buena política monetaria depende de la capacidad de anticipación por
parte de sus autoridades, considera que, de mantenerse el actual estado de cosas, podría ser
necesario emprender una fase de relajamiento de la política monetaria, siempre y cuando la
inflación y las expectativas continúen convergiendo, así sea lentamente, hacia el punto medio del
rango meta.
Por su parte el Ministro de Hacienda estimó que gracias al buen resultado del recaudo y buenas
condiciones de financiamiento reciente el Gobierno Nacional cuenta con recursos líquidos
suficientes para financiar su presupuesto y de ser conveniente implementar políticas fiscales contra
cíclicas.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
De acuerdo con la evaluación del balance de riesgos, la Junta Directiva decidió mantener inalterada
la tasa de interés de intervención. La nueva información permitirá establecer nuevas acciones de
política monetaria. La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo de la situación internacional,
del comportamiento y proyecciones de la inflación, el crecimiento, el comportamiento de los
mercados de activos y reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información
disponible.
Bogotá, D. C.
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2012-06-01 |
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Minutas de la reunión de la JDBR del 29 de junio de 2012
1. Antecedentes
a. Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor en mayo se situó en 3,44%, 1 punto base (pb) por encima del dato
del mes anterior. Este resultado se explica por un aumento de la variación anual del IPC sin
limentos, que pasó de 2,81% en abril a 2,94% en mayo, y una reducción de 29 pb en la variación
anual del IPC de alimentos (4,72%) frente al registro del mes anterior. En lo corrido del año se ha
acumulado un aumento del IPC de 1,92%, inferior al observado durante el mismo período de 2011
(2,2%).
En el IPC sin alimentos, el aumento de la variación anual se dio por una aceleración importante de
la variación anual del IPC de regulados en el último mes (de 3,83% a 4,42%) hecho explicado,
principalmente, por el incremento en el precio de la energía. En cuanto a los combustibles, el menor
precio internacional del petróleo se ha comenzado a transferir al precio interno de la gasolina, cuya
variación anual ha caído de 5,7% en febrero a 3,7% en mayo.
Las demás sub-canastas del IPC sin alimentos, la de transables y la de no transables, presentaron
pequeños cambios en mayo sin llegar a afectar de manera importante el desempeño de la inflación
anual. Mientras la variación anual de los transables aumentó de 0,91% a 0,96%, la de los no
transables cayó de 3,77% a 3,74%. Los arriendos continuaron aumentando (5 pb) como lo vienen
haciendo desde hace más de un año, para ubicarse en mayo en 3,7%.
La variación anual del IPC de alimentos descendió de 5,01% en abril a 4,72% en mayo. Este
comportamiento se explicó por el grupo de perecederos, que en el mismo periodo se desaceleró de
4,68% a 1,18%, sugiriendo que las condiciones de la oferta agropecuaria han tendido a
normalizarse. Las alzas, por su parte, provinieron de las sub-canastas de alimentos procesados
(arroz entre otros) y de las comidas fuera del hogar.
Los indicadores de inflación básica aumentaron de manera leve. El promedio de tres indicadores
monitoreados por el Banco de la República cerró en 3,35%, 5 pb más que el mes anterior.
En mayo, la variación anual del IPP se redujo de 1,56% a 0,80% y continuó con la caída iniciada en
octubre pasado. En los dos últimos meses la variación del IPP de importados (-1,1%) viene siendo
menos negativa, en línea con la menor apreciación del peso registrada en abril y mayo. En
contraste, la variación anual del IPP local (1,2%) continuó desacelerándose durante mayo,
reflejando el menor ritmo de ajuste tanto del IPP agropecuario, como del industrial y minero.
Las expectativas de inflación derivadas de los TES a diferentes horizontes disminuyeron en el
último mes y se encuentran alrededor de 3%. Las obtenidas a partir de la encuesta mensual no
presentaron cambios relevantes: la inflación esperada a diciembre es 3,3% y a doce meses es 3,5%.
b. Crecimiento
En el primer trimestre de 2012 el PIB colombiano creció 4,7% en términos anuales, cifra que se
ubicó en la parte inferior del intervalo de pronóstico del equipo técnico del Banco de la República.
De esta forma, la economía nacional completó dos trimestres registrando desaceleraciones en la tasa
de crecimiento, luego de expandirse 7,5% en el tercer trimestre de 2011 y 6,1% en el cuarto. Frente
al trimestre anterior también se presentó una desaceleración pues el PIB pasó de crecer en términos
anualizados de 5.1% al final del año anterior a 1.1% en el primer trimestre
Por tipo de gasto, la desaceleración del PIB se explicó principalmente por la moderación en la
dinámica de la inversión, al pasar de crecer 14,2% anual en el último trimestre de 2011 a 8,3% en el
primero de 2012. Dentro de este agregado se destacó la caída registrada en las obras civiles (8,1%)
que estuvo explicada en buena medida por un descenso en la que corresponde al sector petrolero y
minero. Las inversiones en equipo de transporte y en maquinaria también registraron
desaceleraciones, pero crecen a tasas altas y superiores a sus promedios desde 2000. El único
componente de la inversión que se aceleró fue construcción de edificaciones de 1,8% en el cuarto
trimestre de 2011 a 4,5% en el primer trimestre de 2012.
En el consumo de los hogares también se observó una desaceleración en su tasa de crecimiento
anual. Este agregado, con una expansión de 5,9% (en el cuarto trimestre de 2011 había sido de
6,1%) fue la variable con mayor contribución al desempeño del PIB y continuó creciendo a una tasa
superior a su promedio desde 2000. El gasto de los hogares en el primer trimestre de 2012 estuvo
impulsado principalmente por las compras de bienes no durables y por la dinámica de los servicios.
Por su parte, el gasto en bienes semidurables se desaceleró aunque mantuvo un ritmo de crecimiento
alto. El consumo en bienes durables alcanzó una tasa de expansión anual inferior a su promedio
desde 2000 por segundo trimestre consecutivo. El consumo del gobierno continuó mostrando un
crecimiento moderado, convirtiéndose en el agregado menos dinámico por el lado de la demanda.
Como resultado de todo lo anterior, en el primer trimestre la demanda interna creció a una tasa
anual de 6,1%.
En el primer trimestre se registró una significativa reducción en el crecimiento anual de las
exportaciones y de las importaciones. En estas últimas el crecimiento pasó de 21,3% en el cuarto
trimestre del año pasado a 13% en el primero de 2012. En el caso de las ventas externas la tasa pasó
de 16,2% a 6,3%. La contribución combinada de estos agregados al crecimiento del PIB fue
negativa (-2,2 pp).
Por el lado de la oferta, las ramas que más contribuyeron al crecimiento anual del PIB del primer
trimestre fueron, en su orden, servicios financieros y de alquiler, minería, y comercio, restaurantes y
hoteles. En los sectores de minería e industria manufacturera se observaron menores registros de
expansión. En el caso de la minería la desaceleración obedeció a problemas de oferta. El PIB
industrial pasó de crecer 3,9% en el último trimestre de 2011 a 0,6% en el primero de 2012. Los
sectores agrícola y de construcción presentaron caídas anuales, el primero de ellos debido a una
menor producción de café y, el segundo, al comportamiento de las obras civiles.
Con respecto a la situación económica para el segundo trimestre, la mayor parte de la información
disponible registra una desaceleración de la actividad económica. En abril la producción industrial
se contrajo en términos anuales por segundo mes consecutivo. En lo que respecta a la construcción,
el área aprobada según licencias continuó registrando retrocesos anuales.
Los indicadores de demanda apuntan a que en el segundo trimestre el consumo de los hogares se
continuaría desacelerando, acercándose a su crecimiento promedio desde 2000 (4,0%). Esta
desaceleración se infiere principalmente de los datos sobre las ventas del comercio (que cayeron en
términos anuales 2,8% en abril) y de las importaciones (las de bienes de consumo en dólares en
abril crecieron 6% luego de crecer en marzo cerca de 10%). La confianza de los hogares en
términos trimestrales ha disminuido levemente frente al primer trimestre del año.
Las exportaciones colombianas en abril registraron un valor de US$ 4.886 millones y crecieron 4%
anual. Esta tasa de crecimiento es menor a la observada en meses anteriores (22,5% en promedio
anual entre enero y marzo) y se explica por una reducción de 41,7% en las exportaciones agrícolas,
una caída de 9% de las exportaciones industriales sin bienes básicos y un menor ritmo de
crecimiento de las ventas externas de origen minero (11,5% anual). Por productos, las exportaciones
de petróleo y derivados crecieron 19,4% anual en abril, compensando la caída de 20% en las ventas
de carbón. En cuanto a las exportaciones de café, banano y flores, éstas registraron disminuciones
de 57%, 10,9% y 18,7% respectivamente. Por su parte, la caída de las exportaciones industriales se
debió a las menores ventas de alimentos y bebidas (-15,6%), químicos (-9,8%) y textiles (-16,4%).
c. Variables Financieras
La cartera total (MN y ME) registró en mayo un incremento anual de 17,7%, inferior en 70 pb al de
abril y en 346 pb frente a diciembre de 2011. Este comportamiento fue determinado por la cartera
comercial, cuyo crecimiento se sitúo en 15,3%, tasa 60 pb menor a la del mes anterior y que
contribuye a una desaceleración en lo corrido del año de 420 pb. En cuanto al crecimiento anual de
la cartera de los hogares, la de consumo disminuyó de 25% en marzo a 22,1% a junio. De otro lado,
la cartera hipotecaria presentó un crecimiento anual de 16,9% en mayo.
Las tasas reales de interés (descontando el IPC sin alimentos) en mayo para créditos de consumo,
hipotecario y comercial ordinario, en su orden, se ubicaron en 15,9%, 10,2% y 9,0%
d. Contexto Externo
En el segundo trimestre de 2012 los indicadores de la actividad real y de confianza muestran una
desaceleración de la economía mundial. En Estados Unidos la información sugiere un menor ritmo
de crecimiento, mientras que en la zona del euro y en Inglaterra la actividad económica continúa
deteriorándose. Japón, por su parte, moderó su ritmo de expansión, después de la recuperación
asociada con la reconstrucción. China e India, al igual que otras economías en desarrollo de Asia,
también se han desacelerado. En América Latina, Brasil siguió mostrando tasas más bajas trimestre
a trimestre, y a marzo el aumento anual de su PIB se acercó a cero.
En Estados Unidos los indicadores de actividad real han seguido expandiéndose aunque la última
información disponible evidencia algunas señales de desaceleración. Datos recientes del mercado
laboral muestran indicios de que la recuperación que se había presentado en los primeros meses del
año podría no continuar en la segunda mitad. Así, en junio la confianza de los consumidores y los
índices de sentimiento en el sector manufacturero se debilitaron.
Por su parte, en la zona del euro, aunque la economía no se contrajo nuevamente en los primeros
tres meses del año, algunos indicadores de actividad real disponibles para el segundo trimestre
evidencian que la región ha seguido debilitándose, por lo que es altamente probable que el PIB se
contraiga en dicho periodo. Adicionalmente, a partir de mayo la incertidumbre en los mercados
internacionales se incrementó debido al recrudecimiento de las tensiones políticas y financieras en
la zona del euro. La amenaza de contagio a economías de tamaño importante como Italia se
incrementó, haciendo que la percepción de riesgo en los mercados financieros internacionales
aumentara considerablemente.
Los resultados de las recientes elecciones en Grecia y el compromiso de la Unión Europea para
rescatar la banca española sólo fueron un alivio temporal para el nerviosismo en los mercados, pues
éstos no vislumbran en el corto plazo medidas para estabilizar la economía y conducirla a la
recuperación. La evolución de la agenda sobre una mayor integración fiscal y financiera
determinará la forma en que la percepción de riesgo se comporte en los próximos meses. Si dichas
discusiones se hacen de una manera rápida y creíble se esperaría que la incertidumbre se reduzca.
Los índices de confianza de empresarios y consumidores continúan deprimidos, mientras los índices
de sentimiento en los sectores de manufacturas y servicios empeoraron. El deterioro de las
perspectivas económicas y las señales que indican que estas pueden empeorar en el corto plazo,
comprometerían aún más la posibilidad de una recuperación en los países desarrollados. Todo ello
mantiene en niveles elevados el riesgo de las economías de la periferia europea, deteriora la
confianza y podría llevar a la zona del euro a una caída de su producto mayor a la proyectada por
los mercados.
El menor dinamismo de Europa ha empezado a afectar el comportamiento de las economías de Asia
emergente, reflejado en el debilitamiento de las exportaciones y de la producción industrial,
acentuando la desaceleración que venían presentando desde mediados de 2011, generada por el
retiro de las políticas de estímulo fiscal y monetario.
Con excepción de Indonesia, las cifras de abril de 2012 de la producción industrial en las
principales economías de Asia emergente muestran desaceleración. Para el caso específico de
China, el crecimiento de la producción industrial, de las ventas al por menor y de la inversión se ha
moderado en los últimos meses. En India, por su parte, el crecimiento económico ha disminuido de
manera importante en los últimos trimestres y los indicadores de actividad real para el segundo
trimestre evidencian que esta tendencia ha continuado.
En las economías de América Latina el crecimiento económico de Chile, México, Perú y Venezuela
fue favorable en el primer trimestre del año, situación contraria a la de Brasil, en donde la actividad
real se desaceleró nuevamente. La información de abril del presente año muestra que la industria se
ha contraído en Brasil, Colombia y Perú. En Chile, y en menor medida en México, el crecimiento
del sector se ha desacelerado.
La desaceleración económica mundial ha disminuido las presiones sobre los mercados
internacionales de bienes básicos. Los precios del petróleo y de los alimentos se han reducido
significativamente en los últimos meses.
En este contexto, la política monetaria en las economías avanzadas continúa siendo laxa y no se
esperan endurecimientos en los próximos trimestres. Por el contrario, de deteriorarse más el entorno
global, los bancos centrales de este grupo de países implementarían mayores medidas de estímulo.
Hasta el momento, los datos más recientes muestran que los principales efectos de la crisis europea
y de la desaceleración mundial sobre la economía colombiana han sido un deterioro en las ventas
externas, con lo que se registraría una desaceleración del crecimiento de los sectores transables
diferentes a la minería, y una menor cotización del petróleo que afectaría a la baja los términos de
intercambio. Respecto a este último, el índice observado a mayo aún conserva niveles altos, en parte
como consecuencia del menor precio internacional de los bienes importados. Otros canales por los
cuales se podría resentir la economía nacional (el financiamiento externo, la confianza interna y el
riesgo país) hasta ahora no se han visto afectados de manera significativa.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
La Junta Directiva por mayoría consideró apropiado mantener inalterada la tasa de interés de
política teniendo en cuenta los siguientes factores:
(i) El crecimiento mundial ha disminuido en el segundo trimestre del año. En Estados Unidos, la
información sugiere un menor ritmo de crecimiento, mientras que en la zona euro varios
indicadores señalan que la economía se está contrayendo. Los problemas en esta región han
afectado las perspectivas de la economía mundial a través de la confianza y los flujos de comercio y
de capital. Las economías emergentes muestran un ritmo de expansión más moderado, reflejado
principalmente, en el debilitamiento de las exportaciones y la producción industrial.
(ii) En Colombia, al igual que en otros países emergentes, los efectos del debilitamiento de la
economía mundial se han sentido a través de la menor demanda y precios más bajos de las
exportaciones. Ello ha llevado, especialmente, a la desaceleración del crecimiento de los sectores
transables diferentes a la minería. Tanto la producción industrial en marzo y abril, como el PIB de la
agricultura en el primer trimestre del año, se contrajeron.
(iii) En el primer trimestre cayó la construcción de obras civiles, fenómeno no contemplado en las
proyecciones del Banco. En contraste, los sectores financiero, comercial y de transporte y
comunicaciones mostraron un dinamismo importante, impulsado por el crecimiento de la demanda
interna. Esta última se ha visto estimulada por los niveles favorables de confianza y financiamiento.
(iv) En general, el crecimiento económico colombiano en el primer semestre ha sido inferior al
esperado. El dato del crecimiento del PIB del primer trimestre se situó cerca del límite inferior del
rango de pronóstico realizado por el equipo técnico del Banco para ese periodo. Se prevé una
revisión a la baja en el rango de pronóstico para el año.
(v) El crecimiento anual de la cartera comercial continúa desacelerándose. El del crédito a los
hogares, si bien se ha moderado, aún permanece alto, especialmente el de consumo. La cartera
hipotecaria crece a buen ritmo, junto a un índice de precios de la vivienda nueva que volvió a
aumentar en marzo y que se mantiene en niveles históricamente altos.
(vi) En mayo la inflación anual fue 3,44%, cifra similar al dato de abril. El promedio de las
inflaciones básicas, al igual que la media de las expectativas de inflación entre uno y cinco años, se
encuentran en una tasa algo superior al 3%.
Unos Directores resaltaron el crecimiento dinámico de la demanda interna privada, el dinamismo en
los flujos de inversión extranjera directa y una tasa de desempleo estable, pese al deterioro en el
entorno internacional, y especialmente en la zona euro. Destacaron que a pesar de la reducción de
las exportaciones del país, tanto por menores precios como cantidades, y de la desaceleración del
crecimiento, mayor a lo proyectado, hasta el momento el financiamiento, la confianza y el riesgo
país no se han visto afectados significativamente. Consideraron que las expectativas de inflación
están cerca del punto medio del rango meta y que el crecimiento de la economía no está lejos de su
potencial. Señalaron que, si bien, la dinámica del crédito se ha moderado en las últimas semanas,
los peligros de desequilibrios financieros y toma de riesgos en la economía no han desaparecido, lo
que podría afectar la sostenibilidad del crecimiento del producto y el empleo en el mediano plazo.
Otros Directores manifestaron que, de acuerdo con la información disponible, se vislumbra el
mantenimiento del deterioro económico internacional durante un periodo prolongado con efectos
adversos sobre la demanda interna y los términos de intercambio. En el ámbito interno se observa
una mayor desaceleración a la esperada en los sectores agrícola e industrial, los cuales son los
mayores aportantes al empleo formal en el país. Manifestaron su opinión de que la efectividad de la
política monetaria depende de la capacidad de anticipación por parte de las autoridades, por lo que
en este escenario debe emprenderse una fase de relajamiento de la postura para evitar ajustes
drásticos en el futuro. En consecuencia, propusieron una reducción de 25 pb en la tasa de
intervención.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
De acuerdo con la evaluación del actual balance de riesgos, la Junta Directiva decidió mantener
inalterada la tasa de interés de intervención. La nueva información permitirá establecer acciones de
política monetaria.
La Junta reitera que el Banco de la República cuenta con las herramientas y recursos suficientes
para atender las necesidades de liquidez en moneda local y extranjera que regularmente requiere la
economía y aquellas que pudieran aparecer en un ambiente de turbulencia financiera internacional.
La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo de la situación internacional, del
comportamiento y proyecciones de la inflación, el crecimiento, el comportamiento de los mercados
de activos y reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible.
Bogotá, D. C.
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2012-07-01 | -
Minutas de la reunión de la JDBR del 27 de julio de 2012
El 27 de Julio de 2012 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta
Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público,
Juan Carlos Echeverry, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación
exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, Juan Pablo Zárate y César
Vallejo, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus
perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace
un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión.
1. Antecedentes
a. Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor en junio se situó en 3,20%, 24 puntos base (pb) por debajo del
dato del mes anterior. Este resultado se explica tanto por una reducción de la variación anual del
IPC sin alimentos que pasó de 2,94% en mayo a 2,81% en junio y una reducción de 50 pb en la
variación anual del IPC de alimentos (4,22%) frente al registro del mes anterior. En lo corrido del
año se ha acumulado un aumento del IPC de 2,01%, inferior al observado durante el mismo período
de 2011 (2,53%).
En el IPC sin alimentos, la disminución de la variación anual se explicó principalmente por el
componente de regulados y en particular por el precio interno de los combustibles, el cual ha venido
respondiendo a los menores precios internacionales del petróleo que se observan desde abril. La
variación anual del IPC de combustibles pasó de 3,7% a 1,8%. Los otros componentes de regulados
(servicios públicos y transporte público) también presentaron caídas pero de menor cuantía.
En junio también se presentó una reducción de la variación anual del IPC de no transables sin
alimentos ni regulados (de 3,74% a 3,62%), que en parte puede ser atribuida en buena parte a una
alta base de comparación. Sin embargo, se presentó una nueva alza en la variación anual de
arriendos a 3,7% (8 pb más que en mayo). En diciembre del año pasado dicho valor fue de 3,4% y
desde febrero de 2011 (3,0%) ha aumentado sin interrupción. Cabe señalar que los arriendos pesan
cerca del 19% en el IPC total. Respecto a los transables sin alimentos ni regulados, su resultado en
junio fue 1,0%, similar al de mayo, pero mayor a lo observado en el primer trimestre del año
(alrededor de 0,7%). La menor apreciación anual del peso en los últimos meses puede estar
relacionada con este fenómeno.
La variación anual del IPC de alimentos descendió de 4,72% en mayo a 4,22% en junio. Los
alimentos perecederos generalmente más afectados por las condiciones climáticas, fueron los que
mayor descenso presentaron (de 1,1% a -2,0%), lo que en parte puede ser explicado por una
recuperación de la oferta agropecuaria, estimulada por los precios relativamente altos de varios de
estos alimentos hasta el tercer trimestre del año pasado. En el caso de alimentos procesados y
comidas fuera del hogar no se observaron cambios de importancia. En este último componente la
variación anual se situó en 5,5%, relativamente alta, lo que puede denotar algún tipo de presiones de
demanda y/o de costos salariales en ese sector.
En el último mes también se presentó un descenso de la inflación básica. El promedio de los tres
indicadores monitoreados por el Banco de la República se situó en 3,35% frente a 3,20% del mes
anterior.
La variación anual del IPP también presentó reducciones importantes en junio, con una cifra que se
situó en terreno negativo (en -0.69%) por primera vez en más de dos años. Para diciembre de 2011
el registro fue 5,5% y para mayo 0,8%. Una parte importante del descenso está asociado con la
disminución de los precios del petróleo y de los demás combustibles. De mantenerse este
comportamiento, apunta hacia una disminución de las presiones de costos no salariales en los
próximos meses.
Las expectativas de inflación derivadas de los TES a diferentes horizontes disminuyeron en junio;
las expectativas a 5 años, se situaron por debajo de 3% después de varios meses de registros
superiores a este número. Las de 2 y 3 años se mantuvieron por debajo de dicha cifra, con tendencia
3 decreciente. Las obtenidas a partir de la encuesta mensual muestran una inflación esperada para
finales de este año de 3,1% y de 3,32%para julio de 2013, 17 pb y 14 pb menos que lo reportado
hace un mes.
b. Crecimiento
La información más reciente para el segundo trimestre de 2012, sobre todo la relacionada con las el
consumo privado y la industria, sugiere que la economía se habría desacelerado.
Los indicadores relacionados con el consumo, dentro de los que se destacan las ventas minoristas,
apuntan a que durante el segundo trimestre el consumo habría crecido a una tasa significativamente
menor que la registrada en el primer trimestre del año. De acuerdo con el DANE, en los meses de
abril y mayo las ventas al por menor se contrajeron a una tasa anual promedio de 1,0% (la primera
caída anual registrada en casi tres años). Cuando se excluyen las ventas de vehículos el
comportamiento es similar, aunque en este caso el crecimiento anual promedio para abril y mayo es
de 0,5%. La moderación en las importaciones de bienes de consumo, las cuales pasaron de crecer
19% en el primer trimestre a cerca de 8% en promedio en abril y mayo, apuntan igualmente hacia
una desaceleración de este tipo de gasto.
Según Econometría, con datos a junio las ventas de vehículos disminuyeron 1% en términos anuales
y 0,6% en promedio para el trimestre. Con cifras a junio igualmente se observó un descenso en el
indicador de confianza de los consumidores, medido por Fedesarrollo, lo que también apunta a un
menor crecimiento del consumo para este periodo.
El menor crecimiento del consumo para el segundo trimestre coincide con una desaceleración en la
tasa de crecimiento anual del crédito con ese destino de 25,1% en marzo a 21,2% en la primera
semana de julio. Lo anterior en un entorno de tasas de interés estables que se mantienen aún por
debajo de sus promedios desde 2000 (con excepción de la tasa de tarjeta de crédito).
Por otro lado, la información relacionada con la inversión muestra que, si bien las cifras de
importaciones de bienes de capital a mayo (crecieron en el bimestre abril-mayo a una tasa anual de
12% frente a una tasa de 8% en el primer trimestre) indican que este gasto podría estar creciendo a
un mayor ritmo que antes, para el conjunto de la inversión el panorama es incierto debido a que
depende de la velocidad de recuperación de las obras civiles.
Respecto a las ventas externas colombianas en dólares, en mayo crecieron 1,2% respecto al mismo
mes del año anterior. Esta tasa de crecimiento es menor que la observada en meses anteriores
(17,6% en promedio anual entre enero y abril) y se explica por la reducción de 1% en las
exportaciones mineras y por la caída de 12,4% en las exportaciones de los principales productos
agrícolas. Por su parte, las ventas externas del resto de bienes, los cuales son principalmente
industriales (22% del total exportado), crecieron en términos anuales 14,6%.
Por el lado de la oferta, los indicadores disponibles sugieren que el PIB de la industria retrocedería
en términos anuales en el segundo trimestre. En abril y mayo el índice de producción industrial sin
trilla de café se contrajo en términos anuales 1,3% en promedio y en niveles mantuvo una tendencia
decreciente. Si bien buena parte de la caída la explicaron los sectores de químicos que continuaron
reportando problemas de disponibilidad de materias primas. Aún sin estas ramas la producción
industrial se contrajo en dichos meses (0,1% anual en promedio).
Otros indicadores de la industria también señalaron un comportamiento débil para el sector. Los
indicadores de pedidos y existencias de Fedesarrollo a mayo mostraron retrocesos, aunque todavía
se encuentran por encima de sus promedios de los últimos 20 años. Lo anterior generó una caída en
el índice de confianza de los industriales, que de todas maneras resulta menor que la desaceleración
observada en el crecimiento de la producción industrial. En el sector de la construcción, los
indicadores disponibles tampoco sugieren un dinamismo importante. La producción de cemento
cayó en términos anuales 0,8% en promedio en abril y mayo, mientras que las licencias de
construcción presentaron una contracción promedio anual de 33% en esos mismos meses. En este
último caso la fuerte caída es producto de los niveles atípicamente altos con los que se están
comparando.
Por su parte, en el sector agropecuario la recuperación de la producción de café, que creció 18%
anual en el segundo trimestre, así como el aumento en el sacrificio de ganado en los meses de abril
y mayo, permiten esperar que el sector revierta los registros de crecimientos negativos de los dos
trimestres anteriores. 5 Todo lo anterior permite prever que en el 2012 el crecimiento del PIB se
situaría entre 3% y 5%. Si bien el consumo y la inversión seguirán siendo la principal fuente del
crecimiento crecerían menos que el año anterior. Por ramas de actividad, los sectores más dinámicos
continuarían siendo la minería y los servicios financieros, tal como ocurrió en el primer trimestre,
mientras que los de desempeño más bajo serían la industria y la construcción. Para 2013 se proyecta
un crecimiento similar al de 2012.
c. Variables Financieras
El crédito total (MN y ME) registró en junio un incremento anual de 17,15%, porcentaje menor en
53 pb y en 254 pb a los observados, respectivamente un mes y un trimestre atrás. La desaceleración
mensual y trimestral se presentó en todas las modalidades de cartera, cuyas tasas crecimiento en
junio fueron: para la de consumo 21,6%, con una reducción mensual de 105 pb y trimestral de 376
pb; para la hipotecaria 16,11%, con una reducción mensual de 57 pb y trimestral de 113 pb; y para
la comercial 15,17%, con una reducción mensual de 11 pb y trimestral de 230 pb.
Por su parte, en junio las tasas de interés real (descontando el IPC sin alimentos) para créditos de
consumo, hipotecario y comercial ordinario se ubicaron, en su orden, en 15,85%, 10,02% y 9,27%,
tasas menores a sus promedios respectivos calculados desde 1998 (excluyendo la de crédito
hipotecario cuyo promedio se mide a partir de mayo 2002).
d. Contexto Externo
Durante el segundo trimestre del año la actividad económica global se debilitó más de lo esperado,
en buena parte por la mayor incertidumbre generada por la crisis de la deuda pública europea. Por
esa misma razón, en los últimos meses se ha incrementado la probabilidad de que la desaceleración
mundial para el presente año y para 2013 se profundice. Para el próximo año, los pronósticos más
recientes de los principales organismos internacionales siguen indicando una recuperación del
crecimiento mundial frente a 2012, aunque a un menor ritmo que lo estimado en meses anteriores.
Los indicadores de actividad real para la zona del euro muestran que la economía probablemente se
contrajo más de lo previsto en el segundo trimestre del año. En esta línea, estimaciones preliminares
de organismos gubernamentales para Francia y España evidencian que el crecimiento 6 económico
fue negativo entre abril y junio. El pobre comportamiento de las economías de la periferia de esta
región ha afectado de manera significativa la confianza de empresarios y consumidores y ha
comenzado a restar dinamismo a las economías de la región, que hasta ahora presentaban resultados
más sólidos. En lo que respecta al mercado laboral, la tasa de desempleo para la zona del euro en su
conjunto se situó en 11,1% en junio, cifra que representa un aumento respecto a los meses
anteriores. Adicionalmente, las condiciones crediticias se han seguido estrechando, lo que evidencia
la renuencia por parte de los bancos comerciales a reactivar el crédito.
Las últimas medidas que las autoridades europeas han aprobado, tales como la posibilidad de la
capitalización directa de la banca española mediante el uso de los recursos de los fondos de rescate
de la región y el plan de 120.000 millones de euros (equivalentes al 1% del PIB de la región) para
incentivar el crecimiento económico, redujeron momentáneamente la incertidumbre pero aún no
logran convencer a los mercados de la posibilidad de una recuperación económica rápida en la
región. Por ejemplo, a pesar de estos anuncios y el nuevo plan de austeridad fiscal en España,
continúan las presiones en el mercado de la deuda pública de España, en parte por las dudas sobre la
viabilidad de este programa fiscal, incrementado sustancialmente la prima de riesgo.
En el caso de los Estados Unidos, el crecimiento de la economía continuó siendo débil. Además, los
indicadores recientes de consumo y de actividad manufacturera se desaceleraron en los últimos
meses. El registro más reciente del índice de sentimiento manufacturero pasó a terreno negativo,
dando señales de que la producción se podría desacelerar en los próximos meses en los Estados
Unidos. Aunque el mercado de vivienda ha mostrado algunos síntomas de recuperación, estos
todavía son incipientes y se dan desde niveles muy bajos como para representar una aceleración en
la producción. El empeoramiento de la situación europea puede poner en riesgo el crecimiento de la
economía de los Estados Unidos, al deteriorar aún más la confianza de los hogares y empeorar las
restricciones crediticias a nivel global.
El menor ritmo de expansión de las economías desarrolladas ha limitado el crecimiento de los
países emergentes, especialmente los asiáticos, cuyos vínculos comerciales con Europa son
mayores. En este contexto, el crecimiento del PIB se desaceleró nuevamente en China en el
segundo trimestre del año, pasando de 8,1% a 7,6% anual.
Para el caso de América Latina, en Brasil sigue sin observarse una reactivación del crecimiento pese
a las medidas de estímulo. Otras economías como México, Chile y Venezuela muestran un mejor
desempeño de sus indicadores, aunque a mayo se observó una desaceleración de la actividad
industrial para los dos primeros países.
En ese entorno, con excepción de algunos precios agrícolas, los precios internacionales de los
bienes básicos han disminuido pero aún superan sus promedios de los últimos años.
Los excesos globales de capacidad, y los menores precios internacionales de los productos básicos
(con excepción de algunos bienes agrícolas), han moderado las presiones inflacionarias y han
permitido políticas monetarias expansivas en un buen número de países. En las economías
emergentes, por ejemplo, los bancos centrales de Brasil, China y Corea del Sur han reducido
recientemente sus tasas de interés, buscando contrarrestar los efectos de la desaceleración de la
demanda. En las economías avanzadas, la política monetaria continúa siendo laxa, y de deteriorarse
más el entorno global, los bancos centrales de este grupo de países podrían implementar mayores
medidas de estímulo.
En resumen, se espera que en lo que resta de 2012, al igual que está ocurriendo en muchos países
emergentes, el debilitamiento de la economía mundial afecte negativamente el crecimiento de la
economía colombiana a través de una menor demanda externa y de los menores precios
internacionales de los principales productos de exportación.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
La Junta Directiva por mayoría acordó reducir en 25 pb su tasa de interés de intervención. De esta
forma la tasa base para las subastas de expansión será de 5%. La decisión se tomó teniendo en
cuenta lo siguiente:
(i) El crecimiento mundial continúa debilitándose más de lo esperado. En Estados Unidos, la
información sugiere un menor ritmo de crecimiento, mientras que la zona euro se está contrayendo.
En China y otras economías emergentes la desaceleración del crecimiento ha sido mayor a la
anticipada, reflejando el debilitamiento de la demanda mundial y acciones previas de política;
(ii) Los excesos globales de capacidad y los menores precios internacionales de los productos
básicos (con excepción de algunos bienes agrícolas) han moderado las presiones inflacionarias y
han permitido políticas monetarias expansivas en un buen número de países. En las economías
emergentes, por ejemplo, los bancos centrales de Brasil, China y Corea del Sur han reducido
recientemente sus tasas de interés, buscando contrarrestar los efectos de la desaceleración de la
demanda;
(iii) El debilitamiento de la economía mundial está afectando negativamente el crecimiento de la
economía colombiana a través de la menor demanda externa y los menores precios internacionales
de los principales productos de exportación. Es probable que estos factores continúen operando en
esa dirección los próximos trimestres. Si bien el consumo y la inversión serán la principal fuente del
crecimiento del PIB en 2012, estos componentes de la demanda interna crecerán menos que el año
anterior y reducirán, o incluso eliminarán, las actuales presiones de capacidad productiva;
(iv) En general, con la nueva información disponible se proyecta para 2012 un crecimiento del PIB
entre el 3% y el 5%. La amplitud del rango obedece a la incertidumbre sobre el tamaño de la
desaceleración global y su impacto en la economía colombiana, así como sobre la recuperación de
las obras civiles y la superación de algunos choques de oferta negativos que están afectando los
sectores industrial y minero. Para 2013 se proyecta un crecimiento similar al de 2012. Como es de
esperar, los niveles de incertidumbre aumentan en la medida que crece el horizonte de pronóstico;
(v) El crecimiento anual de la cartera comercial continúa desacelerándose. El del crédito de
consumo también se ha moderado pero permanece alto. La cartera hipotecaria crece a buen ritmo,
junto a un índice de precios de la vivienda nueva que se mantiene en niveles históricamente altos;
(vi) En junio la inflación anual fue 3,2%, cifra inferior a la proyectada por el equipo técnico del
Banco. Todas las medidas de inflación básica disminuyeron y su promedio se situó cerca de 3,0%.
Las expectativas de inflación también se redujeron: para diciembre de 2012 se espera 3,1% y para
julio de 2013 cerca de 3,3%, mientras que las derivadas del mercado de TES a horizontes entre dos
y cinco años se encuentran alrededor de 2,5%.
La mayoría de los miembros de la Junta consideró apropiado reducir la tasa de interés de
intervención en 25 pb. Los excesos de gasto en la economía han venido reduciéndose a una
velocidad mayor a la esperada, y el crecimiento del crédito se ha moderado. Así mismo, la inflación
y las expectativas de inflación han caído. Si bien es de esperar que algunos de los factores que han
debilitado el crecimiento del gasto interno se reversen pronto 9 (por ejemplo, la fuerte caída en la
inversión en obras civiles), los asociados a factores externos probablemente continuarán en los
próximos trimestres. En cuanto el comportamiento futuro de la inflación, los riesgos de
desviaciones de la meta son bajos y hasta el momento se ven limitados a un aumento temporal de
los precios de los alimentos en 2013, que debe corregirse en el segundo semestre de ese año. Por su
parte, en este momento se considera acotado el riesgo de que una reducción de la tasa de interés de
intervención de 25 pb incremente los riesgos de desbalances financieros, que posteriormente
comprometan el crecimiento del empleo y el producto. La reducción de la tasa de interés de
intervención representa un cambio en la postura monetaria, señala el compromiso de la Junta de
contribuir a maximizar el crecimiento del empleo y el producto coherente con el logro de las metas
de inflación, y se define contemplando sus efectos en varios mercados simultáneamente, teniendo
en cuenta la existencia de incertidumbre y evaluando cuidadosamente sus riesgos.
Otros miembros consideraron apropiado una reducción de 50 puntos básicos de la tasa de
intervención del Banco, como quiera que, de acuerdo con la información disponible, se confirma
que el deterioro económico internacional es mucho mayor al que se había previsto en los últimos
meses, al tiempo que se eleva cada día más la probabilidad de que dicha tendencia negativa se
acentúe. En el ámbito interno, se observa que la industria va camino de la contracción, y que, según
los indicadores disponibles, el consumo en el segundo trimestre habría crecido significativamente
menos que en el primero, al igual que el PIB, el cual registraría una desaceleración por tercer
trimestre consecutivo. En tanto que se ha incrementado la percepción de riesgo a nivel local y han
caído los índices de confianza de consumidores y empresarios, lo cual indica que la actividad
económica continuaría perdiendo fuerza.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
De acuerdo con la evaluación del actual balance de riesgos, la Junta Directiva acordó reducir la tasa
de interés de intervención del Banco de la República en 25 puntos básicos.
La nueva información permitirá establecer acciones futuras de política monetaria, tanto la
concerniente al desarrollo de los eventos en los países avanzados y su impacto en la confianza, la
demanda global y los precios 10 internacionales de los bienes básicos, como la proveniente de la
dinámica interna.
La Junta reitera que el Banco de la República cuenta con las herramientas y recursos suficientes
para atender las necesidades de liquidez en moneda local y extranjera que regularmente requiere la
economía y aquellas que pudieran aparecer en un ambiente de turbulencia financiera internacional.
La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo de la situación internacional, del
comportamiento y proyecciones de la inflación, el crecimiento, el comportamiento de los mercados
de activos y reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible.
Bogotá, D. C.
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2012-08-01 | -
Minutas de la reunión de la JDBR del 24 de agosto de 2012
El 24 de Agosto de 2012 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la
Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito
Público, Juan Carlos Echeverry, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación
exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Juan Pablo Zárate y César Vallejo, en la cual
se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman
decisiones relacionadas con la política monetaria.
1. Antecedentes
a. Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor en julio se situó en 3,03%, 17 puntos base (pb) por debajo del dato
del mes anterior. Este resultado se explica por una reducción de la variación anual del IPC sin
alimentos que pasó de 2,80% en junio a 2,74% en julio y una reducción de 43 pb en la variación
anual del IPC de alimentos (3,79%) frente al registro del mes anterior. Para el año corrido el
aumento acumulado del IPC asciende a 1,98% frente 2,67% registrado en igual período de 2011.
En el IPC sin alimentos, la disminución de la variación anual se explicó principalmente por el
componente de regulados que pasó de 3,92% a 3,48%. Esta reducción se concentró en las tarifas de
servicios públicos (de 5,1% a 3,0%), específicamente en las de energía eléctrica. Otra caída
importante, y por segundo mes consecutivo, se dio en el precio del gas domiciliario, el cual estaría
respondiendo a los menores precios internacionales de los combustibles observados entre abril y
junio de este año. Por esta misma razón continuó reduciéndose el precio interno de la gasolina. En
las otras dos sub-canastas del IPC sin alimentos– transables y no transables sin regulados– los
cambios de un mes a otro fueron mínimos. En el primer caso, la variación anual de 1,03%, aunque
baja frente a la inflación total, es alta si se compara con lo sucedido el año pasado. Este
comportamiento estaría asociado con la menor apreciación del tipo de cambio en lo corrido del año.
En el segundo caso el ligero aumento en julio de 6pb (a 3,68%) fue en parte motivado por reajustes
en los servicios de diversión (fútbol). La variación anual del IPC de arriendos, el principal
componente, se mantuvo estable alrededor de 3,8% por primera vez después de 16 meses de
aumentos graduales. Otros servicios presentan ajustes anuales relativamente bajos por lo que puede
concluirse que las presiones de demanda a julio eran pocas.
La variación anual del IPC de alimentos descendió de 4,22% en junio a 3,79% en julio. Este
resultado se explicó nuevamente por los productos perecederos donde un conjunto amplio de este
tipo de ítems presentó ajustes bajos o disminuciones de sus precios. Factores como las condiciones
climáticas favorables en la mayor parte del primer semestre, así como unos precios altos en los
trimestres anteriores habrían estimulado la oferta. En julio, también hubo una disminución en la
variación anual del IPC de alimentos procesados, entre ellos en alimentos de origen importado, lo
que sugiere que las alzas de los precios internacionales en los últimos dos meses no han impactado
los precios al consumidor en Colombia. Finalmente, la variación anual del precio de las comidas
fuera del hogar se redujo por segundo mes consecutivo a 5,37%.
La inflación básica se mantuvo estable en julio frente a lo observado en el mes pasado. El promedio
de los cuatro indicadores de inflación básica monitoreados por el Banco pasó de 3,02% anual a
3,04% en el último mes. Desde noviembre de 2011 se interrumpió la tendencia ascendente que
mostraba esta variable.
La variación anual del IPP también presentó reducciones en julio, con una cifra que se situó en
terreno negativo (-0,39%) por segundo mes consecutivo (en junio había sido -0,69%). El IPP local
subió levemente, manteniéndose en terreno negativo mientras que el componente importado no
registró cambios importantes y continuó igualmente en terreno negativo.
En julio el descenso de las expectativas de inflación fue importante. Las expectativas de inflación
derivadas de los TES a 2, 3 y 5 años continuaron disminuyendo, situándose alrededor de 2,4% para
los tres casos. Las obtenidas a partir de la encuesta mensual muestran una inflación esperada para
finales de este año de 2,93% y para agosto de 2013 de 3,27%, 17 pb y 10 pb respectivamente,
menos que lo reportado hace un mes.
b. Crecimiento
Los indicadores más recientes de la industria, comercio, exportaciones e importaciones sugieren que
la economía colombiana se desaceleró en el segundo trimestre frente al primero, aunque los datos
de junio mostraron un desempeño un poco mejor al de los meses anteriores.
Por el lado del consumo de los hogares, el comportamiento de las ventas minoristas del comercio,
de las importaciones de bienes de consumo y del desempleo apunta a una reducción en el ritmo de
crecimiento del consumo en el período abril-junio. De acuerdo con la información publicada por el
DANE, las ventas al por menor en junio crecieron a una tasa anual de 4,0%, la cual es superior a la
registrada en los meses de abril (-2,85%) y mayo (0,93%). La expansión anual para todo el segundo
trimestre fue de 0,8%, menor que la observada durante el primer trimestre (6,1%). Por su parte, las
importaciones de bienes de consumo en dólares en junio crecieron 13,3% en términos anuales. Si
bien este crecimiento es mayor que el observado en abril (5,6%) y mayo (11,4%), no impidió una
desaceleración significativa del crecimiento entre el primero (18,3% anual) y segundo trimestre
(10,1% anual). En lo referente a la tasa de desempleo, en mayo y junio siguió mostrando una
tendencia decreciente pero con un ritmo de descenso que en términos anuales es cada vez menor.
Respecto a la inversión diferente de la construcción y obras civiles, las importaciones de bienes de
capital (crecimiento anual de 5,1%) sugieren que su crecimiento podría mantenerse en tasas
similares a las observadas a comienzo del año. Sin embargo, en el caso de los rubros de
construcción y obras civiles, no es claro que haya habido una mejoría dado el comportamiento de la
producción de cemento y licencias de construcción.
En cuanto a las exportaciones colombianas, en junio las totales en dólares cayeron 2,3% anual como
consecuencia del menor crecimiento nominal de las de origen minero (petróleo y derivados, carbón,
ferroníquel y oro) 0,7% y de la contracción en el valor exportado de productos agrícolas (café,
banano y flores) -21,4% e industriales -3,8%. En el caso de los bienes de origen minero, su
crecimiento se vio afectado por la caída en las ventas externas de petróleo y derivados (-7,3%
anual), principalmente por un efecto precio. Las menores exportaciones de productos agrícolas se
explican por la disminución en los valores exportados de café (-26%) y flores (-39%). De esta
manera, durante el segundo trimestre el crecimiento anual de las ventas externas (1,8%) se
desaceleró frente al del primer trimestre (21,2%) en buena parte por una reducción en los precios de
los bienes básicos.
Por el lado de la oferta, el índice de producción industrial sin trilla de café creció en términos
anuales 2,8% en junio. A pesar de que esta cifra representa una aceleración respecto a los dos meses
anteriores (-2,54% en abril y -0,24% en mayo), para el segundo trimestre en su conjunto significa
un crecimiento anual de 0%, menor al observado en el primer trimestre (2%). Los sectores de
químicos continuaron reportando problemas de disponibilidad de materias primas, mientras que
otros sectores como vehículos, confecciones, azúcar y bebidas entre otros contribuyeron al repunte
del sector en el mes.
Los indicadores del sector de la construcción indican que la producción de cemento mostró un
crecimiento anual de 0,83% en el segundo trimestre frente a 8,3% en el primero y las licencias de
construcción continuaron contrayéndose a un ritmo elevado.
Por el contrario, en el caso del sector agropecuario la recuperación de la producción de café, que
creció 18% anual en el segundo trimestre, así como la expansión registrada en el sacrificio de
ganado en los meses de abril y mayo, permiten esperar que el sector revierta los registros de
crecimientos negativos de los últimos dos trimestres. Así mismo, dado el comportamiento del
crédito, el sector de servicios financieros debería crecer a un ritmo similar al del trimestre anterior
que fue alto.
La escasa información del tercer trimestre arroja resultados mixtos. La confianza de los
consumidores registró un aumento ligero en el mes de julio, luego de las caídas que se presentaron
en el mes de junio. Este indicador supera su promedio histórico y el promedio de todo 2011. Ello
muestra que el consumo de los hogares habría continuado expandiéndose.
Sin embargo, por el lado de la industria, los indicadores líderes, como los de pedidos, los de
existencias y de expectativas de producción en tres meses de la Encuesta de Opinión Empresarial
(EOE) de junio, continuaron desmejorando aunque desde niveles todavía altos. Esto vino
acompañado con una caída de la confianza de los industriales, lo cual podría estar anticipando un
pobre desempeño de la industria en los próximos meses. No obstante, la demanda de energía, tanto
la regulada como la no regulada, en julio creció a un buen ritmo acelerándose frente al segundo
trimestre. Además en julio, las ventas de vehículos reportadas por Econometría cayeron en términos
anuales (-2,6%) continuando la tendencia decreciente que viene observándose desde hace ya un
semestre. Esta caída se explica por una disminución en las ventas de automóviles particulares,
vehículos utilitarios y pick ups, que juegan un papel importante en el consumo de bienes durables
de los hogares. Por el contrario, las ventas de vehículos de uso comercial (carga y de transporte de
pasajeros) crecieron a tasas anuales importantes, lo que sugiere un buen comportamiento de la
inversión de equipo de transporte.
Dada la información anterior, se mantiene el pronóstico de crecimiento para todo 2012 entre 3% y
5%.
c. Variables Financieras.
En julio el crédito total (MN y ME) presentó una tasa anual de crecimiento de 17,2%, menor a la
del mes anterior (17,6%) y a la observada en marzo (19,7%). Se acumula un año de moderación del
crédito, pues en julio de 2011 crecía a una tasa anual de 23,3%.
La desaceleración mensual y trimestral se manifestó principalmente en las modalidades de cartera a
los hogares. Para la de consumo, el incremento anual en julio fue de 20,9% menor al del mes
anterior (22,3%) y al de marzo (25,4%). Para la hipotecaria la variación anual fue de 16,0%, menor
a la del mes anterior (16,5%) y a la de marzo (17,2%). Por su parte, la cartera comercial tuvo un
crecimiento anual de 15,56% manteniendo una dinámica similar a la del mes anterior 15,53%, como
resultado de una compensación entre la desaceleración de la cartera en moneda nacional y la
aceleración de la cartera en moneda extranjera. Sin embargo, el crecimiento en julio fue menor que
el presentado en marzo (17,5%)
Por su parte, las tasas de interés real (descontando el IPC sin alimentos) en julio para créditos de
consumo, hipotecario y comercial ordinario, en su orden, se ubicaron en 16,5%, 10,0% y 9,3%,
tasas menores a sus promedios respectivos calculados desde 1998 (excluyendo la de crédito
hipotecario cuyo promedio se mide a partir de mayo 2002). Desde el principio de mayo de 2012, la
TIB comenzó a desviarse por encima de la tasa de referencia del BR, alcanzando la mayor
desviación de 30 pb el 30 de julio. Posteriormente, en la medida en que las necesidades de liquidez
del mercado se han reducido, dicha desviación también ha presentado una corrección y se ubica al
23 de agosto, 16 pb por encima de la tasa de referencia.
d. Contexto Externo
Los resultados de actividad económica del segundo trimestre confirman el debilitamiento del
crecimiento mundial. El PIB de la zona del euro cayó frente al nivel observado en el primer
trimestre, y el crecimiento económico de los Estados Unidos y de algunos países emergentes de
Asia fue un poco más débil. Los mercados financieros internacionales siguen volátiles y los riesgos
provenientes de Europa continúan afectando la confianza de los empresarios y de los hogares.
La zona del euro se contrajo en el segundo trimestre del año como consecuencia de la recesión que
enfrentan las economías de la periferia y del nulo crecimiento de Francia. El crecimiento positivo de
Alemania no fue suficiente para compensar la caída de economías como las de España e Italia. A
esto se sumó la fuerte contracción del Reino Unido. Indicadores más recientes apuntan a que las
economías europeas podrían continuar deteriorándose en el tercer trimestre del año. Esto se
desprende, por ejemplo, de la caída fuerte que se observó en las expectativas de empresarios y
consumidores en julio completando once meses con un balance negativo.
En los Estados Unidos, por su parte, el crecimiento del PIB se desaceleró en el segundo trimestre.
Algunos indicadores de actividad real a julio, como la producción industrial y las ventas al por
menor, evidencian que la economía ha seguido expandiéndose lentamente. No obstante, la
confianza de empresarios y consumidores continua en niveles bajos.
Otras economías desarrolladas como Japón mostraron señales de debilitamiento en el segundo
trimestre del año. Los efectos del deterioro del comercio externo sobre todo con la zona euro están
en buena parte detrás de este fenómeno.
Las economías emergentes, en especial las asiáticas, también han moderado su ritmo de expansión
como consecuencia de la menor demanda de la zona del euro. Con cifras al segundo trimestre del
año, el crecimiento anual del PIB se desaceleró en China y en otros países de la región como
Singapur y Corea del Sur. Esta tendencia se mantuvo en julio según lo muestran algunos
indicadores de actividad real. Así, la expansión de las ventas al por menor, la industria y las
exportaciones se debilitaron nuevamente en China y algo similar sucedió para otros países de Asia.
La tendencia hacia la desaceleración económica también se observó en Brasil, donde la producción
industrial continuó contrayéndose en términos anuales en junio. Sin embargo, en otros países de la
región como México, Perú, Chile y Venezuela, la expansión del PIB mantuvo un buen ritmo gracias
a que la demanda interna ha permanecido dinámica. Aun así, en estos últimos países las
exportaciones y la producción industrial también muestran signos de debilitamiento.
Los precios internacionales de algunos productos básicos agrícolas y del petróleo repuntaron
después de haber presentado descensos en julio. En el primer caso, las fuertes sequías en los
Estados Unidos y en otros países productores de cereales explican el incremento en el precio de
estos bienes. Por el lado del petróleo, factores geopolíticos, la menor producción y unos inventarios
más bajos de lo esperado generaron presiones al alza en su cotización. Pese a ello, si la
desaceleración de la economía mundial continúa, los precios del petróleo podrían descender
nuevamente. En los últimos meses la inflación global ha seguido contenida, lo cual ha permitido
mantener la política monetaria expansiva en las economías desarrolladas. Algunos bancos centrales
de países emergentes, como Brasil, China y Corea del Sur, entre otros, han adoptado una política
menos restrictiva frente a la desaceleración de la actividad real. Si bien existe un riesgo
inflacionario asociado con el reciente aumento de los precios de alimentos y del petróleo, se espera
que las tasas de interés de referencia internacional se mantengan en niveles bajos durante el resto
del año y buena parte de 2013.
Se espera que en lo que falta de 2012 los problemas en Europa se sigan transmitiendo a las otras
economías como ya lo sugieren las últimas cifras de comercio exterior y de industria a nivel
mundial. Ello eleva la probabilidad de un crecimiento mundial aún más débil en el futuro.
Al igual que está ocurriendo en muchos países emergentes, el debilitamiento de la economía
mundial afecta el crecimiento de la economía colombiana a través numerosos canales cuyo accionar
se vio en la crisis anterior, tales como la caída de los volúmenes y precios de exportación; la
reducción de las remesas de los trabajadores, el deterioro de los términos de intercambio y la
pérdida de confianza de empresarios y consumidores.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
La Junta Directiva por unanimidad acordó reducir en 25 p.b. su tasa de interés de intervención. De
esta forma la tasa base para las subastas de expansión será de 4.75%. La decisión se tomó teniendo
en cuenta lo siguiente:
(i) Los resultados del segundo trimestre confirman el debilitamiento del crecimiento mundial. El
PIB de la zona del euro cayó frente al nivel observado en el primer trimestre, y el crecimiento
económico de los Estados Unidos y de algunos países emergentes de Asia fue un poco más débil.
Los mercados financieros internacionales siguen volátiles y los riesgos provenientes de Europa
continúan afectando la confianza.
(ii) Las últimas cifras de comercio exterior y de industria a nivel mundial también sugieren una
mayor transmisión de los problemas en Europa al resto de las economías. Ello eleva la probabilidad
de un crecimiento mundial aún más débil en el futuro.
(iii) Los precios internacionales de algunos productos básicos agrícolas se han incrementado como
consecuencia de sequías registradas en países productores. La cotización del petróleo también
subió, luego de haber disminuido en el segundo trimestre del año.
(iv) En Colombia, el valor de las exportaciones de bienes básicos de origen minero continuó
desacelerándose y creció 0,7% anual, explicado fundamentalmente por menores precios
internacionales. A su vez, las agrícolas y las del resto de sectores, en especial industriales, cayeron
21,4% anual y 3,8% anual, respectivamente.
(v) Las cifras de industria y comercio en junio resultaron algo mejor a lo esperado, aunque con
crecimientos bajos. En el mismo mes la encuesta de Fedesarrollo de la industria volvió a reflejar un
deterioro en la confianza y en el volumen de pedidos así como un aumento en las existencias. La
confianza de los consumidores aumentó un poco en julio y se encuentra por encima del promedio
observado en 2011.
(vi) El crecimiento del crédito continúa desacelerándose, disminuyendo el riesgo de desbalances
financieros. La moderación reciente ha estado concentrada en el crédito a los hogares, el cual
continúa creciendo a tasas altas. Las tasas de interés reales se encuentran en niveles cercanos al
promedio observado desde el año 2000 y la tasa de interés interbancaria se ha situado por encima de
la tasa de interés de intervención.
(vii) La inflación observada y la esperada en diciembre de 2012 descendieron a tasas cercanas a 3%.
Las medidas de inflación básica se mantuvieron relativamente estables y el promedio de los cuatro
indicadores que calcula el Banco se situó en 3%.
(viii) Las expectativas de inflación a todos los plazos disminuyeron. Las derivadas de los TES a 2, 3
y 5 años se situaron alrededor de 2,4%.
De acuerdo con la evaluación del actual balance de riesgos, la Junta Directiva consideró apropiado
reducir la tasa de interés de intervención. La nueva información permitirá establecer acciones
futuras de política monetaria, tanto la concerniente al desarrollo de los eventos en los países
avanzados y su impacto en la confianza, la demanda global y los precios internacionales de los
bienes básicos, como la proveniente de la dinámica interna.
Adicionalmente, con el fin de suministrar más liquidez permanente a la economía, la Junta decidió
que, en lo que resta de agosto y el mes de septiembre, comprará US$ 700 millones mediante el
mecanismo de subastas diarias de, al menos, US$ 20 millones.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva acordó por unanimidad reducir la tasa de interés de intervención en 25 p.b.
La Junta reitera que el Banco de la República cuenta con las herramientas y recursos suficientes
para atender las necesidades de liquidez en moneda local y extranjera que regularmente requiere la
economía y aquellas que pudieran aparecer en un ambiente de turbulencia financiera internacional.
La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo de la situación internacional, del
comportamiento y proyecciones de la inflación, el crecimiento, el comportamiento de los mercados
de activos y reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible.
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2012-09-01 | -
Minutas de la reunión de la JDBR del 28 de septiembre de 2012
El 28 de Septiembre de 2012 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la
Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito
Público, Mauricio Cárdenas Santamaria, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de
dedicación exclusiva, Fernando Tenjo, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Juan Pablo
Zárate y César Vallejo, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento
económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria.
1. ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor aumentó 8 pb en agosto respecto a julio y se situó en 3,11%. Para
el año corrido a agosto el ajuste del IPC ha sido 2,03%, significativamente menor que el ocurrido en
igual período de 2011 (2,64%). El aumento en la inflación total en agosto se concentró en los
grupos de alimentos y de no transables sin alimentos ni regulados.
Con respecto al IPC sin alimentos, su variación anual permaneció prácticamente estable en 2,75%,
resultado de un alza en el componente de no transables y una caída en transables y en regulados. El
aumento en la variación anual de no transables (de 3,7% en julio a 3,9% en agosto) se explicó sobre
todo por el subgrupo de diversión (boletas de fútbol). El dato de agosto es el más alto desde julio
del año pasado y puede marcar un nuevo nivel para este indicador en los próximos meses. Sin
embargo, este comportamiento obedecería más a una base de comparación baja que a un aumento
en las presiones de demanda. En no transables conviene resaltar la situación de la variación anual de
arriendos, la cual se mantuvo en 3,7% como en los dosmeses anteriores, quebrando la tendencia
ascendente que traía desde comienzos de 2011.
Con respecto a otras subcanastas, la variación anual de transables sin alimentos ni regulados se
mantuvo cerca a 1,0%, como viene sucediendo desde mayo y coincidiendo con una leve
depreciación anual del tipo de cambio. Los regulados por su parte, presentaron una disminución en
su variación anual de 3,5% en julio a 3,1% en agosto, debido principalmente a la reducción en la
variación anual de los combustibles a 1,1%, la cual guarda relación con los menores precios del
petróleo observados en la primera mitad del año.
Respecto al IPC de alimentos, la variación anual presentó un leve repunte (a 4,0%), con lo que se
interrumpió la tendencia descendente que traía desde abril. Esto sucedió básicamente por los
aumentos de precios en el grupo de alimentos perecederos, aunque en este caso la variación anual
permaneció en terreno negativo. Cabe resaltar que los precios de los bienes básicos se han
incrementado poco, lo que sugiere que las alzas de precios internacionales de meses anteriores aún
no se han transferido a la inflación al consumidor.
La inflación básica también aumentó en el último mes. De acuerdo con el promedio de los cuatro
indicadores de inflación básica monitoreados por el Banco de la República, en agosto esta fue de
3,12%, frente a 3,04% del mes anterior. Este promedio ha oscilado entre 3,00% y 3,15% desde
noviembre del año pasado.
En materia de costos, el IPP mantuvo una variación anual muy baja (0,13%) aunque en ascenso,
después de dos meses de registros negativos. Los aumentos se concentraron en el IPP de producidos
y consumidos, sobretodo en minería, debido a los incrementos registrados en el precio de los
productos refinados del petróleo.
En este último mes se presentó un leve repunte de las expectativas de inflación después de varios
meses de descensos. Según la encuesta mensual a operadores del mercado financiero, la inflación
esperada para diciembre de este año es 2,99% (frente a 2,93% en el mes anterior); el aumento se dio
sobretodo en la inflación de alimentos. Por su parte, las expectativas derivadas de los TES
aumentaron a todos los horizontes alrededor de 25 pb. Excepto las de diez años, las demás se
mantuvieron por debajo del 3,0% pero convergiendo a este valor.
b. Crecimiento
De acuerdo con el registro del PIB para el segundo trimestre de 2012, publicado por el DANE, la
economía colombiana creció en ese período a una tasa anual de 4,9%, justo por encima del techo
del rango de pronóstico presentado por la SGEE en el Informe sobre Inflación de Junio (entre 3,3%
y 4,8%). Este resultado implicó una aceleración trimestral de 1,6% (6,7% trimestral anualizado), la
mayor en los últimos cuatro trimestres y superior al 0,2% del primer trimestre del año.
El comportamiento de la economía en el período se debió al dinamismo de la demanda interna que
más que compensó el deterioro de la demanda externa. En efecto, la demanda interna en el segundo
trimestre registró una tasa de crecimiento anual mayor que la observada un trimestre atrás (6,9% vs
6,0%). Por el contrario, las exportaciones crecieron solo 2% anual, registro significativamente
menor al 6,6% del primer trimestre y al 11,4% de crecimiento promedio para 2011. Por su parte, las
importaciones lo hicieron a una tasa anual de 9,5%, también menor que la registrada en los
primeros tres meses del año y al promedio para 2011 (12,4%, y 21,5% respectivamente). En
conjunto, las exportaciones netas contribuyeron negativamente al crecimiento del PIB (-2,2%).
La aceleración de la demanda interna se explicó principalmente por la dinámica de las inversiones
en construcción y edificaciones, y en obras civiles. Dentro de estas últimas se destacaron los
crecimientos que registraron las destinadas a la minería y construcción de vías férreas y pistas
aéreas. Otros componentes de la inversión, como el equipo de transporte y la maquinaria y equipo,
continuaron exhibiendo tasas de crecimiento anual importantes.
El consumo del gobierno contribuyó también al dinamismo de la demanda interna. Este rubro
presentó variaciones anuales superiores a las esperadas y mayores que las registradas en el primer
trimestre del año (4,6%, frente a 3,1%). Su crecimiento fue el mayor observado desde mediados del
año 2010.
En contraste con lo anterior, el consumo de los hogares continuó desacelerándose. Su variación
anual fue de 4,0% (equivalente a su promedio desde 2000), luego de que en el primer trimestre
había sido de 5,7%. A nivel desagregado, también se registraron menores tasas de crecimiento en
todos sus componentes, destacándose aquellas en el consumo de bienes durables y no durables.
Por ramas de actividad, los sectores que más crecieron durante el segundo trimestre de 2012 fueron
la construcción (18,4%), tanto por edificaciones como por obras civiles, la minería (8,5%) y los
servicios financieros (5,1%). El único sector que registró una caída anual fue la industria (-0,6%).
Para el tercer trimestre, los indicadores sugieren menores crecimientos en la actividad económica.
En particular en el caso del consumo de los hogares se podría haber presentado un crecimiento
anual en el tercer trimestre menor que el observado en la primera mitad del año (5,0%). En efecto,
en julio las ventas del comercio al por menor reportadas por el DANE mostraron una variación
anual de 1,3%, menor al 4,0% de junio. En esa misma dirección, los datos más recientes de ventas
de vehículos indicarían que el consumo de bienes durables en el tercer trimestre también habría
crecido menos que lo observado en la primera mitad del año. Según información publicada por
Econometría, en agosto las compras de automotores registraron variaciones anuales negativas de
alrededor del 10%. Adicionalmente, se observó la caída del indicador de confianza del consumidor
de Fedesarrollo para el mes de agosto, aunque su nivel se encuentra todavía por encima del
promedio histórico.
A pesar de lo anterior, los indicadores del mercado laboral, una variable importante para predecir el
comportamiento del consumo, no muestran un deterioro claro en los últimos meses. Es así como el
número de ocupados asalariados y totales con cifras a julio siguió creciendo a tasas cercanas al
4,5%. Lo anterior ha permitido que la tasa de desempleo a nivel nacional siguiera cayendo en
términos anuales. Para las trece principales áreas metropolitanas se observó un leve incremento en
la tasa, el primero en 2 años, el cual estuvo acompañado por un aumento importante en la oferta de
trabajo.
Por el lado de la oferta, los pocos indicadores disponibles para el tercer trimestre de 2012 sugieren
un débil crecimiento de la industria y el comercio. En el primer caso, la producción aumentó 1,5%
en julio y los indicadores de pedidos, existencias y confianza empresarial de Fedesarrollo
continuaron deteriorándose lentamente aunque se mantienen en niveles relativamente buenos. Por
otro lado, el crecimiento de la demanda de energía eléctrica industrial se desaceleró en agosto desde
5,8% a 2,4%, variable altamente correlacionada con el IPI. Sin embargo, cabe señalar que la
demanda de energía regulada creció 4,7%.
En el caso del comercio, en julio los comerciantes consultados por Fenalco señalaron una caída en
la percepción de sus ventas, y un deterioro de sus expectativas a 6 meses. Algo similar arroja la
encuesta de Fedesarrollo, que para el mismo mes registró una caída en la percepción de la situación
actual y futura del negocio de los empresarios del sector.
Por otra parte, las exportaciones totales colombianas en dólares cayeron anualmente 4% en julio,
alcanzando un valor de US$4.694 millones. Esto se debió fundamentalmente a la caída de 9,4% en
las mineras, ya que las agrícolas e industriales y otras crecieron 30,6% y 5% respectivamente. En el
caso de los bienes de origen minero, el único rubro que descendió fue el de petróleo y derivados (-
18,5% anual). Las mayores exportaciones de productos agrícolas se explican por el aumento en los
valores exportados de banano (104%) y flores (58%), lo cual compensó la reducción de 1,4% en las
exportaciones de café.
c. Variables Financieras
En agosto el crédito total (MN y ME) presentó una tasa anual de crecimiento de 16,35%, menor en
83 pb y en 334 pb a los niveles observados el mes anterior y en marzo, respectivamente.
La desaceleración mensual fue liderada por la cartera comercial, cuyo incremento anual se redujo
132 pb, pasando de 15,56% a 14,24% entre julio y agosto. Por su parte, la cartera a los hogares se
mantuvo cerca a la observada el mes anterior (pasó de 19,54% a 19,45%), dado que los
crecimientos registrados en agosto de las carteras de consumo (20,76%) e hipotecaria (15,91%), en
su orden, solo disminuyeron 11 y 5 pb frente a julio.
Con relación a marzo, la moderación de la cartera comercial y la destinada a los hogares ha sido
similar, con reducciones en la tasa de crecimiento de 322 pb y 364 pb, respectivamente.
En agosto, las tasas de interés real (descontando el IPC sin alimentos) para créditos de consumo,
hipotecario y comercial ordinario, en su orden, se ubicaron en 16,3%, 10,2% y 9,4%, tasas menores
a sus promedios respectivos calculados desde 2000 (excluyendo la de crédito hipotecario cuyo
promedio se mide a partir de mayo de 2002). De otra parte, las tasas de interés reales para créditos
otorgados con tarjeta y, para las modalidades preferencial y tesorería se ubicaron en 26,9%, 6,2% y
5,8%, tasas mayores a sus promedios calculados desde 2000.
d. Contexto Externo
Las decisiones recientes de los bancos centrales de las principales economías desarrolladas en torno
a ampliar la política monetaria laxa que han venido sosteniendo durante los últimos años, hace
pensar que las tasas de interés de política de los países desarrollados deberán permanecer en niveles
cercanos a cero mas allá de 2014 y la liquidez global aumentará en los próximos meses. Así, en la
zona del euro el BCE anunció la compra ilimitada de bonos de deuda pública a los países que
soliciten ayudas y se sometan a un plan de ajuste. Por su parte, la reserva federal de los Estados
Unidosimplementó una tercera ronda de relajamiento cuantitativo (QE3), esta vez condicionada a la
evolución del mercado laboral. Al mismo tiempo, el banco central de Japón extendió su política
expansionista. Lo anterior, podría incrementar los flujos de capital hacia las economías emergentes
y generar presiones a la apreciación de sus monedas.
Las medidas adoptadas por el BCE darían tiempo a las demás autoridades de la región para avanzar
en la integración económica y reactivar el crecimiento de sus economías. En este sentido, en el
último mes la Corte Constitucional alemana ratificó la legalidad del mecanismo europeo de
estabilización, que podría comenzar a funcionar en los próximos meses. De la misma forma, las
autoridades europeas continuaron sus diálogos sobre la creación de un organismo centralizado de
supervisión bancaria, sin embargo los avances siguen siendo lentos.
La actividad económica global ha seguido desacelerándose en los últimos meses, en especial en las
economías de la zona del euro y en aquellas con mayor exposición a ella. El menor dinamismo de la
industria y del comercio exterior ha explicado en gran parte este hecho.
Con cifras a julio, en la zona del euro algunos indicadores de actividad real siguieron contrayéndose
en términos anuales (producción industrial, crédito a los consumidores y ventas al por menor). Por
su parte, los índices de sentimiento de empresarios y consumidores continuaron deprimidos en
agosto, lo que podría implicar un deterioro adicional de la actividad real en los próximos meses.
En la medida en que las políticas adoptadas por las autoridades europeas comiencen a tener efectos
sobre la confianza en la región, se podría empezar a observar efectos positivos sobre el crecimiento.
Sin embargo, es de prever que la respuesta de la actividad económica difícilmente logrará
concretarse en lo que resta del año.
En los Estados Unidos la producción industrial se contrajo fuertemente en agosto y se desaceleró en
la comparación anual, situación que podría repetirse en los próximos meses como lo anticipa el
índice de gestores de compras en el sector manufacturero (PMI). De la misma forma, las últimas
cifras sobre exportaciones y el mercado laboral evidenciaron que el estancamiento en estos
indicadores habría continuado en el tercer trimestre. A pesar de lo anterior, el sector de servicios, las
ventas reales al por menor, y el sector inmobiliario siguieron expandiéndose según las últimas cifras
disponibles. En este contexto, se espera que la expansión de la economía de Estados Unidos haya
continuado a un ritmo moderado durante el tercer trimestre.
En relación con los países emergentes, la actividad real ha seguido desacelerándose en las
principales economías asiáticas, en especial en China e India. En el primer caso la desaceleración
podría estar siendo superior a la esperada por las autoridades de este país, las cuales se han visto en
la necesidad de implementar políticas adicionales para incentivar la demanda interna.
En América Latina la actividad real en el segundo trimestre siguió expandiéndose a un ritmo
favorable en México, Chile y Perú, apoyada en el dinamismo de la demanda interna, en especial la
pública. En Brasil, la última información disponible muestra señales de un mejor desempeño que
estaría relacionado con los estímulos implementados meses atrás por las autoridades económicas en
ese país.
Los precios internacionales del petróleo se han reducido en las últimas semanas. Al parecer, algunos
países de la OPEP están dispuestos a aumentar la producción para garantizar precios más bajos que
los observados en los últimos tres meses y que serían más consistentes con la situación económica
actual. Sin embargo, Pese a las caídas, el precio promedio del petróleo permanece relativamente
alto.
En relación con los precios de los alimentos, algunos cereales han interrumpido las subidas
presentadas a mitad de año. Sin embargo, aún permanecen en niveles elevados que podrían generar
presiones inflacionarias en algunas economías emergentes, que en todo caso serían transitorias.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
A efectos de la discusión la Junta Directiva consideró los siguientes elementos:
(i) Los indicadores de actividad económica publicados en el mes pasado confirman un pequeño
debilitamiento de la economía mundial. En Europa las condiciones económicas continuaron
debilitándose y el PIB de la región probablemente cayó en el tercer trimestre. Estados Unidos crece
a un ritmo moderado y la economía de Japón también muestra debilidad. En este contexto, y sin
presiones inflacionarias, los bancos centrales de Europa, Estados Unidos y Japón anunciaron
mayores estímulos monetarios y por un período más prolongado. En un buen número de países
emergentes el factor común ha sido la desaceleración de las exportaciones y de la producción
industrial.
(ii) Los precios internacionales de los productos básicos descendieron pero siguen elevados. En
consecuencia, los términos de intercambio de Colombia continúan altos y estimulan el ingreso
nacional. No obstante, según el último dato disponible (julio) el valor total de las exportaciones del
país cayó por el debilitamiento de la demanda externa y la disminución en los precios del petróleo.
(iii) En Colombia, el crecimiento del PIB en el segundo trimestre (4,9% anual) superó al rango
estimado por el equipo técnico (entre 3,3% y 4,8%). Esta subestimación obedeció a un crecimiento
de la demanda interna (6,4% anual) superior a lo proyectado. Las cifras de actividad económica en
el tercer trimestre sugieren que el aumento anual del PIB será menor que el del segundo trimestre.
Para todo 2012, es probable que el crecimiento de la economía sea superior al punto medio del
rango estimado (entre 3% y 5%).
(iv) En agosto el crecimiento del crédito continuó desacelerándose, disminuyendo el riesgo de
desbalances financieros. Las tasas de interés reales se encuentran en niveles cercanos al promedio
observado desde el año 2000.
(v) La inflación y el promedio de las medidas de inflación básica aumentaron levemente en agosto
pero se sitúan muy cerca del punto medio del rango de inflación (en 3,1%). Las expectativas de
inflación a un año se mantuvieron estables en 3,3%, mientras que las que resultan de los TES a 2, 3
y 5 años aumentaron pero siguen por debajo del 3% (punto medio del rango meta).
Unos miembros resaltaron que las cifras de actividad económica sugieren que la economía está
convergiendo a su nivel de crecimiento potencial en un contexto en que las medidas de inflación
básica y las expectativas se encuentran muy cerca de la meta de largo plazo (3%).
Resaltaron además el dinamismo de la demanda interna, basado en las inversiones de construcción
y obras civiles, el crédito que sigue creciendo a tasas importantes, los favorables términos de
intercambio que continúan estimulando el ingreso nacional y el buen comportamiento del empleo.
Las tasas de interés reales se encuentran en niveles cercanos al los promedio calculados desde el
2000. Lo anterior indica que la política monetaria adoptada por la Junta es coherente con el
crecimiento sostenible a largo plazo. No obstante, la nueva información permitirá establecer
acciones futuras de política monetaria, tanto la concerniente al desarrollo de los eventos en los
países avanzados y su impacto en la confianza, la demanda global y los precios internacionales de
los bienes básicos, como la proveniente de la dinámica interna, en consecuencia propusieron
mantener inalterada la tasa de interés de referencia.
Otros miembros resaltaron que la política monetaria debe mirar hacia adelante. La actividad
económica global ha seguido desacelerándose, en especial en las economías de la zona euro así
como la actividad en las economías asiáticas. La debilidad del contexto externo, en especial el
desempeño de los precios de los productos minero energéticos, hace muy vulnerable la economía
colombiana y contagiará su desempeño económico interno. En la actividad económica interna se
resalta que la inflación así como las expectativas continúan convergiendo hacia el punto medio del
rango meta.
Si bien la demanda se mantiene dinámica por ramas de actividad al descontar la minería o las obras
civiles del PIB se observa una leve 10desaceleración, en especial es inquietante el pobre
comportamiento de laindustria. El consumo de los hogares continuó desacelerándose y se observó
una caída del indicador de confianza del consumidor. Como quiera que una buena política
monetaria yace en la capacidad de anticipación, los miembros consideraron que es necesario reducir
la tasa de interés de intervención.
3. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
De acuerdo con la evaluación del actual balance de riesgos, la Junta Directiva del Banco de la
República por mayoría decidió dejar inalterada su tasa de interés de intervención. De esta forma la
tasa base para las subastas de expansión continuará en 4,75%.
La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo de la situación internacional, del
comportamiento y proyecciones de la inflación, el crecimiento, el comportamiento de los mercados
de activos y reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible.
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2012-10-01 |
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Minutas de la reunión de la JDBR del 26 de octubre de 2012
El 26 de Octubre de 2012 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la
Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito
Público, Mauricio Cárdenas Santamaria, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de
dedicación exclusiva, Fernando Tenjo, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Juan Pablo
Zárate y César Vallejo, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento
económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria.
1. ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor disminuyó en septiembre levemente respecto al mes anterior
situándose en 3,08%. Para el año corrido a septiembre el ajuste del IPC ha sido de 2,32%,
significativamente menor que el registrado en igual período de 2011 (2,95%). La leve disminución
en la inflación total se concentró en el IPC de alimentos.
En el IPC de alimentos, la variación anual descendió 40 pb en el último mes situándose en 3,7%.
Desde hace un año se observa una tendencia a la desaceleración de esta tasa por el comportamiento
favorable de los precios de los alimentos perecederos.
Dentro del IPC sin alimentos, el mayor incremento se observó en el IPC de regulados (3,31%), 18
pb más que el registro de agosto. Este comportamiento obedeció principalmente al ajuste en el
precio de los combustibles y al incremento en las tarifas de energía eléctrica. Las variaciones
anuales de los otros componentes de la canasta – servicios públicos y transporte público urbano –
disminuyeron.
En el mes de septiembre, los IPC de transables (1,09%) y no transables (4,02%) también
presentaron aumentos en las variaciones anuales. En el primer caso, el aumento de 12 pb frente a la
variación anual del mes anterior obedeció principalmente a los reajustes en los pasajes aéreos y a
aumentos en los precios de vehículos. En no transables, la aceleración de 8 pb frente a la variación
anual del mes anterior se concentró en el rubro de arriendos que se situó en 3,9%, el dato más alto
desde finales de 2010.
En el último mes el promedio de los cuatro indicadores monitoreados por el Banco de la República
se situó en 3,16% frente a 3,12% de agosto.
La variación anual del IPP total en septiembre fue de 0,13%, valor similar al de agosto. El IPP
importado continuó en terreno negativo gracias en parte a la estabilidad que muestra la tasa de
cambio, mientras que el IPP de bienes producidos y consumidos en el país es positivo pero muy
bajo.
En el último mes no se registraron cambios de importancia en las diferentes mediciones de
expectativas de inflación. Según la encuesta mensual a los operadores de mercado la inflación
esperada para finales de este año es de 3,1% y de 3,2% para septiembre de 2013. Por su parte, la
encuesta trimestral efectuada a empresas y que se recogió a comienzos de octubre, arrojó una
inflación esperada para diciembre y a doce meses de 3,4%. Finalmente, las medidas derivadas de
los TES a 2, 3 y 5 años convergieron hacia 3%.
b. Crecimiento
Para el tercer trimestre, los indicadores de oferta y demanda muestran señalas mixtas. Sin embargo,
la información más relevante sugiere que la actividad económica en este periodo se desaceleró
frente a lo observado en el primer semestre del año.
Por el lado de la demanda, los indicadores de ventas al por menor del comercio, las ventas de
vehículos y los niveles de confianza son evidencia de que el consumo de los hogares es menos
dinámico. De acuerdo con el DANE, en agosto las ventas del comercio crecieron a una tasa anual
de 1,2%, menor al 1,4% registrado en julio y al 4,0% de junio. Esta desaceleración fue explicada en
parte por la caída en las ventas de automotores y motocicletas (-3,7% anual). De hecho, las ventas
del comercio minorista sin vehículos ni combustibles aumentaron 2,5% anual. Los niveles de
confianza del consumidor en el tercer trimestre fueron menores que los observados en el segundo.
La recuperación del índice de confianza en el mes de septiembre no compensó los descensos
registrados en los dos meses anteriores. Con esta evolución reciente, el indicador mantiene la
tendencia decreciente observada desde comienzos de 2012.
Sin embargo, otras variables apuntan a que la desaceleración del gasto total de los hogares podría
ser no muy pronunciada. Por un lado, las importaciones en dólares en julio y agosto dirigidas al
sector de consumo crecieron anualmente 12,9% y 11,9% respectivamente. Adicionalmente, el
ingreso de las familias no se ha visto afectado, a juzgar por el buen comportamiento del empleo
especialmente del asalariado que crece a una tasa anual de 6,8%, y por una inflación cercana al
punto medio del rango meta. El crédito dirigido al consumo se ha desacelerado, pero sigue
creciendo a tasas altas junto a unas tasas de interés reales que se encuentran en el promedio
calculado desde el 2000.
Con respecto a la inversión, la información disponible indica que la dinámica observada en el
segundo trimestre podría mantenerse. Las importaciones de bienes de capital para la industria se
aceleraron en el promedio para julio y agosto, frente a lo registrado en el trimestre abril-junio. Sin
embargo, las importaciones de bienes de capital para la agricultura y las importaciones de equipo de
transporte registraron caídas en los meses de julio y agosto.
Respecto a las exportaciones, las totales en dólares cayeron 9% anual en agosto (sin incluir las
rexportaciones de aeronaves; cuando éstas se incluyen, la variación anual es de -7,6%). Esto se
debió fundamentalmente a la caída de 14,6% en las exportaciones mineras, ya que las agrícolas e
industriales y otras crecieron a tasas anuales de 2,7% y 5,8% respectivamente. En el caso de los
bienes de origen minero, los rubros que mostraron caídas fueron los de petróleo y derivados (-2,9%
anual) y carbón (-55% anual). Las mayores exportaciones de productos agrícolas se explican por el
aumento en los valores exportados de café (15% anual) ya que las exportaciones de banano y flores
cayeron anualmente 14% y 3% respectivamente.
Por el lado de la oferta, los indicadores disponibles para la industria continuaron mostrando un
pobre desempeño. La variación anual del IPI sin trilla de café para el mes de agosto fue de -1,9%.
Este comportamiento es explicado en parte por una menor demanda externa producto de la
debilidad de la economía mundial. En Colombia, al igual que en otros, la debilidad de la economía
mundial se ha visto reflejada en el menor crecimiento de las exportaciones y de la producción
industrial.
Adicionalmente, de acuerdo con Fedesarrollo, la confianza industrial continuó deteriorándose en
agosto. Algo similar ocurrió con las expectativas de la producción a tres meses. Por su parte el
indicador de existencias de la industria (que es contra cíclico) mostró una tendencia ascendente,
aunque su nivel es aún bajo. El volumen de pedidos de la industria continuó deteriorándose. Todo
ello sugiere un crecimiento bajo de este sector en los próximos meses. A pesar de lo anterior, la
demanda de energía no regulada industrial, la cual tiene una alta correlación con el IPI, creció en
septiembre a una tasa anual de 3,4% (2,4% en agosto), por lo que se pudo dar en este mes una
aceleración de la producción industrial. En el caso del comercio, de acuerdo con la encuesta de
Fedesarrollo para agosto, la situación económica de los comerciantes mostró un leve repunte,
mientras que las expectativas a 6 meses se mantuvieron estables. Pese a esto, la tendencia continúa
sugiriendo una moderación del crecimiento del sector para los próximos meses. Algo similar se
desprende de la encuesta de Fenalco.
Algunas cifras asociadas con los sectores de la agricultura y la minería registraron mejoría en los
últimos meses. Tal es el caso de la producción cafetera en el período comprendido entre julio y
septiembre, que de acuerdo con la Federación de Cafeteros creció 20% anual. Por su parte, de
acuerdo con el Ministerio de Minas y Energía, la producción de petróleo en septiembre fue de 956
mil barriles diarios, cifra superior a lo observado en los tres meses anteriores (927 MBD).
Pese a las señales de desaceleración, la expansión en los trimestres siguientes continuará impulsada
por la demanda interna. Un sistema financiero saludable, la confianza de los hogares y un mercado
laboral dinámico seguirán apoyando el crecimiento del consumo. Por su parte, los precios de los
bienes básicos, los niveles de confianza, la disponibilidad de financiamiento interno y externo y la
inversión extranjera directa contribuirán al dinamismo de la inversión. Así, para todo el año 2012 el
rango de pronóstico de crecimiento de la economía se ubica entre 3,7% y 4,9%.
c. Variables Financieras
En Septiembre, el crédito bancario (MN y ME) presentó una tasa anual de crecimiento de 16,1%,
menor a la del mes anterior (16,4%) y a la observada en junio del presente año (17,5%).
Las carteras comercial y a los hogares continuaron desacelerándose durante el tercer trimestre. El
crecimiento anual de la cartera comercial en moneda nacional pasó de 16,6% a 14,4% entre el 29 de
junio y el 5 de octubre, en tanto, la de moneda extranjera presentó un leve repunte pero aún no se
observa una tendencia consolidada. Por su parte, el crecimiento anual de la cartera de consumo en el
trimestre pasó de 21,2% a 19,1%, y el de la cartera hipotecaria disminuyó de 16,0% a 15,4%, en el
mismo período.
En septiembre, las tasas de interés real (descontando el IPC sin alimentos) para créditos de
consumo, hipotecario, comercial ordinario y preferencial se ubicaron, en su orden, en 15,7%,
10,0%, 8,8% y 5,8%, tasas menores a sus promedios respectivos calculados desde 2000.
d. Contexto Externo
Los datos más recientes muestran que Europa continúa contrayéndose y los Estados Unidos crecen
a un ritmo moderado. En los países emergentes se destaca la desaceleración de China y otras
economías del Sudeste Asiático, como consecuencia del debilitamiento de sus exportaciones y
producción industrial. En América Latina, con excepción de Brasil, el ritmo de crecimiento de las
economías de mayor tamaño se ha mantenido en un buen nivel, gracias al dinamismo de la demanda
interna.
En la zona del euro tanto la producción industrial como las ventas al por menor siguen cayendo en
términos anuales. De igual forma, los índices de confianza de los consumidores y de la industria
continúan deteriorándose y la tasa de desempleo que se encuentra en niveles elevados no da señales
de mejoría. Sin embargo, las condiciones en los mercados financieros y de deuda pública han
mejorado respecto al trimestre anterior gracias en parte a los anuncios del Banco Central Europeo
sobre la compra ilimitada de títulos soberanos (OMT). Este plan ha sido bien recibido por los
mercados, lo cual ha mejorado la confianza de los agentes.
En el caso de Estados Unidos, la economía se sigue expandiendo a un ritmo moderado al alcanzar
un crecimiento de 2% en el tercer trimestre, a pesar de la menor demanda externa. Algunos
indicadores en el mercado de vivienda y del mercado laboral han mejorado. La industria se ha
desacelerado, pero las medidas de sentimiento han empezado a recuperarse. Por el lado de la
demanda, los hogares han seguido aumentando su consumo y la confianza se ha recuperado. El
crecimiento de las exportaciones ha seguido moderándose por la mayor debilidad externa. En un
contexto de bajas presiones inflacionarias, debilidad en la demanda y percepción de riesgos ante la
situación en Europa, las autoridades monetarias de los Estados Unidos anunciaron que mantendrían
la tasa de interés en niveles bajos al menos hasta el 2015. En el futuro cercano el mayor riesgo para
esa economía yace en el campo fiscal.
En China, al igual que en otros países del Asia, se viene observando un patrón similar de
desaceleración en el crecimiento de las exportaciones, la actividad industrial y las ventas al por
menor, que paulatinamente empieza a reflejarse en un menor ritmo de actividad económica. En el
caso de China la reducción del crecimiento se vio acentuada por medidas de política monetaria que
buscaban moderar la demanda interna para prevenir presiones inflacionarias.
En América Latina, aunque el crecimiento de las exportaciones se ha frenado de manera
significativa en países como Chile, Perú, México, Venezuela y Ecuador, el ritmo de expansión se ha
mantenido favorable. El debilitamiento en la actividad externa ha sido compensado por el
dinamismo de la demanda interna y en varios casos ha permitido que el producto crezca a un nivel
cercano al potencial.
Pese a la desaceleración de la economía global, los precios internacionales del petróleo han
permanecido en niveles elevados, como consecuencia de las mayores tensiones geopolíticas en
Oriente Medio y en el Norte de África. Por su parte, los precios de los alimentos han mostrado una
reducción en las últimas semanas gracias a la normalización de los fenómenos climáticos de mitad
de año. En este contexto, la inflación global continúa en rangos tolerables, lo que junto con un débil
crecimiento económico ha permitido a los bancos centrales, especialmente de las economías
desarrolladas, mantener una política monetaria fuertemente expansiva.
Las condiciones financieras internacionales han mejorado en las últimas semanas, en parte por las
acciones de política de los principales bancos centrales del mundo. La volatilidad ha disminuido y
los precios de algunos activos han aumentado. No obstante, la incertidumbre asociada a los
problemas de las finanzas públicas y de los bancos privados en algunas economías avanzadas
continúa siendo alta por lo que los riesgos a la baja para el crecimiento mundial siguen vigentes.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
A efectos de la discusión la Junta Directiva consideró los siguientes elementos:
(i) Los indicadores de actividad económica en el tercer trimestre de 2012 confirman la debilidad de
la economía mundial. Europa continúa contrayéndose y los Estados Unidos crecen a un ritmo
moderado. La desaceleración observada en algunas de las economías emergentes de mayor tamaño
parece estar estabilizándose. En este contexto, y sin presiones inflacionarias, es de esperar que la
tasa de interés externa se mantenga baja por un período prolongado. Asimismo, a pesar del menor
crecimiento mundial, el precio internacional del petróleo y otros productos básicos permanecen
altos.
(ii) Las condiciones financieras internacionales han mejorado, en parte por las acciones de política
de los principales bancos centrales del mundo. La volatilidad ha disminuido y los precios de
algunos activos han aumentado. No obstante, la incertidumbre asociada a los problemas de las
finanzas públicas y de los bancos en algunas economías avanzadas continúa siendo alta.
(iii) En Colombia, al igual que en otros países, la debilidad de la economía mundial se ha visto
reflejada en el menor crecimiento de las exportaciones y de la producción industrial. Los términos
de intercambio continúan altos y estimulan el ingreso nacional.
(iv) Pese a las señales de desaceleración, la expansión en los trimestres siguientes continuará
impulsada por la demanda interna. Un sistema financiero saludable, la confianza de los hogares y
un mercado laboral dinámico seguirán apoyando el crecimiento del consumo. Por su parte, los
precios de los bienes básicos, los niveles de confianza, la disponibilidad de financiamiento interno
y externo y la inversión extranjera directa contribuirán al dinamismo de la inversión.
(v) El crecimiento del crédito continúa desacelerándose y los índices de precios de la vivienda
nueva y usada se encuentran en niveles históricamente altos.
(vi) La inflación, el promedio de los indicadores de inflación básica y las expectativas se encuentran
muy cerca al punto medio del rango meta (3%,).
(vii) El mayor riesgo sobre la actividad económica del país continúa siendo una fuerte recesión en
Europa. Al parecer, su probabilidad de ocurrencia ha disminuido, dadas las acciones de las
autoridades europeas y las reacciones de los mercados en ese continente.
Unos miembros propusieron mantener inalterada la tasa de interés de referencia considerando que,
si bien las cifras de actividad económica muestran una desaceleración, ésta se ha presentado a partir
de un punto en el cual el gasto agregado superaba la capacidad productiva de la economía. El
crecimiento del PIB en 2012 será satisfactorio teniendo en cuenta la situación internacional y que el
PIB se encuentra cerca a su nivel potencial. Las medidas de inflación básica y las expectativas de
inflación están alrededor de la meta de largo plazo (3%). Consideraron, además, que el dinamismo
de la demanda interna, estimulado, entre otros, por las inversiones en construcción y obras civiles y
los términos de intercambio, continuará estimulando el ingreso nacional y el empleo. Los precios de
la vivienda continúan aumentando a tasas altas y el crédito se ha desacelerado pero crece a buen
ritmo, variables que también deben ser tenidas en cuenta en la definición de la postura monetaria
con el fin de minimizar los riesgos de desbalances futuros en estas variables.
Otros miembros consideraron que, como quiera que una buena política monetaria yace en la
capacidad de anticipación y que la inflación y sus expectativas continúan convergiendo hacia el
punto medio del rango meta de largo plazo, hay espacio para reducir la tasa de interés de
intervención. Lo anterior, en un contexto de actividad económica global débil por cuenta de una
recesión más fuerte y prolongada en Europa y el lento crecimiento de Estados Unidos y algunos
países emergentes, que hace vulnerable la economía colombiana en razón a la composición de sus
sectores exportadores. Adicionalmente, los indicadores de demanda interna, consumo, confianza del
consumidor, crédito y el comportamiento de la industria indican que la economía se ha venido
desacelerando.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
De acuerdo con la evaluación del actual balance de riesgos, la Junta Directiva del Banco de la
República por mayoría consideró apropiado mantener la tasa de interés de intervención en 4,75%.
La nueva información permitirá establecer acciones futuras de política monetaria, tanto la
concerniente al desarrollo de los eventos en los países avanzados y su impacto en la confianza, la
demanda global y los precios internacionales de los bienes básicos, como la proveniente de la
dinámica interna.
La Junta reitera que el Banco de la República cuenta con las herramientas y recursos suficientes
para atender las necesidades de liquidez en moneda local y extranjera que regularmente requiere la
economía y aquellas que pudieran aparecer en un ambiente de turbulencia financiera internacional.
La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo del comportamiento y proyecciones de la
actividad económica e inflación en el país, de los mercados de activos y la situación internacional.
Finalmente, reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible.
Bogotá, D. C.
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2012-11-01 |
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Minutas de la reunión de la JDBR del 23 de noviembre de 2012
El 23 de Noviembre de 2012 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la
Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito
Público, Mauricio Cárdenas Santamaria, el Gerente General, José Darío Uribe, y los directores de
dedicación exclusiva, Fernando Tenjo, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Juan Pablo
Zárate y César Vallejo, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento
económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria.
1. ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación
En octubre la inflación anual al consumidor se situó en 3,06%, cifra similar a la observada el mes
anterior (3,08%). Para el año corrido a octubre, el aumento acumulado del IPC ha sido de 2,48%,
significativamente menor al registrado en igual período de 2011 (3,15%), lo que sugiere una alta
probabilidad en el cumplimiento de la meta de inflación este año.
El comportamiento de los grandes subgrupos del IPC durante octubre fue muy similar al del mes
pasado. Dentro del IPC sin alimentos, la variación anual de los precios de la canasta de transables
sin alimentos ni regulados en octubre estuvo cerca del 1,1%, nivel que se ha mantenido desde hace
varios meses, consistente con la estabilidad del tipo de cambio. La variación anual del IPC de no
transables sin alimentos ni regulados se mantuvo en 4,0%, con los arriendos, su principal
componente, aumentando 7 pb frente al mes anterior y situándose en 4,9%. En el grupo de no
transables, ítems como los servicios de educación y salud presentan ajustes anuales superiores al
4,0% desde comienzos de año, los cuales han sido compensados por los menores aumentos en los
precios de otros servicios relacionados con la diversión, cultura y esparcimiento y otros servicios.
Respecto a los regulados, los precios de esta canasta aumentaron en octubre 3,3% frente a los
registrados en el mismo mes del año pasado, dato similar al de septiembre. Los combustibles
volvieron a ejercer una presión alcista (aumentando 120 pb a 4,4%), pero los servicios públicos
tuvieron un comportamiento opuesto (descendieron 62 pb a 2,0%), debido a las rebajas en las tarifas
de energía eléctrica que compensaron parcialmente las alzas del mes anterior.
El IPC de alimentos aumentó 3,6% frente a lo registrado en el mismo mes del año pasado. El
descenso de los precios internacionales de varios alimentos como los del café, azúcar y algunas
oleaginosas y cereales habría permitido la moderación en los ajustes de precios internos de los
alimentos procesados, cuya variación anual pasó de 4,3% a 3,7% entre septiembre y octubre. En
octubre se observó menor caída de la variación anual del IPC de alimentos perecederos (de -2,4% a
-0,6%). Las comidas fuera del hogar presentaron un ajuste superior al 5,0%, similar al de meses
anteriores.
La inflación básica tampoco presentó cambios de importancia en este último mes. Para el promedio
de los cuatro indicadores monitoreados por el Banco de la República se observó un registro de
3,11%, levemente inferior al de septiembre (3,16%). Desde noviembre del año pasado esta variable
ha presentado pocos cambios, oscilando en un rango entre 3,0% y 3,2%.
La variación anual del IPP total en octubre fue de -1,1%, registro inferior al de septiembre. El IPP
importado continuó en terreno negativo gracias a la estabilidad de la tasa de cambio y los descensos
en varios precios de las materias primas. La variación anual del IPP de bienes producidos y
consumidos en el país se redujo de 0,6% en septiembre a -0,5% en octubre. Dicha situación permite
vislumbrar menores presiones sobre la inflación hacia los próximos meses.
En lo que respecta a las expectativas de inflación, según la encuesta mensual efectuada a los
analistas de las entidades financieras, la inflación esperada a diciembre de este año es de 3,0% y a
doce meses de 3,2%, sin cambios respecto al mes pasado.
b. Crecimiento
En septiembre se observaron señales mixtas sobre el desempeño de la actividad económica.
Indicadores como los de ventas al por menor sin vehículos mostraron una aceleración importante,
mientras que la producción industrial continuó en retroceso tal como se había previsto. A esto se
suma la contracción no anticipada de las importaciones de bienes de capital y el menor crecimiento
de las exportaciones.
Por otro lado, el índice de confianza del consumidor de Fedesarrollo con cifras a octubre se
mantuvo en niveles similares a los observados en septiembre y por encima del dato de octubre del
año pasado y de su promedio calculado desde el año 2001, lo cual sugiere que el consumo de los
hogares mantiene un dinamismo similar al de su promedio histórico (4%). Aun así, lo más probable
es que el crecimiento anual en este periodo haya sido inferior al observado en la primera mitad del
año, en parte por una alta base de comparación.
Adicionalmente, la encuesta regional mensual que realiza el Banco de la República muestra que el
componente tendencial de las expectativas de ventas a un horizonte de 12 meses aumentó entre julio
y septiembre, después de haber caído en la primera mitad del año. Las expectativas de generación
de empleo de la misma encuesta muestran un comportamiento similar.
Por el lado de la inversión privada, si bien la información es escasa, los resultados de las
importaciones de bienes de capital a septiembre sugieren un comportamiento menos dinámico para
este agregado que el proyectado anteriormente. Estas compras cayeron 24,2% frente al mismo mes
del año anterior. Excluyendo aviones, la caída fue de 15,2%. Se destaca la disminución en las
compras de maquinaria industrial, que cayeron 26% anual frente al mismo mes del año anterior,
hecho que contrasta con las tasas positivas de los meses de julio y agosto (20% en promedio).
En el mes de septiembre las exportaciones totales en dólares crecieron 4,9% frente al mismo mes
del año pasado (6,1% si se incluyen las re-exportaciones de aviones). Las ventas externas
continuaron lideradas por las de petróleo, mientras que las de carbón volvieron a caer y las
industriales se mantienen estancadas. Por su parte, las exportaciones de origen agrícola presentaron
una caída de 7,7% frente al mismo mes del año anterior, dado el menor valor exportado de café y
banano. Si bien el crecimiento anual de las ventas externas totales en este mes fue mayor al
obtenido en agosto, las tasas anuales de crecimiento de los últimos meses son inferiores a las
observadas en la primera mitad del año.
Dentro de los indicadores por el lado de la oferta, se destaca que la producción industrial sin trilla
de café, según el DANE, registró una variación anual en septiembre de -1,3%. Los indicadores de
confianza, pedidos, existencias y expectativas de la encuesta de Fedesarrollo para la industria de
septiembre, junto con la demanda de energía del sector para octubre, sugieren que la contracción de
la producción industrial se prolongará.
Las últimas cifras de los sectores agrícola y minero son positivas. Según la federación de cafeteros
la producción de café habría crecido en el tercer trimestre a una tasa anual un poco superior al 20%.
Así mismo, la producción de petróleo en septiembre y octubre registró un repunte significativo,
después de los pobres resultados de los cuatro meses anteriores atribuidos a choques de oferta.
En conclusión, el crecimiento de la economía colombiana se ha desacelerado a partir de tasas
observadas por encima de sus niveles de tendencia en el segundo semestre de 2011. Luego de un
crecimiento anual de 4,8% en la primera mitad de 2012, los indicadores recientes de actividad
sugieren una moderación en el crecimiento un poco mayor a la esperada. La debilidad de la
economía mundial y el descenso en la demanda interna se han visto reflejados en el menor
crecimiento de las exportaciones y la contracción de la producción industrial. El rango de
pronóstico del crecimiento del PIB para 2012 está entre 3,7% y 4,9%, con 4,3% como la cifra más
probable. Para 2013 se espera un crecimiento cercano al crecimiento de la capacidad productiva.
c. Variables Financieras
En octubre continuó la moderación del crédito bancario (M/N y M/E) como ha sido característico a
lo largo del año. Su tasa anual de crecimiento fue de 15,3%, menor en 43 pb y 221 pb frente a la
observada el mes anterior y en junio, respectivamente.
El crecimiento anual de la cartera comercial en moneda nacional pasó de 16,9% en junio a 14,2%
en octubre, mientras el componente en moneda extranjera lo hacia en el mismo mes en 6,2%.
Tendencia similar presentó la cartera de consumo, con tasas de crecimiento de 22,2%, y 18,9% en
los meses ya mencionados. Por su parte, la desaceleración de la cartera hipotecaria ha sido menos
acentuada con tasas de variación de 16,4%, y 15,6% en igual periodo.
Las tasas de interés real (descontando el IPC sin alimentos) para los desembolsos de octubre de
créditos de consumo, hipotecario, comercial ordinario y preferencial, en su orden, se ubicaron en
15,6%, 9,9%, 9,0% y 5,6%, niveles menores a sus promedios respectivos calculados desde 2000.
De otra parte, las tasas de interés reales para créditos otorgados con tarjeta y para la modalidad de
tesorería se ubicaron en 26,5%, y 5,3%, tasas mayores a sus promedios calculados desde 2000.
d. Contexto Externo
En términos generales la actividad global ha evolucionado en línea con lo esperado en los pasados
informes sobre inflación. La incertidumbre internacional se mantiene por cuenta de los riesgos de
una profundización de la crisis en Europa y de una posible contracción en Estados Unidos en 2013
atribuida al “abismo fiscal”. La última información disponible apunta a una menor probabilidad de
una desaceleración de la economía china.
En la Zona Euro, durante el tercer trimestre el PIB se contrajo nuevamente. La información
disponible para el cuarto trimestre del año (índices de gestión de compras, índices de confianza,
etc.), indica que la contracción de la actividad económica muy probablemente continúa en el cuarto
trimestre. Cabe resaltar que la situación de los países de la periferia estaría restando nuevamente
dinamismo a Alemania y Francia, donde se espera una desaceleración para el último trimestre del
año.
En los Estados Unidos, la expansión ha seguido a un ritmo modesto, como lo evidencia el
comportamiento de las ventas al por menor, las exportaciones y la actividad industrial. No obstante,
cabe resaltar que el mercado inmobiliario ha continuado recuperándose y para los próximos
trimestres se espera que siga aportando de forma positiva al crecimiento, aunque todavía desde un
nivel bajo.
Para el caso de América Latina, los indicadores de actividad real muestran un crecimiento bajo de la
economía brasilera, mientras que Chile y Perú continúan expandiéndose a un ritmo favorable. La
economía mexicana se está desacelerando, la venezolana si bien creció, se espera una
desaceleración importante en el próximo año.
Las monedas y la percepción de riesgo hacia las economías de la región, no han presentado cambios
importantes en un entorno de estímulo monetario implementado por los países desarrollados.
Los precios internacionales del petróleo se han mantenido relativamente estables en las últimas
semanas; sin embargo, las tensiones geopolíticas en Oriente Medio podrían incrementarlos
nuevamente. Los precios de los alimentos, con excepción del trigo, han revertido el alza de mitad
de año.
En Colombia, los términos de intercambio que habían descendido hacia mediados de año, volvieron
a recuperarse en septiembre y octubre y se encuentran en niveles históricamente altos lo que es
explicado por las elevadas cotizaciones del petróleo y por los menores ritmos de ajuste de los
precios de bienes importados.
Las bajas presiones inflacionarias y brechas del producto negativas siguen permitiendo a los países
desarrollados mantener una política monetaria expansiva. Las economías emergentes han
presentado un mejor crecimiento económico aunque inferior a su potencial, con unas tasas de
interés de referencia alrededor de la natural. Se espera que en 2013 esta situación continúe.
Hacia el futuro, los mayores riesgos continúan siendo una fuerte recesión en Europa, con impactos
negativos y significativos sobre los términos de intercambio, la confianza y la demanda agregada de
Colombia. También, la posibilidad de que se presente el llamado abismo fiscal en Estados Unidos
sigue vigente, situación que podría tener efectos negativos importantes.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
A efectos de la discusión, la Junta Directiva consideró los siguientes elementos:
(i) La incertidumbre internacional se mantiene. Algunos indicadores económicos internacionales
han mejorado un poco. La debilidad de un buen número de economías industrializadas y la
inexistencia de presiones inflacionarias permiten esperar que las tasas de interés externas se
mantengan bajas por un período prolongado.
(ii) El crecimiento colombiano se ha desacelerado a partir de tasas observadas por encima de sus
niveles de tendencia en el segundo semestre de 2011. Luego de un crecimiento anual de 4,8% en la
primera mitad de 2012, los indicadores recientes de actividad sugieren una moderación en el
crecimiento un poco mayor a la esperada. La debilidad de la economía mundial y el descenso en la
demanda interna se han visto reflejados en el menor crecimiento de las exportaciones y la
contracción de la producción industrial. El rango de pronóstico del crecimiento del PIB para 2012
está entre 3,7% y 4,9%, con 4,3% como la cifra más probable.
(iii) Para 2013 se espera un crecimiento moderado pero sostenido de la demanda externa de
productos colombianos, niveles estables de los precios internacionales y amplias condiciones de
liquidez internacional. La inversión continuaría siendo impulsada por las obras civiles, por las
menores tasas de interés y por la expansión de los proyectos minero-energéticos. De esta manera, se
espera un crecimiento en 2013 cercano al crecimiento de la capacidad productiva.
(iv) El crecimiento del crédito continúa desacelerándose. Los índices de precios de la vivienda
nueva y usada se encuentran en niveles históricamente altos.
(v) La inflación, el promedio de los indicadores de inflación básica y las expectativas se encuentran
muy cerca al punto medio del rango meta (3%).
(vi) Los mayores riesgos sobre la actividad económica del país en 2013 continúan siendo una
recesión significativa en Europa o la posibilidad de que se presente un fuerte recorte fiscal en los
Estados Unidos.
Unos miembros propusieron reducir la tasa de interés de intervención a partir de varias
consideraciones. Mientras que la inflación y sus expectativas se encuentran en la meta de largo
plazo, los indicadores de industria, importaciones de bienes de capital y las ventas de bienes
durables sugieren que la economía se puede estar desacelerando más de lo esperado en relación a su
nivel de crecimiento potencial. Adicionalmente, a pesar de que las reducciones de la tasa de interés
de intervención parecen estar transmitiéndose adecuadamente al mercado, la percepción de riesgo
de los agentes locales sigue siendo alta.
Otros miembros consideraron que debe mantenerse inalterada la tasa de interés de referencia
teniendo en cuenta lo siguiente: Si bien el crecimiento de la demanda se ha reducido en lo corrido
del año, esto ha ocurrido a partir de niveles insostenibles del crecimiento del gasto privado en el
segundo semestre de 2011. No es evidente con la información disponible que el ajuste del gasto
haya sido, o vaya en camino de ser, mayor que el requerido para mantener el producto y el empleo
cerca de sus niveles sostenibles. Si bien el crédito se ha desacelerado, la financiación a empresas y
hogares crece a buen ritmo, de manera coherente con un apropiado dinamismo de la demanda
interna. Las tasas de interés reales, con excepción de las de tarjeta de crédito, son similares a las que
tuvo el país en el primer semestre de 2010, y que mostraron ser expansivas. Tanto la inflación y sus
expectativas, como las proyecciones de inflación para este año y el siguiente, se encuentran
alrededor de 3%. Si bien se mantienen altos niveles de incertidumbre en la economía mundial, las
noticias e indicadores internacionales disponibles en el último mes muestran unas perspectivas algo
más favorables para 2013 que las que se tenía en la reunión de Junta anterior. Algo similar ocurrió
con la confianza del consumidor y algunos otros indicadores. Consideraron, además, que su postura
parte de un supuesto de importantes inversiones en construcción y obras civiles, así como de la
existencia de términos de intercambio que sostienen niveles altos del ingreso nacional.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
De acuerdo con la evaluación del actual balance de riesgos, la Junta Directiva consideró apropiado
reducir la tasa de interés de intervención a 4,5%. Con la información actual, este es el nivel de tasa
de interés compatible con el crecimiento cercano a la capacidad productiva y el cumplimiento de la
meta de inflación.
La Junta reitera que el Banco de la República cuenta con las herramientas y recursos suficientes
para atender las necesidades de liquidez en moneda local y extranjera que regularmente requiere la
economía y aquellas que pudieran aparecer en un ambiente de turbulencia financiera internacional.
La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo del comportamiento y proyecciones de la
actividad económica e inflación en el país, de los mercados de activos y la situación internacional.
Finalmente, reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible.
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2012-12-01 |
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Minutas de la reunión de la JDBR del 21 de diciembre de 2012
El 21 de Diciembre de 2012 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la
Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito
Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los
directores de dedicación exclusiva, Fernando Tenjo Galarza, Carlos Gustavo Cano Sanz, Juan José
Echavarría Soto, Juan Pablo Zárate Perdomo y César Vallejo Mejía, en la cual se discuten las
situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones
relacionadas con la política monetaria.
1. ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación
La inflación anual al consumidor se redujo en noviembre por tercer mes consecutivo, situándose en
2,77%, 29 puntos base (pb) menos que el registro del mes anterior. Con este dato, la inflación
acumulada en lo corrido del año es de 2,34%. La variación anual de los precios de las canastas de
alimentos y sin alimentos presentaron reducciones importantes durante este mes.
Para el caso del IPC de alimentos, en noviembre la variación anual disminuyó de manera
significativa. El dato fue 3,0%, 55 pb por debajo del registro del mes anterior. Esta canasta presenta
una tendencia decreciente, con algunas interrupciones pequeñas, desde comienzos de 2011. Esto ha
sido posible por el buen comportamiento de los precios de los alimentos perecederos, cuya
variación anual en el mes fue de -1,95%, 130 pb menos que el registro de octubre. También se ha
presentado un descenso en la variación anual del IPC de alimentos procesados (3,12%) en los
últimos meses que ha ayudado a la tendencia decreciente del agregado. Desde junio de 2012, la
reducción en la variación anual ha sido de 200 pb. Finalmente, la variación anual del rubro de
comidas fuera del hogar disminuyó en el último mes 20 pb y se situó en 5,1%.
En el IPC sin alimentos, el grueso de la disminución de la variación anual de los precios en
noviembre se concentró en la canasta de regulados, cuya variación anual se situó en 2,8%, el
registro más bajo de los últimos tres años. La disminución del precio de los combustibles en el
último mes contribuyó de manera importante a este resultado. En noviembre también se presentó
una reducción en el ajuste anual del IPC de transporte público. En servicios públicos se presentaron
descensos mensuales en los IPC de energía y gas.
Los otros dos componentes del IPC sin alimentos – transables y no transables – también presentaron
reducciones en los cambios anuales en el último mes, aunque mucho más leves que las observadas
en la canasta de regulados. En el primer caso, la variación anual se situó en 0,94% lo que significó
una disminución de 12 pb frente a lo observado en octubre. Desde junio de 2012, la variación anual
de esta canasta ha estado alrededor de 1%. Este resultado puede estar en parte asociado a la
apreciación del tipo de cambio.
Para el IPC de no transables, sin alimentos ni regulados, el registro de noviembre fue de 3,97%, 6
pb menos que el registro de octubre. Este resultado puede ser explicado por la demanda agregada,
que ha presentado una desaceleración desde mediados del año que podría haber contenido ajustes de
precios más pronunciados. Es de resaltar que el rubro de arriendos, que ha presentado una tendencia
creciente desde hace dos años, presentó un leve descenso en esta oportunidad (4 pb) y se situó en
3,9%. Algunos otros servicios también presentaron una variación anual decreciente y contribuyeron
al resultado del agregado.
La inflación básica también se redujo en el último mes. El promedio de los cuatro indicadores de
inflación básica monitoreados por el Banco se redujo por tercer mes consecutivo, pasando de 3,11%
en octubre a 2,96% en noviembre.
La variación anual del IPP se mantuvo en terreno negativo y siguió disminuyendo, situándose en -
1,6% en noviembre. Parte de este descenso se explica por los precios agropecuarios pero también se
observa en los mineros y manufactureros. La apreciación del tipo de cambio y los menores precios
internacionales explican en parte dicho fenómeno.
Según la encuesta mensual efectuada a los analistas de las entidades financieras, la inflación
esperada a diciembre de este año es de 2,63% y a doce meses de 3,12%, lo que representa una
disminución frente a los resultados del mes pasado. Las expectativas derivadas de los TES (con
cifras al 12 de diciembre) se situaron alrededor de 2,5% para el horizonte de 2 a 5 años, entre 40 y
50 pb menos que hace un mes.
b. Crecimiento
En el tercer trimestre de 2012 el PIB se expandió a una tasa anual de 2,1%, por debajo del límite
inferior del rango de pronóstico presentado en el Informe sobre Inflación de septiembre (entre 3,3%
y 4,8%). Esta cifra indica una importante desaceleración con respecto al crecimiento económico del
segundo trimestre (4,9%) y más marcada que la esperada. En términos trimestrales esto significó
una caída de 0,7%, la primera en los últimos siete trimestres.
Por componentes del gasto, la desaceleración se presentó sobre todo en la demanda interna y
también en las exportaciones. En el primer caso, el crecimiento anual fue de 2,4%, frente a 7,1% del
segundo trimestre. El menor crecimiento del PIB y de la demanda interna tuvo origen en el rubro de
formación bruta de capital fijo, en particular por la pobre dinámica de las inversiones en obras
civiles, construcción y edificaciones y equipo de transporte, cuyos resultados mostraron una
contracción importante en términos anuales que no fue prevista (-14,9%, -10,7% y -10,9%
respectivamente). Dentro de las obras civiles se presentaron fuertes caídas en la inversión de
minería y en la construcción de carreteras y otras vías. En la inversión en edificaciones el menor
gasto se dio tanto en vivienda como en construcciones no residenciales.
En contraste, la dinámica del consumo privado (4%) y público (4,8%) en el tercer trimestre fue
similar a la observada en el segundo y mejor que lo esperado, aún cuando el crecimiento de bienes
durables presentó una contracción anual de 5,9% en el tercer trimestre de 2012. Por su parte, las
exportaciones, que en 2011 crecieron por encima del 11% real, en lo corrido de 2012 se han venido
desacelerando y en el tercer trimestre crecieron 2,5%. Esto refleja, en gran medida, el efecto de la
desaceleración mundial sobre el comercio exterior colombiano, así como las caídas observadas en
las producciones de petróleo y de carbón durante el tercer trimestre, debido a choques de oferta que
en principio serían transitorios. Así mismo, coherente con el menor dinamismo de la demanda
interna, el crecimiento real de las importaciones ha disminuido de 21,5% en 2011 a 8,8% en el
tercer trimestre de 2012.
Por el lado de la oferta, en el tercer trimestre, además de la contracción de la rama de construcción
(obras civiles y edificaciones), sobresalen el estancamiento del PIB industrial (con una tasa de
crecimiento anual de -0,1%) y el muy bajo crecimiento de minas y canteras (0,5%). El pobre
resultado para esta última rama contrasta con el importante ritmo de expansión observado en el
primer semestre de este año (10,8%) y se explica por choques de oferta en la producción de petróleo
y carbón. El comercio, una rama de gran peso dentro del PIB, se desaceleró de 4,3% en el segundo
trimestre a 3,7% en el tercero. También presentaron desaceleraciones los rubros de transporte y PIB
financiero. Por el contrario, tanto los PIB de agricultura como de servicios sociales, comunales y
personales se aceleraron.
Respecto al cuarto trimestre, los indicadores disponibles sugieren un desempeño similar al del
tercero en lo que respecta al consumo privado. El índice de confianza de los consumidores de
Fedesarrollo se mantuvo por encima de su promedio histórico calculado a partir de 2001 y fue
similar al de septiembre y octubre. De hecho, el promedio de lo corrido del cuarto trimestre superó
al observado en el tercer trimestre. Por otro lado, las importaciones de bienes de consumo en
dólares tuvieron un aumento de 22,4% en octubre frente al mismo mes del año pasado, lo que
representa una fuerte aceleración frente a los últimos meses. Por último, el crédito bancario dirigido
al consumo que venía desacelerándose en meses anteriores, no lo hizo en noviembre y creció a una
tasa anual (18,9%) similar a aquella registrada en octubre. Sin embargo, estos resultados contrastan
con el indicador de las ventas totales del comercio al por menor, que cayó 0,3% anual (excluyendo
los automóviles el retroceso fue de 0,2%). En septiembre el crecimiento anual había sido de 2,3%
(6,2% excluyendo automóviles). Para el consumo público y la inversión en obras civiles la
incertidumbre es alta, en especial teniendo en cuenta la gran volatilidad que han exhibido estas
series recientemente.
Las exportaciones colombianas en dólares aumentaron 5,2% en octubre respecto al mismo mes de
2011 (5,8% si se incluyen re-exportaciones de aviones). Este comportamiento es explicado por los
aumentos anuales en los valores despachados en los rubros de industriales y otros (18%), bienes
agrícolas (3,3%) y productos mineros (1,7%). Dentro de estos dos últimos grupos se destacan los
crecimientos anuales en las exportaciones de carbón y flores de 38,6% y 16%, respectivamente. En
el grupo de industriales, los ítems de vehículos (73,6%), productos químicos (10,4%) y alimentos y
bebidas (10%), presentaron la mayor contribución al crecimiento de las ventas externas.
En cuanto a los indicadores de oferta, la producción industrial de octubre creció a un ritmo anual de
1,2%. Por sub-ramas, las de mayor dinamismo fueron elaboración de bebidas (13,4%), vehículos
(13,4%), otros productos alimenticios (11,1%) y molinería y almidones (7,3%). Los resultados más
recientes de la EOE de Fedesarrollo en industria con información a noviembre no apuntan a
cambios en el desempeño del sector para los últimos dos meses del año. Los pedidos dejaron de
presentar caídas adicionales y el nivel de existencias disminuyó. Así mismo, el índice de confianza
de los empresarios mantuvo su tendencia descendente pero no mostró caídas adicionales. Algo
similar ocurrió en la encuesta regional del Banco de la República de octubre en la cual los
industriales sugieren una leve mejoría de su percepción sobre la situación de las ventas actuales,
mientras que la percepción de los próximos 12 meses continúa siendo menos favorable.
Para el comercio, los indicadores de Fenalco y Fedesarrollo muestran señales dispares. De acuerdo
con Fenalco, en noviembre los comerciantes registran una mejoría de su percepción sobre la
situación de las ventas actuales, mientras que las expectativas siguen siendo desfavorables. Por otra
parte, la encuesta mensual de Fedesarrollo sugiere que tanto las perspectivas actuales como las
expectativas a 6 meses mejoraron en los últimos dos meses.
En resumen, los datos del PIB para el tercer trimestre y las cifras más recientes del cuarto trimestre
de 2012 sugieren que el crecimiento para todo este año podría ser inferior a 4%. La mayor
incertidumbre en esta proyección se vuelve a originar en el comportamiento de la inversión,
principalmente la destinada a obras civiles y a edificaciones.
Para 2013 se espera que algunos de los factores que han frenado la inversión en 2012 se reviertan,
impulsando por esta vía la demanda interna. Este es el caso, por ejemplo, de algunos proyectos de
inversión en el sector minero-energético, los cuales han sufrido atrasos en el presente año. Algo
similar debería observarse en el rubro de construcción de carreteras y otras vías. Por su parte, las
condiciones que soportan el dinamismo observado del consumo y de la inversión en maquinaria y
equipo se mantendrían en 2013. Entre ellas, los niveles estables de empleo y confianza del
consumidor y la reducción de las tasas de interés de política en el segundo semestre de 2012, que se
están transmitiendo a las tasas de interés del crédito.
c. Variables Financieras
En Noviembre el crédito bancario (M/N y M/E) presentó una pausa en la moderación del
crecimiento. Su tasa anual fue de 15,2%, mayor en 12 pb frente a la de octubre y menor en 226 pb
al compararla con la de junio.
Este comportamiento se observó en todas las modalidades. La cartera comercial en moneda
nacional registró en noviembre un incremento anual de 14,3%, levemente superior al del mes
anterior (14,1%) e inferior al del primer semestre (16,9%). Para el componente en moneda
extranjera, el crecimiento anual fue de 5,8% continuando con una ligera recuperación desde el nivel
de julio (2%). En forma similar, la cartera de consumo repuntó un poco entre octubre (18,6%) y
noviembre (18,9%), pero con crecimiento menor al de junio (22,2%). Por su parte, la cartera
hipotecaria ha mostrado un comportamiento más estable, con variaciones anuales de 15,4% en
noviembre, 15,5% en octubre y 16,4% en junio.
Las tasas reales de interés (descontando el IPC sin alimentos) para los desembolsos de noviembre
de los créditos de consumo fue de 15,4%, para los hipotecarios de 10%, para el comercial ordinario
de 9,2% y para el preferencial de 5,7%. Estos niveles son menores a sus promedios históricos
respectivos calculados desde 2000. De otra parte, las tasas reales de interés para créditos otorgados
con tarjeta y para la modalidad de tesorería se ubicaron en 26,7%, y 5,5%, tasas mayores a sus
promedios calculados desde 2000.
d. Contexto Externo
Para el cuarto trimestre de 2012 la nueva información de los países desarrollados muestra que la
actividad económica es más débil de lo esperado. La zona del Euro siguió en recesión y sus
economías más grandes (Alemania y Francia) muestran señales de contracción mientras que
Estados Unidos volvió a mostrar signos de desaceleración. En los países emergentes, los nuevos
indicadores económicos de China sugieren una recuperación. Algunos indicadores de Brasil apuntan
a que la recuperación de esa economía podría continuar creciendo a un ritmo lento. En Chile y Perú
se siguen presentando crecimientos robustos originados principalmente en su demanda interna.
Con cifras a mediados de diciembre, los índices de actividad manufacturera y de servicios de la
zona del euro permanecieron en terreno contractivo, mientras que en noviembre la confianza de los
empresarios y de los consumidores se mantuvo deprimida. Cabe resaltar que la debilidad de la
región no es exclusiva de las economías de la periferia, pues los países más sólidos de Europa, con
Alemania a la cabeza, han venido perdiendo dinamismo.
Por su parte, en los Estados Unidos algunos indicadores de actividad real continúan mostrando un
comportamiento débil. Lo anterior es especialmente cierto en el caso de las ventas al por menor y de
la actividad industrial, que evidencian un virtual estancamiento con cifras a noviembre. La
incertidumbre alrededor del manejo fiscal, además de haber afectado las decisiones de inversión de
las empresas, ha comenzado a afectar la confianza de los consumidores. Por el lado positivo, la tasa
de desempleo se redujo nuevamente en noviembre y el mercado de vivienda continúa mostrando
señales de recuperación, aunque todavía en un nivel muy bajo.
Para el caso de las economías emergentes de Asia, el crecimiento económico disminuyó en la
mayoría de países durante el tercer trimestre. Sin embargo, con cifras a noviembre, en China las
ventas al por menor y la actividad industrial se aceleraron nuevamente, situación que estaría
contribuyendo a la recuperación del dinamismo de la región.
En América Latina, el crecimiento del tercer trimestre se aceleró en Brasil, Chile y Perú, mientras
que en México y Venezuela se mantuvo a un ritmo favorable. Pese al mayor crecimiento de la
economía brasilera, éste fue muy inferior al esperado por los analistas, situación que incrementó
ligeramente la percepción de riesgo de dicho país.
En relación con los precios internacionales de los bienes básicos, las cotizaciones del petróleo han
permanecido por debajo de lo observado en la primera mitad del año pero relativamente altas en
términos históricos. Los precios del café mantuvieron su tendencia descendente. De esta forma,
aunque los términos de intercambio de noviembre son menores que los observados a comienzos de
año, siguen siendo históricamente elevados y contribuyen a soportar el ingreso de Colombia. Para
2013 se espera que los términos de intercambio sean relativamente estables.
Los menores precios internacionales de los bienes básicos junto con la desaceleración en la
demanda, principalmente en los países desarrollados, han contribuido a la reducción de la inflación
en estos países. De forma similar, en América Latina, con excepción de Brasil, los precios han
mantenido una tendencia decreciente en los últimos meses. En el caso de las economías asiáticas no
se observa una tendencia común.
Las bajas presiones inflacionarias y una brecha de producto negativa han permitido a los bancos
centrales de países desarrollados mantener las tasas de interés cercanas a cero. En las economías
emergentes las tasas de interés de referencia se encuentran alrededor de la natural. Se espera que en
2013 estas situaciones no cambien, por lo que la abundancia de liquidez internacional continuaría.
Los riesgos que pesan sobre la economía global para 2013 siguen siendo los mismos que los
identificados en minutas anteriores y que se centran en la encrucijada fiscal de los Estados Unidos y
en el desenvolvimiento de la situación europea. Cabe la posibilidad de que el estímulo fiscal en
China favorezca un mayor crecimiento en este país y ayude a compensar un comportamiento más
flojo en Europa y Estados Unidos.
Con todo lo anterior, es factible que en 2013 el crecimiento promedio de los socios comerciales de
Colombia sea algo más débil de lo estimado anteriormente, aunque se sigue proyectando una cifra
superior al crecimiento de 2012.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
A efectos de la discusión la Junta Directiva consideró los siguientes elementos:
(i) El crecimiento del PIB del tercer trimestre de 2012 (2,1%) se situó por debajo del rango
proyectado por el equipo técnico del Banco de la República (entre 3,3% y 4,8%). La demanda
interna se desaceleró significativamente, de 7,1% en el segundo trimestre a 2,4% en el tercero. Esto
se explica en su totalidad por una fuerte e inesperada contracción de la inversión, en especial la de
obras civiles y edificaciones. En obras civiles se presentaron grandes reducciones en la inversión en
minería y en la construcción de carreteras y otras vías. En la inversión en edificaciones, la caída se
presentó tanto en vivienda como en construcciones no residenciales.
(ii) En contraste, la dinámica del consumo privado (4%) y público (4,8%) en el tercer trimestre fue
similar a la observada en el segundo y un poco mejor que la esperada, aún cuando el crecimiento de
bienes durables presentó una contracción anual de 5,9% en el tercer trimestre de 2012. Por su parte,
las exportaciones, que en 2011 crecieron por encima del 11% real, en lo corrido de 2012 se han
venido desacelerando y en el tercer trimestre crecieron 2,5%. Esto refleja, en gran medida, el efecto
de la desaceleración mundial sobre el comercio exterior colombiano. Así mismo, coherente con el
menor dinamismo de la demanda interna, el crecimiento real de las importaciones ha disminuido de
21,5% en 2011 a 8,8% en el tercer trimestre de 2012.
(iii) Los datos recientes sobre la economía mundial no cambian mayormente lo informado en el
comunicado del la Junta pasada. La incertidumbre internacional se mantiene. Algunos indicadores
económicos internacionales han mejorado un poco. La debilidad de un buen número de economías
industrializadas y la inexistencia de presiones inflacionarias permiten esperar que las tasas de
interés externas se mantengan bajas por un período prolongado.
(iv) Los anteriores resultados y las nuevas cifras económicas del cuarto trimestre de 2012 sugieren
que el crecimiento para todo el año podría ser inferior a 4%. La mayor incertidumbre en esta
proyección se vuelve a originar en el comportamiento de la inversión, principalmente la destinada a
obras civiles y a edificaciones.
(v) Para 2013 se espera que algunos de los factores que han frenado la inversión en 2012 se
reviertan, impulsando por esta vía la demanda interna. Este es el caso, por ejemplo, de algunos
proyectos de inversión en el sector minero-energético, los cuales han sufrido atrasos en el presente
año. Algo similar debería observarse en el rubro de construcción de carreteras y otras vías. Por su
parte, las condiciones que soportan el dinamismo observado del consumo y de la inversión en
maquinaria y equipo se mantendrían en 2013. Entre ellas, los niveles estables de empleo y
confianza del consumidor y la reducción de las tasas de interés de política en el segundo semestre
de 2012. Estas últimas se están transmitiendo a las tasas de interés del crédito. Por último, en el
contexto externo se prevé un crecimiento de la economía mundial ligeramente mayor al registrado
en 2012, términos de intercambio relativamente estables y abundancia de liquidez internacional. En
estas condiciones, se espera un crecimiento de la economía en 2013 superior al proyectado para este
año.
(vi) Los resultados de la inflación en noviembre fueron inferiores a lo esperado, lo cual se explica
principalmente por el comportamiento de los precios regulados y de los alimentos. La inflación, el
promedio de los indicadores de inflación básica y la mayoría de medidas de expectativas de
inflación se encuentran por debajo de la meta de 3%. Con la nueva información disponible se prevé
que ésta situación continúe por un tiempo.
(vii) En Noviembre el crédito bancario (M/N y M/E) presentó una pausa en la moderación del
crecimiento. Su tasa anual fue de 15,2%, mayor en 12 pb frente a la de octubre y menor en 226 pb
al compararla con la de junio. Este comportamiento se observó en todas las modalidades. La cartera
comercial en moneda nacional registró en noviembre un incremento anual de 14,3%, levemente
superior al del mes anterior (14,1%) e inferior al del primer semestre (16,9%). Para el componente
en moneda extranjera, el crecimiento anual fue de 5,8% continuando con una ligera recuperación
desde el nivel de julio (2%). En forma similar, la cartera de consumo repuntó un poco entre octubre
(18,6%) y noviembre (18,9%), pero con crecimiento menor al de junio (22,2%). Por su parte, la
cartera hipotecaria ha mostrado un comportamiento más estable, con variaciones anuales de 15,4%
en noviembre, 15,5% en octubre y 16,4% en junio.
La mayoría de los miembros de la Junta consideró apropiado reducir la tasa de interés de
intervención 25 pb, teniendo en cuenta nueva información en varios frentes. Por un lado, con los
datos de noviembre tanto la inflación observada como las proyecciones a tres trimestres se ubican
por debajo de la meta de largo plazo, en un contexto en que no se perciben presiones inflacionarias
por mayores costos o por factores climáticos. Por otro lado, los datos de crecimiento del PIB para el
tercer trimestre señalan una desaceleración de la actividad económica mayor a la esperada,
indicando la posibilidad de un exceso de capacidad productiva (brecha negativa del producto). Las
razones para esta mayor desaceleración de la economía pueden adjudicarse a problemas bien
identificados. Como es sabido, las condiciones externas vienen afectando negativamente el
comercio internacional y los precios de los bienes exportados desde hace varios trimestres. Si bien
estos precios se mantienen en niveles históricamente altos, son inferiores a los registrados en la
primera mitad del año. A esto ha venido a sumarse más recientemente un desplome de la demanda
interna asociado a la contracción de la inversión en obras civiles y en construcción de vivienda y no
residencial, principalmente. Esta contracción en buena medida se explica por factores exógenos de
tipo administrativo y regulatorio que podrían superarse, aunque sólo parcialmente, en el corto plazo.
Finalmente, si bien el crecimiento de la cartera se ha estabilizado en niveles relativamente altos,
éstos pueden estar reflejando más una mayor profundización financiera de la economía que un
excesivo endeudamiento de los agentes.
Otros miembros subrayaron que casi todos los indicadores sobre la marcha de la economía denotan
un ostensible deterioro de la misma: la industria en terreno contractivo (con un crecimiento negativo
en el tercer trimestre de -0.1%), en medio de una fuerte caída en el ritmo de crecimiento de la
demanda interna por los bienes de origen nacional; en particular, sectores como el siderúrgico, el
textil, las confecciones, el calzado, las manufacturas de cuero, los alimentos procesados, entre otros,
acusando notorio debilitamiento; adicionalmente, se observa una migración de la producción
nacional a la comercialización de bienes importados en especial en vestuario, calzado y
manufacturas de cuero; el comercio con un crecimiento mediocre, impulsado principalmente por las
importaciones de bienes de consumo; las tasas de crecimiento de la minería a gran escala
disminuyendo considerablemente; y la construcción contrayéndose de manera ostensible.
Indicadores líderes como el consumo de bienes durables y la inversión en vivienda muestran tasas
de crecimiento negativo en el tercer trimestre. En el plano internacional la demanda en general
continúa desacelerándose; en Asia, China con algunos signos de recuperación, pero India y Corea
del Sur, entre otros, perdiendo dinamismo; en Europa, las economías fuertes contagiándose de las
de la periferia, y la confianza cayendo; en Estados Unidos las exportaciones siguen debilitándose;
en América Latina, aunque en Chile y Perú la dinámica del crecimiento aún se mantiene, Brasil sólo
crecerá ese año cerca del 1%. En conclusión, la desaceleración de la economía es mucho más fuerte
que la esperada y la brecha del producto probablemente ha entrado en un terreno negativo. Por el
lado de la inflación, no se percibe riesgo alguno en el mediano plazo: la total cayó a 2,77%; el
promedio de las básicas se ubicó por primera vez por debajo del punto medio del rango meta; la
inflación sin alimentos en 2,68%; la de alimentos se redujo a 3,1%; es cada día más probable que
no se presente el fenómeno del Niño el año entrante; todas las expectativas de inflación también
disminuyeron; las de inflación sin alimentos a 12 meses cayeron al 2,8%; y por el lado de los
commodities agrícolas a nivel internacional, sus precios en general están cediendo. Finalmente, se
observa una desaceleración importante en la dinámica del crédito. En consecuencia, propusieron
una reducción de 50 puntos básicos en la tasa de interés de intervención.
Otro codirector expresó que, si bien los datos de PIB, demanda privada e inflación permiten prever
la existencia de un exceso moderado de capacidad instalada, esta no es la única variable que se debe
tener en cuenta al momento de establecer la postura de la política monetaria. Los diferentes agentes
del sector real, especialmente los hogares, muestran niveles elevados de apalancamiento que
afortunadamente se han venido desacelerando en el último semestre. Una tasa de interés de
intervención muy por debajo de la tasa de largo plazo puede revertir ese proceso de ajuste (como
comienza a insinuarse con las cifras disponibles en el último mes) e incrementar la vulnerabilidad
del sector real. La tasa de interés de intervención actual es baja en términos históricos y reducciones
adicionales la alejarían aún más de una tasa que pueda ser considerada neutral para una economía
que no ha padecido crisis financieras ni quiebras generalizadas en el sector productivo en el pasado
reciente. En conclusión, la actual postura de política es expansiva y adecuada para atenuar una
brecha del producto moderada, sin exacerbar las vulnerabilidades del sector real.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
De acuerdo con la evaluación del balance de riesgos, la mayoría de Junta Directiva consideró
apropiado reducir la tasa de interés de intervención a 4,25%.
La Junta reitera que el Banco de la República cuenta con las herramientas y recursos suficientes
para atender las necesidades de liquidez en moneda local y extranjera que regularmente requiere la
economía y aquellas que pudieran aparecer en un ambiente de turbulencia financiera internacional.
La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo del comportamiento y proyecciones de la
actividad económica e inflación en el país, de los mercados de activos y la situación internacional.
Finalmente, reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible.
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2013-01-01 |
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Minutas de la reunión de la JDBR del 28 de enero de 2013
El 28 de Enero de 2013 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta
Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público,
Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los directores de
dedicación exclusiva, Fernando Tenjo Galarza, Carlos Gustavo Cano Sanz, Juan José Echavarría
Soto, Juan Pablo Zárate Perdomo y César Vallejo Mejía, en la cual se discuten las situaciones
inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas
con la política monetaria.
1. ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación
En diciembre la inflación anual al consumidor cayó de manera significativa y mucho más que lo
esperado por el mercado y por el equipo técnico. El resultado al último mes del año fue 2,43%, 34
puntos base (pb) menos que el registro de noviembre, mes en el que también se había observado un
descenso importante. De esta forma, la inflación al consumidor se situó por debajo de la meta de
2012 y de largo plazo (3%) pero dentro del rango de 2% a 4%. Como ha ocurrido a lo largo del año,
la desaceleración de la inflación volvió a explicarse por el menor ritmo de aumento del IPC de
alimentos y del de regulados.
En el IPC de alimentos, la variación anual de diciembre (2,52%) mostró una caída de consideración
(49 pb) que se suma a la del mes anterior y a la de otros meses a lo largo del año. En el último mes
se acentuó la caída de los precios de un gran número de alimentos no procesados, pero también se
siguieron observando ajustes muy moderados o incluso negativos en los precios de varios productos
procesados o semi-procesados. En el caso de los alimentos no procesados, las caídas en los precios
pueden ser explicadas por las condiciones de oferta aceptables y los menores costos de insumos.
Para el caso de los alimentos procesados, el comportamiento bajista en los precios puede ser
atribuido a la caída en los precios internacionales del maíz y otros cereales, de las oleaginosas, de
los aceites y del café entre otros, a la apreciación del peso y a una oferta importada importante. Por
otra parte, la variación anual de las comidas fuera del hogar también descendió nuevamente, aunque
de forma leve, situándose en 4,9%.
Dentro del IPC sin alimentos, la subcanasta de regulados presentó una variación anual de 1,9%, (88
pb menos que el dato de noviembre) siendo el registro más bajo desde finales de 2008. Este rubro
ha presentado una variación anual en descenso a partir del cuarto trimestre de 2010 pero que se ha
acentuado en los últimos dos meses. En diciembre se presentaron disminuciones en la variación
anual de todos los rubros. La más fuerte se dio en el de servicios públicos y estuvo liderado por el
IPC de energía eléctrica que mostró variaciones anuales y mensuales negativas. En este caso, la
disminución de los riesgos del fenómeno de El Niño junto con la caída en la inflación al productor,
que hace parte de las fórmulas de regulación, habrían contribuido a este comportamiento. La
disminución en la variación del IPC de combustibles también fue importante (al cierre del año se
situó en solo 1,3%) y se relaciona con las rebajas en el precio de la gasolina.
Los otros dos componentes del IPC sin alimentos – transables y no transables – también presentaron
reducciones en los cambios anuales en el último mes. En el primer caso, la variación anual se situó
en 0,77% lo que significó una disminución de 17 pb frente a lo observado en noviembre. Desde
junio de 2012, la variación anual de esta canasta había estado alrededor de 1%. Este resultado puede
estar en parte asociado a la apreciación del tipo de cambio.
Para el IPC de no transables, sin alimentos ni regulados, la variación anual de diciembre fue de
3,92%, 5 pb menos que el registro de noviembre. Este resultado puede ser atribuido a la demanda
agregada que ha presentado una desaceleración desde mediados del año que podría haber contenido
ajustes de precios más pronunciados. El rubro de arriendos, que ha exhibido una tendencia creciente
desde hace dos años, presentó un leve descenso en esta oportunidad (5 pb) y se situó en 3,9%.
La inflación básica también presentó una caída significativa en su variación anual en diciembre. El
promedio de los cuatro indicadores monitoreados por el Banco se situó en 2,80%, 16 pb menos que
el dato de noviembre.
La variación anual del IPP se mantuvo en terreno negativo y siguió disminuyendo, situándose en
-2,9% en diciembre. Los descensos fueron marcados tanto en el IPP importado como en el IPP de
producidos y consumidos y en ambas canastas las variaciones anuales se situaron en terreno
negativo (-4,8% y -2,6% respectivamente). La apreciación anual, la estabilidad o descenso en los
precios internacionales y unas buenas condiciones de oferta agropecuaria explican este
comportamiento.
En lo que respecta a las expectativas de inflación, estas continuaron descendiendo en diciembre y a
comienzos de enero. La encuesta mensual más reciente del Banco indica que los analistas del
mercado financiero esperan una inflación a doce meses de 2,9% (frente a 3,1% hace un mes). En el
caso de la encuesta trimestral a empresarios, la inflación esperada a doce meses es de 3,1% (antes
era 3,4%), mientras que las estimaciones derivadas de los TES muestran una inflación esperada
cercana al 2,6% para horizontes de 2, 3 y 5 años.
b. Crecimiento
La información disponible para el cuarto trimestre sugiere que el crecimiento anual del producto se
aceleraría un poco en este periodo frente al trimestre anterior, pero a una tasa menor que la del
primer semestre de 2012.
Para el caso del consumo privado, las últimas cifras del comercio al por menor (con y sin
vehículos), la desaceleración del crecimiento anual de la cartera de consumo (18,4% en promedio
para el cuarto trimestre vs. 20,5% promedio para el tercero) y la estabilidad en el indicador de
confianza del consumidor reportado por Fedesarrollo, apuntan a que este rubro crecería en el cuarto
trimestre a una tasa menor que la observada en los primeros tres trimestres.
En la inversión, la incertidumbre sobre el comportamiento del rubro es elevada, especialmente la
del gasto en obras civiles, en construcción y en edificaciones. En otros componentes de este gasto
como la inversión en equipo de transporte, el aumento en noviembre de las importaciones CIF de
bienes de capital en equipo de transporte (4,6% anual) indicaría una posible mejoría frente a lo
observado en el tercer trimestre del año. Cabe destacar igualmente el crecimiento en noviembre de
las importaciones de bienes de capital para la agricultura (20,5% anual) y las de materiales de
construcción (19%).
Respecto a las exportaciones, las totales en dólares cayeron 7,7% en noviembre frente a las del
mismo mes de 2011 (-8,2% si se incluyen las re-exportaciones de aviones). El comportamiento en el
mes de noviembre se debe a la caída conjunta de las exportaciones de bienes mineros (-11,9%) y
agrícolas (-18,9%). Dentro de estos grupos se destacan las disminuciones en las exportaciones de
petróleo y derivados (-13,8%), carbón (-12,4%) y café (-42%). El grupo de exportaciones
industriales y otros, registró una variación anual positiva de 12,7% en noviembre de 2012,
destacándose los aumentos en las exportaciones de vehículos (246%), productos químicos (5,2%) y
maquinaria y equipos eléctricos (43%).
Por el lado de la oferta, los indicadores disponibles para la industria muestran un deterioro del
sector. La variación anual del IPI sin trilla de café para el mes de noviembre fue de -4,0%. El
componente tendencial del indicador tiene una pendiente negativa desde mayo de 2012.
Adicionalmente, de acuerdo con Fedesarrollo, la confianza industrial continuó deteriorándose en
noviembre. El indicador de pedidos no registró caídas adicionales, mientras que el indicador de
existencias (contra-cíclico a la producción) reportó un leve aumento. Sin embargo, esto no afectó
las tendencias negativas de ambos. Algo similar ocurrió con las expectativas de la producción a tres
meses. En línea con lo anterior, la demanda de energía no regulada industrial, la cual tiene una alta
correlación con el IPI, se contrajo en diciembre a una tasa anual de 0,8%. Cabe señalar que este
efecto también podría obedecer a un menor número de días hábiles respecto al mismo mes del año
anterior.
En contraste, en el caso del comercio, de acuerdo con la encuesta de Fedesarrollo para noviembre,
la situación económica de los comerciantes muestra un repunte en los últimos meses. De igual
manera, las expectativas a 6 meses sugieren mejorías para los próximos meses. Algo similar se
desprende de la encuesta de Fenalco para las ventas actuales.
Algunas cifras asociadas con la minería, en particular con el petróleo, registraron mejoría en el
último trimestre de 2012. De acuerdo con la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), la
producción de petróleo en diciembre se ubicó en 984 mil barriles diarios. Así durante el cuarto
trimestre, se produjeron 972 MBD en promedio, cifra superior a lo observada en los tres meses
anteriores (934 MBD). Esto último se explica por el mejoramiento en las condiciones de transporte
y la estabilización de la producción de los diferentes campos, lo que se sumó a menores problemas
de orden público que habían afectado la producción entre el segundo y el tercer trimestre.
Todo lo anterior permite fijar un rango de pronóstico de crecimiento anual del PIB para el cuarto
trimestre entre 2,0% y 3,5%. Esto contempla una recuperación parcial de la inversión, y un
comportamiento de los consumos público y privado que se expandirían a tasas cercanas a sus
promedios históricos. Las exportaciones e importaciones crecerían a tasas levemente inferiores a las
registradas en el tercer trimestre de 2012. Por el lado de la oferta, los sectores más dinámicos en el
cuarto trimestre habrían sido transporte, servicios sociales, comunales y personales y por último,
minería. Por el contrario, los sectores que restarían al crecimiento serían la construcción y la
industria. Cabe señalar que la incertidumbre sobre el desempeño de la inversión en obras civiles
aumentó considerablemente, aunque sin un sesgo definido, dada la alta volatilidad que la serie ha
mostrado en los últimos trimestres. Esto explica por qué el rango de pronóstico es amplio.
Así, para todo el año 2012 se estima un rango de pronóstico de crecimiento anual del PIB entre
3,3% y 3,9%.
Para 2013, el equipo técnico proyecta un rango de crecimiento económico entre 2,5% y 4,5%. La
mayor incertidumbre sobre este pronóstico se origina en la persistencia que pueda tener el choque
negativo observado en la inversión en obras civiles y edificaciones. Se espera que algunos de los
factores que han frenado este gasto se reviertan, impulsando por esta vía la demanda interna. Las
condiciones que soportan el dinamismo observado del consumo y de la inversión en maquinaria y
equipo se mantendrían en 2013. Entre ellas, los niveles estables de empleo y de confianza del
consumidor y la reducción acumulada de las tasas de interés de política. Estas últimas se están
transmitiendo a las tasas de interés de los préstamos, junto a un crédito que se ha desacelerado pero
que sigue creciendo a buen ritmo. Todo ello en un contexto internacional de amplia liquidez y de
bajas tasas de interés.
c. Variables Financieras
En diciembre, el crédito bancario (M/N y M/E) creció a una tasa anual de 15,19%, menor en 6 pb a
la observada en noviembre. Frente a septiembre la disminución fue de 58 pb y frente a junio de 231
pb.
Por destinos, la cartera comercial repuntó, con un crecimiento anual a diciembre de 13,8%, mayor
en 46 pb que la tasa observada en el mes anterior (13,3%). Esta dinámica se explicó por los créditos
otorgados en moneda extranjera, cuya tasa de crecimiento anual entre noviembre y diciembre pasó
de 5,8% a 14,5%, consolidando la recuperación iniciada en julio. Por su parte, el componente en
moneda nacional continuó desacelerándose, disminuyendo a 13,7% en diciembre frente a 14,3% del
mes anterior. En lo referente al crédito de consumo, este registró en el último mes una tasa de
crecimiento anual de 17,8%, lo que significó una reducción de 112 pb frente al registro de
noviembre. La cartera hipotecaria se desaceleró levemente, con una variación anual de 15,2% en
diciembre frente a 15,4% en el mes anterior.
Las tasas de interés nominales de los créditos en todas las modalidades marcan una tendencia
decreciente frente a sus niveles de finales de julio, cuando se comenzó a bajar la tasa de interés de
política. Sin embargo, el efecto en las tasas las reales (descontando el IPC sin alimentos) ha sido
menor pues la inflación también ha disminuido. En este contexto, la tasa interés real para los
desembolsos de diciembre de los créditos de consumo fue de 15,5%, para los hipotecarios de 10,2%
y para el comercial ordinario de 9,1%. Estas tasas son menores a sus promedios históricos
calculados desde 2000. De otra parte, la tasa de interés real para los créditos comercial preferencial
fue de 6,0%, para los créditos otorgados con tarjeta y para la modalidad de tesorería se ubicaron en
27,4%, y 5,8%, tasas mayores a sus promedios calculados desde 2000.
d. Contexto Externo
En la zona del Euro, las medidas adoptadas por las autoridades económicas en los últimos meses
han dado tranquilidad a los mercados financieros. Esto ha permitido una reversión de las salidas de
capitales desde los países de la periferia de la región que se había iniciado en el primer semestre de
2012. De esta manera, las tensiones en los mercados de deuda pública de España e Italia han
disminuido considerablemente. Así, la probabilidad de una fuerte crisis financiera que causaría una
profundización de la recesión en la zona del euro ha disminuido considerablemente. No obstante,
esta mejora en las condiciones financieras aún no se ha transmitido al sector real por lo cual la
mayoría de los analistas esperan que la recesión en la región se prolongue por lo menos durante la
primera mitad de 2013.En efecto, la información más reciente para la Zona Euro muestra que la
producción industrial, las ventas al por menor y el crédito al sector privado se contrajeron en
noviembre, al tiempo que la confianza de los empresarios y de los consumidores permanecía
deprimida. En diciembre la tasa de desempleo se mantuvo en máximos históricos en algunas
economías de la periferia. Adicionalmente la débil situación de la región siguió afectando a países
como Alemania y Francia, economías que experimentaron un retroceso en su producción industrial
en los últimos meses de 2012.
Para los Estados Unidos, los indicadores de actividad real para el cuarto trimestre evidencian que la
economía se habría expandido a un ritmo moderado en este periodo. Con cifras a diciembre, las
ventas al por menor y la producción industrial continuaron creciendo tanto en términos anuales
como mensuales; mientras que el mercado de vivienda siguió recuperándose, aunque todavía desde
un nivel muy bajo. Análogamente, el comportamiento del sector externo continuó deprimido,
evidenciando la mayor transmisión de la débil demanda global. Además, los niveles de confianza de
los consumidores han seguido afectados por la incertidumbre fiscal. En relación con las
negociaciones sobre el tema fiscal, el acuerdo parcial al que llegó el Congreso de los Estados
Unidos evitó por algunos meses el llamado “abismo fiscal”. Sin embargo, las decisiones sobre
recortes de gasto en seguridad social y defensa, al igual que la definición de algunas partidas
federales, se postergaron para marzo, por lo que la incertidumbre fiscal seguiría afectando la
confianza durante los primeros meses de 2013. Para el presente año se espera que la economía
americana crezca a un ritmo moderado algo menor que lo estimado para 2012.
En China, el crecimiento económico se aceleró en el cuarto trimestre creciendo 7,9% anual (anterior
7,4%). Este hecho estaría dinamizando el crecimiento de otros países emergentes de la región. Si
bien las cifras a diciembre evidenciaron un crecimiento mayor en las exportaciones, la industria y
las ventas al por menor, el principal motor de la economía ha sido la inversión en activos fijos. Para
el 2013 se espera que esta economía presente un crecimiento similar al observado en 2012.
Para las economías de América Latina, la información disponible para el cuarto trimestre evidencia
que Chile y Perú habrían crecido alrededor de su potencial, mientras que la economía mexicana ha
empezado a desacelerarse, aunque su tasa de crecimiento continúa en niveles favorables. Por su
parte en Brasil, la actividad real ha seguido recuperándose en respuesta a las medidas de estímulo
implementadas recientemente. Las perspectivas para el año que comienza son de un crecimiento
nuevamente favorable y cercano al potencial en Perú y Chile, una aceleración en Brasil aunque a
tasas moderadas y una desaceleración en Venezuela.
En lo que respecta a los precios del petróleo, las cotizaciones para la referencia Brent se
comportaron en el cuarto trimestre de acuerdo con lo esperado en el Informe sobre Inflación de
septiembre. Por otra parte, aunque las cotizaciones del carbón, níquel y café se contrajeron en 2012,
en los últimos meses del año mostraron un leve incremento. En cuanto a los precios de los
alimentos, éstos presentaron una tendencia decreciente en los últimos meses de 2012, dada la
normalización de los fenómenos climáticos que afectaron las cotizaciones a mediados de año.
La moderación en los precios internacionales de los alimentos y la estabilidad en las cotizaciones
del crudo ayudaron a mantener la inflación baja en las principales economías desarrolladas. Lo
anterior, sumado al débil dinamismo en estos países, permitió seguir con una política monetaria de
estímulo, apoyada en bajas tasas de interés y amplias inyecciones de liquidez.
En el caso de la mayoría de economías de América Latina, la inflación presentó una tendencia
decreciente en los últimos meses de 2012, la cual estaría explicada por los menores precios de los
alimentos y por la apreciación generalizada de las monedas de la región.
En resumen, el crecimiento económico promedio de los socios comerciales de Colombia en 2012 ha
estado en línea con lo esperado. Para 2013, las medidas adoptadas por las autoridades europeas y las
mejoras en las condiciones financieras han reducido la probabilidad de que se presente una fuerte
recesión en la zona del euro. En Estados Unidos, la última información sugiere que su economía
podría crecer a un ritmo algo menor que lo estimado para 2012. El crecimiento de China se
mantendría cerca del 8%. Con todo ello, se espera que en el presente año la demanda externa siga
débil y se expanda a una tasa similar a la de 2012. Adicionalmente se espera que las condiciones de
amplia liquidez y de bajas tasas de interés continúen.
La tendencia creciente que llevaban los términos de intercambio hasta 2011 se interrumpió en 2012,
año en el cual se mantuvieron estables. En las condiciones de debilidad de la economía mundial, los
términos de intercambio en 2013 podrían ser algo menores al promedio observado en 2012.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
A efectos de la discusión la Junta Directiva consideró los siguientes elementos:
(i) En el contexto externo, el crecimiento económico promedio de los socios comerciales de
Colombia en 2012 ha estado en línea con lo esperado. Para 2013, las medidas adoptadas por las
autoridades europeas y las mejoras en las condiciones financieras han reducido la probabilidad de
que se presente una fuerte recesión en la zona del euro. En Estados Unidos, la última información
sugiere que su economía podría crecer a un ritmo algo menor que lo estimado para 2012. El
crecimiento de China se mantiene cerca del 8%. Con todo ello, se espera que en el presente año la
demanda externa siga débil y se expanda a una tasa similar a la de 2012.
(ii) La tendencia creciente que llevaban los términos de intercambio hasta 2011 se interrumpió en
2012, año en el cual se mantuvieron estables. En las condiciones de debilidad de la economía
mundial, los términos de intercambio en 2013 podrían ser algo menores al promedio observado en
2012.
(iii) Para el cuarto trimestre de 2012 la nueva información de crédito de consumo, de comercio al
por menor y de confianza del consumidor sugiere que el gasto de los hogares crecería a una tasa
algo menor que la observada en el tercer trimestre. La incertidumbre sobre el comportamiento de la
inversión es elevada, especialmente la del gasto en obras civiles, en construcción y en edificaciones.
Las cifras de exportaciones en dólares muestran una desaceleración mayor que la de las
importaciones.
(iv) Por el lado de la oferta, en noviembre se presentó una caída anual en el indicador de producción
industrial y las expectativas en el sector volvieron a deteriorarse. Las ventas de comercio al por
menor, con y sin vehículos, crecieron a buen ritmo.
(v) Para 2013, el equipo técnico proyecta un rango de crecimiento económico entre 2,5% y 4,5%,
con 4% como cifra más probable. La mayor incertidumbre sobre este pronóstico se origina en la
persistencia que pueda tener el choque negativo observado en la inversión en obras civiles y
edificaciones. Se espera que algunos de los factores que han frenado este gasto se reviertan,
impulsando por esta vía la demanda interna. Las condiciones que soportan el dinamismo observado
del consumo y de la inversión en maquinaria y equipo se mantendrían en 2013. Entre ellas, los
niveles estables de empleo y confianza del consumidor y la reducción acumulada de las tasas de
interés de política. Estas últimas se están transmitiendo a las tasas de interés de los préstamos, junto
a un crédito que se ha desacelerado pero que sigue creciendo a buen ritmo. Todo ello en un contexto
internacional de amplia liquidez y de bajas tasas de interés.
(vi) En diciembre la inflación anual al consumidor (2,4%) descendió más que lo esperado por el
mercado y por el equipo técnico del Banco. Como ha ocurrido a lo largo del año, la desaceleración
de la inflación volvió a explicarse por el menor ritmo de aumento del IPC de regulados y de
alimentos. Tanto el promedio de las inflaciones básicas, como las expectativas de inflación
volvieron a reducirse y se encuentran por debajo de la meta de largo plazo (3%).
(vii) En resumen, la economía colombiana crece por debajo de su potencial, la inflación observada
y proyectada se sitúan por debajo de la meta del 3%, y no se vislumbran presiones alcistas sobre la
misma en el futuro cercano. En estas circunstancias, la evaluación del balance de riesgos indica la
conveniencia de reducir la tasa de interés de intervención a 4%. Las acciones de política monetaria
están encaminadas a que en 2013 el producto se sitúe cerca de la capacidad productiva de la
economía, sin poner en riesgo la meta de inflación ni la estabilidad macroeconómica del país.
La mayoría de los miembros de la Junta consideró apropiado reducir la tasa de interés de
intervención en 25 pb teniendo en cuenta principalmente que:
(i) Las proyecciones y expectativas de inflación se sitúan por debajo de la meta de largo plazo de
3% al igual que la inflación total y el promedio de inflación básica.
(ii) el debilitamiento del crecimiento económico y las menores proyecciones de crecimiento este
año.
(iii) La desaceleración significativa y no esperada en la demanda interna explicada principalmente
por un choque negativo a la inversión. La duración de este choque es incierta y depende en gran
medida del comportamiento del gasto público y de la inversión del sector minero en 2013.
(iv) El consumo privado crece a un ritmo cercano a su promedio histórico y es factible que en el
presente año muestre alguna moderación pero no significativa. Bajo las condiciones anteriores se
considera acotado el riesgo de que una reducción de la tasa de interés de intervención de esta
magnitud exacerbe los riesgos de desbalances financieros y comprometa el crecimiento del empleo
y el producto.
Además estimaron que si bien se necesita una política monetaria más expansionista, la
incertidumbre acerca de la evolución futura de la demanda interna y las posibilidades de exacerbar
desequilibrios previos acumulados por la economía, sobretodo en un ambiente de amplia liquidez
internacional, sugieren la conveniencia de ser prudente en las medidas de política.
Un miembro del grupo mayoritario resaltó que, además de los problemas que han afectado al sector
de la construcción en el tercer trimestre de 2012, el débil crecimiento de la demanda agregada
registrado desde el segundo trimestre de 2012 ha repercutido en una disminución del crecimiento de
varios sectores en la economía, por lo que actualmente se presentan excesos de capacidad instalada.
Sin embargo, el ambiente de abundante liquidez internacional y las informaciones recientes de la
oferta de bienes no transables permiten prever que la demanda interna podría incrementar su
dinamismo hacia finales de 2013.
Otros miembros consideraron apropiado una reducción de 50 puntos básicos de la tasa de
intervención del Banco, como quiera que, de acuerdo con la información disponible, se confirma
que al inicio de 2013 todo indica que en Europa la recesión se estaría prolongando aún más. En
Estados Unidos la recuperación no sale de su ritmo mediocre. En la región se destaca el buen
desempeño de Chile y Perú. Brasil rompiendo la tendencia hacia la desaceleración. Y Venezuela, el
mercado más importante para nuestras exportaciones industriales, seguramente experimentará una
gran devaluación este año por sus desequilibrios fiscales y cambiarios, y una caída del crecimiento
del 5,5% en 2012 al 2,5% el 2013. En Colombia, con una tasa real de cambio promedio para 2012
en un 8% por debajo de la de equilibrio, el dinamismo de las exportaciones se desploma. En efecto,
entre enero y noviembre con relación a igual período de 2011 sólo crecieron 6%, en contraste con
43% entre 2010 y 2011. Las de minería y petróleo en el mismo lapso pasaron del 56% en 2011 a
apenas 8% en 2012; las agrícolas del 26% a una caída del 14%; y las industriales del 15% al 7%.
Para la industria los problemas relativos al debilitamiento de la demanda interna pesan cada vez
más. La tasa de desempleo ha dejado de reducirse, debido a que el empleo total aumenta cada vez
menos, al punto de que la NAIRU en 2013 se mantendrá por debajo de aquella. En la industria el
empleo empezó a caer por primera vez en dos años. Es en el mercado interno donde la industria está
perdiendo más espacio frente a las importaciones de bienes de consumo, lo cual es coherente con el
crecimiento del comercio en contraste con la contracción de la industria. El pronóstico de
crecimiento para este año del equipo técnico apunta a un rango entre 2,5% y 4,5%, siendo la cifra
más probable 4%, pero con un balance de riesgos que se inclina hacia la baja. Lo que indica que
tanto el crecimiento alcanzado en 2012 (cerca de 3,6%) como el proyectado para 2013 se hallan por
debajo del potencial. O sea unas brechas tanto del producto como laboral en terreno crecientemente
negativo.
En suma, desde el año anterior resulta evidente el debilitamiento de la demanda interna, aparejado
con la continuada fragilidad del contexto externo. Adicionalmente, la inflación se ubicó en
diciembre en 56 puntos básicos por debajo del punto medio del rango meta, el promedio de las
básicas en 2,8%, y sin alimentos en 2,4%. Y todas las expectativas de inflación igualmente por
debajo de la meta. En concordancia con el esquema de Inflación Objetivo, la política monetaria
debe provocar el retorno de la inflación a la meta del 3%. En consecuencia, propusieron reducir la
tasa de interés de intervención del Banco en 50 puntos básicos. Desde el ángulo monetario, es lo
que se debe hacer a fin de permitir que el PIB pueda volver a acercarse a su potencial al final de
2013 y en 2014 sin poner en riesgo el cumplimiento de la meta de inflación.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
De acuerdo con la evaluación del actual balance de riesgos, la Junta Directiva acordó reducir la tasa
de interés de intervención en 25 pb.
La Junta reitera que el Banco de la República cuenta con las herramientas y recursos suficientes
para atender las necesidades de liquidez en moneda local y extranjera que regularmente requiere la
economía y aquellas que pudieran aparecer en un ambiente de turbulencia financiera internacional.
La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo del comportamiento y proyecciones de la
actividad económica e inflación en el país, de los mercados de activos y la situación internacional.
Finalmente, reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible.
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2013-02-01 |
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Minutas de la reunión de la JDBR del 22 de febrero de 2013
El 22 de Febrero de 2013 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la
Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito
Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los
directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano Sanz, Juan Pablo Zárate Perdomo y César
Vallejo Mejía, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus
perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria.
1. ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación
En enero la inflación anual al consumidor cayó de manera significativa y mucho más que lo
esperado por el mercado y por el equipo técnico. El resultado de este mes fue 2,00%, 44 puntos
base (pb) menos que el registro de diciembre, mes en el que también se había observado un
descenso importante. Como ocurrió a lo largo de 2012, la desaceleración de la inflación volvió a
explicarse por el menor ritmo de aumento del IPC de alimentos y del de regulados.
En el IPC de alimentos, la variación anual de enero (1,69%) registró una caída de consideración (83
pb). Todos los precios de los componentes principales de esta canasta se desaceleraron y en ello
pudo haber tenido un papel importante las disminuciones al IVA contempladas por la reforma
tributaria. Es el caso de las comidas fuera del hogar, rubro que presentó durante 2011 y 2012 una
variación anual de 5% o más, que se redujo significativamente en enero cerrando el mes en 3,9%
(100 pb menos que en diciembre). Para la mayoría de estos servicios se eliminó el IVA que estaba
estipulado en 16% y se sustituyó por un gravamen al consumo de 8%, por lo que en términos netos
se redujeron los impuestos indirectos. A esta rebaja se suman además unos costos con pocos ajustes
en salarios, arriendos y servicios públicos.
En alimentos procesados el registro de enero fue de 2,2% frente a 2,8% en diciembre; aquí también
se redujo el IVA en el caso del café, el azúcar y el chocolate, precios que efectivamente cayeron este
mes a diferencia de lo ocurrido en enero del año pasado. Adicionalmente se presentaron rebajas en
otros precios (como leche y huevos). Otras circunstancias que contribuyeron a la disminución en la
variación anual de esta subcanasta son la apreciación del peso y los precios internacionales de
algunos alimentos más bajos en la segunda mitad del año pasado. Finalmente, la disminución de la
variación anual del IPC de alimentos perecederos continuó (-5,0 en enero frente a -3,9 en
diciembre) explicada por las condiciones climáticas favorables y unos menores costos de
producción. Si bien los precios de varios de estos productos aumentaron en enero como es usual, lo
hicieron en menor magnitud que en el mismo mes del año pasado.
Dentro del IPC sin alimentos, la variación anual de los precios de la canasta de regulados cayó a
0,67% en enero, (124 pb menos que el dato de diciembre). La principal presión bajista se originó,
en la reducción del precio de la gasolina en $200, debido a la entrada en vigencia de la reforma
tributaria. Igualmente se volvieron a presentar reducciones en las tarifas de servicio domiciliario de
gas y en los pasajes de bus intermunicipal, que pueden atribuirse a las escasas presiones
provenientes de los precios internacionales de los combustibles en la segunda mitad del año pasado,
combinados con la apreciación acumulada del peso. En el caso de las tarifas del transporte público
urbano, los ajustes fueron positivos pero menores que los observados en el mismo mes del año
anterior.
Los otros dos componentes del IPC sin alimentos – transables y no transables – se mantuvieron
relativamente estables en enero. En la primera subcanasta, la variación anual pasó de 0,77% en
diciembre a 0,73% en enero, reducción de menor magnitud a la observada al final de 2012. Una
presión desinflacionaria importante en esta subcanasta provino de los pasajes aéreos, cuyo IPC se
redujo 1,2% en el mes. En enero nuevamente se observaron disminuciones en precios de artículos
eléctricos, electrónicos y de comunicación. La apreciación del tipo de cambio (que a enero ascendía
a 4,4% anual para el promedio del mes) y pocas presiones de precios internacionales siguen
explicando este comportamiento.
Por su parte, el IPC de no transables sin alimentos ni regulados subió marginalmente en el último
mes (2 pb) situándose en 3,94%. Se presentaron alzas en servicios de turismo que podrían estar
relacionadas con el aumento del IVA de 10% a 16% en el caso de los servicios hoteleros decretados
por la reforma tributaria. Dicha reforma, por otro lado, implicó una reducción del IVA para
medicina prepagada y otros gastos de salud de 10% a 5% que se tradujo en disminuciones en estos
precios. En arriendos, la variación anual disminuyó un poco, como viene sucediendo desde hace
tres meses, y se situó en 3,8%. No se presentaron cambios importantes en los demás rubros.
La inflación básica también descendió en enero por cuarto mes consecutivo. El promedio de los
cuatro indicadores calculados por el Banco se situó en 2,59%, 21 pb menos que el registro de
diciembre.
En enero, la variación anual del IPP se mantuvo en terreno negativo, situándose en -2,15% (en
diciembre fue -2,95%). Las pocas presiones provenientes de los precios internacionales hasta
mediados de enero, la apreciación acumulada del peso y menores aranceles, pueden explicar estas
reducciones que se observan desde hace cuatro meses.
En lo que respecta a las expectativas de inflación, la encuesta mensual más reciente efectuada por el
Banco de la República a analistas del mercado financiero muestra una caída de las expectativas de
inflación a diciembre de 2013 a 2,65% (frente a 2,82% del mes anterior). A pesar de ello, las
expectativas a 12 meses no presentaron cambios de importancia (2,9%). Algo similar se aprecia en
el caso de las expectativas para la inflación sin alimentos (están en 2,46% para diciembre de 2013 y
en 2,61% a doce meses). Las estimaciones derivadas de los TES a 2, 3 y 5 años cayeron cerca de 20
pb, después de conocerse el dato de inflación de enero, y en los últimos días han fluctuado entre
2,5% y 2,7%.
Cabe resaltar que en enero la caída de la inflación puede atribuirse en buena parte a la rebaja en el
IVA y otros impuestos asociada con la aplicación de la reforma tributaria. El choque por cuenta del
IVA tiende a ser transitorio, afectando la inflación por un año al cabo del cual esta puede retornar a
su nivel inicial.
b. Crecimiento
Por el lado del gasto, el buen resultado de las ventas al por menor en noviembre, la desaceleración
del crecimiento anual de la cartera de consumo con datos a diciembre y la estabilidad en el
indicador de confianza del consumidor en el cuarto trimestre de 2012, apuntan a que el consumo de
los hogares habría continuado mostrando un comportamiento algo similar a lo observado en el
tercer trimestre. Esto es reforzado por el comportamiento de las importaciones de bienes de
consumo en dólares que en diciembre crecieron 14,7% en términos anuales. Esta cifra representa
una aceleración frente a la registrada en el mes de noviembre, cuando se expandieron a una tasa
anual de 4,3%. Sin embargo, en el agregado del año sí se observa una menor tasa de crecimiento
con respecto a la de todo el año 2011 (12,3% en 2012 frente 25,7% del año anterior).
Para la inversión, los datos sobre importaciones en dólares de bienes de capital para la industria
(que además de manufacturas incluiría minería, comercio y construcción entre otros) crecieron en
términos anuales 7% en el cuarto trimestre y 10% en diciembre, lo que sugiere un comportamiento
relativamente bueno de la inversión en maquinaria y equipo. En las importaciones de equipo de
transporte, en el cuarto trimestre se presentó una caída de 27% anual concentrada en diciembre
(57%). Esta caída en parte es el resultado de una alta base de comparación en diciembre de 2011.
De esta manera es posible que la inversión en equipo de transporte (que pesa 14,9% de la inversión
total y 4,2% del PIB) no tenga un muy buen comportamiento en el último trimestre de 2012. Por
otra parte, en el rubro de construcción de obras civiles y edificaciones la incertidumbre sobre su
comportamiento se mantiene elevada, especialmente la del gasto en obras civiles, en construcción y
en edificaciones.
Respecto a las exportaciones, en 2012 las exportaciones totales (sin incluir reexportaciones de
aviones) sumaron US$ 60.235 millones, lo que representa un crecimiento de 5,8% respecto a 2011.
Este comportamiento se explica principalmente, por el aumento de las exportaciones de origen
minero (8% anual) y de las exportaciones industriales (5,9%). Por su parte, las ventas externas de
bienes agrícolas cayeron en el año 14%, debido a la disminución de 27% en las exportaciones de
café. El crecimiento de las exportaciones de bienes industriales se explica por las mayores ventas
hacia Venezuela (52%); Estados Unidos (1,8%); Ecuador (1,7%) y resto de Latinoamérica (7,1%).
Hacia otros destinos como Europa y Asia estas exportaciones presentaron en el año variaciones
negativas (22% y 3%, respectivamente).
Por el lado de la oferta, la información más reciente del cuarto trimestre de 2012 confirma
crecimientos muy dispares entre los sectores económicos, pero con tendencias similares a las
observadas en el tercer trimestre. La diferencia más evidente está entre la industria y el comercio.
Mientras la producción industrial y otros indicadores de dicho sector sugieren que la contracción se
prolongó hasta finales de año con una intensidad mayor que la prevista, las encuestas a los
comerciantes sugieren expansiones.
La ANDI divulgó que la producción industrial creció 0,7% en todo 2012. De esta información se
infiere que el dato del mes de diciembre mostraría una nueva contracción (a noviembre la industria
crecía 1,0% año corrido). De acuerdo con la encuesta, los industriales consideran que los mayores
problemas que enfrentaron durante el 2012 fueron, en su orden, el tipo de cambio, el acceso a
materias primas y la baja demanda. Este último ha ganado terreno desde mediados de 2011 aunque
aún se mantiene un poco por debajo de su nivel promedio desde 1997 y los aumentos han sido más
graduales que los presentados en el periodo 2008-2009. De igual manera, con información de la
encuesta de Fedesarrollo las señales sobre el comportamiento de la industria no son positivas. Así,
en diciembre, el indicador de pedidos en la industria mantuvo una tendencia descendente, mientras
que el de existencias (que es contra-cíclico) aumentó notablemente en el último mes sugiriendo una
acumulación inesperada de inventarios. Adicionalmente, el indicador de expectativas de producción
a tres meses en diciembre mostró nuevamente un deterioro.
En contraste con lo anterior, en diciembre los comerciantes consultados por Fedesarrollo no
sugirieron un deterioro relevante en su percepción de la situación actual del negocio ni de su
situación futura. De hecho las tendencias de estas series siguen siendo positivas y los niveles son
relativamente altos. Asimismo, las ventas del comercio al por menor han venido creciendo
significativamente como se mencionó con anterioridad.
En lo que respecta a la construcción, a diciembre la producción de cemento continuó estancada y
registró una contracción anual de 1,3%. El crecimiento para todo 2012 fue de 1,4% frente al 13,4%
observado en 2011. Esto, junto con los datos de CAMACOL que muestran a noviembre una caída
de las ventas de viviendas nuevas a nivel nacional, sugiere un bajo crecimiento para el sector en el
cuarto trimestre.
Dado todo lo anterior, el equipo técnico del Banco mantiene el rango de pronóstico para el
crecimiento del cuarto trimestre entre 2,0% y 3,5%. La amplitud del rango se explica por la
incertidumbre sobre el desempeño de la inversión en obras civiles que ha aumentado
considerablemente, aunque sin un sesgo definido. Sin embargo, la última información sobre la
industria y las importaciones de equipo de transporte han sorprendido a la baja, por lo que es
probable que el pronóstico central se esté sesgando hacia la parte inferior de dicho rango. De la
misma manera, para todo el 2012 el pronóstico de crecimiento se mantendría en un rango entre
3,3% y 3,9%.
Con respecto a la expansión del PIB en el primer trimestre de 2013, en las últimas semanas han
surgido noticias desfavorables que pueden reducir el crecimiento. Es el caso del carbón en donde la
parálisis de la producción de las dos empresas más importantes del sector, (Cerrejón y Drummond),
limita seriamente la expansión del sector minero en el comienzo del año.
De la misma manera, en enero las ventas de vehículos reportadas por Econometría registraron
caídas en sus niveles con respecto a la cifra publicada doce meses atrás. Este indicador creció a
tasas anuales de -16,5%, y apunta a un mal comienzo de año para el consumo de bienes durables.
Entre las noticias favorables durante el primer mes del 2013, se destaca el aumento de la producción
de petróleo cuyo nivel fue 1.012.000 barriles diarios (BD), cifra históricamente alta y que está por
encima de lo contemplado en los pronósticos del informe pasado (1.000.000 BD de promedio).
También en el caso del café, la producción fue de 877 mil sacos de 60 kilos en dicho mes, 64% más
que en igual periodo de 2012. Asimismo, la demanda por energía total aumentó 4,6% anualmente.
De igual manera, los comerciantes consultados por Fenalco mantuvieron la tendencia positiva sobre
las ventas actuales, aunque las expectativas de ventas a 6 meses mostraron algún deterioro. Por
último, otro buen dato fue el de la confianza de los consumidores medida por Fedesarrollo que
registró un aumento en el mes de enero frente al de diciembre con el cual se mantiene en niveles
relativamente altos y similares a los observados durante el segundo semestre del año pasado.
Para todo 2013 el equipo técnico del Banco mantiene el intervalo de pronóstico entre 2,5% y 4,5%
con 4% como cifra más probable. Se espera una aceleración leve frente a 2012 gracias a un entorno
internacional que no se deterioraría más, a una política monetaria expansiva, a un crédito que
seguiría creciendo a un buen ritmo pese a la desaceleración reciente y bajo el supuesto de que el
gasto público y la inversión en obras civiles crecen a buen ritmo.
c. Variables Financieras
El crecimiento del crédito bancario (M/N y M/E) se ha estabilizado. Entre octubre de 2012 y enero
de 2013 el crecimiento anual pasó de 15,12% a 15,10%. Esto es el resultado de una compensación
entre la desaceleración de la cartera total en moneda nacional (la tasa de crecimiento descendió de
15,76% en octubre de 2012 a 14,63% en enero de 2013) y la recuperación de la cartera en moneda
extranjera (la tasa de crecimiento aumentó de 5,98% en octubre 2012 a 21,86% en enero 2013).
Por modalidades, la cartera comercial mostró un aumento en su tasa de crecimiento anual de 13,2%
a 14,1% entre octubre de 2012 y enero de 2013, impulsada principalmente por la cartera en moneda
extranjera. Por su parte, el crédito con destino a los hogares ha continuado desacelerándose. Para el
crédito de consumo, la tasa de crecimiento registró una reducción de 18,64% a 17,01% entre
octubre de 2012 y enero de 2013 y para la cartera hipotecaria de 15,47% a 14,72% en el mismo
periodo.
Las tasas de interés nominales de los créditos concedidos en todas las modalidades marcan una
tendencia decreciente frente a sus niveles de finales de julio, cuando se comenzó a bajar la tasa de
interés de política. Sin embargo, en términos reales (descontando el IPC sin alimentos) la menor
inflación ha frenado dicha tendencia decreciente. En este contexto, la tasa de interés real en enero
para los desembolsos destinados a consumo fue de 16,7%, para los hipotecarios de 10,2% y para el
comercial ordinario de 9,4%, tasas menores a sus promedios históricos respectivos calculados desde
2000. De otra parte, la tasa de interés real para los créditos comercial preferencial fue de 6,2%, para
los créditos otorgados con tarjeta y para la modalidad de tesorería se ubicaron en 27,4%, y 5,8%,
tasas mayores a sus promedios calculados desde 2000.
d. Contexto Externo
Durante el cuarto trimestre de 2012 el PIB de la zona del euro se contrajo de nuevo y para el año
completo el crecimiento fue de -0,5%. Aunque la contracción de la economía se esperaba, su ritmo
de deterioro fue mayor al pronosticado en el escenario central del Informe sobre inflación de
diciembre (-0,4%). El menor crecimiento de la región obedece a una caída generalizada del PIB,
incluso en países como Francia y Alemania que hasta el 2011 habían mostrado un comportamiento
relativamente bueno frente a lo que se observaba en la región. Sin embargo, la información reciente
sobre la actividad real alemana evidencia alguna recuperación, impulsada en parte por el comercio
externo con otros socios fuera de la región. Asimismo, algunos indicadores de confianza y de
expectativas empresariales para la zona del euro han presentado alguna mejora en los últimos meses
(diciembre y enero).
En los Estados Unidos, la primera estimación del crecimiento de 2012 estuvo por debajo de lo
esperado en el escenario central del informe sobre inflación anterior. En el cuarto trimestre la
economía Estadounidense se contrajo debido a la caída en inventarios, a la dinámica del gasto del
gobierno y al menor aporte del sector externo. Pese a ello, el consumo mantuvo un crecimiento
modesto. Durante el mes de enero la información sobre la actividad real, los índices de opinión de
los sectores de manufacturas y servicios y las ventas al por menor evidencian una mejoría en el
comportamiento económico de ese país.
Para el caso de las economías emergentes de Asia, la información al cuarto trimestre muestra que su
ritmo de expansión se mantuvo estable. Para China, en enero la actividad real siguió creciendo a un
ritmo favorable, particularmente en el sector de la industria y en las exportaciones.
En los países de la región, la economía de Brasil se sigue recuperando y las de Perú, Chile y México
continuaron creciendo a un buen ritmo. En Venezuela se decretó una fuerte devaluación, país que en
lo corrido de 2012 (a noviembre) representó el primer lugar de destino de las exportaciones
industriales colombianas y el segundo puesto en las de alimentos. Este hecho, podría tener efectos
en la actividad industrial y en la oferta agrícola en Colombia, en la medida en que se torne más
difícil exportar a ese país.
Las expectativas de un mejoramiento de la actividad global, especialmente en China, la amplia
liquidez internacional y las tensiones geopolíticas en Oriente Medio y el Norte del África han
presionado al alza los precios internacionales del petróleo en las últimas semanas. Por su parte, los
precios de los alimentos no han presentado cambios significativos durante este periodo. Pese a ello,
los bajos precios del café y del carbón y los leves aumentos en los precios de los bienes importados
generaron en enero un pequeño descenso en los términos de intercambio.
En relación con la inflación, salvo en los casos puntuales de Brasil, India, Argentina y Venezuela, se
mantiene en niveles bajos tanto en las economías desarrolladas como en las emergentes. En un
contexto de baja inflación y débil crecimiento, los bancos centrales de los países desarrollados han
mantenido una política monetaria de estímulo.
Cabe resaltar el caso de Japón cuyo banco central se comprometió con una meta de inflación de 2%.
Aunque el plazo para cumplir con dicha meta no es claro, los analistas han interpretado estos
anuncios como una política monetaria bastante expansiva, ante lo cual el yen se ha depreciado de
manera significativa en relación con el dólar de los Estados Unidos.
La evolución de los mercados de deuda pública en los países de la periferia europea ha estado
influenciada por la incertidumbre política en España e Italia, que se ha traducido en un incremento
en sus primas de riesgo. Pese a ello, se encuentran en niveles bajos.
En resumen, la información más reciente del cuarto trimestre de 2012 muestra que la economía
mundial creció de forma algo más débil de lo esperado. No obstante, para comienzos de este año
algunos indicadores de actividad económica y de expectativas en las grandes economías como
Alemania, Estados Unidos y China, dieron señales de recuperación, y pueden sugerir una
moderación en la desaceleración global. Adicionalmente las condiciones financieras han mejorado.
Con base en lo anterior, para el primer semestre de 2013 se sigue proyectando una demanda débil de
los socios comerciales del país, con una recuperación en la segunda mitad del año, como se había
contemplado en el Informe sobre Inflación de diciembre.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
A efectos de la discusión la Junta Directiva consideró los siguientes elementos:
(i) El crecimiento de la economía mundial en el cuarto trimestre de 2012 fue algo más débil de lo
esperado. No obstante, en lo corrido de 2013, indicadores de actividad económica y de expectativas
en algunas de las economías de mayor tamaño han sido algo más positivos y las condiciones
financieras han mejorado.
(ii) Los precios internacionales del petróleo subieron y se encuentran en niveles superiores al
promedio observado en 2012. Si dicha cotización se mantiene en esos niveles podría compensar los
bajos precios del café y del carbón y llevar a que los términos de intercambio en 2013 superen el
promedio observado en 2012.
(iii) En Colombia, los indicadores de actividad económica para el cuarto trimestre de 2012 sugieren
que el consumo privado creció un poco menos que en los dos trimestres anteriores. La
incertidumbre sobre el comportamiento de la inversión, en particular en obras civiles y construcción
de edificaciones, sigue siendo elevada. Por el lado de la oferta, los indicadores líderes de la
industria sugieren de nuevo una caída en la producción de este sector en diciembre, mientras que los
del comercio indican que se presentaría un crecimiento aceptable. Con lo anterior, el equipo técnico
estima que el crecimiento económico de 2012 se situaría en un intervalo entre 3,3% y 3,9%.
(iv) El crecimiento económico del primer trimestre de 2013 estará afectado por los menores días
hábiles que tiene el periodo, así como por los choques de oferta registrados en las exportaciones de
carbón y por el riesgo de una menor demanda desde Venezuela.
(v) En enero, la inflación anual al consumidor (2%) fue menor a la esperada, en especial por el
menor aumento del IPC de regulados y de alimentos. La reforma tributaria contribuyó a la
reducción de algunos de estos precios, hecho que tiene un efecto transitorio sobre la variación anual
del IPC. Otros factores, como menores costos de producción y ajustes moderados en los salarios,
también explican parte de este comportamiento.
(vi) Tanto el promedio de las inflaciones básicas como las expectativas de inflación se encuentran
por debajo de la meta de largo plazo (3%).
(vii) La desaceleración en la inflación, mayor que la esperada, se ha dado en un contexto de una
brecha negativa del producto, situación que puede mantener las expectativas de inflación en niveles
bajos por un mayor periodo de tiempo. Ello también disminuye la probabilidad de que aumentos no
anticipados y generados por choques de oferta pongan en peligro el cumplimiento de la meta de
inflación.
(viii) En enero el crédito siguió desacelerándose pero a un menor ritmo. Las tasas de interés
nominales de los distintos tipos de préstamos se redujeron, exceptuando las de consumo que
aumentaron en el mes. En términos reales todas las tasas se incrementaron, en parte como
consecuencia de la reducción en la inflación observada y sus expectativas.
En estas circunstancias, la evaluación del balance de riesgos indica la conveniencia de reducir la
tasa de interés de intervención. Las acciones de política monetaria están encaminadas a que el
producto se sitúe cerca de la capacidad productiva de la economía, sin poner en riesgo la meta de
inflación ni la estabilidad macroeconómica del país.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
De acuerdo con la evaluación del actual balance de riesgos, la Junta Directiva acordó por
unanimidad reducir la tasa de interés de intervención en 25 pb. La decisión se tomó teniendo en
cuenta que la economía colombiana crece por debajo de su potencial, la inflación observada y
proyectada se sitúan por debajo de la meta del 3% y no se vislumbran presiones alcistas sobre la
misma en el futuro cercano.
La Junta reitera que el Banco de la República cuenta con las herramientas y recursos suficientes
para atender las necesidades de liquidez en moneda local y extranjera que regularmente requiere la
economía y aquellas que pudieran aparecer en un ambiente de turbulencia financiera internacional.
La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo del comportamiento y proyecciones de la
actividad económica e inflación en el país, de los mercados de activos y la situación internacional.
Finalmente, reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible.
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2013-03-01 |
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Minutas de la reunión de la JDBR del 22 de marzo de 2013
El 22 de Marzo de 2013 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta
Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público,
Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar, y los Directores
doctores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Enrique Meisel
Roca, César Vallejo Mejía, Juan Pablo Zárate Perdomo, en la cual se discuten las situaciones
inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas
con la política monetaria.
1. ANTECEDENTES
a. Desarrollos recientes de la inflación
En febrero la inflación anual del IPC fue de 1,83%, 16 puntos base (pb) menos que el mes anterior.
Como viene sucediendo desde hace varios meses, los menores ajustes en los precios de los
alimentos explicaron en gran medida este resultado. Por otro lado, las demás subcanastas
(regulados, transables y no transables) presentaron este mes mayor estabilidad frente a lo observado
en meses anteriores.
El descenso en la variación anual del IPC de alimentos – de 1,7% en enero a 1,2% en febrero –
cobijó nuevamente a un gran número de productos tanto perecederos (de -5,0% en enero a -5,6% en
febrero) como procesados (de 2,2% en enero a 1,6% en febrero) y a las comidas fuera del hogar (de
3,9% en enero a 3,6% en febrero). Los distintos factores que estarían explicando este
comportamiento en febrero y en meses anteriores son: los pocos aumentos en los precios
internacionales de los alimentos importados, las escasas presiones cambiarias, las pocas presiones
de costos (en parte por rebajas arancelarias asociadas con la entrada en vigencia de acuerdos
comerciales) y unas condiciones climáticas que han favorecido la oferta. Asimismo, es posible que
la rebaja del IVA para comidas fuera del hogar y algunos alimentos perecederos desde comienzos de
año todavía se estuviera trasmitiendo a los precios en febrero. Adicionalmente, en el último mes
también habría empezado a jugar un papel importante la menor demanda proveniente de Venezuela,
lo que se podría estar traduciendo en un aumento de la oferta agropecuaria disponible para el
consumo interno en productos como carne, huevos y pollo. Los ajustes de los precios de estos
productos fueron bajos o incluso negativos en el último mes.
Dentro del IPC sin alimentos no se presentaron cambios de importancia en las variaciones anuales
de regulados y de transables sin alimentos ni regulados. En el primer caso, la variación anual en
febrero permaneció en 0,7%. Si bien se presentaron alzas en las tarifas de gas domiciliario, energía
y combustibles, estas fueron compensadas por ajustes nulos en la tarifa del servicio de acueducto y
por una reducción importante en los precios de pasajes de buses intermunicipales. Cabe señalar que
la variación anual del IPC de regulados presentó caídas importantes en la segunda mitad de 2012 y
en enero de este año.
En transables sin alimentos ni regulados por su parte, la variación anual en febrero fue baja (0,7%)
y similar al registro de enero. En esta subcanasta se siguieron observando reducciones o escasos
aumentos en los precios de bienes importados como automóviles, electrodomésticos y aparatos
electrónicos y de comunicación, además de pasajes aéreos, entre otros. La apreciación acumulada
de los meses anteriores y las pocas presiones en los precios internacionales explican esta situación.
Finalmente, la variación anual del IPC de no transables sin alimentos ni regulados se redujo un poco
en febrero a 3,84% frente a 3,94% en enero, pero se mantiene como la subcanasta con los ajustes
más altos. Buena parte de la rebaja se concentró en el segmento de diversión, cultura y
esparcimiento. Otros componentes que presentaron menores ajustes fueron las matrículas y
pensiones y algunos servicios de salud. La variación anual de arriendos, un rubro que ha sido
altamente indexado, se mantuvo en 3,8% e interrumpió la tendencia decreciente que traía desde
hace tres meses.
En febrero se presentó nuevamente una disminución de los indicadores de inflación básica, pero
menor que la observada en los tres meses anteriores. El promedio de los cuatro indicadores
monitoreados por el Banco de la República fue 2,49%, frente a 2,59% de enero.
La variación anual del IPP se mantuvo en terreno negativo, en -2,47% en febrero, 4 pb más que el
registro de enero. Esto, como en meses anteriores, se explica por la apreciación acumulada y la
estabilidad de los precios internacionales de la mayoría de materias primas y otros bienes.
Las expectativas de inflación a diciembre de 2013, recogidas por la encuesta mensual del Banco a
analistas del mercado, disminuyeron en febrero, aunque menos que en meses anteriores: para
comienzos de marzo este valor era 2,55% frente a 2,65% de febrero. A pesar de lo anterior, las
expectativas a doce meses se mantuvieron cerca de 2,9% en los dos meses. En el caso de las
expectativas estimadas a partir de la tasa de los TES tampoco se observaron disminuciones en las
últimas cuatro semanas, con cierre al 14 de marzo. La inflación esperada a dos, tres y cinco años se
situó cerca de 2,6%, levemente por encima del dato del mes anterior.
b. Crecimiento
La última información publicada por el DANE muestra una fuerte revisión de varios de los
componentes del PIB para 2011 y 2012, en especial al de la inversión en obras civiles. Con lo
anterior, el DANE corrigió las cifras de crecimiento del PIB de 2011 pasando de 5,9% a 6,6%.
Al incorporar las revisiones, las tasas de expansión anual para los tres primeros trimestres de 2012
fueron, 5,3%, 5,0%, y 2,7%, en su orden. El dato del cuarto trimestre fue 3,1% y el del año
completo 4,0%. La demanda interna creció 4,6% en 2012 lo que representa una desaceleración
frente a lo registrado en 2011 (8,2%). La desaceleración se presentó especialmente en el segundo
semestre.
El consumo de los hogares jugó un papel importante y contribuyó activamente a la expansión de la
demanda interna. Durante el cuarto trimestre, el consumo privado creció 4,0%. Sin embargo, este
renglón del PIB también mostró una pérdida de dinamismo en su tasa de crecimiento anual, al pasar
de 5,9% en 2011 a 4,3% en 2012. Desagregando por componentes, las mayores desaceleraciones se
registraron en los gastos destinados al consumo de bienes durables y semidurables. Por su parte, los
servicios y el consumo de bienes no durables también se desaceleraron pero en menor magnitud.
Respecto al consumo del Gobierno la expansión anual fue 6,5% en el cuarto trimestre y 5,1% para
todo el año.
En lo referente a la formación bruta de capital fijo, en 2012 este gasto creció 6,0%, cifra también
menor que la de 2011 (18,7%). El componente que más contribuyó al crecimiento del gasto en
bienes de capital fue aquel destinado a inversión en maquinaria y equipo, que creció, 7,7% para
todo el año. Durante el segundo semestre de 2012, todos los rubros que conforman este agregado
mostraron una desaceleración generalizada, lo que complica la interpretación de los choques que
sufrió este agregado en la segunda mitad del año.
En 2012 se registraron tasas de crecimiento significativamente menores para las importaciones y
para las exportaciones. Con respecto al primer agregado, el año pasado su expansión fue de 8,0%,
mucho menor que la registrada en 2011, cuando creció 21,2%. De igual forma, las ventas externas
mostraron menor dinamismo al crecer 5,3% frente al 12,9% de 2011. En el cuarto trimestre se
registraron crecimientos anuales del orden de 3,3% y 1,4% para ambos rubros, en su orden.
Por el lado de la oferta, entre los sectores que crecieron por encima de la economía en su conjunto
durante 2012 se encuentran los de minería (5,9% anual), financiero (5,5% anual) y servicios
comunales, sociales y personales (4,9% anual). En el caso de la minería, se observó una fuerte
desaceleración frente a 2011 (14,4% anual), que se concentró en el segundo semestre del año por la
contracción de la producción de carbón y el menor ritmo de crecimiento de la producción de
petróleo. En el financiero, a pesar de la desaceleración del crédito en la segunda mitad del año, se
reportaron crecimientos importantes que contribuyeron de manera positiva a la expansión total de la
economía, dada su gran participación dentro del PIB (19,6%). Por último, en servicios se destaca el
dinamismo de los servicios comunales prestados por el gobierno.
Con respecto a la situación económica para el primer trimestre de 2013, la información disponible
apunta a que el crecimiento de la economía podría ser inferior al observado a final de 2012. Esta
dinámica sugiere un crecimiento económico actual por debajo del potencial.
Por el lado del gasto, el consumo de los hogares podría mostrar una desaceleración a comienzos del
año como lo sugiere la información más reciente de la encuesta de confianza de los consumidores
medida por Fedesarrollo. En febrero este indicador cayó de manera significativa, ubicándose en
niveles levemente por debajo de su promedio histórico. A ello se suma una contracción de las ventas
de automotores del orden de 16,4% en febrero, según el Comité Automotor Colombiano y las cifras
publicadas por Econometría. Por su parte, la encuesta mensual de expectativas económicas del
Banco de la República sugiere que las ventas durante el mes de enero fueron significativamente
menores que los registros del cuarto trimestre de 2012. No obstante cabe señalar que las cifras de
importaciones de bienes de consumo en dólares mostraron un crecimiento anual de 19,9% en enero.
Por otra parte, en enero las exportaciones totales tuvieron una variación de -1,1% con respecto al
mismo mes de 2012. Esta caída se explicó por la disminución conjunta de las exportaciones de
bienes mineros (-2,2%) y agrícolas (-15,3%). Las exportaciones de productos industriales (y otros)
registraron un crecimiento anual de 10,2%, acelerándose frente al registro de diciembre. Este mejor
desempeño se explica principalmente por el aumento de las ventas de vehículos (109,5%), de
productos químicos (13%) y de caucho y plásticos (43,7%).
Por el lado de la oferta, las variables asociadas con la industria continúan mostrando un pobre
desempeño. Los indicadores de pedidos, existencias y las expectativas de producción a enero
siguieron conservando la tendencia negativa de los meses anteriores. Por su parte, en febrero la
demanda de energía no regulada para la industria cayó 2,1% anualmente después de haber crecido
un poco más de 2% en enero. Este indicador que está altamente correlacionado con el crecimiento
de la industria, sugiere un deterioro adicional del sector en dicho mes. Debe tenerse en cuenta que
parte de esta caída obedece a la existencia de un día hábil menos en febrero de este año (el año
anterior fue bisiesto).
En lo referente a la rama de minería, la producción de carbón se habría visto afectada en febrero y
marzo debido a las huelgas en el Cerrejón y al problema ambiental de la Drummond que ocasionó
una parada de la producción por las restricciones en el transporte del producto al puerto (suspensión
temporal en la licencia de carga). En la rama agrícola se destaca que la producción de café creció
36,7% anualmente, en promedio entre enero y febrero.
Adicionalmente, a estos choques no esperados en el sector minero debe tenerse en cuenta la
presencia de menores días hábiles durante el primer trimestre del año (Semana Santa y un día hábil
menos de febrero) cuyo impacto es negativo en especial al sector industrial.
Las cifras de mercado laboral muestran que la tasa de desempleo continuó cayendo a comienzos de
año. Adicionalmente, a enero el crecimiento del nivel de empleo mostró alguna aceleración y los
indicadores de calidad del empleo continúan creciendo a tasas importantes; en particular el empleo
asalariado se aceleró de manera significativa.
c. Variables Financieras
El crecimiento del crédito bancario (M/N y M/E) se ha estabilizado en los últimos cinco meses en
una tasa de crecimiento anual cercana a 15%. La desaceleración de la cartera en moneda nacional se
ha compensado con el impulso de la cartera en moneda extranjera. Entre octubre de 2012 y febrero
de 2013, la tasa de crecimiento de la primera descendió de 15,8% a 14,4%, mientras la segunda
aumentó de 6,0% a 24,8%.
Por modalidades, el crecimiento anual de la cartera comercial pasó de 13,2% en octubre de 2012 a
14,2% en febrero de 2013. Por su parte, el crédito con destino a los hogares tuvo una leve
desaceleración en febrero 16,9% frente al 18,6% observado en octubre de 2012. En la cartera
hipotecaria se observó igualmente una desaceleración en la variación anual en el mismo periodo (de
15,5% a 14,5%).
Las tasas de interés nominales de los créditos concedidos en todas las modalidades marcan una
tendencia decreciente frente a sus niveles de finales de julio, cuando se comenzó a bajar la tasa de
interés de política. Sin embargo, en términos reales, el descenso de la inflación y sus expectativas ha
neutralizado buena parte de dicha tendencia.
La tasa de interés real en febrero para los desembolsos destinados a consumo fue de 16,0%, para los
hipotecarios de 10,2%, para los preferenciales de 5,9% y para el comercial ordinario de 9,0%, tasas
menores a sus promedios históricos respectivos calculados desde 2000. De otra parte, la tasa de
interés real para los créditos otorgados con tarjeta de crédito y para la modalidad de tesorería se
ubicó en 27,1%, y 5,8% respectivamente, tasas mayores a sus promedios calculados desde 2000.
d. Contexto Externo
La nueva información sugiere que en 2013 el crecimiento económico promedio de nuestros socios
comerciales podría ser algo menor que lo estimado en informes pasados, e inferior al registrado en
2012. Además la incertidumbre y la percepción de riesgo en los mercados financieros, que durante
los últimos meses se había reducido, podría volver a aumentar por los acontecimientos del último
mes en Europa.
En la zona del Euro la recuperación de la actividad real aún no logra concretarse y todo indica que
el PIB de la región habría continuado contrayéndose en el primer trimestre del año. Pese a ello, el
ritmo de deterioro de la actividad real parece estar moderándose pues algunos indicadores como la
actividad industrial y los índices de opinión del sector de manufacturas y de servicios han
presentado alguna pausa en su tendencia decreciente. Adicionalmente en los últimos meses ha
habido una recuperación leve de la confianza de los consumidores y empresarios. Las noticias más
favorables provienen de Alemania, país en el que en los primeros meses del año se observa una
reactivación de la actividad real explicada por las exportaciones a países fuera de la región y por el
dinamismo del consumo interno. En este contexto, se espera que para el segundo semestre la
actividad económica de la región empiece a recuperarse. No obstante, el clima político y las
decisiones de las autoridades económicas europeas podrían afectar nuevamente la confianza en la
región, como recientemente ha sucedido tras las elecciones inconclusas de Italia y las condiciones
para el rescate del sector bancario en Chipre.
En los Estados Unidos, las cifras de la actividad real para los primeros meses del año son
relativamente favorables y sugieren que la economía ha seguido expandiéndose. El sector
inmobiliario y el mercado laboral continúan recuperándose lentamente. Sin embargo, como no hubo
acuerdo acerca de los recortes presupuestales en salud y educación, el ajuste fiscal en Estados
Unidos podría ser mayor que lo previsto, lo que podría afectar negativamente las perspectivas de
crecimiento de este país en 2013. La caída de la confianza de los consumidores que se observó en
las primeras semanas de marzo, puede ya estar reflejando este hecho.
Por su parte en China, aunque los indicadores de enero y febrero no son fáciles de interpretar dados
los efectos del año nuevo, es posible afirmar que el crecimiento no se ha desacelerado en estos
meses, por lo que la actividad real habría continuado expandiéndose a un ritmo favorable.
En las economías de mayor tamaño de América Latina, el crecimiento de 2012 fue bueno con
excepción de Brasil. Algunos indicadores económicos para el primer trimestre del año muestran un
comportamiento favorable en Chile y Perú, y en menor medida en México. En Brasil se ha
observado una recuperación pero aún desde niveles bajos. En Venezuela se estima un crecimiento
bajo para 2013.
En relación con los precios internacionales del petróleo, las alzas presentadas en febrero se han
revertido. La debilidad de la demanda global y algunos datos favorables en la oferta de petróleo y
sus sustitutos, estarían explicando las menores cotizaciones de las últimas semanas. Otros precios
de bienes exportados por Colombia, como el carbón, el níquel y el café, han permanecido
relativamente estables en niveles inferiores a los observados el año pasado.
Para el caso de los precios de los alimentos, aunque se han presentado algunas alzas en la soya, el
maíz y el aceite de palma, éstas aún no representan riesgos inflacionarios y se espera que no se
sostengan dadas las expectativas de buena oferta mundial.
Así las cosas, la inflación en las principales economías desarrolladas y en algunas emergentes
(principalmente latinoamericanas) se mantiene en niveles relativamente bajos. Este hecho unido al
débil crecimiento económico, ha permitido a los bancos centrales de los países desarrollados
mantener una política monetaria expansiva. Adicionalmente ha permitido que varios bancos
centrales de países emergentes hayan reducido recientemente sus tasas de política.
En este contexto si las primas de riesgo de Colombia se mantienen en los actuales niveles, el costo
de financiamiento externo del país seguirá siendo bajo.
En resumen, la nueva información sugiere que en 2013 el crecimiento económico promedio de
nuestros socios comerciales podría ser algo menor que lo estimado en informes pasados, e inferior
al registrado en 2012. Si estos pronósticos se materializan, la contribución de la demanda externa al
crecimiento de Colombia seguiría siendo baja. Asimismo, de continuar las tendencias observadas en
los precios de los principales productos de exportación, los términos de intercambio promedio en
2013 serían menores que los observados el año anterior.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
La Junta Directiva tomó en consideración los siguientes aspectos relevantes:
(i) El crecimiento de nuestros socios comerciales probablemente será menor a lo esperado, con lo
cual la contribución de la demanda externa al crecimiento del país seguiría siendo baja. Así mismo,
de continuar las tendencias observadas en los precios de nuestros principales productos de
exportación, los términos de intercambio promedio en 2013 serían menores que los del año anterior.
En consecuencia, el gasto agregado en 2013 no tendría un impulso adicional originado por un
mayor ingreso nacional.
(ii) Los nuevos datos de crecimiento económico para 2012 (4%) muestran una desaceleración desde
niveles altos en 2011 (6,6%). La mayor pérdida de dinamismo se presentó en el segundo semestre y
se explicó principalmente por una reducción significativa en el crecimiento de la inversión. El
crecimiento del consumo privado se moderó en 2012, alcanzando tasas similares a su promedio
histórico. El crecimiento de las exportaciones también registró un descenso frente a 2011, con una
caída importante en el cuarto trimestre.
(iii) La interpretación de los choques que sufrió la inversión en el segundo semestre de 2012 es
compleja y puede obedecer a múltiples factores, como se desprende del hecho que todos los
componentes de este agregado mostraron una desaceleración en el segundo semestre.
(iv) Para el primer trimestre de 2013, el deterioro en las expectativas del comercio, así como la
caída en el índice de confianza del consumidor y de las ventas de automóviles, sugieren una menor
dinámica del consumo privado. En enero el valor de las exportaciones en dólares fue similar al
registro de un año atrás y las de origen industrial registraron un crecimiento anual positivo. No
obstante, los indicadores de confianza de los empresarios indican que la industria sigue
contrayéndose. Esta dinámica sugiere un crecimiento económico actual por debajo del potencial y,
por lo tanto, la ampliación de los defectos en el uso de capacidad productiva de la misma.
(v) El descenso en la inflación anual, desde 2,0% en enero a 1,8% en febrero, fue similar al
proyectado por el equipo técnico. Dicha desaceleración se explicó en su mayor parte por el menor
ritmo de aumento de precios de los alimentos, principalmente de los procesados. Todas las medidas
de inflación básica también se redujeron. Tanto el promedio de dichas medidas como las
expectativas de inflación se encuentran por debajo de la meta (3%). La reducción reciente de los
precios internacionales de la energía y otros productos básicos implica menores presiones sobre la
inflación local.
(vi) Las reducciones de las tasas de interés del Banco de la República se han transmitido a las tasas
de interés de depósitos y préstamos del sistema financiero. No obstante, las tasas de interés real no
han caído en igual magnitud debido al fuerte descenso de la inflación y las expectativas de
inflación.
(vii) El crecimiento de la cartera continuó moderándose. En lo corrido del año se ha observado una
desaceleración del crédito comercial en pesos, pero un aumento en la financiación mediante emisión
de bonos de las firmas junto a un mayor endeudamiento externo. El crédito a los hogares (consumo
e hipotecario) sigue creciendo menos pero a tasas superiores que el aumento del PIB nominal. La
continua moderación del ritmo de apalancamiento de firmas y hogares reduce el riesgo de
generación de excesos financieros durante la presente fase expansiva de la política monetaria.
En este contexto, la evaluación del balance de riesgos indica la conveniencia reducir en 50 pb la
tasa de interés de intervención, con lo cual se espera que la política macroeconómica sea consistente
con un crecimiento de la economía cercano a su potencial.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
De acuerdo con la evaluación del actual balance de riesgos la Junta Directiva acordó por
unanimidad reducir la tasa de interés de referencia en 50 puntos básicos. La decisión se tomó
teniendo en cuenta que la economía colombiana crece por debajo de su potencial y probablemente
operará en los próximos trimestres por debajo de su capacidad productiva, y que la inflación
observada y proyectada se sitúan por debajo de la meta del 3%. Esto en un contexto en el cual las
reducciones de las tasas de interés parecieran estar transmitiéndose a la economía de manera más
lenta que lo deseado.
La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo del comportamiento y proyecciones de la
actividad económica e inflación en el país, de los mercados de activos y la situación internacional.
Finalmente, reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible.
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2013-04-01 |
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Minutas de la reunión de la JDBR del 26 de abril de 2013
El 26 de Abril de 2013 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta
Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público,
Mauricio Cárdenas Santamaria, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores
doctores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Enrique Meisel
Roca, César Vallejo Mejía, Juan Pablo Zárate Perdomo. En las minutas se presenta un resumen de la
situación inflacionaria, de crecimiento económico y sus perspectivas, elaborada por el equipo
técnico del Banco (sección 1) y se reseña la discusión y opciones de política consideradas por la
Junta Directiva (sección 2).
1. SITUACION INFLACIONARIA Y DE CRECIMIENTO ECONÓMICO
a. Desarrollos recientes de la inflación
En marzo, la inflación anual al consumidor interrumpió la tendencia descendente que traía desde
hace nueve meses y se situó en 1,91%, 8 puntos base (pb) superior al resultado del mes anterior. El
aumento de la inflación en este mes fue explicado principalmente por la aceleración en la variación
de los precios de la canasta de alimentos. En el IPC sin alimentos, el resultado varió poco frente al
mes pasado. La variación de los precios de los transables se aceleró, compensando el fuerte
descenso de los precios de la canasta de regulados.
En la variación anual del IPC de alimentos, se interrumpió la tendencia decreciente que mostraba
desde hace varios meses. El registro en marzo de 1,4% fue 22 pb mayor que el de un mes atrás. El
grupo de perecederos fue el que presentó una mayor aceleración (de -5,6% en febrero a -1,9% en
marzo) aunque manteniéndose en terreno negativo. Respecto a los grupos de procesados y de
comidas fuera del hogar, se observaron desaceleraciones de 1,6% en febrero a 1,3% en marzo y de
3,6% en febrero a 3,2% en marzo respectivamente.
Dentro del IPC sin alimentos, la canasta de no transables sin alimentos ni regulados se mantuvo en
3,9%, al igual que los hizo su principal componente, los arriendos. Estos dos índices venían
disminuyendo lentamente desde noviembre del año pasado, lo cual puede ser atribuido a las escasas
presiones de demanda existentes desde hace varios trimestres, junto con la reducción de las
expectativas de inflación, entre otros.
Respecto al IPC de transables sin alimentos ni regulados, en el último mes su variación anual
aumentó (de 0,7% en febrero a 1,1% en marzo) a diferencia de lo ocurrido en los meses anteriores
cuando se había mantenido estable. Este fenómeno, en alguna medida puede explicarse por la
depreciación del peso en lo corrido del año la cual ya se habría empezado a trasmitir a los precios al
consumidor.
Finalmente, en marzo continuó el descenso de la variación anual de los regulados. El resultado para
este mes fue 0,2%, frente a 0,7% en febrero. En esta ocasión volvió a presentarse un descenso fuerte
en las tarifas de energía.
En marzo no se presentaron cambios importantes en los indicadores de inflación básica. El
promedio de los cuatro indicadores monitoreados por el Banco de la República fue 2,52%, frente a
2,49% de febrero.
La variación anual del IPP se mantuvo en terreno negativo en marzo (-1,9%) pese a los aumentos de
los últimos tres meses, lo que puede estar relacionado a la trasmisión de la depreciación a sus
componentes importados.
Las diferentes medidas de expectativas de inflación se mantienen en niveles bajos. Según la
encuesta mensual efectuada por el Banco de la República a los analistas del mercado, la inflación
esperada para diciembre de este año es de 2,6%, levemente menor que lo obtenido hace un mes. Las
expectativas a doce meses, están en 2,9% sin mostrar variación en los últimos meses. Por su parte,
la encuesta trimestral efectuada a empresas a comienzos de abril indica que se prevé una inflación
de 2,8% para diciembre de 2013. Las estimaciones efectuadas a partir de los TES tasa fija y UVR
apuntan a una inflación entre 2,5% y 2,7% a horizontes entre 2 y 5 años.
b. Crecimiento
Los indicadores disponibles para el primer trimestre sugieren que la actividad económica se habría
desacelerado. El consumo de los hogares habría crecido a una tasa menor que la del cuarto trimestre
de 2012, como se puede inferir de los siguientes hechos: De acuerdo al DANE, las ventas del
comercio de febrero crecieron a una tasa anual de 0,6%, menor al 1,3% de enero y al 3,3% del
promedio para el cuarto trimestre de 2012. Los datos de lo corrido del año sugieren un
estancamiento en las tendencias de las ventas frente a lo registrado hacia finales del año pasado
(descontando las ventas de automotores, la tasa anual de crecimiento fue 2,9%). Por otro lado, el
índice de confianza del consumidor publicado por Fedesarrollo mostró una caída sustancial en su
nivel para febrero y mantuvo su nivel en marzo. Con ese resultado el promedio de este índice para
el primer trimestre es menor que el observado para el cuarto del año pasado. Por su parte la cartera
de consumo siguió desacelerándose con un crecimiento anual promedio de 16,5% durante el primer
trimestre frente al 18,4% observado en el cuarto de 2012. En términos reales se mantiene esta
tendencia.
En la inversión se podría esperar una recuperación dada la buena dinámica que se observó para las
importaciones de bienes de capital en promedio entre enero y febrero (crecieron 9,0% en términos
reales, frente al -8,7% del cuarto trimestre).
Las ventas externas colombianas a febrero de 2013 se redujeron 6,6% frente al mismo mes del año
anterior. Dicho comportamiento se explica por la caída de las principales exportaciones de origen
minero (-11,9%) y agrícola (-6,3%). En contraste, el grupo de exportaciones industriales y otros
registró un crecimiento anual de 13,4% en el mes de febrero. Nuevamente, las exportaciones de
vehículos y autopartes tuvieron un aporte importante al aumentar 354% en este mes. También se
destacan los crecimientos de las exportaciones de máquinas y aparatos eléctricos (38%) y de carne
(167%).
Por el lado de la oferta, los indicadores disponibles para la industria siguen mostrando un deterioro
del sector. La variación anual del IPI sin trilla de café para el mes de febrero fue de -4,5%, similar a
lo esperado. Cabe resaltar que este comportamiento estaría en parte relacionado con la presencia de
un día calendario menos en este mes frente al mismo mes del año anterior. La confianza de los
empresarios también se deterioró en el primer trimestre registrando niveles menores que los
observados a finales del año pasado. Por último, los indicadores de pedidos y existencias muestran
también un empeoramiento del sector. Algo similar revelaron las expectativas de producción a tres
meses.
Algunas cifras asociadas con el comercio y la construcción también sugieren desaceleraciones en
estos sectores. De acuerdo con la encuesta de Fedesarrollo, la situación actual y las expectativas a 6
meses de los comerciantes señalan algún deterioro en el sector. Con respecto a la construcción, la
producción de cemento mostró una caída de 4,8% anual, con lo que su componente tendencial sigue
cayendo.
Se espera también una reducción de la producción de carbón debido a choques de oferta en febrero
y marzo. Para el total de la actividad minera, sin embargo, el aumento de la producción de petróleo
debería compensar en parte el anterior efecto negativo. La producción de petróleo aumentó de
manera importante durante los primeros tres meses del año, alcanzando 1.008 miles barriles diarios
con un crecimiento anual de 8,5%.
Por su parte, el crecimiento de la producción de café se habría acelerado entre enero y marzo de
2013 (a 26% en promedio) de acuerdo con la Federación Nacional de Cafeteros, esto incluso a pesar
del paro y los problemas reportados por los cafeteros.
Es importante tener en cuenta que durante el primer trimestre del año hubo menos días hábiles
frente al mismo periodo del año anterior por cuenta de la Semana Santa en marzo y un mes de
febrero con un día menos. En el pasado, esta circunstancia ha afectado de manera significativa los
resultados de crecimiento económico del primer trimestre. Esto ha dificultado la interpretación de
las tendencias actuales de la actividad económica y su proyección.
Sin embargo, es de esperar que el crecimiento económico aumente a lo largo del año en la medida
en que el gasto agregado reaccione a las acciones previas de la política monetaria y a los programas
de inversión y gasto anunciados recientemente por el Gobierno nacional. Para todo el año 2013, el
equipo técnico del Banco proyecta un crecimiento del PIB entre el 3,0% y el 5,0%, con 4,3% como
cifra más probable.
c. Variables Financieras
El crecimiento del crédito bancario (M/N y M/E) continuó moderándose, luego de cinco meses de
relativa estabilidad. En marzo registró una tasa de crecimiento anual de 14,2%, inferior en 95 pb al
mes anterior. Para la cartera en moneda nacional se observó una desaceleración en el crecimiento
anual pasando de 14,4% a 13,2% entre febrero y marzo. Para el caso de la cartera en moneda
extranjera se observó un repunte de 24,8% a 29,4%.
Durante marzo, todas las modalidades de cartera presentaron alguna reducción en sus tasas de
crecimiento anual frente a al mes anterior. La cartera comercial pasó de 14,2% a 13,2%, el crédito
de consumo de 16,9% a 15,6% y la cartera hipotecaria de 14,5% a 14,1%.
Las tasas de interés nominales de los créditos concedidos en todas las modalidades marcan una
tendencia decreciente frente a sus niveles de finales de julio de 2012, cuando se comenzó a bajar la
tasa de interés de política. Hasta marzo, la mayor reacción se observó en las tasas de consumo (-165
pb), de crédito preferencial (-152 pb) y de microcrédito (-182 pb). En menor medida disminuyeron
las tasas de crédito hipotecario (-94 pb), de tarjeta de crédito (-73 pb), de comercial ordinario (-104
pb) y para construcción de vivienda (-124 pb).
En marzo la tasa de interés real para los desembolsos destinados a consumo fue de 15,6%, para los
hipotecarios de 9,8%, para los preferenciales de 5,6% y para el comercial ordinario de 8,9%, tasas
menores a sus promedios históricos respectivos calculados desde 2000. De otra parte, la tasa de
interés real para los créditos otorgados con tarjeta de crédito y para la modalidad de tesorería se
ubicaron en 26,9%, y 5,2% respectivamente, tasas mayores a sus promedios calculados desde 2000.
d. Contexto Externo
Diversos indicadores sobre producción industrial, consumo, empleo, y crédito, sugieren que la
actividad económica global durante el primer trimestre de 2013 continúa registrando un bajo
dinamismo. El escaso ritmo de expansión de la economía mundial obedece al débil crecimiento de
la actividad económica de los países desarrollados, lo que se refleja en elevados niveles de
desempleo y en dudas crecientes sobre la sostenibilidad fiscal en varias de estas economías. En
contraste, las economías emergentes mantienen un dinamismo favorable, aunque en algunas de ellas
comienzan a aparecer síntomas de desaceleración como resultado del debilitamiento de la demanda
mundial y su efecto negativo sobre los precios de los productos básicos.
La zona euro continúa siendo la región menos dinámica. Las cifras sobre el desempeño de su
actividad real indican una nueva contracción de su producto interno bruto en el primer trimestre de
2013. Esto se desprende del comportamiento de los índices de sentimiento empresarial de los
sectores de manufacturas y servicios que acentuaron su caída en los últimos meses, y de la
evolución los indicadores de actividad de la industria y el comercio al por menor que siguieron
contrayéndose en términos anuales. Pese a que a partir de la segunda mitad de 2012, las medidas
adoptadas en la zona del euro han mejorado las condiciones financieras de la región, el canal del
crédito continúa interrumpido como consecuencia de la desconfianza de los intermediarios
financieros frente a la evolución de la economía.
En los Estados Unidos las noticias son un poco más favorables. El crecimiento del producto para el
primer trimestre de este año alcanzó una tasa anualizada de 2,5%, mayor que la expansión de 0,4%
observada en el último trimestre del año anterior. El consumo de los hogares y los sectores de
manufacturas y servicios siguieron expandiéndose mientras que el mercado de vivienda mantuvo su
tendencia a la recuperación aunque todavía desde niveles relativamente bajos. Sin embargo, algunas
cifras para marzo y abril empezaron a mostrar un debilitamiento de la demanda, lo cual parece estar
asociado con los efectos del ajuste fiscal y con la baja demanda global que estaría afectando el
desempeño exportador de esta economía.
Por su parte, en las economías emergentes, el crecimiento de China durante el primer trimestre del
año fue inferior al esperado por los analistas y evidenció una desaceleración frente al cuarto
trimestre de 2012. El menor ritmo en la primera parte del año de la industria, las ventas al por
menor y las exportaciones son evidencia de esta desaceleración. Una consecuencia importante de
esto es la reducción de las compras externas de materias primas y bienes básicos por parte de China.
Esta tendencia, que se observa desde finales de 2010, afecta el desempeño de la mayoría de las
economías emergentes que habían encontrado en ese país un mercado importante para sus
productos.
Para el caso de América Latina, las economías de Chile, México y Perú han seguido expandiéndose
a un ritmo favorable, aunque han empezado a mostrar algunas señales de debilitamiento,
especialmente en las dos primeras. En Brasil la industria frenó en febrero su ritmo de recuperación.
No obstante, se espera que el crecimiento de Brasil en 2013 sea superior al del año pasado (0,9%).
Otras economías de la región, como Venezuela y Ecuador, estarían desacelerándose frente al año
anterior.
En relación con los precios internacionales de los bienes básicos, la debilidad de la economía
mundial generó caídas importantes en las cotizaciones del petróleo en las últimas semanas. Para el
caso de otros bienes exportados por Colombia, como el carbón, el níquel y el café, los precios se
encuentran por debajo del promedio de 2012.
Las menores cotizaciones internacionales de los bienes básicos, en especial las de los energéticos,
han disminuido las presiones inflacionarias en la economía mundial y sugieren pocos riesgos en este
frente en el corto plazo. Esto unido a la debilidad esperada del crecimiento mundial, indica que la
política monetaria en las economías desarrolladas y en algunas emergentes continuaría siendo
expansiva. Vale la pena notar que el banco central de Japón anunció una política de relajación
cuantitativa que implicaría una duplicación de la base monetaria en los siguientes dos años, la cual
pasaría de cerca del 30% del PIB en la actualidad a más del 60% en 2015.
En resumen, se proyecta una actividad económica global más débil en 2013 frente a lo observado en
2012. Se esperan unos términos de intercambio menores a los observados el año pasado,
interrumpiendo la tendencia al alza observada en los años anteriores. Si estas tendencias continúan,
el impulso externo para la economía colombiana en 2013 podría ser menor que en años anteriores.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
La Junta Directiva tomó en consideración los siguientes aspectos relevantes:
(i) En el contexto internacional, los indicadores de actividad económica del primer trimestre del año
muestran un crecimiento modesto en los Estados Unidos, Europa en recesión y una leve
desaceleración en China. En Japón, además, el banco central ha anunciado un programa de fuerte
estímulo monetario.
(ii) De continuar a lo largo del año las tendencias actuales en la economía internacional, los
términos de intercambio y el crecimiento promedio de los socios comerciales de Colombia
probablemente caerán un poco frente a lo observado en 2012. En consecuencia, el gasto agregado
tendría un impulso externo menor que en años anteriores.
(iii) La información del primer trimestre sugiere que la actividad económica en Colombia se habría
desacelerado frente a lo observado en 2012. Por el lado de la demanda, el consumo de los hogares
habría crecido a una tasa menor, como se desprende de la evolución de los indicadores de comercio
al por menor, de confianza de los hogares y de crédito. Por el lado de la oferta, los indicadores
disponibles para la industria siguen mostrando deterioro. En febrero las exportaciones en dólares se
contrajeron en términos anuales, hecho explicado principalmente por las de origen minero y
afectadas por los choques de oferta en el sector del carbón. En contraste, las exportaciones
industriales crecieron a buen ritmo.
(iv) El comportamiento reciente de algunos componentes del gasto agregado y el menor número de
días hábiles del primer trimestre frente al mismo periodo del año anterior, ha hecho particularmente
difícil la interpretación de las tendencias actuales de la actividad económica y su proyección. Sin
embargo, es de esperar que el crecimiento económico aumente a lo largo del año en la medida que
el gasto agregado reaccione a las acciones previas de política monetaria y a los programas
anunciados recientemente por el gobierno nacional. Para todo el año 2013, el equipo técnico del
Banco proyecta un crecimiento del PIB entre el 3% y el 5%, con 4,3% como cifra más probable.
(v) En marzo, la inflación anual (1,91%) se aceleró levemente y las medidas de inflación básica no
presentaron cambios importantes. Tanto el promedio de dichas medidas, como la mayor parte de los
indicadores de expectativas de inflación se encuentran por debajo de la meta (3%).
(vi) A marzo las reducciones en la tasa de interés de política se han transmitido a las tasas nominales
de interés de mercado. Las de créditos de consumo, preferencial y microcrédito reaccionaron en
magnitud similar o mayor que la tasa del Banco, mientras que las de créditos comerciales
ordinarios, hipotecarias y tarjetas de crédito lo hicieron de forma más lenta. Sin embargo, en las
últimas semanas se ha observado una reducción importante en las tasas de interés del crédito
hipotecario. En términos reales las tasas han disminuido menos debido al fuerte descenso de la
inflación y sus expectativas.
(vii) El crecimiento de la cartera continuó moderándose. En lo corrido del año se ha observado una
desaceleración del crédito comercial en pesos, pero un aumento en la financiación mediante emisión
de bonos de las firmas junto a un mayor endeudamiento externo. El crédito a los hogares (consumo
e hipotecario) también crece menos pero lo hace a tasas superiores a las del PIB nominal.
(viii) A diciembre, los índices de precios de la vivienda nueva y usada continuaron creciendo a tasas
elevadas, y sus niveles son históricamente altos.
En resumen, la economía colombiana crece actualmente por debajo de su potencial y la inflación se
sitúa por debajo del 3%. Las acciones de política monetaria y fiscal adoptadas contribuirán a que en
2013 el producto se sitúe cerca de la capacidad productiva de la economía y a que la inflación vaya
convergiendo a la meta de largo plazo.
DECISIÓN DE POLÍTICA
De acuerdo con la evaluación del balance de riesgos la Junta Directiva acordó por unanimidad
mantener inalterada la tasa de interés de intervención en 3,25%, a la espera de mayor información.
La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo del comportamiento y proyecciones de la
actividad económica e inflación en el país, de los mercados de activos y la situación internacional.
Finalmente, reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible.
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2013-05-01 |
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Minutas de la reunión de la JDBR del 31 de mayo de 2013
El 31 de Mayo de 2013 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta
Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público,
Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores
doctores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Enrique Meisel
Roca, César Vallejo Mejía, Juan Pablo Zárate Perdomo. En las minutas se presenta un resumen de la
situación inflacionaria y del crecimiento económico, y sus perspectivas, elaborada por el equipo
técnico (sección 1) y se reseñan las principales discusiones y opciones de política consideradas por
la Junta Directiva (sección 2).
1. SITUACIÓN INFLACIONARIA Y DE CRECIMIENTO ECONÓMICO
Antecedentes
a. Desarrollos recientes de la inflación
La inflación al consumidor en abril fue 2,02%, 10 puntos base (pb) por encima de lo observado en
marzo. La aceleración de la inflación anual se concentró en el precio de los alimentos y de los
regulados tal como se había anticipado.
En el IPC de alimentos, la variación anual aumentó por segundo mes consecutivo y se situó en
1,6%, 20 pb más que en marzo. Las presiones alcistas provinieron de los alimentos perecederos (la
variación anual pasó de -1,9% en marzo a 0,4% en abril). Por otra parte, para los alimentos
procesados los aumentos anuales de precios volvieron a ser de poca magnitud algo que estaría
relacionado con la estabilidad relativa que mostraron los precios internacionales de cereales, aceites
y oleaginosas a finales del año pasado y comienzos del actual.
Dentro del IPC sin alimentos, se destaca el aumento de los precios de los regulados cuya variación
anual en el último mes fue 0,9%, 70 pb más que en marzo. Dicha aceleración se dio en las tarifas de
energía eléctrica. Los otros componentes del grupo –transporte, gasolina, gas domiciliario – se
desaceleraron.
Para los otros componentes del IPC sin alimentos, en transables la variación anual en abril fue de
0,98%, lo que implicó un descenso de 15 pb frente a marzo. Los precios de un buen número de
bienes de consumo durables, incluidos automóviles, siguieron cayendo como sucede desde hace
varios trimestres. La depreciación del peso de los últimos meses, dado que ha sido moderada, se ha
transmitido poco a los precios al consumidor. Por otra parte, la variación anual de no transables no
presentó cambios de importancia manteniéndose en 3,8%. La subcanasta de arriendos, su principal
componente, también se mantuvo en ese nivel.
En abril, los indicadores de inflación básica mostraron pocos cambios. El promedio de todos ellos
se situó en 2,48%, 4 pb por debajo del dato del mes anterior y en el menor nivel desde octubre de
2010.
La variación anual del IPP se mantuvo en terreno negativo en abril (-2,4%) gracias al descenso del
componente local (producidos y consumidos) pues el importado aumentó. Esto último estaría
relacionado con la depreciación del peso.
Respecto a las expectativas de inflación, las diferentes medidas se encuentran en o por debajo de la
meta de 3%. La obtenida a partir de la encuesta mensual del Banco para fin de año se redujo
levemente a 2,5%, mientras que la de doce meses se situó en 3,0% (aumentando un poco frente al
registro de la encuesta anterior). Entre tanto, las estimadas a partir de los TES para horizontes de 2,
3 y 5 años continuaron oscilando entre 2,6% y 2,8% durante abril y las tres primeras semanas de
mayo.
b. Crecimiento
La información más reciente sobre el comportamiento de la economía en el primer trimestre de
2013 sugiere que ésta se habría desacelerado frente a lo observado a finales del año pasado, como se
anticipó en informes anteriores. Los indicadores para este periodo están influenciados por el menor
número de días hábiles que se dio en febrero y marzo.
En el primer trimestre del año el consumo de los hogares habría crecido a tasas ligeramente
menores que las registradas en el cuarto trimestre de 2012. De acuerdo a las cifras de la Muestra
Mensual de Comercio al por Menor (MMCM) publicadas por el DANE en marzo, el crecimiento
anual de las ventas fue de 0,9% en el primer trimestre (inferior al 3,3% del último de 2012). Esta
dinámica sería explicada por una caída anual en las ventas de vehículos automotores (-11,4%). En
contraste, las ventas de los demás bienes crecieron 4,0% durante los primeros tres meses del año.
Por otra parte, en las importaciones de bienes de consumo en dólares también se observó una
desaceleración. Entre enero y marzo de 2013 se expandieron a una tasa anual de 3,3%, cifra menor
que la registrada en el último trimestre de 2012 (15,4%). Esta dinámica se vio afectada por el
comportamiento de las importaciones de bienes de consumo duradero que crecieron 1,6% durante
este periodo, luego del registro de 11,2% en el cuarto trimestre. De estos datos se desprende que el
consumo de bienes no durables, semidurables y de servicios habría continuado expandiéndose a
tasas similares a las observadas hacia el final del año pasado, mientras que en el segmento de bienes
durables habría presentado una marcada desaceleración.
En lo que respecta la inversión, la información de importaciones de bienes de capital muestra que
este rubro se contrajo en marzo (-6,7% de crecimiento anual), lo que también apuntaría a una menor
dinámica de la inversión diferente de construcción de vivienda y obras civiles.
Por otra parte, las exportaciones en dólares registraron una caída de 20% en marzo respecto al
mismo mes del año anterior (al pasar de US$5.712 millones a US$4.567 millones). Las ventas
externas de los principales grupos disminuyeron así: las mineras 22,3% anual, las agrícolas 24,2% y
las industriales 9,4%.
Con respecto a los indicadores de oferta, las noticias muestran comportamientos mixtos. La
producción de café continúa expandiéndose a tasas favorables. La actividad minero-energética,
mostró una producción petrolera con un buen crecimiento, mientras que la producción de carbón se
vio afectada por problemas laborales y sanciones ambientales. La industria registró un deterioro
importante durante el trimestre. El índice de producción industrial sin trilla se contrajo 11,5% en
términos anuales en marzo. Con este registro, la producción de la industria mostró una contracción
de 6,0% anual en el primer trimestre, la cifra más baja para todo un trimestre desde 2009.
Dado lo anterior, no se estima necesario revisar los pronósticos de crecimiento para el primer
trimestre. Gran parte de la desaceleración ya se había previsto y estaba incorporada en los ejercicios
de pronóstico, que tenían en cuenta el menor número de días hábiles durante el primer trimestre. Así
las cosas, se mantiene el rango de pronóstico entre 2,0% y 3,5%. Un resultado que supone un buen
comportamiento del consumo público y de la inversión en obras civiles.
Para el segundo trimestre de 2013, la información es escasa y está disponible solo para abril.
Algunos datos sugieren un repunte en el crecimiento de la actividad económica. Por el lado de la
demanda, en abril la confianza del consumidor rebotó de manera importante desde los niveles
registrados en febrero y marzo, y se ubicó nuevamente por encima de su promedio histórico. Este
comportamiento obedeció a unas mejores expectativas económicas de mediano y largo plazo de los
hogares. Por su parte, según la información publicada por Econometría, las ventas de vehículos
registraron un crecimiento anual positivo en abril (3,3%) luego de las fuertes caídas en los meses
anteriores (-18,5% en promedio para el primer trimestre).
Por el lado de la oferta, los indicadores disponibles para el mes de abril mostraron una mejoría. En
el caso de la industria, según la encuesta de Fedesarrollo, los indicadores de pedidos y existencias
mejoraron de manera importante. No obstante, el componente tendencial continúa sugiriendo un
deterioro. Asimismo, el indicador de expectativas de producción a tres meses en abril también
aumentó y la caída del componente tendencial se frenó. De todas maneras es conveniente esperar
nueva información para confirmar un cambio de tendencia en estas series.
Por otra parte, los comerciantes consultados por Fedesarrollo reportaron una leve mejoría en la
percepción actual y futura de sus ventas en abril. Sin embargo, también en este caso, el componente
tendencial continúa mostrando un debilitamiento, comportamiento que también registra la encuesta
de Fenalco.
Por último, la demanda de energía total aumentó 8,1% anual en abril y la de energía no regulada
para la industria aumentó 8,2% anual. Dado que la correlación entre esta última serie y la
producción industrial es alta, se espera que ésta muestre una recuperación en abril.
Es de esperar que el crecimiento económico colombiano aumente a lo largo del año en la medida en
que el gasto agregado reaccione a las medidas previas de política monetaria y a los programas
anunciados durante el mes pasado por el gobierno nacional. El equipo técnico del Banco mantiene
su pronóstico de crecimiento del PIB para 2013 entre 3,0% y 5,0%, con 4,3% como cifra más
probable.
c. Variables Financieras
En abril, el crecimiento del crédito bancario (M/N y M/E) continuó moderándose, registrando una
tasa de crecimiento anual de 14,0%, inferior en 18 pb al mes anterior. Esta desaceleración se explica
por el comportamiento de la cartera en moneda nacional que pasó de crecer a una tasa anual de
12,6% en abril frente a 13,2% en marzo. Para el caso de la cartera en moneda extranjera se observó
en este mismo periodo un incremento en la variación anual de 29,4% a 36,3%.
Por modalidades, la desaceleración se concentró en el crédito con destino a los hogares, con una
reducción en las tasas de crecimiento del crédito de consumo (de 15,6% a 14,6% entre marzo y
abril) y de la cartera hipotecaria (de 14,1% a 13,7% entre marzo y abril). Por su parte la cartera
comercial presentó un leve repunte en el crecimiento anual durante abril (13,5% frente a 13,2% en
marzo) explicado principalmente por el dinamismo de la cartera en moneda extranjera.
En abril la tasa de interés real para los desembolsos destinados al crédito de consumo fue de 15,5%,
para los hipotecarios de 9,5%, para los preferenciales de 4,6% y para el comercial ordinario de
8,4%, tasas menores a sus promedios históricos respectivos calculados desde 2000 . Por otra parte,
la tasa de interés real para los créditos otorgados con tarjeta de crédito y para la modalidad de
tesorería fueron de 26,4% y 5,1%, respectivamente, tasas mayores a sus promedios calculados
desde 2000.
Las tasas de interés nominales de los créditos concedidos en todas las modalidades marcan una
tendencia decreciente frente a los niveles de finales de julio de 2012, cuando se comenzó a bajar la
tasa de interés de política. Hasta abril, la mayor reacción se observó en las tasas de crédito
preferencial (-237 pb), de construcción de vivienda (-178 pb), consumo (-160 pb) y microcrédito (-
160 pb). En menor medida disminuyeron las tasas de crédito ordinario (-151 pb), de crédito
hipotecario (-117 pb) y tarjeta de crédito (-107 pb). Esta reducción también se ha transmitido a las
tasas de interés reales, pese al descenso reciente de la inflación. Durante el período mencionado, se
destacan las diminuciones de 177 pb en créditos preferenciales, de 118 pb en créditos para
construcción, de 96 pb en créditos de consumo, de 91 pb en créditos comerciales ordinarios y de 87
pb en microcréditos.
d. Contexto Externo
Los datos recientes sugieren un crecimiento de las economías industrializadas similar al esperado en
el Informe sobre Inflación pasado. Estados Unidos crece a un ritmo moderado, Europa continúa
contrayéndose y Japón pareciera estar empezando a reaccionar a las fuertes medidas de estímulo
monetario. Sin embargo, varias economías de países emergentes de Asia y de América Latina se
desaceleraron más de lo anticipado.
En la zona del euro la contracción del PIB fue inferior a la registrada en el último trimestre de 2012.
Pese a ello, el deterioro de las economías de la periferia continuó afectando a Alemania y en mayor
medida a Francia. Las últimas cifras de actividad real muestran que la economía de la región habría
seguido contrayéndose; no obstante, para el caso de Alemania, la información es más favorable y
estaría indicando algún repunte en los próximos meses. En este sentido, el ritmo de deterioro de la
región podría estar moderándose.
En los Estados Unidos algunos indicadores del gasto privado para el segundo trimestre sugieren que
la economía habría seguido expandiéndose a un ritmo moderado. La información sobre consumo,
manufacturas y servicios apuntan a que el crecimiento se mantuvo en abril. De igual forma, el
mercado de vivienda continuó recuperándose y los precios de otros activos financieros,
valorizándose.
En China, la economía se ha expandido a un ritmo menor al esperado. La información a abril sobre
exportaciones, actividad industrial y ventas al por menor, presentan crecimientos anuales que son
inferiores a los de años atrás. De la misma manera el crecimiento de la inversión en activos fijos ha
seguido moderándose.
Para el caso de América Latina, en marzo la actividad real se desaceleró en México, Chile y Perú.
Parte de este fenómeno puede estar asociado al efecto de menores días hábiles por la presencia de
Semana Santa en el primer trimestre. En Brasil, aunque la recuperación de la actividad económica
ha continuado, su expansión fue menor que la esperada por las autoridades económicas y por los
analistas.
En relación con los precios internacionales de bienes básicos, las cotizaciones del petróleo han
disminuido en las últimas semanas. El precio promedio actual del petróleo se encuentra 3,5% por
debajo del promedio de 2012. Para el caso de otras materias primas, como el cobre, el carbón y el
níquel, los precios también se encuentran en niveles inferiores a los de 2012. De igual forma, las
cotizaciones internacionales de los alimentos no han mostrado alzas significativas en lo corrido del
año y para los próximos meses no se esperan aumentos gracias a que las condiciones climáticas han
sido normales en las áreas productoras. Además, en Brasil se esperan cosechas agrícolas récord.
Salvo en casos puntuales, la inflación al consumidor se encuentra en niveles bajos y estables, tanto
en las economías avanzadas como en las emergentes. Para los próximos meses no se esperan riesgos
alcistas.
En un contexto de débil crecimiento económico y baja inflación, se espera que las medidas de
estímulo monetario implementadas por los bancos centrales de las principales economías
desarrolladas se mantengan en lo que resta del año.
Finalmente, las menores cotizaciones de los bienes básicos frente al promedio observado en 2012,
la desaceleración en el crecimiento económico en América Latina mayor a lo esperado y las
conjeturas sobre la posibilidad de que Reserva Federal de los Estados Unidos comience a reducir su
programa de compra de activos entre otros factores, afectaron las primas de riesgo y las tasas de
cambio de la región.
En síntesis, se continúa proyectando una actividad económica global más débil en 2013 frente a lo
observado en 2012. El menor crecimiento de las economías emergentes hace prever una demanda
de exportaciones colombianas que podría ser levemente menor a lo estimado anteriormente. En este
contexto se siguen proyectando unos términos de intercambio inferiores al promedio observado en
2012. Si estas tendencias continúan, el impulso externo para la economía colombiana en 2013
podría ser menor que en años anteriores.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
La Junta Directiva tomó en consideración los siguientes aspectos relevantes:
(i) Los datos recientes sugieren un crecimiento de las economías industrializadas similar al esperado
un mes atrás. Estados Unidos crece a un ritmo moderado, Europa continúa contrayéndose y Japón
pareciera estar empezando a reaccionar a las fuertes medidas de estímulo monetario. Sin embargo,
varias economías de países emergentes de Asia y de América Latina se desaceleraron más de lo
anticipado.
(ii) El menor crecimiento de las economías emergentes hace prever una demanda de exportaciones
colombianas levemente menor a la estimada antes y términos de intercambio inferiores al promedio
observado en 2012.
(iii) El peso colombiano, al igual que la moneda de varios países de América Latina, se ha
depreciado frente al dólar. Esto podría estar asociado con la reducción en los precios internacionales
de los bienes básicos que estos países exportan, con la desaceleración en sus crecimientos
económicos, y con conjeturas sobre la posibilidad de que la Reserva Federal de los Estados Unidos
comience a reducir su programa de compra de activos. Las intervenciones del Banco de la
República en el mercado cambiario local, al igual que las medidas adoptadas por el gobierno, han
reforzado la tendencia hacia la depreciación del peso.
(iv) Los indicadores disponibles hasta el momento sugieren un crecimiento en el segundo trimestre
superior al del primero. En abril, la confianza del consumidor mejoró de manera importante, al
igual que los indicadores de expectativas empresariales en la industria y el comercio y el consumo
de energía eléctrica. Asimismo, las reducciones en la tasa de referencia continúan transmitiéndose a
las tasas de interés nominales y reales y el crédito total detuvo su desaceleración.
(v) En general es de esperar que el crecimiento económico colombiano aumente a lo largo del año
en la medida en que el gasto agregado reaccione a las medidas previas de política monetaria y a los
programas anunciados durante el mes pasado por el gobierno nacional. El equipo técnico del Banco
mantiene su pronóstico de crecimiento del PIB para 2013 entre 3,0% y 5,0%, con 4,3% como cifra
más probable.
(vi) En abril la inflación anual (2,02%) se aceleró. Las medidas de inflación básica no presentaron
cambios importantes. Tanto el promedio de dichas medidas como las expectativas de inflación se
encuentran en o por debajo de la meta (3%).
En resumen, la economía colombiana habría crecido por debajo del 3% en el primer trimestre, pero
es de esperar que las acciones de política monetaria y fiscal realizadas hasta el momento
contribuyan a que en el transcurso del año el producto se sitúe cerca de su nivel potencial. De igual
manera, la probabilidad de que la inflación culmine en el rango meta es elevada. En este contexto, y
con la evaluación del balance de riesgos, la Junta Directiva consideró conveniente mantener la tasa
de interés de intervención en 3,25%.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
De acuerdo con la evaluación del balance de riesgos la Junta Directiva acordó por unanimidad
mantener inalterada la tasa de interés de intervención en 3,25%.
La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo del comportamiento y proyecciones de la
actividad económica e inflación en el país, de los mercados de activos y la situación internacional.
Finalmente, reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible.
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2013-06-01 |
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Minutas de la reunión de la JDBR del 28 de junio de 2013
El 28 de Junio de 2013 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta
Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público,
Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores
doctores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Enrique Meisel
Roca, César Vallejo Mejía, Juan Pablo Zárate Perdomo. En las minutas se presenta un resumen de la
situación inflacionaria y del crecimiento económico, y sus perspectivas, elaborada por el equipo
técnico (sección 1) y se reseñan las principales discusiones y opciones de política consideradas por
la Junta Directiva (sección 2).
1. SITUACIÓN INFLACIONARIA Y DE CRECIMIENTO ECONÓMICO
Antecedentes
a. Desarrollos recientes de la inflación
En mayo la inflación anual al consumidor fue 2,00%, manteniéndose prácticamente estable frente
al registro de abril (2,02%). Los aumentos de precios de algunos regulados, fueron compensados
por reducciones de precios en alimentos procesados y en el IPC de no transables sin alimentos ni
regulados.
Dentro del IPC sin alimentos, en mayo sobresalió el aumento de la variación anual de regulados
(1,25% frente a 0,9% en abril). Esta alza se centró en las tarifas de energía eléctrica de algunas
ciudades, incluida Bogotá. En este mes se presentaron también aumentos en las tarifas de transporte
público de otras ciudades como Medellín. Por otro lado, la variación anual de los combustibles
continuó en terreno negativo (-3,5%).
Se presentó un aumento moderado en la variación anual del IPC de transables sin alimentos ni
regulados (1,06% frente a 0,98% de abril). La depreciación del peso en lo corrido del año (cerca del
9% entre el 31 de diciembre y el 24 de junio) no se ha trasmitido hasta el momento a esta
subcanasta.
Respecto a los no transables sin alimentos ni regulados, el resultado de mayo (3,7%) refleja una
caída de 9 pb frente al mes anterior. El hecho más destacable fue la reducción de la variación anual
de arriendos a 3,7% (frente a 3,8% de abril). Este indicador viene descendiendo muy lentamente,
aunque con algunas interrupciones, desde octubre del año pasado.
En el IPC de alimentos la variación anual en mayo (1,3%) cayó 28 pb después de aumentos
consecutivos los dos últimos meses. Esta disminución fue explicada principalmente por la
reducción de los precios de procesados (de 0,91% a -0,14%). En contraste, los precios de los
perecederos aumentaron por segundo mes consecutivo (de 0,4% a 2,6%). La variación de los
precios de comidas fuera del hogar no presentó cambios manteniéndose en 3,3%.
En mayo el promedio de los cuatro indicadores de inflación básica monitoreados por el Banco
descendió levemente, situándose en 2,44%, 4 pb menos que el registro de abril. Los cuatro
indicadores se mantienen entre 2% y 3% desde enero de este año.
El IPP mantuvo una variación anual negativa en mayo (-2,1%) aunque aumentó frente al mes
pasado (-2,4%). Tanto la variación de los precios de los bienes consumidos y producidos como de
los importados se mantuvo en terreno negativo.
En mayo las expectativas de inflación se incrementaron levemente, pero siguieron en niveles
compatibles con el cumplimiento de la meta. La encuesta mensual del Banco de la República indica
que la inflación esperada a diciembre de este año es 2,6% (7 pb más que hace un mes) y la de doce
meses se situó en 3,1% (aumentando 8 pb frente a abril). Por su parte, las expectativas derivadas de
los TES a horizontes de 2, 3 y 5 años se mantuvieron entre 2,5% y 3,0%.
b. Crecimiento
El PIB se expandió 2,8% durante los primeros tres meses del año, en línea con el punto medio del
rango de pronóstico presentado en el anterior informe trimestral sobre inflación. El resultado en
parte está relacionado con la presencia de un menor número de días calendario y hábiles frente al
mismo periodo del año pasado, aunque también por diversos choques de oferta en el sector minero.
La mayoría de los componentes de la demanda interna se desaceleraron. Los rubros de inversión en
maquinaria y equipo y consumo durable fueron los que más contribuyeron a este comportamiento.
En contraste, la inversión destinada a construcción y edificaciones y obras civiles creció de manera
significativa (17,5% y 14,4% respectivamente) compensando en parte la debilidad en el resto de
componentes.
Tanto las exportaciones como las importaciones decrecieron frente al mismo periodo de 2012. En
el primer caso la variación anual fue de -1,2%. Diversos choques de oferta en la producción minera
afectaron considerablemente las ventas al exterior, en especial las de carbón. En el segundo caso, la
desaceleración del crecimiento anual a -0,2% se dio principalmente en las compras externas de
bienes de capital.
Por el lado de la oferta, la construcción y los servicios sociales, personales y comunales fueron las
ramas que reportaron los mayores crecimientos anuales: 16,9% y 4,5%, respectivamente. La
minería mantuvo un crecimiento bajo, 1,4%, debido a choques de oferta que afectaron la
producción de carbón, que disminuyó anualmente 21% y contrarrestó el dinamismo del petróleo que
creció 7,8%. La única gran rama que registró una contracción anual fue la industria (-4,1%).
Respecto al segundo trimestre de 2013, los indicadores disponibles con información a abril
muestran un repunte generalizado en las tasas de crecimiento. Es así como se espera que para el
segundo trimestre el consumo privado muestre una mejor dinámica que en el primero. Esto se
desprende del comportamiento de las ventas al por menor que según la Muestra Mensual de
Comercio al por Menor (MMCM) publicada por el DANE, registraron una aceleración en abril
frente a los registros de marzo y del promedio para los primeros tres meses: las ventas minoristas
crecieron a una tasa anual de 5,7% (frente al 0,8% y 0,9% de marzo y primer trimestre,
respectivamente). Para el bimestre marzo-abril, el crecimiento fue de 3,1%, mejor que lo observado
en enero y febrero de este año y similar al registrado en el cuarto trimestre del año pasado. En la
misma dirección apuntan los resultados de la Encuesta Mensual de Expectativas Económicas
(EMEE) del Banco de la República que, con datos hasta abril, muestra que las expectativas de
ventas son mayores que las registradas en promedio para el primer trimestre del año. Por su parte,
según Econometría, las ventas de automóviles en abril crecieron 3,3% y en mayo cayeron 10,4%.
Esta última caída es menos pronunciada que la observada en el primer trimestre. Por último, el
índice de confianza del consumidor (ICC) publicado por Fedesarrollo muestra mayores niveles en
abril y mayo que los observados en los primeros tres meses de 2013 y se encuentra por encima del
promedio histórico de la serie (desde 2001).
En cuanto a los indicadores asociados con la oferta, las señales fueron mixtas. En la industria, el
índice de producción industrial creció 8,4% en abril. Sin embargo, el componente tendencial de la
serie siguió cayendo lentamente. Así, para el bimestre marzo-abril continuó observándose una caída
de 1,6% anual y para el año corrido de 2,7%. Por su parte, aunque los indicadores de pedidos y de
existencias de la encuesta de Fedesarrollo para la industria mostraron un leve repunte en abril,
siguieron presentando una tendencia decreciente. Algo similar ocurrió con el balance sobre las
expectativas de producción a tres meses, el cual sugiere que la industria continuaría débil hacia
adelante.
En lo que respecta a la construcción, con información a abril, las licencias crecieron a una tasa de
36,4% (dividido entre 39,1% destinada a vivienda y 27,7% a otros destinos) y la producción y los
despachos de cemento crecieron 4,2% y 16,4%. En el caso de estos dos últimos, no se observaba un
crecimiento positivo desde noviembre del año pasado.
Por su parte, en abril, las exportaciones de carbón se incrementaron 27,9% en volumen y 11,2% en
valor (USD).
La poca información disponible a mayo, muestra un comportamiento menos favorable que el de
abril pero mejor que el de febrero y marzo. La producción de petróleo creció 8,3% anual y se
mantuvo por encima del millón de barriles diarios mientras que la producción de café registró una
expansión de 36% anual, luego del 67% de abril. La demanda de energía aumentó 2,6%
anualmente.
En general se espera que el crecimiento económico colombiano aumente a lo largo del año en la
medida en que el gasto agregado reaccione a las medidas previas de política monetaria y a los
programas que viene ejecutando el gobierno nacional. El equipo técnico del Banco mantiene su
pronóstico de crecimiento del PIB para 2013 entre 3,0% y 5,0%, con 4,3% como cifra más
probable.
c. Variables Financieras
En mayo, el crédito bancario (M/N y M/E) mantuvo el crecimiento anual del mes anterior (14,0%).
La aceleración de la variación anual de la cartera en moneda nacional, que pasó de 12,58% en abril
a 12,68% en mayo, fue compensada por la desaceleración de la cartera en moneda extranjera que
pasó de crecer a una tasa de 36,26% a una de 34,67% en el mismo periodo.
Por destinos, se observó un comportamiento mixto: el crecimiento anual del crédito de consumo
pasó de 15,65% a 14,47% entre abril y mayo mientras que la variación anual de la cartera
hipotecaria aumentó de 13,68% a 13,82% en el mismo periodo. Esto último asociado a la acogida
del subsidio para compra de vivienda decretado por el gobierno a partir de abril. Por su parte, la
cartera comercial, a diferencia de lo observado desde el cuarto trimestre del año anterior,
experimentó un incremento en la tasa de crecimiento anual en su componente en moneda nacional
de 10,97% a 11,16% en este periodo, lo que significó una leve recuperación en el total de 13,46% a
13,51%.
Las tasas de interés nominales aplicadas por los establecimientos de créditos en todas las
modalidades de préstamo continuaron la tendencia decreciente iniciada con los recortes en la tasa de
política iniciados en julio de 2012. Hasta mayo, se destaca la respuesta en las tasas de los créditos
preferencial (-238 pb), hipotecario (-203 pb) (que en parte, se explica por la cobertura del gobierno
para la compra de vivienda), comercial ordinario (-201 pb) y para construcción de vivienda (-190
pb). Seguidas por la reducción en las tasas de consumo (-177 pb), microcrédito (-174 pb) y tarjeta
de crédito (-134 pb).
El descenso de las tasas de interés también se aprecia en términos reales, pero en menor magnitud
por el efecto de la baja en la tasa de inflación. Desde julio de 2012, la disminución ha sido: -185 pb
en créditos preferenciales, -150 en créditos hipotecarios, -148 pb en créditos comerciales ordinario,
-138 pb en créditos para construcción, -122 pb en créditos de consumo, y -112 pb en
microcréditos.
En mayo la tasa de interés real para los créditos de consumo fue de 15,3%, para los hipotecarios de
8,5%, para los preferenciales de 4,5% y para el comercial ordinario de 7,8%. Estos niveles se
encuentran por debajo de sus promedios históricos calculados desde 2000. Por el contrario, para los
créditos otorgados con tarjeta de crédito la tasa real de 26,1% fue mayor a su promedio. Por su
parte, la tasa de tesorería iguala su promedio con 5,0%.
d. Contexto Externo
La economía mundial continúa mostrando señales mixtas. Mientras la contracción europea persiste,
las perspectivas en Estados Unidos y Japón lucen más favorables. El crecimiento de buena parte de
las economías emergentes de Asia y América Latina es robusto pero menor a lo proyectado en
informes anteriores.
En los Estados Unidos el dinamismo del sector privado ha compensado los efectos contractivos del
ajuste fiscal y ha permitido que el crecimiento de la economía esté alrededor de 2%. Con cifras a
mayo, los indicadores de consumo de este país, incluida la confianza de los hogares, continuaron
apoyando una recuperación gradual. Por su parte, la industria mostró algún debilitamiento en ese
mes, aunque las cifras adelantadas a junio sugieren que éste no habría continuado. En contraste con
lo anterior, la recuperación en los mercados de vivienda y de trabajo se mantiene.
En la zona del euro la actividad real ha seguido deteriorándose, aunque a un ritmo menor. En este
sentido, los indicadores de confianza, tanto de los empresarios como de los consumidores, han
mostrado algún repunte en los últimos meses pero todavía en un nivel muy bajo. Por el lado menos
favorable, las ventas al por menor continúan deteriorándose, al igual que los mercados de trabajo,
en especial los de las economías de la periferia. En Alemania la actividad real parece estar ganando
dinamismo: tanto los indicadores de confianza como los de actividad manufacturera llevan varios
meses al alza. Esta situación contribuiría a la recuperación de la región.
Las economías emergentes se expanden a un ritmo menor que en el periodo 2011-2012.
En relación con los precios internacionales, las cotizaciones del petróleo han permanecido
relativamente estables en las últimas semanas. Para el caso de otros bienes exportados por
Colombia, como el carbón, café y ferroníquel, los precios continúan por debajo de los niveles
promedio observados en 2012. Por el lado de los precios de los bienes básicos importados, las
cotizaciones internacionales de los alimentos también se encuentran en niveles inferiores a los del
año anterior. Esto sugiere que en el presente año el nivel de términos de intercambio será favorable
pero inferior al promedio observado en 2012.
En un contexto de pocas presiones sobre la inflación global y un crecimiento débil, la política
monetaria expansiva ha continuado en la mayoría de países desarrollados y emergentes.
Recientemente, el anuncio de la Reserva Federal sobre la posible disminución en los montos de
compras de activos ante el mejor comportamiento de la economía, incrementó la volatilidad en los
mercados financieros internacionales. Las tasas de largo plazo de los bonos de las economías
avanzadas y emergentes han subido, partiendo de un nivel bajo. Los precios de las acciones han
caído y el dólar se ha fortalecido. La reacción de los mercados ha sido más acentuada en los países
emergentes que han visto un aumento de la prima de riesgo.
Si el menor estímulo monetario se da en un contexto de recuperación gradual en los Estados
Unidos, como lo ha anunciado la FED, los efectos sobre las economías emergentes, y en especial
sobre América Latina, podrían ser de bajo impacto. Un mayor dinamismo de la economía
estadounidense implicaría una mayor demanda externa al igual que unos precios internacionales
favorables. De materializarse este escenario, los fundamentales de las economías de la región no
deberían modificarse sustancialmente, los términos de intercambio continuarían en niveles
relativamente altos y los flujos de inversión extranjera directa se mantendrían.
Es probable entonces que se de una reducción de las inversiones de portafolio, debido a unas
expectativas de menor crecimiento de la liquidez global. Esto no necesariamente implica una
reducción sustancial del financiamiento interno y externo de la región.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
La Junta Directiva tomó en consideración los siguientes aspectos relevantes:
(i) La economía mundial continúa mostrando señales mixtas. Mientras la contracción europea
probablemente persista más de lo esperado antes, las perspectivas en Estados Unidos y Japón lucen
más favorables. El crecimiento de buena parte de las economías emergentes de Asia y América
Latina es robusto pero menor a lo proyectado meses atrás.
(ii) El anuncio de la Reserva Federal sobre la posible disminución en los montos de compras de
activos incrementó la volatilidad en los mercados financieros internacionales. Las tasas de largo
plazo de los bonos de las economías avanzadas y emergentes han subido, partiendo de un bajo nivel
anterior. Los precios de las acciones han caído y el dólar se ha fortalecido. La reacción de los
mercados ha sido más acentuada en los países emergentes.
(iii) El comportamiento de los precios de los principales productos básicos que exporta Colombia
sugiere que en el presente año el nivel de términos de intercambio será favorable pero inferior al
promedio observado en 2012.
(iv) En el contexto interno, el crecimiento del PIB del primer trimestre de 2013 (2,8%) resultó igual
al estimado por el equipo técnico. La demanda interna se desaceleró, hecho explicado por un menor
crecimiento del consumo que fue parcialmente compensado por un mayor dinamismo de la
inversión en construcción de edificaciones y obras civiles. Para el segundo trimestre, las cifras de
industria y comercio, de confianza del consumidor, así como las de producción de petróleo y café
sugieren un crecimiento superior al observado en los tres primeros meses del año.
(v) En materia de crédito y costos de financiamiento, la volatilidad de los mercados internacionales
se ha reflejado en un incremento en las tasas de interés de los títulos de deuda pública y de los
bonos privados. El crecimiento del crédito bancario, en moneda nacional y extranjera, da señales de
estabilizarse a una tasa mayor que el crecimiento del PIB nominal. Las tasas de interés del crédito
siguen descendiendo y en términos reales se encuentran por debajo de sus promedios históricos
(exceptuando tarjetas de crédito).
(vi) En general es de esperar que el crecimiento económico colombiano aumente a lo largo del año
en la medida en que el gasto agregado reaccione a las medidas previas de política monetaria y a los
programas que viene ejecutando el gobierno nacional. El equipo técnico del Banco mantiene su
pronóstico de crecimiento del PIB para 2013 entre 3,0% y 5,0%, con 4,3% como cifra más
probable.
(vii) En mayo la inflación anual (2%) fue similar a la de abril. El promedio de inflaciones básicas
descendió y se situó en 2,4%. El promedio de las expectativas de inflación de los analistas y de las
que resultan de los títulos de deuda pública es similar a la meta de inflación de 3%.
En resumen, el crecimiento de la economía colombiana en el primer trimestre fue bajo e igual a lo
proyectado. Es de esperar que las acciones de política monetaria y fiscal realizadas hasta el
momento contribuyan a que en el transcurso del año el producto se sitúe cerca de su nivel potencial.
De igual manera, la probabilidad de que la inflación culmine en el rango meta es elevada.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
De acuerdo con la evaluación del balance de riesgos la Junta Directiva acordó por unanimidad
mantener inalterada la tasa de interés de intervención en 3,25%.
La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo del comportamiento y proyecciones de la
actividad económica e inflación en el país, de los mercados de activos y la situación internacional.
Finalmente, reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible.
Bogotá, D. C.
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2013-07-01 |
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Minutas de la reunión de la JDBR del 26 de julio de 2013
El 26 de Julio de 2013 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta
Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público,
Mauricio Cárdenas Santamaria, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores
doctores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Enrique Meisel
Roca, César Vallejo Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo. En las minutas se presenta un resumen de
la situación inflacionaria y del crecimiento económico, y sus perspectivas, elaborada por el equipo
técnico (sección 1) y se reseñan las principales discusiones y opciones de política consideradas por
la Junta Directiva (sección 2).
1. SITUACION INFLACIONARIA Y DE CRECIMIENTO ECONÓMICO
a. Desarrollos recientes de la inflación
En junio, la inflación anual al consumidor se situó en 2,16%, 16 puntos base (pb) por encima del
registro de mayo. El aumento de la inflación total en junio se concentró en el IPC de regulados,
pues los aumentos en los precios de las otras subcanastas fueron moderados.
La variación anual del IPC de regulados en junio fue 1,98% lo que representa un aumento de 73 pb
frente al registro del mes anterior. El mayor incremento se originó en las tarifas de energía eléctrica,
principalmente en Bogotá. Hay que anotar que en los últimos tres meses los precios de esta
subcanasta han aumentado de manera importante. Sin embargo, los niveles continúan siendo bajos
comparados con los otros componentes del IPC y con el registro histórico de la serie.
Los otros dos componentes del IPC sin alimentos – transables y no transables – variaron poco en el
último mes. En transables (sin alimentos ni regulados), la variación anual aumentó a 1,1%, 4 pb más
que el registro de mayo, como viene sucediendo desde abril. Esto podría estar relacionado con la
depreciación del peso en los últimos meses. Por otra parte, la variación anual del IPC de no
transables (sin alimentos ni regulados) aumentó a 3,78%, 4 pb más que el registro de mayo,
reflejando escasas presiones de demanda. Arriendos, su principal componente, se situó cerca de
3,7%, levemente por debajo del registro de mayo. Este ítem ha mostrado un descenso lento desde el
cuarto trimestre del año pasado.
Respecto al IPC de alimentos, en junio se mantuvo un bajo registro en la variación anual (1,34%),
tal como se ha observado en lo transcurrido del año. Se observó una ligera disminución de la
variación anual del IPC de alimentos perecederos (2,4% en junio frente a 2,6% en mayo) mientras
que la del IPC de procesados (-0,11% en junio) se mantuvo estable frente al mes anterior. Por su
parte, la variación anual del IPC de comidas fuera del hogar (3,5%) aumentó en junio 20 pb
respecto al mes anterior.
En junio el promedio de los cuatro indicadores de inflación básica monitoreados por el Banco
aumentó levemente situándose en 2,52%, 8 pb más que el registro de abril. Los cuatro indicadores
se mantienen entre 2% y 3% desde enero de este año.
El IPP mantuvo una variación anual negativa en junio (-0,2%) aunque aumentó frente al mes pasado
(-2,1%). Esta tendencia obedece en parte a la trasmisión de la depreciación nominal al cambio anual
del IPP de importados que está en terreno positivo (0,6%) por primera vez en varios meses. El
componente local también aumentó.
En junio las expectativas de inflación aumentaron levemente, pero siguieron en niveles compatibles
con el cumplimiento de la meta. Las medidas obtenidas a partir de la encuesta mensual del Banco
de la República realizada a analistas del mercado financiero están cerca de 2,6% para diciembre de
este año (7 pb más que hace un mes) y en 3,1% para junio de 2014 (8 pb más que hace un mes). Por
su parte, las expectativas de inflación derivadas de la curva de rendimientos de los TES variaron
menos y se mantuvieron en un rango entre 2,3% y 3,1% para varios horizontes.
b. Crecimiento
Los indicadores de actividad económica del segundo trimestre sugieren que el PIB crecería a una
mayor tasa que la registrada en los primeros tres meses del año. Una parte importante de esta
aceleración se debe al mayor número de días hábiles en abril y a la superación de algunos choques
de oferta que se presentaron entre febrero y marzo de este año.
Por componentes del gasto se espera que el consumo y las exportaciones sean más dinámicas,
mientras que la inversión podría desacelerarse.
El consumo de los hogares tendría un mejor desempeño que el observado en el primer trimestre.
Esto se desprende de lo observado en materia de confianza del consumidor y en las ventas
minoristas. En el primer caso, en junio el índice de confianza de los consumidores (ICC) publicado
por Fedesarrollo repuntó de manera importante, ubicándose en niveles similares a los registrados a
finales de 2011 y por encima del nivel promedio para 2012 e histórico desde 2001. Por otro lado,
según los últimos resultados de la Muestra Mensual de Comercio al por Menor (MMCM) publicada
por el DANE, en mayo las ventas minoristas crecieron 6,5% en términos anuales frente al mismo
periodo de 2012. Al descontar el segmento de ventas de vehículos automotores y motocicletas (que
crecieron 5,3%) el agregado resultante se expandió 6,8%, dato mayor que el 3,4% registrado para el
mes de abril.
En la formación bruta de capital se espera un menor dinamismo durante el segundo trimestre. En lo
que respecta a la inversión, distinta de construcción de edificaciones y de obras civiles, se prevé un
débil desempeño. Lo anterior se desprende de las cifras de importaciones de bienes de capital (en
especial las de equipo de transporte) que registraron caídas. Adicionalmente, la Encuesta Mensual
de Expectativas Económicas (EMEE) del Banco de la República no registra alguna recuperación en
la intención de los empresarios de invertir en capital fijo. Para la inversión en construcción de
edificaciones y obras civiles se esperan unas tasas de crecimiento menores que las observadas
durante el primer trimestre.
El nivel de las exportaciones totales en dólares en abril y mayo se recuperó aunque continúa
presentando crecimientos anuales negativos (-2,5% en mayo). Esto se explicó por mayores
cantidades exportables de algunos bienes básicos (principalmente petróleo y derivados, ferroníquel
y café). Se destaca el caso de las exportaciones de bienes industriales y otros, que registró un
crecimiento en términos anuales de 6,7%, principalmente por las mayores ventas externas de
vehículos (256%), carne (202%) y productos químicos (5,4%). Para lo que resta del año se prevé
que las exportaciones crezcan a mayores tasas luego de la superación de los distintos choques de
oferta que ocurrieron entre enero y marzo de este año.
En mayo, las importaciones CIF en dólares disminuyeron 6,6% respecto al mismo mes de 2012.
Este comportamiento se explica por las caídas de 12,8% en las importaciones de bienes de capital y
de 5,7% en las de bienes intermedios. Por su parte, las compras externas de bienes de consumo
aumentaron 2,7%. El componente tendencial de la serie de importaciones totales muestra aumentos
graduales desde hace varios meses aunque con tasas de crecimiento anuales muy bajas.
En lo que respecta a las distintas ramas de actividad económica, se espera que la industria continúe
contrayéndose aunque de forma menos acentuada, mientras que la minería, la construcción, la
agricultura y el comercio presentarían un buen comportamiento.
Los indicadores disponibles sugieren que el PIB de la industria retrocedería en términos anuales en
el segundo trimestre. En mayo, el índice de producción industrial sin trilla de café se contrajo 3,1%;
en niveles se aprecia un estancamiento y el componente tendencial dejó de caer. Otros indicadores
del sector como el indicador de pedidos y el de expectativas a tres meses de empresarios de la
encuesta de Fedesarrollo, así como la demanda de energía eléctrica industrial, señalan un
comportamiento débil en el sector. No obstante, el índice de confianza de los industriales se
recuperó levemente y su componente tendencial muestra un aumento por primera vez desde hace un
año.
En lo que respecta a la minería, se espera un crecimiento mayor para el segundo trimestre gracias al
aumento que se ha observado en la producción de carbón y petróleo, pese a que en este último caso
hubo una caída en el mes de junio debido a choques de oferta. La producción de petróleo en lo
corrido del año a junio está por encima del millón de barriles y las exportaciones de carbón han
mostrado un notable desempeño en el bimestre abril-mayo, luego de los problemas que enfrentaron
Cerrejón y Drummond en los meses de febrero y marzo.
En el sector de la construcción, los indicadores disponibles sugieren que el buen desempeño
observado en el primer trimestre continuaría en los siguientes tres meses. En particular, la
producción de cemento creció anualmente 1,0% en mayo y 2,6% en promedio entre abril y mayo,
luego de haber registrado una caída anual entre enero y marzo de 6,4% en promedio. Las licencias
de construcción crecieron 28,9% en el bimestre abril-mayo, manteniendo la fuerte recuperación que
se apreció en los primeros tres meses del año (31,9%).
Por su parte en el sector agropecuario, la recuperación de la producción de café, que creció
alrededor de 40% anual en el segundo trimestre de acuerdo a la Federación de cafeteros, así como el
aumento en el sacrificio de ganado en los meses de abril y mayo (alrededor de 5%), permiten
esperar que el sector revierta los bajos registros de crecimientos de la segunda mitad de 2012.
Todo lo anterior permite prever que el crecimiento de la economía colombiana en el segundo
trimestre de 2013 se ubicaría alrededor de 3,4% como cifra más probable dentro de un intervalo
entre 2,5% y 4,0%, cuya amplitud está determinada por la incertidumbre del comportamiento de la
inversión en obras civiles y el consumo público.
Para todo 2013 se revisó levemente a la baja el pronóstico de crecimiento frente a lo reportado en el
pasado Informe sobre inflación. El nuevo rango de pronóstico se ubica entre 3,0% y 4,5%, con
4,0% como cifra más probable. Esta revisión se explica en parte por el comportamiento observado
de la economía mundial y el gasto privado, el cual ha sido más débil de lo previsto.
c. Variables Financieras
El crédito bancario (M/N y M/E) en junio registró una tasa anual de crecimiento de 14,06%, similar
a lo observado en los últimos meses. Entre mayo y junio, el crecimiento anual de la cartera en
moneda nacional pasó de 12,67% a 12,86%, mientras que el de moneda extranjera lo hizo de
34,53% a 33,23%.
Por destinos, la variación anual del crédito de consumo en junio fue 13,66% frente a 14,40% en
mayo. EL crecimiento anual de la cartera hipotecaria, por el contrario, se incrementó de 13,73% en
mayo a 13,95% en junio. Por otra parte, la cartera comercial, continúa consolidando la recuperación
iniciada en marzo, con un incremento mensual de 46 pb en la tasa anual de crecimiento en junio
(13,96%).
En junio, las tasas de interés de los préstamos desembolsados por los establecimientos de crédito
continuaron descendiendo para todas las modalidades, con excepción de las aplicadas para tarjeta de
crédito y microcrédito. Así, desde que se iniciaron los recortes en la tasa de política en julio de
2012, se han acumulado hasta junio de 2013, reducciones en las tasas de interés de: -251 pb para
los créditos preferenciales, -228 pb para los hipotecarios y -203 pb para los comerciales ordinarios.
Variaciones a las que en menor cuantía siguieron: -187 pb para los créditos de construcción de
vivienda, -179 pb para los de consumo, -156 pb para los de microcrédito, -144 pb para los de
tesorería y -101 pb para las tarjetas de crédito.
La magnitud del descenso de las tasas de interés reales ha sido inferior por el efecto de la menor
tasa de inflación. En términos reales la reducción desde julio de 2012 ha sido de: -219 pb para los
créditos preferenciales, -195 pb para los créditos hipotecarios, -183 pb para los créditos comerciales
ordinarios, -155 pb para los créditos para construcción, -146 pb para créditos de consumo, y -119 pb
para microcréditos.
Los niveles de las tasas de interés reales a junio de los créditos de consumo (15,0%), hipotecarios
(8,1%), preferenciales (4,2%), comercial ordinario (7,5%) y comercial de tesorería (4,5%), se
situaron por debajo de sus promedios históricos calculados desde 2000. Por el contrario, para los
créditos otorgados con tarjeta de crédito la tasa real de 26,1% fue mayor a su promedio.
d. Contexto Externo
Durante el primer semestre de 2013 la economía mundial continuó expandiéndose a un ritmo lento.
La debilidad de la demanda mundial continuó afectando el comportamiento de la industria y del
comercio global.
Aunque en la zona del euro los indicadores de actividad, permanecieron en terreno contractivo,
evidenciaron un menor deterioro que en los trimestres anteriores. Estos resultados estarían
explicados en parte por un mayor dinamismo de la economía alemana.
En Estados Unidos, las ventas al por menor, la industria y los servicios mostraron señales de
crecimiento moderado. La desaceleración de algunos indicadores responde al mayor impacto del
ajuste fiscal.
En Japón se observa una recuperación de las exportaciones, ayudadas por un yen más débil, y una
amplia recuperación del gasto de los consumidores, de la inversión de las grandes corporaciones y
de las expectativas de los hogares y firmas.
Los países emergentes fueron nuevamente el motor de la economía mundial. No obstante su
crecimiento sería inferior al esperado en el Informe sobre Inflación de marzo. El menor impulso del
sector externo junto con una moderación en la demanda interna parecen explicar la desaceleración
en sus tasas de expansión.
En China se ha observado una desaceleración de la producción mayor que la esperada que se puede
explicar por un menor crecimiento del sector externo y algunos componentes de la demanda interna.
El crecimiento anual durante el segundo trimestre (7,5%), fue menor al observado en los primeros
tres meses del año (7,7%). En América Latina los indicadores de actividad real evidencian que en el
segundo trimestre el crecimiento ha seguido moderándose frente a lo observado en 2011-2012. Las
exportaciones y la actividad industrial de la región no muestran un comportamiento favorable.
La debilidad de la demanda global junto con algunas condiciones de oferta favorables mantuvieron
los precios internacionales de los principales bienes básicos en niveles inferiores a los observados
en 2012. En este contexto, y a pesar del incremento en las tensiones geopolíticas que han llevado a
un aumento reciente en el precio del petróleo, la cotización para la referencia Brent aún permanece
por debajo del promedio de 2012 y ligeramente por encima de lo estimado en el escenario central
del Informe sobre Inflación de marzo.
Los precios de otros bienes básicos exportados por Colombia siguieron reduciéndose en los últimos
meses y se ubican por debajo de lo estimado en el Informe sobre Inflación anterior. Esta situación
estaría explicando el comportamiento reciente de los términos de intercambio del país, cuya caída
ha sido compensada de manera parcial por las menores cotizaciones internacionales de algunos
bienes importados, como los alimentos. Los niveles actuales de los precios de estos últimos bienes
son inferiores a los de 2012 pese a que en las últimas semanas han registrado un ligero aumento.
La inflación en las principales economías desarrolladas continúa siendo baja, lo que facilita las
posturas monetarias expansivas. Para el caso de los países emergentes la situación es similar, con
algunas excepciones como Brasil, India e Indonesia países en los que los bancos centrales se han
visto en la necesidad de incrementar sus tasas de intervención ante la rápida subida de sus niveles
de precios.
En los mercados financieros internacionales, las tasas de interés que habían subido en meses
anteriores como consecuencia del anuncio del posible retiro del programa de estímulo de la FED,
han presentado descensos parciales en las últimas semanas. Algo similar ha sucedido con los
indicadores de volatilidad, los indicadores de riesgo y los tipos de cambio.
En resumen, se anticipa para este año un crecimiento de los socios comerciales del país y un nivel
de términos de intercambio menores a los de 2012. Se espera que la demanda mundial tenga una
mejoría a partir de la segunda mitad de este año y durante 2014 aunque a un menor ritmo que el
estimado en el último informe. Los costos de financiamiento externo se mantendrían en niveles
bajos pero podrían aumentar gradualmente si se concreta el inicio del retiro gradual de las compras
de activos por parte de la FED.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
La Junta Directiva tomó en consideración los siguientes aspectos relevantes:
(i) El crecimiento económico mundial continúa siendo modesto y con diferencias importantes entre
países. Mientras que la contracción europea persiste, en Japón se observa una rápida recuperación
de la actividad productiva. En los Estados Unidos, el fortalecimiento de la demanda privada está
siendo parcialmente compensado por la consolidación fiscal y ha llevado a una leve disminución en
la proyección de crecimiento. La expansión de buena parte de las economías emergentes de Asia y
América Latina continúa siendo robusta aunque menor a la prevista. En consecuencia, se espera
para este año un crecimiento de nuestros socios comerciales y un nivel de términos de intercambio
menores a los de 2012.
(ii) El fortalecimiento del dólar y el incremento en las tasas de interés externas de largo plazo
observadas en mayo y junio, se revirtieron parcialmente en julio. Lo mismo se observó en las
primas de riesgo y en las tasas de interés de los papeles de deuda pública de la región.
(iii) En el segundo trimestre de 2013, la mayor producción de petróleo, ferroníquel y café y el
aumento en la tasa de crecimiento de las ventas externas industriales en dólares sugieren un mejor
desempeño de las exportaciones. El incremento en la confianza del consumidor y el mayor ritmo de
aumento del comercio al por menor también indican alguna aceleración del consumo privado. Por el
lado de la oferta, la aceleración de la economía se origina principalmente en minería, agricultura y
comercio. La industria se contraería nuevamente, aunque de forma menos acentuada. Con lo
anterior, el equipo técnico estima que el crecimiento del segundo trimestre se situará entre 2,5% y
4,0%, con 3,4% como cifra más probable.
(iv) El equipo técnico del Banco redujo su pronóstico de crecimiento más probable para 2013 desde
4,3% a 4%, con un rango entre 3,0% y 4,5%. Dicha revisión se explica en parte por el
comportamiento observado de la economía mundial y el gasto privado, el cual ha sido más débil de
lo previsto. Es de esperar que el crecimiento económico colombiano aumente a lo largo del año en
la medida en que el gasto agregado reaccione a las medidas previas de política monetaria y a los
programas que viene ejecutando el gobierno nacional.
(v) El crecimiento del crédito bancario, en moneda nacional y extranjera, da señales de estabilizarse
a una tasa mayor que el crecimiento del PIB nominal. Las tasas de interés del crédito siguen
descendiendo y en términos reales se encuentran por debajo de sus promedios históricos
(exceptuando tarjetas de crédito).
(vi) En junio la inflación anual (2,16%) y el promedio de las inflaciones básicas (2.5%) fueron
levemente superiores a las del mes anterior. El promedio de las expectativas de inflación de los
analistas y las calculadas a partir de las tasas de los títulos de deuda pública es similar a la meta de
inflación de 3%.
En resumen, los indicadores de actividad económica y sus proyecciones muestran un nivel de
producto inferior al que se puede generar con la capacidad instalada. Es de esperar que las acciones
de política monetaria y fiscal realizadas hasta el momento contribuyan a que en el transcurso del
año el producto crezca a un ritmo mayor. La inflación es baja y sus expectativas se encuentran
ancladas en la meta de largo plazo (3%).
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
De acuerdo con la evaluación del balance de riesgos la Junta Directiva acordó por unanimidad
mantener inalterada la tasa de interés de intervención en 3,25%.
La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo del comportamiento y proyecciones de la
actividad económica e inflación en el país, de los mercados de activos y la situación internacional.
Finalmente, reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible.
Bogotá, D. C.
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2013-08-01 |
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Minutas de la reunión de la JDBR del 30 de agosto de 2013
El 30 de Agosto de 2013 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la
Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito
Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los
Directores doctores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Enrique
Meisel Roca, César Vallejo Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo. En las minutas se presenta un
resumen de la situación inflacionaria y del crecimiento económico, y sus perspectivas, elaborada
por el equipo técnico (sección 1) y se reseñan las principales discusiones y opciones de política
consideradas por la Junta Directiva (sección 2).
1. SITUACION INFLACIONARIA Y DE CRECIMIENTO ECONÓMICO
a. Desarrollos recientes de la inflación
En julio la inflación anual al consumidor fue 2,22%, 6 pb más que el registro del mes anterior. En
los primeros siete meses, el cambio acumulado en el IPC ascendió a 1,77%, inferior a la variación
acumulada en igual lapso de 2012 (1,98%).
La variación anual del IPC de alimentos en julio fue de 1,6%, 30 pb más respecto a junio. El
aumento se concentró en la canasta de alimentos perecederos (4,0% frente a 2,4% en junio), cuya
variación anual ha venido acelerándose desde una tasa negativa en febrero. Para los alimentos
procesados, el cambio anual en los precios (0,06%) se mantuvo cercano a cero por tercer mes
consecutivo después de haber descendido entre mediados del año pasado y comienzos del actual. En
este caso, los descensos en los precios internacionales de productos como el trigo, el maíz y la soya
habrían contrarrestado el efecto de la depreciación nominal reciente del peso. Por otra parte, en las
comidas fuera del hogar la variación anual se mantuvo estable en 3,5%.
Dentro del IPC sin alimentos ni regulados, en julio se registraron aumentos en las variaciones
anuales de transables y no transables. En el caso del primero, el aumento (a 1,3% desde 1,1% en
junio) se suma a los observados en meses anteriores y estaría en parte relacionado con la
depreciación del peso registrada en lo corrido del año. Respecto a los no transables, la variación
anual (3,9%) significó un aumento de 12 pb frente al mes anterior. En el caso de arriendos, el ajuste
anual aumentó 7 pb respecto a junio, situándose en 3,8%.
En julio se presentó un descenso significativo (de 61 pb) en la variación anual de la canasta de
regulados (a 1,4%) después de tres meses consecutivos de crecimiento. Esta caída se concentró en
las tarifas de energía principalmente y en menor medida en el transporte público. Según el DANE la
energía eléctrica tuvo un descenso mensual de 5,5%.
El promedio de los cuatro indicadores de inflación básica monitoreados por el Banco de la
República, se situó en 2,54% en julio, valor similar al del mes anterior (2,52%). Este indicador ha
mostrado una gran estabilidad en torno a 2,5% desde febrero de este año.
La variación anual del IPP se mantuvo en terreno negativo en julio (-0,03%), aunque con una
tendencia ascendente que inició en abril. Tanto el componente local como el importado aumentaron
frente al mes pasado (19 pb en ambos casos).
Las expectativas de inflación no registraron cambios importantes en el último mes. Según la
encuesta mensual del Banco a los analistas del mercado financiero, la inflación esperada a
diciembre de este año se mantuvo en 2,6% mientras que la de 12 meses se volvió a situar en 3,1%.
Por su parte, las expectativas de inflación derivadas de la curva de rendimiento de los TES a
horizontes de 2, 3 y 5 años, se mantienen entre 2,4% y 3,0%, niveles similares a los observados en
junio.
b. Crecimiento
La última información sugiere que el consumo de los hogares se habría expandido a una mayor tasa
durante el segundo trimestre que en el primero. Tanto los buenos niveles en el indicador de
confianza de los consumidores, que entre abril y junio se situó en niveles similares a los registrados
a finales de 2011 y por encima del nivel promedio para 2012, como la mejor dinámica del comercio
justifican este pronóstico. En referencia a este último, según la información más reciente reportada
por el DANE, en junio las ventas del comercio minorista aumentaron 4,1% anual frente al mismo
mes de 2012. Para el total del segundo trimestre el índice de ventas del comercio creció anualmente
4,9%, cifra mayor que la registrada para el agregado de los primeros tres meses de 2013 (0,8%).
Otro indicador que sugiere la aceleración del consumo es el balance de ventas totales de la Encuesta
Mensual de Expectativas Económicas (EMEE) del Banco de la República que se ubicó en niveles
superiores al promedio del primer trimestre.
Para la inversión, las caídas en las importaciones de bienes de capital y en el balance de las
expectativas de inversión de corto y mediano plazos de la EMEE siguen indicando que aquella
distinta a la destinada a construcción de edificaciones y de obras civiles continuaría con un
desempeño mediocre.
En lo referente a las exportaciones, durante el primer semestre del año las totales en dólares cayeron
4% respecto al mismo período del año anterior. Dicho comportamiento se explica, principalmente,
por la disminución de 8% en las exportaciones de productos de origen minero, dada la caída de 29%
en las de carbón y de 12,6% en las de oro. Las exportaciones de bienes agrícolas también cayeron,
aunque en menor magnitud (-2%). Por su parte, las exportaciones de bienes industriales y otros
registraron un crecimiento anual de 9%.
Durante el primer semestre de 2013, el valor total en dólares de las importaciones CIF cayó 1%
anual, dadas las menores compras de materias primas (-2,7%) y de bienes de capital (-1,7%). Por su
parte, las importaciones de bienes de consumo crecieron en el período 4,2%.
En lo que respecta a las distintas ramas de actividad económica, se sigue esperando que la industria
continúe contrayéndose aunque de forma menos acentuada, mientras que la minería, la
construcción, la agricultura y el comercio presentarían un buen comportamiento.
El índice de producción industrial sin trilla de café cayó en términos anuales 5,5% en junio. Con
este dato, el segundo trimestre se contrajo 0,3% (luego de -6,6% en los tres primeros meses del
año), mientras que el año corrido se ubicó en -3,4%.
En el sector de la construcción la información para el segundo trimestre sugiere que la expansión se
mantendría. La producción de cemento mostró un crecimiento anual de 0,71% mientras que los
despachos lo hicieron en 4,3%. Por su parte, aunque las licencias de construcción registraron una
contracción en junio, el acumulado de doce meses continúa creciendo alrededor de 7,6%.
Por último, en el sector agropecuario, la recuperación de la producción de café, que creció alrededor
de 40% anual en el segundo trimestre, así como la expansión registrada en el sacrificio de ganado
(3,3%), permiten esperar que el sector registre una aceleración frente al primer trimestre.
Dado todo lo anterior, no se realizaron revisiones al rango de pronóstico de crecimiento del PIB
para el segundo trimestre del equipo técnico expuesto en el anterior Informe sobre Inflación (entre
2,5% y 4,0%, con cifra más probable en 3,4%). Es importante resaltar nuevamente que los datos
aún no publicados de obras civiles y de consumo público presentan una alta volatilidad por lo que
se justifica un rango de pronóstico amplio.
Para el tercer trimestre de 2013 la información disponible es escasa pero podría sugerir que el
consumo privado mantendría o incluso mejoraría el dinamismo alcanzado durante el segundo
trimestre. Por un lado, en julio la confianza de los consumidores fue menor que la reportada para el
mes de junio, aunque se ubicó por encima de los demás registros de lo corrido de 2013 y del
promedio desde 2001. Al desagregar por componentes, se observó que la percepción sobre las
condiciones económicas actuales de los hogares sigue en un nivel relativamente alto y que las
expectativas de mediano y largo plazos de los consumidores siguen estables.
Por el lado de la oferta, los indicadores líderes, como los de pedidos y los de existencias de la
encuesta de Fedesarrollo señalan alguna mejoría, mientras que las expectativas de producción de los
industriales para los próximos tres meses (EOE) se mantuvieron en niveles similares a los de meses
anteriores. La confianza de los empresarios de la manufactura también mostró una mejoría.
La demanda de energía total en julio aumentó 3,4% anualmente. La demanda de energía no
regulada industrial, que está altamente correlacionada con la industria, creció 1,1% anualmente
(frente -1,2% de junio), lo que podría sugerir que el crecimiento del sector se contraería en julio
menos que en meses anteriores.
La producción de petróleo superó el millón de barriles diarios (1.002 Mbd) en julio, frente a los
974.000 del mes de junio. En lo corrido del año, la producción ha crecido 7,2%. De mantenerse este
comportamiento favorable, esta sub-rama reportaría una aceleración frente a 2012.
Dado todo lo anterior, el equipo técnico mantiene el pronóstico de crecimiento para todo 2013 entre
3,0% y 4,5% con 4% como cifra más probable. Se espera que el crecimiento económico del país
aumente a lo largo del año en la medida en que el gasto agregado reaccione a las medidas previas de
política monetaria y a los programas que viene ejecutando el gobierno nacional.
c. Variables Financieras
El crédito bancario (M/N y M/E) en julio registró una tasa anual de crecimiento de 13,71%,
ligeramente inferior al observado el mes pasado (14,05%). El crecimiento anual de la cartera en
moneda nacional se desaceleró de 12,85% a 12,45% entre junio y julio mientras que la de moneda
extranjera se aceleró pasando de 35,56% a 37,07% en el mismo periodo.
Por destinos, la cartera a los hogares se desaceleró, con una tasa anual a julio de 13,27%, inferior 44
pb al mes anterior. Esto se explicó principalmente por la moderación de la variación del crédito de
consumo (de 13,66% en junio a 12,90% en julio) pues la cartera para compra de vivienda se aceleró
con una tasa de crecimiento anual de 14,28% frente a 13,86% el mes pasado. En cuanto a la cartera
hacia las empresas, la tasa de crecimiento anual disminuyó 27 pb entre junio (13,95%) y julio
(13,70%).
En lo referente a las tasas de interés de los préstamos desembolsados por los establecimientos de
crédito, desde el inicio los recortes en la tasa de política en julio de 2012, se han acumulado
reducciones en las tasas de interés de 230 pb para los créditos hipotecarios; 209 pb para los de
construcción y; 200 pb para los de consumo.
Los niveles de las tasas de interés reales a julio de los créditos de consumo, hipotecarios,
preferenciales, comercial ordinario y comercial de tesorería se situaron por debajo de sus promedios
históricos calculados desde 2000. Por el contrario, para los créditos otorgados con tarjeta de crédito
la tasa real fue mayor a su promedio.
La magnitud del descenso de las tasas de interés reales ha sido inferior por efecto de la menor tasa
de inflación, con rebajas durante el período de estímulo monetario de: 194 pb en créditos
hipotecarios, 174 pb en créditos para construcción y 163 pb en créditos de consumo.
d. Contexto Externo
En el segundo trimestre del año, el crecimiento del PIB de la zona del euro estuvo por encima de lo
esperado por el equipo técnico. El mayor dinamismo de Alemania y Francia, junto con un menor
deterioro de la actividad real en las economías de la periferia, explican este resultado. Los
indicadores de confianza de empresarios y consumidores, al igual que los índices de opinión en los
sectores de manufacturas y servicios mantienen una tendencia favorable en lo corrido del tercer
trimestre. De continuar este comportamiento, la recuperación de la actividad real debería proseguir
en el segundo semestre del año. No obstante, el mercado laboral continúa débil y el crédito al sector
privado se mantiene deprimido.
En los Estados Unidos, de acuerdo con la más reciente revisión metodológica de las cuentas
nacionales, el crecimiento del PIB para 2011 y 2012 fue superior al previamente estimado. En
contraste, las cifras para el primer trimestre de 2013 evidenciaron una expansión de la actividad
real menor que la inicialmente estimada. Para el segundo trimestre se presentó un mejor crecimiento
que debería mantenerse en la segunda mitad del año si los efectos del ajuste fiscal no lo impiden. La
información parcial para el tercer trimestre muestra que la economía ha seguido expandiéndose a un
ritmo modesto. Las ventas al por menor y la confianza de los consumidores mantienen una
tendencia favorable. Aunque la producción industrial se encuentra prácticamente estancada, los
indicadores de opinión del sector apuntan a una recuperación en los próximos meses.
Para el caso de las economías emergentes, con información al segundo trimestre, el crecimiento de
los países de Asia fue modesto, con alguna desaceleración en Tailandia e Indonesia. Los datos de
actividad económica para el tercer trimestre no muestran que el deterioro de la actividad económica
en China haya continuado.
Por su parte, en América Latina el crecimiento estaría siendo un poco inferior al esperado. Las
cifras del PIB para el segundo trimestre muestran una fuerte desaceleración en México y alguna
moderación en Chile. Para el caso de Perú y Venezuela el crecimiento se aceleró, aunque en este
último país continúa en un nivel muy bajo. Por último, en Brasil, la economía ha seguido
expandiéndose, aunque a un ritmo moderado.
En relación con los precios internacionales de los bienes básicos, las tensiones geopolíticas de
Medio Oriente y del Norte de África incrementaron las cotizaciones del petróleo, que se ubican en
niveles superiores a los previstos por el equipo técnico. Para el caso de otros bienes exportados por
Colombia, como el carbón y el café, se ha evidenciado una relativa estabilidad en las últimas
semanas. El panorama es menos favorable para otros bienes básicos y minerales como el cobre, la
plata y el oro, al igual que para algunos alimentos, en donde recientemente se han observado caídas.
Es así como, gracias al comportamiento del precio del petróleo y el menor precio de los alimentos
que el país importa, no se esperan reducciones adicionales en los términos de intercambio de
Colombia a diferencia de lo que podría estar sucediendo en otros países de la región.
En cuanto a los mercados financieros, las expectativas sobre el desmonte gradual del programa de
estímulo de la FED continúan afectando las economías emergentes. En las últimas semanas los
precios de los activos financieros de este grupo de países mantuvieron una tendencia a la baja, en un
entorno de salidas de capital y de depreciaciones en sus tasas de cambio. La depreciación de la tasa
de cambio ha sido mayor en aquellas economías emergentes con amplios déficits en la cuenta
corriente financiados con deuda externa de corto plazo y con tasas de inflación elevadas. Por lo
anterior, varios países emergentes han vendido reservas internacionales en cuantías importantes.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
La Junta Directiva tomó en consideración los siguientes aspectos relevantes:
(i) El crecimiento económico de las economías avanzadas en el segundo trimestre del año fue un
poco mejor que el esperado. En contraste, la expansión de buena parte de las economías emergentes
de Asia y América Latina ha sido menor a la prevista. El crecimiento agregado de los socios
comerciales de Colombia probablemente será menor que el valor observado en 2012. Algo similar
se espera para los términos de intercambio, salvo si la tendencia alcista reciente de los precios del
petróleo se mantuviera por un período prolongado.
(ii) La volatilidad en los mercados financieros mundiales ha aumentado y ha afectado a algunas
economías emergentes en particular. Las expectativas de una expansión monetaria menos amplia en
los Estados Unidos incrementaron considerablemente las tasas de interés de los bonos soberanos,
partiendo de niveles muy bajos. Las monedas de las economías emergentes se han devaluado frente
al dólar, incluyendo el peso colombiano. Es posible que esta tendencia continúe y contribuya a un
mejor desempeño de los sectores transables de la economía y, por ende, a un crecimiento más
balanceado de la misma.
(iii) En el país, la nueva información de comercio exterior y de demanda interna sugieren un
crecimiento del PIB en el segundo trimestre de 2013 mayor que en el primero. El consumo de los
hogares y la inversión en obras civiles y edificaciones probablemente crecieron a una tasa algo
mayor. Por el lado de la oferta, la aceleración del crecimiento se daría en la minería, la agricultura y
el comercio, mientras que la industria se contraería nuevamente aunque de forma menos acentuada.
(iv) Con lo anterior, el equipo técnico mantuvo su pronóstico de crecimiento en el segundo
trimestre en un rango de 2,5% a 4,0%, con 3,4% como cifra más probable. Para todo 2013 el
intervalo se mantiene entre 3,0% y 4,5%, con 4,0% como dato más factible. Es de esperar que el
crecimiento económico colombiano aumente a lo largo del año en la medida en que el gasto
agregado reaccione a las medidas previas de política monetaria y a los programas que viene
ejecutando el gobierno nacional. No obstante, los riesgos a la baja de estas proyecciones se han
incrementado recientemente.
(v) Las tasas de crecimiento del crédito bancario se han estabilizado en niveles superiores al
crecimiento del PIB nominal. En términos reales, las tasas de interés de las distintas modalidades
del crédito se encuentran por debajo de sus promedios históricos (exceptuando la de las tarjetas de
crédito). Las condiciones financieras generales, sin embargo, pueden haberse ajustado como
resultado del encarecimiento del financiamiento externo.
(vi) En julio la inflación anual (2,2%) resultó algo menor a lo estimado por el equipo técnico y el
promedio de inflaciones básicas se mantuvo relativamente estable en 2,5%. El promedio de las
expectativas de inflación de los analistas y las calculadas a partir de las tasas de los títulos de deuda
pública es similar a la meta de inflación de 3%.
La mayoría de los miembros consideró conveniente mantener la tasa de intervención en 3,25%,
teniendo especialmente en cuenta los siguientes factores: (i) Hay información que sugiere una
recuperación de la demanda agregada durante lo que resta del año, en gran parte debido a la actual
postura expansionista de la política monetaria y a los programas que viene ejecutando el gobierno
nacional. Así lo indica el comportamiento de variables de producción, como ventas al por menor y
despachos de cemento; los resultados de las encuestas de expectativas de consumidores y
empresarios; y los principales indicadores del mercado laboral; (ii) Las señales de la economía
mundial son mixtas. Mientras las economías desarrolladas muestran signos de recuperación, el
crecimiento de algunas economías emergentes ha sido menor que el esperado; (iii) Los niveles de
los términos de intercambio para Colombia siguen siendo altos; (iv) El balance de riesgos debe
tener en cuenta el efecto de una expansión monetaria adicional sobre la vulnerabilidad de la
economía a choques negativos, en especial en el actual contexto de futura normalización de las
condiciones financieras externas; (v) En el siguiente mes se tendrá información relevante sobre el
crecimiento de la economía colombiana en el segundo trimestre y sobre decisiones de política
monetaria en los Estados Unidos.
Otros miembros consideraron que debía reducirse la tasa de interés de intervención teniendo en
cuenta: (i) los riesgos a la baja de las proyecciones de crecimiento económico se han incrementado.
El crecimiento agregado de los socios comerciales de Colombia probablemente será menor que el
valor observado en 2012 y algo similar se espera para los términos de intercambio, mientras que el
comportamiento reciente de la demanda interna no permite prever un cierre de la brecha del
producto en el horizonte de política y; (ii) Las proyecciones y las expectativas de inflación no
muestran que existan riesgos importantes de que esta sobrepase la meta del 3%. En estas
condiciones es posible y deseable llevar una política monetaria más expansiva que reduzca la
brecha esperada del producto en un contexto en que no se presentan riesgos inflacionarios.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
Hecha la evaluación del balance de riesgos la Junta Directiva por mayoría consideró apropiado
mantenerla en 3,25%.
La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo del comportamiento y proyecciones de la
actividad económica e inflación en el país, de los mercados de activos y la situación internacional.
Finalmente, reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible.
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2013-09-01 |
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Minutas de la reunión de la JDBR del 27 de Septiembre de 2013
El 27 de Septiembre de 2013 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la
Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito
Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los
Directores doctores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Enrique
Meisel Roca, César Vallejo Mejía, Juan Pablo Zárate Perdomo. En las minutas se presenta un
resumen de la situación inflacionaria y del crecimiento económico, y sus perspectivas, elaborada
por el equipo técnico (sección 1) y se reseñan las principales discusiones y opciones de política
consideradas por la Junta Directiva (sección 2).
1. SITUACION INFLACIONARIA Y DE CRECIMIENTO ECONÓMICO
a. Desarrollos recientes de la inflación
En agosto la inflación anual al consumidor fue 2,27%, 5 puntos base (pb) más que el registro del
mes anterior. En los primeros ocho meses, el cambio acumulado en el IPC ascendió a 1,86%,
inferior a la variación acumulada en igual lapso de 2012 (2,03%).
La variación anual del IPC de alimentos en agosto fue de 1,8%, 13 pb más respecto a julio. El
aumento se concentró en la canasta de alimentos perecederos (5,5% frente a 4,0% en julio), lo que
puede ser explicado por una disminución del abastecimiento de estos productos por los bloqueos
experimentados durante este mes. La variación de los precios de las comidas fuera del hogar
aumentó ligeramente de 3,5% en julio a 3,6% en agosto. Para los alimentos procesados, el cambio
anual en los precios (-0,1%) disminuyó frente a julio (0,1%).
Dentro del IPC sin alimentos, en agosto la variación anual (2,45%) no cambió frente a lo observado
el mes anterior. En esta canasta se registraron aumentos en las variaciones anuales de los precios de
los transables y de los de regulados. En el caso del primero, el aumento (de 1,3% a 1,4% en agosto)
se suma a los observados en meses anteriores y estaría en parte relacionado con la depreciación del
peso registrada en lo corrido del año. Respecto a los regulados, la variación anual (1,5%) significó
un aumento de 9 pb frente al mes anterior. Dicha aceleración se concentró en las tarifas del
transporte público que pasaron de crecer anualmente 1,7% en julio a 2,5% en agosto (el impulso se
presentó en parte por un efecto de base de comparación estadística en la variación anual, la cual
recogió la caída en las tarifas en Transmilenio decretadas en agosto de 2012). Los otros dos
componentes de regulados, servicios públicos y combustibles cayeron.
Durante el mes se presentó un descenso de 12 pb en la variación anual de la canasta de no
transables sin alimentos ni regulados (3,8%), nivel similar al de junio. En julio se había presentado
una aceleración de 12 pb. Esta volatilidad se explica esencialmente por el rubro diversión, cultura y
esparcimiento (específicamente boletas de fútbol). Por su parte, el ajuste anual de los arriendos
(3,7%) se mantuvo estable.
El promedio de los cuatro indicadores de inflación básica monitoreados por el Banco de la
República se situó en agosto en 2,54%, valor igual al del mes anterior. Este indicador ha mostrado
una gran estabilidad en torno a 2,5% desde febrero de este año.
La variación anual del IPP se mantuvo en terreno negativo en agosto (-0,5%). Tanto el componente
local como el importado disminuyeron frente al mes pasado (52 pb en el primer caso y 33 pb en el
segundo).
Las expectativas de inflación no registraron cambios significativos en el último mes. Según la
encuesta mensual del Banco a los analistas del mercado financiero, la inflación esperada a
diciembre de este año se mantuvo en 2,6% mientras que la de 12 meses se situó en 3,0%, 7 pb
menos que el mes anterior.
Por su parte, las expectativas de inflación derivadas de la curva de rendimiento de los TES a
horizontes de 2, 3 y 5 años, se mantienen entre 2,3% y 2,8%, niveles ligeramente inferiores a los
observados el mes pasado.
b. Crecimiento
Durante el segundo trimestre de 2013 la economía colombiana creció 4,2% frente al mismo periodo
de 2012. Este registro fue superior al de los primeros tres meses del año (2,7%). Aunque parte de
esta aceleración se esperaba, el resultado fue superior al rango proyectado por el equipo técnico
(2,5% a 4,0%).
Por componentes del gasto, el mayor ritmo de crecimiento se originó en el consumo privado (4,4%
anual), en el público (5,0% anual) y en las exportaciones netas. La contribución de estas últimas al
crecimiento del PIB fue positiva, hecho que no se registraba desde el cuarto trimestre de 2009. Esto
obedeció a la importante aceleración observada en las exportaciones, que pasaron de caer 2,7%
anual en los primeros tres meses del año a crecer 7,6%; mientras que las importaciones lo hicieron a
un menor ritmo (de -0,2% a 1,3% respectivamente).
Por ramas de actividad, con excepción de la construcción, todos los sectores económicos
presentaron una mayor tasa de crecimiento anual en el segundo trimestre que en el anterior. Los
sectores que más crecieron fueron la agricultura (7,6%) y la construcción (6,4%). La minería mostró
un desempeño favorable (4,3%) pero continúa por debajo del promedio de los últimos cinco años
(10,3%). La industria, que incluye trilla de café, registró un crecimiento positivo (1,2%) luego de
haberse contraído en los últimos tres trimestres.
Para el tercer trimestre algunos indicadores de julio sugieren que la actividad económica sigue
recuperándose.
El consumo privado podría continuar registrando tasas de crecimiento similares a las observadas en
la primera mitad del año. De acuerdo a la Muestra Mensual de Comercio al por Menor (MMCM)
del DANE, las ventas minoristas de los establecimientos comerciales se expandieron 5,4% en
términos anuales durante julio (frente al 5,2% registrado en el segundo trimestre del año). Al
descontar el efecto de las ventas de vehículos automotores y motocicletas, las ventas crecieron 3,2%
durante el mismo periodo y mantienen su tendencia creciente. Otro indicador que apunta a un buen
dinamismo del consumo privado es la Encuesta Mensual de Expectativas Económicas (EMEE) del
Banco de la República que en julio muestra que las condiciones y expectativas de ventas de los
comerciantes fueron favorables pues el balance se ubicó por encima del promedio del segundo
trimestre. Las variables del mercado laboral también brindan una perspectiva de un mejor
desempeño del consumo privado durante el tercer trimestre. El empleo asalariado, que ha mostrado
una alta correlación con el consumo privado, crece a buen ritmo (5,8% anual). Por último, el crédito
de consumo ha mantenido un buen ritmo de expansión (12,9% anual en agosto) apunta también a un
buen comportamiento de este gasto en el tercer trimestre.
Para la inversión, con información a julio, la estabilidad en el balance de las expectativas de
inversión de corto y mediano plazos de la EMEE indicaría que aquella distinta a la destinada a
construcción de edificaciones y de obras civiles se podría estar estabilizando en el tercer trimestre.
Además se espera que la inversión en edificaciones y obras civiles crezca a buen ritmo durante la
segunda mitad del año, en parte por un efecto estadístico de una baja base de comparación en el
2012.
Por otra parte, en el mes de julio se observó una disminución anual del valor de las exportaciones
totales en dólares de 6,6%. La caída se explica, en gran parte, por la variación de -7,4% en las
exportaciones de origen minero (carbón y oro principalmente). Asimismo, las ventas externas
agrícolas registraron una caída anual de 8,8%. En el caso de las exportaciones de bienes industriales
y otros, en julio se observó una reducción de 3,2%.
Las importaciones totales en dólares en julio disminuyeron 1,6% anual. Estas menores compras
externas se explican por la caída de 11,5% en las de bienes de capital, ya que las de bienes de
consumo y materias primas crecieron 4,2% y 3,9%, respectivamente. La disminución en las
importaciones de bienes de capital se asocia, en gran medida, a aquellas de equipo de transporte (-
35,1%), cuyo descenso se debe, principalmente, a la variación de -50,5% en equipo rodante de
transporte.
Por el lado de la oferta, los pocos indicadores disponibles para el tercer trimestre de 2013 sugieren
una mejora del comercio, de la construcción y de la industria. En julio, en el caso del comercio,
además del dinamismo de las ventas al por menor antes mencionado, se destaca la mejor percepción
actual y a futuro que arroja la encuesta de Fedesarrollo. En el caso de la construcción, aunque en
julio las licencias registraron una caída de 11,4%, el acumulado de doce meses continúa mostrando
crecimientos (alrededor de 6,2%). Por su parte la producción y despachos de cemento crecieron en
julio 6,2% y 11,5%, respectivamente.
En el caso de la industria, en julio el crecimiento anual de la producción fue ligeramente positivo
(0,2%). Se destaca que el componente tendencial de la serie por primera vez en el año tiene una
pendiente ascendente. Cabe señalar que el crecimiento para el año corrido a julio todavía se ubica
en terreno negativo (pasó de -3,4% en junio a -2,9% en julio). Otras variables relacionadas con el
sector como los indicadores de pedidos, existencias, expectativas a tres meses de la producción y de
confianza industrial de Fedesarrollo con información a julio confirman el cambio en la tendencia y
muestran una mejoría respecto a los meses anteriores.
Es así como la más reciente información aumentó la probabilidad de que el PIB crezca este año a
una tasa similar a la de 2012. Los indicadores de actividad económica y sus proyecciones muestran
que el nivel del producto que va convergiendo hacia su potencial. Es de esperar que las acciones de
política monetaria y fiscal realizadas hasta el momento contribuyan a consolidar esta tendencia.
c. Variables Financieras
El crédito bancario (M/N y M/E) en agosto registró una tasa anual de crecimiento de 13,9%,
ligeramente superior al observado el mes pasado (13,8%). El crecimiento anual de la cartera en
moneda nacional se aceleró de 12,45% a 12,91% entre julio y agosto mientras que la de moneda
extranjera se desaceleró de 37,07% a 30,66% en el mismo periodo.
Por destinos, la cartera a los hogares presentó una tasa anual de crecimiento de 13,21%, inferior en
6 pb al mes anterior. Esto se explicó por la estabilidad en la variación del crédito de consumo
(12,90% en julio y en agosto) y la leve desaceleración en la cartera para compra de vivienda de
14,28% en julio a 14,06% en agosto. En cuanto a la cartera hacia las empresas, la tasa de
crecimiento anual aumentó 26 pb entre julio (13,79%) y agosto (14,05%).
Las tasas de interés de los préstamos desembolsados por los establecimientos de crédito desde el
inicio de los recortes en la tasa de política en julio de 2012, han acumulado reducciones de: -224 pb
para los créditos hipotecarios, -210 pb para los de consumo y -194 pb en los créditos para
construcción.
Los niveles de las tasas de interés reales en agosto de los créditos de consumo, hipotecarios,
preferenciales, comercial ordinario y comercial de tesorería, se sitúan por debajo de sus promedios
históricos calculados desde 2000. Por el contrario, la tasa real de los créditos otorgados con tarjeta
de crédito se encuentra por encima de su promedio.
La magnitud del descenso de las tasas de interés reales desde el inicio de los recortes de la tasa de
referencia ha sido inferior por efecto de la menor tasa de inflación, con rebajas durante este mismo
período de: -190 pb en créditos hipotecarios, -174 pb en créditos de consumo y -160 pb en créditos
para construcción.
d. Contexto Externo
La economía mundial continuó recuperándose, hecho explicado principalmente por los países
desarrollados. En la zona del euro las cifras de actividad económica han sido mejores a lo esperado
mientras que en Estados Unidos el crecimiento sigue siendo modesto. Como se proyectaba, las
grandes economías emergentes registran un ritmo de actividad económica más débil que en 2012 y
en algunas de ellas la actividad se ha desacelerado más de lo previsto.
En la zona del euro, los indicadores recientes sobre actividad real y confianza, evidencian que la
recuperación económica observada en la primera parte del año estaría continuando. Pese a ello, el
ritmo de expansión de toda la región siendo muy bajo (-0,7% anual en el segundo trimestre de
2013) y la debilidad se mantiene pues los mercados laborales permanecen todavía vulnerables y el
crédito aún no muestra señales de recuperación.
En los Estados Unidos, la expansión de la economía continúa con un ritmo modesto. Durante el
segundo trimestre la economía se expandió a una tasa anual de 1,6% lo que significó una leve
aceleración frente a lo observado en el primer trimestre (1,3%). Las cifras recientes sobre ventas al
por menor y actividad industrial mostraron un buen comportamiento. Por otra parte, aunque la tasa
de desempleo sigue con una tendencia decreciente, la creación de empleo continúa baja. Los
incrementos recientes en las tasas de interés de largo plazo se han transmitido a las tasas de interés
de los créditos hipotecarios. Este fenómeno se ha dado al tiempo con una leve desaceleración en
algunas cifras del mercado de vivienda (inicios y permisos de construcción, precios de la vivienda).
Estos hechos han generado alertas sobre la sensibilidad de la recuperación del mercado de vivienda
a una menor expansión de la política monetaria en ese país.
En cuanto a las economías emergentes el crecimiento del primer semestre fue inferior al observado
el año pasado; sin embargo este sigue siendo favorable. En China, la producción industrial, las
ventas al por menor y algunos indicadores de comercio internacional repuntaron nuevamente en
agosto lo que indicaría que la actividad real se estaría dinamizando en el tercer trimestre.
Para los países de América Latina los resultados de la primera mitad del año fueron mixtos. La
actividad real se desaceleró fuertemente en México, pasando de una tasa de expansión anual de
2,6% en el primer trimestre a 0,3% en el segundo. En Chile se observó igualmente una menor tasa
de expansión en el segundo trimestre (4,0% anual) que en el primero (5,1% anual). Por otra parte,
en Brasil, la actividad económica repuntó en el segundo trimestre con una tasa de crecimiento anual
de 3,3% frente a 1,9% registrado en el primero. En Perú se observó igualmente un mejor
crecimiento anual en el segundo trimestre (5,6% frente a 4,5% en el primero). Para el tercer
trimestre, la información más reciente evidencia que la actividad económica en México crecería a
un ritmo moderado, mientras que en Chile y Perú la actividad continuaría expandiendo a un ritmo
favorable.
En relación con los precios internacionales de los bienes básicos, las tensiones geopolíticas en
Medio Oriente incrementaron nuevamente las cotizaciones externas del petróleo. Anuncios
recientes ayudaron a reducir de manera parcial dichos aumentos. En este contexto, los precios del
crudo se estarían ubicando en el límite superior del rango de pronóstico establecido en el Informe
sobre Inflación pasado (110 USD/barril).
Las cotizaciones externas de otros bienes exportados por Colombia, como el carbón y el níquel,
evidenciaron alguna estabilidad en las últimas semanas; las cotizaciones del café se redujeron
nuevamente. Para el caso de algunos alimentos importados, como el trigo y el maíz, las condiciones
favorables de oferta han reducido los precios internacionales. Con ello, los términos de intercambio
del país dejaron de caer y se mantienen en niveles históricamente elevados.
La inflación de las principales economías desarrolladas se mantiene en niveles relativamente
estables. Es de destacar el comportamiento de los precios en Japón, país en el que las políticas
económicas expansionistas estarían propiciando un aumento en el nivel de precios. Para las
economías emergentes la situación es menos homogénea, en tanto, países como Brasil, India e
Indonesia continúan experimentando inflaciones elevadas; mientras que economías como Chile,
Colombia y Perú han presentado un incremento moderado en su inflación, aunque todavía desde
niveles bajos.
Es importante notar que economías con fuertes presiones inflacionarias y cambiarias como India e
Indonesia incrementaron sus tasas de interés de referencia en las últimas semanas. Otros países, con
menores variaciones de precios y preocupaciones por la actividad real las redujeron (México y
Hungría).
Respecto a los mercados financieros globales, la decisión de la FED de no iniciar todavía el retiro
del estímulo monetario contribuyó a la valorización de los bonos públicos y privados y a la
apreciación de las monedas de la mayoría de los países emergentes. Pese a ello, esta corrección ha
sido parcial y los precios de estos activos son todavía mayores que los observados antes de mayo.
Adicionalmente, es probable que la incertidumbre sobre cuándo, cómo y en cuánto sería el
desmonte del programa de estímulo monetario continúe presionando los mercados de capital en las
próximas semanas.
Es de resaltar que en los próximos días se deberá negociar en el Congreso americano, el
presupuesto del nuevo año fiscal y el límite de endeudamiento del gobierno. En los últimos años
estas discusiones entre demócratas y republicanos, han sido muy complejas y polarizadas. Esto ha
generado una alta incertidumbre que ha afectado la confianza de los consumidores y empresarios
americanos, y ha producido un aumento de la volatilidad en los mercados financieros
internacionales.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
La Junta Directiva tomó en consideración los siguientes aspectos relevantes:
(i) Las cifras de tercer trimestre indican que el crecimiento de un buen número de economías
avanzadas ha mejorado, al tiempo que las economías emergentes crecen menos que el año anterior.
El crecimiento promedio de los socios comerciales de Colombia probablemente será menor en 2013
que en 2012.
(ii) El precio internacional del petróleo continúa en niveles altos y las cotizaciones de algunos
productos básicos que importa Colombia han caído, con lo cual los términos de intercambio del país
se mantienen en niveles altos.
(iii) La decisión de la Reserva Federal de los Estados Unidos de mantener inalterado el programa
de compras mensuales de activos contribuyó a la valorización de los activos financieros
internacionales y a la apreciación de las monedas de la mayoría de los países emergentes.
(iv) El crecimiento del PIB de Colombia en el segundo trimestre fue superior al proyectado. Por el
lado de la demanda interna, tanto la inversión como el consumo de los hogares y el gobierno
mostraron un mayor dinamismo. Asimismo, el crecimiento real de las exportaciones superó al de las
importaciones, hecho que no se registraba desde el segundo trimestre de 2009. Por el lado de la
oferta, con excepción de la construcción, todos los sectores económicos se expandieron a un mayor
ritmo que en el trimestre anterior, destacándose el sector agropecuario. La industria, con trilla de
café, creció a una tasa positiva luego de haberse contraído durante tres trimestres consecutivos.
(v) Los indicadores del tercer trimestre sugieren que el PIB se expande a tasas anuales mayores
que las observadas en el primer semestre del año. La inversión, especialmente en edificaciones,
crecería a tasas elevadas mientras que el consumo probablemente lo hará a una tasa similar a la
observada en la primera mitad del año. Así lo sugieren las cifras de comercio al por menor, las
encuestas mensuales de expectativas económicas al comercio, el crédito de consumo y los datos de
empleo asalariado.
(vi) El crédito bancario crece a tasas estables superiores a las del PIB nominal. En términos reales,
las tasas de interés de las distintas modalidades del crédito se encuentran por debajo de sus
promedios históricos (exceptuando la de las tarjetas de crédito). Las condiciones financieras
generales, sin embargo, pueden haberse ajustado como resultado del encarecimiento del
financiamiento externo.
(vii) La nueva información aumentó la probabilidad de que el PIB crezca este año a una tasa
similar a la de 2012. No obstante, si bien los riesgos provenientes de las economías avanzadas
probablemente son ahora menores que antes, los de algunas economías emergentes pueden estar
aumentando.
(viii) En agosto la inflación anual (2,27%) estuvo en línea con lo estimado por el equipo técnico y
el promedio de inflaciones básicas se mantuvo estable en 2,5%. El promedio de las expectativas de
inflación de los analistas y las calculadas a partir de las tasas de los títulos de deuda pública es
similar a la meta de inflación de 3%.
Los miembros de la Junta resaltaron el crecimiento del producto en el segundo trimestre del año,
superior al estimado, como reflejo del mayor dinamismo de la demanda interna y, por primera vez
desde 2009, un dato positivo de las exportaciones netas. Así mismo, los datos favorables del
mercado laboral y el crecimiento del empleo asalariado (5,8%). Adicionalmente, si bien en el mes
de agosto el índice de confianza del consumidor (ICC) publicado por Fedesarrollo presentó una
caída, es de esperarse que ésta sea transitoria, y que el crecimiento económico siga fortaleciéndose
en parte impulsado por la inversión en construcción de edificaciones y obras civiles. No obstante,
continúan elementos de incertidumbre en el contexto externo, tanto en las economías avanzadas
como en algunas emergentes.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
Hecha la evaluación del balance de riesgos, la Junta Directiva por unanimidad consideró
apropiado mantener la tasa de interés de intervención en 3,25%.
La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo del comportamiento y proyecciones de la
actividad económica e inflación en el país, de los mercados de activos y la situación internacional.
Finalmente, reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible.
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2013-10-01 |
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Minutas de la reunión de la JDBR del 25 de octubre de 2013
El 25 de Octubre de 2013 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la
Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito
Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los
Directores doctores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Enrique
Meisel Roca, César Vallejo Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo. En las minutas se presenta un
resumen de la situación inflacionaria y del crecimiento económico, y sus perspectivas, elaborada
por el equipo técnico (sección 1) y se reseñan las principales discusiones y opciones de política
consideradas por la Junta Directiva (sección 2).
1. SITUACIÓN INFLACIONARIA Y DE CRECIMIENTO ECONÓMICO
a. Desarrollos recientes de la inflación
En septiembre la inflación anual al consumidor fue 2,27%, igual al registro del mes anterior. En los
primeros nueve meses del año, el cambio acumulado en el IPC ascendió a 2,16%, inferior a la
variación acumulada en igual lapso de 2012 (2,32%). La estabilidad del indicador en el último mes
fue el resultado de una aceleración en la variación anual del IPC de alimentos que fue compensada
por reducciones en las variaciones anuales de los IPC de los otros tres grandes componentes
(regulados y transables y no transables, sin alimentos ni regulados).
La variación anual del IPC de alimentos en septiembre fue de 2,1%, 28 puntos base (pb) más
respecto a agosto. La tendencia ascendente en este indicador ha sido continua desde mediados del
segundo trimestre. Los precios de los productos perecederos explican buena parte de este
comportamiento (aumentaron 40 pb frente al mes anterior situándose en 5,9%). Por el lado de los
alimentos procesados se observaron presiones al alza muy moderadas (0,18% de variación anual).
En esta subcanasta, la depreciación de los últimos meses no se ha transmitido a los precios internos
lo que puede obedecer a que los precios internacionales de cereales, oleaginosas y aceites han caído
de manera importante. Finalmente, la variación anual del IPC de comidas fuera del hogar aumentó a
3,7% desde 3,6% en agosto.
La variación anual del IPC sin alimentos se situó en 2,4% en este mes, 10 pb menos que el dato de
agosto. Después de los aumentos observados entre enero y junio esta variable ha mostrado una
tendencia levemente decreciente. El mayor descenso se dio en la variación anual del IPC de
regulados (1,2% en septiembre frente a 1,5% en agosto) y se explica principalmente por la
estabilidad del precio de los combustibles frente a los aumentos registrados en igual mes del año
pasado. La variación anual del IPC de regulados se ha mantenido por debajo de la inflación anual
desde mediados de 2012, gracias a las menores alzas en los precios internacionales del petróleo, a
las rebajas en las tarifas de acueducto y servicios de recolección de basuras y otras disminuciones
asociadas con la reforma tributaria a comienzos de este año.
En el caso del IPC de no transables sin alimentos ni regulados, el cambio anual fue 3,7% 8 pb
menos que el observado en agosto. Este indicador muestra, con algunas interrupciones, una leve
tendencia decreciente desde hace tres trimestres que ha sido posible por el comportamiento del
rubro de arriendos, su componente más importante. En el último mes la variación anual de arriendos
se situó en 3,6% frente a 3,7% en agosto e inferior a los registros de junio y marzo. En los demás
subgrupos de la canasta de no transables se observan ajustes cercanos a 3,0%, excepto por el caso
de educación que se sitúa en 4,9%.
Respecto a los transables sin alimentos ni regulados, el dato de septiembre fue 1,3%, 5 pb por
debajo del registro de agosto. Aunque la depreciación de los meses anteriores se ha transmitido a
dichos precios, esto ha sucedido de forma lenta y no continua.
El promedio de los cuatro indicadores de inflación básica monitoreados por el Banco de la
República se situó en septiembre en 2,51%, 3 pb menos que el del mes anterior. Este indicador ha
mostrado estabilidad en torno a 2,5% desde febrero de este año.
La variación anual del IPP descendió en septiembre a -1,3% de -0,5% en agosto. El componente
local disminuyó frente al mes pasado (122 pb), gracias a los menores ajustes en los precios de los
productos agropecuarios y manufacturados. El componente importado aumentó 1,6% anual en
septiembre, influenciado por la depreciación del peso reciente.
En lo referente a las expectativas de inflación, según la encuesta mensual del Banco a los analistas
del mercado financiero, la inflación esperada a diciembre de este año es 2,6% mientras que la de 12
meses es 3,0%, iguales a los registros del mes pasado. Por otra parte, las expectativas de inflación
derivadas de la curva de rendimiento de los TES a horizontes de 2, 3 y 5 años, se encuentran entre
2,6% y 2,7%, lo que representó un ligero aumento a lo observado un mes atrás.
b. Crecimiento
Los indicadores de demanda disponibles para el tercer trimestre sugieren una expansión del PIB
superior a la registrada durante la primera mitad del año. Esta aceleración se explica en gran medida
por el desempeño de la demanda interna, rubro que habría sido impulsado principalmente por un
buen comportamiento de la inversión. El consumo de los hogares se habría expandido a una tasa
cercana a la observada en el primer semestre.
La aceleración esperada en la inversión para el tercer trimestre, se daría principalmente por el buen
comportamiento que se espera en construcción de edificaciones. La mayor expansión esperada en
este rubro está asociada en gran medida a la baja base de comparación en el mismo periodo del año
pasado, al efecto de la política de vivienda de interés prioritario del Gobierno y a las buenas
perspectivas generales del mercado de vivienda que se reflejaron en un aumento de la aprobación de
licencias de construcción durante el tercer trimestre. En la inversión en obras civiles, se espera que
crezca a tasas ligeramente mayores que las registradas durante el segundo trimestre. Es importante
resaltar que la incertidumbre que rodea el comportamiento de la inversión en obras civiles es muy
alta.
Para la inversión distinta de construcción de edificaciones y de obras civiles se espera que tenga un
desempeño ligeramente mejor a lo registrado durante el segundo trimestre. Esto se basa en el
balance de expectativas de inversión de los empresarios reportado en la Encuesta Mensual de
Expectativas Económicas del Banco de la República (EMEE) y en los resultados (en términos de
pesos reales) de las importaciones de bienes de capital y de maquinaria para la industria.
Para el consumo de los hogares, en el tercer trimestre se espera un comportamiento similar al
observado en el primer semestre del año. Según la información de la Muestra Mensual de Comercio
al por Menor (MMCM) publicada por el DANE, las ventas minoristas crecieron 6,9% en términos
anuales durante agosto. Esta cifra es mayor que el 5,8% registrado para el segundo trimestre y que
el 2,8% de la primera mitad del año. Al descontar el segmento de ventas de vehículos, estas se
expandieron 8,6% en términos anuales durante el mismo periodo, lo que significa una aceleración
frente al 5,2% del segundo trimestre y al 4,3% del primer semestre. Las tasas de crecimiento del
bimestre julio-agosto confirman la perspectiva del buen desempeño del consumo privado durante el
tercer trimestre (6,2% de crecimiento en ventas totales, 5,9% al descontar vehículos). En línea con
lo anterior, el balance de ventas de la EMEE sugiere que durante julio y agosto los comerciantes
percibieron una demanda ligeramente más dinámica que la observada durante el segundo trimestre.
No obstante, hay indicadores que apuntan a que la dinámica del consumo en el tercer trimestre
podría ser menor a lo que se desprende de los indicadores descritos anteriormente. Por una parte, en
septiembre el índice de confianza del consumidor de Fedesarrollo se ubicó en niveles similares a los
registrados en el mes de agosto, el cual cayó de manera significativa con respecto al observado en el
segundo trimestre del año y por otra parte, la cartera de consumo registró nuevas desaceleraciones
(en términos reales) al expandirse 10,0% en términos anuales durante el trimestre julio-septiembre
frente a 11,7% del segundo trimestre y 12,9% de la primera mitad del año.
En lo referente a las ventas externas del país, en el mes de agosto el valor total exportado en dólares
presentó un aumento anual de 8,9%. Este incremento se explica por el crecimiento de 19,3% en las
exportaciones de origen minero (gracias a las mayores ventas externas de petróleo y derivados y
carbón). En este mes las exportaciones agrícolas registraron una caída de 0,8%, asociada a la
variación negativa de las exportaciones de banano y café. Las exportaciones de bienes industriales y
otros cayeron 16,4%, principalmente por las menores ventas de productos químicos, otros agrícolas,
caucho y plásticos y vehículos. Para el tercer trimestre, se espera que las exportaciones crezcan a un
ritmo modesto, esto principalmente por el efecto que pueda tener los distintos paros presentados en
el sector carbonífero.
En el mes de agosto las importaciones totales en dólares disminuyeron 5%, respecto al mismo mes
del año anterior. Este comportamiento se explica por la caída conjunta de las importaciones de
bienes de capital (-6,1%), materias primas (-3,9%) y bienes de consumo (-5,4%). Para el tercer
trimestre se proyecta que este rubro se expanda a una tasa mayor que la de las exportaciones,
aunque por debajo de la tasa registrada en 2012.
Por el lado de la oferta, los indicadores disponibles sugieren que el sector de la construcción sería la
principal fuente de crecimiento del producto, seguido por la agricultura, la minería y el comercio.
La industria continuaría con un desempeño bajo.
El PIB de la industria mostraría un crecimiento anual nulo o levemente positivo en el tercer
trimestre. Si bien se puede esperar una caída adicional del índice de producción industrial sin trilla
de café, el comportamiento del sector cafetero compensaría las caídas de algunas ramas de la
industria, ya que la trilla estaría creciendo muy por encima del promedio de toda la economía. Es
así como en agosto el índice de producción industrial sin trilla de café cayó 3,9% anual (en julio
había crecido 0,2%), mientras que hubo un crecimiento importante de la trilla de café, (aumentó
12,7% anual en agosto y en julio fue de 15,1%). Aunque otros indicadores de la industria mostraron
leves deterioros frente al mes anterior, al realizar un análisis de sus tendencias se observa que sus
componentes de largo plazo podrían estarse estabilizando. Esto es el caso para el indicador de
pedidos, el indicador de existencias y las perspectivas a seis meses de los industriales obtenidos de
la encuesta de Fedesarrollo.
En lo que respecta a la minería, pese a la caída que podría observarse en la producción de carbón
debido al paro en la Drummond, se espera un crecimiento mayor para este trimestre gracias al
aumento que se ha observado en la producción de petróleo. En este último sector, el crecimiento
anual del trimestre julio-septiembre fue de 8,7%.
En el sector de la construcción, los indicadores disponibles sugieren que el buen desempeño
observado en el primer semestre continuaría en los siguientes tres meses. Las licencias de
construcción crecieron 18,7% en agosto, principalmente por un incremento de 33,1% en el área
aprobada para vivienda.
Respecto a otros sectores, en el sector de transporte el menor desempeño de la industria junto con el
paro de agosto pudo haber tenido efectos negativos. De todas maneras se espera que se mantengan
una tasa de crecimiento para el tercer trimestre levemente inferior a la del segundo. Por otra parte,
en el caso del comercio, la información de Fedesarrollo y Fenalco muestra un debilitamiento en las
perspectivas de los comerciantes hacia el futuro. Sin embargo, como se mencionó anteriormente, las
ventas al por menor mostraron un buen desempeño en agosto. Por último, la agricultura tendría un
desempeño favorable sustentado principalmente en el dinamismo de la producción de café que de
acuerdo con la Federación de Cafeteros está creciendo por encima del 40% en el tercer trimestre.
Todo lo anterior permite prever que el crecimiento de la economía colombiana en el tercer trimestre
de 2013 se ubicaría en un intervalo entre 3,8% y 5,2%. Es importante resaltar que la amplitud de
este rango está determinada en gran medida por la incertidumbre que rodea el comportamiento de la
inversión en obras civiles y del consumo público.
Para todo 2013 se tiene un rango de pronóstico entre 3,5% y 4,5%. El anterior pronóstico supone
que durante la segunda mitad del año el consumo de los hogares crecería a tasas cercanas a las
observadas en la primera mitad del año, mientras que la inversión en construcción se aceleraría de
manera importante. Por ramas de actividad, los sectores más dinámicos serían la construcción y la
agricultura, mientras que el desempeño más bajo sería el de la industria.
Para 2014, se estima que el crecimiento de la economía colombiana se ubicaría entre 3,0% y 5,0%.
c. Variables Financieras
El crédito bancario (M/N y M/E) en septiembre registró una tasa anual de crecimiento de 13,94%,
cercano al promedio observado desde abril (13,97%). La cartera en moneda nacional se aceleró de
12,90% en agosto a 13,18% en septiembre y la de moneda extrajera se desaceleró de 30,91% a
27,25% en el mismo periodo.
Por destinos, la cartera a los hogares registró un crecimiento anual en septiembre de 12,80%, menor
al del mes anterior (13,19%). Esto fue explicado por el comportamiento del crédito de consumo que
disminuyó de 12,90% a 12,37%, mientras que el hipotecario mantuvo un crecimiento anual de
14,0% en septiembre.
En cuanto a la cartera comercial, la tasa de crecimiento con respecto al mismo mes del año pasado
aumentó 36 pb en septiembre (14,41%), explicado por la aceleración en el componente de moneda
nacional (de 12,33% en agosto a 13,13% en septiembre).
Las tasas de interés de los préstamos desembolsados por los establecimientos de crédito desde el
inicio de los recortes en la tasa de política en julio de 2012, han acumulado reducciones de: -223 pb
para los créditos hipotecarios, -206 pb para los de consumo, -185 pb para los créditos de
construcción.
La magnitud del descenso de las tasas de interés reales ha sido inferior por el efecto de la menor
tasa de inflación, con rebajas durante este mismo período de: -189pb para créditos hipotecarios, -
170 pb para créditos de consumo y -141 pb para créditos para construcción.
Los niveles de las tasas de interés reales en septiembre de los créditos de consumo, hipotecarios,
preferenciales, comercial ordinario y comercial de tesorería y de construcción se sitúan por debajo
de sus promedios históricos calculados desde 2000. Por el contrario, los créditos otorgados con
tarjeta de crédito se encuentran por encima de su promedio.
d. Contexto Externo
La información disponible para el tercer trimestre evidencia que la actividad global ha seguido
recuperándose, lo que se explica por indicadores de crecimiento positivo que empiezan a registrarse
en la zona del euro, luego de un prolongado período de contracción, como también por crecimientos
moderados en los Estados Unidos y Japón. Por su parte, las grandes economías emergentes de Asia
y de América Latina crecen de forma heterogénea, aunque en su mayoría presentan ritmos de
expansión inferiores a los observados el año pasado.
En el caso de la zona del euro los índices de confianza de empresarios y consumidores, junto con
los indicadores de actividad en los sectores de manufacturas y servicios, siguieron mostrando con
datos a septiembre un comportamiento alentador. De igual forma, con cifras a agosto, las ventas al
por menor completaron varios meses creciendo en términos mensuales y desacelerando su caída
anual. Es importante destacar, sin embargo, que la economía de esta región continúa vulnerable: La
tasa de desempleo se mantiene en niveles elevados, principalmente en las economías de la periferia,
el crédito sigue contrayéndose y la fragmentación financiera continúa afectando a las economías
más vulnerables de la región.
En el caso de Japón, el fuerte estímulo provisto por la política monetaria comienza a manifestarse
en indicadores positivos de actividad económica en ese país, los cuales muestran que las
exportaciones han seguido expandiéndose al igual que la actividad industrial. En este contexto, la
confianza de los empresarios ha aumentado en los últimos meses, caso contrario a la de los
consumidores que lleva varios meses deteriorándose.
En relación con los Estados Unidos, con cifras a agosto, las ventas al por menor y la industria
crecieron tanto en términos mensuales como anuales; de forma similar, en septiembre, los
indicadores de actividad en los sectores de manufacturas y servicios se mantuvieron en terreno
expansivo. Esta información apunta a que la actividad real se expandió a un ritmo moderado en el
tercer trimestre. Cabe notar que en los primeros días de octubre el Congreso de los Estados Unidos
no logró llegar a un acuerdo sobre el presupuesto para el año fiscal, por lo que se declaró un cierre
administrativo. Las discusiones sobre el presupuesto coincidieron con la negociación sobre el límite
de endeudamiento. El 16 de octubre el Congreso llegó a un acuerdo que evitó una cesación de pagos
de la economía (se autorizó el endeudamiento hasta febrero de 2014) y permitió la reapertura del
gobierno hasta enero de 2014. En este lapso se deberán efectuar negociaciones para acordar nuevos
ajustes fiscales.
Por el lado de las economías emergentes, el crecimiento económico de China se aceleró levemente
durante el tercer trimestre del año. El mayor crecimiento se reflejó en una recuperación de la
demanda interna y de la actividad industrial. Durante este periodo el Gobierno implementó algunas
medidas de estímulo que contribuyeron al crecimiento de la inversión.
Para el caso de América Latina, con información preliminar al tercer trimestre, se observa que el
comportamiento de la actividad real continúa siendo heterogéneo. Así, mientras en Perú los
indicadores mensuales evidencian alguna aceleración, en Chile el crecimiento parece estabilizarse
en 4,5%, tasa inferior a su potencial. Por su parte en Brasil, la economía pareciera estar perdiendo
dinamismo.
En relación con los precios internacionales de los bienes básicos, el incremento en las tensiones
geopolíticas aumentó las cotizaciones externas del petróleo durante el tercer trimestre y las ubicó
por encima de lo estimado por el equipo técnico en el Informe sobre inflación de junio. Para el caso
de otros bienes exportados por Colombia, el carbón y el níquel interrumpieron sus caídas y en las
últimas semanas evidenciaron alguna estabilidad; sin embargo, los precios externos del café
continuaron cayendo, aunque a un menor ritmo. Por su parte, se observaron caídas en los precios
internacionales de algunos granos y cereales (exceptuando el trigo).
La inflación de las principales economías desarrolladas ha permanecido relativamente estable en los
últimos meses. En cuanto a la inflación en las economías emergentes, el panorama es heterogéneo.
En este sentido, se observan países como Brasil, India e Indonesia con inflaciones relativamente
altas y en algunos casos superiores a las metas fijadas por sus bancos centrales. Por otra parte, se
encuentran economías, como Chile, Colombia y Perú, con inflaciones bajas pero acelerándose.
Otras economías asiáticas evidencian inflaciones bajas e incluso decrecientes (Taiwán y Corea).
Respecto a los mercados financieros globales, los últimos eventos en los Estados Unidos han
llevado a que el mercado haya reducido la probabilidad de que la FED empiece este año a disminuir
el monto de las compras mensuales de activos, lo que ha revertido parcialmente los aumentos en las
tasas de interés de largo plazo que se registraron a partir de mayo. Asimismo, se produjo una
disminución de los indicadores de riesgo país en América Latina y una leve apreciación de sus
monedas.
Teniendo en cuenta este entorno internacional, el equipo técnico sigue previendo un crecimiento de
la demanda externa de los productos colombianos para el presente año por debajo de lo observado
el año anterior. Es de esperar que en lo que resta de este año y en el siguiente, los términos de
intercambio permanezcan en niveles relativamente altos, aunque inferiores a los registrados a
comienzos de 2012.
Hay que resaltar que los riesgos externos sobre la actividad económica mundial aumentaron
respecto al informe trimestral anterior. Por una parte, la incertidumbre sobre los acuerdos fiscales en
los Estados Unidos podría repercutir negativamente sobre la confianza de los consumidores y de los
mercados financieros, lo que impactaría el crecimiento económico en este país tanto en 2013 como
en 2014. Por otra parte, se podría dar una mayor desaceleración en 2014, incluso con riesgos a la
estabilidad financiera, en las economías emergentes más vulnerables a los cambios en los flujos
financieros que resultarían del inicio del retiro del estímulo monetario en Estados Unidos.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
La Junta Directiva tomó en consideración los siguientes aspectos relevantes:
(i) La economía mundial se expande a un ritmo moderado y su dinámica de corto plazo ha
cambiado un poco frente a lo observado en trimestres anteriores. Según indicadores del tercer
trimestre, en la Zona Euro se observa una incipiente recuperación. No obstante, el crecimiento de
los Estados Unidos puede haberse resentido como consecuencia del cierre parcial del gobierno
federal y la mayor incertidumbre. El conjunto de las economías emergentes se expande a un menor
ritmo, aunque el dato de crecimiento del PIB de China fue más alto que el esperado por el mercado.
(ii) Adicionalmente, ha caído la probabilidad de que la FED empiece este año a disminuir el monto
de las compras mensuales de activos, lo que revirtió parcialmente los aumentos en las tasas de
interés de largo plazo que se registraron a partir de mayo. Así mismo se produjo una disminución de
los indicadores de riesgo país en América Latina y una leve apreciación de sus monedas.
(iii) Por otro lado, el precio internacional del petróleo y de algunas materias primas importadas por
Colombia presentaron caídas.
(iv) En Colombia, los datos disponibles para el tercer trimestre sugieren una actividad económica
que se expande a un ritmo mayor que en la primera mitad del año, impulsado por la inversión. El
consumo habría crecido a una tasa similar a la del primer semestre. Por el lado de la oferta, el sector
de la construcción sería la principal fuente de crecimiento, seguido por la agricultura, la minería y
el comercio. Para todo el año 2013, el equipo técnico proyecta una tasa de crecimiento entre el 3,5%
y el 4,5%.
(v) El crédito bancario crece a tasas estables superiores a las del PIB nominal. En términos reales,
las tasas de interés de las distintas modalidades de crédito se encuentran por debajo de sus
promedios históricos (exceptuado las de tarjetas de crédito) e impulsan el crecimiento económico.
(vi) En septiembre la inflación anual (2,27%) se mantuvo estable con respecto al mes anterior y lo
mismo se observó con el promedio de las medidas de inflación básica. Las expectativas de
inflación de los analistas a doce meses y las calculadas a partir de los títulos de deuda pública a
horizontes más largos son consistentes con la meta de inflación de largo plazo.
Unos miembros consideraron que la brecha del PIB es levemente negativa y, a juzgar por el
comportamiento de los indicadores de inflación básica y de los precios de los no transables,
pareciera estar en un nivel estable desde hace un buen número de meses. Adicionalmente, el 3,25%
de tasa de interés de intervención está por debajo de cualquier estimación razonable del nivel
"natural" de tasa de interés nominal, indicando una postura monetaria expansiva. Esta postura se
justifica por los efectos negativos sobre la demanda agregada de choques financieros y reales
externos, y algo por la precaria recuperación en algunos indicadores de confianza o expectativas.
Sobre el futuro de estas variables hay gran incertidumbre y por ello se considera apropiado
mantener el nivel actual de tasa de interés de intervención.
Otro grupo de directores consideró que es posible que la brecha del producto sea más negativa que
lo mencionado anteriormente, si se tiene en cuenta que tanto la inflación básica como el punto
medio de las proyecciones de inflación, se mantiene alrededor de 2,5%, por debajo de la meta de
largo plazo. Así mismo, la evolución de diversos indicadores sectoriales y de demanda ha sido
errática, sin presentar señales contundentes respecto de la magnitud y sostenibilidad del proceso de
cierre de esta brecha. Finalmente, las proyecciones sobre el contexto global, a pesar de algunas
mejoras, no parecen indicar que la demanda externa sea una fuente que promueva un mayor
crecimiento del producto. En estas circunstancias es conveniente continuar con el impulso que la
política monetaria está aportando a la demanda agregada, manteniendo la actual postura
expansionista.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva por unanimidad consideró apropiado mantener la tasa de interés de intervención
en 3,25%.
La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo del comportamiento y proyecciones de la
actividad económica e inflación en el país, de los mercados de activos y de la situación
internacional. Finalmente, reitera que la política monetaria dependerá de la información disponible.
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2013-11-01 |
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Minutas de la reunión de la JDBR del 29 de noviembre 2013
El 29 de noviembre de 2013 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la
Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito
Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los
Directores doctores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel
Roca, César Vallejo Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo. En las minutas se presenta un resumen de
la situación inflacionaria y del crecimiento económico, y sus perspectivas, elaborada por el equipo
técnico (sección 1) y se reseñan las principales discusiones y opciones de política consideradas por
la Junta Directiva (sección 2).
1. SITUACIÓN INFLACIONARIA Y DE CRECIMIENTO ECONÓMICO
a. Desarrollos recientes de la inflación
En octubre, la inflación anual al consumidor presentó un descenso importante y significativamente
mayor que el esperado. El resultado de este mes fue 1,84%, 43 puntos base (pb) menos que el
registro de septiembre. Para el año corrido el dato asciende a 1,89%, menor que el incremento
acumulado en igual período del año pasado (2,48%). El descenso de la inflación en octubre se
concentró principalmente en alimentos y en segundo lugar en el componente de regulados.
En alimentos, la variación anual se desaceleró de manera importante (139 pb frente al registro de
septiembre) cerrando el mes en 0,7%. El descenso se concentró en los alimentos perecederos, donde
se observaron caídas importantes en los precios de la papa y una gran variedad de otros productos
(tubérculos, hortalizas y frutas). Una buena oferta agrícola junto con pocas alzas en los costos de
producción y de transporte seguirían explicando los pocos aumentos relativos en estos precios en
octubre al igual que en meses anteriores. Otro rubro que presentó un descenso en el mes fue el de
comidas fuera del hogar (de 3,7% a 3,3% anual). Por último, los precios de los bienes procesados
tampoco variaron de manera relevante en el último mes y su variación anual se mantuvo en 0,0%.
En meses recientes los precios internacionales de cereales, aceites y otros alimentos han
descendido, lo que explica en parte las escasas presiones alcistas que se observan en este grupo de
bienes.
La variación anual del IPC sin alimentos en octubre se situó en 2,31%, 5 pb menos que el mes
anterior. Es de destacar el descenso de 17 pb en la variación anual del IPC de regulados en octubre
(1,1%). Esta variable ha presentado disminuciones desde julio explicadas por escasas alzas o caídas
en los precios de los combustibles primordialmente y en menor medida en las tarifas de diversos
servicios públicos. En el caso de los combustibles, las rebajas recientes, que en el último mes fueron
de -3,6% anual, están en parte relacionadas con los pocos aumentos que se han registrado en los
precios internacionales desde hace varios trimestres y sobre todo con las reducciones a partir de
agosto. En cuanto a las tarifas de servicios públicos, en octubre se presentaron ajustes pequeños en
gas y acueducto y reducciones en energía eléctrica. Año corrido, el aumento de estos rubros ha sido
de 2,5%, lo que es bajo comparado con los registros de años anteriores. Esto podría explicarse por
las decisiones de reducción de tarifas de acueducto y aseo en algunas ciudades, por el
comportamiento de los precios internacionales de los combustibles y por la reducción en el IPP
entre otros.
En octubre, la variación anual del IPC de no transables sin alimentos ni regulados se mantuvo casi
inalterada alrededor de 3,7%. La variación anual de arriendos descendió levemente (3 pb) como
viene sucediendo desde comienzos de año, mientras que no se registraron cambios de importancia
en los otros componentes de la canasta. Por otra parte, en el IPC de transables sin alimentos ni
regulados, la variación anual se mantuvo en octubre en 1,3%. En los meses recientes la depreciación
del peso se ha reflejado en una aceleración moderada de este indicador y en aumentos (aunque
leves) en los precios de algunos bienes importados.
La inflación básica disminuyó en octubre nuevamente. El promedio de los cuatro indicadores
monitoreados por el Banco se situó en 2,44% frente al 2,51% del mes anterior. Desde febrero del
año en curso esta medición presenta muy pocas variaciones.
La variación anual del IPP descendió en octubre a -1,9% de -1,3% en septiembre. El componente
local disminuyó frente al mes pasado (56 pb), en un conjunto amplio de bienes. El componente
importado aumentó 0,9% anual, cifra inferior a la registrada el mes pasado (1,6%).
En lo referente a las expectativas de inflación, según la encuesta mensual del Banco a los analistas
del mercado financiero, la inflación esperada a diciembre de este año es 2,2% mientras que la de 12
meses es 2,9%, registros inferiores a los del mes pasado. Por otra parte, las expectativas de inflación
derivadas de la curva de rendimiento de los TES a diferentes plazos se encuentran en niveles
inferiores al 3%. Frente al mes anterior, las derivadas de los papeles de 2 y 3 años disminuyeron,
mientras que las de 5 años subieron.
b. Crecimiento
La última información disponible señala que en el tercer trimestre, algunos rubros de la demanda
interna se estarían expandiendo a una tasa positiva moderada. El consumo de los hogares continúa
dinámico mientras que la inversión en maquinaria y equipo, podría haber presentado un buen
desempeño en el período. Persiste la incertidumbre en relación con la información de construcción
de edificaciones, de obras civiles y el consumo público.
Según la información más reciente reportada por el DANE, entre julio y septiembre el índice de
ventas totales del comercio creció 4,9% en términos anuales, cifra similar a la registrada para el
agregado del segundo trimestre (5,1%). El balance de ventas de la encuesta regional del Banco de la
República (EMEE) también sugiere que la expansión del consumo de los hogares se habría dado a
un buen ritmo durante el tercer trimestre.
Con respecto a la inversión distinta de aquella realizada en construcción de edificaciones y de obras
civiles, tanto el balance de expectativas de inversión de la EMEE, como las expansiones de las
importaciones de bienes de capital en pesos reales sugieren que su comportamiento habría sido algo
mejor que lo registrado en el segundo trimestre de 2013.
Por otra parte, en el mes de septiembre las exportaciones totales en dólares registraron una caída
anual de 1,2%, obedeciendo a las menores ventas externas de bienes de origen minero (-2,4%). Esta
disminución fue compensada levemente por el crecimiento de 10% en las exportaciones agrícolas y
de 0,1% en las exportaciones industriales.
Las importaciones totales (CIF) en dólares aumentaron 10% respecto al mismo mes del año
anterior. Este comportamiento se explica por las mayores compras de bienes de capital (15%) y de
materias primas (13%), ya que las de bienes de consumo cayeron 1,1%.
Por el lado de la oferta, los indicadores más recientes para el tercer trimestre sugieren
comportamientos mixtos. Para el caso de la industria en septiembre la variación anual del IPI sin
trilla de café fue de -1,8%, en línea con lo esperado. Con esto, el tercer trimestre registró una
disminución de 1,9% y el año corrido se ubicó en -2,7%.
Sin embargo, en septiembre las licencias de construcción aumentaron frente al mes anterior (18,9%)
y el crecimiento acumulado doce meses se situó en 10,6% (en junio fue 7,3%). A su vez, la
producción de cemento y los despachos se aceleraron entre el segundo y tercer trimestre: la
producción de cemento pasó de crecer de 0,7% anual en junio a 5,9% en septiembre. Los despachos
pasaron a crecer en el tercer trimestre a una tasa anual de 6,9% frente a 4,3% en el segundo
trimestre.
Es así como se espera que los sectores más dinámicos en el tercer trimestre hubieran sido la
construcción y la agricultura. Otros que podrían haber contribuido de manera importante al
crecimiento serían los servicios financieros, el comercio y la minería. Por el contrario, el sector
industrial (con trilla de café) sería el de menor aporte al crecimiento del producto.
Lo anterior permite continuar conservando un rango de pronóstico para el crecimiento del PIB en el
tercer trimestre entre 3,8% y 5,2%. Hay que señalar que la incertidumbre en la inversión en obras
civiles, el consumo público y de construcción de vivienda sigue siendo alta por falta de
información.
Para el cuarto trimestre aún se dispone de muy poca información. Durante el mes de octubre se
destaca el repunte del índice de confianza del consumidor (ICC) publicado por Fedesarrollo y la
aceleración de las ventas de vehículos. En el primer caso, el ICC se ubicó nuevamente por encima
de su promedio desde 2001, al haberse superado los choques que en el mes de agosto afectaron de
manera importante la percepción y las expectativas de los hogares. Por otra parte, en octubre las
ventas de vehículos se expandieron 10,2% frente al mismo mes del año pasado, lo que significa una
aceleración frente a lo registrado en promedio para el tercer trimestre (-0,6%).
Para el cuarto trimestre, las noticias más favorables provienen de los sectores de agricultura y
energía. En particular, de acuerdo con cifras de la Federación Nacional de Cafeteros, la producción
de café mostró una expansión de 62% en octubre, luego de haber crecido alrededor de 52% durante
el tercer trimestre. Adicionalmente, se destaca el repunte en la variación anual de la demanda de
energía total, la cual pasó de 1,2% en septiembre a 3,5% en octubre.
Para la industria, con información a octubre, la encuesta de opinión empresarial (EOE) de
Fedesarrollo señala una mejoría de los indicadores de confianza, pedidos, existencias y expectativas
a tres meses. Además, la demanda de energía no regulada para la industria, variable que está
altamente correlacionada con el IPI, reportó una expansión de 5,4% en octubre (frente a -0,8% en
septiembre). Lo anterior, podría sugerir un mejor comportamiento para el sector en el siguiente mes
y perspectivas más favorables hacia final de año.
Con todo lo anterior, para todo el año 2013 se mantiene el rango de pronóstico entre 3,5% y 4,5%.
Se debe señalar que el comportamiento de la inversión en obras civiles, de la construcción de
vivienda y del consumo público es una fuente de alta incertidumbre sobre estas proyecciones.
c. Variables Financieras
El crédito bancario (M/N y M/E) en octubre registró una tasa anual de crecimiento de 14,13%,
cercano al promedio observado desde marzo (14,02%). La cartera en moneda nacional se aceleró de
13,18% en septiembre a 13,74% en octubre y la de moneda extranjera se desaceleró de 26,91% a
20,61% en el mismo periodo.
Por destinos, la cartera a los hogares registró un crecimiento anual en octubre de 13,07%, mayor al
del mes anterior (12,81%). Esto fue explicado por el comportamiento del crédito de consumo que
aumentó de 12,37% a 12,61%, como por el hipotecario que aumentó el crecimiento anual de
14,05% en septiembre a 14,37% en octubre. En cuanto a la cartera comercial, la tasa de crecimiento
anual en octubre (14,45%) fue similar a la del mes anterior, explicado por una aceleración en el
componente de moneda nacional (de 13,13% en septiembre a 13,99% en octubre) que compensó la
desaceleración en el componente en moneda extranjera (de 27,02% a 18,85%).
Las tasas de interés de los préstamos desembolsados por los establecimientos de crédito desde el
inicio de los recortes en la tasa de política en julio de 2012, han acumulado reducciones de: -222 pb
para los créditos hipotecarios, -221 pb para los de consumo y -185 pb para los créditos de
construcción.
La magnitud del descenso de las tasas de interés reales ha sido inferior por el efecto de la menor
tasa de inflación, con rebajas durante este mismo período de: -171 para créditos hipotecarios, -167
pb para créditos de consumo y -136 pb para créditos para construcción.
Los niveles de las tasas de interés reales en septiembre de los créditos de consumo, hipotecarios,
preferenciales, comercial ordinario y comercial de tesorería y de construcción se sitúan por debajo
de sus promedios históricos calculados desde 2000. Por el contrario, los créditos otorgados con
tarjeta de crédito se encuentran por encima de su promedio.
d. Contexto Externo
En los últimos meses la actividad económica en las economías desarrolladas ha continuado
recuperándose. En las economías emergentes por su parte, las tasas de crecimiento se han
estabilizado pero en algunos casos en niveles inferiores a sus potenciales.
En Estados Unidos, la información al tercer trimestre muestra que el crecimiento económico se
aceleró y fue superior al esperado. Pese a ello, los datos evidencian una desaceleración en el
consumo y en las exportaciones. El mayor crecimiento fue explicado principalmente por el
incremento de los inventarios, lo que podría afectar el crecimiento del último trimestre del año. Las
cifras para el cuarto trimestre muestran que la actividad real ha seguido expandiéndose. En este
sentido el mayor impacto del cierre del gobierno federal de octubre ha sido sobre la confianza de los
consumidores y no sobre la actividad privada, en tanto, la industria y los indicadores de opinión
empresarial continúan expandiéndose.
En la zona del euro, el crecimiento se mantuvo en terreno positivo en el tercer trimestre. No
obstante, la expansión fue inferior a la observada en el segundo. Tanto en Alemania como en
Francia se observaron menores tasas de crecimiento que el trimestre anterior (en el caso de Francia
hubo una contracción). Se evidencian algunos síntomas de reactivación en algunas de las economías
de la periferia, aunque todavía a un ritmo muy bajo. Por otra parte, los indicadores de confianza,
tanto de empresarios como de consumidores, al igual que los índices de opinión empresarial han
seguido recuperándose en los últimos meses. Pese a ello, la vulnerabilidad de la economía, en
términos de estabilidad financiera y de actividad económica se mantiene.
En las economías emergentes, el crecimiento fue positivo en el tercer trimestre aunque inferior al
observado en los años anteriores. El crecimiento en China estuvo en línea con lo esperado y las
cifras preliminares para el cuarto trimestre muestran alguna estabilidad. Otras economías asiáticas
mantienen un crecimiento inferior al observado en años anteriores.
Por otra parte, en América Latina se evidenció una leve desaceleración de la tasa de crecimiento en
Perú mientras se vio alguna estabilidad en la tasas de crecimiento de Chile; para los dos casos los
últimos datos muestran niveles inferiores a los estimados como potenciales. En Venezuela se
observó una desaceleración.
En relación con los precios internacionales del petróleo, las menores tensiones geopolíticas y el
menor crecimiento esperado de las economías emergentes han permitido un descenso en sus
cotizaciones desde agosto. Sin embargo, en los últimos días ha habido un ligero aumento atribuido a
algunos problemas de orden público en Libia. Para el caso de otros bienes exportados por
Colombia, como el carbón y el níquel, los precios se han mantenido relativamente estables en las
últimas semanas. Por su parte, los precios de los alimentos permanecen por debajo de los niveles
observados en 2012 y en algunos casos se han presentado descensos adicionales en las últimas
semanas.
Por todo lo anterior, la inflación en las principales economías desarrolladas y en un grupo
considerable de emergentes se ha reducido en los últimos meses. Esta situación, junto con un
crecimiento por debajo del potencial, ha incentivado a diversos bancos centrales a reducir sus tasas
de intervención. Los bancos centrales de otras economías con mayores presiones inflacionarias,
como Brasil, India e Indonesia, han aumentado sus tasas en los últimos meses.
Los términos de intercambio del país continúan altos, pero inferiores a los de años anteriores. Hacia
adelante no se espera un alza de los mismos, en un escenario de recuperación pausada de la
economía mundial y de mejores condiciones esperadas de oferta mundial de petróleo.
En relación con los anuncios sobre la política monetaria por parte de la Reserva Federal de los
Estados Unidos, parece que los mercados han incorporado la idea de que el desmonte del programa
de estímulo comenzaría un poco más tarde de lo que anticipaban hace algunos meses. Esta situación
ha generado alguna calma en los mercados financieros, que se ha reflejado en una estabilidad de la
percepción de riesgo de las economías emergentes. Igualmente se ha observado cierta reactivación
de los flujos de capital, lo que ha contribuido a reducir las presiones cambiarias. Sin embargo, la
incertidumbre sobre el comienzo y la velocidad de la normalización de la política monetaria en los
Estados Unidos, así como los efectos que pueda tener en los mercados financieros sigue siendo alta.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
La Junta Directiva tomó en consideración los siguientes aspectos relevantes:
(i) Los resultados de crecimiento mundial para el tercer trimestre muestran una demanda externa
global que se recupera de forma lenta, jalonada principalmente por los países desarrollados. Tanto el
crecimiento en los Estados Unidos como la recuperación de la actividad económica en la zona del
euro resultaron algo mejor a lo proyectado. Las grandes economías emergentes de Asia y de
América Latina crecen de forma heterogénea y en su mayoría presentan ritmos de expansión
inferiores a sus potenciales.
(ii) Las tasas de interés de los bonos del tesoro americano han estado relativamente estables, pero en
niveles superiores a los observados antes de mayo, mes en el que se anunció una posible
disminución del estímulo monetario por parte de la FED. No obstante, la incertidumbre sobre el
comienzo y la velocidad de la normalización de la política monetaria en los Estados Unidos es alta.
(iii) Los términos de intercambio del país continúan altos, pero inferiores a los de años anteriores.
Hacia adelante no se espera un alza de los mismos, en un escenario de recuperación pausada de la
economía mundial y de mejores condiciones esperadas de oferta mundial de petróleo.
(iv) En septiembre la producción industrial sin trilla de café volvió a presentar una caída en
términos anuales. El crecimiento anual de las ventas del comercio al por menor fue bajo, aunque
para el tercer trimestre registró una tasa de aumento similar a la observada en el segundo.
(v) Las cifras a octubre dan cuenta de una recuperación de la confianza de los hogares y de una
mejora en la dinámica de las ventas de bienes durables y en la percepción de ventas de los
comerciantes. El crecimiento de la demanda de energía de la industria aumentó y las encuestas
sugieren un repunte en los despachos y en las expectativas de producción a tres meses del sector
manufacturero.
(vi) Por lo anterior, el equipo técnico no modificó su estimación de crecimiento para el tercer
trimestre (entre 3,8% y 5,4%) ni para todo 2013 (entre 3,5% y 4,5%).
(vii) En octubre el crecimiento del crédito total se desaceleró, aunque continúa siendo superior al
aumento del PIB nominal. La mayoría de tasas de interés nominales de crédito se redujeron en el
mes. En términos reales se mantienen por debajo de sus promedios históricos (exceptuando las de
tarjetas de crédito) e impulsan el crecimiento económico.
(viii) La inflación anual al consumidor presentó un fuerte descenso no esperado, de 2,27% en
septiembre a 1,84% en octubre, explicado principalmente por una caída transitoria en el ritmo de
aumento de los precios de los alimentos.
(ix) Las expectativas de inflación a un año de los analistas económicos, así como las derivadas de
los papeles de deuda pública con plazos menores a cinco años, disminuyeron y se sitúan por debajo
de 3%. En la medida en que los choques de oferta se diluyan y la demanda agregada continúe
impulsada por la política monetaria expansiva es de esperar que las expectativas converjan hacia la
meta de largo plazo.
En resumen, se prevé que el crecimiento económico en 2013 sea similar al observado en el año
anterior. En la medida en que el choque de oferta de alimentos se diluya, la inflación y sus
expectativas deberían volver al rango objetivo y retomar su convergencia hacia la meta de largo
plazo (3%). Las tasas de interés se mantienen en niveles que estimulan el gasto agregado de la
economía.
Los miembros de la Junta coincidieron en la conveniencia de mantener inalterada la tasa de interés
de intervención. Algunos enfatizaron que la información disponible a partir de la reunión de Junta
anterior mostró señales mixtas; con variables que se comportaron mejor a lo esperado y otras por
debajo de las expectativas. Consideraron además que si en el futuro la información disponible
sugiere una consolidación de las expectativas de inflación a la baja, con un crecimiento igual o
menor de lo esperado, podría haber espacio para un impulso monetario aún mayor al actual. Habría
también que tener en cuenta los posibles efectos de una disminución en la compra de activos por
parte de la FED (“tapering”) sobre las variables financieras del país.
Además, otros miembros añadieron que es necesario tener una respuesta simétrica frente a las
desviaciones de la inflación proyectada frente a la meta. Esto significa que es tan poco deseable
superar el techo del rango meta, como estar por debajo del mismo. Finalmente se discutió sobre la
necesidad de evaluar los indicios de que el PIB potencial sea mayor que el estimado, al igual que la
permanencia de éste fenómeno y los efectos que ello tenga lugar en la senda de política, por lo que
podría ser necesario hacer ajustes con el propósito de acelerar la convergencia de la inflación a la
meta y el cierre de la brecha del producto.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva por unanimidad consideró apropiado mantener la tasa de interés de intervención
en 3,25%.
Adicionalmente la Junta ratificó su compromiso con la meta de inflación de largo plazo de 3% y
reitera que las acciones de política monetaria continuarán dirigidas a que la inflación converja a
dicho valor. De esta forma, definió una meta de inflación de 3% para efectos legales en 2014, con
un rango de +/- 1 pp. Una inflación baja y estable es la mejor contribución que puede hacer la
política monetaria al crecimiento sostenible del producto y del empleo.
La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo del comportamiento y proyecciones de la
actividad económica e inflación en el país, de los mercados de activos y de la situación
internacional. Finalmente, reitera que la política monetaria dependerá de la información disponible.
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2013-12-01 |
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Minutas de la reunión de la JDBR del 20 de diciembre de 2013
El 20 de diciembre de 2013 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la
Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito
Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los
Directores doctores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel
Roca, César Vallejo Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo. En las minutas se presenta un resumen de
la situación inflacionaria y del crecimiento económico, y sus perspectivas, elaborada por el equipo
técnico (sección 1) y se reseñan las principales discusiones y opciones de política consideradas por
la Junta Directiva (sección 2).
1. SITUACIÓN INFLACIONARIA Y DE CRECIMIENTO ECONÓMICO
a. Desarrollos recientes de la inflación
En noviembre, la inflación anual al consumidor fue 1,76%, 8 puntos base (pb) menos que en
octubre. Para el año corrido, el dato asciende a 1,67%, menor que el incremento acumulado en igual
período del año pasado (2,34%). El descenso de la inflación en noviembre se explicó
principalmente por el componente de regulados.
En la canasta de alimentos, la variación anual cerró el mes en 0,62%, 4 pb menos que el mes
pasado. El cambio anual en los precios de las comidas fuera del hogar y en el de los alimentos
procesados presentó caídas de 23 pb y 15 pb, respectivamente. Dentro de este segundo grupo, los
precios de los productos de origen importado o de otros producidos en el país pero altamente
transables, se han mantenido sin cambios o incluso han continuado cayendo, en consonancia con los
menores precios internacionales y con las pocas presiones provenientes del tipo de cambio. Por su
parte, los precios de los alimentos perecederos cayeron 2,1%, caída menor a la observada en octubre
(-2,8%).
La variación anual del IPC sin alimentos en noviembre se situó en 2,21%, 10 pb menos que el mes
anterior. Es de destacar el descenso de 62 pb en la variación anual del IPC de regulados (0,5%
anual), que nuevamente es atribuible a los servicios públicos (tarifas de energía eléctrica) y al
descenso en los precios de los combustibles, que en el último mes fue de -3,95% anual. La
depreciación acumulada del peso en lo corrido del año y aumentos leves en los precios de algunos
bienes importados mantienen la variación anual de los precios de los bienes transables sin alimentos
en 1,4%. Por otra parte, los no transables sin alimentos presentaron una variación anual de 3,7%, 6
pb por encima del registro anterior. La variación anual de arriendos, el principal componente del
grupo, se mantuvo en 3,6%.
El promedio de los cuatro indicadores de inflación básica monitoreados por el Banco de la
República se situó en noviembre en 2,46%, 2 pb más que el mes anterior. Este indicador ha
mostrado estabilidad en torno a 2,5% desde febrero de este año.
El IPP cayó en noviembre frente al mismo mes del año anterior 1,3%, caída inferior a la de octubre
(1,9%) El componente local aumentó frente al mes pasado (57 pb). El componente importado
aumentó 1,2% anual, cifra superior a la registrada el mes pasado (0,95%).
En noviembre, las expectativas de inflación continuaron situándose por debajo de la meta de largo
plazo aunque en el rango establecido por la Junta Directiva. La encuesta mensual efectuada a
analistas del mercado financiero muestra una inflación esperada a 12 meses de 2,89%, 3 pb menos
que lo obtenido hace un mes; para diciembre de este año el mercado espera una cifra de 1,86%. Por
su parte, las expectativas derivadas de los TES a horizontes de 2 y 3 años se mantuvieron
relativamente estables ubicándose entre 2,3% y 2,6%. Las de horizontes a 5 años aumentaron un
poco situándose cerca de 2,8%.
b. Crecimiento
Según la información publicada por el DANE, la economía colombiana se expandió 5,1% en
términos anuales durante el tercer trimestre de 2013. Esta cifra, que significó una aceleración
importante frente a los registros de la primera mitad del año, se ubicó en la parte superior del
intervalo de pronóstico presentado en el anterior Informe sobre Inflación (entre 3,8% y 5,2%). En lo
corrido del año a septiembre el crecimiento del PIB (3,9% anual) fue similar a la proyección central
del equipo técnico del Banco de la República.
Durante el trimestre julio – septiembre la demanda interna creció a buen ritmo (6,0% anual). Esto
gracias a un muy buen desempeño de la construcción de edificaciones (26,7% anual) y de obras
civiles (18,2% anual), a una fuerte expansión del consumo público (5,7% anual) y a un crecimiento
del consumo de los hogares (4,0% anual) cercano a su promedio histórico. En lo que respecta a las
cuentas de comercio exterior, las exportaciones se desaceleraron en términos anuales frente al
segundo trimestre (1,9% vs 7,8%) por cuenta de diversos choques de oferta en la producción minera
que afectaron considerablemente las ventas al exterior. En el caso de las importaciones, se
reportaron mayores tasas de crecimiento anual frente al segundo trimestre de 2013 (2,9% vs 1,3%).
Por el lado de la oferta, los sectores que mayor crecimiento anual registraron durante el tercer
trimestre fueron la construcción (21,3%), la agricultura (6,6%) y explotación de minas y canteras
(6,1%). La industria continuó siendo la rama de peor desempeño (-1,0%). Otros sectores como el
comercio y el financiero mantuvieron un ritmo de expansión favorable creciendo a tasas anuales de
4,3% y 4,9% respectivamente.
En el cuarto trimestre de 2013, el consumo de los hogares podría continuar dinámico. Esto se
desprende de indicadores como las ventas al por menor publicadas por el DANE que muestran que
en octubre crecieron a una tasa anual de 6,6% y excluyendo vehículos a 4,5%. Parte de este
crecimiento es explicado por una baja base de comparación el año pasado. La Encuesta Mensual de
Expectativas Económicas (EMEE) del Banco de la República revela igualmente que con datos a
octubre, las expectativas de ventas son mayores que las registradas en promedio para el tercer
trimestre del año. Por otra parte, en noviembre el índice de confianza del consumidor (ICC)
publicado por Fedesarrollo muestra registros similares a los observados en el mes de octubre y
mejoras leves en los indicadores de expectativas. Igualmente el crecimiento de las importaciones de
bienes de consumo (8,4% real) así como la estabilidad del crecimiento anual de la cartera de
consumo (12,7%), apuntan a que el consumo mantenga el dinamismo observado en los últimos
trimestres.
En lo referente a la inversión, la Encuesta Mensual de Expectativas Económicas (EMEE) del Banco
de la República con datos a octubre, sugiere un buen comportamiento de la inversión distinta de
aquella realizada en construcción de edificaciones y de obras civiles en el último trimestre del año.
La información de importaciones de bienes de capital muestra que en el mes de octubre las compras
de ese tipo de bienes continúan en niveles elevados creciendo 5,3% en pesos reales (según
estimaciones del equipo técnico).
Para las exportaciones totales en dólares, la variación anual en octubre fue de -11%. Esta
disminución obedece a la caída conjunta de las ventas externas de bienes mineros (-14,4%),
agrícolas (-7,4%) y del rubro de industriales y otras (-0,4%). Por otra parte, las importaciones
totales en dólares crecieron 2,7% respecto al mismo período del año anterior.
Por el lado de la oferta, los pocos indicadores disponibles muestran que sectores como la minería, el
comercio y la construcción continuarían mostrando crecimientos altos en el cuarto trimestre del año.
El ministerio de Minas y Energía informó que la producción de petróleo en noviembre alcanzó el
millón doce mil barriles diarios (1.012 MBD), lo cual implica un crecimiento de 2,63% respecto a
octubre y de 4,3% frente al mismo mes de 2012. En el caso del comercio, además de los resultados
de la muestra mensual manufacturera del DANE mencionados anteriormente, la encuesta de
FENALCO a noviembre mostró que la percepción de los comerciantes sobre la situación de las
ventas actuales y sobre las expectativas de ventas a 6 meses mantuvo una tendencia ascendente.
Para la construcción, con cifras a octubre, la producción y los despachos de cemento crecieron
anualmente 18,4% y 13,9%, respectivamente.
Para la industria, las cifras publicadas por el DANE para el mes de octubre, reportan un crecimiento
anual negativo aunque cercano a cero (-0,1%). En el año corrido cae 2,4%. El debilitamiento de la
industria continúa, pero a un menor ritmo comparado con meses anteriores (en agosto y septiembre
había caído 3,9% y 1,8%, respectivamente). En noviembre la demanda de energía de la industria
creció 3,1% anualmente y el componente tendencial comenzó a mostrar una pendiente positiva.
Esto tiene una alta correlación con la producción industrial, por lo que su dinámica reciente sugiere
recuperaciones de la industria hacia el cuarto trimestre.
Igualmente, la importación de materias primas en el mes de octubre sugiere que la actividad
productiva se expande al inicio del cuarto trimestre a un buen ritmo. Para ese mes el nivel de esas
importaciones continuó alto, con una tasa de crecimiento de 10,2% en pesos reales (según
estimaciones del equipo técnico).
Con los anteriores resultados, el equipo técnico no modificó el rango estimado de crecimiento para
todo 2013 (entre 3,5% y 4,5%). Esto implica que el crecimiento económico en el segundo semestre
sería considerablemente mayor al observado en el primero. Se debe señalar que el comportamiento
de la inversión en obras civiles, de la construcción de vivienda y del consumo público es una fuente
de alta incertidumbre sobre estas proyecciones.
c. Variables Financieras
El crédito bancario (M/N y M/E) en noviembre registró una tasa anual de crecimiento de 13,30%,
nivel inferior al observado el mes anterior (14,03%). La cartera en moneda nacional se desaceleró
de 13,74% en octubre a 13,48% en noviembre y la de moneda extranjera también lo hizo de 19,35%
a 11,10%.
Por destinos, la cartera a los hogares registró un crecimiento anual en noviembre de 13,51%,
levemente mayor al del mes anterior (13,28%). Esto fue explicado por el comportamiento del
crédito de hipotecario que aumentó entre octubre y noviembre de 14,37% a 14,80%; por su parte el
crédito de consumo se desaceleró ligeramente pasando de crecer a una tasa anual de 12,66% a
12,45% en el mismo periodo. En cuanto a la cartera comercial, la tasa de crecimiento anual en
noviembre (13,32%) fue inferior a la del mes anterior (14,45%), explicado por la moderación en el
componente de moneda nacional (de 13,99% en octubre a 13,65% en noviembre) y por la
desaceleración en el componente en moneda extranjera (de 18,85% a 10,16%). Las tasas de interés
de los préstamos desembolsados por los establecimientos de créditos desde el inicio de los recortes
en la tasa de política en julio de 2012, han acumulado reducciones de: -224 pb para los créditos
hipotecarios, -206 pb para los de consumo y -184 pb para los créditos de construcción.
La magnitud del descenso de las tasas de interés reales ha sido inferior por el efecto de la menor
tasa de inflación, con rebajas durante este mismo período de: -163 pb para créditos hipotecarios, -
141 pb para créditos de consumo y -124 pb para créditos para construcción.
Los niveles de las tasas de interés reales en septiembre de los créditos de consumo, hipotecarios,
preferenciales, comercial ordinario y comercial de tesorería y de construcción se sitúan por debajo
de sus promedios históricos calculados desde 2000. Por el contrario, los créditos otorgados con
tarjeta de crédito se encuentran por encima de su promedio.
d. Contexto Externo
En los últimos meses la actividad global ha seguido recuperándose, principalmente en las
economías avanzadas y en menor medida en algunos países emergentes de Asia. En general, los
indicadores de actividad globales en los sectores de manufacturas y servicios se mantienen en
terreno expansivo y el comercio global presenta síntomas de reactivación.
En los Estados Unidos, las más recientes cifras sobre crecimiento económico muestran que la
economía se expandió en el tercer trimestre del año a una tasa superior a la pronosticada por los
analistas. Con información a noviembre, las ventas al por menor y la producción industrial
sorprendieron al alza y mostraron que la economía seguiría expandiéndose a un ritmo modesto en el
último trimestre del año. De igual forma, las cifras de empleo para este mismo mes fueron
alentadoras y presentaron un ritmo de contratación favorable. Por otra parte, es de anotar que
recientemente el Congreso de los Estados Unidos aprobó un plan que evitaría la implementación de
ciertos recortes automáticos en 2014 y 2015 y que daría algún alivio a las discusiones fiscales en los
próximos años. Así en los siguientes trimestres la economía enfrentaría un menor retroceso por el
lado fiscal y quizás alguna menor incertidumbre proveniente de este frente.
En la zona del euro, con cifras a noviembre, los indicadores de confianza empresarial y los de
actividad en los sectores de manufacturas y servicios muestran señales de una expansión de la
economía a un ritmo modesto. Igualmente se evidencia alguna divergencia en las cifras de actividad
real en los países de la región. En particular mientras Alemania se expande a un ritmo favorable, en
Francia se percibe algún debilitamiento de la actividad real. A pesar de la mejoría de los indicadores
de confianza, las ventas al por menor siguen deprimidas, el mercado laboral presenta altas tasas de
desempleo, la fragmentación financiera continúa y el crédito no muestra señales favorables. En este
sentido, la región sigue siendo vulnerable a choques tanto internos como externos.
Para el caso de las economías emergentes, en China la actividad real continúa expandiéndose a un
ritmo favorable aunque inferior al observado en los últimos 5 años. Con información a noviembre el
comportamiento de las ventas al por menor, de las exportaciones y de la producción fue mejor que
lo esperado. Por su parte, en América Latina, la actividad real ha seguido desacelerándose en Chile,
mientras que en Brasil se expande a un rimo modesto.
En relación con los precios internacionales del petróleo, éstos se han mantenido en niveles
relativamente altos frente a lo observado en la primera mitad del año, lo que ha estado un poco por
encima de lo esperado. Para el caso de las cotizaciones externas del carbón y del níquel se ha
observado alguna estabilidad. Los precios del café han seguido cayendo. Por su parte, los precios
externos de los alimentos continuaron en niveles relativamente bajos, con algunos repuntes
menores.
En este contexto, la inflación en las principales economías desarrolladas continuó en niveles bajos,
que junto a una actividad económica que crece por debajo de su potencial, explica la postura
monetaria de sus bancos centrales. En el caso de las economías emergentes la situación es más
heterogénea, pues mientras algunos países como Colombia, Taiwán y Corea presentan inflaciones
bajas y decrecientes; otros, como Brasil, India e Indonesia, evidencian mayores incrementos en sus
niveles de precios.
Los términos de intercambio bajaron en octubre pero continúan en niveles altos. No se espera un
alza de términos de intercambio, en un escenario de recuperación pausada de la economía global y
de mejores condiciones esperadas de oferta mundial de petróleo.
Finalmente, la Reserva Federal de los Estados Unidos (FED) en su reunión del 17-18 de diciembre
decidió reducir sus compras de activos financieros en 10 mil millones de USD comenzando en
enero de 2014. De esta forma, la FED compraría 40 mil millones en bonos del tesoro y 35 mil
millones en MBS. La evolución favorable del mercado laboral y de otras variables económicas y
financieras motivaron esta decisión. El forward guidance sobre las condiciones bajo las cuales la
tasa de fondos federales subiría, se modificó afirmando que esta tasa se mantendría en niveles bajos
más allá del momento en que la tasa de desempleo se ubique por debajo de 6,5%, especialmente si
las proyecciones de inflación continúan por debajo de la meta de largo plazo (2%). La FED insistió
en que la postura de la política monetaria sigue dependiendo de la evolución de la economía, en
particular del mercado laboral y de la inflación. En relación con las proyecciones de crecimiento y
de tasa de desempleo se presentaron algunas mejoras para 2013 y 2014.
Hasta el momento, la reacción de algunos indicadores del mercado no ha sido muy fuerte ante el
anuncio. Las tasas de interés de los títulos de deuda pública de los Estados Unidos, el VIX y la
cotización del dólar frente a las principales monedas no han presentado cambios significativos en
sus niveles. Similar conclusión se puede derivar de los indicadores financieros en los mercados
emergentes: las primas de riesgo, el precio del dólar en moneda local y las tasas de interés de los
títulos de deuda pública no han variado sustancialmente.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
La Junta Directiva tomó en consideración los siguientes aspectos relevantes:
(i) La nueva información sugiere que la economía mundial se recupera de forma lenta y algo mejor
a lo previsto. En los Estados Unidos el crecimiento del PIB del tercer trimestre fue revisado al alza
y las cifras a noviembre siguen mostrando recuperación aunque a una tasa modesta. La zona del
euro probablemente está creciendo de nuevo y las grandes economías emergentes de Asia y de
América Latina crecen de forma heterogénea.
(ii) En los Estados Unidos la Reserva Federal anunció que en el mes de enero comprará un monto
inferior de activos financieros y ratificó su compromiso de mantener el actual nivel de tasa de
interés por un periodo prolongado.
(iii) Los términos de intercambio bajaron en octubre pero continúan en niveles altos. No se espera
un alza de términos de intercambio, en un escenario de recuperación pausada de la economía global
y de mejores condiciones esperadas de oferta mundial de petróleo.
(iv) En Colombia, el crecimiento económico del tercer trimestre fue superior al estimado, debido
principalmente al dinamismo de la construcción. El gasto público se aceleró y el consumo de los
hogares creció a buen ritmo. Las exportaciones tuvieron un crecimiento bajo e inferior al de las
importaciones. En lo corrido del año a septiembre el crecimiento del PIB (3,9%) fue similar a lo
proyectado por el equipo técnico del Banco de la República.
(v) Para el cuarto trimestre de 2013, los indicadores de confianza del consumidor, de expectativas
económicas, de comercio al por menor y de ventas de automóviles, sugieren que el consumo de los
hogares crece a buen ritmo. La aceleración en el crédito hipotecario también indica una dinámica
favorable en la inversión en edificaciones. Por el lado de la oferta, en octubre la industria sin trilla
de café volvió a descender (-0,1%) aunque a un menor ritmo que el registrado un mes atrás.
(vi) Con los anteriores resultados, el equipo técnico no modificó el rango estimado de crecimiento
para todo 2013 (entre 3,5% y 4,5%), el cual contiene 4,1% como cifra más probable. Esto significa
que el crecimiento económico en el segundo semestre será considerablemente mayor al observado
en el primero. (vii) En noviembre el crecimiento del crédito total se desaceleró, aunque continúa
siendo superior al aumento del PIB nominal. La mayoría de tasas de interés nominales de crédito se
redujeron en el mes. En términos reales se mantienen por debajo de sus promedios históricos
(exceptuando las de tarjetas de crédito) e impulsan el crecimiento económico.
(viii) La inflación anual al consumidor en noviembre se situó en 1,76%, cifra inferior a la esperada.
Este hecho fue explicado principalmente por una desaceleración en la variación anual de los precios
de los regulados y de los alimentos. El promedio de inflaciones básicas se mantuvo estable en
2,46%.
(ix) Las expectativas de inflación a un año de los analistas económicos, así como las derivadas de
los papeles de deuda pública con plazos menores a cinco años se mantuvieron relativamente
estables y se sitúan por debajo de 3%.
En resumen, se prevé que el crecimiento económico en 2013 sea similar al observado en el año
anterior. Las tasas de interés se mantienen en niveles que estimulan el gasto agregado de la
economía. Hecha la evaluación del balance de riesgos, la Junta Directiva consideró apropiado
mantener inalterada la tasa de interés de referencia.
Los miembros de la Junta coincidieron en la conveniencia de mantener inalterada la tasa de interés
de intervención. Algunos enfatizaron la información reciente sobre la dinámica de la demanda
interna y el crecimiento del producto y el hecho de que la actual postura monetaria es expansiva y
las expectativas de inflación a doce meses se encuentran ancladas a niveles cercanos a la meta.
Además, que el bajo nivel de inflación obedece fundamentalmente a choques de oferta con algunos
componentes transitorios.
Otro codirector expresó que la información contenida en el informe indica un buen comportamiento
tanto de la oferta como de la demanda agregada. Por el lado de la oferta, el comportamiento de la
producción, los precios, el empleo y los salarios muestra un buen crecimiento del PIB potencial que
muy probablemente se mantendrá en el horizonte de política, gracias a las altas tasas de inversión y
a los efectos de las reducciones en los impuestos a la nómina sobre el mercado laboral. Desde el
punto de vista de la demanda agregada, la información reciente muestra un incremento en el
dinamismo tanto público como privado, lo que aumenta la probabilidad de que, con la actual
postura de política monetaria, se vayan cerrando paulatinamente las brechas de producto e inflación.
Adicionalmente, otro miembro consideró que el hecho de que la tasa de crecimiento del PIB esté
aumentando en tanto que la tasa de inflación está por debajo de la meta y cayendo, arroja indicios
de que el PIB potencial puede ser mayor al estimado, la NAIRU inferior, y la brecha del producto
más negativa que lo indicado por los índices que hasta ahora se vienen calculando. Por tanto, lo
apropiado es asumir y comunicar el compromiso de mantener inalterada la tasa de interés por un
período prolongado, al menos hasta la mitad del próximo año, o aún más allá, hasta que sea
evidente la convergencia de la inflación hacia la meta y el cierre de la brecha del producto.
Finalmente, otros miembros añadieron que considerando que el nivel actual de inflación ha estado
por debajo de la meta durante varios meses es necesario evaluar la coherencia de la tasa de política
monetaria ante los indicios de que el PIB potencial sea mayor que el estimado. Por lo anterior,
podría llegar a ser necesario hacer ajustes con el propósito de acelerar la convergencia de la
inflación a la meta y el cierre de la brecha del producto.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva por unanimidad consideró apropiado mantener la tasa de interés de intervención
en 3,25%.
La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo del comportamiento y proyecciones de la
actividad económica e inflación en el país, de los mercados de activos y de la situación
internacional.
Finalmente, reitera que la política monetaria dependerá de la información disponible.
Bogotá DC, enero 03 de 2014.
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2014-01-01 |
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Minutas de la reunión de la JDBR del 31 de enero de 2014
El 31 de enero de 2014 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta
Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público,
Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores
doctores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca, César
Vallejo Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo. En las minutas se presenta un resumen de la situación
inflacionaria y del crecimiento económico, y sus perspectivas, elaborada por el equipo técnico
(sección 1) y se reseñan las principales discusiones y opciones de política consideradas por la Junta
Directiva (sección 2).
1. SITUACIÓN INFLACIONARIA Y DE CRECIMIENTO ECONÓMICO
a. Desarrollos recientes de la inflación
En diciembre, la inflación anual al consumidor (1,94%) registró una aceleración de 18 puntos base
(pb) frente al registro de noviembre. Este aumento se concentró en los índices de regulados y de
alimentos. De esta manera, la inflación al consumidor en 2013 fue 50 pb menos que lo registrado
durante 2012.
En la canasta de alimentos, la variación anual cerró el mes en 0,86%, 24 pb más que noviembre. En
términos de variaciones anuales, la aceleración se concentró en los alimentos primarios (de -2,09%
a -0,16%). De la misma manera, en diciembre se presentó una aceleración moderada en comidas
fuera del hogar (de 3,08% a 3,26%) mientras que en alimentos procesados se observó una ligera
desaceleración frente al mes anterior (de -0,10% a -0,24%).
La variación anual del IPC sin alimentos en diciembre se situó en 2,36%, 15 pb más que el mes
anterior. Es de destacar el aumento de 60 pb en la variación anual del IPC de regulados (1,05%
anual), atribuible principalmente a los servicios públicos (tarifas de energía eléctrica). En los otros
rubros de la sub canasta, los cambios que se dieron en la variación anual fueron menores. La de
combustibles terminó en el año en terreno negativo (-3,2%).
Las otras subcanastas del IPC sin alimentos, transables y no transables no presentaron cambios de
importancia. En el primer caso, la variación anual en diciembre mantuvo el nivel del mes pasado
(1,4%). Los precios de esta canasta se vienen acelerando desde niveles muy bajos a lo largo del año
siguiendo la depreciación de la tasa de cambio. Por otra parte, los no transables presentaron una
variación anual de 3,76%, 3 pb por encima del registro anterior. La variación de los precios de esta
canasta ha permanecido estable en los últimos meses lo que sugiere que las presiones originadas en
la demanda continúan siendo moderadas.
El promedio de los cuatro indicadores de inflación básica monitoreados por el Banco de la
República se situó en diciembre en 2,51%, 5 pb más que el mes anterior. Esta medición ha
presentado pocos cambios después del descenso de comienzos de año, fluctuando alrededor de
2,5%.
La variación anual del IPP aumentó en diciembre a -0,5% de -1,3% en noviembre. Tanto el
componente local como el componente importado aumentaron frente al mes pasado. (En el primer
caso el aumento fue de 90 pb mientras que para el segundo fue de 55 pb).
Las expectativas de inflación a diferentes horizontes no presentaron cambios importantes en el
último mes. Según la encuesta mensual del Banco de la República efectuada a analistas del mercado
financiero, la inflación esperada a doce meses es de 2,85%, solo 4 pb menos que la obtenida el mes
pasado. En esta misma encuesta, la inflación prevista para diciembre de 2014 es de 2,80%. Por su
parte, la encuesta trimestral del Banco efectuada a empresarios muestra unas expectativas de
inflación a doce meses de 2,7%, un poco menos que la medición de octubre (2,9%). Finalmente, las
expectativas obtenidas de la curva de TES a 2, 3 y 5 años aumentaron un poco en lo corrido de
enero, para converger al 3,0%.
b. Crecimiento
Los indicadores disponibles para el último trimestre de 2013 sugieren que el PIB se habría
expandido a una tasa por debajo de la registrada para el tercer trimestre. Sin embargo, es de esperar
que esta se ubique por encima del promedio de la primera mitad del año.
En lo que respecta el consumo privado, se espera que este crezca a una tasa similar a la del trimestre
anterior. Esto se desprende del comportamiento de las ventas al por menor de la Muestra Mensual
de Comercio al por Menor (MMCM) que muestran que en noviembre crecieron anualmente 5,3%
(5,9% para el bimestre octubre-noviembre), cifra mayor que la registrada para el tercer trimestre
(4,9%). Al descontar el segmento de ventas de vehículos y automotores, las ventas minoristas
crecieron 8,7% (6,7% en el bimestre), lo que significó una aceleración frente a lo registrado para el
tercer trimestre (4,0%). En línea con lo anterior, el balance de ventas de la Encuesta Mensual de
Expectativas Económicas del Banco de la República (EMEE) muestra que durante octubre y
noviembre los comerciantes percibieron una demanda ligeramente mayor que la observada durante
el tercer trimestre. Por su parte, el índice de confianza del consumidor a diciembre no mostró
variaciones importantes con respecto a los niveles de noviembre y octubre. De igual manera, el
buen desempeño del mercado laboral así como la estabilidad en la tasa de crecimiento de la cartera
de los hogares apuntan a que el consumo de los hogares mantenga la dinámica observada en el
tercer trimestre.
En lo referente a la inversión, de acuerdo al balance de expectativas de inversión de la Encuesta
Mensual de Expectativas Económicas del Banco de la República (EMEE), la formación bruta de
capital sin inversión en obras civiles ni construcción habría crecido a tasas importantes y mayores
en el cuarto trimestre que las observadas en el tercero. Las cifras de importación de bienes de
capital para la industria en términos reales confirman esto. La inversión en equipo de transporte
seguiría cayendo en términos anuales, aunque a un ritmo cada vez menor. Para la inversión en obras
civiles se supone que se mantendrían los altos niveles observados en el tercer trimestre. Lo mismo
se puede esperar de la inversión en construcción.
En materia de comercio exterior, en noviembre, la variación anual de las exportaciones totales fue
de 2,6%. Este crecimiento es el resultado de mayores exportaciones de bienes mineros (5,7%) y
agrícolas (1%). El aumento de las exportaciones mineras se explica por el incremento de las ventas
externas de crudo (15,9%) y derivados (15,2%). Del lado de las exportaciones agrícolas solo se
registró crecimiento en café (21,1%). Las exportaciones de bienes industriales y otros disminuyeron
6,1%, en gran medida por las caídas en los rubros de resto de industriales (-27,9%), resto de
agrícolas (-56%) y vehículos (-19,6%).
Por su parte, las importaciones totales en noviembre registraron un retroceso de 1,8% respecto al
mismo mes del año anterior. Dicho comportamiento se explica por la disminución en las
importaciones de bienes de capital (-6,8%) y de bienes de consumo (-3%), compensadas
parcialmente por el aumento de las importaciones de materias primas (3,3%).
Por el lado de la oferta, los indicadores disponibles para la industria muestran que el estancamiento
del sector no ha sido superado aún. La variación anual del IPI sin trilla de café para el mes de
noviembre fue de -0,6%. El componente tendencial se aplanó nuevamente. Adicionalmente, de
acuerdo con Fedesarrollo la confianza industrial disminuyó en noviembre. El indicador de pedidos
registró una caída, mientras que el indicador de existencias (contra-cíclico a la producción) no
reportó cambios. Sin embargo, en este caso el componte tendencial continúa mostrando un
comportamiento favorable para las dos variables. Por su parte, las expectativas de la producción a
tres meses disminuyeron significativamente. En contraste, la demanda de energía no regulada
industrial, la cual tiene una alta correlación con el IPI, creció en diciembre a una tasa anual de 6,4%.
En el caso del comercio, en la encuesta de Fedesarrollo para noviembre los empresarios señalaron
algunas mejorías, tanto en su percepción de la situación actual del negocio como de su situación
futura.
Algunas cifras asociadas con la minería, en particular con el petróleo, continuaron mostrando
crecimiento en el cuarto trimestre de 2013, aunque a un menor ritmo frente al tercero. De acuerdo
con la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), la producción de petróleo en diciembre se ubicó
en un millón catorce mil barriles diarios. Durante el cuarto trimestre, se produjo un millón cuatro
mil barriles diarios en promedio, con lo cual se registró una desaceleración (a 3,3% desde el 8,8%
del tercer trimestre).
Todo lo anterior permite fijar el rango de pronóstico de crecimiento anual del PIB para el cuarto
trimestre entre 4,0% y 5,0%, con una tasa más probable de 4,5%. De esta manera, el rango de
pronóstico para el crecimiento de la economía en 2013 se ubicaría entre 3,7% y 4,3%. Se debe
señalar que el comportamiento de la inversión en obras civiles, de la construcción y del consumo
público es una fuente de alta incertidumbre sobre estas proyecciones.
La situación para 2014 es aún incierta, pero se calcula que el PIB se expandiría a tasas similares a
las registradas para todo 2013. Dentro de los factores que mantendría la dinámica del crecimiento
en Colombia están i) un mayor dinamismo de la demanda externa y de los socios comerciales, ii) un
flujo de IED que seguirá siendo favorable, iii) una política monetaria que seguiría teniendo efectos
expansivos sobre la actividad real, iv) una inflación baja que favorecería el poder adquisitivo del
ingreso de los hogares, y v) un mercado laboral que seguiría mostrando un dinamismo importante.
Por otro lado, se esperan niveles favorables de los términos de intercambio, aunque por debajo de lo
observado en 2013. En materia de inversión en obras civiles y construcción de edificaciones se
supone una expansión menor que la del año pasado, pero todavía significativa.
Lo anterior permitiría fijar un rango de pronóstico para la expansión del PIB en 2014 entre 3,3% y
5,3%, con 4,3% como cifra más probable.
c. Variables Financieras
El crédito bancario (M/N y M/E) en diciembre registró una tasa anual de crecimiento de 12,19%,
nivel inferior al observado el mes anterior (13,30%). La cartera en moneda nacional se desaceleró
de 13,48% en noviembre a 12,91% en diciembre y la de moneda extranjera también lo hizo de
11,10% a 1,65%.
Por destinos, la cartera a los hogares registró un crecimiento anual en diciembre de 13,16%,
levemente inferior al del mes anterior (13,51%). Esto fue explicado por el comportamiento del
crédito de consumo que disminuyó entre noviembre y diciembre de 12,45% a 11,95%; por su parte
el crédito para adquisición de vivienda se aceleró ligeramente pasando de crecer a una tasa anual de
14,80% a 15,37% en el mismo periodo. En cuanto a la cartera comercial, la tasa de crecimiento
anual en diciembre (11,55%) fue inferior a la del mes anterior (13,32%), explicado por la
moderación en el componente de moneda nacional (de 13,65% en noviembre a 12,76% en
diciembre) y por la desaceleración en el componente en moneda extranjera (de 10,16% a 1,30%).
Las tasas de interés de los préstamos desembolsados por los establecimientos de créditos desde el
inicio de los recortes en la tasa de política en julio de 2012, han acumulado reducciones de: -226 pb
para los créditos hipotecarios, -203 pb para los de consumo y -215 pb para los créditos de
construcción.
La magnitud del descenso de las tasas de interés reales ha sido inferior por el efecto de la menor
tasa de inflación, con rebajas durante este mismo período de: -181pb para créditos hipotecarios, -
156 pb para créditos de consumo y -170 pb para créditos para construcción.
Los niveles de las tasas de interés reales en septiembre de los créditos de consumo, hipotecarios,
preferenciales, comercial ordinario y comercial de tesorería y de construcción se sitúan por debajo
de sus promedios históricos calculados desde 2000. Por el contrario, los créditos otorgados con
tarjeta de crédito se encuentran por encima de su promedio.
d. Contexto Externo
Durante el cuarto trimestre de 2013 la actividad económica global continuó recuperándose gracias
al mayor dinamismo de las economías desarrolladas, con los Estados Unidos a la cabeza. Las
grandes economías emergentes de Asia y América Latina crecen de forma heterogénea con tasas
inferiores o cercanas a las potenciales. Durante el mismo periodo, a nivel global los índices de
actividad manufacturera y de comercio tuvieron un comportamiento favorable.
En los Estados Unidos, la confianza de los consumidores se ha recuperado tras las caídas
producidas por la incertidumbre fiscal de meses anteriores. De igual forma, con información a
diciembre, los indicadores sobre industria y ventas al por menor tuvieron un comportamiento
favorable. En relación con el mercado laboral, la tasa de desempleo siguió cayendo; sin embargo el
ritmo de creación de empleo se ha desacelerado, lo que hace presumir que la tasa de participación
también se ha reducido. Los indicadores del mercado de vivienda evidenciaron un mejor
comportamiento en los últimos meses, después de la desaceleración observada en el tercer trimestre.
En relación con la política fiscal, en los dos últimos meses se llegó a importantes acuerdos en el
frente fiscal que reducen la incertidumbre en el mediano plazo, al igual que parte del impacto
contractivo del ajuste en las finanzas públicas. En las próximas semanas se deberá nuevamente
discutir en el congreso el límite de endeudamiento del gobierno, pero se espera que dicha
negociación se haga en esta ocasión con menos sobresaltos que los observados en los episodios
anteriores, por lo que no debería afectar de manera significativa la confianza.
Por su parte, en la zona del euro las cifras sobre actividad real para el cuarto trimestre muestran que
la recuperación se habría mantenido en las últimas semanas del año. En este sentido, las ventas al
por menor y la industria repuntaron levemente en los últimos meses. De igual forma, los índices de
opinión empresarial en los sectores de manufacturas y servicios permanecieron en terreno positivo,
mientras que la confianza de empresarios y consumidores mostró señales favorables. A pesar de los
síntomas alentadores en la economía europea, es importante notar que la vulnerabilidad de la región
se mantiene, en la medida en que la tasa de desempleo permanece en máximos históricos (en
particular en las economías de la periferia), los mercados financieros continúan fragmentados y el
crédito sigue contrayéndose (aunque a un menor ritmo).
En relación con las economías emergentes, el crecimiento en China se aceleró en la segunda mitad
del año debido al mayor dinamismo de la inversión. Esta economía tuvo en 2013 una tasa de
crecimiento de 7,7% (igual a la de 2012). Para el caso de los países de América Latina, las cifras
para el cuarto trimestre evidencian que la actividad real se debilitó en Brasil y Chile, mientras que
en Perú mantuvo su ritmo de crecimiento; para el caso de México se observó alguna recuperación.
En relación con los precios internacionales de los bienes básicos exportados por Colombia, durante
el cuarto trimestre los precios internacionales del petróleo, del carbón y del níquel permanecieron
relativamente estables, mientras que los del café continuaron mostrando una tendencia decreciente.
Los precios de los alimentos no presentaron cambios significativos en los últimos meses del año y
permanecieron en niveles inferiores a los observados en 2012. En este contexto, los términos de
intercambio del país se mantuvieron por debajo de los niveles alcanzados en 2011 y 2012.
En relación con la inflación, la variación en el nivel general de precios en las principales economías
desarrolladas se situó por debajo de las metas de largo plazo fijadas por sus bancos centrales. En el
caso particular de la zona del euro, la inflación total y básica llevan varios trimestres reduciéndose y
en diciembre se ubicaron por debajo del 1%. En contraste, los precios siguieron aumentando en
Japón. En las economías emergentes, el panorama inflacionario continuó siendo desigual; así,
mientras en países como Chile, Colombia y Perú, la inflación fue relativamente baja; otras
economías, como Brasil, India e Indonesia, siguieron presentando presiones alcistas.
En el cuarto trimestre del año la percepción de riesgo hacia las economías de América Latina se
mantuvo relativamente estable, aunque en un nivel mayor que el observado en la primera mitad del
año. Una excepción fue Brasil, en donde la debilidad económica y la caída de la confianza afectaron
las expectativas de crecimiento para los próximos trimestres, por lo que se vio un mayor aumento
en las primas de riesgo.
No obstante, en la última semana en las economías emergentes se ha observado una marcada
depreciación de las monedas frente al dólar y desvalorizaciones en sus mercados accionarios y de
deuda pública. La continuación del desmonte del estímulo monetario por parte de la FED en
momentos en que se hacen evidentes menores perspectivas de crecimiento en algunas economías,
parecen ser las causas del aumento de la percepción de riesgo. Las presiones han sido mayores en
aquellos países con fundamentales de crecimiento más débiles: alta inflación, amplios déficits en
cuenta corriente, reservas internacionales decrecientes, y alta dependencia de los flujos de capital de
corto plazo. En este contexto, algunos bancos centrales como los de Brasil, Turquía, India y
Sudáfrica incrementaron sus tasas de interés con el fin de aliviar las presiones cambiarias.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
La Junta Directiva tomó en consideración los siguientes aspectos relevantes:
(i) En el cuarto trimestre de 2013 la actividad económica mundial continuó recuperándose gracias al
mayor dinamismo de las economías desarrolladas, en especial de Estados Unidos. En la zona del
euro los indicadores económicos sugieren un crecimiento trimestral bajo pero positivo. Las grandes
economías emergentes de Asia y América Latina crecen de forma heterogénea con tasas cercanas o
inferiores a las potenciales. Para 2014, las estimaciones sugieren que la recuperación global
continuaría y que los socios comerciales del país tendrían un crecimiento promedio superior al
registrado en 2013.
(ii) La Reserva Federal de los Estados Unidos anunció que en febrero reducirá de nuevo el monto
de compras de activos financieros y ratificó su compromiso de mantener el actual nivel de tasa de
interés por un periodo prolongado. De esta forma, en la medida que los niveles de liquidez
continúen siendo menos expansivos, el costo de financiación internacional puede aumentar.
(iii) La mejora en las perspectivas de la economía de los Estados Unidos y sus implicaciones de
política monetaria en ese país están afectando los mercados de bonos, acciones y monedas. El peso
colombiano se ha devaluado frente al dólar. Por su parte, el precio internacional del petróleo
continúa en niveles altos y los del carbón, níquel y café dejaron de descender. Con ello, es probable
que los términos de intercambio se mantengan en niveles favorables.
(iv) Para el cuarto trimestre de 2013, el equipo técnico proyecta un crecimiento económico entre 4%
y 5%, con 4,5% como cifra más probable. El consumo de los hogares crecería a tasas similares a la
de su promedio histórico. El mayor aumento lo presentaría la inversión. Las exportaciones se
acelerarían pero con una dinámica inferior al de las importaciones. Por el lado de la oferta, los
mayores crecimientos se presentarían en la construcción (edificaciones y obras civiles) y la
agricultura. El sector minero se desaceleraría y el crecimiento de la industria (que incluye trilla de
café) sería casi nulo. Con esta información se calcula que la economía colombiana creció en 2013
entre 3,7% y 4,3%.
(v) Para el año 2014 se proyecta un crecimiento económico entre 3,3% y 5,3%, con 4,3% como
cifra más probable.
(vi) En diciembre el crecimiento del crédito total se desaceleró, aunque continúa siendo superior al
aumento del PIB nominal. Las tasas de interés nominales de crédito se redujeron y las de consumo e
hipotecarias permanecieron relativamente estables. En términos reales se mantienen por debajo de
sus promedios históricos (exceptuando las de tarjetas de crédito) e impulsan el crecimiento
económico.
(vii) La inflación anual en diciembre fue de 1,94%, cifra similar a la proyectada y por debajo del
límite inferior del rango meta establecido para 2013 (3% ± 1 pp.). El promedio de las medidas de
inflación básica se situó en 2,5% y las expectativas de inflación a un año de los analistas
económicos, así como las derivadas de los papeles de deuda pública con plazos menores a cinco
años, son cercanas al 3%.
Los miembros de la Junta Directiva consideraron que hay claros indicios de que la brecha del
producto y la actual desviación de la inflación observada frente a la meta (brecha de inflación) se
irán cerrando a lo largo de 2014. Sobre la magnitud, la velocidad del cierre de estas brechas y su
relación con la actual brecha de inflación, persisten diferencias entre los miembros de la Junta.
Asimismo, destacaron la incertidumbre existente sobre el efecto en la economía colombiana que
pueda tener la normalización de la política monetaria de los Estados Unidos, directamente y a través
de su impacto en otras economías emergentes.
Finalmente, la junta recalcó el buen funcionamiento del marco de política monetaria, compuesto por
el esquema de inflación objetivo y la flotación cambiaria, para afrontar los choques externos. Así, la
brecha presente entre la inflación observada y la meta del Banco, el débil traspaso de la
depreciación nominal al nivel de precios al consumidor, y un bajo nivel de descalces cambiarios en
la economía, permiten que el tipo de cambio absorba los efectos de la coyuntura internacional, sin
generar traumatismos a la economía colombiana y sin poner en riesgo el cumplimiento de la meta
de inflación.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva por unanimidad consideró apropiado mantener la tasa de interés de intervención
en 3,25%.
La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo del comportamiento y proyecciones de la
actividad económica e inflación en el país, de los mercados de activos y de la situación
internacional. Finalmente, reitera que la política monetaria dependerá de la información disponible.
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2014-02-01 | -
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 28
de febrero de 2014
El 28 de febrero de 2014 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la
Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito
Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los
Directores doctores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel
Roca, César Vallejo Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo. En las minutas se presenta un resumen de
la situación inflacionaria y del crecimiento económico, y sus perspectivas, elaborada por el equipo
técnico (sección 1) y se reseñan las principales discusiones y opciones de política consideradas por
la Junta Directiva (sección 2).
1. SITUACIÓN INFLACIONARIA Y DE CRECIMIENTO ECONÓMICO
a. Desarrollos recientes de la inflación
En enero, la inflación anual al consumidor (2,13%) registró una aceleración de 19 puntos base (pb)
frente al registro de diciembre. Se observó un aumento tanto en la variación anual de los precios de
los alimentos (1,2% anual) como en los de la canasta de sin alimentos (2,5% anual).
En la canasta de alimentos, la variación anual cerró el mes en 1,20%, 34 pb más que diciembre. La
aceleración se concentró en los precios de los alimentos perecederos (de -0,2% a 2,1% anual). Por
otra parte, el ajuste en los precios de los alimentos procesados (-0,2% anual) continuó en terreno
negativo sin mayores cambios, mientras que el componente de comidas fuera del hogar se mantuvo
estable (3,3% anual).
Dentro del IPC sin alimentos, las principales presiones al alza se originaron en el grupo de
regulados y en el de transables. En regulados (1,7% anual) se registró un aumento de 61 pb en la
variación anual frente al mes anterior. Sobresale el aumento en el precio de los combustibles en
enero, después de 5 meses consecutivos de ajustes negativos; igualmente se dio un mayor ajuste en
los precios de transporte público explicado por los cambios en las tarifas de Bogotá. Por su parte, la
variación anual del IPC de transables sin alimentos ni regulados pasó de 1,4% en diciembre a 1,6%
enero lo que podría explicarse por el comportamiento reciente del tipo de cambio.
En enero se presentó un descenso de 15 pb en la variación anual del IPC de no transables sin
alimentos ni regulados (3,6% anual), siendo este el nivel más bajo desde junio de 2012. El
comportamiento de este indicador sugeriría escasas presiones de demanda sobre los precios al
consumidor a comienzos de año. En el caso de arriendos, la variación anual siguió cayendo muy
lentamente y se situó en 3,5%.
El promedio de los cuatro indicadores de inflación básica monitoreados por el Banco de la
República se situó en enero en 2,55%, 5 pb más que el mes anterior. Esta medición ha presentado
pocos cambios desde comienzos de 2013 fluctuando alrededor de 2,5%.
La variación anual del IPP aumentó 72 pb en enero y se situó en terreno positivo (0,2%) por primera
vez desde septiembre de 2012. En buena parte este cambio en las tendencias se podría relacionar
con la depreciación del peso y se da principalmente en el IPP importado (la variación anual aumentó
121 pb en enero frente a diciembre), aunque también en el IPP de producidos y consumidos se
observó una aceleración (la variación anual aumentó 61 pb durante el último mes).
En enero las diferentes medidas de expectativas de inflación se mantuvieron cerca de 3,0%. La cifra
derivada de la encuesta mensual efectuada a los analistas de las entidades financieras se situó en
2,9% para un horizonte a doce meses y en 2,8% para diciembre de 2014. Las expectativas derivadas
de la curva de rendimientos de los TES a 2, 3 y 5 años aumentaron en enero y en lo corrido de
febrero (en promedio) y se situaron alrededor de 3,0%.
b. Crecimiento
La información reciente para el último trimestre de 2013 indica que la actividad real se habría
expandido a una tasa por debajo de la registrada para el tercer trimestre. Sin embargo, es de esperar
que ésta se ubique por encima del promedio de la primera mitad del año. Por su parte, los
indicadores de coyuntura disponibles para enero 2014, aunque todavía muy escasos, sugieren que
ese dinamismo se habría mantenido.
Para diciembre de 2013, según el índice de la Muestra Mensual de Comercio al por Menor
(MMCM) publicado por el DANE, las ventas minoristas crecieron anualmente 4,1%, registro menor
que el reportado en los dos meses anteriores. Sin embargo, el promedio del cuarto trimestre de este
indicador se expandió 5,0% frente al mismo periodo de 2012. Este dato es cercano al observado
para el tercer trimestre (4,9%). Al descontar las ventas de vehículos, el crecimiento en diciembre fue
4,6%, mientras que el promedio del cuarto trimestre se expandió a una tasa de 5,7%. Esta última
cifra representa una aceleración frente al registro del tercer trimestre (4,0%). Adicionalmente, en
diciembre el balance de ventas de la Encuesta Mensual de Expectativas Económicas (EMEE) del
Banco de la República también sugiere que la expansión del consumo interno de los hogares
durante el cuarto trimestre se habría dado a un ritmo similar al registrado para el tercero.
Con respecto a la inversión distinta de la realizada en la construcción de edificaciones y de obras
civiles, tanto el balance de expectativas de inversión de la EMEE como el crecimiento en términos
reales de las importaciones de bienes de capital apuntarían a una mejor dinámica que la registrada
en el tercer trimestre de 2013. En el primer caso se observa una recuperación del nivel del balance
con respecto al registrado en el tercer trimestre. En el segundo, la expansión del cuarto trimestre fue
de 8,5%, muy superior al 2,1% registrado en promedio para el tercero.
Respecto al comercio exterior, en diciembre las exportaciones totales en dólares aumentaron 6,5%,
gracias al aumento conjunto de las mineras (3,6%), agrícolas (18,4%) y del resto de exportaciones
(5,5%). El aumento de las mineras se dio por las mayores ventas externas de carbón (36,2%) y
crudo (7,2%). En el caso de las agrícolas se registraron crecimientos en café (16,9%), banano
(21,3%) y flores (18,6%). Por su parte, las exportaciones de bienes industriales y otros aumentaron
5,5%, en mayor parte por los crecimientos en los rubros de alimentos y bebidas, vehículos y
autopartes y productos químicos que compensaron las caídas en confecciones y máquinas y
aparatos eléctricos.
Para todo el 2013, las exportaciones totales en dólares tuvieron una caída de 2,2% frente al año
anterior. Esta caída, asociada principalmente a menores precios, se debe a las menores ventas de
bienes mineros (-3,6%) y agrícolas (-0,5%). Del lado de las exportaciones de bienes industriales y
otros, hubo un aumento de 2,2%.
Por su parte, en diciembre las importaciones totales en dólares registraron un crecimiento de 8,6%
respecto al mismo mes del año anterior. Esta dinámica se explica fundamentalmente por las
mayores compras de bienes de capital (23%), vinculadas a un aumento de las de equipo rodante de
transporte. Las importaciones de materias primas crecieron 1,2% y las de consumo presentaron una
caída de 1%.
Durante todo 2013, el valor total de las importaciones en dólares creció 0,5% frente al año anterior.
Este comportamiento se explica por las mayores importaciones de bienes de consumo (1,5%) y
materias primas (0,5%), compensadas en parte por las disminuciones en las compras de bienes de
capital (-0,1%). En general, el bajo crecimiento de las importaciones estuvo asociado con menores
precios.
Por el lado de la oferta, el índice de producción industrial (IPI) sin trilla de café medido por el
DANE creció 1,5% en diciembre. En términos trimestrales, durante el periodo octubre-diciembre de
2013, la caída del IPI sin trilla de café (-0,3%) fue compensada por un crecimiento significativo de
la trilla de café (55%). Como resultado, el total de la industria creció 1,0% en el cuarto trimestre de
2013, lo que implica una recuperación luego del registro negativo de 1,0% en el trimestre anterior.
Con respecto a la construcción, con información a noviembre, el licenciamiento continuó
reportando un importante dinamismo al crecer 21,7%. El acumulado a doce meses mostró una
expansión de 15%. Con información a diciembre, la producción y los despachos de cemento
crecieron 7,3% y 8,9% respectivamente, conservando niveles bastante favorables e históricamente
altos. Frente al trimestre anterior, tanto la producción (que pasó de 6,0% a 11,7%) como los
despachos (pasaron de 7,1% a 9,9%) se aceleraron. El comportamiento de dichos indicadores
sugiere que el dinamismo del sector habría continuado.
Lo anterior permite tener un rango de pronóstico para el crecimiento del PIB en el cuarto trimestre
entre 4,0% y 5,0%, con 4,6% como cifra más probable. El consumo de los hogares crecería a tasas
similares a la de su promedio histórico. El mayor aumento lo presentaría la inversión. Las
exportaciones se acelerarían pero con una dinámica inferior a la de las importaciones. Por el lado de
la oferta, los mayores crecimientos se presentarían en la construcción (edificaciones y obras civiles)
y la agricultura. El sector minero se desaceleraría y el crecimiento de la industria (que incluye trilla
de café) sería casi nulo. Con esta información se calcula que la economía colombiana creció en
2013 entre 3,7% y 4,3%, con 4,1% como cifra más probable.
La información para el 2014 es todavía muy escasa y preliminar. Por el lado de la demanda, el
índice de confianza del consumidor (ICC) publicado por Fedesarrollo, que está altamente
correlacionado con el consumo privado, repuntó en enero frente a los niveles del trimestre anterior y
se ubicó por encima de su promedio para todo 2013. El componente de expectativas continúa
mostrando un dinamismo importante, lo que muestra posiblemente un desempeño favorable de este
rubro hacia futuro.
Para indicadores por el lado de la oferta, la encuesta de opinión de Fedesarrollo a los empresarios
muestra que en enero el indicador de pedidos mantuvo sus niveles y su componente tendencial
continúa creciendo pero a un menor ritmo. El indicador de existencias mejoró frente al mes anterior.
Por último, las expectativas de producción a tres meses aumentaron significativamente y el
componente tendencial mostró una pendiente positiva. Como resultado, la confianza de los
industriales mejoró frente a los dos meses anteriores.
En el caso del comercio, la encuesta de Fedesarrollo arrojó resultados bastante positivos para la
percepción actual de las ventas, en donde la tendencia de la series tiene una pendiente positiva que
indicaría que el comportamiento de estas continuaría con el dinamismo registrado de los últimos
meses. Por su parte, las perspectivas a seis meses no presentaron cambios significativos y se
mantuvieron en niveles similares a los de los últimos dos meses. Pese a ello, los valores actuales
son relativamente altos frente al promedio histórico de la serie.
Otros indicadores disponibles con información a enero son: i) la demanda de energía total, que
aumentó 2,9% anualmente. En niveles, se expandió y su componente tendencial muestra una
pendiente positiva, ii) la producción de petróleo fue de un millón catorce mil barriles diarios en
promedio, que pese a mostrar un bajo crecimiento de 0,3%, implica un incremento frente a los
últimos cuatro meses.
Así, para todo el año 2014 el pronóstico de crecimiento se mantiene en un rango entre 3,3% y 5,3%,
con 4,3% como cifra más probable.
c. Variables Financieras
El crédito bancario (M/N y M/E) en enero registró una tasa anual de crecimiento de 12,2%, nivel
similar al observado el mes anterior. La cartera en moneda nacional se aceleró levemente de 12,9%
en diciembre a 13,0% en enero, mientras que la de moneda extranjera se desaceleró pasando de una
tasa de crecimiento anual de 1,5% a 0,4%.
Por destinos, la cartera a los hogares registró un crecimiento anual en enero de 13,5%, levemente
mayor al del mes anterior (13,2%). Esto fue explicado por el comportamiento del crédito de
consumo que aumentó marginalmente entre diciembre y enero (de 11,95% a 12,05%); por su parte
el crédito para adquisición de vivienda se aceleró igualmente pasando de crecer a una tasa de
15,37% a 15,59% en el mismo periodo. En cuanto a la cartera comercial, la tasa de crecimiento
anual en enero (11,51%) fue similar a la del mes anterior (11,55%), explicado por la aceleración en
el componente de moneda nacional (de 12,76% en diciembre a 12,92% en enero) y por la
desaceleración en el componente en moneda extranjera (de 1,30% a -0,04%).
Las tasas de interés de los préstamos desembolsados por los establecimientos de créditos desde el
inicio de los recortes en la tasa de política en julio de 2012, han acumulado reducciones de: -213 pb
para los créditos hipotecarios, -144 pb para los de consumo y -236 pb para los créditos de
construcción.
La magnitud del descenso de las tasas de interés reales ha sido inferior por el efecto de la menor
tasa de inflación, con rebajas durante este mismo período de: -182 para créditos hipotecarios, -114
pb para créditos de consumo y -205 pb para créditos para construcción.
Los niveles de las tasas de interés reales en septiembre de los créditos de consumo, hipotecarios,
preferenciales, comercial ordinario y comercial de tesorería y de construcción se sitúan por debajo
de sus promedios históricos calculados desde 2000. Por el contrario, los créditos otorgados con
tarjeta de crédito se encuentran por encima de su promedio.
d. Contexto Externo
De acuerdo con las cifras para el cuarto trimestre, el PIB de las principales economías desarrolladas
siguió expandiéndose a un ritmo modesto, aunque con alguna aceleración en la zona del euro y en el
Reino Unido. Por otra parte, el crecimiento de algunas economías emergentes mostró una
desaceleración respecto a lo observado en el 2012.
En Estados Unidos, los datos preliminares del cuarto trimestre de 2013 revelan un crecimiento
favorable, liderado por el consumo privado y las exportaciones. Sin embargo, las primeras cifras
conocidas para enero de 2014 de la actividad real (industria y ventas al por menor) evidenciaron una
desaceleración en su ritmo de expansión anual y registraron caídas mensuales. Es importante
resaltar que estas cifras pueden estar afectadas por la fuerte temporada invernal de comienzos del
año por lo que se podría esperar que en los próximos meses la actividad repunte. Por ejemplo, datos
preliminares de manufactura en febrero sugieren alguna recuperación. En este contexto, diversos
analistas han reducido sus pronósticos de crecimiento para el primer trimestre, sin embargo, han
dejado inalteradas sus proyecciones para todo el 2014.
En la zona del euro, durante el cuarto trimestre, hubo una aceleración en el crecimiento explicada
por el mejor comportamiento de Alemania y Francia, al igual que por la salida de la recesión de
algunas economías de la periferia. Las cifras de enero muestran que la confianza de los
consumidores siguió recuperándose, mientras que para el caso de los empresarios se mantuvo en un
nivel favorable. De igual forma, los índices de sentimiento empresarial en los sectores de
manufacturas y servicios permanecieron en terreno expansivo.
En relación con las economías emergentes, en América Latina, la información a diciembre de 2013
muestra que la actividad real siguió desacelerándose en Brasil y en Chile, mientras que en Perú se
mantuvo estable y en México presentó un ligero repunte. Para el comienzo del año se tiene
información muy parcial que muestra algún deterioro de la confianza de los agentes en varias
economías de la región.
En China, en enero la actividad manufacturera siguió moderándose; en contraste, las exportaciones
se aceleraron.
En relación con los precios internacionales de los bienes básicos exportados por Colombia, las
cotizaciones para el petróleo (de referencia Brent), el carbón y el níquel han permanecido
relativamente estables en las últimas semanas; las del café han repuntado debido a las sequías en
Brasil. Las condiciones climáticas adversas en este país también han afectado los precios de otros
alimentos, como la soya.
En cuanto a la inflación, en enero la variación de precios en las principales economías desarrolladas
permaneció por debajo de las metas de largo plazo fijadas por sus bancos centrales. En Japón
continuó la tendencia ascendente que se observa desde el año pasado.
Dada esta coyuntura y con unas brechas del producto todavía ampliamente negativas, los
principales bancos centrales mantuvieron sus políticas de estímulo monetario. Sin embargo, en los
Estados Unidos se anunció un nuevo recorte de las compras de activos mensuales a partir de
febrero. Por otra parte, de acuerdo con las más recientes minutas sobre las reuniones de la FED,
algunos miembros han empezado a considerar que el incremento en la tasa de interés de política
podría darse incluso antes de mediados de 2015, si las condiciones económicas continúan de
acuerdo con lo previsto.
Por el lado de las economías emergentes el panorama inflacionario continúa siendo heterogéneo,
con algunos repuntes en América Latina e inflaciones todavía elevadas en algunos países de esta
región (Brasil, Argentina y Venezuela) y de Asia.
En relación con los mercados financieros, en enero se observó un incremento en la incertidumbre
global, en particular en algunas economías emergentes. La continuación del desmonte del programa
de estímulo en los EEUU, la reducción en las proyecciones de crecimiento para los emergentes y
algunos eventos políticos en estos países, elevaron la percepción de riesgo hacia estas economías,
por lo que se observaron depreciaciones en sus monedas y desvalorizaciones en sus mercados
bursátiles. En las últimas semanas la situación ha tendido a normalizarse. Vale la pena señalar que
los países más afectados con la incertidumbre global fueron aquellos con mayores vulnerabilidades
externas y menores espacios para implementar políticas de estímulo.
En resumen, las perspectivas del crecimiento mundial en 2014 se mantienen sin mayores cambios.
Se proyecta que el crecimiento mundial en 2014 supere en algo más de medio punto porcentual al
de 2013. Para 2014 los socios comerciales de Colombia tendrían un crecimiento promedio superior
al registrado en 2013.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
La Junta Directiva tomó en consideración los siguientes aspectos relevantes:
(i) Las perspectivas del crecimiento mundial en 2014 se mantienen sin mayores cambios frente a las
descritas en el Informe sobre Inflación publicado recientemente. Se proyecta que el crecimiento
mundial en 2014 supere en algo más de medio punto porcentual al de 2013. La recuperación
gradual de las economías avanzadas continúa y los nuevos datos de países emergentes confirman la
desaceleración esperada en su tasa de crecimiento. Para 2014 los socios comerciales de Colombia
tendrían un crecimiento promedio superior al registrado en 2013.
(ii) Las tasas de interés externas y la cotización del dólar superan los promedios observados en
2013. Es probable que una parte importante de estos aumentos sea permanente en la medida que
obedece a niveles de liquidez global menos expansivos.
(iii) El precio internacional del petróleo continúa en niveles altos y el del café colombiano ya superó
el registro medio de 2013. Los precios del carbón y níquel dejaron de descender. Con ello, es
probable que los términos de intercambio se mantengan en niveles favorables.
(iv) Para el cuarto trimestre de 2013, el equipo técnico proyecta un crecimiento económico entre 4%
y 5%, con 4,6% como cifra más probable. El consumo de los hogares crecería a tasas similares a la
de su promedio histórico. El mayor aumento lo presentaría la inversión. Las exportaciones se
acelerarían pero con una dinámica inferior a la de las importaciones. Por el lado de la oferta, los
mayores crecimientos se presentarían en la construcción (edificaciones y obras civiles) y la
agricultura. El sector minero se desaceleraría y el crecimiento de la industria (que incluye trilla de
café) sería casi nulo. Con esta información se calcula que la economía colombiana creció en 2013
entre 3,7% y 4,3%, con 4,1% como cifra más probable.
(v) Para el año 2014 se proyecta un crecimiento económico entre 3,3% y 5,3%, con 4,3% como
cifra más probable.
(vi) En enero el crecimiento del crédito total se desaceleró, aunque sigue mostrando tasas superiores
al aumento del PIB nominal. Las tasas de interés nominales de crédito aumentaron pero en términos
reales permanecieron estables y se encuentran en niveles que impulsan el crecimiento económico.
(vii) La inflación anual en enero fue de 2,13%, ubicándose dentro del rango meta, y el promedio de
las medidas de inflación básica se situó en 2,55%. Las expectativas de inflación a un año de los
analistas económicos, así como las derivadas de los papeles de deuda pública con plazos menores a
cinco años, se encuentran alrededor de 3%.
Los miembros de la Junta Directiva destacaron que la información disponible sobre las variables
internas de demanda, confianza, crecimiento del producto, crédito e inflación indica que la brecha
del producto y la actual desviación de la inflación observada frente a la meta (brecha de inflación)
se han ido cerrando y se espera que continúe haciéndolo a lo largo del año.
Reiteraron la incertidumbre existente sobre el efecto en la economía colombiana que pueda tener la
normalización gradual de la política monetaria de la Reserva Federal de los Estados Unidos, vía
contagio de los países emergentes con mayores vulnerabilidades. Asimismo, destacaron otros
riesgos, en especial los provenientes de la situación de Venezuela; la moderación del crecimiento en
la actividad económica en China y el comportamiento reciente de algunos indicadores asociados al
ritmo de expansión de la economía norteamericana. Comentaron también que a pesar de que la
inflación de alimentos continua siendo muy baja comparada con los registros históricos, dicho
comportamiento obedece parcialmente a factores transitorios y podría revertirse si cambia la
tendencia de los precios internacionales de alimentos.
La proyección de una gradual convergencia de la inflación a la meta y del producto a su valor
potencial, en conjunto con los riesgos anotados antes, sugirió a los miembros de la Junta que era
prudente mantener la postura expansiva actual de política monetaria.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva por unanimidad consideró apropiado mantener la tasa de interés de intervención
en 3,25%.
La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo del comportamiento y proyecciones de la
actividad económica e inflación en el país, de los mercados de activos y de la situación
internacional. Finalmente, reitera que la política monetaria dependerá de la información disponible.
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2014-03-01 |
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Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República de 21 de
marzo de 2014
El 21 de marzo de 2014 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta
Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público,
Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores
doctores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca, César
Vallejo Mejía, Juan Pablo Zárate Perdomo. En las minutas se presenta un resumen de la situación
inflacionaria y del crecimiento económico, y sus perspectivas, elaborada por el equipo técnico
(sección 1) y se reseñan las principales discusiones y opciones de política consideradas por la Junta
Directiva (sección 2).
1. SITUACION INFLACIONARIA Y DE CRECIMIENTO ECONÓMICO
a. Desarrollos recientes de la inflación
En febrero, la inflación anual al consumidor (2,32%) registró una aceleración de 19 puntos base
(pb) frente al registro de enero. La aceleración se originó principalmente en las canastas de
alimentos y regulados.
En la canasta de alimentos, la variación anual cerró el mes en 1,78%, 58 pb más que enero. La
aceleración se dio en los tres principales componentes de la subcanasta: perecederos (de 2,1% a
2,6% anual), procesados (de -0,2% a 0,4% anual) y comidas fuera del hogar (de 3,3% a 3,9%
anual).
Dentro del IPC sin alimentos (2,53% anual), las principales presiones al alza se originaron en los
grupos de regulados y transables. En regulados (1,8% anual) se registró un aumento de 10 pb en la
variación anual frente al mes anterior que obedeció principalmente a incrementos en las tarifas de
gas domiciliario. Por su parte, la variación anual del IPC de transables sin alimentos ni regulados
(1,6% anual) aumentó 4 pb frente al mes anterior. La depreciación desde comienzos del año pasado
explicaría la tendencia ascendente en el IPC transable, cuya variación anual acumula 90 pb en los
últimos doce meses. La variación anual de no transables sin alimentos ni regulados se mantuvo en
3,6%, destacándose el aumento de 10 pb en la variación anual del IPC de arriendos, interrumpiendo
la tendencia descendente que se observaba desde hace dos trimestres.
El promedio de los cuatro indicadores de inflación básica monitoreados por el Banco de la
República se situó en febrero en 2,63%, 8 pb más que el mes anterior. Así, se completan cuatro
meses seguidos de leves aumentos en dicha variable.
La variación anual del IPP aumentó 104 pb en febrero (1,3% anual). Una parte importante de estas
alzas está relacionada con la depreciación acumulada del tipo de cambio y se refleja sobre todo en
una aceleración del IPP importado (de 2,95% a 4,28% anual). Sin embargo también en los últimos
meses se ha observado un mayor crecimiento del IPP de producidos y consumidos localmente (de -
0,35% a 0,63% anual), que se concentra en bienes de origen agropecuario y minero.
En cuanto a las expectativas de inflación, en febrero tendieron a aumentar, aunque se mantuvieron
cercanas al punto medio del rango meta. Las obtenidas a partir de la encuesta mensual de
expectativas a analistas del mercado financiero se situaron en 2,85% y 2,90% a fin de año y a doce
meses respectivamente. Las mediciones derivadas de la curva de rendimientos de los TES para
horizontes de 2, 3 y 5 años se mantuvieron alrededor de 3,0%.
b. Crecimiento
De acuerdo con el DANE, la economía colombiana se expandió 4,9% en términos anuales durante
el cuarto trimestre de 2013. De esta manera, la expansión anual de la economía colombiana para
2013 fue 4,3%. Adicionalmente, se revisó a la baja la dinámica de crecimiento económico para el
año 2012 (pasó de 4,2% a 4,0%).
Por el lado de la demanda se destacó el aumento significativo del consumo de los hogares y del
gobierno hacia el final del año. El consumo de los hogares creció al 4,5%, manteniendo el ritmo que
se observó en 2012. Con respecto al consumo del Gobierno la expansión anual fue de 6,0% para
todo el año.
Para el caso de la inversión, en 2013 creció anualmente 5,7%, cifra mayor que la de 2012 (4,6%).
Los renglones que más contribuyeron a la expansión de la inversión fueron aquellos relacionados
con la construcción de obras civiles y de edificaciones. El gasto dedicado a la inversión en
maquinaria y equipo se desaceleró de manera importante, mientras que el de equipo de transporte se
contrajo.
Así las cosas, la demanda interna contribuyó activamente al crecimiento de la actividad económica,
sobre todo en los últimos meses de 2013 (6,2% en el cuarto trimestre vs 3,4% primer semestre).
Los rubros de comercio exterior mostraron desaceleraciones entre 2012 y 2013, que fueron
mayores para el caso de las importaciones que para el de las exportaciones. Para las primeras, el
crecimiento pasó de 8,9% en 2012 a 2,1% en 2013, mientras que para las segundas pasó de 6,1% a
5,3% respectivamente.
Por el lado de la oferta, los sectores que mostraron crecimientos por encima de la economía en su
conjunto durante 2013 fueron la construcción (9,8%), los servicios sociales (5,3%) y la agricultura
(5,2%). En el primer caso, tanto en el sub-grupo de construcción de edificaciones como en el de
obras civiles se observó un fuerte dinamismo. En el último, la expansión se explicó principalmente
por el significativo impulso que tuvo la producción de café. La minería (4,9%) presentó un
comportamiento dispar: mientras que la producción de petróleo creció anualmente a una tasa por
encima del resto de sectores (7,8%), la de carbón se contrajo (-4,0%), producto de varios choques
de oferta que ocurrieron a lo largo del año. Por último, la industria mostró una disminución del
valor agregado por segundo año consecutivo (-1,2%).
Para el primer trimestre de 2014, la información disponible arroja resultados mixtos sobre el
desempeño de la economía. Para el consumo privado, las cifras en materia de ventas minoristas y de
automóviles apuntan a un buen comportamiento. Según las cifras de la Muestra Mensual de
Comercio al por Menor (MMCM) publicada por el DANE, en enero las ventas se incrementaron
6,5% anual, lo que implica una aceleración frente al registro del cuarto trimestre de 2013 (5,3%
anual). El componente más dinámico fue el de las ventas de vehículos, que creció 19,9% anual. Al
excluir estas últimas del total, la expansión anual fue 4,0%. Por otra parte, el Índice de Confianza
del Consumidor de Fedesarrollo (ICC) presentó un importante retroceso en febrero, luego de haber
mostrado un incremento significativo durante el mes anterior. Tanto en el componente de
expectativas como en el de condiciones económicas se registraron caídas, mayores en el primer
caso que en el segundo. A pesar de lo anterior, el promedio para el primer bimestre del año se ubicó
cerca de su media desde 2001.
En lo referente a las exportaciones, las totales en dólares cayeron 1,5% en enero de 2014, debido a
la disminución conjunta de las exportaciones mineras (-1,6%), industriales y otras (-1,1%) y
agrícolas (-2,1%). El comportamiento de las exportaciones mineras se explica en gran medida por
las menores ventas externas de oro, derivados de petróleo y carbón. En el caso de las exportaciones
agrícolas, la caída se explica por las menores exportaciones de café. La menor dinámica de las
exportaciones de bienes industriales y otros se explica principalmente por las reducciones en
vehículos, caucho y plástico y productos químicos. Estas caídas fueron parcialmente compensadas
por el aumento en las exportaciones de alimentos y bebidas.
Por otra parte, en enero de 2014 las importaciones totales en dólares (CIF) registraron una
disminución de 6,6% respecto al mismo mes del año anterior. Este comportamiento se debió a una
caída generalizada de los principales rubros, con descensos de 12,6% en bienes de capital, de 6,3%
en bienes de consumo y de 1,9% en materias primas.
Por el lado de la oferta, los indicadores disponibles para el primer trimestre del año también
muestran señales mixtas. Se destaca el desempeño de la demanda de energía total y el de la
producción de café en el mes de febrero. En el primer caso, la demanda creció 6,4% anual, y su
nivel superó los registros de los últimos seis meses. En el segundo caso, de acuerdo con cifras de la
Federación de Cafeteros, la producción aumentó 39,8% frente al mismo mes del año pasado. En
contraste, la industria continuó mostrando un desempeño débil. De acuerdo con el DANE, en enero
el índice de producción manufacturera creció en enero 0,1%. El componente tendencial de la serie
sigue mostrando un estancamiento. Cabe señalar que el comportamiento sectorial es bastante dispar:
mientras que sub-ramas como ingenios, molinería y almidones, confecciones, otros productos
alimenticios y elaborados de metal mostraron crecimientos elevados, otras sub-ramas registraron
caídas importantes, como es el caso de la de vehículos automotores, otros productos químicos y
actividades de edición.
Por último, aunque en febrero la producción de petróleo mantuvo niveles superiores al millón de
barriles diarios (1,002mbd), se ha desacelerado de manera considerable en los últimos cuatro meses.
La variación anual se ubicó en 0,5%.
De esta manera, para el 2014 el equipo técnico del Banco mantiene un pronóstico de crecimiento
económico entre 3,3% y 5,3%, con 4,3% como cifra más probable.
c. Variables Financieras.
El crédito bancario (M/N y M/E) en febrero registró una tasa anual de crecimiento de 12,4%, nivel
ligeramente mayor al observado el mes anterior (12,2%). La cartera en moneda nacional mostró una
tasa de expansión de 13,2% ligeramente mayor a la del mes pasado, mientras que la de moneda
extranjera se aceleró pasando de una tasa de crecimiento anual de 0,4% a 1,9%.
Por destinos, la cartera a los hogares registró un crecimiento anual en febrero de 13,2%, levemente
inferior a la del mes anterior (13,5%). Esto fue explicado por el comportamiento del crédito de
consumo que se moderó entre enero y febrero (de 12,1% a 11,6%); por su parte el crédito para
adquisición de vivienda se aceleró pasando de crecer a una tasa de 15,6% a 16,1% en el mismo
periodo. En cuanto a la cartera comercial, la tasa de crecimiento anual en febrero (12,0%) fue
mayor a la del mes anterior (11,5%), explicado por la aceleración en el componente de moneda
nacional (de 12,9% en enero a 13,3% en febrero) y en el componente en moneda extranjera (de -
0,04% a 1,7%).
Las tasas de interés de los préstamos desembolsados por los establecimientos de créditos desde el
inicio de los recortes en la tasa de política en julio de 2012, han acumulado reducciones de: -209 pb
para los créditos hipotecarios, -199 pb para los de consumo y -215 pb para los créditos de
construcción.
La magnitud del descenso de las tasas de interés reales ha sido inferior por el efecto de la menor
tasa de inflación, con rebajas durante este mismo período de: -182 pb para créditos hipotecarios, -
171 pb para créditos de consumo y -188 pb para créditos para construcción.
Los niveles de las tasas de interés reales en septiembre de los créditos de consumo, hipotecarios,
preferenciales, comercial ordinario y comercial de tesorería y de construcción se sitúan por debajo
de sus promedios históricos calculados desde 2000. Por el contrario, los créditos otorgados con
tarjeta de crédito se encuentran por encima de su promedio.
d. Contexto Externo.
La más reciente información muestra que la recuperación en la zona del euro ha continuado a un
ritmo modesto tal como se esperaba. En febrero, los indicadores de actividad en los sectores de
manufacturas y servicios permanecieron en terreno expansivo, mientras que la confianza de
empresarios y consumidores se sostuvo en niveles favorables, aunque en esta última se observó un
ligero deterioro.
En los Estados Unidos durante los dos primeros meses del año algunos indicadores evidenciaron un
comportamiento inferior al esperado. Tal es el caso de las ventas al por menor, las cuales se
redujeron en términos mensuales y se desaceleraron en la comparación anual. Lo anterior podría
estar parcialmente explicado por el fuerte invierno experimentado en ese país. Por el contrario, en
febrero la industria se expandió y el mercado laboral continuó mostrando señales de mejoría pues el
ritmo de contratación se aceleró frente a lo observado en los últimos meses.
Para las economías emergentes, la información disponible apunta a una desaceleración en varias de
ellas. En China, los indicadores de ventas al por menor, de la industria, de la inversión en activos
fijos y de comercio internacional mostraron un comportamiento por debajo del esperado por el
mercado. Si bien estas cifras están afectadas por las festividades del año nuevo chino, las tendencias
son hacia una moderación en el crecimiento económico.
Algo similar ocurre en América Latina donde las últimas cifras de actividad económica también
muestran un deterioro en el crecimiento de la región, más allá del esperado. En Chile, el índice de
actividad económica mensual en enero completó varios meses desacelerándose, mientras que en
Brasil la industria se contrajo nuevamente en términos anuales. Por otra parte, las exportaciones de
la región permanecieron débiles y la confianza de los consumidores disminuyó en varios países.
En relación con los precios internacionales de los bienes básicos exportados por Colombia, las
cotizaciones del petróleo para la referencia Brent permanecieron en febrero alrededor de los 108
dólares por barril, nivel mayor que el anticipado (105 dólares/barril en promedio). El precio del
carbón cayó levemente mientras que el del níquel mostró un ligero incremento. Las sequías en
Brasil impulsaron nuevamente las cotizaciones del café, las cuales se encuentran muy por encima
de lo previsto. Para el caso de los alimentos importados, en las últimas semanas se han observado
repuntes en los precios de la soya, el maíz y el trigo.
Por su parte, la inflación en las principales economías desarrolladas se mantuvo en un nivel
relativamente bajo. En particular, en febrero, en la zona del euro la variación en el nivel general de
precios siguió reduciéndose y completó varios meses por debajo del 1%. En los Estados Unidos los
indicadores mostraron estabilidad. En las economías emergentes, la inflación repuntó en varios
países de América Latina, situación que estaría asociada con la depreciación de sus monedas. Por el
contrario, en Asia se observó alguna desaceleración.
En términos de política monetaria, los bancos centrales de las principales economías avanzadas,
exceptuando los Estados Unidos, continuaron con sus políticas de estímulo y no anunciaron nuevas
medidas. En el caso de la FED, en la reunión de marzo, continuó recortando sus compras de activos
en diez mil millones de dólares adicionales. De igual forma anunció que, dadas las condiciones
actuales de la economía, era apropiado mantener la política de estímulo. Igualmente la FED
descartó una meta puntual en la tasa de desempleo y condicionó su política a un rango más amplio
de indicadores del mercado laboral, la inflación y los mercados financieros. En concepto de muchos
analistas ha aumentado la probabilidad de que se anticipen los incrementos en las tasas.
En las economías emergentes, algunos países como Chile, Hungría y Rumania recortaron sus tasas
de intervención ante la desaceleración de sus indicadores de actividad real. Otros países con
mayores presiones inflacionarias, como Brasil e India, las aumentaron.
Finalmente, en lo corrido del año las medidas de riesgo país y la tasa de cambio se mantienen en
niveles superiores al promedio observado en 2013. De confirmarse la normalización de la política
monetaria en los Estados Unidos, es probable que estos niveles de tasa de cambio y de riesgo se
conserven o se incrementen levemente. No obstante el reciente anuncio de JP Morgan, sobre el
incremento de la participación de los TES en su portafolio de referencia para mercados emergentes
(en monedas locales) puede compensar significativamente estos efectos.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
La Junta Directiva tomó en consideración los siguientes aspectos relevantes:
(i) Los datos recientes de actividad económica en varias regiones del mundo sugieren que la
recuperación del crecimiento continuará en 2014, pero con una ligera desaceleración en relación
con las previsiones anteriores. La recuperación en la zona Euro ha continuado a un ritmo modesto,
al tiempo que la desaceleración de algunas economías emergentes se ha acentuado.
(ii) Las tasas de interés externas y la cotización del dólar superan los promedios observados en
2013. Es probable que una parte importante de estos aumentos sea permanente en la medida en que
obedece a niveles de liquidez global menos expansivos. La reciente decisión de la Reserva Federal
y los pronósticos de sus miembros sobre la tasa de interés de referencia reafirman esta tendencia.
(iii) El aumento de la ponderación de los títulos de deuda pública colombianos en los portafolios de
referencia de algunos inversionistas internacionales puede compensar en algún grado los efectos
que el ajuste de la liquidez global tiene sobre la tasa de cambio y las tasas de interés del mercado en
Colombia.
(iv) En el cuarto trimestre de 2013 el crecimiento anual del producto fue 4,9%. Para el año
completo fue 4,3%, por encima de una tasa revisada de 4% para 2012. El crecimiento se aceleró en
el segundo semestre, impulsado especialmente por la inversión. El consumo de los hogares se
mantuvo a tasas de crecimiento cercanas a su promedio histórico a lo largo del año, mientras que el
público creció por encima del producto en todos los trimestres. Por el lado de la oferta, los mayores
crecimientos en el trimestre se presentaron en los sectores minero, agrícola, de la construcción y de
servicios sociales y personales. La industria mantuvo un débil desempeño. Para el año completo se
observaron tendencias similares.
(v) La información reciente sobre el crecimiento de las ventas minoristas, la producción cafetera, el
consumo de energía y el descenso continuado del desempleo sugieren un fuerte dinamismo de la
economía en lo corrido del año. No obstante, el retroceso de la confianza del consumidor en
febrero, la debilidad de las exportaciones y de la industria manufacturera, apuntan en sentido
contrario. Para el año 2014 el equipo técnico del Banco mantiene un pronóstico de crecimiento
económico entre 3,3% y 5,3%, con 4,3% como cifra más probable.
(vi) En febrero el crecimiento del crédito total se estabilizó en tasas superiores al aumento del PIB
nominal. El crecimiento del crédito de consumo se ha moderado, pero el crédito hipotecario se ha
acelerado. Las tasas de interés reales de crédito continúan en niveles que impulsan el crecimiento
económico.
(vii) La inflación anual aumentó en febrero por tercer mes consecutivo y se situó en 2,32%, dentro
del rango meta. El promedio de las medidas de inflación básica también continuó aumentando y
alcanzó 2,63%. Las expectativas de inflación a un año de los analistas económicos, así como las
derivadas de los papeles de deuda pública con plazos menores a cinco años, se mantienen alrededor
de 3%. En resumen, el crecimiento económico se aceleró en el segundo semestre de 2013 y la
inflación continuó aumentando en febrero. Las tasas de interés se mantienen en niveles que
estimulan el gasto agregado y es de esperar que contribuyan a que en 2014 el producto se acerque a
la capacidad productiva de la economía y a que la inflación converja hacia la meta de 3%.
Los miembros de la Junta Directiva destacaron el dinamismo de la demanda interna, tanto del
consumo como de la inversión, observado en el segundo semestre de 2013 y comienzos del presente
año. Así mismo, la inflación ha aumentado de acuerdo con lo previsto. Lo anterior indicaría que la
brecha del producto y la actual desviación de la inflación observada frente a la meta (brecha de
inflación) continuará cerrándose a lo largo de 2014.
DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva por unanimidad consideró apropiado mantener la tasa de interés de intervención
en 3,25%.
La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo del comportamiento y proyecciones de la
actividad económica e inflación en el país, de los mercados de activos y de la situación
internacional. Finalmente, reitera que la política monetaria dependerá de la información disponible.
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2014-04-01 |
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Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 25
de abril de 2014
El 25 de abril de 2014 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta
Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público,
Mauricio Cárdenas Santamaria, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores,
Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca, César Vallejo
Mejía, Juan Pablo Zárate Perdomo. En las minutas se presenta un resumen de la situación
inflacionaria y del crecimiento económico, y sus perspectivas, elaborada por el equipo técnico
(sección 1) y se reseñan las principales discusiones y opciones de política consideradas por la Junta
Directiva (sección 2).
1. SITUACIÓN INFLACIONARIA Y DE CRECIMIENTO ECONÓMICO
a. Desarrollos recientes de la inflación
En marzo de 2014 la inflación anual al consumidor volvió a aumentar, por cuarto mes en línea. El
dato reportado por el DANE fue de 2,51%, 19 puntos base (pb) más que lo observado en febrero.
Para lo corrido del año, el IPC acumula un aumento de 1,52%, superior al registrado en igual
período de 2013 (0,95%). Al igual que en los dos meses anteriores, las presiones alcistas se
concentraron principalmente en los precios de los alimentos y regulados aunque también se vio un
ligero aumento en la canasta de transables.
En la canasta de alimentos, la variación anual cerró el mes en 2,2%, 45 pb más que febrero. La
aceleración se dio en los tres principales componentes de esta canasta: perecederos (de 2,6% a 3,2%
anual), procesados (de 0,4% a 0,9% anual) y comidas fuera del hogar (de 3,9% a 4,1% anual). En el
caso del componente de alimentos perecederos los precios estarían normalizándose después de los
bajos niveles de final del año pasado. Las alzas en los precios de los procesados estarían asociadas
con la depreciación del peso.
Dentro del IPC sin alimentos (2,6% anual, 9 pb más que el mes pasado), las principales presiones al
alza se originaron en el grupo de regulados. Esta canasta (2,2% anual) registró un aumento de 45 pb
en la variación anual frente al mes anterior que obedeció a incrementos en las tarifas de gas
domiciliario. En el IPC de energía eléctrica también se observó una aceleración importante en la
variación anual, pero en este caso ello obedece más a una baja base de comparación (en marzo de
2013 estas tarifas cayeron).
Para el IPC de transables sin alimentos ni regulados la variación anual (1,6%) aumentó 4 pb frente
al mes anterior. La tendencia ascendente en esta canasta sigue estando relacionada con la
depreciación acumulada del tipo de cambio. Por otra parte, la variación anual de no transables sin
alimentos ni regulados (3,55%) disminuyó 6 pb frente al mes anterior; se destaca la variación anual
de arriendos (3,5%) que disminuyó ligeramente luego de los leves aumentos de los dos meses
anteriores.
El promedio de los cuatro indicadores de inflación básica monitoreados por el Banco de la
República se situó en marzo en 2,69%, 6 pb más que el mes anterior y 19 pb más que lo observado
a finales del año pasado. Así, se completan cinco meses seguidos de leves aumentos en dicha
variable.
La variación anual del IPP aumentó por quinto mes consecutivo a 2,6%, frente a 1,3% del mes
anterior. Esto se explica principalmente por el mayor ajuste en el componente local (de 0,6% a 2,3%
anual). La variación anual del IPP importado aumentó poco (de 4,28% a 4,34%). La depreciación
del peso, el aumento de los precios de productos perecederos y el del café explican este
comportamiento.
Las expectativas de inflación continuaron aumentando gradualmente. Según la encuesta mensual
efectuada por el Banco de la República a los analistas del mercado financiero, la inflación esperada
para diciembre de este año ascendió a 3,04%, frente a 2,90% del mes anterior. Algo similar sucedió
con la expectativa a doce meses, la cual pasó de 3,0% a 3,1%. Para las expectativas derivadas de la
curva de rendimiento de los TES en las últimas 4 semanas (terminadas el 21 de abril) se dio un
aumento en los horizontes de 2, 3 y 5 años situándose muy cerca a la meta de inflación de largo
plazo.
b. Crecimiento
La información disponible sugiere que durante los primeros meses de 2014 la actividad económica
se habría expandido a una tasa similar a la registrada hacia finales del año pasado. El consumo
privado habría crecido a un buen ritmo, mientras que la inversión, sobre todo aquella relacionada
con equipo de transporte y construcción de obras civiles, habría tenido un dinamismo más
moderado. Cabe resaltar que el desempeño del aparato productivo habría sido influenciado por un
mayor número de días hábiles por la presencia de Semana Santa en abril (y no en marzo, como
sucedió en 2013).
Los hechos que confirman las buenas perspectivas para el consumo de los hogares son: La Muestra
Mensual de Comercio al por Menor (MMCM) del Departamento Administrativo Nacional de
Estadística (DANE) muestra que en febrero las ventas crecieron 6,7% anual, una de las cifras más
altas de los últimos 24 meses. Al descontar las ventas de vehículos, el incremento fue 4,6%. El
comportamiento de las ventas de vehículos también sugiere un buen desempeño del gasto en bienes
durables. Por otra parte, en los primeros tres meses del año el índice de confianza del consumidor
publicado por Fedesarrollo se ubicó, en promedio, por debajo del dato para el cuarto trimestre de
2013. A pesar de lo anterior, esta serie se situó por encima del promedio histórico desde 2001. En
línea con lo anterior, el balance de ventas de la Encuesta Mensual de Expectativas Económicas
(EMEE) del Banco de la República muestra que durante enero y febrero los comerciantes
percibieron una demanda levemente mayor que la observada durante el cuarto trimestre de 2013.
Por último, el buen comportamiento del mercado laboral, en particular el mayor crecimiento del
empleo asalariado, al igual el hecho que el financiamiento del consumo de los hogares, pese a que
se ha desacelerado levemente en lo corrido del año, continúa creciendo a un buen ritmo también,
contribuirían a un buen comportamiento del rubro.
Con respecto a la inversión, la información es escasa. De acuerdo al balance de expectativas de
inversión de la EMEE, la formación bruta de capital sin obras civiles ni construcción habría
mantenido su dinámica durante el primer trimestre del año.
Respecto a las exportaciones, en febrero, las totales registraron una disminución de 8,5%, debido a
la caída conjunta de las de bienes mineros (-10,3%) y de las industriales y otros (-15,1%). En el
primer grupo, la reducción se explica por las menores ventas externas de crudo (-12,2%), oro (-
48%) y carbón (-6,6%). En el segundo, principalmente por la caída de las exportaciones de
vehículos (-67,5%). Por su parte, las exportaciones de los principales bienes agrícolas crecieron en
conjunto 34,4% (banano 90,1%, café 20% y flores 31,8%).
Por el lado de la oferta, los indicadores disponibles para el primer trimestre de 2014 manifiestan
comportamientos dispares. Cifras relacionadas con sectores como la industria, la energía y el
comercio muestran un desempeño favorable respecto a lo observado en el último trimestre de 2013,
mientras que algunos indicadores asociados a ramas de actividad como la construcción, la minería y
la agricultura reportaron algunas desaceleraciones.
La industria presenta una expansión positiva pero moderada. La variación anual del IPI sin trilla de
café para el mes de febrero fue de 2,8%. Dentro de la industria, se mantienen las disparidades
sectoriales. De acuerdo con la encuesta de opinión empresarial de Fedesarrollo a marzo, el
indicador de pedidos y su componente tendencial continuaron aumentando lentamente. El indicador
de existencias (contra-cíclico a la producción) subió un poco pero su componente tendencial se
mantuvo en descenso. Las expectativas de producción a tres meses permanecieron en niveles
aceptables y similares a los del mes anterior. Todo esto apuntaría a un buen comportamiento en ese
mes. La demanda de energía no regulada de la industria siguió creciendo con bastante dinamismo
en marzo (22,1% frente al 15,2% de febrero). Es importante señalar que parte de esto podría
explicarse por una baja base de comparación del mismo mes del año anterior debido al efecto de
Semana Santa.
Para otros sectores, los indicadores que tuvieron un buen comportamiento fueron: la demanda de
energía total que creció 5,7% en marzo y 5,0% en el primer trimestre; la producción de cemento que
aumentó a un ritmo anual de 10,2% en febrero y 6,1% en el primer bimestre; y la producción de
café que continuó expandiéndose a tasas significativas en los primeros tres meses del año (29%). En
el caso de la producción de petróleo, sin embargo, se observó una desaceleración significativa en el
primer trimestre y en marzo su nivel cayó por debajo de un millón de barriles diarios.
Todo lo anterior, permite fijar el rango de pronóstico de crecimiento anual del PIB para el primer
trimestre de 2014 entre 4,2% y 5,4%. Para todo el 2014 se mantiene el rango de crecimiento del
producto entre 3,3% y 5,3%, con 4,3% como cifra más probable.
c. Variables Financieras
El crédito bancario (M/N y M/E) en marzo registró una tasa anual de crecimiento de 12,8%, nivel
ligeramente mayor al observado el mes anterior (12,4%). La cartera en moneda nacional mostró una
tasa de expansión anual de 13,5% ligeramente mayor a la del mes pasado (13,1%), mientras que la
de moneda extranjera se aceleró pasando de una tasa de crecimiento anual de 2,0% a 2,5%.
Por destinos, en marzo la cartera a los hogares registró un crecimiento anual de 12,9%, levemente
inferior a la del mes anterior (13,3%). Esto fue explicado por el comportamiento del crédito de
consumo que se moderó entre febrero y marzo (de 11,6% a 11,3%); por su parte la tasa de
crecimiento del crédito para adquisición de vivienda (16,2%) no varío entre estos dos meses. En
cuanto a la cartera comercial, la tasa de crecimiento anual en marzo (12,8%) fue mayor a la del mes
anterior (12,0%), explicado por la aceleración en el componente de moneda nacional (de 13,3% en
febrero a 14,1% en marzo) y en el componente en moneda extranjera (de 1,7% a 2,3%).
Las tasas de interés de los préstamos desembolsados por los establecimientos de créditos desde el
inicio de los recortes en la tasa de política en julio de 2012, han acumulado reducciones de: -205 pb
para los créditos hipotecarios, -221 pb para los de consumo y -210 pb para los créditos de
construcción.
La magnitud del descenso de las tasas de interés reales ha sido similar debido a que el reciente
incremento de la inflación la acerca al nivel de julio 2012. Así durante este mismo período la
disminución ha sido de: -188 pb para créditos hipotecarios, -203 pb para créditos de consumo y -
193 pb para créditos para construcción.
Los niveles de las tasas de interés reales en septiembre de los créditos de consumo, hipotecarios,
preferenciales, comercial ordinario y comercial de tesorería y de construcción se sitúan por debajo
de sus promedios históricos calculados desde 2000. Por el contrario, los créditos otorgados con
tarjeta de crédito se encuentran por encima de su promedio.
d. Contexto Externo
Durante el primer trimestre de 2014, la actividad económica siguió expandiéndose en los
principales países desarrollados. Por su parte, en los países emergentes el ritmo de crecimiento
continuó moderándose.
En los Estados Unidos, las condiciones invernales extremas de enero y febrero afectaron la
actividad económica; sin embargo, información reciente evidencia que la economía se expande a un
ritmo favorable. Con cifras a marzo, la producción industrial y las ventas al por menor repuntaron
tanto en términos anuales como mensuales. En relación con el mercado laboral la tasa de desempleo
aumentó levemente en los últimos meses; sin embargo, el ritmo de creación de trabajos se aceleró.
Por su parte, en la zona del euro la actividad económica continúa recuperándose a un ritmo
modesto. Con cifras a marzo, los indicadores de opinión en los sectores de manufacturas y servicios
permanecieron en terreno expansivo, mientras que los índices de confianza de empresarios y
consumidores mostraron de nuevo una tendencia positiva. Otros indicadores, como las ventas al por
menor y la producción industrial, también muestran mejoras.
Para el caso de las economías emergentes, en China el crecimiento del PIB se desaceleró en el
primer trimestre del año, pasando de 7,7% a 7,4% anual. Las exportaciones y la demanda interna
crecieron menos que en el periodo anterior, lo que muestra que el efecto de la pérdida de dinamismo
de la demanda mundial sobre el crecimiento de la economía china no está siendo compensado por la
expansión de su mercado interno, como muchos analistas esperaban. En América Latina los
indicadores de actividad real siguieron expandiéndose a un ritmo menor que en años anteriores, en
particular se destaca el bajo ritmo de crecimiento en Brasil y la desaceleración de la economía
chilena.
En relación con los precios internacionales de los bienes básicos exportados por Colombia, las
cotizaciones del petróleo se mantuvieron en niveles favorables, ligeramente por debajo al promedio
observado en 2013. Los precios del café y del níquel aumentaron nuevamente en el último mes. Por
su parte, las cotizaciones de algunos alimentos importados siguieron creciendo.
En cuanto a la inflación en las principales economías desarrolladas, la variación de precios se
mantuvo baja en Europa; mientras que en los Estados Unidos presentó un leve repunte aunque se
mantiene por debajo de la meta de las autoridades. En el caso de Japón la relajación de la política
monetaria continúa reflejándose en una inflación creciente.
Con bajas presiones inflacionarias y con crecimientos por debajo del potencial, los principales
bancos centrales han mantenido una postura monetaria expansiva. En el caso de la Reserva Federal
de los Estados Unidos, los recortes en las compras mensuales de activos se mantuvieron en línea
con lo esperado por el mercado y se espera que el primer aumento en la tasa de referencia se dé
hacia mediados de 2015. Las tasas de largo plazo han permanecido relativamente estables.
En el caso de la zona del euro, ante los temores de deflación, los analistas prevén la implementación
de nuevas medidas de estímulo monetario, como la compra de activos financieros.
En las economías emergentes el panorama inflacionario continúa siendo heterogéneo, al igual que
las respuestas de política monetaria. En América Latina algunos países han evidenciado aumentos
en la variación de precios. En el caso de Brasil el banco central incrementó nuevamente sus tasas,
mientras que el de Chile las redujo. En otros países de la región las tasas de interés han
permanecido estables.
En lo corrido del año la aversión al riesgo global se ha moderado y las primas de riesgo en los
principales países de la región han descendido. En estas economías emergentes, ello se ha reflejado
en una valorización de los activos financieros en moneda local y en una apreciación de las monedas
frente al dólar. Los anteriores cambios han sido más acentuados en Colombia, especialmente en el
mercado de deuda pública, como resultado de los mayores ingresos de capital extranjero. Las tasas
de interés externas no han presentado cambios significativos y se mantienen en niveles bajos
aunque superiores al promedio observado en 2013.
En resumen, los anteriores hechos apuntan a que en 2014 el crecimiento promedio de los socios
comerciales de Colombia sea similar al registrado en 2013 y que el promedio de los términos de
intercambio se mantenga en niveles favorables. Las expectativas sobre un ajuste pausado de la
liquidez en los Estados Unidos se mantienen. Asimismo, se espera que la postura monetaria
expansiva en otras economías avanzadas persista por un período prolongado.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
La Junta Directiva tomó en consideración los siguientes aspectos relevantes:
(i) En marzo, la inflación y el promedio de las cuatro medidas de inflación básica continuaron su
proceso de convergencia al 3%. Por su parte, las expectativas de inflación a un año de los analistas
económicos y las implícitas en los papeles de deuda pública, han fluctuado alrededor de la meta de
inflación de largo plazo.
(ii) El pronóstico macroeconómico indica que la demanda interna continuará creciendo a buen ritmo
y que la economía se acercará al uso pleno de su capacidad productiva en 2014. Al mismo tiempo,
la tasa de desempleo desestacionalizada ha mantenido una tendencia decreciente y alcanza el
menor nivel observado en lo corrido de este siglo.
(iii) En la medida que la inflación ha ido convergiendo a su meta de 3%, las diferentes tasas de
interés reales han descendido. En marzo, el crecimiento del crédito total se aceleró levemente,
impulsado por el comportamiento del crédito comercial e hipotecario.
(iv) Las primas de riesgo de varias economías emergentes han descendido recientemente, los
activos financieros en moneda local se han valorizado y sus monedas se han apreciado frente al
dólar. Los anteriores cambios han sido más acentuados en Colombia, especialmente en el mercado
de deuda pública, como resultado de los mayores ingresos de capital extranjero.
(v) Los datos recientes de actividad económica global sugieren que la recuperación mundial
continuará en 2014. En Estados Unidos las últimas cifras indican que su actividad económica podría
mantener una recuperación gradual, mientras que la expansión en la zona Euro continuaría a un
ritmo modesto. La desaceleración de algunas economías emergentes podría acentuarse. Con ello, es
probable que en 2014 el crecimiento promedio de los socios comerciales de Colombia sea similar al
aumento registrado en 2013 y que el promedio de los términos de intercambio se mantenga en
niveles altos.
(vi) Las expectativas sobre un ajuste pausado de la liquidez en los Estados Unidos se mantienen.
Asimismo, se espera que la postura monetaria expansiva en otras economías avanzadas persista por
un período prolongado. Las tasas de interés externas no han presentado cambios significativos y se
mantienen en niveles bajos aunque superiores al promedio observado en 2013.
La mayoría de los miembros de la Junta consideró que la estabilidad macroeconómica y la actual
convergencia de la inflación hacia la meta de largo plazo, son compatibles con una postura de la
política monetaria un poco menos expansiva que la actual. Considera además que un ajuste
gradual y oportuno de esta última reduce la necesidad de ajustes bruscos en el futuro y asegura la
estabilidad macroeconómica. Teniendo en cuenta todo esto y los rezagos con que las acciones de
política monetaria afectan la inflación y el crecimiento, se consideró prudente aumentar en 25
puntos básicos la tasa de interés de intervención.
Un miembro de la Junta manifestó la necesidad de mantener inalterada la tasa de intervención,
teniendo en cuenta que las expectativas de inflación se encuentran perfectamente alineadas con la
meta de 3% fijada por la Junta Directiva del Banco de la República. Adicionalmente, el dato más
probable de crecimiento para 2014 según el equipo técnico del Banco, 4,3%, implica que la brecha
del producto permanecerá en terreno negativo a lo largo del año. Estas consideraciones sugieren la
necesidad de mantener inalterada la postura de la política monetaria hasta cuando se cuente con
mayor información sobre la evolución de la actividad económica en el primer trimestre del año.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva por mayoría consideró apropiado incrementar la tasa de interés de intervención
en 25 pb, y la situó en 3,5%.
La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo del comportamiento y proyecciones de la
actividad económica e inflación en el país, de los mercados de activos y de la situación
internacional. Finalmente, reitera que la política monetaria dependerá de la información disponible.
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2014-05-01 |
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Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República de 30 de
mayo de 2014
El 30 de mayo de 2014 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta
Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público,
Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores,
Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca, César Vallejo
Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo.
A continuación se presenta una síntesis de la visión del equipo técnico del Banco de la República
sobre la situación macroeconómica (sección 1) y posteriormente se reseñan las principales
discusiones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2).
Un mayor detalle de la situación macroeconómica elaborada por el equipo técnico del Banco de la
República se presenta en la sección de datos del informe sobre Inflación de abril de 2014 y el anexo
estadístico.
1. CONTEXTO MACROECONÓMICO
Con respecto al informe trimestral de inflación publicado en marzo de 2014 y teniendo en cuenta la
información disponible a la fecha de la reunión, el equipo técnico encuentra que no se han
presentado cambios significativos en el contexto macroeconómico:
En particular resalta los siguientes elementos:
i. El crecimiento oficial de los Estados Unidos para el primer trimestre fue revisado a la baja. Esta
caída en la actividad económica, que se atribuye a los efectos del fuerte invierno, podría implicar
menores pronósticos en el mercado para todo el año. Pese a ello, es probable que tales revisiones a
la baja no sean significativas, ya que el comportamiento favorable más reciente sugiere que el
choque del primer trimestre fue transitorio. Por otra parte, los principales países emergentes se han
desacelerado, pero mantienen un crecimiento moderado. En este contexto, el DPI estima para 2014
un crecimiento promedio de los socios comerciales de Colombia similar al de 2013.
ii. La Fed volvió a reducir sus compras de activos financieros. Las tasas de interés externas se
redujeron y el mercado espera que el primer incremento en la tasa de interés de referencia de la Fed
ocurra en la segunda mitad de 2015. En la zona del euro el BCE estaría considerando implementar
nuevas medidas de estímulo monetario.
iii. En mayo las medidas de aversión al riesgo global y las primas de riesgo de los principales países
de la región se redujeron levemente y se mantienen por debajo de los promedios observados en lo
corrido del año y de 2013.
iv. En los primeros tres meses de 2014 los precios de las exportaciones han descendido más que el
de las importaciones, por lo que los términos de intercambio (TI) se deterioraron. Entre febrero y
marzo los TI se recuperaron debido a los mejores precios del café y el níquel. Se estima que en todo
2014 su promedio sea inferior a la media observada en 2013, pero sus niveles seguirán siendo
favorables.
v. El deterioro en los TI contribuyó a que en el primer trimestre de 2014 se registrara un déficit
comercial externo. En lo corrido del año, y en términos anuales, las exportaciones descendieron
debido a la caída de las ventas externas de origen minero e industrial (las agrícolas aumentaron). En
el mismo período las importaciones crecieron debido a las mayores compras internacionales de
materias primas. El valor de las importaciones de consumo fue similar al de un año atrás, mientras
que el de los bienes de capital cayó. Con todo esto se incrementó la probabilidad de que en el
presente año se registre una ampliación en el déficit de la cuenta corriente.
vi. Las nuevas cifras para el primer trimestre del año del comercio al por menor y de expectativas
económicas del Banco ratifican el buen comportamiento proyectado del gasto de los hogares, en
especial en bienes durables. Por el lado de la oferta, al corregir por días hábiles, las cifras de
industria indican un crecimiento bajo del sector, similar al estimado.
vii. En abril la confianza de los consumidores se mantuvo en niveles por encima de su promedio
histórico. Según la encuesta de Fedesarrollo, la confianza de industriales y comerciantes continúa al
alza (series desestacionalizadas). En el mismo mes, las ventas de vehículos retrocedieron, pero su
componente tendencial volvió a crecer. De todos modos, hay que advertir que las cifras del segundo
trimestre estarán afectadas por los menores días hábiles, y por ello, el desempeño de la economía en
este período puede ser menor al del primero.
viii. En abril el crédito bancario presentó de nuevo mayores ritmos de aumento, como consecuencia
de una mejor dinámica de los préstamos comerciales (en pesos) e hipotecarios y por una cartera de
consumo que dejó de desacelerarse. Las tasas de interés reales de los diferentes tipos de créditos
volvieron a descender, debido al aumento de la inflación sin alimentos.
ix. Con todo lo anterior, el crecimiento proyectado más probable para los primeros tres meses de
2014 (4,8%) no cambió frente a la estimación del informe pasado. De esta forma, las estimaciones
sugieren que en 2014 la brecha del producto sería negativa, pero cercana a cero, y que en 2015 se
situaría por encima de este valor.
x. En materia de precios, la inflación en abril fue de 0,46%, superior al promedio estimado por el
mercado y al pronóstico de la SGEE. Con ello, la inflación anual se situó en 2,72%. Asimismo, el
promedio de las cuatro medidas de inflación básica continuó con su tendencia creciente y se situó
en 2,75%. Al igual que en el mes anterior, la variación anual de los no transables se desaceleró
levemente, mientras que los otros grupos registraron mayores ritmos de aumento.
xi. Ante estos resultados, las expectativas de inflación a un año de los analistas aumentaron a 3,2%.
Las que surgen de los títulos de deuda pública a 2, 3 y 5 años han sido volátiles y se sitúan
alrededor de 3%. En cuanto a los costos, en abril los salarios de la industria y el comercio volvieron
a registrar mayores ritmos de aumento, con variaciones anuales superiores al límite superior del
rango meta. Esto, en un contexto de una tasa de desempleo con tendencia decreciente y que se sitúa
en un nivel similar a la estimación de la Nairu. El costo de las materias primas en la industria se
habría acelerado, a juzgar por el aumento del IPP (consumo intermedio: 4,8%).
En resumen, para el equipo técnico del Banco de la República el contexto macroeconómico se
caracteriza por una brecha de producto ligeramente negativa, una inflación que converge más rápido
hacia el punto medio del rango meta, unas expectativas de inflación de los analistas que aumentaron
y superan el 3%, un nuevo descenso en las tasas de interés reales desde niveles bajos con respecto a
los promedios históricos y una aceleración del crecimiento del crédito.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
Los miembros de la Junta Directiva coinciden en que las expectativas de inflación se encuentran
ancladas en la meta de mediano plazo del Banco, y que los datos recientes de inflación observada, si
bien muestran una aceleración mayor a la esperada, forman parte del proceso de convergencia hacia
la meta. Además mencionaron que una parte de este fenómeno obedece a la corrección de la
reducción que tuvo el índice de ciertas subcanastas durante 2013, y que por su naturaleza, era
transitoria.
En cuanto al producto, los miembros de la Junta Directiva coincidieron en que la economía crecerá
en 2014 al menos 4,3%, que es el pronóstico central del equipo técnico. Existen algunas diferencias
en el grupo sobre cuál sería el crecimiento del PIB potencial, de la demanda agregada y de la
velocidad del cierre de la brecha del producto. En particular, algunos miembros esperan que tanto el
crecimiento del PIB potencial como el observado, sean superiores a los proyectados por el equipo
técnico del Banco.
En el marco de análisis que se lleva a cabo en la determinación de la postura de la política
monetaria, también se hace un seguimiento a las variables financieras. En este sentido, varios
directores mencionaron que el crecimiento del endeudamiento de los hogares y de las empresas y la
evolución de los indicadores de carga financiera representan una acumulación de riesgos en los
balances de los agentes de la economía. Resaltaron que en la actualidad un aumento en la tasa de
interés de intervención es coherente con el objetivo de reducir el estímulo a la acumulación de
dichos riesgos, aún más si se tiene en cuenta que la tasa de interés real de la economía ha estado
baja por un período prolongado de tiempo.
Los miembros de la Junta Directiva consideraron que en el contexto anteriormente descrito, es
deseable continuar con el retiro gradual del estímulo monetario, lo que implica un incremento en la
tasa de interés de intervención. Esta opción de política recoge el hecho de que tanto la brecha del
producto como de la inflación se irán cerrando a lo largo del año, y contrarresta las presiones a la
baja que el aumento en la inflación genera en las tasas de interés reales, al tiempo que contribuye a
moderar una acumulación excesiva de riesgos en los balances de la economía.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva por unanimidad consideró apropiado incrementar la tasa de interés de
intervención en 25 pb, y la situó en 3,75%.
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2014-06-01 |
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Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 20
de junio de 2014
El 20 de Junio de 2014 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta
Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público,
Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores,
Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca, César Vallejo
Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo.
A continuación se presenta una síntesis de la visión del equipo técnico del Banco de la República
sobre la situación macroeconómica (sección 1) y posteriormente se reseñan las principales
discusiones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2).
Un mayor detalle de la situación macroeconómica elaborada por el equipo técnico del Banco de la
República se presenta en la sección de datos del informe sobre Inflación de abril de 2014 y el anexo
estadístico.
1. CONTEXTO MACROECONÓMICO
En relación con el contexto macroeconómico el equipo técnico resalta los siguientes elementos:
i. La información disponible señala que los principales países desarrollados siguen expandiéndose a
un ritmo moderado. En el caso de los Estados Unidos el repunte de la actividad manufacturera, las
ventas al por menor, la creación de empleo y la confianza del consumidor, según indicadores a
mayo, parecen sugerir una recuperación de la actividad económica frente al primer trimestre. Pese a
ello, el Banco Mundial y algunos analistas redujeron recientemente sus pronósticos de crecimiento
de esta economía para 2014. En cuanto a la economía de la Zona Euro, ésta continúa creciendo a un
ritmo modesto, a pesar de la mejoría en la confianza de consumidores y productores. El crecimiento
de las economías emergentes de Asia se ha estabilizado, en tanto que en diversos países de América
Latina ha predominado la desaceleración, con excepción de Colombia.
ii.El comportamiento de los precios de los bienes básicos ha sido dispar. La cotización del petróleo
continúa por encima del pronóstico del equipo técnico del Banco para 2014 y en las últimas
semanas ha repuntado por factores geopolíticos; la del carbón permaneció estable, la del níquel
presentó una tendencia alcista en lo corrido del año, a pesar de alguna caída durante las últimas
cuatro semanas y la del café mostró cierto retroceso. Para el caso de los precios de los alimentos
importados como el trigo y el maíz, en las últimas semanas se observaron descensos.
iii. En la zona del euro persisten riesgos de deflación, lo que ha llevado al Banco Central Europeo a
anunciar nuevas medidas de estímulo monetario. En Japón y los Estados Unidos la inflación ha
aumentado recientemente, al igual que en varias economías de América Latina. En Asia se observa
estabilidad.
iv.Los mercados financieros globales han presentado un desempeño favorable durante las últimas
semanas. Los índices de actividad bursátil se valorizaron y la percepción de riesgo se redujo. En
América Latina las primas de riesgo continuaron descendiendo, en tanto que las tasas de cambio
respecto al dólar de las principales monedas han mostrado comportamientos disímiles. En los casos
de Chile y Perú se ha presentado cierta estabilidad, que contrasta con los altibajos que se observan
en Brasil y la tendencia decreciente de Colombia. En este último caso como resultado de las
entradas de capital relacionadas con los cambios en los portafolios de referencia de JP Morgan. No
obstante, los síntomas de un mejor desempeño de la economía de los EEUU y su efecto sobre las
expectativas de un ajuste de las tasas de interés de política en ese país, hacen que la tendencia futura
de las tasas de cambio en la región sea particularmente incierta.
v.En abril el valor en dólares de las exportaciones colombianas disminuyó frente a igual mes del año
anterior. Esto se explica por la caída generalizada de los principales rubros (productos mineros,
industriales y principales bienes agrícolas). En el acumulado enero-abril se redujeron las ventas
externas de productos mineros por efecto de los menores precios, mientras que las agrícolas
crecieron. Para las exportaciones no tradicionales, la contracción se explica, en gran medida, por
las disminuciones registradas en las ventas externas de vehículos y de bienes agrícolas distintos a
café, banano y flores.
vi.El crecimiento anual del PIB del primer trimestre de 2014 fue 6,4% y se revisó al alza el de 2013.
Por el lado de la oferta se destaca la dinámica positiva de todas las ramas de actividad, en particular
los sectores de construcción, servicios sociales, el sector agropecuario y el financiero. Es
importante resaltar que la industria registró un crecimiento de 3.3%, luego de dos años de tasas
negativas.
vii.Aunque aún no se han publicado las cifras del PIB por el lado de la demanda, la información
disponible sugiere que la aceleración de la actividad económica se habría explicado por el
dinamismo de la demanda interna, y en especial por el componente de inversión (según lo muestra
el crecimiento del sector de la construcción y los datos de importaciones de bienes de capital para la
industria y para la agricultura).
viii.Para el segundo trimestre los indicadores de ventas y confianza del consumidor señalan que el
consumo de los hogares mantiene su dinámica. En particular, las cifras de ventas de vehículos
publicadas por Fenalco y Econometría sugieren que el consumo durable habría registrado un
comportamiento favorable durante el segundo trimestre.
ix.Lo anterior es coherente con el comportamiento de la cartera de consumo en el mes de mayo, la
cual dejó de desacelerarse y registró un aumento leve en su ritmo de crecimiento. Por otro lado, los
indicadores del mercado laboral continúan sugiriendo mejoras en las condiciones de trabajo. El
crecimiento del empleo se ha mantenido en tasas aceptables en los últimos meses, y está
concentrado principalmente en el componente asalariado.
x.A lo anterior se suma que las tasas de interés reales de los hogares al igual que las comerciales
están descendiendo y ambas se ubican por debajo de su promedio desde 2000, como resultado del
aumento de la inflación y su efecto sobre las expectativas. Esto puede ser un factor que explique el
repunte que se observa en el crecimiento de las carteras comercial y de consumo. Igualmente, la
cartera hipotecaria ha venido acentuando su tendencia positiva.
xi.En mayo la inflación anual al consumidor continuó con la tendencia ascendente que trae desde el
comienzo del año. Este aumento se explica principalmente por el comportamiento de los precios de
los alimentos. En el año corrido los alimentos también fueron el rubro que más contribuyó al
aumento de la inflación.
xii.Cabe destacar dos aspectos sobre el comportamiento reciente de la variación de los precios al
consumidor: i) El IPC sin alimentos fue el único indicador de inflación básica que se redujo, y ii)
los indicadores de expectativas muestran alzas y algunos empiezan a sobrepasar el punto medio del
rango meta.
xiii.El estado de la economía descrito por la información de crecimiento para el primer trimestre,
los indicadores positivos que se conocen para el segundo trimestre, y la posible revisión al alza del
pronóstico del PIB para el año completo que esto podría significar, sugieren que la demanda crece a
un ritmo superior que el PIB potencial. Lo anterior, combinado con el registro de unas expectativas
de inflación al alza, aumenta la probabilidad de que las presiones inflacionarias puedan estar
propagándose a toda la economía.
xiv.En síntesis, se podría afirmar que los datos más recientes muestran una economía y una
inflación creciendo más rápido de lo previsto, con lo cual las expectativas han sido presionadas al
alza. La tasa de interés real se mantiene en un nivel bajo (frente a su promedio desde el año 2000) y
puede continuar estimulando la demanda interna.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
La Junta Directiva coincidió en que la economía creció en el primer trimestre del año con una
dinámica mayor a la esperada y a la que había tomado en consideración los modelos del equipo
técnico del Banco. Además, en que, independientemente de las diferentes opiniones que existen
sobre el crecimiento del PIB potencial, la brecha se está cerrando a una tasa más acelerada que la
antes prevista o incluso, en opinión de algunos miembros, ya se cerró.
En cuanto a la inflación, los miembros de la Junta coincidieron en que las expectativas a pesar de
haberse incrementado recientemente, se encuentran ancladas en la meta. Así mismo, coincidieron
en que buena parte del aumento de la variación anual del los precios al consumidor se debe a la
reversión esperada en algunos alimentos perecederos, así como en la reducción en los aumentos de
precios de algunos bienes y servicios regulados. Varios miembros de la Junta manifestaron que
podrían existir presiones inflacionarias surgidas de la aceleración de la demanda. Otro agregó que
durante el pasado reciente las variaciones de la tasa de inflación han sido determinadas
fundamentalmente por el comportamiento de los precios de los alimentos, en especial de los
perecederos, y que dicho comportamiento, a su vez, ha sido el resultado de factores climáticos, esto
es de choques de oferta, en vez de excesos de demanda.
La Junta señaló que un ajuste gradual de la tasa de interés de intervención se justifica teniendo en
cuenta los siguientes aspectos: (i) la volatilidad e incertidumbre de los datos de inversión pública,
que han constituido la principal sorpresa en el crecimiento; (ii) el debilitamiento del comercio
internacional, y (iii) los impactos de la política monetaria de los Estados Unidos.
Los miembros de la Junta Directiva consideraron que en el contexto anteriormente descrito, es
necesario continuar con el proceso de normalización de la política monetaria y monitorear de cerca
la reacción de los balances del sistema financiero.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva por unanimidad consideró apropiado incrementar la tasa de interés de
intervención en 25 pb, y la situó en 4%.
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2014-07-01 |
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Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 31
de julio de 2014
El 31 de julio de 2014 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta
Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público,
Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores,
Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca, César Vallejo
Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo.
A continuación se presenta una síntesis de la visión del equipo técnico del Banco de la República
sobre la situación macroeconómica (sección 1) y posteriormente se reseñan las principales
discusiones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2).
Un mayor detalle de la situación macroeconómica elaborada por el equipo técnico del Banco de la
República se presenta en la sección de datos del informe sobre Inflación de junio de 2014 y en el
anexo estadístico.
1. CONTEXTO MACROECONÓMICO
En relación con el contexto macroeconómico el equipo técnico resalta los siguientes elementos:
i. En el informe del mes de junio de 2014 se redujo el pronóstico de crecimiento promedio de los
principales socios comerciales de Colombia para todo 2014. Ello como consecuencia de la caída del
producto de los Estados Unidos registrada a comienzo de año y por la desaceleración más acentuada
que la estimada en algunos países de la región. El nuevo pronóstico tiene implícita una demanda
externa más dinámica en el segundo semestre, debido al repunte esperado en la actividad económica
de los Estados Unidos.
ii. En Estados Unidos las tasas de interés de largo plazo descendieron a lo largo del segundo
trimestre, pero se mantienen por encima del promedio observado en 2013. El promedio del mercado
proyecta que las compras de activos financieros por parte de la Reserva Federal (FED) culminen en
octubre de 2014. También, que el primer incremento en su tasa de interés de referencia se dé a
mediados de 2015.
iii. En la economía global persisten algunos riesgos asociados a la dinámica de la economía China y
otros países emergentes, así como al temor de deflación en la zona del euro. No obstante, la
información más reciente de crecimiento del segundo trimestre para China y España resultó mejor
que la esperada.
iv. En lo corrido del año las medidas de riesgo país de Colombia presentaron una tendencia
decreciente y a finales de julio se situaron en niveles bajos e inferiores al promedio de 2013. Los
términos de intercambio han estado relativamente estables, con niveles algo inferiores al promedio
registrado el año pasado. Es probable que en la segunda mitad del año los términos de intercambio
continúen siendo favorables y contribuyan a sostener el ingreso nacional en niveles que se pueden
calificar como históricamente altos.
v. En el bimestre abril- mayo de 2014 el valor de las exportaciones en dólares resultó menor que el
observado un año atrás. El mayor deterioro lo presentaron las ventas externas mineras seguidas de
las industriales. Las exportaciones de los principales productos agrícolas siguen muy dinámicas
impulsadas por las ventas externas de café y banano. De esta forma, en lo corrido del año hasta abril
el valor de las exportaciones totales en dólares acumula una caída de 4,6% anual.
vi. Por el contrario, en abril el valor de las importaciones en dólares se incrementó en términos
anuales, jalonado por las compras externas destinadas al consumo final e intermedio y, en menor
medida, por las de bienes de capital. En lo corrido del año hasta abril las importaciones totales
crecieron a una tasa del 4,5% respecto al mismo período del año anterior.
vii. De acuerdo con las anteriores tendencias de comercio exterior, es probable que en todo 2014 la
balanza comercial sea negativa y que el déficit en la cuenta corriente sea mayor que el registrado en
2013.
viii. En el contexto interno, la recuperación de la confianza del consumidor, el aumento del crédito
de consumo, el buen crecimiento de las ventas al por menor y las constantes mejoras del mercado
laboral sugieren que en el segundo trimestre el gasto real de los hogares mantendría un buen ritmo
de crecimiento, aunque algo inferior al observado a comienzos de año. También se espera que la
inversión crezca a un menor ritmo, más cercano al de su tasa histórica de crecimiento. Lo anterior, a
juzgar por el comportamiento de las expectativas de inversión de las empresas (EMEE) y de las
importaciones de bienes de capital, principalmente las destinadas al transporte.
ix. Por el lado de la oferta, se espera que en el segundo trimestre la inversión en obras civiles y en
construcción de edificaciones registre un crecimiento alto, pero inferior al observado en el primero.
La industria no crecería, en parte afectada por un choque de oferta transitorio en el sector de
derivados del petróleo y por el menor número de días hábiles observados en abril (semana santa).
x. En el segundo trimestre de 2014 los depósitos bancarios crecieron a un menor ritmo anual. En el
mismo periodo también se presentó una recomposición de los activos de los establecimientos de
crédito a favor de la cartera, principalmente hacia la comercial. La venta de parte de las inversiones
(TES) de dichos establecimientos a agentes extranjeros fue la principal fuente de financiación del
crecimiento del crédito. Así, la cartera bancaria en moneda nacional se aceleró y registra tasas de
aumento superiores al crecimiento del PIB nominal estimado para el presente año.
xi. El incremento en las tasas de interés de referencia se ha transmitido hacia las tasas de interés de
crédito, a una velocidad similar a la observada en los últimos diez años.
xii. En términos reales, todas las tasas de interés de crédito (exceptuando tarjetas de crédito) se
encuentran por debajo del promedio calculado desde 2000.
xiii. Con todo lo anterior, para el segundo trimestre de 2014 el equipo técnico proyecta una tasa
anual de crecimiento entre 3,6% y 5,0%, con 4,3% como cifra más probable. Ello representaría una
desaceleración con respecto al primer trimestre, en parte explicada por el menor número de días
hábiles. Si dicho pronóstico se materializa, en la primera mitad de 2014 la economía crecería a una
tasa similar a la registrada en el segundo semestre de 2013.
xiv. Para todo 2014 el equipo técnico revisó al alza el rango de pronóstico y lo situó en un intervalo
entre 4,2% y 5,8%, con 5% como cifra más probable.
xv. En junio la inflación anual se situó en 2,79%, cifra inferior al registro de mayo y menor al
pronóstico promedio del mercado y del equipo técnico. Esta pausa en la aceleración de la inflación
se dio después de seis meses de continuo incremento y se explicó principalmente por los grupos de
alimentos y no transables sin alimentos ni regulados. El promedio de las medidas de inflación
básica ha presentado un comportamiento similar y se situó en 2,76%.
xvi. Las expectativas de inflación de los analistas a un año, al igual que las que resultan de los
papeles de deuda pública a dos, tres y cinco años se mantienen cerca de la meta de largo plazo (3%).
En síntesis, la demanda agregada en Colombia ha mantenido un fuerte crecimiento en el contexto
de un uso de la capacidad productiva cercano al pleno empleo. Se espera que el gasto interno
mantenga un ritmo de crecimiento dinámico, acompañado de una recuperación de la demanda
externa. La aceleración de la inflación presentó una pausa en junio, pero los pronósticos de corto
plazo (PCP) sugieren que a diciembre se situará algo por encima del 3%. Las expectativas de
inflación se han situado cerca o levemente por encima del 3%. Todo esto ocurre en un ambiente en
el cual el crecimiento del crédito ha aumentado y las tasas de interés reales de los préstamos se
sitúan en niveles que impulsan el gasto.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
En materia de inflación los miembros de la Junta destacaron que las expectativas se ubican
alrededor de la meta, y que se espera que continúen con dicha dinámica. En cuanto a la inflación,
esperan que haya algunos choques adicionales de oferta, en particular en alimentos y regulados, que
impacten datos puntuales del dato total de inflación y se espera que éstos no contaminen las
expectativas generales, por su naturaleza y transitoriedad.
La mayoría de los miembros de la Junta consideran que la brecha del producto se cerró debido a la
fuerte dinámica de la demanda interna y al crecimiento del PIB. Además, que de mantenerse
inalterada la tasa de interés, podría llegar a generarse un exceso de demanda que comprometería la
estabilidad del crecimiento y la inflación. Coincidieron también en que existen riesgos de choques
exógenos a la política monetaria relacionados con el comportamiento de la demanda externa y el
impacto en la demanda interna de la política fiscal y resaltaron que la nueva información será
especialmente relevante para definir la necesidad de movimientos posteriores de la tasa de interés
de intervención.
Otro miembro de la Junta manifestó que, aunque en su opinión la brecha del producto aún no se
halla cerrada, resulta clara la convergencia tanto de la inflación total y de las expectativas hacia la
meta, y del crecimiento del PIB hacia su potencial, que es precisamente lo que desde el inicio del
ciclo de normalización de la política a partir de abril se buscaba. Por tanto, no cree conveniente
hacer una pausa en el reajuste de la tasa de interés antes de llegar a su rango de normalización
donde debería culminar este ciclo de reajustes, del cual el actual nivel de la misma se halla muy
cercano.
Un miembro de junta considera que la economía se encuentra cerca al equilibrio y que ante los
riesgos de reducción de la demanda agregada no resulta apropiado incrementar la tasa de interés. En
efecto, factores exógenos como un deterioro de la confianza externa o una caída en el precio de los
commodities podrían desacelerar la dinámica que la economía ha presentado en la primera mitad
del año, con lo cual una tasa de interés de intervención del 4% sería consistente con una economía
creciendo a su ritmo potencial pero con riesgos de desaceleración en el corto plazo.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva por mayoría consideró apropiado incrementar la tasa de interés de intervención
en 25 pb, y la situó en 4,25%.
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2014-08-01 | -
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 29
de agosto de 2014
El 29 de agosto de 2014 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta
Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público,
Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores,
Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca, César Vallejo
Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo.
A continuación se presenta una síntesis de la visión del equipo técnico del Banco de la República
sobre la situación macroeconómica (sección 1) y posteriormente se reseñan las principales
discusiones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2).
Un mayor detalle de la situación macroeconómica elaborada por el equipo técnico del Banco de la
República se presenta en la sección de datos del informe sobre Inflación de junio de 2014 y en el
anexo estadístico.
1. CONTEXTO MACROECONÓMICO
En relación con el contexto macroeconómico el equipo técnico resalta los siguientes elementos:
En el presente informe, la nueva información disponible sugiere que el pronóstico de crecimiento
para 2014 del promedio de los socios comerciales de Colombia podría ser algo menor frente al
pasado informe. Ello, como consecuencia del crecimiento nulo en la zona del euro en el segundo
trimestre y por una desaceleración más acentuada que la estimada en algunos países de la región. En
el mismo periodo, el aumento del PIB de los Estados Unidos estuvo en línea con lo proyectado y es
coherente con la estimación anual. Para el segundo semestre se espera una demanda externa más
dinámica, debido al repunte proyectado en la actividad económica de los Estados Unidos.
En lo corrido de agosto las tasas de interés de largo plazo en los Estados Unidos continuaron con su
tendencia decreciente, pero se mantienen por encima del promedio observado en 2013. Se espera
que las compras de activos financieros por parte de la Reserva Federal (FED) culminen en octubre
de 2014. En general, el mercado proyecta que el primer incremento en su tasa de interés de
referencia ocurra a mediados de 2015.
Las tensiones geopolíticas mundiales y los problemas de deuda pública en Argentina han generado
volatilidad en las medidas de riesgo mundial y en los países de la región. Pese a ello, en agosto
dichas medidas para Colombia se mantienen en niveles bajos e inferiores al promedio de 2013.
En el segundo trimestre de 2014 el nivel de los términos de intercambio ha sido algo inferior al
registrado un año atrás. Es probable que en lo que resta del año continúen con una leve tendencia
decreciente, pero contribuyendo a mantener el ingreso nacional en niveles que se pueden calificar
como históricamente altos.
En el segundo trimestre de 2014, la caída anual en el valor de las exportaciones en dólares fue
similar a la observada en los primeros tres meses del año. En esta oportunidad el mayor deterioro lo
presentaron las ventas externas de bienes industriales, mientras que las mineras registraron una
caída menor que la observada en el primer trimestre. Las exportaciones de los principales productos
agrícolas siguen muy dinámicas, impulsadas por las ventas externas de café y banano. De esta
forma, en el primer semestre el valor de las exportaciones totales en dólares acumuló una caída de
4,5% anual.
Con respecto a las importaciones en dólares, en el segundo trimestre su valor creció a un mayor
ritmo anual que el observado en el primer trimestre. La aceleración en las compras externas se
registró tanto en las destinadas al consumo final como en las dirigidas a bienes de capital. Con ello,
en el primer semestre las importaciones totales crecieron 6,1% anual.
De acuerdo con las anteriores tendencias de comercio exterior, es probable que en todo 2014 la
balanza comercial sea negativa y que el déficit en la cuenta corriente sea mayor que el registrado en
2013. De todas maneras hay que advertir que el choque de oferta ocasionado por el cierre temporal
de la refinería de Cartagena podría explicar parte de la ampliación de este déficit.
En el contexto interno, la nueva información con cierre a junio sugiere que el crecimiento del
segundo trimestre estaría en línea con lo proyectado en el Informe sobre Inflación trimestral pasado.
El gasto real de los hogares mantendría un buen ritmo de expansión, aunque algo inferior al
observado a inicios de año. También, se espera que la inversión crezca un ritmo menor y más
cercano al de su tasa histórica de crecimiento.
Por el lado de la oferta, se espera que en el segundo trimestre la inversión en obras civiles y en
construcción de edificaciones registre un crecimiento alto, pero inferior al observado en el primero.
La producción industrial (incluye trilla de café) podría ser algo menor al registro de un año atrás, en
parte afectada por un choque de oferta transitorio en el sector de derivados del petróleo y por el
menor número de días hábiles observados en abril (Semana Santa).
Para el tercer trimestre las cifras económicas son escasas y sugieren señales mixtas. Por un lado, la
nueva información a julio del Índice de Confianza del Consumidor, de las expectativas de los
comerciantes, de las ventas de automóviles y del crédito de consumo, indican que el gasto de los
hogares continuó expandiéndose de manera satisfactoria. De igual forma, la encuesta de
Fedesarrollo aplicada a la industria apunta a que el proceso de recuperación de este sector continuó.
Por el contrario, en julio la producción de petróleo retrocedió y volvió a situarse por debajo del
millón de barriles diarios.
En julio y lo corrido de agosto la cartera bancaria en moneda nacional se desaceleró frente al primer
semestre del año. La menor dinámica de la cartera comercial y, en menor medida, de la hipotecaria,
explicaron dicha desaceleración. La cartera de consumo continúa creciendo a una tasa estable.
Todas las modalidades registran aumentos anuales superiores al crecimiento del PIB nominal
estimado para el presente año.
En julio se debilitó el traspaso de los incrementos de la tasa de interés de referencia hacia las tasas
de interés de los créditos. En términos reales, todas las tasas de interés de crédito (exceptuando las
de tarjetas) se encuentran por debajo del promedio calculado desde 2000.
Con todo lo anterior, para el segundo trimestre de 2014 el equipo técnico mantuvo la proyección de
crecimiento entre 3,6% y 5,0%, con 4,3% como cifra más probable. Para todo 2014 se sigue
estimando un rango entre 4,2% y 5,8%, con 5% como cifra más factible. Los modelos sugieren que
la brecha de producto podría ser levemente positiva en el presente año.
En julio la inflación anual retomó su convergencia hacia la meta de largo plazo y se situó en 2,89%.
Como ha sido frecuente en lo corrido del año, la tendencia creciente en la variación anual de los
precios regulados y de los alimentos explicó la aceleración de la inflación del mes pasado.
En los últimos dos meses el promedio de las medidas de inflación básica descendió y en julio se
situó en 2,58%. Esta desaceleración también se observó en los grupos de transables y no transables
sin alimentos ni regulados. Las expectativas de inflación de los analistas a un año, al igual que las
que resultan de los papeles de deuda pública a dos, tres y cinco años, se mantienen cerca o
levemente por encima de la meta de largo plazo (3%).
En síntesis, la nueva información disponible indica que la demanda agregada del país mantiene su
dinamismo. Los pronósticos apuntan a que el gasto interno continuará creciendo a buen ritmo junto
a una recuperación de la demanda externa más lenta de lo proyectado. Si bien la tendencia
decreciente de la tasa de desempleo podría reflejar factores estructurales, la fortaleza de la demanda
agregada podría llevarla a niveles que generen presiones de costos salariales sobre los precios. La
inflación retomó su sendero de convergencia hacia la meta de largo plazo y las proyecciones de
corto plazo y las expectativas de inflación continúan algo por encima del 3%, aunque las medidas
de inflación básica han disminuido en los dos últimos meses. La transmisión de las alzas de la tasas
de interés de intervención a las tasas de interés del sistema financiero se ha debilitado, al tiempo con
una reducción del crecimiento del crédito.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
La Junta Directiva por mayoría consideró apropiado incrementar la tasa de interés de intervención
en 25 pb, y la fijó en 4,5%.
Unos directores coincidieron en la decisión de incrementar la tasa considerando que la información
de la dinámica económica continúa siendo positiva en la mayoría de sectores analizados; además, la
tasa de interés real sigue estimulando la actividad económica.
Por su parte, otro director afirmó que con este incremento de 25 pb se culminaría el proceso de
normalización de la política monetaria que se inició en abril de este año.
Unos miembros consideraron que existe evidencia de ajuste en algunas variables económicas
claves, con lo que se considera que la política monetaria está logrando sus efectos tanto en
crecimiento como en inflación, particularmente en los indicadores de inflación básica. Para algunos
de ellos, el balance de riesgos sugiere incrementar la tasa de intervención en 25 puntos básicos con
el fin de asegurar la consolidación del proceso de normalización de la postura monetaria y el anclaje
de las expectativas de inflación a la meta. Para otros, teniendo en cuenta el rezago con que actúa la
política monetaria, no es necesario incrementar más la tasa de intervención, por lo que votaron en
favor de mantener la tasa en 4,25%. Estos últimos resaltaron que existen factores exógenos que
estarían contribuyendo a desacelerar la actividad económica.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva por mayoría consideró apropiado incrementar la tasa de interés de intervención
en 25 pb, y la fijó en 4,5%.
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2014-09-01 |
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Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 26
de septiembre de 2014
El 26 de septiembre de 2014 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la
Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito
Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los
Directores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca,
César Vallejo Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo.
A continuación se presenta una síntesis de la visión del equipo técnico del Banco de la República
sobre la situación macroeconómica (sección 1) y posteriormente se reseñan las principales
discusiones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2).
Un mayor detalle de la situación macroeconómica elaborada por el equipo técnico del Banco de la
República se presenta en la sección de datos del informe sobre Inflación de junio de 2014 y en el
anexo estadístico.
1. CONTEXTO MACROECONÓMICO
En relación con el contexto macroeconómico el equipo técnico resalta los siguientes elementos:
La nueva información de la actividad económica mundial sugiere que el crecimiento promedio de
nuestros socios comerciales para 2014 podría ser algo menor que lo estimado en el escenario central
del informe trimestral pasado (2,5%). Ello, como consecuencia de la pérdida de dinamismo en la
zona del euro y por una desaceleración más acentuada en China y en algunos países de la región.
Por el contrario, en los Estados Unidos se ha observado un desempeño en su actividad económica
algo mayor que lo estimado. De esta forma, es probable que en el segundo semestre la recuperación
de la demanda externa por los productos colombianos sea más lenta de lo pronosticado en informes
anteriores.
Se espera que las compras de activos financieros por parte de la Reserva Federal (FED) culminen en
octubre de 2014. También, se sigue proyectando que el primer incremento en la tasa de interés de
referencia de la FED ocurra a mediados de 2015, pero con ajustes algo más rápidos a los esperados
en meses anteriores. Ante este escenario, las tasas de interés de largo plazo de los bonos del
gobierno de Estados Unidos dejaron de descender en las últimas semanas y se situaron en niveles
superiores al promedio observado en 2013.
En las últimas semanas las primas de riesgo de varios países de la región se han incrementado, pero
se mantienen en niveles bajos e inferiores al promedio registrado en 2013. El precio internacional
del petróleo, al igual que las cotizaciones de algunos bienes básicos que importa Colombia,
descendieron. Cálculos preliminares indican que el deterioro en los términos de intercambio podría
ser mayor que lo estimado en el informe trimestral pasado.
En julio el valor de las exportaciones en dólares se recuperó y se situó por encima del promedio
registrado en el primer semestre del año. La recuperación fue más acentuada en las ventas externas
de bienes de origen minero y agrícola. En los primeros siete meses del año, el valor de las
exportaciones totales en dólares acumuló una caída de 2,6% (en el primer semestre fue de -4,5%).
Las importaciones en dólares se aceleraron y en julio registraron su mayor valor mensual histórico.
El crecimiento anual más alto se dio en las destinadas a bienes de capital, principalmente por
compras de aviones. Las importaciones de bienes de consumo e intermedios también registraron
crecimientos importantes. En lo acumulado entre enero y julio, las importaciones totales crecieron
8,1%, 2 pp más que lo registrado en el primer semestre del año.
Las anteriores tendencias de comercio exterior aumentaron la probabilidad de que en todo 2014 la
balanza comercial sea negativa y que se presente una ampliación en el déficit de la cuenta corriente
frente a 2013. El choque de oferta ocasionado por el cierre temporal de la refinería de Cartagena
explica parte de la ampliación de este déficit.
En el contexto interno, el crecimiento económico del segundo trimestre de 2014 (4,3%) estuvo en
línea con lo proyectado. La demanda interna y sus principales componentes (consumo e inversión)
se desaceleraron, pero mantienen aumentos superiores a los del PIB total. Las exportaciones
cayeron mientras que las importaciones se desaceleraron. Por el lado de la oferta, los sectores
económicos más dinámicos fueron las obras civiles, seguido de servicios financieros, inmobiliarios
y a las empresas, y servicios sociales comunales y personales. Además del minero, el otro sector
que presentó una caída fue la industria, en parte explicada por el cierre temporal de la refinería de
Cartagena.
Para el tercer trimestre, las nuevas cifras de actividad económica sugieren que el crecimiento en este
período podría ser algo mayor que el registrado en el segundo. Esto se observa en el
comportamiento, a julio, del comercio al por menor, de la producción industrial, de las licencias de
construcción y producción de cemento, y en las cifras de café y demanda de energía a agosto. No
obstante, la producción de petróleo continuó contrayéndose en el bimestre julio-agosto.
En agosto y lo corrido de septiembre, el crecimiento de la cartera bancaria en moneda nacional
continuó con su tendencia decreciente. La menor dinámica de la cartera comercial y, en menor
medida, de la hipotecaria, explicaron dicha desaceleración. La cartera de consumo continúa
creciendo a una tasa estable. Todas las modalidades registran aumentos anuales superiores al
crecimiento del PIB nominal estimado para el presente año.
10. En agosto el traspaso de los incrementos de la tasa de interés de referencia hacia las tasas de
interés de los créditos se deterioró. Algunos indicadores sugieren que dicho comportamiento se debe
a una mayor oferta de crédito. En términos reales, todas las tasas de interés de crédito (exceptuando
las de tarjetas) se encuentran por debajo del promedio calculado desde 2000.
Con todo lo anterior, para 2014 el equipo técnico sigue estimando un rango de crecimiento entre
4,2% y 5,8%, con 5% como cifra más factible. Esta última cifra implica un aumento del PIB para el
segundo semestre algo menor que el registrado en el primero.
En agosto la inflación anual aumentó y se situó en 3,02%, en línea con lo estimado por el equipo
técnico. Los mayores ajustes en los precios de los alimentos, regulados y no transables sin
alimentos ni regulados, explicaron dicho comportamiento. El promedio de las medidas de inflación
básica retomó su convergencia hacia la meta y se ubicó en 2,7%.
Las expectativas de inflación de los analistas a un año, al igual que las que resultan de los papeles
de deuda pública a dos, tres y cinco años, se mantienen cerca o levemente por encima de la meta de
largo plazo (3%).
En síntesis la demanda agregada continúa mostrando un fuerte crecimiento en un contexto cercano a
la plena utilización de la capacidad productiva. Al tiempo, las expectativas de inflación se
mantienen cerca del 3%. Lo anterior se presenta en un entorno de deterioro de los términos de
intercambio y de mayor incertidumbre sobre la recuperación de la actividad económica mundial y
del costo del financiamiento externo, factores que pueden incidir tanto en la demanda agregada
como en la tasa de cambio.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
La Junta Directiva por mayoría consideró apropiado mantener inalterado el nivel de la tasa de
interés de intervención en 4,5%.
Algunos integrantes de la Junta coinciden con los elementos principales del diagnóstico de corto y
mediano plazo del documento del equipo técnico. Las consideraciones relevantes en el horizonte
tradicional del esquema de inflación objetivo (uno a dos años) son la existencia de una brecha del
producto levemente positiva, una demanda interna que crece a tasas altas y superiores a la esperada,
una inflación que estará en los próximos meses ligeramente por encima del 3% pero unas
expectativas de inflación que hasta ahora muestran señales de estar ancladas a la meta del 3%, y una
tasa de interés de política que lleva implícita una postura monetaria levemente expansiva. Sin
embargo, en la medida que la política monetaria actúa con rezago, es necesario considerar los
riesgos que podrían afectar la confianza y el comportamiento futuro de la economía real, en
particular los inherentes al entorno internacional y la política fiscal. En esa medida consideraron
prudente mantener inalterada en esta ocasión la tasa de intervención en 4,5% y enfatizaron la
importancia de seguir evaluando el desempeño de la economía en la próxima reunión para definir el
futuro de la política monetaria.
Por su parte, otros integrantes de la Junta afirmaron que la información más reciente sobre el
crecimiento del PIB en el segundo trimestre por el lado de la demanda interna, indica una
moderación de la misma, a pesar de que conserva su dinamismo especialmente debido al rubro de
obras civiles. No obstante, dado el rezago entre los movimientos de la tasa de interés de política y
sus efectos plenos sobre la demanda, sus mayores efectos no se sentirán antes del segundo semestre
de 2015 y el primero de 2016. De otra parte, el impulso originado en el comportamiento del sector
minero-energético se ha moderado, al igual que la tendencia descendente de los términos de
intercambio, a lo que se suma la debilidad del sector externo, particularmente de nuestros vecinos
de la región. Finalmente, tanto la inflación total como las expectativas se hallan ancladas en la meta,
lo cual es el objetivo esencial de la política monetaria, en tanto que el promedio de las básicas como
la inflación sin alimentos aún se encuentran por debajo del punto medio del rango meta. Por
consiguiente, se debe mantener la actual tasa de 4,5%.
Otro integrante de la Junta consideró que, con una brecha positiva del producto y una inflación que
continua elevándose en sus expectativas, es prudente continuar aumentando la tasa de interés de
intervención en 25 pb a 4,75% dados los datos de crecimiento de la demanda interna en el segundo
trimestre, los pertinentes al mercado laboral y los indicadores de confianza de empresarios y
consumidores.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
Por mayoría, la Junta Directiva decidió mantener la tasa de interés de intervención en 4,5%.
Bogotá DC, octubre 10 de 2014.
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2014-10-01 | -
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 30
de octubre de 2014
El 30 de octubre de 2014 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la
Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito
Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los
Directores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca,
César Vallejo Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo.
A continuación se presenta una síntesis de la visión del equipo técnico del Banco de la República
sobre la situación macroeconómica (sección 1) y posteriormente se reseñan las principales
discusiones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2).
Un mayor detalle de la situación macroeconómica elaborada por el equipo técnico del Banco de la
República se presenta en la sección de datos del informe sobre Inflación de septiembre de 2014 y en
el anexo estadístico.
1. CONTEXTO MACROECONÓMICO
En relación con el contexto macroeconómico el equipo técnico resalta los siguientes elementos:
En el presente informe se redujo el pronóstico de crecimiento de la demanda externa para este y el
siguiente año frente a lo estimado un trimestre atrás. Las nuevas proyecciones sugieren que en 2015
la recuperación promedio de nuestros socios comerciales sería más lenta e impulsada
principalmente por la economía estadounidense. La zona del euro registraría un bajo crecimiento en
su PIB, pero algo superior al estimado para 2014. China continuaría con su desaceleración, mientras
que la mayoría de países socios de la región se recuperarían en el siguiente año pero presentarían
tasas de crecimiento menores que sus respectivos potenciales.
Las medidas de prima de riesgo de varios países de la zona del euro y de algunas economías
emergentes se han incrementado, aunque de forma moderada. El deterioro observado en la actividad
económica de varios de ellos, así como la mayor incertidumbre sobre su recuperación, explican
parte de este comportamiento. Adicionalmente, las caídas en los precios de los bienes básicos que
exportan algunas de estas economías, principalmente del petróleo, también contribuyeron a
incrementar las medidas de riesgo. Con ello, sus monedas se han depreciado frente al dólar.
En los Estados Unidos, la apreciación del dólar y la caída en los precios internacionales energéticos
contribuirían a aminorar los costos de producción y a reducir la inflación. La tasa de desempleo
volvió a descender pero a niveles que todavía no generan presiones de costos salariales sobre los
precios. La menor cotización de la gasolina también sería un incentivo para que los hogares
incrementen su gasto. No obstante, la recuperación más débil de sus socios comerciales y los
riesgos de una desaceleración en la demanda externa incrementó la incertidumbre sobre el
desempeño de su sector exportador.
Ante la perspectiva de una inflación baja en los Estados Unidos y los mayores riesgos de una
desaceleración en el comercio global, el promedio del mercado espera que el primer incremento en
la tasa de interés de la FED se dé hacia finales de 2015, en lugar de junio del mismo año como lo
proyectaban un trimestre atrás. Este horizonte más lejano en dicho incremento contribuyó al
descenso en las tasas de interés de largo plazo.
Los actuales niveles en el precio internacional del petróleo se sitúan muy por debajo del pronóstico
que tenía el equipo técnico, mientras que los del café siguen en niveles altos. Otros bienes básicos
que importa Colombia, como el maíz, el trigo y la soya también han presentado descensos
importantes en sus cotizaciones internacionales. En el neto, los términos de intercambio han
descendido más de lo previsto, situación que de mantenerse, se verá reflejada en un menor ingreso
nacional.
La debilidad en la demanda externa y los menores precios internacionales de los bienes básicos
mineros se han reflejado en el comportamiento de las ventas externas del país. En lo corrido de
2014 hasta agosto, las exportaciones totales en dólares han caído 2,7% anual. En dicho periodo las
de origen agrícola han presentado altos incrementos debido a las exportaciones de café y banano,
mientras que las de origen minero y del resto de sectores han descendido. En el margen, bimestre
julio-agosto, las agrícolas y de resto de sectores presentaron altos crecimientos anuales mientras que
las mineras descendieron pero con menor intensidad.
En lo corrido hasta agosto, las importaciones en dólares han crecido 6,8%, explicadas por el
aumento de las destinadas a materias primas, a consumo y en menor medida a bienes de capital. En
el bimestre julio-agosto las compras externas se aceleraron, tanto las dirigidas al consumo como a
bienes de capital; las de materias primas presentaron un menor ritmo de aumento.
Con el anterior contexto externo y las nuevas cifras de comercio exterior, el equipo técnico
incrementó la proyección del déficit en la cuenta corriente para 2014, el cual estaría contenido en un
rango entre 4,4% y 4,8% del PIB. Estas cifras tienen implícito un menor superávit corriente del
sector minero debido a la caída en los ingresos petroleros. También, supone que el amplio uso del
ahorro externo por parte del resto de sectores habría continuado en la segunda mitad del año.
En cuanto al crecimiento interno, los nuevos indicadores de oferta y demanda para el tercer
trimestre de 2014 sugieren que en dicho periodo el PIB crecerá a buen ritmo, aunque menor que el
registrado en el primer semestre del año. El comportamiento de las ventas al por menor, del crédito
de consumo, del índice de confianza del consumidor y del mercado laboral, indican que el consumo
mantendría una fuerte dinámica. El aumento de las compras externas de maquinaria y equipo de
transporte, y la tendencia registrada por las obras civiles, prevén un buen desempeño de la
inversión, aunque a tasas menores. Con todo ello, la demanda interna crecería a un ritmo menor que
el del semestre anterior, aunque a una tasa alta y superior a la del producto. Las cifras de comercio
exterior indican que las importaciones aumentarían más que las exportaciones, y con ello la balanza
comercial tendría un aporte negativo al crecimiento.
En el tercer trimestre el crédito bancario continuó desacelerándose y registró tasas anuales
superiores al PIB nominal estimado para el presente año. La menor dinámica se ha presentado en el
dirigido a las empresas. En el mismo periodo, la desaceleración en los préstamos hipotecarios
fueron compensados por el leve repunte de la cartera de consumo y con ello el crecimiento del
crédito a los hogares se estabilizó. Todo ello en un contexto de débil transmisión de los aumentos de
la tasa de interés de referencia hacia las tasas de interés de los préstamos.
Con todo lo anterior, el equipo técnico estima un intervalo de crecimiento económico para el tercer
trimestre entre 4,0% y 5,2%. Para todo 2014 el rango de pronóstico se sitúa entre 4,5% y 5,5% con
5% como cifra más probable. Según las estimaciones, en 2015 la economía se desaceleraría y el PIB
presentaría una tasa de aumento alrededor de 4,3%, contenida en un intervalo entre 3,0% y 5,3%.
Las nuevas estimaciones de brecha de producto para 2014, indican que esta sería levemente positiva
y más cerrada que el pronóstico realizado el trimestre pasado. En 2015 la brecha continuaría
cerrándose pero se mantendría positiva.
En materia de inflación, el resultado de septiembre de 2,86% anual, estuvo en línea con lo esperado
por el equipo técnico. El grupo de alimentos presentó menores ritmos de aumento, y al excluirlos
del IPC, su complemento también se desaceleró en el último mes. Las otras tres medidas de
inflación básica también disminuyeron y el promedio de los cuatro indicadores se situó en 2,63%.
En lo corrido del año hasta septiembre se ha acumulado una inflación de 3,08%, cifra que ya supera
la meta de largo plazo (3,0%). Con este resultado y dada la baja base de comparación del IPC en el
último trimestre de 2013, es probable que al finalizar el año la inflación se sitúe en la parte alta del
rango meta establecido para el presente año (entre 2% y 4%). Las expectativas de inflación a un año
de los analistas y las de 2, 3 y 5 años derivadas de los papeles de deuda pública permanecen
relativamente estables y algo por encima del 3%.
En síntesis, la demanda agregada continúa mostrando un fuerte crecimiento en un contexto cercano
a la plena utilización de la capacidad productiva. Al tiempo, las expectativas de inflación se
mantienen cerca del 3%. Lo anterior se presenta en un entorno de deterioro de los términos de
intercambio y de creciente incertidumbre sobre la recuperación de la actividad económica mundial
y el costo del financiamiento externo, factores que pueden incidir en la demanda agregada y en la
tasa de cambio.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
La decisión por unanimidad de los miembros de la Junta Directiva fue la de mantener la tasa de
interés de intervención en 4,5%.
Los miembros de la Junta Directiva destacaron que la economía exhibe una fuerte dinámica pero
existen riesgos de choques negativos en el horizonte tradicional de política que podrían resultar en
una desaceleración de la actividad. En particular el entorno externo sigue exhibiendo síntomas de
debilidad y los términos de intercambio para Colombia se han deteriorado. De mantenerse esta
tendencia se afectará el crecimiento del ingreso nacional y el gasto agregado.
De otro lado, las expectativas de inflación se encuentran ancladas en niveles cercanos al 3%. El
promedio de los indicadores de inflación básica y la inflación total converge hacia su meta.
En estas condiciones, los miembros de la Junta coincidieron en mantener inalterada la tasa de
interés de intervención y continuar monitoreando el desempeño de la economía.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva por unanimidad consideró mantener la tasa de interés de intervención en 4,5%.
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2014-11-01 |
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Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 28
de noviembre de 2014
El 28 de noviembre de 2014 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la
Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito
Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los
Directores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca,
César Vallejo Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo.
A continuación se presenta una síntesis de la visión del equipo técnico del Banco de la República
sobre la situación macroeconómica (sección 1) y posteriormente se reseñan las principales
discusiones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2).
Un mayor detalle de la situación macroeconómica elaborada por el equipo técnico del Banco de la
República se presenta en la sección de datos del informe sobre Inflación de octubre de 2014 y en el
anexo estadístico.
1. CONTEXTO MACROECONÓMICO
En relación con el contexto macroeconómico el equipo técnico resalta los siguientes elementos:
La información ratificó el débil crecimiento de la economía mundial. Estados Unidos presentó un
buen desempeño mientras que en la zona del euro el producto registró un aumento modesto. En la
mayoría de países de Latinoamérica los crecimientos del PIB fueron inferiores a sus promedios
históricos. Con todo lo anterior, se mantuvo el pronóstico de un débil crecimiento del promedio de
nuestros socios comerciales para 2014 y 2015. La demanda externa en el siguiente año seguirá lenta
con excepción de la economía estadounidense.
Los precios del petróleo descendieron fuertemente. Este comportamiento, que presiona a la baja la
inflación mundial, también podría contribuir a incentivar el gasto, especialmente en aquellos países
importadores de crudo. Para las economías exportadoras de petróleo, la caída en estas cotizaciones
genera una caída de los términos de intercambio y por ende una reducción en el ingreso nacional.
Ante la perspectiva de una inflación baja en los Estados Unidos y los mayores riesgos de una
desaceleración en el comercio global, el promedio del mercado espera que el primer incremento en
la tasa de interés de la FED se dé hacia finales de 2015. Lo anterior se ha presentado junto con una
leve tendencia decreciente en las tasas de interés de largo plazo.
Las medidas de prima de riesgo de varios países de la zona del euro y de algunas economías
emergentes continuaron incrementándose aunque de forma moderada. Los flujos de capitales hacia
estos países se han reducido y sus monedas se han depreciado frente al dólar.
En Colombia la caída del precio internacional del petróleo ha implicado un deterioro de los
términos de intercambio, a pesar de que las cotizaciones internacionales del café se mantienen altas.
De mantenerse esta tendencia se seguirá afectando negativamente el ingreso nacional.
La debilidad en la demanda externa y los menores precios internacionales de los bienes básicos
mineros se han reflejado en el comportamiento de las exportaciones en dólares del país. En lo
corrido de 2014 hasta septiembre, las ventas externas totales han caído 1,9% anual. Las de origen
agrícola han presentado altos incrementos debido a las exportaciones de café y banano, mientras
que las de origen minero y del resto de sectores han descendido. En el acumulado enero-septiembre,
las importaciones en dólares han crecido 7,4%, explicadas por el aumento de las de materias primas,
de las destinadas a consumo, y en menor medida a las de bienes de capital.
Las nuevas cifras de comercio exterior validan la proyección de un mayor déficit en la cuenta
corriente para 2014: entre 4,4% y 4,8% del PIB. Esta ampliación tiene implícito un menor superávit
corriente del sector minero y supone que el amplio uso del ahorro externo por parte del resto de
sectores habría continuado en la segunda mitad del año.
En cuanto al crecimiento en Colombia, los indicadores más recientes de oferta y demanda sugieren
que en el segundo semestre de 2014, el PIB crecería a buen ritmo, aunque menor que el registrado
en la primera mitad del año. El principal impulso provendría de la demanda interna. Así lo sugiere
el comportamiento de las ventas al por menor, del crédito de consumo, del índice de confianza del
consumidor y del mercado laboral, los cuales indican que el consumo mantendría una fuerte
dinámica. El aumento de las compras externas de maquinaria y equipo de transporte, y la tendencia
registrada por las obras civiles, prevén un buen desempeño de la inversión, aunque a tasas menores
a las observadas en la primera mitad del año. Las cifras de comercio exterior indican que las
importaciones aumentarían más que las exportaciones, y con ello la balanza comercial tendría un
aporte negativo al crecimiento.
En octubre el crédito bancario continuó desacelerándose y registró tasas anuales superiores al PIB
nominal estimado para el presente año. La menor dinámica la presentó el dirigido a las empresas.
En el mismo periodo, la desaceleración en los préstamos hipotecarios fue más que compensada por
el repunte de la cartera de consumo por lo que el crédito a los hogares se aceleró. Todo ello en un
contexto de débil transmisión de los aumentos de la tasa de interés de referencia hacia las tasas de
interés de los préstamos.
Dado lo anterior, el equipo técnico mantuvo la proyección del rango de crecimiento económico para
todo 2014 entre 4,5% y 5,5%, con 5% como más probable.
En materia de precios, como lo esperaba el equipo técnico, la inflación anual aumentó de 2,86% en
septiembre a 3,29% en octubre. Ello se explicó por una aceleración en el grupo de alimentos y
regulados y por la baja base de comparación del IPC un año atrás. Las cuatro medidas de inflación
básica aumentaron y su promedio se situó en 2,76%.
En lo corrido del año hasta octubre se ha acumulado una inflación de 3,25%. Con este resultado al
finalizar el 2014 la inflación se situará en la parte superior del rango meta para éste año (entre 2,0%
y 4,0%). Las expectativas de inflación a un año de los analistas y las de 2, 3 y 5 años derivadas de
los papeles de deuda pública se encuentran ancladas alrededor de la meta.
Hasta el momento la depreciación del peso se ha traspasado parcialmente al IPC de transables sin
alimentos ni regulados. No obstante, si persiste la depreciación, ello podría trasmitirse en mayor
medida a los precios internos y generar mayores expectativas de inflación.
En síntesis, la demanda agregada continúa mostrando un fuerte crecimiento en un contexto cercano
a la plena utilización de la capacidad productiva. Como se proyectaba, la inflación se incrementó,
hecho explicado por el mayor ritmo de aumento en los precios de los alimentos, el cual se espera
sea transitorio. Al tiempo, las expectativas de inflación se mantienen estables y son algo superiores
al 3%. Lo anterior se presenta en un entorno de caída en los términos de intercambio, de débil
crecimiento de la demanda mundial y de incertidumbre sobre el costo del financiamiento externo. Si
estos factores externos continúan deteriorándose, ellos pueden incidir sobre la demanda agregada, la
tasa de cambio y las expectativas de inflación.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
La Junta Directiva por unanimidad decidió mantener la tasa de interés de intervención en 4.5%.
Los miembros de la Junta Directiva destacaron el fuerte dinamismo de la economía colombiana y
un ambiente externo cada vez más adverso en el horizonte de política.
La fuerte caída en los precios internacionales del petróleo y otros productos básicos consolida un
escenario de debilidad del entorno externo colombiano que afectará de manera negativa su
desempeño a lo largo de 2015. Como era de esperar, el peso se ha devaluado, lo cual puede
amortiguar los efectos de la debilidad en las variables externas sobre la brecha del producto, e
incidir en el nivel de inflación de corto plazo. La flotación cambiaria ha mostrado ser un mecanismo
eficaz que permite absorber los choques externos.
Las expectativas de inflación se encuentran ancladas en niveles cercanos a la meta. El promedio de
los indicadores de inflación básica converge hacia la misma, en tanto que la inflación total se halla
por encima, debido a choques transitorios de oferta.
En estas condiciones, los miembros coincidieron en mantener inalterada la tasa de interés de
intervención y continuar monitoreando el desempeño de la economía.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva por unanimidad consideró mantener la tasa de interés de intervención en 4,5%.
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2014-12-01 | -
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 19
de diciembre de 2014
El 19 de diciembre de 2014 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la
Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito
Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los
Directores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca,
César Vallejo Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo.
A continuación se presenta una síntesis de la visión del equipo técnico del Banco de la República
sobre la situación macroeconómica (sección 1) y posteriormente se reseñan las principales
discusiones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2).
Un mayor detalle de la situación macroeconómica elaborada por el equipo técnico del Banco de la
República se presenta en la sección de datos del informe sobre Inflación de noviembre de 2014 y en
el anexo estadístico.
1. CONTEXTO MACROECONÓMICO
En relación con el contexto macroeconómico el equipo técnico resalta los siguientes elementos:
En el presente mes el precio internacional del petróleo continuó descendiendo y se situó en niveles
que no se observaban desde 2009. Al parecer, algunos factores de oferta y demanda sugieren que
gran parte de este descenso es de carácter estructural. Pese a ello, la incertidumbre sobre el nivel
futuro del precio del petróleo sigue siendo elevada.
Las monedas de varios países emergentes se siguen depreciando, sus primas de riesgo país se han
incrementado y el precio de los activos financieros se ha deteriorado. Este comportamiento ha sido
mucho más acentuado en los países productores del crudo como Colombia.
Lo anterior se ha dado en un contexto de débil actividad económica mundial, en la cual el principal
impulso es generado por la economía de los Estados Unidos. La zona del euro mantiene bajos
crecimientos en su PIB mientras que el de las principales emergentes se sigue desacelerando o
presenta aumentos históricamente bajos. Con este panorama es factible que la recuperación
promedio de nuestros socios comerciales en 2015 sea más débil de lo estimado en el pasado informe
trimestral.
Las tasas de interés de largo plazo en los Estados Unidos volvieron a descender y la Reserva
Federal dio indicios de que el primer incremento en la tasa de referencia se daría a comienzos del
segundo semestre y continuaría de manera gradual.
La caída en el precio del petróleo y el incremento en las cotizaciones internacionales de algunos
alimentos que importa Colombia se verán reflejados en un descenso, mayor que el esperado, en los
términos de intercambio del país. De mantenerse estos niveles, ello generará un menor ingreso
nacional en 2015.
El descenso en el precio del petróleo volvió a afectar las exportaciones del país. En octubre, las
ventas externas cayeron, hecho explicado principalmente por los menores valores exportados de
crudo. Las ventas de los principales productos agrícolas siguieron registrando altos incrementos,
mientras que las exportaciones del resto de sectores cayeron, pero en menor medida que las
mineras.
En el contexto interno, el crecimiento del PIB del tercer trimestre de 2014 (4,2%) se situó dentro del
rango estimado por el equipo técnico, aunque resultó algo inferior al punto medio de dicho
intervalo. Como se esperaba, este resultado implicó una desaceleración con respecto al primer
semestre del año. Los sectores económicos con mayor dinámica fueron la construcción, el comercio
y las actividades de servicios sociales, comunales y personales. La minería y la industria fueron los
únicos sectores que presentaron descensos.
Los nuevos datos de actividad económica para el último trimestre de 2014 muestran un
comportamiento mixto. Por un lado algunos indicadores de demanda interna sugieren que ésta sigue
dinámica. Al menos así lo indican los resultados de confianza del consumidor, del comercio al por
menor, de ventas de automóviles y de crédito de consumo. Por otra parte, otros indicadores por el
lado de la oferta, como la industria y la producción de petróleo registran aumentos anuales bajos.
En noviembre el crecimiento anual del endeudamiento de las empresas se ha desacelerado, hecho
explicado principalmente por el menor ritmo de aumento del endeudamiento externo directo. Por el
contrario, la cartera de consumo presentó una mayor dinámica y más que compensó la
desaceleración registrada en los créditos hipotecarios. Lo anterior se ha dado junto con unas tasas de
crédito que permanecieron relativamente estables, las cuales en lo corrido del segundo semestre
sólo han reflejado de forma parcial el incremento registrado en la tasa de interés de referencia.
En los resultados del mercado laboral a octubre, al descontar el componente estacional de la tasa de
desempleo, dicho indicador da señales de estabilizarse en niveles históricamente bajos. El número
de empleados asalariados se ha estabilizado mientras que los no asalariados presentan una tendencia
creciente.
El rango de pronóstico de crecimiento para 2014 presentado en los informes anteriores se situaba
entre 4,5% y 5,5%, con 5% como cifra más probable. No obstante, todo lo anterior sugiere que los
riesgos a la baja han aumentado y que la probabilidad de que el crecimiento para todo 2014 esté por
debajo de 5% es ahora mayor.
La inflación anual de noviembre (3,65%) resultó igual a la estimada por el equipo técnico del Banco
y algo superior a la proyectada por el promedio del mercado. El incremento de la inflación
registrado en noviembre se explicó por la aceleración del IPC de regulados y de alimentos. El
promedio de las cuatro medidas de inflación básica también se incrementó y se situó en 2,85%.
La probabilidad de que a diciembre de 2014 la inflación anual permanezca alrededor de los actuales
niveles y se sitúe dentro del rango meta es elevada. Las expectativas de inflación de los analistas a
un año y las que se infieren de los papeles de deuda pública a mayores plazos se incrementaron y se
sitúan alrededor de 3,4%.
Se espera que el mayor nivel de la tasa de cambio se transmita a los precios internos, aunque la
magnitud de dicha transmisión depende de muchos factores, lo que la hace incierta. En este
contexto, dada la depreciación acumulada hasta mediados de diciembre, existe el riesgo de que la
inflación al consumidor siga aumentando en 2015. Una alta transmisión podría afectar las
expectativas y tener efectos más persistentes sobre la inflación.
En resumen, la demanda interna sigue dinámica en un contexto cercano a la plena utilización de la
capacidad productiva. Al mismo tiempo, la inflación y sus expectativas se sitúan por encima del
3%. Lo anterior se presenta en un entorno de deterioro de los términos de intercambio, de
depreciación del peso y de creciente incertidumbre sobre la recuperación de la actividad económica
mundial y del costo de financiamiento externo, factores que pueden incidir en el comportamiento
futuro de la demanda agregada.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
La Junta Directiva por unanimidad decidió mantener la tasa de interés de intervención en 4.5%.
Resaltó que, como ya se ha mencionado, la economía enfrentará en el horizonte de política una
desaceleración en su ritmo de crecimiento, como resultado del choque de términos de intercambio y
el débil entorno externo.
Algunos de sus miembros subrayaron los riesgos del impacto en la caída en los precios del petróleo
en socios comerciales importantes para Colombia, como Venezuela y Ecuador.
En cuanto a la inflación, los miembros de la Junta mencionaron que, al finalizar 2014, ésta se
situará en la mitad superior del rango meta. La desviación respecto al punto central de 3% es
temporal y se explica fundamentalmente por la corrección de caídas transitorias en algunos precios
en el pasado y por aumentos temporales en otros. La inflación básica se sitúa por debajo del 3% y se
espera que la inflación general converja a dicho valor.
Uno de sus miembros opinó que, en un contexto de brecha del producto cerrada, el fuerte
dinamismo actual de la economía puede generar presiones inflacionarias.
Por último la Junta es consciente que la devaluación reciente del peso podría traer un aumento en el
IPC. Esto no debería afectar las expectativas de inflación en la medida en que la devaluación se
traslada a los precios por una sola vez y, por lo tanto, la inflación presenta aumentos que
posteriormente se revertirán.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva por unanimidad consideró mantener la tasa de interés de intervención en 4,5%.
Bogotá, D. C.
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2015-01-01 | -
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 30
de Enero de 2015
El 30 de Enero de 2015 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta
Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público,
Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores,
Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca, César Vallejo
Mejía y Juan Pablo Zárate
A continuación se presenta una síntesis de la visión del equipo técnico del Banco de la República
sobre la situación macroeconómica (sección 1) y posteriormente se reseñan las principales
discusiones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2).
Un mayor detalle de la situación macroeconómica elaborada por el equipo técnico del Banco de la
República se presenta en la sección de datos del informe sobre Inflación de diciembre de 2014 y en
el anexo estadístico.
1. CONTEXTO MACROECONÓMICO
En el presente informe los precios del petróleo continuaron descendiendo y se situaron en niveles
que no se observaban desde 2009. La probabilidad de que gran parte de este descenso sea
estructural es elevada y debido a ello los pronósticos del precio del petróleo se redujeron
significativamente respecto a lo estimado un trimestre atrás. Otros productos que exporta Colombia,
como el carbón y el níquel, también registraron caídas en sus cotizaciones internacionales.
Las primas de riesgo de varios países emergentes se han incrementado, sus monedas se han
depreciado y el precio de algunos activos financieros se ha deteriorado. Este comportamiento ha
sido mucho más acentuado en los países productores del crudo como Colombia.
Lo anterior se ha dado en un contexto de débil actividad económica mundial, en el cual el principal
impulso es generado por la economía de los Estados Unidos. La zona del euro mantiene bajos
crecimientos en su PIB mientras que el de las principales emergentes se sigue desacelerando o
presenta aumentos históricamente bajos. Con este panorama, el equipo técnico redujo el crecimiento
promedio de nuestros socios comerciales para 2015, hecho que refleja una recuperación más débil
de lo estimado en el pasado informe trimestral.
En los Estados Unidos las tasas de interés de largo plazo volvieron a descender y es probable que el
primer incremento en la tasa de referencia de la Reserva Federal se dé a comienzos del segundo
semestre y que continúe de manera gradual. En la zona del euro, el Banco Central Europeo inició su
programa de compras de títulos financieros, la cual se extenderá por lo menos hasta septiembre de
2016.
La caída en el precio del petróleo, que supera ampliamente las reducciones en las cotizaciones
internacionales de algunos alimentos que importa Colombia, se verán reflejados en un descenso,
mayor que el esperado, en los términos de intercambio del país. De mantenerse estos niveles, ello
generará una caída del ingreso nacional en 2015.
El descenso en el precio del petróleo sigue afectando el valor de las exportaciones del país. En
noviembre, las ventas externas cayeron, hecho explicado principalmente por los menores valores
exportados de crudo. Las ventas de los principales productos agrícolas siguieron registrando altos
incrementos, mientras que las exportaciones del resto de sectores cayeron, pero en menor medida
que las mineras.
Con lo anterior, para todo 2014 la proyección más probable del déficit de la cuenta corriente como
proporción al PIB se incrementó y se situó en el límite superior del rango estimado un trimestre
atrás (5%). Se estima que en 2015 el déficit y su financiamiento sean menores, en parte como
resultado de una reducción esperada en la inversión extranjera directa (especialmente la dirigida a
petróleo), y por una inversión de cartera menos dinámica.
En el contexto interno, la nueva información para el cuarto trimestre de 2014 sugieren que la
demanda interna continuó muy dinámica y que las exportaciones netas habrían restado más de lo
esperado al producto. Con esta información, el equipo técnico proyecta que el crecimiento
económico para 2014 se sitúe entre 4,5% y 5%, con 4,8% como cifra más probable.
En el mercado laboral, con cifras desestacionalizadas, a diciembre la tasa de desempleo sigue en
niveles bajos, con una tasa de ocupación en el máximo de los últimos 14 años, impulsada
principalmente por el empleo asalariado.
En diciembre el crecimiento anual del endeudamiento de las empresas se ha desacelerado, hecho
explicado principalmente por el menor ritmo de aumento del endeudamiento externo directo. Por el
contrario, la cartera de consumo presentó una mayor dinámica y más que compensó la
desaceleración registrada en los créditos hipotecarios. Lo anterior se ha dado junto con unas tasas de
crédito que permanecieron relativamente estables, las cuales en lo corrido del segundo semestre de
2014 sólo han reflejado de forma parcial el incremento registrado en la tasa de interés de referencia.
Para 2015 el equipo técnico redujo el rango de crecimiento económico proyectado a un intervalo
entre 2% y 4%, con 3,6% como cifra más probable. Dicha estimación más factible tiene en cuenta
una caída en el ingreso nacional y una menor financiación externa, las cuales podrían generar una
moderación del gasto, especialmente por un menor nivel de inversión privada.
No obstante, es importante mencionar que la incertidumbre del anterior rango de pronóstico es
elevada, y dependerá del tamaño del descenso esperado en los términos de intercambio, del costo y
nivel del financiamiento externo, y del efecto que tendría la caída en el ingreso nacional sobre las
decisiones de gasto privado y público. Si los pronósticos más probables de crecimiento se cumplen,
la brecha de producto podría ser positiva en 2014 y tornarse levemente negativa en el presente año
(antes se estimaba podría ser positiva).
En materia de precios, en diciembre de 2014 la inflación culminó en 3,66%, cifra similar a la
proyectada por el equipo técnico del Banco, y superior en 80 puntos base (pb) al registro de
septiembre. En el pasado trimestre, el mayor ritmo de aumento en los precios de los alimentos y de
los regulados explicaron un gran porcentaje de la aceleración de la inflación. En el mismo periodo,
el promedio de las cuatro medidas de inflación básica se incrementó 43 pb y se situó en 3,06% en
diciembre.
Las expectativas de inflación de los analistas a un año y las que resultan de los papeles de deuda
pública a mayores plazos se incrementaron y se mantienen por encima de 3%.
Se espera que el mayor nivel de la tasa de cambio se transmita a los precios internos, aunque la
magnitud de dicha transmisión depende de muchos factores, lo que la hace incierta. En este
contexto, dada la depreciación acumulada hasta enero de 2015, existe el riesgo de que la inflación al
consumidor siga aumentando en este año. Una alta transmisión podría afectar las expectativas y
tener efectos más persistentes sobre la inflación.
En resumen, la demanda interna sigue dinámica en un contexto cercano a la plena utilización de la
capacidad productiva, junto a una inflación y sus expectativas que se sitúan por encima del 3%. Lo
anterior se ha dado en un entorno de fuerte deterioro de los términos de intercambio y con elevada
incertidumbre sobre su comportamiento futuro. La actividad económica mundial se recupera de
forma más lenta a lo esperado y la evolución del costo de financiamiento también es incierta. Todos
estos factores pueden incidir en el comportamiento futuro de la demanda agregada.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
Los miembros de la Junta concuerdan en que la economía colombiana se ajustará a la caída en los
términos de intercambio creciendo en 2015 y 2016 menos que en los años 2013 y 2014.
La dinámica de la inflación en 2015 estará principalmente afectada por el menor crecimiento
económico y por los posibles efectos de corto plazo de la devaluación del peso sobre la inflación del
consumidor. Algunos miembros de la Junta consideran que el efecto de la devaluación puede
inicialmente primar sobre el del menor crecimiento y desviar transitoriamente la inflación de la
meta. En la medida que las expectativas permanezcan ancladas a la meta de mediano plazo (3%)
este efecto sobre la inflación se desvanecería en el horizonte de política.
Por su parte, un miembro de la junta espera un crecimiento del PIB entre 3% y 3.5%, con lo cual la
brecha negativa del producto sería mayor a lo esperado por el equipo técnico y su efecto mitigador
sobre el nivel de precios sería aún más fuerte. En este contexto lo apropiado es que la autoridad
monetaria continúe manteniendo inalterada la tasa de interés de intervención.
Otro miembro de la junta consideró necesario contemplar, con criterio anticíclico, escenarios de
menores tasas de interés de intervención.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva por unanimidad consideró mantener la tasa de interés de intervención en 4,5%.
Bogotá DC.
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2015-02-01 |
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Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 20
de Febrero de 2015
El 20 de Febrero de 2015 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la
Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito
Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los
Directores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca,
César Vallejo Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo.
A continuación se presenta una síntesis de la visión del equipo técnico del Banco de la República
sobre la situación macroeconómica (sección 1) y posteriormente se reseñan las principales
discusiones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2).
Un mayor detalle de la situación macroeconómica elaborada por el equipo técnico del Banco de la
República se presenta en la sección de datos del informe sobre Inflación de diciembre de 2014 y en
el anexo estadístico.
1. CONTEXTO MACROECONÓMICO
1. A finales de 2014 los términos de intercambio descendieron de forma significativa y se situaron
en niveles no vistos desde inicios de 2009. A comienzos de 2015 cabe esperar caídas adicionales en
este indicador, a pesar de la recuperación observada en los últimos días en la cotización del crudo.
2. En las últimas semanas las primas de riesgo de Colombia y de varios países de la región se
redujeron pero se mantienen en niveles mayores que el promedio registrado en 2014. En lo corrido
a febrero la cotización del peso frente al dólar ha sido volátil aunque sin tendencia definida.
3. La recuperación de la economía mundial sigue débil aunque en algunos países desarrollados ha
sido algo mejor que lo proyectado. En los Estados Unidos los indicadores de actividad real apuntan
a un buen resultado en el presente trimestre. El crecimiento de Alemania para final de 2014 resultó
mejor a lo estimado y en enero los indicadores de confianza e industria de la zona del euro
mostraron tendencias positivas. Las principales economías emergentes se siguen desacelerando o
presentan aumentos históricamente bajos. Ante este contexto, el equipo técnico mantuvo la
proyección de crecimiento promedio de nuestros socios comerciales para 2015 presentado en el
anterior informe.
4. En los Estados Unidos las tasas de interés de largo plazo de los papeles de deuda pública dejaron
de caer y se sitúan por debajo del promedio registrado en 2014. Es probable que el primer
incremento en la tasa de referencia de la Reserva Federal se dé a comienzos del segundo semestre y
que continúe de manera gradual. Los problemas de financiamiento de Grecia y la incertidumbre
sobre su permanencia en la zona del euro incrementaron la volatilidad en los mercados accionarios
en esa región.
5. En Colombia, el aumento de las importaciones y la caída de las exportaciones en diciembre
resultaron algo mayores que las proyectadas. Estos registros sugieren que en el cuarto trimestre de
2014, el déficit de la balanza comercial de bienes podría ser mayor que lo estimado. Por el lado del
financiamiento, en enero continuó el ingreso de capitales dirigido a la compra de portafolio, sin
embargo, los nuevos anuncios acerca de los planes de inversión extranjera directa en el sector
petrolero siguen reflejando una caída importante en este tipo de financiamiento externo.
6. En el mercado laboral las cifras a diciembre muestran una tasa de desempleo desestacionalizada
que sigue en niveles bajos, con una tasa de ocupación dinámica que se explica principalmente por el
empleo asalariado.
7. La nueva información para el cuarto trimestre de 2014 sugiere que la demanda interna continuó
dinámica y que las exportaciones netas habrían restado más de lo esperado al producto. Con esta
información, se mantuvo el pronóstico de crecimiento económico para 2014 entre 4,5% y 5%, con
4,8% como cifra más probable.
8. Las pocas cifras de actividad real para el primer trimestre de 2015 dan señales mixtas. Por el lado
de la oferta, la producción de petróleo y de café de enero mostraron un crecimiento superior al
estimado. Por el lado de la demanda, el descenso en las ventas de automóviles sugiere una
desaceleración en el consumo durable para ese mes.
9. En enero el crecimiento anual del endeudamiento de las empresas volvió a desacelerarse, debido
al menor ritmo de aumento del crédito externo directo. El crédito a los hogares mantiene tasas de
crecimiento relativamente estables. Los aumentos de ambos tipos de cartera superan el incremento
del PIB nominal estimado para el presente año. Lo anterior se dio junto con unas tasas de interés del
crédito que se incrementaron, aunque en términos reales siguen en niveles inferiores a sus
promedios históricos (exceptuando tarjetas de crédito).
10. Con todo lo anterior, para 2015 el equipo técnico mantuvo la cifra más probable de crecimiento
en 3,6%, contenida en un rango entre 2% y 4%. La amplitud del intervalo refleja la incertidumbre
que se tiene sobre los supuestos hechos en los posibles escenarios extremos. Por su parte, la cifra
más factible tiene en cuenta una menor dinámica en el ingreso nacional y una reducción de la
financiación externa, las cuales podrían generar una moderación del gasto, especialmente por un
menor nivel de inversión privada.
11. En materia de precios, la inflación en enero se incrementó y se situó en 3,82%, cifra superior a
la proyectada por el equipo técnico del Banco y por el promedio del mercado. La aceleración en la
inflación se explicó principalmente por el mayor ritmo de aumento en los precios de los alimentos.
El promedio de las medidas de inflación básica completó cuatro meses con incrementos y se situó
en 3,22%.
12. Las medidas de expectativas de inflación de los analistas y las que se derivan de los TES se
encuentran en promedio en la mitad superior del rango meta.
13. Aunque el mayor nivel de la tasa de cambio se ha transmitido de forma parcial a los precios
internos, esta probablemente no se ha completado. Por otro lado, la magnitud de dicha transmisión
depende de muchos factores, lo que la hace incierta. En este contexto, dada la depreciación
acumulada hasta febrero de 2015, existe el riesgo de que la variación anual del grupo de transables
sin alimentos ni regulados aumente más de lo proyectado. Una alta transmisión al grupo de
transables podría afectar las expectativas y tener efectos más persistentes sobre la inflación.
En resumen, a finales de 2014 la demanda interna mostró dinamismo en un contexto cercano a la
plena utilización de la capacidad productiva. La inflación y sus expectativas se sitúan un poco por
encima del 3%. Lo anterior se presenta en un entorno de deterioro de los términos de intercambio y
de incertidumbre sobre su evolución futura e impacto sobre la demanda agregada.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
Los miembros de la Junta esperan un ajuste de la tasa de crecimiento de la economía a los cambios
de las condiciones externas y un aumento transitorio de la inflación total, que podría desviarla
temporalmente de su meta. Las expectativas de inflación se encuentran ancladas en la meta a pesar
del incremento de la inflación observada en los últimos meses.
Para algunos miembros de la Junta, en la medida en que el efecto de la disminución de los términos
de intercambio tiene un componente permanente, el ingreso nacional cae en forma estructural y, por
lo tanto, no es pertinente tratar de sustituir esa pérdida de ingreso a través de una política monetaria
más expansiva.
Uno de los miembros opinó que, no obstante la ostensible desaceleración proyectada de la
economía, que provocaría el retorno de la brecha del producto a terreno negativo como mínimo
durante el presente año, la tasa de interés de intervención debería mantenerse inalterada al menos
durante lo que resta del mismo, excepto en el caso de que se sucedan eventos extraordinarios o no
previstos que alteren significativamente los fundamentales de la economía.
Finalmente los miembros de la Junta mencionaron que si se presenta un sobre ajuste en el gasto del
sector privado en relación con el nuevo PIB potencial de la economía, la autoridad monetaria debe
estar abierta a una política contra cíclica
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva por unanimidad consideró mantener la tasa de interés de intervención en 4,5%.
Bogotá D.C. marzo 6 de 2015.
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2015-03-01 |
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Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 20
de Marzo de 2015
El 20 de Marzo de 2015 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta
Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público,
Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores,
Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca, César Vallejo
Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo.
A continuación se presenta una síntesis de la visión del equipo técnico del Banco de la República
sobre la situación macroeconómica (sección 1) y posteriormente se reseñan las principales
discusiones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2).
Un mayor detalle de la situación macroeconómica elaborada por el equipo técnico del Banco de la
República se presentará en el Informe sobre Inflación del primer trimestre de 2015 y en el anexo
estadístico.
1. CONTEXTO MACROECONÓMICO
En lo corrido de 2015, el comportamiento de los precios del petróleo y de otros productos básicos
que exporta e importa Colombia, sugieren que el deterioro de los términos de intercambio ha
continuado pero a un ritmo más lento. De esta forma, es probable que en el primer trimestre de
2015, los términos de intercambio se ubiquen cerca de los niveles observados a inicios de 2009.
En marzo de 2014 continuó la apreciación del dólar frente a la mayoría de monedas y las medidas
de primas de riesgo se incrementaron. Dentro de los países de la región, este comportamiento ha
sido más acentuado en Brasil, seguido por Colombia.
La recuperación de la economía mundial sigue débil y dispar. En Estados Unidos los indicadores de
actividad real indican que la recuperación continúa y que el crecimiento del presente trimestre será
similar al registrado a finales de 2014. La actividad económica en la zona del euro sigue frágil y el
bajo estimativo de crecimiento para 2015 no ha cambiado. Las principales economías emergentes
continúan desacelerándose o presentan aumentos históricamente bajos. Ante este contexto, el
equipo técnico mantuvo la proyección de crecimiento promedio de nuestros socios comerciales para
2015 en 2%, cifra algo superior a la de 2014 (1,7%).
En los Estados Unidos las tasas de interés de largo plazo de los papeles de deuda pública dejaron de
caer y se sitúan por debajo del promedio registrado en 2014. Según el último anuncio de la Reserva
Federal, es probable que el primer incremento en su tasa de interés de referencia se dé a comienzos
del segundo semestre y que el aumento en todo el año sea menor que el proyectado en meses
anteriores.
En Colombia la fuerte caída de las exportaciones y el alto incremento de las importaciones
registradas en diciembre sugieren que el déficit en la cuenta corriente para todo 2014 puede ser algo
superior al proyectado en el informe pasado. En enero las exportaciones totales en dólares volvieron
a caer a una tasa similar al descenso registrado en el precio del petróleo. Las de origen agrícola
presentaron altos crecimientos mientras que el resto de sectores descendieron de forma
significativa.
El crecimiento económico del último trimestre de 2014 (3,5%) se situó en la parte baja del rango
estimado por el equipo técnico (3,3% - 4,7%). Por el lado de la oferta, la minería e industria
registraron caídas, mientras que la agricultura presentó un bajo dinamismo. El resto de sectores
crecieron de manera similar o más que el aumento del producto. Durante todo 2014 el PIB real se
expandió 4,6%, cifra inferior al punto medio del intervalo proyectado para el año (4,8%).
Las cifras de actividad de enero y febrero de 2015 sugieren que la desaceleración del PIB,
observada desde el segundo trimestre de 2014, se mantiene. Los registros de comercio al por menor,
de confianza al consumidor y de expectativas de ventas así lo sugieren. Por el lado de la oferta, la
producción de petróleo ha presentado crecimientos mayores que los previstos pero bajos, mientras
que la producción industrial volvió a descender.
En el mercado laboral, las cifras a enero muestran una tasa de desempleo desestacionalizada que
sigue en niveles bajos, con una tasa de ocupación dinámica que se explica principalmente por el
empleo asalariado. Hasta el momento, los incrementos salariales no sugieren presiones de costos
laborales sobre los precios.
En febrero el crecimiento anual del endeudamiento de las empresas volvió a desacelerarse, debido
al menor ritmo de aumento del crédito externo directo. El crédito a los hogares también presentó
una reducción en su dinámica. Pese a lo anterior, los aumentos de ambos tipos de cartera superan el
crecimiento del PIB nominal estimado para el presente año. Lo anterior se ha dado junto con unas
tasas de interés del crédito que en términos reales siguen en niveles inferiores que sus promedios
históricos (exceptuando tarjetas de crédito).
Con todo lo anterior, si se confirman las últimas tendencias, la estimación del crecimiento
proyectado más probable para 2015 (3,6%) podría reducirse. Esta revisión, tendría en cuenta un
mayor deterioro del ingreso nacional y de las exportaciones, una menor financiación externa, así
como los recortes de gasto público anunciado por el Gobierno. Todo ello generará una moderación
de la demanda, especialmente por un menor nivel de inversión privada. La amplitud del intervalo
(entre 2% y 4%), refleja la incertidumbre que se tiene sobre los supuestos hechos en los escenarios
extremos.
En materia de precios, en febrero la inflación se incrementó y se situó en 4,36%, cifra superior a la
proyectada por el promedio del mercado y por el equipo técnico del Banco. La aceleración de la
inflación se explicó principalmente por el mayor ritmo de aumento en los precios de los alimentos,
y en segundo lugar, por el incremento en el cambio anual del grupo de transables sin alimentos ni
regulados. El promedio de las medidas de inflación básica completó cinco meses con incrementos y
se situó en 3,53%.
Las expectativas de inflación de los analistas para diciembre se incrementaron desde 3,3% a 3,6%,
mientras que a uno y dos años permanecieron relativamente estables y se situaron en su orden en
3,2% y 3,1%. Las que se derivan de los TES a dos, tres y cinco años aumentaron y se encuentran en
la mitad superior del rango meta. Buena parte de este último incremento estaría relacionado con el
aumento de la prima de riesgo inflacionario.
La depreciación del peso frente al promedio de monedas con las cuales comercia el país se
incrementó y su transmisión hacia el sector transable del IPC se aceleró. Pese a ello, su impacto
sobre la inflación total ha sido bajo y similar al promedio observado en los periodos pasados de
depreciación nominal. En los próximos meses, cabe esperar que esta transmisión continúe aunque
su magnitud es incierta y depende de muchos factores. En este contexto, persiste el riesgo de que el
sector transable del IPC aumente más de lo proyectado, contagie las expectativas y tenga un efecto
más persistente sobre la inflación.
En resumen, a finales de 2014 la economía colombiana se desaceleró, partiendo de un nivel de
producto cercano a la plena utilización de la capacidad productiva. La inflación aumentó
principalmente por factores transitorios y sus expectativas se sitúan por encima del 3%. Debido a
que parte de la reducción de los precios del petróleo y del ingreso nacional es duradera, es necesario
un ajuste permanente del gasto interno de la economía.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
Los miembros de la Junta resaltan que en 2014 el crecimiento de la economía colombiana (4.6%)
fue menor que el proyectado por el Banco de la República (4.8%), mientras que el de 2013 fue
revisado de 4.7% a 4.9%. Esperan que el crecimiento en 2015 sea inferior al registrado el año
anterior y coinciden en que dicha desaceleración representa un ajuste necesario ante las nuevas
condiciones externas que llevaron a una disminución significativa de los términos de intercambio.
Para algunos miembros de la Junta esto último podría tener un impacto negativo fuerte en el ingreso
nacional. Adicionalmente, mencionaron que la devaluación representa un estímulo para las
exportaciones y los sectores que compiten con importaciones, y contribuye a moderar el impacto
negativo del precio del petróleo sobre las cuentas fiscales y externas; así mismo, incrementa los
precios en el corto plazo, en especial de los bienes transables.
Los miembros de la Junta reafirman el compromiso de mantener la inflación y sus expectativas
ancladas en la meta. Coinciden en que en el corto plazo la inflación total al consumidor continuará
mostrando presiones al alza generadas por aumentos temporales en los precios de los alimentos y,
en una menor proporción, por el traspaso de la devaluación a los precios de los bienes transables de
la canasta familiar. Se espera que la presión empiece a ceder en el segundo semestre y que la
inflación vaya convergiendo a la meta (3%) en el horizonte de política.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva por unanimidad consideró mantener la tasa de interés de intervención en 4,5%.
Bogotá DC.
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2015-04-01 | -
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 24
de abril de 2015
El 24 de abril de 2015 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta
Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público,
Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores,
Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca, César Vallejo
Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo.
A continuación se presenta una síntesis de la visión del equipo técnico del Banco de la República
sobre la situación macroeconómica (sección 1) y posteriormente se reseñan las principales
discusiones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2).
Un mayor detalle de la situación macroeconómica elaborada por el equipo técnico del Banco de la
República se presentará en el Informe sobre Inflación del primer trimestre de 2015 y en el anexo
estadístico.
1. CONTEXTO MACROECONÓMICO
En el presente informe se redujo el crecimiento promedio estimado de los socios comerciales de
Colombia para 2015. La recuperación económica en los Estados Unidos sería más lenta que lo
proyectado, mientras que el producto de la zona del euro se expandiría a una tasa baja. China
continuaría desacelerándose y los países de la región registrarían tasas de crecimiento débiles o
negativas. Si estos pronósticos se materializan, en 2015 la demanda externa relevante para
Colombia crecería a una tasa baja y algo menor que la observada en 2014.
Los menores precios internacionales del petróleo y de otros bienes básicos han presionado a la baja
la inflación mundial. Ello ha contribuido a que en algunos países desarrollados los precios al
consumidor no aumenten o se registre deflación.
El banco central de la zona del euro continuó realizando estímulos monetarios, mientras que la
Reserva Federal, en su última reunión, sugirió que el posible incremento en su tasa de interés sería
de forma más gradual que lo anunciado a finales de 2014. En este contexto, las tasas de interés de
largo plazo en dichos países han descendido y se mantienen en niveles bajos.
La apreciación del dólar frente a la mayoría de monedas se ha revertido de forma parcial. En la
región, las medidas de primas de riesgo descendieron, después de los incrementos registrados a
inicios del año.
En el primer trimestre de 2015, el precio promedio del petróleo se situó algo por debajo de los
niveles registrados a finales de 2014. En el mismo periodo, otros bienes básicos que exporta e
importa Colombia descendieron. Si todos estos precios se mantienen, en 2015 los términos de
intercambio registrarían niveles bajos similares a los registrados a inicios de 2009. Esta caída en los
términos de intercambio generaría una pérdida significativa en la dinámica del ingreso nacional.
El anterior comportamiento de la demanda externa y de los precios de los bienes básicos se ha visto
reflejado en los resultados de comercio exterior. En los dos primeros meses del año las
exportaciones en dólares descendieron 34%, caída explicada principalmente por las de origen
minero (-47%), especialmente por el menor precio del petróleo. En el mismo periodo las ventas
externas de los principales productos agrícolas aumentaron 22,5%, mientras que las del resto de
sectores descendieron 11%.
En lo corrido del año, las importaciones totales acumulan una caída de 3,8%, debido a las menores
compras externas de bienes intermedios (-18,4%). Las de bienes de capital aumentaron 13,9% y las
de consumo lo hicieron en 1,3%. El aumento en bienes de capital se explica por los incrementos de
63,9% en equipo de transporte y de 4,1% en materiales de construcción. Dentro de los bienes de
consumo, se registró una caída de 3,2% en los bienes durables y un aumento de 6,2% en los no
duraderos.
Con la anterior información, el equipo técnico incrementó la proyección del déficit de la cuenta
corriente como porcentaje del PIB para 2015, desde un rango entre 3,3% y 5,5%, a uno entre 4,2%
y 6,1%. El nuevo registro más probable para 2015 (5,3%) sería similar al déficit observado en 2014
(5,2%). Cerca de 0,9 puntos porcentuales de la estimación de 2015 se explicaría por el menor PIB
en dólares debido al mayor nivel de la tasa de cambio. En dólares, el déficit en la cuenta corriente se
reduciría ya que supone que el menor nivel de renta de factores y la reducción del déficit comercial
de servicios superaría la ampliación del déficit de la balanza comercial de bienes. Por el lado del
financiamiento, las proyecciones contemplan un descenso de la inversión extranjera directa,
especialmente en el sector minero-energético, y menores entradas por inversión de portafolio. Esto
último se desprende de una mayor base de comparación en 2014, cuando se presentaron flujos
significativos de esta índole como resultado del aumento de la ponderación de los bonos públicos
colombianos en algunos índices de referencia de mercados emergentes.
En el contexto interno, la nueva información para el primer trimestre de 2015 indica que la
actividad económica sería menos dinámica que la registrada en el último trimestre de 2014. La
información de comercio al por menor, de confianza del consumidor y la encuesta de expectativas
económicas, indican una desaceleración del consumo y la inversión privada. Por el lado de la oferta,
la caída de la producción industrial y del sacrificio de ganado, el menor crecimiento de la demanda
de energía no regulada, y el descenso en la percepción presente y futura del comercio indican que el
crecimiento económico seguirá desacelerándose. Otra información como la producción de petróleo,
café y cemento sugieren buenos comportamientos.
En el mercado laboral, las cifras a febrero de 2015 muestran que la tasa de desempleo
(desestacionalizada) sigue en niveles bajos históricamente, con una tasa de ocupación dinámica que
se explica principalmente por el empleo asalariado.
En el primer trimestre de 2015, la deuda total de las empresas y los hogares creció a una tasa similar
a la registrada en diciembre pasado, tasas que superan el aumento del PIB nominal estimado para el
presente año. El endeudamiento de las empresas en moneda extranjera (directo y bancario) volvió a
desacelerarse, hecho que ha sido compensado por el mejor ritmo de aumento del crédito comercial
en pesos y bonos. La cartera de los hogares se desaceleró levemente, principalmente por la menor
dinámica del crédito hipotecario. Lo anterior se dio junto con unas tasas de interés del crédito que se
incrementaron, aunque en términos reales siguen en niveles inferiores a sus promedios históricos
(exceptuando tarjetas de crédito).
Con todo lo anterior, el equipo técnico estima que el crecimiento del primer trimestre estaría entre
2% y 3,5%, con 2,7% como cifra más factible. Para todo 2015, la cifra más probable de crecimiento
se revisó a la baja, desde 3,6% a 3,2%, contenida en un rango entre 2% y 4,0%. La amplitud del
intervalo refleja la incertidumbre que se tiene sobre los supuestos hechos en los posibles escenarios
extremos. Por su parte, la cifra más factible tiene en cuenta una menor dinámica en el ingreso
nacional y una reducción de la financiación externa, las cuales podrían generar una moderación del
gasto, especialmente por un menor nivel de inversión privada.
En materia de precios, la inflación en marzo se incrementó y se situó en 4,56%, algo superior a la
proyectada por el promedio del mercado y por el equipo técnico. La aceleración en la inflación se
explicó principalmente por el mayor ritmo de aumento en los precios de los alimentos y de los
transables sin alimentos ni regulados. El promedio de las medidas de inflación básica completó un
semestre con incrementos y se situó en 3,65%.
Las medidas de expectativas de inflación de los analistas a un año y las que se derivan de los TES a
2, 3 y 5 años en un rango entre 3,1% y 3,6%.
En resumen, se espera que la desaceleración que se inició a finales de 2014, a partir de un nivel de
actividad cercano a la plena utilización de la capacidad productiva, continúe en 2015. La inflación
aumentó principalmente por factores transitorios y sus expectativas se sitúan por encima del 3%.
Puesto que parte de la menor dinámica del ingreso nacional es de naturaleza permanente, el gasto
interno de la economía debe ajustarse para reducir las vulnerabilidades y generar así las condiciones
de un crecimiento sostenido en el futuro.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
Los miembros de la Junta concuerdan en que el 2015 traerá una desaceleración en el crecimiento
del producto, pero difieren en la magnitud de dicha desaceleración. Mientras que algunos miembros
esperan un crecimiento del PIB cercano a 3%, otros creen que estará más próximo a 3,5% o incluso
por encima de esa cifra.
Destacaron que el menor crecimiento del gasto interno, complementado por la sustitución de
importaciones, y, con mayor rezago, por las mayores exportaciones, inducidas por la depreciación
real del peso, hacen parte de un ajuste necesario de la economía colombiana a las nuevas
condiciones externas.
Dicho ajuste traerá con el tiempo un menor desequilibrio externo y, en consecuencia, contribuirá a
preservar las condiciones necesarias para un crecimiento económico sostenido.
Los miembros de la Junta concordaron en que la inflación total al consumidor ha mostrado
presiones al alza generadas por aumentos temporales en los precios de los alimentos y, en menor
medida, por el traspaso de la devaluación a los precios de los bienes transables de la canasta
familiar. Se prevé que la presión empiece a ceder en el segundo semestre y que la inflación vaya
convergiendo a la meta (3%) en el horizonte de política. Se resalta además la importancia de que las
expectativas de inflación de mediano plazo continúen ancladas a la meta mencionada, como ha sido
el caso hasta ahora.
Para algunos miembros de la Junta el crecimiento en 2015 alcanzaría niveles cercanos al 3%,
debido a una desaceleración de la demanda interna y a una recuperación leve en las exportaciones
no petroleras. Las proyecciones previas incluían un crecimiento en dichas exportaciones que hasta
el momento no parece consolidarse, resultando más probable un aumento en este rubro consistente
con un crecimiento del PIB total de 3%. Teniendo en cuenta la magnitud del choque externo, un
crecimiento del PIB de 3% sería un resultado positivo para la economía en la medida que venga
acompañado con una reducción de las vulnerabilidades externas.
Otros miembros consideran que el crecimiento del PIB en el 2015 estará más próximo al 3,5% o
incluso por encima. El aumento de la demanda externa que se dará con la recuperación de los
Estados Unidos y Europa principalmente, los efectos positivos de la devaluación sobre los sectores
industrial y agropecuario, la contribución del consumo y la inversión pública, ya financiados por el
gobierno, y la dinámica mostrada por el empleo y el crédito, entre otros, permiten prever que la
desaceleración y el necesario ajuste de la economía, asociado con la caída en los términos de
intercambio, se darán en forma ordenada y permitirán alcanzar una tasa de crecimiento destacable
en el contexto latinoamericano.
Un miembro de la Junta reiteró su pronóstico de crecimiento del 3% del PIB para 2015, con un
sesgo a la baja. Señaló que la fuente principal del incremento de la inflación, que ha llevado la tasa
de interés real de política a terreno negativo, ha sido la inflación de alimentos, producida por un
choque de oferta transitorio. Agregó, que es de esperar que a finales de 2015 la inflación total
termine cerca del límite superior del rango meta, y que a lo largo de 2016 converja hacia el 3%. Por
tanto, no obstante la ostensible desaceleración de la economía y el retorno de la brecha del producto
a signo negativo, la tasa de interés nominal de política debería mantenerse inalterada al menos
durante lo que resta del año. Lo anterior, siempre y cuando las expectativas de inflación no se
desanclen de la meta, caso en el cual habría que considerar el cambio de postura de la política
monetaria.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva por unanimidad consideró mantener la tasa de interés de intervención en 4,5%.
Bogotá.
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2015-05-01 |
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Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 22
de mayo de 2015
El 22 de mayo de 2015 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta
Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público,
Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores,
Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca, César Vallejo
Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo.
A continuación se presenta una síntesis de la visión del equipo técnico del Banco de la República
sobre la situación macroeconómica (sección 1) y posteriormente se reseñan las principales
discusiones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2).
Un mayor detalle de la situación macroeconómica elaborada por el equipo técnico del Banco de la
República se presentará en el Informe sobre Inflación del segundo trimestre de 2015 y en el anexo
estadístico.
1. CONTEXTO MACROECONÓMICO
Las nuevas cifras de actividad económica mundial para el primer trimestre de 2015 ratificaron la
debilidad de la demanda externa. En ese periodo el crecimiento de los Estados Unidos fue bajo e
inferior a lo estimado, mientras que la expansión de la zona del euro fue débil aunque algo mayor
que lo proyectado. El PIB de China volvió a desacelerarse mientras que las cifras de actividad
económica de los principales países de la región sugieren que su producto se expandirá a tasas bajas
o negativas. Con ello, es factible que en 2015 el crecimiento económico promedio de nuestros
socios comerciales sea menor que el observado un año atrás.
En los Estados Unidos se espera que el incremento en la tasa de interés de referencia de la Reserva
Federal se inicie hacia finales del presente año. Por su parte, el banco central de la zona del euro y
el de Japón continuaron su política de fuerte estímulo monetario.
En la zona del euro y en menor medida en los Estados Unidos, aumentaron las tasas de interés de
largo plazo de los títulos de deuda pública, pero se mantienen en niveles menores que el promedio
registrado en 2014. El dólar, que en abril y comienzos de mayo se había depreciado frente a la
mayoría de monedas, en la última semana cambió dicha tendencia. Dentro de los principales países
de la región, la depreciación del peso frente al dólar ha sido de las más acentuadas en la última
semana.
Los precios del petróleo se han recuperado parcialmente pero siguen con niveles muy inferiores al
promedio observado en el último lustro. Este comportamiento y el de otros precios de bienes
básicos que exporta e importa Colombia indican que en 2015 los términos de intercambio
registrarían niveles bajos y similares a los observados a inicios de 2009. Esta caída en los términos
de intercambio genera una pérdida significativa en la dinámica del ingreso nacional.
El anterior comportamiento de la demanda externa y de los precios de los bienes básicos se ha visto
reflejado en los resultados de comercio exterior en dólares. En el primer trimestre de 2015 las
exportaciones descendieron 30,2%, caída explicada principalmente por las de origen minero (-
41,8%), especialmente por el menor precio del petróleo. En el mismo periodo las ventas externas de
los principales productos agrícolas aumentaron 24,5%, mientras que las del resto de sectores
descendieron 11,6%. En el mismo periodo, las importaciones totales CIF acumularon una caída de
4,4%.
En el contexto interno, la nueva información para el primer trimestre y abril de 2015 indican que en
ese periodo la actividad económica habría sido menos dinámica que la registrada en el último
trimestre de 2014. Los datos de comercio al por menor, de confianza del consumidor y la encuesta
de expectativas económicas del Banco de la República, sugieren una desaceleración del consumo y
la inversión privada. Por el lado de la oferta, la caída de la producción industrial, el menor
crecimiento de la demanda de energía no regulada, y el descenso en la percepción presente y futura
del comercio indican que el crecimiento económico seguirá desacelerándose. Otra información
como la producción de petróleo, café y cemento sugiere buenos comportamientos.
En el mercado laboral, las cifras a marzo de 2015 muestran que la tasa de desempleo
(desestacionalizada) sigue en niveles históricamente bajos, con una tasa de ocupación dinámica que
se explica principalmente por el empleo asalariado.
En abril la deuda total de las empresas y los hogares creció a una tasa menor que la registrada en el
primer trimestre, pero mayor que el aumento del PIB nominal estimado para el presente año. Lo
anterior se dio junto con unas tasas de interés (comercial y consumo) que disminuyeron y que en
términos reales siguen en niveles inferiores a sus promedios históricos (exceptuando tarjetas de
crédito).
Con todo lo anterior, el equipo técnico estima que el crecimiento del primer trimestre estaría entre
2% y 3,5%, con 2,7% como cifra más factible. Para todo 2015, la cifra más probable de crecimiento
sería 3,2%, contenida en un rango entre 2% y 4,0%. La amplitud del intervalo refleja la
incertidumbre que se tiene sobre los supuestos hechos en los posibles escenarios extremos.
En materia de precios, en abril la inflación se incrementó y se situó en 4,64%, cifra superior a la
proyectada por el promedio del mercado y por el equipo técnico. La aceleración en la inflación se
explicó principalmente por el mayor ritmo de aumento en los precios de los alimentos, y en menor
medida, por el incremento en los precios de los transables y no transables sin alimentos ni
regulados. El promedio de las medidas de inflación básica completó siete meses con incrementos y
se situó en 3,84%.
Las medidas de expectativas de inflación de los analistas a uno y dos años y las que se derivan de
los TES a 2, 3 y 5 años están en un rango entre 3,1% y 3,5%.
En resumen, el aumento observado de la inflación ha obedecido a factores transitorios y sus
expectativas a mediano plazo se mantienen cerca del 3% en un contexto de desaceleración de la
demanda agregada.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
Los miembros de la Junta coincidieron en que la reducción de los términos de intercambio tiene un
componente permanente que afecta negativamente el ingreso nacional, por lo que la demanda
interna debe ajustarse. Este proceso de ajuste a las nuevas condiciones externas se está dando de
manera ordenada.
Igualmente, estuvieron de acuerdo en que, como parte de este proceso, se desacelerará el
crecimiento del producto. Sin embargo, difieren en la magnitud de la desaceleración y de la brecha
del producto resultante de este comportamiento. Aun así, todos los pronósticos de crecimiento de
los miembros de la Junta se encuentran dentro del rango de pronóstico del equipo técnico del Banco
(entre 2% y 4%).
Los miembros de la Junta coinciden en que la desaceleración del gasto agregado impedirá que se
presenten presiones inflacionarias por excesos de demanda y que las expectativas de inflación de
mediano plazo están ancladas en niveles coherentes con la meta. El anclaje de las expectativas y la
inexistencia de excesos de demanda son elementos fundamentales para que la inflación converja a
la meta en el horizonte de política. Concuerdan también en que, de presentarse fenómenos que
pongan en riesgo el cumplimiento de la meta de inflación en el horizonte de política, la autoridad
monetaria deberá reaccionar para conjurar dicho riesgo.
Con respecto al nivel alcanzado por el déficit en la cuenta corriente de la balanza de pagos,
señalaron que ésta es una de las fuentes de mayor vulnerabilidad para la economía colombiana y
que, en esa medida, el menor crecimiento de la demanda interna y la devaluación real del peso son
elementos necesarios para reducirla paulatinamente.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva por unanimidad consideró mantener la tasa de interés de intervención en 4,5%.
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2015-06-01 |
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Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 24
de junio de 2015
El 24 de Junio de 2015 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta
Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público,
Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores,
Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca, César Vallejo
Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo.
A continuación se presenta una síntesis de la visión del equipo técnico del Banco de la República
sobre la situación macroeconómica (sección 1) y posteriormente se reseñan las principales
discusiones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2).
Un mayor detalle de la situación macroeconómica elaborada por el equipo técnico del Banco de la
República se presentará en el Informe sobre Inflación del segundo trimestre de 2015 y en el anexo
estadístico.
1. CONTEXTO MACROECONÓMICO
1. Las nuevas cifras de actividad económica global sugieren que el crecimiento promedio de los
socios comerciales de Colombia para 2015 podría ser algo menor que lo estimado en el informe
trimestral pasado (1,3%). La recuperación económica en los Estados Unidos estaría siendo más
lenta de lo proyectado, mientras que la zona del euro y Japón siguen presentando crecimientos
bajos. La economía China continúa desacelerándose, y las cifras de actividad económica de los
principales países de la región sugieren que su producto se expandirá a tasas bajas o negativas. Con
ello, es factible que en 2015 el crecimiento económico promedio de nuestros socios comerciales sea
menor que el observado un año atrás.
2. En los Estados Unidos se espera que el incremento en la tasa de interés de referencia de la
Reserva Federal se inicie hacia finales del presente año. Por su parte, el banco central de la zona del
euro continuó realizando estímulos monetarios, en medio de una elevada incertidumbre sobre la
permanencia de Grecia en la zona.
3. En los Estados Unidos y en la zona del euro aumentaron las tasas de interés de los títulos de largo
plazo de la deuda pública, pero se mantienen en niveles menores que el promedio registrado en
2014. El dólar retomó su tendencia hacia la apreciación, pero con una pendiente menos marcada
que la observada a inicios de año. En lo corrido del año y dentro de los principales países de la
región con un esquema de inflación objetivo, el real brasileño y el peso colombiano han sido las
monedas más depreciadas frente al dólar.
4. En lo corrido del mes de junio, los precios del petróleo presentaron niveles superiores a lo
proyectado para todo 2015, pero sus cotizaciones siguen siendo muy inferiores al promedio
observado en el último lustro. El promedio de los precios de los bienes que importa Colombia ha
descendido, pero a un menor ritmo que la caída de los precios exportados. Este comportamiento
indica que en 2015, el nivel de los términos de intercambio será bajo y similar al registrado a inicios
de 2009, y que se presentará una pérdida significativa en la dinámica del ingreso nacional.
5. El anterior comportamiento de la demanda externa y de los precios de los bienes básicos se ha
visto reflejado en los resultados de comercio exterior en dólares. En términos anuales, el valor de
las exportaciones volvió a descender en abril, caída explicada principalmente por las de origen
minero, especialmente por el menor nivel del precio del petróleo respecto a un año atrás. En el
mismo mes, las ventas externas de los principales productos agrícolas y del resto de sectores
también descendieron. En el acumulado de los cuatro primeros meses del año, las exportaciones
totales en dólares han caído 29%; las de origen minero han descendido 40,2% y las del resto de
sectores -9,4%; las ventas externas agrícolas aumentaron 16,9%.
6. En abril las importaciones totales en dólares cayeron 18,2% anual. El mayor descenso presentado
por las destinadas a bienes de capital (-23,2%), seguidas de materias primas (-17,5%) y bienes de
consumo (-12,3%). Con ello, en los cuatro primeros meses de 2015 las compras totales externas
acumulan una caída de 8,1%, hecho explicado por el descenso de las importaciones de materias
primas (-16%), de consumo (-2%) y en menor medida de capital (-1%).
7. El comportamiento de las exportaciones e importaciones y el de otros rubros de la balanza de
pagos indican que en el primer trimestre de 2015, el déficit de la cuenta corriente relativo al PIB
sería mayor que el registrado en todo 2014.
8. En el contexto interno, el crecimiento del primer trimestre de 2015 (2,8%) se desaceleró en línea
con lo estimado por el equipo técnico. La demanda interna creció a menor ritmo que un trimestre
atrás, pero a una tasa mayor que la proyectada debido a la dinámica de la inversión. Las
exportaciones netas cayeron, y su aporte negativo al crecimiento resultó superior a lo estimado,
debido al fuerte aumento de las importaciones reales.
9. Por el lado de la oferta, en el primer trimestre de 2015 los sectores más dinámicos fueron las
obras civiles; comercio, reparación, restaurantes y hoteles; establecimientos financieros, seguros y
actividad inmobiliaria. Por su parte, la industria manufacturera y la explotación de minas y canteras
fueron los únicos sectores que presentaron un descenso en su actividad.
10. La nueva información para el segundo trimestre de 2015, de comercio al por menor, de
confianza del consumidor y la encuesta de expectativas económicas del Banco de la República,
sugieren que el consumo privado crece a una tasa algo menor que la registrada a inicios de año. Por
el lado de la oferta, en abril la producción industrial manufacturera volvió a contraerse.
11. En el mercado laboral, las cifras a abril de 2015 registraron un leve incremento de la tasa de
desempleo (desestacionalizada), pero sus niveles siguen siendo históricamente bajos.
12. En mayo la deuda total de las empresas creció a una tasa algo superior que la registrada en el
primer trimestre, mientras que la de los hogares continúa desacelerándose. Ambos saldos crecen a
una tasa mayor que el aumento del PIB nominal estimado para 2015. Lo anterior se ha dado junto
con unas tasas de interés (comercial y consumo) que en términos reales siguen en niveles inferiores
a sus promedios históricos (exceptuando tarjetas de crédito).
13. En materia de precios, en mayo la inflación descendió y se situó en 4,41%, cifra algo menor que
la proyectada por el promedio del mercado y por el equipo técnico. La desaceleración de la
inflación se explicó por el menor ritmo de aumento en los precios de los alimentos. Los demás
grupos: regulados y transables y no transables sin alimentos ni regulados se aceleraron y sus tasas
de aumento se sitúan en la parte superior del rango meta.
14. El promedio de las medidas de inflación básica completó ocho meses con incrementos y se situó
en 3,99%. Las medidas de expectativas de inflación de los analistas a uno y dos años y las que se
derivan de los TES a 2, 3 y 5 años se mantienen en un rango entre 3,0% y 3,5%.
En resumen, la desaceleración que se inició a finales de 2014 continúa en 2015. La inflación
disminuyó y sus expectativas continúan cerca del 3%. El gasto interno de la economía continua su
proceso de ajuste debido a la menor dinámica del ingreso nacional.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
En opinión de los miembros de la Junta, la nueva información disponible corrobora que continúa el
proceso de ajuste ordenado al que se habían referido en reuniones anteriores, marcado por una
reducción gradual en el crecimiento de demanda interna y del producto. Todo ello va en línea con la
convergencia de la inflación a la meta de largo plazo y contribuye a la reducción en el déficit en la
cuenta corriente de la balanza de pagos.
En materia de precios, destacaron que la inflación anual se redujo, pero aumentaron las inflaciones
básicas. El incremento en los precios de algunos bienes y servicios ha tenido una persistencia mayor
a la esperada, lo que ha elevado las proyecciones de inflación para el 2015. Sin embargo, el buen
anclaje de las expectativas de inflación y los excesos de capacidad instalada que se generarán como
consecuencia de la desaceleración del producto permiten prever que la inflación convergerá a la
meta en el horizonte de política.
Señalaron también que el déficit en la cuenta corriente de la balanza de pagos es una vulnerabilidad
para la economía colombiana. El menor crecimiento de la demanda interna y la devaluación real del
peso son elementos necesarios para reducirlo paulatinamente.
Finalmente, subrayaron que la flexibilidad cambiaria es un elemento fundamental del esquema de
inflación objetivo, que permite que la tasa de cambio absorba choques externos. Este marco de
política le ha permitido a la economía colombiana afrontar los choques de términos de intercambio
y la volatilidad de los mercados financieros internacionales.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva por unanimidad consideró mantener la tasa de interés de intervención en 4,5%.
Bogotá D. C.
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2015-07-01 |
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Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 31
de Julio de 2015
El 31 de Julio de 2015 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta
Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público,
Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores,
Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca, César Vallejo
Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo.
A continuación se presenta una síntesis de la visión del equipo técnico del Banco de la República
sobre la situación macroeconómica (sección 1) y posteriormente se reseñan las principales
discusiones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2).
Un mayor detalle de la situación macroeconómica elaborada por el equipo técnico del Banco de la
República se presentará en el Informe sobre Inflación del segundo trimestre de 2015 y en el anexo
estadístico.
1. CONTEXTO MACROECONÓMICO
En el presente informe el crecimiento proyectado para 2015 de la mayoría de los socios comerciales
de Colombia fue revisado a la baja por el equipo técnico. De esta forma, para 2015 se estima una
demanda externa más débil con una dinámica inferior a la registrada en 2014.
En Estados Unidos el PIB del primer y segundo trimestre de 2015 muestran una moderación en su
crecimiento. La zona del euro mantiene una lenta recuperación mientras que en China se aumentó la
probabilidad de que su desaceleración sea más fuerte que la esperada. Los principales países socios
de Colombia en América Latina siguen registrando bajos crecimientos y algunas caídas en su
actividad económica.
En los mercados financieros internacionales, el acuerdo entre Grecia y sus acreedores redujo de
forma importante la aversión al riesgo global. En China los malos resultados registrados por las
empresas generaron caídas importantes en el mercado bursátil desde niveles históricamente altos.
En Estados Unidos aumentó la probabilidad de que se presente un incremento en la tasa de interés
de referencia por parte de la Reserva Federal y con ello las tasas de interés de mercado han
aumentado y el dólar se sigue fortaleciendo.
Las menores perspectivas de crecimiento mundial, los altos niveles de producción de crudo y las
mayores perspectivas de oferta de este bien básico, generaron en las últimas semanas una caída en
los precios internacionales del petróleo. Estos nuevos niveles se situaron por debajo de la
estimación que tiene el equipo técnico para el promedio de 2015. Algo similar ocurrió con las
cotizaciones de otros bienes básicos mineros que exporta Colombia. De esta forma, en el presente
año la caída de los términos de intercambio seguirá teniendo un efecto negativo significativo sobre
el ingreso nacional.
Los menores precios de los bienes básicos y la debilidad en la demanda externa se ha reflejado en el
comportamiento de las ventas externas en dólares de Colombia. En el bimestre abril-mayo, las
exportaciones continuaron registrando caídas anuales importantes. Los mayores descensos se
presentaron en las ventas externas de origen minero, seguidas por las caídas en las exportaciones de
bienes agrícolas y del resto de sectores.
En abril-mayo el descenso anual en el valor en dólares de la importaciones también fue importante,
aunque menor que el registrado por las exportaciones. Las mayores caídas se presentaron en las
compras externas de bienes de capital, seguidas por los descensos en las importaciones de materias
primas y para consumo.
Con la nueva información, el equipo técnico revisó al alza la proyección que se tiene para 2015 del
déficit en la cuenta corriente relativo al PIB. El nuevo intervalo se sitúa entre 4,8% y 6,4%, con
5,6% como cifra más factible. Esta revisión tiene en cuenta un balance más negativo en el comercio
de servicios no factoriales, compensado parcialmente por unas exportaciones netas menos
deficitarias y unos menores egresos netos por renta de factores.
En el contexto interno, los indicadores de comercio al por menor, de confianza al consumidor y del
comercio, de expectativas económicas de la encuesta mensual del Banco de la República, de
importaciones de bienes de capital y de consumo, indican que en el segundo trimestre de 2015 la
absorción se habría desacelerado nuevamente. El déficit comercial medido en pesos constantes se
habría reducido.
En el mercado laboral, la tendencia decreciente de la tasas de desempleo (desestacionalizada)
muestra señales de interrumpirse. En los últimos meses, la tasa global de participación se ha
mantenido relativamente estable mientras que la de ocupación ha disminuido.
Las tasas reales de interés se han reducido y se sitúan por debajo de sus promedios históricos
calculados desde el 2000 (exceptuando tarjetas de crédito). El crédito total se ha desacelerado pero
crece a tasas superiores que el aumento del PIB nominal.
Con todo lo anterior, el equipo técnico estima que el crecimiento de la economía para el segundo
trimestre de 2015 habría sido similar al registrado en el primero. Para todo 2015, la cifra más
probable se revisó desde 3,2% a 2,8%, contenida en un rango entre 1,8% y 3,4%.
En junio la inflación anual se mantuvo relativamente estable y situó en 4,42%, cifra algo inferior a
lo estimado por el equipo técnico y por el promedio del mercado. En esta oportunidad el menor
ritmo de aumento del IPC de regulados compensó los aumentos registrados en los otros grupos. El
promedio de las cuatro medidas de inflaciones básicas volvió a incrementarse y se situó en 4,14%.
Las expectativas de inflación a uno y dos años de los analistas financieros permanecieron
relativamente estables. Las que se calculan con los papeles de deuda pública a más de dos años re
redujeron. Todas se sitúan alrededor del 3%.
En resumen, la inflación se mantiene por encima del límite superior del rango meta, las expectativas
de inflación se encuentran alrededor de 3% y el gasto interno de la economía continúa ajustándose a
la menor dinámica del ingreso nacional. Se espera que en el horizonte de acción de la política
monetaria los choques temporales de precios se reviertan en un entorno de expectativas de inflación
ancladas en la meta.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
Los miembros de la Junta resaltaron el ajuste gradual del gasto interno de la economía a la menor
dinámica del ingreso nacional y la existencia de un nivel de inflación que se encuentra por encima
del límite superior del rango meta. Se espera que en el horizonte de acción de la política monetaria
los choques temporales de precios se reviertan en un entorno de expectativas de inflación ancladas
en la meta.
Para algunos, existen factores que aumentan el riesgo de que en un futuro las expectativas de
inflación se desvíen de la meta, lo cual podría ser argumento para un incremento preventivo de la
tasa de interés. Sin embargo, ante la magnitud del choque de términos de intercambio, existen
también riesgos elevados de que la economía crezca por debajo de lo previsto en los modelos
estimados por el equipo técnico. En esta medida consideran apropiado no aumentar la tasa de
interés de intervención de forma pro cíclica a menos que la probabilidad de que se comprometa la
credibilidad de la política monetaria se incremente o de que el ajuste en el gasto esté siendo
insuficiente para guiar la inflación a su meta de largo plazo.
Otros consideraron que, dado que la inflación se mantuvo relativamente estable en 4,42% y sus
expectativas continúan dentro del rango meta y se espera que la demanda interna sufra un choque
significativo, es prudente esperar y obtener mayor información relacionada con el comportamiento
de los precios, en especial el impacto del pass through. Un aumento de la tasa de interés de
intervención en este momento sería inapropiado, porque la inflación sigue presentándose por
fenómenos temporales, y un cambio en la señal de política podría afectar las expectativas en un
contexto donde estas se encuentran ancladas.
Un tercer grupo manifestó su preocupación por el persistente ascenso del promedio de los
indicadores de inflación básica durante nueve meses consecutivos, el cual además ya superó el
límite superior del rango meta (4%), y por la probabilidad consiguiente de que las expectativas se
desanclen de aquella. Opinó adicionalmente que, en la coyuntura actual, parece más probable el
riesgo de mayor inflación que el de una desaceleración excesiva y subrayó que la clave de una
buena política monetaria yace en la capacidad de anticipación de sus autoridades. Un menor
estímulo monetario en 25 p.b. no debería tener un excesivo impacto adicional en la desaceleración
de la economía y en el empleo. Tendría la ventaja de reforzar el anclaje de las expectativas de
inflación a la meta, reducir la presión devaluacionista y contribuir a corregir el déficit en cuenta
corriente. Sería además una señal del compromiso del Banco con el control de la inflación y
aumentaría la credibilidad de la autoridad monetaria.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva por mayoría consideró mantener la tasa de interés de intervención en 4,5%.
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2015-08-01 |
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Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 21
de agosto de 2015
El 21 de Agosto de 2015 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la
Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito
Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los
Directores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca,
César Vallejo Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo.
A continuación se presenta una síntesis de la visión del equipo técnico del Banco de la República
sobre la situación macroeconómica (sección 1) y posteriormente se reseñan las principales
discusiones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2).
Un mayor detalle de la situación macroeconómica elaborada por el equipo técnico del Banco de la
República se presentará en el Informe sobre Inflación del segundo trimestre de 2015 y en el anexo
estadístico.
1. CONTEXTO MACROECONÓMICO
1. En el presente informe las cifras de actividad económica mundial continúan reflejando una débil
dinámica de la demanda externa e inferior a la registrada en 2014. En los Estados Unidos la
economía habría seguido creciendo a tasas favorables mientras que la zona del euro se recupera
aunque a una tasa algo inferior a la prevista. En China, la actividad económica continúa
desacelerándose y las principales economías de América Latina registran bajos aumentos o
retrocesos del producto.
2. En Estados Unidos y en la zona del euro las tasas de interés de largo plazo han disminuido pero
se mantienen en niveles superiores al promedio registrado en 2014. En China, el yuan se devaluó y
persisten las caídas en el mercado bursátil desde niveles históricamente altos. En Estados Unidos se
mantiene elevada la probabilidad de que se presente un incremento en la tasa de interés de
referencia de la Reserva Federal y el dólar se sigue fortaleciendo.
3. Las menores perspectivas de crecimiento mundial, los altos niveles de producción de crudo y las
mayores perspectivas de oferta de este bien básico, volvieron a generar caídas en los precios
internacionales del petróleo. Estos nuevos niveles de precios se sitúan por debajo de la estimación
que tiene el equipo técnico para el promedio de 2015. Algo similar ocurrió con las cotizaciones de
otros bienes básicos mineros que exporta Colombia. De esta forma, en el presente año la caída de
los términos de intercambio seguirá siendo importante con un efecto negativo y significativo sobre
el ingreso nacional.
4. Los menores precios de los bienes básicos y la debilidad en la demanda externa se ha reflejado en
el comportamiento de las ventas externas en dólares de Colombia. En el segundo trimestre las
exportaciones continuaron registrando caídas anuales importantes (-32,6%). En ese periodo los
mayores descensos se presentaron en las ventas externas de origen minero (-43,3%), seguidas por
las caídas en las exportaciones de bienes agrícolas (-13,9%) y del resto de sectores (-3%).
5. La nueva información de comercio exterior continúa sugiriendo que en el presente año el déficit
de la cuenta corriente relativo al PIB será mayor que el registrado en 2014. Para el presente año el
intervalo de pronóstico se mantiene entre 4,8% y 6,4%, con 5,6% como cifra más factible.
6. En el contexto interno, los indicadores para el segundo trimestre de comercio al por menor, de
confianza al consumidor y del comercio, y de expectativas económicas del Banco de la República,
indican que la absorción continúa desacelerándose. Por el lado de la oferta, en el mismo periodo, la
industria se contrajo y los indicadores de construcción sugieren una desaceleración en el sector. Las
cifras de julio muestran una caída en la confianza del consumidor y en la producción de petróleo,
mientras que la producción de café registró un aumento importante.
7. En el mercado laboral, la tasa de desempleo (desestacionalizada) dejó de caer y en términos
anuales la creación de empleo se ha desacelerado. En junio, al descontar los efectos estacionales, la
tasa global de participación y la tasa de ocupación descendieron.
8. Las tasas reales de interés se redujeron y se sitúan por debajo de sus promedios históricos
calculados desde el 2000 (exceptuando tarjetas de crédito). El crédito comercial se ha desacelerado
mientras que el dirigido a los hogares mejoró su dinámica. Ambos tipos de crédito crecen a tasas
superiores que el aumento del PIB nominal.
9. Con todo lo anterior, el equipo técnico mantuvo su estimación de crecimiento económico para el
segundo trimestre de 2015 entre 2,0% y 3,5%, con 2,7% como cifra más probable. Para todo 2015,
la cifra más factible sigue en 2,8%, contenida en un rango entre 1,8% y 3,4%.
10. En julio la inflación anual se incrementó levemente y situó en 4,46%, cifra algo superior a lo
estimado por el equipo técnico y por el promedio del mercado. En esta oportunidad la aceleración
del IPC sin alimentos explicó el mayor ritmo de aumento de la inflación. Las otras medidas de
inflación básica también se incrementaron y su promedio se situó en 4,29% y acumuló diez meses
con aumentos consecutivos.
11. Las expectativas de inflación de los analistas financieros a uno y dos años y las que se calculan
con los papeles de deuda pública a más de dos años se incrementaron. Todas estas medidas son
inferiores que el actual registro de inflación y se sitúan en la parte superior del rango meta.
En resumen, la inflación se mantiene por encima del límite superior del rango meta y el gasto
interno de la economía continúa ajustándose a la menor dinámica del ingreso nacional. Las
proyecciones indican que en el horizonte de acción de la política monetaria los choques temporales
de precios se revertirán y los probables excesos de capacidad contribuirán a que la inflación
converja a la meta en un entorno de expectativas de inflación ancladas. No obstante, el traslado
parcial de la devaluación del peso a los precios y una eventual intensificación del fenómeno de El
Niño podrían hacer más lenta dicha convergencia.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
Los miembros de la Junta resaltaron que la economía colombiana ha recibido un choque muy fuerte
asociado a la caída de los precios del petróleo, que reduce el crecimiento y aumenta la inflación en
el corto plazo -en la medida que la devaluación se traslada parcialmente a los precios-. Ese
incremento de la inflación es temporal siempre y cuando las expectativas de inflación se mantengan
ancladas cerca de la meta del Banco de la República. Por su parte, el menor crecimiento es la
respuesta de la economía al ajuste necesario de la demanda interna ante un menor ingreso nacional,
fruto del choque negativo de términos de intercambio.
Para algunos miembros de la Junta, la información reciente podría estar sugiriendo un crecimiento
del producto menor al esperado por el equipo técnico y, dado el anclaje actual de las expectativas
de inflación, consideraron apropiado esperar a tener mayor información sobre la evolución de
variables que pueden incidir de manera significativa en el comportamiento futuro de la actividad
productiva y las expectativas de inflación. Para ellos, esa nueva información contribuirá a balancear
de mejor manera los riesgos entre una mayor inflación y un ajuste excesivo del crecimiento
económico, que en el corto plazo se contraponen para la decisión de la postura de política.
Otros miembros concuerdan en que la información reciente apunta a un menor crecimiento. Este
grupo opinó que en estas condiciones, el escenario más probable es uno en el que se genere un
exceso de capacidad productiva en el horizonte de política. Esto apuntalaría la convergencia de la
inflación hacia la meta, y dado el anclaje actual de las expectativas de inflación, hace que la postura
de política existente lleve al cumplimiento de sus objetivos. Así mismo señalaron que, si bien las
expectativas de inflación se encuentran ancladas a la meta, los riesgos de que dejen de estarlo están
asociados principalmente a la dinámica de corto plazo del tipo de cambio, la cual tiene una relación
débil con la tasa de interés de intervención. Por lo tanto consideran fundamental fortalecer la
comunicación con el público respecto de la naturaleza de la inflación y los mecanismos de
convergencia de la misma hacia la meta de mediano plazo.
Otro grupo manifestó que la presión al alza de la inflación, proveniente del traslado de la
devaluación a los precios, si bien es temporal, se manifiesta más rápidamente que la presión
desinflacionaria proveniente de la desaceleración de la demanda interna y los excesos de capacidad
productiva. Esto puede desanclar las expectativas de inflación, produciendo un espiral de precios y
una situación de inestabilidad que haga inevitables drásticas medidas de política en el futuro. Ese
riesgo de desancle ha crecido significativamente en un escenario en el que la inflación completa
medio año por encima del límite superior del rango meta, que ha seguido subiendo aun
sustrayéndole la inflación de alimentos, y en el que el promedio de los indicadores de inflación
básica ha aumentado por décimo mes consecutivo y se sitúa también por encima del límite superior
de dicho rango. Consideran además que, dado lo anterior y una tasa de interés real cercana a cero en
los últimos meses, reajustes tempranos de la tasa de referencia podrían evitar posteriores alzas de
mayor magnitud. En su opinión, un aumento de 25 p.b. sería una señal que contribuiría a que no se
desanclen las expectativas a través del fortalecimiento de la credibilidad del Banco.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva por mayoría consideró mantener la tasa de interés de intervención en 4,5%.
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2015-09-01 |
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Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 25
de Septiembre de 2015
El 25 de Septiembre de 2015 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la
Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito
Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los
Directores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca,
César Vallejo Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo.
A continuación se presenta una síntesis de la visión del equipo técnico del Banco de la República
sobre la situación macroeconómica (sección 1) y posteriormente se reseñan las principales
discusiones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2).
Un mayor detalle de la situación macroeconómica elaborada por el equipo técnico del Banco de la
República se presentará en el Informe sobre Inflación del tercer trimestre de 2015 y en el anexo
estadístico.
1. CONTEXTO MACROECONÓMICO
Las cifras de actividad económica mundial continúan reflejando una débil dinámica de la demanda
externa e inferior a la registrada en 2014. En los Estados Unidos la economía habría seguido
creciendo a tasas favorables mientras que la zona del euro se recupera lentamente. En China,
continúa la desaceleración, y su banco central implementó nuevas medidas de estímulo. Las
principales economías de América Latina registran bajos aumentos y en algunos casos retrocesos.
En su reunión de septiembre la Reserva Federal de los Estados Unidos decidió no incrementar su
tasa de interés. Según su comunicado, esta decisión obedeció a la mayor incertidumbre en el
panorama internacional y a presiones inflacionarias menores a las esperadas. A pesar de ello, las
proyecciones de los miembros del Comité Federal de Operaciones de Mercado Abierto (FOMC) de
la Fed sugieren que subirían su tasa de política en la última parte del año y que continuarían con
alzas graduales a futuro.
En lo corrido del presente mes los indicadores de volatilidad de los mercados financieros se
redujeron desde los elevados niveles que presentaron a finales de agosto. Las primas de riesgo de
las economías más grandes de la región han permanecido en niveles superiores a los de 2014 y las
cotizaciones de las monedas respecto al dólar mantienen una alta volatilidad.
En las últimas semanas, el precio internacional del petróleo tuvo una leve recuperación pero se
mantiene bajo (menos de USD 50 para la referencia Brent) y con alta volatilidad. Las cotizaciones
internacionales de otros bienes básicos continúan siendo muy inferiores a los niveles registrados en
los últimos años. Esto ha generado una caída en los términos de intercambio de los países que los
exportan y ha deteriorado su ingreso nacional. En el presente año, esta tendencia ha sido
especialmente acentuada en Colombia.
Las cifras del segundo trimestre de 2015 muestran que el ajuste del déficit externo del país estaría
ocurriendo de forma más lenta que la esperada, hecho explicado principalmente por el
comportamiento de la balanza comercial de bienes. Los bajos precios de los bienes básicos y la
debilidad en la demanda externa relevante para el país se han reflejado en un deterioro de las ventas
externas (-32,6% acumulado a julio) superior que el proyectado. Las importaciones han caído a una
tasa más lenta que lo pronosticado (-12,1% acumulado a julio).
En el contexto interno, los resultados del PIB del segundo trimestre revelados por el DANE
mostraron un crecimiento de la economía (3% anual) un poco mejor que lo proyectado. La demanda
interna se desaceleró de manera significativa, en línea con lo esperado. El ajuste se dio
principalmente por el rubro de inversión en maquinaria y equipo de transporte, mientras que el
consumo privado se desaceleró a una tasa más lenta. Tanto las exportaciones como las
importaciones cayeron en términos reales, pero su contribución neta al crecimiento del PIB fue
positiva.
Por el lado de la oferta, los sectores que más crecieron fueron la construcción y la minería (8,7% y
4,2%, respectivamente), y la única rama que reportó una disminución en su producción fue la
industria (-1,3%). La información disponible para el tercer trimestre no muestra cambios en estas
tendencias. Para todo 2015, el equipo técnico mantuvo su estimación de crecimiento económico en
2,8% como cifra más probable, contenida en un rango entre 1,8% y 3,4%.
En el mercado laboral, la tasa de desempleo descendió en julio, lo cual se explica por un menor
nivel de la participación laboral y no por un aumento de la contratación. Adicionalmente, el empleo
asalariado y formal se ha desacelerado en los últimos meses.
Las tasas reales de interés se mantienen por debajo de sus promedios históricos calculados desde el
2000 (exceptuando tarjetas de crédito). El crédito a las empresas y a los hogares continúa creciendo
por encima del PIB nominal.
En agosto la inflación anual se incrementó y se situó en 4,74%. En lo corrido del año se acumuló
una inflación de 4,02%. La mayor parte del aumento se explica por el componente del IPC transable
sin alimentos ni regulados y por los alimentos. Los cuatro indicadores de inflación básica también
superaron el techo del rango meta y su promedio se situó en el máximo desde junio de 2009. En
términos mensuales y con series desestacionalizadas, más del 80% de los ítems de la canasta del
IPC mostraron incrementos en sus precios.
Las expectativas de inflación de los analistas financieros y las que se calculan a partir de los papeles
de deuda pública se incrementaron significativamente en septiembre. Estas últimas, calculadas a 2,
3, 5 y 10 años, se ubicaron, en promedio al 22 de septiembre, por encima del techo del rango meta.
En resumen, la nueva información disponible muestra un aumento continuo y mayor al esperado de
la inflación y de las medidas de inflación básica, así como la aparición de señales de posible
"desanclaje" de las expectativas de inflación. Los fuertes aumentos de los precios de los bienes que
se ven más afectados por la depreciación del peso han continuado presionando la inflación al alza.
Los precios de los otros bienes y servicios también muestran variaciones crecientes, lo cual puede
reflejar la presencia de indexación, la expectativa de mayor inflación en el futuro o presiones de
costos en esos sectores. El fenómeno de El Niño se intensificó y aumentó el riesgo de incrementos
adicionales en los precios de los alimentos y la energía. Los datos recientes de crecimiento y
actividad económica confirman una desaceleración de la producción y el gasto en línea con las
proyecciones del equipo técnico del Banco y compatible con la corrección del déficit externo del
país. Así, el riesgo de un aumento duradero de la inflación y de un desanclaje de las expectativas de
inflación se incrementó, mientras que el riesgo de una desaceleración excesiva de la actividad
económica no ha presentado un cambio notorio.
2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA
La Junta en el mes de septiembre de 2015 decidió aumentar la tasa de interés en 25 puntos básicos,
después de 13 meses de haber mantenido dicha tasa estable, al percibir un cambio en el balance de
riesgos que enfrenta la economía.
Todos los miembros de la Junta concuerdan que la economía colombiana se está ajustando al fuerte
choque de ingreso derivado de la caída del precio internacional del petróleo que ha generado una
depreciación sustancial del peso, la cual es necesaria para lograr una reorientación sectorial del
gasto y la producción, conducente al ajuste de las cuentas externas del país.
Por su gran magnitud, la devaluación ha elevado la inflación de los precios al consumidor, y dicho
aumento se ha visto reforzado por otras presiones de oferta sobre los alimentos especialmente. Sin
embargo, consideran que este choque es transitorio, puesto que no se espera una depreciación
adicional, fuerte y continua, y así mismo esperan que los fenómenos que están afectando los
precios de los alimentos desaparezcan en el horizonte de política.
Aunque ha habido diferentes percepciones de los riesgos existentes a la baja en términos de
crecimiento y en consecuencia de la posibilidad de que se dé un ajuste mayor al necesario, en
particular en un contexto de débil demanda externa, esa percepción se ha reducido.
Por el contrario, han aumentado los riesgos de "desanclaje" de las expectativas de inflación en
presencia de un aumento continuo y mayor al esperado de la inflación y de las medidas de inflación
básica. Los indicadores de expectativas de inflación aumentaron y aquellos derivados de los precios
de la deuda pública a corto y largo plazo se sitúan por encima de 4%.
Ante este cambio en el balance de riesgos que enfrenta la economía, con mayores riesgos de un
aumento duradero de la inflación y de un desanclaje de las expectativas de inflación, la Junta
Directiva decidió aumentar en 25 pbs la tasa de interés de referencia del Banco de la República.
Con la información actual considera que este aumento es coherente con la convergencia de la
inflación hacia la meta del 3%.
3. DECISIÓN DE POLÍTICA
La Junta Directiva por unanimidad decidió incrementar la tasa de interés de intervención en 25 pb y
la situó en 4,75%.
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