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2007-06-01
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 15 de junio de 2007 El 15 de junio de 2007 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia de todos sus miembros: doctor Óscar Iván Zuluaga Escobar, Ministro de Hacienda y Crédito Público, doctor José Darío Uribe Escobar, Gerente General y los Codirectores, doctores Carlos Gustavo Cano Sanz, Juan José Echavarría Soto, Juan Mario Laserna Jaramillo, Fernando Tenjo Galarza y Leonardo Villar Gómez, en la cual se discutió la situación inflacionaria y se tomaron decisiones relacionadas con las tasas de interés de intervención del Banco. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en la reunión. 1. Antecedentes a. Desarrollos recientes de la inflación En el mes de mayo la inflación anual al consumidor se situó en 6,23%, por fuera del rango meta establecido por la Junta Directiva del Banco para diciembre de este año (3,5% - 4,5%). Ello, a pesar de que se interrumpió la tendencia ascendente de la inflación, tanto en el grupo de alimentos como en el índice de precios al consumidor (IPC) sin alimentos. Si bien el promedio de los tres indicadores de inflación básica (sin alimentos, núcleo 20 y sin alimentos ni regulados) se redujo de 5,29% en abril a 5,21% en el último mes, también se ubicó por encima del rango meta de inflación. La inflación anual de transables se mantuvo alrededor del 2% a lo largo del año a pesar de una apreciación de 13% en el año corrido, mientras que la de no transables sin alimentos ni regulados presentó nuevamente un ligero repunte, al situarse en 5,1%. Los aumentos se observaron principalmente en arriendos pero también en otros subgrupos relacionados con la vivienda y la salud. Desde septiembre, mes en el que 2 alcanzó un punto mínimo, la inflación anual de no transables sin alimentos ni regulados ha aumentado cerca de 90 puntos básicos. El comportamiento de los alimentos explica cerca del 77% de lo ocurrido con el índice global de precios al consumidor en lo corrido del año, y por ello es necesario sopesar la importancia relativa de elementos transitorios o permanentes en la evolución de sus precios. Los alimentos cerraron el mes con una inflación anual de 10%, muy cercana a la del mes de abril, debido al comportamiento de los alimentos perecederos (tubérculos, hortalizas, frutas y legumbres). Se trata de un patrón anticipado, al ceder los efectos del fenómeno de El Niño. Sin embargo, los incrementos en los precios de otros grupos de alimentos podrían ser menos transitorios. De hecho, el precio de los alimentos procesados, incluyendo carne y comidas fuera del hogar, continuó aumentando, tal y como lo viene haciendo desde marzo del año pasado. Los aumentos recayeron principalmente en la carne de res y sus sustitutos, lo cual sugiere que se mantienen los efectos de la mayor demanda venezolana y el proveniente de la fortaleza de la demanda interna. También se presentaron aumentos en la inflación de comidas fuera del hogar. Dentro del rubro de alimentos procesados se registró un buen comportamiento en los precios de los alimentos importados y/o más directamente afectados por precios externos. b. Contexto externo, crecimiento y variables financieras Los mercados externos mostraron una mayor volatilidad, como consecuencia del incremento en la percepción de riesgo asociado a posibles presiones inflacionarias, tanto en los Estados Unidos como en la mayoría de países desarrollados. El repunte del riesgo se debió en parte a los mejores indicadores en la industria, el comercio y el empleo en las últimas semanas, junto con los incrementos en los precios de la gasolina y los alimentos. A este hecho se sumaron los ajustes recientes en las tasas de interés por parte de varios bancos centrales, lo que afectó el desempeño de los mercados de activos y de divisas y produjo un repunte de las tasas de interés en los mercados internacionales. La 3 economía mundial muestra una fortaleza superior a la esperada y la probabilidad de incrementos en las tasas de interés externas ha aumentado. A pesar de lo anterior, los factores fundamentales como términos de intercambio y crecimiento de los socios comerciales son ahora más favorables para Colombia. Así mismo, no se esperan cambios importantes en los flujos de capital de largo plazo hacia el país. Los indicadores disponibles sobre industria, construcción y comercio confirman un muy buen desempeño de la economía colombiana en el primer trimestre del año. Lo anterior, sumado al dinamismo de los sectores agropecuario y de servicios del gobierno y a la información que divulgó el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE) sobre el crecimiento de obras civiles en el primer trimestre de 2007 (42,7%), llevó a que el equipo técnico del Banco estime que el crecimiento para el primer trimestre podría estar por encima del 7%. Por el lado de la demanda, la contribución de la inversión y el consumo de los hogares es similar. El consumo estaría creciendo alrededor del 8%, un ritmo semejante al observado en la segunda mitad de 2006. Factores como el crecimiento del crédito y las cifras preliminares de importaciones hacen pensar que el dinamismo se ha mantenido en estos meses. La cartera total del sistema financiero en mayo continuó creciendo a un ritmo anual del 34%, con signos parciales de moderación reciente, principalmente en el crédito ordinario. En los últimos dos meses las entidades financieras continuaron fondeándose con captaciones y con liquidación de TES. Respecto a la cartera en moneda extranjera, las cifras a mayo muestran una menor expansión a la observada un mes atrás (de US$ 115 millones frente a US$ 565 millones). La Junta ha incrementado paulatinamente las tasas de interés REPO desde abril del año pasado, pero la tasa DTF a 90 días y otras tasas activas y pasivas han crecido mucho menos; varias de ellas han incluso descendido en términos reales y las tasas reales activas se mantienen en niveles históricamente bajos. Hay convicción de que el incremento en las tasas REPO comenzará a sentirse con más fuerza sobre las demás 4 tasas de la economía en los próximos meses. Las tasas de interés nominales pasivas se mantuvieron sin cambios en mayo, en tanto que las tasas activas aumentaron. El incremento en el caso de las de consumo y tarjetas puede estar vinculado al reajuste en la tasa de usura. Las condiciones propicias para el crecimiento de la demanda agregada continúan vigentes. Por su parte, la demanda externa se mantiene fuerte y los términos de intercambio continúan siendo favorables. Estos elementos han mitigado el efecto de la apreciación sobre los sectores transables. 2. Discusión y opciones de política monetaria En desarrollo de la discusión, se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo anual de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas por el Banco; (ii) el comportamiento de la inflación de los bienes no transables sigue sin mostrar una tendencia hacia la baja; (iii) el equipo técnico del Banco ha elevado su proyección de crecimiento del PIB para el año, reflejando la importante dinámica que viene registrando la demanda agregada que supera las proyecciones iniciales; (iv) las proyecciones del equipo técnico del Banco sugieren una probabilidad no despreciable de que la inflación se sitúe por encima del rango meta fijado por la Junta, a pesar de que la inflación probablemente disminuirá en el segundo semestre del año; y (v) la apreciación de la tasa de cambio no se ha reflejado en los precios de los bienes transables. Se destacó que la economía colombiana sigue mostrando una importante dinámica que llevó al equipo técnico a ajustar al alza sus proyecciones para el crecimiento del PIB en el primer trimestre del año. Los indicadores disponibles muestran que la inversión y el consumo siguen comportándose favorablemente y que no se han presentado cambios importantes en el contexto internacional que afecten de manera negativa los términos de intercambio. Se estima que continúa presente el riesgo de presiones inflacionarias de demanda, si bien en el segundo semestre se espera que se 5 hagan más evidentes los efectos de los aumentos de las tasas de interés. Se destacó que el crédito continúa mostrando un crecimiento importante, con alguna moderación en las últimas semanas. Los principales puntos de divergencia entre los miembros de la Junta se refieren a los siguientes aspectos: (i) las posibilidades de reversión de los precios de los alimentos en lo restante del año; (ii) el comportamiento de los precios de los bienes transables y el efecto de la revaluación del peso; y (iii) la duración del mecanismo de transmisión de aumentos anteriores en las tasas de interés de intervención sobre las tasas de interés de mercado y la conveniencia de hacer ajustes adicionales en la presente sesión. Algunos directores expresaron su preocupación por la situación del crecimiento de los precios de los alimentos y la posibilidad de que la caída prevista para el segundo semestre sea menor que la inicialmente proyectada al concentrarse exclusivamente en los precios de los alimentos perecederos. Esto debido a que tanto el efecto de la demanda de alimentos procedente de Venezuela como el de los altos precios internacionales pueden ser más duraderos. En contraste, otros directores destacaron que los precios de algunas materias primas de los biocombustibles, han venido cediendo terreno a nivel internacional, como es el caso del azúcar, lo cual sería de prever que pueda ocurrir con el resto más adelante. Algo similar puede ocurrir con el precio del maíz, dado el volumen esperado de la cosecha de este producto en Estados Unidos. Estos elementos pueden tener un efecto importante en términos de la reducción de la inflación de alimentos. Algunos directores señalaron que debe estudiarse cuidadosamente el comportamiento de los precios de los bienes transables, los cuales no han reducido su tasa de crecimiento anual a pesar del comportamiento de la tasa de cambio, situación que puede presentarse con mayor intensidad en el segundo semestre del año. Otros señalaron que este hecho es evidencia de la gran dinámica que registra en el momento la demanda agregada. 6 Un grupo de directores manifestó la conveniencia de no incrementar las tasas de interés de intervención en esta reunión y revisar de nuevo el tema en la próxima, en espera a que las medidas ya adoptadas en este y otros frentes de política monetaria muestren sus resultados en registros más favorables de inflación. Destacaron que si bien las medidas tomadas por la Junta han mostrado un mayor rezago en los mecanismos de transmisión dado el cambio de la estructura de fondeo de los establecimientos de crédito que han estado liquidando inversiones en TES a favor de la cartera, algunas tasas pasivas vienen reaccionado al alza. Llamaron la atención sobre los posibles efectos que se pueden presentar en la tasa de cambio, al estimular mayores entradas de capital del exterior. También advirtieron que apretar en exceso la política monetaria cuando el PIB y el empleo vienen creciendo de manera satisfactoria desde hace cuatro años, y la inflación convergiendo hacia su meta de largo plazo, podría frustrar la expansión de la economía. Otros directores recordaron que a pesar de ajustes recientes, las tasas de interés de mercado en términos reales están en niveles históricamente bajos y algunas de ellas han disminuido desde que esta Junta inició el incremento de tasas en abril de 2006. Adicionalmente, subrayaron la importancia de las proyecciones de inflación y la necesidad de estabilizar las expectativas de inflación como condición para que la tasa de inflación converja hacia las metas de largo plazo. Finalmente, destacaron que en el momento el balance de riesgos indica más peligros de mayor inflación que de menor crecimiento. 3. Decisión de política La Junta Directiva acordó por mayoría de votos aumentar en 25 puntos básicos las tasas de interés de intervención del Banco de la República. Bogotá D.C., 29 de junio de 2007
2007-07-01
1 Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 27 de julio de 2007 El 27 de julio de 2007 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República, con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Dario Uribe y los Directores de dedicación exclusiva Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarria, Juan Mario Laserna, Fernando Tenjo y Leonardo Villar, en la cual se discute la situación inflacionaria y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de la discusión. 1. Antecedentes a. Desarrollos recientes de la inflación En el segundo trimestre del año, la inflación total al consumidor quebró la tendencia ascendente que traía desde finales de 2006, cerrando junio en 6,0% (22 p.b. por debajo del nivel alcanzado en abril). Este comportamiento también se observó en todos los indicadores de inflación básica. La inflación anual de alimentos en junio (9,7%), disminuyó 30 p.b. frente al nivel registrado en abril. Como se esperaba, en el segundo trimestre las presiones alcistas generadas por la aparición del fenómeno de “El Niño” empezaron a ceder, en especial en los precios de los productos perecederos. Sin embargo, la inflación de alimentos procesados siguió aumentando, aunque a un ritmo cada vez menor, principalmente por el incremento en el precio de la carne, el cual siguió impulsado por la fuerte demanda interna y externa. Se espera que la inflación de alimentos siga disminuyendo en el tercer trimestre en la medida en que la situación climática se normalice. La reducción de la inflación sin alimentos y de los otros indicadores de inflación básica en los dos últimos meses refleja el comportamiento de los precios de los bienes regulados y transables. En el caso de regulados, la disminución se concentró en algunos servicios públicos, como gas domiciliario. Esta disminución se produjo a pesar de ajustes importantes en los precios de los combustibles y en las tarifas del transporte público. Respecto a los precios de los bienes transables sin alimentos ni regulados, la apreciación también habría incidido en ajustes relativamente bajos en los dos últimos meses que, en buena parte, recogen caídas en precios de bienes como electrodomésticos y automóviles. 2 Sin embargo, hay que señalar que dada la magnitud de la apreciación – 14,8% año corrido – la reacción de la inflación de transables a la tasa de cambio continúa siendo pequeña. Por su parte, la inflación de no transables sin alimentos ni regulados cerró el trimestre con una inflación anual de 5,1%, cifra superior al registro de marzo (4,9%) y al de diciembre (4,8%). El incremento se concentró en arriendos (4,3%), rubro que ha presentado aumentos relativamente importantes en los tres últimos meses. b. Crecimiento En el primer trimestre de 2007 el crecimiento del PIB fue 8,0%, levemente inferior al observado en el cuarto trimestre de 2006, pero superior al observado en años anteriores. El dinamismo económico continuó siendo impulsado por la demanda interna que aceleró su crecimiento a 11,0%. Sobresale el fuerte aumento de la inversión pública y de la inversión privada representada en maquinaria y equipo y en edificaciones de vivienda. El consumo de los hogares por tercer trimestre consecutivo creció a tasas superiores al 7,0%, mientras el consumo público cayó 0,5%. La demanda externa neta continuó siendo negativa (-7,9% del PIB) por el mayor dinamismo de las importaciones, las cuales crecieron en el primer trimestre a una tasa real anual de 21,8 %. Las exportaciones lo hicieron al 9,4%. El crecimiento anual del 26% observado en las importaciones de bienes de capital, la fuerte expansión de las licencias de construcción a mayo y la aceleración de los desembolsos de crédito hipotecario reflejan el gran dinamismo observado en la inversión. Para el resto del año se prevé que continúe el buen desempeño de la inversión pública y privada, con un crecimiento conjunto de 21%. La dinámica del consumo privado se ha desacelerado levemente en los últimos meses, pero para 2007 se espera un crecimiento similar al observado en 2006. Las diversas medidas de utilización de la capacidad productiva siguen en niveles históricamente altos, aunque muestran una ligera reducción en los últimos meses. c. Costos y salarios El ritmo de crecimiento anual en los costos de las materias primas muestra una importante desaceleración en el segundo trimestre del año al pasar de 4,8% en marzo a 0,3% en junio. En buena parte, esto es el resultado de la reducción en la inflación del IPP de productos importados. En lo corrido de 2007 los ajustes salariales en la industria y el comercio han sido similares o levemente inferiores a los que tuvieron lugar en 2006. Para el segundo semestre no se prevén presiones inflacionarias en el mercado laboral. d. Contexto internacional 3 Durante el segundo trimestre de 2007 la coyuntura internacional estuvo marcada por un crecimiento de la economía mundial y precios de los productos básicos “commodities” mayores a lo previsto hace unos meses. La inflación en varios países ha retomado una tendencia ascendente que puede llevar a aumentos en las tasas de interés y a una reducción de la liquidez internacional, principalmente en el 2008. Se considera, sin embargo, que estas alzas serán moderadas y harán parte de una normalización de la situación de liquidez en los mercados internacionales. El contexto externo para la economía colombiana seguirá siendo favorable. La coyuntura actual permite esperar mejores términos de intercambio, en parte por los recientes aumentos del precio del petróleo. Por otro lado, se estima que la demanda de nuestros socios comerciales continuará mostrando una gran fortaleza, especialmente en Venezuela. Igualmente se espera que continúe el flujo de inversión extranjera al país. e. Variables financieras En los últimos meses se ha moderado el crecimiento anual de los agregados monetarios. Así, mientras en abril el agregado M3 aumentó a una tasa anual de 21%, en junio su ritmo de crecimiento fue de 17% aproximadamente. El grueso de la desaceleración se originó en el comportamiento de la demanda por efectivo, la cual ha venido creciendo a tasas cada vez menores desde mediados del año pasado. Por su parte, los depósitos en el sistema financiero se desaceleraron en los últimos dos meses después de varios meses de aceleraciones continuas. En los últimos meses parece haberse disminuido el proceso de recomposición del activo de las entidades financieras desde TES hacia cartera. De consolidarse esta nueva tendencia, podría significar menores recursos para la expansión de cartera, permitiendo una más rápida transmisión de la política monetaria al crédito y a las tasas de interés de mercado. En el segundo trimestre se observó una leve desaceleración en el ritmo de crecimiento del crédito, el cual se mantuvo sin embargo a tasas nominales muy altas. Mientras en marzo el crecimiento anual de la cartera bruta total fue 31,2%, en junio dicha tasa fue 29,5%. La desaceleración ha sido más importante en la cartera comercial y en menor medida en la cartera de consumo, pero ha sido compensada por la aceleración de la hipotecaria. No obstante, las tasas de crecimiento de la cartera comercial y de consumo siguen siendo altas tanto en términos anuales (25,1% y 44,2% respectivamente), como en términos mensuales anualizados (18% y 38%). Las tasas de interés vienen mostrando un comportamiento al alza. En efecto, la tasa promedio de los CDT se situó en 8,35% en junio frente a 7,79% en mayo. Por su parte, la tasa activa promedio se situó en 15,3% frente a 14,8% en mayo, parcialmente gracias al aumento de las tasas de usura. La tasa promedio de los CDT acumuló un incremento de 220 p.b. desde abril del año pasado. Frente a abril de 2006 las tasas de consumo y ordinario 4 presentan menores aumentos (71 p.b. y 151 p.b.) que la tasa de política, mientras que las de crédito preferencial y de tesorería (357 p.b. y 409 p.b.) han subido más. 2. Discusión y opciones de política En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo anual de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas por el Banco. Lo anterior, a pesar del quiebre observado en la tendencia ascendente de la inflación, que había sido proyectado por la Junta; (ii) el comportamiento de la inflación de los bienes no transables sigue sin mostrar una tendencia a la baja; (iii) el equipo técnico del Banco ha elevado su proyección de crecimiento del PIB para el año, lo cual incide en el tamaño de la brecha del producto; (iv) la apreciación del peso no se ha reflejado de manera significativa en los precios de los bienes transables; y (v) las expectativas de inflación, si bien se han reducido, todavía se sitúan por encima de la meta. No obstante, la Junta consideró que los aumentos en las tasas de interés de intervención y la modificación en los encajes han empezado a mostrar los efectos esperados en el comportamiento de los precios, la dinámica del crédito y los agregados monetarios. Esto indica que la transmisión de las tasas de interés del Banco al resto de la economía se ha acelerado. Algunos factores como la recomposición que empieza a observarse de inversiones de los bancos hacia TES y el mayor espacio que ahora permite la tasa de usura, podrían generar una transmisión aún mayor de las tasas en los próximos meses. Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) la velocidad e intensidad con la cual se manifiestan los efectos de las medidas de política monetaria adoptadas hasta el momento; (ii) la incertidumbre sobre el comportamiento de la inflación para lo que resta del año y la posibilidad de que la disminución de la misma pueda ser menor a lo previsto inicialmente; (iii) el comportamiento de la cuenta corriente y, en especial, la posibilidad de que cambios en el contexto internacional produzcan alteraciones abruptas en la demanda agregada y el crecimiento del producto; y (iv) el impacto de la brecha del producto en la inflación. Algunos directores destacaron que los factores que explican la alta tasa de crecimiento de la economía continúan vigentes. Las tasas de interés reales se mantienen bajas en términos históricos, la demanda externa continúa fuerte, los términos de intercambio siguen siendo favorables y el crédito crece aún a tasas elevadas. Adicionalmente, el incremento de los precios de la vivienda puede reforzar el crecimiento del gasto. En conjunto, estos factores conforman un escenario en el que la demanda agregada continuará expandiéndose a ritmos elevados. La mayoría de la Junta consideró que el balance de riesgos de los factores antes reseñados justifica un aumento de las tasas de interés de intervención. Igualmente, que esta acción es coherente con el propósito de hacer sostenible el crecimiento de la economía y garantizar la convergencia de la inflación hacia la meta de largo plazo. Otros directores propusieron hacer en esta ocasión una pausa y posponer una eventual decisión sobre un nuevo reajuste en las tasas de intervención del Banco hasta la 5 próxima reunión en el mes de agosto, con el objeto de contar con mayor y mejor información sobre los reales efectos de las medidas hasta ahora tomadas. Al respecto, señalaron que se pueden estar subestimando los efectos de las medidas de política monetaria adoptadas a lo largo del último año, las cuales han sido reforzadas por decisiones tales como el recorte del gasto público, el aumento de las tasas de interés de usura y las mayores provisiones para la cartera comercial derivadas de la aplicación del SARC por el sector financiero. Manifestaron que el crecimiento esperado del producto no necesariamente genera presiones inflacionarias dado el gran aumento de las inversiones y la productividad en la economía, y de las importaciones de bienes de capital y de bienes intermedios, el cual indica un excelente comportamiento reflejado en la ampliación de la capacidad instalada. Además no se observan cuellos de botella ni presiones inflacionarias en el mercado laboral. 3. Decisión de política La Junta Directiva acordó por mayoría de votos aumentar en 25 puntos básicos las tasas de intervención del Banco de la República. Bogotá D.C., 10 de agosto de 2007
2007-08-01
1 Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 24 de agosto de 2007 El 24 de agosto de 2007 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga Escobar, el Gerente General, José Dario Uribe y los directores de dedicación exclusiva Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarria, Juan Mario Laserna, Fernando Tenjo y Leonardo Villar, en la cual se discute la situación inflacionaria y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. Antecedentes a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor se redujo en julio, por tercer mes consecutivo, cerrando en 5,77%, 26 puntos básicos (pb) por debajo de la del mes anterior y 49 pb menor que su nivel máximo reciente alcanzado en abril. Este comportamiento favorable también se observó en todos los indicadores de inflación básica utilizados por el Banco de la República. El promedio de esos indicadores pasó de 5,1% a 5,0% entre junio y julio, continuando el proceso de reducción que se venía observando desde el mes de abril cuando llegó a 5,3%. La inflación anual de alimentos siguió disminuyendo, como se esperaba, principalmente por la normalización del clima y su efecto en la caída en los precios de los alimentos perecederos. También se observó una disminución en la inflación de los alimentos procesados, explicada por una pequeña caída en el precio de la carne. La inflación de bienes transables diferentes de alimentos bajó de 1,76% en junio a 1,62% en julio, manifestando una caída que es, sin embargo, pequeña frente a la apreciación acumulada del peso del último año. La inflación de no transables, sin alimentos ni regulados, continuó creciendo, comportamiento que viene presentándose desde el mes de abril, y se situó en 5,45%, frente a 5,1% en el mes anterior. Dentro de este grupo se destacan los arriendos, cuya inflación anual a julio se situó en 4,8%, frente a 4,6% en junio. Para el subgrupo “Resto” que excluye arriendos, la inflación anual subió 43 pb y se situó en 6,3%, debido fundamentalmente al aumento del rubro de “diversión, cultura y esparcimiento”. 2 La inflación de regulados disminuyó. Estos precios están atados parcialmente al índice de precios al productor (IPP) y han resultado favorecidos por la caída absoluta que se observa en este indicador, muy vinculada al comportamiento de la tasa de cambio. El ritmo de inflación correspondiente al grupo de bienes y servicios regulados del índice de precios al consumidor (IPC) se redujo de 7,4% en junio a 6,6% en julio, a pesar de presiones al alza provenientes del precio de los combustibles y del transporte público. b. Crecimiento, contexto externo y variables financieras La información disponible continúa mostrando una dinámica fuerte en el crecimiento económico interno. El DANE informó que en junio la producción industrial creció 11,9% y las ventas del comercio aumentaron 9,2% frente al mismo mes del año anterior. En la industria, el total de obreros contratados creció 4,2% y en el comercio el aumento fue de 6,6%. Así mismo, el desempeño de las licencias de construcción al mes de junio (aumentaron 39%) anticipa un crecimiento alto para esta actividad económica en la segunda mitad del año. Las exportaciones a mayo siguieron aumentado con un crecimiento en el acumulado de los últimos doce meses del 15%. Este desempeño se explica tanto por el comportamiento de las exportaciones tradicionales como de las no tradicionales, destacándose las exportaciones a Venezuela que crecieron 47%. El fuerte crecimiento de las importaciones a junio (26% para el acumulado a 12 meses) no muestra cambios importantes frente a las tendencias que se observaban en meses anteriores. Las importaciones de bienes de consumo en dólares crecieron en este mes a una tasa superior al 30%. En este mismo período, las importaciones de bienes de capital y de bienes intermedios aumentaron a una tasa cercana al 25%, reflejando la buena dinámica de la industria manufacturera Contexto internacional Los mercados han exhibido mayor volatilidad que en meses anteriores como consecuencia de la crisis del sector hipotecario “subprime”. La incertidumbre sobre sus efectos, además de los elevados niveles de apalancamiento de los inversionistas, se ha reflejado en un menor apetito por activos riesgosos y una importante disminución de la liquidez de los mercados. El efecto de esta coyuntura sobre los mercados emergentes se ha dado a través de un aumento en la prima de riesgo (medida por el EMBI+), que, sin embargo, ha sido menor a la observada en los bonos especulativos del mercado americano. La reacción del tipo de cambio fue más alta en Colombia que en los demás países de la región, pero la pérdida de valor del mercado bursátil fue moderada. Otros activos nacionales como los TES de largo plazo también experimentaron pérdidas. 3 Variables Financieras Los agregados monetarios continuaron desacelerándose en julio, en parte como resultado de un menor ritmo de crecimiento del efectivo. Respecto a los pasivos sujetos a encaje, su ritmo de expansión también se ha moderado recientemente aunque a julio seguía siendo alto. En los últimos meses se ha notado una recuperación relativa de las captaciones de los CDT frente a las cuentas corrientes. El crédito también se desaceleró nuevamente en julio. La cartera total creció a un ritmo anual de 28,5% frente a 29,5% en el mes anterior. La moderación en el crecimiento se observó en todos los tipos de crédito excepto en el hipotecario el cual ha continuado ganando impulso: su crecimiento anual pasó de 17,3% en junio a 19,4% en julio. En el último mes, la cartera de consumo se expandió a una tasa anual de 23,4%, que corresponde a un crecimiento trimestral anualizado de 31%. La tasa de interés interbancaria (TIB) se situó en promedio en 9% en junio, aumentando 20 pb en el último mes y 310 pb desde abril de 2006 cuando la Junta Directiva del Banco de la República comenzó a incrementar sus tasas de interés de intervención. Las tasas de interés nominales pasivas aumentaron levemente en julio (entre 16 pb y 21 pb), acumulando un aumento desde abril de 2006 de alrededor de 180 pb (240 pb para CDT solamente). El ajuste fue mayor en el caso de las tasas activas, especialmente en consumo y tarjetas de crédito, las cuales se han acercado a las de usura. Entre abril de 2006 y julio de 2007 las tasas de crédito preferencial y de tesorería acumulan un aumento de 424 y 457 pb, respectivamente. En dicho período el aumento en las tasas de crédito ordinario, de consumo y con tarjetas ha sido mucho menor: 183, 230 y 280 pb, respectivamente. Respecto a las tasas reales, estas se encuentran cerca de los niveles históricos promedio observados para la década en la mayoría de casos, excepto en el crédito preferencial y de tesorería en donde ya lo superan. 2. Discusión y opciones de política En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) las cifras de julio confirmaron el quiebre de la tendencia ascendente en el ritmo anual de crecimiento de los precios que ya se había detectado en los dos meses anteriores; (ii) a pesar de lo anterior, la inflación se mantiene por encima de las metas establecidas por el Banco; (iii) el comportamiento de la inflación de los bienes no transables, sin alimentos ni regulados, sigue mostrando una tendencia al alza; (iv) la demanda agregada mantiene un fuerte dinamismo; (v) la apreciación de la tasa de cambio no se ha reflejado plenamente en los precios de los bienes transables; y (vi) todas las expectativas de inflación han bajado: las de mediano plazo se ubican por debajo del 4% aunque las de corto plazo se mantienen por encima de la meta. Se destacó que los factores que explican la alta tasa de crecimiento de la economía continúan vigentes. La demanda externa se conserva fuerte, los términos de intercambio siguen siendo favorables y el crédito sigue creciendo a tasas elevadas. En 4 conjunto, estos factores conforman un escenario en el que la demanda agregada continuará expandiéndose, impulsando el crecimiento de corto plazo de la economía. La Junta consideró que los aumentos en las tasas de interés de intervención y la modificación en los encajes continúan mostrando los efectos esperados en el comportamiento de los precios, la dinámica del crédito y en los agregados monetarios. Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política monetaria dado el rezago de las mismas; (ii) la incertidumbre sobre el comportamiento inflacionario para lo que resta del año y la posibilidad de que la disminución en el ritmo de crecimiento de los precios pueda ser mayor a lo previsto un mes atrás; (iii) el impacto del crecimiento en la brecha del producto; (iv) el comportamiento de la cuenta corriente y, en especial, que modificaciones en el contexto internacional pudieran llevar a ajustes futuros en la disponibilidad de financiamiento externo, y en las tasas de cambio y de interés relevantes para las economías emergentes; y (v) la incertidumbre generada por la alta volatilidad de los mercados internacionales y la incidencia que puede tener en la economía colombiana. La mayoría de la Junta consideró oportuno hacer una pausa en el incremento de las tasas de interés de intervención del Banco de la República con el fin de obtener mayor información para evaluar las posibles consecuencias que podrían presentarse por la volatilidad de los mercados externos y los efectos de la política monetaria sobre la demanda agregada y las perspectivas inflacionarias. A este respecto se destacó que la información disponible muestra que la transmisión de la política monetaria a las tasas de interés de la economía se está reflejando con mayor rapidez, lo cual se aprecia en los aumentos de las tasas de interés de la economía y en la caída del ritmo de crecimiento de los agregados monetarios y el crédito. Otros directores señalaron su preferencia en continuar con los aumentos de las tasas interés de intervención. En particular, destacaron el alto dinamismo de la demanda agregada, el comportamiento al alza de los precios de los bienes no transables, sin alimentos ni regulados, y que los crecimientos de los agregados monetarios y del crédito siguen en niveles altos. Expresaron su preocupación de que, si bien la inflación y las expectativas de inflación vienen mostrando una tendencia a la baja, su disminución ha sido menor a la esperada, lo cual dificulta la convergencia de las mismas a las metas de inflación futuras. Finalmente, consideraron que posponer el incremento en las tasas podría hacer necesarias tasas de interés más altas en el futuro. 3. Decisión de política La Junta Directiva acordó por mayoría mantener inalteradas las tasas de intervención del Banco de la República. Bogotá D.C., septiembre 7 de 2007
2007-09-01
1 Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 21 de septiembre de 2007 El 21 de septiembre de 2007 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga Escobar, el Gerente General, José Dario Uribe y los directores de dedicación exclusiva Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarria, Juan Mario Laserna y Leonardo Villar, en la cual se discute la situación inflacionaria y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. El director Fernando Tenjo estuvo ausente por razón justificada. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. Antecedentes a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor se redujo en agosto, por cuarto mes consecutivo, cerrando en 5,2% (55 p.b. por debajo de la del mes anterior). Este comportamiento también se observó en todos los indicadores de inflación básica. La inflación anual de alimentos continuó disminuyendo, como se esperaba, principalmente por la normalización del clima. La reducción se presentó tanto en alimentos procesados como en los perecederos, destacándose los precios de la carne y la papa. La inflación de no transables, sin alimentos ni regulados, se situó en 5,56%, frente a 5,45% en el mes anterior. Desde octubre del año pasado este indicador ha presentado una tendencia al alza de manera ininterrumpida. Se destaca el rubro de arriendos que en el mes de agosto se incrementó, situándose en 4,9%. En el último mes se presentó una caída en la inflación de transables sin alimentos ni regulados. Aunque en agosto se mantuvo estable la inflación de regulados (6,6%), los resultados se ubicaron por encima de lo esperado. b. Crecimiento, contexto externo y variables financieras En cuanto al crecimiento económico interno, la información disponible continúa mostrando que mantiene una dinámica fuerte. El DANE informó que el PIB aumentó el segundo trimestre del año en 6,87% impulsado por la inversión y la aceleración del 2 consumo de las familias. Para lo que resta del año se prevé un comportamiento positivo, como lo sugieren el crecimiento de la industria en julio y los buenos resultados del indicador de confianza de los consumidores. Durante el segundo trimestre se estabilizó el crecimiento de las exportaciones totales alrededor del 15%. Entre abril y junio las exportaciones tradicionales han crecido en promedio 12,8% mientras que las no tradicionales alcanzaron a junio un crecimiento anual de 21,8%. Se destaca que las exportaciones a los Estados Unidos han disminuido, lo cual ha sido compensado parcialmente por aumentos a Venezuela y a otros países. Con cifras a agosto, las importaciones mantuvieron un ritmo de crecimiento alto (26,8% frente al período enero agosto de 2006), aunque se evidencia un dinamismo menor al de los primeros meses del año (30% para el período enero-abril). La desaceleración es particularmente notoria en las importaciones de bienes de capital y bienes de consumo. Contexto internacional En el ámbito externo, los mercados continúan mostrando una alta incertidumbre como consecuencia de la crisis hipotecaria en los Estados Unidos. Dicha situación aumentó la percepción de riesgo a nivel mundial y generó restricciones en la liquidez en varios mercados, lo que motivó la intervención de algunos bancos centrales. El Banco de la Reserva Federal de los Estados Unidos redujo su tasa de política en 50 p.b., dejándola en 4,75%, en procura de moderar el impacto de la caída en el precio de la vivienda en ese país. Los efectos de los cambios recientes en la coyuntura internacional sobre la economía colombiana son inciertos. Por un lado, el riesgo de que la turbulencia financiera se traduzca en un menor crecimiento en los Estados Unidos ha aumentado, si bien los analistas internacionales no vislumbran una recesión en ese país. Por otra parte, los precios de varios productos básicos de exportación de Colombia, tales como el petróleo y el café, han aumentado recientemente, lo que puede tener efectos expansivos sobre la demanda agregada. Adicionalmente, el aumento en el precio de algunos bienes agrícolas importados como el trigo puede generar presiones inflacionarias. Variables Financieras Los agregados monetarios continuaron desacelerándose en agosto como resultado de un menor ritmo de crecimiento del efectivo. Respecto a los pasivos sujetos a encaje (PSE), su ritmo de expansión también se ha moderado aunque su dinámica sigue siendo alta y se mantiene la recuperación relativa de los CDT frente a las cuentas corrientes. El crédito también se desaceleró nuevamente en agosto. La cartera bruta total en moneda nacional creció a un ritmo anual de 24%, inferior en 145 puntos básicos a la registrada el mes anterior. La moderación en el crecimiento se observó en todos los 3 tipos de crédito excepto en el hipotecario, el cual continúa ganando impulso: su crecimiento anual pasó de 19% en julio a 19,8% en agosto. La tasa de interés interbancaria (TIB) se mantuvo levemente por encima de la tasa de intervención del Banco. Aunque esta última se mantuvo inalterada, las tasas de interés de los CDT y las tasas promedio de colocación aumentaron en el mes de agosto. 2. Discusión y opciones de política En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) a pesar de la notable reducción en el ritmo anual de inflación que se observó en agosto, el ritmo anual de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas por el Banco; (ii) la apreciación del peso se ha reflejado de manera limitada en los precios de los bienes transables; (iii) el comportamiento de la inflación de los bienes no transables, sin alimentos ni regulados, sigue mostrando una tendencia al alza; (iv) los indicadores disponibles sugieren que el dinamismo de la demanda agregada se mantiene en niveles muy altos; y (v) las expectativas de inflación se han reducido pero todavía se sitúan por encima de las metas establecidas por el Banco. La Junta consideró que distintos indicadores muestran que las medidas de política monetaria adoptadas (aumentos en las tasas de interés de intervención y modificación en los encajes) han moderado el crecimiento de los agregados monetarios y la dinámica del crédito. Por otra parte, se destacó que los factores que explican la alta tasa de crecimiento de la economía continúan vigentes. La demanda externa continúa fuerte, los términos de intercambio siguen siendo favorables, destacándose en las últimas semanas aumentos en los precios del petróleo y del café, y el crédito sigue creciendo a tasas elevadas. En conjunto, estos factores conforman un escenario en el que la demanda agregada continúa expandiéndose rápidamente, impulsando el crecimiento de corto plazo de la economía. Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política monetaria dado el rezago de las mismas; (ii) la incertidumbre sobre el comportamiento inflacionario para lo que resta del año; (iii) el comportamiento de la cuenta corriente y, en especial, el que cambios en el contexto internacional pudieran llevar a ajustes futuros en la tasa de cambio; (iv) el impacto del crecimiento en la brecha del producto; y (v) la incertidumbre generada por la alta volatilidad de los mercados internacionales y la incidencia que puede tener en la economía colombiana. La Junta de manera unánime consideró oportuno mantener la pausa en el incremento de sus tasas de interés de intervención con el fin de obtener mayor información para evaluar las posibles consecuencias que podrían presentarse por la crisis externa y los efectos de la política monetaria sobre la demanda agregada y las perspectivas inflacionarias. Se destacó que dado el contexto internacional existe un alto grado de incertidumbre en las proyecciones de inflación y crecimiento económico. Por una parte, existe la posibilidad de que el crecimiento de la demanda interna retorne más lentamente de lo esperado a tasas que sean coherentes con el logro de las metas de 4 inflación y unas cuentas externas sostenibles, lo que llevaría a futuros aumentos en la tasa de intervención. Por otra, la solución de la crisis del mercado hipotecario en los Estados Unidos puede ser más lenta y tener mayor efecto en el crecimiento de la economía mundial que lo inicialmente previsto. Para la economía colombiana esto puede afectar la demanda, los precios de los productos de exportación y el acceso futuro al mercado internacional de capitales. 3. Decisión de política La Junta Directiva acordó por unanimidad mantener inalteradas las tasas de intervención del Banco de la República. Bogotá D.C., octubre 5 de 2007
2007-10-01
1 Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 26 de octubre de 2007 El 26 de octubre de 2007 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga Escobar, el Gerente General, José Dario Uribe y los directores de dedicación exclusiva Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarria, Juan Mario Laserna, Fernando Tenjo Galarza y Leonardo Villar, en la cual se discute la situación inflacionaria y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. Antecedentes a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor se redujo en septiembre, por quinto mes consecutivo, cerrando en 5,01%, inferior a lo que se esperaba y 21 puntos básicos por debajo de la del mes anterior. Este comportamiento también se observó en todos los indicadores de inflación básica. Como se preveía, luego del choque negativo de oferta generado por el fenómeno del Niño, la inflación anual de alimentos continuó disminuyendo y explica en buena parte la caída de la inflación. La reducción se presentó tanto en alimentos procesados como en los perecederos. La inflación de no transables, sin alimentos ni regulados, se situó en 5,55%, cifra similar a la del mes anterior. Se destaca, sin embargo, que este indicador sigue sin mostrar una tendencia descendente. En el último mes se presentó una caída en la inflación de transables sin alimentos ni regulados acorde con el comportamiento de la tasa de cambio. Por su parte, el índice de precios al productor (IPP) total mostró, por cuarto mes consecutivo, un crecimiento anual negativo (0,91%), lo cual también ha influido en la inflación de regulados. b. Crecimiento, contexto externo y variables financieras El crecimiento económico interno continúa mostrando una fuerte dinámica. Aunque, el crecimiento del PIB estimado para el segundo trimestre (6,9%) fue menor al del 2 primer trimestre (8,1%), la información disponible permite prever que el resultado a final del año será similar al del año anterior. Las cifras de empleo del periodo junio a agosto muestran que la tasa de desempleo de las 13 principales áreas metropolitanas se ubicó en 11%, cifra inferior en 1,5 puntos porcentuales a la observada en el mismo trimestre del año anterior. Otros indicadores disponibles del mercado laboral indican que el empleo en la industria y comercio siguen creciendo, como lo señala el registro de julio con variaciones anuales de 2,9% y 6,2%, respectivamente. El dinamismo de las exportaciones (crecimiento de 15,3% en dólares) se explica en gran parte por las mayores ventas de productos no tradicionales que aportaron cerca del 64% del incremento del valor exportado. Venezuela continúa siendo el socio de mayor crecimiento con un aumento anual de exportaciones acumuladas entre enero y julio de 73,1%. En el mismo periodo las exportaciones hacia Estados Unidos se redujeron en 6,4%. Por su parte, las importaciones mantuvieron un ritmo de crecimiento alto, aunque se evidencia un dinamismo menor al de los primeros meses del año, particularmente en lo que hace referencia a bienes de capital y bienes de consumo. Contexto internacional En los mercados financieros mundiales continúa la incertidumbre sobre el tamaño y la duración de la recesión en el mercado de vivienda norteamericano y su impacto sobre el crecimiento de las economías desarrolladas. Las estimaciones de crecimiento económico de algunos de nuestros principales socios comerciales han sido revisadas a la baja. Por otra parte, se espera que los precios de la mayoría de los productos básicos de exportación continúen en niveles altos, lo cual permitiría mantener unos términos de intercambio favorables. Variables Financieras El ritmo de crecimiento de los agregados monetarios ha venido registrando una tendencia descendente, a pesar de que ésta no se observó en el mes de septiembre. La variación anual del M3, la base monetaria y el efectivo fueron en su orden: 16,4%, 11,8% y 8,1%. Los pasivos sujetos a encaje mantuvieron la recuperación relativa de los CDT frente a las cuentas corrientes. En septiembre, el crédito mantuvo un crecimiento anual de 27%, cifra superior a la presentada en agosto. La cartera de consumo creció 39,4% anual con un ligero descenso frente a la del mes anterior. Por el contrario, el crecimiento de la cartera comercial mostró un repunte de 20,5% a 22,2% y la cartera hipotecaria mantuvo su ritmo de crecimiento anual en 19,2%. 3 La tasa de interés interbancaria (TIB) se ubicó levemente por encima de la tasa de intervención del Banco de la República. En términos reales, las tasas de interés DTF y de colocación mostraron un incremento importante en el tercer trimestre. Aunque si se comparan con las que han predominado durante períodos más recientes de más baja inflación, sus niveles resultarían superiores. 2. Discusión y opciones de política En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) a pesar de la notable reducción en la inflación anual a septiembre, el ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas por la Junta; (ii) el significativo peso de los alimentos en la reducción reciente de la inflación; (iii) la apreciación del peso se ha reflejado de manera limitada en los precios de los bienes transables; (iv) el comportamiento de la inflación de los bienes no transables, sin alimentos ni regulados, sigue sin mostrar una tendencia descendente; (v) los indicadores disponibles sugieren que el dinamismo de la demanda agregada se mantiene en niveles altos; y (vi) las expectativas de inflación se han reducido pero todavía se sitúan por encima de las metas establecidas. La Junta consideró que distintos indicadores muestran que las medidas de política monetaria adoptadas (aumentos en las tasas de interés de intervención y modificación en los encajes) han resultado eficaces frente a los objetivos buscados de moderar el crecimiento de los agregados monetarios y la dinámica del crédito. En los últimos meses dichas medidas han fortalecido los canales de transmisión de la política monetaria, generando incrementos importantes en las tasas de interés activas, lo cual las ha llevado a niveles más coherentes con una moderación de la demanda agregada. A pesar de ello, se destacó que en el último mes se registró un aumento en algunas componentes del crédito y de las tasas de crecimiento de los agregados monetarios. Por otra parte, la demanda externa sigue fuerte, los términos de intercambio siguen siendo favorables e, incluso, han mejorado recientemente, y el crédito mantiene tasas elevadas de crecimiento. En conjunto, estos factores conforman un escenario en el que la demanda agregada continúa expandiéndose. Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política monetaria dado el rezago de las mismas; (ii) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para lo que resta del año y el 2008; (iii) el comportamiento de la cuenta corriente y, en especial, el que cambios en el contexto internacional pudieran llevar a ajustes futuros en la tasa de cambio; (iv) el impacto de la brecha del producto sobre los precios; (v) la incertidumbre generada por la alta volatilidad de los mercados internacionales y la incidencia que puede tener en la economía colombiana; y (vi) la posible desaceleración del crecimiento de la demanda agregada como efecto de las medidas de política monetaria hasta ahora aplicadas. La Junta de manera unánime consideró oportuno mantener la pausa en el incremento de sus tasas de interés de intervención con el fin de obtener mayor información para evaluar las consecuencias que podrían presentarse por la crisis externa y los efectos remanentes de la política monetaria sobre la demanda agregada y las 4 perspectivas inflacionarias. Se destacó, que dado el contexto internacional, existe un alto grado de incertidumbre en las proyecciones de inflación y crecimiento económico. Por una parte, existe la posibilidad de que el crecimiento de la demanda interna retorne más lentamente de lo esperado a tasas que sean coherentes con el logro de las metas de inflación y unas cuentas externas sostenibles, lo que podría llevar a futuros aumentos en la tasa de intervención. Por otra, la solución de la crisis del mercado hipotecario en los Estados Unidos puede ser más lenta y tener mayor efecto en el crecimiento de la economía mundial que lo inicialmente previsto. Para la economía colombiana esto tendría efectos sobre la demanda, los precios de los productos de exportación y el acceso futuro al mercado internacional de capitales. La Junta destacó que con una inflación y expectativas de inflación ancladas en las metas de mediano y largo plazo, la autoridad monetaria tendría mayores grados de libertad para ejecutar una política anticíclica en caso de que, en el futuro, se presente un escenario desfavorable para la economía colombiana. 3. Decisión de política La Junta Directiva acordó por unanimidad mantener inalteradas las tasas de intervención del Banco de la República. Bogotá D.C., noviembre 9 de 2007
2007-11-01
1 Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 23 de noviembre de 2007 El 23 de noviembre de 2007 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga Escobar, el Gerente General, José Dario Uribe y los directores de dedicación exclusiva Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarria, Juan Mario Laserna, Fernando Tenjo Galarza y Leonardo Villar, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. Antecedentes a. Desarrollos recientes de la inflación En el mes de octubre, el índice de precios al consumidor se mantuvo prácticamente inalterado, con una variación de 0,01%. Sin embargo, debido a la caída que se había presentado en ese índice en octubre de 2006, la inflación anual interrumpió la tendencia decreciente que traía desde mayo, cerrando en 5,16%, 15 puntos básicos por encima del dato de septiembre. Este aumento de la inflación se concentró en la inflación sin alimentos, en especial en los bienes transables y, en menor medida, en los regulados. Este comportamiento también se observó en la mayoría de los indicadores de inflación básica. La variación anual de los precios de los alimentos, que venía cayendo desde abril de este año, dejó de hacerlo en octubre y se mantuvo en 7%. La inflación de los alimentos perecederos continuó disminuyendo, pero la de alimentos procesados aumentó levemente. El incremento en los precios de los cereales y oleaginosas, vinculados con los precios internacionales y la tasa de cambio, fue la principal causa para que se diera una interrupción de la tendencia decreciente. La inflación de no transables sin alimentos ni regulados se redujo a 5,3%, cifra inferior en 26 puntos básicos a la del mes anterior. Se destaca la caída de arriendos por segundo mes consecutivo y del subgrupo de diversión cultura y esparcimiento. 2 En octubre se presentó un aumento en la inflación anual de transables diferentes de alimentos como consecuencia de una base de comparación muy baja en el mismo mes del año pasado, cuando se efectuaron importantes rebajas en las tarifas de telefonía. Los precios de los regulados también contribuyeron a acelerar la inflación anual en octubre, destacándose incrementos en servicios públicos, como gas domiciliario y, en menor medida, energía. b. Crecimiento, contexto externo y variables financieras El crecimiento económico interno continúa mostrando una fuerte dinámica, aunque alguna información disponible sugiere que se está moderando. Los indicadores sobre crecimiento industrial muestran una desaceleración paulatina desde el primer trimestre. Las ventas al por menor según el DANE crecieron en términos reales 9,4% en septiembre, cifra similar a la observada desde el segundo trimestre del año pero inferior a la del mismo mes del 2006. Por su parte, el indicador de confianza de los consumidores sigue presentando niveles similares a los de la misma fecha del año pasado. Todo lo anterior es consistente con los pronósticos de crecimiento del PIB que se divulgaron en el Informe sobre Inflación del Banco de la República correspondiente a Septiembre del 2007, en los cuales se suponía que el dinamismo del segundo semestre sería inferior al de la primera mitad del año. Las exportaciones a agosto siguieron creciendo a un ritmo alto y similar al de meses anteriores (de 16% en dólares), en gran parte por las mayores ventas de productos no tradicionales. Venezuela continúa siendo el mercado de mayor crecimiento y ha compensado en el mismo periodo la caída en las exportaciones hacia Estados Unidos. Contexto internacional Se mantiene la incertidumbre sobre la magnitud y la duración de la recesión en el mercado de vivienda norteamericano y su impacto sobre el crecimiento de la economía mundial. Varios indicadores líderes sugieren que la economía norteamericana se estaría debilitando, lo que se une a la persistencia de los problemas que muestra el sector hipotecario y varias entidades financieras. El consumo privado podría estar resintiéndose, en parte por los aumentos en el precio de los combustibles, pero también por la disminución en los precios de los activos (finca raíz y acciones). A las señales de desaceleración se suma el surgimiento de nuevas presiones inflacionarias por los altos precios del petróleo y de los alimentos. Por otra parte, se espera que los precios internacionales de la mayoría de los productos básicos de exportación continúen en niveles altos, lo cual permitiría mantener unos términos de intercambio favorables para Colombia. 3 Variables Financieras Las principales variables monetarias observaron un aumento en octubre. Se destaca el crecimiento de M3 a una tasa anual de 17,3%, mayor que la de agosto (15,7%) y por encima del crecimiento del PIB nominal. Por su parte, el crecimiento anual de la cartera total del sistema financiero en moneda legal continuó desacelerándose frente al último mes, pasando de 27% en septiembre a 25% en octubre. Este fenómeno se observó en especial en la cartera de consumo, que pasó de crecer 39,4% en septiembre a 36,7% en octubre. Las carteras comercial e hipotecaria también perdieron dinamismo pero en menor medida. Para octubre se expandieron a tasas de 20,3% y 18,8% frente a tasas de 22,2% y 19,2% en el mes anterior, respectivamente. En octubre, aumentaron las tasas nominales de ahorro y de crédito de consumo y de tarjetas. Las demás tasas disminuyeron, sobresaliendo el descenso de la DTF (en 30 puntos básicos) y la de crédito ordinario (en 24 puntos básicos). 2. Discusión y opciones de política En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas por la Junta; (ii) el significativo peso de los alimentos en el comportamiento futuro de inflación; (iii) el comportamiento de la inflación de los bienes no transables, sin alimentos ni regulados, que en el mes de octubre se redujo pero sigue por encima de la inflación total; (iv) los indicadores disponibles sugieren que el dinamismo de la demanda agregada se mantiene en niveles altos frente a la producción, aunque muestra síntomas de moderación; (v) la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de la economía mundial y de nuestros principales mercados de exportación (Venezuela y Estados Unidos); y (vi) las implicaciones para la política monetaria de las metas de inflación fijadas por la Junta y del comportamiento de las expectativas de inflación frente a esas metas. La Junta consideró que, a pesar de los resultados de octubre, distintos indicadores muestran que los aumentos en las tasas de interés de intervención y modificación en los encajes, han resultado eficaces frente a los objetivos buscados de moderar el crecimiento de la demanda agregada y la dinámica del crédito. En los últimos meses dichas medidas han fortalecido los canales de transmisión de la política monetaria, lo cual ha llevado las tasas de interés hacia niveles más coherentes con aquellos objetivos. A manera de ejemplo, entre mayo de 2006 y octubre de 2007, la DTF aumentó de 5,97% a 8,59%, y la tasa activa promedio de 12,89% a 17,24%. 4 Por otra parte, la demanda externa sigue fuerte, los términos de intercambio siguen siendo favorables e, incluso, han mejorado recientemente, y el crédito mantiene tasas elevadas de crecimiento. Así mismo, la demanda interna continúa expandiéndose a un ritmo superior al de la producción nacional, aunque declinante. Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política monetaria dado el rezago de las mismas; (ii) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para lo que resta del año y el 2008; (iii) la ampliación del déficit de la cuenta corriente que refleja un crecimiento de la demanda superior al de la producción nacional; (iv) el que cambios en el escenario internacional puedan llevar a ajustes futuros en la tasa de cambio en un contexto de fuerte crecimiento de la demanda interna; (v) la incertidumbre generada por la alta volatilidad de los mercados internacionales y la incidencia que puede tener en la economía colombiana; y (vi) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria como estrategia para anclar las expectativas de inflación ante las tendencias de incrementos de precios que vienen enfrentando cada vez más otros países. La Junta de manera unánime juzgó que el logro de las metas de inflación establecidas para el 2008 (rango entre 3,5% y 4,5%, con 4% como meta puntual para efectos legales) y el 2009 (meta puntual entre 3% y 3,5%) requerían de un ajuste adicional en las tasas de interés de intervención. Por tal razón, decidió incrementar en 25 p.b. sus tasas de intervención de 9,25% a 9,50%. Lo anterior teniendo en cuenta un entorno caracterizado por un crecimiento aún fuerte de la demanda agregada y el crédito, alta utilización de la capacidad instalada y un contexto internacional de desaceleración moderada de la economía mundial. Sobre el particular, algunos directores señalaron que el nuevo nivel de tasa de interés es consistente con una política monetaria contraccionista a la manera de ‘seguro’ que selle la credibilidad del mercado y ancle sus expectativas en el cumplimiento de las metas de inflación fijadas para 2008 y 2009. Que después del nuevo aumento de 25 puntos básicos las necesidades de incrementos adicionales desaparecen. Y que, dependiendo del comportamiento de los niveles internos de precios y del empleo, y de la evolución de las condiciones externas, en especial de Estados Unidos y Venezuela, eventualmente se podría regresar a una postura más neutral. Otros directores manifestaron que resulta muy difícil predecir decisiones futuras sobre la senda de tasas de interés de intervención y consideraron que no se pueden descartar incrementos adicionales si la información que se reciba en los meses venideros sugiere que ello es aconsejable para garantizar el cumplimiento de las metas de inflación establecidas y maximizar la tasa de crecimiento económico sostenible. Por esta razón, la Junta estará atenta a la nueva información y sus implicaciones sobre la inflación proyectada. Con la información disponible, los miembros de la Junta consideran que el 9,50% de tasa de interés se encuentra alrededor del nivel coherente con el logro de las metas de inflación anunciadas. Adicionalmente, estima que este nivel de tasa sería consistente con el máximo crecimiento sostenible de la economía. 5 3. Decisión de política La Junta Directiva acordó por unanimidad aumentar en 25 puntos básicos de 9,25% a 9,50% las tasas de intervención del Banco de la República Bogotá D.C., diciembre 7 de 2007
2007-12-01
1 Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 14 de diciembre de 2007 El 14 de diciembre de 2007 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Dario Uribe y los directores de dedicación exclusiva Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarria, Juan Mario Laserna, Fernando Tenjo y Leonardo Villar, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. Antecedentes Desarrollos recientes de la inflación En noviembre, la variación anual del índice de precios al consumidor se situó en 5,41%, veinticinco puntos básicos por encima del resultado de octubre (5,16%). El aumento se concentró en los precios de los alimentos y, en menor medida, de los bienes transables y los regulados, en particular las tarifas de energía y los precios de los combustibles. Este comportamiento también se observó en la mayoría de los indicadores de inflación básica. La variación anual de los precios de los alimentos se debió al fuerte aumento tanto en alimentos perecederos como en procesados. Se destaca el incremento de las hortalizas, como consecuencia del invierno, y de los cereales y aceites, estrechamente vinculado con el comportamiento de los precios internacionales. La inflación anual de no transables sin alimentos ni regulados se redujo a 5,27% desde un nivel de 5,33% en octubre. Se destaca la caída por tercer mes consecutivo del rubro de arriendos y del subgrupo de servicios bancarios, que compensó el aumento en diversión, cultura y esparcimiento. Crecimiento, contexto externo y variables financieras El crecimiento económico interno continúa mostrando una fuerte dinámica. La poca información nueva disponible, como el indicador de confianza de los consumidores y las cifras del mercado laboral, es consistente con los pronósticos de crecimiento del PIB que se divulgaron en el Informe de Inflación del Banco de la 2 República. En dicho informe, correspondiente a septiembre de 2007, se indica que el dinamismo del segundo semestre sería inferior al de la primera mitad del año. Las exportaciones continuaron creciendo a un buen ritmo. En lo corrido del año hasta agosto, las ventas totales al exterior en dólares aumentaron 18,5% anual. Las de mayor dinamismo fueron las destinadas a Venezuela con un incremento del 76,8%, con lo cual ese mercado representó el 14,9% del total de las exportaciones colombianas. Contexto internacional En el último mes se mantuvo la incertidumbre sobre la magnitud y duración de la recesión en el mercado de vivienda norteamericano y su impacto sobre el crecimiento de la economía mundial. Varios indicadores líderes de la industria y de sectores no industriales sugieren que la economía de los Estados Unidos se estaría debilitando, lo que se une a la persistencia de los problemas que muestran el sector hipotecario y varias entidades financieras. La Reserva Federal redujo su tasa de referencia en 25 p.b. en su reunión del 11 de diciembre y, conjuntamente con otros Bancos Centrales ofreció una mayor liquidez al mercado con el fin de atenuar los problemas de liquidez de algunas entidades financieras. Estas dudas sobre la economía norteamericana han extendido los temores de desaceleración a otras economías desarrolladas, a lo que se suma el surgimiento de nuevas presiones inflacionarias por los altos precios del petróleo y de los alimentos y la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de las exportaciones colombianas a Venezuela. Por otra parte, se espera que los precios de la mayoría de los productos básicos de exportación continúen en niveles altos, lo cual permitiría mantener unos términos de intercambio favorables para Colombia. Variables Financieras La cartera bruta total en moneda legal del sistema financiero continuó moderando su ritmo de crecimiento, al pasar de incrementos anuales de 25,1% en octubre a 24,1% en noviembre. Igual dinámica se observó en la cartera de consumo, con tasas anuales de 36,7% y 35% para las mismas fechas. Las carteras comercial e hipotecaria también perdieron dinamismo, aunque en menor medida. Para noviembre se expandieron en 19,6% y 17,8%, frente a tasas de 20,3% y 18,3% en el mes anterior, respectivamente. 3 En noviembre las tasas de interés pasivas volvieron a mostrar una tendencia ascendente, en particular la tasa promedio de los CDT. La tasa activa promedio se redujo en 11 p.b frente al mes anterior situándose en 16,7%. 2. Discusión y opciones de política En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas por la Junta; (ii) el significativo peso de los alimentos en el comportamiento de la inflación en un contexto internacional de presiones al alza; (iii) el comportamiento de la inflación de los bienes no transables sin alimentos ni regulados, que siguió reduciéndose pero sigue por encima de niveles compatibles con las metas establecidas; (iv) los indicadores disponibles sugieren que el dinamismo de la demanda agregada se mantiene en niveles altos frente a la producción, aunque muestra síntomas de moderación; (v) la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de la economía mundial y de nuestros principales mercados de exportación, en particular de Venezuela; y (vi) las implicaciones para la política monetaria de las metas de inflación fijadas por la Junta y del comportamiento de las expectativas de inflación frente a esas metas. La Junta consideró que distintos indicadores muestran que los aumentos en las tasas de interés de intervención y modificación en los encajes, han resultado eficaces frente a los objetivos buscados de moderar la dinámica del crédito. En los últimos meses se han fortalecido los canales de transmisión de la política monetaria. En todo caso, el crédito mantiene tasas elevadas de crecimiento. Así mismo, la demanda interna continúa expandiéndose a un ritmo superior al de la producción nacional, aunque declinante. Por otra parte, la demanda externa continúa fuerte, los términos de intercambio siguen siendo favorables e, incluso, siguen mejorando. Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política monetaria dado el rezago de las mismas; (ii) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para el 2008; (iii) la ampliación del déficit de la cuenta corriente que refleja un crecimiento de la demanda interna superior al de la producción nacional; (iv) el que cambios en el escenario internacional, en un contexto de déficit de cuenta corriente, puedan llevar a ajustes futuros en la tasa de cambio; (v) la incertidumbre generada por la alta volatilidad de los mercados internacionales y la incidencia que puede tener en la economía colombiana y (vi) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria como estrategia para anclar las expectativas de inflación ante las tendencias de incrementos de los precios que vienen enfrentando los países. Los miembros de la Junta resaltaron que la actual coyuntura se caracteriza por una gran incertidumbre, lo cual hace difícil predecir decisiones sobre la tasa de interés de intervención. Algunos de los directores destacaron que, a pesar de las medidas de política adoptadas a lo largo del año, la inflación sigue mostrando una preocupante tendencia al alza que la aleja de la meta de largo plazo definida en la sesión anterior, lo cual se ha manifestado parcialmente en el comportamiento de las expectativas. Al mismo tiempo, no descartaron que en el futuro sean necesarios incrementos adicionales si la 4 información sugiere que ello es aconsejable para garantizar el cumplimiento de las metas de inflación y maximizar la tasa de crecimiento económico sostenible. Otros miembros reiteraron su postura planteada durante la reunión de la Junta del 23 de noviembre pasado, en el sentido de que la tasa de interés vigente es consistente con una política monetaria contraccionista. Por tanto, destacaron que la información disponible no sugiere la necesidad de aumentos futuros en la tasa de intervención; que la política monetaria viene logrando los objetivos buscados para moderar el crecimiento y el crédito y anclar las expectativas hacia el logro de las metas de inflación; y que, dependiendo de la evolución de las condiciones externas y de los niveles internos de precios y empleo, cabría regresar a una postura más neutral. La Junta, de manera unánime, mantuvo inalterada su tasa de intervención en 9,50% y estimó necesario seguir haciendo un cuidadoso seguimiento del efecto que pueda tener la situación económica internacional sobre el crecimiento, así como, de las presiones inflacionarias provenientes de los precios internacionales de los alimentos y combustibles. 3. Decisión de política La Junta Directiva acordó por unanimidad mantener inalteradas las tasas de intervención del Banco de la República. Bogotá D.C., diciembre 28 de 2007
2008-01-01
1 Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 25 de enero de 2008 El 25 de enero de 2008 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Dario Uribe y los directores de dedicación exclusiva Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarria, Juan Mario Laserna y Leonardo Villar, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. El director Fernando Tenjo no estuvo presente. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. Antecedentes a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación al consumidor cerró el año en 5,69%, 119 p.b. por encima del techo del rango meta fijado por la Junta Directiva del Banco de la República y mayor en 121 p.b. al resultado de diciembre de 2006. El aumento de la inflación en diciembre se explica fundamentalmente por el comportamiento de los precios de los alimentos y de los regulados. En el mes, la inflación anual de no transables sin alimentos ni regulados no aumentó y se situó en 5,2%, cayendo por cuarto mes consecutivo luego de haber alcanzado un máximo de 5,57% en agosto. El promedio de los indicadores de la inflación básica al final del año se situó alrededor del 5%. En el caso específico de la inflación sin alimentos, el resultado de diciembre de 2007 fue 4,4%, similar al de noviembre. En lo que se refiere a los alimentos, la variación anual de sus precios (8,51%) se explica por diversos factores. Por una parte, fenómenos climáticos como El Niño en los primeros meses del año y la Niña en el segundo semestre de 2007 impactaron el abastecimiento de varios alimentos (hortalizas, frutas y tubérculos). Por otra, la mayor demanda y producción de biocombustibles presionó los precios internacionales de algunos alimentos e insumos agrícolas, mientras que los altos precios del petróleo incrementaron los fletes del transporte y los precios de varios agroquímicos. Adicionalmente, esta situación ha inducido el desplazamiento de materias primas agrícolas, antes destinadas a alimentos, para su utilización en la elaboración de biocombustibles. Finalmente, el aumento de la demanda de Venezuela por algunos alimentos y la fortaleza de la demanda interna también presionaron los precios al alza. 2 b. Crecimiento, contexto externo y variables financieras El crecimiento económico interno continúa mostrando una fuerte dinámica. El crecimiento anual registrado para el PIB en el tercer trimestre de 2007 fue de 6,6%. Con esta nueva información se corrobora que el crecimiento para todo el año estará alrededor del 7,0% Para 2008 se prevé una desaceleración cuya magnitud dependerá de la situación internacional. A pesar de ello, estudios técnicos del Banco muestran que el crecimiento del PIB para este año se mantendrá vigoroso, alrededor del promedio del último lustro. Lo anterior es consistente con el buen desempeño de las exportaciones, que continúan creciendo a un buen ritmo, de la inversión y del dinamismo en el empleo. En el comercio, de acuerdo con la encuesta sectorial, el empleo a noviembre creció a una tasa del 6,7% anual y completó 2 años expandiéndose por encima del 5% anual. El empleo en la industria, aunque con registros menos altos, también completó seis trimestres creciendo a tasas superiores al 2%, mostrando en noviembre un crecimiento del 2,5% anual. c. Contexto internacional Distintos indicadores confirman la desaceleración de la economía norteamericana. El mercado de vivienda no muestra señales de recuperación, las restricciones crediticias han aumentado y las ventas, los permisos de construcción y el desarrollo de nuevos proyectos habitacionales continúan deteriorándose. Ello permite esperar caídas mayores en los precios de la vivienda en los próximos meses e implicaciones importantes sobre la solidez financiera de ese país y de otros países desarrollados. Adicionalmente, a diciembre la tasa de desempleo aumentó de 4,7% a 5% y la generación de empleo se desaceleró sustancialmente, algo que no sucedía desde la anterior recesión en 2001. Así mismo, las expectativas de producción para la industria obtenidas de encuestas se han reducido a niveles que no se observaban desde 2001. El consumo de los hogares, que hasta hace poco mostraba una gran solidez, podría estar resintiéndose a juzgar por la contracción de las ventas al por menor en diciembre (-4,3% mensual anualizado) y por el comportamiento de las encuestas de consumo. Estas dudas sobre la economía norteamericana han extendido los temores de desaceleración a otras economías desarrolladas y en desarrollo, a lo que se suma el surgimiento de nuevas presiones inflacionarias por los altos precios del petróleo y de los alimentos y la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de las exportaciones colombianas a Venezuela. d. Variables financieras La base monetaria cerró el año con un crecimiento de 19,4% frente a 15,3% en noviembre y 10,9% un trimestre atrás. La tendencia de la base guarda relación con la recuperación de la demanda por efectivo y con una mayor demanda por reserva bancaria 3 asociada con el aumento del encaje marginal a mediados del 2007. Por su parte, el M3 creció en diciembre a una tasa anual de 17,8%, también mayor que la observada en meses anteriores. Se destaca un aumento en la participación de los CDT en detrimento de las cuentas de ahorro. En el mismo período, el crecimiento de la cartera del sistema financiero continuó moderándose y a diciembre era de 23,6%. El crédito comercial muestra signos de aceleración confirmados por los mayores desembolsos. Parte de este aumento podría ser explicado por la sustitución de créditos externos por crédito interno a raíz del restablecimiento de los depósitos sobre endeudamiento externo. Por su parte, el crecimiento anual del crédito de consumo y de la cartera total se redujo. En el mes de diciembre las tasas pasivas, excepto la DTF, tendieron a disminuir y algo similar sucedió con las tasas activas de consumo, comercial y microcrédito, y con el promedio de la tasa activa. Con ese comportamiento de las tasas nominales y dado el aumento de la inflación de los últimos meses, las tasas reales tendieron a reducirse en el cuarto trimestre, interrumpiendo la tendencia ascendente que se observaba desde comienzos de 2007. 2. Discusión y opciones de política En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas por la Junta; (ii) el significativo peso de los alimentos en el comportamiento de la inflación en el 2008 y 2009 en un contexto internacional de presiones al alza; (iii) el comportamiento de la inflación de los bienes no transables sin alimentos ni regulados que, si bien siguió reduciéndose, continúa por encima de niveles compatibles con las metas establecidas; (iv) los indicadores disponibles sugieren que el dinamismo de la demanda agregada se mantiene en niveles altos frente a la producción, aunque muestra síntomas de moderación; (v) la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de la economía mundial y de nuestros principales mercados de exportación, en particular de Venezuela y (vi) las implicaciones para la política monetaria de las metas de inflación fijadas por la Junta y del comportamiento de las expectativas de inflación las cuales aumentaron en el último mes por el resultado de la inflación en el 2007. La Junta consideró que distintos indicadores muestran que los aumentos en las tasas de interés de intervención y modificación en los encajes, han tenido impacto sobre las tasas de interés activas y pasivas y han resultado eficaces frente a los objetivos buscados de moderar la dinámica del crédito. En todo caso, el crédito mantiene tasas elevadas de crecimiento. Así mismo, la demanda interna continúa expandiéndose a un ritmo superior al de la producción nacional, aunque declinante. Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política monetaria dado el rezago de las mismas; (ii) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para el 2008; (iii) la ampliación del déficit de la cuenta corriente que refleja un crecimiento de la demanda interna superior al de la producción nacional; (iv) el que cambios en el escenario internacional, en un contexto de déficit de cuenta corriente, puedan llevar a 4 ajustes futuros en la tasa de cambio; (v) la incertidumbre generada por la alta volatilidad de los mercados internacionales y la incidencia que puede tener en la economía colombiana y (vi) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria como estrategia para anclar las expectativas de inflación ante las tendencias de incrementos de los precios que vienen enfrentando los países. Los miembros de la Junta resaltaron de manera unánime que la actual coyuntura se caracteriza por una gran incertidumbre. En especial, las posibles implicaciones en el crecimiento de la economía colombiana por un menor crecimiento de la economía mundial aconsejan que sea mejor esperar a nueva información antes de tomar decisiones sobre la tasa de interés de intervención. En efecto, este menor crecimiento de la economía mundial podría afectar el desempeño de la economía colombiana, lo cual dependerá de la magnitud de la desaceleración en esos países y su incidencia sobre las exportaciones, los precios de los bienes básicos, los flujos de capital y las remesas. Algunos de los directores destacaron que la inflación sigue mostrando una preocupante tendencia al alza que la aleja de la meta de largo plazo definida en la sesión anterior, lo cual se ha manifestado en el comportamiento de las expectativas. Al mismo tiempo, no descartaron que en el futuro sean necesarios incrementos adicionales en la tasa de intervención si la información sugiere que ello es aconsejable para garantizar el cumplimiento de las metas de inflación y maximizar la tasa de crecimiento económico sostenible. Otros miembros reiteraron que la tasa de interés vigente es consistente con una política monetaria contraccionista y que la información disponible no sugiere la necesidad de aumentos futuros en la tasa de intervención. A su juicio, la política monetaria viene logrando los objetivos buscados para moderar el crecimiento y el crédito y anclar las expectativas hacia el logro de las metas de inflación. Dependiendo de la evolución de las condiciones externas y de los niveles internos de precios y empleo, cabría regresar a una postura más neutral. La Junta de manera unánime mantuvo inalterada su tasa de intervención en 9,50% y estimó necesario seguir haciendo un cuidadoso seguimiento del efecto que pueda tener la situación económica internacional sobre el crecimiento, así como, de las presiones inflacionarias provenientes de los precios internacionales de los alimentos y combustibles. 3. Decisión de política La Junta Directiva acordó por unanimidad mantener inalteradas las tasas de intervención del Banco de la República. Bogotá D.C., febrero 8 de 2008
2008-02-01
1 Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 22 de febrero de 2008 El 22 de Febrero de 2008 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Dario Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Fernando Tenjo, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarria, Juan Mario Laserna y Leonardo Villar, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. Antecedentes a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual en enero aumentó por cuarto mes consecutivo al cerrar en 6,0%. Este nivel supera en 31 p.b. el registro del mes anterior y en 150 p.b. el rango superior de la meta para 2008. El aumento de la inflación en enero se explica fundamentalmente por el comportamiento de los precios de los alimentos. En el mes, la inflación anual de no transables sin alimentos ni regulados se mantuvo estable alrededor de 5,2%. Los distintos indicadores de inflación básica se mantuvieron alrededor de 5%. El indicador de inflación sin alimentos aumentó de 4,4% en diciembre a 4,5% en enero. Respecto a los alimentos, el grupo de perecederos, encabezados por la papa, hortalizas y huevos, fue responsable del fuerte aumento de la inflación en enero. La inflación de procesados, por su parte, se contrajo levemente. A pesar de ello, la inflación anual de este subgrupo continúa exhibiendo un alto nivel (9,7%). Los procesados estarían siendo afectados por los precios internacionales altos, los cuales a su vez han sido golpeados 2 por el desplazamiento de la oferta agrícola hacia la producción de biocombustibles y por la gran demanda de China, la India y de otras economías emergentes. b. Crecimiento interno El crecimiento económico interno continúa mostrando una fuerte dinámica, lo que permite mantener las estimaciones realizadas por el equipo técnico del Banco que sitúan el crecimiento del PIB alrededor del 7% en el 2007 y del 5% para el 2008. Las cifras de producción industrial arrojaron un crecimiento alto, de 7,7% en promedio entre octubre y noviembre, aunque menor que el observado en el tercer trimestre (8,5%). Algo similar se observa en el crecimiento de las ventas del comercio al por menor. Por su parte, el indicador de confianza del consumidor de la encuesta de Fedesarrollo se situó en el último trimestre de 2007 en niveles históricamente altos. Las importaciones crecieron 24,5%, sobresaliendo la aceleración de las de bienes de capital. Esto sugiere que la inversión conservó una dinámica importante hacia finales de año. En el caso de las importaciones de bienes de consumo, su crecimiento fue 28,4%, pero con una ligera desaceleración desde abril de 2007. Las exportaciones tradicionales y no tradicionales, continuaron creciendo en octubre y noviembre. En el caso de las tradicionales, su dinámica obedece a un aumento en los precios internacionales, mientras que en las no tradicionales sobresale el dinamismo que exhibieron las ventas a Venezuela, las cuales crecieron a un ritmo anual de 84%, frente a 70% a finales del tercer trimestre (acumulado a 12 meses). Las exportaciones no tradicionales a Venezuela ya representan el 8,44% del PIB. c. Contexto internacional En enero y lo corrido de febrero, las noticias sobre la economía de EEUU apoyan los menores pronósticos de crecimiento. En efecto, la generación de empleo fue negativa en enero, por primera vez desde 3 mediados de 2003. El indicador líder del sector de servicios sufrió un retroceso importante en ese mismo mes, algo que no se veía desde el anterior período recesivo en 2001, mientras que el sentimiento de los consumidores cayó en febrero a niveles no vistos desde comienzos de la década pasada. Por otro lado, las cifras para el mercado de vivienda a noviembre de 2007 sugieren que el deterioro se acentuó a finales del año pasado. Respecto a las tasas de interés de la FED, el mercado espera reducciones en los próximos meses de alrededor de 75 p.b., lo que situaría la tasa de referencia sobre los fondos federales en junio en 2,25%, aproximadamente. No obstante, el dato relativamente alto de inflación básica al consumidor para enero en EEUU (2,5% en términos anuales) podría frenar en algo estas disminuciones. El menor crecimiento en EEUU aún no ha tenido efectos evidentes en la demanda mundial ni en los precios de las materias primas. De hecho, estos últimos continuaron aumentando a comienzos de año y se sitúan en niveles máximos históricos. Los aumentos han sido significativos en el caso de los productos agrícolas, incluido el café, y en otros bienes exportados por Colombia como carbón y oro. c. Variables Financieras Desde septiembre, el M3 crece alrededor de 18%. Se desataca la aceleración de las captaciones a través de CDT, que en enero crecían a una tasa cercana al 35%. El crecimiento de la cartera del sistema financiero continuó desacelerándose. En enero, el crédito total creció a una tasa anual de 23,5%, menor que la de diciembre (24,5%) y que la de septiembre (28,2%), aunque todavía por encima del crecimiento esperado del PIB nominal. El crédito de consumo es el que más rápidamente se ha desacelerado en los últimos seis meses, aunque su ritmo sigue siendo el más alto (31% aproximadamente). La tasa de interés interbancaria (TIB) se mantuvo alrededor de 9,40%, ligeramente por debajo de la tasa de referencia del Banco de la República. La mayoría de las otras tasas nominales tendieron a aumentar en 4 enero, destacándose lo sucedido con las de tarjetas de crédito, las de crédito de consumo y las de crédito ordinario. Si bien el diferencial de las tasas de interés de la FED y las tasas del BR se han incrementado en 125 p.b., la caída de las tasas de interés relativas en los Estados Unidos fue compensada por el aumento de la prima de riesgo colombiana. 2. Discusión y opciones de política En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas por la Junta; (ii) el significativo peso de los alimentos en el comportamiento de la inflación en un contexto internacional de presiones al alza; (iii) el comportamiento de la inflación de los bienes no transables sin alimentos ni regulados frenó la tendencia descendente que traía en meses anteriores; (iv) los indicadores disponibles sugieren que el dinamismo de la demanda agregada se mantiene en niveles altos frente a la producción, aunque muestra síntomas de moderación; (v) la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de la economía mundial y de nuestros principales mercados de exportación y, en particular de Venezuela, y; (vi) el comportamiento de las expectativas de inflación, las cuales aumentaron en el último mes ubicándose por encima de las metas fijadas por la Junta. La Junta consideró que distintos indicadores muestran que los aumentos en las tasas de interés de intervención y modificación en los encajes, han tenido impacto sobre las tasas de interés activas y pasivas y han resultado eficaces frente a los objetivos buscados de moderar la dinámica del crédito. En todo caso, el crédito mantiene tasas elevadas de crecimiento. Así mismo, la demanda interna continúa expandiéndose a un ritmo superior al de la producción nacional, aunque desacelerándose. Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política monetaria, dado el rezago de las mismas; (ii) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para el 2008; (iii) la pertinencia de adoptar medidas de política monetaria en un contexto de alza de precios internacionales de los alimentos y combustibles; (iv) la ampliación del déficit de la cuenta corriente que refleja un crecimiento de la demanda interna superior al de la producción nacional; (v) el que cambios en el escenario internacional, en un contexto de déficit de cuenta corriente, puedan llevar a ajustes futuros en la tasa de cambio; (vi) la incertidumbre 5 generada por la alta volatilidad de los mercados internacionales y la incidencia que puede tener en la economía colombiana, y; (vii) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria como estrategia para anclar las expectativas de inflación ante las tendencias de incrementos de los precios que vienen enfrentando los países. La mayoría de la Junta consideró necesario elevar en 25 p.b. las tasas de interés de intervención para garantizar el cumplimiento de las metas de inflación y maximizar la tasa de crecimiento económico sostenible, teniendo en cuenta los siguientes elementos: (i) Si bien la demanda agregada ha moderado su ritmo de crecimiento gracias a las decisiones de política monetaria, la información disponible muestra que continúa fuerte. Lo mismo sucede con el crecimiento del crédito que, aunque muestra una tendencia decreciente, sigue estando por encima de sus promedios históricos; (ii) los distintos indicadores de expectativas de inflación a horizontes de uno y más años muestran que estas han aumentado en los últimos meses haciendo más costosa la reducción futura de la inflación; (iii) los altos incrementos en los precios de los alimentos y combustibles pueden ser persistentes manteniendo la inflación total en niveles elevados, más aún cuando algunas alzas internas podrían aún no haberse incorporado al comportamiento de los precios internos; (iv) no hay aún evidencia de que la desaceleración de la economía en Estados Unidos y Europa haya afectado la economía colombiana. Los términos de intercambio se encuentran en niveles históricamente altos, los flujos comerciales mantienen su dinámica positiva y la confianza de los inversionistas internacionales se refleja en los crecientes flujos de inversión extranjera directa; (v) las entradas netas de capital de la balanza de cambiaria se explican por la dinámica de inversión extranjera directa y no por flujos de capital de corto plazo inducidos por diferenciales de tasas de interés entre Colombia y el exterior, y; (vi) el aumento de la tasa de intervención apuntala la credibilidad de la política monetaria y facilita la política anticíclica en el futuro. Otros miembros de la Junta, por el contrario, estimaron que no debía aumentarse la tasa de interés de intervención por las siguientes razones: (i) Como resultado de los reajustes de la tasa de intervención del Banco, uno de los más altos de toda la región en los últimos dos años, las tasas de interés de colocación también han subido, y subirán aún más a lo largo de este año por los efectos remanentes del rezago natural entre las medidas tomadas y sus impactos, entre año y medio y dos años; (ii) inclusive según los modelos, aunque la brecha del producto es positiva desde hace dos años, ha comenzado a corregirse por efecto de las alzas en las tasas de interés; (iii) la economía colombiana se encuentra afrontando los efectos de un choque externo muy severo de precios de alimentos y combustibles, lo 6 que se refleja en las expectativas de inflación; (vi) la economía en 2008 se desaceleraría a una tasa de crecimiento del 5%, suponiendo un crecimiento de la norteamericana del 0,8%. Sin embargo, pronósticos recientes indican que ésta apenas se incrementará cerca de 0,5%; (v) es ostensible la reducción de la utilización de la capacidad instalada de la industria; la caída de su índice de confianza; la desaceleración de la demanda de energía, de bienes de consumo durable y de vivienda; la tendencia descendente de la demanda de crédito de los hogares; y la descolgada de la cartera, en especial de la de consumo; (vi) la formación interna bruta de capital fijo continúa en niveles históricos record, al haber llegado al 27% sobre el PIB; (vii) la inflación básica sin alimentos, que es a la cual debería reaccionar la política monetaria a través de las tasas de interés, aún se ubica dentro del rango meta; (viii) el diferencial entre las tasas de referencia de Colombia y EU ha aumentado en 200 p.b desde septiembre del año anterior, el cual, de seguir ampliándose, provocaría una mayor revaluación del peso, cuya magnitud durante el último lustro es una de las más altas del mundo, y causaría graves perjuicios para los sectores transables y la generación de empleo. Teniendo en cuenta lo anterior, la Junta de manera mayoritaria decidió aumentar su tasa de intervención a 9,75% y estimó necesario seguir haciendo un cuidadoso seguimiento del efecto que pueda tener la situación económica internacional sobre el crecimiento, así como, de las presiones inflacionarias provenientes de los precios internacionales de los alimentos y combustibles. 3. Decisión de política La Junta Directiva acordó por mayoría aumentar las tasas de interés de intervención del Banco de la República en 25 p.b. Bogotá D.C., marzo 7 de de 2008
2008-03-01
1 Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 28 de marzo de 2008 El 28 de Marzo de 2008 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Dario Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Fernando Tenjo, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Juan Mario Laserna y Leonardo Villar, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. Antecedentes a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual en febrero aumentó por quinto mes consecutivo al cerrar en 6,35%. Este nivel supera en 35 p.b. el registro del mes anterior y en 185 p.b. el rango superior de la meta para 2008. El aumento de la inflación en febrero se explica fundamentalmente por el comportamiento de los precios de los alimentos. En el mes, la inflación sin alimentos se mantuvo estable en 4,47% y algunos de los indicadores de inflación básica se redujeron ligeramente. Por su parte, la inflación anual de no transables sin alimentos ni regulados se mantuvo estable alrededor de 5,2%. Respecto a los alimentos, su inflación pasó de 9,4% en enero a 10,5% en febrero. El aumento se debió al grupo de perecederos y, en particular, al comportamiento de los precios de la papa. La inflación de procesados, por su parte, se mantuvo en un nivel similar al de enero. A pesar de ello, la inflación anual de este subgrupo continúa exhibiendo un alto nivel (9,5%). 2 A febrero el IPP continuó acelerándose y registró una inflación anual de 3,9%, mientras que los indicadores de salarios muestran aceleraciones importantes en todos los sectores en los que se dispone de información. b. Crecimiento interno Los resultados del crecimiento del PIB para el 2007 (7,52%) y del último trimestre del año (8,14%) fueron superiores a los esperados y confirman que la economía colombiana sigue creciendo a un ritmo fuerte. Las exportaciones en dólares registraron una importante aceleración en noviembre y, especialmente, en diciembre. El buen desempeño se presentó tanto para las tradicionales como para las no tradicionales y se explica por una mejoría en los precios de exportación y un aumento en los volúmenes exportados. Las exportaciones a Venezuela mostraron un crecimiento de más de 90% para el acumulado a 12 meses en diciembre. Las exportaciones tradicionales a Estados Unidos repuntaron en los últimos meses de 2007 y las no tradicionales dejaron de caer. El crecimiento de la industria en enero según el DANE fue de 5,6%, mientras que las cifras de la ANDI señalan un crecimiento para la industria de 7,5%. Las ventas al por menor, por su parte, presentaron una caída explicada por las ventas de alimentos. Otros indicadores de gasto privado como el sentimiento de los consumidores medido por Fedesarrollo indican que este se mantuvo en un nivel alto. El ritmo de crecimiento de las importaciones se aceleró en enero frente a diciembre, particularmente en bienes de consumo durable y bienes de capital. En materia de empleo, las cifras del DANE y las encuestas sectoriales en enero muestran que ha seguido creciendo a un ritmo alto. c. Contexto internacional La actividad económica en los EEUU continuó deteriorándose. El comportamiento de diversos indicadores en febrero y marzo sugiere que el crecimiento ya habría entrado en terreno negativo en el primer trimestre del año. El sentimiento de los consumidores en marzo cayó a niveles similares 3 o incluso inferiores a los observados en la pasada recesión de 2001-2002, reflejándose en un pobre desempeño de las ventas al detal y en una caída de la producción industrial. Por otro lado, la crisis en el sector de finca raíz continúa: el precio de la vivienda sigue descendiendo, los inventarios aún no se reducen y los incumplimientos hipotecarios y los embargos de vivienda aumentan, según la última información disponible a diciembre. El sistema financiero ha sido afectado por las noticias anteriores y las dudas sobre su solidez han seguido creciendo, lo que se confirma con la difícil situación de varios bancos internacionales. Todo lo anterior hace presagiar una recesión en EEUU más fuerte y duradera de lo que inicialmente se esperaba. Los pronósticos de crecimiento para 2008 de los diferentes analistas se han reducido desde niveles de 1,5% hacia niveles cercanos a 0,5%. Se anticipa para 2009 tasas de crecimiento inferiores al 1%. Estos resultados, de confirmarse, estarían sugiriendo un desempeño económico en ese país por debajo del observado en las últimas dos décadas, lo que podría terminar afectando el crecimiento mundial. Por esta razón, las perspectivas económicas para otras economías desarrolladas también están siendo revisadas a la baja. Los precios de las materias primas han presentado gran volatilidad como resultado del aumento en la incertidumbre en EEUU. No es claro hasta qué punto los altos niveles que exhiben hoy en día estos precios obedecen a excesos de la demanda mundial o a movimientos especulativos asociados con el debilitamiento del dólar. Esto último aumenta el riesgo de que se presenten cambios con reducciones más pronunciadas que las observadas en los últimos días. Las monedas de los países emergentes, en especial de América Latina, continuaron apreciándose. Por otro lado, en las últimas semanas, las primas de riesgo de estas economías han tenido una reacción relativamente moderada al deterioro del contexto internacional. 4 d. Variables Financieras Los agregados monetarios se desaceleraron nuevamente en febrero. El M3 creció a una tasa anual de 16,9%, el efectivo lo hizo al 11,3% y los pasivos sujetos a encaje (PSE) al 17,8%. En el mes continuó la aceleración de las captaciones a través de CDT. El crecimiento de la cartera del sistema financiero también continuó desacelerándose. El crédito total creció a una tasa anual de 23,1% frente 24,6% en diciembre. Cuando se observa el crecimiento marginal utilizando la serie de promedios móviles de orden 13 se aprecia una desaceleración más pronunciada en los últimos meses sobre todo en el crédito de consumo y en el comercial. Las tasas de interés nominales continuaron incrementándose y las diferentes tasas reales, tanto activas como pasivas, están en sus promedios históricos. 2. Discusión y opciones de política En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas por la Junta; (ii) el significativo peso de los alimentos en el comportamiento de los precios en un contexto internacional de presiones al alza; (iii) el comportamiento de la inflación de los bienes no transables sin alimentos ni regulados frenó la tendencia descendente que traía en meses anteriores; (iv) los indicadores disponibles sugieren que el dinamismo de la demanda agregada se mantiene en niveles altos frente a la producción, aunque muestra síntomas de moderación; (v) la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de la economía mundial y de nuestros principales mercados de exportación y, en particular de Venezuela, (vi) el efecto de la reciente revaluación del peso sobre la inflación y las perspectivas de crecimiento de los sectores transables y (vii) el comportamiento de las expectativas de inflación, las cuales continuaron aumentando, ubicándose por encima de las metas fijadas por la Junta, y que podrían estar reflejándose en las negociaciones salariales. La Junta consideró que distintos indicadores muestran que los aumentos en las tasas de interés de intervención y modificación en los encajes, han tenido impacto sobre las tasas de interés activas y pasivas y han resultado eficaces frente a los objetivos buscados de moderar la 5 dinámica del crédito. En todo caso, la demanda interna continúa expandiéndose a un ritmo superior al de la producción nacional, aunque desacelerándose. Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política monetaria dado el rezago de las mismas; (ii) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para el 2008 y 2009; (iii) la pertinencia de adoptar medidas de política monetaria en un contexto de alza de precios internacionales de los alimentos y combustibles; (iv) el déficit de la cuenta corriente que refleja un crecimiento de la demanda interna superior al de la producción nacional; (v) el que cambios en el escenario internacional, en un contexto de déficit de cuenta corriente, puedan llevar a ajustes futuros en la tasa de cambio; (vi) la incertidumbre generada por la alta volatilidad de los mercados internacionales y la incidencia que puede tener en la economía colombiana, y (vii) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria como estrategia para anclar las expectativas de inflación ante las tendencias de incrementos de los precios que vienen enfrentando los países. La mayoría de la Junta consideró conveniente mantener inalterada la tasa de interés de intervención, a pesar de la persistencia de las presiones inflacionarias reseñadas y en especial del aumento en las expectativas de inflación de los agentes en la economía. Lo anterior, con el fin de acopiar mayor información para evaluar los posibles efectos sobre el crecimiento de una recesión más profunda y prolongada en los Estados Unidos, así como del impacto de las medidas de política monetaria adoptadas en el pasado. Unos miembros de la Junta señalaron la importancia de tener la inflación y las expectativas de inflación ancladas a las metas, para lo cual consideran necesario mantener una postura de la política monetaria restrictiva, que facilite en el futuro una política contracíclica en el manejo monetario. Lo anterior, a pesar de las perspectivas de menor crecimiento de la economía, en especial por el efecto de la recesión en los Estados Unidos. Un miembro de la Junta estimó que debería disminuirse la tasa de interés de intervención, por las siguientes razones: (i) Las medidas tomadas por la Junta han tenido y seguirán teniendo los efectos buscados por la política monetaria. Lo anterior se refleja ya en la reducción de la utilización de la capacidad instalada de la industria, la caída de su índice de confianza, la desaceleración de la demanda de energía y de bienes de consumo durable y de vivienda, el aumento de las tasas de interés y la tendencia descendente de la demanda de crédito de los hogares y la descolgada de la cartera, en 6 especial de la de consumo; (ii) La información disponible sugiere que se presentará una corrección importante en los próximos meses de los precios internos de los alimentos perecederos; (iii) La dinámica de la economía colombiana en los años 2008 y 2009 se va a afectar por el deterioro del crecimiento de la economía norteamericana y mundial a lo cual se suman los posibles problemas futuros que afecten a Venezuela; (iv) Una disminución de la tasa de intervención conduciría a que no se siga ampliando el diferencial de las tasas internas y externas y a una menor presión sobre la revaluación del peso, cuya magnitud durante el último lustro es una de las más altas del mundo, y causaría graves perjuicios para los sectores transables y la generación de empleo. Teniendo en cuenta lo anterior la Junta de manera mayoritaria decidió mantener inalterada su tasa de intervención en 9,75% y estimó necesario seguir haciendo un cuidadoso seguimiento del efecto que pueda tener la situación económica internacional sobre el crecimiento, así como, de las presiones inflacionarias provenientes de los precios internacionales de los alimentos y combustibles. 3. Decisión de política La Junta Directiva acordó por mayoría mantener inalterada las tasas de interés de intervención del Banco de la República en 9,75%. Bogotá D.C., abril 11 de 2008
2008-04-01
1 Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 25 de abril de 2008 El 25 de Abril de 2008 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Dario Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Fernando Tenjo, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Juan Mario Laserna y Leonardo Villar, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. Antecedentes a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual en marzo se situó en 5,93%, 42 p.b. por debajo de la observada un mes atrás. El descenso se dio luego de cinco meses de aumentos consecutivos. La desaceleración de la inflación en marzo se explica por el comportamiento de los precios de los alimentos (8,6% en marzo frente a 10,5% en febrero) y, en especial, de los perecederos. A pesar de ello, la inflación anual de este subgrupo continúa exhibiendo un alto nivel (9,6%). La inflación sin alimentos se incrementó en el mes de marzo alcanzando 4,67% frente a 4,47% del mes anterior, lo cual obedeció fundamentalmente al comportamiento de los regulados, cuyos precios mostraron incrementos anuales de 6,57% a febrero y 7,7% a marzo. Algunos indicadores de inflación básica aumentaron después de permanecer cuatro meses estables. La inflación anual de no transables sin alimentos ni regulados, la cual suele ser un buen indicador de las presiones inflacionarias del lado de la demanda, disminuyó al pasar de 5,3% en febrero a 5,1% en marzo. Se destaca el menor ajuste de los servicios bancarios y la estabilidad de la 2 inflación anual de arriendos. Esta última se ha mantenido alrededor de 4,3% en los últimos cuatro meses. Los precios de los bienes transables sin alimentos ni regulados mostraron incrementos superiores a los de un mes atrás a pesar de la notoria caída que se observó en la tasa de cambio del peso con respecto al dólar. A marzo, el ritmo de crecimiento del IPP se redujo levemente y registró una inflación anual de 3,4%. b. Crecimiento interno Los resultados del crecimiento del PIB para el 2007 (7,52%) y del último trimestre del año (8,14%) fueron superiores a los esperados y confirman que la economía colombiana sigue creciendo a un ritmo fuerte. El crecimiento para el 2007 es uno de los más altos de los últimos cincuenta años. La inversión y el consumo de los hogares fueron los componentes de la demanda que más contribuyeron al crecimiento durante el 2007. Desde una perspectiva sectorial, los mayores crecimientos se observaron en la construcción, el transporte, la industria manufacturera y el comercio. La información del cuarto trimestre del 2007 confirmó el fuerte dinamismo de las exportaciones con crecimiento real de 9,2% frente a 7,7% del trimestre anterior. Para todo el 2007 el crecimiento fue de 7,5%. El promedio del primer trimestre del indicador de confianza al consumidor de FEDESARROLLO se mantuvo en un nivel alto y las exportaciones de bienes en los primeros meses del año crecieron a tasas superiores a las observadas a finales del año pasado. Por su parte, el fuerte crecimiento de las importaciones de bienes de capital sugiere que la inversión privada continúa firme. El tipo de cambio presentó una apreciación promedio anual de 14% durante el primer trimestre del año como efecto, principalmente, de las inversiones extranjeras directas orientadas a los sectores petrolero y minero. En materia de empleo, las cifras del DANE y las encuestas sectoriales muestran que ha seguido creciendo a un ritmo alto. 3 c. Contexto internacional La actividad económica en los EEUU continuó deteriorándose. Los indicadores relativos a los sectores de servicios e industria, a la percepción de los consumidores sobre su situación económica, a las ventas minoristas (reales) al mes de marzo y a la creación de empleos, han sido negativos. Por esa razón los analistas internacionales prevén una contracción del producto de EEUU en la primera mitad del año. Para el resto de 2008 y para el 2009 se esperan bajas tasas de crecimiento. En los últimos meses también ha continuado el deterioro del mercado de la vivienda. Los permisos de construcción y la construcción de vivienda nueva siguieron cayendo y los inventarios se mantienen muy altos (a febrero). La presión bajista sobre los precios de la vivienda muy probablemente continuará hacia el futuro. Esta situación está dificultando los pagos de hipotecas y ha aumentado los embargos. Adicionalmente, se han observado incrementos en la morosidad, que son más pronunciados en los créditos otorgados recientemente y que no solo se circunscriben a la cartera subprime. El sistema financiero ha sido afectado por las noticias anteriores y se mantienen las dudas sobre su solidez, lo que se confirma con las importantes pérdidas incurridas por varios bancos internacionales. d. Variables Financieras Los agregados monetarios mantuvieron la desaceleración que se observa desde noviembre del año pasado. El M3 creció a una tasa anual de 15,2%, el efectivo lo hizo al 9,8% y los pasivos sujetos a encaje (PSE) al 16,05%. En el mes continuó el proceso de recomposición de las captaciones a favor de CDT. El crecimiento de la cartera del sistema financiero también continuó desacelerándose. El crédito en pesos creció en marzo 21,9% frente a 24,6% en diciembre anterior. La cartera de consumo es el segmento que muestra una desaceleración más fuerte en los últimos meses con un crecimiento de 26,1% frente a 32,6% en diciembre. En el mes de marzo las tasas nominales activas y pasivas aumentaron, con excepción de las de crédito de consumo y las de crédito hipotecario, que se redujeron ligeramente. La tasa DTF se situó en 9,6% 4 frente a 9,3% en febrero y 9,0% en diciembre. Dicha tasa se encuentra al mismo nivel que la TIB, después de dos años de registros inferiores a ella. Por su parte, la tasa activa promedio se encuentra en 16,9% frente a 16,6% en febrero y diciembre. El alza en las tasas reales ha sido menor por el aumento de la inflación en lo corrido del año. La tasa real activa promedio (11,7%) se encuentra entre el promedio calculado desde 1986 (12,5%) y el computado a partir de 2001 (9,8%). 2. Discusión y opciones de política En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas por la Junta; (ii) el significativo peso de los alimentos en el comportamiento de los precios en un contexto internacional de presiones al alza; (iii) la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de los precios de los regulados dados los mecanismos de indexación incorporados en la determinación de tarifas; (iv) los costos de producción de las empresas muestran incrementos importantes tanto por materias primas como en los componentes laborales; (v) los indicadores disponibles sugieren que el dinamismo de la demanda agregada se mantiene en niveles altos frente a la producción; (vi) la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de la economía mundial y de nuestros principales mercados de exportación y, en particular de Venezuela; (vii) el efecto de la reciente revaluación del peso sobre la inflación y las perspectivas de crecimiento de los sectores transables y (viii) el comportamiento de las expectativas de inflación, que continúan ubicándose por encima de las metas fijadas por la Junta. La Junta consideró que los aumentos en las tasas de interés de intervención que se vienen haciendo desde abril de 2006 y la modificación en los encajes realizada a mediados de 2007 han tenido impacto sobre las tasas de interés activas y pasivas y han resultado eficaces frente a los objetivos buscados de moderar la dinámica del crédito. No obstante, la demanda interna continúa expandiéndose a un ritmo superior al de la producción nacional. Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política monetaria dado el rezago de las mismas; (ii) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para el 2008 y 2009; (iii) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria como estrategia para anclar las expectativas de inflación ante el riesgo de los efectos colaterales de los precios internacionales de alimentos y combustibles; (iv) la pertinencia de adoptar medidas de política monetaria en un contexto de alza 5 de precios internacionales de los alimentos y combustibles; (v) el déficit de la cuenta corriente que refleja un crecimiento de la demanda interna superior al de la producción nacional; (vi) la posibilidad de que cambios en el escenario internacional, en un contexto de déficit de cuenta corriente, puedan llevar a ajustes futuros en la tasa de cambio; (vii) la incertidumbre generada por la alta volatilidad de los mercados internacionales y la incidencia que puede tener en la economía colombiana y; (viii) los efectos de la apreciación de la tasa de cambio. Algunos miembros de la Junta subrayaron la existencia de presiones inflacionarias a nivel mundial y la postura más restrictiva que han adoptado recientemente muchos bancos centrales. Señalaron que, ante las proyecciones de inflación para los próximos meses, es importante tener la inflación y sus expectativas ancladas a las metas, para lo cual consideraron necesario mantener una postura restrictiva de la política monetaria que facilite en el futuro un manejo monetario contra cíclico ante una eventual desaceleración de la economía, que contribuya a que esta alcance el máximo crecimiento sostenible. Destacaron que la información disponible indica que continúan los excesos de demanda en la economía y existen riesgos inflacionarios que pudieran llevar en el futuro a que sea necesario aumentar las tasas de interés de intervención. Consideraron que, aunque existe gran incertidumbre sobre el desempeño futuro de la economía mundial y su efecto sobre la economía colombiana, hasta el momento el contexto externo sigue siendo favorable al crecimiento colombiano a juzgar por el aumento reciente en los términos de intercambio, las exportaciones y las entradas de inversión extranjera directa. Finalmente expresaron que si bien existe un diferencial de tasas de interés entre Colombia y los Estados Unidos, la apreciación del peso se explica fundamentalmente por las fuertes presiones globales sobre la devaluación del dólar y el comportamiento de los términos de intercambio y la inversión extranjera directa. Otros miembros de la Junta estimaron que, excepto en el caso de presentarse graves perturbaciones no previstas, no sería necesario elevar las tasas de interés de intervención debido a que las medidas de política monetaria tomadas hasta ahora han tenido y seguirán teniendo los efectos buscados en materia de freno de la demanda interna y la consiguiente desaceleración de la economía. A lo anterior, se suma la importante corrección a la baja de la inflación de los alimentos perecederos y de los no transables sin alimentos ni regulados, y los posibles efectos adversos de la recesión norteamericana y la crisis mundial sobre el crecimiento de la economía colombiana, aparte de la gran incertidumbre en torno de la suerte y la sostenibilidad de la evolución económica de Venezuela. Por tales razones insistieron en la necesidad de emprender en breve un proceso gradual de normalización de la política monetaria. Dicho proceso a su turno 6 contribuiría a evitar que se siga ampliando el diferencial entre las tasas de interés internas y externas, y la consiguiente presión adicional sobre la revaluación del peso, cuya magnitud durante el último lustro ha sido una de las más altas en todo el mundo. Teniendo en cuenta lo anterior la Junta decidió mantener inalterada su tasa de intervención en 9,75% y estimó necesario seguir haciendo un cuidadoso seguimiento del efecto que pueda tener la situación económica internacional sobre el crecimiento, así como, de las presiones inflacionarias provenientes de los precios internacionales de los alimentos y combustibles. 3. Decisión de política La Junta Directiva acordó mantener inalteradas las tasas de interés de intervención del Banco de la República en 9,75%. Bogotá D.C., mayo 09 de 2008
2008-05-01
1 Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 23 de mayo de 2008 El 23 de Mayo de 2008 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Fernando Tenjo, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Juan Mario Laserna y Leonardo Villar, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. Antecedentes a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual en abril se situó en 5,73%, 20 p.b. por debajo de la observada un mes atrás. El descenso se dio por segundo mes consecutivo, luego de haber alcanzado su máximo reciente en febrero pasado (6,35%). La desaceleración de la inflación en abril se explica por el comportamiento de los precios de los alimentos (7,82% en abril frente a 8,61% en marzo) y, en especial, de los perecederos. Los alimentos procesados (8,75%) también descendieron gracias a las carnes y sus sustitutos. La inflación sin alimentos se incrementó en el mes de abril alcanzando 4,74% frente a 4,67% del mes anterior, lo cual obedeció, fundamentalmente, al comportamiento de los regulados, cuyos precios mostraron incrementos anuales de 7,7% a marzo y 8,10% a abril. Algunos indicadores de inflación básica aumentaron y se mantienen por encima de la meta de inflación. La inflación anual de no transables sin alimentos ni regulados, que suele ser un buen indicador de las presiones inflacionarias del lado de la demanda, disminuyó al pasar de 5,1% en marzo a 5,05% en abril. Se destaca el menor ajuste de los servicios bancarios y el incremento de la 2 inflación de arriendos (4,65%) después de varios meses de estabilidad alrededor de 4,3%. Los precios de los bienes transables sin alimentos ni regulados reportaron el mismo crecimiento anual de un mes atrás. El grupo de regulados aumentó de 7,7% en marzo a 8,1% en abril, destacándose las tarifas de servicios públicos (gas 9,8% y energía 9,4%). A abril, el ritmo de crecimiento del IPP se aceleró pasando de una inflación anual de 3,4% a 3,8%. b. Crecimiento interno La información disponible relacionada con el comportamiento de la demanda agregada muestra lo siguiente: - En el primer trimestre de 2008 las importaciones de consumo duradero crecieron 13,7% en dólares y 1,7% en volumen respecto al primer trimestre de 2007, mientras que las importaciones de bienes de consumo no duradero lo hicieron 18,3% en dólares, aunque registran caídas en volúmenes (25,4%). Los productos alimenticios, las bebidas y el vestuario fueron los rubros que presentaron mayores disminuciones en volumen. - La variación anual de las ventas de comercio al por menor disminuyó nuevamente. En marzo se ubicó en 0%. - La Encuesta de Consumo de Fedesarrollo a abril muestra unas perspectivas de los consumidores elevadas. - La inversión, medida a través de las importaciones de bienes de capital a marzo de 2008, continúa a un buen ritmo de crecimiento. Las importaciones de capital para la agricultura crecen 46% y para la industria 23%. Los volúmenes registraron aumentos importantes. - Las exportaciones continuaron con una buena dinámica. Las exportaciones tradicionales aumentaron 32,1% y las no tradicionales alcanzaron una tasa de crecimiento anual de 27,3%. Venezuela continúa siendo el principal receptor de exportaciones no tradicionales. Estados Unidos, por su parte, sigue siendo el principal receptor de exportaciones tradicionales que presentaron un crecimiento importante (21,2%). 3 Por su parte la información asociada a la producción muestra lo siguiente: - Las importaciones de bienes intermedios para la industria crecieron 13,5% en el acumulado a marzo de 2008. - En marzo, el Indice de Producción Industrial (IPI) sin trilla de café cayó 9,4%. Ajustando la serie por días hábiles, el indicador crecería 2,4%. Una estimación del efecto de la huelga de Cerromatoso es de 2 pp. De esta forma, excluyendo estos efectos, el IPI sin trilla habría crecido 4,4%. - Descomponiendo el IPI por subsectores (ajustados por días hábiles), el 58% de estos está creciendo por encima del promedio histórico (1980- 2008). De estos subsectores los subgrupos “industrias básicas de hierro y acero; fundición de metales” y “equipos y aparatos de radio, televisión y comunicaciones” son los que presentan unas caídas atípicas desde 2001. - En la Encuesta de Opinión Empresarial de Fedesarrollo, las preguntas asociadas a actividad productiva y a pedidos presentaron las reducciones más importantes en los resultados desde que se lleva a acabo la encuesta (1980). - Las importaciones de materias primas para la agricultura crecieron 62% en dólares a marzo de 2008. - El comercio presentó una desaceleración según la encuesta de Fedesarrollo. Las preguntas asociadas a variación en ventas con respecto al mes anterior y al mismo mes en el año anterior, son las que presentan los cambios más importantes desde que se lleva a cabo la encuesta (Junio de 1980). - El indicador de licencias de construcción continúo desacelerándose y a marzo de 2008, su tasa de crecimiento acumulado 12 meses fue de 7,6%. La producción de cemento también mostró menores tasas de crecimiento. - El Indice Mensual de Actividad de Colombia (IMACO) estimado hasta agosto de 2008, muestra una desaceleración, lo que indicaría disminución en los niveles de crecimiento del PIB durante los dos primeros trimestres de este año. De variables asociadas al ingreso se encuentra lo siguiente: 4 - Aunque se presentó una caída en las tasas de desempleo, el empleo asalariado continúa desacelerándose y a marzo muestra una importante disminución (2,5%). - En marzo, la creación de empleo en la industria y el comercio se desaceleró, pero sigue mostrando tasas de crecimiento positivas. - El crecimiento de los salarios reales durante el 2007 fue inferior al de 2006, cuando alcanzó un nivel alto. En particular, los salarios reales de la industria (deflactados con el IPC total) muestran crecimientos negativos en 2007. En 2008 se mantienen estas tendencias. - La carga financiera de los hogares se ha incrementado debido, principalmente, a los costos asociados a los créditos de consumo. La apreciación enero-abril de este año con respecto al mismo período del año pasado se ubicó en 15%. Continúan entradas importantes de inversión extranjera directa, las cuales a abril se ubican en US$3.070 millones, de éstas US$1.901 millones corresponden a petróleo y minería y US$1.169 millones al resto de sectores. En materia de empleo, las encuestas sectoriales a marzo si bien muestran tasas de crecimiento positivas también reflejan una moderación en el crecimiento. c. Contexto internacional La información disponible sobre los EEUU muestra una economía débil pero mejor que la esperada por los analistas internacionales. El dato preliminar sobre el crecimiento para el primer trimestre del año (0,6%) estuvo por encima de lo proyectado. Sin embargo, cifras como la de indicadores líderes de la industria y el sector servicios continuaron mostrando una menor dinámica, al igual que las ventas minoristas y la confianza de los consumidores. Aunque este menor ritmo de crecimiento estaría permitiendo una estabilidad en la inflación básica, los altos precios del petróleo han generando un fuerte aumento en las expectativas de inflación futura. Bajo este escenario, el mercado espera que la FED mantenga sus tasas de interés inalteradas, e incluso se proyectan posibles aumentos para finales de año. Los mercados financieros mostraron mayor calma en el último mes. Se presentó una menor presión de liquidez en los mercados interbancarios y una disminución de la aversión al riesgo internacional. Esto se reflejó en 5 una ligera recomposición del portafolio de inversionistas internacionales en búsqueda de activos con mayor rentabilidad y riesgo de mercado. A pesar de la caída en algunos precios de bienes básicos, estos se mantienen en niveles elevados. En el caso de nuestros principales productos de exportación, algunos de ellos continuaron aumentando al mes de abril, como es el caso del petróleo y carbón. d. Variables Financieras Los agregados monetarios, con excepción de la base monetaria, mantuvieron la desaceleración que se observa desde noviembre del año pasado. El M3 creció a una tasa anual de 13,9%, el efectivo lo hizo al 7,51% y los pasivos sujetos a encaje (PSE) al 14,8%. En el mes continuó el proceso de recomposición de las captaciones a favor de CDT. El crecimiento de la cartera del sistema financiero en moneda legal creció en marzo 21,65% frente a 24,6% en diciembre anterior. Este comportamiento se debió a la cartera de consumo que muestra una desaceleración más fuerte en los últimos meses con un crecimiento de 23,7% frente a 32,6% en diciembre, mientras que la cartera comercial se incrementó (21,5%) y la hipotecaria se mantuvo. En el mes de abril las tasas de interés nominales activas y pasivas aumentaron con excepción de las del crédito consumo y preferencial. La tasa de interés activa real se aproxima a su promedio histórico (12,3% observado vs 12,5% promedio) mientras que la DTF real ya lo alcanzó (4,8%). 2. Discusión y opciones de política En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas por la Junta; (ii) el significativo peso de los alimentos en el comportamiento de los precios en un contexto internacional de presiones al alza; (iii) la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de los precios de los regulados dados los mecanismos de indexación incorporados en la determinación de tarifas; (iv) los costos de producción de las empresas que muestran incrementos importantes tanto por materias primas como en los componentes laborales; (v) la incertidumbre sobre el comportamiento 6 futuro de la economía mundial y de nuestros principales mercados de exportación y, en particular de Venezuela; (vi) el efecto de la reciente revaluación del peso sobre la inflación y las perspectivas de crecimiento de los sectores transables; y (vii) el comportamiento de las expectativas de inflación, que continúan ubicándose por encima de las metas fijadas por la Junta. La Junta consideró que los aumentos en las tasas de interés de intervención que se vienen haciendo desde abril de 2006 y la modificación en los encajes realizada a mediados de 2007 han tenido impacto sobre las tasas de interés activas y pasivas y han resultado eficaces frente a los objetivos buscados de moderar la dinámica del crédito y la demanda interna. Igualmente destacó que la información disponible muestra una moderación más acentuada en el crecimiento de la economía que la inicialmente esperada. Diversos indicadores de demanda y de producción presentan comportamientos en este sentido, en especial los datos de comercio y de algunos sectores de la industria. Sin embargo, las importaciones de bienes de capital sugieren que la inversión sigue con un buen dinamismo y la Encuesta de Opinión al Consumidor mantiene el indicador de confianza en niveles altos, a lo que se suma el incremento de las exportaciones. Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política monetaria dado el rezago de las mismas; (ii) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para el 2008 y 2009; (iii) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria como estrategia para anclar las expectativas de inflación ante el riesgo de los efectos colaterales de los precios internacionales de alimentos y combustibles; (iv) la pertinencia de adoptar medidas de política monetaria en un contexto de alza de precios internacionales de los alimentos y combustibles; (v) el déficit de la cuenta corriente que refleja un crecimiento de la demanda interna superior al de la producción nacional; (vi) la posibilidad de que cambios en el escenario internacional, en un contexto de déficit de cuenta corriente, puedan llevar a ajustes futuros en la tasa de cambio; (vii) la incertidumbre generada por la alta volatilidad de los mercados internacionales y la incidencia que puede tener en la economía colombiana; (viii) el balance de riesgo entre crecimiento e inflación frente a la nueva información disponible y (ix) los efectos de la apreciación de la tasa de cambio. Algunos miembros de la Junta subrayaron que persisten presiones inflacionarias a nivel mundial y que dadas las proyecciones de inflación 7 para los próximos meses, es importante tener la inflación y sus expectativas ancladas a las metas. Para lograr ese objetivo, estimaron necesario una postura de la política monetaria que facilite en el futuro un manejo monetario contra cíclico ante una eventual desaceleración de la economía. Señalaron que conducir la inflación hacia la meta de largo plazo es fundamental para evitar en el futuro un período de dificultades económicas y que la moderación en el crecimiento de la demanda interna y el crédito reduce las presiones inflacionarias y permite el crecimiento sostenible de la economía. Destacaron que la información disponible muestra que la industria y el comercio, dos sectores altamente sensibles de la demanda interna, crecieron en el mes de marzo a una tasa inferior a los pronósticos del Banco y que las últimas encuestas sugieren también un menor crecimiento de la demanda. A este respecto consideraron necesario obtener mayor información para establecer los riesgos de inflación y de un menor crecimiento de la economía para este año y, en especial, en el 2009, antes de modificar la postura de la política monetaria. No obstante, resaltaron que, aunque existe gran incertidumbre sobre el desempeño futuro de la economía mundial, hasta el momento el contexto externo sigue siendo favorable al crecimiento colombiano a juzgar por el aumento reciente en los términos de intercambio, las exportaciones y las entradas de inversión extranjera directa. Finalmente expresaron que, si bien existe un diferencial de tasas de interés entre Colombia y los Estados Unidos, la apreciación del peso se explica fundamentalmente por las fuertes presiones globales sobre la devaluación del dólar y el comportamiento de los términos de intercambio y la inversión extranjera directa. Otros miembros de la Junta estimaron que la evolución reciente de los indicadores económicos sugiere que continúa el proceso de desaceleración de la economía que se inició desde finales del año anterior, tanto desde la oferta como de la demanda y que esta desaceleración es más rápida de lo previsto inicialmente, aún descontando los efectos de la Semana Santa y de la huelga en Cerromatoso. A lo anterior se suma el efecto negativo de la revaluación en algunos sectores y en el ingreso disponible de los hogares vía menores ingresos de remesas. Destacaron que Colombia está enfrentando, al igual que otros países, un choque de oferta sobre la inflación liderado por los precios de los alimentos y cuestionaron, por esta razón, la pertinencia de mantener una política monetaria restrictiva. Indicaron que las medidas tomadas por la Junta en el pasado han tenido y seguirán teniendo los efectos buscados de moderar el crédito y que ya se presenta una importante corrección a la baja de la inflación de los alimentos perecederos y de los no transables sin alimentos ni regulados. Deben considerarse, adicionalmente, los posibles efectos adversos de la recesión norteamericana y la crisis mundial sobre el crecimiento de la economía colombiana, aparte de la gran incertidumbre en torno de la suerte 8 y la sostenibilidad de la evolución económica de Venezuela. Por tales razones propusieron disminuir la tasa de interés de intervención en 25 p.b lo cual contribuiría a reducir el diferencial entre las tasas de interés internas y externas, y la consiguiente presión adicional sobre la revaluación del peso, cuya magnitud durante el último lustro ha sido una de las más altas en todo el mundo. 3. Decisión de política La Junta Directiva, por mayoría, acordó mantener inalteradas las tasas de interés de intervención del Banco de la República y estimó necesario seguir haciendo un cuidadoso seguimiento del efecto que pueda tener la situación económica internacional sobre el crecimiento, así como, de las presiones inflacionarias provenientes de los precios internacionales de los alimentos y combustibles. Bogotá D.C., junio 6 de 2008
2008-06-01
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 20 de junio de 2008 El 20 de junio de 2008 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Fernando Tenjo, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Juan Mario Laserna y Leonardo Villar, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. Antecedentes a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor en mayo se situó en 6,39%, 66 pb por encima de la observada en abril, luego de haber caído durante los dos meses anteriores. La inflación acumulada en los cinco primeros meses del año ascendió a 5,1%, nivel que supera en 70 pb el registro de igual período del año pasado. Todos los indicadores de inflación básica aumentaron en mayo y algunos se mantienen por encima de la meta de inflación. La aceleración de la inflación durante mayo se explica, principalmente, por el comportamiento del precio de los alimentos (incremento de 9,7% en mayo frente a 7,8% de abril). En especial, de los perecederos (papa y otras hortalizas y tubérculos) y de los importados. La inflación sin alimentos fue 4,8%, levemente superior al 4,7% de abril. El aumento obedeció al grupo de no transables sin alimentos ni regulados cuya inflación se situó en 5,25% frente a 5,05% en abril. La inflación anual de arriendos (4,7%) se mantuvo en un nivel cercano al observado el mes pasado y se presentó una nueva alza de los servicios bancarios. El grupo de regulados pasó de 8,1% en abril a 8,3% en mayo. Desde septiembre del año pasado la inflación de esta canasta viene aumentando como resultado de los incrementos de los precios de los combustibles y de los servicios públicos. El único grupo cuya inflación disminuyó fue el de transables sin alimentos ni regulados al pasar de 2,4% en abril a 2,2% en mayo. Dentro de este grupo se destaca el comportamiento a la baja de los precios de los vehículos (-4,6% de inflación anual). En general, el precio de los bienes de consumo durable se viene reduciendo, probablemente por el efecto de la apreciación acumulada. Las expectativas de inflación a un año, medidas por las encuestas a analistas y los precios de los papeles de deuda interna, aumentaron y se situaron por encima de 5,5%. A mayo, el índice de crecimiento del IPP pasó de una inflación anual de 3,8% en abril a 5,4%. b. Crecimiento Interno La información disponible relacionada con el comportamiento de la producción, la demanda agregada y el ingreso, muestra lo siguiente: - El indicador de confianza de los hogares de la encuesta de Fedesarrollo, entre enero y mayo mostró una caída frente a 2007, aunque mantiene niveles relativamente altos. - En abril, la producción industrial sin trilla de café creció a una tasa anual de 9,8%. Este crecimiento contrasta con la caída de 9,4% registrada en marzo y que, en su momento, se explicó principalmente como resultado de menores días hábiles en ese mes y de la huelga en Cerromatoso. Para el bimestre marzo-abril el crecimiento anual fue de -0,2%. Año corrido a abril el crecimiento anual fue de 3,5%. - Las cifras del DANE indican que las ventas al por menor crecieron en abril 1,2%, tasa superior a la de un mes atrás pero baja con respecto a lo observado a finales de 2007 y comienzos de 2008. Por sectores, el peor desempeño se observó en las ventas de alimentos (-3,5%). Otros sectores como calzado y textiles también mostraron cifras negativas. - Las exportaciones en dólares mantuvieron su dinamismo en el primer trimestre del año. Las exportaciones totales acumuladas a 12 meses crecieron a una tasa cercana al 30%, similar a la de comienzo de año y superior a la observada en 2007. - El aumento en los precios de varios productos primarios de exportación unido a un mayor volumen exportado, explica la aceleración de las exportaciones tradicionales en lo corrido del año (34% en marzo para el acumulado a 12 meses en dólares). - Las exportaciones no tradicionales presentaron a marzo un crecimiento cercano al 25%. En el último mes se observó una desaceleración de las exportaciones dirigidas hacia Venezuela. Este fenómeno puede haber ocurrido debido a las restricciones fronterizas que se presentaron en marzo y a la presencia de Semana Santa en ese mes. No obstante, el menor crecimiento fue, en parte, compensado por un aumento de las exportaciones no tradicionales hacia EEUU. - Las importaciones mostraron en abril una recuperación frente al desempeño de marzo, lo que sugiere que la presencia de Semana Santa en este segundo mes generó algún efecto estadístico. Para el acumulado a 12 meses las importaciones totales se mantuvieron en tasas del orden del 24%, similar a las que se observan desde 2006. En el caso de las importaciones de bienes de consumo se observa una moderación en su crecimiento, particularmente de los bienes durables. - El indicador de inversión en obras civiles publicado por el DANE muestra una caída de 30% anual con respecto al primer trimestre de 2007. Esta caída, muy superior a la esperada, puede obedecer al relevo de gobiernos locales. - Las menores cifras de crecimiento para industria, comercio y obras civiles en el primer trimestre habrían sido parcialmente compensadas por un mejor desempeño de los sectores agropecuario, minero y financiero. - Las cifras de la Encuesta de Hogares a abril sigue mostrando caídas en la tasa de desempleo en todos los dominios, aunque de menor magnitud en comparación con las de los últimos meses. Las tasas de desempleo trimestrales se ubicaron en 11,3% y 12,1% para el total nacional y las 13 principales áreas urbanas respectivamente, indicando caídas de 0.5 pp. y 0.3 pp. con respecto al mismo trimestre del año anterior. - El descenso en la tasa de desempleo se explica por el mayor dinamismo de la creación de empleo con respecto a la oferta laboral, pues el número de ocupados creció 4,5% anual a nivel nacional. c. Contexto externo Los indicadores de la actividad económica de los EEUU en abril y mayo mostraron un desempeño mejor que lo esperado por los analistas internacionales. Esto es especialmente cierto en industria y servicios. Las exportaciones, impulsadas por el debilitamiento del dólar, podrían explicar en parte este resultado. A pesar de que las políticas de estímulo monetario y fiscal adelantadas en EEUU han empezado a amortiguar la caída de la economía, el consumo de los hogares sigue afectado por las fuertes restricciones de crédito, el debilitamiento del mercado laboral, el efecto en el ingreso disponible del aumento de los precios energéticos y la caída del precio de la vivienda. La inflación en EEUU se ha mantenido alta y es probable que continúe aumentando con las recientes alzas en el precio internacional del petróleo. La mayor inflación ha aumentado las expectativas de los agentes que se incrementaron de manera importante en los dos últimos meses. Los analistas internacionales esperan un crecimiento en EEUU en lo que resta del año de 0,8% y un desempeño por debajo del promedio histórico para 2009 de 1,2%. Los aumentos en la inflación y en las expectativas de inflación se presentaron no solo en EEUU sino también en un buen número de economías tanto emergentes como algunas desarrolladas, siendo el caso más importante el de la zona del euro. Esta situación ha conducido a aumentos en tasas de interés o anuncios de posibles aumentos hacia el futuro por parte de varios bancos centrales, incluso a pesar de que las perspectivas de crecimiento han disminuido. d. Variables Financieras El crecimiento de los agregados monetarios más amplios continuó desacelerándose en mayo. El M3 creció a una tasa anual de 13,5%, por debajo de la del mes anterior (13,9% ). El comportamiento de los pasivos sujetos a encaje (PSE) fue similar. En los últimos dos meses se siguió observando una recomposición de los PSE a favor de los CDT. La cartera del sistema financiero viene creciendo en lo corrido del año a una tasa anual cercana al 20%. La cartera en pesos sigue siendo la que exhibe mayor dinamismo aunque presenta una tendencia hacia la desaceleración desde hace cerca de un año. La cartera de consumo sigue moderándose más rápidamente que la comercial y la hipotecaria. Para mayo su crecimiento anual fue de 22,4%. La cartera comercial y la hipotecaria han mantenido un crecimiento más estable en lo corrido del año de alrededor de 20,5% y 16,4% respectivamente. En el mes de mayo las tasas de interés nominales diminuyeron. El descenso fue más fuerte en las tasas de colocación, principalmente en las de consumo (92 pb), preferencial (72 pb) y ordinario (49 pb). Las tasas de captación incluida la DTF cayeron alrededor de 20 pb El descenso de las tasas fue un poco mayor en términos reales dado el aumento de la inflación sin alimentos en el último mes. La tasa activa promedio real se encuentra un poco por debajo de su media histórica (desde 1986). La tasa real de consumo se encuentra por debajo de esta media pero también por debajo del promedio observado desde 2001. La apreciación enero-mayo de este año en promedio con respecto al mismo período del año pasado se ubicó en 14%. Continuaron presentándose entradas importantes de inversión extranjera directa, en especial en los sectores de petróleo y minería. 2. Discusión y opciones de política En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas por la Junta; (ii) el significativo peso de los alimentos en el comportamiento de los precios en un contexto internacional de presiones al alza; (iii) la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de los precios de los regulados dados los mecanismos de indexación incorporados en la determinación de las tarifas y de la inflación de no transables; (iv) los costos de producción de las empresas que muestran incrementos importantes tanto por materias primas como en los componentes laborales; (v) la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de la economía mundial y de nuestros principales mercados de exportación y, en particular, de Venezuela; (vi) el efecto de la revaluación del peso sobre la inflación y las perspectivas de crecimiento de los sectores transables; (vii) el comportamiento de las expectativas de inflación, que continúan ubicándose por encima de las metas fijadas por la Junta y (viii) el fuerte impacto en el crecimiento del PIB del primer trimestre de la caída de la inversión en obras civiles y la incertidumbre por sus posibles efectos en el crecimiento futuro. La Junta consideró que los aumentos en las tasas de interés de intervención realizadas a partir de abril de 2006 y la modificación a los encajes a mediados de 2007 han tenido impacto sobre las tasas de interés activas y pasivas y han resultado eficaces frente a los objetivos buscados de moderar la dinámica del crédito y la demanda interna. El comportamiento de los indicadores de inflación básica y de las expectativas de inflación confirman que la expansión de la demanda hacía necesaria su moderación con el fin de reducir las presiones inflacionarias y evitar un crecimiento insostenible de la economía. Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política monetaria dado el rezago de las mismas; (ii) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para el 2008 y 2009; (iii) la pertinencia de adoptar medidas de política monetaria en un contexto de alza de precios internacionales de los alimentos y los combustibles; (iv) el comportamiento de la inflación de los bienes no transables sin alimentos ni regulados que sigue mostrando una tendencia al alza; (v) el déficit de la cuenta corriente que refleja un crecimiento de la demanda interna superior al de la producción nacional; (vi) los efectos de la apreciación de la tasa de cambio; (vii) la posibilidad de que cambios en el escenario internacional, en un contexto de déficit de cuenta corriente puedan llevar a ajustes futuros en la tasa de cambio: (viii) la incertidumbre generada por la alta volatilidad de los mercados internacionales y la incidencia que puede tener en la economía colombiana; (ix) la dificultad para evaluar la información disponible en una coyuntura en la cual hay un quiebre en el ciclo sostenido de crecimiento; (x) el balance de riesgo entre crecimiento e inflación en un contexto de expectativas de inflación al alza y de desaceleración de la economía y (xi) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria como estrategia para anclar las expectativas de inflación ante el riesgo de los efectos colaterales de los precios internacionales de los alimentos y de los combustibles. La Junta destacó que persisten presiones inflacionarias a nivel mundial y que dadas las proyecciones de inflación para los próximos meses, es importante tener la inflación y sus expectativas ancladas a las metas. A pesar de que las condiciones externas continúan siendo favorables al crecimiento económico, los indicadores disponibles en el último mes sugieren una importante moderación en el crecimiento de la demanda interna y el producto. Por lo anterior, consideró que con el nivel actual de las tasas de interés de intervención se está dando la moderación requerida en el crecimiento de la demanda y es prudente, por lo tanto, mantener la actual postura de la política monetaria. La Junta Directiva de manera unánime decidió mantener inalteradas las tasas de interés de intervención del Banco de la República en 9, 75% y estimó necesario seguir haciendo un cuidadoso seguimiento del efecto que pueda tener la situación económica internacional sobre el crecimiento, así como de las presiones inflacionarias de los precios internacionales de los alimentos y combustibles. Adicionalmente, acordó intensificar la acumulación de reservas internacionales en lo que resta de 2008 con el fin de hacer frente a un eventual deterioro del entorno internacional, aprovechando niveles de la tasa de cambio inferiores a los sostenibles. Para compensar los efectos monetarios de esta medida se decidió modificar a partir del 1 de septiembre el esquema de encaje, eliminando el encaje marginal y estableciendo un encaje promedio ordinario del 10% (11,5% para cuentas corrientes y de ahorro y 6% para CDT) y, si fuera necesario, abrir sus ventanillas de contracción. 3. Decisión de Política La Junta Directiva acordó de manera unánime mantener inalteradas las tasas de interés de intervención del Banco de la República en 9,75% Bogotá D.C., julio 04 de 2008
2008-07-01
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 25 de julio de 2008 El 25 de julio de 2008 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Fernando Tenjo, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Juan Mario Laserna y Leonardo Villar, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor en junio se situó en 7,18%, 79 pb por encima de la observada en mayo. La inflación acumulada en los seis primeros meses del año ascendió a 6%. Algunos de los indicadores de inflación básica aumentaron en junio y se mantienen por encima de la meta de inflación. La aceleración de la inflación durante junio se explica por el comportamiento del precio de los alimentos (incremento de 12% en junio frente a 9,7% de mayo), en especial, de la papa y el arroz. Otros alimentos, tanto perecederos como procesados, siguen mostrando ajustes anuales de precios muy altos y crecientes. La inflación anual sin alimentos fue 4,9%, levemente superior al 4,8% de mayo. La de los subgrupos de bienes transables y no transables sin alimentos ni regulados permanecieron estables frente a mayo. La inflación del grupo de regulados pasó de 8,3% en mayo a 8,8% en junio como resultado de aumentos en las tarifas de energía y gas y en los precios de los combustibles. Las expectativas de inflación a uno, cinco y diez años, medidas por las encuestas a analistas y los precios de los papeles de deuda interna, aumentaron y se situaron por encima de 5,5%. El incremento anual en el índice de crecimiento del IPP pasó de 5,4% en mayo a 8%. b. Crecimiento interno La información disponible relacionada con el comportamiento de la producción, la demanda agregada y el ingreso, muestra lo siguiente: - El DANE dio a conocer el crecimiento en la producción para 2007 a partir de la nueva base 2000. De acuerdo con esta información, en 2007 la economía colombiana (sin cultivos ilícitos) se expandió a un ritmo de 8,2% y no de 7,6% como se había señalado inicialmente. La mayor tasa de crecimiento se presentó en el primer trimestre (9,1%), pero el cuarto trimestre también presentó una variación anual muy alta (8,4%). Con la nueva base, 2007 es el año de mayor expansión de la actividad económica de las últimas cinco décadas. - Las cifras del DANE para el crecimiento del PIB en el primer trimestre señalan un registro de 4,1%. La desaceleración del crecimiento fue el resultado de diversos factores, tanto de oferta como de demanda, algunos de ellos de naturaleza puntual. El más importante corresponde al impacto directo de la caída de las obras civiles que, como se ha señalado en otras ocasiones, pudo obedecer al cambio de administraciones públicas locales y regionales. Un segundo factor fue el menor número de días hábiles en el trimestre debido a que la Semana Santa cayó en marzo. La huelga de Cerromatoso y la reducción de las exportaciones de automóviles a Venezuela también afectaron de manera importante el crecimiento del PIB. - La economía colombiana, al igual que la mundial, enfrenta desde hace varios trimestres un encarecimiento importante de los costos de producción y de transporte, como consecuencia de las fuertes alzas en los precios del petróleo y de algunas materias primas. Estas circunstancias afectan negativamente el producto y elevan los precios. - Por el lado de la demanda, los aumentos en los precios de los combustibles y de los alimentos afectan el ingreso real disponible de los hogares, frenando el consumo presente y el consumo futuro, esto último especialmente a través de una pérdida en la confianza de los consumidores. - Las cifras del DANE muestran que la formación bruta de capital fue el componente que registró mayor desaceleración, asociada más con la caída de la inversión en obras civiles realizadas por el sector público, que con un deterioro de la inversión privada. - El consumo de los hogares también se desacelero, pasando de crecer 5,6% en el cuarto trimestre de 2007 a 3,9% en el primero de 2008. De acuerdo con la nueva serie (base 2000), el consumo habría empezado a desacelerarse a partir del segundo trimestre de 2007, lo que contrasta con la información previa, la cual no mostraba una desaceleración importante durante el año pasado - Las exportaciones totales aumentaron 15% en pesos reales a comienzos de año. Esta expansión se dio pese a la apreciación del tipo de cambio y obedece a la fuerte demanda venezolana por productos manufactureros y alimentos y al aumento de la producción de productos mineros como el carbón. - La demanda final interna creció a un ritmo de 5,4% anual durante el primer trimestre, lo que implicó una desaceleración frente a lo observado en 2007, pero aún por encima del promedio histórico. Por su parte, el crecimiento anual de la demanda agregada a marzo fue 6,7%, frente a 11,1% del cuarto trimestre de 2007 y de 10,3% de todo el año pasado. - El comportamiento de indicadores de producción industrial, de ventas de comercio al por menor y de confianza de los consumidores a mayo sugieren nuevamente un crecimiento menor para el segundo trimestre, que el observado en 2007. - Todas estas circunstancias llevaron a una reducción por parte del equipo técnico del Banco en la proyección de crecimiento para 2008 a un rango entre 3,3% y 5,3%, frente al anterior que estaba entre 4,0% y 6,0%. - Los indicadores disponibles de salarios no muestran una tendencia homogénea por sectores. Mientras que a junio los salarios promedio de la construcción pesada se aceleraban, registrando reajustes elevados, los crecimientos anuales de los salarios de la industria y del comercio se mantuvieron estables alrededor de tasas de 5,3% y 7,5% respectivamente. c. Contexto externo En los Estados Unidos, durante los últimos meses el empleo continuó cayendo, una señal de que la actividad productiva se encuentra debilitada. Simultáneamente, el sector de vivienda no muestra indicios de recuperación y, por el contrario, su situación podría estarse deteriorando aún más. Como resultado del aumento en la morosidad del crédito hipotecario y de los embargos de vivienda, los precios de la vivienda continuaron reduciéndose en abril y podrían seguir haciéndolo en los próximos trimestres. Aunque durante el segundo trimestre se observó una mejoría en las condiciones financieras en los Estados Unidos, esta tendencia no se ha mantenido en las últimas semanas. La crisis hipotecaria siguió golpeando a las instituciones financieras, siendo afectadas en esta oportunidad las dos mayores entidades respaldadas por el gobierno que cubren el sector de créditos de vivienda. (Fannie Mae y Freddie Mac). A raíz de estos problemas han surgido nuevamente presiones de liquidez en el mercado interbancario de ese país como lo registra el incremento del diferencial entre el costo del endeudamiento del tesoro y de los bancos comerciales. Igualmente, se han producido descensos significativos en los índices accionarios, que ya no solo se circunscriben a las empresas financieras sino que también se extienden a las del sector real (excluyendo las de energía). El crecimiento también ha perdido impulso fuera de los Estados Unidos, siendo el caso más evidente Europa en donde ya se observa un deterioro importante en la confianza de consumidores y empresarios. En algunos países emergentes de la región como Venezuela, Ecuador, Chile y México también se observó una desaceleración del crecimiento para el primer trimestre. A pesar de ello, la tasa de crecimiento para la región en su conjunto sigue siendo relativamente alta. Para Venezuela, en particular, el crecimiento del primer trimestre fue 4,8%, reduciéndose frente al observado en 2007 (8,5%). La demanda interna perdió impulso por una fuerte desaceleración del consumo y la inversión privada. No obstante el menor dinamismo de la economía mundial, los precios internacionales de los productos básicos, en particular del petróleo, continuaron en niveles altos, lo que siguió impulsando la inflación a nivel mundial. En los Estados Unidos en particular, la inflación total al consumidor continuó aumentando y en junio se situó en 5%, por encima de las expectativas de los analistas. Se espera que los precios de los productos básicos se mantengan en niveles altos. Aunque podrían existir comportamientos especulativos, es probable que factores fundamentales relacionados con el balance de oferta y demanda expliquen el auge de estos precios. En esas condiciones, un retroceso significativo de los precios de las materias primas y del petróleo quizá sea posible solo si se presenta una desaceleración fuerte en la demanda mundial, más allá de la prevista por el mercado. Los aumentos en la inflación y en las expectativas de inflación se presentaron no solo en los Estados Unidos sino también en un buen número de economías emergentes y desarrolladas, siendo el caso más importante el de la zona del euro. Esta situación ha conducido a aumentos en tasas de interés o anuncios de posibles aumentos hacia el futuro, por parte de un buen número de bancos centrales, a pesar de que las perspectivas de crecimiento han disminuido. d. Variables financieras El crecimiento de los agregados monetarios más amplios se ha estabilizado en el último trimestre en niveles superiores al crecimiento del PIB nominal estimado para el presente año. A la segunda semana de julio, el M3 crecía a una tasa anual de 12,5% y los pasivos sujetos a encaje (PSE) aumentaron 13,3%. Se sigue observando una recomposición en los PSE a favor de los CDT. La cartera del sistema financiero viene creciendo en lo corrido del año a una tasa anual cercana al 18,9% frente a 20% del mes pasado. La cartera en pesos sigue siendo la que exhibe mayor dinamismo aunque presenta una tendencia hacia la desaceleración desde hace cerca de un año. La cartera bruta en moneda nacional continuó desacelerándose, aunque a un menor ritmo. A junio esta variable creció 18,9%, mientras que un mes atrás lo hacía a 20%. El mayor descenso en la tasa anual de crecimiento lo continúa registrando la cartera de consumo (incluye microcrédito) con variaciones a doce meses de 20,6%, seguida de la comercial 19,7% y la hipotecaria 16,1%. Diferentes medidas de tendencia de cartera sugieren que su crecimiento terminaría al finalizar el año en alrededor de 18%. Las tasas promedio nominales de interés de captación (9,7% - DTF) y colocación (17,1% - metodología BR) aumentaron levemente en junio. Estos niveles son similares a los registrados en abril pasado. En términos reales, la tasa promedio de crédito ha tenido un comportamiento decreciente desde octubre de 2007, interrumpido únicamente en abril del presente año, y su actual nivel se encuentra por debajo del promedio histórico calculado desde 1986. Este último comportamiento se explica por el descenso en la tasa real de créditos ordinarios y, en menor medida, por la menor tasa de interés real de consumo. La apreciación enero-junio de este año en promedio con respecto al mismo período del año pasado fue 13,5%. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas por la Junta; ii) el significativo peso de los alimentos en el comportamiento de los precios en un contexto internacional de presiones al alza; iii) la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de los precios de los regulados dados los mecanismos de indexación incorporados en la determinación de las tarifas y de la inflación de no transables; iv) los costos de producción de las empresas que muestran incrementos importantes tanto por materias primas como en los componentes laborales; (v) la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de la economía mundial y de nuestros principales mercados de exportación y, en particular, de Venezuela; vi) el efecto de la revaluación del peso sobre la inflación y las perspectivas de crecimiento de los sectores transables; vii) el comportamiento de las expectativas de inflación, que continúan ubicándose por encima de las metas fijadas por la Junta y viii) el fuerte impacto en el crecimiento del PIB del primer trimestre de la caída de la inversión en obras civiles y la incertidumbre por sus posibles efectos en el crecimiento futuro. Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: i) el efecto de las medidas de política monetaria dado el rezago de las mismas; ii) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para el 2008 y 2009; iii) las malas proyecciones de inflación a corto plazo; iv) la pertinencia de adoptar medidas de política monetaria en un contexto de alza de precios internacionales de los alimentos y los combustibles; v) el comportamiento de la inflación de los bienes no transables sin alimentos ni regulados que sigue mostrando una tendencia al alza; vi) las menores proyecciones de déficit de la cuenta corriente ; vii) los efectos de la apreciación de la tasa de cambio; viii) la posibilidad de que cambios en el escenario internacional, en un contexto de déficit de cuenta corriente, puedan llevar a ajustes futuros en la tasa de cambio: ix) la incertidumbre generada por la alta volatilidad de los mercados internacionales y la incidencia que puede tener en la economía colombiana; x) la dificultad para evaluar la información disponible en una coyuntura en la cual hay un quiebre en el ciclo sostenido de crecimiento; xi) el balance de riesgo entre crecimiento e inflación en un contexto de expectativas de inflación al alza y de desaceleración de la economía y xii) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación ante el riesgo de los efectos colaterales de los precios internacionales de los alimentos y de los combustibles. La mayoría de la Junta consideró que la presente coyuntura es particularmente delicada y amerita un análisis con una explícita perspectiva de mediano y largo plazo. Si bien la economía presenta claras señales de desaceleración, y el balance de riesgos indica que el crecimiento este año será menor que en los años recientes, los riesgos de una inflación que ponga en peligro el crecimiento en el mediano plazo son considerables. Contrario a lo observado en 2007, durante el primer semestre del 2008 la economía ha recibido plenamente, el impacto del choque de precios de alimentos, combustibles y metales que viene afectando a la economía mundial, sumado al producido por factores climáticos locales. De hecho, el diagnóstico de las razones que explican la desaceleración de la economía indica que los altos niveles de inflación, dada su relación con estos choques de precios relativos, están generando presiones de costos que afectan negativamente la oferta de varios sectores productivos, entre ellos la industria manufacturera. Adicionalmente, la inflación de alimentos y regulados viene erosionando el poder de compra de los consumidores por otros bienes de la canasta familiar. De aquí se desprende que la naturaleza de la inflación explica buena parte del menor crecimiento económico reciente. De otro lado, las expectativas de inflación a corto, mediano y largo plazo han venido subiendo, lo que constituye un serio obstáculo para los propósitos de la autoridad monetaria y la mayor efectividad de las decisiones de política adoptadas y por adoptar. Esto es particularmente peligroso en momentos en que las medidas de difusión de la inflación alcanzan valores cercanos al 70%, indicando que la mayor inflación de alimentos y bienes regulados ha alcanzado ya a contaminar parte de la canasta familiar. Y cuando los recientes incrementos en las tasas de interés de intervención han sido absorbidos por la mayor inflación que se ha registrado este año, así esta refleje en parte aumentos transitorios de precios. Es indispensable entonces evitar que la política monetaria valide los choques de precios relativos de carácter temporal y permita que éstos se conviertan en una inflación, mayor y de naturaleza permanente, con enormes costos económicos y sociales. De lo anterior se deduce que en el momento no existe realmente una disyuntiva entre inflación y crecimiento. El dilema de la autoridad monetaria es entre buscar una mayor dinámica de la economía en el muy corto plazo, probablemente de carácter temporal y que va a ser erosionada por una inflación desbordada y, por el otro lado, consolidar las condiciones de un crecimiento sostenido de la producción y el empleo, retomando una senda sensata de la inflación hacia las metas de largo plazo. Para esto es necesario incrementar las tasas de intervención del Banco. Algunos directores advirtieron que en esta ocasión un incremento adicional de la tasa de interés resultaría inconveniente e inoportuno habida cuenta de las siguientes razones: i) La reciente evolución de los indicadores económicos confirma que la economía se está desacelerando desde finales del año anterior de una manera mucho más rápida de lo que inicialmente habían previsto las autoridades económicas. El mismo equipo técnico del Banco se ha visto obligado a ir reduciendo los pronósticos sobre el crecimiento de la economía en 2008, primero de 5,2% anual al 4,7%, y, de acuerdo con su último ejercicio, del 4,7% al 4,3%. ii) Colombia está enfrentando, al igual que otros países, un choque de oferta sobre la inflación por el aumento de precios de los alimentos. En la región, Colombia registra un incremento de la inflación total y básica relativamente moderado. El cambio de postura de la política monetaria desde inicios de 2006 y las medidas adicionales de control de la inflación ha permitido que dicha postura en términos reales no se haya erosionado por cuenta del aumento en la tasa de inflación. iii) El gobierno anunció un recorte al presupuesto de 2008 de $1.5 billones, equivalente al 0,4% del PIB el cual tiene como uno de sus objetivos fundamentales aliviar la presión sobre la política monetaria derivada del incremento de la inflación. Esta medida ajusta las cuentas fiscales y tiene un efecto importante sobre el crecimiento de la demanda pública y el crecimiento económico en general y, por tanto, sobre el comportamiento de la inflación. iv) Cabe destacar que la política monetaria adoptada por la Junta desde abril de 2006 ha demostrado por sus resultados que ha ido en la dirección correcta, Además, no se debe olvidar que más de la mitad de los 15 incrementos de la tasa de interés de intervención del Banco tuvo lugar hace menos de año y medio, lo cual indica, debido al rezago natural existente entre estas medidas y su impacto sobre la demanda interna y el crédito, que aún existe un tramo muy considerable de efectos remanentes que aún no se han sentido, y v) Un aumento adicional de la tasa de interés ampliaría aún más el ya significativo diferencial existente entre las tasas internas y externas, y agudizaría por tanto la presión hacia la revaluación del peso y el consiguiente perjuicio sobre el empleo de los sectores transables de la economía. La Junta Directiva de manera mayoritaria decidió aumentar en 25 pb las tasas de interés de intervención del Banco de la República y estimó necesario seguir haciendo un cuidadoso seguimiento del efecto que pueda tener la situación económica internacional sobre el crecimiento, así como de las presiones inflacionarias de los precios internacionales de los alimentos y combustibles. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva acordó por mayoría aumentar en 25 pb las tasas de interés de intervención del Banco de la República que pasaran de 9,75% a 10%. Bogotá D. C., agosto 08 de 2008.
2008-08-01
1 Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 15 de agosto de 2008 El 15 de agosto de 2008 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Óscar Iván Zuluaga, el gerente general, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Fernando Tenjo, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Juan Mario Laserna y Leonardo Villar, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor en junio se situó en 7,52%, incrementándose por tercer mes consecutivo. La inflación acumulada en los cinco primeros meses del año asciende a 6,5%, 181 puntos base (pb) por encima del registro del año pasado. Algunos de los indicadores de inflación básica aumentaron en junio y se mantienen por encima de la meta de inflación. La aceleración de la inflación durante junio se explica por el comportamiento del precio de los alimentos, siendo el arroz y los aceites los que ejercieron la mayor presión alcista. La inflación de regulados pasó de 8.8% en junio a 9.5% en julio, principalmente por combustibles y transporte. La inflación de transables y no transables sin alimentos ni regulados se redujo en el último mes. En particular, el IPC de no transables sin alimentos ni regulados fue 5,1% en julio frente a 5,3% en junio. Las expectativas de inflación a mediano y largo plazo implícitas en el comportamiento del mercado de TES se redujeron con posterioridad a la sesión de la Junta del 25 de julio, lo cual constituye un punto de quiebre en la tendencia al alza que se venía presentando desde abril. Adicionalmente, entre el 25 de julio y el 12 de agosto se observó una reducción en las tasas de los TES de mediano (59 pb) y largo plazo (90 pb). A julio, la inflación al productor medida por el IPP total se aceleró nuevamente, pasando de 8% en junio a 9,6%, el más alto desde 2003. b. Crecimiento interno 2 La información disponible no sugiere cambios en la proyección de crecimiento del PIB del equipo técnico del Banco para este año, que está entre 3,3% y 5,3%, La información de la industria en los últimos dos meses indica que el sector continuó reduciendo su dinamismo y que esto ha sucedido a un ritmo mayor que el esperado. De acuerdo con la Encuesta de Opinión Conjunta de la ANDI, la producción industrial presenta un crecimiento anual año corrido a junio de 1,2%, menor que el registrado en abril y mayo (2,8% y 1,9% respectivamente). Los indicadores de confianza de los industriales y el nivel de existencias y de pedidos a junio corroboran estas tendencias. Los indicadores de comercio no son concluyentes acerca de las tendencias del sector. La información proveniente de los balances de las encuestas de opinión de Fenalco sugiere que las ventas han continuado perdiendo impulso, aunque a un ritmo menor que en el primer trimestre. Por otro lado, diferentes indicadores de Fedesarrollo como el de situación económica actual para el sector y el de expectativas de situación económica a seis meses no presentan un deterioro adicional para los últimos dos meses. Las últimas cifras en materia de exportaciones muestran que éstas mantienen un fuerte dinamismo al registrar un crecimiento en dólares de 42,4% y de 22,9% para las exportaciones no tradicionales. Las cifras sobre demanda de energía a junio y julio mostraron mejoría luego de registros bajos en meses anteriores. En julio, por ejemplo, el crecimiento anual fue de 2,8%, superior al observado en lo corrido del año a junio (2,1%). Por su parte, los recaudos de IVA interno mostraron tasas de crecimiento nominal durante todo el primer semestre superior a los dos dígitos, habiéndose acelerado en junio a 35,7%. c. Contexto externo En los últimos meses la inflación mundial se ha acelerado como consecuencia de los altos precios de los alimentos y bienes energéticos. A su vez, se ha presentado un menor ritmo de crecimiento económico. Este fenómeno ha sido más profundo en Japón, Inglaterra y la Zona Euro, economías que ya han empezado a sentir el efecto de los altos precios de las materias primas y de la desaceleración de los Estados Unidos. En el caso de los Estados Unidos, durante el segundo trimestre se observó un crecimiento anual de 1,9%. Sin embargo, esto no modifica las perspectivas desfavorables para éste y el próximo año. Los analistas han revisado a la baja las proyecciones de crecimiento de ese país para 2008 y 2009. En la Zona Euro los índices de confianza de los consumidores y el índice de producción manufacturera han disminuido fuertemente en los últimos meses, debilitando las proyecciones de crecimiento del PIB para 2008 y 2009. Estos indicadores han sido aún más desfavorables para el caso del Japón y Reino Unido. Lo mismo ha sucedido con algunos países emergentes de la región como Venezuela, Ecuador, Chile y México en donde se sigue observando una desaceleración del crecimiento. 3 En ese contexto, el dólar se ha fortalecido frente a un gran número de monedas. Esta situación, junto con las perspectivas de una demanda mundial más débil, ha conducido a una caída de los precios de las materias primas en las últimas semanas, en especial, del petróleo. d. Variables financieras El crecimiento anual de los principales agregados monetarios en julio se redujo en el último mes y medio. Entre junio y julio, por ejemplo, el crecimiento de M3 pasó de 14,5% a 11,5%. Las captaciones del sistema financiero siguen efectuándose, en buena parte, a través de CDT. La cartera del sistema financiero en pesos mantuvo, en julio, un crecimiento de 19,4%, muy similar al observado en el mes anterior. Cuando se examina el comportamiento de los últimos meses no se observa una tendencia hacia la desaceleración de este agregado. La moderación de la cartera de consumo (crece 18,4% en julio) ha continuado siendo compensada por una aceleración de la cartera ordinaria (20,4% en julio) y, en las últimas tres semanas, por un crecimiento mayor de la cartera hipotecaria (16,5% en julio) La mayoría de tasas de interés nominal disminuyeron en el último mes. La reducción más grande se presentó en las de tarjetas de crédito (40 pb). Cabe señalar que la tasa de usura también se redujo en este período cerca de 60 pb. La tasa de cambio mostró entre julio 14 y agosto 14 una devaluación de 4,2%. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: i) el ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas por la Junta, si bien algunos rubros de la canasta han empezado a mostrar aumentos menores de precios, como es el caso del IPC sin alimentos ni regulados; ii) la incertidumbre sobre el comportamiento de los precios internacionales de los alimentos y del petróleo, que en las últimas semanas han tenido una tendencia a la baja, y sobre sus efectos en la inflación total; iii) la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de los precios de los regulados dados los mecanismos de indexación incorporados en la determinación de las tarifas y de la inflación de no transables; iv) los costos de producción de las empresas, que muestran incrementos importantes; v) la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de la economía mundial y de nuestros principales mercados de exportación y, en particular, de Venezuela; vi) el efecto de la tasa de cambio sobre la inflación y las perspectivas de crecimiento de los sectores transables y vii) el comportamiento de las expectativas de inflación, que continúan ubicándose por encima de las metas fijadas por la Junta, aunque disminuyeron en el último mes. Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: i) el efecto de las medidas de política monetaria dado el rezago de las mismas; ii) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para 2008 y 2009; iii) la pertinencia de adoptar medidas de política monetaria en un contexto de 4 altos precios internacionales de los alimentos y los combustibles; iv) el comportamiento de la inflación de los bienes no transables sin alimentos ni regulados que en el mes de julio presentó una disminución frente al mes anterior; v) las menores proyecciones de déficit de la cuenta corriente ; vi) los efectos de la apreciación acumulada de la tasa de cambio y de la devaluación observada en las últimas semanas; vii) la posibilidad de que cambios en el escenario internacional, en un contexto de déficit de cuenta corriente, puedan llevar a ajustes futuros en la tasa de cambio; viii) la incertidumbre generada por la alta volatilidad de los mercados internacionales y la incidencia que puede tener en la economía colombiana; ix) la dificultad para evaluar la información disponible en una coyuntura en la cual hay un quiebre en el ciclo sostenido de crecimiento; x) el balance de riesgo entre crecimiento e inflación en un contexto de expectativas de inflación al alza y de desaceleración de la economía y xi) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación ante el riesgo de los efectos colaterales de los precios internacionales de los alimentos y los combustibles. En la reunión se destacó que la inflación continúa aumentando en muchos países y cómo varios bancos centrales han incrementado sus tasas de interés. Los precios internacionales del petróleo, alimentos y otros productos básicos han caído recientemente, pero sus niveles se mantienen históricamente altos. En Colombia, las expectativas de inflación a varios plazos, medidas a partir del mercado de títulos de deuda pública TES, disminuyeron significativamente desde la decisión de la Junta Directiva pasada de aumentar en 25 pb su tasa de intervención. Sobresale, además, la reciente disminución en las tasas de interés de largo plazo y el descenso en la inflación de no transables sin alimentos ni regulados en julio. La información disponible muestra que al igual que en otros países, en Colombia se ha moderado el crecimiento de la demanda interna y el producto, aunque se mantiene la proyección de crecimiento entre 3,3% y 5,3%. Condiciones financieras menos amplias y el efecto de los mayores precios de los alimentos y los combustibles sobre el ingreso disponible real han restringido la expansión de la demanda. A su vez, la oferta se ha visto afectada negativamente por los mayores costos de producción, los cuales reducen el crecimiento de la producción al tiempo que elevan los precios. Es de esperar que en 2008 la inflación anual se mantenga alta en los próximos meses por los elevados precios de los alimentos y los combustibles. Posteriormente, tanto la inflación total como los indicadores de inflación básica podrán disminuir de manera gradual, siempre y cuando las expectativas de inflación continúen a la baja y el crecimiento salarial sea moderado. El compromiso de la autoridad monetaria con las metas de inflación de largo plazo promueve las condiciones de un crecimiento sostenido de la producción y el empleo. Conforme a lo anterior, la Junta Directiva de manera unánime decidió mantener inalterada las tasas de interés de intervención del Banco de la República y estimó necesario seguir haciendo un cuidadoso seguimiento del efecto que pueda tener la situación económica internacional sobre el crecimiento, así como de las presiones inflacionarias de los precios internacionales de los alimentos y combustibles. 5 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva acordó por unanimidad dejar inalteradas las tasas de interés de intervención del Banco de la República.
2008-09-01
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 19 de Septiembre de 2008 El 19 de Septiembre de 2008 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Fernando Tenjo, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Juan Mario Laserna y Leonardo Villar, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor en agosto se situó en 7,87%, incrementándose por cuarto mes consecutivo. La inflación acumulada en los ocho primeros meses del año asciende a 6,74%. La inflación básica anual promedio alcanzó niveles de 5,1% y 5,8% para cinco y tres indicadores, respectivamente. Por primera vez en lo corrido del año estos indicadores disminuyeron levemente (seis puntos básicos en los dos casos). La aceleración de la inflación durante agosto se explica por el comportamiento del precio de los alimentos, siendo las hortalizas, las frutas, los tubérculos y la leche los que ejercieron la mayor presión alcista. Los precios de los regulados presentaron un crecimiento anual de 9,4%, similar a la del mes anterior. En este rubro los precios de los combustibles y los servicios públicos continuaron presionando el alza. La inflación de transables aumentó de 2,1% en julio a 2,3% en agosto. Los no transables sin alimentos ni regulados se redujeron por segundo mes 2 consecutivo, pasando de 5,1% en julio a 5% en agosto. En el último año, este rubro de la canasta acumula un descenso de 60 pb. Las diferentes medidas de las expectativas de inflación resultantes de los papeles de deuda pública (a 1, 5 y 10 años) se siguieron moderando, aunque aún se sitúan muy por encima de la meta de inflación de largo plazo. La inflación anual al productor, medida por el IPP total, se redujo de 9,6% en julio a 9% en agosto. b. Crecimiento interno La información disponible sugiere que la economía colombiana viene creciendo a un ritmo menor al esperado. Para el tercer trimestre, el comportamiento de la industria y el comercio (a julio), así como las encuestas de opinión empresarial, confirman la desaceleración del crecimiento, en especial en lo que hace a la industria textil, de confecciones y calzado y de vehículos y material de transporte. En estas ramas de la producción, la pérdida de dinamismo coincide con una reducción en el volumen de exportaciones a Venezuela y Estados Unidos. En el mercado de trabajo, el empleo asalariado está cayendo, mientras que los llamados cuenta propia continúan creciendo a buen ritmo. c. Contexto externo La crisis financiera internacional se agudizó en el último mes, en especial en los Estados Unidos. La declaratoria de quiebra de Lehman Brothers y los temores de que otras entidades financieras corrieran igual suerte aumentaron la incertidumbre de los mercados financieros. Estos acontecimientos llevaron a una caída de los índices bursátiles en todo el mundo y a la recomposición de los portafolios de inversión hacia títulos más seguros, como los bonos del tesoro de corto plazo de los Estados Unidos. Lo anterior aceleró el fortalecimiento del dólar frente a la mayoría de monedas. 3 Las perspectivas de crecimiento de los países avanzados se han deteriorado. Lo mismo ha sucedido en algunas economías latinoamericanas, aunque países como Perú, Brasil y Venezuela mantienen niveles altos de crecimiento. La información disponible sugiere que la inflación en los países desarrollados y en algunos emergentes como China, podría estar empezando a ceder, lo cual ha llevado a que los bancos centrales de un buen número de países interrumpan las alzas en sus tasas de interés que estaban llevando a cabo en los meses anteriores. En cuanto a las economías emergentes, la crisis financiera ha reducido el acceso y aumentado el costo de financiación. Adicionalmente, la caída en el precio internacional de la mayoría de los productos básicos podría contribuir al descenso de la inflación en la región, pero también afecta los términos de intercambio, en especial para países exportadores de petróleo, como lo son Colombia y sus principales socios comerciales en la región. d. Variables financieras El crecimiento anual de los principales agregados monetarios se aceleró en el último mes. Entre julio y agosto, por ejemplo, el crecimiento de M3 pasó de 11,5% a 16,3%. En agosto, la cartera del sistema financiero en pesos mantuvo un crecimiento de 19%, muy similar al observado en el mes anterior. El comportamiento de este agregado en los últimos meses no muestra una tendencia hacia la desaceleración. La moderación de la cartera de consumo (crecimiento de 16,8% en agosto) sigue siendo compensada por el dinamismo de la cartera comercial (21,4% en agosto). En los últimos tres meses la cartera hipotecaria ha crecido, en promedio, alrededor de 15,8%. Las tasas de interés pasivas se incrementaron, al igual que las de crédito ordinario e hipotecario, mientras que las de consumo presentaron un leve descenso. En términos reales, las tasas promedio de crédito calculadas por el Banco de la República y la DTF se ubicaron a niveles cercanos a sus promedios históricos calculados desde 1986. 4 La tasa de cambio mostró una devaluación de 15,4% desde la última reunión de la Junta Directiva, como resultado de la incertidumbre presentada en los mercados internacionales. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas por la Junta; (ii) algunos rubros de la canasta continúan mostrando aumentos menores de precios, como es el caso del IPC sin alimentos ni regulados; (iii) los precios internacionales de los alimentos, las materias primas y el petróleo siguen mostrando una tendencia a la baja, lo cual podría tener un efecto importante en la inflación total; (iv) los indicadores de inflación básica disminuyeron levemente por primera vez en lo corrido del año; (v) la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de los precios de los regulados dados los mecanismos de indexación incorporados en la determinación de las tarifas y de la inflación de no transables; (vi) los costos de producción de las empresas, que muestran incrementos importantes, si bien el ritmo de crecimiento del IPP se redujo en el último mes; (vii) la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de la economía mundial y de nuestros principales mercados de exportación y, en particular, de Venezuela; viii) el efecto de la tasa de cambio sobre la inflación y las perspectivas de crecimiento de los sectores transables y ix) el comportamiento de las expectativas de inflación de mediano y largo plazo, que continúan ubicándose por encima de las metas fijadas por la Junta, aunque disminuyeron en el último mes. Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: i) el efecto de las medidas de política monetaria dado el rezago de las mismas; ii) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para 2008 y 2009; iii) el comportamiento de la inflación de los bienes no transables sin alimentos ni regulados que en el mes de agosto cayó por segundo mes consecutivo; iv) las proyecciones de déficit de la cuenta corriente; v) los efectos de la volatilidad de la tasa de cambio y de la devaluación observada en las últimas semanas; vi) la posibilidad de que cambios en el escenario internacional, en un contexto de déficit de cuenta corriente, puedan llevar a ajustes futuros en la tasa de cambio; vii) la incertidumbre generada por la crisis financiera mundial en los mercados internacionales y la incidencia que puede tener en la economía colombiana; viii) la dificultad para evaluar la información disponible en una coyuntura en 5 la cual se ha dado un quiebre en el ciclo de crecimiento; ix) el balance de riesgo entre crecimiento e inflación en un contexto de expectativas de inflación al alza y de desaceleración de la economía y x) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación ante el riesgo de los efectos colaterales de los precios internacionales de los alimentos y los combustibles. Los miembros de la Junta resaltaron la bondad de las decisiones de política monetaria adoptadas a partir de abril de 2006, dirigidas a eliminar los excesos de demanda y crédito en la economía, a controlar las entradas de capital extranjero especulativo, a fortalecer la posición de reservas internacionales y a mitigar los efectos sobre las expectativas de inflación de los mayores precios internacionales de los productos básicos. Adicionalmente, destacaron que la información disponible apunta a un crecimiento de la actividad económica menor al esperado, tanto en Colombia como en la gran mayoría de países. En el último mes se agudizó la crisis financiera internacional afectando los precios de algunos activos en Colombia, en especial de la tasa de cambio del peso frente al dólar, la cual mostró una gran volatilidad en el pasado reciente. Todo hace prever que la incertidumbre continúe y se desconocen los efectos precisos sobre el crecimiento económico mundial y sobre la disponibilidad de recursos para las economías emergentes. Por último, señalaron que las proyecciones de inflación presentadas en el Informe de junio pasado, y que indican que esta variable probablemente mostrará una tendencia descendente a partir del cuarto trimestre del año, muy seguramente se consolidará con los nuevos datos sobre precios internacionales y de alimentos. Algunos directores subrayaron que, de lo anotado en el párrafo anterior, no se desprende que por ahora sea oportuno revisar la postura de política monetaria con bajas en las tasas de interés de intervención. Lo anterior por dos factores. Por un lado, el choque de precios relativos ha hecho de la inflación una de las principales causas de la desaceleración de la economía, dado su efecto sobre el ingreso disponible de los hogares y los costos de las empresas. Por el otro, si bien algunas presiones inflacionarias han disminuido recientemente, existen aún elementos que elevan el riesgo de mayores incrementos del nivel general de precios. Entre estos se destacan las expectativas de inflación, las cuales permanecen en niveles altos, la incertidumbre sobre el comportamiento de la tasa de cambio y sus efectos 6 sobre los precios y las perspectivas de incrementos salariales a decidirse en los próximos meses. En estas condiciones y con la información disponible, no puede esperarse que mayor inflación lleve a mayor crecimiento sino que, por el contrario, demore la reactivación del mismo. Adicionalmente, estos directores consideraron que el compromiso de la autoridad monetaria con las metas de inflación de largo plazo promueve las condiciones de un crecimiento sostenido de la producción y el empleo. Así mismo, que en la actual coyuntura, un cambio prematuro de la política monetaria podría llevar a un incremento en las expectativas de inflación, con lo cual se elevarían las tasas de interés de mediano y largo plazo, con efectos negativos cobre la actividad económica, y se reduciría la capacidad de la política monetaria de actuar de manera anti-cíclica en el futuro. Otra posición dentro de la Junta consideró que, frente a la caída de la inflación de bienes no transables sin alimentos ni regulados; la caída del promedio de los indicadores de inflación básica; la fuerte desaceleración del crecimiento, superior a la esperada desde el inicio del endurecimiento de la política monetaria; la reducción del empleo asalariado en más del 8% durante el trimestre mayo-julio; la declinación del clima de los negocios y del ánimo inversionista de los empresarios según la última encuesta del Banco; los efectos de la crisis financiera internacional en Colombia y en nuestros principales socios comerciales; y habida cuenta de que la política monetaria tiene que mirar hacia adelante en un horizonte de tiempo no inferior al rango entre un año y medio y dos, lo indicado es iniciar hoy su proceso de normalización con una reducción de la tasa de interés de intervención del Banco en 25 puntos básicos, de suerte que con posterioridad no nos veamos forzados a efectuar recortes abruptos de magnitud inusual. Finalmente, los miembros de la Junta señalaron que es necesario hacer un seguimiento a la situación financiera internacional y adoptar oportunamente las medidas de política monetaria que sean necesarias para enfrentar los efectos de la misma. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva acordó por mayoría dejar inalteradas las tasas de interés de intervención del Banco de la República. Bogotá D. C., octubre 03 de 2008.
2008-10-01
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 24 de Octubre de 2008 El 24 de Octubre de 2008 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Juan Mario Laserna, Fernando Tenjo y Leonardo Villar, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor en septiembre se situó en 7,57%, disminuyendo 30 pb frente al mes de agosto. La inflación acumulada en los nueve primeros meses del año asciende a 6,5%, mientras que en el último mes los distintos indicadores de inflación básica aumentaron. La reducción de la inflación durante septiembre se explica por el comportamiento del precio de los alimentos, siendo las hortalizas, las frutas, los tubérculos y la leche, los que ejercieron una menor presión alcista. Los precios de los regulados presentaron un crecimiento anual de 10,5% versus 9,4% del mes anterior. En este rubro, los precios de los combustibles y los servicios públicos, en especial gas y energía, continuaron presionando el alza. La inflación de transables se redujo de 2,3% en agosto a 2,2% en septiembre. La de no transables sin alimentos ni regulados se situó en 5,1% luego de haber caído en agosto a 5%. Este aumento se concentró en 2 arrendamientos y en servicios relacionados con la diversión y el entretenimiento. Las diferentes medidas de las expectativas de inflación resultantes de los papeles de deuda pública (a 1, 5 y 10 años) se siguieron moderando, aunque aún se encuentran por encima de la meta de inflación de largo plazo. La inflación anual al productor, medida por el IPP total, aumentó al pasar de 9% en agosto a 9,8% en septiembre. b. Crecimiento interno La información disponible muestra que: - El crecimiento anual del PIB para el primero y segundo trimestre fueron de 4,5% y 3,7%, respectivamente. Con esto, el crecimiento para la primera mitad del año fue de 4,1%. - El debilitamiento de la demanda interna fue el factor que más contribuyó a la disminución del crecimiento económico entre el primero y segundo trimestres. Se destaca la desaceleración y bajo crecimiento del consumo de los hogares (3,1% en el segundo trimestre). Por su parte, la inversión en obras civiles cayó nuevamente cerca de un 14% en el segundo trimestre. La inversión sin obras civiles fue el componente más dinámico de la demanda interna, creciendo a un alto ritmo en el segundo trimestre, cercano al 17% y muy similar al del trimestre anterior. - Para el tercer trimestre, los diferentes indicadores disponibles sugieren que la economía continuó desacelerándose como se puede apreciar en las cifras de crecimiento industrial para el mes de agosto, -8,8% respecto a igual mes de 2007 (-0,8% año corrido a agosto), en las ventas al pormenor que también cayeron en agosto (-0,7%) y en el sentimiento de los consumidores que volvió a decrecer en ese mes. - Durante el período enero-agosto, las importaciones totales del país, mostraron un crecimiento anual de 22,7% alcanzando un valor de US$ 25,785 m (CIF). Lo anterior evidencia una tendencia hacia la desaceleración, si se compara con igual período de 2007, cuando crecían a una tasa del 26,8% anual. 3 - El menor ritmo de crecimiento de las importaciones ha sido provocado por la reducción en las de bienes de consumo, cuya variación anual en los primeros 8 meses de 2008 fue de 11% frente al 31,7% del mismo periodo de 2007. - Entre enero y agosto las compras externas de materias primas y de bienes de capital registraron aumentos anuales de 29,1% y 21,5% respectivamente. El crecimiento en dólares de las materias primas, en particular aquellas destinadas a la actividad industrial (20%), podría estar reflejando los aumentos en los precios internacionales de productos básicos ya que la información muestra caídas en las cantidades importadas por este concepto. - En lo corrido del año a agosto, las exportaciones totales del país alcanzaron un valor en dólares de US$26,142 millones, con un crecimiento anual de 41%. Este crecimiento ha estado liderado por las ventas de productos tradicionales, que a esa fecha aumentaban 61% anual, favorecido principalmente por las altas cotizaciones internacionales, principalmente de petróleo y carbón. Por su parte, las exportaciones de productos no tradicionales aumentaron 22% anual entre enero y agosto del presente año. - Por países, en lo corrido del año a agosto las exportaciones a Estados Unidos representan el 39% de las exportaciones totales y el 21% de las no tradicionales. Las exportaciones a este destino han conservado su dinamismo, registrando un crecimiento del 54%, por efecto en gran medida de las ventas de petróleo y derivados. Se destaca que las ventas de no tradicionales a ese país han mantenido su tendencia a la recuperación, ya observada desde finales de 2007. En lo corrido del año a agosto crecen 9,8% anual sin oro no monetario. - Las ventas a Venezuela continúan desacelerándose y a agosto su tasa de crecimiento anual para el año corrido es de 31%, inferior a la registrada a igual fecha de 2007 (75%) como consecuencia principalmente de unas menores ventas en materiales de transporte. - Las ventas externas al resto del mundo, se han mantenido dinámicas (35% anual a agosto), explicado tanto por las ventas de productos tradicionales (50%) como de no tradicionales (18%). Utilizando la información más desagregada, se encuentra que, año corrido a julio, las 4 ventas de productos industriales hacia destinos diferentes a Estados Unidos, Venezuela y Ecuador, crecían a tasas del 18% anual. - En el mercado de trabajo, el empleo asalariado está cayendo, mientras que los llamados cuenta propia continúan creciendo. c. Contexto externo Los acontecimientos del último mes en el plano internacional han revelado una crisis financiera más profunda, generando problemas en el financiamiento para un amplio número de economías desarrolladas y emergentes, lo cual puede tener efectos duraderos sobre el desempeño económico global. Los planes de salvamento adoptados por las autoridades económicas de EEUU y Europa han tenido resultados parciales y no han logrado restablecer plenamente los canales crediticios ni disminuir los costos de endeudamiento. En ese entorno, las perspectivas de crecimiento de la economía mundial se han reducido fuertemente. Algunos indicadores ya muestran un deterioro importante, que lleva a pensar que economías como las de EEUU y Europa se encuentran en recesión. Los índices de confianza de los consumidores y el índice de producción manufacturera han disminuido fuertemente en los últimos meses. Igualmente, el crédito comercial en EEUU ha empezado a contraerse a un ritmo similar al observado en recesiones anteriores. Esta situación puede agravar los problemas del sistema financiero en muchos países y comprometer la estabilidad de las finanzas públicas en la medida en que sus gobiernos han anunciado avales para garantizar los depósitos en el sistema financiero. A la par con los menores pronósticos de crecimiento mundial, los precios de los productos básicos han presentado caídas pronunciadas en las últimas semanas. Con la caída observada y esperada en los precios de las materias primas y el menor crecimiento mundial, los riesgos de inflación en el mundo están cediendo de manera considerable. Por lo tanto, es muy probable que los Bancos Centrales de países desarrollados reduzcan sus tasas de intervención en los próximos trimestres. De hecho, a comienzos de octubre, los bancos 5 centrales de las economías desarrolladas actuaron coordinadamente y bajaron sus tasas de interés de referencia para afrontar los problemas ocasionados por la crisis. A pesar de lo anterior, en algunos países las tasas de interés de los mercados monetarios de corto plazo superaron ampliamente las tasas de intervención de los bancos centrales. A esta situación se unió un aumento de las tasas de interés de los créditos, en especial en los papeles comerciales en EEUU y Europa, lo cual está ejerciendo presiones sobre las tasas de interés relevantes para países emergentes. d. Variables financieras El crecimiento anual de los principales agregados monetarios disminuyó en el último mes, en particular el M3 pasó de 16,3% a 14,6%. En septiembre continúo la moderación de la dinámica de la cartera. En las últimas ocho semanas, la tasa de crecimiento anual en pesos disminuyó de 19,9% a 18,2%. La comercial, por su parte, se desaceleró en el último mes revirtiendo la tendencia que se observaba desde mayo. La de consumo para el 3 de octubre crecía a una tasa anual de 15,5% nominal frente a 16,4% de finales de agosto. Finalmente, la hipotecaria siguió creciendo alrededor del 16%. Las tasas de interés pasivas se mantuvieron en niveles cercanos a los observados en agosto. En términos reales, las tasas promedio de crédito calculadas por el Banco de la República y la DTF se ubicaron por debajo de los niveles promedio históricos calculados desde 1986. El peso se devalúo 8 % frente al dólar desde la última reunión de la Junta Directiva, como resultado de la incertidumbre presentada en los mercados internacionales. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas y la disminución presentada en el último mes se debió principalmente a la caída de los precios de los alimentos; (ii) los precios internacionales de los alimentos, las materias primas y el petróleo siguen 6 disminuyendo, lo cual podría tener un efecto importante en la inflación total dentro de unos pocos meses, dependiendo del comportamiento de la tasa de cambio; (iii) los precios de los regulados siguieron aumentando dados los mecanismos de indexación incorporados en la determinación de las tarifas y de la inflación de no transables; (iv) en contraste con meses anteriores, el IPC sin alimentos ni regulados dejó de caer en el mes de septiembre; (v) la actividad económica continúa debilitándose; (vi) los costos de producción de las empresas muestran incrementos importantes, como lo refleja el aumento en el ritmo de crecimiento del IPP; (vii) la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de la economía mundial y de nuestros principales mercados de exportación, en particular, de Venezuela y Ecuador; viii) el efecto de la tasa de cambio sobre la inflación y el crecimiento de los sectores transables y ix) el comportamiento de las expectativas de inflación de mediano y largo plazo, que continúan ubicándose por encima de las metas fijadas por la Junta, aunque disminuyeron en el último mes. Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: i) el efecto de las medidas de política monetaria dado el rezago de las mismas; ii) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para 2009; iii) el comportamiento de la inflación de los bienes no transables sin alimentos ni regulados; iv) las proyecciones de déficit de la cuenta corriente; v) los efectos de la volatilidad de la tasa de cambio y de la devaluación observada en las últimas semanas; vi) la incertidumbre generada por la crisis financiera mundial en los mercados internacionales y su incidencia en la economía colombiana; vii) la dificultad para evaluar la información disponible en una coyuntura en la cual se ha dado un quiebre en el ciclo de crecimiento; viii) el balance de riesgos entre crecimiento e inflación en un contexto en el que se mantienen expectativas de inflación por encima de las metas y de desaceleración de la economía y ix) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación. Los miembros de la Junta resaltaron la bondad y eficacia de las decisiones de política monetaria adoptadas a partir de abril de 2006, dirigidas a eliminar los excesos de demanda y crédito en la economía, a controlar las entradas de capital extranjero especulativo, fortalecer la posición de reservas internacionales y mitigar los efectos sobre las expectativas de inflación de los mayores precios internacionales de los productos básicos. 7 Destacaron que en el último mes se ha presentado un marcado deterioro del contexto internacional que acentuó la restricción del crédito a nivel mundial y el menor crecimiento de nuestros principales socios comerciales. Adicionalmente, la información disponible muestra que el sector productivo colombiano está sintiendo los efectos negativos del aumento en los costos y la caída de la demanda, lo cual se refleja en una menor dinámica del crecimiento del PIB. La crisis internacional ha conducido a que los precios de los activos continúen mostrando una gran volatilidad y a que se incrementen las primas de riesgo y las tasas de interés externas para todas las economías emergentes. Lo anterior se ha reflejado en Colombia en la devaluación del peso, en la caída del precio de las acciones y el aumento de las tasas de interés de los TES de largo plazo. Los precios de los alimentos, la devaluación del peso y, eventualmente, los mayores costos salariales, podrían mantener alta la inflación total en los próximos meses. Sin embargo, se espera que la debilidad de la demanda y la reciente reducción en los precios internacionales de los principales productos básicos se conviertan en menores presiones inflacionarias en el futuro. Algunos directores subrayaron que, de lo anotado en el párrafo anterior, no se desprende que por ahora sea oportuno revisar la postura de política monetaria con bajas en las tasas de interés de intervención. Si bien algunas presiones inflacionarias han disminuido, aún existe el riesgo de mayores incrementos del nivel general de precios. Igual sucede con las expectativas de inflación que todavía permanecen en niveles altos. En especial hay incertidumbre sobre el comportamiento de la tasa de cambio y sus efectos sobre los precios y las perspectivas de incrementos salariales a decidirse en los próximos meses. Adicionalmente, estos directores consideraron que el compromiso de la autoridad monetaria con las metas de inflación de largo plazo promueve las condiciones de un crecimiento sostenido de la producción y el empleo. Así mismo, que en la actual coyuntura, un cambio prematuro de la política monetaria podría llevar a un incremento en las expectativas de inflación, con lo cual se elevarían las tasas de interés de mediano y largo plazo, con efectos negativos sobre la actividad económica y el precio de los títulos de deuda pública. Actuar sin la cautela necesaria reduciría la capacidad de la política monetaria de actuar de manera anti-cíclica en el futuro. 8 Otra posición dentro de la Junta consideró que dado el deterioro de la economía mundial y la caída de los precios de los productos básicos, así como la consecuente reducción de las presiones inflacionarias, resulta oportuno un cambio de postura de la política monetaria. Indicaron además que, en el ámbito interno, la información muestra la continuación de la caída en el crecimiento del producto; la disminución de la producción del sector industrial en 8,8% en agosto y en lo que va corrido del año en 0,8%; la continuación de la elevación de sus existencias y la disminución del nivel de sus pedidos; el deterioro de los índices de confianza; el aumento de la capacidad ociosa; el marchitamiento de las expectativas de inversión y el deterioro del sentimiento de los consumidores; el debilitamiento del sector comercial; el aumento de la tasa nacional de desempleo y la caída del empleo asalariado en 6,9%, entre otras manifestaciones de la desaceleración de la economía. Situación que bien podría agudizarse dependiendo de cómo la crisis internacional afecte a nuestros principales socios comerciales. Habida cuenta de que la política monetaria tiene que mirar hacia adelante en un horizonte de tiempo no inferior al rango entre un año y medio y dos, lo indicado es iniciar un proceso de normalización con una reducción de la tasa de interés de intervención del Banco. Sobre el particular, dentro de este grupo hubo dos opiniones. La primera en el sentido de que dicha reducción debería ser de 25 puntos básicos, y la segunda en el sentido de que debería ser de 50 puntos básicos. Los miembros de la Junta discutieron un paquete de medidas tendientes a facilitar el buen funcionamiento de los mercados monetario y de crédito y la debida irrigación de la liquidez. Las medidas buscan evitar aumentos en las tasas de interés por encima de las de intervención como ha sucedido en otros países. Finalmente, señalaron que es necesario hacer un seguimiento a la situación financiera internacional y adoptar oportunamente las medidas de política monetaria que sean necesarias para enfrentar los efectos de la misma. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva acordó, por mayoría, dejar inalteradas las tasas de interés de intervención del Banco de la República. Igualmente acordaron de manera unánime: 9 - Reducir el encaje bancario de las cuentas corrientes y de ahorro, de 11,5% a 11% y de los depósitos a término a plazos menores a 18 meses de 6% a 4,5%. La medida tendrá efectos a partir de la bisemana de cálculo requerido de encaje que se inicia el 19 noviembre. - Ampliar de dos a tres semanas el cómputo del encaje para el cierre del año. - Otorgar liquidez transitoria con operaciones repo de plazos de 14 y 30 días. Comprar TES de manera definitiva por un monto de $ 500 mil millones, a los cuales se adicionará el equivalente en pesos de la venta de divisas realizadas con el sistema de opciones de volatilidad. - Cerrar temporalmente a partir del próximo lunes las subastas de contracción mediante depósitos remunerados no constitutivos de encaje y mantener abierta la ventanilla “lombarda” de contracción. Bogotá D. C., noviembre 07 de 2008.
2008-11-01
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 21 de Noviembre de 2008 El 21 de Noviembre de 2008 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Juan Mario Laserna, Fernando Tenjo y Leonardo Villar, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor en octubre se situó en 7,94%, aumentando 37 pb frente a septiembre, mes en el que había presentado un descenso. La inflación acumulada en los diez primeros meses del año asciende a 6,9% y en el último mes los distintos indicadores de inflación básica aumentaron. La inflación de no transables sin alimentos ni regulados, se situó en 5,7% frente a 5,1% en septiembre. Este aumento se concentró en arrendamientos y en servicios bancarios y relacionados con la diversión y el entretenimiento. Por su parte, la inflación de transables sin alimentos ni regulados, aumentó de 2,2% en septiembre a 2,3% en octubre. La inflación de alimentos en octubre aumentó 38 pb respecto al mes anterior, situándose en 13,2%. Las presiones al alza se originaron en los precios de la carne de res y sus sustitutos y en los de cereales (en particular 2 arroz y maíz), aceites y otros. De esta forma los aumentos en los precios de los alimentos explican un 67,97% de la aceleración de la inflación en el año corrido. Los precios de los bienes regulados presentaron en octubre un crecimiento anual de 10,8%, superior en 33 pb al del mes anterior, destacándose los precios del gas y los combustibles. Las diferentes medidas de las expectativas de inflación resultantes de los papeles de deuda pública (a 1, 5 y 10 años) se mantienen por encima de las metas fijadas por la Junta. La variación anual de los precios al productor (IPP) aumentó de 9,8% en septiembre a 11,8% en octubre. b. Crecimiento interno La información disponible muestra que: - La producción industrial de acuerdo con el DANE se contrajo en el mes de septiembre a una tasa anual de 3,3%, lo que arroja un resultado de -1,1% para el año corrido. Con esta nueva cifra, el crecimiento industrial del tercer trimestre es de -3,4%. Indicadores de confianza de los industriales y el nivel de existencias y de pedidos de Fedesarrollo a septiembre corroboran esta tendencia. - La ventas al por menor se contrajeron a una tasa anual de 2,5% en septiembre, con lo cual el crecimiento del trimestre habría sido nulo. La información proveniente de los balances de las encuestas de opinión de Fenalco a octubre confirman la pérdida de impulso de las ventas en los últimos seis meses. Algo similar sugieren indicadores de Fedesarrollo para el sector como el de situación económica actual y el de expectativas de situación económica a seis meses. - Las cifras sobre demanda de energía a septiembre y octubre mostraron mejoría luego de un registro bajo en agosto. En octubre por ejemplo, el crecimiento anual fue de 3,8%, superior al observado en lo corrido del año a septiembre (2,1%). No obstante, este incremento podría obedecer más a la alta demanda proveniente del sector minero que a una recuperación generalizada de la economía. 3 - Para el cuarto trimestre situaciones como la huelga de los corteros de caña y la parálisis de los ingenios se suman al desempeño débil que trae la demanda. Adicionalmente hay que tener en cuenta las posibles consecuencias que pueda tener la caída de las pirámides en el consumo de varias regiones. - En el mercado de trabajo, el empleo asalariado está cayendo, mientras que los llamados cuenta propia continúan creciendo. c. Contexto externo La crisis financiera ha tenido consecuencias sobre la actividad real. En Estados Unidos, el crecimiento del PIB durante el tercer trimestre entró en terreno negativo (según cifras preliminares) de -0,3% (t/t), mientras que en la zona del euro se completaron dos trimestres consecutivos de caídas (de -0,2% t/t cada una), con lo cual dicha economía podría encontrarse técnicamente en recesión. Algo similar sucede en el Reino Unido y Japón, donde también el crecimiento ha sido nulo o negativo en dos trimestres. En China, aunque la expansión sigue siendo importante, en los últimos meses se ha observado una importante desaceleración. Ante este escenario, las autoridades económicas en EEUU reformularon su plan de salvamento, haciendo énfasis en la recapitalización del sistema financiero y en la creación de mecanismos para impulsar el crédito. En Europa, aunque se espera un programa económico conjunto, varios países como Alemania y España han decidido actuar individualmente. Por su parte, China anunció un plan para fortalecer su economía el cual asciende a 17% del PIB de 2007 (4 billones de yuanes), que se ejecutaría en los próximos tres años. Las políticas adelantadas por las autoridades económicas en EEUU y Europa han permitido reducir los problemas de liquidez, aunque la situación aún no se ha normalizado plenamente. Al mismo tiempo, la aversión al riesgo se mantiene alta y los inversionistas siguen refugiándose en los activos más seguros. En las dos primeras semanas de noviembre, las primas de riesgo de las economías emergentes se redujeron desde los altos niveles alcanzados a mediados de octubre, pero se mantienen altas frente a lo observado hace dos o 4 tres meses. Estas primas podrían resultar afectadas por la situación particularmente vulnerable de varios países de Europa del Este. Los precios de los productos básicos han descendido rápidamente. En el caso del petróleo, la caída entre julio y la segunda semana de noviembre ha sido del 60%, dejando el precio alrededor de 55 dólares el barril, nivel que no se veía desde 2005. Para las economías desarrolladas y para muchos países importadores de materias primas, estos menores precios deberán traducirse en un descenso de su inflación en el corto plazo. Sin embargo, para los países exportadores de materias primas como los de la región, la situación inflacionaria es más compleja ya que la caída de los precios tenderá a ir acompañada de una depreciación de sus monedas. En Latinoamérica aún no se observa un descenso de la inflación, al tiempo que varias monedas de la región se han depreciado en los últimos meses. Dado lo anterior, el panorama de la política monetaria es bastante diverso. Por un lado, los bancos centrales de economías grandes (EEUU, Zona euro, China) han reducido sus tasas ante la percepción de menores riesgos inflacionarios y por la preocupación existente en cuanto al crecimiento. Por otro lado, algunas economías emergentes de Europa del Este han subido sus tasas, mientras que en Latinoamérica éstas se mantienen inalteradas. d. Variables financieras Los principales agregados monetarios mantuvieron tasas de expansión similares a las observadas en meses anteriores. El M3 y los pasivos sujetos a encaje crecieron a tasas anuales de 15,5% y 16,4%, respectivamente. En octubre continúo la moderación de la dinámica de la cartera. La cartera total en moneda legal del sistema financiero mostró un crecimiento anual de 18,5%, frente a 19,1% un mes atrás. La cartera comercial creció 20,6% frente a 19,8% en septiembre, mientras que la de consumo lo hizo a una tasa de 14,9%, menor que la del mes anterior (17,6%). La cartera hipotecaria también se desaceleró levemente. La mayoría de las tasas activas y pasivas disminuyeron en octubre, tanto en términos nominales como reales. En octubre, la tasa promedio de captación de CDT descendió 16 pb y se ubicó en 10,3%. La DTF y la tasa de ahorro 5 aumentaron levemente (10pb y 4pb respectivamente) situándose en 10% y 5%. Por su parte, la tasa activa promedio calculada por el Banco de la República disminuyó 26pb frente al mes pasado, situándose en 17,1%. Así mismo, las tasas de interés de crédito a hogares disminuyeron: la de consumo 29 pb y la de tarjeta 24 pb. Este movimiento estuvo acompañado de una caída de la tasa de usura por 73pb. Las tasas de cartera comercial tuvieron un comportamiento mixto, descendiendo para el crédito ordinario (51 pb), aumentando para el crédito de tesorería (24 pb) y manteniéndose en el caso de la tasa preferencial. El peso se mantuvo estable frente al dólar desde la última reunión de la Junta Directiva. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas; (ii) el aumento presentado en el último mes debido principalmente a los precios de los no transables; (iii) los precios internacionales de los alimentos, las materias primas y el petróleo siguen disminuyendo, lo cual podría tener un efecto importante en la inflación total dentro de unos pocos meses, dependiendo del comportamiento de la tasa de cambio; (iv) los precios de los regulados siguieron aumentando, dados los mecanismos de indexación incorporados en la determinación de las tarifas y de la inflación de no transables; (v) la actividad económica continúa debilitándose; (vi) los costos de producción de las empresas muestran incrementos importantes, como lo refleja el aumento en el ritmo de crecimiento del IPP; la mayor depreciación del peso observada podría manifestarse en presiones adicionales; (vii) la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de la economía mundial y de nuestros principales mercados de exportación, en particular, de Venezuela y Ecuador; viii) el efecto de la tasa de cambio sobre la inflación y el crecimiento de los sectores transables y ix) el comportamiento de las expectativas de inflación de mediano y largo plazo, que continúan ubicándose por encima de las metas fijadas por la Junta . Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: i) el efecto de las medidas de política monetaria dado el rezago de las mismas; ii) los elementos que afectan las 6 proyecciones de inflación para 2009 y 2010; iii) el comportamiento de la inflación de los bienes no transables sin alimentos ni regulados; iv) el efecto que puede tener el comportamiento de corto plazo de la inflación sobre la formación de precios y salarios en el 2009; v) las implicaciones sobre la inflación observada y sobre las expectativas de inflación que tiene la política actual de restricción a las importaciones de algunos productos agropecuarios, cuyo impacto sobre la canasta familiar es significativo; vi) las proyecciones de déficit de la cuenta corriente; vii) los efectos de la volatilidad de la tasa de cambio y de la devaluación observada en los últimos meses; viii) la incertidumbre generada por la crisis financiera mundial en los mercados internacionales y su incidencia en la economía colombiana; ix) la dificultad para evaluar la información disponible en una coyuntura en la cual se ha dado un quiebre en el ciclo de crecimiento; x) el balance de riesgos entre crecimiento e inflación en un contexto en el que se mantienen expectativas de inflación por encima de las metas y de desaceleración de la economía y xi) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación. Los miembros de la Junta resaltaron la bondad y eficacia de las decisiones de política monetaria adoptadas a partir de abril de 2006, dirigidas a eliminar los excesos de demanda y del crecimiento del crédito, controlar las entradas de capital extranjero especulativo, fortalecer la posición de reservas internacionales y mitigar los efectos sobre las expectativas de inflación de los mayores precios internacionales de los productos básicos. Destacaron que continúa el deterioro internacional lo que ha causado restricciones en el crédito a nivel mundial y un menor crecimiento de nuestros principales socios comerciales. Adicionalmente, la información disponible muestra que el sector productivo colombiano sigue sintiendo los efectos negativos del aumento en los costos y la caída de la demanda, lo cual se refleja en una menor dinámica del crecimiento del PIB. La crisis internacional también ha conducido a que los precios de los activos continúen mostrando una gran volatilidad y a que se incrementen las primas de riesgo y las tasas de interés externas para todas las economías emergentes. Los precios de los alimentos, la devaluación del peso y, eventualmente, los mayores costos salariales, podrían mantener alta la inflación total en los próximos meses. Sin embargo, se espera que la debilidad de la demanda y la 7 reciente reducción en los precios internacionales de los principales productos básicos se conviertan en menores presiones inflacionarias en el futuro. Algunos directores subrayaron que, de lo anotado en los párrafos anteriores, se desprende que aún no es oportuno revisar la postura de política monetaria con bajas en las tasas de interés de intervención. Si bien algunas presiones inflacionarias han disminuido, todavía no hay evidencia de que se encuentren suficientemente controladas. Igual sucede con las expectativas de inflación las cuales permanecen en niveles altos. En especial hay incertidumbre sobre el comportamiento de la tasa de cambio y sus efectos sobre los precios y las perspectivas de incrementos salariales a decidirse en los próximos meses. Los riesgos de la crisis internacional sobre el financiamiento de la balanza de pagos constituyen un argumento adicional para tener cautela en la adopción de la política monetaria. Adicionalmente, estos directores consideraron que el compromiso de la autoridad monetaria con las metas de inflación de largo plazo promueve las condiciones de un crecimiento sostenido de la producción y el empleo. Así mismo, que en la actual coyuntura, un cambio prematuro de la política monetaria podría llevar a un incremento en las expectativas de inflación, con lo cual se elevarían las tasas de interés de mediano y largo plazo, con efectos negativos sobre la actividad económica y el precio de los títulos de deuda pública. Actuar sin la cautela necesaria reduciría la capacidad de la política monetaria de operar de manera anti-cíclica en el futuro. Otra posición dentro de la Junta consideró que dado el deterioro de la economía mundial y la caída de los precios de los productos básicos, así como la consecuente reducción de las presiones inflacionarias y las expectativas, resulta oportuno un cambio de postura de la política monetaria. Indicaron además que, en el ámbito interno, la nueva información sigue mostrando una caída pronunciada en el crecimiento del producto. El comportamiento negativo de la industria y el comercio, el aumento de sus existencias y la disminución del nivel de sus pedidos, así como el deterioro de los índices de confianza, el marchitamiento de las expectativas de inversión y del sentimiento de los consumidores confirman lo anterior. Esta disminución en la dinámica productiva sigue reflejándose en el aumento de la tasa nacional de desempleo y la caída del empleo asalariado. Este grupo de directores señaló que la situación bien podría agudizarse dependiendo de cómo la crisis internacional afecte a nuestros principales socios comerciales. Habida cuenta de que la política monetaria tiene que mirar hacia adelante en un horizonte de 8 tiempo no inferior al rango entre uno y dos años, lo indicado es iniciar un proceso de reducción de la tasa de interés de intervención del Banco. Sobre el particular, dentro de este grupo hubo dos opiniones. La primera en el sentido de que dicha reducción debería ser de 25 puntos básicos, y la segunda en el sentido de que debería ser por lo menos de 50 puntos básicos. Por otra parte, la Junta, de manera unánime, fijó la meta de inflación para el año 2009 en el rango entre 4,5% y 5,5%, con 5% como meta puntual para efectos legales. Así mismo, fijó en 4% el punto medio del rango-meta de inflación para el año 2010 y sus miembros expresaron confianza en que la inflación estará en el rango-meta de largo plazo (3% +/- 1 punto porcentual) en el año 2011. La nueva senda de inflación toma en cuenta los efectos del fuerte aumento en los precios de los alimentos y los bienes y servicios regulados observados este año. Estos choques de precios, que se presentaron en todas la economías del mundo, produjeron un aumento sustancial de la inflación y llevaron al incumplimiento de las metas. Las decisiones de política monetaria están encaminadas a retomar una senda de inflación convergente hacia la meta de largo plazo. Para 2009 se espera que la reversión o moderación de estos choques de precios relativos, así como el efecto acumulado de los ajustes de política monetaria efectuados desde 2006, produzcan una reducción significativa de la inflación anual al consumidor. El anuncio de las nuevas metas muestra el compromiso de la Junta con el logro de la meta de largo plazo. Constituye además un criterio fundamental para guiar las decisiones sobre precios y salarios en la economía. Finalmente, reiteraron que su compromiso de suministrar la liquidez requerida por la economía para el final del año y la necesidad de continuar con el seguimiento a la situación financiera internacional con el fin de adoptar oportunamente las medidas de política monetaria que sean necesarias para enfrentar los efectos de la misma. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva acordó, por mayoría, dejar inalteradas las tasas de interés de intervención del Banco de la República. 9 Por otra parte, la Junta, de manera unánime, fijó la meta de inflación para el año 2009 en el rango entre 4,5% y 5,5%, con 5% como meta puntual para efectos legales y en 4% el punto medio del rango-meta de inflación para el año 2010. Bogotá D. C., diciembre 05 de 2008
2008-12-01
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 19 de Diciembre de 2008 El 19 de Diciembre de 2008 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Juan Mario Laserna, Fernando Tenjo y Leonardo Villar, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor en noviembre se situó en 7,73%, disminuyendo 21 pb frente a octubre. La inflación acumulada en los once primeros meses del año asciende a 7,2% y en el último mes los distintos indicadores de inflación básica cayeron. La inflación de no transables sin alimentos ni regulados se situó en 5,2% frente a 5,7% en octubre. Esta disminución se concentró en diversión, cultura y esparcimiento. Por su parte, la inflación de transables sin alimentos ni regulados se redujo de 2,3% en octubre a 2,2% en noviembre. La inflación de alimentos disminuyó ligeramente, de 13,2% en octubre a 13% del mes anterior. La reducción se concentró en alimentos perecederos. Los cereales (en particular arroz), aceites y otros presentaron alzas en sus precios. 2 Los precios de los bienes regulados registraron en noviembre un crecimiento anual de 10,9%, destacándose el aumento de los precios de la energía eléctrica y el transporte público urbano. Los diferentes indicadores de las expectativas de inflación medidas con los papeles de deuda pública (a 1, 5 y 10 años) disminuyeron, aunque se mantienen por encima de las metas fijadas por la Junta. La variación anual de los precios al productor (IPP) disminuyó de 11,8% en octubre a 10,9% en noviembre. b. Crecimiento interno La mayoría de indicadores disponibles al tercer trimestre muestran que el crecimiento económico continuó desacelerándose. Por el lado de la demanda, sobresale una menor expansión de las exportaciones en pesos reales y un consumo débil de los hogares. Esto último se refleja en el poco crecimiento que muestran las importaciones de bienes de consumo en pesos y la desaceleración de las ventas al por menor a septiembre. La caída del indicador de consumo de Fedesarrollo en octubre y noviembre también anticipa un bajo comportamiento del gasto de consumo durante el cuarto trimestre. Las importaciones de bienes intermedios y bienes de capital continúan mostrando un dinamismo importante, lo que permite prever un crecimiento todavía alto para la inversión en la segunda mitad del año. Este pronóstico es reforzado por la recuperación de 8,7% en las obras civiles para el tercer trimestre del año, según lo muestra el censo del DANE. Por el lado de la oferta, la industria y el comercio tuvieron un desempeño menor al esperado. La industria se contrajo 3,3% en el tercer trimestre, en parte como resultado de los choques negativos de oferta (aumento de costos, huelgas en el sector azucarero y paro camionero, entre otros) pero también debido al estancamiento de la demanda externa, especialmente de Venezuela. La contracción de la industria parecería estar acentuándose para el cuarto trimestre según la información más reciente del DANE, que reporta un crecimiento año corrido a octubre de -1,9% frente a -1,2% un mes atrás. Para el mes de octubre únicamente, las cifras del DANE muestran una contracción 3 de la producción industrial de 7,5% anual. Durante el cuarto trimestre se deterioraron marcadamente varios indicadores de expectativas de industriales y comerciantes. En el mercado de trabajo, el empleo asalariado está cayendo, mientras que los llamados cuenta propia continúan creciendo. c. Contexto externo Pese a las intervenciones de los gobiernos y bancos centrales de las economías desarrolladas, no se ha logrado reestablecer el canal crediticio a nivel internacional. La crisis financiera en EEUU continúa y sus efectos sobre la actividad real muestran una contracción en ese país. La situación es similar en otras economías desarrolladas, con resultados de crecimiento que han sido más débiles de lo esperado. En EEUU, la caída del precio de la vivienda y las acciones, junto con un endurecimiento de los mercados de crédito, están teniendo un gran impacto en el gasto de los consumidores. La producción industrial se está contrayendo a tasas de más de 5% y el sentimiento de los empresarios se ha desplomado. El deterioro económico se ha propagado al mercado laboral, en donde para noviembre las peticiones de seguro de desempleo aumentaron a 573 mil, dato que no se observaba desde 1983. Así, en lo corrido del año la destrucción de puestos de trabajo asciende a 1,9 millones, lo que ha elevado la tasa de desempleo en ese país a 6,7% en noviembre. En Europa la crisis también se siente con gran intensidad, como lo sugiere el deterioro de los indicadores de confianza de los consumidores y de sentimiento de los empresarios. En China la producción industrial se ha debilitado más rápidamente de lo previsto y las exportaciones han comenzado a contraerse. Ante esta situación las autoridades monetarias de las economías desarrolladas han continuado bajando sus tasas de referencia. En cuanto a las economías emergentes, las tasas de intervención se redujeron recientemente en varios países de Europa Oriental y en algunos países asiáticos. En los países latinoamericanos estas tasas se han mantenido inalteradas. En EEUU, la política monetaria actual ya se enmarca dentro de un contexto de tasas de interés de 0% y posiblemente otros bancos centrales 4 lleguen a esta situación en el corto plazo. Cada vez se hace más evidente la efectividad de los instrumentos de política monetaria. Varios gobiernos han empezado a realizar programas fiscales. Los efectos de la crisis internacional comienzan a sentirse en el crecimiento de algunos países de la región. Al mismo tiempo, la inflación ha continuado en ascenso, aunque se espera un alivio para el próximo año. La mayoría de las monedas de la región, incluido el peso colombiano, se han apreciado en las últimas dos semanas. d. Variables financieras Los principales agregados monetarios moderaron su crecimiento. El M3 y los pasivos sujetos a encaje crecieron a tasas anuales de 14,4% y 15,5%, respectivamente, por debajo de lo observado en octubre. En noviembre, el crédito del sistema financiero en moneda local aumentó 18,6% anual, similar a lo observado en octubre. La cartera de consumo creció 13,5% frente a un crecimiento de 15% el mes anterior. El crédito comercial se mantuvo estable y la cartera hipotecaria continuó expandiéndose a una tasa de 16%, tal y como lo viene haciendo desde hace varios meses. Durante la última quincena de noviembre las tasas de interés activas nominales aumentaron. El incremento fue importante en el caso de los créditos de tesorería, preferencial y ordinario: 131 pb, 83 pb y 60 pb respectivamente. Las tasas pasivas, por el contrario, se mantuvieron relativamente estables. Entre noviembre y comienzos de diciembre se presentaron reducciones importantes en las tasas de los TES, en particular las de los plazos más largos. Para los títulos con vencimiento en 2020 las caídas acumularon 224 pb en esas seis semanas. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas; (ii) los precios internacionales de los alimentos, las materias 5 primas y el petróleo siguen disminuyendo, lo cual podría tener un efecto importante en la inflación total dentro de unos meses, dependiendo del comportamiento de la tasa de cambio y de la política comercial, en especial de la importación de alimentos; (iii) la variación anual de los precios de los regulados sigue aumentando, dados los mecanismos de indexación incorporados en la determinación de las tarifas y de la inflación de no transables; (iv) la actividad económica continúa debilitándose; (v) los costos de producción de las empresas siguen siendo altos a pesar de la caída en el último mes del ritmo de crecimiento del IPP; (vi) la incertidumbre sobre el comportamiento futuro de la economía mundial y de nuestros principales mercados de exportación, en particular, de Venezuela y Ecuador; (vii) el efecto de la tasa de cambio sobre la inflación y el crecimiento de los sectores transables y (viii) el comportamiento de las expectativas de inflación de mediano y largo plazo, que descendieron desde la reunión anterior pero continúan ubicándose por encima de las metas fijadas por la Junta. Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política monetaria dado el rezago de las mismas; (ii) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para 2009 y 2010; (iii) el comportamiento de la inflación de los bienes no transables sin alimentos ni regulados que aunque disminuyó continúa siendo alto; (iv) el efecto que puede tener el comportamiento de corto plazo de la inflación sobre la formación de precios y salarios en el 2009; (v) las implicaciones sobre la inflación observada y sobre las expectativas de inflación que tiene la política actual de restricción a las importaciones de algunos productos agropecuarios, cuyo impacto sobre la canasta familiar es significativo; (vi) las proyecciones de déficit de la cuenta corriente; vii) la incertidumbre generada por la crisis financiera mundial en los mercados internacionales y su incidencia en la economía colombiana; ( viii) la estabilidad del mercado cambiario en las últimas semanas; (ix) la mejora presentada en las últimas semanas en el acceso de la región al financiamiento externo, la reducción de las tasas de interés de largo plazo y la dinámica de la cartera del sistema financiero; x) el balance de riesgos entre crecimiento e inflación en un contexto en el que se mantienen expectativas de inflación por encima de las metas y de desaceleración de la economía y xi) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación. Los miembros de la Junta resaltaron la bondad y eficacia de las decisiones de política monetaria adoptadas a partir de abril de 2006, dirigidas 6 a eliminar los excesos de demanda y del crecimiento del crédito, controlar las entradas de capital extranjero especulativo, fortalecer la posición de reservas internacionales y mitigar los efectos sobre las expectativas de inflación de los mayores precios internacionales de los productos básicos. Destacaron que la economía mundial está experimentando una fuerte caída que se refleja en una contracción de la mayoría de las economías desarrolladas. Los países emergentes, si bien todavía muestran crecimientos positivos, también se están desacelerando. En la medida que la economía mundial crezca por debajo de su tendencia de largo plazo y los precios internacionales de los productos básicos caigan, la inflación mundial se reducirá significativamente en 2009. Si la tasa de cambio se mantiene estable y se sigue una apropiada política comercial, en especial en la importación de alimentos, es de esperar que esta menor inflación internacional se transmita relativamente pronto a los precios al consumidor en Colombia. Resaltaron, igualmente, la caída de las tasas de interés de largo plazo y de las expectativas de inflación desde la última reunión de la junta directiva, así como la reducción de la tasa de cambio observada en las últimas semanas y una mejora en el acceso de los países emergentes a la financiación externa. La nueva información disponible confirma el debilitamiento de la actividad productiva, en especial de la industria y el comercio. La confianza de las familias y de las empresas se ha visto afectada por factores internos y externos, con lo cual es de esperar un bajo crecimiento de la demanda interna. A esta situación se unen las dificultades de los principales socios comerciales y la caída en los precios internacionales de nuestros principales productos de exportación. Un crecimiento más débil de la demanda y el producto reduce las presiones inflacionarias. Conforme a lo anterior, la Junta Directiva de manera unánime decidió reducir en 50 pb su tasa de intervención. Con esta reducción se consolida un cambio en la postura de la política monetaria que se venía preparando desde hace varios meses. La posibilidad de seguir relajando la política monetaria en el 2009 dependerá críticamente del comportamiento esperado de la inflación y de las expectativas frente a las metas. Finalmente, reiteraron su compromiso de suministrar la liquidez requerida por la economía para el final del año y la necesidad de continuar con el seguimiento a la situación financiera internacional con el fin de adoptar 7 oportunamente las medidas de política monetaria que sean necesarias para enfrentar los efectos de la misma. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva acordó, por unanimidad, reducir en 50 pb las tasas de interés de intervención del Banco de la República. De esta manera su tasa de intervención será de 9,50% Bogotá D. C., enero 05 de 2009.
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Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 30 de Enero de 2009 El 30 de Enero de 2009 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Juan Mario Laserna, Fernando Tenjo y Leonardo Villar, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor en diciembre se situó en 7,67%, disminuyendo 6 pb frente a la de noviembre. De esta manera, el registro de fin de año superó el techo de la meta de inflación fijada para el 2008. En diciembre se presentó un comportamiento mixto en los indicadores de inflación básica. La inflación de alimentos aumentó de 13% en noviembre a 13, 2% en diciembre. El repunte de los precios de los alimentos a finales de año es atribuible tanto a los alimentos procesados como a los perecederos. Los precios de los bienes regulados registraron en diciembre un crecimiento anual de 9,45% inferior a 10,9% de noviembre, destacándose una disminución en los precios de la gasolina y los servicios de gas a domicilio. La inflación de no transables sin alimentos ni regulados se situó en 5,25% frente a 5,2% en noviembre. Se destaca el rubro de arriendos (5,21%) que ha mostrado una tendencia al alza en los últimos cuatro meses. Por su 2 parte, la inflación de transables sin alimentos ni regulados pasó de 2,2% en noviembre a 2,4% en diciembre. Los diferentes indicadores de las expectativas de inflación medidas con los títulos de deuda pública (a 1, 5 y 10 años) disminuyeron, aunque se mantienen por encima de las metas fijadas por la Junta. La variación anual de los precios al productor (IPP) disminuyó de 10,9% en noviembre a 9% en diciembre. b. Crecimiento interno La actividad económica interna se desaceleró durante la segunda mitad de 2008 más rápidamente de lo previsto por el equipo técnico del Banco de la República. El DANE dio a conocer en diciembre las cifras de crecimiento para el tercer trimestre (3,1%) y revisó las cifras para el segundo trimestre de 3,7% a 3,8%. De esta forma, el crecimiento en los tres primeros trimestres del año ascendió a 3,8%, por debajo del resultado de 2007 (7,5%). Las cifras del tercer trimestre muestran que el consumo privado continuó debilitándose, especialmente en lo que corresponde al consumo de bienes durables. De igual manera, se observó una importante desaceleración de las exportaciones en pesos reales, en buena parte como consecuencia de caídas en los volúmenes exportados de café y carbón y de menores exportaciones no tradicionales (textiles, confecciones, plásticos y maquinaria) dirigidas especialmente a EEUU y Venezuela. El bajo desempeño de estos dos agregados explica el menor crecimiento en el tercer trimestre frente al segundo. La inversión, por el contrario, continuó mostrando un ritmo de expansión elevado, incluso mayor que el observado en la primera mitad del año, lo que obedeció a la recuperación de las obras civiles. La inversión en edificaciones también tuvo un crecimiento significativo y algo similar sucedió con el resto de inversión privada a juzgar por el alto crecimiento de las importaciones de bienes de capital hasta esa fecha (23,9% en dólares). Los indicadores disponibles para el cuarto trimestre también muestran resultados por debajo de lo previsto y con tendencia decreciente. El caso más evidente es el de la industria, que en octubre y en noviembre presentó fuertes contracciones frente a los mismos meses del año anterior (7,5% y 13,3% respectivamente). Los sectores que reportan mayores caídas son material de transporte y textiles y confecciones, lo cual está asociado con una menor 3 demanda tanto interna como externa (Venezuela). En comercio también se presentó una caída de las ventas al por menor en noviembre (2,9%) en buena medida concentrada en vehículos. Las encuestas de opinión realizadas a empresarios confirman el debilitamiento de la actividad económica observado en los indicadores sectoriales, y además muestran que los encuestados son muy pesimistas respecto al desempeño de sus sectores en el primer semestre de 2009. En el sector externo, a noviembre de 2008 las importaciones continuaron creciendo a buen ritmo, comportamiento que se explica principalmente por aquellas destinadas a bienes de capital. En el mismo mes, las compras externas de materias primas registraron por primera vez en el año un descenso significativo en su valor, mientras que las de consumo continuaron con su desaceleración, aunque todavía en niveles históricamente altos. A octubre de 2008 las exportaciones totales siguieron desacelerándose, pero aún siguen creciendo a tasas anuales elevadas. La caída en el precio del petróleo y de otros productos mineros registrada desde mediados de 2008, ha hecho que disminuya el valor de las ventas externas mensuales de estos bienes básicos. Por su parte, el valor mensual de las exportaciones no tradicionales que había mostrado menores niveles en agosto y septiembre, volvió a incrementarse en octubre, explicado principalmente por el aumento de las ventas externas a Venezuela y a Ecuador. Las últimas cifras de empleo mostraron destrucción de puestos de trabajo, situación que se atenuó gracias al aumento de los ocupados cuenta propia. No obstante, este último rubro se viene desacelerando desde mediados de 2008. Aunque se ha presentado un descenso en la oferta laboral, la caída en el número de ocupados ha sido mayor, situación que generó un aumento en la tasa de desempleo. c. Contexto externo En el último mes se confirmó la profundidad de la crisis financiera internacional y la recesión en EEUU y Europa. Las políticas fiscales y monetarias adoptadas por los países desarrollados en el cuarto trimestre no han evitado el contagio de la crisis hipotecaria y financiera hacia el consumo y la inversión no residencial. Igualmente el empleo está seriamente afectado. En Estados Unidos aumentó la tasa de desempleo a 7,2% en diciembre. 4 Por otra parte, la producción industrial en Europa y Asia se contrajo fuertemente en octubre y noviembre. Aunque algunos de estos países ya han anunciado paquetes de medidas para afrontar la crisis, al igual que en Estados Unidos la incertidumbre sobre la capacidad de los estímulos fiscales para ayudar a la economía es alta. Respecto a Latinoamérica, en el último mes y medio se han hecho más evidentes los signos de desaceleración económica. Indicadores como la producción industrial y las ventas al por menor muestran una contracción con datos a noviembre para países como Brasil, Chile, Colombia y México. Todo lo anterior se ha traducido en una contracción del comercio internacional. En EEUU, por ejemplo, el valor en dólares de las exportaciones se contrajo en 1,6% a/a en noviembre, en las principales economías de Europa el descenso osciló entre 15% y 20% a/a y en economías como Japón y China la contracción fue de 14% en noviembre y 2% a/a en diciembre, respectivamente. En cuanto a Latinoamérica, ya se sienten los efectos de la desaceleración mundial en sus exportaciones en la mayoría de países. De otro lado, la crisis en el sistema financiero en las economías desarrolladas no ha sido contenida. Los problemas del Bank of America y de los bancos ingleses en lo corrido de enero son una prueba de ello. Aunque las condiciones de liquidez han mejorado en los mercados interbancarios, el estrés financiero en estos mercados continúa. A nivel de las economías emergentes, hasta las primeras semanas de enero la situación era más alentadora. El deterioro de los indicadores de riesgo (EMBI y CDS) se detuvo, aunque en niveles más altos que los observados a comienzos de septiembre. Brasil, Colombia y México lograron colocar deuda en dólares a comienzos de enero a tasas no muy altas y con emisiones sobre demandas lo que sugiere que los mercados de capitales siguen abiertos para los emisores soberanos emergentes. Recientemente, en el mercado cambiario se han presentado algunos movimientos alcistas en la tasa de cambio relacionados con aumentos en la aversión al riesgo internacional y perspectivas de menores tasas de interés de referencia en la región. 5 El deterioro de la demanda mundial y la caída de precios de los productos básicos han venido acompañados de una rápida disminución de la inflación en economías desarrolladas y varios países emergentes. Como respuesta a lo anterior, los Bancos Centrales de algunas economías latinoamericanas y emergentes, incluida Colombia, han empezado a reducir sus tasas de referencia. Dado todo lo anterior, se han disminuido las estimaciones de crecimiento para nuestros socios comerciales. En 2009 se espera para EEUU un crecimiento entre -1,6% y -2,5%, para Europa entre -1,3% y -2,3% y para Venezuela entre 0% y 2,5%. A la par con los menores pronósticos de crecimiento mundial también se disminuyeron las proyecciones para los precios de los productos básicos, esperándose para el petróleo WTI niveles entre US$35 y US$50 el barril. d. Variables financieras Los principales agregados monetarios se aceleraron en los dos últimos meses. Con corte al 23 de enero, la base monetaria creció 15,3% anual y el M3 17,6%. La cartera bruta total en pesos continuó desacelerándose y a enero 23 su crecimiento anual se situó en 16,7%. El mejor dinamismo lo presenta la cartera comercial con aumentos anuales de 20,2%, mientras que la hipotecaria creció 15,2% y la de consumo 11,6%. Entre noviembre y lo corrido de enero, el sector real y el sector financiero emitieron títulos de deuda y bonos por montos importantes a tasas ligeramente superiores a las de los papeles de deuda publica. En los últimos dos meses, la TIB se ha ubicado en promedio 50 pb por debajo de la tasa de política, situación que se ha dado en un contexto en que el Banco de la República fue temporalmente deudor neto del sistema financiero. El 23 de enero, la tasa activa promedio ponderada (metodología BR) se situó en 15,9%, mostrando una reducción mensual de 93 pb. Las tasas de interés de crédito de consumo, vivienda y microcrédito no presentaron 6 descensos. Por su parte, la tasa de interés promedio de CDT se situó en 10,1%, cifra menor en 8 pb al observado un mes atrás. La DTF real promedio se ubicó en 4,8% y la tasa activa promedio (metodología BR) en 12%, cifras similares a sus promedios históricos calculados desde 1986, y superiores a las medias efectuados desde el 2001. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas; (ii) los precios internacionales de los alimentos, las materias primas y el petróleo siguen disminuyendo, lo cual podría tener un efecto importante en la inflación total dentro de unos meses, dependiendo del comportamiento de la tasa de cambio y de la política comercial, en especial de la importación de alimentos; (iii) la variación anual de los precios de los regulados ha empezado a disminuir a pesar de que la caída de los precios internacionales del petróleo no se ha transmitido a los precios internos de la gasolina; (iv) la actividad económica continúa debilitándose más rápidamente de lo previsto por el equipo técnico del Banco; (v) los costos de producción de las empresas siguen siendo altos a pesar de la caída en el último mes del ritmo de crecimiento del IPP; (vi) el bajo desempeño de la economía mundial y de nuestros principales mercados de exportación, en particular, de Estados Unidos, Venezuela y Ecuador; (vii) el efecto de la tasa de cambio sobre la inflación y el crecimiento de los sectores transables y (viii) el comportamiento de las expectativas de inflación de mediano y largo plazo, que continúan ubicándose por encima de las metas fijadas por la Junta. Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política monetaria dado el rezago de las mismas; (ii) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para 2009 y 2010; (iii) el efecto que puede tener el comportamiento de corto plazo de la inflación sobre la formación de precios y salarios en 2009; (iv) el hecho de que algunos indicadores de la inflación básica no disminuyan; (v) las proyecciones de déficit de la cuenta corriente; (vi) la incertidumbre generada por la crisis financiera mundial en los mercados internacionales y su incidencia en la economía colombiana; (vii) la depreciación del peso frente al dólar presentado en las últimas semanas; (viii) la mejora presentada en las últimas semanas en el acceso de la región al financiamiento externo, la reducción de las tasas de interés de largo plazo y la 7 dinámica de la cartera del sistema financiero; (ix) el balance de riesgos entre crecimiento e inflación en un contexto en el que se mantienen expectativas de inflación por encima de las metas y una desaceleración de la economía mayor a lo esperada; y (x) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación. Los miembros de la Junta destacaron que si bien la inflación al consumidor en diciembre de 2008 fue de 7,67%, situándose por encima de la meta fijada por la Junta Directiva para ese año, se espera que la debilidad de la demanda interna y externa y la caída en los precios internacionales de los productos básicos se traslade en menores presiones inflacionarias a lo largo de 2009. La Corporación confía en que la inflación al consumidor se sitúe este año dentro del rango meta (5% +/- medio punto porcentual) y continúe su senda descendente hacia su objetivo de mediano y largo plazo (3% +/- 1 punto porcentual). También resaltaron que el comportamiento de la economía mundial continúa siendo negativo a pesar de las políticas fuertemente expansivas de los países. La mayoría de las economías desarrolladas están mostrando una contracción en su crecimiento, mientras que las de los países emergentes se están desacelerando, en algunos casos de manera drástica. En la medida que la economía mundial crece por debajo de su tendencia de largo plazo y los precios internacionales de los productos básicos caen, la inflación mundial se reducirá significativamente en 2009. Si la tasa de cambio se mantiene estable y se sigue una apropiada política comercial, es de esperar que esta menor inflación internacional se transmita relativamente pronto a los precios al consumidor en Colombia. La nueva información disponible confirma el debilitamiento de la actividad productiva en Colombia. Los últimos datos de la industria y el comercio muestran una caída superior a la esperada por la Junta en la reunión anterior. A esta situación se unen los efectos que tiene en la actividad productiva el mayor deterioro de la actividad mundial vía menores exportaciones y términos de intercambio, deterioro en los niveles de confianza y flujos de capital más costosos. La Junta Directiva consideró que hay condiciones para continuar con la reducción de la tasa de intervención y consolidar el cambio en la postura de la política monetaria que se inició en el último trimestre del año anterior. La oportunidad y velocidad a la que se pueda seguir flexibilizando la política 8 monetaria en el 2009 dependerá del comportamiento esperado de la inflación y de las expectativas frente a las metas. El grupo mayoritario de la Junta Directiva estimó que en una coyuntura caracterizada por la inestabilidad de los mercados financieros internacionales y locales, la reducción de la tasa de interés de intervención del Banco debe hacerse de tal forma que le apunte a la credibilidad y la confianza de los agentes económicos. De esta manera se asegura que en el futuro la autoridad monetaria pueda seguir usando de manera contracíclica las herramientas de política a su cargo. La cautela se hace particularmente importante ante los siguientes hechos: la inflación básica ha sido renuente a bajar; la caída en los precios internos de alimentos y regulados ha sido menor a lo que sería consistente con el comportamiento de los mercados internacionales; y, la tasa de cambio ha tenido aumentos particularmente pronunciados en las dos últimas semanas, lo que podría generar menor confianza en el peso colombiano. En ese contexto una disminución de 50 pb se consideró adecuada. El grupo minoritario de la Junta Directiva estimó que las condiciones macroeconómicas permiten y aconsejan una reducción más ambiciosa de la tasa de interés de intervención sin poner en riesgo el cumplimiento de las metas de inflación fijadas por la Junta. Una reducción de 100 pb daría una señal contundente al sector productivo en circunstancias en donde hay expectativas de crecimiento e inflación a la baja. Finalmente, la Junta reiteró la necesidad de continuar con el seguimiento a la situación financiera internacional con el fin de adoptar oportunamente las medidas de política monetaria que sean necesarias para enfrentar los efectos de la misma. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva acordó, por mayoría, reducir en 50 pb las tasas de interés de intervención del Banco de la República. De esta manera su tasa de intervención será de 9%. Bogotá D. C., febrero 13 de 2009.
2009-02-01
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 27 de Febrero de 2009 El 27 de Febrero de 2009 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Juan Mario Laserna, Fernando Tenjo y Leonardo Villar, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor en enero se situó en 7,18%, disminuyendo 49 pb frente a la de diciembre y cayendo por tercer mes consecutivo. Durante el mes, la mayoría de indicadores de inflación básica se comportaron a la baja. La inflación de alimentos disminuyó de 13,2% en diciembre a 12, 2% en enero. La caída se presentó tanto en los alimentos perecederos como en algunos importados. Los precios de los bienes regulados registraron en enero un crecimiento anual de 8,5%, inferior a 9,45% de diciembre, destacándose una disminución en los servicios públicos (gas y acueducto), transporte y combustibles. La inflación de no transables sin alimentos ni regulados se redujo de 5,25% en diciembre a 5,1% en enero. Se destaca el rubro de arriendos que sigue mostrando una tendencia al alza en los últimos cinco meses debido en 2 buena medida a las cláusulas de indexación incorporadas en los contratos. Por su parte, la inflación de transables sin alimentos ni regulados no tuvo modificaciones y se situó en 2,4%. Los diferentes indicadores de las expectativas de inflación medidas con los títulos de deuda pública a 5 y 10 años disminuyeron por debajo del 5%, mientras que las obtenidas con los TES a un año se ubicaron en 5,6%, ligeramente por encima del techo del rango meta fijado por la Junta. La variación anual de los precios al productor (IPP) disminuyó por tercer mes consecutivo pasando de 9% en diciembre a 6,2% en enero. Su variación mensual fue de -1,5%, la caída mensual más grande de la historia de la serie desde 1970. b. Crecimiento interno La actividad económica interna continuó desacelerándose más rápidamente de lo previsto por el equipo técnico del Banco de la República. La información disponible muestra que para diciembre la industria tuvo un crecimiento anual del mes de -9,2%. El DANE, por su parte, reveló que las ventas totales al pormenor del comercio se contrajeron 3,4% en diciembre frente al mismo mes del año anterior. Los pocos indicadores disponibles para comienzos de año muestran que la economía sigue perdiendo dinamismo: - La demanda de energía del sector industrial a enero presentó un decrecimiento de 9,5%, mayor que el de un mes atrás. - El indicador de ventas al por menor de Fenalco, que descuenta la estacionalidad del comercio, mostró una caída en enero respecto a noviembre y diciembre. - La demanda total de energía, tanto para consumo como para producción, creció solamente un 1% en enero frente al mismo mes de 2008. - El indicador de Fedesarrollo sobre sentimiento de los consumidores presentó un pequeño repunte en enero, que de todas maneras lo deja por debajo de los niveles observados en los últimos 5 años. 3 En el sector externo, las exportaciones totales en dólares entre enero y noviembre de 2008 aumentaron a una tasa anual de 30,8%, con un crecimiento mayor para las tradicionales (48,3%) que para las no tradicionales (9,0%). En el caso de las exportaciones no tradicionales, las ventas a Venezuela crecieron 17,2% en el año corrido a noviembre, exhibiendo una menor dinámica respecto al año anterior. Las exportaciones a Ecuador aumentaron a una tasa anual de 15,4% mientras que las exportaciones a Estados Unidos presentaron una caída (0,6% enero - noviembre 2008 sin oro), con disminuciones en el valor de las exportaciones en los últimos tres meses. Finalmente, las exportaciones no tradicionales para el resto del mundo registraron un incremento del 5,3% para el mismo período. Las importaciones registraron entre enero y diciembre de 2008 un ritmo de crecimiento importante de 20,6%. Sin embargo, se evidencia una dinámica menor en las compras al exterior, liderada por los bienes de consumo, que pasó de tasas de crecimiento cercanas al 25,1% año corrido a febrero a 11,5% en el año completo. Al mismo tiempo, los bienes de capital, que crecieron 20,6% a diciembre, mostraron un menor ritmo de crecimiento frente a su máximo a febrero, cuando aumentaban 35,4%. Las últimas cifras de empleo mostraron importantes incrementos anuales en la tasa de desempleo al ubicarse la total nacional en 14,2%. Lo anterior, se debió principalmente a un aumento de la tasa de participación respecto al mismo mes del año anterior, mientras que la tasa de ocupación se mantuvo relativamente estable. c. Contexto externo En los últimos meses, la economía mundial se deterioró a una velocidad creciente y mayor que la esperada. La contracción de la demanda que se inició en EEUU y en algunas economías europeas se extendió a otras regiones del mundo. En febrero ya era clara una profunda contracción de la actividad económica en Japón, la Unión Europea, varios países de Europa Oriental y Asia, mientras que en otras grandes economías emergentes como China e India se evidenció una fuerte desaceleración. En América Latina el impacto también es evidente. Economías como la mexicana muestra una contracción del PIB del cuarto trimestre de 1,6% (en términos anuales). Otros países como Brasil y Chile también presentaban en 4 diciembre una caída de la producción industrial (en términos anuales) de 15,5% y 5,6%, respectivamente. El fuerte debilitamiento de la demanda ha hecho que el comercio mundial se contraiga aceleradamente. En diciembre, las exportaciones nominales en dólares de las economías desarrolladas de Europa cayeron a una tasa anual de entre 15% y 20%, mientras que en Estados Unidos lo hicieron en 9%. El deterioro de la confianza en los mercados financieros y la parálisis del crédito continúan afectando en mayor medida a los países desarrollados. En las economías emergentes, sobretodo en Colombia y otros países de América Latina como Perú, Chile y Brasil, los bancos permanecen solventes y el canal crediticio continúa abierto. En estos países, la trasmisión de la crisis internacional se está dando principalmente a través de un menor flujo de capitales y la caída del comercio exterior. Por otro lado, la debilidad de la demanda mundial y la caída de los precios de las materias primas han venido acompañadas de una caída importante de las presiones inflacionarias en economías desarrolladas y emergentes. Ante este escenario, los bancos centrales de América Latina optaron por bajar sus tasas de referencia para estimular la economía. Finalmente, en el último mes las tasas de cambio de la región se depreciaron. La tendencia fue más marcada en Colombia y México en donde la pérdida en valor de las monedas en las últimas cuatro semanas terminadas el 20 de febrero fue de 14,5% y de 7,8%, respectivamente. d. Variables financieras En las últimas dos semanas los agregados monetarios se desaceleraron, luego de presentar una tendencia ascendente en diciembre y enero. La cartera total del sistema financiero creció a un ritmo anual de 16,6% en enero frente a 18,4% registrado tres meses atrás (aislando el efecto del tipo de cambio en la de dólares). La caída en el nivel de la cartera se ha observado tanto en moneda extranjera (- US$ 615 m desde octubre) como en moneda legal (-$2,4 b en las últimas 8 semanas). 5 La cartera en moneda legal sigue presentando disminuciones en su ritmo de crecimiento. La comercial registró una tasa anual de crecimiento de 18% a comienzos de febrero, frente a cerca de 22% de finales de diciembre. Por su parte, la de consumo pasó de 11,6% en diciembre a 10% en la primera semana de febrero. Los indicadores de calidad de cartera se deterioraron especialmente en el crédito de consumo en donde el porcentaje de cartera vencida ascendía a diciembre en 7,2% frente a un mínimo de 4,2% a finales de 2004. El leasing y el microcrédito también presentaron un aumento en la cartera vencida. En las últimas semanas el sistema bancario destinó los fondos obtenidos por captaciones y por Repos a constituir inversiones en moneda nacional y extranjera y no a una ampliación de la cartera. Por su parte, el sector real se mantuvo activo en la colocación de títulos como mecanismo para financiar sus actividades. En enero la TIB y el Indicador Bancario de Referencia se nivelaron con la tasa de política, algo que no sucedía desde finales de octubre. Esto ocurrió en un contexto en el que el BR volvió a ser prestamista neto del sistema financiero. Respecto a las demás tasas de interés de mercado, las de CDT y DTF descendieron 131pb y 125pb, respectivamente desde el 19 de diciembre, cuando la Junta Directiva inició el actual proceso de reducción de la tasa de referencia. De igual manera, en estos últimos dos meses todas las tasas de interés para créditos comerciales han disminuido, lo mismo que la tasa para tarjetas de crédito, aunque en este último caso se encontraría relacionado con la reducción de la tasa de usura. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas, aunque se observa una tendencia a la baja; (ii) los precios internacionales de los alimentos, las materias primas y el petróleo siguen disminuyendo, lo cual podría tener un efecto importante en la inflación total, dependiendo del comportamiento de la tasa de cambio y de la política comercial; (iii) la variación anual de los precios de los regulados sigue disminuyendo, a pesar de que la caída de los precios internacionales del petróleo no se ha transmitido a los precios internos de la gasolina; (iv) la actividad económica continúa debilitándose más rápidamente de lo previsto 6 por el equipo técnico del Banco; (v) la cartera total del sistema financiero continuó perdiendo dinamismo en el último mes; (vi) el bajo desempeño de la economía mundial y de nuestros principales mercados de exportación, en particular, de Estados Unidos, Venezuela y Ecuador; (vi) el efecto de la tasa de cambio sobre la inflación y el crecimiento de los sectores transables y (vii) las expectativas de inflación de mediano y largo plazo se ubican dentro del rango de las metas fijadas por la Junta. Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política monetaria dado el rezago de las mismas; (ii) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para 2009 y 2010; (iii) el efecto que puede tener el comportamiento de corto plazo de la inflación sobre la formación de precios y salarios en 2009; (iv) las proyecciones de déficit de la cuenta corriente; (v) la incertidumbre generada por la crisis financiera mundial en los mercados internacionales y su incidencia en la economía colombiana; (vi) la depreciación del peso frente al dólar presentada en las últimas semanas; (vii) el acceso de la región al financiamiento externo, la reducción de las tasas de interés de largo plazo y la baja dinámica de la cartera del sistema financiero; (viii) el balance de riesgos entre crecimiento e inflación en un contexto de desaceleración de la economía mayor a lo esperada; y ix) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación. La Junta destacó la caída de la inflación al consumidor por tercer mes consecutivo. Este descenso, mayor al esperado, se dio en la gran mayoría de los componentes de la canasta familiar y, en especial, del grupo de alimentos. En el mes también cayeron los indicadores de inflación básica y las expectativas de inflación se ubicaron dentro del rango meta fijado por la Junta (5%+/- 1/2 punto porcentual). La disminución de la inflación y las expectativas de inflación ratifican que la debilidad de la demanda interna y externa y la caída en los precios internacionales de los productos básicos se están reflejando en menores presiones inflacionarias. La Junta tiene ahora una mayor confianza en que la inflación anual continuará cayendo en los meses siguientes y terminará dentro del rango meta a final del año. La información disponible muestra que la economía mundial continúa mostrando un panorama negativo a pesar de las políticas fuertemente 7 expansivas de los países. Igualmente, confirma el debilitamiento de la actividad productiva en Colombia. Los últimos datos de la industria y el comercio siguen mostrando caídas importantes, a lo que se unen los efectos que tiene en la actividad productiva el mayor deterioro de la actividad mundial vía menores exportaciones y términos de intercambio, deterioro en los niveles de confianza y flujos de capital más costosos. La Junta Directiva consideró que la actual coyuntura caracterizada por una caída en la inflación y en sus expectativas, así como del debilitamiento de la economía, permite reducir la tasa de intervención a un ritmo más rápido del empleado en los dos meses anteriores sin que se afecte la credibilidad de la política monetaria. Destacó que la pérdida de dinamismo de la actividad productiva, que se refleja en un aumento del desempleo, es mayor a la esperada y que otros bancos centrales de la región están también adoptando políticas monetarias expansivas para apoyar la demanda y el crecimiento futuro de sus economías. Algunos directores, aunque estuvieron de acuerdo con la disminución de la tasa de interés de intervención, alertaron sobre los riesgos asociados con un movimiento de la tasa de política a un ritmo más rápido del adoptado por la Corporación en las reuniones pasadas. Consideraron que dada la inestabilidad de los mercados financieros internacionales y locales, la reducción de la tasa de interés de intervención del Banco debe hacerse de tal forma que apunte a la credibilidad y la confianza de los agentes económicos. Una disminución en las tasas que no sea creíble podría tener efectos en el mercado cambiario, en el mercado de deuda pública y en las expectativas futuras de la inflación, todo lo cual podría dificultar que la Junta continúe con una política monetaria anticíclica. No obstante lo anterior, los miembros de la Junta decidieron por consenso reducir la tasa de intervención a un ritmo más rápido del empleado en reuniones pasadas, sin que ello signifique reducciones similares en el futuro. De esta manera, la política monetaria y la devaluación del peso, en la medida que no comprometa el logro de las metas de inflación, servirán para apoyar la demanda y el crecimiento futuro de la economía. Finalmente, la Junta reiteró la necesidad de continuar con el seguimiento a la situación financiera internacional con el fin de adoptar oportunamente las medidas de política monetaria que sean necesarias para enfrentar los efectos de la misma. 8 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva acordó reducir en 100 pb las tasas de interés de intervención del Banco de la República. De esta manera su tasa de intervención será de 8%. Bogotá D. C., marzo 13 de 2009.
2009-03-01
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 20 de Marzo de 2009 El 20 de Marzo de 2009 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo y Juan Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor en febrero se situó en 6,47%, disminuyendo 71 pb frente a la de enero y cayendo por cuarto mes consecutivo. La mayoría de indicadores de inflación básica aumentaron después de presentar una tendencia decreciente durante cuatro meses. La inflación anual de alimentos disminuyó de 12,2% en enero a 9,5% en febrero. La caída se presentó tanto en los alimentos perecederos como en algunos importados. Los precios de los bienes regulados registraron en febrero un crecimiento anual de 9,0% superior al 8,5% de enero. Las mayores alzas provinieron de los servicios de acueducto y gas y del transporte urbano. La inflación de no transables sin alimentos ni regulados aumentó de 5,1% en enero a 5,4% en febrero. Se destacan el rubro de arriendos que sigue 2 mostrando una tendencia al alza y el de servicios de educación que también aumentó. Por su parte, la inflación de transables sin alimentos ni regulados disminuyó pasando de 2,4% en enero a 2,3% en febrero. Los diferentes indicadores de las expectativas de inflación medidas con los títulos de deuda pública a 1, 5 y 10 años se ubicaron entre 4% y 5% en la primera semana de marzo. Este es el resultado más bajo desde mediados de 2006. La variación anual de los precios al productor (IPP) dejó de caer y se mantuvo en un registro igual al de enero de 6,2%. b. Crecimiento interno La información disponible muestra que la actividad económica interna continuó desacelerándose más rápidamente de lo previsto por el equipo técnico del Banco de la República: - Los datos del DANE para producción industrial muestran una caída anual en el mes de enero de 10,7%. - La demanda de energía disminuyó en febrero 3,2% (una vez se ajusta por días hábiles el dato es +0,8%). - La producción de cemento cayó en el primer bimestre alrededor del 20%, generando dudas sobre la recuperación de las obras civiles. - Los pedidos y las existencias de la industria según Fedesarrollo continuaron deteriorándose en el primer mes del año. - El indicador de sentimiento de los consumidores cayó nuevamente en febrero, alcanzando un valor negativo por primera vez desde 2003. - Las ventas al por menor en enero reportadas por el DANE cayeron a una tasa anual de 4,5%, continuando con la tendencia decreciente que se inició a mediados de 2008. 3 En cuanto a la demanda externa, las exportaciones totales en dólares aumentaron 25,5% anual en 2008, con un crecimiento de las tradicionales de 40,8% y de las no tradicionales de 8,3% anual. En las primeras, sobresalen las de petróleo y derivados, carbón y café, con tasas anuales de 67%, 44% y 9,9%, respectivamente. Las exportaciones a Venezuela mostraron un crecimiento anual de 16,9%, con una dinámica sobresaliente en las ventas de carne (94,3%), hilados y tejidos (93,8%) y metales comunes (81,1%). Por el contrario, los sectores de confecciones (-11,5%) y material de transporte (- 68,4%) presentaron una importante caída. Las ventas totales a Estados Unidos registraron una tasa anual de 34,8%. Las exportaciones no tradicionales a ese país (excluyendo oro), crecieron 1,1% anual. Las ventas de maquinaria y equipo, metales comunes, alimentos, banano, textiles y confecciones se recuperaron respecto a las caídas observadas durante el 2007. En el cuarto trimestre, las exportaciones en dólares cayeron cerca de 6% frente a igual período de 2008. La caída fue más fuerte en el caso de las exportaciones tradicionales (9%) debido a la reducción de los precios internacionales de las materias primas exportadas por el país. En las no tradicionales también se observó una reducción importante del orden del 6% anual. Para el caso de las ventas no tradicionales a EEUU, la caída fue de 13,5%, mientras que la de las exportaciones de este tipo de bienes a Venezuela fue de 3%. En enero de 2009 las importaciones totales disminuyeron a un ritmo anual de 5,2%. Este agregado se está desacelerando desde septiembre de 2008 cuando su variación anual fue de 39%. El análisis por tipo de bienes (clasificación CUODE) muestra que dicha desaceleración ha sido liderada tanto por el grupo de bienes de consumo, que pasó de tasas de crecimiento anual mensual cercanas al 25,0% en abril de 2008 a -9,1% en enero de 2009, como por los bienes intermedios que registraron una tasa máxima mensual de 47,0% anual en septiembre de 2008 y una caída del 25,7% anual en enero de este año. Por su parte, las compras de bienes de capital registraron un aumento de 22,0% anual. Los promedios trimestrales a enero muestran aumentos anuales de la tasa de desempleo para todos los dominios de la encuesta, aunque de mayor magnitud en el caso de las 13 ciudades principales. Las tasas de desempleo para dicho periodo se ubicaron en 11,9% y 12,1% para el total nacional y las 13 ciudades principales respectivamente, indicando incrementos de 1,1 y 1,6 pp con respecto al mismo trimestre del año anterior. 4 c. Contexto externo Las intervenciones realizadas por las autoridades económicas en EEUU y Europa han permitido que las condiciones de liquidez se normalicen y retornen a los niveles observados antes de septiembre. Sin embargo, el canal crediticio en las economías desarrolladas sigue sin restablecerse. Las restricciones al otorgamiento de préstamos se mantienen elevadas lo que ha llevado a una fuerte desaceleración del crédito comercial y de consumo. La crisis financiera ha golpeado de manera fuerte al sector real. La segunda revisión del PIB de Estados Unidos para el cuarto trimestre de 2008 muestra una contracción de 6,2% trimestre anualizado, la más alta desde comienzos de los ochenta. El consumo y la inversión en ese país presentaron una caída de 4,3% y 20,8%, respectivamente, mientras que las exportaciones que se habían mantenido en terreno positivo, se contrajeron en 23,6% al finalizar el año. Los indicadores de confianza y sentimiento del consumidor siguieron deteriorándose en enero y febrero Por otro lado, la producción industrial en Estados Unidos se contrajo a una tasa anual de 11% en febrero, la caída más profunda desde la década de los setenta. En otras economías desarrolladas la situación es similar. En cuanto a las economías emergentes incluyendo Latinoamérica, la actividad económica se ha desacelerado fuertemente. En la región, el crecimiento de Brasil durante el cuarto trimestre fue 1,3% frente a 6,8% en el trimestre inmediatamente anterior. En México se presentó una contracción de 1,6% a diciembre. Para Chile no se cuenta con información del PIB del último trimestre pero indicadores como la producción industrial muestran una fuerte contracción de la actividad durante el último trimestre y comienzos de 2009. La disminución de las presiones inflacionarias y los bajos pronósticos de crecimiento siguen permitiendo que los bancos centrales reduzcan sus tasas de referencia. Las monedas de la región, que se habían depreciado en los últimos 6 meses, han revertido esta tendencia en la segunda semana de marzo. Este es el caso de Colombia y México en donde se presentaron apreciaciones de alrededor de 4%, mientras que en Brasil y Chile la apreciación ha sido de alrededor de 2,5%. A pesar de este repunte reciente de las monedas locales, 5 frente a diciembre de 2008 los tipos de cambio de Colombia, México y Perú muestran una depreciación. d. Variables financieras En las últimas semanas de febrero, los agregados monetarios retomaron una tendencia ascendente. A finales del mes, el crecimiento anual de M3 fue de 19,4% y el del efectivo fue de 11,2%. Las captaciones del sistema financiero de CDT y de bonos continuaron aumentando. Los CDT crecen desde hace varios meses a tasas cercanas al 45% anual. En lo corrido del año, los fondos captados por el sistema bancario se han destinado principalmente a inversiones en moneda nacional y extranjera. En febrero, el crédito se siguió desacelerando, tanto en la cartera en pesos como en la de moneda extranjera. En las últimas 8 semanas el saldo de la cartera en moneda nacional no ha crecido (crecimiento anual de 15,8% a finales de febrero frente a 18,5% en diciembre). Por tipo de crédito, la cartera comercial con leasing (en pesos) creció a una tasa anual de 17,3% a finales de febrero, lo que muestra una fuerte desaceleración. El crecimiento mensual anualizado de la serie suavizada (promedio de 13 semanas) es cercano al 0% en febrero, lo que sugiere que la cartera comercial no se está expandiendo en el margen. En el caso de la de consumo, se presenta un fenómeno similar. El crecimiento anual a finales de febrero es de 9% frente a 11,6% en diciembre y el crecimiento mensual anualizado de la serie suavizada está en terreno negativo (-2,2%). La desaceleración menos marcada se presenta en la cartera hipotecaria, cuyo crecimiento anual a febrero fue de 15% y el mensual anualizado fue de 8,8%. Respecto a los créditos en dólares, en lo corrido del año la cartera en moneda extranjera se redujo en US$323 m (9,2%). Simultáneamente, el endeudamiento externo directo del sector privado empezó a reducirse desde diciembre (en US$ 41 millones) y en enero disminuyó US$59 m. Desde que el Banco comenzó a reducir su tasa de referencia el 19 de diciembre del año pasado, se ha observado una rápida disminución de la mayoría de tasas de interés de mercado. En particular, entre esa fecha y el 11 de marzo, la TIB y el Indicador Bancario de Referencia (IBR) han acumulado 6 una disminución de 130pb, nivelándose con la tasa de referencia que se encuentra en 8%. Por su parte, desde el 19 de diciembre y hasta comienzos de marzo el promedio ponderado de las tasas de los CDT y de la DTF han descendido 193 pb y 160 pb, respectivamente. Desde mediados de diciembre y hasta finales de febrero también se observó una reducción significativa de todas las tasas de interés para créditos así: el preferencial en 120pb, el de tesorería en 107 pb, el ordinario en 120 pb y el de construcción en 60 pb. La transmisión más lenta se ha dado para las tasas de crédito a los hogares, pero incluso a este nivel se observaron caídas, específicamente en las de crédito para adquisición de vivienda, las cuales disminuyeron 50pb en las dos últimas semanas de febrero. Las tasas de interés reales (deflactadas por el IPC sin alimentos) también presentaron una reducción generalizada en enero y sobretodo en febrero. Esto sucedió por la combinación de menores tasas nominales y por el incremento de la inflación sin alimentos en el último mes. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas, aunque se observa una tendencia a la baja; (ii) la inflación sin alimentos ni regulados continúa sin mostrar una reducción importante; (iii) los precios internacionales de los alimentos, las materias primas y el petróleo siguen disminuyendo, lo cual podría tener un efecto importante en la inflación total, dependiendo del comportamiento de la tasa de cambio y de la política comercial; (iv) la caída de los precios internacionales del petróleo no se ha transmitido a los precios internos de la gasolina; (v) la actividad económica continúa debilitándose más rápidamente de lo previsto por el equipo técnico del Banco; (vi) la cartera total del sistema financiero continuó perdiendo dinamismo en el último mes y la mayoría de las tasas de interés de mercado disminuyó rápidamente respondiendo a la baja de la tasa de referencia del Banco; (vii) el bajo desempeño de la economía mundial y de nuestros principales mercados de exportación, en particular, de Estados Unidos, Venezuela y Ecuador; (viii) el efecto de la tasa de cambio sobre la inflación y el crecimiento de los sectores transables y (ix) las expectativas de inflación de mediano y largo plazo se ubican dentro del rango de las metas fijadas por la Junta. 7 Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política monetaria dado el rezago de las mismas; (ii) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para 2009 y 2010 y, en especial, los de los mecanismos de indexación incorporados en algunos precios; (iii) la incertidumbre generada por la crisis financiera mundial en los mercados internacionales y su incidencia en la economía colombiana; (iv) la apreciación del peso frente al dólar presentada en las últimas semanas; (v) el acceso de la región al financiamiento externo y la baja dinámica de la cartera del sistema financiero; (vi) el balance de riesgos entre crecimiento e inflación en un contexto de desaceleración de la economía mayor a lo esperada y caída en las expectativas de inflación y vii) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación. Los miembros de la Junta destacaron la caída de la inflación al consumidor por cuarto mes consecutivo. La disminución de la inflación y las expectativas de inflación ratifican que la debilidad de la demanda interna y externa y la caída en los precios internacionales de los productos básicos se están reflejando en menores presiones inflacionarias. Lo anterior hace prever que la inflación anual continuará cayendo en los meses siguientes y terminará 2009 en el rango meta. Destacaron, así mismo, que la economía mundial continúa mostrando un panorama negativo. Durante el mes, organismos internacionales como el FMI y el Banco Mundial proyectaron crecimientos negativos de la economía mundial en 2009. Esta caída ha llevado a que en América Latina se presente una fuerte desaceleración en el crecimiento económico y a que muchos bancos centrales reduzcan sus tasas de referencia. La devaluación de las monedas de la región registrada entre enero y febrero se corrigió parcialmente en el mes de marzo, en especial en Colombia en donde la reciente devaluación del peso había sido mayor que la observada en otros países. La economía colombiana ha mostrado resistencia a la crisis mundial pese a la caída de la demanda externa que se refleja en una menor dinámica de las exportaciones y en el consecuente debilitamiento del crecimiento. Los últimos datos de la industria y el comercio señalan caídas fuertes. En estas condiciones, y teniendo en cuenta el bajo nivel de capacidad utilizada, es de esperar que la inflación en el país siga cayendo. 8 Dado lo anterior, los miembros de la Junta de manera unánime decidieron reducir en 100 pb la tasa de intervención del Banco de la República, pasando a 7%. Los 300 pb de disminución acumulada de la tasa de interés de intervención desde diciembre de 2008 impulsan el crecimiento económico. Estas decisiones de política se han podido hacer rápidamente teniendo en cuenta que los desarrollos recientes en Colombia y el mundo crean un balance de riesgos a la baja, tanto en la actividad económica como en la inflación. Finalmente, la Junta reiteró la necesidad de continuar con el seguimiento a la situación financiera internacional con el fin de adoptar oportunamente las medidas de política monetaria que sean necesarias para enfrentar los efectos de la misma. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva acordó reducir en 100 pb las tasas de interés de intervención del Banco de la República. De esta manera su tasa de intervención será de 7%. Bogotá D. C., abril 03 de 2009.
2009-04-01
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 30 de Abril de 2009 El 30 de Abril de 2009 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Cesar Vallejo y Juan Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. El director Fernando Tenjo no asistió a la reunión por razón justificada. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor en marzo se situó en 6,14%, cayendo por quinto mes consecutivo. La mayoría de indicadores de inflación básica disminuyeron, retomando la tendencia decreciente que se había observado desde noviembre del año pasado y que se había interrumpido en febrero. La inflación anual de alimentos disminuyó de 9,5% en febrero a 8,7% en marzo. La caída se presentó en los alimentos procesados mientras que los perecederos mostraron aumentos. Los precios de los bienes regulados pasaron de 9,0% en febrero a 8,1% en marzo, principalmente por el comportamiento de los servicios públicos, gas domiciliario y gasolina. La inflación de no transables sin alimentos ni regulados fue similar a la de un mes atrás situándose en 5,36%. Lo anterior, debido a varios precios indexados como son la educación, la salud y los arriendos. 2 Por su parte, la inflación de transables sin alimentos ni regulados aumentó pasando de 2,4% en febrero a 2,5% en marzo. Los diferentes indicadores de las expectativas de inflación medidas con los títulos de deuda pública a 1, 5 y 10 años se ubicaron entre 3,5% y 4,7% a comienzos de abril. Este es el resultado más bajo desde mediados de 2006. La variación anual de los precios al productor (IPP) aumentó de 6,2% en febrero a 6,8% en marzo. b. Crecimiento interno La información disponible muestra que la actividad económica interna continuó desacelerándose más rápidamente de lo previsto un trimestre atrás por el equipo técnico del Banco de la República: - Los datos del DANE para producción industrial muestran una caída anual en el mes de febrero de 12,8%. - Si bien la demanda de energía mostró una recuperación y creció 5%, una vez se ajusta por días hábiles disminuyó 5,1%. - Los pedidos y las existencias de la industria según Fedesarrollo continuaron deteriorándose en los dos primeros meses del año. - El indicador de sentimiento de los consumidores de Fedesarrollo cayó nuevamente en marzo. - La encuesta sobre el estado de las ventas del comercio de Fenalco mostró alguna recuperación en el mes pero desde un nivel bajo. Por su parte, el indicador de expectativas de actividad económica que resulta de la encuesta realizada por esa entidad gremial se situó en niveles históricamente bajos. - Las ventas al por menor en febrero reportadas por el DANE cayeron a una tasa anual de 4,1%, continuando con la tendencia decreciente que se inició a mediados de 2008. 3 - Las licencias de construcción siguieron cayendo, así como la producción de cemento. En cuanto a la demanda externa, las exportaciones totales en dólares a enero cayeron 13,2% respecto a igual mes del año anterior. La caída de las no tradicionales (14,8%) fue un poco mayor que la de las tradicionales (13,6%). Dentro de las tradicionales, solo el carbón registró un aumento (de 88% anual) gracias a mayores volúmenes vendidos. Los menores valores exportados en los otros productos (petróleo y ferroníquel) obedecen a la caída en sus precios. En el caso de las exportaciones no tradicionales, por destino, las ventas a Venezuela exhibieron una menor dinámica en todos los rubros respecto al mismo mes del año anterior: en conjunto se contrajeron a una tasa anual de 20% en enero. Las exportaciones a Ecuador aumentaron a una tasa anual de 1,7%, impulsadas por las del sector industrial, particularmente alimentos y bebidas, material de transporte y artes gráficas. El otro gran comprador, EEUU, también presentó un bajo desempeño (-43% en enero de 2009 sin oro), con disminuciones en el valor de todas las ventas, excepto para el banano. Finalmente, para el caso de las exportaciones no tradicionales para el resto del mundo se registró un incremento de 0,4%. Respecto a las importaciones en dólares, entre enero y febrero de 2009 registraron una contracción de 11,7% frente al mismo período de 2008. El análisis por tipo de bienes (clasificación CUODE) muestra que dicha caída ha sido liderada por el grupo de bienes intermedios (-26,9% anual). Los bienes de consumo registraron tasas anuales de -9,5% a febrero mientras los de bienes de capital crecieron 4,0%. Con cifras mensuales a marzo, las tasas de desempleo para el total nacional y las 13 principales áreas urbanas registraron incrementos anuales: la del total nacional se ubicó en 12,0% y la de 13 áreas en 13,5%, 0.8 pp y 1.5 pp superiores a las registradas en el mismo periodo del año anterior, respectivamente. Al igual que en febrero, en marzo los aumentos se explican principalmente por crecimientos de la oferta laboral (medida a través de la tasa global de participación). c. Contexto externo 4 La economía y el comercio mundial sufrieron una fuerte contracción durante el primer trimestre de 2009 que se suma a la del cuarto trimestre del año pasado. Estos resultados confirman los temores sobre una recesión acentuada y mayor a la prevista en la economía global. La producción industrial en EEUU se contrajo a una tasa anual de 12,8% en marzo de 2009 llegando a niveles equivalentes a los de 1999. Caídas muy fuertes se han observado también en la producción industrial del resto de economías desarrolladas. El caso más extremo ha sido Japón en donde la producción industrial ha caído a una tasa anual de más de 45% en febrero y en donde el nivel correspondiente a ese mes era inferior a cualquier valor observado en las últimas dos décadas. El comercio mundial también ha sufrido un golpe fuerte. La variación anual de las exportaciones nominales en dólares se contrajo a tasas anuales de 25% en enero y febrero, tanto en la Zona Euro como en Estados Unidos, respectivamente. Para esta variable la caída también es más dramática en Japón, en donde la contracción es de alrededor de 48% anual en febrero. El efecto de este desplome ha hecho que el PIB de las economías desarrolladas se contraiga fuertemente. En síntesis, la situación actual en las economías desarrolladas puede caracterizarse como la de una pérdida generalizada en la confianza de consumidores e inversionistas que ha reducido fuertemente los niveles de gasto y que ha sido reforzada por un aumento notable en las restricciones crediticias. Lo anterior no mostró un giro durante el primer trimestre como lo sugiere la caída adicional de los indicadores de confianza de los consumidores. Los indicadores de confianza empresarial han presentado un comportamiento un poco menos desfavorable en los últimos dos meses, aunque la percepción sobre la situación económica sigue siendo bastante negativa. Dado lo anterior, se redujeron los pronósticos de crecimiento de EEUU y de otras economías desarrolladas. Las economías emergentes también han resultado fuertemente golpeadas. En América Latina es un hecho la contracción de la producción industrial en los principales países al igual que la de las exportaciones. En consecuencia, los pronósticos de crecimiento e inflación para la región se han revisado a la baja. Pese a las menores perspectivas de crecimiento, las tasas de cambio de los países latinoamericanos no siguieron debilitándose, por el contrario en el 5 último mes la mayoría de monedas se apreció. A su vez, la percepción de riesgo ha disminuido, vista tanto con el EMBI+ como con los CDS a 5 años. d. Variables financieras En las últimas siete semanas terminadas el 10 de abril, el crecimiento de los agregados monetarios se desaceleró como efecto del aumento de los depósitos de la Tesorería General de la Nación en el Banco de la República. Durante la primera semana del mes, M3 crecía a una tasa anual cercana al 17% y algo similar sucedía con los PSE. El sistema financiero sigue dando prioridad a las captaciones a través de CDT y Bonos, las cuales crecen a tasas anuales de 40%. Respecto al crédito, la cartera bruta total en moneda nacional dejó de desacelerarse en el último mes y medio y a comienzos de abril crecía a una tasa anual de 15,2%. En términos reales, el crecimiento de la cartera total es de 9,4%, que es superior al promedio observado desde 1970 (6,4%). Por destino de la cartera, en las últimas seis semanas sobresale la aceleración de la cartera comercial (de 17,0% a 18,4%), lo que se dio simultáneamente con una reducción de la cartera de consumo. A comienzos de abril esta última crecía a una tasa anual de 6,5%. Por su parte, la cartera hipotecaria siguió creciendo a una tasa anual de alrededor del 14%. En enero y febrero, el endeudamiento externo del sector privado disminuyó en US259 m. Esto se dio por la contracción de la cartera en moneda extranjera de los intermediarios del mercado cambiario. El endeudamiento directo aumentó levemente (en US$ 63 millones) pero no alcanzó a compensar la caída de la cartera en moneda extranjera. Las tasas de interés continuaron reduciéndose de manera rápida siguiendo la tasa de referencia del Banco de la República. Frente al 19 de diciembre, fecha del primer ajuste en esta tasa y hasta el 17 de abril, la tasa de los CDT ha caído un total de 324 pb mientras que la DTF lo hizo en 283 pb. Por el lado de las tasas activas, las disminuciones acumuladas también son significativas en los créditos comerciales: 342 pb para el preferencial y 298 pb para el de tesorería. En cuanto al crédito dirigido a los hogares, sus tasas han caído menos y en medio de mayor volatilidad: 85 pb para adquisición de 6 vivienda, 65 pb para financiación de consumo y cerca de 100 pb en el caso de los otorgados a través de tarjetas. La caída en las tasas nominales ha permitido una reducción de las tasas reales en los últimos meses incluido marzo. Las tasas reales de crédito preferencial y de tesorería se mantienen por encima de sus promedios históricos (calculados desde 1998 y 2001), las de crédito comercial están ya por debajo y las de consumo han fluctuado alrededor de sus promedios. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas, aunque se observa una tendencia a la baja; (ii) la inflación de no transables sin alimentos ni regulados continúa sin reducirse ; (iii) los precios internacionales de los alimentos, las materias primas y el petróleo han disminuido frente al alto nivel del 2008 y podrían tener un efecto importante en la inflación total, dependiendo del comportamiento de la tasa de cambio y de la política comercial; (iv) la caída de los precios internacionales del petróleo no se ha transmitido a los precios internos de la gasolina; (v) la actividad económica continúa debilitándose más rápidamente de lo previsto por el equipo técnico del Banco; (vi) la cartera total del sistema financiero dejó de desacelerarse y la mayoría de las tasas de interés del mercado disminuyó rápidamente respondiendo a la baja de la tasa de referencia del Banco; (vii) el crecimiento negativo de los Estados Unidos y el menor crecimiento de Venezuela y Ecuador; (viii) el efecto de la tasa de cambio sobre la inflación y el crecimiento de los sectores transables; (ix) el comportamiento a la baja de los precios de los títulos de deuda pública; y (ix) las expectativas de inflación de mediano y largo plazo se ubican dentro del rango de las metas fijadas por la Junta. Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) el efecto de las medidas de política monetaria dado el rezago de las mismas; (ii) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para 2009 y 2010 y, en especial, los de los mecanismos de indexación incorporados en algunos precios; (iii) la incertidumbre generada por la crisis financiera mundial en los mercados internacionales y su incidencia en la economía colombiana; (iv) el acceso de la región al financiamiento externo y las causas de la baja dinámica de la cartera 7 del sistema financiero; (v) el balance de riesgos entre crecimiento e inflación en un contexto de desaceleración de la economía mayor a la esperada y caída en las expectativas de inflación y (vi) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación. Los miembros de la Junta destacaron la caída de la inflación al consumidor por quinto mes consecutivo. La disminución de la inflación y las expectativas de inflación ratifican que la debilidad de la demanda interna y externa y la caída en los precios internacionales de los productos básicos se están reflejando en menores presiones inflacionarias. Resaltaron, así mismo, que la economía mundial se deterioró más de lo esperado en el primer trimestre de 2009. Si bien algunos países industrializados muestran signos de estabilización, es de esperar que los efectos negativos de la crisis mundial se mantengan a lo largo del año. En América Latina es un hecho la contracción generalizada de la producción industrial y la caída de la inflación. Se destaca que la fuerte devaluación de las monedas latinoaméricanas registrada al principio de 2009 se ha corregido. La información disponible muestra un comportamiento similar de la economía colombiana con una menor dinámica de las exportaciones y el consecuente debilitamiento del crecimiento. Los últimos datos de la industria y el comercio señalan caídas fuertes. No obstante, el sistema financiero sigue mostrando un comportamiento saludable. En estas condiciones, y teniendo en cuenta el bajo nivel de capacidad utilizada, es de esperar que la inflación en el país siga cayendo en los próximos meses y podrá terminar el 2009 por debajo del punto medio del rango meta. Dado lo anterior, los miembros de la Junta de manera unánime decidieron reducir en 100 pb la tasa de intervención del Banco de la República, pasando a 6%. Los 400 pb de disminución acumulada de la tasa de interés de intervención desde diciembre de 2008 impulsan el crecimiento económico. Los desarrollos recientes en Colombia y el mundo crean un balance de riesgos a la baja, tanto en la actividad económica como en la inflación, lo que permite que la Junta continúe adoptando una política de disminuir sus tasas de intervención. Finalmente, la Junta reiteró la necesidad de continuar con el seguimiento a la situación financiera internacional con el fin de adoptar 8 oportunamente las medidas de política monetaria que sean necesarias para enfrentar los efectos de la misma. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva acordó reducir en 100 pb las tasas de interés de intervención del Banco de la República. De esta manera su tasa de intervención será de 6%. Bogotá D. C., mayo 15 de 2009.
2009-05-01
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 29 de Mayo de 2009 El 29 de Mayo de 2009 se celebró en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, Cesar Vallejo y Juan Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor en abril se situó en 5,73% cayendo por sexto mes consecutivo. En los cuatro primeros meses del año se acumuló una inflación de 2,3%, muy por debajo del mismo registro del año pasado (4,2%). La mayoría de indicadores de inflación básica disminuyeron a un ritmo mayor que a comienzos de año o a finales de 2008. La inflación anual de alimentos disminuyó de 8,7% en marzo a 7,9% en abril. La caída se presentó principalmente en los alimentos procesados. Debido al comportamiento de los combustibles, los precios de los bienes regulados pasaron de 8,1% en marzo a 7,6% en abril. La inflación de no transables sin alimentos ni regulados pasó de 5,36% a 4,8% en abril. Lo anterior, debido principalmente al rubro de arrendamientos. Se destaca que desde marzo de 2007 este indicador no se situaba por debajo del 5%. 2 Por su parte, la inflación de transables sin alimentos ni regulados aumentó de 2,5% en marzo a 2,6% en abril. Los diferentes indicadores de las expectativas de inflación medidas con los títulos de deuda pública a 1, 5 y 10 años continuaron descendiendo y se ubicaron entre 3,2% y 4,0% a comienzos de mayo. Este es el resultado más bajo desde mediados de 2006. La variación anual de los precios al productor (IPP) disminuyó de 6,8% en marzo a 6,6% en abril. b. Crecimiento interno La información disponible confirma que la debilidad de la actividad económica interna se mantiene: - Los datos del DANE para producción industrial muestran un crecimiento en marzo de 0,4% frente al mismo mes del año anterior, que ajustado por días hábiles corresponde a una caída anual de 7,2%. Para el primer trimestre, el DANE reporta una disminución de 7,5%. - La demanda de energía cayó a una tasa anual de 5% que al corregirse por días hábiles creció 3%. - El indicador de sentimiento de los consumidores de Fedesarrollo disminuyó nuevamente en abril, mientras que el indicador de consumo registró una caída a niveles similares a los registrados a mediados de 2002. - Las ventas al por menor en febrero reportadas por el DANE cayeron a una tasa anual de 7,1%, continuando con la tendencia decreciente que se inició a mediados de 2008. Lo anterior coincide con la reducción que registra el indicador de ventas de Fenalco para el mes de abril. - Las licencias de construcción siguieron disminuyendo, así como la producción de cemento. En cuanto a la demanda externa, en lo corrido del año a febrero de 2009, las exportaciones totales en dólares registraron una caída de 15,3% frente a un crecimiento de 51,9% para el mismo período de 2008. Este hecho se vio reflejado tanto en las exportaciones tradicionales (-21,4% en 2009 Vs. 3 74,8% en 2008) como en la ventas de los productos no tradicionales sin oro (- 14 % en 2009 Vs. 16 % en 2008). En el grupo de tradicionales, el único producto que mostró una tasa anual positiva fue carbón, en tanto que ferroníquel, petróleo y derivados y café presentaron reducciones originadas en la caída de sus precios implícitos y no en los volúmenes exportados (excepto para café). Excepto para banano, las exportaciones no tradicionales (sin oro) hacia Estados Unidos continuaron disminuyendo en valor de -30,1% en 2009 frente a 9,9% en 2008. Las exportaciones a Venezuela también exhibieron una menor dinámica en todos los rubros respecto al mismo período del año anterior, al pasar de una tasa anual de 86 % en 2008 a una de -12 % en 2009. Sin embargo, sectores como el agrícola, industria química, hilados y tejidos, metales comunes y maquinaria y equipo mostraron incrementos anuales respecto al mismo período de 2008. Así mismo, para los países diferentes a Estados Unidos, Venezuela y Ecuador, las ventas de productos no tradicionales presentaron una caída de 10% en lo corrido a febrero (16,4% a febrero de 2008), debido principalmente a la contracción de las exportaciones industriales de 0,9% (14% a febrero de 2008) y, en particular, al comportamiento de los sectores de confecciones, alimentos y bebidas y maquinaria y equipo. Por el contrario, las exportaciones no tradicionales hacia Ecuador presentaron una tasa de crecimiento anual positiva de 3,5% frente a una caída de 0,1% registrada en el mismo período de 2008. Finalmente, entre enero y marzo de 2009 las importaciones totales registraron una contracción de 10,2% frente al mismo período de 2008. Por tipo de bienes (clasificación CUODE), dicha desaceleración ha sido, en parte, liderada por el grupo de bienes intermedios que pasaron de crecer 18,3% en lo corrido a marzo de 2008 a -22,0% anual para el mismo período de 2009. Al mismo tiempo, los bienes de consumo registraron una reducción anual de 6,3% a marzo de 2009 frente a un crecimiento anual de 15,7% en 2008. Por su parte, los bienes de capital crecieron 1,1% en 2009, mostrando un menor ritmo de crecimiento frente a su máximo a febrero de 2008 cuando aumentaban 35,4%. Con cifras mensuales a abril, las tasas de desempleo para el total nacional y las 13 principales áreas urbanas registraron incrementos anuales: la del total nacional se ubicó en 12,1% y la de 13 áreas en 12,9%, 1 pp y 1,6 pp 4 superiores a las registradas en el mismo periodo del año anterior. Al igual que en marzo, en abril los aumentos en las tasas de desempleo se explican principalmente por los altos crecimientos de la oferta laboral (medida a través de la tasa global de participación). En este mes, se observó un ligero incremento en las tasas de ocupación. c. Contexto externo Durante el primer trimestre de 2009 la economía estadounidense se contrajo 6,1% trimestre anualizado (t/a). Esta es la tercera caída consecutiva del PIB en ese país, que había presentado una contracción de 6,3% en el cuarto trimestre del año pasado. En la zona euro y el Reino Unido la caída también fue considerable en el primer trimestre, 9,8% t/a y 7,4% t/a, respectivamente. El caso más dramático fue el japonés en donde la caída del PIB fue de 15,2% t/a. Pese a lo anterior, se observó en los mercados financieros una recuperación del optimismo que se reflejó en un aumento en los indicadores bursátiles y de la confianza de consumidores e inversores y en la caída de las primas de riesgo. Las economías emergentes se han visto fuertemente golpeadas y para el primer trimestre la actividad económica se contrajo en muchas de ellas. En Latinoamérica, por ejemplo, el PIB de México cayó a una tasa anual de 8,2%, mientras que en Perú se desaceleró aunque presentó una expansión (3,1% anual). En Chile y Brasil no se cuenta con información del PIB del primer trimestre, pero indicadores como la producción industrial muestran una fuerte contracción de la actividad en dicho período. Algunas economías emergentes se están beneficiando del comportamiento de los precios de los bienes básicos que se han recuperado, así mismo países como China y Corea muestran signos de recuperación. De igual forma, las exportaciones de China, Hong Kong y Corea que habían descendido fuertemente, registraron niveles positivos en marzo y abril. En el último mes y medio, varios bancos centrales redujeron nuevamente su tasa de referencia. El Banco Central Europeo (BCE) bajó su tasa 25 pb, llevándola a 1%. En Latinoamérica, los movimientos más recientes son los de los bancos centrales de Chile y Perú, con reducciones de 50 pb y 100 pb, respectivamente. En estos países, las tasas quedaron en 1,25% y 4,00%. 5 En América Latina, el comportamiento del mercado cambiario se ha revertido desde marzo siguiendo la caída en la percepción de riesgo. Desde dicho mes el fortalecimiento de las monedas de la región frente al dólar ha sido marcado y generalizado. Una tendencia similar se ha observado en el caso del euro frente al dólar y de otras monedas de Asia y Europa Oriental. d. Variables financieras En abril, la base monetaria redujo su ritmo de crecimiento anual. Igual comportamiento presentó el M3 por la desaceleración de los pasivos sujetos a encaje (PSE), lo cual estuvo relacionado con el mayor monto de fondos del gobierno en el BR a finales de abril y comienzos de mayo para atender los vencimientos de TES. En el último mes y medio, la cartera nominal en moneda nacional del sistema financiero dejó de caer y su crecimiento se estabilizó alrededor del 15% anual. Por tipo de crédito, el mayor dinamismo se centró en el comercial, con un crecimiento anual de 19,6% en la primera semana de mayo frente a 17% en marzo. Los desembolsos más dinámicos en las últimas semanas fueron los de crédito preferencial, con crecimientos cercanos al 100% anual. Por otro lado, los desembolsos de crédito ordinario mantuvieron su dinamismo con tasas cercanas al 40%. En lo corrido del año se nota un aumento de los plazos a los cuales se están otorgando los nuevos créditos comerciales, en especial los ordinarios. En los últimos dos meses la cartera de consumo presentó un crecimiento anualizado negativo en términos nominales, acompañado de un mayor deterioro en su calidad y de mayores provisiones. Algo más de la mitad de las provisiones acumuladas en este año por cartera en moneda nacional obedecen a créditos de consumo. Por su parte, el endeudamiento externo siguió desacelerándose en marzo y abril. Esta tendencia se explica por una reducción de la cartera en moneda extranjera pues el endeudamiento directo del sector privado aumentó (en marzo) un 5% respecto a igual mes del 2008. Dado todo lo anterior, la tasa anual de crecimiento del endeudamiento total (moneda nacional más moneda extranjera) en marzo fue 12,9%, inferior a la de febrero (13,5%) y a la de finales de 2008. 6 Estudios preparados por el equipo técnico del Banco muestran que el crédito ha sido afectado por factores tanto de oferta como demanda. En el caso de la cartera de consumo, las restricciones de oferta parecen imperar. En la cartera hipotecaria se observa que además de las restricciones de oferta, la demanda por este tipo de crédito se ha desacelerado. La cartera comercial, por su parte, es la menos sujeta a restricciones de oferta. En materia de tasas de interés, en abril y comienzos de mayo continuó la rápida transmisión de los descensos de la tasa de política hacia las tasas de mercado, en especial hacia las pasivas y las activas para crédito comercial. Durante abril, las tasas de CDT y DTF se redujeron un poco más de 100pb respecto al mes anterior y las activas para crédito ordinario, preferencial y de tesorería lo hicieron en cerca de 130 pb. Entre el 19 de diciembre y finales de abril, las tasas pasivas cayeron alrededor de 300pb y las de crédito comercial entre 260 pb y 390 pb. La trasmisión hacia las tasas de interés para el crédito dirigido a los hogares ha sido mucho más lenta, aunque en el último mes tendió a acelerarse en el caso de las de crédito de consumo. Desde mediados de diciembre de 2008 y hasta abril las caídas en las tasas de consumo, tarjetas y crédito hipotecario habían sido de 85 pb, 101 pb y 142 pb, respectivamente. Desde finales de marzo y hasta mediados de abril todas las tasas de interés de los TES descendieron de manera importante. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo de crecimiento de los precios se mantiene por encima de las metas establecidas, aunque se observa una tendencia sostenida a la baja; (ii) la inflación de no transables sin alimentos ni regulados presentó durante el mes una caída debido al rubro de arriendos; (iii) los precios internacionales de los alimentos, las materias primas y el petróleo han disminuido frente al nivel más alto del 2008 y podrían tener un efecto importante en la inflación total, dependiendo del comportamiento de la tasa de cambio y de la política comercial; (iv) la información disponible confirma que la actividad económica continúa debilitándose; (v) la cartera total del sistema financiero dejó de desacelerarse y la mayoría de las tasas de interés del mercado disminuyó rápidamente respondiendo a la baja de la tasa de referencia del Banco; (vi) el crecimiento negativo de los Estados Unidos y el menor crecimiento de Venezuela, Ecuador y otros socios comerciales; (vii) el efecto de la tasa de cambio sobre la inflación y el crecimiento de los sectores 7 transables; (viii) el comportamiento a la baja de las tasas de interés de los títulos de deuda pública; y (ix) las expectativas de inflación de mediano y largo plazo se ubican dentro de las metas fijadas por la Junta para el largo plazo. Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para 2009 y 2010 y, en especial, los de los mecanismos de indexación incorporados en algunos precios; (ii) el efecto rezagado de las medidas de política monetaria sobre la producción y los precios; (iii) el impacto que puede tener en la inflación el precio interno de la gasolina;(iv) la incertidumbre generada por la crisis financiera mundial en los mercados internacionales y su incidencia en la economía colombiana; (v) el acceso de la región al financiamiento externo, los flujos de inversión directa y las causas de la baja dinámica de la cartera del sistema financiero; (vi) el balance de riesgos entre crecimiento e inflación en un contexto de desaceleración de la economía mayor a la esperada y caída en las expectativas de inflación y (vii) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación alrededor de la meta de largo plazo. Los miembros de la junta destacaron la caída de la inflación anual al consumidor que en abril cayó por sexto mes consecutivo. Este descenso se presentó tanto en los precios de alimentos como en otros rubros de la canasta familiar, destacándose la desaceleración de los precios de los bienes no transables y de los regulados. En el mes continuaron disminuyendo los indicadores de inflación básica y las expectativas de inflación se aproximan al rango meta de mediano y largo plazo (3%+/- un punto porcentual). Lo anterior ratifica que la debilidad de la demanda interna y externa, la reducción de las expectativas de inflación y la caída en los precios internacionales de los productos básicos frente al nivel máximo alcanzado en 2008, se están reflejando con fuerza en menores presiones inflacionarias. La Junta considera que la inflación anual continuará cayendo en los próximos meses y podrá terminar el año por debajo del punto medio del rango meta (5%). En la medida que se conocen datos sobre el crecimiento del producto de los países en el primer trimestre del año, se confirma la contracción de la economía mundial. Sin embargo, en las últimas semanas hay signos de 8 estabilización de la economía de los Estados Unidos y de una recuperación importante de China. Así mismo, en algunas economías industrializadas y emergentes, los precios de los activos han tenido un comportamiento positivo. En América Latina, la fuerte devaluación de las monedas registrada al principio de 2009 se ha corregido y las primas de riesgo han disminuido. En Colombia, la crisis internacional se ha transmitido principalmente a través del deterioro en la confianza de los consumidores y productores y de una menor dinámica de las exportaciones y las remesas. Los últimos datos de la industria, el comercio y la construcción señalan caídas fuertes una vez se ajustan por días hábiles. No obstante, el sistema financiero sigue mostrando un comportamiento saludable. Dado lo anterior, los miembros de la Junta de manera unánime decidieron reducir en 100 pb la tasa de intervención del Banco de la República, pasando a 5%. Destacaron que la tasa de interés de intervención se ha reducido 500 puntos básicos en cerca de cinco meses, y que su nivel actual es claramente expansivo. Se espera que continúen cayendo las tasas de interés de préstamo para las empresas y las familias aunque en algunos casos, estas se verán afectadas por primas de riesgo. El impulso monetario, un ambiente externo menos negativo y la expectativa del mayor dinamismo de la inversión pública, permiten esperar una recuperación gradual del crecimiento económico a partir del segundo semestre de este año. Con la información disponible hasta el momento, la Junta prevé que cualquier eventual reducción de su tasa de interés en el futuro sería menor que las observadas recientemente. Finalmente, la Junta reiteró la necesidad de continuar con el seguimiento a la situación financiera internacional con el fin de adoptar oportunamente las medidas de política monetaria que sean necesarias para enfrentar los efectos de la misma. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva acordó reducir en 100 pb las tasas de interés de intervención del Banco de la República. De esta manera su tasa de intervención será de 5%. Bogotá D. C., junio 12 de 2009.
2009-06-01
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 19 de Junio de 2009 El 19 de Junio de 2009 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor en mayo se situó en 4,77% cayendo por séptimo mes consecutivo. En los cinco primeros meses del año se acumuló una inflación de 2,3%, muy por debajo del mismo registro del año pasado (5,12%). Los indicadores de inflación básica continuaron disminuyendo. La variación anual de los precios de los alimentos cayó de 7,9% en abril a 5,5% en mayo, principalmente por los precios de los alimentos perecederos que pasaron de un crecimiento anual del 14,5% en abril a 4% en mayo. El incremento anual de precios de los bienes regulados disminuyó de 7,6% en abril a 6,5% en mayo, debido al comportamiento de los combustibles y del gas domiciliario. Igualmente, el de los bienes no transables sin alimentos ni regulados pasó de 4,9% en abril a 4,7% en mayo. Se destaca la reducción en el crecimiento anual de los rubros con “baja indexación”, en especial el de 2 servicios personales. La variación de los ítems con “alta indexación” (servicios financieros, médicos y educativos) también mostró una reducción pero se mantiene en niveles superiores al 7%. El rubro de arrendamientos, por su parte, completó tres meses de caídas consecutivas y se situó en 4,7%. El aumento anual de precios de bienes transables sin alimentos ni regulados pasó de 2,6% en abril a 2,8% en mayo. Los indicadores de las expectativas de inflación medidas con los títulos de deuda pública aumentaron en las últimas semanas, en particular para los horizontes de 5 y 10 años. . La variación anual de los precios al productor (IPP) disminuyó de 6,6% en abril a 5,3% en mayo. b. Crecimiento El DANE reveló un crecimiento anual de 19,4% en obras civiles para el primer trimestre de 2009. Se destaca la contribución que presentó el subsector de vías de aguas, puertos, represas y otras obras portuarias, que creció 54,6% respecto al mismo trimestre del año anterior, y el subsector de construcciones para la minería, cuya variación anual fue de 93,5%. Por su parte, la información disponible muestra que aunque la debilidad de la actividad económica interna se mantiene, las expectativas de los empresarios y consumidores revelan signos de recuperación: - Los datos del DANE para producción industrial a abril muestran un crecimiento de -14,5% para ese mes. La fuerte caída se debió, en parte, al menor número de días hábiles en abril de 2009 respecto al año anterior, por la presencia de Semana Santa. - La Encuesta de Opinión Empresarial –EOE- de Fedesarrollo para la industria, muestra en abril un deterioro de los indicadores de pedidos e inventarios frente a los niveles del mes anterior. - Las ventas al por menor en abril según el DANE cayeron 7,1% en términos anuales, caída similar a la observada en marzo, pero mayor a la del primer trimestre (-5,5%). En mayo, la información de Fenalco sobre comercio no sugiere quiebres importantes en estas tendencias. 3 - La producción de cemento año corrido a mayo registró una caída anual de 15,1%. Sin embargo, ésta fue menor que la registrada año corrido a abril (-16,6%). La producción de cemento puede estar relacionada tanto con la construcción nacional como con los pedidos del exterior - La EOE de Fedesarrollo para la industria y comercio, en abril, muestra que los empresarios de estos sectores mejoraron sus expectativas de producción y ventas a tres meses, lo que ocasionó un quiebre de las tendencias decrecientes de dichas variables. - El Indicador de Confianza del Consumidor de Fedesarrollo presentó un importante incremento en mayo y se recuperó del muy bajo nivel alcanzado en abril. La balanza comercial en el primer trimestre de 2009 fue deficitaria en USD11 m, en contraste con el superávit de USD342 m registrado un año atrás, debido a una caída de las exportaciones de 13,2% superior a la de las importaciones (-9,5%). El descenso anual del valor exportado (USD1,144 m) en los primeros tres meses se explica principalmente por las menores ventas de petróleo y derivados al mercado de Estados Unidos. Las ventas a dicho mercado, que representan el 31% de las totales, cayeron 26,8%. Por su parte, las exportaciones con destino a Venezuela, que representan cerca del 20% de las totales, crecieron 4,1% debido a las mayores ventas de carne de bovino, combustible y calderas. Entre enero y abril, las importaciones FOB totalizaron USD 10,058 m y disminuyeron anualmente 12,5%. En términos CIF, éstas sumaron USD 10,640 m y cayeron -13,3%. La disminución más importante en las compras totales se presentó en los bienes intermedios y materias primas adquiridos en Estados Unidos, en especial de productos mineros, químicos y farmacéuticos. c. Contexto externo Después del profundo deterioro de la economía mundial observado en los últimos meses, algunos indicadores del sentimiento de los hogares y las empresas muestran señales de mejoría. Así mismo, la fuerte reducción de los 4 inventarios observada en el PIB de EE.UU. sugiere un cambio en el comportamiento de la actividad económica para el segundo semestre. En las economías emergentes, la recuperación de la producción industrial de China e India, al igual que algunos signos de reactivación de las exportaciones de otros países asiáticos, han incentivado las compras de bienes básicos y generado un mejor sentimiento en los mercados de capitales. Sin embargo, el deterioro de la actividad económica de la mayoría de países ha continuado. En América Latina, en particular, durante el primer trimestre de 2009 se observó una fuerte caída en México y una contracción menos fuerte en Brasil y Chile. Perú habría crecido, pero a una tasa muy inferior a la registrada el año anterior. En la región, la caída de la demanda y los menores precios de los productos básicos frente a los niveles alcanzados un año antes han contribuido al descenso de la inflación. Esta reducción ha sido más notoria en los casos de Chile, Colombia y Perú. Esto a su vez, unido a las mejores expectativas de inflación, ha facilitado reducciones adicionales de tasas de interés por parte de los bancos centrales. No obstante, algunas tasas de mercado, especialmente las de consumo, aún no han reaccionado en línea con el estímulo monetario. En los últimos tres meses las principales monedas de la región se han apreciado frente al dólar, y frente al euro están llegando a los niveles de un año atrás. Con esto se ha corregido la depreciación registrada entre enero y febrero. El fortalecimiento de las principales monedas latinoamericanas se ha dado en un contexto de un dólar debilitado frente a las otras referencias más duras y de una menor percepción de riesgo de los países emergentes. d. Variables financieras En mayo, el M3 y los pasivos sujetos a encaje (PSE) retomaron un ritmo de crecimiento de 16% anual después de la desaceleración transitoria que se observó en abril. La desaceleración y el posterior repunte estuvieron relacionados con la acumulación de depósitos de la Tesorería General de la Nación (TGN) en el Banco de la República en abril y su giro en mayo 15 para atender vencimiento de TES por $4 billones. Para julio, se esperan nuevamente vencimientos de TES por $6 billones. La cartera en moneda nacional en mayo creció a un ritmo anual de 15%, similar al que se observó en los tres meses anteriores. Por tipo de crédito, se 5 mantuvo la desaceleración de la cartera de consumo, cuyo crecimiento nominal anual en el mes fue de 3,9%. Sin embargo, el saldo del crédito de consumo se estabilizó alrededor de $39,4 billones desde el mes de marzo de este año. El menor crecimiento del crédito de consumo contrasta con un mayor dinamismo en el crédito comercial. La cartera comercial creció a una tasa cercana al 21% anual en mayo, observándose un dinamismo particularmente importante en los desembolsos de los créditos ordinario, preferencial y de tesorería. En lo corrido del año hasta mayo, la cartera en moneda extranjera con intermediarios locales disminuyó en US$1,087 m. Por su parte, el crédito externo directo hasta el mes de abril había aumentado US$279 m. La reducción de las tasas de interés del Banco de la República (500 pb) se ha transmitido de manera rápida al mercado interbancario, al de depósitos y al de crédito comercial, pero de una forma lenta en el caso del crédito dirigido a los hogares. Al finalizar mayo la tasa interbancaria (6,00%) y la IBR (6,04%) estaban en línea con la tasa de de interés de referencia. De igual forma, desde el inicio de la reducción de la tasa de política (diciembre 19 de 2008) y hasta la última semana de mayo de 2009, la tasa DTF se redujo 408 pb y se situó en 6,11%. En las mismas fechas, el descenso también ha sido significativo en el caso de las tasas de crédito comercial ordinario (-443 pb), al pasar de 17,75% a 13,32%. En el mismo período, las tasas de interés de créditos de consumo y adquisición de vivienda se redujeron -134 pb y -159 pb y se situaron al finalizar mayo en 24,20% y 15,73%, respectivamente. Al restarle a las tasas de interés de ahorro y crédito la inflación sin alimentos, los resultados también muestran una reducción importante. Entre diciembre pasado y mayo de 2009, las tasas de interés reales promedio DTF y activa (según metodología Banco de la República) disminuyeron 305 pb y 362 pb, respectivamente. En mayo éstas se situaron en 1,72% y 8,38%. La tasa de interés de los TES de corto plazo se redujo a un ritmo similar que la tasa de interés de referencia. Las de los TES a plazos más largos han presentado un menor descenso. Entre diciembre 19 de 2008 y mayo 29 de 2009, la curva cero cupón de los TES registró un descenso de 395 pb, 228 pb y 162 pb, en el tramo de 1, 5 y 10 años, respectivamente. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA 6 En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo de crecimiento de los precios y su tendencia sostenida a la baja; (ii) la caída en la inflación de los alimentos y de los no transables sin alimentos ni regulados; (iii) los precios internacionales de los alimentos, las materias primas y el petróleo que podrían tener un efecto importante en la inflación total, dependiendo del comportamiento de la tasa de cambio y de la política comercial; (iv) la mejora en las expectativas a pesar de la debilidad de la actividad económica; (v) la cartera del sistema financiero en moneda legal creció impulsada por la cartera comercial y, en menor medida, por la hipotecaria; (vi) la rápida disminución de la mayoría de las tasas de interés del mercado en respuesta a la baja de la tasa de referencia del Banco; (vii) el crecimiento negativo de los Estados Unidos y el menor crecimiento de Venezuela, Ecuador y otros socios comerciales; (viii) el efecto de la tasa de cambio sobre la inflación y el crecimiento de los sectores transables; (ix) el comportamiento al alza de las tasas de interés de los títulos de deuda pública; y (x) el comportamiento de las expectativas de inflación de mediano y largo plazo. Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para 2009 y 2010, incluyendo los mecanismos de indexación incorporados en algunos precios; (ii) el efecto rezagado de las medidas de política monetaria sobre la producción y los precios; (iii) la incertidumbre generada por la crisis financiera mundial en los mercados internacionales y su incidencia en la economía colombiana; (iv) el acceso de la región al financiamiento externo, los flujos de inversión directa y las causas de la baja dinámica de la cartera del sistema financiero; (v) el balance de riesgos entre crecimiento e inflación en un contexto de desaceleración de la economía y caída de la inflación; (vi) la pertinencia de continuar reduciendo la tasa de intervención ante la última información disponible; (vii) el reciente aumento de las expectativas de inflación de mediano y largo plazo; y (viii) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación alrededor de la meta de largo plazo. Los miembros de la Junta destacaron la caída de la inflación anual al consumidor (4,77%) por séptimo mes consecutivo. Este descenso se presentó nuevamente en los precios tanto de los alimentos como de los bienes no transables y los regulados. Los indicadores de inflación básica continuaron disminuyendo. 7 El comportamiento de los precios ratifica que la debilidad de la demanda interna y externa, las expectativas de inflación y la caída en los precios de los productos básicos frente al nivel máximo alcanzado en 2008, se está reflejando en menores presiones inflacionarias. La Junta espera que la inflación anual caiga de manera apreciable en el mes de junio y termine el año por debajo del punto medio del rango meta (5%). Algunos indicadores de expectativas en las economías industrializadas registran cambios positivos, lo cual sugiere que podrían estar estabilizándose. La recuperación de la producción de China e India, al igual que la reactivación de las exportaciones en otros países asiáticos, han incentivado las compras de productos básicos y un mejor comportamiento de los mercados de capitales. Sin embargo, es de esperar que los efectos negativos de la crisis mundial se mantengan a lo largo del año. En la mayoría de economías de América Latina se confirmó la contracción en el crecimiento del producto en los primeros meses del año, así como una caída pronunciada de la inflación. La fuerte devaluación de las monedas de América Latina registrada al principio de 2009 se ha corregido en un contexto de debilitamiento del dólar y menor percepción de riesgo de los países emergentes. En Colombia, la crisis internacional se ha transmitido principalmente por el deterioro en las expectativas de los consumidores y productores y de una menor dinámica de las exportaciones y remesas. Aunque la debilidad de la actividad económica se mantiene, las expectativas de los empresarios y consumidores revelan signos de recuperación para el segundo semestre. El crédito sigue creciendo a buen ritmo, impulsado especialmente por la cartera comercial, y el sistema financiero sigue mostrando un comportamiento saludable. La Junta Directiva espera que las tasas de interés de préstamos para las empresas y las familias continúen cayendo. Algunos directores indicaron su preferencia por mantener inalterada o disminuir 25 pb la tasa de interés de intervención, a partir de las siguientes consideraciones. La economía colombiana no sufre de una crisis financiera que justifique, como en otros países, medidas extremas de política y tasas de interés anormalmente bajas. Por otro lado, dado el importante peso que factores externos tienen en la explicación de la desaceleración del crecimiento en el país, menores tasas de interés probablemente no tengan un efecto positivo importante sobre la actividad productiva. Adicionalmente, las expectativas de inflación de mediano y largo plazo registraron en el último 8 mes un incremento que, de ser persistente, exigiría una reacción de política monetaria. Otros directores indicaron su preferencia por una disminución de 50 pb en la tasa de interés de intervención y comunicar que, con la información disponible, no se esperan modificaciones a la tasa de interés en el futuro cercano. Esto último teniendo en cuenta los efectos rezagados de una reducción acumulada de 550 pb en la tasa de intervención sobre el crecimiento económico en lo que resta del año y el 2010; el comportamiento reciente de las expectativas de inflación de mediano y largo plazo y el hecho de que parte de la reducción de la inflación es el resultado de un choque temporal en los precios de los alimentos. Los directores coincidieron en que la fuerte expansión monetaria, la menor variación en los precios de los alimentos y regulados, un ambiente externo menos negativo y un mayor dinamismo en las obras civiles permiten esperar una recuperación gradual del crecimiento económico a partir del segundo semestre del año. Así mismo, en que la postura de la política monetaria permite la consolidación de la reducción de la inflación hacia sus metas de largo plazo. Dado lo anterior, los miembros de la Junta decidieron reducir en 50 pb la tasa de intervención del Banco de la República, pasando a 4,5%. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva acordó reducir en 50 pb las tasas de interés de intervención del Banco de la República y comunicar que, con la información disponible hasta el momento, no se esperan modificaciones en la tasa de interés de intervención en el futuro cercano. De esta manera la tasa de interés de intervención del Banco será de 4,5%. Bogotá D. C., julio 03 de 2009.
2009-07-01
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 24 de Julio de 2009 El 24 de Julio de 2009 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor en junio se situó en 3,81% cayendo por octavo mes consecutivo. En lo corrido del año hasta junio se acumuló una inflación de 2,22%, muy por debajo del mismo registro del año pasado (6,02%). Los indicadores de inflación básica continuaron disminuyendo. La variación anual de los precios de los alimentos cayó de 5,5% en mayo a 2,8% en junio, principalmente por los precios de los alimentos perecederos y, en menor medida, por los cereales, aceites y otros alimentos importados. El incremento anual de precios de los bienes regulados disminuyó de 6,5% en mayo a 5,9% en junio, debido al comportamiento de los combustibles. La variación anual de los precios de los bienes no transables sin alimentos ni regulados se mantuvo en 4,7% en junio. A diferencia del mes anterior, la mayor presión alcista la ejercieron los rubros con baja indexación (4,2%). La variación anual de precios de los rubros de alta indexación 2 continuó cayendo lentamente, pero se mantiene en niveles superiores al 7%. El rubro de arrendamientos, por su parte, completó cuatro meses de caídas consecutivas y se situó en 4,5%. El aumento anual de precios de bienes transables sin alimentos ni regulados fue de 2,78%, ligeramente menor al 2,84% de mayo. Los indicadores de las expectativas de inflación obtenidas de los TES se ubican por debajo del punto medio de la meta de inflación para este año: entre 1,55% (TES negociados a un año) y 4,1% (TES a 10 años). Sin embargo, las de TES a 10 años se encuentran por encima de la meta de largo plazo anunciada por la Junta (2% - 4%). La variación anual de los precios al productor (IPP) disminuyó de 5,3% en mayo a 2,7% en junio. b. Crecimiento Según el DANE, el crecimiento del PIB en el primer trimestre de 2009 frente al mismo periodo del año anterior, fue de -0,6%. La contracción obedeció a la caída de la demanda interna (-0,5%) y de las exportaciones en pesos reales (-0,5%). Dado que las importaciones cayeron en una magnitud similar (en pesos reales, -0,5%), la demanda externa neta se contrajo menos (- 0,4%) y su contribución al retroceso del PIB fue muy pequeña. En cuanto a la demanda interna, la inversión en obras civiles fue el componente más dinámico, en tanto que el resto del gasto en inversión, que en buena parte corresponde a inversión privada, fue el que más cayó. El consumo de los hogares, por su parte, presentó un crecimiento anual ligeramente negativo (-0,5%), mientras que el consumo público se expandió 0,2%. Por el lado de la oferta, los sectores con desempeño más pobre durante el primer trimestre fueron industria (-7,9%), construcción de edificaciones (- 14,1%) y comercio (-2,7%). Sus caídas contrastan con una expansión significativa en los sectores de construcción de obras civiles (21,2%), financiero (4,7%) y de minería (10,6%). Lo anterior ratifica que, al igual que sucede con otras economías de la región, la contracción del PIB en Colombia desde el cuarto trimestre del año pasado está relacionada con la crisis externa. El colapso del comercio 3 mundial ha afectado el desempeño de las exportaciones, especialmente de las no tradicionales dirigidas a EE.UU. y a otros países diferentes de Ecuador y Venezuela, las cuales se resintieron fuertemente desde el cuarto trimestre del año pasado (en dólares y en volumen). La información disponible muestra que aunque se mantiene la debilidad de la actividad económica interna, las expectativas de los empresarios y consumidores revelan signos de recuperación: - Los datos del DANE para producción industrial a mayo muestran una caída anual de 6,5%. El crecimiento anual para el acumulado de los cinco primeros meses fue de -8,8%, levemente mejor que el registrado en los primeros cuatro meses del año (-9,3%). - La Encuesta de Opinión Empresarial –EOE- de Fedesarrollo para la industria no muestra en mayo un mayor deterioro pero tampoco una recuperación clara de la actividad empresarial. - Las ventas anuales al por menor en abril según el DANE cayeron 3,5%, registro mejor que el del mes anterior (-7,1%). Este indicador sigue afectado, principalmente, por la fuerte caída en las ventas de vehículos. Cuando se excluyen éstos, el índice de ventas alcanza a crecer 0,3% anual en mayo. En los 5 primeros meses, las ventas totales al por menor completaron una caída anual de 5,2%. - La demanda de energía total, creció 0,8% en junio frente a 1,6% en mayo. Para el total del segundo trimestre su crecimiento anual fue de 0,3%, menor que el observado en el primer trimestre (0,8%). - El Indicador de Confianza del Consumidor de Fedesarrollo en mayo mejoró por segundo mes consecutivo, luego de haber alcanzado el menor nivel en abril. La balanza comercial en lo corrido del año a mayo fue superavitaria en US$300 m, inferior en US$448 m a lo registrado un año atrás. Esto se debió a una caída de las exportaciones de 17,7%, superior a la de las importaciones (-15,5%). El total de exportaciones en lo corrido del año hasta mayo fue de US$2.719 m frente al mismo período del año anterior. Dicho comportamiento 4 estuvo explicado, principalmente, por las menores ventas de petróleo y derivados al mercado de Estados Unidos. Las ventas a dicho mercado a mayo, que representan el 33% de las totales cayeron 27,5%. Las exportaciones con destino a Venezuela, que representan el 18% de las exportaciones totales, se redujeron en 0,8%. Por otro lado, las exportaciones industriales a Estados Unidos cayeron 31,7% durante los primeros meses del año frente a igual período de 2008. De igual manera, las exportaciones industriales a Venezuela cayeron 17% en esos mismos meses, en particular debido a las menores ventas de confecciones, vehículos, cueros y muebles. Entre enero y mayo, las importaciones FOB totalizaron US$12.383 m y disminuyeron anualmente 15,5%. En términos CIF, éstas sumaron US$13.088 m y cayeron 16,3%. La disminución más importante en las compras totales se presentó en los bienes intermedios y materias primas adquiridos en Estados Unidos, en especial de productos mineros y farmacéuticos. De acuerdo con la gran encuesta integrada de hogares (GEIH), el empleo creció entre enero y mayo de 2009 a una tasa promedio del 2,1% en el total nacional, y de 1,5% en las 13 áreas metropolitanas. Sin embargo, la oferta laboral (TGP) aumentó a un mayor ritmo, probablemente como consecuencia de un deterioro de los ingresos de los hogares. Esto condujo a un aumento de la tasa de desempleo que se ubicó en el trimestre móvil terminado en mayo en 11,9% en el total nacional y 12,9% en las 13 áreas. Estos incrementos anuales son similares a los que se observaron en el trimestre móvil terminado en marzo. c. Contexto externo Si bien en el segundo trimestre la economía mundial continuó contrayéndose, algunos indicadores de confianza, de crédito, de ganancias de las empresas y de inventarios y pedidos en las economías industriales permiten ser más optimistas con respecto al fin de la recesión. La Reserva Federal incrementó las estimaciones de crecimiento de EE.UU. y en Europa las expectativas de aumento del PIB real del presente y siguiente año no han cambiado significativamente. El comercio externo de algunas economías asiáticas (China e India) muestra señales de recuperación, mientras que los precios de los productos básicos se mantienen en niveles cercanos a los registrados en 2007. Todo lo 5 anterior hace esperar una recuperación del crecimiento de la economía en el mundo durante 2010. Las primas de riesgo de varios países de la región se han reducido y de nuevo se ha registrado una apreciación de las principales monedas frente al dólar, situación a la cual no ha sido ajena Colombia. De todos modos, persiste preocupación en varias economías desarrolladas respecto a: i) el ingreso de los consumidores que podría disminuir si se da un incremento de la inflación debido a un aumento en los precios de la energía; ii) la debilidad de las industrias de bienes de capital y de bienes durables (automóviles) y de la actividad de la construcción; y iii) el fuerte endeudamiento de los bancos, las grandes empresas multinacionales, los hogares y el sector público. d. Variables financieras El comportamiento de los agregados monetarios ha estado afectado en el último mes y medio por una recomposición en la captación de depósitos lo que ha conducido a una aceleración en el ritmo de crecimiento de la reserva bancaria desde una tasa anual de 16% en mayo a una de 21,9% en junio. Por consiguiente, la base monetaria también registró un aumento en su ritmo de crecimiento (a 14,7% en junio). En el agregado monetario más amplio (M3), sin embargo, no se observó cambios importantes en su tendencia y su tasa de crecimiento anual al cierre del semestre fue de 16%. Para julio y agosto se espera que se presente un aumento en la liquidez permanente en el mercado como efecto de la redención de TES de $6 billones. Lo anterior, eventualmente hará que el Banco de la República sea deudor neto de manera temporal. El crecimiento de la cartera comercial al 15 de julio fue de 18,5% en términos nominales, disminuyendo frente al presentado en mayo y junio. Por su parte, la cartera de consumo se desaceleró y a comienzos de julio presentó una tasa de crecimiento de 2,8% nominal. La cartera hipotecaria también disminuyó ligeramente su ritmo de crecimiento en junio (13,7%). Dado lo anterior, la cartera total en pesos del sistema financiero creció a una tasa de 14% a mediados de julio frente a 15,5% a finales de mayo. 6 A mayo. la tasa anual de crecimiento del endeudamiento externo del sector privado, es decir, aquella contratada con entidades financieras del exterior, fue de -3,5%. En junio, la cartera en moneda extranjera del sistema financiero siguió cayendo. A junio las tasas de interés pasivas siguieron disminuyendo, mientras que en julio se frenó el descenso que traía la tasa DTF (5,7%). Por su parte, las tasas de crédito preferencial y de constructores siguieron descendiendo. En este contexto, las tasas reales han seguido cayendo y en junio todas se encontraban por debajo de sus promedios históricos (calculados desde 1986 o desde 2001). Las tasas más bajas frente a estos promedios eran las de DTF y crédito ordinario. La curva de los TES registró un movimiento a la baja de 95 pb, 45pb y 40 pb en el tramo corto, medio y largo, respectivamente. La curva presentó un aplanamiento en el tramo medio y largo, mientras se empinó en la de corto plazo. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo de crecimiento de los precios y su tendencia sostenida a la baja; (ii) la continua caída en el crecimiento anual del precio de los alimentos; (iii) el efecto sobre la inflación total que podrían provocar los precios internacionales de los alimentos, las materias primas y el petróleo, dependiendo del comportamiento de la tasa de cambio; (iv) la mejora en la confianza de productores y consumidores a pesar de la debilidad de la actividad económica; (v) la cartera del sistema financiero en moneda legal que continua creciendo por encima del PIB nominal, aunque a un ritmo menor al de otros meses, impulsada por la cartera comercial y, en menor medida, por la hipotecaria; (vi) la rápida disminución de la mayoría de las tasas de interés del mercado en respuesta a la baja de la tasa de referencia del Banco; (vii) el crecimiento negativo de los Estados Unidos y el menor crecimiento de Venezuela, Ecuador y otros socios comerciales; (viii) el efecto de la tasa de cambio sobre la inflación y el crecimiento de los sectores transables; (ix) el comportamiento a la baja de las tasas de interés de los títulos de deuda pública; y (x) el comportamiento de las expectativas de inflación de mediano y largo plazo. Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) los elementos que afectan las 7 proyecciones de inflación para 2009 y 2010, en especial un eventual repunte en los precios de los alimentos; (ii) el efecto rezagado de las medidas de política monetaria sobre la producción y los precios; (iii) la incertidumbre generada por la crisis financiera mundial en los mercados internacionales y su incidencia en la economía colombiana; (iv) el acceso de la región al financiamiento externo, los flujos de inversión directa y las causas de la baja dinámica de la cartera del sistema financiero; (v) el balance de riesgos entre crecimiento e inflación en un contexto de desaceleración de la economía y caída de la inflación; (vi) la pertinencia de continuar reduciendo la tasa de intervención ante la última información disponible; (vii) el comportamiento de la tasa de cambio en las últimas semanas; y (viii) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación alrededor de la meta de largo plazo. Los miembros de la Junta destacaron la caída de la inflación anual al consumidor (3,81%) por octavo mes consecutivo. Este descenso, mayor al esperado, se presentó nuevamente en los precios de los alimentos y los bienes regulados. Los indicadores de inflación básica continuaron disminuyendo y las expectativas de inflación de mediano y largo plazo se sitúan cerca del límite superior del rango meta de largo plazo fijado por la Junta (3%+/- un punto porcentual). El comportamiento de los precios indica que la debilidad de la demanda interna y externa, las menores expectativas de inflación y la caída en los precios de los productos básicos frente al nivel máximo alcanzado en 2008, se están reflejando en menores presiones inflacionarias. La Junta prevé que la inflación anual termine el año por debajo del límite inferior del rango meta (4,5%). La economía mundial se está estabilizando. Algunos indicadores económicos de Estados Unidos sugieren un quiebre en la tendencia negativa del crecimiento del producto en ese país. Las condiciones económicas en Europa todavía se están debilitando. El crecimiento de China se ha fortalecido considerablemente con impacto favorable sobre los precios de los productos básicos y las economías asiáticas. La mayoría de economías de América Latina continúan mostrando una reducción moderada en su crecimiento y una caída de la inflación. Las primas de riesgo de varios países de América Latina se han reducido y de nuevo se ha registrado una apreciación de las principales 8 monedas de la región frente al dólar. El peso colombiano no ha sido ajeno a esta situación y se ha fortalecido más de lo esperado, impulsado además por la colocación exitosa de bonos de empresas colombianas en el mercado internacional para financiar proyectos de inversión. La Junta Directiva es conciente de los riesgos asociados a la apreciación del peso en un ambiente de demanda externa débil, y continuará revisando cuidadosamente la situación del mercado cambiario. En Colombia, la nueva información disponible sigue mostrando mejoras en los indicadores de opinión y confianza de las empresas y de los consumidores para el segundo semestre. Las exportaciones y las importaciones en dólares registran tasas anuales negativas de crecimiento, y los términos de intercambio se encuentran en niveles cercanos a los registrados a mediados de 2007. Así mismo, las remesas del exterior han venido cayendo a lo largo del año. Gracias a la disminución de la tasa de intervención del Banco de la República, las tasas activas y pasivas han caído persistentemente. La Junta Directiva espera que esta disminución continúe y estimule el crecimiento económico. El sistema financiero muestra un comportamiento saludable. Algunos directores indicaron su preferencia por mantener inalterada la tasa de interés de intervención, a partir de las siguientes consideraciones: (i) la fuerte expansión monetaria, la menor variación en los precios de los alimentos y regulados, un ambiente externo menos negativo y un mayor dinamismo en las obras civiles permiten esperar una recuperación gradual del crecimiento económico a partir del segundo semestre del año; (ii) el descenso de la inflación al consumidor durante lo corrido del año obedece, en parte, a factores temporales que pueden revertirse en el futuro; (iii) el importante peso de factores externos en la explicación de la desaceleración del crecimiento en el país, hace probable que menores tasas de interés no tengan un efecto positivo importante sobre la actividad productiva; (iv) la economía colombiana no sufre de una crisis financiera que justifique, como en otros países, medidas extremas de política y tasas de interés anormalmente bajas; (v) las cifras de crecimiento de cartera sugieren que su dinámica no está afectada por problemas de liquidez sino en la insuficiente demanda de crédito. En opinión de los directores, la actual postura de la política monetaria permite la consolidación de la reducción de la inflación hacia sus metas de largo plazo. 9 Otro de los directores pidió evaluar el impacto de las distintas modalidades de intervención cambiaria y propuso una reducción de 50 puntos básicos de la tasa de interés de intervención del Banco. Lo anterior teniendo en cuenta los siguientes hechos sobrevinientes: (i) una brecha del producto crecientemente negativa, reflejada en la continuación del deterioro de la economía y del aumento del desempleo; (ii) los crecientes riesgos de índole comercial para Colombia de parte de Venezuela y Ecuador; (iii) la acentuada revaluación del peso, una de las más altas de la región y superior a la de nuestros principales competidores y; (iv) un índice de inflación a junio que es el más bajo de los últimos 47 años, y que seguirá reduciéndose en los siguientes meses hasta hallarse al final de 2009 muy por debajo de límite interior del rango meta. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva acordó por mayoría mantener inalterada la tasa de intervención del Banco de la República. De esta manera, la tasa de interés de intervención del Banco será de 4,5%. Bogotá D. C., agosto 06 de 2009.
2009-08-01
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 28 de Agosto de 2009 El 28 de Agosto de 2009 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor en julio se situó en 3,28% cayendo por noveno mes consecutivo. En lo corrido del año hasta julio se acumuló una inflación de 2,18%, muy por debajo del mismo registro del año pasado (6,53%). Los indicadores de inflación básica continuaron disminuyendo. La variación anual de los precios de los alimentos cayó de 2,8% en junio a 1,58% en julio, principalmente por los precios de los alimentos perecederos. El incremento anual de precios de los bienes regulados disminuyó de 5,9% en junio a 4,7% en julio, debido al comportamiento de los combustibles. La variación anual de los precios de los bienes no transables sin alimentos ni regulados se ubicó en 4,68% en julio, cifra similar a la de junio. Lo anterior, fundamentalmente por los rubros con baja indexación y los arriendos. La variación anual de precios de los rubros de alta indexación 2 mantuvo niveles superiores al 7%. El rubro de arrendamientos, por su parte, completó cinco meses de caídas consecutivas y se situó en 4,43%. El aumento anual de precios de bienes transables sin alimentos ni regulados pasó de 2,78% en junio a 3,0% en julio. Los indicadores de las expectativas de inflación obtenidas de los TES se encuentran por debajo del punto medio de la meta de inflación para este año: entre 1,46% (TES negociados a un año) y 4,37 % (TES a 10 años). Sin embargo, las de TES a 10 años están por encima de la meta de largo plazo anunciada por la Junta (2% - 4%). La variación anual de los precios al productor (IPP) disminuyó de 2,7% en junio a 1,4% en julio. b. Crecimiento La información disponible sugiere que la actividad económica en el segundo trimestre mostró una contracción anual cercana a la observada en el primero, en línea con lo proyectado por el equipo técnico del Banco. Al igual que en el mes pasado, las expectativas de los empresarios y consumidores revelan signos de recuperación: - Los datos del DANE para producción industrial a junio muestran una caída anual de 6,6%. Para el segundo trimestre, la caída anual fue de 9,4% mayor que la registrada en el primer semestre de 7,4%. - La Encuesta de Opinión Empresarial –EOE- de Fedesarrollo para la industria muestra que la actividad continúa débil. Sin embargo, la confianza de los industriales se siguió recuperando por mayores expectativas de producción en los próximos tres meses. - Las ventas anuales al por menor en abril según el DANE cayeron 4,5%, registro peor que el del mes anterior (-3,5%) pero mejor que el observado en lo corrido del año. En los 6 primeros meses, las ventas totales al por menor completaron una caída anual de 5,1%, tasa similar a la observada en el trimestre anterior (-5,3%) - La encuesta de Fenalco en julio continúa reflejando una contracción en las ventas, pero con expectativas a seis meses al alza. 3 - La demanda de energía no regulada cayó en julio a una tasa anual de 1,0%, cuando se corrige por días hábiles el crecimiento fue de 3,0%. - El Indicador de Confianza del Consumidor de Fedesarrollo en junio mejoró por tercer mes consecutivo y se situó por encima de los promedios del primer y segundo trimestre del año. - Las licencias de construcción para el mes de junio, tanto las dirigidas a vivienda como a otros destinos, siguieron con caídas anuales, superiores al 20%. La producción de cemento registró una caída anual en ese mismo mes de 15%. A pesar de la fuerte contracción en el mes, el crecimiento anual de este indicador en el segundo trimestre (-14,2%) fue mejor que el del primero (- 17,5%). En lo corrido del año a julio, el promedio de los términos de intercambio ha sido superior que el de los años anteriores. Desde marzo, los precios de los bienes exportados en dólares han aumentado a un mayor ritmo que los precios de los bienes que se importan. Para lo que resta del año, es factible que dicha tendencia continúe. Por otra parte, los niveles de exportación e importación acumulados en el primer semestre de 2009 han sido menores a los registrados en el mismo periodo de 2008, pero superiores a los observados entre enero y junio de 2007. Entre enero y junio de 2009, las exportaciones totales en dólares se redujeron 19,1% respecto al mismo período de 2008, con una contracción de las tradicionales de 23,2% y de las no tradicionales de 15,0%. El descenso en el valor exportado de las tradicionales (US$2.690m) estuvo explicado principalmente por café (-22,5%), crudo y derivados (-40,0%) y ferroníquel (- 39,4%). En el caso del café, su caída obedeció al menor volumen exportado, mientras que para los otros productos el descenso obedeció principalmente a menores precios. La mayor desaceleración del valor de las exportaciones tradicionales se originó en el mercado de EE.UU. En lo corrido del año a junio las exportaciones no tradicionales en dólares hacia Venezuela, que representan el 36% del total no tradicional, registraron un descenso de 4 %, que se explica por una caída de las ventas del sector industrial de 13,6%. Por otra parte, las ventas a Estados Unidos, que representan el 17% del total de las exportaciones no tradicionales (sin oro), disminuyeron 25,6%. 4 Entre enero y junio de 2009 las importaciones (CIF) ascendieron a US$15.574 m, disminuyendo anualmente 17,7%. La caída más importante fue registrada por las importaciones de bienes intermedios (28,3%), en particular las provenientes de los Estados Unidos. La reducción de las importaciones totales también se presentó en los bienes de consumo y los bienes de capital (- 13,1% y -7,3%, respectivamente). En volúmenes, todas las importaciones exhibieron caídas. En el primer semestre de 2009 las remesas en dólares cayeron 10% anual. c. Contexto externo Los resultados de las principales economías desarrolladas han llevado a que los analistas esperen una recuperación mundial lenta en el segundo semestre de 2009 y en el 2010 superior al proyectado. Esta mejora en el crecimiento permitió que los precios internacionales de los productos básicos siguieran con su fase de recuperación iniciada tres meses atrás. En las economías emergentes las señales son mixtas. China, India y Corea muestran mejores indicadores de producción, comercio interno y exportación. Sin embargo, México y Chile registraron una gran contracción en su actividad económica en el segundo trimestre. Para el resto de economías de la región, las expectativas del mercado sugieren una reducción menos marcada. En EE. UU., la zona Euro y el Reino Unido, las restricciones de crédito podrían retardar la recuperación y reducir la eficacia de los estímulos macroeconómicos. A esto se agrega una tasa de desempleo que continúa aumentando. En estas condiciones, la recuperación del consumo puede verse afectada, a pesar de la reducción de la inflación. d. Variables financieras La base monetaria y M3 siguió creciendo a tasas cercanas a tres veces el aumento del PIB nominal estimado para 2009. La variación anual en agosto 7 de la cartera en moneda legal se situó en 11,8%, como resultado de la desaceleración de la cartera comercial, que para 5 las mismas fechas pasó de crecer 20,6% a 15,3%. Estos menores niveles de cartera comercial han sido compensados en parte por mayores colocaciones de deuda del sector privado. A junio de 2009, la suma de los saldos de bonos del sector real ($ 10,2 b) y de la cartera comercial crecía 19,1% en términos anuales. En julio, la cartera comercial cayó $ 1 b, mientras que la emisión de bonos del sector real aumentó $ 0,5 b. En los días transcurridos de agosto, las nuevas emisiones de deuda del sector real ya superaron el billón de pesos. En julio la cartera de consumo continuó con crecimientos bajos (1,8% anual) y la hipotecaria se estabilizó en aumentos cercanos a 12,5% anual. Sin embargo, los crecimientos anualizados de las últimas trece semanas sugieren que ambas modalidades están en una fase de recuperación. Las tasas de interés pasivas y activas de mercado continuaron descendiendo. Al 14 de agosto, la DTF se situó en 5,04%, cifra inferior en 28 pb a la registrada un mes atrás y menor en 515 pb que el registro del 19 de diciembre de 2008. En cuanto a las tasas de interés activas, el descenso se ha dado con mayor intensidad en las de créditos a las empresas, grupo en el cual sus modalidades (tesorería, preferencial, ordinario y construcción) han presentado desde diciembre de 2008, caídas en las tasas de interés cercanas a 550 pb. En la primera semana de agosto, la tasa de interés de créditos de consumo e hipotecarios se situaron en 22,4% y 14,7% respectivamente, cifras inferiores en su orden en 39 pb y 23 pb a las del mes pasado y menores en 344 pb y 265 pb que las registradas el pasado 19 de diciembre . En términos reales, las tasas de interés promedio activas y pasivas se situaron cerca de sus mínimos históricos de la última década. La curva de los TES registró un movimiento al alza de 25 pb, 38 pb y 73 pb en el tramo corto, medio y largo, respectivamente. La curva presentó un empinamiento, reflejado en la diferencia entre el tramo largo y el tramo corto. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo de crecimiento de los precios y su tendencia sostenida a la baja; (ii) la continua caída en el crecimiento anual del precio de los alimentos; (iii) el efecto sobre la inflación total que podrían provocar los precios internacionales 6 de los alimentos, las materias primas y el petróleo, dependiendo del comportamiento de la tasa de cambio; (iv) la continua mejora en la confianza de productores y consumidores a pesar de la debilidad de la actividad económica; (v) la cartera del sistema financiero en moneda legal que sigue creciendo por encima del PIB nominal, aunque en las últimas semanas presentó una desaceleración; (vi) las importantes emisiones de bonos que han complementado la financiación del sector real; (vii) la rápida disminución de la mayoría de las tasas de interés del mercado en respuesta a la baja de la tasa de referencia del Banco; (viii) el comportamiento del mercado interbancario de crédito; (ix) el crecimiento negativo de los Estados Unidos y el menor crecimiento de Venezuela, Ecuador y otros socios comerciales; (x) el efecto de la tasa de cambio sobre la inflación y el crecimiento de los sectores transables; (xi) el comportamiento de las tasas de interés de los títulos de deuda pública; y (xii) el comportamiento de las expectativas de inflación de mediano y largo plazo. Los principales puntos de discusión entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para 2009 y 2010, en especial un eventual repunte en los precios de los alimentos; (ii) el efecto rezagado de las medidas de política monetaria sobre la producción y los precios; (iii) la incertidumbre generada por la crisis financiera mundial en los mercados internacionales y su incidencia en la economía colombiana; (iv) el acceso de la región al financiamiento externo, los flujos de inversión directa y las causas de la reciente baja dinámica de la cartera comercial del sistema financiero; (v) el balance de riesgos entre crecimiento e inflación en un contexto de desaceleración de la economía y caída de la inflación; (vi) la pertinencia de continuar reduciendo la tasa de intervención ante la última información disponible; (vii) el comportamiento de la tasa de cambio en las últimas semanas; y (viii) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación alrededor de la meta de largo plazo. Los miembros de la Junta destacaron la caída de la inflación anual al consumidor por noveno mes consecutivo que se ubicó en julio en 3,28%. Este descenso se presentó nuevamente en los precios de los alimentos y los bienes regulados mientras que los indicadores de inflación básica continuaron disminuyendo. 7 Estas menores presiones inflacionarias continúan como resultado de varios factores tales como: la debilidad de las demandas interna y externa, las menores expectativas de inflación que se sitúan cerca del límite superior del rango meta de largo plazo fijado por la junta (entre 2% y 4%) y la disminución en los precios de los productos básicos frente al nivel máximo alcanzado en 2008. En consecuencia, la Junta prevé que la inflación anual termine el año por debajo del límite inferior del rango meta (4,5%). La economía mundial se está estabilizando. Se espera una lenta recuperación económica en el segundo semestre y han mejorado las proyecciones de crecimiento para 2010. La mayoría de economías de América Latina continúan mostrando una reducción moderada en su crecimiento y una caída de la inflación. Gracias a la disminución de la tasa de intervención del Banco de la República y a la menor demanda de crédito, las tasas de interés de captación y colocación han descendido persistentemente. La Junta Directiva espera que esta disminución continúe y estimule el crecimiento económico. Por su parte, el sistema financiero presenta un comportamiento saludable y se destacan las grandes emisiones de bonos por parte del sector real que han complementado el crédito otorgado por el sector financiero. A lo anterior se suma que los indicadores de opinión y confianza de las empresas y los consumidores siguen mostrando mejoras para el segundo semestre. Por otra parte, los últimos resultados de la industria, comercio y la construcción se encuentran en línea con las proyecciones de crecimiento realizadas por el equipo técnico para fin de año. Algunos directores indicaron su preferencia por mantener inalterada la tasa de interés de intervención, a partir de las siguientes consideraciones: (i) la postura de la política monetaria es expansionista; (ii) la economía colombiana no sufre de una crisis financiera que justifique, como en otros países, medidas extremas de política y tasas de interés nominales anormalmente bajas (iii) parte del descenso de la inflación al consumidor, en particular la caída de la variación anual de los alimentos, puede tener elementos temporales; (iv) el importante peso de factores externos en la explicación de la desaceleración del crecimiento en el país, hace probable que menores tasas de interés no tengan un efecto positivo importante sobre la actividad productiva; (v) las cifras de crecimiento de cartera sugieren que su comportamiento no está afectada por problemas de liquidez sino por la baja dinámica del mercado crediticio; y (vi) 8 la actual postura de la política monetaria hace compatible la estabilidad de las tasas de interés con la consolidación de la reducción de la inflación hacia sus metas de largo plazo. Otros directores propusieron una reducción de 25 o 50 puntos básicos de la tasa de interés de intervención del Banco. Lo anterior teniendo en cuenta que las proyecciones de inflación para este año muestran que ésta se situará por debajo del límite inferior del rango meta para el 2009, mientras que para el 2010 tendrá una caída superior a la prevista inicialmente. Uno de estos directores enfatizó que la medida se justifica también en que: (i) hay una brecha del producto crecientemente negativa, reflejada en la continuación del deterioro de la economía y del aumento del desempleo; (ii) los crecientes riesgos de índole comercial para Colombia de parte de Venezuela y Ecuador; y (iii) la acentuada revaluación del peso, una de las más altas de la región y superior a la de nuestros principales competidores. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva acordó por mayoría mantener inalterada la tasa de intervención del Banco de la República De esta manera la tasa de interés de intervención del Banco será de 4,5%. Bogotá D. C., septiembre 11de 2009.
2009-09-01
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 25 de Septiembre de 2009 El 25 de Septiembre de 2009 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor en agosto se situó en 3,13%, cayendo por décimo mes consecutivo. En lo corrido del año hasta agosto se acumuló una inflación de 2,23%, muy por debajo del mismo registro del año pasado (6,74%). Los indicadores de inflación básica continuaron disminuyendo. La variación anual de los precios de los alimentos cayó de 1,5% en julio a 1,46% en agosto. El incremento anual de precios de los bienes regulados disminuyó de 4,7% en julio a 3,5% en agosto, debido al comportamiento de todos sus componentes (combustibles, servicios públicos y transporte) La variación anual de los precios de los bienes no transables sin alimentos ni regulados subió de 4,7% en julio a 4,9% en agosto. Los rubros con baja indexación y los arriendos pasaron de 4,4% a 4,6%. La variación anual de precios de los rubros de alta indexación se mantuvo en niveles del 7%. 2 El aumento anual de precios de bienes transables sin alimentos ni regulados cayó de 3% en junio a 2,8% en agosto. Los indicadores de las expectativas de inflación obtenidas de los TES aumentaron y se encuentran entre 2,4% (TES negociados a un año) y 4,58 % (TES a 10 años), este último por encima de la meta de largo plazo anunciada por la Junta (2% - 4%). La variación anual de los precios al productor (IPP) disminuyó de 1,4% en julio a 1% en agosto. b. Crecimiento El crecimiento anual del PIB para el segundo trimestre del año fue - 0,5%. Comparado con el primer trimestre, el segundo registró un aumento de 0,7%. La contracción anual del segundo trimestre obedeció principalmente a una caída de la demanda interna (de 2,1% anual). Las exportaciones netas en pesos reales (exportaciones menos importaciones) tuvieron una contribución positiva. La inversión en obras civiles fue el componente más dinámico de la demanda interna (crecimiento anual de 40,6%), en tanto que la inversión en maquinaria y equipo disminuyó (-18,4%). El consumo de los hogares cayó más que en el primer trimestre por efecto del consumo de bienes durables (- 7,2%) y no durables (- 2,0%). El consumo público se expandió 0,9%. Los sectores que más contribuyeron al crecimiento anual del PIB del segundo trimestre fueron el financiero (4,3%), la minería (10,2%) y la construcción de obras civiles (40,5%). La industria fue el sector que más se contrajo (-10,2%) completando un año de crecimientos anuales negativos consecutivos. Otros sectores que contribuyeron a la caída del PIB fueron comercio (cuya variación anual fue -3,9%), construcción de edificaciones (- 9,9%) y, en menor medida, transporte (-1,2%) y agricultura (-1,8%). En cuanto al tercer trimestre, los indicadores sectoriales disponibles muestran lo siguiente: 3 - Los datos del DANE para producción industrial a julio indican una caída anual de 6,5%, asociada de manera importante con el subsector de hierro y acero. - La Encuesta de Opinión Empresarial –EOE- de Fedesarrollo para la industria muestra que la actividad continúa débil. Sin embargo, la confianza de los industriales se siguió recuperando por mayores expectativas de producción en los próximos tres meses. - Las ventas anuales al por menor en julio según el DANE cayeron 3,7% frente a una disminución de 4,5% del mes anterior. - La encuesta de Fenalco en agosto continúa reflejando una contracción en las ventas, pero con expectativas a seis meses al alza. - La demanda de energía no regulada creció en agosto a una tasa anual de 1%. - El Indicador de Confianza del Consumidor de Fedesarrollo en agosto mejoró por cuarto mes consecutivo y se situó en niveles similares a los observados a finales de 2008 y comienzos de 2009. - Las licencias de construcción para el mes de agosto, tanto las dirigidas a vivienda como a otros destinos, siguieron con caídas anuales superiores al 25%. La producción de cemento registró una caída anual en ese mismo mes de 12,5%. Sin embargo, la contracción de este indicador es menor que la del primer y segundo trimestres (17,4% y 14,2%, respectivamente). Las exportaciones totales a julio cayeron 10% anual en el acumulado de doce meses. Aunque en lo corrido del año (enero-julio) disminuyeron 19,2% anual, los niveles son superiores a los del mismo período de 2007. Para este mismo lapso de tiempo (enero-julio), el valor de las exportaciones en dólares de todos los sectores (agropecuario, minero e industrial) cayó en términos anuales, mientras que en volúmenes los sectores agropecuario y minero registraron crecimientos anuales. La mayor caída por nuestras exportaciones se presentó en el mercado de Estados Unidos. En el acumulado de doce meses, las importaciones totales a julio de 2009 cayeron 3,2 % (en términos anuales) y en lo corrido del año (enero-julio) 16,2% (anual). Esto último por las importaciones de bienes intermedios (- 4 27%). El valor en dólares de las importaciones totales en el mes de julio (US$3,178m) fue mayor al del mes anterior (US$2,486m) pero menor al observado en julio de 2008 (US$3,447m). El valor de las exportaciones e importaciones en 2009 podría ser similar al registrado en 2007. Esto implicaría, con respecto a los niveles alcanzados en 2008, una reducción de las exportaciones totales de 20% y de las importaciones de 17%. Lo anterior es consistente con una caída anual de las exportaciones a Venezuela de 20%. En el trimestre móvil terminado en julio, el aumento de la tasa de desempleo a nivel nacional se dio en un contexto de incremento de la participación (la cual subió 2,8pp) mayor que el incremento de la ocupación (que subió 2,1pp). De esta manera, el desempleo se ubicó en 11,9%, 0,5pp por encima del mismo período de 2008. Según la GEIH, el empleo en julio creció 6,4% a nivel nacional y 4,2% en las 13 áreas metropolitanas frente al mismo periodo del año anterior. Por ramas de actividad, se observó un fortalecimiento de la ocupación en construcción y transporte durante el segundo trimestre, hecho que podría estar asociado al dinamismo de las obras civiles. c. Contexto externo Los resultados de las principales economías desarrolladas han llevado a que los analistas esperen una recuperación mundial lenta en el segundo semestre de 2009 y en el 2010 superior al proyectado. Esta mejora en el crecimiento permitió que los precios internacionales de algunos productos básicos siguieran con su fase de recuperación iniciada tres meses atrás. La industria automotriz, apoyada por subvenciones estatales, ha impulsado la recuperación. Japón, Alemania y Francia registraron un crecimiento positivo en el segundo trimestre, mientras que en E.E.U.U. los indicadores señalan la estabilización de su economía. En cuanto a las economías emergentes, las señales son mixtas: algunos países asiáticos se han recuperado en el último trimestre mientras que países de Europa Oriental y América Latina continúan contrayéndose. La corrección de los desbalances macroeconómicos estructurales de las economías desarrolladas es necesaria para restablecer una dinámica sostenida 5 del crecimiento en dichos países y en el mundo. Mientras ello no ocurra, las mayores necesidades de financiamiento de las economías industrializadas podrían generar un incremento en las tasas de interés mundiales. En la misma línea, es poco probable que en un mediano plazo el comercio mundial retorne a los niveles registrados previos a la crisis. d. Variables financieras El crecimiento del M3 se desaceleró pero presenta aumentos anuales superiores al incremento del PIB nominal estimado para el presente año. Entre junio 19 y septiembre 4, la tasa de crecimiento de la cartera en moneda legal cayó de 15,6% a 9,9% por el comportamiento de la cartera comercial. En las mismas fechas, la tasa de crecimiento de la cartera comercial cayó de 21,2% a 12,4%. Las colocaciones de bonos han compensado esta caída con un aumento en lo corrido del año de $1,8 b. El crédito a los hogares muestra una desaceleración de la cartera de consumo y un buen comportamiento de la hipotecaria. En septiembre 4, la tasa de crecimiento anual de la cartera de consumo se ubicó en 0,3%, cuando un mes atrás lo hacía a un ritmo de 1,8%. Por su parte, la cartera hipotecaria entre el 7 de agosto y el 4 de septiembre, pasó de crecer 12,4% anual a 13,2% anual, respectivamente. En las últimas semanas se detuvo la tendencia descendente de todas las tasas de interés. Desde finales de julio, la tasa de captación DTF se ha situado alrededor de 5%. Por su parte, las tasas de interés de consumo se estabilizaron en 22%, las de tarjetas de crédito en 28% y las de crédito de vivienda en 14,5%. La pausa en las tasas también se ha dado en los créditos de tesorería, grupo que presenta una tasa cercana al 8,5%. Al 4 de septiembre, los créditos ordinarios y preferenciales han incrementado levemente su tasa, con valores de 12,5% y 9,4%, respectivamente. La curva de los TES registró un movimiento al alza de 27 pb y 6 pb en el tramo corto y medio de la curva mientras que en el tramo largo presentó un movimiento a la baja de 22 pb. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA 6 En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo de crecimiento de los precios y su tendencia sostenida a la baja; (ii) la caída en el crecimiento anual del precio de los alimentos; (iii) el efecto sobre la inflación total que podrían provocar los precios internacionales de los alimentos, las materias primas y el petróleo; (iv) la continua mejora en la confianza de productores y consumidores ; (v) la cartera del sistema financiero en moneda legal que presentó una desaceleración aunque sigue creciendo por encima del PIB nominal; (vi) las emisiones de bonos que han complementado la financiación del sector real; (vii) el comportamiento de las tasas de interés del mercado en respuesta a la baja en la tasa de referencia del Banco; (viii) el crecimiento negativo de los Estados Unidos y el menor crecimiento de Venezuela, Ecuador y otros socios comerciales; (ix) el efecto de la tasa de cambio sobre la inflación y el crecimiento de los sectores transables; (x) el comportamiento de las tasas de interés de los títulos de deuda pública; y (xi) el comportamiento de las expectativas de inflación de mediano y largo plazo. Los principales puntos de análisis entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para 2009 y 2010, en especial un eventual repunte en los precios de los alimentos y regulados; (ii) el efecto rezagado de las medidas de política monetaria sobre la producción y los precios; (iii) los resultados del PIB para el segundo trimestre, en especial de la demanda interna más débil que la proyectada; (iv) el efecto de las restricciones comerciales impuestas a productos colombianos; (v) el comportamiento de la tasa de cambio en las últimas semanas; (vi) la reciente baja dinámica de la cartera comercial del sistema financiero; (vii) el balance de riesgos entre crecimiento e inflación en un contexto de desaceleración de la economía y caída de la inflación; (viii) la pertinencia de continuar reduciendo la tasa de intervención ante la última información disponible; y (ix) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación alrededor de la meta de largo plazo. Los miembros de la Junta destacaron la caída de la inflación anual al consumidor por décimo mes consecutivo y los posibles efectos de las restricciones comerciales y de la revaluación del peso, en las proyecciones de inflación y crecimiento. Así mismo, señalaron el debilitamiento de la demanda de crédito. Con el fin de afianzar la recuperación de la economía y reducir posibles efectos negativos de las restricciones que se han presentado al comercio y de 7 la apreciación del peso, la Junta Directiva de manera unánime acordó reducir 50 puntos básicos la tasa de intervención. Los miembros de la Corporación esperan estabilidad de la tasa de intervención en el futuro cercano. Esta disminución de la tasa de referencia continúa con la política monetaria expansiva adelantada desde finales del año pasado que ha permitido una disminución persistente de las tasas de interés de captación y colocación. La Junta Directiva espera que ésta tendencia continúe estimulando el crecimiento económico en un ambiente caracterizado por un sistema financiero saludable, en línea con la mejora de los indicadores de confianza de los consumidores y empresarios. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva acordó disminuir 50 pb la tasa de intervención del Banco de la República. De esta manera la tasa de interés de intervención del Banco será de 4%. Bogotá D. C., octubre 09 de 2009.
2009-10-01
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 23 de Octubre de 2009 El 23 de Octubre de 2009 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor en septiembre se situó en 3,21%, con un incremento de 8 pb con respecto al mes de agosto. En lo corrido del año hasta septiembre se acumuló una inflación de 2,12%, muy por debajo del mismo registro del año pasado (6,53%). Los indicadores de inflación básica continuaron disminuyendo. La variación anual de los precios de los alimentos aumentó de 1,46% en agosto a 2,2% en septiembre. El incremento anual de precios de los bienes regulados disminuyó de 3,5% en agosto a 2,5% en septiembre, debido al comportamiento de los combustibles y los servicios públicos. La variación anual de los precios de los bienes no transables sin alimentos ni regulados bajó de 4,9% en agosto a 4,8% en septiembre. Se destaca la caída de los rubros con baja indexación y de los arriendos. La 2 variación anual de precios de los rubros de alta indexación se mantuvo en niveles del 7%. El aumento anual de precios de bienes transables sin alimentos ni regulados cayó de 2,8% en agosto a 2,7% en septiembre. Con datos preliminares al 20 de octubre, las expectativas de inflación derivadas de las negociaciones de deuda pública para 1, 5 y 10 años, presentaron variaciones de 88 pb, 1 pb y -50 pb frente a los datos promedio de septiembre, ubicándose en 3,71%, 4,55% y 4,58%, respectivamente. La variación anual de los precios al productor (IPP) disminuyó de 1% en agosto a -1,5% en septiembre. b. Crecimiento Durante el tercer trimestre del año, la mayoría de los indicadores de actividad real mostraron menores caídas anuales, pero no evidenciaron crecimientos importantes en sus niveles. - La producción de la industria en el mes de agosto, según información del DANE, cayó 3,3% frente a agosto del año pasado, lo cual se compara favorablemente con lo que sucedió en los meses anteriores. - En niveles, la producción industrial (ajustada por estacionalidad) decreció en agosto frente a julio. Sin embargo, la misma serie ajustada por días hábiles mostró un resultado mayor en agosto frente a julio. - La ANDI reportó que el crecimiento año corrido a agosto del IPI (- 7,5%) se habría deteriorado aunque su nivel es mejor que el registrado a julio (-8,1%). Cabe comentar que en el pasado han existido grandes discrepancias entre las series del DANE y de la ANDI tanto en tasas de crecimiento año corrido como en tendencias. - La demanda de energía total (regulada y no regulada) creció en septiembre 3,0% en términos anuales. Para el tercer trimestre, este indicador creció 2,2% anualmente, registro mejor que el del primero y segundo trimestres (0,8% y 0,3%, respectivamente). 3 - Las licencias de construcción mostraron un aumento en niveles durante julio y agosto. - A partir de mayo y hasta agosto, las ventas reales del comercio al por menor aumentaron en niveles y el ritmo de decrecimiento anual ha disminuido (-0,9% anual en agosto frente a -3,7% en julio). - El indicador de confianza del consumidor de Fedesarollo disminuyó levemente en septiembre con respecto al mes anterior pero el promedio del tercer trimestre supera el del trimestre anterior. En lo corrido del año al mes de agosto de 2009, la balanza comercial fue superavitaria en US$874 m, inferior en US$1,112 m a lo registrado un año atrás. Esto se debió a una caída de las exportaciones de 19,4% superior a la de las importaciones (-16,5%). En agosto la balanza comercial fue superavitaria en US$260 m como consecuencia de superávit comerciales con Estados Unidos, Venezuela y Ecuador. Año corrido a agosto de 2009 las exportaciones totales en dólares (clasificación CIIU) se redujeron 19,4% respecto al mismo período del año 2008. La industria se contrajo 22,1%, el sector minero -17,2% y el agropecuario -12,1%. A pesar de dichas caídas, los niveles estuvieron cercanos a los del mismo período de 2007, excepto en el caso del sector minero que muestra una mejoría respecto a dicho año. Las exportaciones totales en dólares a Venezuela, que representan el 16%, registraron una caída de 9,8% año corrido. Esto se explicó, principalmente por las ventas del sector industrial, -12,5%. Las ventas a Venezuela durante agosto cayeron frente al mismo mes del año anterior - 45,7%, más de lo que venía sucediendo en meses anteriores. Las ventas a los Estados Unidos, que representa el 38% del total de las exportaciones, exhibieron un descenso, año corrido a agosto, de 22,5%. Dicha contracción se originó en las menores ventas en dólares del sector minero (26,2%) y del sector industrial (19,7%). En lo corrido del año al mes de agosto de 2009 las importaciones (CIF) ascendieron a US$21,293 m y disminuyeron anualmente 17,4%. La disminución más importante fue registrada por las importaciones de bienes 4 intermedios (28,8%), en particular las compras realizadas a los Estados Unidos. De acuerdo con la gran encuesta integrada de hogares (GEIH), el empleo creció en el trimestre móvil junio - agosto de 2009 a una tasa anual de 6,6% en el total nacional, y de 3,6% en las 13 áreas. Sin embargo, la oferta laboral (TGP) aumentó a un mayor ritmo, conduciendo a un aumento de la tasa de desempleo (TD), la cual se ubicó en el trimestre móvil terminado en agosto en 11,9% en el total nacional y 13% en las 13 áreas. c. Contexto externo Las condiciones económicas en los países desarrollados han mejorado en los últimos meses gracias a las acciones emprendidas por los gobiernos y bancos centrales. Estas medidas han permitido: (i) mejorar las condiciones de liquidez y estabilizar los mercados interbancarios, disminuyendo la percepción de riesgo; (ii) fortalecer las expectativas de consumidores y empresarios y (iii) evitar una mayor caída de la actividad económica. Las economías emergentes también muestran signos de recuperación, en especial las economías asiáticas. En China se espera un crecimiento de 8,5% para este año y de 9,0% para 2010. Para nuestros principales socios comerciales de la región se espera mejoría en 2010, aunque en el caso de Venezuela y Ecuador los pronósticos son menos optimistas. La recuperación de China y de algunas otras economías asiáticas ha reactivado la demanda por bienes básicos en lo corrido del año. Lo anterior con el debilitamiento del dólar, ha permitido sostener los precios de los productos básicos, lo cual favorece los términos de intercambio de los países latinoamericanos. En cuanto al comportamiento de las monedas de Latinoamérica, continúa la tendencia a la apreciación, con mayor intensidad en Brasil y Colombia. Desde marzo de 2009, el peso colombiano se ha apreciado frente a la mayoría de monedas. d. Variables financieras La base monetaria creció en septiembre a una tasa nominal anual de 6,1% comparado con una tasa anual de 15,3% un mes atrás. Esta 5 desaceleración se explicó por una caída en el crecimiento de la reserva bancaria, debido a un efecto estadístico relacionado con el fuerte crecimiento en septiembre del año anterior por el aumento del encaje bancario y la mayor percepción de riesgo en el sistema financiero que suscitó la quiebra de Lehman Brothers. Los pasivos sujetos a encaje también cayeron en los últimos meses. El descenso en los PSE puede estar asociado con la menor actividad económica y con una reasignación de portafolio de los agentes a favor de títulos de deuda pública. Como consecuencia de lo anterior, el agregado monetario más amplio – M3 – también mostró una desaceleración que se ha acentuado en los primeros días de octubre. Entre inicios de agosto y octubre 9, el crecimiento anual de M3 pasó de 13,2% a 9,7%, mientras que el crecimiento de los PSE pasó de 14,0% a 10,2%. La cartera bruta en moneda nacional del sistema financiero continuó desacelerándose. Al 9 de octubre, el crecimiento anual de este agregado fue de 7,3% frente a 9,5% un mes atrás. No obstante, los saldos se estabilizaron en las últimas semanas. El crecimiento anual de la cartera comercial a septiembre fue 8,4% frente a 12,4% del mes anterior. El crédito de consumo mantuvo un crecimiento anual muy bajo (0,2%) y el crédito hipotecario tendió a acelerarse (pasó de 11,9 en agosto a 12,9% en octubre 9). En agosto, el endeudamiento externo total (crédito directo del sector privado real más cartera en moneda extranjera de los bancos) cayó 8,1% en términos anuales (frente a 6,2% un mes atrás). A pesar de las tasas anuales negativas, en agosto el saldo del endeudamiento externo directo aumentó respecto al nivel del mes de julio. Así mismo, en septiembre se observó un aumento en el saldo de la cartera en moneda extranjera del sistema financiero respecto a agosto. En 2009 la colocación de bonos se consolidó como un instrumento complementario de financiación del sector real. En lo corrido del año hasta comienzos de octubre, el sector real emitió deuda por $6,2 billones, con un incremento del saldo entre enero y agosto por $2,8 billones. En el último mes se observó una caída en todas las tasas de interés nominales promedio mensuales, tanto pasivas como activas. El recorte de la 6 tasa de política por 50 pb efectuado por la JDBR el 25 de septiembre se trasmitió en su totalidad a la tasa del mercado monetario (TIB). También disminuyeron las tasas de captación y de los créditos comerciales, de consumo e hipotecarios. Adicionalmente, la disminución de la tasa de usura llevó a una caída en la tasa de tarjetas de crédito. Pese a las caídas en las tasas nominales, las tasas reales aumentaron debido a la reducción de la inflación sin alimentos. La curva de los TES registró movimientos a la baja de 42 pb, 47 pb y 49 pb en el tramo corto, medio y largo, respectivamente. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el ritmo de crecimiento de los precios y su tendencia a la baja; (ii) la variación de los precios de los alimentos que continua siendo baja; (iii) el efecto sobre la inflación total que podrían provocar los precios internacionales de los alimentos, las materias primas y el petróleo; (iv) el efecto que podría tener sobre el crecimiento de los precios el fenómeno del Niño; (v) la confianza de productores y consumidores que sigue estando por encima de los registros del primer semestre; (vi) la caída de los agregados monetarios y, en especial, del M3; (vii) la cartera del sistema financiero en moneda legal que aunque sigue cayendo crece por encima del PIB nominal; (viii) las emisiones de bonos que han complementado la financiación del sector real; (ix) el comportamiento de las tasas de interés del mercado en respuesta a la baja en la tasa de referencia del Banco; (x) el crecimiento negativo de los Estados Unidos y el menor crecimiento de Venezuela, Ecuador y otros socios comerciales; (xi) la apreciación reciente de la tasa de cambio (xii) el efecto de la tasa de cambio sobre la inflación y el crecimiento de los sectores transables; (xiii) el comportamiento de las tasas de interés de los títulos de deuda pública; y (xiv) el comportamiento de las expectativas de inflación de mediano y largo plazo. Los principales puntos de análisis entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para 2009 y 2010, en especial un eventual repunte en los precios de los regulados y de los alimentos debido al fenómeno climático del Niño; (ii) el efecto rezagado de las medidas de política monetaria sobre la producción y los precios; (iii) las proyecciones de crecimiento de la economía para lo que resta del año y del 2010 con una demanda interna más débil que la proyectada y un menor impulso fiscal el año entrante; (iv) la fuerte caída que se presentó en los últimos meses de las exportaciones a 7 Venezuela; (v) el comportamiento de la tasa de cambio en las últimas semanas; (vi) la caída de los agregados monetarios y sus posibles efectos en la reactivación económica; (vii) la reciente baja dinámica en la cartera comercial del sistema financiero y las causas de la misma; (viii) la necesidad de otorgar la liquidez de fin de año y la conveniencia de hacerlo de manera permanente; (ix) el balance de riesgos entre crecimiento e inflación en un contexto de desaceleración de la economía y caída de la inflación; (x) la pertinencia de continuar reduciendo la tasa de intervención ante la última información disponible; y (xi) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación alrededor de la meta de largo plazo. La Junta Directiva del Banco de la República acordó fijar como meta de inflación para el 2010 el rango entre 2% y 4%, con 3% como meta puntual para efectos legales. Este rango corresponde a la meta de largo plazo fijado años atrás por la Junta Directiva. Los miembros de la Junta consideraron que las condiciones de la economía permiten que en lo sucesivo la inflación se mantenga en el rango meta de largo plazo, lo cual contribuye a anclar las expectativas de inflación. Una inflación baja y estable es la mejor contribución que puede hacer la política monetaria al crecimiento sostenido de la economía y el empleo y a la competitividad nacional. La meta de inflación adoptada tiene en cuenta: • El resultado de la inflación a fin de año, cercano al 3%. Lo anterior, como resultado de la caída en los precios de los productos básicos en 2009 y el marcado debilitamiento de la demanda interna y externa causada por la crisis financiera internacional. • Las expectativas de lento crecimiento de la economía mundial en el 2010 y 2011 y el comportamiento a la baja de la inflación global. • La reciente evolución de los precios internacionales de los productos básicos, la demanda de nuestros principales productos de exportación en un contexto de bajo crecimiento de los socios comerciales y posibles choques futuros de oferta en los precios de alimentos y regulados. • El efecto rezagado de la política monetaria expansionista seguida por la Junta Directiva, las proyecciones de los modelos de inflación y las expectativas de inflación de los agentes. Por otra parte, la Junta decidió mantener inalterada la tasa de interés base para las subastas de expansión, que continuará en 4% y estima que la 8 meta de inflación fijada para el 2010 se podrá cumplir sin presiones al alza de la tasa de interés de intervención en el futuro cercano. Así mismo decidió dar una mayor proporción de liquidez permanente para atender las necesidades de liquidez que aumentan tradicionalmente en el fin de año. Para estos efectos comprará TES en el mercado secundario y divisas por un monto de tres millones de millones de pesos. Algunos directores expresaron su preocupación por la caída de los agregados monetarios y del crédito y su posible relación con el comportamiento de la actividad económica. Señalaron que el comportamiento de los agregados monetarios y crediticios puede estar reflejando un incremento en la percepción de riesgo por un debilitamiento de la actividad productiva mayor al previsto. En consecuencia, advirtieron sobre la necesidad de realizar un cuidadoso seguimiento de los agregados monetarios y del crédito y su posible incidencia en la postura de la política monetaria. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva acordó mantener inalterada la tasa de intervención del Banco de la República. De esta manera la tasa de interés de intervención del Banco será de 4%. Bogotá D. C., noviembre 06 de 2009.
2009-11-01
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 23 de Noviembre de 2009 El 23 de Noviembre de 2009 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor en octubre se situó en 2,72%, con una disminución de 49 pb con respecto al mes de septiembre. En lo corrido del año hasta octubre se acumuló una inflación de 1,98%, muy por debajo del mismo registro del año pasado (6,9%). Los indicadores de inflación básica continuaron disminuyendo. La variación anual de los precios de los alimentos descendió de 2,2% en septiembre a 1,6% en octubre. El incremento anual de precios de los bienes regulados disminuyó de 2,5% en septiembre a 1,7% en octubre, debido al comportamiento de todos los subgrupos que la componen y, en especial, de los servicios públicos. La variación anual de los precios de los bienes no transables sin alimentos ni regulados bajó de 4,8% en septiembre a 4,6% en octubre. Se destaca la caída de los rubros con baja indexación y de los arriendos. La 2 variación anual de precios de los rubros de alta indexación se mantuvo en niveles del 7%. El aumento anual de precios de bienes transables sin alimentos ni regulados cayó de 2,7% en septiembre a 2,1% en octubre. Con datos preliminares al 13 de noviembre, las expectativas de inflación derivadas de las negociaciones de deuda pública para 1, 5 y 10 años, presentaron variaciones de -31 pb, -57 pb y -31 pb frente a los datos promedio de octubre, ubicándose en 2,78%, 3,59% y 4,09%, respectivamente. La variación anual de los precios al productor (IPP) disminuyó de - 1,5% en septiembre a -4,7% en octubre. b. Crecimiento La mayoría de los indicadores de actividad real no muestran una profundización en la caída de la actividad económica, pero tampoco señalan un crecimiento generalizado. - La variación anual del índice de producción industrial sin trilla de café en septiembre fue de -3,8%. Con esta cifra, la contracción anual de la producción industrial del tercer trimestre se situó en 4,6%, caída que se compara favorablemente con las de los anteriores tres trimestres. - En niveles, la producción industrial (ajustada por estacionalidad) muestra un aumento pequeño en septiembre frente a agosto. - El indicador de existencias de la industria de la Encuesta de Opinión Empresarial (EOE) de Fedesarrollo de septiembre muestra una disminución leve respecto al nivel observado meses atrás. Por su parte, el indicador de pedidos de la misma encuesta se encuentra estancado desde hace varios meses. - La variación anual de las ventas en septiembre fue de -7,3%. Al desestacionalizar la serie, las ventas del comercio cayeron en septiembre a niveles de mediados de 2006. El Indicador de Confianza del Consumidor de Fedesarrollo disminuyó ligeramente en los meses de septiembre y octubre. 3 - El recaudo de IVA real al tercer trimestre también mostró una recuperación frente al segundo. - Las ventas al por menor de agosto cayeron a una tasa anual de 3,9%, que resulta menor que la observada en el segundo trimestre (-4,8%). En lo corrido del año hasta el mes de septiembre de 2009, la balanza comercial fue superavitaria en US$1.054 millones, inferior en US$500 m al del mismo período del año anterior. Año corrido a septiembre de 2009 las exportaciones totales en dólares (clasificación CIIU) se redujeron 18,5% respecto al mismo período del año 2008. Por origen, todas mostraron reducciones: -21,7% las industriales, - 16,2% las mineras y -7,2% las del sector agropecuario. Las exportaciones en dólares a Venezuela, que representan el 15% del total, registraron una caída de 14,2% año corrido. Las ventas a Venezuela durante septiembre cayeron frente al mismo mes del año anterior 49,5%, más de lo que venía sucediendo en meses anteriores. Las ventas a los Estados Unidos, que representa el 38% del total de las exportaciones, exhibieron un descenso, año corrido a septiembre, de 20,3%. Dicha contracción se originó en las menores ventas en dólares del sector minero (-23,6%) y del sector industrial (-19%). En lo corrido del año al mes de septiembre de 2009, las importaciones (CIF) ascendieron a US$24,039m, disminuyendo anualmente 18,7%. La disminución más importante fue registrada por las importaciones de bienes intermedios (29%), en particular las compras realizadas a los Estados Unidos. De acuerdo con la Gran Encuesta Integrada de Hogares (GEIH), el empleo creció en el trimestre móvil junio a septiembre de 2009 a una tasa anual de 5,1% en el total nacional, y de 2,6% en las 13 áreas. Sin embargo, la oferta laboral (TGP) aumentó a un mayor ritmo, conduciendo a un aumento de la tasa de desempleo (TD), la cual se ubicó en el trimestre móvil terminado en agosto en 12,2% en el total nacional y 13% en las 13 áreas. c. Contexto externo 4 Las condiciones económicas de los países desarrollados han mejorado en los últimos meses. Para el tercer trimestre de 2009, la mayoría de economías desarrolladas presentaron un crecimiento del PIB. En el caso de EEUU, el PIB creció 3,5% (t/a) en dicho período, siendo el consumo y la inversión las variables que más aportaron a este resultado. El sentimiento empresarial también ha continuado mejorando en los países industrializados, así como algunos indicadores de la actividad real, tales como las exportaciones y las ventas al por menor. Igualmente, los mercados financieros internacionales continuaron recuperándose, sobresaliendo las condiciones de liquidez y el comportamiento bursátil. Estas mejores perspectivas han llevado a que los analistas internacionales modifiquen sus pronósticos de crecimiento al alza, en particular los de EEUU, para 2010. Pese a lo anterior, existe todavía incertidumbre sobre el devenir económico de estos países. En particular, el débil mercado laboral y las restricciones al crédito bancario podrían atenuar la recuperación del consumo y la inversión en los próximos trimestres. En cuanto a los países emergentes, el comportamiento de la actividad económica ha sido bastante heterogéneo. En el caso de los países asiáticos, China ha consolidado su recuperación y muchos de sus indicadores reales muestran repuntes significativos, también liderados por gasto fiscal. Por su parte, el desempeño de India también es positivo aunque con una recuperación menos marcada. Para América Latina las señales son mixtas. Las exportaciones en algunos países de la región han mejorado en el último trimestre. En Brasil y Chile hay una recuperación de la actividad industrial, mientras que para el resto de los países de la región las señales son menos claras. En el caso de la economía venezolana, el PIB real presentó una contracción anual de 4,5% durante el tercer trimestre de 2009, mientras el mercado esperaba contracciones anuales cercanas al 1,5% para el mismo periodo. Aunque el gasto del gobierno mantuvo su dinámica, el consumo privado y la formación bruta de capital fijo presentaron importantes retrocesos. Lo anterior ha llevado a que se proyecte una caída de 2% para el 2009. Las monedas de la región han mantenido una tendencia de apreciación en lo corrido del año. Sin embargo, en el último mes en la mayoría de países la 5 tasa de cambio se estabilizó e incluso se depreció, excepto por Chile, que ha continuado apreciándose. d. Variables financieras La tasa de crecimiento anual de M3, que se había desacelerado hasta mediados de octubre, se estabilizó alrededor de 10% en las últimas tres semanas (del 16 octubre al 6 de noviembre). Lo anterior se explica principalmente por los pasivos sujetos a encaje –PSE-. Por su parte, la variación anual del efectivo que crecía 0,7% anual en octubre, mostró una leve recuperación y a noviembre 6 se ubicó en 3,7%. En términos reales (deflactando por el IPC sin alimentos), en octubre las tasas de crecimiento de los promedios de M3, los PSE y el efectivo se ubicaron en 6,5%, 7,2% y 1,7%, respectivamente La cartera bruta en moneda nacional continuó desacelerándose. En noviembre 6, la tasa de crecimiento anual se ubicó en 5,1%, cuando un mes atrás lo hacía a un ritmo de 7,3%. La cartera bruta comercial fue la que presentó la mayor caída en el ritmo anual de crecimiento, al pasar de 8,4% en octubre 9 a 6,3% en noviembre 6. En cuanto a la cartera de consumo, ésta se mantuvo a lo largo del mes en niveles similares a los observados un año atrás. Por su parte, la cartera hipotecaria siguió consolidando su aceleración entre octubre 6 y noviembre 9 pasó de crecer 12,9% a 15,7% en términos anuales. De ésta manera, en términos reales (con IPC sin alimentos), a noviembre 6 el crecimiento de la cartera en moneda nacional se ubicó en 2%, el de la comercial en 3,1%, el de la hipotecaria en 12,3% y el de la de consumo en - 3,2% Parte de la desaceleración en la cartera comercial se explica por la emisión de deuda de las empresas. Con información a septiembre, la cartera comercial más bonos crecía 13,4%, cifra superior en 320 pb al crecimiento de la cartera comercial. Otro factor detrás de la desaceleración de la cartera en moneda nacional está asociado con el mayor ritmo de castigos de cartera, que durante los últimos 12 meses pasó de $5.5 a $7.5 b. En materia de tasas de interés, el recorte de 50 pb en la tasa de política (25 de septiembre) se reflejó en su totalidad en las tasas del mercado monetario y se ha transmitido rápidamente a las tasas de captación y de créditos comerciales (exceptuando construcción). Adicionalmente, la 6 reducción de la tasa de usura a partir del 1 de octubre (206 pb) aceleró el descenso de las tasas de crédito con tarjeta. La reducción de las tasas nominales promedio en octubre fue similar a la desaceleración de la inflación sin alimentos y, por tal motivo, en términos reales las tasas de interés permanecieron relativamente estables (con excepción de la tasa de tarjeta de crédito, -116 pb y de consumo, -33 pb). Entre el 23 de octubre al 13 de noviembre de 2009, la curva de los TES registró movimientos a la baja de 45 pb, 111 pb y 70 pb en el tramo corto, medio y largo, respectivamente. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) la profunda y rápida caída en el ritmo de crecimiento de los precios durante el mes, no esperada por el mercado ni por los trabajos técnicos del Banco; (ii) la continua disminución en los indicadores de inflación básica y de las expectativas de inflación que se sitúan en el rango meta fijado por la Junta Directiva para el año entrante; (iii) la reducción generalizada del crecimiento de los precios, frente a otros meses en los cuales las reducciones se debieron básicamente a bajas en alimentos y regulados; (iv) el efecto transitorio que podría tener sobre el crecimiento de los precios el fenómeno del Niño; (v) el estancamiento en el crecimiento de los indicadores de confianza de productores y consumidores; (vi) la recuperación del M3 y , en especial, de los pasivos sujetos a encaje; (vii) la cartera del sistema financiero en moneda legal que, aunque sigue cayendo, crece por encima del PIB nominal; (viii) las emisiones de bonos que han complementado la financiación del sector real; (ix) el comportamiento de las tasas de interés del mercado en respuesta a la baja en la tasa de referencia del Banco; (x) la contracción del crecimiento de la economía venezolana para este año y sus perspectivas para el 2010; (xi) el efecto de la tasa de cambio sobre la inflación y el crecimiento de los sectores transables; y (xiii) el comportamiento de las tasas de interés de los títulos de deuda pública. Los principales puntos de análisis entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para 2009 y 2010, en especial un eventual repunte en los precios de los regulados y de los alimentos debido al fenómeno climático del Niño; (ii) el efecto rezagado de las medidas de política monetaria 7 sobre la producción y los precios; (iii) las proyecciones de crecimiento de la economía para lo que resta del año y del 2010 con una demanda interna más débil que la proyectada y un menor impulso fiscal el año entrante; (iv) la fuerte caída que se presentó en los últimos meses de las exportaciones a Venezuela y en el producto de ese país; (v) el comportamiento de la tasa de cambio en las últimas semanas; (vi) el comportamiento de los agregados monetarios y sus posibles efectos en la reactivación económica; (vii) la baja dinámica reciente en la cartera comercial del sistema financiero y las causas de la misma; (viii) el balance de riesgos entre crecimiento e inflación en un contexto de desaceleración de la economía y caída de la inflación; (ix) la pertinencia de continuar reduciendo la tasa de intervención ante la última información disponible; y (x) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación alrededor de la meta de largo plazo. La Junta Directiva destacó lo siguiente sobre el comportamiento de la inflación durante el mes: (i) la inflación anual al consumidor disminuyó en octubre más rápido de lo esperado; (ii) los indicadores de inflación básica continuaron cayendo; (iii) las expectativas de inflación siguen disminuyendo; (iv) si bien el comportamiento a la baja de la inflación ha estado liderado por los precios de los alimentos y los regulados, las reducciones mensuales en precios han sido más generalizadas abarcando una amplia variedad de bienes y servicios y (v) las proyecciones para fin de año muestran que la inflación se ubicará por debajo del punto medio del rango meta de largo plazo (3%). En cuanto al contexto externo, se señaló que éste ha mejorado en los últimos meses, lo que ha llevado a que los analistas internacionales aumenten sus pronósticos de crecimiento económico para el 2010 en la mayoría de los países y, en particular, en los Estados Unidos. No obstante, las proyecciones de crecimiento para Venezuela muestran una caída importante del PIB tanto para este año como para 2010 lo que, conjuntamente con las mayores restricciones al comercio, afectará las exportaciones colombianas a ese país. Por otra parte, la información disponible a septiembre no refleja nuevas caídas en los niveles de actividad económica en el país, pero tampoco una reactivación vigorosa. A lo anterior se suma que la cartera en moneda nacional se sigue desacelerando. La política monetaria expansiva ha permitido una disminución persistente de las tasas de interés de captación y colocación. La Junta 8 Directiva espera que esta tendencia continúe estimulando el crecimiento económico en un ambiente caracterizado por un sistema financiero saludable. La mayoría de los miembros de la junta consideraron que una reducción de 50 puntos básicos de la tasa de intervención afianzará la recuperación de la economía y reducirá los efectos negativos de la caída del comercio con Venezuela. Esta reducción de la tasa de interés de intervención corrige el aumento de la tasa de interés real causado por la reducción de la inflación y sus expectativas y es coherente con la meta de inflación fijada para el 2010. Otros directores manifestaron su temor sobre la extemporaneidad de la medida debido al rezago natural entre la misma y sus efectos plenos sobre la demanda, y señalaron que una nueva disminución de las tasas de interés podría dificultar el cumplimiento de la meta de inflación para el 2010 y, en consecuencia, que la Junta tenga que aumentar su tasa de intervención en una coyuntura en la cual no se haya consolidado la recuperación de la economía. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva por mayoría acordó reducir en 50 pb la tasa de intervención del Banco de la República. De esta manera la tasa de interés de intervención del Banco será de 3,5%. Bogotá DC, diciembre 04 de 2009.
2009-12-01
MINUTAS DE LA REUNIÓN DE LA JUNTA DIRECTIVA DEL BANCO DE LA REPÚBLICA DEL 18 DE DICIEMBRE DE 2009 El 18 de diciembre de 2009 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del ministro de Hacienda y Crédito Público, Óscar Iván Zuluaga, el gerente general, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor en noviembre se situó en 2,37%, con una disminución de 35 puntos básicos (pb) con respecto al mes de octubre. En lo corrido del año hasta noviembre se acumuló una inflación de 1,92%, muy por debajo del mismo registro del año pasado (7,2%). Los indicadores de inflación básica continuaron disminuyendo. La variación anual de los precios de los alimentos descendió de 1,6% en octubre a 0,7% en noviembre. El incremento anual de precios de los bienes regulados disminuyó de 1,7% en octubre a 1,5% en noviembre, destacándose la caída del transporte público. La variación anual de los precios de los bienes no transables sin alimentos ni regulados bajó de 4,6% en octubre a 4,5% en noviembre. Se destaca la caída de los arriendos que pasó de 4,4% a 4,2%. La variación anual de precios de los rubros de alta indexación disminuyó ubicándose en 6,8%, mientras que la de los menos indexados pasó de 3,6% en octubre a 3,8% en noviembre. El aumento anual de precios de bienes transables sin alimentos ni regulados cayó de 2,1% en octubre a 1,94% en noviembre. 2 Las expectativas de inflación para diciembre derivadas de las negociaciones de deuda pública para 1, 5 y 10 años, presentaron variaciones de -1 pb, -23 pb y -32 pb frente a los datos promedio de noviembre, ubicándose en 2,57%, 3,17% y 3,67%, respectivamente. La variación anual de los precios al productor (IPP) fue de -3,9%, ligeramente mayor que la del mes pasado (-4,1%). b. Crecimiento La información disponible a noviembre muestra que los niveles trimestrales del PIB se siguen recuperando, aunque con tasas anuales de crecimiento bajas: • La información para el tercer trimestre muestra que sectores como el minero y las obras civiles, siguen jalonando el crecimiento de la economía. Sin embargo, otras actividades importantes como la industria, las edificaciones, el comercio y el transporte continúan con una baja dinámica, pero con señales de recuperación. • La producción industrial medida por la ANDI del año corrido a octubre fue de -6,9% frente al registrado año corrido a septiembre (-7,3%). • El indicador de existencias de la industria de la Encuesta de opinión empresarial (EOE) de Fedesarrollo de octubre muestra una disminución leve respecto al nivel que venía observando, mientras que el indicador de pedidos de la misma encuesta se recuperó frente a lo ocurrido meses atrás. • El crecimiento anual de la demanda de energía para el mes de noviembre fue de 3,3%, superior al de octubre y al del promedio del tercer trimestre (1,2% y 2,2%, respectivamente). • El indicador de confianza del consumidor de Fedesarrollo creció significativamente en noviembre y se ubicó en el nivel más alto desde septiembre de 2008, cuando se presentó la quiebra de Lehman Brothers. El aumento en este índice se debe principalmente a la mejor percepción de los hogares sobre las condiciones económicas actuales. Al promediar los registros de octubre y noviembre, se observa un aumento en el indicador en el cuarto trimestre con relación al del tercer trimestre. • De acuerdo con el Comité de la Industria Automotriz Colombiana, la caída anual en las ventas de automóviles particulares, utilitarios y pick ups disminuyó en los últimos dos meses y, en niveles, muestran una ligera recuperación. • Las importaciones de bienes de capital en pesos constantes continuaron cayendo en el cuarto trimestre. 3 A nivel mensual, en octubre la balanza comercial (FOB) registró un superávit de US$134 millones (m). En el año corrido (enero-octubre) continúa registrando un saldo positivo de US$1.188 m, nivel similar al del mismo periodo del año anterior. En octubre las exportaciones totales continuaron registrando una caída con respecto al mismo mes del año anterior (-5,5%), especialmente las de origen industrial. En lo corrido del año (enero-octubre) las exportaciones totales disminuyeron 17,3% con respecto al mismo período del año anterior. Sin embargo los niveles de 2009 son cercanos a los de 2007, con excepción de las del sector minero cuyo valor ha sido mayor. Para el mismo período, todos los sectores exhibieron caídas en valores, en tanto que en volúmenes sólo el sector industrial mostró una reducción. En lo corrido de 2009 (enero- octubre), las exportaciones a los Estados Unidos son las que han presentado la mayor caída en valores absolutos (US$ 2.089 m). Por su parte, en términos porcentuales las mayores caídas se han registrado en las ventas a Venezuela: en octubre 73,3% con respecto al mismo mes del año anterior y entre enero y octubre 22% anual. En octubre el valor de las importaciones CIF fue menor en 20% al del mismo mes del año anterior, destacándose la caída de las importaciones de bienes intermedios. En lo corrido del año las importaciones totales cayeron 18,9%. c. Contexto externo La mayoría de economías desarrolladas presentó una expansión económica en el tercer trimestre respecto al segundo, con excepción del Reino Unido donde el PIB se contrajo nuevamente. A lo anterior se suma el resultado positivo en el mercado laboral de los Estados Unidos que, de acuerdo con varios analistas, puede marcar un quiebre en la tendencia. Sin embargo, otros indicadores disponibles para el cuarto trimestre sugieren un crecimiento lento para finales de año en varios países industrializados, incluso menor al del tercer trimestre. Algunos indicadores de producción y ventas que venían creciendo, mostraron algunos retrocesos. Durante el último mes y medio, las primas de riesgo de la deuda soberana de dichos países aumentaron, especialmente en el caso de los Estados Unidos y Japón, algo que podría guardar relación con el gran incremento que registra la deuda pública de muchas de estas economías en un entorno de bajo crecimiento. Respecto a las economías de América Latina, los resultados del PIB para el tercer trimestre muestran una contracción anual menor que la del segundo en países como Brasil, Perú, Chile y México. Una excepción es Venezuela en donde el crecimiento fue de -4,5%, frente a -2,4% en el segundo trimestre. Las monedas de la región no presentaron cambios relevantes frente al dólar y tendieron a estabilizarse en noviembre y lo corrido de diciembre. Lo mismo ocurrió con las primas de riesgo, las cuales se han estabilizado en 4 niveles previos a la crisis, destacándose que el impacto de la declaración de moratoria de Dubai fue mínimo. En materia de precios, el descenso de la inflación ha continuado de manera significativa, sobre todo en el caso de Chile, Perú y Colombia. d. Variables financieras El crecimiento anual del M3 que venía desacelerándose desde mediados de agosto, se estabilizó en noviembre a una tasa promedio cercana a 9,4%. La misma tendencia presentaron los pasivos sujetos a encaje (PSE) que en el mismo mes crecieron 10,2% en promedio. En términos reales (descontando inflación sin alimentos), los PSE aumentaron anualmente 7% en noviembre. La cartera bruta en moneda nacional (M/N) continuó desacelerándose, principalmente a causa de la comercial. Entre finales de octubre y noviembre, la variación anual de la cartera bruta total (M/N) pasó de crecer 6,7% a 5,3%. En las mismas fechas, la cartera comercial se desaceleró de 6,1% a 4,8%, mientras que la hipotecaria subió de 13,9% a 14,5%. En cuanto a la cartera de consumo, desde el último trimestre de 2008, su nivel se ha mantenido alrededor de $40 billones (b), y al 27 de noviembre de 2009 presentó un crecimiento anual de 0,8%. En términos reales, en noviembre las tasas de crecimiento anual de la cartera fueron: total 2,7%, comercial (incluye leasing) 3,0%, consumo -2,9%, hipotecaria ajustada 11,0% y microcrédito 33,1%. El sector real continuó aumentando su financiación con emisión de títulos. Estimaciones hechas por el equipo técnico del banco con información de la Superintendencia Financiera muestran que la cartera comercial más bonos del sector real se ubicó en niveles cercanos a $100,5 b. En cuanto a las tasas de interés, la última reducción en la tasa de política se transmitió con mayor intensidad a las tasas del mercado monetario y a las de crédito comercial y de consumo. La condición de deudor neto del Banco de la República con el sistema financiero observada desde finales de noviembre contribuyó para que las tasas del mercado monetario (TIB e IBR) se mantuvieran en niveles inferiores (15 pb en promedio) a la de expansión del Banco de la República. Entre octubre 30 y el 4 de diciembre, la tasa DTF disminuyó 10 pb y presentó un promedio de 4,4%. En el mismo período, la tasa de CDT total descendió 44 pb y se ubicó al inicio de diciembre en 4,42%. Con excepción de las tasas de interés para la construcción, de adquisición de vivienda y de tarjeta de crédito, las demás tasas siguen recibiendo la transmisión plena de la reducción de la tasa de política. Entre octubre 30 y noviembre 27 las tasas de créditos ordinarios, preferenciales, de tesorería y de consumo descendieron en su orden, 90 pb, 75 pb, 33 pb y 46 pb En las mismas fechas las tasas de interés de la construcción subieron 45 pb y la de adquisición de vivienda disminuyó 8 pb. Las de tarjeta continúan acotadas por la tasa de usura. 5 En términos reales, la tasa activa promedio a noviembre (metodología BR) se situó en 7,12%, nivel más bajo desde junio de 2000 e inferior a su promedio histórico calculado desde 1986. La curva de los TES entre el 24 de noviembre y el 11 de septiembre registró movimientos a la baja de 26 pb, y 11 pb en el tramo corto y medio, respectivamente. El tramo largo aumentó 14 pb, llevando a un empinamiento de la curva. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: i) la caída en el ritmo de crecimiento de los precios durante el mes, superior a lo esperado por el mercado y los trabajos técnicos del Banco; ii) la continua disminución en los indicadores de inflación básica y de las expectativas de inflación que se sitúan en el rango meta fijado por la Junta Directiva para el año entrante; iii) la reducción del crecimiento de los precios nuevamente fue generalizada; iv) el efecto transitorio que podría tener sobre el crecimiento de los precios el fenómeno del Niño; v) la mejora en el crecimiento de los indicadores de confianza de productores y consumidores; vi) la recuperación del M3 y, en especial, de los pasivos sujetos a encaje; vii) la cartera del sistema financiero en moneda legal que, aunque sigue cayendo, crece por encima del PIB nominal; viii) las emisiones de bonos que han complementado la financiación del sector real; ix) el comportamiento de las tasas de interés del mercado en respuesta a la baja en la tasa de referencia del Banco; x) la contracción del crecimiento de la economía venezolana para este año y sus perspectivas para 2010; xi) el efecto de la tasa de cambio sobre la inflación y el crecimiento del producto de los sectores transables; y xii) el comportamiento de las tasas de interés de los títulos de deuda pública. Los principales puntos de análisis entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: i) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para 2009 y 2010, en especial un eventual repunte en los precios de los regulados y de los alimentos debido al fenómeno climático de El Niño; ii) el efecto rezagado de las medidas de política monetaria sobre la producción y los precios; iii) las proyecciones de crecimiento de la economía para lo que resta del año y 2010 con una demanda interna más débil que la proyectada, aunque recuperándose y un menor impulso fiscal el año entrante; iv) la fuerte caída que se presentó en los últimos meses de las exportaciones a Venezuela y en el producto de ese país; v) el comportamiento de los agregados monetarios y sus posibles efectos en la reactivación económica; vi) la dinámica reciente en la cartera comercial del sistema financiero ; vii) el balance de riesgos entre crecimiento e inflación en un contexto de desaceleración de la economía y caída de la inflación; y viii) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación alrededor de la meta de largo plazo. La Junta Directiva destacó lo siguiente sobre el comportamiento de la inflación durante el mes: i) la inflación anual al consumidor en el mes de noviembre mantuvo la tendencia descendente que viene observando a lo largo del año; ii) los indicadores de inflación básica 6 y las expectativas de inflación continuaron disminuyendo; iii) la caída generalizada de los precios de los distintos rubros que componen la canasta, abarcando así una amplia variedad de bienes y servicios; iv) la inflación a fin del año se ubicará por debajo del punto medio del rango meta de largo plazo (3%) y cercana al 2%. Si bien el contexto externo ha mejorado en los últimos meses, la recuperación económica de los países desarrollados sigue siendo lenta. Las perspectivas de mediano y largo plazo para las economías de la región y de otros países emergentes son más favorables. No obstante, las proyecciones de crecimiento para Venezuela muestran una caída importante del PIB tanto para este año como para 2010. La información disponible muestra que los niveles trimestrales del PIB se siguen recuperando con tasas anuales de crecimiento bajas. Se destaca que el indicador de confianza del consumidor de Fedesarrollo creció significativamente en noviembre. La Junta Directiva considera que la política monetaria expansiva ha permitido una disminución persistente de las tasas de interés de captación y colocación y que el actual nivel de la tasa de referencia continúe estimulando el crecimiento económico en un ambiente caracterizado por un sistema financiero saludable. En consecuencia se acordó mantener inalterada la tasa de intervención del Banco en los niveles actuales. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva acordó mantener inalterada la tasa de intervención del Banco de la República en 3,5%. Bogotá D. C., 30 de diciembre de 2009
2010-01-01
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 29 de Enero de 2010 El 29 de Enero de 2010 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor en diciembre se situó en 2%, con una disminución de 37 pb respecto al mes de noviembre. Por su parte, la inflación mensual (0,08%) fue positiva por primera vez en tres meses. Los indicadores de inflación básica continuaron disminuyendo. La variación anual de los precios de los alimentos descendió de 0,7% en noviembre a -0,3% en diciembre. El incremento anual de precios de los bienes regulados pasó de 1,5% en noviembre a 2,6% en diciembre, debido a aumentos en los servicios públicos. La variación anual de los precios de los bienes no transables sin alimentos ni regulados bajó de 4,5% en noviembre a 4,4% en diciembre. Se destaca la variación anual de los arriendos que pasó de 4,2% a 3,9% en el mes. La de los de alta indexación se mantuvo en 6,8%, mientras que la de los menos indexados pasó de 3,8% en noviembre a 3,7% en diciembre. 2 El aumento anual de precios de bienes transables sin alimentos ni regulados cayó de 1,9% en noviembre a 1,4% en diciembre. Las expectativas de inflación derivadas de las negociaciones de deuda pública para 1, 5 y 10 años, se ubicaron en 3,07%, 4,17% y 4,47%, respectivamente, con variaciones de 111 pb, 69 pb y 33 pb frente a los datos promedio de diciembre. La variación anual de los precios al productor (IPP) fue de -2,2% frente a -3,9% del mes pasado. b. Crecimiento A finales de diciembre, el DANE dio a conocer el crecimiento anual del PIB de -0,2% para el tercer trimestre del año pasado. Comparado con el del segundo trimestre, el PIB del tercero aumentó 0,2%, completando tres períodos sucesivos de expansión lenta del PIB en términos trimestrales. En variaciones anuales, la contracción del PIB en el tercer trimestre de 2009 estuvo asociada con la caída en la inversión. El DANE registró un descenso en la formación bruta de capital, que se explica por una fuerte disminución de la inversión diferente a obras civiles. El otro componente de la demanda interna, el consumo (público más privado) contribuyó positivamente a la variación anual del PIB en este periodo. En el consumo privado específicamente, el crecimiento anual fue nulo, lo que sin embargo implica una mejora frente a las caídas de los dos trimestres anteriores y, en niveles, resulta ligeramente superior al de estos. En cuanto al consumo del gobierno, en el tercer trimestre se registró el mayor crecimiento anual en lo corrido del año. En lo que respecta a la demanda externa, las exportaciones disminuyeron en términos anuales debido a menores ventas de café por la caída en su producción y a las exportaciones a Venezuela, lo que se sumó a la contracción de la demanda externa por cuenta de la crisis internacional. Por otro lado, las importaciones volvieron a caer más que las exportaciones, esto hizo que la demanda externa realizara un aporte positivo al crecimiento anual del PIB. Por ramas de actividad económica, los sectores que explicaron la caída anual del PIB fueron, en su orden: industria, comercio, construcción de 3 edificaciones y transporte. Los sectores que más contribuyeron de manera positiva a la variación anual del PIB del tercer trimestre fueron construcción de obras civiles y minería. Para el cuarto trimestre de 2009, la mayoría de los indicadores disponibles muestran una expansión de la actividad económica en términos de crecimientos anuales. - La variación anual a noviembre del índice de producción industrial (IPI) sin trilla de café publicada por el DANE fue de 2,0%, el mejor registro para un crecimiento anual de un mes desde abril de 2008. - En los últimos tres meses a noviembre, se observaron signos de reactivación en cerca de la mitad de ramas industriales, dentro de las que se encuentran sustancias químicas, muebles, tabaco y productos metálicos. Sin embargo, otras ramas como prendas de vestir, papel, derivados del petróleo, vidrio, cemento y aparatos eléctricos entre otros, siguieron sin mostrar señales de recuperación. Algunas de estas industrias estarían siendo afectadas por las restricciones comerciales de Venezuela. - La demanda total de energía (regulada y no regulada) creció a una tasa anual de 3,4% en diciembre y de 2,6% en todo el último trimestre, siendo el registro más alto desde finales de 2007. - El Índice de Confianza del Consumidor de Fedesarrollo (ICC) con datos trimestralizados aumentó en el cuarto trimestre, a pesar de la caída que se observó en el dato mensual de diciembre. - Las ventas al por menor en noviembre crecieron 2,0% en términos anuales. En niveles, las ventas desestacionalizadas mostraron un aumento frente a meses anteriores, con excepción de alimentos y bebidas - A diferencia del consumo, la inversión (por lo menos la que no incluye obras civiles ni construcción de edificaciones) mantuvo crecimientos estables a finales de 2009. De acuerdo con la balanza de pagos observada al tercer trimestre de 2009, el déficit en cuenta corriente fue de US$3.456 millones (m) (2,1% del PIB), menor en US$737 m al déficit registrado en el mismo período de 2008. 4 Dicha reducción se originó por una caída mayor en los egresos corrientes (- US$7.019 m) que la de los ingresos corrientes (-US$6.282 m). Dicho déficit se financió con entradas de capital por US$ 4.894 m (3 % del PIB), que provinieron principalmente de recursos del sector público (incluido Ecopetrol) por US$ 6.165 m. El superávit de la cuenta de capital y financiera es menor en US$ 2.166 m que el registrado durante el mismo período de 2008, lo cual se explica por una disminución en los flujos netos de capital por inversión extranjera directa (-US$ 2.410 m), mayores pagos de deuda y constitución de inversiones de colombianos en el exterior. En noviembre de 2009, las exportaciones totales en dólares presentaron un crecimiento de 25,9% anual, principalmente por un aumento de 61,6% en las exportaciones con destino a Estados Unidos. Dicho comportamiento se debe en gran parte a un efecto base, dado el bajo nivel alcanzado por las exportaciones en el mes de noviembre de 2008 (un poco mas de US$ 2.000 millones). Por su parte, en el mismo mes, las exportaciones mensuales a Venezuela cayeron 71,5% en términos anuales. Aunque entre enero y noviembre de 2009 las exportaciones totales en dólares cayeron 14,4% anual, los niveles son superiores a los del mismo período de 2007 (US$29.660 m en 2009 vs US$ 26.815 m en 2007). Durante este período, la caída acumulada de las ventas externas a Estados Unidos fue 12,7%, a Venezuela 28,2% y a Ecuador 17%. En valores todos los sectores exhibieron caídas (industrial -21%, minero -7,2% y agropecuario -1,6%), en tanto que en volúmenes sólo el sector industrial mostró una reducción (- 19,4%). En lo corrido del año al mes de noviembre de 2009, las importaciones (CIF) ascendieron a US$ 29.836 m, disminuyendo 18,5% en términos anuales. La importación de bienes intermedios se redujo en -27,6%, las de bienes de consumo -12,5% y de capital -10,2%. En volúmenes las importaciones totales también disminuyeron 7,6% en el acumulado a noviembre. A nivel mensual, en noviembre de 2009 el valor de las importaciones fue inferior con respecto al registrado en el mismo período del año anterior (-14,2%), principalmente por una caída de las importaciones de bienes de capital de 21,6%. La gran encuesta integrada de hogares (GEIH) muestra un aumento del empleo para el trimestre móvil septiembre - noviembre de 2009 de 4,3% anual en las 13 principales áreas urbanas. Al analizar las series desestacionalizadas 5 se observa un aumento en los niveles de ocupación en la segunda mitad de 2009 frente al primer semestre. Sin embargo, este aumento se concentró en los trabajadores no asalariados toda vez que el empleo asalariado se mantuvo estancado a lo largo del año. c. Contexto externo Durante el cuarto trimestre de 2009, la economía mundial continuó recuperándose gracias al dinamismo de los países del Asia. Esta reactivación se reflejó desde mediados de año en un crecimiento del comercio internacional, que alcanzó en algunos países niveles similares a los de 2007. Los principales analistas consideran que la economía mundial en el 2010 seguirá siendo liderada por Asia, lo que favorecerá los términos de intercambio en Colombia y otros países de la región. Pese a ello, los riesgos en las economías desarrolladas siguen siendo altos, por lo que todavía se espera una recuperación lenta en 2010. Por esta razón, los pronósticos de crecimiento solo se aumentaron levemente, en especial para EEUU. En materia de precios, si bien la inflación anual aumentó en los últimos meses en los países industrializados, esto se explica por efectos de una menor base en la segunda mitad de 2008 (por la caída en los precios de la energía). Sin embargo, la inflación básica se ha mantenido estable y en algunos casos ha disminuido. En vista de ello y del débil crecimiento previsto, no se esperan presiones inflacionarias importantes durante los próximos trimestres: los analistas proyectan una inflación para EEUU de 2,1% en 2010 y de 2% en 2011 En cuanto a las economías emergentes, la recuperación económica ha sido liderada por los países del Asia, en particular China e India. China reportó un crecimiento anual de 10,7% en el cuarto trimestre, con lo cual dicha economía creció 8,7% en 2009. Respecto a América Latina, algunos países como Brasil y Chile muestran claros signos de recuperación y en el tercer trimestre, varios países de la región alcanzaron los niveles de PIB de 2008. Durante el último trimestre de 2009 la mayoría de monedas de la región se apreciaron. Sin embargo en las últimas cuatro semanas terminadas el 25 de enero el comportamiento fue mixto: mientras que Brasil y Chile se han depreciado, Colombia y Perú han reportado apreciaciones. Adicionalmente, en Venezuela el gobierno decretó una importante devaluación del bolívar. Las 6 primas de riesgo han permanecido estables y se ubican en niveles anteriores a la quiebra de Lehman Brothers d. Variables financieras El M3 pasó de crecer 16,4% anual en julio de 2009 a 10,3% en septiembre del mismo año y a 7,3% en enero 15 de 2010. El comportamiento de los Pasivos Sujetos a Encaje –PSE-, especialmente de los CDT, explica la mayor parte de la desaceleración de M3. No obstante lo anterior, el M3 continúa aumentando más que la actividad económica y la relación M3/ PIB se encuentra en el nivel máximo calculado desde diciembre de 1989. En el mercado del crédito, tanto en los datos como en las expectativas sobre la evolución de la cartera bruta total se observan señales de estabilización. En algunas modalidades como la cartera hipotecaria y la de consumo, se registran signos de recuperación. En el caso de la cartera comercial, su desaceleración ha sido compensada por el incremento en la colocación de bonos emitidos por grandes empresas. En septiembre de 2009 la cartera bruta total creció 8,1% anual, mientras que a diciembre y lo corrido de enero del presente año, lo hizo a un ritmo de 4,9% y 5,3%, respectivamente. Por modalidades, la más dinámica ha sido la hipotecaria que pasó de un crecimiento anual de 14,6% en septiembre a 18,3% anual en lo corrido de enero. En las mismas fechas el ritmo de aumento anual de la de consumo pasó de 0,6% a 1,5% y la comercial de 9,3% a 4%. Parte de la desaceleración de la cartera comercial se explica por la emisión de bonos de las empresas. Al sumar bonos corporativos más cartera comercial su saldo se mantuvo estable en el último trimestre de 2009, con crecimientos nominales y reales de 5,3% y 2,9%, respectivamente. Con respecto a la disponibilidad de crédito, la última encuesta trimestral realizada por el Banco de la República a empresarios, comerciantes, transportadores, analistas financieros, académicos y sindicatos, muestra que en su mayoría los agentes de la economía la perciben como alta, tendencia que ha sido creciente desde el primer trimestre de 2009. Por el lado de la oferta de crédito ganó terreno la preferencia hacia el otorgamiento de crédito, especialmente a las empresas que producen para el mercado interno y a las empresas con inversión extranjera. En la misma encuesta se observa que el sistema financiero está más dispuesto a atender las solicitudes de crédito y no 7 contempla aumentar los requerimientos de aprobación, con la posibilidad incluso de que los disminuyan. En materia de tasas de interés, las del mercado interbancario a 1 día se acercaron a la tasa de referencia del Banco y las activas y pasivas continuaron descendiendo. Al 22 de enero, la DTF se situó en 4,10%, cuando cuatro y trece semanas atrás eran 4,14% y 4,45% respectivamente. En el caso de créditos comerciales, en enero 15 las tasas de interés de préstamos ordinarios fueron 10,56%, la de crédito preferencial 7,63%, y la de tesorería 7,12%. En su orden, estas cifras fueron menores en 4 pb, 15 pb y 2 pb a las de un mes atrás. En el trimestre y en el mismo orden, los descensos fueron de 60 pb, 57 pb y 67 pb. En los créditos a los hogares también se presentaron caídas en las tasas de interés. Para el consumo, los registros a octubre 16, diciembre 11 y enero 15 fueron 21,20%, 20,43% y 19,98%, respectivamente. En las mismas fechas para los créditos de vivienda las observaciones fueron 14,14%, 13,84% y 13,66%. La curva de los TES entre el 21 de diciembre y el 26 de enero registró movimientos al alza de 63 pb, 91 pb y 34 pb en el tramo corto, medio y largo respectivamente. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el resultado de la inflación a fin de año y la caída en el ritmo de crecimiento de los precios durante el mes, que fue nuevamente generalizada; (ii) la disminución en los indicadores de inflación básica; (iii) el efecto transitorio que podría tener sobre el crecimiento de los precios el fenómeno del Niño; (iv) la mejora en el crecimiento de los indicadores de confianza de productores y consumidores; (v) el comportamiento del M3 y, en especial, de los pasivos sujetos a encaje; (vi) la cartera del sistema financiero en moneda legal que sigue creciendo por encima del PIB nominal; (vii) las emisiones de bonos que han complementado la financiación del sector real; (viii) el comportamiento de las tasas de interés del mercado en respuesta a la baja en la tasa de referencia del Banco; (ix) el efecto de la tasa de cambio sobre la inflación y el crecimiento del producto de los sectores transables; y (x) el comportamiento de las tasas de interés de los títulos de deuda pública. 8 Los principales puntos de análisis entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para 2010, en especial un eventual repunte transitorio en los precios de los regulados y de los alimentos debido al fenómeno climático del Niño; (ii) el efecto rezagado de las medidas de política monetaria sobre la producción y los precios; (iii) las proyecciones de crecimiento de la economía para 2010; (iv) la fuerte caída que se presentó en los últimos meses de las exportaciones a Venezuela y en el producto de ese país; (v) el comportamiento de los agregados monetarios y sus posibles efectos en la reactivación económica; (vi) la dinámica reciente en la cartera comercial del sistema financiero; (vii) el balance de riesgos entre crecimiento e inflación en un contexto de desaceleración de la economía y caída de la inflación; y (viii) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación alrededor de la meta de largo plazo. La Junta Directiva destacó lo siguiente sobre el comportamiento de la inflación durante el mes: (i) la inflación anual al consumidor cerró el año con un registro de 2%; (ii) los indicadores de inflación básica (aquella que excluye los precios de los productos más volátiles como los alimentos) continuaron cayendo, mientras que las expectativas de inflación a un año siguen en el rango meta fijado por la Junta, que coincide con el de largo plazo (entre 2% y 4%) y; (iii) durante el mes de diciembre se observó de nuevo una caída generalizada de los precios de los distintos rubros que componen la canasta, abarcando así una amplia variedad de bienes y servicios. La economía mundial continuó recuperándose, en especial gracias al dinamismo de los países del Asia. Esta reactivación se refleja en un incremento del comercio internacional y de los precios de productos básicos, lo que ha llevado a que los pronósticos de crecimiento aumentaran para el 2010. Por su parte, las perspectivas de mediano y largo plazo para las economías de la región y de otros países emergentes siguen siendo favorables. No obstante, las proyecciones de crecimiento para Venezuela fueron revisadas nuevamente a la baja. La información disponible muestra que los niveles trimestrales del PIB se siguen recuperando. A lo anterior se suman señales de recuperación de la demanda agregada como son: la mejoría en el indicador de confianza de los consumidores y de los sectores industriales vinculados con la construcción de 9 obras civiles, la estabilización de los indicadores de capacidad instalada y la recuperación de los niveles de importación de materias primas. La Junta Directiva considera que la política monetaria expansiva ha permitido una disminución persistente de las tasas de interés de captación y colocación y que el actual nivel de la tasa de referencia continúe estimulando el crecimiento económico en un ambiente caracterizado por un sistema financiero saludable. En consecuencia se acordó mantener inalterada la tasa de intervención del Banco en los niveles actuales. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva acordó mantener inalterada la tasa de intervención del Banco de la República en 3,5%. Bogotá DC, febrero 12 de 2010.
2010-02-01
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 26 de Febrero de 2010 El 26 de Febrero de 2010 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor en enero se situó en 2,1%, 10 pb más que en diciembre. La inflación mensual fue de 0,69% y los indicadores de inflación anual básica aumentaron por primera vez desde comienzos del 2009. La variación anual de los precios de los alimentos descendió de -0,3% en diciembre a -0,5% en enero. Si bien el grupo de productos perecederos mostró aumentos en sus precios, estos fueron más que compensados por el mejor comportamiento de los no perecederos y las comidas fuera del hogar. El incremento anual de precios de los bienes regulados pasó de 2,6% en diciembre a 3,9% en enero, debido a aumentos en todos los componentes de esta subcanasta, especialmente gas domiciliario y transporte público. La variación anual de los precios de los bienes no transables sin alimentos ni regulados se mantuvo estable en 4,4%. Se destaca la variación mensual de los arriendos que aumentaron 0,4%, por encima de lo registrado en el mismo mes en otros años. 2 El aumento anual de precios de bienes transables sin alimentos ni regulados cayó de 1,4% en diciembre a 1,2% en enero, lo que refleja la apreciación de la tasa de cambio acumulada en los últimos meses y la estabilidad en los precios internacionales de los productos industriales. Con datos preliminares para febrero, las expectativas de inflación derivadas de las negociaciones de deuda pública para 1, 5 y 10 años, se ubicaron en 4,26%, 4,89% y 5,05%, respectivamente, con variaciones de 57 pb, 64 pb y 65 pb frente a los datos promedio de enero. Las expectativas de inflación de la encuesta mensual realizada por el Banco de la República a comienzos de febrero aumentaron levemente, pero se mantienen dentro del rango meta de largo plazo fijado por la Junta Directiva. La variación anual de los precios al productor (IPP) fue de 0,5% frente a -2,2% del mes pasado. b. Crecimiento La información disponible sobre la actividad real en diciembre y enero indica que la recuperación de la economía mantuvo una dinámica débil, afectada por la caída de las ventas a Venezuela. Si bien los indicadores de consumo presentan una recuperación leve, los de industria y comercio no muestran una tendencia clara. Algunos indicadores relevantes son los siguientes: - De acuerdo con el DANE, el crecimiento de la producción industrial del mes de diciembre fue 2,0%, mejor que el previsto por el equipo técnico del Banco. - Las preguntas sobre pedidos y existencias de la Encuesta de Opinión empresarial de FEDESARROLLO de diciembre sugieren que la industria se demoraría en volver a los niveles de actividad económica previos a la crisis, ya que la dinámica que exhiben estos indicadores, cuando son depurados estadísticamente, es baja. 3 - La demanda de energía no regulada industrial cayó en términos anuales 2,6% en enero, deteniendo la recuperación que se presentó en el cuarto trimestre del año pasado. - Las expectativas de los empresarios relacionadas con la actividad industrial de la Encuesta de Opinión Empresarial de FEDESARROLLO de noviembre y diciembre son optimistas. En particular, en los dos últimos meses del 2009 las expectativas de producción a tres meses muestran una tendencia creciente, con niveles superiores a los observados en 2008 y en el primer semestre de 2009. - La Encuesta de Opinión Empresarial para comercio con datos a diciembre señala que los empresarios esperan una recuperación económica a comienzos de 2010. La encuesta de FENALCO con información a enero prevé un crecimiento en ventas bajo frente a lo observado en años anteriores. - La demanda de energía total creció 2,5% en términos anuales, tasa inferior a la registrada en los dos meses anteriores. - La producción de café en enero cayó 40%, comparada frente al mismo mes del año anterior, según estimaciones de la Federación Nacional de Cafeteros. Los indicadores disponibles por el lado de la demanda con información a enero muestran que el consumo privado está recuperándose a un ritmo moderado: - El Índice de Confianza del Consumidor (ICC) de FEDESARROLLO, con datos a enero, indica que la confianza de los agentes se mantiene en los niveles alcanzados en el tercero y cuarto trimestres del año anterior. Dada la alta correlación de dicho indicador con el consumo total de los hogares, el dato de enero indica que esta demanda estaría expandiéndose todavía a una tasa menor que la del promedio histórico. - El Comité Automotor Colombiano y la firma Econometría reportaron que las ventas de vehículos en enero mostraron un crecimiento anual de 6,8%. Las ventas de automóviles han estado altamente correlacionadas con el consumo de bienes durables según lo mide el DANE en cuentas nacionales. 4 Las exportaciones totales en dólares ascendieron en 2009 a US$ 32.849 millones (m) con una reducción de 12,7% anual. Dicha caída se explica principalmente por las menores ventas a Estados Unidos (-8,2%) y Venezuela (-33,5%). En valores, todos los sectores presentaron caídas (industrial -20,3%, minero -3,4% y agropecuario -2,5%), en tanto que en volúmenes sólo el sector industrial mostró una reducción (-17,6%). Las exportaciones totales en diciembre de 2009 aumentaron 7,6% con respecto al mismo mes del año 2008, hecho que se explica principalmente por el crecimiento de 51,7% de las exportaciones mineras. Por su parte, las ventas externas agropecuarias e industriales en dólares cayeron a tasas anuales de 12,8% y 13,4%, respectivamente. Así mismo, se observó en diciembre de 2009 un aumento importante de las exportaciones con destino a los Estados Unidos (50,9% anual), el cual se explicó principalmente por las ventas de petróleo y derivados. Por su parte, las exportaciones mensuales a Venezuela cayeron 77,6% en términos anuales. En el 2009 las importaciones (CIF) fueron de US$ 32.897 m, disminuyendo 17,1% en términos anuales. La reducción más importante se observó en las importaciones de bienes intermedios (-25,4%), seguida por las de bienes de consumo (-11,9%) y por las de bienes de capital (-9,62%). En volúmenes, todas las importaciones cayeron, acumulando una disminución de 6,6% en el total. A nivel mensual, en diciembre de 2009 el valor total de las importaciones fue similar al registrado en el mismo mes de 2008 (menor en 0,1%). c. Contexto externo La recuperación de la economía mundial continuó a finales de 2009, aunque el desempeño de los países no fue homogéneo. Para comienzos de 2010 la información disponible muestra que esta recuperación continúa. En efecto, la producción industrial de EE.UU. siguió expandiéndose y presenta un crecimiento anual positivo, mientras que el sentimiento empresarial mejoró moderadamente en diciembre y enero en la mayoría de países y se mantiene en niveles que indican expansión de la actividad económica. Pese a este entorno favorable, en el último mes se presentaron dificultades relacionadas con los problemas de endeudamiento público de 5 Grecia. Esto ha generado un aumento en la percepción de riesgo hacia éste y otros países altamente endeudados como España, Portugal e Irlanda, lo cual se reflejó en el incremento de los márgenes de los bonos soberanos de esos países. Esta situación llevó a presiones sobre el Euro, que se debilitó frente al dólar y golpeó la confianza de los inversionistas y el desempeño de los mercados bursátiles de las economías desarrolladas. En cuanto a las economías emergentes, los problemas de la deuda pública en Europa han tenido un impacto bajo. Si bien las primas de riesgo de los países de la región se incrementaron un poco en el último mes, en la última semana esto se revirtió parcialmente. Varias de las monedas incluyendo el peso colombiano permanecieron estables, y otras como el real y el peso chileno presentaron una depreciación de 7% entre enero y la primera semana de febrero. En materia de crecimiento, en la región algunos países como Brasil y Chile ya muestran claros signos de recuperación, los cuales se aprecian en indicadores como la producción industrial y las exportaciones. En general, las perspectivas de mediano plazo para los países en vía de desarrollo son más favorables que para las economías avanzadas. d. Variables financieras El crecimiento anual de los principales agregados monetarios durante las últimas 9 semanas se estabilizó en torno a tasas entre el 5,0% y 8,0%. En el caso de M3, la estabilidad en la tasa de crecimiento fue el resultado de una aceleración de los ahorros y una desaceleración de la captación a plazo. La cartera bruta total creció a una tasa anual nominal de 5,8% a comienzos de febrero, ligeramente mayor que la de finales de 2009 (4,9%). Aunque la cartera destinada al consumo creció poco (2,3% nominal), los desembolsos continuaron fortaleciéndose y aumentaron 26,6% anual. En la cartera hipotecaria el crecimiento del saldo es mucho más alto (18,1%) y los desembolsos aumentaron 48%. Por su parte, la cartera comercial creció 4,5% frente a 3,5% de finales de 2009, mientras que los desembolsos se debilitaron en enero, en especial los dirigidos a los constructores para financiación de vivienda. En los últimos tres meses se muestra una aceleración del crédito hipotecario y de consumo. 6 Durante el mes de enero y comienzos de febrero, las tasas interbancarias (TIB e IBR) se acercaron a la tasa de política. El descenso generalizado de las demás tasas de interés que caracterizó el cuarto trimestre de 2009 se mantuvo hasta mediados de enero, pero se interrumpió en las últimas dos semanas de ese mes, excepto para las tasas de interés de crédito de tesorería. En términos reales, todas las tasas de interés promedio se redujeron en enero. Los títulos de deuda pública presentaron un comportamiento mixto durante enero, con una desvalorización en los títulos de mediano plazo (24 pb), una valorización en los de corto plazo (-35 pb) y estabilidad en los de largo plazo (2 pb). 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el resultado de la inflación a enero que fue menor que la proyectada por el equipo técnico del Banco de la República, especialmente por el buen comportamiento de los precios de los alimentos; (ii) el aumento en los indicadores de inflación básica; (iii) el efecto transitorio que podría tener sobre el crecimiento de los precios el fenómeno del Niño; (iv) el optimismo en los indicadores de confianza de productores y consumidores; (v) el crecimiento de los agregados monetarios, que se situó en torno a tasas entre el 5% y el 8%; (vi) la cartera del sistema financiero en moneda legal que sigue creciendo por encima del PIB nominal; (vii) el comportamiento de las tasas de interés del mercado en respuesta a la baja en la tasa de referencia del Banco; (viii) el efecto de la tasa de cambio sobre la inflación y el crecimiento del producto de los sectores transables; y (ix) las tasas de interés de los títulos de deuda pública, que mostraron un comportamiento mixto en los diferentes tramos. Los principales puntos de análisis entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para 2010, en especial un eventual repunte transitorio en los precios de los regulados y de los alimentos debido al fenómeno climático del Niño; (ii) el efecto rezagado de las medidas de política monetaria sobre la producción y los precios; (iii) las proyecciones de crecimiento de la economía para 2010; (iv) la fuerte caída que se prevé en las exportaciones a Venezuela; (v) el comportamiento de los agregados monetarios y sus posibles efectos en la reactivación económica; (vi) la dinámica reciente en la cartera comercial e hipotecaria del sistema financiero; 7 (vii) el aumento en las expectativas de inflación; (viii) el balance de riesgos entre crecimiento e inflación en un contexto de una economía que muestra todavía una dinámica débil y una inflación que se ubica dentro del rango de largo plazo fijado por la Junta Directiva; y (ix) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación alrededor de la meta de largo plazo. La Junta Directiva destacó lo siguiente sobre el comportamiento de la inflación durante el mes: (i) la inflación anual al consumidor en enero fue de 2,1% frente al 2% con que cerró en diciembre; (ii) los indicadores de inflación básica aumentaron levemente al igual que las expectativas de inflación a un año que, sin embargo, siguen en el rango meta fijado por la Junta, que coincide con el de largo plazo (entre 2% y 4%); (iii) el comportamiento de la inflación anual en enero se debió fundamentalmente al aumento de los bienes regulados; (iv) los alimentos, a pesar de la presencia del fenómeno del Niño, continuaron disminuyendo; (v) si bien los productos perecederos presentaron alzas en los precios, éstos fueron más que compensados por los no perecederos y las comidas fuera del hogar; (vi) las proyecciones de inflación del Banco incorporan aumentos transitorios en los precios de los alimentos como consecuencia del fenómeno del Niño, aumentos que se espera se reviertan en el segundo semestre del año. La economía de los Estados Unidos, principal mercado de exportación, mostró en el cuarto trimestre de 2009 y en lo corrido del año un crecimiento mayor al esperado por los analistas internacionales. Las perspectivas de mediano y largo plazo para las economías de la región y de otros países emergentes siguen siendo favorables. La información disponible muestra que los niveles trimestrales del PIB se siguen recuperando lentamente. Se destaca que las expectativas de los empresarios han tenido una evolución favorable y que el consumo privado muestra una mayor dinámica. La Junta Directiva considera que la política monetaria expansiva ha permitido una disminución persistente de las tasas de interés de captación y colocación y que el actual nivel de la tasa de referencia continúa estimulando el crecimiento económico en un ambiente caracterizado por un sistema financiero saludable. En consecuencia, se acordó mantener inalterada la tasa de intervención del Banco en los niveles actuales. 8 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva acordó mantener inalterada la tasa de intervención del Banco de la República en 3,5%. Bogotá DC, marzo 12 de 2010.
2010-03-01
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 26 de Marzo de 2010 El 26 de Marzo de 2010 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor en febrero se situó en 2,09%, 1 pb menos que en enero. La inflación mensual fue de 0,83% y todos los indicadores de inflación anual básica disminuyeron. La variación anual de los precios de los alimentos pasó de -0,5% en enero a -0,1% en febrero, pero estuvo por debajo de las proyecciones del equipo técnico. En lo corrido del año, los precios de los alimentos perecederos han tenido alzas como consecuencia del fenómeno del Niño. Sin embargo, otros componentes de la canasta han disminuido por los siguientes factores: (i) caída en el precio de la carne por la debilidad de la demanda interna y el cierre de las exportaciones hacia el mercado venezolano, (ii) ajustes moderados en los precios de las comidas fuera del hogar, también por la debilidad de la demanda interna y el ajuste moderado en el salario mínimo y (iii) estabilidad en los precios de los alimentos importados. 2 El incremento anual de precios de los bienes regulados pasó de 3,9% en enero a 4,2% en febrero, debido a aumentos autorizados por el Gobierno en los precios de la gasolina y el ACPM. La variación anual de los precios de los bienes no transables sin alimentos ni regulados cayó de 4,4% en enero a 3,9% en febrero, consolidándose la tendencia decreciente que se observa desde septiembre del año pasado. El aumento anual de precios de bienes transables sin alimentos ni regulados cayó de 1,2% en enero a 1% en febrero, determinado, en parte, por la apreciación del peso frente al dólar acumulada en los últimos meses. Con datos preliminares para marzo, las expectativas de inflación derivadas de las negociaciones de deuda pública para 1, 5 y 10 años disminuyeron, situándose en 3,87%, 4,71% y 4,46%, con caídas de 39 pb, 18 pb y 60 pb, respectivamente. Las expectativas de inflación de la encuesta mensual realizada por el Banco de la República a comienzos de marzo disminuyeron y se ubican dentro del rango meta de largo plazo fijado por la Junta Directiva. La variación anual de los precios al productor (IPP) fue de -0,4%, frente a 0,5% del mes pasado. b. Crecimiento El DANE dio a conocer el crecimiento anual del PIB del cuarto trimestre del año pasado y de todo 2009. La economía colombiana creció 0,4% en todo 2009 y 2,5% anual el cuarto trimestre, resultados superiores a los previstos por las proyecciones del equipo técnico. Comparado con el PIB del tercer trimestre, el del cuarto registró un aumento de 1,1% (4,7% trimestral anualizado). De esta manera, los niveles del PIB aumentaron en los cuatro trimestres del año y la única caída en niveles se presentó en el cuarto trimestre de 2008. Por el lado de la demanda, el crecimiento del PIB en 2009 estuvo impulsado por la inversión en obras civiles, el consumo público y, en menor medida, por el consumo de los hogares. El consumo privado presentó caídas anuales leves en el primer semestre del año pero mostró una recuperación en 3 la segunda mitad del año, superando en el cuarto trimestre el nivel máximo observado en 2008. Las exportaciones netas contribuyeron también positivamente al crecimiento anual del PIB para todo 2009, debido a que la fuerte caída de las importaciones compensó el descenso observado en las ventas externas. Finalmente, la inversión diferente de obras civiles mostró en 2009 una fuerte caída anual. La contracción en este tipo de gasto estuvo asociada con la menor inversión en maquinaria y equipo del sector industrial. Por ramas de actividad económica, los sectores que más contribuyeron al crecimiento anual del PIB tanto en todo 2009 como en el cuarto trimestre, fueron las obras civiles, la minería y el sector financiero. Las obras civiles registraron un crecimiento anual por encima de 40% en el segundo semestre. El sector minero estuvo impulsado por el PIB petrolero, que mantuvo una permanente expansión a lo largo de todo el año, creciendo siempre a tasas anuales superiores al 10%. Los sectores con mayores caídas en 2009 fueron la construcción de edificaciones y la industria. Para el primer sector, las cifras del cuarto trimestre aún no arrojan señales claras de reactivación. En el caso del PIB industrial, sin embargo, se observó una ligera recuperación en sus niveles durante el segundo semestre del año. Otro sector que también registró contracciones durante todo 2009 fue el transporte, mientras que el comercio solo tuvo un crecimiento anual débil en el cuarto trimestre del año. Los indicadores disponibles de actividad económica para enero y febrero de 2010, en especial el de las ventas al por menor y el de la demanda por energía, dan indicios de que la recuperación del primer trimestre podría ser más rápida que la anticipada. En adición a ello, las expectativas de los empresarios (tanto industriales como comerciantes) sobre el desempeño de la economía en los próximos meses se mantienen en niveles relativamente altos. Algunos indicadores relevantes son los siguientes: - En enero la variación anual del índice de producción industrial fue de 1,6%, registro mayor que el proyectado por el equipo técnico. 4 - La encuesta de opinión empresarial de Fedesarrollo muestra que los industriales mantienen unas altas expectativas para la producción de los siguientes tres meses. - La percepción positiva de la situación económica actual y a 6 meses por parte de los comerciantes en enero siguió aumentando, de acuerdo con la encuesta de Fedesarrollo. - Los indicadores de Fenalco con información a febrero revelan un repunte de las ventas del sector, aunque todavía en niveles bajos. - La demanda de energía total (regulada y no regulada excluidas las exportaciones) creció en febrero 5,6% en términos anuales, el mejor comportamiento desde febrero de 2008. - La cantidad de pasajeros en vuelos nacionales en enero se mantuvo muy dinámica (creciendo más del 30% anual), mientras que el transporte aéreo de carga se recuperó frente a lo observado en diciembre. - El Índice de Confianza del Consumidor (ICC) de Fedesarrollo, con datos a febrero, muestra que la confianza de los agentes creció por segundo mes consecutivo, aunque aún se ubica en niveles relativamente bajos. - Las ventas al por menor mostraron un importante crecimiento anual en el mes de enero (8,8%), jalonado principalmente por las ventas de automóviles, que presentaron un crecimiento anual de 30,6%. De acuerdo con la información del Comité Automotor Colombiano, dichas ventas habrían crecido en febrero a una tasa también alta (10%) y - Las importaciones de bienes de capital en pesos constantes continuaron mostrando crecimientos negativos en enero. En enero de 2010, las exportaciones totales en dólares ascendieron a US$ 2.913 millones (m) con un crecimiento de 15,3% anual. Dicho crecimiento se explica principalmente por las mayores ventas a Estados Unidos (80%) y Asia (112%). En valores, los sectores minero y agropecuario exhibieron crecimientos anuales de 45,8% y 23,8%, respectivamente. Las exportaciones industriales registraron una reducción de 9,1%. Al excluir de las exportaciones industriales el café, el ferroníquel, el oro y los derivados del petróleo, se observa una reducción en el valor en dólares de 21,6% anual. Por 5 su parte, los volúmenes de todos los sectores mostraron una reducción (- 13,7%). La recuperación de las exportaciones totales durante el mes de enero, con respecto al mismo mes de 2009, se dio, principalmente, por las ventas de crudo y derivados a los mercados de Estados Unidos y Asia. Así mismo, se observó un aumento importante de las exportaciones industriales (sin café, derivados del crudo, oro y ferroníquel) con destino a los Estados Unidos de 28% anual, el cual se originó, principalmente, en las ventas de alimentos y bebidas. Por su parte, las exportaciones en enero a Venezuela cayeron 77% en términos anuales, destacándose los productos de origen industrial (-68%) y agropecuario (-100%) En enero de 2010, las importaciones (CIF) ascendieron a US$ 2.697 m, disminuyendo 3,1% en términos anuales. Dicha reducción se origina en la contracción de las importaciones de bienes de capital (-17,8% anual). En volúmenes, las importaciones aumentaron en 24,6% anual debido al comportamiento registrado por las cantidades de bienes intermedios (39,1%). En el trimestre móvil terminado en enero, la tasa de desempleo (TD) nacional se ubicó en 12,3% y la de 13 áreas en 13,2%. Corrigiendo por estacionalidad, la TD se redujo levemente en ambos dominios frente a diciembre de 2009, lo que sugiere que este indicador habría dejado de deteriorarse por primera vez desde finales de 2007. c. Contexto externo La información disponible muestra que la economía de los EE.UU. creció en el cuarto trimestre 5,9% (trimestral anualizado) y que habría continuado expandiéndose a comienzos de 2010. La producción industrial y las ventas al por menor en ese país siguieron aumentando en enero y febrero, así como el crédito de consumo que presentó en enero un repunte después de 20 meses de caídas continuas. En contraste, los países europeos parecen mostrar un estancamiento en su crecimiento. La economía venezolana se contrajo 5,8% en el cuarto trimestre y durante todo el año decreció 3,3%. Para 2010 los analistas esperan un crecimiento negativo de -0,4%, lo que junto con las restricciones comerciales mantendría las ventas de productos colombianos hacia ese país en niveles muy bajos. 6 El crecimiento en los países desarrollados y emergentes y, en particular, el acelerado crecimiento de las economías de China e India, siguen sosteniendo los precios de los productos básicos en niveles relativamente altos. Si este impulso en la demanda mundial continúa como se espera, los precios tenderían a conservar los actuales niveles. Por su parte, los indicadores de actividad económica de Brasil, Chile y Perú mostraron una tendencia ascendente en el cuarto trimestre del año pasado y en lo corrido de 2010. En este entorno, la inflación total se ha incrementado en la mayoría de economías desarrolladas por el efecto de los energéticos. Sin embargo, esto no parece obedecer a una tendencia de largo plazo pues la inflación básica se mantiene baja (excepto en Reino Unido), e incluso ha disminuido. Los mercados siguen exhibiendo nerviosismo en torno a la deuda soberana de Europa, en particular de Portugal y Grecia. Por esta razón, el euro continuó debilitándose frente al dólar. Los problemas de la deuda pública en Europa han tenido un impacto relativamente leve en las economías emergentes incluida América Latina. Aunque las primas de riesgo para la región habían aumentado un poco en febrero, esto se revirtió en lo corrido de marzo. Las monedas de la región se apreciaron frente al dólar, excepto por el peso chileno. d. Variables financieras En los últimos dos meses, las variaciones anuales de los pasivos sujetos a encaje (PSE) y del M3 han permanecido relativamente estables. Durante las últimas 13 semanas, el crecimiento anual de dichos agregados se ubicó en 7,8% y 7,4%, respectivamente. Para febrero de 2010, el crecimiento real de M3 se situó en 4,2%, similar al registrado en enero del mismo año. El crédito total en M/N creció a una tasa anual nominal de 6,0% a comienzos de marzo, ligeramente mayor que el de un mes atrás (5,5%). Aunque la cartera destinada al consumo sigue aumentando poco (3,4% nominal a comienzos de marzo), se presentó un repunte frente al crecimiento observado el mes anterior (2,3%) como resultado del fortalecimiento de los desembolsos (26,1% anual). En la cartera hipotecaria ajustada, el crecimiento del saldo es mucho más alto (16,7%) y los desembolsos se expanden al 54%. Por su parte, la cartera comercial creció 4,7% frente a 4,5% observado un mes atrás. 7 Al agregar el crédito comercial y la colocación de bonos ($445 mm), el saldo resultante a febrero es de $100.7 b, con un incremento en lo corrido del año de 1,3% y anual de 8,2%. En marzo ya se realizaron colocaciones de bonos por $234 mm. Durante comienzos de marzo, las tasas interbancarias (TIB e IBR) han continuado acercándose a la tasa de política. A partir de marzo 16 se ubicaron en promedio 5 pb por debajo de este indicador. Con datos mensuales a febrero, las tasas nominales activas han registrado disminuciones moderadas con respecto a enero, mientras que las pasivas se mantuvieron estables. En términos reales, todas las tasas de interés promedio de febrero aumentaron, con excepción de las de tesorería y consumo. Los títulos de deuda pública de mediano y largo plazo, se valorizaron - 22pb y -36 pb, respectivamente, en las últimas cuatro semanas terminadas el 16 de marzo. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el resultado de la inflación a febrero, que fue menor que la proyectada por el equipo técnico del Banco de la República y por el mercado, en un buen número de las subcanastas que conforman el índice de precios al consumidor; (ii) la caída en los indicadores de inflación básica luego del aumento presentado en enero; (iii) el efecto transitorio que podría tener sobre el crecimiento de los precios el fenómeno del Niño; (iv) el resultado del crecimiento para todo el 2009 y en el último trimestre, superior a lo proyectado por el equipo técnico; (v) los indicadores disponibles de actividad económica para enero y febrero de 2010, en especial el de las ventas al por menor y el de la demanda por energía, que sugieren una recuperación del primer trimestre más rápida que la anticipada; (vi) las expectativas de los industriales y los comerciantes sobre el desempeño de la economía para los próximos meses, que se mantienen en niveles altos; (vi) el crecimiento de los agregados monetarios, que se situó entre el 7% y el 8%; (vii) la cartera del sistema financiero en moneda legal que sigue creciendo por encima del PIB nominal; (viii) el comportamiento de las tasas de interés del mercado en respuesta a la baja en la tasa de referencia del Banco; (ix) el efecto de la tasa de cambio sobre la inflación y el crecimiento del producto de los sectores 8 transables; y (x) las tasas de interés de los títulos de deuda pública, que mostraron una caída en los tramos medio y largo. Los principales puntos de análisis entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) los elementos que afectan las proyecciones de inflación para 2010, en especial un eventual repunte transitorio en los precios de los regulados y de los alimentos debido al fenómeno climático del Niño; (ii) el efecto rezagado de las medidas de política monetaria sobre la producción y los precios; (iii) las proyecciones de crecimiento de la economía para 2010 que sugieren una recuperación más rápida de lo previsto; (iv) el mal desempeño de las exportaciones a Venezuela frente a las del 2009; (v) el comportamiento de los agregados monetarios y sus posibles efectos en la reactivación económica; (vi) la dinámica reciente en la cartera del sistema financiero; (vii) la caída en las expectativas de inflación; (viii) el balance de riesgos entre crecimiento e inflación en un contexto de una economía que muestra todavía una dinámica débil y una inflación que se ubica dentro del rango de largo plazo fijado por la Junta Directiva; y (ix) la necesidad de fortalecer la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación alrededor de la meta de largo plazo. La Junta Directiva destacó lo siguiente sobre el comportamiento de la inflación durante el mes: (i) la inflación anual al consumidor en febrero fue de 2,09%, inferior en 1 punto básico al resultado de enero, siendo mejor a la esperada por el mercado y los estudios técnicos del Banco de la República. (ii) Los indicadores de inflación básica disminuyeron, situándose dentro del rango meta de inflación fijado por la Junta (entre 2% y 4%) y; (iii) las proyecciones de inflación del Banco incorporan aumentos transitorios en los precios de algunos alimentos como consecuencia del fenómeno del Niño, aumentos que se espera se reviertan en el segundo semestre del año. La economía de los Estados Unidos, nuestro principal socio comercial, mostró en lo corrido del año incrementos en la producción industrial y en las ventas al por menor, mientras que China e India siguen con un crecimiento acelerado que ha permitido que los precios de los productos básicos se ubiquen en niveles altos. Los países de América Latina, por su parte, muestran una recuperación en su crecimiento. El DANE informó que el aumento anual del PIB para el 2009 fue de 0,4% y el del cuarto trimestre de 2,5% anual. Estos resultados confirman la solidez de la economía colombiana para enfrentar choques externos. 9 Los indicadores disponibles de actividad económica para lo corrido del año, en especial el de las ventas al por menor y de demanda de energía, también sugieren una mayor dinámica de la economía. Esto se corrobora con los resultados de las expectativas de los empresarios que se mantienen en niveles relativamente altos. Todo lo anterior indica que la economía se encuentra en una senda de franca recuperación. La Junta Directiva considera que la política monetaria expansiva ha permitido una disminución persistente de las tasas de interés de captación y colocación y que el actual nivel de la tasa de referencia continúa estimulando el crecimiento económico en un ambiente caracterizado por un sistema financiero saludable. En consecuencia, se acordó mantener inalterada la tasa de intervención del Banco en los niveles actuales. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva acordó mantener inalterada la tasa de intervención del Banco de la República en 3,5%. Bogotá DC, abril 09 de 2010.
2010-04-01
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 30 de Abril de 2010 El 30 de Abril de 2010 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor en marzo se situó en 1,84%, 25 pb menos que en febrero. La inflación mensual fue de 0,25% y todos los indicadores de inflación anual básica disminuyeron. La variación anual de los precios de los alimentos pasó de -0,1% en febrero a 0,34% en marzo, por debajo de las proyecciones del equipo técnico. En lo corrido del año, los precios de los alimentos perecederos han tenido alzas como consecuencia del fenómeno del Niño aunque en una menor intensidad de la esperada. Sin embargo, otros componentes de la canasta han disminuido por los siguientes factores: (i) caída en el precio de la carne por la debilidad de la demanda interna y el cierre de las exportaciones hacia el mercado venezolano, (ii) ajustes moderados en los precios de las comidas fuera del hogar, también por la debilidad de la demanda interna y el ajuste moderado en el salario mínimo y (iii) estabilidad en los precios de los alimentos importados como efecto de la revaluación del peso frente al dólar. 2 El incremento anual de precios de los bienes regulados pasó de 4,2% en febrero a 3,4% en marzo, debido al menor crecimiento anual en el IPC de servicios públicos y de transporte público. La variación anual de los precios de los bienes no transables sin alimentos ni regulados cayó de 3,9% en febrero a 3,8% en marzo, consolidándose la tendencia decreciente que se observa desde septiembre del año pasado. El aumento anual de precios de bienes transables sin alimentos ni regulados cayó de 1% en febrero a 0,3% en marzo. Este nivel es el más bajo desde que se llevan registros para ese indicador. La caída está determinada, entre otras, por la apreciación del peso frente al dólar acumulada en los últimos meses, una demanda interna que continúa débil y una demanda externa menor a la proyectada por el equipo técnico. Con datos preliminares para abril, las expectativas de inflación derivadas de las negociaciones de deuda pública para 1, 5 y 10 años disminuyeron, situándose en 2,61%, 3,91% y 4,18%, con caídas de 105 pb, 78 pb y 29 pb, respectivamente. Las expectativas de inflación de las encuestas trimestral y mensual realizadas por el Banco de la República a comienzos de abril disminuyeron y se ubican dentro del rango meta de largo plazo fijado por la Junta Directiva. La variación anual de los precios al productor (IPP) fue de -0,17% frente a -0,4%, del mes pasado. b. Crecimiento Los indicadores disponibles para el primer trimestre de 2010 mostraron una expansión de la actividad económica y una aceleración de las tasas de crecimiento anuales. En particular, los relacionados con la demanda apuntan a que el consumo privado continuó con la dinámica favorable observada desde hace dos trimestres. Los indicadores asociados a la formación bruta de capital fijo diferentes de obras civiles y construcción, todavía muestran crecimientos anuales negativos. Algunos indicadores relevantes son los siguientes: 3 - El Índice de Confianza del Consumidor (ICC) de Fedesarrollo, con datos a marzo muestra que la confianza de los agentes creció por tercer mes consecutivo y se ubica en su mayor nivel desde 2008. El aumento se explica por una mejoría en las expectativas de los hogares sobre la situación económica en el corto y mediano plazo. - Las ventas del comercio al por menor a febrero mantuvieron la tendencia creciente que se observa desde mediados del año pasado. La alta correlación del crecimiento de las ventas del comercio con el consumo interno de los hogares permite confiar en una aceleración de este tipo de gasto durante el primer trimestre de 2010. - Las ventas al por menor de vehículos para consumo de los hogares a marzo crecieron a una tasa anual de 28,3%. - La variación anual del índice de producción sin trilla de café fue de 3%, mayor que la esperada por el equipo técnico del Banco (2,5%). - El sector de la construcción de edificaciones muestra signos de crecimiento. Las licencias de construcción en enero y febrero crecieron a una tasa cercana al 8% anual, con lo cual el número de licencias se mantuvo en registros similares a los de hace 5 años - La demanda de energía total (regulada y no regulada, que excluye exportaciones) creció a una tasa anual de 7,2% en marzo, la mayor tasa en toda la década. En el primer trimestre, su crecimiento anual fue de 5,1%, superior a la tasa registrada en el cuarto trimestre del año pasado (2,6%). - Las importaciones de bienes de capital en dólares y en pesos reales están cayendo (-21% anual a febrero), lo que sugiere que este gasto continuará exhibiendo una contracción en términos anuales durante el primer trimestre. En febrero de 2010 las exportaciones totales en dólares registraron un crecimiento de 22,9% con respecto al mismo mes del año anterior. Lo anterior por el incremento de las exportaciones del sector minero (94,6%) y del sector agropecuario (7,6%). Las exportaciones del sector industrial cayeron en febrero 7,9% anual. Al descontar los principales productos de exportación 4 (café, ferroníquel, derivados del petróleo y oro), las exportaciones industriales se redujeron 26,3%. En el mes de febrero, las exportaciones colombianas a los diferentes países de destino presentaron niveles mayores a los observados un año atrás, excepto las dirigidas a Venezuela las cuales registraron una caída anual de 73,2%. Las ventas externas a los Estados Unidos y al resto de países (sin Venezuela y Estados Unidos) crecieron anualmente 47,2% y 49,1%, respectivamente. Las exportaciones a Asia aumentaron 233% y a la Unión Europea 55,6%, destinos que sumados representan cerca del 30% de las exportaciones totales de febrero. En lo corrido del año a febrero, el valor de las exportaciones totales en dólares creció 19% respecto a las observadas en el mismo período del año anterior, dadas las mayores exportaciones del sector minero (65%) y del sector agropecuario (14,5%). Por su parte, las exportaciones del sector industrial registraron una caída anual de 8,5% y de 19,8% al descontar los principales productos. En volúmenes, las del sector minero presentaron un pequeño incremento (1,3% anual) debido a las mayores exportaciones de crudo (33%). En cuanto a las importaciones, en febrero el valor CIF en dólares (US$ 2.793 millones) se incrementó en 10,5% con respecto al mismo mes del año anterior. Sin embargo, su nivel sigue siendo inferior al promedio registrado en el año 2008 (US$ 3.306 millones). Las importaciones de materias primas y las de bienes de consumo registraron, en febrero, incrementos anuales de 37,2% y 12,8%, respectivamente. Por su parte, las importaciones de bienes de capital siguen cayendo (disminuyeron 11,9% en febrero). El déficit en cuenta corriente de la balanza de pagos observada para el año 2009 fue de 2,2% del PIB (US$ 5.146 m). Las mayores entradas de capital del sector público y de Ecopetrol (US$ 7.275 m) financiaron la menor inversión extranjera directa neta (ésta se redujo de US$ 8.329 m en 2008 a US$ 4.177 m en 2009). En el trimestre móvil terminado en marzo, la tasa de desempleo (TD) nacional se ubicó en 13% y la de 13 áreas en 13,7%. . c. Contexto externo 5 El crecimiento mundial siguió acelerándose durante el primer trimestre por el mejor comportamiento de las economías emergentes y de los EEUU. Se espera que la economía mundial siga siendo liderada por Asia, lo que mantendría los precios de los bienes básicos en los niveles actuales o un poco más altos y continuaría favoreciendo los términos de intercambio en Colombia y otros países de la región. En el caso de EEUU, los analistas internacionales prevén un crecimiento inferior al 3% dada la debilidad del mercado laboral, el alto nivel del endeudamiento de los hogares y las restricciones al crédito bancario. En cuanto a las economías emergentes se destaca el crecimiento del PIB de la China de 11,9% en el primer trimestre de 2010. Los países latinoamericanos y, en particular Brasil, mostraron una recuperación importante. Venezuela presentó una caída en la actividad económica al finalizar el año lo que, junto con las restricciones comerciales, continuó debilitando nuestro comercio con ese país que redujo su participación de una manera marcada. En este entorno de crecimiento, los precios de los productos básicos se han comportado mejor de lo esperado por el equipo técnico. En general, estos precios se han mantenido en niveles altos y se espera que ello continúe en el resto de 2010. En materia de inflación anual al consumidor, esta aumentó en los últimos meses en los países industrializados. Sin embargo, este repunte no parece ser de naturaleza permanente como lo sugieren las disminuciones que se presentaron en la inflación básica en EEUU y la zona del Euro. En cuanto a las monedas, el dólar se ha fortalecido en lo corrido del año frente al Euro y la Libra y las primas de riesgo de los países emergentes han permanecido estables ubicándose en niveles similares a los que se observaron antes de la quiebra de Lehman Brothers. d. Variables financieras Durante marzo y comienzos de abril el crecimiento nominal de los agregados monetarios continuó exhibiendo estabilidad. El M3 y los Pasivos Sujetos a Encaje (PSE) crecieron a tasas entre 7,0% y 8,0% en la primera semana de abril. 6 La cartera bruta total en moneda nacional (con leasing) creció en el mismo período a una tasa anual de 5,2%, en términos nominales. Esta tasa es menor que la observada en marzo, dado a los cambios transitorios en la estacionalidad de la serie por la presencia de Semana Santa a comienzos de abril. Por tipo de cartera, la ligera desaceleración de las últimas semanas se concentró en la cartera comercial, la cual se vio afectada por prepagos de grandes empresas y por la emisión de bonos del sector real. Si se incluye la colocación de bonos, en marzo, el crédito comercial ($100.9 b) se mantuvo cerca del observado en febrero ($100.8 b). En marzo las colocaciones de bonos del sector real ascendieron a $900 mm, monto superior en 525 mm al observado en febrero. En marzo y comienzos de abril, la cartera hipotecaria continuó creciendo a un buen ritmo (18,6% nominal) y la cartera de consumo mantuvo una lenta recuperación, con aumentos anuales de 4,6%. A marzo, la cartera en moneda extranjera del sistema financiero ascendió US$2,532 millones frente a US$2,388 millones de febrero. De otro lado, el endeudamiento directo del sector privado en febrero, último mes para el cual hay información, fue de US$13,965 millones, US$ 158 millones más que el presentado en diciembre de 2009. Pese a lo anterior, a febrero, la suma de ambos tipos de recursos crecía todavía a una tasa anual negativa de -3,9%. En las últimas semanas, las tasas interbancarias se nivelaron con la tasa de política. Las tasas de interés de consumo y, en menor medida, las de Tesorería, continúan descendiendo. Las otras tasas activas tienden a estabilizarse. Con el descenso de la inflación sin alimentos, todas las tasas de interés aumentaron en términos reales Entre el 26 de marzo y el 28 de abril, los títulos de deuda pública registraron variaciones negativas de 9pb, 31pb y 35 pb en los tramos corto, medio y largo, respectivamente. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el resultado de la inflación a marzo, menor que la proyectada por el equipo 7 técnico del Banco de la República y por el mercado, en todas las subcanastas que conforman el índice de precios al consumidor; (ii) la nueva caída en los indicadores de inflación básica ; (iii) la disminución en las expectativas de inflación; (iv) el menor efecto sobre el crecimiento de los precios por el fenómeno de El Niño; (iv) la recuperación de la economía durante el primer trimestre más rápida de la esperada; (vi) las mejoras en las expectativas de los empresarios y consumidores; (vi) el crecimiento de los agregados monetarios entre el 7% y el 8%; (vii) la cartera del sistema financiero en moneda legal creciendo por encima del PIB nominal; (viii) el comportamiento de las tasas de interés del mercado en respuesta a la baja en la tasa de referencia del Banco; (ix) el efecto de la tasa de cambio sobre la inflación y el crecimiento del producto de los sectores transables; (x) las tasas de interés de los títulos de deuda pública, que mostraron una caída en el mes y (xi) la recuperación de la economía mundial y la fuerte incertidumbre generada por la crisis de Grecia. Los principales puntos de análisis entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) las proyecciones de inflación para el 2010 y 2011 ; (ii) la disminución de los riesgos al alza en la inflación por efecto de un menor impacto del fenómeno de El Niño sobre el precio de los alimentos; (iii) la reducción en la variación de los precios de los bienes transables debido a la apreciación del peso frente al dólar; (iv) el efecto rezagado de las medidas de política monetaria sobre la producción y los precios; (v) las proyecciones de crecimiento de la economía para 2010 que sugieren una recuperación más rápida de lo previsto; (vi) la dinámica reciente en la cartera del sistema financiero; (vii) la caída en las expectativas de inflación; (viii) el balance de riesgos entre crecimiento e inflación en un contexto de una economía recuperándose y una inflación que se ubica levemente por debajo del rango meta de largo plazo; (ix) el posible impacto de la crisis griega; y (x) la necesidad de mantener la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación alrededor de la meta de largo plazo. La Junta Directiva destacó lo siguiente sobre el comportamiento de la inflación durante el mes: (i) la inflación anual al consumidor en marzo fue de 1,84%, 25 pb menos que en febrero, resultado significativamente mejor al esperado por el mercado y por los estudios técnicos del Banco de la República; (ii) los indicadores de inflación básica continuaron disminuyendo y están en la parte baja del rango meta de inflación de largo plazo fijado por la Junta (3% más o menos 1%); (iii) la disminución de la inflación sin 8 alimentos; (iii) las expectativas de inflación que siguieron cayendo; (iv) las nuevas proyecciones realizadas por el equipo técnico muestran que, con un alto grado de confianza, la inflación se situará dentro del rango meta de largo plazo en 2010 y 2011; (iv) los riesgos al alza en la inflación han disminuido debido a un menor impacto del fenómeno de El Niño sobre el precio de los alimentos y a que la apreciación del peso ha reducido la variación en los precios de los bienes transables y; (vi) este buen comportamiento de la inflación y de las expectativas confirman la credibilidad en la política monetaria por parte de la sociedad colombiana, que está incorporando en sus decisiones la meta de largo plazo establecida por la Junta. La información recibida en las últimas semanas indica que la economía se viene recuperando más rápidamente de lo esperado, sin generar presiones inflacionarias. Factores tales como el mayor crecimiento de la economía mundial, las mejoras en la confianza de los agentes y el dinamismo de varios indicadores líderes, muestran la fortaleza del crecimiento. Los trabajos técnicos indican que pese al mayor crecimiento de la economía, se mantiene una brecha negativa que, en conjunto con el buen comportamiento de la inflación y de las expectativas, permite una política monetaria aún más expansiva sin comprometer las metas de inflación y la estabilidad macroeconómica La Junta analizó las siguientes alternativas relacionada con la postura de la política monetaria: (i) Reducir la tasa de referencia del Banco teniendo en cuenta que el análisis técnico muestra que una política monetaria más expansiva contribuirá a la recuperación de la economía sin poner el riesgo el logro de la meta de inflación en 2010 y 2011. (ii) Postergar la decisión anterior para el mes siguiente, con el fin de esperar que el mercado incorpore en sus expectativas las nuevas proyecciones de inflación y, de esta manera, facilitar la transmisión de la política monetaria. (iii) Mantener inalterada la tasa de intervención a la espera de información que confirme las nuevas proyecciones, anunciando que la Junta no avizora aumentos en el futuro cercano en la tasa de interés de referencia. Hubo un consenso entre los miembros de la Junta en reducir 50 pb la tasa de intervención y comunicar de manera detallada las razones que motivaron la 9 decisión. Se destacó que el banco no tiene temores sobre la recuperación económica y que el nuevo nivel de tasas es el adecuado sin que ello genere presiones al alza en la inflación. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva acordó reducir 50 pb la tasa de intervención del Banco de la República que quedará en 3%. Bogotá DC, mayo 14 de 2010.
2010-05-01
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 27 de Mayo de 2010 El 27 de Mayo de 2010 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor en abril se situó en 1,98%, 14 pb más que en marzo. La inflación mensual fue de 0,46% y todos los indicadores de inflación anual básica disminuyeron. La variación anual de los precios de los alimentos pasó de 0,34% en marzo a 0,93% en abril debido al aumento de los alimentos perecederos. El incremento anual de precios de los bienes regulados pasó de 3,4% en marzo a 3,9% en abril. Esto como consecuencia de los ajustes que se hicieron en combustibles y energía. La variación anual de los precios de los bienes no transables sin alimentos ni regulados fue de 3,9% en abril frente a 3,8% en marzo. 2 El aumento anual de precios de bienes transables sin alimentos ni regulados cayó de 0,3% en marzo a -0,3% en abril. Esta tasa es la más baja desde que se llevan registros para ese indicador. Con datos preliminares al 19 de mayo, las expectativas de inflación derivadas de las negociaciones de deuda pública para 1, 5 y 10 años disminuyeron, situándose en 1,87%, 3,56% y 4,09%, respectivamente. Las expectativas de inflación de las encuestas trimestral y mensual realizadas por el Banco de la República a comienzos de mayo siguen mostrando descensos y se ubican dentro del rango meta de largo plazo fijado por la Junta Directiva. En abril, la inflación anual de los precios al productor (IPP) fue de 0,3%, 45 pb mayor que la de marzo. El IPP aumentó principalmente por los precios de los bienes importados. b. Crecimiento Los indicadores disponibles muestran que la recuperación del consumo se está dando a un ritmo más rápido que el previsto, sobre todo en el caso de los bienes durables. Los indicadores asociados a la formación bruta de capital fijo diferentes de obras civiles y construcción, todavía muestran crecimientos anuales negativos. Algunos indicadores relevantes son los siguientes: - El Índice de Confianza del Consumidor (ICC) de Fedesarrollo, con datos a abril sigue mostrando una mejoría en las expectativas de los hogares sobre la situación económica en el corto y mediano plazo. - Las ventas del comercio medidas por el DANE terminaron el trimestre con un crecimiento superior al observado en los últimos dos años. La alta correlación del crecimiento de las ventas del comercio con el consumo interno de los hogares permite confiar en una aceleración de este tipo de gasto durante el primer trimestre de 2010. - La variación anual del índice de producción industrial fue de 6,4%, registro similar al esperado por el equipo técnico del Banco. 3 - La demanda de energía total regulada y no regulada, sin incluir exportaciones, creció 4,6% en términos anuales en abril, lo que se suma a un crecimiento de 5,1% anual en el promedio del primer trimestre. - Las ventas totales de la industria según el DANE crecieron 3,2% anualmente en el primer trimestre. Las exportaciones totales del mes de marzo registraron un aumento anual de 19,4%, y en año corrido 19,1%. Las mineras crecieron 33%, las agropecuarias 25% y las industriales 9,4%, con respecto al mismo mes del año anterior. Sin embargo, al descontar de las exportaciones del sector industrial los productos principales como café, ferroníquel, derivados del petróleo y oro, se observa una caída anual de 8,1%.” Los principales productos de exportación (café, carbón, ferroníquel, petróleo y derivados, los cuales representaron en el mes de marzo el 57% del total de las ventas externas), presentaron un crecimiento anual de 39,8% en dólares y una disminución de 5,8% en volúmenes. Por país de destino, la mayor demanda de nuestras exportaciones totales es Estados Unidos, que representó 44% del total de las ventas en el mes de marzo. Venezuela disminuyó su participación al pasar de 18,2% en marzo de 2009 a 4,7% en el mismo mes de este año. Los otros destinos (excepto la Unión Europea) han ganado participación en el total exportado por Colombia. En particular, las mayores ventas a Asia, las cuales pasaron de representar el 5,6% en marzo del año anterior al 12,2% en marzo de 2010. Las mayores ventas registradas a los Estados Unidos, India y China obedecen principalmente al aumento de las exportaciones de petróleo y sus derivados, de carbón y de oro. Las menores exportaciones del sector industrial sin principales productos se explican por la caída de las ventas a Venezuela, que en marzo disminuyeron 68% anual. Estas ventas aumentaron en términos anuales hacia los otros destinos: las dirigidas a los Estados Unidos lo hicieron en 46% y al resto de países en 36%. En marzo, el valor en dólares de las importaciones totales (CIF) creció 24,7% con respecto al observado en el mismo mes del año anterior y 19% en relación al registrado en febrero de 2010. El aumento de las importaciones se originó por las mayores compras de bienes de consumo, particularmente de 4 bienes duraderos (31,4% anual) y las de bienes intermedios (29% anual). Las importaciones de bienes de capital crecieron 16,5% anual. En el trimestre móvil terminado en marzo, la tasa de desempleo (TD) nacional se ubicó en 13% y la de 13 áreas en 13,7%. c. Contexto externo Los diferentes indicadores de actividad real en EE.UU. y en países emergentes de Asia y América Latina confirman que la economía mundial sigue recuperándose. Los mercados financieros mundiales presentaron un aumento importante en los niveles de incertidumbre y volatilidad debido a los crecientes problemas de la deuda soberana en varios países europeos. Esta situación llevó a un aumento en la percepción de riesgo global, a pesar de las medidas de apoyo adoptadas por la Unión Europea y el FMI a los países más endeudados (PIIGS) por 750 mil millones de euros. En ese entorno, se han presentado fuertes caídas en los mercados bursátiles en los países desarrollados, especialmente en Europa, y el euro continúa depreciándose frente al dólar y otras monedas (con cifras al viernes 21 de mayo). Pese a lo anterior, las economías de Latinoamérica no han resultado afectadas de manera importante por la turbulencia financiera. Las primas de riesgo soberano presentaron aumentos pequeños comparados con episodios de crisis anteriores. Las monedas de la mayoría de países se depreciaron en el último mes, siendo mucho más fuerte esta tendencia en Brasil y México. En estos últimos, la depreciación del último mes fue alrededor de 7%, mientras que en Colombia ha sido de alrededor de 2%. El impacto principal de la crisis europea se ha visto en los precios de los productos básicos, en particular en el petróleo. De mantenerse esta tendencia, perjudicaría especialmente a países exportadores de materias primas, al afectar sus términos de intercambio y, por esta vía, al PIB. Sin embargo, todavía es prematuro hablar sobre cuál será el impacto a la economía global por la crisis en Europa. d. Variables financieras 5 El M3 y los Pasivos Sujetos a Encaje, que en lo corrido del año hasta abril habían registrado un crecimiento anual estable cercano a 7%, se aceleraron en la primera semana de mayo a tasas algo superiores a 9%. Este comportamiento, de carácter transitorio, se explicó por menores depósitos del Gobierno en el Banco. En abril y la primera semana de mayo de 2010, el crecimiento anual de la cartera bruta total (M/N) se estabilizó en una tasa cercana a 5%. Por modalidades, la desaceleración de la cartera comercial ha sido compensada con los mayores ritmos de aumentos en la cartera hipotecaria y de consumo. Aunque en lo corrido del año el saldo de la cartera comercial ha estado relativamente estable, cuando se le suman los bonos emitidos por el sector real su comportamiento es más favorable. En abril este agregado de crédito llegó a $ 101,6 b, cifra mayor en $ 683 mm a la observada un mes atrás y superior en $ 2 b a la registrada el pasado diciembre. En materia de desembolsos, los destinados a cartera comercial se aceleraron en el margen (entre abril y mediados de mayo), pero sus niveles son similares a los registrados un año atrás. Los desembolsos de créditos para los hogares (consumo e hipotecarios) continúan con fuertes aumentos tanto en el margen como en términos anuales Luego de la reducción de la tasa de referencia del Banco de la República en 50 pb, las tasas pasivas descendieron y las activas tuvieron un comportamiento mixto. Las tasas de consumo, que también habían presentado un descenso en abril, cayeron 28 pb en la primera semana de mayo. En este último periodo, las tasas de interés comerciales de tesorería y preferenciales descendieron 54 pb y 26 pb, respectivamente. Por su parte, las de crédito de vivienda, tanto para construcción como para adquisición se incrementaron. En materia de precios de activos, similar a lo ocurrido en otros países de la región, el Índice General de la Bolsa de Colombia (IGBC) que alcanzó su máximo histórico a inicios de mayo, presentó una leve desvalorización a raíz de la crisis en la Unión Europea. En el caso de renta fija, el impacto negativo ha sido muy bajo. Entre el 30 de abril y el 24 de mayo, las tasas de los títulos de deuda pública registraron variaciones negativas de 59pb, 36pb y 13pb en los tramos corto, medio y largo, respectivamente. 6 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el resultado de la inflación a abril que se ubicó dentro de las proyecciones realizadas por el equipo técnico del Banco de la República; (ii) la variación anual de los bienes transables sin alimentos ni regulados que volvió a descender reforzando la tendencia que se viene registrando desde agosto de 2009; (iii) la nueva caída en los indicadores de inflación básica y en las expectativas de inflación; (iv) la recuperación de la economía durante el primer trimestre más rápida de la esperada; (v) las mejoras en las expectativas de los empresarios y consumidores; (vi) el crecimiento estable de los agregados monetarios ; (vii) el crecimiento de la cartera del sistema financiero en moneda legal en niveles similares al aumento estimado del PIB nominal para 2010; (viii) el comportamiento reciente de los precios de los activos; (ix) el comportamiento de las tasas de interés del mercado en respuesta a la reducción de la tasa de referencia del Banco; (x) el efecto de la tasa de cambio sobre la inflación y el crecimiento del producto de los sectores transables; (xi) las tasas de interés de los títulos de deuda pública, que mostraron una caída en el mes y (xii) la recuperación de la economía mundial y la fuerte incertidumbre generada por la crisis de algunos países europeos. Los principales puntos de análisis entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) las proyecciones de inflación para el 2010 y 2011 ; (ii) la reducción en la variación de los precios de los bienes transables debido a la apreciación del peso frente al dólar; (iii) el efecto rezagado de las medidas de política monetaria sobre la producción y los precios; (iv) las proyecciones de crecimiento de la economía para 2010 que sugieren una recuperación más rápida de lo previsto; (v) la dinámica reciente en la cartera del sistema financiero y de los precios de los activos; (vi) la caída en las expectativas de inflación; (vii) el balance de riesgos entre crecimiento e inflación en un contexto de una economía recuperándose y una inflación que se ubica levemente por debajo del rango meta de largo plazo; (viii) la incertidumbre generada por la crisis europea en la economía mundial; y (ix) la necesidad de mantener la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación alrededor de la meta de largo plazo. La Junta Directiva destacó lo siguiente sobre el comportamiento de la inflación durante el mes: (i) la inflación anual al consumidor en abril fue de 1,98%, ligeramente mayor que en marzo (14 pb), pero dentro de las proyecciones realizadas por el equipo técnico del Banco de la República; (ii) 7 los indicadores de inflación básica continuaron disminuyendo y están en la parte baja del rango meta de inflación de largo plazo fijado por la Junta; (iii) las expectativas de inflación siguieron cayendo; (iv) el resultado de la inflación en el último mes está en línea con las proyecciones realizadas por el equipo técnico que muestran, con un alto grado de confianza, que la inflación se situará dentro del rango meta de largo plazo en 2010 y 2011. La información recibida en las últimas semanas indica que la economía se viene recuperando más rápidamente de lo esperado, sin generar presiones inflacionarias. Factores tales como las mejoras en la confianza de los agentes y el dinamismo de varios indicadores líderes, confirman el mayor crecimiento. La recuperación de la economía mundial se ha visto afectada por la crisis de la deuda pública en Grecia y su posible contagio a otros países europeos. Los efectos de estas crisis aún son inciertos. Se destaca, sin embargo, que Asia, Estados Unidos y las economías de América Latina muestran una recuperación cada vez más fuerte. La Junta considera que la política monetaria expansiva adoptada, incluyendo la reciente disminución de 50 pb en su tasa de referencia, contribuye al crecimiento de la economía en un ambiente caracterizado por un sistema financiero saludable. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva acordó mantener inalterada la tasa de intervención del Banco de la República que seguirá en 3%. Bogotá DC, junio 11 de 2010
2010-06-01
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 18 de Junio de 2010 El 18 de Junio de 2010 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor en mayo se situó en 2,07%, 9 pb más que en abril. La inflación mensual fue de 0,10% y algunos de los indicadores de inflación anual básica dejaron de caer. La variación anual de los precios de los alimentos pasó de 0,93% en abril a 1% en mayo, debido al aumento de las comidas fuera del hogar. El precio de los perecederos cayó por primera vez en el año, mientras que el de procesados se mantuvo estable. El incremento anual de precios de los bienes regulados pasó de 3,9% en abril a 4,6% en mayo. Esto como consecuencia de los ajustes que se hicieron en el precio de la gasolina. La variación anual de los precios de los bienes no transables sin alimentos ni regulados se mantuvo estable durante mayo en 3,9%. 2 El aumento anual de precios de bienes transables sin alimentos ni regulados cayó de -0,3% en abril a -0,5% en mayo. Esta tasa es la más baja desde que se llevan registros para ese indicador. Con datos preliminares para junio, las expectativas de inflación derivadas de las negociaciones de deuda pública para 1, 5 y 10 años disminuyeron, situándose en 1,49%, 3,5% y 3,88%, respectivamente. Las expectativas de inflación de las encuestas trimestral y mensual realizadas por el Banco de la República a comienzos de junio siguen mostrando descensos y se ubican dentro del rango meta de largo plazo fijado por la Junta Directiva. En mayo, la inflación anual de los precios al productor (IPP) fue de 1,3%, frente a una variación anual de 0,3% en abril. El IPP aumentó principalmente por una caída en la base de comparación en mayo del año anterior. b. Crecimiento La información de las últimas semanas indica que la economía colombiana crecerá a un mayor ritmo de lo esperado. Algunos indicadores relevantes son los siguientes: - El índice de confianza de la industria en abril, que reúne las preguntas de pedidos, existencias y expectativas y que tiene una alta correlación con el crecimiento anual de la producción industrial, siguió mostrando una tendencia ascendente. El comportamiento reciente de este indicador lo explican las preguntas referentes a existencias y los pedidos de la industria, contrario a lo que sucedía hace algunos meses, cuando aumentaba solamente la pregunta sobre la dinámica de las expectativas de producción. - La demanda de energía total creció en mayo 4,4% en términos anuales, mostrando incrementos respecto al cuarto trimestre de 2009 y a los primeros meses de 2010. - El indicador de confianza del consumidor de Fedesarrollo aumentó en mayo nuevamente. Tal como ocurrió en el mes anterior, el aumento en la confianza de los hogares estuvo impulsado por mejores expectativas para el corto y mediano plazo así como por una más favorable percepción de las 3 condiciones económicas actuales. Asimismo, se destaca la mejoría gradual en la disponibilidad para comprar bienes durables y para la adquisición de vivienda durante lo corrido de 2010. Las exportaciones totales del mes de abril sumaron US$3.491 millones, registrando un incremento de 43,8% con respecto al mismo mes del año anterior. Dicho comportamiento se explica por el aumento de las exportaciones en dólares del sector minero (73,6%) y del sector industrial (30,8%). En volúmenes, las ventas al exterior de dichos sectores también presentaron incrementos (18,0% y 43,7%, respectivamente). Por su parte, las exportaciones del sector industrial sin café, derivados del petróleo, ferroníquel y oro registraron en abril niveles similares a los observados durante el mismo mes de 2009, con un crecimiento anual de 1,3%. Frente al mes de marzo de 2010 las exportaciones totales en dólares crecieron 4,4% debido principalmente al aumento que registraron las ventas externas del sector minero (15,7%). Los principales productos de exportación (café, carbón, ferroníquel, petróleo y derivados), los cuales representaron el 64% del total de las ventas externas del mes de abril, presentaron un crecimiento anual de 86% en valores y de 23% en volúmenes. En abril, las ventas a Venezuela del sector industrial sin principales productos (café, derivados del petróleo, ferroníquel y oro) se contrajeron en términos anuales 65%, mientras que a Estados Unidos y al resto de países aumentaron 43% y 42% anual, respectivamente. Se destaca el comportamiento de las ventas a Ecuador, las cuales crecieron en abril 49,3% con respecto al mismo mes del año anterior. Aunque países como Estados Unidos, Brasil, Chile y Ecuador han venido ganando participación como destino de nuestras exportaciones industriales sin principales productos, los niveles promedio mensuales de estas ventas en lo corrido de 2010 (US$840 m) siguen siendo inferiores a los registrados en el mismo período de 2007 (US$903 m). Las importaciones totales (CIF) del mes de abril sumaron US$3.182 millones, valor mayor en 19,3% al registrado en el mismo mes del año anterior, pero inferior en 4,2% respecto al de marzo de 2010. El aumento de las importaciones durante el mes de abril se originó principalmente por las mayores compras de bienes de consumo (particularmente de bienes duraderos) y de bienes intermedios (específicamente para la industria). Las compras de 4 bienes de capital, por su parte, registraron en el mes de abril una disminución de 13,8% con respecto al mismo mes del año anterior, debido a las menores importaciones de equipo de transporte (-47,7%) y a pesar de que las importaciones de bienes de capital para la industria crecieron a una tasa anual de 16,9%. c. Contexto externo En mayo y a comienzo de junio, los mercados continuaron exhibiendo una alta volatilidad. A los problemas de deuda de los denominados PIIGS (Portugal, Italia, Irlanda, Grecia y España) se sumaron los de Hungría. Esta situación llevó a un aumento en los indicadores de riesgo global que, sin embargo, no han golpeado fuertemente a los países emergentes de la región incluyendo Colombia. Como consecuencia de lo anterior, se mantuvieron las fuertes caídas en las bolsas internacionales, sobre todo de los países desarrollados, en donde se perdió una parte significativa de las valorizaciones ganadas en el último año. Asimismo, el euro continúo depreciándose frente al dólar. El efecto en América Latina y otras economías emergentes ha sido leve. Las primas de riesgo de la región se han elevado relativamente poco en las últimas semanas. Así mismo, el impacto sobre las monedas no ha sido fuerte, siendo el efecto más notorio en Brasil y Chile donde las monedas se han depreciado desde comienzos de mayo. En el caso del peso colombiano esta tendencia ha sido mucho menos marcada y en los últimos 20 días se ha presentado una apreciación. Los mercados bursátiles de la región han caído, pero no tan fuertemente como en los países desarrollados. La bolsa de Colombia es de las más estables. En materia de crecimiento, los datos reales del primer trimestre confirman la recuperación de la actividad productiva. En este período se observó una expansión importante del PIB en algunos países de la región como Brasil y Perú y de otros emergentes de Asia. El impacto principal de la mayor incertidumbre externa se ha visto en los precios de los productos básicos, en particular en el petróleo. De mantenerse esta tendencia, perjudicaría especialmente a países exportadores de materias primas, al afectar sus términos de intercambio y, por esta vía, al PIB. 5 d. Variables financieras Durante mayo no se presentaron cambios en las tendencias de los principales agregados monetarios. El M3 creció a una tasa anual de 8,0% y algo similar sucedió con los pasivos sujetos a encaje (8,0% anual) y con el efectivo (8,6% anual). En pesos constantes, el M3 creció a una tasa anual de 5,3%. La cartera total del sistema financiero en pesos a finales de mayo creció a un ritmo anual de 4,6%, menor que lo registrado en abril (5,0%). La desaceleración se concentró en la cartera comercial. Si bien la cartera comercial presenta un ritmo de crecimiento anual bajo, cuando se tienen en cuenta las emisiones de bonos del sector real, el crédito dirigido al sector comercial registra un aumento anual estimado de 4,0% en mayo. En pesos constantes, el crecimiento anual de la cartera hipotecaria es de 17% y presenta una tendencia ascendente que acumula más de seis meses. Por su parte, la cartera de consumo real se expandió en mayo a un ritmo anual de 3,6%, presentando también una tendencia positiva desde diciembre del año pasado. Las reducciones de la tasa de interés de banco se siguieron trasmitiendo a las tasas de mercado en mayo. En el caso de la DTF, en mayo su nivel fue 3,6% frente a 3,9% de abril. La mayoría de otras tasas pasivas también presentaron reducción de magnitud similar durante las últimas cinco semanas. Por el lado de las tasas activas, todas excepto las del crédito a constructores, presentaron disminuciones. Entre el 26 de mayo y el 16 de junio, las tasas de los títulos de deuda pública registraron variaciones negativas de 2pb, 23pb y 4pb en los tramos corto, medio y largo, respectivamente. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el resultado de la inflación a mayo que se ubicó por debajo de lo esperado por el mercado y el equipo técnico del Banco de la República; (ii) los indicadores de 6 inflación básica que si bien dejaron de caer se encuentran dentro del rango meta fijado por la Junta; (iii) las expectativas de inflación que continuaron reduciéndose; (iv) la recuperación de la economía durante el primer trimestre más rápida de la esperada; (v) las mejoras en las expectativas de los empresarios y consumidores; (vi) el crecimiento estable de los agregados monetarios ; (vii) el crecimiento de la cartera del sistema financiero en moneda legal en niveles similares al aumento estimado del PIB nominal para 2010; (viii) el comportamiento reciente de los precios de los activos; (ix) el comportamiento de las tasas de interés del mercado en respuesta a la reducción de la tasa de referencia del Banco; (x) el efecto de la tasa de cambio sobre la inflación y el crecimiento del producto de los sectores transables; (xi) las tasas de interés de los títulos de deuda pública, que mostraron una caída en el mes y (xii) la recuperación de la economía mundial y la fuerte incertidumbre generada por la crisis de algunos países europeos. Los principales puntos de análisis entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) las proyecciones de inflación para el 2010 y 2011 ; (ii) la reducción en la variación de los precios de los bienes transables debido a la apreciación del peso frente al dólar; (iii) el efecto rezagado de las medidas de política monetaria sobre la producción y los precios; (iv) las proyecciones de crecimiento de la economía para 2010 que sugieren una recuperación más rápida de lo previsto; (v) la dinámica reciente en la cartera del sistema financiero y de los precios de los activos; (vi) la caída en las expectativas de inflación; (vii) el balance de riesgos entre crecimiento e inflación en un contexto de una economía recuperándose y una inflación que se ubica levemente por debajo del rango meta de largo plazo; (viii) la incertidumbre generada por la crisis europea en la economía mundial; y (ix) la necesidad de mantener la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación alrededor de la meta de largo plazo. La Junta Directiva destacó lo siguiente sobre el comportamiento de la inflación durante el mes: (i) la inflación anual al consumidor en mayo fue de 2,07%, ligeramente mayor que en abril (9 pb), pero por debajo de lo esperado por el mercado y por el equipo técnico del Banco de la República; (ii) la mayoría de los indicadores de inflación básica continúan en la parte baja del rango meta de inflación de largo plazo fijado por la Junta (3% más o menos 1%). (iii) las expectativas de inflación siguieron cayendo y (iv) el resultado de la inflación en el último mes está en línea con las proyecciones realizadas por el equipo técnico que muestran, con un alto grado de confianza, que la inflación se situará dentro del rango meta de largo plazo en 2010 y 2011. 7 La Junta destacó que la información recibida en las últimas semanas indica que la economía colombiana crecerá a un mayor ritmo de lo esperado, sin generar presiones inflacionarias. El crecimiento de las exportaciones, impulsado por la recuperación de la dinámica de la economía global y mejores términos de intercambio; el aumento en la confianza de consumidores y productores; el dinamismo de varios indicadores líderes y la solidez del sistema financiero, confirman el fortalecimiento de la economía colombiana. Los mercados internacionales han mostrado una gran volatilidad como consecuencia de la crisis de la deuda pública en algunos países europeos. Hasta la fecha siguen siendo inciertos los efectos de esta crisis. Se destaca, sin embargo, que las economías de América Latina muestran una recuperación cada vez más fuerte acompañada del fortalecimiento de sus monedas. La Junta considera que la política monetaria expansiva adoptada contribuye al crecimiento de la economía, en un ambiente caracterizado por un sistema financiero saludable. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva acordó mantener inalterada la tasa de intervención del Banco de la República que seguirá en 3%. Bogotá DC, julio 2 de 2010
2010-07-01
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 23 de Julio de 2010 El 23 de Julio de 2010 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Oscar Iván Zuluaga, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo y Juan Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. El director César Vallejo no asistió por razón justificada. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor en junio se situó en 2,25%, 18 pb más que en mayo. La inflación mensual fue de 0,11% y los indicadores de inflación básica volvieron a descender. La variación anual de los precios de los alimentos pasó de 1% en mayo a 1,5% en junio, debido básicamente al precio de los perecederos. El incremento anual de precios de los bienes regulados pasó de 4,6% en mayo a 5,1% en junio. Esto como consecuencia de los ajustes que se hicieron en el precio de los combustibles. La variación anual de los precios de los bienes no transables sin alimentos ni regulados se redujo de 3,9% en mayo a 3,8% en junio. El aumento anual de precios de bienes transables sin alimentos ni regulados se mantuvo estable en -0,5% en junio. 2 Con datos preliminares para julio, las expectativas de inflación derivadas de las negociaciones de deuda pública para 1, 5 y 10 años se situaron en 1,44%, 3,85% y 4,31%, con variaciones de -3 pb, +21 pb y +23 pb respectivamente, frente al promedio del mes anterior. Las expectativas de inflación de las encuestas trimestral y mensual realizadas por el Banco de la República a comienzos de junio siguen mostrando descensos y se ubican dentro del rango meta de largo plazo fijado por la Junta Directiva. En junio, la inflación anual de los precios al productor (IPP) fue de 2,1% frente a un registro de 1,3% en mayo. El IPP aumentó principalmente por una caída en la base de comparación del año anterior. b. Crecimiento A finales de junio el DANE dio a conocer el crecimiento anual del PIB para el primer trimestre del año, calculado con un nuevo año base de referencia y modificaciones metodológicas importantes. El resultado fue 4,4%, mayor que lo previsto en la última proyección por parte del equipo técnico del Banco de la República (3,4%). Comparado con el del trimestre inmediatamente anterior, el PIB del primer trimestre aumentó 1,5%, cifra que corresponde a una tasa anualizada de 6,2%. De esta manera, se completaron cinco períodos sucesivos de expansión del PIB en términos trimestrales. El consumo de los hogares fue el rubro de gasto que contribuyó en mayor medida al crecimiento del PIB en el primer trimestre de 2010. Este agregado completó cuatro trimestres con crecimientos anuales positivos, siendo la expansión del primer trimestre de 2010 (3,5%) superior a la del trimestre anterior. La inversión en capital fijo fue el segundo rubro de gasto con mayor contribución al crecimiento. En los primeros tres meses del año este agregado aumentó a una tasa anual alta (8%) y estuvo impulsado por la construcción de obras civiles. Es importante destacar que con la nueva base 2005 la formación bruta de capital fijo se expandió durante todo el 2009. Las exportaciones netas (exportaciones menos importaciones), por su parte, presentaron una contribución negativa al crecimiento. Mientras las 3 importaciones aumentaron a una tasa anual positiva por primera vez desde el cuarto trimestre de 2008, las exportaciones siguieron contrayéndose en términos anuales, aunque a un ritmo menor que el observado el año pasado. La recuperación de las importaciones estuvo impulsada principalmente por la compra de bienes de consumo. Por ramas de actividad económica, los sectores que explicaron el crecimiento anual del PIB fueron, en su orden, construcción (por obras civiles), minería, servicios, industria y comercio, todos con crecimientos anuales mayores a 3%. En el caso de los servicios se destaca el buen desempeño de los ofrecidos por el gobierno. El único sector que mostró una caída anual de su actividad económica fue la agricultura, hecho que obedeció a una contracción del PIB del sector pecuario y a que la producción cafetera siguió mostrando niveles bajos respecto al año anterior. Para el segundo trimestre de 2010 la mayoría de los indicadores disponibles sugiere que la expansión anual de la actividad económica continuó a un ritmo más dinámico que el observado durante el primer trimestre del año. Algunos indicadores relevantes muestran lo siguiente: - La Encuesta de Opinión al Consumidor de Fedesarrollo que mide el índice de confianza de los hogares, aumentó en abril, mayo y junio y se acercó este último mes a sus máximos niveles históricos. El Índice de Confianza del Consumidor durante lo corrido de 2010 ha estado impulsado principalmente por las mejores expectativas que tienen los hogares sobre el comportamiento futuro de la economía y, en menor medida, por una mejor percepción de las condiciones económicas actuales. El mejoramiento en la confianza de los consumidores va de la mano de una mayor disponibilidad para comprar bienes durables, vivienda y carro. - Las ventas al por menor reportadas por el DANE crecieron durante los meses de abril y mayo, en términos reales a una tasa anual de 8% y 13,1%, respectivamente. La expansión de las ventas del comercio al por menor en mayo, sin tener en cuenta automóviles, fue de 7,9%. - En mayo, la variación anual del índice de producción industrial (IPI) sin trilla de café fue de 7,5%, inferior al del mes de abril (7,9%). A pesar de que en mayo el nivel del IPI desestacionalizado retrocedió levemente, la serie mantiene una tendencia ascendente sólida. 4 Con base en la información disponible, el equipo técnico realizó el pronóstico de crecimiento anual del PIB para el segundo trimestre del año. El resultado del ejercicio arroja un intervalo de pronóstico entre 4,3% y 5,5%, con 4,9% como cifra más probable. Para todo el 2010, el equipo técnico estima que el PIB crecería en un rango entre 3,5% y 5,5%, con un escenario más probable de 4,5%. Las exportaciones totales en dólares del mes de mayo sumaron US$3.510 millones, registrando un incremento de 28% con respecto al mismo mes del año anterior. Dicho comportamiento se explica por el aumento de las exportaciones del sector minero (42%) y del sector industrial (21%). En volúmenes, las ventas al exterior de dichos sectores también presentaron incrementos (31% y 13%, respectivamente). Por su parte, las exportaciones del sector industrial sin café, derivados del petróleo, ferroníquel y oro registraron en mayo niveles similares a los observados en el mismo mes de 2009, con un crecimiento anual de 1%. Los principales productos de exportación (café, carbón, ferroníquel, petróleo y derivados), que representaron el 61% del total de las ventas externas en el mes de mayo, registraron en dicho período un crecimiento anual de 51% en valores y de 31% en volúmenes. En mayo, las ventas a Venezuela del sector industrial sin principales productos (café, derivados del petróleo, ferroníquel y oro) se contrajeron en términos anuales 68%, mientras que a Ecuador, Estados Unidos y al resto de países aumentaron 42%, 27% y 57% anual, respectivamente. A pesar de que países como Estados Unidos, Brasil, Chile, China y Ecuador han venido ganando participación como destino de nuestras exportaciones industriales sin principales productos, en lo corrido de 2010 los niveles promedio mensuales de las ventas totales de estos productos (US$867 m) siguen siendo inferiores a los registrados en el mismo período de 2007 (US$947 m). Las importaciones totales (CIF) del mes de mayo sumaron US$3.184 millones, valor mayor en 30,1% al registrado en el mismo mes del año anterior. Dicho aumento se originó principalmente en las mayores compras de bienes de consumo (particularmente de bienes duraderos) y de bienes intermedios (específicamente combustibles y bienes para la industria). Por su parte, las importaciones de bienes de capital registraron durante el mes de mayo un aumento de 14,4% con respecto al mismo mes del año anterior, debido a las mayores compras de bienes para la industria (36,6%). 5 En el período marzo - mayo, la tasa de desempleo para el total nacional fue de 12%. En las 13 principales ciudades disminuyó, pasando de 12,9% en el mismo período de 2009 a 12,5% en 2010. Al analizar las series desestacionalizadas se observa que a lo largo del trimestre la tasa de desempleo se redujo frente a los niveles observados a finales de 2009 y a principios de 2010. Lo anterior fue posible gracias a una menor presión de la tasa global de participación, la cual ha dejado de expandirse al ritmo en que lo había hecho a finales de 2009. c. Contexto externo Durante el segundo trimestre, la economía mundial continuó creciendo, gracias al mejor comportamiento de las economías emergentes y de EEUU. Los países en desarrollo continúan liderando la reactivación de la demanda mundial, en particular por los asiáticos, aunque también en Latinoamérica se ha observado un repunte significativo. Pese a este panorama favorable, la crisis de deuda pública en Europa ha generado temores sobre la sostenibilidad de la recuperación mundial y, en particular, la de los países desarrollados. Adicionalmente, las economías desarrolladas siguen enfrentando problemas que pueden limitar su crecimiento en los próximos trimestres. Los más serios son la debilidad que exhibe el mercado laboral, el alto nivel de endeudamiento de los hogares y las restricciones al crédito bancario que permanecen vigentes. En cuanto a las economías emergentes, un hecho sobresaliente en el último mes fue la leve desaceleración del PIB de China, que creció 10,3% en el segundo trimestre de 2010, luego del 11,9% observado en el trimestre anterior. Este fenómeno se atribuye al cambio en la postura de política económica adoptado en ese país hace unos meses para enfriar la economía. Pese a esto, se espera que el crecimiento de China y del resto de Asia seguirá siendo fuerte el resto del año. En América Latina se observaron crecimientos dinámicos durante el primer trimestre. Sobresalen los casos de Brasil y Perú, con tasas anuales de 9% y 6%, respectivamente. 6 Por su parte, los precios de los productos básicos, aunque presentaron fuertes caídas por la turbulencia financiera, tendieron a recuperarse, manteniéndose en niveles históricamente altos. Para lo que resta del año y para 2011 no se esperan cambios sustanciales en sus niveles con lo cual los términos de intercambio para países exportadores de materias primas como Colombia seguirían siendo favorables. En materia de inflación al consumidor, tanto la total como la básica permanecen en niveles bajos en la mayoría de países industrializados. Por ello y por la débil situación del crecimiento y del empleo, se espera que los bancos centrales de estas economías mantengan sus tasas de interés en niveles cercanos a cero durante 2010 con algunas notables excepciones como las de Canadá y Australia. En América Latina, a excepción de Argentina y Venezuela, la inflación parece estar bajo control, en niveles relativamente bajos. Pese a ello, el fuerte crecimiento económico ha inducido ajustes de la política monetaria en varios países de la región. En cuanto a las monedas, el dólar se ha fortalecido en lo corrido del año frente al Euro y la Libra, aunque en el caso de las divisas de las economías emergentes el comportamiento ha sido mixto. El peso colombiano, en particular, se ha apreciado en lo corrido del año alrededor de 8%. Finalmente, las primas de riesgo han permanecido estables o han decrecido levemente para las economías emergentes, especialmente para los países latinoamericanos d. Variables financieras En los últimos meses, el crecimiento anual del efectivo se ha acelerado. De acuerdo con los datos más recientes de comienzos de julio, su crecimiento se ubica en 11,5%, 6 puntos porcentuales más que lo registrado a comienzos del año. Por su parte, M3 y los pasivos sujetos a encaje, que habían presentado tasas de crecimiento nominal relativamente estables, aumentaron su volatilidad como consecuencia del comportamiento de los depósitos fiduciarios, principalmente. En términos reales, la tasa promedio de crecimiento de M3 de junio fue 4,4%. 7 Con respecto al crédito, el crecimiento anual de la cartera en M/N nominal se recuperó frente a mayo. La cartera comercial detuvo su tendencia decreciente y las carteras hipotecaria y de consumo consolidaron su aceleración. Al 2 de julio, las tasas de crecimiento anual fueron 0,9%, 22,2% y 8,9% respectivamente. La cartera total en M/N creció 5,6%. Durante el segundo semestre es posible que se presente un mejor desempeño del crédito de acuerdo con las encuestas realizadas al sector financiero por parte del Banco de la República, que capturan aspectos de oferta. De acuerdo con dichos resultados, las entidades de crédito muestran una mayor disposición a otorgar préstamos frente a lo que se observó a finales de 2009 y comienzos de 2010. Por el lado de la demanda, la encuesta de Fedesarrollo indica que los consumidores han aumentado la disposición para comprar inmuebles y bienes durables que requieren financiación. Respecto de las tasas de interés, las interbancarias han permanecido ajustadas a la de política desde mediados de abril. Las reducciones de la tasa de interés de intervención del Banco de la República se siguieron trasmitiendo a las tasas de mercado en junio. En el caso de la DTF, su nivel fue 3,5% en este último mes frente a 3,6% de mayo. Por el lado de las tasas activas, todas presentaron disminuciones en junio que oscilaron entre 9 pb (para consumo) y los 38 pb (para hipotecaria). En términos reales también se presentó una reducción, en particular en las de crédito hipotecario. Con respecto al precio de los activos las acciones retomaron su tendencia a la valorización. También aumentaron de precio los títulos de deuda pública con plazo mayor a un año. El índice de precios de la vivienda usada se encuentra en niveles históricamente altos. Entre el 18 de junio y el 21 de julio, las tasas de los títulos de deuda pública registraron variaciones negativas de 10pb, 51pb y 65pb en los tramos corto, medio y largo, respectivamente. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el resultado de la inflación a junio que fue menor al esperado por el equipo técnico del Banco de la República; (ii) los indicadores de inflación básica que retomaron la senda descendente y se encuentran dentro del rango meta fijado 8 por la Junta; (iii) las expectativas de inflación que continuaron reduciéndose; (iv) la información del DANE sobre crecimiento del PIB en el primer trimestre que confirma una recuperación de la economía más rápida de la esperada; (v) las mejoras en las expectativas de los empresarios y consumidores; (vi) el crecimiento estable de los agregados monetarios ; (vii) el crecimiento de la cartera del sistema financiero en moneda legal en niveles similares al aumento estimado del PIB nominal para 2010; (viii) el comportamiento reciente de los precios de los activos; (ix) el comportamiento de las tasas de interés del mercado en respuesta a la reducción de la tasa de referencia del Banco; (x) el efecto de la tasa de cambio sobre la inflación y el crecimiento del producto de los sectores transables; (xi) las tasas de interés de los títulos de deuda pública, que mostraron una caída en el mes y (xii) la recuperación de la economía mundial y la fuerte incertidumbre generada por la crisis de algunos países europeos. Los principales puntos de análisis entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) las proyecciones de inflación para el 2010 y 2011 ; (ii) la reducción en la variación de los precios de los bienes transables debido a la apreciación del peso frente al dólar; (iii) el efecto rezagado de las medidas de política monetaria sobre la producción y los precios; (iv) las proyecciones de crecimiento de la economía para 2010 que sugieren una recuperación más rápida de lo previsto y que llevó al equipo técnico a aumentar su pronóstico para el año ; (v) la dinámica reciente en la cartera del sistema financiero y el alto nivel en los precios de los activos; (vi) la caída en las expectativas de inflación; (vii) el comportamiento reciente de los flujos de capital; (viii) el balance de riesgos entre crecimiento e inflación en un contexto de una economía recuperándose y una inflación que se sitúa en el rango meta de largo plazo y; (ix) la necesidad de mantener la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación alrededor de la meta de largo plazo. La Junta Directiva destacó lo siguiente sobre el comportamiento de la inflación durante el mes: (i) la inflación anual al consumidor en junio fue de 2,25%, mayor que en abril (18 pb) pero por debajo de lo esperado por el equipo técnico del Banco de la República; (ii) la mayoría de los indicadores de inflación básica volvieron a caer y continúan en la parte baja del rango meta de inflación de largo plazo fijado por la Junta (3% más o menos 1%); (iii) las expectativas de inflación también siguieron disminuyendo; (iv) el resultado de la inflación en el último mes está en línea con las proyecciones realizadas por 9 el equipo técnico que muestran, con un alto grado de confianza, que la inflación se situará dentro del rango meta de largo plazo en 2010 y 2011. La Junta destacó que la información recibida en las últimas semanas indica que la economía colombiana está creciendo a un mayor ritmo de lo esperado, sin generar presiones inflacionarias. El crecimiento de las exportaciones, impulsado por la recuperación de la dinámica de la economía global y mejores términos de intercambio; el aumento en la confianza de consumidores y productores; el dinamismo de varios indicadores líderes y la solidez del sistema financiero, confirman el fortalecimiento de la economía colombiana. Dado lo anterior, el equipo técnico del Banco de la República aumentó su pronóstico de crecimiento del PIB para 2010, señalando que este se ubicará dentro de un rango entre 3,5% y 5,5%, con un escenario más probable de 4,5%. Durante el segundo trimestre, la economía mundial continuó creciendo debido al mejor comportamiento de las economías emergentes y de USA, destacándose una recuperación cada vez mayor de las economías de América Latina. Los mercados internacionales, por su parte, se estabilizaron luego de la crisis financiera en Europa. Todo lo anterior llevó a una disminución de las primas de riesgo y a la apreciación de varias monedas de la región, incluido el peso colombiano. La Junta considera que la política monetaria expansiva adoptada, contribuye al crecimiento económico de corto plazo. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva acordó mantener inalterada la tasa de intervención del Banco de la República que seguirá en 3%. Bogotá DC, agosto 6 de 2010
2010-08-01
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 20 de Agosto de 2010 El 20 de Agosto de 2010 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor en julio se situó en 2,24%, 1 pb menos que en junio. La inflación mensual fue de -0,04% y los indicadores de inflación básica volvieron a descender. La variación anual de los precios de los alimentos pasó de 1,5% en junio a 1,71% en julio, debido básicamente al precio de los perecederos. El incremento anual de precios de los bienes regulados pasó de 5,1% en junio a 5,23% en julio. Esto como consecuencia de los ajustes que se hicieron en las tarifas de energía eléctrica. La variación anual de los precios de los bienes no transables sin alimentos ni regulados se redujo de 3,8% en junio a 3,78% en julio. El aumento anual de precios de bienes transables sin alimentos ni regulados pasó de -0,5% en junio a -0,77% en julio. 2 Con datos preliminares para julio, las expectativas de inflación derivadas de las negociaciones de deuda pública para 1, 5 y 10 años se situaron en 1,12%, 3,81% y 4,33%, con variaciones de -51 pb, -4 pb y +2 pb respectivamente, frente al promedio del mes anterior. Las expectativas de inflación de las encuestas trimestral y mensual realizadas por el Banco de la República a comienzos de julio siguen mostrando descensos y se ubican dentro del rango meta de largo plazo fijado por la Junta Directiva. En julio, la inflación anual de los precios al productor (IPP) fue de 1,8% frente a un registro de 2,1% en junio. b. Crecimiento Los indicadores disponibles señalan que el dinamismo de la demanda interna observado al comienzo del año se habría mantenido para el segundo trimestre y, aunque con una menor evidencia, en lo corrido del tercero. Los indicadores sobre la evolución del consumo de los hogares y sus determinantes sugieren que éste sigue expandiéndose. El promedio del Índice de Confianza del Consumidor para el segundo trimestre, muestra que el consumo de los hogares continuó creciendo a buen ritmo. También, las importaciones de bienes de consumo, especialmente de durables, apoyada en los bajos precios internacionales y la evolución de la tasa de cambio, siguen mostrando la aceleración del gasto de los hogares en este rubro. En la misma dirección apuntan los indicadores de la actividad comercial. En junio, la EOE también registró señales de recuperación para el comercio, confirmadas con un crecimiento de las ventas al por menor de 15,4% anual, de acuerdo con el registro reciente divulgado por el DANE. El comportamiento del empleo también ha contribuido al desempeño del consumo. En el segundo trimestre, el empleo volvió a incrementarse tanto en términos anuales como frente al primer trimestre. El aumento se dio principalmente en los empleados asalariados urbanos. Sobre la inversión se destacan dos aspectos en la información reciente. El primero es la recuperación lenta pero sostenida de las importaciones de bienes de capital, dirigidas especialmente a la industria. La segunda es la aceleración del área aprobada de licencias registrada en mayo, que indica que 3 la construcción diferente a obras civiles está retornando a una tendencia creciente Por el lado de la oferta, la actividad industrial se está expandiendo a un buen ritmo pero algo más lento que el esperado. Para el mes de junio, el DANE reportó un crecimiento de la actividad industrial de 8,5% anual, cifra inferior a la proyectada por el equipo técnico (9,8%). La información de las encuestas de opinión también es favorable. A junio, la EOE de Fedesarrollo muestra que los pedidos de la industria continuaron mejorando, mientras que las expectativas de producción a tres meses se estabilizan en niveles altos. Para el tercer trimestre la información es limitada. Dentro de los pocos indicadores disponibles se encuentra la confianza de los consumidores, la cual se mantuvo en niveles relativamente altos en el mes de julio, con lo cual se prevé que el consumo podría mantener el ritmo observado en el segundo trimestre. Dentro de esa misma encuesta, la disposición a comprar vivienda y bienes durables se mantiene más alta que la de comienzos de año. Las ventas observadas de vehículos confirman esa percepción, ya que para el mes de julio continuaron creciendo a un ritmo importante Los nuevos datos a junio mostraron una desaceleración de las exportaciones en dólares. A junio las ventas externas totales crecieron 11,7% anual, cuando un mes atrás lo habían hecho a un ritmo de 30% anual. Este menor ritmo de crecimiento se observó en las principales categorías según el origen de los bienes. Las ventas externas de los principales productos (café, carbón, petróleo ferroníquel y sus derivados) aumentaron en junio 30%, cifra menor en 24,9 pp a la observada en mayo. Por su parte, las exportaciones agropecuarias crecieron 0,8% anual y las industriales sin principales productos -19,7% anual, cifras menores en 0,5 pp y 18 pp a los registros de mayo. c. Contexto externo La última información disponible sobre el panorama externo sugiere una recuperación económica mundial que se puede dar de una forma más lenta que la esperada por el mercado. Lo anterior, por la desaceleración observada en Estados Unidos, nuestro principal socio comercial, que en el segundo trimestre de 2010 creció 2,4% (t/a), luego de haberlo hecho a un ritmo de 3,7% (t/a) al inicio del año. La mayor sorpresa se dio en el consumo de los hogares, cuyo 4 crecimiento en el primer trimestre fue revisado a la baja y con un aumento aún menor para el segundo trimestre. Los nuevos datos del mercado laboral, de confianza del consumidor, de ventas al por menor, de crédito de consumo y de inicios de vivienda siguen reflejando la debilidad de la demanda interna en dicho país. Por su parte, la reciente información de Europa sigue mostrando una recuperación lenta, a pesar de la aceleración observada en Alemania e Inglaterra. Los países asiáticos, en cambio, mantienen buenos ritmos de crecimiento y se espera que continúen por esta senda. Con excepción de Venezuela, nuestros principales socios comerciales en Latinoamérica continúan mostrando una aceleración en su economía. Se destacan los altos crecimientos en el Perú, Brasil y Chile. En lo que resta del año es factible que esta dinámica continúe y que en 2011 se presente un crecimiento aún mayor del PIB. En el caso de Venezuela, tanto el crecimiento observado para el primer trimestre (-5,8% anual) como el que se proyecta para todo el 2010 son reflejo de una economía en recesión que ha disminuido fuertemente sus compras externas. Otros factores como la devaluación del bolívar fuerte y la pérdida de confianza de los exportadores colombianos hacia dicho país, no permiten ser optimistas en el crecimiento de las exportaciones en el caso de que se restablezcan plenamente las relaciones comerciales. A pesar del menor crecimiento de algunos países industrializados, se espera que los términos de intercambio se mantengan en los actuales niveles, los cuales se pueden considerar como favorables. d. Variables financieras En julio el promedio de las tasas nominales de los créditos de consumo y ordinario se situaron en 17,9% y 12,9% respectivamente, con descensos en el mismo orden de 31 pb y 18 pb respecto al mes anterior. Las tasas para créditos hipotecarios se mantuvieron estables en 12,9%. De esta forma, las tasas de interés de los préstamos a los hogares y a las empresas se encuentran en niveles históricamente bajos. A julio el crecimiento anual de la cartera bruta total promedio fue 5,4%, cuando un mes atrás lo había hecho a un ritmo de 4,6%. Las carteras más 5 dinámicas continúan siendo la hipotecaria, 18,8% anual, y la de consumo, 9,3% anual, cifras superiores en su orden en 90 pb y 170 pb que los registros de junio. En julio el crecimiento anual de la cartera comercial se aceleró 60 pb y se situó en 1,4%. Entre el 23 de julio y el 18 de agosto, las tasas de los títulos de deuda pública registraron variaciones negativas de 5pb, 27pb y 35pb en los tramos corto, medio y largo, respectivamente. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el resultado de la inflación a julio que fue menor al esperado por el equipo técnico del Banco de la República y el mercado, encontrándose dentro del rango meta fijado por la Junta; (ii) los indicadores de inflación básica que siguen cayendo y también se encuentran dentro del rango meta fijado por la Junta; (iii) las expectativas de inflación que continuaron reduciéndose; (iv) la información disponible que sigue mostrando una recuperación de la economía rápida y sostenida; (v) las mejoras en las expectativas de los empresarios y consumidores; (vi) el crecimiento de la cartera del sistema financiero en moneda legal en niveles similares al aumento estimado del PIB nominal para 2010; (vii) el comportamiento de las tasas de interés del mercado en respuesta a la reducción de la tasa de referencia del Banco; (viii) el efecto de la tasa de cambio sobre la inflación y el crecimiento del producto de los sectores transables; (ix) las tasas de interés de los títulos de deuda pública, que mostraron una caída en el mes y (x) la posibilidad de que la recuperación de la economía mundial sea más lenta de lo esperado. Los principales puntos de análisis entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) las proyecciones de inflación para el 2010 y 2011 ; (ii) la reducción en la variación de los precios de los bienes transables debido a la apreciación del peso frente al dólar; (iii) el efecto rezagado de las medidas de política monetaria sobre la producción y los precios; (iv) las proyecciones de crecimiento de la economía para 2010 que sugieren una recuperación más rápida de lo previsto y que llevó al equipo técnico a aumentar su pronóstico para el año ; (v) la dinámica reciente en la cartera del sistema financiero y el comportamiento de los precios de los activos; (vi) la caída en las expectativas de inflación; (vii) el comportamiento reciente de los flujos de capital; (viii) el balance de riesgos entre crecimiento e 6 inflación en un contexto de una economía recuperándose y una inflación que se sitúa en el rango meta de largo plazo y; (ix) la necesidad de mantener la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación alrededor de la meta de largo plazo. La Junta Directiva destacó lo siguiente sobre el comportamiento de la inflación durante el mes: (i) la inflación anual al consumidor en julio fue de 2,24%, por debajo de lo esperado por el mercado y el equipo técnico del Banco de la República;(ii) los indicadores de inflación básica volvieron a caer y continúan en la parte baja del rango meta de inflación de largo plazo fijado por la Junta; (ii) las expectativas de inflación se mantienen en niveles bajos; y (iv) el resultado de la inflación en el último mes está en línea con las proyecciones realizadas por el equipo técnico que muestran, con un alto grado de confianza, que la inflación se situará dentro del rango meta de largo plazo en 2010 y 2011. La Junta resaltó que la información recibida en las últimas semanas sigue indicando que la economía colombiana está creciendo a un mayor ritmo de lo esperado, sin generar presiones inflacionarias. El aumento en la confianza de consumidores y productores; el dinamismo de varios indicadores líderes y la solidez del sistema financiero, confirman el fortalecimiento de la economía colombiana. La economía mundial continuó creciendo aunque a un paso más lento de lo ocurrido en el primer semestre. Lo anterior debido a la desaceleración en USA. Sin embargo, se aprecia una recuperación cada vez mayor de las economías de América Latina. Los mercados internacionales, por su parte, se estabilizaron luego de la crisis financiera en Europa. La Junta considera que la economía colombiana para lo que resta del año y comienzos de 2011, podrá tener términos de intercambio favorables, mayores flujos de capital, tasas de interés internacionales bajas y una demanda externa por nuestros productos no tradicionales con una recuperación débil. La Junta considera que la política monetaria expansiva adoptada, contribuye al crecimiento de la economía. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA 7 La Junta Directiva acordó mantener inalterada la tasa de intervención del Banco de la República que seguirá en 3%. Bogotá DC, septiembre 3 de 2010
2010-09-01
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 24 de Septiembre de 2010 El 24 de Septiembre de 2010 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor en agosto se situó en 2,31% (0,11% mensual) frente 2,24% registrado en julio. De esta manera, la inflación acumulada es 2,54%. Como viene sucediendo desde hace varios meses, la principal presión al alza de la inflación anual proviene del comportamiento de los precios de los regulados y de los alimentos. El incremento anual de precios de los bienes regulados pasó de 5,23% en julio a 5,69% en agosto. Esto como consecuencia de los ajustes que se hicieron en las tarifas de acueducto y gas domiciliario. La variación anual del IPC de alimentos en agosto se ubicó en 1,80% frente a 1,71% registrado el mes anterior. Por su parte, la variación anual de los precios de los bienes no transables sin alimentos ni regulados se redujo de 3,78% en julio a 3,69% en agosto. El aumento anual de precios de bienes transables sin alimentos ni regulados se mantuvo constante en -0,77% entre julio y agosto. 2 En cuanto a los indicadores de inflación básica, estos se mantuvieron prácticamente estables en el último mes, y se situaron por debajo del 3%. El registro más bajo se sigue presentando en el IPC sin alimentos ni regulados con 1,7% anual. Con datos preliminares para lo corrido de septiembre, las expectativas de inflación derivadas de las negociaciones de deuda pública para 1, 5 y 10 años se situaron en 2,43%, 3,67% y 3,98%, con variaciones de +74 pb, -2 pb y -9 pb respectivamente, frente al promedio del mes anterior. Las expectativas de inflación de la encuesta mensual realizadas por el Banco de la República a comienzos de septiembre siguen mostrando descensos y se ubican dentro del rango meta de largo plazo fijado por la Junta Directiva. Respecto a las presiones de costos no salariales, cabe mencionar que el comportamiento del IPP a la fecha sugiere que ellas no son significativas. La variación anual del IPP en agosto fue de solo 2,0%, con un ligero aumento debido a una base de comparación muy baja. b. Crecimiento De acuerdo con el DANE, el PIB creció a una tasa anual de 4,5% en el segundo trimestre. Con las nuevas cifras, el consumo de los hogares siguió recuperándose, favorecido por las bajas tasas de interés, los altos niveles de confianza y la baja inflación. Su crecimiento anual pasó de 3,5% en el primer trimestre a 3,9% en el segundo. En julio la tasa de desempleo dejo de caer como consecuencia del incremento de la oferta de trabajo (12,6% para el total nacional y 13,3 para las 13 ciudades). En el caso de jefes de hogar la tasa de ocupación se mantiene en niveles superiores al 74%. En general, la economía siguió jalonada por la demanda interna, incluida la inversión total y el consumo público. En el segundo trimestre, la contribución negativa de la demanda externa neta fue más acentuada que en el primero debido al dinamismo que ganaron las importaciones y al lento crecimiento de las exportaciones. 3 El crecimiento para el primer trimestre de 2010 se revisó a la baja, situándose en 4,2% frente a 4,4% de la estimación inicial. Con este dato el PIB creció durante la primera mitad del año a una tasa anual promedio de 4,3%. Para el tercer trimestre, los indicadores disponibles sobre la oferta han tenido comportamientos mixtos y sugieren que el crecimiento económico podría moderarse en varias ramas como el transporte, la energía, gas y agua y la industria, en este último caso según lo muestran las encuestas de la ANDI y Fedesarrollo y la información del DANE a julio. Por el lado de la demanda hay información más favorable, especialmente en el consumo de los hogares, el cual estaría creciendo a un ritmo elevado según lo muestran las encuestas de opinión del mes de agosto y las cifras recientes de comercio. La inversión de las empresas se estaría fortaleciendo, de acuerdo con algunos indicadores como la inversión extranjera, las importaciones de bienes de capital para la industria y la producción local de maquinaria y equipo. El incremento en las licencias de construcción y el buen desempeño del crédito hipotecario también sugiere alguna recuperación en edificaciones. c. Contexto externo La última información disponible sobre el panorama externo sugiere un menor crecimiento en EE.UU. y Japón. En Estados Unidos, nuestro principal socio comercial, el PIB del segundo trimestre de 2010 fue revisado a la baja de 2,4%(t/a) a 1,6%(t/a), principalmente por un menor ritmo de aumento de la inversión y de las exportaciones. Para el tercer trimestre, los nuevos datos del mercado laboral, de sentimiento de la industria, de ventas al por menor, de crédito de consumo y de inicios de vivienda sugieren que el crecimiento del segundo semestre de 2010 podría ser menor que el estimado previamente por los analistas. Por su parte, la reciente información sobre el PIB de Europa fue mejor al esperado, hecho que hizo revisar al alza los pronósticos para todo el 2010 por parte del mercado. No obstante, la nueva información del tercer trimestre muestra que este dinamismo está perdiendo fuerza. En julio, la producción industrial de la zona del Euro creció 7,1% (se esperaba 8%), cuando un mes atrás lo hacía a un ritmo de 8,3%. En Alemania, país que ha sido el de mayor 4 crecimiento de la zona, el indicador de sentimiento económico de los analistas (ZEW) de septiembre entró en terreno negativo (-4,3 puntos y se esperaba 14 puntos) y alcanzó su nivel más bajo en los 19 meses. Con excepción de Venezuela, nuestros principales socios comerciales en Latinoamérica mostraron altos crecimientos en el segundo trimestre de 2010, aunque para el resto del año se espera que dichos ritmos se moderen. En el caso de Venezuela, el crecimiento del PIB del segundo trimestre de 2010 (-1,9% anual), mostró que esta economía continúa en recesión, aunque menos fuerte que la prevista por los analistas. En el mismo periodo su demanda interna se contrajo 0,9% anual, explicado principalmente por la caída en consumo de los hogares (-2,5% anual). d. Variables financieras En agosto, el promedio de las tasas de interés nominal de los créditos de consumo y ordinario se situaron en 17,6% y 9,8% respectivamente, con descensos en el mismo orden de 32 pb y 6 pb respecto al mes anterior. Las tasas para créditos hipotecarios se mantuvieron estables en 12,9%. De esta forma, las tasas de interés de los préstamos a los hogares y a las empresas se encuentran en niveles históricamente bajos. En agosto el crecimiento anual de la cartera bruta total promedio fue 6,6%, cuando un mes atrás lo había hecho a un ritmo de 4,4%. Las carteras más dinámicas continúan siendo la hipotecaria, 19,3% anual, y la de consumo, 10,6% anual, cifras superiores en su orden en 50 pb y 130 pb a los registrados en julio. En agosto el crecimiento anual de la cartera comercial aumentó con respecto a julio en 110 pb y se situó en 2,5%. Entre finales de agosto y el 17 de septiembre de 2010, las tasas de los títulos de deuda pública registraron caídas de 10pb y 15pb para los títulos a uno y cinco años. Los títulos a 10 años se ubicaron en la misma fecha en 7,79%, 4 pb más que lo registrado al cierre del mes anterior. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el resultado de la inflación a agosto; (ii) los indicadores de inflación básica; (iii) 5 las expectativas de inflación; (iv) la información disponible sobre el crecimiento de la economía; (v) los indicadores de confianza de productores y consumidores; (vi) el desarrollo de la cartera del sistema financiero en moneda legal; (vii) el comportamiento de las tasas de interés del mercado en respuesta a la tasa de referencia del Banco; (viii) el efecto de la tasa de cambio sobre la inflación y los precios de los sectores transables; (ix) el comportamiento de los títulos de deuda pública; y (x) los datos de crecimiento de la economía mundial, especialmente los datos de crecimiento de Estados Unidos. Los principales puntos de análisis entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) las proyecciones de inflación para el 2010 y 2011; (ii) la reducción en la variación de los precios de los bienes transables debido a la apreciación del peso frente al dólar; (iii) el efecto rezagado de las medidas de política monetaria sobre la producción y los precios; (iv) las proyecciones de crecimiento de la economía para 2010 que sugieren una recuperación a un menor ritmo que el esperado; (v) el aumento de la confianza de los consumidores y el comportamiento de la inversión; (vi) la dinámica reciente en la cartera del sistema financiero; (vii) el incremento del precio de los activos financieros y de la vivienda; (viii) la caída en las expectativas de inflación; (ix) el comportamiento reciente de los flujos de capital; (x) el comportamiento de los títulos de deuda pública que muestran valorización en el tramo corto de la curva y desvalorización en el tramo largo de la curva; (xi) el balance de riesgos entre crecimiento e inflación en un contexto de una economía recuperándose y una inflación que se sitúa en el rango meta de largo plazo y; (xi) la necesidad de mantener la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación alrededor de la meta de largo plazo. La Junta Directiva destacó los siguiente aspectos sobre el comportamiento de la inflación durante el mes: (i) la inflación anual al consumidor en agosto fue de 2,31%, ligeramente superior a lo esperado por el mercado y el equipo técnico del Banco de la República; (ii) los indicadores de inflación básica volvieron a caer; (iii) las expectativas de inflación se mantienen en niveles bajos; y (iv) el resultado de la inflación en el último mes está en línea con las proyecciones realizadas por el equipo técnico que muestran, con un alto grado de confianza, que la inflación se situará dentro del rango meta de largo plazo en 2010 y 2011. La Junta resaltó que la información recibida indica que la economía colombiana está creciendo al ritmo previsto sin generar presiones 6 inflacionarias. La economía sigue jalonada por la demanda interna, incluida la inversión total y el consumo público. La economía mundial continuó creciendo aunque más lentamente de lo ocurrido en el primer semestre. Sin embargo, se aprecia buen ritmo de crecimiento en las economías de Asia y una recuperación cada vez mayor de las economías de América Latina. La Junta considera que para el resto del año y comienzos de 2011 la economía colombiana podrá tener términos de intercambio favorables, mayores flujos de capital, tasas de interés internacionales bajas y una demanda externa con una recuperación débil. La Junta considera que la política monetaria expansiva adoptada, contribuye al crecimiento de la economía sin poner en riesgo el cumplimiento de las metas de inflación. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva acordó mantener inalterada la tasa de intervención del Banco de la República que seguirá en 3%. Bogotá DC, octubre 8 de 2010
2010-10-01
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 29 de Octubre de 2010 El 29 de Octubre de 2010 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor en septiembre se situó en 2,28% (mensual de -0,14%), 3 puntos básicos (pb) menos que en agosto. El menor registro frente a agosto se debió a la presión bajista de alimentos perecederos, no transables sin alimentos ni regulados, y de los regulados. La variación anual de los precios de los alimentos pasó de 1,80% en agosto a 1,72% en septiembre, impulsada por los alimentos perecederos que registraron una inflación anual de 4,43% en septiembre frente a 6,24% en agosto. Por su parte, la variación anual de los precios de los bienes y servicios no transables sin alimentos ni regulados se redujo de 3,69% en agosto a 3,58% en septiembre. Finalmente, los precios de los bienes regulados registraron un aumento anual de 5,62% en septiembre inferior al registro para agosto de 5,69%. Por su parte, la variación anual de los precios de los bienes transables sin alimentos ni regulados pasó de -0,77% en agosto a -0,62% en septiembre. 2 En cuanto a los indicadores de inflación básica, éstos se mantuvieron prácticamente estables en el último mes, y se situaron por segundo mes consecutivo por debajo del 3%. El registro más bajo se sigue presentando en el IPC sin alimentos ni regulados con 1,67% anual. Con datos para octubre, las expectativas de inflación derivadas de las negociaciones de deuda pública para 1, 5 y 10 años se situaron en 0,8%, 3,5% y 3,8%, con variaciones de -174pb, -14pb y- 27pb respectivamente, datos inferiores al promedio del mes anterior. Las expectativas de inflación de las encuestas trimestral y mensual realizadas por el Banco de la República a comienzos de octubre siguen mostrando descensos y se ubican dentro del rango meta de largo plazo fijado por la Junta Directiva. Las presiones de costos no salariales continúan en niveles bajos. No se perciben presiones significativas por dicho frente a pesar del incremento registrado en el último mes. La variación anual de los precios al productor (IPP) fue de 2,3% frente a un registro de 2,0% en agosto. b. Crecimiento La información para el tercer trimestre sugiere que en términos generales la demanda interna mantuvo el comportamiento observado en la primera mitad del año, caracterizado por dinamismo del consumo de los hogares y recuperación sostenida de la inversión. Para el tercer trimestre, los indicadores disponibles de oferta han tenido comportamientos mixtos y sugieren que el crecimiento económico en varias ramas como la industria, la energía, gas y agua y el transporte podría moderarse. Según la más reciente información del DANE, la industria estaría exhibiendo una tasa de expansión anual de 4,4% en agosto. Sin embargo, otros sectores muestran un comportamiento más destacado, como es el caso del comercio que según el DANE se expandía a una tasa anual de 12,7% en agosto. Este último registro concuerda con el buen comportamiento exhibido en los indicadores de confianza de los consumidores para el tercer trimestre. 3 En cuanto al mercado laboral, en septiembre la tasa de desempleo se ubica en 10,6% para el total nacional y 11,5% para las 13 ciudades, cifras inferiores a las presentadas el año pasado. Se espera que la inversión aumente en el tercer trimestre. Esta previsión se apoya en el incremento de las importaciones de bienes de capital, el buen comportamiento de la inversión extranjera directa y la producción local de maquinaria y equipo. A su vez, el incremento de las licencias de construcción y el dinamismo en el crédito hipotecario también sustentan un mejor desempeño de la construcción. En cuanto al comercio exterior, con datos a agosto las exportaciones totales en dólares mostraban una variación anual de 22,3%, impulsadas principalmente por el sector minero con una variación anual de 30,4%. En cuanto al comercio exterior, con datos a agosto las exportaciones totales en dólares mostraban una variación anual de 22,3% impulsadas principalmente por el sector minero con una variación anual de 30,4%. Cifras superiores a los registros de los meses de julio y junio. Por otra parte, las importaciones totales en dólares mostraron una aceleración en agosto con una tasa de crecimiento anual acumulada 12 meses de 5,0% frente al registro un mes atrás de -0,5%. La aceleración se exhibió en los tres grupos: consumo, materias primas y bienes de capital. c. Contexto externo La última información disponible sobre el panorama externo sugiere una recuperación económica mundial que se puede dar de una forma más lenta y desigual que la esperada por el mercado. En particular, Estados Unidos, nuestro principal socio comercial, muestra signos de desaceleración más marcados que lo esperado por el mercado. En el segundo trimestre de 2010 creció 1,6% (t/a), luego de haberlo hecho a un ritmo de 3,7% (t/a) al inicio del año. Esto lo confirman indicadores del tercer trimestre como: los nuevos datos del mercado laboral, el sentimiento de la industria, las ventas al por menor, el crédito de consumo y los inicios de vivienda. En conjunto, la desaceleración en esta economía, la fuerte inyección monetaria y las expectativas de mayores estímulos a la economía por parte de la Reserva Federal, han continuado debilitando el dólar frente a la mayoría de las monedas. 4 Por su parte, la más reciente información de Europa sigue mostrando una recuperación lenta, a pesar de la aceleración observada en Alemania y Francia en el primer y segundo trimestres. Los países asiáticos, en cambio, mantienen buenos ritmos de crecimiento y se espera que continúen por esta senda. En las economías emergentes de la región, a excepción de Venezuela, las políticas monetarias y las medidas fiscales, los niveles de endeudamiento, los flujos de capitales, los términos de intercambio y la confianza, siguen favoreciendo el crecimiento, especialmente de la demanda interna. Ello, en conjunto con las perspectivas futuras, ha llevado a que en algunas de ellas (Perú, Brasil y Chile) los bancos centrales comiencen a normalizar sus políticas monetarias con incrementos de sus tasas de interés. En el caso de Venezuela, los distintos analistas proyectan una caída del PIB para el presente año cercana al 2% en línea con los registros del segundo trimestre (-1,9%), y una recuperación muy incipiente para 2011. A pesar del menor crecimiento de algunos países industrializados, se espera que los términos de intercambio se mantengan históricamente altos. d. Variables financieras En septiembre el promedio de las tasas nominales de los créditos de consumo y ordinario se situaron en 17,5% y 9,7% respectivamente, con descensos de 3 pb y 10 pb respecto al mes anterior. Las tasas para créditos hipotecarios se mantuvieron estables en 12,9%. De esta forma, las tasas de interés de los préstamos a los hogares y a las empresas se encuentran en niveles históricamente bajos. En septiembre el crecimiento anual de la cartera bruta total promedio fue 9,3% cuando el mes pasado había sido de 6,6%. Las carteras más dinámicas continúan siendo la hipotecaria, con una variación anual de 22,5%, y la de consumo, con una variación anual de 12,3%, cifras superiores en 300 pb para el caso de la cartera hipotecaria y 182 pb para la cartera de consumo a los datos registrados en agosto. En septiembre el crecimiento anual de la cartera comercial aumentó con respecto a agosto en 353pb y se situó en 6,1%. Entre el 30 de septiembre y el 29 de octubre de 2010, las tasas de los títulos de deuda pública registraron caídas de 20 pb y 28 pb para los títulos a 5 uno y cinco años. Los títulos a 10 años se ubicaron en la misma fecha en 7,49%, 40 pb menos que lo registrado al cierre del mes anterior. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA En desarrollo de la discusión se resaltaron los siguientes puntos: (i) el resultado de la inflación a septiembre; (ii) los indicadores de inflación básica; (iii) las expectativas de inflación; (iv) la información disponible sobre el crecimiento de la economía; (v) los indicadores de confianza de productores y consumidores; (vi) el desarrollo de la cartera del sistema financiero en moneda legal; (vii) el comportamiento de las tasas de interés del mercado en respuesta a la tasa de referencia del Banco; (viii) La evolución reciente de la tasa de cambio su efecto sobre la inflación y los sectores productivos; (ix) el comportamiento de los títulos de deuda pública; y (x) los datos de crecimiento de la economía mundial. Los principales puntos de análisis entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) las proyecciones de inflación para el 2010 y 2011; (ii) la variación de los precios de los bienes transables; (iii) el efecto rezagado de las medidas de política monetaria sobre la producción y los precios; (iv) las proyecciones de crecimiento de la economía y del empleo para 2010 y 2011 que sugieren un crecimiento similar al observado en 2010; (v) el aumento de la confianza de los consumidores y el comportamiento de la inversión; (vi) la dinámica reciente en la cartera del sistema financiero; (vii) el incremento del precio de los activos financieros y de la vivienda; (viii) la caída en las expectativas de inflación; (ix) el comportamiento reciente de los flujos de capital; (x) el comportamiento de los títulos de deuda pública que muestran valorización en todos los tramos; (xi) el balance de riesgos entre crecimiento e inflación en un contexto de una economía recuperándose y una inflación que se sitúa en la mitad inferior del rango meta de largo plazo y; (xii) la necesidad de mantener la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación alrededor de la meta de largo plazo. La Junta Directiva destacó los siguientes aspectos sobre el comportamiento de la inflación durante el mes: (i) la inflación anual al consumidor en agosto fue de 2,28%, inferior a lo esperado por el mercado y el equipo técnico del Banco de la República; (ii) los indicadores de inflación básica siguen mostrando niveles bajos y estables; (iii) las expectativas de inflación se mantienen en niveles bajos; y (iv) el resultado de la inflación en el 6 último mes está en línea con las proyecciones realizadas por el equipo técnico que muestran, con un alto grado de confianza, que la inflación se situará en la mitad inferior del rango meta de largo plazo en 2010 y 2011. La Junta resaltó que la información recibida indica que la economía colombiana está creciendo al ritmo previsto un par de meses atrás sin generar presiones inflacionarias. La economía sigue jalonada por la confianza de los consumidores, los altos términos de intercambio, el fortalecimiento de la inversión de las empresas y la recuperación de la cartera del sistema financiero. En Europa y Estados Unidos las perspectivas de crecimiento en el corto plazo siguen siendo modestas. En contraste, Asia y América Latina muestran mejores ritmos y perspectivas de crecimiento. La Junta considera que la política monetaria expansiva adoptada, contribuye al crecimiento de la economía sin poner en riesgo el cumplimiento de las metas de inflación. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva acordó mantener inalterada la tasa de intervención del Banco de la República que seguirá en 3%. Bogotá DC, noviembre 12 de 2010
2010-11-01
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 19 de Noviembre de 2010 El 19 de Noviembre de 2010 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor en octubre se situó en 2,33% (mensual de -0,09%), 5 puntos básicos (pb) más que en septiembre. El mayor registro frente a septiembre se debió a la presión alcista de los regulados y de los transables sin alimentos ni regulados. La variación anual de los precios de los regulados pasó de 5,62% en septiembre a 5,94% en octubre, impulsada por los servicios públicos y combustibles. Por su parte, la variación anual de los precios de los bienes transables sin alimentos ni regulados pasó de -0,62% en septiembre a -0,57% en octubre. Por su parte, la variación anual de los precios de los bienes y servicios no transables sin alimentos ni regulados se redujo por cuarto mes consecutivo y se ubicó en 3,52% en octubre frente a 3,58% en septiembre. De otro lado, los precios de los alimentos mostraron una caída de 3 pb de 1,72% en septiembre a 1,69% en octubre. 2 En cuanto a los indicadores de inflación básica, estos se mantuvieron estables con respecto al mes anterior y su promedio se situó en 2,3%. El registro más bajo se sigue presentado en el IPC sin alimentos ni regulados con 1,67% anual. Con datos disponibles al 10 de noviembre, las expectativas de inflación derivadas de las negociaciones de deuda pública para 1, 5 y 10 años se situaron en 1,47%, 3,46% y 3,72%, con variaciones de 58 pb, -7 pb y -6 pb respectivamente, frente al promedio del mes anterior. Las expectativas de inflación de la encuesta mensual realizada por el Banco de la República a comienzos de noviembre siguen mostrando descensos y se ubica dentro del rango meta de largo plazo fijado por la Junta Directiva. Las presiones de costos no salariales continúan en niveles bajos. No se perciben presiones significativas por dicho frente a pesar del incremento registrado en los últimos meses. La variación anual de los precios al productor (IPP) fue de 2,7% frente a un registro de 2,3% en septiembre, con una variación mensual de -0,3%. b. Crecimiento La información para el tercer y cuarto trimestres sugiere que la demanda interna exhibe una expansión ligeramente superior a la registrada en el primer semestre, caracterizada por el dinamismo del consumo de los hogares y recuperación sostenida de la inversión. La información de confianza del consumidor de FEDESARROLLO muestra una leve caída en octubre frente a los registros más recientes. Sin embargo, sus niveles continúan siendo elevados y claramente superiores al promedio observado en la primera mitad del año. Ello se ha visto reflejado también en los indicadores de comercio del DANE. A septiembre las ventas del comercio al por menor crecían a una tasa anual de 18,6%. Se espera que la inversión continúe recuperándose en el tercer y cuarto trimestres. Esta previsión se apoya en el incremento de las importaciones de bienes de capital, el buen comportamiento de la inversión extranjera directa y la producción local de maquinaria y equipo. A su vez, el incremento de las licencias de construcción y el dinamismo en el crédito hipotecario también sustentan un mejor desempeño de la construcción. Para el cuarto trimestre y 3 en particular para 2011 a los factores mencionados anteriormente se suma el impulso positivo que puede tener la política de reducción arancelaria para bienes de capital primordialmente. En cuanto al comercio exterior, con datos a septiembre las exportaciones totales en dólares mostraban una variación anual de 15,0% impulsadas principalmente por el sector minero, con una variación anual de 21,5%. Por otra parte, el crecimiento de las importaciones totales en dólares mostró un leve incremento en septiembre, con una variación anual de 43% frente a un registro en agosto de 41,9%. En esta oportunidad la aceleración en las importaciones se debió al comportamiento en las importaciones de bienes de capital que presentaron una tasa de expansión anual de 54,9%. Los otros dos grupos mostraron menores tasas de crecimiento que las observadas un mes atrás (de 40,3% a 34,5% para las de bienes intermedios y de 51,4% a 13,5% para las de consumo). Para el tercer trimestre, los indicadores disponibles de oferta han tenido comportamientos mixtos y sugieren que el crecimiento económico en varias ramas como la industria, la energía, gas y agua y el transporte podría moderarse. Según la más reciente información del DANE, la industria crece a una tasa de 2,8% anual en septiembre. En contraste, el comportamiento del sector minero y el comercio ha sido favorable. En el mercado laboral, los datos disponibles indican que la tasa de desempleo fue de 10,6% para el total nacional y 11,5% para las 13 ciudades, cifras inferiores a las del año anterior. c. Contexto externo En el último mes, el evento de mayor importancia en el contexto externo fue el anuncio por parte de la FED de la puesta en marcha de un nuevo programa de compra de títulos por un valor total entre 850 y 900 miles de millones de dólares (con una partida directa de 600 miles de millones y el restante como reinversión de recursos de paquetes anteriores). Al tiempo, los eventos recientes en Europa han aumentado la percepción de riesgo en los mercados internacionales. La crisis en Irlanda ha revivido los temores de contagios en la región sobre economías más grandes como España e Italia y pone en duda la capacidad de la Unión Europea para hacer frente a una crisis más marcada en estos últimos. 4 En cuanto a Estados Unidos, el crecimiento de 2,0% (t/a) para el tercer trimestre de 2010 fue ligeramente superior al registrado en el segundo trimestre del mismo año, de 1,7% (t/a). En Europa se observa de igual forma una desaceleración marcada con un crecimiento para el tercer trimestre de 1,5% (t/a), registro muy inferior al 3,9% (t/a) del segundo trimestre. Adicionalmente, los pocos datos del cuarto trimestre no permiten esperar una aceleración del crecimiento para las economías mencionadas. Las economías emergentes de la región también sintieron los efectos del incremento del riesgo, aunque sus niveles siguen bajos. Así, en las últimas semanas se observó una caída en los principales índices accionarios de la región unido a una depreciación de sus monedas frente al dólar. De todos modos, el buen desempeño económico, las aún bajas primas de riesgo y el favorable nivel de los precios de algunos productos básicos deberían seguir contribuyendo a la entrada de capitales hacia las economías emergentes. A pesar del menor crecimiento de algunos países industrializados, se espera que los términos de intercambio se mantengan históricamente altos. d. Variables financieras En octubre el promedio de las tasas nominales de los créditos de consumo y ordinario se situaron en 16,9% y 9,4% respectivamente, con descensos de 62 pb y 34 pb respecto al mes anterior. La tasa para crédito hipotecario se situó en 12,1% inferior en 11pb al registro de septiembre. De esta forma, las tasas de interés de los préstamos a los hogares y a las empresas se encuentran en niveles históricamente bajos. En octubre el crecimiento anual de la cartera bruta total promedio fue 10,7% cuando un mes atrás lo había hecho a un ritmo de 9,2%. Las carteras más dinámicas continúan siendo la hipotecaria, con una variación anual de 19,8%, y la de consumo, con una variación anual de 13,7%, cifra menor en 276 pb para el caso de la cartera hipotecaria y mayor en 134 pb para la cartera de consumo a los datos registrados en septiembre. En octubre, el crecimiento anual de la cartera comercial aumentó con respecto a septiembre en 178 pb y se situó en 7,8%. Entre el 29 de octubre y el 19 de noviembre de 2010, las tasas de los títulos de deuda pública aumentaron 26 pb y 13 pb para los títulos a uno y 5 cinco años. Los títulos a 10 años se ubicaron en la misma fecha en 8,06 %, 57 pb más que lo registrado al 29 de octubre. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA Los principales puntos de discusión y análisis entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) las proyecciones de inflación para el 2010 y 2011; (ii) la variación de los precios de los bienes transables; (iii) el efecto rezagado de las medidas de política monetaria sobre la producción y los precios; (iv) las proyecciones de crecimiento de la economía y del empleo para 2010 y 2011 que sugieren un crecimiento similar al observado en 2010; (v) el aumento de la confianza de los consumidores y el comportamiento de la inversión; (vi) la dinámica reciente en la cartera del sistema financiero; (vii) el incremento del precio de los activos financieros y de la vivienda; (viii) la caída en las expectativas de inflación; (ix) el comportamiento reciente de los flujos de capital; (x) el comportamiento de los títulos de deuda pública; (xi) el balance de riesgos entre crecimiento e inflación en un contexto de una economía recuperándose y una inflación que se sitúa en la mitad inferior del rango meta de largo plazo y; (xii) la necesidad de mantener la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación alrededor de la meta de largo plazo; (xiii) los datos de crecimiento y proyecciones de la economía mundial. La Junta Directiva destacó los siguientes aspectos sobre el comportamiento de la inflación durante el mes: (i) la inflación anual al consumidor en agosto fue de 2,33%, mayor que lo observado un mes atrás pero inferior a lo esperado por el mercado; (ii) los indicadores de inflación básica siguen mostrando niveles bajos y estables; (iii) las expectativas de inflación se mantienen en niveles bajos; y (iv) el resultado de la inflación en el último mes está en línea con las proyecciones realizadas por el equipo técnico que muestran, con un alto grado de confianza, que la inflación se situará en la mitad inferior del rango meta de largo plazo en 2010 y 2011. La Junta resaltó que la economía colombiana sigue mostrando señales de fortalecimiento impulsado por la confianza de los consumidores, los altos términos de intercambio, el fortalecimiento de la inversión de las empresas y la recuperación de la cartera del sistema financiero. Para 2011 se espera un crecimiento similar al observado en 2010, cercano al 4,5%. 6 La información disponible sobre el comportamiento de las economías de los Estados Unidos, Europa y Japón en el tercer trimestre muestra un crecimiento débil, aunque con diferencias importantes entre países. Las economías Asiáticas, y una parte importante de las de América Latina están creciendo a tasas altas. Los precios internacionales de los productos básicos más relevantes para Colombia permanecen en niveles históricamente altos a pesar del descenso reciente en las cotizaciones de algunos de ellos. En las últimas semanas han surgido eventos en Europa y Asia que han afectado el comportamiento de los mercados, aumentando la percepción de riesgo en el mundo. América Latina no ha sido la excepción. En consecuencia, recientemente se observó una caída en los principales índices accionarios de la región unido a una depreciación de sus monedas frente al dólar. La Junta Directiva considera que la postura de la política monetaria ha contribuido al crecimiento de la economía sin comprometer el logro de la meta de inflación. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva acordó mantener inalterada la tasa de intervención del Banco de la República que seguirá en 3%. Bogotá DC, diciembre 03 de 2010
2010-12-01
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 17 de Diciembre de 2010 El 17 de Diciembre de 2010 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor en noviembre fue de 2,59% (mensual de 0,19%), 26 puntos básicos (pb) más que en octubre. De esta manera la inflación acumulada es 2,51%. El mayor registro frente a octubre se debió a la presión alcista de bienes y servicios regulados y alimentos. La variación anual de los precios de los regulados pasó de 5,94% en octubre a 6,29% en noviembre, impulsada por los servicios públicos. La variación anual de los precios de los alimentos pasó de 1,69% en octubre a 2,40% en noviembre. El incremento en los precios se observó en alimentos procesados y perecederos. La variación anual de los precios de los bienes y servicios no transables sin alimentos ni regulados se incrementó marginalmente luego de completar cuatro meses consecutivos de caídas y se ubicó en 3,54% en noviembre frente a 3,52% en octubre. De otro lado, los precios de los bienes transables sin 2 alimentos ni regulados mostraron un ligero incremento de 3 pb de -0,57% en octubre a -0,54% en noviembre. En cuanto a los indicadores de inflación básica, su promedio pasó de 2,34% en octubre a 2,41% en noviembre. El registro más bajo se sigue presentado en el IPC sin alimentos ni regulados con 1,69% anual. Con datos disponibles al 14 de diciembre de 2010, las expectativas de inflación derivadas de las negociaciones de deuda pública para 1, 5 y 10 años se situaron en 2,4%, 3,9% y 4,2%, con incrementos de 68pb, 28pb y 24pb respectivamente frente al promedio del mes anterior. Las expectativas de inflación de la encuesta mensual realizada por el Banco de la República a comienzos de diciembre se ubican dentro del rango meta de largo plazo fijado por la Junta Directiva. La variación anual de los precios al productor (IPP) fue de 3,7% en noviembre frente a un registro de 2,7% en octubre, con una variación mensual de 1,2%. b. Crecimiento La información para el tercero y cuarto trimestres sugiere que la demanda interna habría disminuido su dinámica y que su crecimiento para los últimos trimestres del año sería inferior al observado en la primera mitad de 2010. El consumo de los hogares se mantiene alto pero la inversión se afectó negativamente por la construcción tanto privada como pública. Los indicadores de confianza del consumidor se mantienen altos y explican el desempeño del consumo. Este hecho se refleja en el comportamiento de los indicadores de comercio y las importaciones de consumo del DANE. Sin embargo, los indicadores de confianza según encuesta de FEDESARROLLO han retrocedido. Por otra parte, la inversión durante el tercer trimestre presenta un comportamiento mixto. Las importaciones de bienes de capital al tercer trimestre muestran tasas de expansión elevadas lo que implicaría un buen desempeño de la inversión en equipo de transporte, maquinaria y equipo. La construcción registra una contracción en los indicadores de obras civiles del 3 DANE de 17,7% y poco dinámismo en edificaciones, con excepción de la destinada a la inversión en vivienda de interés social. En cuanto al comercio exterior, a octubre las exportaciones totales en dólares mostraban una variación anual de 20,3% impulsadas principalmente por el sector miniero energético y café, con una variación anual de 29,7%. Para el acumulado de 12 meses el crecimiento de las exportaciones totales es de 20,5%. Las importaciones totales en dólares mostraron una variación anual en octubre de 22,2%. Para el acumulado de 12 meses el crecimiento de las importaciones totales es de 15,8%. Para el tercer trimestre, los indicadores disponibles sobre la oferta han tenido comportamientos mixtos y sugieren que el crecimiento económico en varias ramas como la industria, la energía, gas y agua y el transporte podría moderarse. En contraste, la información proveniente de la encuesta de opinión empresarial de FEDESARROLLO muestra que los pedidos siguen en niveles elevados y las existencias han caído, ambos indicadores asociados con un comportamiento favorable de la industria. En el mercado laboral, la tasa de desempleo muestra una tendencia decreciente en octubre, principalmente en el total nacional. Los datos a octubre muestran una fuerte creación de empleo, especialmente no asalariado, tanto en las trece áreas metropolitanas como en el total nacional. c. Variables financieras En noviembre el promedio de las tasas de interés nominales de los créditos de consumo y ordinario se situaron en 16,8% y 9,2% respectivamente, con descensos en el mismo orden de 13 pb y 21 pb respecto al mes anterior. La tasa para créditos hipotecarios se situó en 12,2% inferior en 7 pb al registro de octubre. De esta forma, las tasas de interés de los préstamos a los hogares y a las empresas se encuentran en niveles históricamente bajos. El crecimiento anual de la cartera bruta total en moneda legal en noviembre fue de 11,9% mientras que el mes anterior su crecimiento fue de 10,7%. Las carteras más dinámicas continúan siendo la hipotecaria, con una variación anual de 20,0%, y la de consumo, con una variación anual de 14,5%. En noviembre el crecimiento anual de la cartera comercial fue de 9,6%. 4 Entre el 30 de noviembre y el 16 de diciembre de 2010, las tasas de los títulos de deuda pública aumentaron 56 pb y 31 pb para los títulos a uno y cinco años. Los títulos a 10 años se ubicaron en la misma fecha en 8,25%, 4 pb más que lo registrado al 30 de noviembre. d. Contexto externo En el contexto externo se destaca el incremento en la percepción de riesgo producto de los problemas fiscales y financieros en Europa, que se ha trasmitido a mayores primas de riesgo en Grecia, Irlanda, Portugal, España y en menor medida Italia. En Europa se observa una desaceleración marcada en la actividad económica con un crecimiento para el tercer trimestre de 1,5% (t/a), registro muy inferior al 3,9% (t/a) del segundo trimestre. Sin embargo, el comportamiento es diverso con Alemania y Francia mostrando una actividad económica en recuperación. En Estados Unidos, la información de la actividad económica continúa mostrando señales mixtas. Mientras se ha revisado al alza el crecimiento para el tercer trimestre de 2010 a 2,5% (t/a), con un desempeño favorable del consumo, hay señales de debilidad considerando que la tasa de desempleo sigue siendo alta por más de un año. Las economías emergentes de la región también sintieron los efectos del incremento del riesgo y algunas de sus monedas se han devaluado frente al dólar. El buen desempeño económico, las aún bajas primas de riesgo y el favorable nivel de los precios de algunos productos básicos, probablemente seguirán contribuyendo a la entrada de capitales en estos paises. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA Los principales puntos de discusión y análisis entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) las proyecciones de inflación para el 2010 y 2011; (ii) la variación de los precios de los bienes transables; (iii) el efecto rezagado de las medidas de política monetaria sobre la producción y los precios; (iv) las proyecciones de crecimiento de la economía y del empleo para 2010 y 2011; (v) el comportamiento de la confianza de los consumidores y el desempeño de la inversión; (vi) la dinámica reciente en la cartera del sistema financiero; (vii) el incremento del precio de los activos financieros y de la vivienda; (viii) las expectativas de inflación; (ix) el 5 comportamiento reciente de los flujos de capital; (x) el comportamiento de los títulos de deuda pública; (xi) el balance de riesgos entre crecimiento y una inflación que se sitúa en la mitad inferior del rango meta de largo plazo ; (xii) la necesidad de mantener la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación alrededor de la meta de largo plazo; y (xiii) los datos de crecimiento y proyecciones de la economía mundial. La Junta Directiva destacó los siguientes aspectos sobre el comportamiento de la inflación durante el mes: (i) la inflación anual al consumidor en noviembre fue de 2,59%, mayor que lo observado un mes atrás y superior a lo esperado por el equipo técnico del Banco y el mercado; (ii) los indicadores de inflación básica (aquella que excluye los precios de los productos más volátiles como los alimentos) aumentaron levemente y siguen cerca o por debajo del punto medio del rango meta; (iii) las expectativas de inflación tuvieron un comportamiento similar; y (iv) el incremento en la inflación, explicado principalmente por el aumento en los precios de los alimentos como consecuencia del fenómeno climático será de carácter transitorio. La Junta resaltó que la economía colombiana sigue impulsada por el dinamismo de la demanda interna y términos de intercambio favorables. Los niveles elevados de confianza, un mercado laboral en recuperación, la dinámica del crédito y tasas de interés reales a niveles históricamente bajos han incidido favorablemente en la recuperación del consumo de los hogares y de la inversión. No obstante lo anterior, un indicador de obras civiles significativamente menor al esperado y el fenómeno climático pueden moderar los datos de la actividad económica a tasa inferior a las previstas en el mes anterior de 4,5%. En el último mes, las estimaciones de crecimiento mundial para 2010 no cambiaron de forma significativa. Sin embargo, en promedio los analistas del mercado y algunas entidades multilaterales continúan pronosticando una desaceleración de la economía mundial en 2011. Adicionalmente, la percepción de riesgo en Europa sigue en niveles elevados y ha afectado el comportamiento de los mercados depreciando sus monedas frente al dólar. Los precios internacionales de los productos básicos más relevantes para Colombia permanecen en niveles históricamente altos. Por su parte, el índice de la Bolsa de Valores Colombia que había descendido en parte por el 6 incremento de la percepción de riesgo mundial, ha retomado la tendencia creciente. La Junta Directiva considera que la postura de la política monetaria ha contribuido al crecimiento de la economía sin comprometer el logro de la meta de inflación. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva acordó mantener inalterada la tasa de intervención del Banco de la República que seguirá en 3%. Bogotá DC, diciembre 30 de 2010
2011-01-01
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 31 de Enero de 2011 El 31 de Enero de 2011 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor en diciembre fue de 3,17% (mensual de 0,65%), 58 puntos básicos (pb) más que en noviembre, cifra que se ubicó en el rango meta definido por la Junta Directiva para 2010 (2% - 4%). El mayor registro frente a noviembre se debió a la presión alcista de los precios de los alimentos y de los regulados así como al comportamiento menos favorable de los bienes transables sin alimentos ni regulados. La variación anual de los precios de los alimentos pasó de 2,4% en noviembre a 4,1% en diciembre, impulsada tanto por perecederos como por procesados. La variación anual de los regulados pasó de 6,3% en noviembre a 6,6% en diciembre y se concentró en combustibles. Por último, la variación anual de los precios de los bienes transables sin alimentos ni regulados pasó de -0,5% en noviembre a -0,3% en diciembre. 2 La variación anual de los precios de los bienes y servicios no transables sin alimentos ni regulados se ubicó en 3,5% en diciembre, luego de haberse incrementado en noviembre. En cuanto a los indicadores de inflación básica, su promedio pasó de 2,4% en noviembre a 2,5% en diciembre. El registro más bajo se sigue presentado en el IPC sin alimentos ni regulados con 1,8% anual. La variación anual de los precios al productor (IPP) fue de 4,4% en diciembre frente a un registro de 3,7% en noviembre, con una variación mensual de 1,6%. Las expectativas de inflación a un año aumentaron y se situaron en la mitad superior del rango meta de 2011. Las de largo plazo (cinco a diez años), medidas con los papeles de deuda pública, superaron el techo del mismo. b. Crecimiento En el tercer trimestre el PIB creció a una tasa anual de 3,6%, inferior a la esperada por el mercado y el Banco. Dicho comportamiento fue explicado principalmente por la contracción en la construcción de edificaciones y obras civiles y, en menor medida, por un bajo crecimiento en carbón y un desempeño menos favorable que el esperado en café. Por el lado de la demanda el menor registro correspondió a un bajo crecimiento en la inversión, en particular la destinada a la construcción y en un desempeño menor al esperado de las exportaciones, estas últimas afectadas por efectos climáticos. El consumo de los hogares mostró un buen desempeño y se aceleró frente a los registros del primer semestre. El mayor consumo y una fuerte inversión en maquinaria y equipo y en equipo de transporte sustentaron unas importaciones elevadas. Para el último trimestre de 2010 se espera un desempeño de la economía similar al registrado en el tercer trimestre, liderado principalmente por la demanda interna. El invierno que se intensificó hacia finales de año, pudo haber tenido efectos negativos importantes no solo en la agricultura, sino también en la Formación Bruta de Capital Fijo y en ciertas exportaciones de origen minero, las cuales no pudieron ser realizadas por problemas de extracción y/o de transporte. El indicador de confianza del consumidor se mantuvo alto para el cuarto trimestre a pesar de presentar caídas en los últimos meses. Esto indicaría que 3 en el cuarto trimestre el consumo de los hogares conservó un buen desempeño. Lo anterior se refleja a su vez en el comportamiento de los indicadores de comercio, que según el último registro del DANE mostraban una tasa de expansión anual a noviembre de 21,4%, y las importaciones de consumo, que se expandían a una tasa de 51,3% en dólares al mismo mes. Por otra parte, los indicadores de inversión presentaron un comportamiento mixto durante el cuarto trimestre. Las importaciones de bienes de capital en dólares a noviembre muestran tasas de expansión elevadas. Sin embargo, la construcción aún no mostraría un desempeño favorable, en parte por los efectos del clima y los problemas de contratación y ejecución de las obras. En cuanto al comercio exterior, a noviembre las exportaciones totales en dólares mostraban una variación anual de 19,5% impulsadas principalmente por el sector minero energético y café, con una variación anual de 30,0%. Para el acumulado de 12 meses el crecimiento de las exportaciones totales es de 20,0%. Las importaciones totales en dólares mostraron una variación anual en noviembre de 34,5%. Para el acumulado de 12 meses el crecimiento de las importaciones totales es de 20,8%. Para el cuarto trimestre, los indicadores disponibles sobre la oferta han tenido comportamientos mixtos y sugieren que el crecimiento económico en varias ramas como la industria, la energía, gas, agua y el transporte podría moderarse. En contraste, la información proveniente de la encuesta de opinión empresarial de FEDESARROLLO muestra que los pedidos de la industria siguen en niveles elevados y las existencias han caído, ambos indicadores asociados con un comportamiento favorable del sector. Sin embargo, en dicha encuesta también se destaca una caída de las expectativas de producción y ventas a tres meses. El crecimiento del empleo formal para los más educados estaría implicando un incremento en sus ingresos, lo que podría estar en parte detrás de la recuperación del consumo. El empleo formal mostró cierta recuperación en lo corrido de 2010 hasta diciembre, especialmente en la última parte del año. Las tasas reales y nominales de interés de crédito en niveles históricamente bajos, junto a una cartera de consumo e hipotecaria que se aceleró a lo largo del último semestre de 2010 son factores que han contribuido al crecimiento, y que permiten esperar un consumo más dinámico y una recuperación de la 4 inversión en edificaciones en el último trimestre. La aceleración de la cartera comercial también ha sido importante. c. Variables Financieras En Diciembre el promedio de las tasas de interés nominales de los créditos de consumo y ordinario se situaron en 16,9% y 9,3% respectivamente, con aumentos de 6 pb y 11 pb respecto al mes anterior. La tasa para créditos hipotecarios se situó en 12,2% sin variación respecto al registro de Noviembre. El crecimiento anual de la cartera bruta total en moneda legal en diciembre fue de 14,1% mientras que el mes anterior su crecimiento fue de 11,9%. Las carteras más dinámicas continúan siendo la hipotecaria, con una variación anual de 21,3% y la de consumo, con una variación anual de 15,5%. En diciembre el crecimiento anual de la cartera comercial fue de 12,8%. Entre el 3 de enero y el 28 de enero de 2011, las tasas de los títulos de deuda pública aumentaron 11 pb y 41pb para los títulos a uno y cinco años. Los títulos a 10 años se ubicaron en la misma fecha en 8,5%, 19 pb más que lo registrado al 3 de enero. d. Contexto Externo En el contexto externo en el último mes se destacan los registros de desempeño favorables en algunas economías desarrolladas como Estados Unidos con un crecimiento en el año de 2,9% y Alemania con una expansión de la economía de 3,5%. Aun así, Europa sigue mostrando una importante desaceleración para el segundo semestre del año frente al primero, producto de un desempeño poco favorable de las economías de la periferia europea. En el caso de las economías europeas con problemas fiscales, los mercados habrían tomado como una señal positiva las colocaciones de deuda realizadas el mes pasado por Portugal, España e Italia, hecho que se ha reflejado parcialmente en una reducción de la percepción de riesgo medida a través de los CDS así como en la tasa de sus títulos a 5 y 10 años. Los mejores indicadores de actividad económica para Estados Unidos, en conjunto con la aprobación de los planes fiscales del mes pasado, han hecho que mejoren las perspectivas para 2011 para esta economía y en general para 5 la economía mundial. Sin embargo, los analistas todavía ven con preocupación que el mercado laboral no muestre claros signos de recuperación. En 2011, las economías emergentes de la región han vuelto a experimentar presiones hacia la apreciación, luego de un corto periodo de calma. La solidez de sus fundamentales y su buen desempeño económico esperado en 2011, así como los precios altos de los productos básicos y las bajas primas de riesgo, seguirán contribuyendo, probablemente, a la entrada de capitales a estos países. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA Los principales puntos de discusión y análisis entre los miembros de la Junta se centraron en los siguientes aspectos: (i) las proyecciones de inflación en 2011; (ii) la variación de los precios de los bienes transables; (iii) el efecto rezagado de las medidas de política monetaria sobre la producción y los precios; (iv) las proyecciones de crecimiento de la economía y del empleo 2011; (v) el comportamiento de la confianza de los consumidores y el desempeño de la inversión; (vi) la dinámica reciente en la cartera del sistema financiero; (vii) el incremento del precio de los activos financieros y de la vivienda; (viii) las expectativas de inflación; (ix) el comportamiento reciente de los flujos de capital; (x) el comportamiento de los títulos de deuda pública; (xi) el balance de riesgos entre crecimiento e inflación; (xii) la necesidad de mantener la credibilidad de la autoridad monetaria y anclar las expectativas de inflación alrededor de la meta de largo plazo; y (xiii) los datos de crecimiento y proyecciones de la economía mundial. La Junta Directiva destacó los siguientes aspectos sobre el comportamiento de la inflación durante el mes: (i) En 2010, la variación anual del índice de precios al consumidor fue 3,17%, cifra superior a lo esperado por el equipo técnico del Banco y el mercado. El incremento en la inflación, explicado principalmente por el aumento en los precios de los alimentos como consecuencia del fenómeno climático será de carácter transitorio; (ii) Los indicadores de inflación básica también aumentaron, pero a un menor ritmo y aún se encuentra por debajo del punto medio del rango meta; (iii) Las diversas medidas de expectativas de inflación a un año se incrementaron y se ubicaron en la mitad superior del rango meta de inflación. 6 El crecimiento de la economía colombiana en el segundo semestre de 2010 fue inferior a lo pronosticado hace unos meses. Esto se explica, fundamentalmente por el comportamiento de la inversión en las obras civiles y los efectos del fenómeno de La Niña sobre la producción agrícola, la producción minera y el transporte. En contraste, el consumo y el endeudamiento de los hogares crecen a tasas altas, así como el endeudamiento de las empresas y la inversión en maquinaria y equipo. Esto último es consecuencia, en parte, de tasas de interés nominales y reales históricamente bajas. Las economías de nuestros principales socios comerciales están creciendo un poco más de lo esperado antes, si bien persiste un alto nivel de incertidumbre sobre el comportamiento futuro de algunas de ellas. Al mismo tiempo, países de Asia y América Latina muestran fuerte crecimiento y presiones de precios, y algunos de sus bancos centrales han iniciado cambios en la postura de la política monetaria. Los precios internacionales de los productos básicos se encuentran en niveles históricamente altos. Los co-directores analizaron las condiciones para que, dentro de los escenarios probables de los próximos meses, sea necesario introducir cambios en la postura de la política monetaria, reduciendo en algún grado su carácter expansivo. Los puntos que se destacaron como fundamento para un eventual aumento de la tasa de interés de intervención serían, entre otros, las crecientes expectativas de inflación al alza por encima del rango meta, la importante dinámica de la demanda interna, los altos precios de los activos y el crecimiento acelerado de la cartera. De otra parte, a favor del mantenimiento de la actual tasa, se subrayaron los bajos niveles de inflación básica y la relativa estabilidad reciente de los precios de los bienes no transables sin alimentos y regulados, el posible carácter transitorio de los incrementos en los precios de los alimentos, la inestable situación de la deuda soberana de algunos países europeos y la falta de certeza sobre las proyecciones de inflación y crecimiento para los próximos meses. Finalmente, los codirectores consideraron que en el caso en que la economía continúe la senda expansiva esperada, o las expectativas de inflación mostraren señales de desviarse de las metas, se darían las condiciones apropiadas para retirar gradualmente el estímulo monetario con el fin de afianzar el crecimiento sostenido de la producción y el empleo. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA 7 La Junta Directiva acordó mantener inalterada la tasa de intervención del Banco de la República que seguirá en 3%. Bogotá DC, febrero 14 de 2011
2011-02-01
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 25 de Febrero de 2011 El 25 de Febrero de 2011 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación: La inflación anual al consumidor de enero fue 3,4% (mensual 0,91%), 13 puntos básicos (pb) más que en diciembre. El mayor registro frente a diciembre se debió a la presión alcista de los precios de los alimentos y de los regulados. La variación anual de los precios de los alimentos pasó de 4,1% en diciembre a 4,8% en enero, impulsada en esta oportunidad principalmente por los alimentos transables y la carne de res. A pesar de que la inflación anual de los alimentos perecederos afectados por el invierno continúa siendo alta, su contribución a la aceleración de la inflación en esta oportunidad fue menor que en meses anteriores. Por su parte, la variación anual de los regulados pasó de 6,6% en diciembre a 7,0% en enero y se concentró en combustibles. Por el contrario, la variación anual de los precios de los bienes y servicios no transables sin alimentos ni regulados se redujo de 3,5% en diciembre, a 3,4% en enero. La variación anual de los precios de los bienes 2 transables sin alimentos ni regulados se mantuvo estable pero todavía en terreno negativo. En cuanto a los indicadores de inflación básica, su promedio en enero se mantuvo estable en 2,5%. El registro más bajo se sigue presentando en el IPC sin alimentos ni regulados con 1,7% anual. De otro lado, la variación anual de los precios al productor (IPP) fue 4,3%, ligeramente inferior a lo registrado en diciembre (4,4%). En cuanto a su composición, se registra un incremento en la variación anual del componente importado y una caída en la del componente nacional. En enero las expectativas de inflación para finales de 2011 se mantuvieron en el mismo nivel del mes anterior (3,6%). Algo similar ocurrió con las expectativas a un año y las de más largo plazo (5 y 10 años) derivadas del mercado de papeles de deuda pública. Para estas últimas, su nivel se encuentra por fuera del rango meta de largo plazo (2% - 4%). b. Crecimiento La información disponible para finales de 2010 permite prever un crecimiento del PIB en el cuarto trimestre del año similar al registrado en el tercero, con lo cual la economía colombiana habría crecido a una tasa cercana al 4,0% para todo el año. Dicho comportamiento estaría fundamentado en la dinámica de la demanda interna, impulsada principalmente por el consumo de los hogares y la formación bruta de capital fijo. Si bien la confianza de los consumidores mostró un retroceso en los últimos cuatro meses de 2010, su nivel a enero según lo mide el indicador de Fedesarrollo, no es bajo en términos históricos. A ello se suma un crédito de consumo que continuó expandiéndose a tasas altas en diciembre y enero y las ventas al por menor que creció 12,4% anual en diciembre. Por anterior sigue siendo razonable esperar un buen crecimiento para el consumo privado en el cuarto trimestre de 2010 y el primero de 2011. El comportamiento de las importaciones de bienes de capital, con un crecimiento fuerte a finales de año, sugiere que la inversión en bienes de capital mantiene un buen dinamismo. Así mismo, el crecimiento de las licencias de construcción en noviembre, al igual que el de las ventas de cemento en diciembre, anticipa un mejor dinamismo en la construcción de vivienda en 2011. 3 En cuanto al comercio exterior, a diciembre las exportaciones totales en dólares mostraban una variación anual de 20,1% impulsadas principalmente por el sector minero energético y café, con una variación anual de 30,4%. Para el acumulado de 12 meses el crecimiento de las exportaciones totales es de 21,1%. Las importaciones totales en dólares mostraron una variación anual en diciembre de 30,1%. Para el acumulado de 12 meses el crecimiento de las importaciones totales es 23,7%. En general, las condiciones macroeconómicas continúan señalando una expansión económica importante en 2011. En particular se sigue esperando una demanda mundial en expansión, unos términos de intercambio altos y que aumentarán frente a 2010, unos flujos de IED elevados, la recuperación del empleo y condiciones crediticias internas amplias, con tasas de interés reales relativamente bajas. Por ello, se espera que el PIB en 2011 muestre un desempeño favorable y se sitúe alrededor del 4,5%. Sin embargo, cabe señalar que sobre esta estimación existe una incertidumbre elevada, producto de los diferentes riesgos económicos y sociopolíticos que enfrenta el mundo, así como el nivel del crecimiento del gasto público en Colombia. c. Variables Financieras En enero el promedio de las tasas de interés nominales de los créditos de consumo y ordinario se situaron en 17,5% y 10,1% respectivamente, con aumentos en el mismo orden de 65pb y 77pb respecto al mes anterior. La tasa para créditos hipotecarios se situó en 12,1% inferior en 11pb al registro de diciembre. El crecimiento anual de la cartera bruta total en moneda legal en enero fue de 14,9% mientras que el mes anterior su crecimiento fue de 14,1%. Las carteras más dinámicas continúan siendo la hipotecaria, con una variación anual de 21,9% y la de consumo, con una variación anual de 16,7%. En enero el crecimiento anual de la cartera comercial fue 13,3%. Entre el 28 de enero y el 25 de febrero de 2011, las tasas de los títulos de deuda pública a uno y cinco años aumentaron 37pb y 46pb. A 10 años se ubicaron en 8,9%, 42pb más que lo registrado al 28 de enero. d. Contexto Externo 4 En el contexto externo se destacan los efectos que sobre la situación económica mundial comienzan a tener las turbulencias políticas en algunos países. En el corto plazo el efecto ha sido un incremento significativo del precio del petróleo y una caída en las bolsas mundiales. En cuanto al crecimiento mundial, éste se sigue dando a dos velocidades. Por una parte, los desarrollados con un crecimiento moderado, aunque los resultados de la economía de los Estados Unidos mostraron un mejor comportamiento al esperado. Por otra, los emergentes continúan creciendo a ritmo alto, impulsados por Asia y América Latina. El mejor desempeño que el esperado de los Estados Unidos en el cuarto trimestre de 2010 (2,8% trimestre anualizado -t/a-) estaría explicado por el impulso del consumo de los hogares y de las exportaciones netas. Sin embargo, persisten varios riesgos sobre la recuperación en esta economía. En primer lugar el desempleo continúa en niveles elevados y su duración se ha incrementado. En segundo lugar, el crédito tanto a hogares como a empresas, continúa en niveles bajos y no se vislumbra una reactivación pronta. En tercer lugar el incremento en los precios del petróleo podrían comprometer las ganancias en ingreso disponible de los hogares y frenar el consumo. La zona Euro por su parte, creció a una modesta tasa de 1,2% (t/a) con Alemania exhibiendo tasas de crecimiento elevadas y la periferia con tasas de crecimiento bajas o incluso contracciones en algunos casos. A pesar que en el último mes se ha reducido el riesgo en la zona medido a partir de los CDS a 5 años de la deuda soberana, persiste la incertidumbre sobre la solvencia de las economías de la periferia europea y no se debe descartar un posible recrudecimiento de la turbulencia en la zona Euro. De otro lado, en los últimos meses, los precios internacionales de los bienes básicos se han incrementado debido a factores de oferta y demanda. Por el lado de demanda, el buen desempeño de las economías emergentes y una mayor utilización de productos agrícolas para la producción de biocombustibles, han presionado al alza el precio de varios de estos bienes. Con respecto a la oferta, los problemas climáticos presentes desde mediados del año anterior, y los recientes acontecimientos políticos han contribuido al incremento de estos precios. En este contexto, es probable que el choque climático se diluya en el transcurso del año. En el caso de los de demanda, su duración puede ser mayor ya que obedecen a factores estructurales asociados con el buen desempeño esperado de las economías emergentes. 5 En este contexto de un buen crecimiento mundial (impulsado principalmente por las economías emergentes) y elevados precios de bienes básicos, algunos Bancos Centrales, principalmente de economías emergentes, han comenzado a reducir el estímulo monetario incrementando sus tasas de interés con el objetivo de evitar desbordes inflacionarios. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA La Junta Directiva destacó los siguientes aspectos sobre el comportamiento de la inflación durante el mes: (i) En enero la inflación anual al consumidor fue de 3,40%, cifra similar a la esperada por el mercado, y 23 puntos básicos superior al dato de diciembre. Al igual que lo observado en los dos meses anteriores, las principales presiones provinieron de los precios de los alimentos y de los regulados, especialmente de los combustibles; (ii) Los indicadores de inflación básica se mantuvieron estables, y su promedio permanece en la mitad inferior del rango meta; (iii) Las expectativas de inflación han aumentado en los últimos tres meses, comportamiento que continuó en febrero pese a que el resultado de inflación del mes anterior fue anticipado por el mercado. Mientras las expectativas de inflación a un año se situaron en la mitad superior del rango meta, las del intervalo entre dos y diez años, medidas con los títulos de deuda pública, completaron dos meses consecutivos por encima del límite superior de dicho rango. Por su parte en cuanto al crecimiento económico, destacó: (i) para 2011 se proyecta un crecimiento económico cercano al 4,5%, luego de que la moderación del crecimiento en el segundo semestre de 2010, debido en alguna medida a factores de oferta, llevara el crecimiento de ese año a una tasa cercana al 4%; (ii) La demanda interna muestra un importante dinamismo, tanto la asociada al consumo de los hogares, como a la inversión en maquinaria y equipo; (iii) La contribución del gasto público se espera que sea mayor este año que en el anterior, coherente con lo observado en períodos previos de terminación de los gobiernos locales y con los programas de reconstrucción de los daños producto de la ola invernal; (iv) Los pronósticos del crecimiento mundial en 2011 y 2012 han sido revisados al alza, a tasas que continúan por encima del crecimiento promedio de largo plazo, impulsado por principalmente por el crecimiento de las economías emergentes. Esto último se manifiesta en niveles históricamente altos de los términos de intercambio de los países productores de bienes básicos como Colombia. 6 Los miembros de la Junta evaluaron la oportunidad de incrementar en esta reunión las tasas de interés de intervención, en línea con lo anunciado en la reunión anterior sobre la conveniencia de retirar gradualmente el estímulo monetario de los meses anteriores, con el objeto de hacer sostenible en el tiempo la mayor dinámica que ha adquirido la economía colombiana y mantener la inflación dentro de su rango meta de largo plazo. Destacaron en particular, los siguientes puntos: (i) La existencia de una tasa de interés de intervención históricamente baja tanto en términos nominales como reales; (ii) Los riesgos que unas tasas de interés muy bajas por un periodo excesivamente prolongado de tiempo pueden terminar generando sobre la estabilidad financiera, el crecimiento y la inflación futura; (iii) La proyección del equipo técnico del Banco que indica que la economía retorna a niveles cercanos a su capacidad en el segundo semestre de este año; (iv) Que la política monetaria actúe con rezago; (v) El dinamismo que ha estado mostrando en el pasado reciente la demanda interna, el crédito y el incremento de tiempo atrás en los precios de la vivienda; (vi) La incoherencia que puede llegar a tener una tasa de interés excepcionalmente baja con un crecimiento esperado en 2011 y 2012 cercano al de tendencia y una inflación proyectada cerca del punto medio del rango meta de largo plazo; (vii) Las expectativas de inflación a más de un año por encima de la meta; y (viii) La estabilidad en la tasa de cambio de las últimas semanas y los resultados favorables del programa de compra de divisas. Así mismo, se consideraron los riesgos en la economía mundial. En particular, continúa la incertidumbre por la situación fiscal en algunos países industrializados y en semanas pasadas ha subido fuertemente el precio internacional del petróleo como consecuencia de la inestabilidad política en el medio oriente. Además, factores climáticos y el gran dinamismo de las economías emergentes han intensificado las presiones inflacionarias en esos países, en especial por el reciente incremento en los precios de los productos básicos. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva acordó incrementar en 25 puntos básicos la tasa de interés de intervención del Banco de la República que será de 3,25%. Bogotá DC, marzo 11 de 2011
2011-03-01
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 18 de Marzo de 2011 El 18 de Marzo de 2011 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación: La inflación anual al consumidor en febrero fue 3,17% (mensual de 0,60%), 23 puntos básicos (pb) menos que en enero. El menor registro frente a enero se debió a variación de los precios de los alimentos y regulados. La variación anual de los precios de los alimentos pasó de 4,8% en enero a 4,4% en febrero, explicada en esta oportunidad principalmente por los alimentos perecederos. Por su parte, la variación anual de los regulados pasó de 7,0% en enero a 6,3% en febrero. El menor registro obedeció a una menor variación anual en el precio de la gasolina que no fue ajustado en febrero. Por último, la inflación de transables sin alimentos ni regulados se hizo más negativa en febrero. La variación anual de los precios de los bienes y servicios no transables sin alimentos ni regulados se incrementó ligeramente, ubicándose en 3,42% en febrero frente a 3,37% en enero. 2 En cuanto a los indicadores de inflación básica, su promedio se mantuvo estable en 2,5% en febrero. El registro más bajo se sigue presentando en el IPC sin alimentos ni regulados con 1,7% anual. De otro lado, la variación anual de los precios al productor (IPP) fue de 4,6% en febrero, superior a la registrada en enero (4,3%). En cuanto a su composición se registra un incremento en la variación anual del componente importado. La encuesta mensual de expectativas de inflación del Banco de la República con datos a febrero indica que para finales de 2011 la inflación se ubicará en 3,5%, registro levemente inferior en el mes anterior de 3,6%. Para las expectativas de más largo plazo (5 y 10 años), basados en los títulos de deuda pública, la reducción fue más clara pero aún se encuentran por encima del techo del rango meta de largo plazo (2% - 4%). b. Crecimiento La información disponible para finales de 2010 permite prever un crecimiento del PIB en el último trimestre del año superior al registrado en el tercero y al pronosticado previamente por el Banco, con lo cual la economía colombiana se habría expandido a una tasa cercana al 4,2% para todo el año. Este mejor comportamiento del esperado se debe principalmente al buen desempeño del indicador de obras civiles y de la producción de café. En lo corrido del año, la actividad económica mantiene el dinamismo de finales de 2010 con un desempeño favorable de la demanda interna, tanto en consumo como en inversión. En el primer caso, la confianza de los consumidores en febrero aumentó y quebró la tendencia. A ello se le suma un crédito de consumo que continuó expandiéndose a tasas altas en enero y febrero, unas ventas al por menor que en enero crecieron 12,3% anual y un mercado laboral que muestra signos de mejoría. Por todo ello, sigue siendo razonable esperar un buen crecimiento para el consumo privado para el primer trimestre de 2011. En materia de inversión, el comportamiento de las importaciones de bienes de capital, con un crecimiento importante a finales de año, sugiere que este gasto mantiene un buen nivel. Así mismo, el fuerte crecimiento de las licencias de construcción en noviembre, al igual que el de las ventas de cemento en diciembre, anticipa una mejoría en la construcción de vivienda para comienzos de 2011 de la mano de un mejor dinamismo en obras civiles. 3 En cuanto al comercio exterior, a enero las exportaciones totales en dólares mostraban una variación anual de 29,5% impulsadas principalmente por el sector minero energético y café, con una variación anual de 30%. Para el acumulado 12 meses el crecimiento de las exportaciones totales es de 22,3%. Las importaciones totales en dólares mostraron una variación anual en diciembre de 39,8%. Para el acumulado 12 meses el crecimiento de las importaciones totales es de 27,3%. Por el lado de la oferta, los diferentes indicadores reales de expectativas y de confianza de la industria muestran que este sector continúa por el camino de la recuperación. Según la Muestra Mensual Manufacturera del DANE, el crecimiento anual de la industria a enero de 2011 fue 6,2%, tasa superior a lo acumulado en todo el 2010 y similar a lo reportado por la ANDI. Con fuente Fedesarrollo, en enero el indicador de volumen de pedidos de este sector continúa creciendo, aunque de forma lenta y con registros aún lejanos a sus máximos históricos. Por el contrario, la medida de existencias (contra cíclica) ya se acerca a su mínimo histórico. Las expectativas de producción a tres meses de los industriales retornaron a un nivel alto y el indicador de confianza (que reúne pedidos, expectativas y existencias) volvió a aumentar. Para 2011, las condiciones macroeconómicas continúan apoyando una expansión económica importante. En particular se sigue esperando una demanda mundial en expansión, unos términos de intercambio altos y que aumentaran frente a 2010, unos flujos de IED importantes, que continúe la recuperación del empleo y unas condiciones crediticias internas amplias, con tasas de interés reales relativamente bajas. Por ello, se espera que el PIB en 2011 muestre un desempeño favorable y se sitúe alrededor del 4,5%. Sin embargo, cabe señalar que sobre esta estimación existe una incertidumbre elevada producto de los diferentes riesgos económicos y sociopolíticos que enfrenta el mundo. c. Variables Financieras En febrero los promedios de las tasas de interés nominales de los créditos de consumo y ordinario se situaron en 17,5% y 9,8% respectivamente, con aumentos de 4pb para el crédito de consumo y una caída en la tasa de crédito ordinario de 27pb respecto al mes anterior. La tasa para créditos hipotecarios se situó en 12,4%, mayor en 7pb al registro de enero. 4 El crecimiento anual de la cartera bruta total en moneda legal en febrero fue 15,5% mayor al 14,9% del mes anterior. Las carteras más dinámicas continúan siendo la hipotecaria y de consumo, con una variación anual de 20,9%, y 17,5% respectivamente. En febrero el crecimiento anual de la cartera comercial fue de 13,5%. Entre el 25 de febrero y el 18 de marzo de 2011, las tasas de los títulos de deuda pública aumentaron 12pb para los títulos a un año y disminuyeron 23pb para los títulos a cinco años. Los títulos a 10 años se ubicaron en la misma fecha en 8,7%, 20pb menos que lo registrado al 25 de febrero. d. Contexto Externo En el contexto externo se destaca el impacto que ha tenido el terremoto en Japón sobre esta economía y en general sobre los mercados internacionales. Desde hace una semana, los mercados bursátiles y de productos básicos han mostrado desvalorizaciones importantes que han puesto freno, al menos de manera parcial, a la escalada en los precios internacionales de los productos básicos y han acentuado las caídas ya registradas en las bolsas, producto de las tensiones en Oriente Medio y el Norte de África. En particular, el precio del petróleo cayó luego del fuerte incremento registrado con el advenimiento de la crisis en Oriente Medio y el Norte de África. En cuanto al crecimiento mundial, éste se sigue dando a varias velocidades. Por una parte, dentro de los principales países desarrollados se destacan Estados Unidos y Alemania que han mostrado un mejor comportamiento al esperado. Por otra, los países de la periferia europea y Japón con crecimientos bajos o incluso contracciones y finalmente los emergentes que continúan creciendo a buen ritmo, impulsados por Asia y América Latina. En lo corrido de 2011 los Estados Unidos han continuado consolidando su recuperación económica con un crecimiento lento de la industria manufacturera y una dinámica más fuerte de la esperada en las ventas del comercio. Así mismo, el mercado laboral ha comenzado a mostrar signos de recuperación, como lo sugieren los indicadores de enero y febrero. A pesar de lo anterior, todavía persisten algunos obstáculos para la recuperación plena. En primer lugar, los altos niveles de la deuda de los agentes y la aún elevada percepción de riesgo no han permitido la reactivación del crédito. En segundo 5 lugar, el mercado de vivienda continúa rezagado y el déficit fiscal es elevado. Estos hechos pueden limitar el crecimiento del consumo y la inversión. En el caso de la zona euro, la situación es menos clara y muestra tendencias diferentes para sus estados miembros. Por una parte, Alemania ha mostrado una fuerte recuperación de la mano de las exportaciones y ha logrado reducir de manera importante el desempleo. Por otra, la periferia europea continua mostrando un crecimiento poco alentador y el desempleo sigue siendo una de las principales preocupaciones. Finalmente, para el Japón, antes del terremoto la actividad económica no evidenciaba un buen desempeño y ello probablemente se verá acentuado en los próximos meses. Sin embargo, en un plazo más largo se puede esperar un crecimiento más dinámico por los esfuerzos de reconstrucción. De otro lado, a pesar de las recientes caídas en los precios internacionales de las materias primas, sus niveles todavía son elevados y pueden trasmitirse a la inflación tanto en las economías desarrolladas como las emergentes. Adicionalmente, aún persisten varios de los factores que presionan de manera estructural dichos precios al alza y a ellos se les ha sumado la preocupación sobre la seguridad de la energía nuclear y las limitaciones a su uso decretadas en algunos países alrededor del mundo. En el contexto de buen crecimiento mundial (impulsado principalmente por las economías emergentes) y de elevados precios de bienes básicos, es de esperarse que los bancos centrales de las economías emergentes y algunas desarrolladas exportadoras de productos básicos continúe el ciclo de incremento de tasas. Para las principales desarrolladas, a pesar de que los excesos de capacidad instalada son amplios, ya se han comenzado a observar traspasos de los altos precios internacionales de los bienes básicos a la inflación. Por estas razones no se descarta que el Banco Central Europeo y el de Inglaterra incrementen sus tasas en el segundo trimestre de 2011. Para Estados Unidos, por el contrario, no se esperan cambios en la postura monetaria en el corto plazo. Por último, en cuanto a la percepción de riesgo, los CDS para las economías europeas de la periferia se han vuelto a incrementar en las últimas semanas y Moody’s redujo las calificaciones a la deuda de España y Portugal. Para América Latina las primas de riesgo continúan en niveles bajos y en el caso particular de Colombia Standard and Poor’s le otorgó el grado de inversión a la deuda pública en moneda extranjera. 6 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA Los miembros de la Junta evaluaron la oportunidad de incrementar en esta reunión las tasas de interés de intervención, en línea con lo anunciado en la reunión anterior sobre la conveniencia de retirar gradualmente el estímulo monetario de los meses anteriores, con el objeto de hacer sostenible en el tiempo la mayor dinámica que ha adquirido la economía colombiana y mantener la inflación dentro de su rango meta de largo plazo. Destacaron en particular, los siguientes puntos: (i) Las tasas de interés se encuentran en niveles históricamente bajos en términos nominales y reales y han mostrado estabilidad en el último mes; (ii) Los riesgos que unas tasas de interés muy bajas por un periodo excesivamente prolongado de tiempo pueden terminar generando sobre la estabilidad financiera, la sostenibilidad del crecimiento y la inflación futura; (iii) El fortalecimiento de las razones para esperar que la economía alcance niveles cercanos a su potencial en el segundo semestre del año basado en: el crédito de consumo que continuó expandiéndose a tasas altas; la mejora en el mercado laboral; el fuerte crecimiento de las licencias de construcción y un mejor dinamismo en obras civiles. (iv) La incoherencia que puede llegar a tener una tasa de interés excepcionalmente baja con un crecimiento esperado en 2011 y 2012 cercano al de tendencia y una inflación proyectada cerca del punto medio del rango meta de largo plazo; (v) Que la política monetaria actúa con rezago; (vi) Las expectativas de inflación a más de un año por encima de la meta; y (vii) La estabilidad en la tasa de cambio de las últimas semanas y los resultados favorables del programa de compra de divisas. En materia de riesgos, aunque todavía es prematuro dimensionar el impacto pleno que tendrá el terremoto y posterior tsunami que afectaron al Japón, los primeros análisis señalan que la recuperación de la economía de los países desarrollados podría hacerse más lenta, pero esto no aliviaría la presión sobre los precios del petróleo y otros bienes básicos. Adicionalmente, continúa la incertidumbre por la situación fiscal en algunos países industrializados y sobre el precio internacional del petróleo como consecuencia de la inestabilidad política en el medio oriente y norte de África. Además, los precios internacionales del petróleo, de los alimentos y de otros productos básicos están en niveles históricamente altos y han llevado a aumentos en los precios al consumidor en muchos países. Los bancos centrales de algunos 7 países de América Latina y otras partes del mundo han subido sus tasas de interés. Teniendo en cuenta todos estos factores y los rezagos con los que las acciones de política monetaria afectan el gasto agregado y la inflación, la Junta consideró apropiado y prudente continuar reduciendo de manera gradual el estímulo monetario. El nivel de la tasa de interés de intervención del Banco de la República sigue apoyando el crecimiento de corto plazo del producto y el empleo. Los aumentos en la tasa de intervención en febrero y marzo servirán para afianzar la sostenibilidad del crecimiento del producto y el empleo, mantener la inflación dentro del rango meta este año y el siguiente, y preservar la estabilidad del sistema financiero. Así mismo, es de esperar que estas acciones anticipadas de política monetaria reduzcan el nivel al cual la tasa de interés de intervención deba subir en relación con niveles observados en ciclos económicos anteriores. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva acordó incrementar en 25 puntos básicos la tasa de interés de intervención del Banco de la República que será de 3,5%. Bogotá DC, abril 01 de 2011
2011-04-01
1 Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 29 de Abril de 2011 El 29 de Abril de 2011 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, César Vallejo y Juan Pablo Zárate, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. Antecedentes a. Desarrollos recientes de la inflación: La inflación anual al consumidor en marzo fue 3,19% (mensual de 0,27%), 2 puntos básicos (pb) más que en febrero. Al alza presionaron la variación anual de precios de los regulados con una inflación de 6,9% en marzo frente a 6,2% en febrero y los transables sin alimentos ni regulados con un registro en marzo de -0,2% frente a -0,3% de febrero. A la baja presionó la variación anual de precios de los alimentos que se ubicó en marzo en 3,9% frente a 4,4% en febrero. En este grupo la principal contribución a la desaceleración provino de los alimentos perecederos, devolviéndose en parte el choque al alza ocasionado por de la primera ola invernal. Finalmente, la variación anual de precios de los no transables sin alimentos ni regulados se mantuvo prácticamente estable en 3,4% (reducción de 2pb en marzo frente a febrero). El promedio de los indicadores anuales de inflación básica, aumentó de 2,59% en febrero a 2,65% en marzo. El registro más bajo se sigue presentando 2 en el IPC sin alimentos ni regulados con 1,8%. La variación de los precios al productor (IPP) fue de 4,9% en marzo, superior a la registrada en febrero (4,6%). En cuanto a su composición se registra un incremento tanto en la variación anual del componente importado como del componente de producidos y consumidos. La encuesta mensual de expectativas de inflación del Banco de la República con datos a marzo sugiere que para finales de 2011 la inflación se ubicaría en 3,3%, registro inferior al del mes anterior (3,5%). Para las expectativas de más largo plazo (5 y 10 años), basadas en los títulos de deuda pública, la reducción fue más clara pero aún se encuentran por encima del techo del rango meta (4%). b. Crecimiento En el cuarto trimestre de 2010 el PIB creció 4,6%. Con este dato, el PIB creció 4,3% en todo 2010. Por tipo de gasto, la mayor contribución al crecimiento provino del consumo de los hogares, especialmente de bienes durables y semi-durables. El consumo del Gobierno y la inversión también contribuyeron al crecimiento. En este último agregado, todos los componentes presentaron crecimientos anuales positivos, excepto la inversión destinada a edificaciones. Así, en 2010 la tasa de inversión sobre PIB se situó en 25,6% medida en términos reales. Por otra parte, las exportaciones netas contribuyeron negativamente a la expansión del PIB en 2010. La información disponible para el primer trimestre de 2011 sugiere que la actividad económica crece vigorosamente, impulsada por el dinamismo de la demanda interna. El consumo privado continúa favorecido por unas tasas de interés (de consumo y de tarjeta de crédito) que permanecen por debajo de sus promedios históricos, una fuerte expansión del crédito a los hogares y un empleo de mejor calidad. Esta mejor perspectiva sobre el consumo de los hogares está siendo refrendada por la información que se conoce sobre las ventas del comercio al por menor medidas por el DANE. Estas crecieron 13,2% en febrero impulsadas por la venta de vehículos (la expansión de las ventas fue 5,5% sin tener en cuenta este factor). Así las cosas, estas condiciones favorables parecen estarse reflejando en la confianza de los consumidores como se desprende del repunte registrado en la medición de la confianza de los consumidores de Fedesarrollo. 3 Por el lado de la inversión, el comportamiento de las importaciones de maquinaria y equipo a febrero sugieren que ésta mantiene un alto dinamismo. En la misma dirección apunta la información sobre licencias de construcción, las cuales mostraron crecimientos importantes a finales del año pasado, impulsadas principalmente por las de vivienda de interés social. Esta información es compatible con las altas tasas de crecimiento de la cartera hipotecaria real a marzo (15%). Por el lado de la oferta, el crecimiento anual de la industria de febrero de 2011 fue 2,4%. Esta tasa, baja frente a la observada en enero y a la esperada por el equipo técnico, se explica por la caída de la producción en la rama de hierro y acero, consecuencia de un cierre parcial en Cerro Matoso que se mantendría hasta agosto. En la mayoría de las otras ramas se observa un buen desempeño que coincide con la evolución favorable de otros indicadores asociados al sector (pedidos, existencias, demanda de energía no regulada, crédito y expectativas de producción). En cuanto al comercio exterior, a febrero las exportaciones totales en dólares mostraban una variación anual de 37,2% impulsadas principalmente por el sector minero energético y café, con una variación anual de 49,8%. Para el acumulado 12 meses el crecimiento de las exportaciones totales es de 23,6%. Las importaciones totales en dólares mostraron una variación anual en febrero de 35,1%. Para el acumulado 12 meses el crecimiento de las importaciones totales es de 29,2%. Para 2011, el equipo técnico elevó el rango de pronóstico de crecimiento para 2011 en 50pb, a un intervalo entre 4,0% y 6,0%. Esta estimación tiene en cuenta el efecto negativo que puede tener sobre la actividad económica el recrudecimiento del fenómeno invernal. Con estas proyecciones, se incrementó la probabilidad de que el nivel del producto se encuentre cercano a su potencial en el segundo semestre del año. c. Variables Financieras En marzo, el promedio de las tasas de interés nominales de los créditos de consumo y ordinario se situaron en 17,6% y 10 % respectivamente, con aumentos de 5pb para consumo y 25pb para ordinario respecto al mes anterior. La tasa para créditos hipotecarios se situó en 12,5%, mayor en 15pb al registro de febrero. 4 El crecimiento anual de la cartera bruta total en moneda legal en marzo fue de 16%, mientras que en el mes anterior fue de 15,5%. Las carteras más dinámicas continúan siendo la hipotecaria y de consumo, con una variación anual de 18,4% y de 19% respectivamente. En marzo el crecimiento anual de la cartera comercial fue de 13,8%. Durante abril, las tasas de los títulos de deuda pública aumentaron 5pb para los títulos a un año y disminuyeron para los títulos a cinco y diez años en 31pb y 15pb respectivamente. d. Contexto Externo Durante el primer trimestre de 2011 los indicadores del sector real para las economías desarrolladas mostraron un comportamiento mixto. Por un lado, el desempeño de EEUU ha sido relativamente bueno pese al crecimiento de 1,8% en el primer trimestre de 2011 (menor al esperado). Por otro, la recuperación en la Zona Euro continúa siendo modesta, liderada principalmente por Alemania, mientras que en Japón su recuperación se ve amenazada en el corto plazo por el desastre natural y la emergencia nuclear. Los resultados positivos de la economía estadounidense se apoyan en factores internos y externos, los cuales se resumen en una mejora del mercado laboral, un consumo de los hogares creciente y un comercio exterior dinámico, con unas exportaciones que se encuentran en niveles pre-crisis. Sin embargo, aún permanecen latentes algunos riesgos sobre la economía de EE.UU. los cuales pueden llevar a retardar su recuperación en el corto y mediano plazo. Como la misma FED advierte, la recuperación ocurre a "paso moderado” por las dificultades que se presentan. Dentro de ellas se destacan: i) un elevado déficit fiscal que limita el accionar del gobierno federal, ii) los mayores precios del petróleo y de los alimentos que podrían castigar su crecimiento y el del resto mundo; iii) la creación de empleo no es robusta y, iv) el mercado de la vivienda sigue rezagado, aunque los últimos datos han sido favorables. Por lo anterior, y teniendo en cuenta que las expectativas de inflación no se han incrementado, pese a aumentos en los precios internacionales, la FED en su reunión del miércoles 27 de abril decidió dejar inalterada la tasa de interés de referencia. De igual forma, mantuvo su política de compra de títulos del Tesoro (US$600 mm) hasta finalizar el segundo trimestre de 2011, como lo habían anunciado inicialmente. Por el contrario, y producto de los mayores precios internacionales y el buen crecimiento en las principales economías 5 europeas, la inflación anual de la Zona Euro se ha acelerado y continúa por encima de la meta. Ello, en parte, llevó al Banco Central Europeo, en su reunión de abril, a aumentar la tasa de interés de intervención en 25pb. El nerviosismo de los mercados en cuanto a la sostenibilidad de la deuda de los países de la periferia europea ha vuelto a aumentar en las últimas semanas, consecuencia de la inestabilidad política en Portugal, la falta de credibilidad de algunos programas de austeridad fiscal y la posible reestructuración de la deuda pública de Portugal y Grecia. A pesar de esto, los analistas han mejorado sus pronósticos sobre el crecimiento de la Zona Euro para el presente año; entre ellos el FMI, por ejemplo, incrementó su pronóstico de 1,5% a 1,6%. Los países emergentes mantienen una dinámica favorable y cerraron el 2010 con un crecimiento alto. Los datos disponibles al primer trimestre del 2011 sugieren que el crecimiento continuará durante el año pero a un ritmo más moderado. Los mayores precios internacionales han comenzado a afectar la inflación de algunos países, en especial de los asiáticos y de Brasil, lo cual ha llevado a la mayoría de las autoridades monetarias a subir sus tasas de intervención. Para lo que resta del año se espera que esta estrategia continúe, dadas las presiones inflacionarias y la disminución de las brechas del producto. Como consecuencia del buen desempeño de las economías de la región, de sus bajas primas de riesgo y las bajas tasas de interés en los países desarrollados, persiste el flujo de capitales hacia América Latina. A raíz de esto, sus monedas se han apreciado. Se espera que los precios internacionales de bienes básicos continúen en niveles elevados en 2011. El buen desempeño de las economías emergentes y los diferentes problemas de oferta han impulsado los términos de intercambio de Colombia a niveles históricamente altos lo que apoyaría las exportaciones y una mejora en el ingreso de los colombianos. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA Los miembros de la Junta evaluaron la oportunidad de incrementar en esta reunión las tasas de interés de intervención, continuando con el retiro gradual del estímulo monetario. 6 Destacaron los siguientes puntos: (i) Las tasas de interés se encuentran en niveles históricamente bajos en términos nominales y reales; (ii) todos los componentes del crédito siguen creciendo a ritmos importantes junto a unas tasas reales de interés de préstamos en niveles bajos y la deuda de los hogares también se ha acelerado; (iii) El crecimiento de 4,3% del PIB en 2010 fue mayor al esperado y a información del primer trimestre del año sugiere que el dinamismo de la economía continúa; (iv) Los términos de intercambio siguen mejorando y se encuentran en niveles históricamente altos y contribuye al crecimiento del ingreso nacional; (v) Las expectativas del consumidor han aumentado y la inversión en maquinaria y equipo continúa dinámica y se cree que lo mismo ocurre con las obras civiles; (vi) El equipo técnico elevó el rango de pronóstico de crecimiento para 2011 en 50 pb, a un intervalo entre 4% y 6%. La parte baja de este rango tiene en cuenta el efecto negativo que puede tener sobre la actividad económica el recrudecimiento del fenómeno invernal; (vii) Los mejores indicadores en el mercado laboral; (viii) La mayor probabilidad de que el nivel del producto se encuentre cercano a su potencial; (ix) Los diferentes indicadores de precios de la vivienda siguen aumentando y ya se encuentran en niveles cercanos a sus máximos registros históricos y; (x) La apreciación reciente del peso. En materia de riesgos se observó que: (i) Los precios internacionales de los bienes básicos, incluyendo los del petróleo y los alimentos, han subido en meses recientes como consecuencia del fuerte dinamismo de la demanda en las economías emergentes y choques negativos de oferta; (ii) El aumento de presiones inflacionarias en muchos países y el incremento de la tasa de interés de algunos bancos centrales de América Latina y Asia, así como el Banco Central Europeo; (iii) Unas tasas de interés muy bajas por un periodo excesivamente prolongado de tiempo pueden terminar generando riesgos sobre la estabilidad financiera, la sostenibilidad del crecimiento y la inflación futura; (iv) Una tasa de interés excepcionalmente baja puede ser inconsistente con un crecimiento esperado en 2011 y 2012 cercano al potencial y una inflación proyectada cercana al punto medio del rango meta de largo plazo; y (v) Las expectativas de inflación a más de un año se sitúan por encima de la meta. Teniendo en cuenta todos estos factores y los rezagos con los que las acciones de política monetaria afectan el gasto agregado y la inflación, la Junta consideró que el ajuste hacia una política monetaria menos expansiva debe continuar. El nuevo nivel de la tasa de interés de intervención del Banco 7 de la República sigue apoyando el crecimiento de corto plazo del producto y el empleo. Los aumentos en la tasa de intervención servirán para mantener la inflación dentro del rango meta de este año y el siguiente y contribuyen a evitar futuros desequilibrios financieros. Así mismo, las acciones anticipadas de política monetaria, junto con una posición fiscal austera, reducirían el nivel al cual la tasa de interés de intervención debe subir en relación con niveles observados en ciclos económicos anteriores. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva acordó incrementar en 25 puntos básicos la tasa de interés de intervención del Banco de la República que será de 3,75%. Bogotá DC, mayo 13 de 2011
2011-05-01
1 Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 30 de Mayo de 2011 El 30 de Mayo de 2011 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo y César Vallejo, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. Antecedentes a. Desarrollos recientes de la inflación: La inflación anual al consumidor en abril fue 2,84% (mensual de 0,12%), 35 puntos básicos (pb) menos que en marzo. A la baja presionaron la variación anual de precios de los regulados, con una inflación de 6,4% en abril frente a 6,9% en marzo, y los alimentos, con un registro en abril de 2,8% frente a 3,9% de marzo. Para el primer caso, la menor inflación se debió principalmente al comportamiento de combustibles y servicios públicos, mientras que para los alimentos las menores presiones provinieron principalmente de perecederos y, en menor medida, de procesados. Al alza, por el contrario, presionaron la variación anual de los precios de los no transables y de transables sin alimentos ni regulados, que se ubicaron en 3,45% y -0,06% en abril frente a 3,4% y -0,17% en marzo, respectivamente. El promedio de los indicadores anuales de inflación básica permaneció estable en abril frente al registro de marzo. El más bajo sigue siendo el IPC sin alimentos ni regulados con 1,9%. La variación de los precios al productor 2 (IPP) fue de 4,7% en abril, menor a la registrada en marzo (4,9%). En cuanto a su composición, la menor inflación se debe principalmente al componente importado. La encuesta mensual de expectativas de inflación del Banco de la República con datos a abril sugiere que para finales de 2011 la inflación se ubicaría en 3,1%, registro inferior al del mes anterior (3,3%). Para las expectativas de más largo plazo (5 años) basadas en los títulos de deuda pública, la reducción fue más clara y se encuentran dentro del rango meta. b. Crecimiento Los diferentes indicadores reales disponibles para el primer trimestre del año apuntan a que la actividad económica se mantuvo dinámica. Este buen desempeño estaría apoyado por una expansión importante de la demanda interna, pero también por un buen comportamiento de las ventas al exterior. El consumo de los hogares mantiene un dinamismo importante a juzgar por el buen desempeño de las ventas al por menor, que a marzo crecieron a una tasa anual de 14,6%. Esta demanda ha continuado impulsada principalmente por el gasto en bienes durables, como se desprende del fuerte crecimiento de las ventas de vehículos y de las importaciones de bienes de consumo durable. Ello ha sido posible gracias a que las condiciones en el mercado laboral están mejorando, en particular la calidad del empleo, a que las tasas de interés que enfrentan los consumidores siguen siendo históricamente bajas, y a que el crédito de consumo crece a tasas altas (20,5% nominal promedio mes de abril) y con tendencia a acelerarse. En el primer trimestre, el componente de los registros de importaciones de bienes de capital destinada a maquinaria y equipo de transporte sugieren un buen desempeño. Por su parte, para la inversión en construcción, tanto en edificaciones como en obras civiles, también se espera un alto crecimiento según lo indican las ventas de cemento y las licencias de construcción para marzo. A estos indicadores también se suman unas tasas de interés comerciales bajas que estarían apoyando la expansión de la inversión en lo que resta del año. Para la demanda externa, los resultados disponibles en dólares para marzo apuntan a un buen desempeño en exportaciones, aún mayores a las esperadas. Esto es válido no sólo para las ventas de productos básicos sino también para 3 las de productos manufacturados. Por destinos, en marzo las ventas industriales dirigidas a los países de la región mostraron un incremento importante y las que se dirigieron a Estados Unidos, aunque aún exhiben crecimientos anuales negativos, tuvieron una recuperación en niveles. Simultáneamente, las importaciones continúan exhibiendo una tasa de expansión elevada a marzo, por lo que aún no se espera una contribución positiva al crecimiento por parte de la demanda externa neta. Por el lado de la oferta, la producción industrial creció en marzo a una tasa de 5,2% anual. Los sectores más dinámicos fueron vehículos, minerales no metálicos y refinación de petróleo, mientras que la producción de hierro y acero volvió a caer por cuenta del cierre temporal de las operaciones de Cerro Matoso por reparación. Con el registro de marzo, el crecimiento de la industria se aceleró en el primer trimestre respecto al de finales del año pasado. Su evolución coincide con la de otros indicadores asociados al sector: pedidos y existencias (de Fedesarrollo), crédito comercial y demanda de energía no regulada. Para el segundo trimestre la información disponible es escasa. La más relevante corresponde al indicador de confianza de los consumidores de Fedesarrollo, que a abril registró una caída importante y se ubicó por debajo de su promedio histórico. Sin embargo, estos resultados pueden estar afectados, entre otros, por fenómenos como el invierno. c. Variables Financieras En abril, el promedio de las tasas de interés nominales de los créditos de consumo y ordinario se situaron en 17,5% y 10,1% respectivamente, con una caída de 10pb para consumo y un aumento de 7pb para ordinario respecto al mes anterior. La tasa para créditos hipotecarios se situó en 12,5%, menor en 7pb al registro de marzo. El crecimiento anual de la cartera bruta total en moneda legal en abril fue de 17,7% nominal promedio, mientras que en el mes anterior fue de 16%. Las carteras más dinámicas continúan siendo de consumo y la hipotecaria y, con una variación anual nominal promedio de 20,5% y de 18,8% respectivamente. En abril el crecimiento anual de la cartera comercial fue de 15,6% nominal promedio. 4 Durante mayo, las tasas de los títulos de deuda pública aumentaron 9pb para los títulos a un año y disminuyeron para los títulos a cinco y diez años en 20pb y 31pb respectivamente. d. Contexto Externo Las novedades más importantes que se registran en el frente externo provienen del mundo desarrollado. La recuperación económica de los Estados Unidos es menos vigorosa que lo esperado, al tiempo que las dificultades financieras de la periferia europea continúan agravándose. A este complejo panorama de los países desarrollados se suma el aumento de las presiones inflacionarias, en especial en la zona Euro. De otro lado, en las economías emergentes se mantiene un elevado ritmo de crecimiento, junto con presiones inflacionarias que han llevado a cambios en la postura de la política monetaria de los bancos centrales. El crecimiento de la economía de Estados Unidos en el primer trimestre fue inferior al observado al final del año 2010. La desaceleración fue causada por la contracción en el gasto del Gobierno y las lluvias del inicio del año. El incremento de los precios de la energía afectó la dinámica de crecimiento del consumo de los hogares. Los indicadores coyunturales disponibles muestran que la actividad industrial y la inmobiliaria no repuntan en el segundo trimestre. En contraste, aunque la información del mercado laboral señala que éste continúa holgado, la reducción por segunda semana consecutiva de las solicitudes de subsidio de desempleo puede estar anticipando un mejoramiento de las condiciones laborales. Por otra parte, los datos sobre crecimiento durante el primer trimestre para la Zona Euro nuevamente reportaron un contraste entre el desempeño de dos grupos de países: mientras que Alemania y Francia registran un buen crecimiento, los países de la periferia no muestran señales claras de recuperación. Portugal completó dos trimestres seguidos contrayéndose y España continuó creciendo a tasas apenas superiores a cero. La percepción de riesgo en los países de la periferia de la Zona Euro siguió aumentando. Las tasas de interés de los títulos de la deuda pública de Grecia permanecen en máximos históricos, y los temores sobre su sostenibilidad cada vez son mayores. Se esperan nuevas medidas de ajuste fiscal, especialmente en Grecia y Portugal. 5 Por su parte, la inflación en los países desarrollados muestra una tendencia ascendente, especialmente en la Zona Euro en donde las presiones inflacionarias han comenzado a trasladarse a la inflación básica. A pesar de esto en Estados Unidos aún no se esperan aumentos de la tasa de interés de intervención, mientras que para la Zona Euro la situación es menos clara. En abril el BCE subió la tasa para controlar las presiones inflacionarias, y en mayo decidió mantenerla inalterada para no perjudicar a las economías de la periferia. Las economías emergentes continúan creciendo a tasas elevadas, lo cual ha reforzado las presiones inflacionarias en estos países. Para el caso de América Latina, la inflación en Brasil y Perú sigue aumentando. En las últimas semanas los precios del petróleo y otras materias primas han presentado caídas asociadas con la incertidumbre sobre el comportamiento de los países desarrollados y con un aumento en los inventarios. Para los próximos meses no se esperan caídas adicionales, aunque sí aumentos en la volatilidad. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA Los miembros de la Junta evaluaron la oportunidad de incrementar en esta reunión las tasas de interés de intervención, continuando con el retiro gradual del estímulo monetario. Destacaron los siguientes puntos: (i) Las tasas de interés se encuentran en niveles históricamente bajos en términos nominales y reales; (ii) todos los componentes del crédito siguen creciendo a ritmos importantes y la deuda de los hogares también se ha acelerado; (iii) La nueva información sugiere que entre enero y marzo la tasa de expansión de la actividad económica podría situarse en la parte superior del rango proyectado (3.9% a 5.5%); (iv) Los términos de intercambio siguen mejorando y se encuentran en niveles históricamente altos, contribuyendo al crecimiento del ingreso nacional; (v) El desempeño del consumo sigue siendo positivo y la inversión en maquinaria y equipo continúa dinámica y se espera que lo mismo ocurra con las obras civiles; (vi) Los mejores indicadores de calidad del empleo en el mercado laboral; (vii) La mayor probabilidad de que el nivel del producto se encuentre cercano a su potencial; (viii) Las expectativas de inflación de corto y mediano 6 plazo han corregido a la baja y se ubican dentro del rango meta y; (ix) La apreciación reciente del peso. En materia de riesgos se observó: (i) Si bien el precio internacional de del petróleo ha presentado reducciones se estima que su precio se mantendrá alto; (ii) Los altos precios internacionales de los alimentos siguen representando un riesgo de inflación internacional. (iii) Continúan las presiones inflacionarias en muchos países y los incrementos de la tasa de interés de algunos bancos centrales de América Latina y Asia y; (iv) Tasas de interés reales muy bajas por un periodo excesivamente prolongado de tiempo pueden terminar generando riesgos sobre la estabilidad financiera. Además, la tasa puede ser inconsistente con un crecimiento esperado en 2011 y 2012 cercano al potencial y una inflación proyectada cercana al punto medio del rango meta de largo plazo. Teniendo en cuenta todos estos factores y los rezagos con los que las acciones de política monetaria afectan el gasto agregado y la inflación, la Junta consideró que el ajuste hacia una política monetaria menos expansiva debe continuar. El nuevo nivel de la tasa de interés de intervención del Banco de la República sigue apoyando el crecimiento de corto plazo del producto y el empleo. Los aumentos en la tasa de intervención servirán para mantener la inflación dentro del rango meta de este año y el siguiente y contribuyen a evitar futuros desequilibrios financieros. Así mismo, las acciones anticipadas de política monetaria, junto con una posición fiscal austera, reducirían el nivel al cual la tasa de interés de intervención debe subir en relación con niveles observados en ciclos económicos anteriores. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva acordó incrementar en 25 puntos básicos la tasa de interés de intervención del Banco de la República que será de 4.0%. Bogotá DC, junio 10 de 2011
2011-06-01
Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 17 de Junio de 2011 El 17 de junio de 2011 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry Garzón, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano Sanz, Juan José Echavarría Soto, Fernando Tenjo Galarza, César Vallejo Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación: La inflación anual al consumidor en mayo fue 3,02% (mensual de 0,28%), 18 puntos básicos (pb) más que en abril. Esta cifra estuvo en línea con la proyección del equipo técnico del Banco, pero fue menor a lo esperado por el mercado. Las principales presiones alcistas se dieron en los precios de los alimentos, tanto de los perecederos como de los procesados. A mayo la variación anual de los alimentos fue 3,6%, registro que corrige una desaceleración no esperada de este grupo en el mes de abril. La inflación sin alimentos (2,81%), al igual que el promedio de todos los indicadores de inflación básica, permaneció relativamente estable. La variación anual de los precios de los no transables sin alimentos ni regulados se incrementó en 5 pb y se situó en mayo en 3,5%. Por el contrario, la de los precios de los regulados y la de los transables sin alimentos ni regulados descendieron en su orden en 26 pb y 4 pb, al ubicarse en 6,15% y -0,10% en mayo. Las expectativas de inflación a dos y tres años volvieron a desacelerarse y se encuentran dentro del rango meta. Para fin de año, la encuesta mensual de expectativas aplicada a analistas sugiere que la inflación se ubicaría en 3,2%, cifra levemente mayor a la que se obtuvo en abril (3,1%). La variación anual de los precios al productor (IPP) fue de 4,8% en mayo frente a 4,7% en abril. Las alzas se han concentrado en los bienes de origen agropecuario. b. Crecimiento Para el primer trimestre, los últimos indicadores de actividad sugieren que el ritmo de crecimiento anual de la economía puede estar levemente por debajo del observado al finalizar el 2010. Esta desaceleración se explica principalmente por una caída no prevista en la construcción, especialmente de obras civiles. El aporte de la demanda externa neta sería negativo, ya que las importaciones reales aumentaron más rápido que las exportaciones. Por el lado del gasto, en el primer trimestre de este año el PIB habría sido impulsado por la demanda interna, tanto por la inversión diferente a la construcción como por el consumo de los hogares. Al igual que en el 2010, en el pasado trimestre la mayor dinámica dentro del consumo privado se habría dado en el de bienes semi-durables y durables (v.g. automóviles), favorecida por las bajas tasas de interés y la amplia disponibilidad de crédito. Respecto a la inversión, el pobre resultado de las obras civiles implicará una desaceleración importante de la inversión en capital fijo. Sin embargo, los demás componentes de este rubro, como la inversión en maquinaria y en equipo de transporte, habrían mostrado crecimientos importantes tal como lo reflejan las importaciones de bienes de capital. Para el segundo trimestre de 2011, los escasos indicadores disponibles no permiten considerar una desaceleración importante en el crecimiento. Las ventas de vehículos siguieron creciendo a buen ritmo, sugiriendo que el consumo durable se mantiene alto. Esto estaría siendo confirmado por la dinámica de las importaciones de consumo (crecimiento anual a abril 30,5%) el crecimiento del crédito de consumo (22,4% a mayo), y la percepción de los comerciantes sobre sus ventas actuales. En abril los indicadores del mercado laboral reflejaron una mejora en la cantidad y calidad del empleo. La generación de empleo se concentró en el trabajo asalariado y la tasa de desempleo ajustada por estacionalidad descendió frente a la observada en marzo y en febrero. Estos hechos pueden continuar impulsando la dinámica del consumo de los hogares. La tendencia favorable en los indicadores de gasto de los hogares descritos anteriormente no ha estado en línea con el comportamiento del índice de confianza del consumidor calculado por Fedesarrollo. En abril y mayo este índice se deterioró, especialmente por las caídas en la disposición a comprar vivienda o bienes durables. En abril las ventas externas en dólares de productos colombianos continuaron creciendo a un ritmo elevado (34,6% anual en valor y 2,5% en volumen), aunque por debajo de lo observado en el mes anterior (46,4% y 7,4% respectivamente). Las exportaciones fueron nuevamente impulsadas por el buen desempeño en los mercados internacionales de productos como café, carbón, ferroníquel, oro, petróleo y derivados. El resto de las ventas externas en dólares crecen 9,1% y con destinos distintos a Venezuela crecen 12,8%. En lo referente a las importaciones, su crecimiento continúa dinámico (32,2%). Se estima que en lo corrido del año el crecimiento real de las importaciones supere el de las exportaciones por lo que el aporte de la demanda externa neta al producto continuaría en terreno negativo. Los indicadores asociados con la oferta continuaron mostrando un buen desempeño. Por ejemplo, la demanda de energía total a mayo volvió a crecer en términos anuales; en particular la demanda de energía no regulada de la industria mostró un importante dinamismo. En la industria, los indicadores de pedidos y de existencias siguieron mostrando un buen comportamiento. Sin embargo, el balance sobre las expectativas de producción a tres meses cayó, aunque dicho retroceso no implicó un quiebre en el componente tendencial del indicador. El posible carácter transitorio del comportamiento de las obras civiles, así como la poca información disponible del segundo trimestre no permite considerar un cambio importante en el pronóstico de crecimiento de 2011. Por tal razón se mantiene el rango de crecimiento para 2011 entre 4% y 6%. c. Variables Financieras. El crédito total en moneda nacional (MN) y extranjera (ME) continuó acelerándose. A mayo todas las modalidades de crédito, tanto a los hogares como a las empresas, registran crecimientos muy superiores al estimado del PIB de 2011. Esto se ha dado en un contexto de tasas reales de interés históricamente bajas. A mayo, el crédito total (MN y ME) se incrementó en 22,4% anual, cifra superior en 93 pb al registro de abril. La cartera de consumo y la comercial (MN y ME) registraron aumentos en mayo de 22,4% y 22,8%, datos superiores en 122 pb y 81 pb respectivamente a lo observado un mes atrás. La hipotecaria se desaceleró en 91 pb y se ubicó en el mes en 17,6%. En mayo las tasas de interés reales (descontando el IPC sin alimentos) para créditos de consumo, hipotecario y comercial se situaron en 14,6%, 9,7% y 7,1%, cifras inferiores a sus promedios históricos desde 1998. d. Contexto Externo. En el segundo trimestre de 2011, la economía mundial ha confirmado la recuperación iniciada en 2009. Sin embargo, esta recuperación podría ser más lenta, ya que la última información disponible muestra que los países desarrollados todavía no han superado totalmente las consecuencias de la pasada recesión. También podrían estar enfrentando una desaceleración temporal asociada a las dificultades que enfrenta Japón. En esas condiciones, el impulso actual de la economía mundial se explica en buena medida por el desempeño de los países emergentes. En Estados Unidos, en particular, la recuperación continúa a un ritmo moderado y la nueva información sobre los indicadores de actividad económica sugiere que el crecimiento del segundo trimestre podría estar desacelerándose. Esta evolución se explica principalmente por un menor dinamismo de la demanda interna, afectada por los recortes en el gasto público y por los altos precios de los combustibles. Adicionalmente, en mayo la tasa de desempleo volvió a aumentar y el número de puestos de trabajo que se crearon fue menor que el de meses anteriores. En contraste, las exportaciones continuaron creciendo en términos nominales y reales, y su tasa de expansión durante los primeros cuatro meses del año ha sido superior a la de las importaciones, lo cual ha permitido reducir el déficit comercial. Por otra parte, la crisis de la deuda en los países más frágiles de la Zona Euro (Grecia, Irlanda, Portugal y España), ha aumentado el nivel de alerta sobre la sostenibilidad fiscal de esas economías. La ausencia de una solución definitiva de la situación en Grecia está impactando las bolsas de valores en todo el mundo, ante el temor que se puedan ver afectados bancos estadounidenses y europeos. Para el caso del Japón, el índice de producción industrial evidenció cierto repunte en abril después de la fuerte caída por el desastre natural. Se espera que en el segundo semestre la actividad comience a recuperarse de manera más clara. Los precios internacionales de los alimentos y del petróleo siguen siendo históricamente altos, pese a algunas reducciones en los últimos meses. Estas caídas obedecen al aumento en la incertidumbre acerca del comportamiento de los países desarrollados y a que la oferta parece estar cubriendo las necesidades actuales. En cuanto a las economías emergentes los índices de producción industrial continúan mostrando un comportamiento favorable, salvo en el caso de Brasil, en donde se presentó una ligera caída. De otro lado, en China e India la inflación se aceleró en mayo evidenciando que las presiones sobre los precios siguen presentes. Esta situación continuará afectando las decisiones de política monetaria y debe llevar a una moderación del ritmo de crecimiento de esas economías. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA Los miembros de la Junta destacaron los siguientes puntos: (i) La fuerte caída en el primer trimestre de la inversión en obras civiles. Este descenso no fue esperado y probablemente es de carácter transitorio; (ii) La incertidumbre internacional debido al descenso de los indicadores de actividad de los Estados Unidos y a la crisis de deuda de la Zona Euro; (iii) El nivel históricamente bajo de la tasa de interés de intervención del Banco y de buena parte de las tasas de interés real, y su posible efecto futuro sobre la solidez del sistema financiero, si se mantienen por un período excesivamente prolongado; (iv) El crecimiento, cada vez mayor, de todos los componentes del crédito y de la deuda de los hogares; (v) El nivel históricamente alto de los términos de intercambio y su contribución al crecimiento del ingreso nacional; (vi) El dinámico desempeño de la demanda privada, tanto en el consumo como en la inversión en maquinaria y equipo; (vii) Los mejores indicadores de calidad del empleo en el mercado laboral; (viii) La alta probabilidad de que el nivel del producto se encuentre cercano a su potencial en el segundo semestre del año; (ix) Las expectativas de inflación de corto y mediano plazo que han corregido a la baja y se ubican dentro del rango meta; (x) La apreciación reciente del peso; (xi) La presión de los precios de los alimentos y del petróleo sobre la inflación internacional; (xii) Las presiones inflacionarias en muchos países, acompañadas por incrementos de la tasa de interés de algunos bancos centrales de América Latina y Asia. Algunos miembros de la Junta manifestaron que la tasa de intervención del Banco debía ser incrementada en 25 pb, por las siguientes razones: (i) si bien se ha introducido cierta incertidumbre al crecimiento del PIB, en especial por los riesgos externos y la ejecución de las obras civiles, la información disponible muestra un fuerte dinamismo de la demanda interna, tanto de la inversión diferente a la construcción como del consumo de los hogares. Esto último parece estar confirmado por el crecimiento anual de 22,4% en el crédito de consumo y por el dinamismo mostrado por las ventas al por menor en lo corrido del año. (ii) La tasa real vigente está por debajo de su probable equilibrio de largo plazo, y es inconsistente con un crecimiento esperado en 2011 y 2012 cercano al potencial y una inflación proyectada cercana al punto medio del rango meta de largo plazo. (iii) El incremento consecutivo y temprano de la tasas de interés del Banco contribuye a preservar la inflación dentro del rango meta y reduce riesgos de desequilibrios financieros que lleven luego a una volatilidad innecesaria de las tasas de interés, del producto y el empleo. En opinión de este grupo de miembros de la Junta, la postura monetaria correspondiente a una tasa de interés de intervención de 4,25% nominal continúa siendo expansiva. Otro miembro de la Junta también estimó apropiado elevar la tasa de intervención del Banco en 25 puntos básicos con el fin de asegurarle un nivel positivo en términos reales. Sin embargo, advirtió que en la fase actual del ciclo económico, este debería ser el último movimiento como quiera que los indicadores demuestran que tanto la inflación total como la básica y las expectativas están controladas y ancladas a la meta. Consideró además que no se debe ampliar aún más la diferencia con relación a las tasas de nuestro principal socio, Estados Unidos, cuya autoridad monetaria, debido al estancamiento de su economía y a los temores sobre una recaída, probablemente no las elevará antes del fin del próximo año. La evolución de la cartera en moneda extranjera, resultante de ese diferencial, es alarmante al haber pasado su crecimiento anual del 134% en marzo al 170% en mayo. Ante lo cual, en adelante, en vez de sobre-utilizar la tasa de interés, se deben contemplar medidas complementarias de regulación macro-prudencial. Finalmente observó que el auge exportador y de inversión extranjera está concentrado en el sector minero-energético, el cual explica el 80% de la dinámica de las primeras y el 85% del tamaño de la segunda. En tanto, que apenas genera 200.000 empleos. Inequívoco síntoma de enfermedad holandesa. Otro miembro de la Junta consideró que no es conveniente incrementar las tasas de interés del Banco en esta oportunidad. Los diferentes indicadores de inflación se encuentran en el rango meta de 3% +/- 1 punto porcentual, el crecimiento del PIB es cercano a su nivel histórico, y las encuestas de confianza al consumidor, a los industriales y a los comerciantes muestran caídas preocupantes. Además, la economía internacional ha mostrado síntomas de desaceleración en los meses recientes. Este escenario justifica esperar hasta la próxima reunión de la Junta Directiva para contar con una información más sólida sobre tasas de interés. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva acordó, por mayoría, incrementar en 25 puntos básicos la tasa de interés de intervención del Banco de la República que será de 4,25%. La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo de la situación internacional, del comportamiento y proyecciones de la inflación, el crecimiento, el comportamiento de los mercados de activos y reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible. Bogotá DC, 1 de julio de 2011
2011-07-01
1 Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 29 de Julio de 2011 El 29 de Julio de 2011 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry, el Gerente General, José Darío Uribe, y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, Juan Pablo Zárate y César Vallejo, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación: La inflación anual al consumidor en junio fue 3,23% (mensual 0,32%), 21 puntos básicos (pb) más que en mayo. Esta cifra superó la proyección del equipo técnico del Banco y fue mayor a lo esperado por el promedio del mercado. Las principales presiones alcistas se dieron en los precios de los alimentos, en particular en los perecederos y más afectados por el clima y, en segundo lugar, los de origen importado. A junio la variación anual de alimentos fue 4,1%. En el caso de los importados, las alzas de los precios internacionales de finales de 2010 siguieron transfiriéndose de manera lenta y moderada a los precios internos. La apreciación acumulada del peso habría compensado parcialmente estas presiones externas. Respecto a los perecederos, los aumentos en precios se han concentrado en hortalizas y frutas y pueden ser el resultado de la intensa temporada de lluvias de marzo y abril, así como del ciclo normal de la oferta de estos productos. 2 La inflación sin alimentos (2,91%), al igual que el promedio de todos los indicadores de inflación básica, presentaron aumentos. La variación anual de los precios de los no transables sin alimentos ni regulados se incrementó en 33 pb y se situó en junio en 3,83%. La variación anual del IPC de no transables ni regulados viene acelerándose lentamente desde marzo, incluso después de descontar el efecto de diversión, cultura y esparcimiento de junio. Por el contrario, la variación de los precios de los regulados y del subgrupo de transables sin alimentos ni regulados descendió 19 pb y 5 pb respectivamente, al ubicarse en 5,96% y -0,13% en junio. La variación de los precios al productor (IPP) se redujo en junio y se ajustó a una tasa anual de 4,7% frente a 4,8% en mayo. Las reducciones se concentraron en el componente importado del indicador. Las diferentes medidas de expectativas de inflación (expectativas del mercado y expectativas calculadas con base en los papeles de deuda pública) se situaron dentro del rango meta de largo plazo (2% a 4%). b. Crecimiento El PIB en el primer trimestre de 2011 creció 5,1% en términos anuales y aumentó 1,9% respecto al trimestre inmediatamente anterior. El consumo de los hogares fue el agregado que más contribuyó a la expansión del PIB. Durante el primer trimestre creció a una tasa superior al promedio de la última década, impulsado sobre todo por las compras de bienes durables y semidurables. La contribución de la inversión total fue igualmente importante, pues registró una tasa de crecimiento mayor a la promedio del año pasado y completó un año y medio de expansiones continuas. Por otro lado, las exportaciones netas continúan aportando negativamente al PIB ya que si bien las exportaciones crecieron a buen ritmo, las importaciones lo hicieron a una tasa mayor. Por el lado de la oferta se destacaron las importantes expansiones que registraron los sectores de comercio, minería y agricultura, todos a tasas anuales superiores al 7%. Sin embargo, el sector de servicios financieros fue el que más contribuyó al crecimiento, por su mayor peso en el PIB. En el primer trimestre, el PIB de la industria creció 5,1%. Sólo los sectores de construcción (por obras civiles) y electricidad, gas y agua registraron contracciones anuales. 3 Para el segundo trimestre de 2011 los indicadores de actividad económica sugieren que el crecimiento sería similar al del primero. Por tipo de gasto, el consumo de los hogares habría mostrado un dinamismo incluso superior al que se observó en el primer trimestre según lo sugieren: el índice de confianza de los consumidores, que se recuperó después de las caídas de abril y mayo; las ventas del comercio al por menor, que mostraron un crecimiento promedio en los meses de abril y mayo de 17%, las importaciones de bienes de consumo que en dólares a mayo se expandieron en 35% anual; y el crecimiento del crédito de consumo que presenta una tasa real de crecimiento anual de 19%. Para la inversión también se espera un buen desempeño en el segundo trimestre como se infiere del comportamiento de las importaciones de bienes de capital, que crecieron 59% en el promedio de abril y mayo. La inversión habría seguido apoyada por el dinamismo del crédito comercial en un contexto de tasas de interés bajas. A junio las tasas de créditos ordinarios y preferenciales se ubicaron en 7,4% y 4,6% respectivamente, cifras inferiores a los promedios desde 1998 (11,8% y 7,5% respectivamente). Asimismo, en junio la cartera comercial a precios constantes mantuvo un crecimiento anual de alrededor de 19%, igual al de los dos meses anteriores. Este comportamiento resulta similar al de la cartera total. Por el lado de la oferta igualmente se destaca que si bien el crecimiento de la producción industrial en mayo (4,3%) resultó menor al esperado, su tendencia sigue positiva. En la construcción, las licencias mostraron un fuerte aumento en los meses de abril y mayo con una tasa de crecimiento promedio anual de 86%. En cuanto al comercio exterior, las exportaciones colombianas en dólares crecieron en lo corrido del año a mayo a una tasa anual de 36%. El aumento de las exportaciones se explica fundamentalmente por un crecimiento de 48% de los productos básicos (petróleo y sus derivados, ferroníquel, carbón, café, oro, banano y flores). Para este mismo periodo las demás exportaciones aumentaron 6%. Las importaciones totales en dólares mostraron una variación anual en mayo de 55%. Para el acumulado de 12 meses el crecimiento de las importaciones totales es de 33,9%. Se espera que el crecimiento del PIB en el segundo semestre de 2011 esté impulsado principalmente por la demanda interna y, en menor medida, por la demanda mundial. En el frente interno debe presentarse una mejoría en el desempeño del consumo público y de la inversión en obras civiles que se sumará a un buen comportamiento de la demanda privada. En el contexto 4 externo, de no profundizarse la crisis en los países desarrollados no se anticipan cambios en los factores que afectan el desempeño de la actividad económica: altos términos de intercambio, crecimiento de los socios comerciales relativamente bueno y flujos de capital abundantes, en particular de inversión extranjera directa. Así, se espera que el crecimiento del PIB para todo 2011 esté dentro de un rango entre 4,5% y 6,5%, siendo 50 pb mayor al rango presentado en el Informe sobre Inflación pasado. c. Variables Financieras El crédito total en moneda nacional (MN) y extranjera (ME) continuó acelerándose. A junio todas las modalidades de crédito, tanto a los hogares como a las empresas, registran crecimientos muy superiores al estimado para el PIB en 2011. Esto se ha dado en un contexto de tasas reales de interés históricamente bajas. A junio, el crédito total (MN y ME) se incrementó en 22,5% anual, cifra superior en 20 pb al registro de mayo. La cartera de consumo (MN y ME) mostró un aumento de 164 pb con respecto al mes anterior, ubicándose para el mes de junio en 24,0%. La hipotecaria y la comercial presentaron una variación anual de 16,7% y 22,4% moderándose en 24 y 42 pb, respectivamente, con relación a los datos del mes de mayo. En junio las tasas reales de interés (descontando el IPC sin alimentos) para créditos de consumo, hipotecario y comercial ordinario se situaron en 14,9%, 9,7% y 7,4%, cifras inferiores a los promedios observados desde 1998. d. Contexto Externo Desde el pasado informe trimestral la actividad de la economía mundial se ha deteriorado como consecuencia de diferentes choques que la impactaron como el alza en el precio del petróleo, el desastre natural del Japón y el deterioro de la confianza asociado con los problemas de deuda en Estados Unidos y Europa. Para lo que resta del año y para 2012, las economías desarrolladas enfrentan perspectivas de crecimiento limitadas. El ritmo de expansión probablemente se mantendrá por debajo de su promedio histórico afectado por los altos niveles de endeudamiento y por costos financieros crecientes. Las necesidades de ajuste fiscal en Europa y en Estados Unidos afectarán el desempeño de la demanda en esos países y pueden complicar aún más el panorama laboral. En contraste, los países emergentes continúan creciendo a buen ritmo. 5 En Estados Unidos los indicadores de actividad económica están mostrando un desempeño mediocre y menor que el esperado hace tres meses. Los mercados de trabajo y de vivienda permanecen estancados. En la Zona Euro, por su parte, se profundizan las diferencias entre los países con bajo nivel de endeudamiento que crecen bien, liderados por Alemania, y los países con alto nivel de endeudamiento, que están virtualmente estancados. En los últimos meses se recrudecieron los problemas de sostenibilidad en la periferia europea. En Japón comienza a observarse una recuperación después del desastre natural de marzo. Dicho choque afectó a otras economías del Asia y probablemente a Estados Unidos. El restablecimiento de la cadena de suministros podría ayudar al crecimiento mundial. La moderación reciente de los precios del petróleo y de los bienes básicos es un efecto colateral de la reducción de la dinámica de la economía global. Este desempeño de los precios puede actuar positivamente sobre la capacidad de compra de los consumidores y reducir las presiones inflacionarias. En cuanto a las economías emergentes, China está creciendo más de lo previsto y el aterrizaje está siendo muy lento. Hasta el momento, el apretón de la política monetaria no ha tenido efectos importantes sobre la actividad económica. Para otras economías asiáticas (India, Corea del sur y Taiwán) hay indicios de desaceleración en el segundo trimestre, pero el ritmo de crecimiento sigue siendo alto. Por su parte, las economías de la región continúan expandiéndose a tasas elevadas. Es de esperar que con la reducción de las presiones inflacionarias las tasas de interés internacionales sigan siendo bajas. De esta forma, la elevada liquidez en los países desarrollados, junto con el diferencial de rentabilidad y la baja percepción de riesgo de América Latina, continuarán estimulando los flujos de capitales hacia la región. En cuanto al crecimiento de los socios comerciales de Colombia hay que destacar que el menor crecimiento en Estados Unidos ha sido compensado por un mejor desempeño en América Latina y en especial Ecuador, país que viene creciendo aceleradamente (8,6% anual a marzo 2011). Los pronósticos suponen un mayor ritmo de crecimiento de Estados Unidos en el segundo semestre del año, y una desaceleración moderada en China, como consecuencia de la postura restrictiva de la política monetaria. 6 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA Los miembros de la Junta destacaron los siguientes puntos: (i) el crecimiento del PIB en el primer trimestre; (ii) la incertidumbre internacional debida a los problemas de deuda pública y sistemas bancarios en algunos países industrializados; (iii) los malos indicadores de actividad económica de los Estados Unidos; (iv) el nivel históricamente bajo de la tasa de interés de intervención del Banco y de buena parte de las tasas de interés real, y su posible efecto futuro sobre la solidez del sistema financiero, si se mantienen por un período excesivamente prolongado; (v) el crecimiento, cada vez mayor, de todos los componentes del crédito y de la deuda de los hogares; (vi) el nivel históricamente alto de los términos de intercambio y su contribución al crecimiento del ingreso nacional; (vii) el dinámico desempeño de la demanda privada, tanto en el consumo como en la inversión en maquinaria y equipo; (viii) los mejores indicadores de calidad del empleo en el mercado laboral; (ix) la alta probabilidad de que el nivel del producto se encuentre cercano a su potencial en el segundo semestre del año; (x) las expectativas de inflación de corto y mediano plazo que han corregido a la baja y se ubican dentro del rango meta; (xi) La apreciación reciente del peso; (xii) los altos precios internacionales del petróleo y de los alimentos en muchos países y los incrementos de las tasas de interés de política en algunos de ellos y; (xiii) la importancia para la economía de medidas que contribuyan a consolidar la estabilidad financiera. Algunos miembros de la Junta manifestaron que, a pesar del comportamiento adecuado de la inflación y sus expectativas, la tasa de intervención del Banco debía ser incrementada en 25 pb, teniendo en cuenta las siguientes razones: (i) el dinamismo de la economía colombiana liderado en especial por el consumo de los hogares y de la inversión diferente a las obras civiles; (ii) la reciente información relacionada con la actividad económica, tanto del lado de la oferta como de la demanda, así como las expectativas del consumidor y de la industria, que indican que el crecimiento del PIB del segundo trimestre podría ser similar al registrado al inicio del año. Para el segundo semestre, el equipo técnico espera que la actividad económica se acelere y por ello elevó su rango de pronóstico de crecimiento para éste año y el siguiente a un intervalo entre 4,5% a 6,5%, en parte influido por los buenos términos de intercambio; (iii) la información disponible hasta el momento, incluyendo el dato de crecimiento del PIB (5,1%), sugiere el cierre 7 de la brecha del producto en el segundo semestre del año; (iv) el crecimiento del crédito continuó acelerándose. Todos sus componentes, tanto el dirigido a las empresas como a los hogares, presentan tasas reales de crecimiento significativamente superiores al aumento del PIB. Esta situación ocurre en un contexto en que buena parte de las tasas de interés reales se encuentran en niveles históricamente bajos; (v) el hecho que a marzo los precios de la vivienda usada continuaron ascendiendo y se acercaron a su nivel máximo observado en 1995. El indicador de precio de vivienda nueva también se incrementó en el primer trimestre; (vi) la tasa real vigente está por debajo de su probable equilibrio de largo plazo, y es inconsistente con un crecimiento esperado en 2011 y 2012 cercano al potencial y una inflación proyectada cercana al punto medio del rango meta de largo plazo; (vii) El incremento consecutivo y temprano de la tasas de interés del Banco que contribuye a preservar la inflación dentro del rango meta reduciendo los riesgos de desequilibrios financieros que lleven luego a una volatilidad innecesaria de las tasas de interés, del producto y el empleo. Otro miembro de la Junta consideró que no es conveniente incrementar las tasas de interés del Banco en esta oportunidad, como quiera que a junio los indicadores de inflación al consumidor, total y básica y las expectativas de inflación a uno, dos, tres y cinco años se hallan anclados a la meta. El aumento acumulado del IPC es muy similar al del mismo período de 2010. La inflación sin alimentos ni regulados se sitúa muy cerca del piso del rango meta. Y los salarios han tenido reajustes compatibles con el mismo. La concentración de las exportaciones y la IED en petróleo y minería continúa en ascenso. Ambos alcanzan el 80% de la dinámica de las primeras y el 85% de la última, aunque sólo generan 200.000 empleos. En contraste, las exportaciones industriales se hallan estancadas. La autoridad monetaria de nuestro principal socio, Estados Unidos, bajo el acoso del estancamiento, los temores sobre una recaída y el persistente y alto desempleo, seguramente no empezará a elevar sus tasas antes de 2013. Y finalmente agregó que la sensibilidad de la demanda interna ante las condiciones externas es hoy mucho más alta vía la cuenta de capital y sus efectos sobre la liquidez y el crédito. De suerte que la expansión de la demanda en buena parte es una contraparte de las entradas de capital, las cuales vienen obstaculizando la transmisión de los reajustes de las tasas del Banco a las tasas activas. Por tanto, alzas adicionales atraerían mayores flujos y oferta crediticia, lo cual entorpecería aún más la transmisión de la política monetaria. Así podríamos terminar alimentando lo que queremos controlar: la 8 inflación. En consecuencia, lo que ahora resulta apropiado es la adopción de medidas de regulación macro-prudencial concertadas con el Gobierno. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva acordó, por mayoría, incrementar en 25 puntos básicos la tasa de interés de intervención del Banco de la República que será de 4,5%. La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo de la situación internacional, en especial de los riesgos asociados al manejo de los problemas de deuda en un buen numero de economías avanzadas; del comportamiento y proyecciones de la inflación, el crecimiento, el comportamiento de los mercados de activos y reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible. Bogotá DC, agosto 12 de 2011
2011-08-01
1 Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 19 de Agosto de 2011 El 19 de Agosto de 2011 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, Juan Pablo Zárate y César Vallejo, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación: La inflación anual al consumidor en julio fue 3,42% (mensual 0,14%), 19 puntos básicos (pb) más que en junio. Esta cifra estuvo en línea con la proyección del equipo técnico del Banco y similar a lo esperado por el promedio del mercado. Las principales presiones alcistas se dieron en los precios de los alimentos perecederos. Se observaron mayores aumentos de precios en algunas hortalizas y frutas que se explican por el efecto rezagado del pasado evento de La Niña sobre este grupo de alimentos. A julio la variación anual del precio de los alimentos fue 4,8%. La inflación sin alimentos se mantuvo estable (2,9%). En esta canasta no se presentaron cambios inesperados y las variaciones en sus diferentes grupos se compensaron. Los transables (-0,02%) mostraron una variación menos negativa (frente a -0,13% en junio) y fue el componente que ejerció la mayor presión al alza en el IPC sin alimentos (por utensilios del hogar y 2 compra de celulares). La variación de los precios de no transables se mantuvo en el mismo nivel de junio (3,8%). A pesar de la estabilidad del último mes, este grupo viene mostrando una tendencia al alza desde marzo explicada principalmente por el comportamiento de los arriendos. En julio, el aumento de los precios de los arriendos (6 pb respecto al nivel de junio) fue compensado por la disminución de los precios de los otros ítems que componen esta canasta. Los regulados (5,7%), por su parte, registraron una caída en julio de 26 pb explicada principalmente por el descenso en la variación anual del IPC de combustibles que compensó el aumento en los precios de la energía. Las medidas de inflación básica (con excepción de la inflación sin alimentos) continuaron con su tendencia creciente. Este comportamiento, lento pero continuo, ha sido común a todas las medidas de inflación básica desde mediados de 2010. De esta forma, el promedio de las cuatro medidas que se publican ya supera el punto medio del rango meta. Las diferentes medidas de expectativas de inflación (expectativas del mercado y expectativas calculadas con base en los papeles de deuda pública) se situaron dentro del rango meta de largo plazo (de 2% a 4%). La variación de los precios al productor (IPP) presentó un leve repunte en julio y se ajustó a una tasa anual de 4,8% frente a 4,7% en junio. Los aumentos se concentraron en el componente importado del indicador. b. Crecimiento Los indicadores de actividad disponibles para el segundo trimestre confirman que la economía colombiana habría mantenido un buen ritmo de crecimiento en ese periodo. Al igual que en los primeros tres meses de 2011, el crecimiento del segundo trimestre habría estado impulsado por la demanda interna, en particular por el consumo de los hogares. En el segundo trimestre, el consumo privado habría continuado favorecido por las mejorías en el mercado laboral. Durante el periodo la tasa de desempleo siguió cayendo y para las 13 áreas se ubicó en 11,5%. Este descenso estuvo acompañado de un aumento por segundo mes consecutivo de la TGP. Lo anterior estuvo más que compensado por el incremento de la tasa de ocupación y por ello la tasa de desempleo descendió. 3 Las importaciones también confirmaron el dinamismo de la demanda interna en el segundo trimestre. Las compras externas en dólares crecieron en junio 46% anual, impulsadas por las de bienes de capital (58%) y de materias primas (45%). Por su parte, las importaciones de bienes de consumo crecieron 31% anual. En materia de exportaciones, los nuevos resultados mostraron una aceleración de las ventas externas en dólares. En junio, las exportaciones en dólares crecieron 54% anual, cifra superior al registro de mayo (34%). Este aumento se explicó por mayores ventas de productos básicos de origen minero (petróleo crudo y sus derivados, carbón, oro y ferroníquel) que aportaron el 82% del crecimiento total. En lo que respecta a los sectores productivos, los indicadores divulgados por la ANDI y Fedesarrollo sugieren que el sector industrial mantuvo el dinamismo observado en el primer trimestre. La producción medida por la ANDI registró una expansión de 6,4% anual para el año corrido a junio. Los indicadores de pedidos y existencias de Fedesarrollo mostraron algún retroceso en junio, pero continuaron en niveles favorables. El indicador de expectativas de producción a tres meses de Fedesarrollo se mantuvo en niveles altos. En cuanto a la construcción, durante el segundo trimestre la producción de cemento registró un crecimiento de 17% anual. Asimismo el comportamiento dinámico de las licencias de construcción en lo corrido del año a mayo indicaría un buen desempeño de la actividad edificadora en los meses posteriores. La nueva información disponible para el segundo trimestre es coherente con el pronóstico de crecimiento anual del PIB de dicho período entre 4,2% y 5,6%. La escasa información disponible sugiere que el crecimiento anual del tercer trimestre sería superior al estimado en la primera mitad del año. Así lo señalan los indicadores de confianza de los consumidores, de crédito destinado a las familias y a las empresas y de la demanda total de energía eléctrica. En conclusión, si la situación externa no se deteriora abruptamente, el crecimiento de todo 2011 se ubicará dentro del rango proyectado (entre 4,5% y 6,5%). c. Variables Financieras. 4 El crédito total continúa acelerándose. A julio todas las modalidades de crédito, tanto a los hogares como a las empresas, registran crecimientos muy superiores al crecimiento estimado del PIB de 2011. En particular, el crecimiento anual fue 24,8% para la cartera de consumo; 22,9%, para la comercial y 17,4%, para la hipotecaria, niveles superiores al mes anterior en 78 pb, 53 pb y 67 pb, respectivamente. Lo anterior se ha dado en un contexto de tasas reales de interés históricamente bajas. En julio las tasas reales de interés (descontando el IPC sin alimentos) se situaron en 15,1%para créditos de consumo; 9,9% para crédito hipotecario; y en 7,5%, para crédito comercial ordinario, cifras inferiores a los promedios observados desde 1998. A julio, el crédito bancario (MN y ME) se incrementó en 23,2% anual, cifra superior en 63 pb al registro de junio. d. Contexto Externo. Durante las últimas semanas la probabilidad de una recaída de la economía global ha aumentado significativamente como resultado de los problemas económicos que actualmente afectan a las economías desarrolladas. Estos problemas se han agudizado debido al lento crecimiento económico, el elevado endeudamiento público, la pérdida de confianza de los mercados y el menor margen de maniobra de la política macroeconómica en esas economías, que han colocado en entredicho la viabilidad de la recuperación en los países avanzados, complicando indirectamente el panorama económico para los países emergentes. Las cifras conocidas recientemente sobre el desempeño de los Estados Unidos durante el segundo trimestre del año fueron desalentadoras. El crecimiento trimestral anualizado entre marzo y junio de 2011 fue de 1,3%, por debajo de lo que esperaba el mercado (2,3%) e inferior tanto al crecimiento del mismo trimestre del año pasado (3,8%) como al de todo 2010 (3%). El débil crecimiento del segundo trimestre en parte se explica por una recaída del consumo personal, que después de alcanzar un crecimiento de 2,0% en 2010, ha venido decayendo en lo corrido del presente año, al punto que en el segundo trimestre presentó un crecimiento casi nulo. Del mismo modo, el gasto del gobierno se ha venido contrayendo durante los últimos tres trimestres, acentuando la contracción de la demanda interna. Los únicos componentes de demanda que han mostrado algún dinamismo son las exportaciones, estimuladas por la depreciación del dólar, y la inversión fija no residencial, en respuesta a las bajas tasas de interés. No obstante, el mejor 5 desempeño de estos renglones no es suficiente para compensar la caída en los demás componentes de demanda. El panorama económico en la Zona Euro es igualmente preocupante. Entre el primero y el segundo trimestres de 2011 su crecimiento económico se redujo de un nivel ya bajo de 0,8% a 0,2%, lo que en la práctica muestra una economía totalmente estancada. La desaceleración fue significativa en casi todos los países. Alemania, por ejemplo, que crecía al 1,3% en el primer trimestre, sólo creció 0,1% en el segundo. Algo similar ocurrió en Francia, cuyo crecimiento decayó de 0,9% a 0% en el mismo periodo. En el caso del Reino Unido las noticias no son mejores. De un pobre crecimiento de 0,5% en el primer trimestre se pasó a un crecimiento de apenas 0,2% entre marzo y junio pasados. Por su parte, los países de la periferia de la Zona Euro –Grecia, Portugal y España- permanecen estancados o contrayéndose. La combinación de lento crecimiento y elevada deuda pública en los países desarrollados plantea dudas sobre la sostenibilidad de esta última. Ello se explica por el círculo vicioso tan complejo en el que algunos de estos países han caído, en el cual el elevado endeudamiento no deja crecer a la economía, y el mismo hecho de no crecer no permite pagar la deuda. En tales condiciones aumenta el peligro de insostenibilidad de la deuda, lo que se refleja en un incremento de la volatilidad real, una mayor fragilidad financiera, y una pérdida de dinamismo económico. Los mercados financieros han percibido claramente este peligro, lo que explica la fuerte caída de las bolsas durante las últimas semanas y el fuerte incremento de las primas de riesgo, principalmente en los países de la periferia de la Zona Euro. En estas condiciones, las perspectivas de la economía mundial son cada vez más inciertas. Los mercados empiezan a temer una doble caída que haga perder los progresos que se venían obteniendo con la lenta recuperación iniciada en el segundo semestre de 2009. Este pesimismo no es infundado. La desaceleración de las economías avanzadas y el efecto negativo que esto representa para la expansión de las economías emergentes, han comenzado a minar la confianza de consumidores y empresarios, que reaccionan restringiendo sus planes de consumo e inversión, debilitando la demanda y con ello las posibilidades de recuperación. Esta situación es particularmente notoria en el caso de los Estados Unidos, donde el índice de sentimiento del consumidor que calcula la Universidad de Michigan ha caído durante los últimos meses al mismo nivel que se observó entre finales de 2008 y principios de 2009, lo que ha llevado a un estancamiento del consumo personal, según se anotó atrás. De otra parte, el elevado desempleo que se 6 registra en los Estados Unidos y en algunos países de Europa como España y Grecia, es otro factor que deprime la confianza, el consumo y la demanda, creando un círculo vicioso que acentúa la contracción de la actividad económica. La incertidumbre se acentúa ante las dudas sobre la capacidad de los gobiernos de las economías avanzadas de poder llevar a cabo políticas macroeconómicas contracíclicas suficientemente efectivas que logren revertir las tendencias negativas y retornar la confianza a los mercados. Se percibe que en varias de estas economías la capacidad de respuesta se ha reducido drásticamente, sino se ha agotado ya. En el caso de los Estados Unidos el elevado endeudamiento del Gobierno, que se aproxima a 100% del PIB, el tamaño del déficit fiscal que alcanza el 10% del PIB, y las restricciones que impone el techo de endeudamiento, no dejan espacio para un papel activo de la política fiscal similar al que tuvo durante la crisis de 2009. Por su parte, la política monetaria en ese país está restringida por el límite cero de tasa de interés, aunque aún podría llevarse a cabo un tercer relajamiento cuantitativo. No obstante, los riesgos de mayores presiones inflacionarias, que se han venido registrando en esa economía durante los últimos meses, podrían impedir expansiones cuantitativas tan fuertes como las que se produjeron para sortear la crisis anterior. En el caso de las economías europeas ocurre otro tanto, debido a la complicación que implica el manejo de una economía con diversidad de países, algunos de los cuales han alcanzado la insostenibilidad de la deuda pública y otros están expuestos a un contagio que los puede colocar en la misma situación. Entretanto, las economías emergentes continúan siendo el motor del crecimiento mundial, aunque sin estar exentas de riesgo. En una economía globalizada hay múltiples canales de contagio, como bien lo demostró la experiencia de la crisis de 2009. Uno de ellos es el precio de los "commodities". Hasta el momento se ha observado que el precio del petróleo ha empezado a descender, lo que sin duda afectará a los países exportadores del mismo, entre ellos Colombia. Los precios de otros "commodities", como cereales y aceites, aún no registran caídas, aunque sí interrumpieron la tendencia ascendente que mostraron durante 2010, lo que es un síntoma de debilitamiento de la demanda mundial. Otro canal de contagio es el de la confianza, que actúa mucho más rápidamente, como lo demuestra sin excepción la caída de las bolsas en los mercados emergentes, replicando lo que ocurre en las economías desarrolladas. En este ambiente de mayor incertidumbre las economías emergentes de Asia y América Latina han empezado a perder dinamismo, aunque la mayoría continúa creciendo a tasas 7 elevadas. La pregunta por responder es hasta cuándo podrán sostener ese crecimiento, si los mercados de las economías avanzadas -que absorben la mayor parte de las exportaciones de los países emergentes-, continúan debilitándose. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA Los miembros de la Junta destacaron los siguientes puntos: (i) El incremento de la incertidumbre en los mercados financieros internaciones; (ii) el crecimiento del PIB en el segundo trimestre; (iii) el dinámico desempeño de la demanda interna, reflejado tanto en el incremento del consumo como de la inversión privada; (iv) los mejores indicadores de calidad del empleo en el mercado laboral; (v) la aceleración del crédito a los hogares y a las empresas, en un contexto de tasas de interés reales que han aumentado pero que presentan niveles inferiores a sus promedios históricos; (vi) el nivel históricamente bajo de la tasa de interés de intervención del Banco y de buena parte de las tasas de interés real, y su posible efecto futuro sobre la toma de riesgos de la economía, si se mantienen por un período excesivamente prolongado; (vii) el alto nivel de los términos de intercambio y su contribución al crecimiento del ingreso nacional; viii) la inflación anual de julio, que aumentó por tercer mes consecutivo (3,42%), en especial por el comportamiento de los precios de los alimentos. Por su parte, el promedio de las medidas de inflación básica volvió a incrementarse y superó el punto medio del rango meta (3% +/- 1 punto porcentual); ix) las expectativas de inflación a distintos plazos y las proyecciones de inflación a finales de 2011 y 2012 se encuentran dentro del rango meta; (x) la alta probabilidad de que el nivel del producto se encuentre cercano a su potencial en el segundo semestre del año; xi) la política monetaria de otros países; (xii) la caída de los precios internacionales del petróleo; xiii) el comportamiento de la tasa de cambio. La Junta Directiva del Banco de la República decidió mantener inalterada la tasa de interés de intervención en 4,5%, teniendo en cuenta principalmente lo siguiente: i) Desde la pasada reunión, los eventos en el frente externo ha aumentado la incertidumbre acerca de la economía global. Al reciente desplome de las bolsas, originado en parte por la reducción de la calificación de la deuda de Estados Unidos y por las dificultades fiscales de algunos países de la zona euro, se sumó un menor crecimiento en el segundo trimestre para las principales economías desarrolladas (Estados Unidos, Alemania, Francia, 8 Japón). En Asia y América Latina, regiones fuertemente dinámicas, el crecimiento se ha desacelerado por factores de oferta o por acciones de política dirigidas a evitar el recalentamiento de sus economías. En consecuencia, los riesgos de un menor crecimiento de la economía mundial se han elevado. ii) Los problemas de deuda soberana en Europa y el debate sobre el techo de endeudamiento en los Estados Unidos incrementaron fuertemente la incertidumbre y la volatilidad en los mercados financieros internacionales. El cambio en el contexto internacional es aún muy reciente y sus consecuencias son todavía difíciles de precisar. Si bien es claro que la desaceleración mundial impactaría negativamente el ingreso y la demanda externa del país, hay gran incertidumbre sobre su tamaño y duración. En contraste, se resaltó que: i) los indicadores de actividad económica disponibles confirman que la economía colombiana mantiene un buen ritmo de crecimiento, impulsado principalmente por la fortaleza del consumo de los hogares; ii) los indicadores de confianza de los consumidores y de la industria continúan en niveles elevados; y iii) el crédito a las empresas y a las familias siguió acelerándose, con aumentos muy superiores al incremento del PIB nominal estimado para el presente año. Ello en un contexto de tasas reales de crédito inferiores a sus promedios históricos. Haciendo un balance, la Junta consideró prudente realizar una pausa en los incrementos de tasas de interés, en especial teniendo en cuenta la alta incertidumbre en los mercados financieros internacionales y su potencial efecto negativo sobre el crecimiento de la economía mundial en general, y de la colombiana en particular. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva acordó, por unanimidad, mantener inalterada la tasa de interés de intervención en 4,5%. La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo de la situación internacional, en especial de los riesgos asociados al manejo de los problemas de deuda en un buen número de economías avanzadas; del comportamiento y proyecciones de la inflación, el crecimiento, el comportamiento de los mercados de activos y reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible. Bogotá DC, septiembre 02 de 2011
2011-09-01
1 Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 30 de Septiembre de 2011 El 30 de Septiembre de 2011 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, Juan Pablo Zárate y César Vallejo, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación: La inflación anual al consumidor en agosto fue 3,27% (mensual de - 0,03%), 15 puntos básicos (pb) menos que en julio. Esta cifra fue inferior a la proyección del equipo técnico del Banco y a lo esperado por el promedio del mercado. Para el año corrido a agosto el IPC acumuló un aumento de 2,64% que es un poco mayor al registrado en igual período del año anterior. Los precios de los alimentos por su parte, registraron un comportamiento favorable en agosto que se tradujo en una disminución de la variación anual del IPC respectivo a 4,6% desde 4,8% un mes atrás. Respecto a la inflación sin alimentos, el resultado en agosto fue 2,76% frente a 2,90% de julio. El descenso se debió a la disminución en la variación anual de las canastas de regulados y de no transables sin alimentos ni 2 regulados. En el caso de los no transables sin alimentos ni regulados, se presentó una disminución significativa de 40 pb frente al registro de julio. Esta caída corresponde, en buena parte, a la reversión del alza que se presentó en junio. Sin embargo, aún descontado este fenómeno, se observó alguna disminución en el ritmo de ajustes de no transables. En el caso de la canasta de regulados, la variación de los precios fue 5,6% (7 pb menos que en julio). La variación anual del IPC de regulados ha disminuido gradualmente desde marzo de este año debido a los bajos ajustes o incluso reducciones que se presentan en las tarifas de energía eléctrica. A ello se suman ajustes en los precios de los combustibles, un poco menores que los observados el año pasado. Dentro del IPC sin alimentos, las presiones alcistas provinieron en esta oportunidad del IPC de transables sin alimentos ni regulados. La variación anual del indicador se situó en terreno positivo (0,12%) por primera vez desde principios del año pasado. Rubros como automóviles, electrodomésticos, aparatos electrónicos y de comunicación continuaron presentando bajas en sus precios, pero de menor magnitud que el año anterior. Así mismo, otros rubros relacionados con el aseo del hogar y el vestuario han comenzado a mostrar algunas alzas. Es posible que este comportamiento obedezca a que la apreciación acumulada del peso cedió en los meses anteriores. Todas las medidas de inflación básica presentaron reducciones en agosto, con lo cual se interrumpió la tendencia creciente que estos indicadores mostraban desde finales de 2010. Las expectativas de inflación medidas a través de las encuestas no presentaron cambios de relevancia y muestran un resultado cercano al 3,2% para finales de año y para los próximos doce meses. Por su parte, las derivadas de los TES a diferentes plazos continuaron disminuyendo, manteniéndose dentro del rango meta. La variación de los precios al productor (IPP) presentó un repunte en agosto y se ajustó a una tasa anual de 5,2% frente a 4,8% en julio. Los aumentos se concentraron en el componente importado del indicador. b. Crecimiento En el segundo trimestre de 2011, el PIB colombiano creció 5,2% anual. El consumo de los hogares fue el agregado que más contribuyó a la expansión del PIB en este período, impulsado principalmente por las compras de bienes durables y semidurables. 3 La inversión en capital fijo también se aceleró durante este periodo, presentando la mayor tasa de expansión en cuatro años y un promedio de crecimiento mayor al de la década pasada. Por componentes se destaca el fuerte dinamismo de la inversión en maquinaria y en equipo de transporte. La construcción contribuyó negativamente debido a la caída en la inversión en obras civiles que no fue compensada por la expansión en edificaciones. Simultáneamente, en el segundo trimestre se registró una fuerte acumulación de inventarios, con lo cual el crecimiento anual de la inversión total fue de 21,1%. La demanda interna en el segundo trimestre creció 9,1% anual y se mantiene como el principal soporte del crecimiento de la economía colombiana. El ritmo anual de crecimiento de la demanda privada fue 11,7%. Por otro lado, las exportaciones netas contribuyeron negativamente al crecimiento del PIB. Esto en razón de un crecimiento de las importaciones tres veces mayor que el de las exportaciones. Por el lado de la oferta se destacaron los crecimientos anuales superiores al 7% que registraron los sectores de minería, comercio y transporte. Sin embargo, por su mayor peso en el PIB, la rama de servicios financieros e inmobiliarios fue la que más contribuyó al crecimiento. El PIB de la industria creció 2,1% en términos anuales, y se contrajo frente al primer trimestre. El sector de la construcción, por la caída de las obras civiles, fue el único que registró un retroceso anual. Las exportaciones totales en dólares crecieron a una tasa anual de 55%. Este aumento fue impulsado tanto por los mayores precios como por las cantidades producidas de petróleo crudo y derivados y, en menor medida, por las exportaciones de carbón y de algunos productos industriales. Por su parte, las exportaciones de productos básicos agrícolas (café, banano y flores) registraron una caída de 6,6% anual. En el caso de las exportaciones industriales (Sin derivados del petróleo, ferroníquel, oro y café), durante el mes de julio, se observó una recuperación tanto en precios (20% anual) como en cantidades (20% anual). Las importaciones totales en dólares mostraron una variación anual de 33% en julio. Las mayores contribuciones al crecimiento anual de las compras externas durante el mes de julio se concentraron en bienes para la industria, equipo de transporte, combustibles y bienes de consumo no duradero. En particular, las importaciones de bienes de consumo crecieron 21% anual, las de bienes intermedios 29% anual y las de bienes de capital 46% anual. 4 Con respecto al tercer trimestre de 2011 la mayoría de indicadores de actividad disponibles sugieren que la economía habría mantenido un buen desempeño. Por tipo de gasto, el crecimiento del tercer trimestre habría seguido impulsado por el consumo de los hogares como se infiere del comportamiento de la confianza de los consumidores, del crédito de consumo a agosto, el buen dinamismo de las importaciones de bienes de consumo y del comportamiento de las ventas minoristas a julio que continúan mostrando una tendencia positiva. La evolución reciente del mercado laboral también apoyaría la dinámica favorable del consumo privado. En el trimestre móvil a julio, el mayor crecimiento de la tasa de ocupación con respecto a la tasa global de participación permitió que la tasa de desempleo continuara con su tendencia decreciente. A pesar de que en junio y julio la generación de empleo se concentró más en trabajadores no asalariados que en asalariados, el subempleo siguió disminuyendo por lo que la calidad del empleo no parece haberse deteriorado. Se espera que el mercado laboral siga comportándose favorablemente durante el resto del año. Por el lado de la oferta, algunas variables asociadas con la industria manufacturera, como el índice de producción industrial del DANE, el indicador de pedidos de Fedesarrollo (ambas a julio) y la demanda de energía del sector (a agosto), sugieren un relativo estancamiento de la actividad productiva. Sin embargo, aún es prematuro predecir un deterioro del sector, si se tiene en cuenta que el indicador de expectativas de los industriales sobre su producción en tres meses se mantiene en niveles bastante altos. Otros indicadores sectoriales sugieren que el comercio, la construcción, la minería y los servicios, serán las actividades de mayor contribución al crecimiento del PIB en el tercer trimestre. Así, es probable que el ritmo de expansión del tercer trimestre sea superior al del segundo. Dado todo lo anterior, es probable que la economía acelere su crecimiento. Adicionalmente, es factible que la coyuntura internacional menos favorable no golpee de manera relevante la economía colombiana en el tercer trimestre. Hacia el cuarto trimestre podría darse un efecto adverso sobre la economía interna si se confirma el deterioro de la situación externa. Bajo el supuesto de que el cuarto trimestre no crezca respecto al tercero, el PIB del año completo podría crecer cerca de 5,2%, cifra que se encuentra dentro del 5 rango de pronóstico establecido en el informe trimestral de junio (4,5% a 6,5%). c. Variables Financieras. El crédito total en moneda nacional (MN) y extranjera (ME) se estabilizó en altas tasas de crecimiento. A agosto todas las modalidades de crédito, tanto a los hogares como a las empresas, registran crecimientos muy superiores al crecimiento estimado del PIB de 2011. Esto se ha dado en un contexto de tasas reales de interés históricamente bajas. En julio y agosto, el crédito bancario (MN y ME) se estabilizó en una tasa de crecimiento promedio de 23,2% anual. Igualmente, por modalidad de cartera en estos dos meses el crecimiento anual promedio fue de: 25,0% para consumo, 23,1% para comercial y 17,3% para hipotecaria. En julio las tasas de interés reales (descontando el IPC sin alimentos) para créditos de consumo, hipotecario y comercial ordinario se situaron en 15,5%, 10,0% y 8,0%, cifras inferiores a los promedios observados desde 1998. En cuanto a cartera, las tasas de crecimiento anual están sostenidas por el endeudamiento en pesos, dado que el crecimiento anual en moneda extranjera viene disminuyendo por cuanto el saldo desde mayo se ha mantenido alrededor de US$ 6850 millones. d. Contexto Externo. En las últimas semanas el contexto internacional continuó deteriorándose. Los temores sobre los problemas de deuda soberana en Europa han crecido y los pronósticos de crecimiento de Estados Unidos y Europa en 2011 y 2012 han sido revisados a la baja. La alta volatilidad y las fuertes pérdidas en los mercados accionarios se han asociado, en gran parte, con la elevada incertidumbre sobre la situación fiscal de algunas economías desarrolladas. Los mercados cada vez son más escépticos sobre la capacidad que tienen los países con problemas fiscales en estabilizar su deuda pública. En el caso de la Zona del Euro, se incrementaron las dudas sobre la solvencia de algunos bancos comerciales de la región, que tienen altas inversiones en bonos soberanos de países con problemas fiscales. De hecho, 6 en los últimos dos meses surgieron señales que indican un posible aumento en las restricciones de liquidez en las economías desarrolladas, sobre todo en Europa. En este continente, el diferencial entre la tasa Libor y la tasa interbancaria continúa subiendo. Adicionalmente, se observan restricciones para el fondeo de mediano plazo que puede limitar el otorgamiento de crédito. La percepción de riesgo sobre el negocio bancario en estas economías se está incrementando nuevamente, alcanzando los niveles de 2008 y de 2009. Los anuncios y medidas que han hecho recientemente los gobiernos y las autoridades económicas de estos países para enfrentar el problema fiscal no han sido eficaces para aumentar la confianza de los agentes. Los mercados bursátiles globales han presentado drásticas caídas que no solamente se limitan a las acciones bancarias. La ausencia de decisiones de fondo al problema de la deuda soberana en Europa impone riesgos cada vez mayores sobre la estabilidad financiera internacional. A lo anterior se suma la incertidumbre fiscal en Estados Unidos, por la falta de acuerdo entre los partidos políticos sobre las medidas necesarias para alcanzar una deuda sostenible. Ante este panorama la recuperación de la demanda interna de las economías desarrolladas puede complicarse aún más, como de hecho algunos indicadores de actividad real tanto en Europa y Estados Unidos ya lo muestran. En la Zona Euro, se observó una contracción de la actividad manufacturera. En Alemania y Francia, que son los motores de crecimiento en la región, se ha visto una desaceleración de las exportaciones. Dicho componente de la demanda ha sido el más dinámico en los últimos dos años. El mercado laboral tampoco muestra signos de recuperación, haciendo prever un consumo muy débil para el tercer trimestre del año. En las economías de la periferia europea, los programas de ajuste fiscal continuarán deprimiendo las perspectivas de recuperación de la demanda interna en el corto plazo. De esta forma, los pronósticos de crecimiento para la Zona Euro se han reducido. Por ejemplo, para 2011 y 2012 el FMI los redujo desde 2,0% y 1,7% a 1,6% y 1,1% respectivamente. En Estados Unidos durante los últimos dos meses diversos indicadores de actividad real se deterioraron. Desde el mes de abril, tanto el consumo personal como las ventas al por menor muestran muy poco crecimiento, explicado en parte por las condiciones del mercado laboral y por la menor 7 confianza de los consumidores. Los altos niveles de endeudamiento de los hogares no se han reducido significativamente, hecho que seguirá siendo un factor negativo para la reactivación de su demanda interna. Por otra parte, el deterioro de la situación económica y financiera en Europa y los efectos que esto tenga en la demanda mundial puede limitar sus exportaciones. Así, el FMI disminuyó el pronóstico de crecimiento para 2011 y 2012 desde 2,5% y 2,7% a 1,6% y 1,9% respectivamente. Todas las proyecciones de analistas consultadas por el equipo técnico también se revisaron a la baja. En las economías emergentes se ha dado una moderación en el crecimiento observado y esperado. Esto explicado en parte por políticas monetarias más restrictivas, por la eliminación de los estímulos fiscales y por la desaceleración de la demanda mundial. Los mercados siguen de cerca especialmente a China e India, en donde algunos indicadores señalan una desaceleración, y a Brasil, en donde esta tendencia es más evidente. En cuanto a los precios de los productos básicos, la desaceleración de la actividad industrial a nivel mundial ha reducido la demanda por estos bienes, de tal forma que en las últimas semanas se ha observado una disminución en la cotización internacional de los precios de algunos de ellos, en particular petróleo, cobre y carbón. Los precios de otros productos básicos de origen agrícola como cereales y aceites interrumpieron su tendencia alcista y se estabilizaron en niveles altos. La turbulencia en los mercados financieros internacionales se está empezando a sentir con fuerza en América Latina, sobre todo en los mercados de divisas y en las bolsas. Las primas de riesgo de los países de la región están subiendo y las monedas se han depreciado contra el dólar, alcanzando niveles que no se veían desde finales de 2009. De complicarse la situación en Estados Unidos y Europa, es probable que el crecimiento de los países de la región se vea afectado negativamente por distintos canales. Uno de ellos sería la pérdida de confianza, variable que jugó un rol importante en la crisis pasada. Otro sería el menor ingreso nacional, ya que una demanda externa deprimida puede generar disminuciones adicionales en los precios de los bienes básicos, caídas en las exportaciones y una alta volatilidad en los flujos de capital. No obstante, las principales economías de América Latina pueden tener un mayor espacio para amortiguar una eventual caída por medio de políticas (fiscales y monetarias) contra- cíclicas que las economías desarrolladas. 8 Los pronósticos de crecimiento de las economías emergentes han comenzado a reducirse pero de manera menos pronunciada que los de las economías desarrolladas. En el caso de China el FMI revisó sus pronósticos para 2011 de 9,6% a 9,5% y para 2012 de 9,5% a 9%. De todas maneras se espera que las economías emergentes sigan impulsando el crecimiento mundial, entre otras razones, porque el consumo de los hogares en estos países será más dinámico que en las economías desarrolladas. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA Los miembros de la Junta destacaron los siguientes puntos: (i) el incremento de la incertidumbre en los mercados financieros internaciones; (ii) el crecimiento del PIB en el segundo trimestre; (iii) el dinámico desempeño de la demanda interna, reflejado tanto en el incremento del consumo como de la inversión privada; (iv) los mejores indicadores de calidad del empleo en el mercado laboral; (v) la estabilización de la tasa de crecimiento del crédito en niveles altos, tanto para los hogares como para las empresas; (vi) el contexto de bajas tasa de interés reales que, aunque han aumentado, presentan niveles inferiores a sus promedios históricos, y su posible efecto futuro sobre la toma de riesgos de la economía, si se mantienen por un período excesivamente prolongado; (vii) el alto nivel de los términos de intercambio, a pesar de la caída de algunos precios de las exportaciones, como los del petróleo; (viii) la inflación anual de agosto, que disminuyó más que lo previsto (3,27%), en especial por el comportamiento de los no transables y regulados. Por su parte, el promedio de las medidas de inflación básica se encuentra dentro del rango meta (3% +/- 1 punto porcentual); (ix) las expectativas de inflación a distintos plazos se reducen y se mantienen las proyecciones de inflación a finales de 2011 y 2012; (x) la política monetaria de otros países; y (xi) el comportamiento de la tasa de cambio. La Junta Directiva del Banco de la República decidió mantener inalterada la tasa de interés de intervención en 4,5%, teniendo en cuenta principalmente lo siguiente: El contexto internacional se ha deteriorado en las semanas posteriores a la Junta Directiva pasada. Los temores sobre los problemas de deuda soberana han crecido y los pronósticos de crecimiento de Estados Unidos y Europa en 2011 y 2012 han sido revisados a la baja. En algunas de las economías de Asia y América Latina, la nueva información apunta hacia una moderación en el 9 crecimiento. Los precios internacionales de los productos básicos han descendido, aun que permanecen en niveles altos. Además, se ha incrementado la volatilidad de los mercados financieros. Por su parte, se resaltó que en Colombia: i) los datos del primer semestre mostraron una actividad económica expandiéndose a buen ritmo (5%), similar a lo proyectado. El crecimiento ha sido impulsado por el fuerte dinamismo de la demanda interna, en especial la proveniente del sector privado la cual creció en el segundo trimestre a una tasa anual de 11,7%. Para el tercer trimestre, la nueva información disponible sugiere que el crecimiento podría ser superior al registrado en el primer semestre. De esta forma, el rango de pronóstico de crecimiento para 2011 (entre 4,5% - 6,5%) continúa teniendo una alta probabilidad; ii) el crecimiento anual del crédito bancario se estabilizó en una tasa elevada, en un entorno de tasa de interés real que aumentó y siguen por debajo de su promedio históricos. La cartera más dinámica continúa siendo la de consumo, con aumentos superiores en casi tres veces el crecimiento del PIB nominal estimado para 2011 y; iii) el índice de precios de la vivienda nueva siguió aumentando y en julio alcanzó el máximo registro de la serie, calculada desde 1997. En este contexto, el balance de riesgos no se modificó sustancialmente frente al mes anterior. Mientras los factores externos reflejaron mayores riesgos e incertidumbre, la economía colombiana mantiene una fuerte dinámica. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva acordó, por unanimidad, mantener inalterada la tasa de interés de intervención en 4,5%. Así mismo, estima que el actual nivel de tasa la mantiene en una buena posición para responder a la nueva información sobre la economía mundial y nacional. La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo de la situación internacional, del comportamiento y proyecciones de la inflación, el crecimiento, el comportamiento de los mercados de activos y reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible. Bogotá DC, octubre 14 de 2011
2011-10-01
1 Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 28 de Octubre de 2011 El 28 de Octubre de 2011 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, Juan Pablo Zárate y César Vallejo, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación: La inflación anual al consumidor en septiembre fue 3,73% (mensual de 0,31%), 46 puntos básicos (pb) más que en agosto. El ajuste de precios acumulado en lo corrido del año es 2,95%, mayor al registrado en igual período del año pasado (2,40%). Durante agosto, las presiones alcistas más importantes provinieron de los alimentos. La variación anual de esta canasta ascendió en septiembre a 5,7%, experimentando el alza mensual más fuerte en lo corrido del año (110 pb). El grueso del aumento de la inflación de alimentos en este último mes es atribuible al grupo de perecederos y en especial al precio de la papa, cuyas alzas acumulan 41% desde junio. Dichas alzas son de carácter transitorio y obedecerían a los efectos rezagados de la temporada de lluvias y al ciclo 2 normal de la oferta de estos productos. En esta medida, estas variaciones de precios tenderán a revertirse cuando se normalice el ciclo de producción. En lo que se refiere a la variación del IPC sin alimentos (3%), el incremento más fuerte se concentró en la canasta de regulados (de 5,6% a 6,5%) y fue ocasionado por aumentos en las tarifas de la energía eléctrica en algunas regiones del país. Los otros componentes de regulados (combustibles, transporte público y otros servicios públicos) presentaron aumentos más moderados. Respecto al IPC de transables sin alimentos ni regulados, se destaca una leve tendencia ascendente en la variación anual (0,16%) que coincide con una depreciación del tipo de cambio en los últimos dos meses. En cuanto a los no transables sin alimentos ni regulados, los datos de septiembre (3,5%) no cambiaron de manera relevante frente al mes anterior. La inflación básica también subió en el último mes, aunque en una magnitud menor que la inflación total. Si bien todos los indicadores aumentaron, se mantuvieron dentro del rango meta. Las expectativas de inflación registraron un leve aumento en las mediciones más recientes. La encuesta mensual del Banco muestra que la inflación esperada por los operadores del mercado financiero para fin de año está en 3,4%, frente a 3,2% de la encuesta anterior. La inflación esperada a doce meses también está en 3,4% cuando hace un mes se encontraba en 3,3%. La información obtenida a partir de los títulos TES sugiere un comportamiento similar, con aumentos en la inflación esperada a todos los horizontes. La variación de los precios al productor (IPP) se incrementó en septiembre a una tasa anual de 6,6% frente a 5,2% en agosto. Los aumentos se concentraron en el componente importado del indicador. b. Crecimiento Los diferentes indicadores disponibles para el tercer trimestre de 2011 confirman que la economía colombiana habría continuado expandiéndose a una alta tasa. Al igual que en la primera mitad del año, el crecimiento del tercer trimestre habría estado impulsado por la demanda interna. Por tipo de gasto, el consumo de los hogares continuaría creciendo en agosto a tasas altas según lo sugieren los indicadores de ventas del comercio al por menor (9.7% anual) y las importaciones de bienes de consumo (30% anual). De igual forma, la cartera real de crédito de consumo en el tercer trimestre de 2011 creció a una tasa promedio de 21,6% (en el trimestre 3 anterior lo hizo a una tasa de 18,9%). En el mes de septiembre la confianza de los hogares medida por Fedesarrollo disminuyó nuevamente pero su nivel continúa siendo alto, con un promedio similar al registrado en 2007 cuando el consumo creció a una tasa superior al 7%. Con respecto a la inversión las perspectivas también son favorables. Esto se puede inferir del crecimiento que se ha venido observando en las importaciones de bienes de capital, tanto en su componente de maquinaria como de equipo de transporte. Adicionalmente, la producción nacional de estos bienes continúa mostrando tasas de crecimiento positivas impulsadas por el buen desempeño previsto de la economía colombiana. La cartera comercial sigue creciendo a tasas cercanas al 20% anual. Por el lado de la oferta, para el tercer trimestre los indicadores de la industria y de la construcción se mantienen dinámicas. En la industria se destacó la expansión de la producción de 9,5% en agosto. La Encuesta de Opinión Empresarial de Fedesarrollo muestra igualmente buenas perspectivas de producción para el sector. En la construcción el dinamismo fue positivo en el tercer trimestre, como lo sugiere el comportamiento de la producción de cemento y sus despachos nacionales, los cuales registraron en agosto crecimientos anuales de 9,6% y 22,2% respectivamente. Las tendencias del sector para el mediano plazo también son favorables como lo indica el área aprobada para construir según licencias, que en agosto siguió creciendo, impulsada principalmente por la destinada al segmento residencial. En contraste, se espera una reducción de la producción del sector agrícola para el tercer trimestre debido al impacto de factores climáticos especialmente en la cosecha cafetera. Las exportaciones totales en agosto aumentaron a una tasa de 50% anual. Este crecimiento se originó en las mayores ventas de petróleo crudo y derivados, carbón y productos industriales. El impulso en las exportaciones de origen minero se explica tanto por el comportamiento de los precios como de las cantidades, cuyos índices registraron aumentos anuales de 38% y 22%, respectivamente. Las exportaciones de bienes básicos de origen agrícola tuvieron una variación anual menor (4,2% anual) en agosto, pero mostraron una recuperación leve con respecto al mes anterior. Los índices de precios y cantidades calculados sugieren que el aumento es explicado más por los precios (13% anual). En agosto las ventas externas sin productos básicos (bienes industriales y otros productos agrícolas) mostraron un crecimiento 4 anual también significativo (41%). El aumento se observó tanto en los precios (14%) como en las cantidades (26%). Con relación al empleo, la información del DANE a agosto sugiere que la demanda por fuerza de trabajo mostró un crecimiento mayor que la oferta laboral, lo que permitió que durante los últimos meses las tasas de desempleo y de subempleo siguieran cayendo. Teniendo en cuenta todo lo anterior los diferentes modelos de pronóstico arrojaron un intervalo de crecimiento para el PIB del tercer trimestre comprendido entre 6% y 7%. Para lo que queda del año los modelos no vislumbran un cambio importante en las tendencias de las variables macroeconómicas y para todo 2011 pronostican un crecimiento del PIB de entre 5% y 6%. Con respecto a 2012 los modelos sugieren un crecimiento algo menor con relación al esperado para 2011. Estos resultados se derivan de las menores proyecciones que se tienen para variables clave como el precio de las materias primas y el crecimiento mundial. c. Variables Financieras. El crédito total en moneda nacional (MN) y extranjera (ME) se mantuvo en altas tasas de crecimiento superior al estimado para el PIB nominal de 2011. A septiembre, el crédito total (MN y ME) se incrementó a una tasa anual de 23,5% anual, superior en 38 pb a la observada en agosto. La cartera de consumo registró la mayor tasa de crecimiento, 25,8%, mayor en 88 pb con respecto al mes anterior. Por su parte la cartera comercial mostró una tasa de crecimiento anual de 23%, mayor en 18 pb a la registrada en el mes de agosto, mientras que la cartera hipotecaria se mantuvo en la tasa de crecimiento anual del mes anterior, 17,3%. En septiembre las tasas reales de interés (descontando el IPC sin alimentos) para créditos de consumo, hipotecario y comercial ordinario se situaron en 15,1%, 10,0% y 8,0%, cifras inferiores a los promedios observados desde 1998. d. Contexto Externo. 5 La crisis de la deuda en Grecia y la vulnerabilidad de los países de la periferia europea a la posibilidad de un contagio han continuado afectando a los mercados, ante los riesgos sistémicos que amenazan la estabilidad de la Zona Euro y el débil crecimiento de los Estados Unidos. En la Zona Euro la probabilidad de una recesión se ha incrementado considerablemente, forzando a un descenso en los pronósticos de crecimiento. Por su parte los indicadores más recientes (septiembre) sobre la actividad manufacturera y de servicios se están contrayendo, y las exportaciones presentan una menor dinámica. En Estados Unidos la confianza del consumidor alcanzó niveles muy bajos en los últimos tres meses (octubre), lo cual se está reflejando en un crecimiento moderado del consumo. Los indicadores de oferta también señalan desaceleración pero sin mostrar aún retrocesos en sus niveles. Por otra parte, el deterioro de la situación económica y financiera en Europa y los efectos que esto tenga en la demanda mundial pueden seguir siendo un limitante para sus exportaciones. El crecimiento económico para el tercer trimestre de 2011 de Estados Unidos alcanzó 2,5%, cifra superior a la incorporada en las proyecciones de demanda externa. Las economías emergentes continúan expandiéndose pero a un ritmo menor. En China el PIB se desaceleró en el tercer trimestre y podría seguir decayendo en lo que resta del año, dado el debilitamiento que se prevé para su demanda externa. En el caso de Brasil, a septiembre se anticipa una fuerte desaceleración en la actividad industrial y una reducción importante del crecimiento del PIB durante el segundo semestre del año. Dado todo lo anterior, el equipo técnico redujo los pronósticos de crecimiento de este año para las principales economías desarrolladas. No obstante, el crecimiento del PIB del conjunto de socios comerciales de Colombia se mantuvo, debido a que se revisó al alza el de algunos países como Ecuador dadas sus tendencias recientes. Para el próximo año se redujeron de manera significativa los pronósticos de crecimiento de las economías desarrolladas, al igual que los de los emergentes. En conjunto, se espera que en 2012 el crecimiento de nuestros principales socios sea menor, pero positivo. En esta estimación se asume que las autoridades económicas adoptarán medidas creíbles para aliviar los problemas de deuda soberana, para garantizar la solidez de sus sistemas financieros y así restablecer la confianza de los agentes. Ante las menores perspectivas de crecimiento mundial, también se redujeron los pronósticos de los precios internacionales de los bienes básicos 6 que exporta Colombia, especialmente para 2012. Las proyecciones tienen en cuenta las tendencias recientes que mostraron estas cotizaciones en los últimos tres meses. La reducción esperada en los precios de los bienes básicos y en el crecimiento mundial, llevará a una contención de las presiones inflacionarias en las economías desarrolladas, con lo cual la postura holgada de política monetaria debería mantenerse por un tiempo mayor al previsto anteriormente. En particular se espera que las tasas de referencia en Estados Unidos y Europa se mantengan en niveles muy bajos por lo menos hasta mediados de 2013. En el caso de las economías emergentes, las presiones sobre precios pueden ceder más lentamente, por lo que resulta más difícil pronosticar caídas en las tasas de interés. En conclusión, el crecimiento de la demanda externa para el siguiente año es incierto e involucra riesgos elevados. Si en la Unión Europea se tiene éxito para detener los temores de insolvencia fiscal, es probable que en 2012 se consiga un crecimiento mundial moderado. De lo contrario, si se complica la situación en Europa y en Estados Unidos no se ratifica la tendencia de crecimiento del pasado trimestre, el escenario de crecimiento es menos favorable e incluiría una recesión en la zona del Euro. En este último escenario, la confianza de los consumidores e inversionistas en las economías emergentes se puede reducir, afectando con ello su demanda interna y el mercado de capitales. También se puede dar una reducción en el ingreso nacional, ya que una demanda externa deprimida generara disminuciones en los precios de los bienes básicos que exporta nuestro país. De llegar a presentarse esta última situación, el mayor impacto negativo debería darse en el 2012. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA Algunos miembros de la Junta manifestaron que la tasa de intervención del Banco debía ser incrementada en 25 pb, teniendo en cuenta las siguientes razones: (i) La inflación anual al consumidor en septiembre fue 3,73% (mensual de 0,31%), 46 puntos básicos (pb) más que en agosto; (ii) Los pronósticos de corto plazo indican que la inflación se situará por encima del punto medio del rango meta al finalizar 2011. Las medidas de inflación básica y las expectativas de inflación repuntaron de nuevo; (iii) La nueva información disponible continúa reflejando una demanda interna muy dinámica, impulsada tanto por el consumo privado como por la inversión. Si la 7 confianza y los precios internacionales de los principales productos de exportación continúan en niveles altos, sería de esperar que el fuerte dinamismo en la demanda se prolongue hacia los próximos trimestres y genere presiones de capacidad; (iv) Si bien el crecimiento anual del crédito bancario se estabilizó, lo hizo a una tasa elevada. La cartera más dinámica es la de consumo, con aumentos superiores en casi tres veces al crecimiento del PIB nominal estimado para 2011. Los índices de precios de la vivienda nueva y usada alcanzaron los máximos registros de las series. El fuerte dinamismo de estos indicadores financieros, que usualmente se identifica con excesos de demanda y riesgo de desbalances, puede estar explicado en parte por tasas de interés reales que aún se encuentran en niveles bajos; (v) El incremento oportuno de la tasas de interés del Banco contribuye a preservar la inflación dentro del rango meta y reduce los riesgos de desequilibrios financieros que lleven luego a una volatilidad innecesaria del producto y el empleo; (vi) La incertidumbre sobre la evolución de la economía mundial no debe demorar decisiones necesarias para la estabilidad de la economía colombiana. Otros miembros de la Junta compartieron la preocupación señalada por el grupo anterior, pero consideraron apropiado mantener la tasa de interés inalterada teniendo en cuenta los factores externos que reflejan mayores riesgos e incertidumbre. Sin embargo, si la confianza internacional tiende a restablecerse y si los indicadores reales internos siguen con el dinamismo actual y no se observa mayor contagio de la situación externa, es probable que la economía requiera menor estímulo monetario. Otros miembros de la Junta consideraron que es conveniente mantener las tasas de interés del Banco teniendo en cuenta que: (i) Con respecto a 2012 los modelos indican un crecimiento menor al esperado para 2011. Estos resultados se derivan de las proyecciones que se tienen para variables clave como el precio de las materias primas y el crecimiento mundial. En términos generales, el panorama interno de mediano plazo se ve menos favorable como consecuencia de los posibles efectos de la baja dinámica en las economías desarrolladas; (ii) El acuerdo firmado en la madrugada del día 27 de octubre en Bruselas para conjurar la profunda crisis europea, dejó grandes vacíos y preguntas sin respuesta, como la indefinición sobre la delicada situación de Italia y la progresiva elevación del costo de su deuda, la capitalización de los bancos de la Zona del Euro, y las modalidades de vinculación de las más grandes economías emergentes al financiamiento del fondo de rescate, entre otros; iii) Se han deteriorado fuertemente los pronósticos recientes sobre el 8 crecimiento de los Estados Unidos; (iv) Una economía mundial menos dinámica reduciría el incremento excesivo de los precios de los activos y el crecimiento del crédito en el próximo futuro; (v) Si bien el registro de la inflación aumentó, el incremento parece transitorio y obedece a los efectos rezagados de la temporada de lluvias y al ciclo normal de la oferta de alimentos perecederos. Además el equipo técnico del banco pronostica descensos de la inflación en los próximos 6 meses; (vi) Las medidas de inflación básica no cambiaron de manera importante frente al mes anterior, lo cual sugiere que las presiones de demanda sobre los precios han sido moderadas. En general, todos los indicadores de inflación se mantuvieron dentro del rango meta; (vii) La dinámica del crédito y el creciente valor de los activos podría obedecer a factores estructurales y no sólo a baja tasa de interés; (viii) De todas formas se justifica pensar en medidas de regulación prudencial adicionales a la tasa de interés; (ix) Las tasas de interés de mercado han subido recientemente, lo cual sugiere que no existe un nivel de liquidez excesivo en la economía. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva acordó, por mayoría, mantener inalterada la tasa de interés de intervención en 4,5. La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo de la situación internacional, del comportamiento y proyecciones de la inflación, el crecimiento, el comportamiento de los mercados de activos y reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible. Bogotá DC, noviembre 11 de 2011
2011-11-01
1 Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 25 de Noviembre de 2011 El 25 de Noviembre de 2011 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, Juan Pablo Zárate y César Vallejo, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación: La inflación anual al consumidor en octubre fue 4,02% (mensual de 0,19%), 29 puntos básicos (pb) más que en septiembre. El ajuste de precios acumulado en lo corrido del año es de 3,15%, mayor al registrado en igual período del año pasado (2,31%). Al igual que en septiembre, durante octubre, las presiones alcistas más importantes provinieron de los alimentos. La variación anual de esta canasta ascendió en octubre a 6,6%, frente a 5,7% en septiembre. La aceleración se concentró en los precios de los alimentos perecederos, especialmente la papa, como se observa desde hace varios meses. Igualmente hubo alzas en alimentos menos perecederos. Utilizando la desagregación de la canasta de alimentos en alimentos afectados por el clima, importados y resto, se observó que los productos afectados por el clima lideraron el repunte de los precios de la 2 canasta con un registro de 15,1% en octubre frente a 12,2% en septiembre, mientras que los alimentos importados (6,5%) no presentaron aumentos importantes respecto al mes anterior. El resto de alimentos (4,7%) aumentó 70 pb respecto al registro de septiembre. Problemas de oferta asociados a las fuertes lluvias de la primera mitad del año, así como el ciclo normal de los precios y la producción explicarían estos registros. La inflación sin alimentos en octubre fue 3,03%, con un aumento leve (5 pb) respecto al dato de septiembre. Desde octubre de 2009, el indicador no se situaba por encima del punto medio del rango meta. El comportamiento en octubre de las sub canastas del IPC sin alimentos fue dispar. Hubo un aumento importante en la variación anual del IPC de transables sin alimentos ni regulados. Este indicador, con un registro de 0,4% en el mes, parece estar consolidándose en terreno positivo después de 16 meses consecutivos de mostrar cifras negativas. Ello en parte está relacionado con la depreciación del tipo de cambio en los últimos meses. La variación anual de no transables sin alimentos ni regulados se mantuvo en 3,5%. Los arriendos presentan una variación anual estable desde hace algunos meses y cercana al 3%, que compensa registros más altos en servicios de educación y salud. En cuanto a la variación anual de la canasta de regulados (6,3%), se presentó un descenso por las tarifas de energía que, sin embargo, fue mucho menor que el previsto. En octubre continuaron los aumentos de los precios del gas domiciliario debido a las alzas de los precios internacionales de los combustibles de la primera mitad del año. Los indicadores de inflación básica continuaron mostrando una tendencia ascendente durante el último mes. El promedio de los tres indicadores divulgados por el Banco de la República fue de 3,27%, 14 pb más que hace un mes. Si bien todos los indicadores aumentaron, aún se mantienen dentro del rango meta. El aumento de la inflación afectó los indicadores de expectativas. Las obtenidas a partir de los TES aumentaron a todos los horizontes, con las de diez años superando un poco el techo del rango meta. Las mediciones a través de encuestas presentan aumentos menos pronunciados. Por ejemplo, según la encuesta mensual la inflación esperada a diciembre de 2011 es de 3,6% y a doce meses es de 3,4%. En la encuesta trimestral, la expectativa a doce meses está en 3,7%. La variación de los precios al productor (IPP) continuó ascendiendo en octubre y se ajustó a una tasa anual de 7,9% frente a 6,6% en septiembre. Los 3 aumentos, como en los meses anteriores, se concentraron en el componente importado del indicador. b. Crecimiento El crecimiento del tercer trimestre, al igual que en la primera mitad del año, seguiría impulsado por la demanda interna como se infiere de la información más reciente de las ventas del comercio al por menor, medidas por el DANE, cuyo crecimiento anual en septiembre fue de 7,2%. Además, las importaciones en dólares de bienes de consumo crecieron en septiembre a una tasa anual de 26% y la cartera de crédito de consumo registró en el mes de septiembre un crecimiento anual de 25,8%. Por su parte, la inversión también habría mostrado un buen comportamiento en el tercer trimestre. Al respecto, el crecimiento registrado por las importaciones de bienes de capital en septiembre (25%) sugiere que el gasto en maquinaria y equipo seguía dinámico. En la misma dirección apunta la evolución de la cartera de crédito comercial, la cual se expandió en el mismo mes a una tasa de 22,2%. Por su parte, la inversión en construcción habría continuado creciendo, de acuerdo con la evolución de las licencias de construcción. Por el lado de la oferta, en septiembre la variación anual del índice de producción industrial fue de 5,2%. El crecimiento anual de la producción de todo el tercer trimestre fue alto (6,2%), jalonado principalmente por el registro de agosto. Los indicadores asociados con la industria manufacturera, como los de pedidos y existencias de Fedesarrollo, se mantienen estables a septiembre y aún en niveles que sugieren un ritmo de expansión importante para el sector. En cuanto a las ventas externas, hasta septiembre el efecto del contexto externo más débil no ha sido importante. Así, las exportaciones totales en dólares aumentaron a una tasa anual de 36%. Este crecimiento se originó en las mayores ventas de petróleo crudo y derivados, carbón y oro. El impulso en las exportaciones de origen minero, tanto por el comportamiento de los precios (32%) como por el de las cantidades (4%). Las exportaciones de bienes básicos de origen agrícola no evidencian una recuperación. En efecto, éstas registraron una caída anual de 4,1% en septiembre. Los índices de precios y cantidades calculados sugieren que dicha disminución fue explicada por la contracción registrada en las cantidades (-16% anual), la cual no fue compensada por el aumento en los precios (12% anual). La caída en las cantidades se originó en las menores ventas externas de café (-21%) y flores (-19%). Finalmente, las ventas externas de bienes industriales y otros 4 productos agrícolas (sin productos básicos) mostraron un crecimiento anual de 4,3% en septiembre. El aumento se observó sólo en precios (9%) mientras que las cantidades registraron una contracción (-5%). Con relación al mercado laboral, la tasa de desempleo continuó en septiembre con su tendencia decreciente. Su reducción respondió nuevamente a un crecimiento de la demanda laboral (medida por la tasa de ocupación) mayor al de la oferta (medida por la tasa global de participación). Tanto para las 13 áreas como para el total nacional, el número de ocupados siguió aumentando a tasas cercanas al 5%, en línea con lo registrado durante todo el 2011. Los indicadores mencionados anteriormente con información al tercer trimestre confirmaron los pronósticos presentados en el último Informe sobre Inflación, cuando se proyectó una expansión anual de la economía entre 6% y 7% para dicho periodo. Para el cuarto trimestre del año, los pocos indicadores disponibles sugieren alguna desaceleración del consumo privado con respecto al tercero, concentrada en el componente de bienes durables. Esto se deduce de la reducción por cuarto mes consecutivo de la confianza de los consumidores observada en el mes de octubre (junto con sus componentes de disposición a comprar carro y vivienda) y por la desaceleración para el mismo mes de las ventas del sector automotriz. Este comportamiento, sin embargo, está en línea con lo esperado en las estimaciones del informe anterior, donde el crecimiento de la economía para todo 2011 estaría en un intervalo entre 5% y 6%. Respecto a la situación del crédito y las finanzas del sector real, los indicadores agregados calculados con base en reportes de los intermediarios al tercer trimestre de 2011 no muestran aún claros indicios de exceso, pese a que la cartera mantiene un alto ritmo de crecimiento real. Sin embargo, información de algunos segmentos, como el del crédito de consumo, señalan un aumento importante del endeudamiento de los hogares y un ligero deterioro de las últimas cosechas (según los datos más recientes disponibles en la Superintendencia Financiera). c. Variables Financieras. El crédito total en moneda nacional (MN) y extranjera (ME) se mantiene en altas tasas de crecimiento, con una leve moderación en octubre. Todas las modalidades de crédito, tanto a los hogares como a las empresas, continúan registrando crecimientos muy superiores al de la actividad 5 económica. Esto se ha dado en un contexto de tasas reales de interés históricamente bajas. A octubre, el crecimiento del crédito total (MN y ME) registró una tasa anual de 22,7%, inferior en 118 pb a la observada en septiembre. La cartera de consumo presentó la mayor tasa de crecimiento, 25,4%, menor en 32 pb con respecto al mes anterior. Por su parte la cartera comercial mostró una tasa de crecimiento anual de 22,0%, menor en 113 pb a la registrada en el mes de septiembre, mientras que la cartera hipotecaria se mantuvo en una tasa de crecimiento de 17,3% anual, como se ha venido observando desde agosto. En octubre las tasas de los intereses reales (descontando el IPC sin alimentos) para créditos de consumo, hipotecario y comercial ordinario se situaron en 14,9%, 10,0% y 8,1%, cifras inferiores a los promedios observados desde 1998. d. Contexto Externo. En el tercer trimestre de 2011 las principales economías desarrolladas registraron un crecimiento del PIB mejor al esperado. No obstante, la probabilidad de que se presente una recesión en Europa aumentó mientras que el consenso del mercado es que la economía de los Estados Unidos se expanda a una tasa moderada por un período prolongado. Ante este panorama y con los grandes países emergentes creciendo a tasas cercanas a su potencial, el pronóstico para 2012 indica que la actividad mundial continuaría desacelerándose pero sin llegar a una situación de recesión. El mejor resultado de crecimiento observado en los principales países desarrollados podría estar asociado con el restablecimiento de las condiciones de producción en Japón y con una reducción en el precio de los combustibles. En Alemania, Francia y Japón, el crecimiento del tercer trimestre se aceleró respecto a lo registrado entre marzo y junio. Algo similar sucedió en Estados Unidos a pesar de la revisión del PIB de ese país de 2,5% a 2,0% que se dio a conocer recientemente. Pese a lo anterior, los mercados internacionales continuaron exhibiendo una alta aversión al riesgo debido a la situación en Europa. En Estados Unidos la poca información disponible del cuarto trimestre muestra que la actividad real sigue creciendo pero lentamente, lo cual aleja los temores de una posible recesión en el corto plazo. Sin embargo, los riesgos se mantienen a la baja, y un detrimento en la situación europea podría afectar 6 considerablemente el crecimiento de este país. En este contexto se mantiene el pronóstico presentado en el Informe Sobre Inflación de septiembre para este país de un crecimiento moderado por un período prolongado. En Europa los indicadores de actividad económica continúan deteriorándose, especialmente en los países de la periferia. Adicionalmente, los acuerdos y medidas dirigidas a solucionar los problemas de deuda pública y del sistema financiero no han tenido hasta el momento el impacto esperado. Todo esto ha repercutido en un deterioro en la confianza de los consumidores e inversionistas y ha contagiado a las economías más grandes y estables de la región. Dado esto es probable que el pronóstico de crecimiento de 2012 para la Zona Euro se reduzca frente a lo presentado en el informe anterior. Las economías emergentes continúan perdiendo dinamismo. En China, la actividad real se ha seguido desacelerando lo cual ha sido confirmado con los últimos datos de industria. Algo similar ocurre en India y Brasil, aunque en estos países los indicadores se han deteriorado de manera más pronunciada. Los mercados financieros han permanecido atentos a la evolución del manejo de la deuda pública de la periferia europea. En las últimas semanas los spreads de tasas de interés de los bonos soberanos de Italia y España aumentaron. El contagio también está alcanzando a Francia y Alemania. En las economías de América Latina, las primas de riesgo no han aumentado significativamente y sus tasas de cambio han tendido a depreciarse moderadamente respecto al dólar. La débil demanda externa y las menores perspectivas de crecimiento global han reducido las presiones sobre los precios internacionales de los alimentos, los cuales cedieron un poco en los últimos meses. En el caso del petróleo, a pesar de las alzas del WTI observadas en los últimos dos meses, sus niveles aún son inferiores a los alcanzados en abril de 2011. A partir de esta última fecha, la cotización del Brent ha tenido un comportamiento decreciente. Todo lo anterior ha permitido una reducción de las presiones inflacionarias en las economías desarrolladas y varias economías emergentes (con excepción de India). La política monetaria sigue siendo muy laxa en los países desarrollados. El Banco Central Europeo redujo en 25 puntos básicos su tasa de intervención en su reunión de noviembre, mientras que los bancos centrales de Japón e Inglaterra mantuvieron sus tasas de referencia cercanas a cero. Por el lado de 7 las economías emergentes, salvo en el caso de la India, los bancos centrales tendieron a mantener sus tasas de política. Las cotizaciones internacionales de los principales bienes básicos que exporta Colombia también se han visto afectadas pero moderadamente. Sin embargo, sus niveles siguen altos y continúan impulsando el ingreso nacional. La anterior situación puede explicar en parte el comportamiento de las exportaciones en dólares a septiembre, las cuales crecieron a tasas elevadas especialmente por las de origen minero. En las ventas externas industriales se observó alguna desaceleración pero aún es temprano para concluir si ello obedeció a una menor demanda externa. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA Algunos miembros de la Junta manifestaron que la tasa de intervención del Banco debe incrementarse en 25 pb, teniendo en cuenta las siguientes razones: (i) Si bien la situación externa se ha deteriorado, el escenario central de pronóstico es que la actividad económica en Europa siga debilitándose pero sin que ocurra una evolución desordenada o colapso. Al mismo tiempo, el consenso del mercado es que la economía de los Estados Unidos se expanda a una tasa moderada por un periodo prolongado. (ii) Si bien la situación externa se ha deteriorado y algunos indicadores internos muestran moderación, desde el último informe, la inflación y las expectativas de inflación aumentaron, lo cual puede llegar a poner en riesgo la meta y la credibilidad de la política monetaria en un contexto en el cual la tasa de interés de política parece reflejar una política monetaria expansiva. Las decisiones sobre salarios y otros precios de comienzos de 2012 se tomarán en el contexto de un choque de oferta, con la inflación por debajo pero cerca de 4% y con un mercado laboral apretado. Además, la depreciación del peso parece estar afectando los precios de los transables. (iii) El deterioro de las condiciones externas y la moderación de algunos indicadores internos no parecen suficientes para compensar una dinámica interna caracterizada por excesos de demanda que eventualmente podría amenazar la meta de inflación y la estabilidad del producto, incluso a mediano plazo por consideraciones de desbalances financieros. A pesar de la desaceleración en algunos indicadores, estos se mantienen en niveles altos y otros se mantienen altos y no se desaceleran. (iv) El crédito bancario continúa creciendo a una tasa anual elevada. La cartera más dinámica es la de consumo de los hogares, los cuales parecen estar elevando significativamente su grado de apalancamiento. Los índices de precios de la vivienda nueva y usada están 8 en sus máximos registros. El crédito bancario a una tasa de interés más elevada contribuye a una medición apropiada de los riesgos. (v) Las decisiones de política deben siempre ponderar los riesgos y costos de equivocarse. Dados los rezagos de la política monetaria, no hacer nada si la economía continúa fuerte, implicaría riesgos sobre la credibilidad o reputación de la propia política y podría llevar a crear una volatilidad innecesaria de las tasas de interés y el PIB. Dados los mismos rezagos, aumentar las tasas hoy podría no traer un costo muy grande si la situación externa se deteriora súbitamente en el futuro cercano, lo cual es fácilmente detectable, y la política se revierte. Teniendo en cuenta el pronóstico central descrito antes, y los riesgos de desequilibrios financieros, se considera prudente aumentar 25 puntos básicos la tasa de interés de intervención y cree que con ese movimiento se alcanza una postura monetaria que contribuye a maximizar el crecimiento del producto y el empleo coherente con el logro de las metas futuras de inflación. Esta decisión incorpora además la posibilidad de detectar a tiempo un cambio sustancial en las condiciones externas de la economía y de reaccionar rápidamente ante el mismo. Otros miembros de la Junta consideraron que es conveniente mantener estables las tasas de interés del Banco teniendo en cuenta que: (i) Si bien es cierto que la inflación anual a octubre tocó el techo del rango meta, la causa se concentra en un choque de oferta de alimentos transitorio por razones climáticas. En efecto, el incremento de precios de los alimentos fue 6,63%, en contraste con 1,69% y 1,64% en igual período de 2009 y 2010 respectivamente. Y los de los más afectados por el clima crecieron 15%, o sea tres veces más que los de los importados y los del resto de origen nacional. Además, el IPC sin alimentos ha estado en el punto medio del rango meta (3,05%, 2,57% y 3,03% en 2009, 2010 y 2011 respectivamente). En tanto que la inflación de no transables sin alimentos ni regulados, que refleja más fielmente posibles presiones de demanda, ha venido reduciéndose: 4,57%, 3,53% y 3,49% a octubre de 2009, 2010 y 2011 respectivamente. Además, el equipo técnico del banco continúa pronosticando descensos de la inflación en los próximos 6 meses. (ii) En Europa los acuerdos y medidas dirigidas a solucionar los problemas de deuda pública y del sistema financiero no han tenido el impacto esperado, y la situación ha continuado deteriorándose en forma marcada desde la última reunión de la Junta. Las agencias calificadoras de riesgo han reducido la calificación de varios países de la zona, los spreads de deuda han crecido en forma marcada, y ni siquiera Alemania ha sido 9 inmune a los temores de los mercados. Varios analistas proyectan una recesión en diferentes países europeos en 2012 y no descartan el fracaso del modelo que llevó a la creación del Euro. (iii) En los Estados Unidos fracasó el "Super Comité" formado por demócratas y republicanos para presentar una propuesta tendiente a reducir el déficit fiscal durante los próximos 10 años, y los pronósticos de crecimiento también se han reducido en forma sustancial durante el último año. (iv) China continuará creciendo a tasas altas, pero las noticias no han sido excepcionalmente alentadoras en los últimos meses. Hay síntomas de contracción de la industria, los precios de la vivienda acusan fuertes caídas, y lo mismo sucede con el crecimiento de la construcción. Al punto de que su autoridad monetaria ha comenzado una nueva fase de medidas monetarias expansivas. (v) En América Latina la industria ha perdido dinamismo y varias de las economías se han enfriado. El Banco Central de Brasil ha reducido tasas en los últimos meses, y los de México, Chile y Perú las han mantenido, con anuncios de sesgos a la baja si las condiciones de la economía mundial continúan deteriorándose. Por qué habría de ser Colombia diferente al resto del mundo excepto la India o Islandia? (vi) La tasa real de interés repo en Colombia está por debajo de su media histórica, pero lo mismo sucede en la mayoría de países del mundo. (vii) Diferentes variables han comenzado a mostrar una menor dinámica en los meses recientes, posiblemente como resultado de la situación internacional: las expectativas al consumidor de la encuesta de Fedesarrollo han caído cuatro meses consecutivos; la dinámica industrial se redujo desde 9,7% en agosto a 5,2% en septiembre; la tasa de crecimiento anual de las ventas externas sin productos básicos en septiembre fue de 4,3% que se desaceleró frente al registro de agosto que fue de 41%; y el crédito de consumo se viene desacelerando de 34.1% en junio de 2011, a 23.4% en noviembre, cuando se consideran las variaciones anualizadas de las últimas 13 semanas. (viii) La dinámica del crédito y el creciente valor de los activos podría obedecer a factores estructurales y no sólo a baja tasa de interés; (ix) De todas formas se justifica pensar en medidas de regulación prudencial adicionales a la tasa de interés; los modelos disponibles en el Banco sugieren que un incremento de 25 puntos en la tasa de interés disminuyen la dinámica del crédito en forma marginal. (x) Las tasas de interés de mercado han subido recientemente, lo cual sugiere que no existe un nivel de liquidez excesivo en la economía. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA 10 La Junta Directiva acordó, por mayoría, aumentar 25 puntos básicos la tasa de interés de intervención que quedará en 4,75. La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo de la situación internacional, del comportamiento y proyecciones de la inflación, el crecimiento, el comportamiento de los mercados de activos y reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible. Bogotá DC, diciembre 09 de 2011
2011-12-01
1    Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 16 de Diciembre de 2011 El 16 de diciembre de 2011 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, Juan Pablo Zárate y César Vallejo, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación: La inflación anual al consumidor en noviembre fue 3,96% (mensual de 0,14%), 6 puntos básicos (pb) menos que en octubre. El ajuste de precios acumulado en lo corrido del año es de 3,29%, mayor al registrado en igual período del año pasado (2,51%). La caída de la inflación total durante el mes se explica principalmente por la desaceleración de la variación de los precios de los alimentos. El IPC sin alimentos, por su parte, se mantuvo en 3,03%. Esto fue el resultado de un descenso en la variación anual del IPC de regulados que compensó el aumento de los IPC de transables y no transables (sin alimentos ni regulados). Para el IPC de alimentos, la variación anual pasó de 6,6% en octubre a 6,4% en noviembre, con lo que se interrumpe la tendencia ascendente que ya acumulaba seis meses. En términos de variaciones anuales, los descensos se concentraron en alimentos perecederos al pasar de 17,6% en octubre a 14,6% en noviembre. Para la mayoría de los otros subgrupos de la canasta se observó una aceleración de la variación anual. En el caso de la papa y de las frutas, se han observado caídas absolutas en precios que ocurren después de un período de alzas importante, lo que sugiere que los movimientos recientes están asociados con el ciclo normal de la oferta de estos productos. Hasta la fecha, las intensas lluvias ocasionadas por el fenómeno de La Niña no habían provocado una interrupción en la cadena de suministros de alimentos, excepto por el caso de la leche y los huevos. Los precios de los alimentos importados han registrado pocos aumentos en los últimos meses, pese a la depreciación del peso. Esto puede estar ligado a algunos descensos que se han observado en los precios internacionales. La desaceleración en la canasta de regulados (caída de 48 pb frente a octubre) obedece a una corrección en las tarifas de energía eléctrica en la ciudad de Cali después del fuerte aumento que se registró dos meses atrás. En el caso del precio interno de la gasolina y de las tarifas de transporte público no se presentaron cambios significativos en noviembre, pero sí hubo un incremento importante en el precio del 2    gas domiciliario, siendo este el rubro que más presiones alcistas ejerce en esta sub canasta. El IPC de transables sin alimentos ni regulados, por su parte, se situó en 0,6% (variación anual) frente a 0,4% del mes anterior. Desde hace varios meses, este grupo presenta aumentos que estarían relacionados con la depreciación del tipo de cambio en la segunda mitad del año. Respecto a los no transables sin alimentos ni regulados la variación anual en noviembre fue de 3,6%. Los arriendos, el principal componente de esta canasta, presenta una ligera tendencia ascendente que sin embargo no implica aún reajustes anuales muy por encima del 3% (3,3% en noviembre). Pese al descenso de la inflación total, la inflación básica continuó aumentando en noviembre. El promedio de los tres indicadores monitoreados por el Banco de la República se situó en 3,34%, 7 pb más que el mes anterior. Si bien todos los indicadores aumentaron, aún se mantienen dentro del rango meta. Las expectativas de inflación no presentaron cambios importantes en el último mes. Las obtenidas con la encuesta mensual a diciembre de este año están en 3,6%, igual que hace un mes y las de doce meses se encuentran en 3,4%, ligeramente por encima de las obtenidas en octubre. Las expectativas obtenidas a partir de los TES presentaron una leve caída después del aumento registrado el mes anterior; todas excepto las de diez años se mantuvieron entre 3,5% y 4,0%. En noviembre se presentó una reducción importante en la variación anual en el IPP (a 6,8% desde 7,9% el mes pasado). La desaceleración se dio tanto en el grupo de bienes importados como en el de producidos y consumidos. b. Crecimiento Los últimos indicadores de actividad económica para el tercer trimestre de 2011 confirmaron que el ritmo de crecimiento anual de la economía se aceleró respecto al observado en la primera mitad del año, y que la economía colombiana continúa siendo impulsada principalmente por la demanda interna. Entre la información divulgada recientemente la más sobresaliente fue el dato de obras civiles para el tercer trimestre. Según el DANE el indicador aumentó 22,8% en términos anuales. La mayor expansión dentro del rubro se dio en la construcción de obras asociadas con el sector minero. También fue divulgado el censo de edificaciones con aumentos del área en el tercer trimestre cercanos al 10% anual. Por su parte, otros indicadores trimestrales asociados al sector servicios (hoteles, agencias de viajes) y al pecuario (sacrificio de ganado) también mostraron comportamientos favorables en el tercer trimestre. La dinámica de la demanda interna en el período se produce en un marco de tasas de interés reales relativamente bajas, alta disponibilidad de crédito e incremento de la ocupación. En esas condiciones el consumo de los hogares habría continuado 3    mostrando un fuerte dinamismo en especial en el relacionado con las compras de bienes durables. La inversión habría sido impulsada por la construcción de obras civiles, por las compras de maquinaria y equipo de transporte y por la expansión de la vivienda. Por ramas de actividad, los sectores que habrían registrado mayores tasas de crecimiento serían la construcción y la minería. Los pocos indicadores disponibles para el cuarto trimestre de 2011 muestran alguna desaceleración en el ritmo de crecimiento anual aunque su dinamismo continúa alto. Las ventas de vehículos continuaron aumentando en noviembre en unidades. La confianza de los consumidores luego de mostrar caídas durante los tres meses anteriores se recuperó en noviembre. El nivel de este indicador aún puede considerarse alto (se encuentra por encima de su promedio desde 2001). La cartera de crédito de consumo sigue expandiéndose a tasas cercanas al 25%. Con respecto a la oferta, la mayor parte de indicadores asociados al sector industrial se mantiene estable (pedidos, existencias, demanda de energía, etc.). Así mismo la ANDI reveló que el crecimiento de la producción industrial para el año corrido a octubre fue de 6%, registro similar al que había señalado un mes atrás (6,1% para el año corrido a septiembre). En octubre las exportaciones totales en dólares registraron un valor de US$ 4.713 millones y crecieron anualmente 32,6%. Este aumento se explicó principalmente por las exportaciones mineras. Por su parte, las ventas externas de los bienes básicos agrícolas (café, banano y flores) disminuyeron 5,3% con respecto al mismo mes del año anterior. Este comportamiento se originó en la caída de las cantidades despachadas principalmente de café (20% anual) y de flores (15,5% anual). El resto de las exportaciones sin productos básicos registraron un crecimiento anual de 8,1%, impulsadas principalmente por alimentos, bebidas y productos químicos. En el mercado laboral, la tasa de desempleo continúa con una tendencia decreciente. La cifra mensual a octubre fue de 9,0% para el total nacional y 10,2% para las trece ciudades principales. Para el caso del total nacional, es la cifra más baja en la última década. Nuevamente el mayor crecimiento de la demanda laboral (medida por la tasa de ocupación) en comparación al crecimiento de la oferta (medida por la tasa global de participación), explicó la caída en la tasa de desempleo. Los comportamientos reseñados están en línea con lo contemplado en el Informe sobre Inflación de septiembre dónde se tiene un rango de crecimiento del producto para todo el año entre 5% y 6%. c. Variables Financieras. El crédito total en moneda nacional (MN) y extranjera (ME) mantiene altas tasas de crecimiento. Todas las modalidades de crédito, tanto a los hogares como a las empresas, continúan registrando crecimientos muy superiores al de la actividad económica. 4    En noviembre las tasas de los interés reales (descontando el IPC sin alimentos) para créditos de consumo, hipotecario y comercial se situaron en 14,9%, 9,9% y 8,3% respectivamente, cifras inferiores a los promedios observados desde el año 1998. d. Contexto Externo. Las medidas para superar la crisis de la deuda en Europa luego de la reunión de diciembre 7 en el Banco Central Europeo y los líderes de la Unión Europea, parecen haber sido consideradas insuficientes por los mercados. Así lo demuestra el reciente incremento de los intereses de los bonos italianos y españoles a 10 años y la caída del Euro a US$ 1,30, el nivel más bajo desde enero del presente año. Como consecuencia, los mercados financieros continúan con altos niveles de volatilidad. La nueva información disponible sugiere que la economía mundial se deteriora a un ritmo mayor al esperado. En la Zona Euro, para el último trimestre de 2011 y el primero de 2012, se proyecta un crecimiento muy bajo, con un riesgo elevado de que se ubique en terreno negativo. En particular, el marcado deterioro de las expectativas de los empresarios y los consumidores, al igual que el menor ritmo de expansión de las economías más grandes de la región (Alemania y Francia), hacen prever un desempeño mediocre durante 2012. Adicionalmente, las restricciones de liquidez de los bancos europeos, a pesar de la rebaja de la tasa de interés de referencia (de 1,25% a 1%) y de las nuevas facilidades de liquidez aprobadas por el Banco Central Europeo, amenazan con un estrangulamiento de crédito. A esto se agrega la rigidez del ajuste fiscal que impone la nueva regla, que limita el déficit estructural a 0.5% del PIB para los países miembros de la Unión Europea. Esto podría acentuar la desaceleración de la actividad económica en el corto plazo. En EEUU los mejores indicadores de actividad económica de las últimas semanas han mitigado los temores de una doble recesión. Sin embargo, los riesgos externos asociados a Europa o una fuerte desaceleración en China, podrían limitar su ritmo de crecimiento. En las economías emergentes los datos de los últimos meses muestran una desaceleración más fuerte que la estimada en el escenario central del Informe sobre Inflación de septiembre como consecuencia de factores internos y externos. En China y Brasil se han empezado a implementar políticas monetarias y fiscales menos restrictivas con el fin de incentivar la demanda interna y contrarrestar los efectos de un menor crecimiento externo. En China la caída en los precios de la vivienda ha comenzado a generar preocupaciones. Durante los últimos años la construcción ha sido el principal motor de crecimiento de esta economía y una crisis en dicho sector podría implicar una fuerte desaceleración. En términos de política monetaria, las economías avanzadas mantienen una posición laxa y algunas economías emergentes, como Brasil y Tailandia, han empezado a reducir sus tasas de intervención. Para los próximos meses los analistas esperan que más economías se unan a esta tendencia y ayuden a estimular la demanda interna en cada país. 5    Las cotizaciones internacionales de los principales bienes básicos han descendido moderadamente. En particular, el precio internacional del petróleo se encuentra en la parte superior del rango estimado en el pasado informe trimestral. De esta forma, el nivel de los términos de intercambio sigue alto y continúa impulsando el ingreso nacional. El mayor riesgo de los pronósticos centrales de crecimiento es un ajuste desordenado en Europa. De materializarse, la economía mundial crecería considerablemente menos de lo esperado, los precios internacionales de los bienes básicos podrían caer y la aversión global al riesgo exacerbase, lo que afectaría adversamente la economía colombiana. Existe gran incertidumbre sobre la magnitud de dicha contracción y sus efectos. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA La mayoría de la Junta expresó la conveniencia de mantener inalteradas las tasas de interés de intervención con base en el balance de la situación externa e interna, balance que de todas formas resulta altamente sensible a la nueva información disponible. La Junta consideró que en el frente externo debe tenerse en cuenta que: (i) Los mercados financieros internacionales continúan mostrando altos niveles de volatilidad, como consecuencia de los problemas de deuda soberana en Europa. Es probable que las economías de la zona‐Euro se contraigan en el último trimestre de 2011 y en la primera mitad de 2012, aun cuando existe gran incertidumbre sobre la magnitud de la contracción y sobre sus efectos; (ii) De materializarse un ajuste desordenado en Europa la economía mundial crecería considerablemente menos de lo esperado, los precios internacionales de los bienes básicos podrían caer y la aversión global al riesgo podría exacerbase, todo lo cual afectaría adversamente la economía colombiana; (iii) La economía de los Estados Unidos se expande a una tasa moderada y se espera que continúe así por un período prolongado; (iv) Varias economías emergentes han mostrado signos recientes de desaceleración. En el contexto interno debe tenerse en cuenta que: (i) Los precios internacionales de los productos básicos permanecen en niveles altos y estimulan el ingreso nacional de los países productores; (ii) La información más reciente sobre el comportamiento de la actividad económica sugiere que el crecimiento del PIB en el tercer trimestre superará el 6%; (iii) El crédito bancario crece a una tasa alta y pareciera estar acelerándose. El comportamiento del crédito de consumo sugiere que los hogares han elevado considerablemente su grado de apalancamiento; (iv) Los índices de precios de la vivienda nueva y usada siguen en sus máximos registros; (v) Las medidas de inflación básica continúan subiendo y la mayoría supera el 3%; (vi) La información disponible muestra que con ocasión de los incrementos en la tasa de interés de intervención y del comportamiento de otras variables internacionales y locales, las expectativas de inflación obtenidas a partir de los TES dejaron de subir, e incluso presentaron una ligera caída; (vii) Señales de que, si bien la economía colombiana 6    sigue dinámica, este impulso se puede estarse moderando. Las expectativas y los pronósticos de inflación se hallan crecientemente dominados por las expectativas y pronósticos sobre el clima, ante el cual la política monetaria carece de herramientas apropiadas para responder y; (viii) El probable impacto de decisiones salariales y normas laborales sobre las expectativas de inflación y el funcionamiento del mercado laboral. Un miembro de la Junta opinó que debía incrementarse la tasas de interés de intervención en 25 p.b. teniendo en cuenta que: (i) El contexto interno de la economía colombiana señalados indican la necesidad de un incremento de la tasa de intervención. Como se mencionó antes, el crecimiento excesivo del crédito y la persistencia de tasas de interés bajas podrían ser fuente de desequilibrios financieros, mientras las expansiones excesivas en la demanda o los aumentos en los costos laborales pueden elevar las expectativas de inflación y reducir la credibilidad de la política monetaria en un contexto en el que los indicadores de inflación básica siguen creciendo y; (ii) Si bien los mercados financieros internacionales continúan con altos niveles de volatilidad como consecuencia de las dificultades relacionadas con los problemas de deuda soberana en Europa, el nivel de incertidumbre no ha cambiado en relación con el mes anterior y es poco probable un ajuste financiero desordenado. Además la economía de los Estados Unidos se expande a una tasa positiva. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva acordó, por mayoría, mantener inalterada la tasa de interés de intervención. La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo de la situación internacional, del comportamiento y proyecciones de la inflación, el crecimiento, el comportamiento de los mercados de activos y reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible.
2012-01-01
1 Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 30 de Enero de 2011 El 30 de Enero de 2012 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, Juan Pablo Zárate y César Vallejo, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación: La inflación anual al consumidor en diciembre fue 3,73% (mensual de 0,42%), 23 puntos básicos (pb) menos que en noviembre. Este valor superó el 3%, punto central del rango meta de largo plazo definido por la Junta Directiva del Banco (3% +/-1 punto porcentual). Adicionalmente, el dato estuvo por encima de lo previsto y aumentó 56 pb respecto de la cifra observada un año atrás. La caída de la inflación durante el mes se explica principalmente por la desaceleración de la variación de los precios de los alimentos. El IPC sin alimentos, por su parte, se situó en 3,13%, 10 pb más que en noviembre y 31 pb superior al de diciembre del año anterior. Esto fue el resultado de un aumento de los precios de las canastas de transables y no transables una vez se excluyen alimentos y regulados. Para el IPC de alimentos, la variación anual pasó de 6,4% en noviembre a 5,3% en diciembre. Como el mes anterior, la variación de los precios de los 2 productos perecederos fueron los que más contribuyeron a este descenso, con papa y frutas mostrando caídas absolutas en precios. Este comportamiento sugiere que las condiciones de oferta de alimentos no procesados han seguido normalizándose luego de los choques recibidos por las condiciones climáticas. La depreciación del peso en meses anteriores y los precios internacionales tampoco habrían generado presiones alcistas importantes toda vez que el IPC de alimentos procesados disminuyó levemente. La variación de los precios de comidas fuera del hogar se mantuvo estable pero por encima del techo del rango meta, lo que puede obedecer al dinamismo de la demanda interna. Dentro del IPC sin alimentos sobresale el aumento en la variación anual del IPC de transables (sin regulados) a 0,80% en diciembre. Desde septiembre de 2011 este indicador ha venido aumentando hecho que puede ser asociado con la depreciación del tipo de cambio entre septiembre y diciembre y probablemente también con el auge de la demanda interna. En diciembre también se observaron aumentos en la variación anual de no transables sin alimentos ni regulados. Este indicador ha aumentado en los últimos seis meses lo que podría ser resultado del dinamismo de la demanda interna y la ampliación de la brecha del producto. Los aumentos se han concentrado sobre todo en rubros de servicios de salud y en arriendos. La variación anual del IPC de regulados se mantuvo en 5,8%. No obstante, el registro sigue siendo alto impulsado por el precio de la gasolina y del transporte público. La inflación básica continuó aumentando en diciembre, por cuarto mes consecutivo. El promedio de los tres indicadores monitoreados por el Banco de la República se situó en 3,41%, 7 pb más que el mes anterior. Las expectativas de inflación aumentaron a comienzos de enero de 2012, una vez conocido el dato de diciembre. Las obtenidas de la encuesta mensual a 12 meses están en 3,56% frente a 3,44% del mes pasado. En la misma encuesta se espera una inflación de 3,55% para diciembre de 2012. Las mediciones derivadas de los TES también se incrementaron a diversos los plazos. En materia de salarios, a finales de año no se habrían generado presiones importantes sobre los precios al consumidor toda vez que los ajustes reportados se sitúan alrededor del 4%, tanto para la industria, como para el comercio y para la construcción. Todo lo anterior sugiere que los costos de producción no habrían sido fuente de presiones importantes sobre los precios 3 al consumidor en el cuarto trimestre de 2011. Esta situación, sin embargo puede que no se mantenga para 2012 debido a la estrechez del mercado laboral y a que el ajuste del salario mínimo de 5,8%, fue superior en 2,8 puntos porcentuales a la meta de inflación largo plazo de 3%. b. Crecimiento De acuerdo con el DANE en el tercer trimestre de 2011 el PIB colombiano creció 7,7% en términos anuales (1,7% trimestralmente). Esta tasa de expansión, junto con la registrada en el cuarto trimestre de 2006, representa la mayor desde 1979. A diferencia de los trimestres anteriores, en el tercer trimestre la mayor contribución al crecimiento por tipo de gasto provino de la inversión en capital fijo (FBKF), en donde el aporte de la inversión destinada a la industria fue importante. La FBKF aumentó 20% anual y desplazó al consumo de los hogares como principal motor de crecimiento. No obstante, el desempeño del consumo de los hogares también fue importante (7,3%). En el tercer trimestre se presentó una desaceleración en el crecimiento anual de las importaciones desde 24,9% en junio a 18,8%. Pese a este menor ritmo, el nivel real de las importaciones es históricamente alto. Las exportaciones repuntaron y volvieron a registrar una tasa de crecimiento de dos dígitos (10,5%). Por el lado de la oferta, los sectores que más crecieron fueron minería (18,4%) y construcción (18,1%). Los servicios financieros se expandieron 6,6% pero contribuyeron de manera importante a la dinámica del PIB dada su importancia en el total. En el tercer trimestre todos los sectores registraron crecimiento en términos anuales. Para el cuarto trimestre, la información más reciente sugiere que la economía colombiana continuó mostrando un buen dinamismo, creciendo incluso a una tasa superior a la registrada en el primer semestre del año. Por tipo de gasto el crecimiento continúa siendo impulsado por el consumo de los hogares, lo cual puede inferirse del comportamiento dinámico de las ventas del comercio (variación anual promedio de 3,7% a noviembre), y de las importaciones de bienes de consumo en dólares en los meses de octubre y noviembre (17% en promedio anual), así como también de los datos de cartera correspondientes a este rubro (en el cuarto trimestre el crecimiento anual del saldo de crédito de consumo fue de cerca de 22%). 4 Adicionalmente, es de prever que en el cuarto trimestre el consumo privado se haya visto favorecido por el continuo descenso registrado en la tasa de desempleo. Esta reducción se dio fundamentalmente por el aumento de la demanda laboral y por el dinámico incremento en el número de ocupados tanto a nivel nacional como en las 13 áreas metropolitanas. En el cuarto trimestre se observaron tasas de desempleo de un solo dígito, similares (e incluso menores) a las observadas en el año 2007. La conjunción de los anteriores factores, junto con una mejoría en las expectativas, ha propiciado un repunte en la confianza de los consumidores a finales de 2011. Según Fedesarrollo, la confianza de los consumidores en diciembre creció significativamente y se ubicó no sólo por encima del promedio de la serie sino también en el nivel más alto para todo el año. Con respecto a la inversión, a pesar de contar con menos información, el escenario también habría sido favorable. En primer lugar, las importaciones de bienes de capital en dólares crecieron 40,5% en promedio en octubre y noviembre y, en segundo lugar, en noviembre la producción de cemento mantuvo un comportamiento dinámico con crecimientos anuales superiores al 10%. Por el lado de la oferta, se destacó el comportamiento de la producción industrial. En noviembre el IPI creció a una tasa anual de 6,5%. La información disponible sobre pedidos y existencias sugiere que el sector podría crecer en diciembre a tasas similares a las observadas en los últimos tres meses (5,5%). Las ventas externas de Colombia continuaron creciendo. En noviembre, las exportaciones totales en dólares crecieron 42,5% anual, hecho explicado principalmente por un incremento de 52,1% en las ventas externas de los principales productos de origen minero (petróleo, carbón, oro, Ferroníquel). Así mismo, las exportaciones industriales aumentaron 31,5% y las de origen agrícola lo hicieron en 8,4%. Por destinos, las exportaciones industriales a Venezuela crecieron 69,1%, a Ecuador 28,1% y al resto de la ALADI 26,9%. En términos generales en 2011 se habría tenido un importante crecimiento del consumo de los hogares (duplicando su promedio de crecimiento de la última década) y una fuerte aceleración en el crecimiento de la inversión. En el sector externo las exportaciones en términos reales habrían registrado la tasa de expansión más alta en veinte años (cerca de 11%). Las importaciones también habrían presentado una tasa elevada de crecimiento (22,1%) y compensarían la dinámica de las ventas externas, con lo cual la 5 contribución de la demanda externa al crecimiento del PIB sería negativa. Los sectores de mejor desempeño en 2011 habrían sido la minería, el transporte y el comercio. La anterior información puede indicar que el crecimiento para el 2011 podría ser superior a 5,5%. Para 2012 la información disponible sugiere un intervalo de crecimiento del producto entre 4,0% y 6,0%. c. Variables financieras El crédito total en moneda nacional (MN) y extranjera (ME) mantiene altas tasas de crecimiento, con una leve moderación en diciembre. Todas las modalidades de crédito, tanto a los hogares como a las empresas, continúan registrando crecimientos muy superiores al de la actividad económica. Esto se ha dado en un contexto de tasas reales de interés históricamente bajas. A diciembre, el crecimiento del crédito total (MN y ME) registró una tasa anual de 21,1%, inferior en 22 pb a la observada en noviembre, con moderación en todas sus modalidades. Las tasas de crecimiento fueron: 25,0% para consumo, 19,5% para comercial y 17,2% para hipotecaria. En diciembre las tasas de interés reales (descontando el IPC sin alimentos) para créditos de consumo, hipotecario y comercial ordinario se situaron en 15,4%, 9,6% y 8,2% respectivamente, cifras inferiores a los promedios observados desde el año 1998 (exceptuando la de crédito hipotecario cuyo promedio es calculado desde mayo 2002). d. Contexto externo Para el último trimestre de 2011 las cifras de actividad económica mundial muestran que la economía mundial se ha debilitado como resultado de los síntomas de recesión en la Zona Euro, que obligaron a una revisión a la baja del crecimiento mundial para todo 2012. En la Zona Euro, los problemas de la deuda pública y de fondeo de los bancos privados han afectado la actividad económica y han deteriorado fuertemente la confianza de empresarios y consumidores en la región. A la amenaza de contagio de las crisis de deuda soberana de Grecia e Irlanda a países como España e Italia, se suma el riesgo todavía no disipado de que Grecia no pague su deuda. De no lograrse un acuerdo en las negociaciones entre el sector financiero, las autoridades europeas y Grecia, la probabilidad de una crisis financiera es elevada dada la alta exposición de algunos bancos 6 europeos a la deuda de ese país. Pese a las medidas tomadas por el Banco Central Europeo para evitar las restricciones de crédito, no se ven signos de revitalización del crédito por parte de la banca privada. Las autoridades europeas han seguido avanzado en temas como la reducción del gasto público, la integración fiscal y el fortalecimiento del sistema financiero para enfrentar la crisis. De todos modos, las medidas parecen ser insuficientes para solucionar los desbalances de la región en términos de crecimiento económico y competitividad. Todo esto se ha visto reflejado en un comportamiento volátil de los mercados financieros y ha incrementado la probabilidad de una recesión económica en la Zona Euro que se extendería al primer semestre de 2012. En Estados Unidos el contagio de la situación externa parece ser limitado y la economía ha seguido mostrando una dinámica positiva, apoyada en una recuperación del consumo y de la actividad manufacturera. Las últimas cifras de empleo fueron mejores que las estimadas por el promedio del mercado y la industria continuó mostrando signos de recuperación. Con la inflación en niveles bajos, las principales preocupaciones de la FED continúan siendo los mercados de vivienda y de trabajo. En su reunión del miércoles 25 de enero la FED anunció que mantendría su tasa de interés de intervención en niveles cercanos a cero hasta 2014. Según los analistas, este anuncio busca mantener las tasas de largo plazo en niveles bajos, con el fin de reducir el costo de la deuda hipotecaria. Pese a los buenos datos recientes, se prevé que en los próximos trimestres el crecimiento de Estados Unidos continúe siendo moderado como consecuencia de las dificultades estructurales que aún perduran. En Japón la cadena de suministros parece haberse recuperado en un alto porcentaje después del desastre natural de marzo de 2011. Sin embargo, la economía ha empezado a mostrar síntomas de debilitamiento, especialmente en sus exportaciones como consecuencia de la reducción de la demanda global. Las principales economías emergentes han seguido desacelerándose, en línea con lo previsto en el informe anterior. En China las cifras recientes sobre crecimiento económico y actividad industrial sugieren una disminución leve del crecimiento y el debilitamiento del mercado de vivienda representa un riesgo adicional a la caída de la demanda global. Los recientes anuncios de las autoridades de dicho país dan a entender que en los próximos meses vendrán mayores estímulos fiscales y monetarios. En las economías de Latinoamérica la tendencia es hacia la moderación en el crecimiento. En el caso de Brasil por 7 ejemplo, desde la segunda mitad del año se han empezado a aplicar medidas de estímulo fiscal y monetario, con el fin de atenuar los choques externos. El menor crecimiento económico global y las bajas presiones inflacionarias darían una mayor holgura a la política monetaria alrededor del mundo. Por ello, en las economías avanzadas no se esperan aumentos en las tasas de interés; por el contrario, la política monetaria seguirá siendo expansiva y no se descartan rondas adicionales de inyecciones de liquidez en Europa. Por su parte, en la mayoría de economías emergentes se espera estabilidad o disminución en las tasas de interés. Los precios internacionales de los bienes básicos han disminuido desde los máximos alcanzados en el primer semestre de 2011, pero aún se encuentran en niveles históricamente altos. Para 2012 se espera que las cotizaciones internacionales de los principales bienes básicos exportados por Colombia se mantengan en niveles relativamente altos pese al menor crecimiento esperado para la demanda mundial. En el caso del petróleo las proyecciones aumentaron frente a lo que se tenía previsto hace tres meses por las diversas tensiones geopolíticas. De esta forma, el nivel de los términos de intercambio se mantendría alto y continuaría impulsando el ingreso nacional. Los últimos datos de la balanza cambiaria para Colombia muestran que la inversión extranjera directa sigue dinámica, especialmente la dirigida a la minería. Si la situación internacional no se deteriora aún más, se prevé que este comportamiento continúe durante 2012. Hasta el momento el incremento en las primas de riesgo y la reducción en la calificación de algunos países europeos no han tenido efectos significativos sobre las primas de riesgo del país. De hecho, en lo corrido del presente año la tasa de cambio se apreció después de haber registrado una tendencia alcista a finales de 2011. Pese al deterioro del panorama externo, los buenos resultados del crecimiento interno, de las ventas externas, de la inversión extranjera y de la confianza de los consumidores e inversionistas muestran que el contagio de la situación internacional a la economía colombiana no se ha producido. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA La Junta Directiva expresó por unanimidad la conveniencia de incrementar las tasas de interés de intervención. 8 La Junta consideró que en el frente externo debe tenerse en cuenta que: (i) En Europa la crisis de deuda pública de algunos países de la región y las dudas sobre la solvencia de ciertos bancos continúan afectando la confianza de los hogares y de los empresarios. La recesión en Europa probablemente será mayor a la anticipada meses atrás. (ii) Se espera que la economía de los Estados Unidos en 2012 crezca a una tasa positiva pero algo inferior a la de su potencial. (iii) Los precios internacionales de los productos básicos permanecen en niveles altos y estimulan el ingreso nacional de los países productores. (iv) El mayor riesgo de los pronósticos centrales de crecimiento sigue siendo un ajuste desordenado en Europa. De materializarse dicho riesgo, la economía mundial crecería considerablemente menos de lo esperado, los precios internacionales de los bienes básicos podrían caer y la aversión global al riesgo exacerbase, todo lo cual afectaría adversamente la economía colombiana. En el contexto interno debe tenerse en cuenta: (i) En Colombia, al tercer trimestre de 2011 el PIB creció 7,7% anual, cifra históricamente alta y superior a la esperada. El crecimiento anual de la demanda interna (9,4%) se explicó por el fuerte aumento de la inversión y del consumo de los hogares. (ii) La información más reciente sugiere que en el cuarto trimestre la economía colombiana continuó mostrando un fuerte dinamismo. En el balance externo tanto las exportaciones como las importaciones continuaron creciendo a tasas altas en noviembre. Con todo ello, el equipo técnico estima un crecimiento económico para 2011 superior a 5,5%. Para 2012 el intervalo de pronóstico siguió entre 4% y 6%. (iii) El crédito bancario continuó incrementando a tasas altas. El comportamiento del crédito de consumo sugiere que los hogares están elevando significativamente su grado de endeudamiento. Los índices de precios de la vivienda nueva y usada siguen en niveles históricamente altos. (iv) El promedio de las medidas de inflación básica volvió a subir y la mayoría de ellas supera el 3%. Las expectativas de inflación aumentaron. (v) La confianza del consumidor sigue en niveles altos. (vi) Los pronósticos sobre empleo prevén presiones crecientes en el mercado laboral para el 2012. (vii) El impacto de la tasa de cambio sobre las proyecciones de la inflación y el crecimiento. (viii) Los niveles de las distintas tasas de interés, salvo las de tarjeta de crédito, se encuentran en valores inferiores a los promedios de los últimos 15 años. (ix) El principal riesgo sobre la inflación proviene de expansiones excesivas en la demanda o aumentos en los costos superiores a los previstos, con efectos fuertes y perdurables sobre las expectativas y la credibilidad de la política monetaria. 9 En un horizonte de tiempo más largo, un crecimiento excesivo del crédito y la persistencia de tasas de interés real bajas podrían ser fuente de desequilibrios financieros con consecuencias negativas sobre la sostenibilidad del crecimiento económico. Un miembro de la Junta consideró apropiado complementar el incremento de la tasa con alguna medida macro-prudencial que tenga como propósito acelerar la transmisión de la tasa de interés sobre la dinámica del crédito de consumo. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA De acuerdo con la evaluación del balance actual de estos riesgos, los cuales dan más peso a las condiciones internas de la economía, la Junta Directiva decidió incrementar la tasa de interés de intervención del Banco de la República en 25 puntos básicos. La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo de la situación internacional, del comportamiento y proyecciones de la inflación, el crecimiento, el comportamiento de los mercados de activos y reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible. Bogotá DC, febrero 10 de 2012
2012-02-01
1 Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 24 de Febrero de 2012 El 24 de febrero de 2012 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, Juan Pablo Zárate y César Vallejo, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor en enero fue 3,54% (mensual de 0,73%), 19 puntos básicos (pb) menos que en diciembre. La disminución de la inflación durante el mes fue el resultado de menores presiones en las canastas de transables sin alimentos ni regulados, de regulados y de alimentos. La canasta de no transables sin alimentos ni regulados (3,6%) no presentó cambios frente a lo observado en diciembre de 2011. En el caso particular de los precios de la canasta de transables sin alimentos ni regulados, se observó una disminución de 8 pb frente al resultado de diciembre (0,8%), interrumpiendo la tendencia al alza que se presentaba desde septiembre de 2011. Este hecho puede sugerir que la apreciación del peso desde enero de 2012 estaría teniendo algún efecto en esta variable. 2 Por su parte, la variación anual en los precios de los regulados pasó de 5,8% en diciembre a 5,2% en enero, una caída mayor que la esperada. Esto fue posible gracias a que a comienzos de este año no se presentaron reajustes en las tarifas de Transmilenio en Bogotá, a diferencia de lo que aconteció el año pasado. Por el lado de servicios públicos, sin embargo, sí se presentaron ajustes importantes en las tarifas de energía eléctrica y gas domiciliario que se suman a las observadas en meses anteriores. En el caso del gas, desde hace un tiempo se están presentando insuficiencias en la capacidad de transporte que han dificultado la atención de la demanda en la Costa Caribe principalmente. Respecto a los precios de los alimentos, la caída de enero en la variación anual fue importante de 5,3% en diciembre a 4,9% en enero. La normalización de la producción de varios productos perecederos, especialmente de la papa, permitió la caída en precios y la reducción de la variación anual de este subgrupo. También se presentaron pocos ajustes en los precios de productos como aceites y esto puede obedecer a la apreciación del peso más que a movimientos en precios internacionales, los cuales no han descendido. Gracias a ello, la variación anual del IPC de alimentos procesados también disminuyó en este mes. Los anteriores cambios más que compensaron una nueva subida en comidas fuera del hogar (de 5,6% en diciembre a 5,9% en enero). La variación anual de los precios de la canasta de no transables sin alimentos ni regulados se mantuvo estable en 3,6%. Sin embargo, en el caso de arriendos, su componente de más peso, en enero nuevamente se presentó un aumento registrando una cifra de 3,5% en enero frente a 3,4% en diciembre. Este rubro presenta una tendencia ascendente ininterrumpida que acumula nueve meses. Todos los indicadores de inflación básica se redujeron levemente presentando una pausa en la tendencia ascendente que tenían desde hace cinco meses. El promedio de los tres indicadores monitoreados por el Banco de la República se situó en 3,3%, una disminución de 15 pb respecto al mes anterior. Pese a la caída de la inflación total al consumidor, las expectativas no se modificaron sustancialmente. Las obtenidas de la encuesta mensual a diciembre y a doce meses se mantuvieron en 3,6% en ambos casos. Aquellas derivadas de los TES a diversos plazos permanecieron cerca de 4%. 3 Aunque hasta diciembre los ajustes salariales tendieron a ser compatibles con la meta de inflación, el incremento del salario mínimo en 5,8% para 2012 aumenta los riesgos de que surjan presiones de costos salariales. A esto se suma el hecho de que se espera un mercado laboral menos holgado en 2012. El aumento en el precio de las comidas fuera del hogar y de los servicios de salud para enero de este año por encima del registro del año pasado, pueden ser síntomas de ambos fenómenos. Por el contrario, los costos no salariales mostraron en enero un retroceso si se tiene en cuenta la importante disminución de la variación anual del IPP a 3,7% frente a 5,5% en diciembre. Este indicador completa tres meses de caídas, que en enero en particular, obedecieron a la apreciación del peso y a las mejores condiciones de la oferta agrícola. b. Crecimiento La más reciente información indica que la demanda interna continuó expandiéndose a un buen ritmo al finalizar el 2011 y tuvo un comienzo de año dinámico. El desempeño favorable del consumo de los hogares en el cuarto trimestre del año pasado fue confirmado por la evolución de las importaciones y del empleo en diciembre. En este mes las importaciones de bienes de consumo en dólares crecieron 9,6% en términos anuales, una tasa alta aunque menor que la de meses anteriores. Por su parte, el mercado laboral continuó mostrando avances en materia de creación de puestos de trabajo y reducción del desempleo, con lo cual el efecto sobre el consumo debe ser positivo. En diciembre se observaron incrementos en el número de ocupados a nivel nacional y en las 13 áreas metropolitanas. Si bien en este mes se registró un ligero aumento en la tasa de desempleo de las 13 áreas metropolitanas, con la poca información disponible es aún prematuro sugerir un quiebre en la tendencia decreciente observada durante 2011. La información a diciembre de las importaciones también permite esperar buenos resultados para la inversión. En el último mes de 2011 las importaciones de bienes de capital en dólares se expandieron en 36,6% con respecto al mismo mes del año anterior y muy por encima de su promedio desde 1994 (12,7%). 4 Por el lado de la oferta, se destacó el dato de la producción industrial divulgado por la ANDI la cual creció 5,9% en 2011. Se espera igualmente que otros sectores como el comercio, el transporte y la construcción hayan continuado con un buen dinamismo a finales de 2011. Por ejemplo, la encuesta regional del Banco de la República (que se aplica a empresarios de varios sectores) registró para diciembre una percepción muy favorable sobre los crecimientos de las ventas. Así mismo, la producción de cemento en diciembre siguió creciendo, sugiriendo un buen comportamiento de la construcción. Las ventas externas en diciembre continuaron creciendo. El valor de las exportaciones en dólares volvió a registrar un elevado incremento (43% anual), explicado principalmente por las exportaciones de origen minero (petróleo, carbón, ferroníquel y oro) que aumentaron 55,3% anual. Las ventas externas de los principales bienes de procedencia agrícola (café, banano y flores) se redujeron 8,3% anual, debido a la mala cosecha de café. El resto de exportaciones se aceleró en diciembre y aumentó 43% anual. Para el primer trimestre de 2012, la poca información disponible apunta a un comportamiento de la producción similar al que se habría observado a finales del año anterior. De acuerdo con Fedesarrollo, en enero de 2012 la confianza de los hogares creció por tercer mes consecutivo ubicándose cerca de los máximos históricos de la serie (desde 2001). Por su parte, las ventas de automóviles crecieron a una tasa anual de 13% en enero lo que representó una aceleración por segundo mes consecutivo y un nuevo récord de ventas para el mes. De igual manera, la encuesta de Fenalco a enero muestra que la percepción sobre las ventas de los comerciantes continuó siendo alta, en tanto que las expectativas a seis meses son aún mejores. Adicionalmente, los hogares en enero continuaron contando con una tasa de interés real de consumo inferior al promedio desde 1998, por lo que se espera que el consumo de los hogares continúe con una buena tendencia. Con respecto a la inversión, es posible esperar un buen crecimiento, aunque un poco menor al esperado para la segunda mitad de 2011. Lo anterior se infiere de la evolución de la cartera comercial, que en el primer mes de 2012 aumentó a una tasa anual de 17,2% en moneda nacional y de 36,5% en moneda extranjera. Así mismo, los empresarios siguieron contando con tasas de interés reales menores a sus promedios desde 1998 a pesar del aumento del último mes (40 pb). 5 Dado todo lo anterior, se mantiene el pronóstico de crecimiento para el cuarto trimestre de 2011 en un rango entre 5% y 6,2%. Con esas estimaciones sigue siendo factible que el crecimiento en 2011 se ubique en el intervalo de pronóstico de 5,6% a 6%. Para el primer trimestre de 2012 la escasa información apunta a un crecimiento similar o levemente inferior al del cuarto trimestre de 2011. c. Variables Financieras El crédito total en moneda nacional (MN) y extranjera (ME) se mantiene en altas tasas de crecimiento, con una leve moderación a partir de julio de 2011. Todas las modalidades de crédito, tanto a los hogares como a las empresas, continúan mostrando crecimientos muy superiores al de la actividad económica. Esto se ha dado en un contexto de tasas reales de interés históricamente bajas. A enero, el crédito total (MN y ME) registró un incremento anual de 20,9%, inferior en 27 pb con respecto a diciembre y en 247 pb frente a julio. Dinámica establecida por el comportamiento de la cartera comercial, cuyo crecimiento se sitúo en 19,1%, tasa menor en 40 pb a la del mes anterior, con lo cual acumula una reducción de 425 pb en los últimos seis meses. Por su parte las carteras de consumo e hipotecaria observaron tasas de crecimiento de 24,8% y 17,3%, respectivamente, niveles cercanos a sus promedios desde julio de 2011 (25,1% y 17,2%). En enero las tasas de interés real (descontando el IPC sin alimentos) para créditos de consumo, hipotecario y comercial ordinario se situaron en 16,9%, 10,2% y 8,8% respectivamente, cifras inferiores a los promedios observados desde el año 1998 (exceptuando la de crédito hipotecario cuyo promedio es calculado desde mayo de 2002). d. Contexto Externo Los nuevos datos de actividad económica mundial muestran una desaceleración de la demanda externa en línea con lo esperado como resultado de dos factores importantes: de una parte, los elevados niveles de deuda pública y, de otra el desapalancamiento bancario que está en proceso, lo cual limita el acceso a crédito en las economías avanzadas, afectando la dinámica 6 del consumo y la inversión del sector privado. En este contexto, los pronósticos para 2012 prevén un crecimiento económico negativo en Europa, mientras que en Estados Unidos se podría registrar una tasa algo inferior a la de su potencial. En los países emergentes también se presentaría un menor ritmo de actividad económica como resultado del debilitamiento de la demanda mundial. Por lo anterior, es probable que en el presente año el crecimiento promedio de nuestros socios comerciales sea menor al observado en 2011. En el caso particular de Estados Unidos, el crecimiento del producto se aceleró en el último trimestre del año, al pasar de 1,8 % (t/a) en septiembre a 2,8% (t/a) en diciembre. El mercado laboral sigue mejorando y la actividad industrial continúa expandiéndose. No obstante, la desaceleración en las exportaciones y el debilitamiento en el gasto de los hogares indicarían que la economía aún no encuentra una senda de crecimiento sostenible. Para 2012 se espera que el crecimiento económico de este país sea menor que el de su promedio histórico. Por su parte, en la Zona Euro el debilitamiento de la actividad real fue generalizado y, con excepción de Francia, sus economías más grandes se contrajeron en el último trimestre de 2011. En este período el producto se contrajo 1,3% (t/a), comportamiento que incluso podría extenderse hasta el primer semestre del 2012. Sin embargo, en lo corrido del presente año se han observado algunas señales que sugieren que el deterioro no continuará acentuándose y que estará en línea con lo previsto. En primer lugar, el incremento en los apoyos de liquidez por parte del Banco Central Europeo contribuyó a reducir las tasas de interés de la deuda pública de España e Italia. La liquidez interbancaria y la percepción de riesgo también mejoraron. En el caso de Alemania, los indicadores de confianza de empresarios y de consumidores mostraron alguna recuperación en enero. Con respecto a Grecia, el nuevo paquete de rescate fue aprobado por las autoridades económicas europeas. Pese a todo lo anterior, la incertidumbre sobre la profundidad y la duración de la recesión en Europa sigue siendo alta. El crédito continúa restringido, las tasas de desempleo en algunos países de la región, ya de por sí históricamente altas, han continuado aumentando. Además, persiste el riesgo de que malos resultados de la actividad económica vuelvan a incrementar los indicadores de riesgo y pongan en duda la estabilidad del Euro. En Japón, en el cuarto trimestre de 2011 el PIB se redujo como consecuencia de la caída de las exportaciones y las mayores importaciones de 7 energía. La desaceleración en la demanda mundial y la interrupción en la cadena de suministros tailandesa, generada por las inundaciones de octubre, parecerían estar afectando la recuperación de esta economía. Por otro lado, la actividad real en las economías de Asia emergente, salvo en el caso de Indonesia, continuó desacelerándose a un ritmo moderado, en respuesta al menor dinamismo de la demanda mundial y a los ajustes de la política monetaria de 2010 y comienzos de 2011. En algunos países de América Latina, como Brasil, México, Perú y Venezuela, los indicadores de actividad real mejoraron en los últimos meses de 2011. El menor dinamismo de la demanda mundial ha aliviado las presiones inflacionarias tanto en los países desarrollados como en los emergentes. No obstante, recientes choques de oferta, como las sequías en América del Sur y México, al igual que el incremento en las tensiones geopolíticas, han aumentado los precios de algunos alimentos y del petróleo. En conclusión, los nuevos datos muestran una demanda global que se desacelera en línea con lo estimado, y una inflación mundial que ha cedido. Esta nueva información contribuirá a mantener las tasas de interés externas en niveles bajos por un periodo largo de tiempo. Hasta el momento, el menor ritmo de actividad económica de los socios comerciales de Colombia no se ha visto reflejado en una disminución del valor de las exportaciones. Por el contrario, las ventas externas industriales, excluyendo los bienes básicos de origen minero y agrícola, se aceleraron. Adicionalmente, el incremento en el precio del petróleo podría llevar a que los términos de intercambio se mantengan en niveles altos, superiores al promedio estimado para el presente año. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA El grupo mayoritario de miembros consideró apropiado incrementar la tasa de interés de política teniendo en cuenta los siguientes factores: (i) Información reciente indica que en el cuarto trimestre de 2011 la economía colombiana continuó mostrando un fuerte dinamismo y que este comportamiento se ha mantenido en lo corrido del año, tal como lo reflejan las exportaciones, las importaciones de bienes de capital, las ventas al por menor, entre otros. (ii) La brecha del producto probablemente se encuentra aún en 8 terreno positivo. (iii) El índice de confianza de la industria mantiene niveles elevados, mientras que la confianza de los consumidores continúa una tendencia ascendente de varios meses y muestra uno de los niveles históricos más altos. (iv) Algo similar ocurre con los términos de intercambio (en buena medida alimentados por el precio del petróleo), los cuales alcanzan también registros sin precedentes. (v) Si bien la inflación ha mostrado recientemente un comportamiento más en correspondencia con la meta de largo plazo, y las mediciones de inflación básica descendieron en enero por primera vez en varios meses, ni las proyecciones ni las expectativas de inflación muestran aún una clara convergencia al punto medio del rango meta en el horizonte de política. (vi) La incertidumbre sobre la evolución futura de la tasa de cambio dificulta estimar su impacto sobre los registros de inflación en el futuro. (vii) Si bien la transmisión de anteriores ajustes de la tasa de interés de política a las de mercado ha sido adecuada, la leve desaceleración reciente de la cartera de crédito no necesariamente elimina los riesgos de un peligroso episodio de auge, en especial en el crédito de consumo. (viii) Los puntos anteriores hacen necesario asegurar que las tasas de interés de mercado continúen su movimiento hacia unos niveles de largo plazo que permitan suavizar tanto la dinámica del crédito como la del PIB y evitar así riesgos de inestabilidad financiera con altos costos en términos de producción y empleo. (ix) Si bien se mantienen los riesgos de un eventual ajuste desordenado de la situación de la zona euro, medidas adoptadas recientemente en dicha región permiten dar un mayor peso en la decisión de política a las condiciones locales de la economía colombiana, marcadas por los factores que han mostrado hasta el momento poco contagio de la situación de las economías avanzadas. Otros miembros no consideraron apropiado incrementar en esta oportunidad la tasa de interés de intervención por las siguientes razones: (i) El cambio de postura de la Junta para reducir el estimulo monetario iniciado a partir de febrero de 2011 ha tenido los efectos esperados; dichos efectos se extenderán, debido a su rezago natural, a lo largo del resto de este año y del próximo, por lo que ajustes adicionales de la tasa de interés de intervención podrían resultar extemporáneos. (ii) En diciembre de 2011 la inflación anual de Colombia (3,73%), aunque se situó en la parte superior del rango meta, fue la más baja entre las principales economías de la región. En enero de 2012 la inflación terminó en 3,54%, totalizando tres meses consecutivos de caída. Todos los indicadores de inflación básica cayeron por primera vez en cinco meses. La inflación sin alimentos cayó 13 pb hasta situarse en 3%. La inflación de no transables sin alimentos ni regulados se 9 mantuvo sin variación. Hay evidencia de menores presiones en los costos no salariales, dado que en enero continuaron su caída iniciada hace tres meses. (iii) Se estima que la participación de la inversión en el PIB, en 2011, pudo haber alcanzado el record histórico del 30%, lo cual permite inferir que el PIB potencial igualmente se ha expandido por encima de su tendencia histórica y es coherente con la actual dinámica de la economía. (iv) La demanda global continúa desacelerándose. Europa entró en recesión; la lenta recuperación de Estados Unidos mantiene a su economía por debajo de su PIB potencial. La inflación mundial sigue descendiendo. Los dos factores anteriores han llevado a la adopción generalizada de políticas monetarias laxas, caracterizadas por tasas de interés históricamente muy bajas y durante períodos prologados. (v) Factores geopolíticos han comenzado a provocar notorias alzas en los precios del petróleo, que podrían llegar a afectar en sentido negativo el comportamiento de la economía norteamericana, y provocar una secuela recesiva adicional sobre el resto del mundo. Finalmente, un codirector propuso la aplicación de medidas macro prudenciales para acelerar la transmisión de la política monetaria a la demanda. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA De acuerdo con la evaluación presente del balance de estos riesgos, la Junta Directiva decidió incrementar la tasa de interés de intervención del Banco de la República en 25 puntos básicos. Con los recientes incrementos en la tasa de interés de intervención se espera que las tasas de mercado se aproximen más rápidamente a sus niveles históricos promedio y que las expectativas de inflación converjan hacia el punto medio del rango meta. La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo de la situación internacional, del comportamiento y proyecciones de la inflación, el crecimiento, el comportamiento de los mercados de activos y reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible. Bogotá DC, marzo 09 de 2012
2012-03-01
- Minutas de la reunión de la JDBR del 23 de marzo de 2012 El 23 de Marzo de 2012 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, Juan Pablo Zárate y César Vallejo, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación En febrero la inflación anual al consumidor fue 3,55%, similar al registro del mes anterior y por debajo del dato de diciembre. En términos de variaciones mensuales, el resultado fue 0,61%, en línea con lo previsto por el equipo técnico inferior a las proyecciones del mercado en promedio (0,78%). La caída de la inflación anual durante este mes fue explicada principalmente por una nueva reducción de la variación anual del IPC de alimentos, que pasó de 4,9% en enero a 4,7% en febrero. Por su parte, dentro del IPC sin alimentos (3,1%) se observó un aumento de 10 puntos básicos (pb) frente al registro de enero. Dentro de la canasta de alimentos se dieron descensos en las variaciones anuales en todas las categorías influenciados por condiciones favorables de oferta y por la apreciación del tipo de cambio. En comidas fuera del hogar, pese a las disminuciones, los ajustes anuales (del 5,7%) siguen siendo altos y superiores a los del año pasado. En el IPC sin alimentos, las presiones alcistas continuaron concentradas en los precios de los servicios regulados. La variación anual de los precios de esta canasta aumentó 31 pb frente al anterior registro. Por una parte, el precio de la gasolina se ajustó a una tasa anual en febrero de 5,7% que podría estar asociada en parte a los altos precios internacionales de los combustibles. De igual manera, continuaron las alzas en las tarifas de energía que se ajustaron a una tasa anual de 8,9% en este último mes. En el IPC de gas domiciliario, aunque en febrero hubo una reducción frente a enero, los aumentos acumulados de los meses anteriores todavía mantienen la variación anual por encima del 17%. El IPC de transables y no transables sin alimentos ni regulados no se presentaron cambios de importancia en el último mes. En el primer caso la variación anual se mantuvo en 0,7%, un poco por debajo de la de diciembre. El freno en la tendencia ascendente de este indicador en los últimos dos meses puede ser atribuido en parte a la apreciación del tipo de cambio. Respecto a los no transables, la variación anual fue 3,70% frente a 3,64% el mes anterior. En este caso, se mantiene una tendencia ascendente muy gradual que está de acuerdo con el dinamismo de la demanda interna. Los arriendos han seguido acelerándose y al último mes su variación anual es de 3,5%. En servicios de educación el reajuste en las matrículas de febrero superó el 4,5%, por encima de lo esperado. Estos dos grupos fueron parcialmente compensados por caídas en los servicios de diversión cultura y esparcimiento y por leves alzas relativas en los servicios financieros. Los indicadores de inflación básica tampoco presentaron cambios de importancia en el último mes. El promedio de los tres indicadores monitoreados por el Banco de la República se situó en 3,27% similar a 3,26% observado en enero. Esta cifra es inferior a la de diciembre del año pasado. Así las cosas, en lo corrido del año la demanda estaría ejerciendo algunas presiones alcistas junto con los precios de los combustibles. Las expectativas de inflación disminuyeron en el último mes. Según la encuesta mensual a operadores de mercado, la inflación total esperada a diciembre y a febrero de 2013 estaría en 3,5% aproximadamente, 10 pb menos que hace un mes. La reducción fue un poco mayor (alrededor de 30 pb) en el caso de las obtenidas a partir de las tasas de los TES. Estas últimas se situaron en 3,4% a diferentes horizontes. b. Crecimiento De acuerdo con el DANE, en el cuarto trimestre de 2011 el PIB colombiano creció 6,1% en términos anuales. Esto, junto con las leves revisiones en los datos de los otros trimestres del año, implicó un crecimiento para todo 2011 de 5,9%. La expansión de la economía el año pasado estuvo marcada por un favorable desempeño de la demanda interna. Este agregado creció 8,8% lo que significó una aceleración de algo más de 3 puntos porcentuales con respecto a la tasa que se observó en 2010 y es similar a la registrada en 2006 y 2007, ambos periodos de auge económico. A pesar de registrar una desaceleración, la demanda interna tuvo un importante dinamismo con un crecimiento anual de 7,9% frente al 9,8% del tercer trimestre. El consumo de los hogares fue el componente de la demanda que más contribuyó a la expansión del PIB. En todo 2011 fue 6,5%, mayor al registrado en 2010, impulsado principalmente por la adquisición de bienes durables y semidurables cuyos crecimientos fueron 20% en promedio en el año. Los bienes no durables y los servicios mostraron un desempeño relativamente menor (con crecimientos cercanos al 5%) pero de todas formas superiores a su promedio desde 2000. Durante el cuarto trimestre, el consumo privado (6,1%) mostró un comportamiento similar al del resto del año. Respecto al consumo del Gobierno la expansión fue 3%. El segundo componente en orden de contribución al crecimiento fue la inversión en capital fijo la cual aumentó 16,6%, la segunda mayor tasa desde 2000 sólo superada por aquella de 2006. El gasto en bienes de capital mostró una leve desaceleración en el cuarto trimestre del año, explicada en buena medida por una alta base de comparación, y, al igual que durante todo el año, recibió un gran impulso de las compras de equipo de transporte y de maquinaria y equipo. La inversión en construcción de edificaciones y de obras civiles superó el 6%. Mientras en el primer semestre cayó 4,4% en el segundo mostró un crecimiento de 13,3%. En 2011 se registraron tasas de crecimiento récord para las importaciones y para las exportaciones. Con respecto al primer agregado, el año pasado su expansión fue de 21,5% impulsada, en su orden, por las compras de bienes de capital, de materias primas y de bienes de consumo. De igual forma, las ventas externas mostraron un dinamismo importante al crecer 11,4%, sobre todo gracias al comportamiento de las exportaciones tradicionales (café, petróleo y derivados, carbón y ferroníquel). Las ventas del resto de productos también presentaron un comportamiento satisfactorio. En el cuarto trimestre, se observó una aceleración de las exportaciones totales (15,8%) frente a los tres trimestres anteriores del año. Por el lado de la oferta se destacó el buen desempeño a lo largo de todo 2011 de los sectores de minería y transporte y telecomunicaciones. El primero estuvo impulsado tanto por la expansión de la producción petrolera como por el importante aumento que tuvo la de carbón en el segundo semestre del año. En el segundo caso, los buenos resultados obedecieron al notable desempeño del transporte aéreo y del sector de telecomunicaciones. Otros sectores con crecimientos dinámicos fueron el comercio, la construcción y los servicios financieros, mientras que la rama de actividad con desempeño más débil en todo el año fue la de electricidad, gas y agua, aunque presentó un crecimiento positivo. En la rama de actividad agropecuaria se observó en el último trimestre de 2011, una caída de la producción de -2%, lo que implicó un crecimiento en todo el año de 2,2%, siendo así el sector con la segunda menor tasa de expansión en 2011. En el caso de la industria, el crecimiento en el año completo fue 3,9%. Con respecto a la situación económica para el primer trimestre de 2012, la información disponible permite prever un buen desempeño. El consumo de los hogares sigue favorecido por la confianza de los consumidores medida por Fedesarrollo que continúa en niveles relativamente altos, pese a la disminución observada en febrero. El crecimiento anual del crédito a los hogares en febrero (25% para el crédito de consumo y 17% para el hipotecario) sugiere un buen dinamismo para el consumo privado. La evolución del mercado laboral también indicaría que el consumo podría mantener el dinamismo pues la tasa de desempleo (TD) registrada en enero de 2012 fue la menor de la década reciente con respecto a aquellas registradas para el mismo mes. Esta cifra confirma la tendencia decreciente que se ha observado en la TD desde mediados del año pasado. A lo anterior se suma una expansión de las ventas al por menor de 4,9% en enero que aunque menor que la del año pasado, es cercana al crecimiento promedio (6%) desde 2000. Por su parte, según el Comité Automotor Colombiano, en febrero las ventas de vehículos crecieron 7,2% anual. En enero el valor de las exportaciones en dólares registró un incremento de 24% anual, hecho explicado principalmente por las exportaciones de origen minero energético (29,9% anual); e industriales (14,9% anual), en tanto que las ventas externas de los principales bienes de procedencia agrícola se redujeron 19,2% anual, debido a la caída de las exportaciones de café y banano. Por el lado de la oferta, algunos indicadores sugieren un buen dinamismo para el comienzo de 2012. Por un lado, en febrero la demanda de energía total aumentó 6,3% anualmente, una tasa alta que no se registraba desde 2010 que puede ser explicada en parte por una baja base de comparación el año pasado atribuida al mantenimiento de Cerro Matoso. Por otra parte, en enero las importaciones de materias primas se aceleraron fuertemente (a 19%) compensando la caída del mes anterior y sugiriendo que los empresarios de diferentes sectores esperan un aumento de la producción. Finalmente, en la industria, la encuesta de opinión empresarial de Fedesarrollo con datos a enero continuó mostrando niveles de pedidos altos y expectativas de aumento de la producción importantes. Sin embargo, las cifras de producción industrial dadas a conocer por el DANE para este último mes arrojaron una tasa de 2,4%, igual al registro de diciembre e inferior al promedio observado en 2011 (4,8%). c. Variables Financieras El crédito total (MN y ME) registró en febrero un incremento anual de 20,4%, inferior en 46 pb al de enero y 292 pb al de julio de 2011. El comportamiento es dominado por la cartera comercial, cuyo crecimiento se sitúo en 18,8%, tasa 30 pb menor a la del mes anterior y que suma una desaceleración en los últimos siete meses de 455 pb. En tanto la dinámica de las carteras de consumo e hipotecaria se ha estabilizado, con variaciones anuales a febrero de 24,7% y 17,4%, respectivamente, tasas de crecimiento alrededor de los promedios observados desde julio de 2011 (25,1% y 17,3%). Por su parte, las tasas de interés real (descontando el IPC sin alimentos) en febrero para créditos de consumo, hipotecario y comercial ordinario, en su orden, se ubicaron en 15,8%, 10,1% y 8,7%, tasas menores a sus promedios respectivos calculados desde 1998 (excluyendo la de crédito hipotecario cuyo promedio se mide a partir de mayo 2002). d. Contexto Externo Los nuevos datos de actividad económica mundial muestran una demanda externa débil pero algo mejor a lo proyectado a finales del año pasado. Pese a ello, el crecimiento promedio de los socios comerciales de Colombia en el presente año seguiría siendo menor al observado en 2011. En Europa, las últimas medidas tomadas por sus autoridades frente al problema de la deuda pública en los países de la periferia han restablecido parcialmente la confianza de los mercados financieros internacionales y han disminuido la probabilidad de que la crisis financiera en la región se profundice aún más. Los resultados de las dos economías más grandes de la zona del euro, Alemana y Francia han sido más favorables y ello podría indicar que la recesión que se proyecta en dicha zona sea más leve de lo inicialmente esperado. De igual forma, en las últimas semanas las autoridades europeas aprobaron un nuevo plan de rescate para Grecia, situación que estuvo seguida por un recorte voluntario de los títulos de deuda pública por parte del sector privado. Los apoyos masivos de liquidez por parte del Banco Central Europeo a la banca comercial de la región han permitido aliviar las necesidades de liquidez de corto plazo de los bancos y han apoyado las emisiones de deuda pública de España e Italia, países cuyas primas de riesgo se han reducido en los últimos meses. De todos modos, aún no se ha observado un incremento en el otorgamiento de crédito, ya que los bancos comerciales se mantienen renuentes a entregar recursos al sector privado. En Estados Unidos, la nueva información mejor a la esperada, llevo a que la mayoría de analistas incrementara el pronóstico de crecimiento para 2012 de ese país, aunque a una tasa todavía inferior a la de su potencial. La economía continuó recuperándose a un ritmo mejor que el esperado, apoyada en el mayor dinamismo del sector manufacturero y en un mejor comportamiento del mercado laboral. Pese a las señales positivas recientes, existen riesgos que podrían afectar negativamente este dinamismo en los próximos meses como es la posibilidad de que el aumento reciente en los precios del petróleo se prolongue. En Japón, a pesar de la desaceleración de las exportaciones a finales de 2011, la producción industrial a enero del presente año mostró señales de recuperación. En cuanto a las economías emergentes, en el último trimestre de 2011 los crecimientos observados fueron cercanos a los de largo plazo y es probable que en 2012 este comportamiento se mantenga. La información disponible apunta a una desaceleración moderada que estaría en línea con lo previsto. En China, por ejemplo, el Gobierno decidió disminuir la meta de crecimiento para 2012 de 8% a 7,5%. En América Latina, los datos del cuarto trimestre ratificaron una disminución en el ritmo de crecimiento económico. Sin embargo, el incremento en el precio de las materias primas, el dinamismo de la demanda interna y el mejor comportamiento de la economía mundial sugieren que esta tendencia no se profundizaría. Por otra parte, en el último mes disminuyeron levemente las primas de riesgo soberano en esta región y sus monedas se fortalecieron. Si estos niveles de riesgo y la abundante liquidez mundial se mantienen, los flujos de capitales podrían continuar hacia las economías de la región y las monedas se fortalecerían aún más. En cuanto a los precios de los bienes básicos, las tensiones en Oriente Medio y el Norte de África han contribuido al incremento de los precios internacionales del petróleo, los cuales han superado los niveles máximos de 2011. El precio de otros productos básicos como el trigo, el maíz y la soya, entre otros, también han aumentado en los primeros meses del año, debido principalmente a factores climáticos. En conclusión, la más reciente información indica que la demanda mundial sigue débil, aunque algo menos que lo esperado. Sin embargo, los altos precios del petróleo y otros bienes básicos observados en las últimas semanas podrían afectar negativamente las perspectivas de recuperación de las economías desarrolladas. A pesar de los riesgos inflacionarios por cuenta del incremento de los precios de los bienes básicos, se espera que los bancos centrales del mundo continúen con una política monetaria holgada para impulsar el crecimiento económico. Hasta el momento, los distintos canales por los cuales la crisis en Europa y el menor crecimiento mundial podrían transmitirse a Colombia siguen sin mostrar evidencia de contagio. En materia de confianza, los últimos indicadores para la industria y los consumidores siguen en niveles elevados. Respecto al canal comercial, las exportaciones a enero siguieron creciendo a buen ritmo, especialmente las de origen minero. Por otra parte, los últimos datos de la balanza cambiaria reflejan una inversión extranjera directa que sigue dinámica, especialmente la destinada a la minería. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA La Junta Directiva por unanimidad consideró apropiado mantener inalterada la tasa de interés de política teniendo en cuenta los siguientes factores: (i) En febrero la inflación anual (3,55%) se mantuvo estable con respecto al mes anterior y ha venido descendiendo desde octubre del año pasado. El promedio de las medidas de inflación básica continuó cerca del 3%. Lo anterior y las recientes acciones de política monetaria contribuyeron para que las expectativas de inflación disminuyeran. Es de esperar que estas últimas sigan convergiendo hacia el punto medio del rango meta; (ii) El crecimiento económico del cuarto trimestre de 2011 (6,1%) al igual que el de todo el año (5,9%) ratifican el crecimiento robusto de la economía. La dinámica de la demanda interna, que había presentado una tendencia creciente trimestre a trimestre, se desaceleró a final de año y registró una tasa de 7,9%, igual a la observada a comienzo de 2011. El alto rimo de crecimiento del gasto agregado desde hace varios trimestres ha llevado a que la demanda esté copando la capacidad instalada en varios sectores de la economía; (iii) La reciente desaceleración del crecimiento de la industria manufacturera y algunos otros datos conocidos en el primer trimestre de 2012 sugieren que el crecimiento en dicho periodo puede ser menor que el registrado a final de 2011. La nueva información permitirá establecer con mayor certeza si la dinámica de la demanda interna es coherente con el crecimiento sostenible de la economía y el cumplimiento de la meta de inflación; (iv) El crecimiento del crédito permanece alto, especialmente el de consumo. Ello indica que los hogares han elevado significativamente su grado de endeudamiento; (v) Las tasas de interés nominales y reales de crédito, si bien han subido en los últimos 12 meses, siguen en niveles inferiores a sus promedios calculados desde el 2000, exceptuando las de tarjetas de crédito; (vi) En el contexto externo, los pronósticos para 2012 sugieren un crecimiento económico negativo en Europa, mientras que en Estados Unidos se podría registrar una tasa algo inferior a la de su potencial. Los países emergentes podrían crecer a un menor ritmo pero a una tasa cercana a la del largo plazo. Por lo anterior, es probable que en el presente año el crecimiento promedio de nuestros socios comerciales sea menor al observado en 2011; (vii) El precio internacional del petróleo siguió aumentando y las cotizaciones de los otros productos básicos que exporta Colombia se mantienen en niveles elevados. En consecuencia, los términos de intercambio están históricamente altos y estimulan el crecimiento del ingreso nacional. Por su parte, la apreciación del peso puede estar afectando el comportamiento de algunos sectores transables; (viii) El riesgo de una fuerte recesión en Europa con impactos negativos y significativos sobre la actividad económica de Colombia continúa, pero su probabilidad de ocurrencia ha disminuido en las últimas semanas; (ix) Los riesgos sobre la inflación, provenientes de las expectativas, se han moderado. Los que pueden surgir del comportamiento de la demanda o el crédito siguen vigentes. Unos codirectores señalaron que, con la información disponible en el momento, y aún teniendo en cuenta la tendencia reciente de la inflación, las presiones inflacionarias continúan teniendo peso en el balance de riesgos lo cual podría requerir ajustes adicionales en la política monetaria. Otros consideraron que ya se habría alcanzado el rango neutral de la tasa de intervención del Banco, y dado el rezago existente en los movimientos de tasas de interés y sus efectos plenos sobre la demanda, estimaron que en el futuro próximo las presiones inflacionarias subsistentes estarían controladas con las medidas ya tomadas. Finalmente, un codirector reiteró la necesidad de establecer, como complemento de los movimientos ya adelantados de la tasa de intervención del Banco de la República un encaje al crédito de consumo. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA De acuerdo con la evaluación presente del balance de estos riesgos, la Junta Directiva decidió mantener inalterada la tasa de interés de intervención del Banco de la República. La nueva información permitirá establecer nuevas acciones de política monetaria a seguir. La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo de la situación internacional, del comportamiento y proyecciones de la inflación, el crecimiento, el comportamiento de los mercados de activos y reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible. Bogotá, D. C.
2012-04-01
- Minutas de la reunión de la JDBR del 30 de abril de 2012 El 30 de Abril de 2012 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, Juan Pablo Zárate y César Vallejo, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor en marzo se situó en 3,4%, 15 puntos base (pb) por debajo del dato del mes anterior. La caída de la inflación anual al consumidor fue explicada por el descenso en la variación anual de alimentos, por el menor registro en la variación de precios de la canasta de regulados y de la canasta de transables sin alimentos ni regulados. En alimentos la variación fue de 4,56%, 14 pb menos que el registro de febrero. Se presentaron caídas tanto en las variaciones anuales de los perecederos como de los procesados. Por el contrario, en el grupo de comidas fuera del hogar, la variación anual se siguió acelerando y alcanzó en marzo 5,87% (22 pb más que en febrero). El IPC sin alimentos, mostró un descenso de 3,10% en febrero a 2,95% en marzo, que se explica por la desaceleración de los ajustes en precios de las canastas de regulados y de transables y a que los de la canasta de no transables permanecieron relativamente estables. La variación anual del IPC de regulados presentó una reducción significativa en el último mes (de 5,6% a 4,9%), debido sobre todo a una alta base de comparación en marzo del año pasado. Dentro de esta canasta, se mantuvieron los incrementos por encima del promedio del IPC en tarifas de gas, combustibles y servicios de transporte urbano. <7p> Respecto a la variación anual de transables sin alimentos ni regulados, el registro en marzo de 0,68% fue 5 pb menor que en febrero. La leve caída puede estar asociada a la apreciación del tipo de cambio observada desde comienzos del año. Por su parte, los no transables sin alimentos ni regulados se mantuvieron en 3,7%. Esta tasa anual que ha venido ascendiendo lentamente, es reflejo del hecho de que la brecha del producto se estima en niveles positivos. Los indicadores de inflación básica disminuyeron en el último mes aunque de manera muy leve. El promedio de los tres indicadores monitoreados por el Banco estuvo en 3,23% (4 pb por debajo del mes anterior). A la par con el descenso de la inflación al consumidor, en el último mes se dio nuevamente una disminución de la variación anual del IPP a 1,5%, desde 2,6% en febrero. Una parte importante de la disminución puede seguir siendo atribuida a la apreciación del peso, como lo sugiere la caída más fuerte del IPP importado, cuya variación anual en marzo se situó en -2,1%. Las expectativas de inflación a diferentes horizontes volvieron a disminuir en marzo. Las obtenidas con la encuesta mensual a operadores de mercado se situaron en 3,27% para diciembre de este año y en 3,45% para marzo de 2013. En el caso de la encuesta trimestral a empresarios, sindicatos y expertos, los resultados fueron 3,54% y 3,49% respectivamente. Las expectativas derivadas de los TES horizontes de 2, 3 y 5 años convergieron hacia 3%. b. Crecimiento La información disponible para el primer trimestre de 2012 apunta a que el consumo privado podría haber mantenido una dinámica similar a la observada a final del año pasado. Por una parte, las ventas minoristas (medidas por el DANE) crecieron en el primer bimestre a una tasa anual de 7% frente a 5% anual en el cuarto trimestre del año pasado mientras que las ventas sin vehículos mostraron un crecimiento anual a febrero de 10,7%. Por otra parte, las importaciones de bienes de consumo crecieron alrededor de 23% en los dos primeros meses del año, frente a 15% del cuarto trimestre. De la misma manera, los comerciantes consultados por Fenalco volvieron a señalar en marzo una percepción favorable de la situación actual de sus ventas. De otro lado, la cartera de consumo continuó expandiéndose a tasas reales cercanas al 20% en términos anuales. Finalmente, disminuyó la tasa de desempleo observada en los primeros tres meses del año. Los buenos desempeños reseñados para los diferentes indicadores asociados al consumo se confirman con el nivel alto que mantiene la confianza de los consumidores medida por Fedesarrollo. Pese a caídas del indicador en febrero y marzo, los niveles siguen siendo relativamente altos. Respecto a la inversión, es posible prever una desaceleración en el crecimiento anual en el primer trimestre de 2012 al tener en cuenta que las importaciones en dólares de bienes de capital, pasaron de crecer a un promedio de 39% en el último trimestre de 2011 a 16,5% en promedio entre enero y febrero de este año. De la misma manera, el crecimiento de la producción nacional de este tipo de bienes no mostró mayor variación con respecto a lo observado a finales del año pasado. Las exportaciones colombianas registraron en febrero un valor de US$4.836 millones y crecieron 22,5% anual, tasa inferior al promedio de los últimos seis meses (42%). El crecimiento de las exportaciones de este mes, se debió principalmente a incrementos de las ventas de productos básicos de origen minero (33% anual). Las exportaciones agrícolas se redujeron 23% en febrero de 2012, comportamiento que se explica por una caída en las ventas de café y flores de 29% y 17% respectivamente. Las exportaciones sin productos básicos crecieron anualmente 13%. Por ramas de actividad, se destaca que las producciones de café y petróleo fueron afectadas por choques de oferta transitorios que repercutirán en menores ritmos de expansión de los sectores agrícola y minero en el primer trimestre del año. La producción trimestral de café cayó al nivel más bajo de los últimos 40 años mientras que la de petróleo retrocedió en términos trimestrales por primera vez desde 2003. Para la industria, el crecimiento anual de la producción en febrero divulgada por el DANE (4,5%) confirma la evolución que ha venido mostrando el sector durante los últimos trimestres con una expansión lenta y menor que la de la economía en su conjunto. El nivel satisfactorio que presentan los indicadores de pedidos y existencias de Fedesarrollo a febrero permite prever una tendencia similar para marzo y abril. En resumen, la estimación de crecimiento del PIB para el primer trimestre de 2012 indicaría una desaceleración frente al cuarto trimestre del año pasado en términos anuales. Esta situación se explica por un menor ritmo de inversión y de exportaciones. En el consumo privado sin embargo, la información disponible sugiere un buen comportamiento durante los primeros meses del año. Para todo 2012 los modelos no sugieren cambios con respecto a los pronósticos que se tenían un trimestre atrás. Así las cosas, el PIB de todo el año crecería entre 4,0% y 6,0% con 5,0% como cifra más probable. c. Variables Financieras El crédito total (MN y ME) registró en marzo un incremento anual de 19,7%, inferior en 73 pb al de febrero y en 365 pb frente al de julio de 2011. El comportamiento es dominado por la cartera comercial, cuyo crecimiento se sitúo en 17,5%, tasa 130 pb menor a la del mes anterior y que suma una desaceleración en los últimos ocho meses de 585 pb. En tanto la dinámica de las carteras de consumo e hipotecaria se ha estabilizado, con tasas de crecimiento anual cercano a los promedios observados desde julio de 2011. Por su parte, las tasas de interés real (descontando el IPC sin alimentos) en marzo para créditos de consumo, hipotecario y comercial ordinario, en su orden, se ubicaron en 15,9%, 10,3% y 9,0%, tasas menores a sus promedios respectivos calculados desde 1998 (excluyendo la de crédito hipotecario cuyo promedio se mide a partir de mayo 2002). d. Contexto Externo Las perspectivas sobre el crecimiento global para 2012 han mejorado ligeramente respecto a lo que se esperaba al principio del año, entre otras cosas gracias a la mejoría de las condiciones de liquidez en Europa debido a las acciones tomadas por sus autoridades económicas y a que el contagio de la recesión en ese grupo de países sobre el resto de economías del mundo ha sido limitado. Sin embargo, los riesgos se mantienen en tanto que la situación europea no se ha solucionado del todo y los precios del petróleo continúan en niveles altos. En Europa la información para el primer trimestre de 2012 indica que la economía continúa en recesión. Sin embargo, el deterioro en la actividad real ha sido modesto y dista de parecerse a lo evidenciado en la crisis financiera internacional de 2008-2009 cuando el Producto Interno Bruto (PIB) se contrajo 5,6%. Un escenario de una recesión moderada y de corta duración en Europa para 2012 se daría siempre y cuando las acciones de las autoridades europeas logren reactivar el crédito y la demanda. Por su parte, en Estados Unidos los indicadores de actividad real para el primer trimestre de 2012 muestran que la economía ha seguido expandiéndose a un ritmo moderado, pero un poco mejor que el esperado, gracias al mayor dinamismo del consumo y de la actividad industrial. Pese a ello, las cifras de marzo y abril ponen aún en duda la fortaleza de la recuperación puesto que el mercado laboral sigue mostrando síntomas de debilidad y algunos índices de actividad real crecieron menos de lo esperado. Adicionalmente, el mercado de vivienda permanece estancado y la información reciente sobre ventas de viviendas nuevas y usadas no sugiere una pronta recuperación. Respecto de las economías emergentes, se destaca que durante el primer trimestre de 2012 el PIB de China se desaceleró según lo previsto, pasando de crecer 8,9% anual en el cuarto trimestre de 2011, a 8,1%. Sin embargo, el dinamismo de la demanda interna continúa. En febrero, la producción industrial y el índice de confianza en el sector manufacturero sorprendieron al alza. Para el resto de las economías de Asia emergente se han visto algunos repuntes en la actividad industrial y en las exportaciones asociados con la normalización de la cadena de suministros de Tailandia y las mayores compras provenientes de China. Las economías de América Latina han seguido creciendo a una tasa algo menor a la de su potencial. La información disponible para el primer trimestre del año muestra que la producción industrial se aceleró en varios países de la región, al igual que los índices de confianza. El aumento en los precios del petróleo que se ha observado desde finales de 2011, estaría mejorando el ingreso nacional de los países productores como Ecuador y Venezuela lo que tendría un efecto positivo sobre el producto del primer trimestre. En cuanto a los precios de los bienes que exporta Colombia, las cotizaciones del petróleo al igual que otros productos agrícolas volvieron a aumentar. De esta forma, los términos de intercambio se mantienen en niveles históricamente altos y estimulan el ingreso nacional. Para el resto del año, podría darse alguna reducción en los términos de intercambio pero sus niveles seguirían siendo elevados. Los bancos centrales de las principales economías desarrolladas han mantenido una política monetaria laxa. Las perspectivas actuales y los anuncios de las autoridades monetarias implicarían que las tasas de interés de estos países continuarán bajas por un buen tiempo, mientras la inflación doméstica lo permita. En relación con las economías emergentes, la mayoría de bancos centrales han mantenido inalteradas sus tasas de intervención. Las primas de riesgo de los países de América Latina han permanecido relativamente estables como consecuencia del buen momento por el que pasa la región. Lo anterior ha reducido la fluctuación de las tasas de cambio de estos países. En resumen, en el contexto externo los pronósticos para 2012 sugieren un crecimiento económico levemente negativo en Europa, mientras que en Estados Unidos se podría registrar un crecimiento superior al previsto inicialmente, aunque inferior a su potencial. Los países emergentes podrían crecer a un menor ritmo pero a una tasa cercana a la del largo plazo. Por lo anterior, es probable que en el presente año el crecimiento promedio de nuestros socios comerciales sea menor al observado en 2011 y con ello una demanda externa que continuaría débil. Cabe señalar que los riesgos a un menor crecimiento siguen siendo importantes. Desde comienzos de abril, la incertidumbre retornó a los mercados financieros internacionales como consecuencia del incumplimiento de la meta fiscal española para 2011 y de las dudas sobre la recuperación actual de su economía. A esto se suma el estancamiento que aún muestra el crédito en la región a pesar de las acciones del Banco Central Europeo y el hecho de que los mercados de deuda pública de los demás países de la periferia se están debilitando de nuevo. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA La Junta Directiva por unanimidad consideró apropiado mantener inalterada la tasa de interés de política teniendo en cuenta los siguientes factores: (i) En el contexto externo, los pronósticos para 2012 sugieren un crecimiento económico levemente negativo en Europa, mientras que en Estados Unidos se podría registrar una tasa inferior a la de su potencial. Los países emergentes podrían crecer a un menor ritmo pero a una tasa cercana a la del largo plazo. Por lo anterior, es probable que en el presente año el crecimiento promedio de nuestros socios comerciales sea menor al observado en 2011. (ii) El precio internacional del petróleo siguió alto y las cotizaciones de los otros productos básicos que exporta Colombia se mantienen en niveles elevados. En consecuencia, los términos de intercambio están históricamente altos y estimulan el crecimiento del ingreso nacional. Por su parte, la apreciación del peso colombiano puede estar afectando el comportamiento de algunos sectores transables. (iii) En Colombia, se espera que el crecimiento económico en 2012 se sitúe entre el 4% y 6%. La principal fuente de este crecimiento continuará siendo el dinamismo de la demanda privada, tanto del consumo de los hogares como de la inversión. La información disponible a lo largo del año sugiere una moderación en el crecimiento del consumo de los hogares y de la inversión, coherente con la proyección de crecimiento para todo el año. (iv) El aumento de la cartera comercial se desaceleró, explicado por la menor dinámica de los préstamos en moneda extranjera. El crecimiento del crédito a los hogares permanece alto, especialmente el de consumo, lo que indica que los hogares han elevado significativamente su grado de endeudamiento. Lo anterior se ha dado en un contexto de tasas reales de interés de créditos ordinarios y de consumo (exceptuando tarjetas de crédito) que se encuentran por debajo de sus promedios históricos. (v) En marzo la inflación anual (3,40%) se desaceleró a un ritmo mayor al proyectado por el equipo técnico y por el mercado. El promedio de las medidas de inflación básica continuó cerca del 3%. Las expectativas de inflación volvieron a descender y se espera que sigan convergiendo hacia el punto medio del rango meta. (vi) El riesgo de una fuerte recesión en Europa con impacto negativo significativo sobre la actividad económica de Colombia continúa, pero su probabilidad de ocurrencia pareciera haber disminuido. (vii) Los riesgos sobre la inflación provenientes de las expectativas se han moderado. Los que pueden surgir del comportamiento del crédito de consumo, siguen vigentes. Unos codirectores señalaron que, con la información disponible en el momento, y aún teniendo en cuenta la tendencia reciente de la inflación, persisten riesgos al alza provenientes de un dinamismo de la demanda interna mayor al esperado por cuenta de la inversión pública, el consumo y reducción del desempleo. Otros consideraron que ya se habría alcanzado el rango neutral de la tasa de intervención del Banco, y dado el rezago existente entre los movimientos de tasas de interés y sus efectos plenos sobre la demanda, estimaron que en el futuro próximo las presiones inflacionarias subsistentes estarían controladas por las medidas ya tomadas. Finalmente, los codirectores reiteraron la necesidad de continuar con un cuidadoso monitoreo al crédito de consumo que exhibía a marzo una tasa de crecimiento real anual alrededor del 22%, casi cuatro veces el crecimiento real del PIB de 2011. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA De acuerdo con la evaluación presente del balance de estos riesgos, la Junta Directiva decidió mantener inalterada la tasa de interés de intervención del Banco de la República. La nueva información permitirá establecer nuevas acciones de política monetaria. La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo de la situación internacional, del comportamiento y proyecciones de la inflación, el crecimiento, el comportamiento de los mercados de activos y reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible. Bogotá, D. C.
2012-05-01
- Minutas de la reunión de la JDBR del 28 de mayo de 2012 El 28 de Mayo de 2012 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, Juan Pablo Zárate y César Vallejo, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. Antecedentes a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor en abril se situó en 3,43%, 3 puntos base (pb) por encima del dato del mes anterior. Este resultado se explica en buena medida por un aumento de la variación anual del IPC de alimentos, que pasó de 4,56% en marzo a 5,01% en abril. En el IPC de alimentos, las alzas provinieron de las sub canastas de alimentos procesados (arroz entre otros) y de las comidas fuera del hogar. En este último caso, la variación anual ya asciende a 5,9%, lo que probablemente obedece al fuerte crecimiento de la demanda interna. La variación anual de perecederos por su parte, siguió disminuyendo, lo que sugiere que las condiciones de la oferta agropecuaria han tendido a normalizarse. Por su parte el IPC sin alimentos registró un leve caída es su variación anual explicada por una desaceleración importante en la variación anual del IPC de regulados (desde 4,9% a 3,8%) que se concentró en las tarifas de energía. Adicionalmente, el freno en el alza de la cotización internacional del petróleo desde finales de febrero ha hecho posible ajustes menores en el precio interno de los combustibles. Respecto a la variación anual del precio de transables sin alimentos ni regulados, se presentó una aceleración no anticipada (a 0,9% desde 0,7% en marzo) que está relacionada a un reajuste fuerte en las tarifas de telefonía y a la menor apreciación del peso en abril frente a meses anteriores. Cabe señalar que el peso dejó de apreciarse desde mediados de marzo y desde mediados de mayo se devaluó. Por su parte, la variación anual del IPC de no transables sin alimentos ni regulados subió 6 pb en el mes, finalizando cerca al 3,8%. Los arriendos continuaron acelerándose progresivamente, como viene sucediendo desde hace 12 meses, y se situaron en 3,6%. Los indicadores de inflación básica aumentaron después de dos meses de no presentar cambios de importancia. El promedio de los tres indicadores monitoreados por el Banco de la República cerró en 3,3%, 7 pb más que en el mes anterior. En abril, la variación anual del IPP permaneció en 1,6%, con lo cual se consolidó la caída de meses anteriores. En el caso del IPP de importados, la apreciación acumulada del peso mantuvo la variación anual en terreno negativo, aunque en ascenso, mientras que el IPP local siguió desacelerándose apoyado en un menor ritmo de ajuste de los precios agropecuarios. Las expectativas de inflación derivadas de los TES a diferentes horizontes aumentaron levemente en el último mes y se encuentran por encima del 3,0%. Las obtenidas a partir de la encuesta mensual no presentaron cambios relevantes: la inflación esperada a diciembre es 3,3% y a doce meses es de 3,5%. b. Crecimiento Los indicadores más recientes sobre el comportamiento de la economía en el primer trimestre de 2012 muestran señales mixtas. Por un lado, el consumo de los hogares se habría acelerado con respecto al registro de finales del año pasado, mientras que por otro lado, la industria creció muy poco en el período. El buen comportamiento previsto para el consumo privado en el primer trimestre se fundamenta en la dinámica de las ventas del comercio con un crecimiento de 5,1% (según el DANE), que continúan mostrando una tendencia ascendente. Adicionalmente, en marzo las importaciones en dólares de bienes de consumo crecieron 10,3% impulsadas principalmente por las de bienes no durables. De igual manera, el consumo privado se habría favorecido por las buenas condiciones en el mercado laboral, pues la tasa de desempleo siguió disminuyendo y el empleo total y asalariado presentan tasas de crecimiento anual positivas relativamente altas (alrededor del 5%). Respecto a los indicadores de oferta a las caídas en la producción de petróleo y café de los meses anteriores, se suma el comportamiento bastante modesto del sector manufacturero, el cual se contrajo 0,9% en términos anuales en marzo. Con este registro, la producción de la industria creció 1,7% anualmente en el primer trimestre, la cifra más baja para todo un trimestre desde 2009. Buena parte de la caída de la producción industrial en marzo se debió a los fuertes retrocesos de los subsectores de refinación de petróleo y otros químicos que pesan el 19% del total. Al analizar la producción por subsectores, cerca de la mitad de ellos se encuentran estancados o inclusive cayendo tendencialmente. En la construcción, la producción de cemento retrocedió en el primer trimestre frente al trimestre anterior, aunque aún señala crecimientos anuales importantes (del orden del 8%). Además, el área aprobada según las licencias de construcción registró una fuerte contracción anual en el primer trimestre (18%). Si bien esta caída se debe a que se está comparando el actual registro con los niveles altos del año pasado, se nota también cierto estancamiento en el indicador. En cuanto a las exportaciones colombianas, en marzo crecieron 16,1% anual (en dólares). Dicho comportamiento se explica por el incremento de las ventas externas de bienes básicos de origen minero, principalmente las mayores ventas de petróleo crudo y de carbón. Por su parte, las principales exportaciones agrícolas se redujeron 15% en términos anuales, dada la caída en las ventas de café y de banano. El resto de exportaciones disminuyó 1,5% anual, debido a un efecto de base de comparación, ya que el valor de éstas aumentó significativamente respecto a los dos meses anteriores. Al incorporar la información reseñada anteriormente, se sigue proyectando una desaceleración en el crecimiento del PIB en el primer trimestre de 2012 frente al cuarto trimestre del año pasado en términos anuales. El comportamiento negativo de la industria se habría visto compensado por el dinamismo del sector comercio. Para el segundo trimestre la escasa información apunta a una desaceleración del consumo de los hogares. Por un lado, las ventas de vehículos crecieron 2,4%, menos de la mitad de lo que se observó en el primer trimestre (5,6%). Cabe señalar que en los trimestres anteriores dichos bienes impulsaron en buena medida la expansión del gasto de los hogares. Por otro lado, en mayo se notó una leve moderación en el crecimiento de la cartera de consumo con una tasa de crecimiento anual de 23,3% (a mayo 4), frente al 25% registrado en marzo. La encuesta de opinión empresarial de Fedesarrollo para abril mostró un buen desempeño para varios indicadores (pedidos, existencias, expectativas de producción, etc.). En lo corrido del año, los estos comportamientos se han dado al tiempo con unos niveles tendenciales de crecimiento de la industria estancados. Así, ello podría sugerir que en el segundo trimestre dicha tendencia, podría continuar. Dado lo anterior, las proyecciones para todo 2012 presentadas en el Informe sobre Inflación de marzo no se modificaron. El intervalo de pronóstico de crecimiento se mantiene entre 4,0% y 6,0%. c. Variables Financieras El crédito total (MN y ME) registró en abril un incremento anual de 18,3%, inferior en 135 pb al de marzo y en 499 pb al de julio de 2011. Este comportamiento fue determinado por la cartera comercial, cuyo crecimiento se sitúo en 15,9%, tasa 160 pb menor a la del mes anterior y que suma una desaceleración en los últimos nueve meses de 745 pb. En cuanto al crédito a los hogares, el destinado a consumo, que se había estabilizado en un crecimiento de 25% entre julio de 2011 y marzo de 2012, observó una leve moderación en las últimas semanas, disminuyendo de 25% en marzo a 23,3% a mayo 4. De otro lado, la cartera hipotecaria presentó un crecimiento anual en abril de 16,9%, dato cercano al promedio desde julio de 2011 (17, 2%). Por su parte en abril, las tasas de interés real (descontando el IPC sin alimentos) para créditos de consumo, hipotecario y comercial ordinario, en su orden, se ubicaron en 16,3%, 10,3% y 9,3%, tasas menores a sus promedios respectivos calculados desde 1998 (excluyendo la de crédito hipotecario cuyo promedio se mide a partir de mayo 2002). d. Contexto Externo Los últimos datos de actividad económica mundial muestran para el primer trimestre del año un crecimiento mejor al esperado de algunas economías desarrolladas (Alemania, Japón y en menor medida Estados Unidos), unos registros inferiores a lo previsto en ciertos países de la periferia europea (España e Italia) y una mayor desaceleración a la pronosticada en algunas economías emergentes (China y Brasil). En Estados Unidos la producción siguió expandiéndose lentamente y los indicadores de actividad real a abril sugieren que dicha tendencia ha continuado. En la zona del euro, aunque la producción se estancó en el primer trimestre del año, fue superior a lo esperado por los analistas y por el equipo técnico del Banco. La mayor expansión de la economía alemana con relación a la del resto de la región, evitó que esta última entrara en recesión. Si se excluye la producción de dicho país el resultado es un crecimiento de la zona euro que lleva tres trimestres en terreno contractivo. Datos más recientes a abril, como la confianza de los consumidores y empresarios en los sectores manufactureros y de servicios en EEUU, se han sostenido en niveles bajos. En el caso de la zona euro la confianza se ha deteriorado un poco más frente a meses anteriores, al igual que algunos indicadores de actividad real, lo cual sugiere, como se tiene previsto, que el crecimiento del segundo trimestre sería negativo. Respecto a las economías emergentes, los efectos de la crisis europea ya han comenzado a afectar las principales economías de Asia Emergente. Así, las exportaciones y la producción industrial han seguido desacelerándose y en algunos se ha contraído. En las economías de América Latina las señales son mixtas. Por un lado la actividad real ha seguido desacelerándose en Brasil, a pesar de los esfuerzos de las autoridades económicas por reactivar la economía del país. De otra parte, economías como México, Chile, Ecuador, Perú y Venezuela, continúan creciendo a un buen ritmo, aunque algunas de ellas con aumentos inferiores al de su potencial. La mayor percepción de riesgo ha incrementado la volatilidad en los mercados internacionales de capital y se ha traducido en un ligero aumento de las primas de riesgo de las economías de la región y en una depreciación de sus monedas respecto al dólar de Estados Unidos. En relación con los precios internacionales del petróleo, las menores tensiones en Oriente Medio y el Norte de África, los elevados inventarios del crudo en Estados Unidos, y los mayores temores de una recesión en Europa, han permitido la disminución de estos precios. Pese a ello, los niveles continúan siendo favorables para las economías exportadoras. En este contexto, la política monetaria en las economías avanzadas continúa siendo laxa y no se esperan endurecimientos en los próximos trimestres. Por el contrario, de deteriorarse más el entorno global, los bancos centrales de este grupo de países implementarían mayores medidas de estímulo. En resumen, los resultados a marzo sugieren que en 2012 el PIB de los socios comerciales del país puede crecer a una tasa positiva pero menor a la observada en 2011. Las escasas cifras de actividad real mundial de abril continúan apuntando hacia un escenario de desaceleración global. El mercado financiero internacional está a la expectativa de los resultados de las elecciones que se llevarán a cabo en Grecia el 17 de junio. Existe una buena probabilidad de que un nuevo gobierno electo liderado por el partido de izquierda Syriza esté inclinado a renegociar o incluso echar para atrás las medidas de reformas estructurales y compromisos fiscales que el gobierno predecesor aceptó como condición para acceder al segundo rescate financiero a principios de este año. El incumplimiento de estos compromisos pararía el flujo de los fondos de rescate y de financiación externa, lo que implicaría para el país, entre otras cosas, el no pago de la deuda soberana, una crisis bancaria y, con ello, la inminente salida del Euro. Este escenario podría tener consecuencias graves para las economías de toda la zona euro en cuanto el no pago de la deuda griega oficial y privada traería cuantiosas pérdidas tanto para los gobiernos como para el sistema bancario europeo. Asimismo la posible salida de Grecia de la zona euro podría contagiar otros países de la región. El no pago de la deuda por parte de Grecia, aumentaría la presión sobre la deuda soberana de otras economías de la periferia europea en problemas, castigando aún más el costo de la deuda de estos países al percibirla como más riesgosa. Si países más grandes como España o Italia llegaran a esta situación, los fondos de rescate del BCE y FMI podrían ser insuficientes para proveer un alivio. El sistema bancario europeo se encuentra ya en una situación precaria por lo que un choque financiero importante, como el que se puede dar si Grecia no permanece en el euro, podría afectarlo aún más, con repercusiones muy fuertes en el sector real. Incluso se han empezado a contemplar escenarios de posibles corridas bancarias en los bancos de la periferia europea ante el temor del público de la insolvencia de estos sistemas financieros. En las últimas semanas los mercados financieros han estado igualmente atentos a la evolución del sistema bancario en España. A mediados de abril el gobierno español se vio en la necesidad de intervenir Bankia, uno de los principales bancos comerciales por activos del país, como consecuencia de la alta exposición de la entidad al sector inmobiliario que ha incrementado la cantidad de créditos incobrables. La capitalización de Bankia deja al descubierto la débil situación de la banca española y su alta exposición al sector inmobiliario. Aunque los otros grandes bancos del país no presentan estos problemas, no es posible afirmar lo mismo de otras entidades de menor tamaño. Ante esta situación, no es del todo descartable que el gobierno español tenga que intervenir nuevos bancos, lo cual comprometería aún más su situación fiscal. Ante el temor de que esta situación se pueda generalizar en otros países, la Comisión Europea ha planteado que el fondo de rescate de la región pueda ser utilizado para capitalizar los bancos que necesiten dichos recursos. Sin embargo, esta idea no ha contado con el respaldo de Alemania y aunque logre aprobarse, se necesitan muchos debates y consenso político que podrían ser muy demorados para la actual situación de la banca europea. El aumento en la percepción de riesgo y el deterioro en la confianza de los consumidores e inversionistas de la región provocado por estos hechos recientes, de prolongarse, afectaría negativamente el dinamismo de la zona euro, ya de por sí débil, aumentando el riesgo de una recesión fuerte en un entorno en el cual sus economías tienen escaso espacio fiscal y monetario para enfrentarla y un sistema financiero frágil. Si bien aún no se cuenta con la información para evaluar el efecto de estos últimos acontecimientos sobre el sector real mundial, si la incertidumbre aumenta y los niveles de riesgo permanecen elevados, ello podría afectar la confianza a nivel mundial, con consecuencias negativas sobre el consumo, la inversión, el crédito y el comercio global en general. Adicionalmente, si se materializa una salida de Grecia de la zona del euro, la posibilidad de una crisis financiera que lleve a una nueva recesión global podría incrementarse. Bajo este último escenario, los efectos negativos sobre la actividad económica de Colombia podrían llegar a ser fuertes. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA La Junta Directiva por unanimidad consideró apropiado mantener inalterada la tasa de interés de política teniendo en cuenta los siguientes factores: (i) En el contexto externo, el un crecimiento de la economía alemana en el primer trimestre más que compensó las caídas del PIB en el resto. En el mismo periodo, Japón y en menor medida Estados Unidos, registraron crecimientos mayores a los proyectados. En las economías emergentes grandes, como China, Brasil e india se ha dado una desaceleración mayor a la prevista; (ii) En mayo aumentó significativamente la incertidumbre sobre la permanencia de Grecia en la zona del euro. Esto, junto a otros hechos financieros y políticos en Europa, elevó las primas de riesgo internacional, afectó negativamente los mercados de valores y debilitó las monedas de las economías emergentes, incluyendo el peso colombiano; (iii) Los recientes acontecimientos de Europa aumentaron el riesgo de una fuerte recesión en ese continente, en un entorno en el cual sus economías tienen escaso espacio fiscal y monetario para enfrentarla, y un sistema financiero frágil. El incremento en la probabilidad de este escenario elevó la incertidumbre de los pronósticos centrales del crecimiento para Colombia; (iv) El precio internacional del petróleo disminuyó por debajo de lo esperado un mes atrás. Pese a ello, los términos de intercambio continúan elevados y estimulan el crecimiento del ingreso nacional; (v) En Colombia se espera que el crecimiento económico en 2012 se sitúe entre el 4% y 6%. La principal fuente de este crecimiento continuará siendo el dinamismo de la demanda privada, tanto del consumo de los hogares como de la inversión. Sin embargo la información disponible a lo largo del año sugiere una moderación en el crecimiento del consumo de los hogares y de la inversión, coherente con la proyección de crecimiento para todo el año; (vi) El aumento de la cartera comercial se desaceleró, explicado por la menor dinámica de los préstamos en moneda extranjera. El crecimiento del crédito a los hogares permanece alto, especialmente el de consumo. La calidad de esta última modalidad de cartera se ha deteriorado; (vii) En abril la inflación anual (3,43%) fue algo menor a lo estimado y similar al registro de un mes atrás. Los promedios de las medidas de inflación básica y de las expectativas de inflación aumentaron levemente, aunque los riesgos sobre la inflación son moderados. Unos codirectores resaltaron el buen desempeño de la economía colombiana, impulsado por el comportamiento dinámico del consumo de los hogares y sus altos niveles de confianza, el dinamismo de los flujos de inversión extrajera directa; los favorables términos de intercambio observados hasta el momento, y el dinamismo de la mayoría de sectores productivos. Todo lo anterior permite pensar que, con los niveles actuales de tasas de interés, en nuestro escenario central el crecimiento de la economía se encuentra cercano a su potencial y las proyecciones de inflación cercanas a la meta de 3%. Sin embargo, enfatizaron el alto y creciente grado de incertidumbre que enfrenta la economía colombiana, producto de los problemas de deuda pública y de la debilidad del sistema financiero en algunas economías de la zona euro. De materializarse estos riesgos, podrían afectarse de manera considerable los precios de los principales productos de exportación y la confianza. De todas formas el Banco de la República cuenta con el marco de política monetaria para enfrentarlos, y con las herramientas y recursos suficientes para atender las necesidades de liquidez en moneda local y extranjera, y aquellas que pudieran aparecer en un ambiente de turbulencia financiera internacional. Adicionalmente, los codirectores reiteraron la necesidad de continuar con un cuidadoso monitoreo al crédito de consumo que, aunque mostró una leve moderación en las últimas semanas, mantiene una tasa de crecimiento real anual elevada en relación con el crecimiento real del PIB. Finalmente, un codirector, después de sumarse a la decisión de dejar inalterada la tasa de interés de referencia, manifestó que, en su opinión, Europa ya entró en recesión y, en contracción si se excluye a Alemania. Considera que la situación de España es especialmente difícil y que China, India y Brasil se están desacelerando más de lo esperado. Aunque las exportaciones colombianas en dólares siguen aumentando, constata que las agrícolas e industriales han perdido dinamismo, mientras que las minero energéticas crecen en forma vigorosa. En la actividad económica interna ve indicios de desaceleración y le inquieta el pobre comportamiento de la industria. Dado que una buena política monetaria depende de la capacidad de anticipación por parte de sus autoridades, considera que, de mantenerse el actual estado de cosas, podría ser necesario emprender una fase de relajamiento de la política monetaria, siempre y cuando la inflación y las expectativas continúen convergiendo, así sea lentamente, hacia el punto medio del rango meta. Por su parte el Ministro de Hacienda estimó que gracias al buen resultado del recaudo y buenas condiciones de financiamiento reciente el Gobierno Nacional cuenta con recursos líquidos suficientes para financiar su presupuesto y de ser conveniente implementar políticas fiscales contra cíclicas. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA De acuerdo con la evaluación del balance de riesgos, la Junta Directiva decidió mantener inalterada la tasa de interés de intervención. La nueva información permitirá establecer nuevas acciones de política monetaria. La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo de la situación internacional, del comportamiento y proyecciones de la inflación, el crecimiento, el comportamiento de los mercados de activos y reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible. Bogotá, D. C.
2012-06-01
- Minutas de la reunión de la JDBR del 29 de junio de 2012 1. Antecedentes a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor en mayo se situó en 3,44%, 1 punto base (pb) por encima del dato del mes anterior. Este resultado se explica por un aumento de la variación anual del IPC sin limentos, que pasó de 2,81% en abril a 2,94% en mayo, y una reducción de 29 pb en la variación anual del IPC de alimentos (4,72%) frente al registro del mes anterior. En lo corrido del año se ha acumulado un aumento del IPC de 1,92%, inferior al observado durante el mismo período de 2011 (2,2%). En el IPC sin alimentos, el aumento de la variación anual se dio por una aceleración importante de la variación anual del IPC de regulados en el último mes (de 3,83% a 4,42%) hecho explicado, principalmente, por el incremento en el precio de la energía. En cuanto a los combustibles, el menor precio internacional del petróleo se ha comenzado a transferir al precio interno de la gasolina, cuya variación anual ha caído de 5,7% en febrero a 3,7% en mayo. Las demás sub-canastas del IPC sin alimentos, la de transables y la de no transables, presentaron pequeños cambios en mayo sin llegar a afectar de manera importante el desempeño de la inflación anual. Mientras la variación anual de los transables aumentó de 0,91% a 0,96%, la de los no transables cayó de 3,77% a 3,74%. Los arriendos continuaron aumentando (5 pb) como lo vienen haciendo desde hace más de un año, para ubicarse en mayo en 3,7%. La variación anual del IPC de alimentos descendió de 5,01% en abril a 4,72% en mayo. Este comportamiento se explicó por el grupo de perecederos, que en el mismo periodo se desaceleró de 4,68% a 1,18%, sugiriendo que las condiciones de la oferta agropecuaria han tendido a normalizarse. Las alzas, por su parte, provinieron de las sub-canastas de alimentos procesados (arroz entre otros) y de las comidas fuera del hogar. Los indicadores de inflación básica aumentaron de manera leve. El promedio de tres indicadores monitoreados por el Banco de la República cerró en 3,35%, 5 pb más que el mes anterior. En mayo, la variación anual del IPP se redujo de 1,56% a 0,80% y continuó con la caída iniciada en octubre pasado. En los dos últimos meses la variación del IPP de importados (-1,1%) viene siendo menos negativa, en línea con la menor apreciación del peso registrada en abril y mayo. En contraste, la variación anual del IPP local (1,2%) continuó desacelerándose durante mayo, reflejando el menor ritmo de ajuste tanto del IPP agropecuario, como del industrial y minero. Las expectativas de inflación derivadas de los TES a diferentes horizontes disminuyeron en el último mes y se encuentran alrededor de 3%. Las obtenidas a partir de la encuesta mensual no presentaron cambios relevantes: la inflación esperada a diciembre es 3,3% y a doce meses es 3,5%. b. Crecimiento En el primer trimestre de 2012 el PIB colombiano creció 4,7% en términos anuales, cifra que se ubicó en la parte inferior del intervalo de pronóstico del equipo técnico del Banco de la República. De esta forma, la economía nacional completó dos trimestres registrando desaceleraciones en la tasa de crecimiento, luego de expandirse 7,5% en el tercer trimestre de 2011 y 6,1% en el cuarto. Frente al trimestre anterior también se presentó una desaceleración pues el PIB pasó de crecer en términos anualizados de 5.1% al final del año anterior a 1.1% en el primer trimestre Por tipo de gasto, la desaceleración del PIB se explicó principalmente por la moderación en la dinámica de la inversión, al pasar de crecer 14,2% anual en el último trimestre de 2011 a 8,3% en el primero de 2012. Dentro de este agregado se destacó la caída registrada en las obras civiles (8,1%) que estuvo explicada en buena medida por un descenso en la que corresponde al sector petrolero y minero. Las inversiones en equipo de transporte y en maquinaria también registraron desaceleraciones, pero crecen a tasas altas y superiores a sus promedios desde 2000. El único componente de la inversión que se aceleró fue construcción de edificaciones de 1,8% en el cuarto trimestre de 2011 a 4,5% en el primer trimestre de 2012. En el consumo de los hogares también se observó una desaceleración en su tasa de crecimiento anual. Este agregado, con una expansión de 5,9% (en el cuarto trimestre de 2011 había sido de 6,1%) fue la variable con mayor contribución al desempeño del PIB y continuó creciendo a una tasa superior a su promedio desde 2000. El gasto de los hogares en el primer trimestre de 2012 estuvo impulsado principalmente por las compras de bienes no durables y por la dinámica de los servicios. Por su parte, el gasto en bienes semidurables se desaceleró aunque mantuvo un ritmo de crecimiento alto. El consumo en bienes durables alcanzó una tasa de expansión anual inferior a su promedio desde 2000 por segundo trimestre consecutivo. El consumo del gobierno continuó mostrando un crecimiento moderado, convirtiéndose en el agregado menos dinámico por el lado de la demanda. Como resultado de todo lo anterior, en el primer trimestre la demanda interna creció a una tasa anual de 6,1%. En el primer trimestre se registró una significativa reducción en el crecimiento anual de las exportaciones y de las importaciones. En estas últimas el crecimiento pasó de 21,3% en el cuarto trimestre del año pasado a 13% en el primero de 2012. En el caso de las ventas externas la tasa pasó de 16,2% a 6,3%. La contribución combinada de estos agregados al crecimiento del PIB fue negativa (-2,2 pp). Por el lado de la oferta, las ramas que más contribuyeron al crecimiento anual del PIB del primer trimestre fueron, en su orden, servicios financieros y de alquiler, minería, y comercio, restaurantes y hoteles. En los sectores de minería e industria manufacturera se observaron menores registros de expansión. En el caso de la minería la desaceleración obedeció a problemas de oferta. El PIB industrial pasó de crecer 3,9% en el último trimestre de 2011 a 0,6% en el primero de 2012. Los sectores agrícola y de construcción presentaron caídas anuales, el primero de ellos debido a una menor producción de café y, el segundo, al comportamiento de las obras civiles. Con respecto a la situación económica para el segundo trimestre, la mayor parte de la información disponible registra una desaceleración de la actividad económica. En abril la producción industrial se contrajo en términos anuales por segundo mes consecutivo. En lo que respecta a la construcción, el área aprobada según licencias continuó registrando retrocesos anuales. Los indicadores de demanda apuntan a que en el segundo trimestre el consumo de los hogares se continuaría desacelerando, acercándose a su crecimiento promedio desde 2000 (4,0%). Esta desaceleración se infiere principalmente de los datos sobre las ventas del comercio (que cayeron en términos anuales 2,8% en abril) y de las importaciones (las de bienes de consumo en dólares en abril crecieron 6% luego de crecer en marzo cerca de 10%). La confianza de los hogares en términos trimestrales ha disminuido levemente frente al primer trimestre del año. Las exportaciones colombianas en abril registraron un valor de US$ 4.886 millones y crecieron 4% anual. Esta tasa de crecimiento es menor a la observada en meses anteriores (22,5% en promedio anual entre enero y marzo) y se explica por una reducción de 41,7% en las exportaciones agrícolas, una caída de 9% de las exportaciones industriales sin bienes básicos y un menor ritmo de crecimiento de las ventas externas de origen minero (11,5% anual). Por productos, las exportaciones de petróleo y derivados crecieron 19,4% anual en abril, compensando la caída de 20% en las ventas de carbón. En cuanto a las exportaciones de café, banano y flores, éstas registraron disminuciones de 57%, 10,9% y 18,7% respectivamente. Por su parte, la caída de las exportaciones industriales se debió a las menores ventas de alimentos y bebidas (-15,6%), químicos (-9,8%) y textiles (-16,4%). c. Variables Financieras La cartera total (MN y ME) registró en mayo un incremento anual de 17,7%, inferior en 70 pb al de abril y en 346 pb frente a diciembre de 2011. Este comportamiento fue determinado por la cartera comercial, cuyo crecimiento se sitúo en 15,3%, tasa 60 pb menor a la del mes anterior y que contribuye a una desaceleración en lo corrido del año de 420 pb. En cuanto al crecimiento anual de la cartera de los hogares, la de consumo disminuyó de 25% en marzo a 22,1% a junio. De otro lado, la cartera hipotecaria presentó un crecimiento anual de 16,9% en mayo. Las tasas reales de interés (descontando el IPC sin alimentos) en mayo para créditos de consumo, hipotecario y comercial ordinario, en su orden, se ubicaron en 15,9%, 10,2% y 9,0% d. Contexto Externo En el segundo trimestre de 2012 los indicadores de la actividad real y de confianza muestran una desaceleración de la economía mundial. En Estados Unidos la información sugiere un menor ritmo de crecimiento, mientras que en la zona del euro y en Inglaterra la actividad económica continúa deteriorándose. Japón, por su parte, moderó su ritmo de expansión, después de la recuperación asociada con la reconstrucción. China e India, al igual que otras economías en desarrollo de Asia, también se han desacelerado. En América Latina, Brasil siguió mostrando tasas más bajas trimestre a trimestre, y a marzo el aumento anual de su PIB se acercó a cero. En Estados Unidos los indicadores de actividad real han seguido expandiéndose aunque la última información disponible evidencia algunas señales de desaceleración. Datos recientes del mercado laboral muestran indicios de que la recuperación que se había presentado en los primeros meses del año podría no continuar en la segunda mitad. Así, en junio la confianza de los consumidores y los índices de sentimiento en el sector manufacturero se debilitaron. Por su parte, en la zona del euro, aunque la economía no se contrajo nuevamente en los primeros tres meses del año, algunos indicadores de actividad real disponibles para el segundo trimestre evidencian que la región ha seguido debilitándose, por lo que es altamente probable que el PIB se contraiga en dicho periodo. Adicionalmente, a partir de mayo la incertidumbre en los mercados internacionales se incrementó debido al recrudecimiento de las tensiones políticas y financieras en la zona del euro. La amenaza de contagio a economías de tamaño importante como Italia se incrementó, haciendo que la percepción de riesgo en los mercados financieros internacionales aumentara considerablemente. Los resultados de las recientes elecciones en Grecia y el compromiso de la Unión Europea para rescatar la banca española sólo fueron un alivio temporal para el nerviosismo en los mercados, pues éstos no vislumbran en el corto plazo medidas para estabilizar la economía y conducirla a la recuperación. La evolución de la agenda sobre una mayor integración fiscal y financiera determinará la forma en que la percepción de riesgo se comporte en los próximos meses. Si dichas discusiones se hacen de una manera rápida y creíble se esperaría que la incertidumbre se reduzca. Los índices de confianza de empresarios y consumidores continúan deprimidos, mientras los índices de sentimiento en los sectores de manufacturas y servicios empeoraron. El deterioro de las perspectivas económicas y las señales que indican que estas pueden empeorar en el corto plazo, comprometerían aún más la posibilidad de una recuperación en los países desarrollados. Todo ello mantiene en niveles elevados el riesgo de las economías de la periferia europea, deteriora la confianza y podría llevar a la zona del euro a una caída de su producto mayor a la proyectada por los mercados. El menor dinamismo de Europa ha empezado a afectar el comportamiento de las economías de Asia emergente, reflejado en el debilitamiento de las exportaciones y de la producción industrial, acentuando la desaceleración que venían presentando desde mediados de 2011, generada por el retiro de las políticas de estímulo fiscal y monetario. Con excepción de Indonesia, las cifras de abril de 2012 de la producción industrial en las principales economías de Asia emergente muestran desaceleración. Para el caso específico de China, el crecimiento de la producción industrial, de las ventas al por menor y de la inversión se ha moderado en los últimos meses. En India, por su parte, el crecimiento económico ha disminuido de manera importante en los últimos trimestres y los indicadores de actividad real para el segundo trimestre evidencian que esta tendencia ha continuado. En las economías de América Latina el crecimiento económico de Chile, México, Perú y Venezuela fue favorable en el primer trimestre del año, situación contraria a la de Brasil, en donde la actividad real se desaceleró nuevamente. La información de abril del presente año muestra que la industria se ha contraído en Brasil, Colombia y Perú. En Chile, y en menor medida en México, el crecimiento del sector se ha desacelerado. La desaceleración económica mundial ha disminuido las presiones sobre los mercados internacionales de bienes básicos. Los precios del petróleo y de los alimentos se han reducido significativamente en los últimos meses. En este contexto, la política monetaria en las economías avanzadas continúa siendo laxa y no se esperan endurecimientos en los próximos trimestres. Por el contrario, de deteriorarse más el entorno global, los bancos centrales de este grupo de países implementarían mayores medidas de estímulo. Hasta el momento, los datos más recientes muestran que los principales efectos de la crisis europea y de la desaceleración mundial sobre la economía colombiana han sido un deterioro en las ventas externas, con lo que se registraría una desaceleración del crecimiento de los sectores transables diferentes a la minería, y una menor cotización del petróleo que afectaría a la baja los términos de intercambio. Respecto a este último, el índice observado a mayo aún conserva niveles altos, en parte como consecuencia del menor precio internacional de los bienes importados. Otros canales por los cuales se podría resentir la economía nacional (el financiamiento externo, la confianza interna y el riesgo país) hasta ahora no se han visto afectados de manera significativa. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA La Junta Directiva por mayoría consideró apropiado mantener inalterada la tasa de interés de política teniendo en cuenta los siguientes factores: (i) El crecimiento mundial ha disminuido en el segundo trimestre del año. En Estados Unidos, la información sugiere un menor ritmo de crecimiento, mientras que en la zona euro varios indicadores señalan que la economía se está contrayendo. Los problemas en esta región han afectado las perspectivas de la economía mundial a través de la confianza y los flujos de comercio y de capital. Las economías emergentes muestran un ritmo de expansión más moderado, reflejado principalmente, en el debilitamiento de las exportaciones y la producción industrial. (ii) En Colombia, al igual que en otros países emergentes, los efectos del debilitamiento de la economía mundial se han sentido a través de la menor demanda y precios más bajos de las exportaciones. Ello ha llevado, especialmente, a la desaceleración del crecimiento de los sectores transables diferentes a la minería. Tanto la producción industrial en marzo y abril, como el PIB de la agricultura en el primer trimestre del año, se contrajeron. (iii) En el primer trimestre cayó la construcción de obras civiles, fenómeno no contemplado en las proyecciones del Banco. En contraste, los sectores financiero, comercial y de transporte y comunicaciones mostraron un dinamismo importante, impulsado por el crecimiento de la demanda interna. Esta última se ha visto estimulada por los niveles favorables de confianza y financiamiento. (iv) En general, el crecimiento económico colombiano en el primer semestre ha sido inferior al esperado. El dato del crecimiento del PIB del primer trimestre se situó cerca del límite inferior del rango de pronóstico realizado por el equipo técnico del Banco para ese periodo. Se prevé una revisión a la baja en el rango de pronóstico para el año. (v) El crecimiento anual de la cartera comercial continúa desacelerándose. El del crédito a los hogares, si bien se ha moderado, aún permanece alto, especialmente el de consumo. La cartera hipotecaria crece a buen ritmo, junto a un índice de precios de la vivienda nueva que volvió a aumentar en marzo y que se mantiene en niveles históricamente altos. (vi) En mayo la inflación anual fue 3,44%, cifra similar al dato de abril. El promedio de las inflaciones básicas, al igual que la media de las expectativas de inflación entre uno y cinco años, se encuentran en una tasa algo superior al 3%. Unos Directores resaltaron el crecimiento dinámico de la demanda interna privada, el dinamismo en los flujos de inversión extranjera directa y una tasa de desempleo estable, pese al deterioro en el entorno internacional, y especialmente en la zona euro. Destacaron que a pesar de la reducción de las exportaciones del país, tanto por menores precios como cantidades, y de la desaceleración del crecimiento, mayor a lo proyectado, hasta el momento el financiamiento, la confianza y el riesgo país no se han visto afectados significativamente. Consideraron que las expectativas de inflación están cerca del punto medio del rango meta y que el crecimiento de la economía no está lejos de su potencial. Señalaron que, si bien, la dinámica del crédito se ha moderado en las últimas semanas, los peligros de desequilibrios financieros y toma de riesgos en la economía no han desaparecido, lo que podría afectar la sostenibilidad del crecimiento del producto y el empleo en el mediano plazo. Otros Directores manifestaron que, de acuerdo con la información disponible, se vislumbra el mantenimiento del deterioro económico internacional durante un periodo prolongado con efectos adversos sobre la demanda interna y los términos de intercambio. En el ámbito interno se observa una mayor desaceleración a la esperada en los sectores agrícola e industrial, los cuales son los mayores aportantes al empleo formal en el país. Manifestaron su opinión de que la efectividad de la política monetaria depende de la capacidad de anticipación por parte de las autoridades, por lo que en este escenario debe emprenderse una fase de relajamiento de la postura para evitar ajustes drásticos en el futuro. En consecuencia, propusieron una reducción de 25 pb en la tasa de intervención. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA De acuerdo con la evaluación del actual balance de riesgos, la Junta Directiva decidió mantener inalterada la tasa de interés de intervención. La nueva información permitirá establecer acciones de política monetaria. La Junta reitera que el Banco de la República cuenta con las herramientas y recursos suficientes para atender las necesidades de liquidez en moneda local y extranjera que regularmente requiere la economía y aquellas que pudieran aparecer en un ambiente de turbulencia financiera internacional. La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo de la situación internacional, del comportamiento y proyecciones de la inflación, el crecimiento, el comportamiento de los mercados de activos y reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible. Bogotá, D. C.
2012-07-01
- Minutas de la reunión de la JDBR del 27 de julio de 2012 El 27 de Julio de 2012 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Fernando Tenjo, Juan Pablo Zárate y César Vallejo, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. A continuación se hace un resumen de los principales temas tratados en dicha reunión. 1. Antecedentes a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor en junio se situó en 3,20%, 24 puntos base (pb) por debajo del dato del mes anterior. Este resultado se explica tanto por una reducción de la variación anual del IPC sin alimentos que pasó de 2,94% en mayo a 2,81% en junio y una reducción de 50 pb en la variación anual del IPC de alimentos (4,22%) frente al registro del mes anterior. En lo corrido del año se ha acumulado un aumento del IPC de 2,01%, inferior al observado durante el mismo período de 2011 (2,53%). En el IPC sin alimentos, la disminución de la variación anual se explicó principalmente por el componente de regulados y en particular por el precio interno de los combustibles, el cual ha venido respondiendo a los menores precios internacionales del petróleo que se observan desde abril. La variación anual del IPC de combustibles pasó de 3,7% a 1,8%. Los otros componentes de regulados (servicios públicos y transporte público) también presentaron caídas pero de menor cuantía. En junio también se presentó una reducción de la variación anual del IPC de no transables sin alimentos ni regulados (de 3,74% a 3,62%), que en parte puede ser atribuida en buena parte a una alta base de comparación. Sin embargo, se presentó una nueva alza en la variación anual de arriendos a 3,7% (8 pb más que en mayo). En diciembre del año pasado dicho valor fue de 3,4% y desde febrero de 2011 (3,0%) ha aumentado sin interrupción. Cabe señalar que los arriendos pesan cerca del 19% en el IPC total. Respecto a los transables sin alimentos ni regulados, su resultado en junio fue 1,0%, similar al de mayo, pero mayor a lo observado en el primer trimestre del año (alrededor de 0,7%). La menor apreciación anual del peso en los últimos meses puede estar relacionada con este fenómeno. La variación anual del IPC de alimentos descendió de 4,72% en mayo a 4,22% en junio. Los alimentos perecederos generalmente más afectados por las condiciones climáticas, fueron los que mayor descenso presentaron (de 1,1% a -2,0%), lo que en parte puede ser explicado por una recuperación de la oferta agropecuaria, estimulada por los precios relativamente altos de varios de estos alimentos hasta el tercer trimestre del año pasado. En el caso de alimentos procesados y comidas fuera del hogar no se observaron cambios de importancia. En este último componente la variación anual se situó en 5,5%, relativamente alta, lo que puede denotar algún tipo de presiones de demanda y/o de costos salariales en ese sector. En el último mes también se presentó un descenso de la inflación básica. El promedio de los tres indicadores monitoreados por el Banco de la República se situó en 3,35% frente a 3,20% del mes anterior. La variación anual del IPP también presentó reducciones importantes en junio, con una cifra que se situó en terreno negativo (en -0.69%) por primera vez en más de dos años. Para diciembre de 2011 el registro fue 5,5% y para mayo 0,8%. Una parte importante del descenso está asociado con la disminución de los precios del petróleo y de los demás combustibles. De mantenerse este comportamiento, apunta hacia una disminución de las presiones de costos no salariales en los próximos meses. Las expectativas de inflación derivadas de los TES a diferentes horizontes disminuyeron en junio; las expectativas a 5 años, se situaron por debajo de 3% después de varios meses de registros superiores a este número. Las de 2 y 3 años se mantuvieron por debajo de dicha cifra, con tendencia 3 decreciente. Las obtenidas a partir de la encuesta mensual muestran una inflación esperada para finales de este año de 3,1% y de 3,32%para julio de 2013, 17 pb y 14 pb menos que lo reportado hace un mes. b. Crecimiento La información más reciente para el segundo trimestre de 2012, sobre todo la relacionada con las el consumo privado y la industria, sugiere que la economía se habría desacelerado. Los indicadores relacionados con el consumo, dentro de los que se destacan las ventas minoristas, apuntan a que durante el segundo trimestre el consumo habría crecido a una tasa significativamente menor que la registrada en el primer trimestre del año. De acuerdo con el DANE, en los meses de abril y mayo las ventas al por menor se contrajeron a una tasa anual promedio de 1,0% (la primera caída anual registrada en casi tres años). Cuando se excluyen las ventas de vehículos el comportamiento es similar, aunque en este caso el crecimiento anual promedio para abril y mayo es de 0,5%. La moderación en las importaciones de bienes de consumo, las cuales pasaron de crecer 19% en el primer trimestre a cerca de 8% en promedio en abril y mayo, apuntan igualmente hacia una desaceleración de este tipo de gasto. Según Econometría, con datos a junio las ventas de vehículos disminuyeron 1% en términos anuales y 0,6% en promedio para el trimestre. Con cifras a junio igualmente se observó un descenso en el indicador de confianza de los consumidores, medido por Fedesarrollo, lo que también apunta a un menor crecimiento del consumo para este periodo. El menor crecimiento del consumo para el segundo trimestre coincide con una desaceleración en la tasa de crecimiento anual del crédito con ese destino de 25,1% en marzo a 21,2% en la primera semana de julio. Lo anterior en un entorno de tasas de interés estables que se mantienen aún por debajo de sus promedios desde 2000 (con excepción de la tasa de tarjeta de crédito). Por otro lado, la información relacionada con la inversión muestra que, si bien las cifras de importaciones de bienes de capital a mayo (crecieron en el bimestre abril-mayo a una tasa anual de 12% frente a una tasa de 8% en el primer trimestre) indican que este gasto podría estar creciendo a un mayor ritmo que antes, para el conjunto de la inversión el panorama es incierto debido a que depende de la velocidad de recuperación de las obras civiles. Respecto a las ventas externas colombianas en dólares, en mayo crecieron 1,2% respecto al mismo mes del año anterior. Esta tasa de crecimiento es menor que la observada en meses anteriores (17,6% en promedio anual entre enero y abril) y se explica por la reducción de 1% en las exportaciones mineras y por la caída de 12,4% en las exportaciones de los principales productos agrícolas. Por su parte, las ventas externas del resto de bienes, los cuales son principalmente industriales (22% del total exportado), crecieron en términos anuales 14,6%. Por el lado de la oferta, los indicadores disponibles sugieren que el PIB de la industria retrocedería en términos anuales en el segundo trimestre. En abril y mayo el índice de producción industrial sin trilla de café se contrajo en términos anuales 1,3% en promedio y en niveles mantuvo una tendencia decreciente. Si bien buena parte de la caída la explicaron los sectores de químicos que continuaron reportando problemas de disponibilidad de materias primas. Aún sin estas ramas la producción industrial se contrajo en dichos meses (0,1% anual en promedio). Otros indicadores de la industria también señalaron un comportamiento débil para el sector. Los indicadores de pedidos y existencias de Fedesarrollo a mayo mostraron retrocesos, aunque todavía se encuentran por encima de sus promedios de los últimos 20 años. Lo anterior generó una caída en el índice de confianza de los industriales, que de todas maneras resulta menor que la desaceleración observada en el crecimiento de la producción industrial. En el sector de la construcción, los indicadores disponibles tampoco sugieren un dinamismo importante. La producción de cemento cayó en términos anuales 0,8% en promedio en abril y mayo, mientras que las licencias de construcción presentaron una contracción promedio anual de 33% en esos mismos meses. En este último caso la fuerte caída es producto de los niveles atípicamente altos con los que se están comparando. Por su parte, en el sector agropecuario la recuperación de la producción de café, que creció 18% anual en el segundo trimestre, así como el aumento en el sacrificio de ganado en los meses de abril y mayo, permiten esperar que el sector revierta los registros de crecimientos negativos de los dos trimestres anteriores. 5 Todo lo anterior permite prever que en el 2012 el crecimiento del PIB se situaría entre 3% y 5%. Si bien el consumo y la inversión seguirán siendo la principal fuente del crecimiento crecerían menos que el año anterior. Por ramas de actividad, los sectores más dinámicos continuarían siendo la minería y los servicios financieros, tal como ocurrió en el primer trimestre, mientras que los de desempeño más bajo serían la industria y la construcción. Para 2013 se proyecta un crecimiento similar al de 2012. c. Variables Financieras El crédito total (MN y ME) registró en junio un incremento anual de 17,15%, porcentaje menor en 53 pb y en 254 pb a los observados, respectivamente un mes y un trimestre atrás. La desaceleración mensual y trimestral se presentó en todas las modalidades de cartera, cuyas tasas crecimiento en junio fueron: para la de consumo 21,6%, con una reducción mensual de 105 pb y trimestral de 376 pb; para la hipotecaria 16,11%, con una reducción mensual de 57 pb y trimestral de 113 pb; y para la comercial 15,17%, con una reducción mensual de 11 pb y trimestral de 230 pb. Por su parte, en junio las tasas de interés real (descontando el IPC sin alimentos) para créditos de consumo, hipotecario y comercial ordinario se ubicaron, en su orden, en 15,85%, 10,02% y 9,27%, tasas menores a sus promedios respectivos calculados desde 1998 (excluyendo la de crédito hipotecario cuyo promedio se mide a partir de mayo 2002). d. Contexto Externo Durante el segundo trimestre del año la actividad económica global se debilitó más de lo esperado, en buena parte por la mayor incertidumbre generada por la crisis de la deuda pública europea. Por esa misma razón, en los últimos meses se ha incrementado la probabilidad de que la desaceleración mundial para el presente año y para 2013 se profundice. Para el próximo año, los pronósticos más recientes de los principales organismos internacionales siguen indicando una recuperación del crecimiento mundial frente a 2012, aunque a un menor ritmo que lo estimado en meses anteriores. Los indicadores de actividad real para la zona del euro muestran que la economía probablemente se contrajo más de lo previsto en el segundo trimestre del año. En esta línea, estimaciones preliminares de organismos gubernamentales para Francia y España evidencian que el crecimiento 6 económico fue negativo entre abril y junio. El pobre comportamiento de las economías de la periferia de esta región ha afectado de manera significativa la confianza de empresarios y consumidores y ha comenzado a restar dinamismo a las economías de la región, que hasta ahora presentaban resultados más sólidos. En lo que respecta al mercado laboral, la tasa de desempleo para la zona del euro en su conjunto se situó en 11,1% en junio, cifra que representa un aumento respecto a los meses anteriores. Adicionalmente, las condiciones crediticias se han seguido estrechando, lo que evidencia la renuencia por parte de los bancos comerciales a reactivar el crédito. Las últimas medidas que las autoridades europeas han aprobado, tales como la posibilidad de la capitalización directa de la banca española mediante el uso de los recursos de los fondos de rescate de la región y el plan de 120.000 millones de euros (equivalentes al 1% del PIB de la región) para incentivar el crecimiento económico, redujeron momentáneamente la incertidumbre pero aún no logran convencer a los mercados de la posibilidad de una recuperación económica rápida en la región. Por ejemplo, a pesar de estos anuncios y el nuevo plan de austeridad fiscal en España, continúan las presiones en el mercado de la deuda pública de España, en parte por las dudas sobre la viabilidad de este programa fiscal, incrementado sustancialmente la prima de riesgo. En el caso de los Estados Unidos, el crecimiento de la economía continuó siendo débil. Además, los indicadores recientes de consumo y de actividad manufacturera se desaceleraron en los últimos meses. El registro más reciente del índice de sentimiento manufacturero pasó a terreno negativo, dando señales de que la producción se podría desacelerar en los próximos meses en los Estados Unidos. Aunque el mercado de vivienda ha mostrado algunos síntomas de recuperación, estos todavía son incipientes y se dan desde niveles muy bajos como para representar una aceleración en la producción. El empeoramiento de la situación europea puede poner en riesgo el crecimiento de la economía de los Estados Unidos, al deteriorar aún más la confianza de los hogares y empeorar las restricciones crediticias a nivel global. El menor ritmo de expansión de las economías desarrolladas ha limitado el crecimiento de los países emergentes, especialmente los asiáticos, cuyos vínculos comerciales con Europa son mayores. En este contexto, el crecimiento del PIB se desaceleró nuevamente en China en el segundo trimestre del año, pasando de 8,1% a 7,6% anual. Para el caso de América Latina, en Brasil sigue sin observarse una reactivación del crecimiento pese a las medidas de estímulo. Otras economías como México, Chile y Venezuela muestran un mejor desempeño de sus indicadores, aunque a mayo se observó una desaceleración de la actividad industrial para los dos primeros países. En ese entorno, con excepción de algunos precios agrícolas, los precios internacionales de los bienes básicos han disminuido pero aún superan sus promedios de los últimos años. Los excesos globales de capacidad, y los menores precios internacionales de los productos básicos (con excepción de algunos bienes agrícolas), han moderado las presiones inflacionarias y han permitido políticas monetarias expansivas en un buen número de países. En las economías emergentes, por ejemplo, los bancos centrales de Brasil, China y Corea del Sur han reducido recientemente sus tasas de interés, buscando contrarrestar los efectos de la desaceleración de la demanda. En las economías avanzadas, la política monetaria continúa siendo laxa, y de deteriorarse más el entorno global, los bancos centrales de este grupo de países podrían implementar mayores medidas de estímulo. En resumen, se espera que en lo que resta de 2012, al igual que está ocurriendo en muchos países emergentes, el debilitamiento de la economía mundial afecte negativamente el crecimiento de la economía colombiana a través de una menor demanda externa y de los menores precios internacionales de los principales productos de exportación. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA La Junta Directiva por mayoría acordó reducir en 25 pb su tasa de interés de intervención. De esta forma la tasa base para las subastas de expansión será de 5%. La decisión se tomó teniendo en cuenta lo siguiente: (i) El crecimiento mundial continúa debilitándose más de lo esperado. En Estados Unidos, la información sugiere un menor ritmo de crecimiento, mientras que la zona euro se está contrayendo. En China y otras economías emergentes la desaceleración del crecimiento ha sido mayor a la anticipada, reflejando el debilitamiento de la demanda mundial y acciones previas de política; (ii) Los excesos globales de capacidad y los menores precios internacionales de los productos básicos (con excepción de algunos bienes agrícolas) han moderado las presiones inflacionarias y han permitido políticas monetarias expansivas en un buen número de países. En las economías emergentes, por ejemplo, los bancos centrales de Brasil, China y Corea del Sur han reducido recientemente sus tasas de interés, buscando contrarrestar los efectos de la desaceleración de la demanda; (iii) El debilitamiento de la economía mundial está afectando negativamente el crecimiento de la economía colombiana a través de la menor demanda externa y los menores precios internacionales de los principales productos de exportación. Es probable que estos factores continúen operando en esa dirección los próximos trimestres. Si bien el consumo y la inversión serán la principal fuente del crecimiento del PIB en 2012, estos componentes de la demanda interna crecerán menos que el año anterior y reducirán, o incluso eliminarán, las actuales presiones de capacidad productiva; (iv) En general, con la nueva información disponible se proyecta para 2012 un crecimiento del PIB entre el 3% y el 5%. La amplitud del rango obedece a la incertidumbre sobre el tamaño de la desaceleración global y su impacto en la economía colombiana, así como sobre la recuperación de las obras civiles y la superación de algunos choques de oferta negativos que están afectando los sectores industrial y minero. Para 2013 se proyecta un crecimiento similar al de 2012. Como es de esperar, los niveles de incertidumbre aumentan en la medida que crece el horizonte de pronóstico; (v) El crecimiento anual de la cartera comercial continúa desacelerándose. El del crédito de consumo también se ha moderado pero permanece alto. La cartera hipotecaria crece a buen ritmo, junto a un índice de precios de la vivienda nueva que se mantiene en niveles históricamente altos; (vi) En junio la inflación anual fue 3,2%, cifra inferior a la proyectada por el equipo técnico del Banco. Todas las medidas de inflación básica disminuyeron y su promedio se situó cerca de 3,0%. Las expectativas de inflación también se redujeron: para diciembre de 2012 se espera 3,1% y para julio de 2013 cerca de 3,3%, mientras que las derivadas del mercado de TES a horizontes entre dos y cinco años se encuentran alrededor de 2,5%. La mayoría de los miembros de la Junta consideró apropiado reducir la tasa de interés de intervención en 25 pb. Los excesos de gasto en la economía han venido reduciéndose a una velocidad mayor a la esperada, y el crecimiento del crédito se ha moderado. Así mismo, la inflación y las expectativas de inflación han caído. Si bien es de esperar que algunos de los factores que han debilitado el crecimiento del gasto interno se reversen pronto 9 (por ejemplo, la fuerte caída en la inversión en obras civiles), los asociados a factores externos probablemente continuarán en los próximos trimestres. En cuanto el comportamiento futuro de la inflación, los riesgos de desviaciones de la meta son bajos y hasta el momento se ven limitados a un aumento temporal de los precios de los alimentos en 2013, que debe corregirse en el segundo semestre de ese año. Por su parte, en este momento se considera acotado el riesgo de que una reducción de la tasa de interés de intervención de 25 pb incremente los riesgos de desbalances financieros, que posteriormente comprometan el crecimiento del empleo y el producto. La reducción de la tasa de interés de intervención representa un cambio en la postura monetaria, señala el compromiso de la Junta de contribuir a maximizar el crecimiento del empleo y el producto coherente con el logro de las metas de inflación, y se define contemplando sus efectos en varios mercados simultáneamente, teniendo en cuenta la existencia de incertidumbre y evaluando cuidadosamente sus riesgos. Otros miembros consideraron apropiado una reducción de 50 puntos básicos de la tasa de intervención del Banco, como quiera que, de acuerdo con la información disponible, se confirma que el deterioro económico internacional es mucho mayor al que se había previsto en los últimos meses, al tiempo que se eleva cada día más la probabilidad de que dicha tendencia negativa se acentúe. En el ámbito interno, se observa que la industria va camino de la contracción, y que, según los indicadores disponibles, el consumo en el segundo trimestre habría crecido significativamente menos que en el primero, al igual que el PIB, el cual registraría una desaceleración por tercer trimestre consecutivo. En tanto que se ha incrementado la percepción de riesgo a nivel local y han caído los índices de confianza de consumidores y empresarios, lo cual indica que la actividad económica continuaría perdiendo fuerza. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA De acuerdo con la evaluación del actual balance de riesgos, la Junta Directiva acordó reducir la tasa de interés de intervención del Banco de la República en 25 puntos básicos. La nueva información permitirá establecer acciones futuras de política monetaria, tanto la concerniente al desarrollo de los eventos en los países avanzados y su impacto en la confianza, la demanda global y los precios 10 internacionales de los bienes básicos, como la proveniente de la dinámica interna. La Junta reitera que el Banco de la República cuenta con las herramientas y recursos suficientes para atender las necesidades de liquidez en moneda local y extranjera que regularmente requiere la economía y aquellas que pudieran aparecer en un ambiente de turbulencia financiera internacional. La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo de la situación internacional, del comportamiento y proyecciones de la inflación, el crecimiento, el comportamiento de los mercados de activos y reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible. Bogotá, D. C.
2012-08-01
- Minutas de la reunión de la JDBR del 24 de agosto de 2012 El 24 de Agosto de 2012 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Juan Pablo Zárate y César Vallejo, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. 1. Antecedentes a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor en julio se situó en 3,03%, 17 puntos base (pb) por debajo del dato del mes anterior. Este resultado se explica por una reducción de la variación anual del IPC sin alimentos que pasó de 2,80% en junio a 2,74% en julio y una reducción de 43 pb en la variación anual del IPC de alimentos (3,79%) frente al registro del mes anterior. Para el año corrido el aumento acumulado del IPC asciende a 1,98% frente 2,67% registrado en igual período de 2011. En el IPC sin alimentos, la disminución de la variación anual se explicó principalmente por el componente de regulados que pasó de 3,92% a 3,48%. Esta reducción se concentró en las tarifas de servicios públicos (de 5,1% a 3,0%), específicamente en las de energía eléctrica. Otra caída importante, y por segundo mes consecutivo, se dio en el precio del gas domiciliario, el cual estaría respondiendo a los menores precios internacionales de los combustibles observados entre abril y junio de este año. Por esta misma razón continuó reduciéndose el precio interno de la gasolina. En las otras dos sub-canastas del IPC sin alimentos– transables y no transables sin regulados– los cambios de un mes a otro fueron mínimos. En el primer caso, la variación anual de 1,03%, aunque baja frente a la inflación total, es alta si se compara con lo sucedido el año pasado. Este comportamiento estaría asociado con la menor apreciación del tipo de cambio en lo corrido del año. En el segundo caso el ligero aumento en julio de 6pb (a 3,68%) fue en parte motivado por reajustes en los servicios de diversión (fútbol). La variación anual del IPC de arriendos, el principal componente, se mantuvo estable alrededor de 3,8% por primera vez después de 16 meses de aumentos graduales. Otros servicios presentan ajustes anuales relativamente bajos por lo que puede concluirse que las presiones de demanda a julio eran pocas. La variación anual del IPC de alimentos descendió de 4,22% en junio a 3,79% en julio. Este resultado se explicó nuevamente por los productos perecederos donde un conjunto amplio de este tipo de ítems presentó ajustes bajos o disminuciones de sus precios. Factores como las condiciones climáticas favorables en la mayor parte del primer semestre, así como unos precios altos en los trimestres anteriores habrían estimulado la oferta. En julio, también hubo una disminución en la variación anual del IPC de alimentos procesados, entre ellos en alimentos de origen importado, lo que sugiere que las alzas de los precios internacionales en los últimos dos meses no han impactado los precios al consumidor en Colombia. Finalmente, la variación anual del precio de las comidas fuera del hogar se redujo por segundo mes consecutivo a 5,37%. La inflación básica se mantuvo estable en julio frente a lo observado en el mes pasado. El promedio de los cuatro indicadores de inflación básica monitoreados por el Banco pasó de 3,02% anual a 3,04% en el último mes. Desde noviembre de 2011 se interrumpió la tendencia ascendente que mostraba esta variable. La variación anual del IPP también presentó reducciones en julio, con una cifra que se situó en terreno negativo (-0,39%) por segundo mes consecutivo (en junio había sido -0,69%). El IPP local subió levemente, manteniéndose en terreno negativo mientras que el componente importado no registró cambios importantes y continuó igualmente en terreno negativo. En julio el descenso de las expectativas de inflación fue importante. Las expectativas de inflación derivadas de los TES a 2, 3 y 5 años continuaron disminuyendo, situándose alrededor de 2,4% para los tres casos. Las obtenidas a partir de la encuesta mensual muestran una inflación esperada para finales de este año de 2,93% y para agosto de 2013 de 3,27%, 17 pb y 10 pb respectivamente, menos que lo reportado hace un mes. b. Crecimiento Los indicadores más recientes de la industria, comercio, exportaciones e importaciones sugieren que la economía colombiana se desaceleró en el segundo trimestre frente al primero, aunque los datos de junio mostraron un desempeño un poco mejor al de los meses anteriores. Por el lado del consumo de los hogares, el comportamiento de las ventas minoristas del comercio, de las importaciones de bienes de consumo y del desempleo apunta a una reducción en el ritmo de crecimiento del consumo en el período abril-junio. De acuerdo con la información publicada por el DANE, las ventas al por menor en junio crecieron a una tasa anual de 4,0%, la cual es superior a la registrada en los meses de abril (-2,85%) y mayo (0,93%). La expansión anual para todo el segundo trimestre fue de 0,8%, menor que la observada durante el primer trimestre (6,1%). Por su parte, las importaciones de bienes de consumo en dólares en junio crecieron 13,3% en términos anuales. Si bien este crecimiento es mayor que el observado en abril (5,6%) y mayo (11,4%), no impidió una desaceleración significativa del crecimiento entre el primero (18,3% anual) y segundo trimestre (10,1% anual). En lo referente a la tasa de desempleo, en mayo y junio siguió mostrando una tendencia decreciente pero con un ritmo de descenso que en términos anuales es cada vez menor. Respecto a la inversión diferente de la construcción y obras civiles, las importaciones de bienes de capital (crecimiento anual de 5,1%) sugieren que su crecimiento podría mantenerse en tasas similares a las observadas a comienzo del año. Sin embargo, en el caso de los rubros de construcción y obras civiles, no es claro que haya habido una mejoría dado el comportamiento de la producción de cemento y licencias de construcción. En cuanto a las exportaciones colombianas, en junio las totales en dólares cayeron 2,3% anual como consecuencia del menor crecimiento nominal de las de origen minero (petróleo y derivados, carbón, ferroníquel y oro) 0,7% y de la contracción en el valor exportado de productos agrícolas (café, banano y flores) -21,4% e industriales -3,8%. En el caso de los bienes de origen minero, su crecimiento se vio afectado por la caída en las ventas externas de petróleo y derivados (-7,3% anual), principalmente por un efecto precio. Las menores exportaciones de productos agrícolas se explican por la disminución en los valores exportados de café (-26%) y flores (-39%). De esta manera, durante el segundo trimestre el crecimiento anual de las ventas externas (1,8%) se desaceleró frente al del primer trimestre (21,2%) en buena parte por una reducción en los precios de los bienes básicos. Por el lado de la oferta, el índice de producción industrial sin trilla de café creció en términos anuales 2,8% en junio. A pesar de que esta cifra representa una aceleración respecto a los dos meses anteriores (-2,54% en abril y -0,24% en mayo), para el segundo trimestre en su conjunto significa un crecimiento anual de 0%, menor al observado en el primer trimestre (2%). Los sectores de químicos continuaron reportando problemas de disponibilidad de materias primas, mientras que otros sectores como vehículos, confecciones, azúcar y bebidas entre otros contribuyeron al repunte del sector en el mes. Los indicadores del sector de la construcción indican que la producción de cemento mostró un crecimiento anual de 0,83% en el segundo trimestre frente a 8,3% en el primero y las licencias de construcción continuaron contrayéndose a un ritmo elevado. Por el contrario, en el caso del sector agropecuario la recuperación de la producción de café, que creció 18% anual en el segundo trimestre, así como la expansión registrada en el sacrificio de ganado en los meses de abril y mayo, permiten esperar que el sector revierta los registros de crecimientos negativos de los últimos dos trimestres. Así mismo, dado el comportamiento del crédito, el sector de servicios financieros debería crecer a un ritmo similar al del trimestre anterior que fue alto. La escasa información del tercer trimestre arroja resultados mixtos. La confianza de los consumidores registró un aumento ligero en el mes de julio, luego de las caídas que se presentaron en el mes de junio. Este indicador supera su promedio histórico y el promedio de todo 2011. Ello muestra que el consumo de los hogares habría continuado expandiéndose. Sin embargo, por el lado de la industria, los indicadores líderes, como los de pedidos, los de existencias y de expectativas de producción en tres meses de la Encuesta de Opinión Empresarial (EOE) de junio, continuaron desmejorando aunque desde niveles todavía altos. Esto vino acompañado con una caída de la confianza de los industriales, lo cual podría estar anticipando un pobre desempeño de la industria en los próximos meses. No obstante, la demanda de energía, tanto la regulada como la no regulada, en julio creció a un buen ritmo acelerándose frente al segundo trimestre. Además en julio, las ventas de vehículos reportadas por Econometría cayeron en términos anuales (-2,6%) continuando la tendencia decreciente que viene observándose desde hace ya un semestre. Esta caída se explica por una disminución en las ventas de automóviles particulares, vehículos utilitarios y pick ups, que juegan un papel importante en el consumo de bienes durables de los hogares. Por el contrario, las ventas de vehículos de uso comercial (carga y de transporte de pasajeros) crecieron a tasas anuales importantes, lo que sugiere un buen comportamiento de la inversión de equipo de transporte. Dada la información anterior, se mantiene el pronóstico de crecimiento para todo 2012 entre 3% y 5%. c. Variables Financieras. En julio el crédito total (MN y ME) presentó una tasa anual de crecimiento de 17,2%, menor a la del mes anterior (17,6%) y a la observada en marzo (19,7%). Se acumula un año de moderación del crédito, pues en julio de 2011 crecía a una tasa anual de 23,3%. La desaceleración mensual y trimestral se manifestó principalmente en las modalidades de cartera a los hogares. Para la de consumo, el incremento anual en julio fue de 20,9% menor al del mes anterior (22,3%) y al de marzo (25,4%). Para la hipotecaria la variación anual fue de 16,0%, menor a la del mes anterior (16,5%) y a la de marzo (17,2%). Por su parte, la cartera comercial tuvo un crecimiento anual de 15,56% manteniendo una dinámica similar a la del mes anterior 15,53%, como resultado de una compensación entre la desaceleración de la cartera en moneda nacional y la aceleración de la cartera en moneda extranjera. Sin embargo, el crecimiento en julio fue menor que el presentado en marzo (17,5%) Por su parte, las tasas de interés real (descontando el IPC sin alimentos) en julio para créditos de consumo, hipotecario y comercial ordinario, en su orden, se ubicaron en 16,5%, 10,0% y 9,3%, tasas menores a sus promedios respectivos calculados desde 1998 (excluyendo la de crédito hipotecario cuyo promedio se mide a partir de mayo 2002). Desde el principio de mayo de 2012, la TIB comenzó a desviarse por encima de la tasa de referencia del BR, alcanzando la mayor desviación de 30 pb el 30 de julio. Posteriormente, en la medida en que las necesidades de liquidez del mercado se han reducido, dicha desviación también ha presentado una corrección y se ubica al 23 de agosto, 16 pb por encima de la tasa de referencia. d. Contexto Externo Los resultados de actividad económica del segundo trimestre confirman el debilitamiento del crecimiento mundial. El PIB de la zona del euro cayó frente al nivel observado en el primer trimestre, y el crecimiento económico de los Estados Unidos y de algunos países emergentes de Asia fue un poco más débil. Los mercados financieros internacionales siguen volátiles y los riesgos provenientes de Europa continúan afectando la confianza de los empresarios y de los hogares. La zona del euro se contrajo en el segundo trimestre del año como consecuencia de la recesión que enfrentan las economías de la periferia y del nulo crecimiento de Francia. El crecimiento positivo de Alemania no fue suficiente para compensar la caída de economías como las de España e Italia. A esto se sumó la fuerte contracción del Reino Unido. Indicadores más recientes apuntan a que las economías europeas podrían continuar deteriorándose en el tercer trimestre del año. Esto se desprende, por ejemplo, de la caída fuerte que se observó en las expectativas de empresarios y consumidores en julio completando once meses con un balance negativo. En los Estados Unidos, por su parte, el crecimiento del PIB se desaceleró en el segundo trimestre. Algunos indicadores de actividad real a julio, como la producción industrial y las ventas al por menor, evidencian que la economía ha seguido expandiéndose lentamente. No obstante, la confianza de empresarios y consumidores continua en niveles bajos. Otras economías desarrolladas como Japón mostraron señales de debilitamiento en el segundo trimestre del año. Los efectos del deterioro del comercio externo sobre todo con la zona euro están en buena parte detrás de este fenómeno. Las economías emergentes, en especial las asiáticas, también han moderado su ritmo de expansión como consecuencia de la menor demanda de la zona del euro. Con cifras al segundo trimestre del año, el crecimiento anual del PIB se desaceleró en China y en otros países de la región como Singapur y Corea del Sur. Esta tendencia se mantuvo en julio según lo muestran algunos indicadores de actividad real. Así, la expansión de las ventas al por menor, la industria y las exportaciones se debilitaron nuevamente en China y algo similar sucedió para otros países de Asia. La tendencia hacia la desaceleración económica también se observó en Brasil, donde la producción industrial continuó contrayéndose en términos anuales en junio. Sin embargo, en otros países de la región como México, Perú, Chile y Venezuela, la expansión del PIB mantuvo un buen ritmo gracias a que la demanda interna ha permanecido dinámica. Aun así, en estos últimos países las exportaciones y la producción industrial también muestran signos de debilitamiento. Los precios internacionales de algunos productos básicos agrícolas y del petróleo repuntaron después de haber presentado descensos en julio. En el primer caso, las fuertes sequías en los Estados Unidos y en otros países productores de cereales explican el incremento en el precio de estos bienes. Por el lado del petróleo, factores geopolíticos, la menor producción y unos inventarios más bajos de lo esperado generaron presiones al alza en su cotización. Pese a ello, si la desaceleración de la economía mundial continúa, los precios del petróleo podrían descender nuevamente. En los últimos meses la inflación global ha seguido contenida, lo cual ha permitido mantener la política monetaria expansiva en las economías desarrolladas. Algunos bancos centrales de países emergentes, como Brasil, China y Corea del Sur, entre otros, han adoptado una política menos restrictiva frente a la desaceleración de la actividad real. Si bien existe un riesgo inflacionario asociado con el reciente aumento de los precios de alimentos y del petróleo, se espera que las tasas de interés de referencia internacional se mantengan en niveles bajos durante el resto del año y buena parte de 2013. Se espera que en lo que falta de 2012 los problemas en Europa se sigan transmitiendo a las otras economías como ya lo sugieren las últimas cifras de comercio exterior y de industria a nivel mundial. Ello eleva la probabilidad de un crecimiento mundial aún más débil en el futuro. Al igual que está ocurriendo en muchos países emergentes, el debilitamiento de la economía mundial afecta el crecimiento de la economía colombiana a través numerosos canales cuyo accionar se vio en la crisis anterior, tales como la caída de los volúmenes y precios de exportación; la reducción de las remesas de los trabajadores, el deterioro de los términos de intercambio y la pérdida de confianza de empresarios y consumidores. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA La Junta Directiva por unanimidad acordó reducir en 25 p.b. su tasa de interés de intervención. De esta forma la tasa base para las subastas de expansión será de 4.75%. La decisión se tomó teniendo en cuenta lo siguiente: (i) Los resultados del segundo trimestre confirman el debilitamiento del crecimiento mundial. El PIB de la zona del euro cayó frente al nivel observado en el primer trimestre, y el crecimiento económico de los Estados Unidos y de algunos países emergentes de Asia fue un poco más débil. Los mercados financieros internacionales siguen volátiles y los riesgos provenientes de Europa continúan afectando la confianza. (ii) Las últimas cifras de comercio exterior y de industria a nivel mundial también sugieren una mayor transmisión de los problemas en Europa al resto de las economías. Ello eleva la probabilidad de un crecimiento mundial aún más débil en el futuro. (iii) Los precios internacionales de algunos productos básicos agrícolas se han incrementado como consecuencia de sequías registradas en países productores. La cotización del petróleo también subió, luego de haber disminuido en el segundo trimestre del año. (iv) En Colombia, el valor de las exportaciones de bienes básicos de origen minero continuó desacelerándose y creció 0,7% anual, explicado fundamentalmente por menores precios internacionales. A su vez, las agrícolas y las del resto de sectores, en especial industriales, cayeron 21,4% anual y 3,8% anual, respectivamente. (v) Las cifras de industria y comercio en junio resultaron algo mejor a lo esperado, aunque con crecimientos bajos. En el mismo mes la encuesta de Fedesarrollo de la industria volvió a reflejar un deterioro en la confianza y en el volumen de pedidos así como un aumento en las existencias. La confianza de los consumidores aumentó un poco en julio y se encuentra por encima del promedio observado en 2011. (vi) El crecimiento del crédito continúa desacelerándose, disminuyendo el riesgo de desbalances financieros. La moderación reciente ha estado concentrada en el crédito a los hogares, el cual continúa creciendo a tasas altas. Las tasas de interés reales se encuentran en niveles cercanos al promedio observado desde el año 2000 y la tasa de interés interbancaria se ha situado por encima de la tasa de interés de intervención. (vii) La inflación observada y la esperada en diciembre de 2012 descendieron a tasas cercanas a 3%. Las medidas de inflación básica se mantuvieron relativamente estables y el promedio de los cuatro indicadores que calcula el Banco se situó en 3%. (viii) Las expectativas de inflación a todos los plazos disminuyeron. Las derivadas de los TES a 2, 3 y 5 años se situaron alrededor de 2,4%. De acuerdo con la evaluación del actual balance de riesgos, la Junta Directiva consideró apropiado reducir la tasa de interés de intervención. La nueva información permitirá establecer acciones futuras de política monetaria, tanto la concerniente al desarrollo de los eventos en los países avanzados y su impacto en la confianza, la demanda global y los precios internacionales de los bienes básicos, como la proveniente de la dinámica interna. Adicionalmente, con el fin de suministrar más liquidez permanente a la economía, la Junta decidió que, en lo que resta de agosto y el mes de septiembre, comprará US$ 700 millones mediante el mecanismo de subastas diarias de, al menos, US$ 20 millones. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva acordó por unanimidad reducir la tasa de interés de intervención en 25 p.b. La Junta reitera que el Banco de la República cuenta con las herramientas y recursos suficientes para atender las necesidades de liquidez en moneda local y extranjera que regularmente requiere la economía y aquellas que pudieran aparecer en un ambiente de turbulencia financiera internacional. La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo de la situación internacional, del comportamiento y proyecciones de la inflación, el crecimiento, el comportamiento de los mercados de activos y reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible.
2012-09-01
- Minutas de la reunión de la JDBR del 28 de septiembre de 2012 El 28 de Septiembre de 2012 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas Santamaria, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Fernando Tenjo, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Juan Pablo Zárate y César Vallejo, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor aumentó 8 pb en agosto respecto a julio y se situó en 3,11%. Para el año corrido a agosto el ajuste del IPC ha sido 2,03%, significativamente menor que el ocurrido en igual período de 2011 (2,64%). El aumento en la inflación total en agosto se concentró en los grupos de alimentos y de no transables sin alimentos ni regulados. Con respecto al IPC sin alimentos, su variación anual permaneció prácticamente estable en 2,75%, resultado de un alza en el componente de no transables y una caída en transables y en regulados. El aumento en la variación anual de no transables (de 3,7% en julio a 3,9% en agosto) se explicó sobre todo por el subgrupo de diversión (boletas de fútbol). El dato de agosto es el más alto desde julio del año pasado y puede marcar un nuevo nivel para este indicador en los próximos meses. Sin embargo, este comportamiento obedecería más a una base de comparación baja que a un aumento en las presiones de demanda. En no transables conviene resaltar la situación de la variación anual de arriendos, la cual se mantuvo en 3,7% como en los dosmeses anteriores, quebrando la tendencia ascendente que traía desde comienzos de 2011. Con respecto a otras subcanastas, la variación anual de transables sin alimentos ni regulados se mantuvo cerca a 1,0%, como viene sucediendo desde mayo y coincidiendo con una leve depreciación anual del tipo de cambio. Los regulados por su parte, presentaron una disminución en su variación anual de 3,5% en julio a 3,1% en agosto, debido principalmente a la reducción en la variación anual de los combustibles a 1,1%, la cual guarda relación con los menores precios del petróleo observados en la primera mitad del año. Respecto al IPC de alimentos, la variación anual presentó un leve repunte (a 4,0%), con lo que se interrumpió la tendencia descendente que traía desde abril. Esto sucedió básicamente por los aumentos de precios en el grupo de alimentos perecederos, aunque en este caso la variación anual permaneció en terreno negativo. Cabe resaltar que los precios de los bienes básicos se han incrementado poco, lo que sugiere que las alzas de precios internacionales de meses anteriores aún no se han transferido a la inflación al consumidor. La inflación básica también aumentó en el último mes. De acuerdo con el promedio de los cuatro indicadores de inflación básica monitoreados por el Banco de la República, en agosto esta fue de 3,12%, frente a 3,04% del mes anterior. Este promedio ha oscilado entre 3,00% y 3,15% desde noviembre del año pasado. En materia de costos, el IPP mantuvo una variación anual muy baja (0,13%) aunque en ascenso, después de dos meses de registros negativos. Los aumentos se concentraron en el IPP de producidos y consumidos, sobretodo en minería, debido a los incrementos registrados en el precio de los productos refinados del petróleo. En este último mes se presentó un leve repunte de las expectativas de inflación después de varios meses de descensos. Según la encuesta mensual a operadores del mercado financiero, la inflación esperada para diciembre de este año es 2,99% (frente a 2,93% en el mes anterior); el aumento se dio sobretodo en la inflación de alimentos. Por su parte, las expectativas derivadas de los TES aumentaron a todos los horizontes alrededor de 25 pb. Excepto las de diez años, las demás se mantuvieron por debajo del 3,0% pero convergiendo a este valor. b. Crecimiento De acuerdo con el registro del PIB para el segundo trimestre de 2012, publicado por el DANE, la economía colombiana creció en ese período a una tasa anual de 4,9%, justo por encima del techo del rango de pronóstico presentado por la SGEE en el Informe sobre Inflación de Junio (entre 3,3% y 4,8%). Este resultado implicó una aceleración trimestral de 1,6% (6,7% trimestral anualizado), la mayor en los últimos cuatro trimestres y superior al 0,2% del primer trimestre del año. El comportamiento de la economía en el período se debió al dinamismo de la demanda interna que más que compensó el deterioro de la demanda externa. En efecto, la demanda interna en el segundo trimestre registró una tasa de crecimiento anual mayor que la observada un trimestre atrás (6,9% vs 6,0%). Por el contrario, las exportaciones crecieron solo 2% anual, registro significativamente menor al 6,6% del primer trimestre y al 11,4% de crecimiento promedio para 2011. Por su parte, las importaciones lo hicieron a una tasa anual de 9,5%, también menor que la registrada en los primeros tres meses del año y al promedio para 2011 (12,4%, y 21,5% respectivamente). En conjunto, las exportaciones netas contribuyeron negativamente al crecimiento del PIB (-2,2%). La aceleración de la demanda interna se explicó principalmente por la dinámica de las inversiones en construcción y edificaciones, y en obras civiles. Dentro de estas últimas se destacaron los crecimientos que registraron las destinadas a la minería y construcción de vías férreas y pistas aéreas. Otros componentes de la inversión, como el equipo de transporte y la maquinaria y equipo, continuaron exhibiendo tasas de crecimiento anual importantes. El consumo del gobierno contribuyó también al dinamismo de la demanda interna. Este rubro presentó variaciones anuales superiores a las esperadas y mayores que las registradas en el primer trimestre del año (4,6%, frente a 3,1%). Su crecimiento fue el mayor observado desde mediados del año 2010. En contraste con lo anterior, el consumo de los hogares continuó desacelerándose. Su variación anual fue de 4,0% (equivalente a su promedio desde 2000), luego de que en el primer trimestre había sido de 5,7%. A nivel desagregado, también se registraron menores tasas de crecimiento en todos sus componentes, destacándose aquellas en el consumo de bienes durables y no durables. Por ramas de actividad, los sectores que más crecieron durante el segundo trimestre de 2012 fueron la construcción (18,4%), tanto por edificaciones como por obras civiles, la minería (8,5%) y los servicios financieros (5,1%). El único sector que registró una caída anual fue la industria (-0,6%). Para el tercer trimestre, los indicadores sugieren menores crecimientos en la actividad económica. En particular en el caso del consumo de los hogares se podría haber presentado un crecimiento anual en el tercer trimestre menor que el observado en la primera mitad del año (5,0%). En efecto, en julio las ventas del comercio al por menor reportadas por el DANE mostraron una variación anual de 1,3%, menor al 4,0% de junio. En esa misma dirección, los datos más recientes de ventas de vehículos indicarían que el consumo de bienes durables en el tercer trimestre también habría crecido menos que lo observado en la primera mitad del año. Según información publicada por Econometría, en agosto las compras de automotores registraron variaciones anuales negativas de alrededor del 10%. Adicionalmente, se observó la caída del indicador de confianza del consumidor de Fedesarrollo para el mes de agosto, aunque su nivel se encuentra todavía por encima del promedio histórico. A pesar de lo anterior, los indicadores del mercado laboral, una variable importante para predecir el comportamiento del consumo, no muestran un deterioro claro en los últimos meses. Es así como el número de ocupados asalariados y totales con cifras a julio siguió creciendo a tasas cercanas al 4,5%. Lo anterior ha permitido que la tasa de desempleo a nivel nacional siguiera cayendo en términos anuales. Para las trece principales áreas metropolitanas se observó un leve incremento en la tasa, el primero en 2 años, el cual estuvo acompañado por un aumento importante en la oferta de trabajo. Por el lado de la oferta, los pocos indicadores disponibles para el tercer trimestre de 2012 sugieren un débil crecimiento de la industria y el comercio. En el primer caso, la producción aumentó 1,5% en julio y los indicadores de pedidos, existencias y confianza empresarial de Fedesarrollo continuaron deteriorándose lentamente aunque se mantienen en niveles relativamente buenos. Por otro lado, el crecimiento de la demanda de energía eléctrica industrial se desaceleró en agosto desde 5,8% a 2,4%, variable altamente correlacionada con el IPI. Sin embargo, cabe señalar que la demanda de energía regulada creció 4,7%. En el caso del comercio, en julio los comerciantes consultados por Fenalco señalaron una caída en la percepción de sus ventas, y un deterioro de sus expectativas a 6 meses. Algo similar arroja la encuesta de Fedesarrollo, que para el mismo mes registró una caída en la percepción de la situación actual y futura del negocio de los empresarios del sector. Por otra parte, las exportaciones totales colombianas en dólares cayeron anualmente 4% en julio, alcanzando un valor de US$4.694 millones. Esto se debió fundamentalmente a la caída de 9,4% en las mineras, ya que las agrícolas e industriales y otras crecieron 30,6% y 5% respectivamente. En el caso de los bienes de origen minero, el único rubro que descendió fue el de petróleo y derivados (- 18,5% anual). Las mayores exportaciones de productos agrícolas se explican por el aumento en los valores exportados de banano (104%) y flores (58%), lo cual compensó la reducción de 1,4% en las exportaciones de café. c. Variables Financieras En agosto el crédito total (MN y ME) presentó una tasa anual de crecimiento de 16,35%, menor en 83 pb y en 334 pb a los niveles observados el mes anterior y en marzo, respectivamente. La desaceleración mensual fue liderada por la cartera comercial, cuyo incremento anual se redujo 132 pb, pasando de 15,56% a 14,24% entre julio y agosto. Por su parte, la cartera a los hogares se mantuvo cerca a la observada el mes anterior (pasó de 19,54% a 19,45%), dado que los crecimientos registrados en agosto de las carteras de consumo (20,76%) e hipotecaria (15,91%), en su orden, solo disminuyeron 11 y 5 pb frente a julio. Con relación a marzo, la moderación de la cartera comercial y la destinada a los hogares ha sido similar, con reducciones en la tasa de crecimiento de 322 pb y 364 pb, respectivamente. En agosto, las tasas de interés real (descontando el IPC sin alimentos) para créditos de consumo, hipotecario y comercial ordinario, en su orden, se ubicaron en 16,3%, 10,2% y 9,4%, tasas menores a sus promedios respectivos calculados desde 2000 (excluyendo la de crédito hipotecario cuyo promedio se mide a partir de mayo de 2002). De otra parte, las tasas de interés reales para créditos otorgados con tarjeta y, para las modalidades preferencial y tesorería se ubicaron en 26,9%, 6,2% y 5,8%, tasas mayores a sus promedios calculados desde 2000. d. Contexto Externo Las decisiones recientes de los bancos centrales de las principales economías desarrolladas en torno a ampliar la política monetaria laxa que han venido sosteniendo durante los últimos años, hace pensar que las tasas de interés de política de los países desarrollados deberán permanecer en niveles cercanos a cero mas allá de 2014 y la liquidez global aumentará en los próximos meses. Así, en la zona del euro el BCE anunció la compra ilimitada de bonos de deuda pública a los países que soliciten ayudas y se sometan a un plan de ajuste. Por su parte, la reserva federal de los Estados Unidosimplementó una tercera ronda de relajamiento cuantitativo (QE3), esta vez condicionada a la evolución del mercado laboral. Al mismo tiempo, el banco central de Japón extendió su política expansionista. Lo anterior, podría incrementar los flujos de capital hacia las economías emergentes y generar presiones a la apreciación de sus monedas. Las medidas adoptadas por el BCE darían tiempo a las demás autoridades de la región para avanzar en la integración económica y reactivar el crecimiento de sus economías. En este sentido, en el último mes la Corte Constitucional alemana ratificó la legalidad del mecanismo europeo de estabilización, que podría comenzar a funcionar en los próximos meses. De la misma forma, las autoridades europeas continuaron sus diálogos sobre la creación de un organismo centralizado de supervisión bancaria, sin embargo los avances siguen siendo lentos. La actividad económica global ha seguido desacelerándose en los últimos meses, en especial en las economías de la zona del euro y en aquellas con mayor exposición a ella. El menor dinamismo de la industria y del comercio exterior ha explicado en gran parte este hecho. Con cifras a julio, en la zona del euro algunos indicadores de actividad real siguieron contrayéndose en términos anuales (producción industrial, crédito a los consumidores y ventas al por menor). Por su parte, los índices de sentimiento de empresarios y consumidores continuaron deprimidos en agosto, lo que podría implicar un deterioro adicional de la actividad real en los próximos meses. En la medida en que las políticas adoptadas por las autoridades europeas comiencen a tener efectos sobre la confianza en la región, se podría empezar a observar efectos positivos sobre el crecimiento. Sin embargo, es de prever que la respuesta de la actividad económica difícilmente logrará concretarse en lo que resta del año. En los Estados Unidos la producción industrial se contrajo fuertemente en agosto y se desaceleró en la comparación anual, situación que podría repetirse en los próximos meses como lo anticipa el índice de gestores de compras en el sector manufacturero (PMI). De la misma forma, las últimas cifras sobre exportaciones y el mercado laboral evidenciaron que el estancamiento en estos indicadores habría continuado en el tercer trimestre. A pesar de lo anterior, el sector de servicios, las ventas reales al por menor, y el sector inmobiliario siguieron expandiéndose según las últimas cifras disponibles. En este contexto, se espera que la expansión de la economía de Estados Unidos haya continuado a un ritmo moderado durante el tercer trimestre. En relación con los países emergentes, la actividad real ha seguido desacelerándose en las principales economías asiáticas, en especial en China e India. En el primer caso la desaceleración podría estar siendo superior a la esperada por las autoridades de este país, las cuales se han visto en la necesidad de implementar políticas adicionales para incentivar la demanda interna. En América Latina la actividad real en el segundo trimestre siguió expandiéndose a un ritmo favorable en México, Chile y Perú, apoyada en el dinamismo de la demanda interna, en especial la pública. En Brasil, la última información disponible muestra señales de un mejor desempeño que estaría relacionado con los estímulos implementados meses atrás por las autoridades económicas en ese país. Los precios internacionales del petróleo se han reducido en las últimas semanas. Al parecer, algunos países de la OPEP están dispuestos a aumentar la producción para garantizar precios más bajos que los observados en los últimos tres meses y que serían más consistentes con la situación económica actual. Sin embargo, Pese a las caídas, el precio promedio del petróleo permanece relativamente alto. En relación con los precios de los alimentos, algunos cereales han interrumpido las subidas presentadas a mitad de año. Sin embargo, aún permanecen en niveles elevados que podrían generar presiones inflacionarias en algunas economías emergentes, que en todo caso serían transitorias. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA A efectos de la discusión la Junta Directiva consideró los siguientes elementos: (i) Los indicadores de actividad económica publicados en el mes pasado confirman un pequeño debilitamiento de la economía mundial. En Europa las condiciones económicas continuaron debilitándose y el PIB de la región probablemente cayó en el tercer trimestre. Estados Unidos crece a un ritmo moderado y la economía de Japón también muestra debilidad. En este contexto, y sin presiones inflacionarias, los bancos centrales de Europa, Estados Unidos y Japón anunciaron mayores estímulos monetarios y por un período más prolongado. En un buen número de países emergentes el factor común ha sido la desaceleración de las exportaciones y de la producción industrial. (ii) Los precios internacionales de los productos básicos descendieron pero siguen elevados. En consecuencia, los términos de intercambio de Colombia continúan altos y estimulan el ingreso nacional. No obstante, según el último dato disponible (julio) el valor total de las exportaciones del país cayó por el debilitamiento de la demanda externa y la disminución en los precios del petróleo. (iii) En Colombia, el crecimiento del PIB en el segundo trimestre (4,9% anual) superó al rango estimado por el equipo técnico (entre 3,3% y 4,8%). Esta subestimación obedeció a un crecimiento de la demanda interna (6,4% anual) superior a lo proyectado. Las cifras de actividad económica en el tercer trimestre sugieren que el aumento anual del PIB será menor que el del segundo trimestre. Para todo 2012, es probable que el crecimiento de la economía sea superior al punto medio del rango estimado (entre 3% y 5%). (iv) En agosto el crecimiento del crédito continuó desacelerándose, disminuyendo el riesgo de desbalances financieros. Las tasas de interés reales se encuentran en niveles cercanos al promedio observado desde el año 2000. (v) La inflación y el promedio de las medidas de inflación básica aumentaron levemente en agosto pero se sitúan muy cerca del punto medio del rango de inflación (en 3,1%). Las expectativas de inflación a un año se mantuvieron estables en 3,3%, mientras que las que resultan de los TES a 2, 3 y 5 años aumentaron pero siguen por debajo del 3% (punto medio del rango meta). Unos miembros resaltaron que las cifras de actividad económica sugieren que la economía está convergiendo a su nivel de crecimiento potencial en un contexto en que las medidas de inflación básica y las expectativas se encuentran muy cerca de la meta de largo plazo (3%). Resaltaron además el dinamismo de la demanda interna, basado en las inversiones de construcción y obras civiles, el crédito que sigue creciendo a tasas importantes, los favorables términos de intercambio que continúan estimulando el ingreso nacional y el buen comportamiento del empleo. Las tasas de interés reales se encuentran en niveles cercanos al los promedio calculados desde el 2000. Lo anterior indica que la política monetaria adoptada por la Junta es coherente con el crecimiento sostenible a largo plazo. No obstante, la nueva información permitirá establecer acciones futuras de política monetaria, tanto la concerniente al desarrollo de los eventos en los países avanzados y su impacto en la confianza, la demanda global y los precios internacionales de los bienes básicos, como la proveniente de la dinámica interna, en consecuencia propusieron mantener inalterada la tasa de interés de referencia. Otros miembros resaltaron que la política monetaria debe mirar hacia adelante. La actividad económica global ha seguido desacelerándose, en especial en las economías de la zona euro así como la actividad en las economías asiáticas. La debilidad del contexto externo, en especial el desempeño de los precios de los productos minero energéticos, hace muy vulnerable la economía colombiana y contagiará su desempeño económico interno. En la actividad económica interna se resalta que la inflación así como las expectativas continúan convergiendo hacia el punto medio del rango meta. Si bien la demanda se mantiene dinámica por ramas de actividad al descontar la minería o las obras civiles del PIB se observa una leve 10desaceleración, en especial es inquietante el pobre comportamiento de laindustria. El consumo de los hogares continuó desacelerándose y se observó una caída del indicador de confianza del consumidor. Como quiera que una buena política monetaria yace en la capacidad de anticipación, los miembros consideraron que es necesario reducir la tasa de interés de intervención. 3. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA De acuerdo con la evaluación del actual balance de riesgos, la Junta Directiva del Banco de la República por mayoría decidió dejar inalterada su tasa de interés de intervención. De esta forma la tasa base para las subastas de expansión continuará en 4,75%. La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo de la situación internacional, del comportamiento y proyecciones de la inflación, el crecimiento, el comportamiento de los mercados de activos y reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible.
2012-10-01
- Minutas de la reunión de la JDBR del 26 de octubre de 2012 El 26 de Octubre de 2012 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas Santamaria, el Gerente General, José Darío Uribe y los directores de dedicación exclusiva, Fernando Tenjo, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Juan Pablo Zárate y César Vallejo, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor disminuyó en septiembre levemente respecto al mes anterior situándose en 3,08%. Para el año corrido a septiembre el ajuste del IPC ha sido de 2,32%, significativamente menor que el registrado en igual período de 2011 (2,95%). La leve disminución en la inflación total se concentró en el IPC de alimentos. En el IPC de alimentos, la variación anual descendió 40 pb en el último mes situándose en 3,7%. Desde hace un año se observa una tendencia a la desaceleración de esta tasa por el comportamiento favorable de los precios de los alimentos perecederos. Dentro del IPC sin alimentos, el mayor incremento se observó en el IPC de regulados (3,31%), 18 pb más que el registro de agosto. Este comportamiento obedeció principalmente al ajuste en el precio de los combustibles y al incremento en las tarifas de energía eléctrica. Las variaciones anuales de los otros componentes de la canasta – servicios públicos y transporte público urbano – disminuyeron. En el mes de septiembre, los IPC de transables (1,09%) y no transables (4,02%) también presentaron aumentos en las variaciones anuales. En el primer caso, el aumento de 12 pb frente a la variación anual del mes anterior obedeció principalmente a los reajustes en los pasajes aéreos y a aumentos en los precios de vehículos. En no transables, la aceleración de 8 pb frente a la variación anual del mes anterior se concentró en el rubro de arriendos que se situó en 3,9%, el dato más alto desde finales de 2010. En el último mes el promedio de los cuatro indicadores monitoreados por el Banco de la República se situó en 3,16% frente a 3,12% de agosto. La variación anual del IPP total en septiembre fue de 0,13%, valor similar al de agosto. El IPP importado continuó en terreno negativo gracias en parte a la estabilidad que muestra la tasa de cambio, mientras que el IPP de bienes producidos y consumidos en el país es positivo pero muy bajo. En el último mes no se registraron cambios de importancia en las diferentes mediciones de expectativas de inflación. Según la encuesta mensual a los operadores de mercado la inflación esperada para finales de este año es de 3,1% y de 3,2% para septiembre de 2013. Por su parte, la encuesta trimestral efectuada a empresas y que se recogió a comienzos de octubre, arrojó una inflación esperada para diciembre y a doce meses de 3,4%. Finalmente, las medidas derivadas de los TES a 2, 3 y 5 años convergieron hacia 3%. b. Crecimiento Para el tercer trimestre, los indicadores de oferta y demanda muestran señalas mixtas. Sin embargo, la información más relevante sugiere que la actividad económica en este periodo se desaceleró frente a lo observado en el primer semestre del año. Por el lado de la demanda, los indicadores de ventas al por menor del comercio, las ventas de vehículos y los niveles de confianza son evidencia de que el consumo de los hogares es menos dinámico. De acuerdo con el DANE, en agosto las ventas del comercio crecieron a una tasa anual de 1,2%, menor al 1,4% registrado en julio y al 4,0% de junio. Esta desaceleración fue explicada en parte por la caída en las ventas de automotores y motocicletas (-3,7% anual). De hecho, las ventas del comercio minorista sin vehículos ni combustibles aumentaron 2,5% anual. Los niveles de confianza del consumidor en el tercer trimestre fueron menores que los observados en el segundo. La recuperación del índice de confianza en el mes de septiembre no compensó los descensos registrados en los dos meses anteriores. Con esta evolución reciente, el indicador mantiene la tendencia decreciente observada desde comienzos de 2012. Sin embargo, otras variables apuntan a que la desaceleración del gasto total de los hogares podría ser no muy pronunciada. Por un lado, las importaciones en dólares en julio y agosto dirigidas al sector de consumo crecieron anualmente 12,9% y 11,9% respectivamente. Adicionalmente, el ingreso de las familias no se ha visto afectado, a juzgar por el buen comportamiento del empleo especialmente del asalariado que crece a una tasa anual de 6,8%, y por una inflación cercana al punto medio del rango meta. El crédito dirigido al consumo se ha desacelerado, pero sigue creciendo a tasas altas junto a unas tasas de interés reales que se encuentran en el promedio calculado desde el 2000. Con respecto a la inversión, la información disponible indica que la dinámica observada en el segundo trimestre podría mantenerse. Las importaciones de bienes de capital para la industria se aceleraron en el promedio para julio y agosto, frente a lo registrado en el trimestre abril-junio. Sin embargo, las importaciones de bienes de capital para la agricultura y las importaciones de equipo de transporte registraron caídas en los meses de julio y agosto. Respecto a las exportaciones, las totales en dólares cayeron 9% anual en agosto (sin incluir las rexportaciones de aeronaves; cuando éstas se incluyen, la variación anual es de -7,6%). Esto se debió fundamentalmente a la caída de 14,6% en las exportaciones mineras, ya que las agrícolas e industriales y otras crecieron a tasas anuales de 2,7% y 5,8% respectivamente. En el caso de los bienes de origen minero, los rubros que mostraron caídas fueron los de petróleo y derivados (-2,9% anual) y carbón (-55% anual). Las mayores exportaciones de productos agrícolas se explican por el aumento en los valores exportados de café (15% anual) ya que las exportaciones de banano y flores cayeron anualmente 14% y 3% respectivamente. Por el lado de la oferta, los indicadores disponibles para la industria continuaron mostrando un pobre desempeño. La variación anual del IPI sin trilla de café para el mes de agosto fue de -1,9%. Este comportamiento es explicado en parte por una menor demanda externa producto de la debilidad de la economía mundial. En Colombia, al igual que en otros, la debilidad de la economía mundial se ha visto reflejada en el menor crecimiento de las exportaciones y de la producción industrial. Adicionalmente, de acuerdo con Fedesarrollo, la confianza industrial continuó deteriorándose en agosto. Algo similar ocurrió con las expectativas de la producción a tres meses. Por su parte el indicador de existencias de la industria (que es contra cíclico) mostró una tendencia ascendente, aunque su nivel es aún bajo. El volumen de pedidos de la industria continuó deteriorándose. Todo ello sugiere un crecimiento bajo de este sector en los próximos meses. A pesar de lo anterior, la demanda de energía no regulada industrial, la cual tiene una alta correlación con el IPI, creció en septiembre a una tasa anual de 3,4% (2,4% en agosto), por lo que se pudo dar en este mes una aceleración de la producción industrial. En el caso del comercio, de acuerdo con la encuesta de Fedesarrollo para agosto, la situación económica de los comerciantes mostró un leve repunte, mientras que las expectativas a 6 meses se mantuvieron estables. Pese a esto, la tendencia continúa sugiriendo una moderación del crecimiento del sector para los próximos meses. Algo similar se desprende de la encuesta de Fenalco. Algunas cifras asociadas con los sectores de la agricultura y la minería registraron mejoría en los últimos meses. Tal es el caso de la producción cafetera en el período comprendido entre julio y septiembre, que de acuerdo con la Federación de Cafeteros creció 20% anual. Por su parte, de acuerdo con el Ministerio de Minas y Energía, la producción de petróleo en septiembre fue de 956 mil barriles diarios, cifra superior a lo observado en los tres meses anteriores (927 MBD). Pese a las señales de desaceleración, la expansión en los trimestres siguientes continuará impulsada por la demanda interna. Un sistema financiero saludable, la confianza de los hogares y un mercado laboral dinámico seguirán apoyando el crecimiento del consumo. Por su parte, los precios de los bienes básicos, los niveles de confianza, la disponibilidad de financiamiento interno y externo y la inversión extranjera directa contribuirán al dinamismo de la inversión. Así, para todo el año 2012 el rango de pronóstico de crecimiento de la economía se ubica entre 3,7% y 4,9%. c. Variables Financieras En Septiembre, el crédito bancario (MN y ME) presentó una tasa anual de crecimiento de 16,1%, menor a la del mes anterior (16,4%) y a la observada en junio del presente año (17,5%). Las carteras comercial y a los hogares continuaron desacelerándose durante el tercer trimestre. El crecimiento anual de la cartera comercial en moneda nacional pasó de 16,6% a 14,4% entre el 29 de junio y el 5 de octubre, en tanto, la de moneda extranjera presentó un leve repunte pero aún no se observa una tendencia consolidada. Por su parte, el crecimiento anual de la cartera de consumo en el trimestre pasó de 21,2% a 19,1%, y el de la cartera hipotecaria disminuyó de 16,0% a 15,4%, en el mismo período. En septiembre, las tasas de interés real (descontando el IPC sin alimentos) para créditos de consumo, hipotecario, comercial ordinario y preferencial se ubicaron, en su orden, en 15,7%, 10,0%, 8,8% y 5,8%, tasas menores a sus promedios respectivos calculados desde 2000. d. Contexto Externo Los datos más recientes muestran que Europa continúa contrayéndose y los Estados Unidos crecen a un ritmo moderado. En los países emergentes se destaca la desaceleración de China y otras economías del Sudeste Asiático, como consecuencia del debilitamiento de sus exportaciones y producción industrial. En América Latina, con excepción de Brasil, el ritmo de crecimiento de las economías de mayor tamaño se ha mantenido en un buen nivel, gracias al dinamismo de la demanda interna. En la zona del euro tanto la producción industrial como las ventas al por menor siguen cayendo en términos anuales. De igual forma, los índices de confianza de los consumidores y de la industria continúan deteriorándose y la tasa de desempleo que se encuentra en niveles elevados no da señales de mejoría. Sin embargo, las condiciones en los mercados financieros y de deuda pública han mejorado respecto al trimestre anterior gracias en parte a los anuncios del Banco Central Europeo sobre la compra ilimitada de títulos soberanos (OMT). Este plan ha sido bien recibido por los mercados, lo cual ha mejorado la confianza de los agentes. En el caso de Estados Unidos, la economía se sigue expandiendo a un ritmo moderado al alcanzar un crecimiento de 2% en el tercer trimestre, a pesar de la menor demanda externa. Algunos indicadores en el mercado de vivienda y del mercado laboral han mejorado. La industria se ha desacelerado, pero las medidas de sentimiento han empezado a recuperarse. Por el lado de la demanda, los hogares han seguido aumentando su consumo y la confianza se ha recuperado. El crecimiento de las exportaciones ha seguido moderándose por la mayor debilidad externa. En un contexto de bajas presiones inflacionarias, debilidad en la demanda y percepción de riesgos ante la situación en Europa, las autoridades monetarias de los Estados Unidos anunciaron que mantendrían la tasa de interés en niveles bajos al menos hasta el 2015. En el futuro cercano el mayor riesgo para esa economía yace en el campo fiscal. En China, al igual que en otros países del Asia, se viene observando un patrón similar de desaceleración en el crecimiento de las exportaciones, la actividad industrial y las ventas al por menor, que paulatinamente empieza a reflejarse en un menor ritmo de actividad económica. En el caso de China la reducción del crecimiento se vio acentuada por medidas de política monetaria que buscaban moderar la demanda interna para prevenir presiones inflacionarias. En América Latina, aunque el crecimiento de las exportaciones se ha frenado de manera significativa en países como Chile, Perú, México, Venezuela y Ecuador, el ritmo de expansión se ha mantenido favorable. El debilitamiento en la actividad externa ha sido compensado por el dinamismo de la demanda interna y en varios casos ha permitido que el producto crezca a un nivel cercano al potencial. Pese a la desaceleración de la economía global, los precios internacionales del petróleo han permanecido en niveles elevados, como consecuencia de las mayores tensiones geopolíticas en Oriente Medio y en el Norte de África. Por su parte, los precios de los alimentos han mostrado una reducción en las últimas semanas gracias a la normalización de los fenómenos climáticos de mitad de año. En este contexto, la inflación global continúa en rangos tolerables, lo que junto con un débil crecimiento económico ha permitido a los bancos centrales, especialmente de las economías desarrolladas, mantener una política monetaria fuertemente expansiva. Las condiciones financieras internacionales han mejorado en las últimas semanas, en parte por las acciones de política de los principales bancos centrales del mundo. La volatilidad ha disminuido y los precios de algunos activos han aumentado. No obstante, la incertidumbre asociada a los problemas de las finanzas públicas y de los bancos privados en algunas economías avanzadas continúa siendo alta por lo que los riesgos a la baja para el crecimiento mundial siguen vigentes. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA A efectos de la discusión la Junta Directiva consideró los siguientes elementos: (i) Los indicadores de actividad económica en el tercer trimestre de 2012 confirman la debilidad de la economía mundial. Europa continúa contrayéndose y los Estados Unidos crecen a un ritmo moderado. La desaceleración observada en algunas de las economías emergentes de mayor tamaño parece estar estabilizándose. En este contexto, y sin presiones inflacionarias, es de esperar que la tasa de interés externa se mantenga baja por un período prolongado. Asimismo, a pesar del menor crecimiento mundial, el precio internacional del petróleo y otros productos básicos permanecen altos. (ii) Las condiciones financieras internacionales han mejorado, en parte por las acciones de política de los principales bancos centrales del mundo. La volatilidad ha disminuido y los precios de algunos activos han aumentado. No obstante, la incertidumbre asociada a los problemas de las finanzas públicas y de los bancos en algunas economías avanzadas continúa siendo alta. (iii) En Colombia, al igual que en otros países, la debilidad de la economía mundial se ha visto reflejada en el menor crecimiento de las exportaciones y de la producción industrial. Los términos de intercambio continúan altos y estimulan el ingreso nacional. (iv) Pese a las señales de desaceleración, la expansión en los trimestres siguientes continuará impulsada por la demanda interna. Un sistema financiero saludable, la confianza de los hogares y un mercado laboral dinámico seguirán apoyando el crecimiento del consumo. Por su parte, los precios de los bienes básicos, los niveles de confianza, la disponibilidad de financiamiento interno y externo y la inversión extranjera directa contribuirán al dinamismo de la inversión. (v) El crecimiento del crédito continúa desacelerándose y los índices de precios de la vivienda nueva y usada se encuentran en niveles históricamente altos. (vi) La inflación, el promedio de los indicadores de inflación básica y las expectativas se encuentran muy cerca al punto medio del rango meta (3%,). (vii) El mayor riesgo sobre la actividad económica del país continúa siendo una fuerte recesión en Europa. Al parecer, su probabilidad de ocurrencia ha disminuido, dadas las acciones de las autoridades europeas y las reacciones de los mercados en ese continente. Unos miembros propusieron mantener inalterada la tasa de interés de referencia considerando que, si bien las cifras de actividad económica muestran una desaceleración, ésta se ha presentado a partir de un punto en el cual el gasto agregado superaba la capacidad productiva de la economía. El crecimiento del PIB en 2012 será satisfactorio teniendo en cuenta la situación internacional y que el PIB se encuentra cerca a su nivel potencial. Las medidas de inflación básica y las expectativas de inflación están alrededor de la meta de largo plazo (3%). Consideraron, además, que el dinamismo de la demanda interna, estimulado, entre otros, por las inversiones en construcción y obras civiles y los términos de intercambio, continuará estimulando el ingreso nacional y el empleo. Los precios de la vivienda continúan aumentando a tasas altas y el crédito se ha desacelerado pero crece a buen ritmo, variables que también deben ser tenidas en cuenta en la definición de la postura monetaria con el fin de minimizar los riesgos de desbalances futuros en estas variables. Otros miembros consideraron que, como quiera que una buena política monetaria yace en la capacidad de anticipación y que la inflación y sus expectativas continúan convergiendo hacia el punto medio del rango meta de largo plazo, hay espacio para reducir la tasa de interés de intervención. Lo anterior, en un contexto de actividad económica global débil por cuenta de una recesión más fuerte y prolongada en Europa y el lento crecimiento de Estados Unidos y algunos países emergentes, que hace vulnerable la economía colombiana en razón a la composición de sus sectores exportadores. Adicionalmente, los indicadores de demanda interna, consumo, confianza del consumidor, crédito y el comportamiento de la industria indican que la economía se ha venido desacelerando. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA De acuerdo con la evaluación del actual balance de riesgos, la Junta Directiva del Banco de la República por mayoría consideró apropiado mantener la tasa de interés de intervención en 4,75%. La nueva información permitirá establecer acciones futuras de política monetaria, tanto la concerniente al desarrollo de los eventos en los países avanzados y su impacto en la confianza, la demanda global y los precios internacionales de los bienes básicos, como la proveniente de la dinámica interna. La Junta reitera que el Banco de la República cuenta con las herramientas y recursos suficientes para atender las necesidades de liquidez en moneda local y extranjera que regularmente requiere la economía y aquellas que pudieran aparecer en un ambiente de turbulencia financiera internacional. La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo del comportamiento y proyecciones de la actividad económica e inflación en el país, de los mercados de activos y la situación internacional. Finalmente, reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible. Bogotá, D. C.
2012-11-01
- Minutas de la reunión de la JDBR del 23 de noviembre de 2012 El 23 de Noviembre de 2012 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas Santamaria, el Gerente General, José Darío Uribe, y los directores de dedicación exclusiva, Fernando Tenjo, Carlos Gustavo Cano, Juan José Echavarría, Juan Pablo Zárate y César Vallejo, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación En octubre la inflación anual al consumidor se situó en 3,06%, cifra similar a la observada el mes anterior (3,08%). Para el año corrido a octubre, el aumento acumulado del IPC ha sido de 2,48%, significativamente menor al registrado en igual período de 2011 (3,15%), lo que sugiere una alta probabilidad en el cumplimiento de la meta de inflación este año. El comportamiento de los grandes subgrupos del IPC durante octubre fue muy similar al del mes pasado. Dentro del IPC sin alimentos, la variación anual de los precios de la canasta de transables sin alimentos ni regulados en octubre estuvo cerca del 1,1%, nivel que se ha mantenido desde hace varios meses, consistente con la estabilidad del tipo de cambio. La variación anual del IPC de no transables sin alimentos ni regulados se mantuvo en 4,0%, con los arriendos, su principal componente, aumentando 7 pb frente al mes anterior y situándose en 4,9%. En el grupo de no transables, ítems como los servicios de educación y salud presentan ajustes anuales superiores al 4,0% desde comienzos de año, los cuales han sido compensados por los menores aumentos en los precios de otros servicios relacionados con la diversión, cultura y esparcimiento y otros servicios. Respecto a los regulados, los precios de esta canasta aumentaron en octubre 3,3% frente a los registrados en el mismo mes del año pasado, dato similar al de septiembre. Los combustibles volvieron a ejercer una presión alcista (aumentando 120 pb a 4,4%), pero los servicios públicos tuvieron un comportamiento opuesto (descendieron 62 pb a 2,0%), debido a las rebajas en las tarifas de energía eléctrica que compensaron parcialmente las alzas del mes anterior. El IPC de alimentos aumentó 3,6% frente a lo registrado en el mismo mes del año pasado. El descenso de los precios internacionales de varios alimentos como los del café, azúcar y algunas oleaginosas y cereales habría permitido la moderación en los ajustes de precios internos de los alimentos procesados, cuya variación anual pasó de 4,3% a 3,7% entre septiembre y octubre. En octubre se observó menor caída de la variación anual del IPC de alimentos perecederos (de -2,4% a -0,6%). Las comidas fuera del hogar presentaron un ajuste superior al 5,0%, similar al de meses anteriores. La inflación básica tampoco presentó cambios de importancia en este último mes. Para el promedio de los cuatro indicadores monitoreados por el Banco de la República se observó un registro de 3,11%, levemente inferior al de septiembre (3,16%). Desde noviembre del año pasado esta variable ha presentado pocos cambios, oscilando en un rango entre 3,0% y 3,2%. La variación anual del IPP total en octubre fue de -1,1%, registro inferior al de septiembre. El IPP importado continuó en terreno negativo gracias a la estabilidad de la tasa de cambio y los descensos en varios precios de las materias primas. La variación anual del IPP de bienes producidos y consumidos en el país se redujo de 0,6% en septiembre a -0,5% en octubre. Dicha situación permite vislumbrar menores presiones sobre la inflación hacia los próximos meses. En lo que respecta a las expectativas de inflación, según la encuesta mensual efectuada a los analistas de las entidades financieras, la inflación esperada a diciembre de este año es de 3,0% y a doce meses de 3,2%, sin cambios respecto al mes pasado. b. Crecimiento En septiembre se observaron señales mixtas sobre el desempeño de la actividad económica. Indicadores como los de ventas al por menor sin vehículos mostraron una aceleración importante, mientras que la producción industrial continuó en retroceso tal como se había previsto. A esto se suma la contracción no anticipada de las importaciones de bienes de capital y el menor crecimiento de las exportaciones. Por otro lado, el índice de confianza del consumidor de Fedesarrollo con cifras a octubre se mantuvo en niveles similares a los observados en septiembre y por encima del dato de octubre del año pasado y de su promedio calculado desde el año 2001, lo cual sugiere que el consumo de los hogares mantiene un dinamismo similar al de su promedio histórico (4%). Aun así, lo más probable es que el crecimiento anual en este periodo haya sido inferior al observado en la primera mitad del año, en parte por una alta base de comparación. Adicionalmente, la encuesta regional mensual que realiza el Banco de la República muestra que el componente tendencial de las expectativas de ventas a un horizonte de 12 meses aumentó entre julio y septiembre, después de haber caído en la primera mitad del año. Las expectativas de generación de empleo de la misma encuesta muestran un comportamiento similar. Por el lado de la inversión privada, si bien la información es escasa, los resultados de las importaciones de bienes de capital a septiembre sugieren un comportamiento menos dinámico para este agregado que el proyectado anteriormente. Estas compras cayeron 24,2% frente al mismo mes del año anterior. Excluyendo aviones, la caída fue de 15,2%. Se destaca la disminución en las compras de maquinaria industrial, que cayeron 26% anual frente al mismo mes del año anterior, hecho que contrasta con las tasas positivas de los meses de julio y agosto (20% en promedio). En el mes de septiembre las exportaciones totales en dólares crecieron 4,9% frente al mismo mes del año pasado (6,1% si se incluyen las re-exportaciones de aviones). Las ventas externas continuaron lideradas por las de petróleo, mientras que las de carbón volvieron a caer y las industriales se mantienen estancadas. Por su parte, las exportaciones de origen agrícola presentaron una caída de 7,7% frente al mismo mes del año anterior, dado el menor valor exportado de café y banano. Si bien el crecimiento anual de las ventas externas totales en este mes fue mayor al obtenido en agosto, las tasas anuales de crecimiento de los últimos meses son inferiores a las observadas en la primera mitad del año. Dentro de los indicadores por el lado de la oferta, se destaca que la producción industrial sin trilla de café, según el DANE, registró una variación anual en septiembre de -1,3%. Los indicadores de confianza, pedidos, existencias y expectativas de la encuesta de Fedesarrollo para la industria de septiembre, junto con la demanda de energía del sector para octubre, sugieren que la contracción de la producción industrial se prolongará. Las últimas cifras de los sectores agrícola y minero son positivas. Según la federación de cafeteros la producción de café habría crecido en el tercer trimestre a una tasa anual un poco superior al 20%. Así mismo, la producción de petróleo en septiembre y octubre registró un repunte significativo, después de los pobres resultados de los cuatro meses anteriores atribuidos a choques de oferta. En conclusión, el crecimiento de la economía colombiana se ha desacelerado a partir de tasas observadas por encima de sus niveles de tendencia en el segundo semestre de 2011. Luego de un crecimiento anual de 4,8% en la primera mitad de 2012, los indicadores recientes de actividad sugieren una moderación en el crecimiento un poco mayor a la esperada. La debilidad de la economía mundial y el descenso en la demanda interna se han visto reflejados en el menor crecimiento de las exportaciones y la contracción de la producción industrial. El rango de pronóstico del crecimiento del PIB para 2012 está entre 3,7% y 4,9%, con 4,3% como la cifra más probable. Para 2013 se espera un crecimiento cercano al crecimiento de la capacidad productiva. c. Variables Financieras En octubre continuó la moderación del crédito bancario (M/N y M/E) como ha sido característico a lo largo del año. Su tasa anual de crecimiento fue de 15,3%, menor en 43 pb y 221 pb frente a la observada el mes anterior y en junio, respectivamente. El crecimiento anual de la cartera comercial en moneda nacional pasó de 16,9% en junio a 14,2% en octubre, mientras el componente en moneda extranjera lo hacia en el mismo mes en 6,2%. Tendencia similar presentó la cartera de consumo, con tasas de crecimiento de 22,2%, y 18,9% en los meses ya mencionados. Por su parte, la desaceleración de la cartera hipotecaria ha sido menos acentuada con tasas de variación de 16,4%, y 15,6% en igual periodo. Las tasas de interés real (descontando el IPC sin alimentos) para los desembolsos de octubre de créditos de consumo, hipotecario, comercial ordinario y preferencial, en su orden, se ubicaron en 15,6%, 9,9%, 9,0% y 5,6%, niveles menores a sus promedios respectivos calculados desde 2000. De otra parte, las tasas de interés reales para créditos otorgados con tarjeta y para la modalidad de tesorería se ubicaron en 26,5%, y 5,3%, tasas mayores a sus promedios calculados desde 2000. d. Contexto Externo En términos generales la actividad global ha evolucionado en línea con lo esperado en los pasados informes sobre inflación. La incertidumbre internacional se mantiene por cuenta de los riesgos de una profundización de la crisis en Europa y de una posible contracción en Estados Unidos en 2013 atribuida al “abismo fiscal”. La última información disponible apunta a una menor probabilidad de una desaceleración de la economía china. En la Zona Euro, durante el tercer trimestre el PIB se contrajo nuevamente. La información disponible para el cuarto trimestre del año (índices de gestión de compras, índices de confianza, etc.), indica que la contracción de la actividad económica muy probablemente continúa en el cuarto trimestre. Cabe resaltar que la situación de los países de la periferia estaría restando nuevamente dinamismo a Alemania y Francia, donde se espera una desaceleración para el último trimestre del año. En los Estados Unidos, la expansión ha seguido a un ritmo modesto, como lo evidencia el comportamiento de las ventas al por menor, las exportaciones y la actividad industrial. No obstante, cabe resaltar que el mercado inmobiliario ha continuado recuperándose y para los próximos trimestres se espera que siga aportando de forma positiva al crecimiento, aunque todavía desde un nivel bajo. Para el caso de América Latina, los indicadores de actividad real muestran un crecimiento bajo de la economía brasilera, mientras que Chile y Perú continúan expandiéndose a un ritmo favorable. La economía mexicana se está desacelerando, la venezolana si bien creció, se espera una desaceleración importante en el próximo año. Las monedas y la percepción de riesgo hacia las economías de la región, no han presentado cambios importantes en un entorno de estímulo monetario implementado por los países desarrollados. Los precios internacionales del petróleo se han mantenido relativamente estables en las últimas semanas; sin embargo, las tensiones geopolíticas en Oriente Medio podrían incrementarlos nuevamente. Los precios de los alimentos, con excepción del trigo, han revertido el alza de mitad de año. En Colombia, los términos de intercambio que habían descendido hacia mediados de año, volvieron a recuperarse en septiembre y octubre y se encuentran en niveles históricamente altos lo que es explicado por las elevadas cotizaciones del petróleo y por los menores ritmos de ajuste de los precios de bienes importados. Las bajas presiones inflacionarias y brechas del producto negativas siguen permitiendo a los países desarrollados mantener una política monetaria expansiva. Las economías emergentes han presentado un mejor crecimiento económico aunque inferior a su potencial, con unas tasas de interés de referencia alrededor de la natural. Se espera que en 2013 esta situación continúe. Hacia el futuro, los mayores riesgos continúan siendo una fuerte recesión en Europa, con impactos negativos y significativos sobre los términos de intercambio, la confianza y la demanda agregada de Colombia. También, la posibilidad de que se presente el llamado abismo fiscal en Estados Unidos sigue vigente, situación que podría tener efectos negativos importantes. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA A efectos de la discusión, la Junta Directiva consideró los siguientes elementos: (i) La incertidumbre internacional se mantiene. Algunos indicadores económicos internacionales han mejorado un poco. La debilidad de un buen número de economías industrializadas y la inexistencia de presiones inflacionarias permiten esperar que las tasas de interés externas se mantengan bajas por un período prolongado. (ii) El crecimiento colombiano se ha desacelerado a partir de tasas observadas por encima de sus niveles de tendencia en el segundo semestre de 2011. Luego de un crecimiento anual de 4,8% en la primera mitad de 2012, los indicadores recientes de actividad sugieren una moderación en el crecimiento un poco mayor a la esperada. La debilidad de la economía mundial y el descenso en la demanda interna se han visto reflejados en el menor crecimiento de las exportaciones y la contracción de la producción industrial. El rango de pronóstico del crecimiento del PIB para 2012 está entre 3,7% y 4,9%, con 4,3% como la cifra más probable. (iii) Para 2013 se espera un crecimiento moderado pero sostenido de la demanda externa de productos colombianos, niveles estables de los precios internacionales y amplias condiciones de liquidez internacional. La inversión continuaría siendo impulsada por las obras civiles, por las menores tasas de interés y por la expansión de los proyectos minero-energéticos. De esta manera, se espera un crecimiento en 2013 cercano al crecimiento de la capacidad productiva. (iv) El crecimiento del crédito continúa desacelerándose. Los índices de precios de la vivienda nueva y usada se encuentran en niveles históricamente altos. (v) La inflación, el promedio de los indicadores de inflación básica y las expectativas se encuentran muy cerca al punto medio del rango meta (3%). (vi) Los mayores riesgos sobre la actividad económica del país en 2013 continúan siendo una recesión significativa en Europa o la posibilidad de que se presente un fuerte recorte fiscal en los Estados Unidos. Unos miembros propusieron reducir la tasa de interés de intervención a partir de varias consideraciones. Mientras que la inflación y sus expectativas se encuentran en la meta de largo plazo, los indicadores de industria, importaciones de bienes de capital y las ventas de bienes durables sugieren que la economía se puede estar desacelerando más de lo esperado en relación a su nivel de crecimiento potencial. Adicionalmente, a pesar de que las reducciones de la tasa de interés de intervención parecen estar transmitiéndose adecuadamente al mercado, la percepción de riesgo de los agentes locales sigue siendo alta. Otros miembros consideraron que debe mantenerse inalterada la tasa de interés de referencia teniendo en cuenta lo siguiente: Si bien el crecimiento de la demanda se ha reducido en lo corrido del año, esto ha ocurrido a partir de niveles insostenibles del crecimiento del gasto privado en el segundo semestre de 2011. No es evidente con la información disponible que el ajuste del gasto haya sido, o vaya en camino de ser, mayor que el requerido para mantener el producto y el empleo cerca de sus niveles sostenibles. Si bien el crédito se ha desacelerado, la financiación a empresas y hogares crece a buen ritmo, de manera coherente con un apropiado dinamismo de la demanda interna. Las tasas de interés reales, con excepción de las de tarjeta de crédito, son similares a las que tuvo el país en el primer semestre de 2010, y que mostraron ser expansivas. Tanto la inflación y sus expectativas, como las proyecciones de inflación para este año y el siguiente, se encuentran alrededor de 3%. Si bien se mantienen altos niveles de incertidumbre en la economía mundial, las noticias e indicadores internacionales disponibles en el último mes muestran unas perspectivas algo más favorables para 2013 que las que se tenía en la reunión de Junta anterior. Algo similar ocurrió con la confianza del consumidor y algunos otros indicadores. Consideraron, además, que su postura parte de un supuesto de importantes inversiones en construcción y obras civiles, así como de la existencia de términos de intercambio que sostienen niveles altos del ingreso nacional. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA De acuerdo con la evaluación del actual balance de riesgos, la Junta Directiva consideró apropiado reducir la tasa de interés de intervención a 4,5%. Con la información actual, este es el nivel de tasa de interés compatible con el crecimiento cercano a la capacidad productiva y el cumplimiento de la meta de inflación. La Junta reitera que el Banco de la República cuenta con las herramientas y recursos suficientes para atender las necesidades de liquidez en moneda local y extranjera que regularmente requiere la economía y aquellas que pudieran aparecer en un ambiente de turbulencia financiera internacional. La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo del comportamiento y proyecciones de la actividad económica e inflación en el país, de los mercados de activos y la situación internacional. Finalmente, reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible.
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- Minutas de la reunión de la JDBR del 21 de diciembre de 2012 El 21 de Diciembre de 2012 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los directores de dedicación exclusiva, Fernando Tenjo Galarza, Carlos Gustavo Cano Sanz, Juan José Echavarría Soto, Juan Pablo Zárate Perdomo y César Vallejo Mejía, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación anual al consumidor se redujo en noviembre por tercer mes consecutivo, situándose en 2,77%, 29 puntos base (pb) menos que el registro del mes anterior. Con este dato, la inflación acumulada en lo corrido del año es de 2,34%. La variación anual de los precios de las canastas de alimentos y sin alimentos presentaron reducciones importantes durante este mes. Para el caso del IPC de alimentos, en noviembre la variación anual disminuyó de manera significativa. El dato fue 3,0%, 55 pb por debajo del registro del mes anterior. Esta canasta presenta una tendencia decreciente, con algunas interrupciones pequeñas, desde comienzos de 2011. Esto ha sido posible por el buen comportamiento de los precios de los alimentos perecederos, cuya variación anual en el mes fue de -1,95%, 130 pb menos que el registro de octubre. También se ha presentado un descenso en la variación anual del IPC de alimentos procesados (3,12%) en los últimos meses que ha ayudado a la tendencia decreciente del agregado. Desde junio de 2012, la reducción en la variación anual ha sido de 200 pb. Finalmente, la variación anual del rubro de comidas fuera del hogar disminuyó en el último mes 20 pb y se situó en 5,1%. En el IPC sin alimentos, el grueso de la disminución de la variación anual de los precios en noviembre se concentró en la canasta de regulados, cuya variación anual se situó en 2,8%, el registro más bajo de los últimos tres años. La disminución del precio de los combustibles en el último mes contribuyó de manera importante a este resultado. En noviembre también se presentó una reducción en el ajuste anual del IPC de transporte público. En servicios públicos se presentaron descensos mensuales en los IPC de energía y gas. Los otros dos componentes del IPC sin alimentos – transables y no transables – también presentaron reducciones en los cambios anuales en el último mes, aunque mucho más leves que las observadas en la canasta de regulados. En el primer caso, la variación anual se situó en 0,94% lo que significó una disminución de 12 pb frente a lo observado en octubre. Desde junio de 2012, la variación anual de esta canasta ha estado alrededor de 1%. Este resultado puede estar en parte asociado a la apreciación del tipo de cambio. Para el IPC de no transables, sin alimentos ni regulados, el registro de noviembre fue de 3,97%, 6 pb menos que el registro de octubre. Este resultado puede ser explicado por la demanda agregada, que ha presentado una desaceleración desde mediados del año que podría haber contenido ajustes de precios más pronunciados. Es de resaltar que el rubro de arriendos, que ha presentado una tendencia creciente desde hace dos años, presentó un leve descenso en esta oportunidad (4 pb) y se situó en 3,9%. Algunos otros servicios también presentaron una variación anual decreciente y contribuyeron al resultado del agregado. La inflación básica también se redujo en el último mes. El promedio de los cuatro indicadores de inflación básica monitoreados por el Banco se redujo por tercer mes consecutivo, pasando de 3,11% en octubre a 2,96% en noviembre. La variación anual del IPP se mantuvo en terreno negativo y siguió disminuyendo, situándose en - 1,6% en noviembre. Parte de este descenso se explica por los precios agropecuarios pero también se observa en los mineros y manufactureros. La apreciación del tipo de cambio y los menores precios internacionales explican en parte dicho fenómeno. Según la encuesta mensual efectuada a los analistas de las entidades financieras, la inflación esperada a diciembre de este año es de 2,63% y a doce meses de 3,12%, lo que representa una disminución frente a los resultados del mes pasado. Las expectativas derivadas de los TES (con cifras al 12 de diciembre) se situaron alrededor de 2,5% para el horizonte de 2 a 5 años, entre 40 y 50 pb menos que hace un mes. b. Crecimiento En el tercer trimestre de 2012 el PIB se expandió a una tasa anual de 2,1%, por debajo del límite inferior del rango de pronóstico presentado en el Informe sobre Inflación de septiembre (entre 3,3% y 4,8%). Esta cifra indica una importante desaceleración con respecto al crecimiento económico del segundo trimestre (4,9%) y más marcada que la esperada. En términos trimestrales esto significó una caída de 0,7%, la primera en los últimos siete trimestres. Por componentes del gasto, la desaceleración se presentó sobre todo en la demanda interna y también en las exportaciones. En el primer caso, el crecimiento anual fue de 2,4%, frente a 7,1% del segundo trimestre. El menor crecimiento del PIB y de la demanda interna tuvo origen en el rubro de formación bruta de capital fijo, en particular por la pobre dinámica de las inversiones en obras civiles, construcción y edificaciones y equipo de transporte, cuyos resultados mostraron una contracción importante en términos anuales que no fue prevista (-14,9%, -10,7% y -10,9% respectivamente). Dentro de las obras civiles se presentaron fuertes caídas en la inversión de minería y en la construcción de carreteras y otras vías. En la inversión en edificaciones el menor gasto se dio tanto en vivienda como en construcciones no residenciales. En contraste, la dinámica del consumo privado (4%) y público (4,8%) en el tercer trimestre fue similar a la observada en el segundo y mejor que lo esperado, aún cuando el crecimiento de bienes durables presentó una contracción anual de 5,9% en el tercer trimestre de 2012. Por su parte, las exportaciones, que en 2011 crecieron por encima del 11% real, en lo corrido de 2012 se han venido desacelerando y en el tercer trimestre crecieron 2,5%. Esto refleja, en gran medida, el efecto de la desaceleración mundial sobre el comercio exterior colombiano, así como las caídas observadas en las producciones de petróleo y de carbón durante el tercer trimestre, debido a choques de oferta que en principio serían transitorios. Así mismo, coherente con el menor dinamismo de la demanda interna, el crecimiento real de las importaciones ha disminuido de 21,5% en 2011 a 8,8% en el tercer trimestre de 2012. Por el lado de la oferta, en el tercer trimestre, además de la contracción de la rama de construcción (obras civiles y edificaciones), sobresalen el estancamiento del PIB industrial (con una tasa de crecimiento anual de -0,1%) y el muy bajo crecimiento de minas y canteras (0,5%). El pobre resultado para esta última rama contrasta con el importante ritmo de expansión observado en el primer semestre de este año (10,8%) y se explica por choques de oferta en la producción de petróleo y carbón. El comercio, una rama de gran peso dentro del PIB, se desaceleró de 4,3% en el segundo trimestre a 3,7% en el tercero. También presentaron desaceleraciones los rubros de transporte y PIB financiero. Por el contrario, tanto los PIB de agricultura como de servicios sociales, comunales y personales se aceleraron. Respecto al cuarto trimestre, los indicadores disponibles sugieren un desempeño similar al del tercero en lo que respecta al consumo privado. El índice de confianza de los consumidores de Fedesarrollo se mantuvo por encima de su promedio histórico calculado a partir de 2001 y fue similar al de septiembre y octubre. De hecho, el promedio de lo corrido del cuarto trimestre superó al observado en el tercer trimestre. Por otro lado, las importaciones de bienes de consumo en dólares tuvieron un aumento de 22,4% en octubre frente al mismo mes del año pasado, lo que representa una fuerte aceleración frente a los últimos meses. Por último, el crédito bancario dirigido al consumo que venía desacelerándose en meses anteriores, no lo hizo en noviembre y creció a una tasa anual (18,9%) similar a aquella registrada en octubre. Sin embargo, estos resultados contrastan con el indicador de las ventas totales del comercio al por menor, que cayó 0,3% anual (excluyendo los automóviles el retroceso fue de 0,2%). En septiembre el crecimiento anual había sido de 2,3% (6,2% excluyendo automóviles). Para el consumo público y la inversión en obras civiles la incertidumbre es alta, en especial teniendo en cuenta la gran volatilidad que han exhibido estas series recientemente. Las exportaciones colombianas en dólares aumentaron 5,2% en octubre respecto al mismo mes de 2011 (5,8% si se incluyen re-exportaciones de aviones). Este comportamiento es explicado por los aumentos anuales en los valores despachados en los rubros de industriales y otros (18%), bienes agrícolas (3,3%) y productos mineros (1,7%). Dentro de estos dos últimos grupos se destacan los crecimientos anuales en las exportaciones de carbón y flores de 38,6% y 16%, respectivamente. En el grupo de industriales, los ítems de vehículos (73,6%), productos químicos (10,4%) y alimentos y bebidas (10%), presentaron la mayor contribución al crecimiento de las ventas externas. En cuanto a los indicadores de oferta, la producción industrial de octubre creció a un ritmo anual de 1,2%. Por sub-ramas, las de mayor dinamismo fueron elaboración de bebidas (13,4%), vehículos (13,4%), otros productos alimenticios (11,1%) y molinería y almidones (7,3%). Los resultados más recientes de la EOE de Fedesarrollo en industria con información a noviembre no apuntan a cambios en el desempeño del sector para los últimos dos meses del año. Los pedidos dejaron de presentar caídas adicionales y el nivel de existencias disminuyó. Así mismo, el índice de confianza de los empresarios mantuvo su tendencia descendente pero no mostró caídas adicionales. Algo similar ocurrió en la encuesta regional del Banco de la República de octubre en la cual los industriales sugieren una leve mejoría de su percepción sobre la situación de las ventas actuales, mientras que la percepción de los próximos 12 meses continúa siendo menos favorable. Para el comercio, los indicadores de Fenalco y Fedesarrollo muestran señales dispares. De acuerdo con Fenalco, en noviembre los comerciantes registran una mejoría de su percepción sobre la situación de las ventas actuales, mientras que las expectativas siguen siendo desfavorables. Por otra parte, la encuesta mensual de Fedesarrollo sugiere que tanto las perspectivas actuales como las expectativas a 6 meses mejoraron en los últimos dos meses. En resumen, los datos del PIB para el tercer trimestre y las cifras más recientes del cuarto trimestre de 2012 sugieren que el crecimiento para todo este año podría ser inferior a 4%. La mayor incertidumbre en esta proyección se vuelve a originar en el comportamiento de la inversión, principalmente la destinada a obras civiles y a edificaciones. Para 2013 se espera que algunos de los factores que han frenado la inversión en 2012 se reviertan, impulsando por esta vía la demanda interna. Este es el caso, por ejemplo, de algunos proyectos de inversión en el sector minero-energético, los cuales han sufrido atrasos en el presente año. Algo similar debería observarse en el rubro de construcción de carreteras y otras vías. Por su parte, las condiciones que soportan el dinamismo observado del consumo y de la inversión en maquinaria y equipo se mantendrían en 2013. Entre ellas, los niveles estables de empleo y confianza del consumidor y la reducción de las tasas de interés de política en el segundo semestre de 2012, que se están transmitiendo a las tasas de interés del crédito. c. Variables Financieras En Noviembre el crédito bancario (M/N y M/E) presentó una pausa en la moderación del crecimiento. Su tasa anual fue de 15,2%, mayor en 12 pb frente a la de octubre y menor en 226 pb al compararla con la de junio. Este comportamiento se observó en todas las modalidades. La cartera comercial en moneda nacional registró en noviembre un incremento anual de 14,3%, levemente superior al del mes anterior (14,1%) e inferior al del primer semestre (16,9%). Para el componente en moneda extranjera, el crecimiento anual fue de 5,8% continuando con una ligera recuperación desde el nivel de julio (2%). En forma similar, la cartera de consumo repuntó un poco entre octubre (18,6%) y noviembre (18,9%), pero con crecimiento menor al de junio (22,2%). Por su parte, la cartera hipotecaria ha mostrado un comportamiento más estable, con variaciones anuales de 15,4% en noviembre, 15,5% en octubre y 16,4% en junio. Las tasas reales de interés (descontando el IPC sin alimentos) para los desembolsos de noviembre de los créditos de consumo fue de 15,4%, para los hipotecarios de 10%, para el comercial ordinario de 9,2% y para el preferencial de 5,7%. Estos niveles son menores a sus promedios históricos respectivos calculados desde 2000. De otra parte, las tasas reales de interés para créditos otorgados con tarjeta y para la modalidad de tesorería se ubicaron en 26,7%, y 5,5%, tasas mayores a sus promedios calculados desde 2000. d. Contexto Externo Para el cuarto trimestre de 2012 la nueva información de los países desarrollados muestra que la actividad económica es más débil de lo esperado. La zona del Euro siguió en recesión y sus economías más grandes (Alemania y Francia) muestran señales de contracción mientras que Estados Unidos volvió a mostrar signos de desaceleración. En los países emergentes, los nuevos indicadores económicos de China sugieren una recuperación. Algunos indicadores de Brasil apuntan a que la recuperación de esa economía podría continuar creciendo a un ritmo lento. En Chile y Perú se siguen presentando crecimientos robustos originados principalmente en su demanda interna. Con cifras a mediados de diciembre, los índices de actividad manufacturera y de servicios de la zona del euro permanecieron en terreno contractivo, mientras que en noviembre la confianza de los empresarios y de los consumidores se mantuvo deprimida. Cabe resaltar que la debilidad de la región no es exclusiva de las economías de la periferia, pues los países más sólidos de Europa, con Alemania a la cabeza, han venido perdiendo dinamismo. Por su parte, en los Estados Unidos algunos indicadores de actividad real continúan mostrando un comportamiento débil. Lo anterior es especialmente cierto en el caso de las ventas al por menor y de la actividad industrial, que evidencian un virtual estancamiento con cifras a noviembre. La incertidumbre alrededor del manejo fiscal, además de haber afectado las decisiones de inversión de las empresas, ha comenzado a afectar la confianza de los consumidores. Por el lado positivo, la tasa de desempleo se redujo nuevamente en noviembre y el mercado de vivienda continúa mostrando señales de recuperación, aunque todavía en un nivel muy bajo. Para el caso de las economías emergentes de Asia, el crecimiento económico disminuyó en la mayoría de países durante el tercer trimestre. Sin embargo, con cifras a noviembre, en China las ventas al por menor y la actividad industrial se aceleraron nuevamente, situación que estaría contribuyendo a la recuperación del dinamismo de la región. En América Latina, el crecimiento del tercer trimestre se aceleró en Brasil, Chile y Perú, mientras que en México y Venezuela se mantuvo a un ritmo favorable. Pese al mayor crecimiento de la economía brasilera, éste fue muy inferior al esperado por los analistas, situación que incrementó ligeramente la percepción de riesgo de dicho país. En relación con los precios internacionales de los bienes básicos, las cotizaciones del petróleo han permanecido por debajo de lo observado en la primera mitad del año pero relativamente altas en términos históricos. Los precios del café mantuvieron su tendencia descendente. De esta forma, aunque los términos de intercambio de noviembre son menores que los observados a comienzos de año, siguen siendo históricamente elevados y contribuyen a soportar el ingreso de Colombia. Para 2013 se espera que los términos de intercambio sean relativamente estables. Los menores precios internacionales de los bienes básicos junto con la desaceleración en la demanda, principalmente en los países desarrollados, han contribuido a la reducción de la inflación en estos países. De forma similar, en América Latina, con excepción de Brasil, los precios han mantenido una tendencia decreciente en los últimos meses. En el caso de las economías asiáticas no se observa una tendencia común. Las bajas presiones inflacionarias y una brecha de producto negativa han permitido a los bancos centrales de países desarrollados mantener las tasas de interés cercanas a cero. En las economías emergentes las tasas de interés de referencia se encuentran alrededor de la natural. Se espera que en 2013 estas situaciones no cambien, por lo que la abundancia de liquidez internacional continuaría. Los riesgos que pesan sobre la economía global para 2013 siguen siendo los mismos que los identificados en minutas anteriores y que se centran en la encrucijada fiscal de los Estados Unidos y en el desenvolvimiento de la situación europea. Cabe la posibilidad de que el estímulo fiscal en China favorezca un mayor crecimiento en este país y ayude a compensar un comportamiento más flojo en Europa y Estados Unidos. Con todo lo anterior, es factible que en 2013 el crecimiento promedio de los socios comerciales de Colombia sea algo más débil de lo estimado anteriormente, aunque se sigue proyectando una cifra superior al crecimiento de 2012. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA A efectos de la discusión la Junta Directiva consideró los siguientes elementos: (i) El crecimiento del PIB del tercer trimestre de 2012 (2,1%) se situó por debajo del rango proyectado por el equipo técnico del Banco de la República (entre 3,3% y 4,8%). La demanda interna se desaceleró significativamente, de 7,1% en el segundo trimestre a 2,4% en el tercero. Esto se explica en su totalidad por una fuerte e inesperada contracción de la inversión, en especial la de obras civiles y edificaciones. En obras civiles se presentaron grandes reducciones en la inversión en minería y en la construcción de carreteras y otras vías. En la inversión en edificaciones, la caída se presentó tanto en vivienda como en construcciones no residenciales. (ii) En contraste, la dinámica del consumo privado (4%) y público (4,8%) en el tercer trimestre fue similar a la observada en el segundo y un poco mejor que la esperada, aún cuando el crecimiento de bienes durables presentó una contracción anual de 5,9% en el tercer trimestre de 2012. Por su parte, las exportaciones, que en 2011 crecieron por encima del 11% real, en lo corrido de 2012 se han venido desacelerando y en el tercer trimestre crecieron 2,5%. Esto refleja, en gran medida, el efecto de la desaceleración mundial sobre el comercio exterior colombiano. Así mismo, coherente con el menor dinamismo de la demanda interna, el crecimiento real de las importaciones ha disminuido de 21,5% en 2011 a 8,8% en el tercer trimestre de 2012. (iii) Los datos recientes sobre la economía mundial no cambian mayormente lo informado en el comunicado del la Junta pasada. La incertidumbre internacional se mantiene. Algunos indicadores económicos internacionales han mejorado un poco. La debilidad de un buen número de economías industrializadas y la inexistencia de presiones inflacionarias permiten esperar que las tasas de interés externas se mantengan bajas por un período prolongado. (iv) Los anteriores resultados y las nuevas cifras económicas del cuarto trimestre de 2012 sugieren que el crecimiento para todo el año podría ser inferior a 4%. La mayor incertidumbre en esta proyección se vuelve a originar en el comportamiento de la inversión, principalmente la destinada a obras civiles y a edificaciones. (v) Para 2013 se espera que algunos de los factores que han frenado la inversión en 2012 se reviertan, impulsando por esta vía la demanda interna. Este es el caso, por ejemplo, de algunos proyectos de inversión en el sector minero-energético, los cuales han sufrido atrasos en el presente año. Algo similar debería observarse en el rubro de construcción de carreteras y otras vías. Por su parte, las condiciones que soportan el dinamismo observado del consumo y de la inversión en maquinaria y equipo se mantendrían en 2013. Entre ellas, los niveles estables de empleo y confianza del consumidor y la reducción de las tasas de interés de política en el segundo semestre de 2012. Estas últimas se están transmitiendo a las tasas de interés del crédito. Por último, en el contexto externo se prevé un crecimiento de la economía mundial ligeramente mayor al registrado en 2012, términos de intercambio relativamente estables y abundancia de liquidez internacional. En estas condiciones, se espera un crecimiento de la economía en 2013 superior al proyectado para este año. (vi) Los resultados de la inflación en noviembre fueron inferiores a lo esperado, lo cual se explica principalmente por el comportamiento de los precios regulados y de los alimentos. La inflación, el promedio de los indicadores de inflación básica y la mayoría de medidas de expectativas de inflación se encuentran por debajo de la meta de 3%. Con la nueva información disponible se prevé que ésta situación continúe por un tiempo. (vii) En Noviembre el crédito bancario (M/N y M/E) presentó una pausa en la moderación del crecimiento. Su tasa anual fue de 15,2%, mayor en 12 pb frente a la de octubre y menor en 226 pb al compararla con la de junio. Este comportamiento se observó en todas las modalidades. La cartera comercial en moneda nacional registró en noviembre un incremento anual de 14,3%, levemente superior al del mes anterior (14,1%) e inferior al del primer semestre (16,9%). Para el componente en moneda extranjera, el crecimiento anual fue de 5,8% continuando con una ligera recuperación desde el nivel de julio (2%). En forma similar, la cartera de consumo repuntó un poco entre octubre (18,6%) y noviembre (18,9%), pero con crecimiento menor al de junio (22,2%). Por su parte, la cartera hipotecaria ha mostrado un comportamiento más estable, con variaciones anuales de 15,4% en noviembre, 15,5% en octubre y 16,4% en junio. La mayoría de los miembros de la Junta consideró apropiado reducir la tasa de interés de intervención 25 pb, teniendo en cuenta nueva información en varios frentes. Por un lado, con los datos de noviembre tanto la inflación observada como las proyecciones a tres trimestres se ubican por debajo de la meta de largo plazo, en un contexto en que no se perciben presiones inflacionarias por mayores costos o por factores climáticos. Por otro lado, los datos de crecimiento del PIB para el tercer trimestre señalan una desaceleración de la actividad económica mayor a la esperada, indicando la posibilidad de un exceso de capacidad productiva (brecha negativa del producto). Las razones para esta mayor desaceleración de la economía pueden adjudicarse a problemas bien identificados. Como es sabido, las condiciones externas vienen afectando negativamente el comercio internacional y los precios de los bienes exportados desde hace varios trimestres. Si bien estos precios se mantienen en niveles históricamente altos, son inferiores a los registrados en la primera mitad del año. A esto ha venido a sumarse más recientemente un desplome de la demanda interna asociado a la contracción de la inversión en obras civiles y en construcción de vivienda y no residencial, principalmente. Esta contracción en buena medida se explica por factores exógenos de tipo administrativo y regulatorio que podrían superarse, aunque sólo parcialmente, en el corto plazo. Finalmente, si bien el crecimiento de la cartera se ha estabilizado en niveles relativamente altos, éstos pueden estar reflejando más una mayor profundización financiera de la economía que un excesivo endeudamiento de los agentes. Otros miembros subrayaron que casi todos los indicadores sobre la marcha de la economía denotan un ostensible deterioro de la misma: la industria en terreno contractivo (con un crecimiento negativo en el tercer trimestre de -0.1%), en medio de una fuerte caída en el ritmo de crecimiento de la demanda interna por los bienes de origen nacional; en particular, sectores como el siderúrgico, el textil, las confecciones, el calzado, las manufacturas de cuero, los alimentos procesados, entre otros, acusando notorio debilitamiento; adicionalmente, se observa una migración de la producción nacional a la comercialización de bienes importados en especial en vestuario, calzado y manufacturas de cuero; el comercio con un crecimiento mediocre, impulsado principalmente por las importaciones de bienes de consumo; las tasas de crecimiento de la minería a gran escala disminuyendo considerablemente; y la construcción contrayéndose de manera ostensible. Indicadores líderes como el consumo de bienes durables y la inversión en vivienda muestran tasas de crecimiento negativo en el tercer trimestre. En el plano internacional la demanda en general continúa desacelerándose; en Asia, China con algunos signos de recuperación, pero India y Corea del Sur, entre otros, perdiendo dinamismo; en Europa, las economías fuertes contagiándose de las de la periferia, y la confianza cayendo; en Estados Unidos las exportaciones siguen debilitándose; en América Latina, aunque en Chile y Perú la dinámica del crecimiento aún se mantiene, Brasil sólo crecerá ese año cerca del 1%. En conclusión, la desaceleración de la economía es mucho más fuerte que la esperada y la brecha del producto probablemente ha entrado en un terreno negativo. Por el lado de la inflación, no se percibe riesgo alguno en el mediano plazo: la total cayó a 2,77%; el promedio de las básicas se ubicó por primera vez por debajo del punto medio del rango meta; la inflación sin alimentos en 2,68%; la de alimentos se redujo a 3,1%; es cada día más probable que no se presente el fenómeno del Niño el año entrante; todas las expectativas de inflación también disminuyeron; las de inflación sin alimentos a 12 meses cayeron al 2,8%; y por el lado de los commodities agrícolas a nivel internacional, sus precios en general están cediendo. Finalmente, se observa una desaceleración importante en la dinámica del crédito. En consecuencia, propusieron una reducción de 50 puntos básicos en la tasa de interés de intervención. Otro codirector expresó que, si bien los datos de PIB, demanda privada e inflación permiten prever la existencia de un exceso moderado de capacidad instalada, esta no es la única variable que se debe tener en cuenta al momento de establecer la postura de la política monetaria. Los diferentes agentes del sector real, especialmente los hogares, muestran niveles elevados de apalancamiento que afortunadamente se han venido desacelerando en el último semestre. Una tasa de interés de intervención muy por debajo de la tasa de largo plazo puede revertir ese proceso de ajuste (como comienza a insinuarse con las cifras disponibles en el último mes) e incrementar la vulnerabilidad del sector real. La tasa de interés de intervención actual es baja en términos históricos y reducciones adicionales la alejarían aún más de una tasa que pueda ser considerada neutral para una economía que no ha padecido crisis financieras ni quiebras generalizadas en el sector productivo en el pasado reciente. En conclusión, la actual postura de política es expansiva y adecuada para atenuar una brecha del producto moderada, sin exacerbar las vulnerabilidades del sector real. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA De acuerdo con la evaluación del balance de riesgos, la mayoría de Junta Directiva consideró apropiado reducir la tasa de interés de intervención a 4,25%. La Junta reitera que el Banco de la República cuenta con las herramientas y recursos suficientes para atender las necesidades de liquidez en moneda local y extranjera que regularmente requiere la economía y aquellas que pudieran aparecer en un ambiente de turbulencia financiera internacional. La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo del comportamiento y proyecciones de la actividad económica e inflación en el país, de los mercados de activos y la situación internacional. Finalmente, reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible.
2013-01-01
- Minutas de la reunión de la JDBR del 28 de enero de 2013 El 28 de Enero de 2013 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los directores de dedicación exclusiva, Fernando Tenjo Galarza, Carlos Gustavo Cano Sanz, Juan José Echavarría Soto, Juan Pablo Zárate Perdomo y César Vallejo Mejía, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación En diciembre la inflación anual al consumidor cayó de manera significativa y mucho más que lo esperado por el mercado y por el equipo técnico. El resultado al último mes del año fue 2,43%, 34 puntos base (pb) menos que el registro de noviembre, mes en el que también se había observado un descenso importante. De esta forma, la inflación al consumidor se situó por debajo de la meta de 2012 y de largo plazo (3%) pero dentro del rango de 2% a 4%. Como ha ocurrido a lo largo del año, la desaceleración de la inflación volvió a explicarse por el menor ritmo de aumento del IPC de alimentos y del de regulados. En el IPC de alimentos, la variación anual de diciembre (2,52%) mostró una caída de consideración (49 pb) que se suma a la del mes anterior y a la de otros meses a lo largo del año. En el último mes se acentuó la caída de los precios de un gran número de alimentos no procesados, pero también se siguieron observando ajustes muy moderados o incluso negativos en los precios de varios productos procesados o semi-procesados. En el caso de los alimentos no procesados, las caídas en los precios pueden ser explicadas por las condiciones de oferta aceptables y los menores costos de insumos. Para el caso de los alimentos procesados, el comportamiento bajista en los precios puede ser atribuido a la caída en los precios internacionales del maíz y otros cereales, de las oleaginosas, de los aceites y del café entre otros, a la apreciación del peso y a una oferta importada importante. Por otra parte, la variación anual de las comidas fuera del hogar también descendió nuevamente, aunque de forma leve, situándose en 4,9%. Dentro del IPC sin alimentos, la subcanasta de regulados presentó una variación anual de 1,9%, (88 pb menos que el dato de noviembre) siendo el registro más bajo desde finales de 2008. Este rubro ha presentado una variación anual en descenso a partir del cuarto trimestre de 2010 pero que se ha acentuado en los últimos dos meses. En diciembre se presentaron disminuciones en la variación anual de todos los rubros. La más fuerte se dio en el de servicios públicos y estuvo liderado por el IPC de energía eléctrica que mostró variaciones anuales y mensuales negativas. En este caso, la disminución de los riesgos del fenómeno de El Niño junto con la caída en la inflación al productor, que hace parte de las fórmulas de regulación, habrían contribuido a este comportamiento. La disminución en la variación del IPC de combustibles también fue importante (al cierre del año se situó en solo 1,3%) y se relaciona con las rebajas en el precio de la gasolina. Los otros dos componentes del IPC sin alimentos – transables y no transables – también presentaron reducciones en los cambios anuales en el último mes. En el primer caso, la variación anual se situó en 0,77% lo que significó una disminución de 17 pb frente a lo observado en noviembre. Desde junio de 2012, la variación anual de esta canasta había estado alrededor de 1%. Este resultado puede estar en parte asociado a la apreciación del tipo de cambio. Para el IPC de no transables, sin alimentos ni regulados, la variación anual de diciembre fue de 3,92%, 5 pb menos que el registro de noviembre. Este resultado puede ser atribuido a la demanda agregada que ha presentado una desaceleración desde mediados del año que podría haber contenido ajustes de precios más pronunciados. El rubro de arriendos, que ha exhibido una tendencia creciente desde hace dos años, presentó un leve descenso en esta oportunidad (5 pb) y se situó en 3,9%. La inflación básica también presentó una caída significativa en su variación anual en diciembre. El promedio de los cuatro indicadores monitoreados por el Banco se situó en 2,80%, 16 pb menos que el dato de noviembre. La variación anual del IPP se mantuvo en terreno negativo y siguió disminuyendo, situándose en -2,9% en diciembre. Los descensos fueron marcados tanto en el IPP importado como en el IPP de producidos y consumidos y en ambas canastas las variaciones anuales se situaron en terreno negativo (-4,8% y -2,6% respectivamente). La apreciación anual, la estabilidad o descenso en los precios internacionales y unas buenas condiciones de oferta agropecuaria explican este comportamiento. En lo que respecta a las expectativas de inflación, estas continuaron descendiendo en diciembre y a comienzos de enero. La encuesta mensual más reciente del Banco indica que los analistas del mercado financiero esperan una inflación a doce meses de 2,9% (frente a 3,1% hace un mes). En el caso de la encuesta trimestral a empresarios, la inflación esperada a doce meses es de 3,1% (antes era 3,4%), mientras que las estimaciones derivadas de los TES muestran una inflación esperada cercana al 2,6% para horizontes de 2, 3 y 5 años. b. Crecimiento La información disponible para el cuarto trimestre sugiere que el crecimiento anual del producto se aceleraría un poco en este periodo frente al trimestre anterior, pero a una tasa menor que la del primer semestre de 2012. Para el caso del consumo privado, las últimas cifras del comercio al por menor (con y sin vehículos), la desaceleración del crecimiento anual de la cartera de consumo (18,4% en promedio para el cuarto trimestre vs. 20,5% promedio para el tercero) y la estabilidad en el indicador de confianza del consumidor reportado por Fedesarrollo, apuntan a que este rubro crecería en el cuarto trimestre a una tasa menor que la observada en los primeros tres trimestres. En la inversión, la incertidumbre sobre el comportamiento del rubro es elevada, especialmente la del gasto en obras civiles, en construcción y en edificaciones. En otros componentes de este gasto como la inversión en equipo de transporte, el aumento en noviembre de las importaciones CIF de bienes de capital en equipo de transporte (4,6% anual) indicaría una posible mejoría frente a lo observado en el tercer trimestre del año. Cabe destacar igualmente el crecimiento en noviembre de las importaciones de bienes de capital para la agricultura (20,5% anual) y las de materiales de construcción (19%). Respecto a las exportaciones, las totales en dólares cayeron 7,7% en noviembre frente a las del mismo mes de 2011 (-8,2% si se incluyen las re-exportaciones de aviones). El comportamiento en el mes de noviembre se debe a la caída conjunta de las exportaciones de bienes mineros (-11,9%) y agrícolas (-18,9%). Dentro de estos grupos se destacan las disminuciones en las exportaciones de petróleo y derivados (-13,8%), carbón (-12,4%) y café (-42%). El grupo de exportaciones industriales y otros, registró una variación anual positiva de 12,7% en noviembre de 2012, destacándose los aumentos en las exportaciones de vehículos (246%), productos químicos (5,2%) y maquinaria y equipos eléctricos (43%). Por el lado de la oferta, los indicadores disponibles para la industria muestran un deterioro del sector. La variación anual del IPI sin trilla de café para el mes de noviembre fue de -4,0%. El componente tendencial del indicador tiene una pendiente negativa desde mayo de 2012. Adicionalmente, de acuerdo con Fedesarrollo, la confianza industrial continuó deteriorándose en noviembre. El indicador de pedidos no registró caídas adicionales, mientras que el indicador de existencias (contra-cíclico a la producción) reportó un leve aumento. Sin embargo, esto no afectó las tendencias negativas de ambos. Algo similar ocurrió con las expectativas de la producción a tres meses. En línea con lo anterior, la demanda de energía no regulada industrial, la cual tiene una alta correlación con el IPI, se contrajo en diciembre a una tasa anual de 0,8%. Cabe señalar que este efecto también podría obedecer a un menor número de días hábiles respecto al mismo mes del año anterior. En contraste, en el caso del comercio, de acuerdo con la encuesta de Fedesarrollo para noviembre, la situación económica de los comerciantes muestra un repunte en los últimos meses. De igual manera, las expectativas a 6 meses sugieren mejorías para los próximos meses. Algo similar se desprende de la encuesta de Fenalco para las ventas actuales. Algunas cifras asociadas con la minería, en particular con el petróleo, registraron mejoría en el último trimestre de 2012. De acuerdo con la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), la producción de petróleo en diciembre se ubicó en 984 mil barriles diarios. Así durante el cuarto trimestre, se produjeron 972 MBD en promedio, cifra superior a lo observada en los tres meses anteriores (934 MBD). Esto último se explica por el mejoramiento en las condiciones de transporte y la estabilización de la producción de los diferentes campos, lo que se sumó a menores problemas de orden público que habían afectado la producción entre el segundo y el tercer trimestre. Todo lo anterior permite fijar un rango de pronóstico de crecimiento anual del PIB para el cuarto trimestre entre 2,0% y 3,5%. Esto contempla una recuperación parcial de la inversión, y un comportamiento de los consumos público y privado que se expandirían a tasas cercanas a sus promedios históricos. Las exportaciones e importaciones crecerían a tasas levemente inferiores a las registradas en el tercer trimestre de 2012. Por el lado de la oferta, los sectores más dinámicos en el cuarto trimestre habrían sido transporte, servicios sociales, comunales y personales y por último, minería. Por el contrario, los sectores que restarían al crecimiento serían la construcción y la industria. Cabe señalar que la incertidumbre sobre el desempeño de la inversión en obras civiles aumentó considerablemente, aunque sin un sesgo definido, dada la alta volatilidad que la serie ha mostrado en los últimos trimestres. Esto explica por qué el rango de pronóstico es amplio. Así, para todo el año 2012 se estima un rango de pronóstico de crecimiento anual del PIB entre 3,3% y 3,9%. Para 2013, el equipo técnico proyecta un rango de crecimiento económico entre 2,5% y 4,5%. La mayor incertidumbre sobre este pronóstico se origina en la persistencia que pueda tener el choque negativo observado en la inversión en obras civiles y edificaciones. Se espera que algunos de los factores que han frenado este gasto se reviertan, impulsando por esta vía la demanda interna. Las condiciones que soportan el dinamismo observado del consumo y de la inversión en maquinaria y equipo se mantendrían en 2013. Entre ellas, los niveles estables de empleo y de confianza del consumidor y la reducción acumulada de las tasas de interés de política. Estas últimas se están transmitiendo a las tasas de interés de los préstamos, junto a un crédito que se ha desacelerado pero que sigue creciendo a buen ritmo. Todo ello en un contexto internacional de amplia liquidez y de bajas tasas de interés. c. Variables Financieras En diciembre, el crédito bancario (M/N y M/E) creció a una tasa anual de 15,19%, menor en 6 pb a la observada en noviembre. Frente a septiembre la disminución fue de 58 pb y frente a junio de 231 pb. Por destinos, la cartera comercial repuntó, con un crecimiento anual a diciembre de 13,8%, mayor en 46 pb que la tasa observada en el mes anterior (13,3%). Esta dinámica se explicó por los créditos otorgados en moneda extranjera, cuya tasa de crecimiento anual entre noviembre y diciembre pasó de 5,8% a 14,5%, consolidando la recuperación iniciada en julio. Por su parte, el componente en moneda nacional continuó desacelerándose, disminuyendo a 13,7% en diciembre frente a 14,3% del mes anterior. En lo referente al crédito de consumo, este registró en el último mes una tasa de crecimiento anual de 17,8%, lo que significó una reducción de 112 pb frente al registro de noviembre. La cartera hipotecaria se desaceleró levemente, con una variación anual de 15,2% en diciembre frente a 15,4% en el mes anterior. Las tasas de interés nominales de los créditos en todas las modalidades marcan una tendencia decreciente frente a sus niveles de finales de julio, cuando se comenzó a bajar la tasa de interés de política. Sin embargo, el efecto en las tasas las reales (descontando el IPC sin alimentos) ha sido menor pues la inflación también ha disminuido. En este contexto, la tasa interés real para los desembolsos de diciembre de los créditos de consumo fue de 15,5%, para los hipotecarios de 10,2% y para el comercial ordinario de 9,1%. Estas tasas son menores a sus promedios históricos calculados desde 2000. De otra parte, la tasa de interés real para los créditos comercial preferencial fue de 6,0%, para los créditos otorgados con tarjeta y para la modalidad de tesorería se ubicaron en 27,4%, y 5,8%, tasas mayores a sus promedios calculados desde 2000. d. Contexto Externo En la zona del Euro, las medidas adoptadas por las autoridades económicas en los últimos meses han dado tranquilidad a los mercados financieros. Esto ha permitido una reversión de las salidas de capitales desde los países de la periferia de la región que se había iniciado en el primer semestre de 2012. De esta manera, las tensiones en los mercados de deuda pública de España e Italia han disminuido considerablemente. Así, la probabilidad de una fuerte crisis financiera que causaría una profundización de la recesión en la zona del euro ha disminuido considerablemente. No obstante, esta mejora en las condiciones financieras aún no se ha transmitido al sector real por lo cual la mayoría de los analistas esperan que la recesión en la región se prolongue por lo menos durante la primera mitad de 2013.En efecto, la información más reciente para la Zona Euro muestra que la producción industrial, las ventas al por menor y el crédito al sector privado se contrajeron en noviembre, al tiempo que la confianza de los empresarios y de los consumidores permanecía deprimida. En diciembre la tasa de desempleo se mantuvo en máximos históricos en algunas economías de la periferia. Adicionalmente la débil situación de la región siguió afectando a países como Alemania y Francia, economías que experimentaron un retroceso en su producción industrial en los últimos meses de 2012. Para los Estados Unidos, los indicadores de actividad real para el cuarto trimestre evidencian que la economía se habría expandido a un ritmo moderado en este periodo. Con cifras a diciembre, las ventas al por menor y la producción industrial continuaron creciendo tanto en términos anuales como mensuales; mientras que el mercado de vivienda siguió recuperándose, aunque todavía desde un nivel muy bajo. Análogamente, el comportamiento del sector externo continuó deprimido, evidenciando la mayor transmisión de la débil demanda global. Además, los niveles de confianza de los consumidores han seguido afectados por la incertidumbre fiscal. En relación con las negociaciones sobre el tema fiscal, el acuerdo parcial al que llegó el Congreso de los Estados Unidos evitó por algunos meses el llamado “abismo fiscal”. Sin embargo, las decisiones sobre recortes de gasto en seguridad social y defensa, al igual que la definición de algunas partidas federales, se postergaron para marzo, por lo que la incertidumbre fiscal seguiría afectando la confianza durante los primeros meses de 2013. Para el presente año se espera que la economía americana crezca a un ritmo moderado algo menor que lo estimado para 2012. En China, el crecimiento económico se aceleró en el cuarto trimestre creciendo 7,9% anual (anterior 7,4%). Este hecho estaría dinamizando el crecimiento de otros países emergentes de la región. Si bien las cifras a diciembre evidenciaron un crecimiento mayor en las exportaciones, la industria y las ventas al por menor, el principal motor de la economía ha sido la inversión en activos fijos. Para el 2013 se espera que esta economía presente un crecimiento similar al observado en 2012. Para las economías de América Latina, la información disponible para el cuarto trimestre evidencia que Chile y Perú habrían crecido alrededor de su potencial, mientras que la economía mexicana ha empezado a desacelerarse, aunque su tasa de crecimiento continúa en niveles favorables. Por su parte en Brasil, la actividad real ha seguido recuperándose en respuesta a las medidas de estímulo implementadas recientemente. Las perspectivas para el año que comienza son de un crecimiento nuevamente favorable y cercano al potencial en Perú y Chile, una aceleración en Brasil aunque a tasas moderadas y una desaceleración en Venezuela. En lo que respecta a los precios del petróleo, las cotizaciones para la referencia Brent se comportaron en el cuarto trimestre de acuerdo con lo esperado en el Informe sobre Inflación de septiembre. Por otra parte, aunque las cotizaciones del carbón, níquel y café se contrajeron en 2012, en los últimos meses del año mostraron un leve incremento. En cuanto a los precios de los alimentos, éstos presentaron una tendencia decreciente en los últimos meses de 2012, dada la normalización de los fenómenos climáticos que afectaron las cotizaciones a mediados de año. La moderación en los precios internacionales de los alimentos y la estabilidad en las cotizaciones del crudo ayudaron a mantener la inflación baja en las principales economías desarrolladas. Lo anterior, sumado al débil dinamismo en estos países, permitió seguir con una política monetaria de estímulo, apoyada en bajas tasas de interés y amplias inyecciones de liquidez. En el caso de la mayoría de economías de América Latina, la inflación presentó una tendencia decreciente en los últimos meses de 2012, la cual estaría explicada por los menores precios de los alimentos y por la apreciación generalizada de las monedas de la región. En resumen, el crecimiento económico promedio de los socios comerciales de Colombia en 2012 ha estado en línea con lo esperado. Para 2013, las medidas adoptadas por las autoridades europeas y las mejoras en las condiciones financieras han reducido la probabilidad de que se presente una fuerte recesión en la zona del euro. En Estados Unidos, la última información sugiere que su economía podría crecer a un ritmo algo menor que lo estimado para 2012. El crecimiento de China se mantendría cerca del 8%. Con todo ello, se espera que en el presente año la demanda externa siga débil y se expanda a una tasa similar a la de 2012. Adicionalmente se espera que las condiciones de amplia liquidez y de bajas tasas de interés continúen. La tendencia creciente que llevaban los términos de intercambio hasta 2011 se interrumpió en 2012, año en el cual se mantuvieron estables. En las condiciones de debilidad de la economía mundial, los términos de intercambio en 2013 podrían ser algo menores al promedio observado en 2012. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA A efectos de la discusión la Junta Directiva consideró los siguientes elementos: (i) En el contexto externo, el crecimiento económico promedio de los socios comerciales de Colombia en 2012 ha estado en línea con lo esperado. Para 2013, las medidas adoptadas por las autoridades europeas y las mejoras en las condiciones financieras han reducido la probabilidad de que se presente una fuerte recesión en la zona del euro. En Estados Unidos, la última información sugiere que su economía podría crecer a un ritmo algo menor que lo estimado para 2012. El crecimiento de China se mantiene cerca del 8%. Con todo ello, se espera que en el presente año la demanda externa siga débil y se expanda a una tasa similar a la de 2012. (ii) La tendencia creciente que llevaban los términos de intercambio hasta 2011 se interrumpió en 2012, año en el cual se mantuvieron estables. En las condiciones de debilidad de la economía mundial, los términos de intercambio en 2013 podrían ser algo menores al promedio observado en 2012. (iii) Para el cuarto trimestre de 2012 la nueva información de crédito de consumo, de comercio al por menor y de confianza del consumidor sugiere que el gasto de los hogares crecería a una tasa algo menor que la observada en el tercer trimestre. La incertidumbre sobre el comportamiento de la inversión es elevada, especialmente la del gasto en obras civiles, en construcción y en edificaciones. Las cifras de exportaciones en dólares muestran una desaceleración mayor que la de las importaciones. (iv) Por el lado de la oferta, en noviembre se presentó una caída anual en el indicador de producción industrial y las expectativas en el sector volvieron a deteriorarse. Las ventas de comercio al por menor, con y sin vehículos, crecieron a buen ritmo. (v) Para 2013, el equipo técnico proyecta un rango de crecimiento económico entre 2,5% y 4,5%, con 4% como cifra más probable. La mayor incertidumbre sobre este pronóstico se origina en la persistencia que pueda tener el choque negativo observado en la inversión en obras civiles y edificaciones. Se espera que algunos de los factores que han frenado este gasto se reviertan, impulsando por esta vía la demanda interna. Las condiciones que soportan el dinamismo observado del consumo y de la inversión en maquinaria y equipo se mantendrían en 2013. Entre ellas, los niveles estables de empleo y confianza del consumidor y la reducción acumulada de las tasas de interés de política. Estas últimas se están transmitiendo a las tasas de interés de los préstamos, junto a un crédito que se ha desacelerado pero que sigue creciendo a buen ritmo. Todo ello en un contexto internacional de amplia liquidez y de bajas tasas de interés. (vi) En diciembre la inflación anual al consumidor (2,4%) descendió más que lo esperado por el mercado y por el equipo técnico del Banco. Como ha ocurrido a lo largo del año, la desaceleración de la inflación volvió a explicarse por el menor ritmo de aumento del IPC de regulados y de alimentos. Tanto el promedio de las inflaciones básicas, como las expectativas de inflación volvieron a reducirse y se encuentran por debajo de la meta de largo plazo (3%). (vii) En resumen, la economía colombiana crece por debajo de su potencial, la inflación observada y proyectada se sitúan por debajo de la meta del 3%, y no se vislumbran presiones alcistas sobre la misma en el futuro cercano. En estas circunstancias, la evaluación del balance de riesgos indica la conveniencia de reducir la tasa de interés de intervención a 4%. Las acciones de política monetaria están encaminadas a que en 2013 el producto se sitúe cerca de la capacidad productiva de la economía, sin poner en riesgo la meta de inflación ni la estabilidad macroeconómica del país. La mayoría de los miembros de la Junta consideró apropiado reducir la tasa de interés de intervención en 25 pb teniendo en cuenta principalmente que: (i) Las proyecciones y expectativas de inflación se sitúan por debajo de la meta de largo plazo de 3% al igual que la inflación total y el promedio de inflación básica. (ii) el debilitamiento del crecimiento económico y las menores proyecciones de crecimiento este año. (iii) La desaceleración significativa y no esperada en la demanda interna explicada principalmente por un choque negativo a la inversión. La duración de este choque es incierta y depende en gran medida del comportamiento del gasto público y de la inversión del sector minero en 2013. (iv) El consumo privado crece a un ritmo cercano a su promedio histórico y es factible que en el presente año muestre alguna moderación pero no significativa. Bajo las condiciones anteriores se considera acotado el riesgo de que una reducción de la tasa de interés de intervención de esta magnitud exacerbe los riesgos de desbalances financieros y comprometa el crecimiento del empleo y el producto. Además estimaron que si bien se necesita una política monetaria más expansionista, la incertidumbre acerca de la evolución futura de la demanda interna y las posibilidades de exacerbar desequilibrios previos acumulados por la economía, sobretodo en un ambiente de amplia liquidez internacional, sugieren la conveniencia de ser prudente en las medidas de política. Un miembro del grupo mayoritario resaltó que, además de los problemas que han afectado al sector de la construcción en el tercer trimestre de 2012, el débil crecimiento de la demanda agregada registrado desde el segundo trimestre de 2012 ha repercutido en una disminución del crecimiento de varios sectores en la economía, por lo que actualmente se presentan excesos de capacidad instalada. Sin embargo, el ambiente de abundante liquidez internacional y las informaciones recientes de la oferta de bienes no transables permiten prever que la demanda interna podría incrementar su dinamismo hacia finales de 2013. Otros miembros consideraron apropiado una reducción de 50 puntos básicos de la tasa de intervención del Banco, como quiera que, de acuerdo con la información disponible, se confirma que al inicio de 2013 todo indica que en Europa la recesión se estaría prolongando aún más. En Estados Unidos la recuperación no sale de su ritmo mediocre. En la región se destaca el buen desempeño de Chile y Perú. Brasil rompiendo la tendencia hacia la desaceleración. Y Venezuela, el mercado más importante para nuestras exportaciones industriales, seguramente experimentará una gran devaluación este año por sus desequilibrios fiscales y cambiarios, y una caída del crecimiento del 5,5% en 2012 al 2,5% el 2013. En Colombia, con una tasa real de cambio promedio para 2012 en un 8% por debajo de la de equilibrio, el dinamismo de las exportaciones se desploma. En efecto, entre enero y noviembre con relación a igual período de 2011 sólo crecieron 6%, en contraste con 43% entre 2010 y 2011. Las de minería y petróleo en el mismo lapso pasaron del 56% en 2011 a apenas 8% en 2012; las agrícolas del 26% a una caída del 14%; y las industriales del 15% al 7%. Para la industria los problemas relativos al debilitamiento de la demanda interna pesan cada vez más. La tasa de desempleo ha dejado de reducirse, debido a que el empleo total aumenta cada vez menos, al punto de que la NAIRU en 2013 se mantendrá por debajo de aquella. En la industria el empleo empezó a caer por primera vez en dos años. Es en el mercado interno donde la industria está perdiendo más espacio frente a las importaciones de bienes de consumo, lo cual es coherente con el crecimiento del comercio en contraste con la contracción de la industria. El pronóstico de crecimiento para este año del equipo técnico apunta a un rango entre 2,5% y 4,5%, siendo la cifra más probable 4%, pero con un balance de riesgos que se inclina hacia la baja. Lo que indica que tanto el crecimiento alcanzado en 2012 (cerca de 3,6%) como el proyectado para 2013 se hallan por debajo del potencial. O sea unas brechas tanto del producto como laboral en terreno crecientemente negativo. En suma, desde el año anterior resulta evidente el debilitamiento de la demanda interna, aparejado con la continuada fragilidad del contexto externo. Adicionalmente, la inflación se ubicó en diciembre en 56 puntos básicos por debajo del punto medio del rango meta, el promedio de las básicas en 2,8%, y sin alimentos en 2,4%. Y todas las expectativas de inflación igualmente por debajo de la meta. En concordancia con el esquema de Inflación Objetivo, la política monetaria debe provocar el retorno de la inflación a la meta del 3%. En consecuencia, propusieron reducir la tasa de interés de intervención del Banco en 50 puntos básicos. Desde el ángulo monetario, es lo que se debe hacer a fin de permitir que el PIB pueda volver a acercarse a su potencial al final de 2013 y en 2014 sin poner en riesgo el cumplimiento de la meta de inflación. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA De acuerdo con la evaluación del actual balance de riesgos, la Junta Directiva acordó reducir la tasa de interés de intervención en 25 pb. La Junta reitera que el Banco de la República cuenta con las herramientas y recursos suficientes para atender las necesidades de liquidez en moneda local y extranjera que regularmente requiere la economía y aquellas que pudieran aparecer en un ambiente de turbulencia financiera internacional. La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo del comportamiento y proyecciones de la actividad económica e inflación en el país, de los mercados de activos y la situación internacional. Finalmente, reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible.
2013-02-01
- Minutas de la reunión de la JDBR del 22 de febrero de 2013 El 22 de Febrero de 2013 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los directores de dedicación exclusiva, Carlos Gustavo Cano Sanz, Juan Pablo Zárate Perdomo y César Vallejo Mejía, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación En enero la inflación anual al consumidor cayó de manera significativa y mucho más que lo esperado por el mercado y por el equipo técnico. El resultado de este mes fue 2,00%, 44 puntos base (pb) menos que el registro de diciembre, mes en el que también se había observado un descenso importante. Como ocurrió a lo largo de 2012, la desaceleración de la inflación volvió a explicarse por el menor ritmo de aumento del IPC de alimentos y del de regulados. En el IPC de alimentos, la variación anual de enero (1,69%) registró una caída de consideración (83 pb). Todos los precios de los componentes principales de esta canasta se desaceleraron y en ello pudo haber tenido un papel importante las disminuciones al IVA contempladas por la reforma tributaria. Es el caso de las comidas fuera del hogar, rubro que presentó durante 2011 y 2012 una variación anual de 5% o más, que se redujo significativamente en enero cerrando el mes en 3,9% (100 pb menos que en diciembre). Para la mayoría de estos servicios se eliminó el IVA que estaba estipulado en 16% y se sustituyó por un gravamen al consumo de 8%, por lo que en términos netos se redujeron los impuestos indirectos. A esta rebaja se suman además unos costos con pocos ajustes en salarios, arriendos y servicios públicos. En alimentos procesados el registro de enero fue de 2,2% frente a 2,8% en diciembre; aquí también se redujo el IVA en el caso del café, el azúcar y el chocolate, precios que efectivamente cayeron este mes a diferencia de lo ocurrido en enero del año pasado. Adicionalmente se presentaron rebajas en otros precios (como leche y huevos). Otras circunstancias que contribuyeron a la disminución en la variación anual de esta subcanasta son la apreciación del peso y los precios internacionales de algunos alimentos más bajos en la segunda mitad del año pasado. Finalmente, la disminución de la variación anual del IPC de alimentos perecederos continuó (-5,0 en enero frente a -3,9 en diciembre) explicada por las condiciones climáticas favorables y unos menores costos de producción. Si bien los precios de varios de estos productos aumentaron en enero como es usual, lo hicieron en menor magnitud que en el mismo mes del año pasado. Dentro del IPC sin alimentos, la variación anual de los precios de la canasta de regulados cayó a 0,67% en enero, (124 pb menos que el dato de diciembre). La principal presión bajista se originó, en la reducción del precio de la gasolina en $200, debido a la entrada en vigencia de la reforma tributaria. Igualmente se volvieron a presentar reducciones en las tarifas de servicio domiciliario de gas y en los pasajes de bus intermunicipal, que pueden atribuirse a las escasas presiones provenientes de los precios internacionales de los combustibles en la segunda mitad del año pasado, combinados con la apreciación acumulada del peso. En el caso de las tarifas del transporte público urbano, los ajustes fueron positivos pero menores que los observados en el mismo mes del año anterior. Los otros dos componentes del IPC sin alimentos – transables y no transables – se mantuvieron relativamente estables en enero. En la primera subcanasta, la variación anual pasó de 0,77% en diciembre a 0,73% en enero, reducción de menor magnitud a la observada al final de 2012. Una presión desinflacionaria importante en esta subcanasta provino de los pasajes aéreos, cuyo IPC se redujo 1,2% en el mes. En enero nuevamente se observaron disminuciones en precios de artículos eléctricos, electrónicos y de comunicación. La apreciación del tipo de cambio (que a enero ascendía a 4,4% anual para el promedio del mes) y pocas presiones de precios internacionales siguen explicando este comportamiento. Por su parte, el IPC de no transables sin alimentos ni regulados subió marginalmente en el último mes (2 pb) situándose en 3,94%. Se presentaron alzas en servicios de turismo que podrían estar relacionadas con el aumento del IVA de 10% a 16% en el caso de los servicios hoteleros decretados por la reforma tributaria. Dicha reforma, por otro lado, implicó una reducción del IVA para medicina prepagada y otros gastos de salud de 10% a 5% que se tradujo en disminuciones en estos precios. En arriendos, la variación anual disminuyó un poco, como viene sucediendo desde hace tres meses, y se situó en 3,8%. No se presentaron cambios importantes en los demás rubros. La inflación básica también descendió en enero por cuarto mes consecutivo. El promedio de los cuatro indicadores calculados por el Banco se situó en 2,59%, 21 pb menos que el registro de diciembre. En enero, la variación anual del IPP se mantuvo en terreno negativo, situándose en -2,15% (en diciembre fue -2,95%). Las pocas presiones provenientes de los precios internacionales hasta mediados de enero, la apreciación acumulada del peso y menores aranceles, pueden explicar estas reducciones que se observan desde hace cuatro meses. En lo que respecta a las expectativas de inflación, la encuesta mensual más reciente efectuada por el Banco de la República a analistas del mercado financiero muestra una caída de las expectativas de inflación a diciembre de 2013 a 2,65% (frente a 2,82% del mes anterior). A pesar de ello, las expectativas a 12 meses no presentaron cambios de importancia (2,9%). Algo similar se aprecia en el caso de las expectativas para la inflación sin alimentos (están en 2,46% para diciembre de 2013 y en 2,61% a doce meses). Las estimaciones derivadas de los TES a 2, 3 y 5 años cayeron cerca de 20 pb, después de conocerse el dato de inflación de enero, y en los últimos días han fluctuado entre 2,5% y 2,7%. Cabe resaltar que en enero la caída de la inflación puede atribuirse en buena parte a la rebaja en el IVA y otros impuestos asociada con la aplicación de la reforma tributaria. El choque por cuenta del IVA tiende a ser transitorio, afectando la inflación por un año al cabo del cual esta puede retornar a su nivel inicial. b. Crecimiento Por el lado del gasto, el buen resultado de las ventas al por menor en noviembre, la desaceleración del crecimiento anual de la cartera de consumo con datos a diciembre y la estabilidad en el indicador de confianza del consumidor en el cuarto trimestre de 2012, apuntan a que el consumo de los hogares habría continuado mostrando un comportamiento algo similar a lo observado en el tercer trimestre. Esto es reforzado por el comportamiento de las importaciones de bienes de consumo en dólares que en diciembre crecieron 14,7% en términos anuales. Esta cifra representa una aceleración frente a la registrada en el mes de noviembre, cuando se expandieron a una tasa anual de 4,3%. Sin embargo, en el agregado del año sí se observa una menor tasa de crecimiento con respecto a la de todo el año 2011 (12,3% en 2012 frente 25,7% del año anterior). Para la inversión, los datos sobre importaciones en dólares de bienes de capital para la industria (que además de manufacturas incluiría minería, comercio y construcción entre otros) crecieron en términos anuales 7% en el cuarto trimestre y 10% en diciembre, lo que sugiere un comportamiento relativamente bueno de la inversión en maquinaria y equipo. En las importaciones de equipo de transporte, en el cuarto trimestre se presentó una caída de 27% anual concentrada en diciembre (57%). Esta caída en parte es el resultado de una alta base de comparación en diciembre de 2011. De esta manera es posible que la inversión en equipo de transporte (que pesa 14,9% de la inversión total y 4,2% del PIB) no tenga un muy buen comportamiento en el último trimestre de 2012. Por otra parte, en el rubro de construcción de obras civiles y edificaciones la incertidumbre sobre su comportamiento se mantiene elevada, especialmente la del gasto en obras civiles, en construcción y en edificaciones. Respecto a las exportaciones, en 2012 las exportaciones totales (sin incluir reexportaciones de aviones) sumaron US$ 60.235 millones, lo que representa un crecimiento de 5,8% respecto a 2011. Este comportamiento se explica principalmente, por el aumento de las exportaciones de origen minero (8% anual) y de las exportaciones industriales (5,9%). Por su parte, las ventas externas de bienes agrícolas cayeron en el año 14%, debido a la disminución de 27% en las exportaciones de café. El crecimiento de las exportaciones de bienes industriales se explica por las mayores ventas hacia Venezuela (52%); Estados Unidos (1,8%); Ecuador (1,7%) y resto de Latinoamérica (7,1%). Hacia otros destinos como Europa y Asia estas exportaciones presentaron en el año variaciones negativas (22% y 3%, respectivamente). Por el lado de la oferta, la información más reciente del cuarto trimestre de 2012 confirma crecimientos muy dispares entre los sectores económicos, pero con tendencias similares a las observadas en el tercer trimestre. La diferencia más evidente está entre la industria y el comercio. Mientras la producción industrial y otros indicadores de dicho sector sugieren que la contracción se prolongó hasta finales de año con una intensidad mayor que la prevista, las encuestas a los comerciantes sugieren expansiones. La ANDI divulgó que la producción industrial creció 0,7% en todo 2012. De esta información se infiere que el dato del mes de diciembre mostraría una nueva contracción (a noviembre la industria crecía 1,0% año corrido). De acuerdo con la encuesta, los industriales consideran que los mayores problemas que enfrentaron durante el 2012 fueron, en su orden, el tipo de cambio, el acceso a materias primas y la baja demanda. Este último ha ganado terreno desde mediados de 2011 aunque aún se mantiene un poco por debajo de su nivel promedio desde 1997 y los aumentos han sido más graduales que los presentados en el periodo 2008-2009. De igual manera, con información de la encuesta de Fedesarrollo las señales sobre el comportamiento de la industria no son positivas. Así, en diciembre, el indicador de pedidos en la industria mantuvo una tendencia descendente, mientras que el de existencias (que es contra-cíclico) aumentó notablemente en el último mes sugiriendo una acumulación inesperada de inventarios. Adicionalmente, el indicador de expectativas de producción a tres meses en diciembre mostró nuevamente un deterioro. En contraste con lo anterior, en diciembre los comerciantes consultados por Fedesarrollo no sugirieron un deterioro relevante en su percepción de la situación actual del negocio ni de su situación futura. De hecho las tendencias de estas series siguen siendo positivas y los niveles son relativamente altos. Asimismo, las ventas del comercio al por menor han venido creciendo significativamente como se mencionó con anterioridad. En lo que respecta a la construcción, a diciembre la producción de cemento continuó estancada y registró una contracción anual de 1,3%. El crecimiento para todo 2012 fue de 1,4% frente al 13,4% observado en 2011. Esto, junto con los datos de CAMACOL que muestran a noviembre una caída de las ventas de viviendas nuevas a nivel nacional, sugiere un bajo crecimiento para el sector en el cuarto trimestre. Dado todo lo anterior, el equipo técnico del Banco mantiene el rango de pronóstico para el crecimiento del cuarto trimestre entre 2,0% y 3,5%. La amplitud del rango se explica por la incertidumbre sobre el desempeño de la inversión en obras civiles que ha aumentado considerablemente, aunque sin un sesgo definido. Sin embargo, la última información sobre la industria y las importaciones de equipo de transporte han sorprendido a la baja, por lo que es probable que el pronóstico central se esté sesgando hacia la parte inferior de dicho rango. De la misma manera, para todo el 2012 el pronóstico de crecimiento se mantendría en un rango entre 3,3% y 3,9%. Con respecto a la expansión del PIB en el primer trimestre de 2013, en las últimas semanas han surgido noticias desfavorables que pueden reducir el crecimiento. Es el caso del carbón en donde la parálisis de la producción de las dos empresas más importantes del sector, (Cerrejón y Drummond), limita seriamente la expansión del sector minero en el comienzo del año. De la misma manera, en enero las ventas de vehículos reportadas por Econometría registraron caídas en sus niveles con respecto a la cifra publicada doce meses atrás. Este indicador creció a tasas anuales de -16,5%, y apunta a un mal comienzo de año para el consumo de bienes durables. Entre las noticias favorables durante el primer mes del 2013, se destaca el aumento de la producción de petróleo cuyo nivel fue 1.012.000 barriles diarios (BD), cifra históricamente alta y que está por encima de lo contemplado en los pronósticos del informe pasado (1.000.000 BD de promedio). También en el caso del café, la producción fue de 877 mil sacos de 60 kilos en dicho mes, 64% más que en igual periodo de 2012. Asimismo, la demanda por energía total aumentó 4,6% anualmente. De igual manera, los comerciantes consultados por Fenalco mantuvieron la tendencia positiva sobre las ventas actuales, aunque las expectativas de ventas a 6 meses mostraron algún deterioro. Por último, otro buen dato fue el de la confianza de los consumidores medida por Fedesarrollo que registró un aumento en el mes de enero frente al de diciembre con el cual se mantiene en niveles relativamente altos y similares a los observados durante el segundo semestre del año pasado. Para todo 2013 el equipo técnico del Banco mantiene el intervalo de pronóstico entre 2,5% y 4,5% con 4% como cifra más probable. Se espera una aceleración leve frente a 2012 gracias a un entorno internacional que no se deterioraría más, a una política monetaria expansiva, a un crédito que seguiría creciendo a un buen ritmo pese a la desaceleración reciente y bajo el supuesto de que el gasto público y la inversión en obras civiles crecen a buen ritmo. c. Variables Financieras El crecimiento del crédito bancario (M/N y M/E) se ha estabilizado. Entre octubre de 2012 y enero de 2013 el crecimiento anual pasó de 15,12% a 15,10%. Esto es el resultado de una compensación entre la desaceleración de la cartera total en moneda nacional (la tasa de crecimiento descendió de 15,76% en octubre de 2012 a 14,63% en enero de 2013) y la recuperación de la cartera en moneda extranjera (la tasa de crecimiento aumentó de 5,98% en octubre 2012 a 21,86% en enero 2013). Por modalidades, la cartera comercial mostró un aumento en su tasa de crecimiento anual de 13,2% a 14,1% entre octubre de 2012 y enero de 2013, impulsada principalmente por la cartera en moneda extranjera. Por su parte, el crédito con destino a los hogares ha continuado desacelerándose. Para el crédito de consumo, la tasa de crecimiento registró una reducción de 18,64% a 17,01% entre octubre de 2012 y enero de 2013 y para la cartera hipotecaria de 15,47% a 14,72% en el mismo periodo. Las tasas de interés nominales de los créditos concedidos en todas las modalidades marcan una tendencia decreciente frente a sus niveles de finales de julio, cuando se comenzó a bajar la tasa de interés de política. Sin embargo, en términos reales (descontando el IPC sin alimentos) la menor inflación ha frenado dicha tendencia decreciente. En este contexto, la tasa de interés real en enero para los desembolsos destinados a consumo fue de 16,7%, para los hipotecarios de 10,2% y para el comercial ordinario de 9,4%, tasas menores a sus promedios históricos respectivos calculados desde 2000. De otra parte, la tasa de interés real para los créditos comercial preferencial fue de 6,2%, para los créditos otorgados con tarjeta y para la modalidad de tesorería se ubicaron en 27,4%, y 5,8%, tasas mayores a sus promedios calculados desde 2000. d. Contexto Externo Durante el cuarto trimestre de 2012 el PIB de la zona del euro se contrajo de nuevo y para el año completo el crecimiento fue de -0,5%. Aunque la contracción de la economía se esperaba, su ritmo de deterioro fue mayor al pronosticado en el escenario central del Informe sobre inflación de diciembre (-0,4%). El menor crecimiento de la región obedece a una caída generalizada del PIB, incluso en países como Francia y Alemania que hasta el 2011 habían mostrado un comportamiento relativamente bueno frente a lo que se observaba en la región. Sin embargo, la información reciente sobre la actividad real alemana evidencia alguna recuperación, impulsada en parte por el comercio externo con otros socios fuera de la región. Asimismo, algunos indicadores de confianza y de expectativas empresariales para la zona del euro han presentado alguna mejora en los últimos meses (diciembre y enero). En los Estados Unidos, la primera estimación del crecimiento de 2012 estuvo por debajo de lo esperado en el escenario central del informe sobre inflación anterior. En el cuarto trimestre la economía Estadounidense se contrajo debido a la caída en inventarios, a la dinámica del gasto del gobierno y al menor aporte del sector externo. Pese a ello, el consumo mantuvo un crecimiento modesto. Durante el mes de enero la información sobre la actividad real, los índices de opinión de los sectores de manufacturas y servicios y las ventas al por menor evidencian una mejoría en el comportamiento económico de ese país. Para el caso de las economías emergentes de Asia, la información al cuarto trimestre muestra que su ritmo de expansión se mantuvo estable. Para China, en enero la actividad real siguió creciendo a un ritmo favorable, particularmente en el sector de la industria y en las exportaciones. En los países de la región, la economía de Brasil se sigue recuperando y las de Perú, Chile y México continuaron creciendo a un buen ritmo. En Venezuela se decretó una fuerte devaluación, país que en lo corrido de 2012 (a noviembre) representó el primer lugar de destino de las exportaciones industriales colombianas y el segundo puesto en las de alimentos. Este hecho, podría tener efectos en la actividad industrial y en la oferta agrícola en Colombia, en la medida en que se torne más difícil exportar a ese país. Las expectativas de un mejoramiento de la actividad global, especialmente en China, la amplia liquidez internacional y las tensiones geopolíticas en Oriente Medio y el Norte del África han presionado al alza los precios internacionales del petróleo en las últimas semanas. Por su parte, los precios de los alimentos no han presentado cambios significativos durante este periodo. Pese a ello, los bajos precios del café y del carbón y los leves aumentos en los precios de los bienes importados generaron en enero un pequeño descenso en los términos de intercambio. En relación con la inflación, salvo en los casos puntuales de Brasil, India, Argentina y Venezuela, se mantiene en niveles bajos tanto en las economías desarrolladas como en las emergentes. En un contexto de baja inflación y débil crecimiento, los bancos centrales de los países desarrollados han mantenido una política monetaria de estímulo. Cabe resaltar el caso de Japón cuyo banco central se comprometió con una meta de inflación de 2%. Aunque el plazo para cumplir con dicha meta no es claro, los analistas han interpretado estos anuncios como una política monetaria bastante expansiva, ante lo cual el yen se ha depreciado de manera significativa en relación con el dólar de los Estados Unidos. La evolución de los mercados de deuda pública en los países de la periferia europea ha estado influenciada por la incertidumbre política en España e Italia, que se ha traducido en un incremento en sus primas de riesgo. Pese a ello, se encuentran en niveles bajos. En resumen, la información más reciente del cuarto trimestre de 2012 muestra que la economía mundial creció de forma algo más débil de lo esperado. No obstante, para comienzos de este año algunos indicadores de actividad económica y de expectativas en las grandes economías como Alemania, Estados Unidos y China, dieron señales de recuperación, y pueden sugerir una moderación en la desaceleración global. Adicionalmente las condiciones financieras han mejorado. Con base en lo anterior, para el primer semestre de 2013 se sigue proyectando una demanda débil de los socios comerciales del país, con una recuperación en la segunda mitad del año, como se había contemplado en el Informe sobre Inflación de diciembre. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA A efectos de la discusión la Junta Directiva consideró los siguientes elementos: (i) El crecimiento de la economía mundial en el cuarto trimestre de 2012 fue algo más débil de lo esperado. No obstante, en lo corrido de 2013, indicadores de actividad económica y de expectativas en algunas de las economías de mayor tamaño han sido algo más positivos y las condiciones financieras han mejorado. (ii) Los precios internacionales del petróleo subieron y se encuentran en niveles superiores al promedio observado en 2012. Si dicha cotización se mantiene en esos niveles podría compensar los bajos precios del café y del carbón y llevar a que los términos de intercambio en 2013 superen el promedio observado en 2012. (iii) En Colombia, los indicadores de actividad económica para el cuarto trimestre de 2012 sugieren que el consumo privado creció un poco menos que en los dos trimestres anteriores. La incertidumbre sobre el comportamiento de la inversión, en particular en obras civiles y construcción de edificaciones, sigue siendo elevada. Por el lado de la oferta, los indicadores líderes de la industria sugieren de nuevo una caída en la producción de este sector en diciembre, mientras que los del comercio indican que se presentaría un crecimiento aceptable. Con lo anterior, el equipo técnico estima que el crecimiento económico de 2012 se situaría en un intervalo entre 3,3% y 3,9%. (iv) El crecimiento económico del primer trimestre de 2013 estará afectado por los menores días hábiles que tiene el periodo, así como por los choques de oferta registrados en las exportaciones de carbón y por el riesgo de una menor demanda desde Venezuela. (v) En enero, la inflación anual al consumidor (2%) fue menor a la esperada, en especial por el menor aumento del IPC de regulados y de alimentos. La reforma tributaria contribuyó a la reducción de algunos de estos precios, hecho que tiene un efecto transitorio sobre la variación anual del IPC. Otros factores, como menores costos de producción y ajustes moderados en los salarios, también explican parte de este comportamiento. (vi) Tanto el promedio de las inflaciones básicas como las expectativas de inflación se encuentran por debajo de la meta de largo plazo (3%). (vii) La desaceleración en la inflación, mayor que la esperada, se ha dado en un contexto de una brecha negativa del producto, situación que puede mantener las expectativas de inflación en niveles bajos por un mayor periodo de tiempo. Ello también disminuye la probabilidad de que aumentos no anticipados y generados por choques de oferta pongan en peligro el cumplimiento de la meta de inflación. (viii) En enero el crédito siguió desacelerándose pero a un menor ritmo. Las tasas de interés nominales de los distintos tipos de préstamos se redujeron, exceptuando las de consumo que aumentaron en el mes. En términos reales todas las tasas se incrementaron, en parte como consecuencia de la reducción en la inflación observada y sus expectativas. En estas circunstancias, la evaluación del balance de riesgos indica la conveniencia de reducir la tasa de interés de intervención. Las acciones de política monetaria están encaminadas a que el producto se sitúe cerca de la capacidad productiva de la economía, sin poner en riesgo la meta de inflación ni la estabilidad macroeconómica del país. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA De acuerdo con la evaluación del actual balance de riesgos, la Junta Directiva acordó por unanimidad reducir la tasa de interés de intervención en 25 pb. La decisión se tomó teniendo en cuenta que la economía colombiana crece por debajo de su potencial, la inflación observada y proyectada se sitúan por debajo de la meta del 3% y no se vislumbran presiones alcistas sobre la misma en el futuro cercano. La Junta reitera que el Banco de la República cuenta con las herramientas y recursos suficientes para atender las necesidades de liquidez en moneda local y extranjera que regularmente requiere la economía y aquellas que pudieran aparecer en un ambiente de turbulencia financiera internacional. La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo del comportamiento y proyecciones de la actividad económica e inflación en el país, de los mercados de activos y la situación internacional. Finalmente, reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible.
2013-03-01
- Minutas de la reunión de la JDBR del 22 de marzo de 2013 El 22 de Marzo de 2013 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar, y los Directores doctores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Enrique Meisel Roca, César Vallejo Mejía, Juan Pablo Zárate Perdomo, en la cual se discuten las situaciones inflacionaria y de crecimiento económico y sus perspectivas, y se toman decisiones relacionadas con la política monetaria. 1. ANTECEDENTES a. Desarrollos recientes de la inflación En febrero la inflación anual del IPC fue de 1,83%, 16 puntos base (pb) menos que el mes anterior. Como viene sucediendo desde hace varios meses, los menores ajustes en los precios de los alimentos explicaron en gran medida este resultado. Por otro lado, las demás subcanastas (regulados, transables y no transables) presentaron este mes mayor estabilidad frente a lo observado en meses anteriores. El descenso en la variación anual del IPC de alimentos – de 1,7% en enero a 1,2% en febrero – cobijó nuevamente a un gran número de productos tanto perecederos (de -5,0% en enero a -5,6% en febrero) como procesados (de 2,2% en enero a 1,6% en febrero) y a las comidas fuera del hogar (de 3,9% en enero a 3,6% en febrero). Los distintos factores que estarían explicando este comportamiento en febrero y en meses anteriores son: los pocos aumentos en los precios internacionales de los alimentos importados, las escasas presiones cambiarias, las pocas presiones de costos (en parte por rebajas arancelarias asociadas con la entrada en vigencia de acuerdos comerciales) y unas condiciones climáticas que han favorecido la oferta. Asimismo, es posible que la rebaja del IVA para comidas fuera del hogar y algunos alimentos perecederos desde comienzos de año todavía se estuviera trasmitiendo a los precios en febrero. Adicionalmente, en el último mes también habría empezado a jugar un papel importante la menor demanda proveniente de Venezuela, lo que se podría estar traduciendo en un aumento de la oferta agropecuaria disponible para el consumo interno en productos como carne, huevos y pollo. Los ajustes de los precios de estos productos fueron bajos o incluso negativos en el último mes. Dentro del IPC sin alimentos no se presentaron cambios de importancia en las variaciones anuales de regulados y de transables sin alimentos ni regulados. En el primer caso, la variación anual en febrero permaneció en 0,7%. Si bien se presentaron alzas en las tarifas de gas domiciliario, energía y combustibles, estas fueron compensadas por ajustes nulos en la tarifa del servicio de acueducto y por una reducción importante en los precios de pasajes de buses intermunicipales. Cabe señalar que la variación anual del IPC de regulados presentó caídas importantes en la segunda mitad de 2012 y en enero de este año. En transables sin alimentos ni regulados por su parte, la variación anual en febrero fue baja (0,7%) y similar al registro de enero. En esta subcanasta se siguieron observando reducciones o escasos aumentos en los precios de bienes importados como automóviles, electrodomésticos y aparatos electrónicos y de comunicación, además de pasajes aéreos, entre otros. La apreciación acumulada de los meses anteriores y las pocas presiones en los precios internacionales explican esta situación. Finalmente, la variación anual del IPC de no transables sin alimentos ni regulados se redujo un poco en febrero a 3,84% frente a 3,94% en enero, pero se mantiene como la subcanasta con los ajustes más altos. Buena parte de la rebaja se concentró en el segmento de diversión, cultura y esparcimiento. Otros componentes que presentaron menores ajustes fueron las matrículas y pensiones y algunos servicios de salud. La variación anual de arriendos, un rubro que ha sido altamente indexado, se mantuvo en 3,8% e interrumpió la tendencia decreciente que traía desde hace tres meses. En febrero se presentó nuevamente una disminución de los indicadores de inflación básica, pero menor que la observada en los tres meses anteriores. El promedio de los cuatro indicadores monitoreados por el Banco de la República fue 2,49%, frente a 2,59% de enero. La variación anual del IPP se mantuvo en terreno negativo, en -2,47% en febrero, 4 pb más que el registro de enero. Esto, como en meses anteriores, se explica por la apreciación acumulada y la estabilidad de los precios internacionales de la mayoría de materias primas y otros bienes. Las expectativas de inflación a diciembre de 2013, recogidas por la encuesta mensual del Banco a analistas del mercado, disminuyeron en febrero, aunque menos que en meses anteriores: para comienzos de marzo este valor era 2,55% frente a 2,65% de febrero. A pesar de lo anterior, las expectativas a doce meses se mantuvieron cerca de 2,9% en los dos meses. En el caso de las expectativas estimadas a partir de la tasa de los TES tampoco se observaron disminuciones en las últimas cuatro semanas, con cierre al 14 de marzo. La inflación esperada a dos, tres y cinco años se situó cerca de 2,6%, levemente por encima del dato del mes anterior. b. Crecimiento La última información publicada por el DANE muestra una fuerte revisión de varios de los componentes del PIB para 2011 y 2012, en especial al de la inversión en obras civiles. Con lo anterior, el DANE corrigió las cifras de crecimiento del PIB de 2011 pasando de 5,9% a 6,6%. Al incorporar las revisiones, las tasas de expansión anual para los tres primeros trimestres de 2012 fueron, 5,3%, 5,0%, y 2,7%, en su orden. El dato del cuarto trimestre fue 3,1% y el del año completo 4,0%. La demanda interna creció 4,6% en 2012 lo que representa una desaceleración frente a lo registrado en 2011 (8,2%). La desaceleración se presentó especialmente en el segundo semestre. El consumo de los hogares jugó un papel importante y contribuyó activamente a la expansión de la demanda interna. Durante el cuarto trimestre, el consumo privado creció 4,0%. Sin embargo, este renglón del PIB también mostró una pérdida de dinamismo en su tasa de crecimiento anual, al pasar de 5,9% en 2011 a 4,3% en 2012. Desagregando por componentes, las mayores desaceleraciones se registraron en los gastos destinados al consumo de bienes durables y semidurables. Por su parte, los servicios y el consumo de bienes no durables también se desaceleraron pero en menor magnitud. Respecto al consumo del Gobierno la expansión anual fue 6,5% en el cuarto trimestre y 5,1% para todo el año. En lo referente a la formación bruta de capital fijo, en 2012 este gasto creció 6,0%, cifra también menor que la de 2011 (18,7%). El componente que más contribuyó al crecimiento del gasto en bienes de capital fue aquel destinado a inversión en maquinaria y equipo, que creció, 7,7% para todo el año. Durante el segundo semestre de 2012, todos los rubros que conforman este agregado mostraron una desaceleración generalizada, lo que complica la interpretación de los choques que sufrió este agregado en la segunda mitad del año. En 2012 se registraron tasas de crecimiento significativamente menores para las importaciones y para las exportaciones. Con respecto al primer agregado, el año pasado su expansión fue de 8,0%, mucho menor que la registrada en 2011, cuando creció 21,2%. De igual forma, las ventas externas mostraron menor dinamismo al crecer 5,3% frente al 12,9% de 2011. En el cuarto trimestre se registraron crecimientos anuales del orden de 3,3% y 1,4% para ambos rubros, en su orden. Por el lado de la oferta, entre los sectores que crecieron por encima de la economía en su conjunto durante 2012 se encuentran los de minería (5,9% anual), financiero (5,5% anual) y servicios comunales, sociales y personales (4,9% anual). En el caso de la minería, se observó una fuerte desaceleración frente a 2011 (14,4% anual), que se concentró en el segundo semestre del año por la contracción de la producción de carbón y el menor ritmo de crecimiento de la producción de petróleo. En el financiero, a pesar de la desaceleración del crédito en la segunda mitad del año, se reportaron crecimientos importantes que contribuyeron de manera positiva a la expansión total de la economía, dada su gran participación dentro del PIB (19,6%). Por último, en servicios se destaca el dinamismo de los servicios comunales prestados por el gobierno. Con respecto a la situación económica para el primer trimestre de 2013, la información disponible apunta a que el crecimiento de la economía podría ser inferior al observado a final de 2012. Esta dinámica sugiere un crecimiento económico actual por debajo del potencial. Por el lado del gasto, el consumo de los hogares podría mostrar una desaceleración a comienzos del año como lo sugiere la información más reciente de la encuesta de confianza de los consumidores medida por Fedesarrollo. En febrero este indicador cayó de manera significativa, ubicándose en niveles levemente por debajo de su promedio histórico. A ello se suma una contracción de las ventas de automotores del orden de 16,4% en febrero, según el Comité Automotor Colombiano y las cifras publicadas por Econometría. Por su parte, la encuesta mensual de expectativas económicas del Banco de la República sugiere que las ventas durante el mes de enero fueron significativamente menores que los registros del cuarto trimestre de 2012. No obstante cabe señalar que las cifras de importaciones de bienes de consumo en dólares mostraron un crecimiento anual de 19,9% en enero. Por otra parte, en enero las exportaciones totales tuvieron una variación de -1,1% con respecto al mismo mes de 2012. Esta caída se explicó por la disminución conjunta de las exportaciones de bienes mineros (-2,2%) y agrícolas (-15,3%). Las exportaciones de productos industriales (y otros) registraron un crecimiento anual de 10,2%, acelerándose frente al registro de diciembre. Este mejor desempeño se explica principalmente por el aumento de las ventas de vehículos (109,5%), de productos químicos (13%) y de caucho y plásticos (43,7%). Por el lado de la oferta, las variables asociadas con la industria continúan mostrando un pobre desempeño. Los indicadores de pedidos, existencias y las expectativas de producción a enero siguieron conservando la tendencia negativa de los meses anteriores. Por su parte, en febrero la demanda de energía no regulada para la industria cayó 2,1% anualmente después de haber crecido un poco más de 2% en enero. Este indicador que está altamente correlacionado con el crecimiento de la industria, sugiere un deterioro adicional del sector en dicho mes. Debe tenerse en cuenta que parte de esta caída obedece a la existencia de un día hábil menos en febrero de este año (el año anterior fue bisiesto). En lo referente a la rama de minería, la producción de carbón se habría visto afectada en febrero y marzo debido a las huelgas en el Cerrejón y al problema ambiental de la Drummond que ocasionó una parada de la producción por las restricciones en el transporte del producto al puerto (suspensión temporal en la licencia de carga). En la rama agrícola se destaca que la producción de café creció 36,7% anualmente, en promedio entre enero y febrero. Adicionalmente, a estos choques no esperados en el sector minero debe tenerse en cuenta la presencia de menores días hábiles durante el primer trimestre del año (Semana Santa y un día hábil menos de febrero) cuyo impacto es negativo en especial al sector industrial. Las cifras de mercado laboral muestran que la tasa de desempleo continuó cayendo a comienzos de año. Adicionalmente, a enero el crecimiento del nivel de empleo mostró alguna aceleración y los indicadores de calidad del empleo continúan creciendo a tasas importantes; en particular el empleo asalariado se aceleró de manera significativa. c. Variables Financieras El crecimiento del crédito bancario (M/N y M/E) se ha estabilizado en los últimos cinco meses en una tasa de crecimiento anual cercana a 15%. La desaceleración de la cartera en moneda nacional se ha compensado con el impulso de la cartera en moneda extranjera. Entre octubre de 2012 y febrero de 2013, la tasa de crecimiento de la primera descendió de 15,8% a 14,4%, mientras la segunda aumentó de 6,0% a 24,8%. Por modalidades, el crecimiento anual de la cartera comercial pasó de 13,2% en octubre de 2012 a 14,2% en febrero de 2013. Por su parte, el crédito con destino a los hogares tuvo una leve desaceleración en febrero 16,9% frente al 18,6% observado en octubre de 2012. En la cartera hipotecaria se observó igualmente una desaceleración en la variación anual en el mismo periodo (de 15,5% a 14,5%). Las tasas de interés nominales de los créditos concedidos en todas las modalidades marcan una tendencia decreciente frente a sus niveles de finales de julio, cuando se comenzó a bajar la tasa de interés de política. Sin embargo, en términos reales, el descenso de la inflación y sus expectativas ha neutralizado buena parte de dicha tendencia. La tasa de interés real en febrero para los desembolsos destinados a consumo fue de 16,0%, para los hipotecarios de 10,2%, para los preferenciales de 5,9% y para el comercial ordinario de 9,0%, tasas menores a sus promedios históricos respectivos calculados desde 2000. De otra parte, la tasa de interés real para los créditos otorgados con tarjeta de crédito y para la modalidad de tesorería se ubicó en 27,1%, y 5,8% respectivamente, tasas mayores a sus promedios calculados desde 2000. d. Contexto Externo La nueva información sugiere que en 2013 el crecimiento económico promedio de nuestros socios comerciales podría ser algo menor que lo estimado en informes pasados, e inferior al registrado en 2012. Además la incertidumbre y la percepción de riesgo en los mercados financieros, que durante los últimos meses se había reducido, podría volver a aumentar por los acontecimientos del último mes en Europa. En la zona del Euro la recuperación de la actividad real aún no logra concretarse y todo indica que el PIB de la región habría continuado contrayéndose en el primer trimestre del año. Pese a ello, el ritmo de deterioro de la actividad real parece estar moderándose pues algunos indicadores como la actividad industrial y los índices de opinión del sector de manufacturas y de servicios han presentado alguna pausa en su tendencia decreciente. Adicionalmente en los últimos meses ha habido una recuperación leve de la confianza de los consumidores y empresarios. Las noticias más favorables provienen de Alemania, país en el que en los primeros meses del año se observa una reactivación de la actividad real explicada por las exportaciones a países fuera de la región y por el dinamismo del consumo interno. En este contexto, se espera que para el segundo semestre la actividad económica de la región empiece a recuperarse. No obstante, el clima político y las decisiones de las autoridades económicas europeas podrían afectar nuevamente la confianza en la región, como recientemente ha sucedido tras las elecciones inconclusas de Italia y las condiciones para el rescate del sector bancario en Chipre. En los Estados Unidos, las cifras de la actividad real para los primeros meses del año son relativamente favorables y sugieren que la economía ha seguido expandiéndose. El sector inmobiliario y el mercado laboral continúan recuperándose lentamente. Sin embargo, como no hubo acuerdo acerca de los recortes presupuestales en salud y educación, el ajuste fiscal en Estados Unidos podría ser mayor que lo previsto, lo que podría afectar negativamente las perspectivas de crecimiento de este país en 2013. La caída de la confianza de los consumidores que se observó en las primeras semanas de marzo, puede ya estar reflejando este hecho. Por su parte en China, aunque los indicadores de enero y febrero no son fáciles de interpretar dados los efectos del año nuevo, es posible afirmar que el crecimiento no se ha desacelerado en estos meses, por lo que la actividad real habría continuado expandiéndose a un ritmo favorable. En las economías de mayor tamaño de América Latina, el crecimiento de 2012 fue bueno con excepción de Brasil. Algunos indicadores económicos para el primer trimestre del año muestran un comportamiento favorable en Chile y Perú, y en menor medida en México. En Brasil se ha observado una recuperación pero aún desde niveles bajos. En Venezuela se estima un crecimiento bajo para 2013. En relación con los precios internacionales del petróleo, las alzas presentadas en febrero se han revertido. La debilidad de la demanda global y algunos datos favorables en la oferta de petróleo y sus sustitutos, estarían explicando las menores cotizaciones de las últimas semanas. Otros precios de bienes exportados por Colombia, como el carbón, el níquel y el café, han permanecido relativamente estables en niveles inferiores a los observados el año pasado. Para el caso de los precios de los alimentos, aunque se han presentado algunas alzas en la soya, el maíz y el aceite de palma, éstas aún no representan riesgos inflacionarios y se espera que no se sostengan dadas las expectativas de buena oferta mundial. Así las cosas, la inflación en las principales economías desarrolladas y en algunas emergentes (principalmente latinoamericanas) se mantiene en niveles relativamente bajos. Este hecho unido al débil crecimiento económico, ha permitido a los bancos centrales de los países desarrollados mantener una política monetaria expansiva. Adicionalmente ha permitido que varios bancos centrales de países emergentes hayan reducido recientemente sus tasas de política. En este contexto si las primas de riesgo de Colombia se mantienen en los actuales niveles, el costo de financiamiento externo del país seguirá siendo bajo. En resumen, la nueva información sugiere que en 2013 el crecimiento económico promedio de nuestros socios comerciales podría ser algo menor que lo estimado en informes pasados, e inferior al registrado en 2012. Si estos pronósticos se materializan, la contribución de la demanda externa al crecimiento de Colombia seguiría siendo baja. Asimismo, de continuar las tendencias observadas en los precios de los principales productos de exportación, los términos de intercambio promedio en 2013 serían menores que los observados el año anterior. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA La Junta Directiva tomó en consideración los siguientes aspectos relevantes: (i) El crecimiento de nuestros socios comerciales probablemente será menor a lo esperado, con lo cual la contribución de la demanda externa al crecimiento del país seguiría siendo baja. Así mismo, de continuar las tendencias observadas en los precios de nuestros principales productos de exportación, los términos de intercambio promedio en 2013 serían menores que los del año anterior. En consecuencia, el gasto agregado en 2013 no tendría un impulso adicional originado por un mayor ingreso nacional. (ii) Los nuevos datos de crecimiento económico para 2012 (4%) muestran una desaceleración desde niveles altos en 2011 (6,6%). La mayor pérdida de dinamismo se presentó en el segundo semestre y se explicó principalmente por una reducción significativa en el crecimiento de la inversión. El crecimiento del consumo privado se moderó en 2012, alcanzando tasas similares a su promedio histórico. El crecimiento de las exportaciones también registró un descenso frente a 2011, con una caída importante en el cuarto trimestre. (iii) La interpretación de los choques que sufrió la inversión en el segundo semestre de 2012 es compleja y puede obedecer a múltiples factores, como se desprende del hecho que todos los componentes de este agregado mostraron una desaceleración en el segundo semestre. (iv) Para el primer trimestre de 2013, el deterioro en las expectativas del comercio, así como la caída en el índice de confianza del consumidor y de las ventas de automóviles, sugieren una menor dinámica del consumo privado. En enero el valor de las exportaciones en dólares fue similar al registro de un año atrás y las de origen industrial registraron un crecimiento anual positivo. No obstante, los indicadores de confianza de los empresarios indican que la industria sigue contrayéndose. Esta dinámica sugiere un crecimiento económico actual por debajo del potencial y, por lo tanto, la ampliación de los defectos en el uso de capacidad productiva de la misma. (v) El descenso en la inflación anual, desde 2,0% en enero a 1,8% en febrero, fue similar al proyectado por el equipo técnico. Dicha desaceleración se explicó en su mayor parte por el menor ritmo de aumento de precios de los alimentos, principalmente de los procesados. Todas las medidas de inflación básica también se redujeron. Tanto el promedio de dichas medidas como las expectativas de inflación se encuentran por debajo de la meta (3%). La reducción reciente de los precios internacionales de la energía y otros productos básicos implica menores presiones sobre la inflación local. (vi) Las reducciones de las tasas de interés del Banco de la República se han transmitido a las tasas de interés de depósitos y préstamos del sistema financiero. No obstante, las tasas de interés real no han caído en igual magnitud debido al fuerte descenso de la inflación y las expectativas de inflación. (vii) El crecimiento de la cartera continuó moderándose. En lo corrido del año se ha observado una desaceleración del crédito comercial en pesos, pero un aumento en la financiación mediante emisión de bonos de las firmas junto a un mayor endeudamiento externo. El crédito a los hogares (consumo e hipotecario) sigue creciendo menos pero a tasas superiores que el aumento del PIB nominal. La continua moderación del ritmo de apalancamiento de firmas y hogares reduce el riesgo de generación de excesos financieros durante la presente fase expansiva de la política monetaria. En este contexto, la evaluación del balance de riesgos indica la conveniencia reducir en 50 pb la tasa de interés de intervención, con lo cual se espera que la política macroeconómica sea consistente con un crecimiento de la economía cercano a su potencial. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA De acuerdo con la evaluación del actual balance de riesgos la Junta Directiva acordó por unanimidad reducir la tasa de interés de referencia en 50 puntos básicos. La decisión se tomó teniendo en cuenta que la economía colombiana crece por debajo de su potencial y probablemente operará en los próximos trimestres por debajo de su capacidad productiva, y que la inflación observada y proyectada se sitúan por debajo de la meta del 3%. Esto en un contexto en el cual las reducciones de las tasas de interés parecieran estar transmitiéndose a la economía de manera más lenta que lo deseado. La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo del comportamiento y proyecciones de la actividad económica e inflación en el país, de los mercados de activos y la situación internacional. Finalmente, reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible.
2013-04-01
- Minutas de la reunión de la JDBR del 26 de abril de 2013 El 26 de Abril de 2013 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas Santamaria, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores doctores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Enrique Meisel Roca, César Vallejo Mejía, Juan Pablo Zárate Perdomo. En las minutas se presenta un resumen de la situación inflacionaria, de crecimiento económico y sus perspectivas, elaborada por el equipo técnico del Banco (sección 1) y se reseña la discusión y opciones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2). 1. SITUACION INFLACIONARIA Y DE CRECIMIENTO ECONÓMICO a. Desarrollos recientes de la inflación En marzo, la inflación anual al consumidor interrumpió la tendencia descendente que traía desde hace nueve meses y se situó en 1,91%, 8 puntos base (pb) superior al resultado del mes anterior. El aumento de la inflación en este mes fue explicado principalmente por la aceleración en la variación de los precios de la canasta de alimentos. En el IPC sin alimentos, el resultado varió poco frente al mes pasado. La variación de los precios de los transables se aceleró, compensando el fuerte descenso de los precios de la canasta de regulados. En la variación anual del IPC de alimentos, se interrumpió la tendencia decreciente que mostraba desde hace varios meses. El registro en marzo de 1,4% fue 22 pb mayor que el de un mes atrás. El grupo de perecederos fue el que presentó una mayor aceleración (de -5,6% en febrero a -1,9% en marzo) aunque manteniéndose en terreno negativo. Respecto a los grupos de procesados y de comidas fuera del hogar, se observaron desaceleraciones de 1,6% en febrero a 1,3% en marzo y de 3,6% en febrero a 3,2% en marzo respectivamente. Dentro del IPC sin alimentos, la canasta de no transables sin alimentos ni regulados se mantuvo en 3,9%, al igual que los hizo su principal componente, los arriendos. Estos dos índices venían disminuyendo lentamente desde noviembre del año pasado, lo cual puede ser atribuido a las escasas presiones de demanda existentes desde hace varios trimestres, junto con la reducción de las expectativas de inflación, entre otros. Respecto al IPC de transables sin alimentos ni regulados, en el último mes su variación anual aumentó (de 0,7% en febrero a 1,1% en marzo) a diferencia de lo ocurrido en los meses anteriores cuando se había mantenido estable. Este fenómeno, en alguna medida puede explicarse por la depreciación del peso en lo corrido del año la cual ya se habría empezado a trasmitir a los precios al consumidor. Finalmente, en marzo continuó el descenso de la variación anual de los regulados. El resultado para este mes fue 0,2%, frente a 0,7% en febrero. En esta ocasión volvió a presentarse un descenso fuerte en las tarifas de energía. En marzo no se presentaron cambios importantes en los indicadores de inflación básica. El promedio de los cuatro indicadores monitoreados por el Banco de la República fue 2,52%, frente a 2,49% de febrero. La variación anual del IPP se mantuvo en terreno negativo en marzo (-1,9%) pese a los aumentos de los últimos tres meses, lo que puede estar relacionado a la trasmisión de la depreciación a sus componentes importados. Las diferentes medidas de expectativas de inflación se mantienen en niveles bajos. Según la encuesta mensual efectuada por el Banco de la República a los analistas del mercado, la inflación esperada para diciembre de este año es de 2,6%, levemente menor que lo obtenido hace un mes. Las expectativas a doce meses, están en 2,9% sin mostrar variación en los últimos meses. Por su parte, la encuesta trimestral efectuada a empresas a comienzos de abril indica que se prevé una inflación de 2,8% para diciembre de 2013. Las estimaciones efectuadas a partir de los TES tasa fija y UVR apuntan a una inflación entre 2,5% y 2,7% a horizontes entre 2 y 5 años. b. Crecimiento Los indicadores disponibles para el primer trimestre sugieren que la actividad económica se habría desacelerado. El consumo de los hogares habría crecido a una tasa menor que la del cuarto trimestre de 2012, como se puede inferir de los siguientes hechos: De acuerdo al DANE, las ventas del comercio de febrero crecieron a una tasa anual de 0,6%, menor al 1,3% de enero y al 3,3% del promedio para el cuarto trimestre de 2012. Los datos de lo corrido del año sugieren un estancamiento en las tendencias de las ventas frente a lo registrado hacia finales del año pasado (descontando las ventas de automotores, la tasa anual de crecimiento fue 2,9%). Por otro lado, el índice de confianza del consumidor publicado por Fedesarrollo mostró una caída sustancial en su nivel para febrero y mantuvo su nivel en marzo. Con ese resultado el promedio de este índice para el primer trimestre es menor que el observado para el cuarto del año pasado. Por su parte la cartera de consumo siguió desacelerándose con un crecimiento anual promedio de 16,5% durante el primer trimestre frente al 18,4% observado en el cuarto de 2012. En términos reales se mantiene esta tendencia. En la inversión se podría esperar una recuperación dada la buena dinámica que se observó para las importaciones de bienes de capital en promedio entre enero y febrero (crecieron 9,0% en términos reales, frente al -8,7% del cuarto trimestre). Las ventas externas colombianas a febrero de 2013 se redujeron 6,6% frente al mismo mes del año anterior. Dicho comportamiento se explica por la caída de las principales exportaciones de origen minero (-11,9%) y agrícola (-6,3%). En contraste, el grupo de exportaciones industriales y otros registró un crecimiento anual de 13,4% en el mes de febrero. Nuevamente, las exportaciones de vehículos y autopartes tuvieron un aporte importante al aumentar 354% en este mes. También se destacan los crecimientos de las exportaciones de máquinas y aparatos eléctricos (38%) y de carne (167%). Por el lado de la oferta, los indicadores disponibles para la industria siguen mostrando un deterioro del sector. La variación anual del IPI sin trilla de café para el mes de febrero fue de -4,5%, similar a lo esperado. Cabe resaltar que este comportamiento estaría en parte relacionado con la presencia de un día calendario menos en este mes frente al mismo mes del año anterior. La confianza de los empresarios también se deterioró en el primer trimestre registrando niveles menores que los observados a finales del año pasado. Por último, los indicadores de pedidos y existencias muestran también un empeoramiento del sector. Algo similar revelaron las expectativas de producción a tres meses. Algunas cifras asociadas con el comercio y la construcción también sugieren desaceleraciones en estos sectores. De acuerdo con la encuesta de Fedesarrollo, la situación actual y las expectativas a 6 meses de los comerciantes señalan algún deterioro en el sector. Con respecto a la construcción, la producción de cemento mostró una caída de 4,8% anual, con lo que su componente tendencial sigue cayendo. Se espera también una reducción de la producción de carbón debido a choques de oferta en febrero y marzo. Para el total de la actividad minera, sin embargo, el aumento de la producción de petróleo debería compensar en parte el anterior efecto negativo. La producción de petróleo aumentó de manera importante durante los primeros tres meses del año, alcanzando 1.008 miles barriles diarios con un crecimiento anual de 8,5%. Por su parte, el crecimiento de la producción de café se habría acelerado entre enero y marzo de 2013 (a 26% en promedio) de acuerdo con la Federación Nacional de Cafeteros, esto incluso a pesar del paro y los problemas reportados por los cafeteros. Es importante tener en cuenta que durante el primer trimestre del año hubo menos días hábiles frente al mismo periodo del año anterior por cuenta de la Semana Santa en marzo y un mes de febrero con un día menos. En el pasado, esta circunstancia ha afectado de manera significativa los resultados de crecimiento económico del primer trimestre. Esto ha dificultado la interpretación de las tendencias actuales de la actividad económica y su proyección. Sin embargo, es de esperar que el crecimiento económico aumente a lo largo del año en la medida en que el gasto agregado reaccione a las acciones previas de la política monetaria y a los programas de inversión y gasto anunciados recientemente por el Gobierno nacional. Para todo el año 2013, el equipo técnico del Banco proyecta un crecimiento del PIB entre el 3,0% y el 5,0%, con 4,3% como cifra más probable. c. Variables Financieras El crecimiento del crédito bancario (M/N y M/E) continuó moderándose, luego de cinco meses de relativa estabilidad. En marzo registró una tasa de crecimiento anual de 14,2%, inferior en 95 pb al mes anterior. Para la cartera en moneda nacional se observó una desaceleración en el crecimiento anual pasando de 14,4% a 13,2% entre febrero y marzo. Para el caso de la cartera en moneda extranjera se observó un repunte de 24,8% a 29,4%. Durante marzo, todas las modalidades de cartera presentaron alguna reducción en sus tasas de crecimiento anual frente a al mes anterior. La cartera comercial pasó de 14,2% a 13,2%, el crédito de consumo de 16,9% a 15,6% y la cartera hipotecaria de 14,5% a 14,1%. Las tasas de interés nominales de los créditos concedidos en todas las modalidades marcan una tendencia decreciente frente a sus niveles de finales de julio de 2012, cuando se comenzó a bajar la tasa de interés de política. Hasta marzo, la mayor reacción se observó en las tasas de consumo (-165 pb), de crédito preferencial (-152 pb) y de microcrédito (-182 pb). En menor medida disminuyeron las tasas de crédito hipotecario (-94 pb), de tarjeta de crédito (-73 pb), de comercial ordinario (-104 pb) y para construcción de vivienda (-124 pb). En marzo la tasa de interés real para los desembolsos destinados a consumo fue de 15,6%, para los hipotecarios de 9,8%, para los preferenciales de 5,6% y para el comercial ordinario de 8,9%, tasas menores a sus promedios históricos respectivos calculados desde 2000. De otra parte, la tasa de interés real para los créditos otorgados con tarjeta de crédito y para la modalidad de tesorería se ubicaron en 26,9%, y 5,2% respectivamente, tasas mayores a sus promedios calculados desde 2000. d. Contexto Externo Diversos indicadores sobre producción industrial, consumo, empleo, y crédito, sugieren que la actividad económica global durante el primer trimestre de 2013 continúa registrando un bajo dinamismo. El escaso ritmo de expansión de la economía mundial obedece al débil crecimiento de la actividad económica de los países desarrollados, lo que se refleja en elevados niveles de desempleo y en dudas crecientes sobre la sostenibilidad fiscal en varias de estas economías. En contraste, las economías emergentes mantienen un dinamismo favorable, aunque en algunas de ellas comienzan a aparecer síntomas de desaceleración como resultado del debilitamiento de la demanda mundial y su efecto negativo sobre los precios de los productos básicos. La zona euro continúa siendo la región menos dinámica. Las cifras sobre el desempeño de su actividad real indican una nueva contracción de su producto interno bruto en el primer trimestre de 2013. Esto se desprende del comportamiento de los índices de sentimiento empresarial de los sectores de manufacturas y servicios que acentuaron su caída en los últimos meses, y de la evolución los indicadores de actividad de la industria y el comercio al por menor que siguieron contrayéndose en términos anuales. Pese a que a partir de la segunda mitad de 2012, las medidas adoptadas en la zona del euro han mejorado las condiciones financieras de la región, el canal del crédito continúa interrumpido como consecuencia de la desconfianza de los intermediarios financieros frente a la evolución de la economía. En los Estados Unidos las noticias son un poco más favorables. El crecimiento del producto para el primer trimestre de este año alcanzó una tasa anualizada de 2,5%, mayor que la expansión de 0,4% observada en el último trimestre del año anterior. El consumo de los hogares y los sectores de manufacturas y servicios siguieron expandiéndose mientras que el mercado de vivienda mantuvo su tendencia a la recuperación aunque todavía desde niveles relativamente bajos. Sin embargo, algunas cifras para marzo y abril empezaron a mostrar un debilitamiento de la demanda, lo cual parece estar asociado con los efectos del ajuste fiscal y con la baja demanda global que estaría afectando el desempeño exportador de esta economía. Por su parte, en las economías emergentes, el crecimiento de China durante el primer trimestre del año fue inferior al esperado por los analistas y evidenció una desaceleración frente al cuarto trimestre de 2012. El menor ritmo en la primera parte del año de la industria, las ventas al por menor y las exportaciones son evidencia de esta desaceleración. Una consecuencia importante de esto es la reducción de las compras externas de materias primas y bienes básicos por parte de China. Esta tendencia, que se observa desde finales de 2010, afecta el desempeño de la mayoría de las economías emergentes que habían encontrado en ese país un mercado importante para sus productos. Para el caso de América Latina, las economías de Chile, México y Perú han seguido expandiéndose a un ritmo favorable, aunque han empezado a mostrar algunas señales de debilitamiento, especialmente en las dos primeras. En Brasil la industria frenó en febrero su ritmo de recuperación. No obstante, se espera que el crecimiento de Brasil en 2013 sea superior al del año pasado (0,9%). Otras economías de la región, como Venezuela y Ecuador, estarían desacelerándose frente al año anterior. En relación con los precios internacionales de los bienes básicos, la debilidad de la economía mundial generó caídas importantes en las cotizaciones del petróleo en las últimas semanas. Para el caso de otros bienes exportados por Colombia, como el carbón, el níquel y el café, los precios se encuentran por debajo del promedio de 2012. Las menores cotizaciones internacionales de los bienes básicos, en especial las de los energéticos, han disminuido las presiones inflacionarias en la economía mundial y sugieren pocos riesgos en este frente en el corto plazo. Esto unido a la debilidad esperada del crecimiento mundial, indica que la política monetaria en las economías desarrolladas y en algunas emergentes continuaría siendo expansiva. Vale la pena notar que el banco central de Japón anunció una política de relajación cuantitativa que implicaría una duplicación de la base monetaria en los siguientes dos años, la cual pasaría de cerca del 30% del PIB en la actualidad a más del 60% en 2015. En resumen, se proyecta una actividad económica global más débil en 2013 frente a lo observado en 2012. Se esperan unos términos de intercambio menores a los observados el año pasado, interrumpiendo la tendencia al alza observada en los años anteriores. Si estas tendencias continúan, el impulso externo para la economía colombiana en 2013 podría ser menor que en años anteriores. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA La Junta Directiva tomó en consideración los siguientes aspectos relevantes: (i) En el contexto internacional, los indicadores de actividad económica del primer trimestre del año muestran un crecimiento modesto en los Estados Unidos, Europa en recesión y una leve desaceleración en China. En Japón, además, el banco central ha anunciado un programa de fuerte estímulo monetario. (ii) De continuar a lo largo del año las tendencias actuales en la economía internacional, los términos de intercambio y el crecimiento promedio de los socios comerciales de Colombia probablemente caerán un poco frente a lo observado en 2012. En consecuencia, el gasto agregado tendría un impulso externo menor que en años anteriores. (iii) La información del primer trimestre sugiere que la actividad económica en Colombia se habría desacelerado frente a lo observado en 2012. Por el lado de la demanda, el consumo de los hogares habría crecido a una tasa menor, como se desprende de la evolución de los indicadores de comercio al por menor, de confianza de los hogares y de crédito. Por el lado de la oferta, los indicadores disponibles para la industria siguen mostrando deterioro. En febrero las exportaciones en dólares se contrajeron en términos anuales, hecho explicado principalmente por las de origen minero y afectadas por los choques de oferta en el sector del carbón. En contraste, las exportaciones industriales crecieron a buen ritmo. (iv) El comportamiento reciente de algunos componentes del gasto agregado y el menor número de días hábiles del primer trimestre frente al mismo periodo del año anterior, ha hecho particularmente difícil la interpretación de las tendencias actuales de la actividad económica y su proyección. Sin embargo, es de esperar que el crecimiento económico aumente a lo largo del año en la medida que el gasto agregado reaccione a las acciones previas de política monetaria y a los programas anunciados recientemente por el gobierno nacional. Para todo el año 2013, el equipo técnico del Banco proyecta un crecimiento del PIB entre el 3% y el 5%, con 4,3% como cifra más probable. (v) En marzo, la inflación anual (1,91%) se aceleró levemente y las medidas de inflación básica no presentaron cambios importantes. Tanto el promedio de dichas medidas, como la mayor parte de los indicadores de expectativas de inflación se encuentran por debajo de la meta (3%). (vi) A marzo las reducciones en la tasa de interés de política se han transmitido a las tasas nominales de interés de mercado. Las de créditos de consumo, preferencial y microcrédito reaccionaron en magnitud similar o mayor que la tasa del Banco, mientras que las de créditos comerciales ordinarios, hipotecarias y tarjetas de crédito lo hicieron de forma más lenta. Sin embargo, en las últimas semanas se ha observado una reducción importante en las tasas de interés del crédito hipotecario. En términos reales las tasas han disminuido menos debido al fuerte descenso de la inflación y sus expectativas. (vii) El crecimiento de la cartera continuó moderándose. En lo corrido del año se ha observado una desaceleración del crédito comercial en pesos, pero un aumento en la financiación mediante emisión de bonos de las firmas junto a un mayor endeudamiento externo. El crédito a los hogares (consumo e hipotecario) también crece menos pero lo hace a tasas superiores a las del PIB nominal. (viii) A diciembre, los índices de precios de la vivienda nueva y usada continuaron creciendo a tasas elevadas, y sus niveles son históricamente altos. En resumen, la economía colombiana crece actualmente por debajo de su potencial y la inflación se sitúa por debajo del 3%. Las acciones de política monetaria y fiscal adoptadas contribuirán a que en 2013 el producto se sitúe cerca de la capacidad productiva de la economía y a que la inflación vaya convergiendo a la meta de largo plazo. DECISIÓN DE POLÍTICA De acuerdo con la evaluación del balance de riesgos la Junta Directiva acordó por unanimidad mantener inalterada la tasa de interés de intervención en 3,25%, a la espera de mayor información. La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo del comportamiento y proyecciones de la actividad económica e inflación en el país, de los mercados de activos y la situación internacional. Finalmente, reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible.
2013-05-01
- Minutas de la reunión de la JDBR del 31 de mayo de 2013 El 31 de Mayo de 2013 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores doctores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Enrique Meisel Roca, César Vallejo Mejía, Juan Pablo Zárate Perdomo. En las minutas se presenta un resumen de la situación inflacionaria y del crecimiento económico, y sus perspectivas, elaborada por el equipo técnico (sección 1) y se reseñan las principales discusiones y opciones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2). 1. SITUACIÓN INFLACIONARIA Y DE CRECIMIENTO ECONÓMICO Antecedentes a. Desarrollos recientes de la inflación La inflación al consumidor en abril fue 2,02%, 10 puntos base (pb) por encima de lo observado en marzo. La aceleración de la inflación anual se concentró en el precio de los alimentos y de los regulados tal como se había anticipado. En el IPC de alimentos, la variación anual aumentó por segundo mes consecutivo y se situó en 1,6%, 20 pb más que en marzo. Las presiones alcistas provinieron de los alimentos perecederos (la variación anual pasó de -1,9% en marzo a 0,4% en abril). Por otra parte, para los alimentos procesados los aumentos anuales de precios volvieron a ser de poca magnitud algo que estaría relacionado con la estabilidad relativa que mostraron los precios internacionales de cereales, aceites y oleaginosas a finales del año pasado y comienzos del actual. Dentro del IPC sin alimentos, se destaca el aumento de los precios de los regulados cuya variación anual en el último mes fue 0,9%, 70 pb más que en marzo. Dicha aceleración se dio en las tarifas de energía eléctrica. Los otros componentes del grupo –transporte, gasolina, gas domiciliario – se desaceleraron. Para los otros componentes del IPC sin alimentos, en transables la variación anual en abril fue de 0,98%, lo que implicó un descenso de 15 pb frente a marzo. Los precios de un buen número de bienes de consumo durables, incluidos automóviles, siguieron cayendo como sucede desde hace varios trimestres. La depreciación del peso de los últimos meses, dado que ha sido moderada, se ha transmitido poco a los precios al consumidor. Por otra parte, la variación anual de no transables no presentó cambios de importancia manteniéndose en 3,8%. La subcanasta de arriendos, su principal componente, también se mantuvo en ese nivel. En abril, los indicadores de inflación básica mostraron pocos cambios. El promedio de todos ellos se situó en 2,48%, 4 pb por debajo del dato del mes anterior y en el menor nivel desde octubre de 2010. La variación anual del IPP se mantuvo en terreno negativo en abril (-2,4%) gracias al descenso del componente local (producidos y consumidos) pues el importado aumentó. Esto último estaría relacionado con la depreciación del peso. Respecto a las expectativas de inflación, las diferentes medidas se encuentran en o por debajo de la meta de 3%. La obtenida a partir de la encuesta mensual del Banco para fin de año se redujo levemente a 2,5%, mientras que la de doce meses se situó en 3,0% (aumentando un poco frente al registro de la encuesta anterior). Entre tanto, las estimadas a partir de los TES para horizontes de 2, 3 y 5 años continuaron oscilando entre 2,6% y 2,8% durante abril y las tres primeras semanas de mayo. b. Crecimiento La información más reciente sobre el comportamiento de la economía en el primer trimestre de 2013 sugiere que ésta se habría desacelerado frente a lo observado a finales del año pasado, como se anticipó en informes anteriores. Los indicadores para este periodo están influenciados por el menor número de días hábiles que se dio en febrero y marzo. En el primer trimestre del año el consumo de los hogares habría crecido a tasas ligeramente menores que las registradas en el cuarto trimestre de 2012. De acuerdo a las cifras de la Muestra Mensual de Comercio al por Menor (MMCM) publicadas por el DANE en marzo, el crecimiento anual de las ventas fue de 0,9% en el primer trimestre (inferior al 3,3% del último de 2012). Esta dinámica sería explicada por una caída anual en las ventas de vehículos automotores (-11,4%). En contraste, las ventas de los demás bienes crecieron 4,0% durante los primeros tres meses del año. Por otra parte, en las importaciones de bienes de consumo en dólares también se observó una desaceleración. Entre enero y marzo de 2013 se expandieron a una tasa anual de 3,3%, cifra menor que la registrada en el último trimestre de 2012 (15,4%). Esta dinámica se vio afectada por el comportamiento de las importaciones de bienes de consumo duradero que crecieron 1,6% durante este periodo, luego del registro de 11,2% en el cuarto trimestre. De estos datos se desprende que el consumo de bienes no durables, semidurables y de servicios habría continuado expandiéndose a tasas similares a las observadas hacia el final del año pasado, mientras que en el segmento de bienes durables habría presentado una marcada desaceleración. En lo que respecta la inversión, la información de importaciones de bienes de capital muestra que este rubro se contrajo en marzo (-6,7% de crecimiento anual), lo que también apuntaría a una menor dinámica de la inversión diferente de construcción de vivienda y obras civiles. Por otra parte, las exportaciones en dólares registraron una caída de 20% en marzo respecto al mismo mes del año anterior (al pasar de US$5.712 millones a US$4.567 millones). Las ventas externas de los principales grupos disminuyeron así: las mineras 22,3% anual, las agrícolas 24,2% y las industriales 9,4%. Con respecto a los indicadores de oferta, las noticias muestran comportamientos mixtos. La producción de café continúa expandiéndose a tasas favorables. La actividad minero-energética, mostró una producción petrolera con un buen crecimiento, mientras que la producción de carbón se vio afectada por problemas laborales y sanciones ambientales. La industria registró un deterioro importante durante el trimestre. El índice de producción industrial sin trilla se contrajo 11,5% en términos anuales en marzo. Con este registro, la producción de la industria mostró una contracción de 6,0% anual en el primer trimestre, la cifra más baja para todo un trimestre desde 2009. Dado lo anterior, no se estima necesario revisar los pronósticos de crecimiento para el primer trimestre. Gran parte de la desaceleración ya se había previsto y estaba incorporada en los ejercicios de pronóstico, que tenían en cuenta el menor número de días hábiles durante el primer trimestre. Así las cosas, se mantiene el rango de pronóstico entre 2,0% y 3,5%. Un resultado que supone un buen comportamiento del consumo público y de la inversión en obras civiles. Para el segundo trimestre de 2013, la información es escasa y está disponible solo para abril. Algunos datos sugieren un repunte en el crecimiento de la actividad económica. Por el lado de la demanda, en abril la confianza del consumidor rebotó de manera importante desde los niveles registrados en febrero y marzo, y se ubicó nuevamente por encima de su promedio histórico. Este comportamiento obedeció a unas mejores expectativas económicas de mediano y largo plazo de los hogares. Por su parte, según la información publicada por Econometría, las ventas de vehículos registraron un crecimiento anual positivo en abril (3,3%) luego de las fuertes caídas en los meses anteriores (-18,5% en promedio para el primer trimestre). Por el lado de la oferta, los indicadores disponibles para el mes de abril mostraron una mejoría. En el caso de la industria, según la encuesta de Fedesarrollo, los indicadores de pedidos y existencias mejoraron de manera importante. No obstante, el componente tendencial continúa sugiriendo un deterioro. Asimismo, el indicador de expectativas de producción a tres meses en abril también aumentó y la caída del componente tendencial se frenó. De todas maneras es conveniente esperar nueva información para confirmar un cambio de tendencia en estas series. Por otra parte, los comerciantes consultados por Fedesarrollo reportaron una leve mejoría en la percepción actual y futura de sus ventas en abril. Sin embargo, también en este caso, el componente tendencial continúa mostrando un debilitamiento, comportamiento que también registra la encuesta de Fenalco. Por último, la demanda de energía total aumentó 8,1% anual en abril y la de energía no regulada para la industria aumentó 8,2% anual. Dado que la correlación entre esta última serie y la producción industrial es alta, se espera que ésta muestre una recuperación en abril. Es de esperar que el crecimiento económico colombiano aumente a lo largo del año en la medida en que el gasto agregado reaccione a las medidas previas de política monetaria y a los programas anunciados durante el mes pasado por el gobierno nacional. El equipo técnico del Banco mantiene su pronóstico de crecimiento del PIB para 2013 entre 3,0% y 5,0%, con 4,3% como cifra más probable. c. Variables Financieras En abril, el crecimiento del crédito bancario (M/N y M/E) continuó moderándose, registrando una tasa de crecimiento anual de 14,0%, inferior en 18 pb al mes anterior. Esta desaceleración se explica por el comportamiento de la cartera en moneda nacional que pasó de crecer a una tasa anual de 12,6% en abril frente a 13,2% en marzo. Para el caso de la cartera en moneda extranjera se observó en este mismo periodo un incremento en la variación anual de 29,4% a 36,3%. Por modalidades, la desaceleración se concentró en el crédito con destino a los hogares, con una reducción en las tasas de crecimiento del crédito de consumo (de 15,6% a 14,6% entre marzo y abril) y de la cartera hipotecaria (de 14,1% a 13,7% entre marzo y abril). Por su parte la cartera comercial presentó un leve repunte en el crecimiento anual durante abril (13,5% frente a 13,2% en marzo) explicado principalmente por el dinamismo de la cartera en moneda extranjera. En abril la tasa de interés real para los desembolsos destinados al crédito de consumo fue de 15,5%, para los hipotecarios de 9,5%, para los preferenciales de 4,6% y para el comercial ordinario de 8,4%, tasas menores a sus promedios históricos respectivos calculados desde 2000 . Por otra parte, la tasa de interés real para los créditos otorgados con tarjeta de crédito y para la modalidad de tesorería fueron de 26,4% y 5,1%, respectivamente, tasas mayores a sus promedios calculados desde 2000. Las tasas de interés nominales de los créditos concedidos en todas las modalidades marcan una tendencia decreciente frente a los niveles de finales de julio de 2012, cuando se comenzó a bajar la tasa de interés de política. Hasta abril, la mayor reacción se observó en las tasas de crédito preferencial (-237 pb), de construcción de vivienda (-178 pb), consumo (-160 pb) y microcrédito (- 160 pb). En menor medida disminuyeron las tasas de crédito ordinario (-151 pb), de crédito hipotecario (-117 pb) y tarjeta de crédito (-107 pb). Esta reducción también se ha transmitido a las tasas de interés reales, pese al descenso reciente de la inflación. Durante el período mencionado, se destacan las diminuciones de 177 pb en créditos preferenciales, de 118 pb en créditos para construcción, de 96 pb en créditos de consumo, de 91 pb en créditos comerciales ordinarios y de 87 pb en microcréditos. d. Contexto Externo Los datos recientes sugieren un crecimiento de las economías industrializadas similar al esperado en el Informe sobre Inflación pasado. Estados Unidos crece a un ritmo moderado, Europa continúa contrayéndose y Japón pareciera estar empezando a reaccionar a las fuertes medidas de estímulo monetario. Sin embargo, varias economías de países emergentes de Asia y de América Latina se desaceleraron más de lo anticipado. En la zona del euro la contracción del PIB fue inferior a la registrada en el último trimestre de 2012. Pese a ello, el deterioro de las economías de la periferia continuó afectando a Alemania y en mayor medida a Francia. Las últimas cifras de actividad real muestran que la economía de la región habría seguido contrayéndose; no obstante, para el caso de Alemania, la información es más favorable y estaría indicando algún repunte en los próximos meses. En este sentido, el ritmo de deterioro de la región podría estar moderándose. En los Estados Unidos algunos indicadores del gasto privado para el segundo trimestre sugieren que la economía habría seguido expandiéndose a un ritmo moderado. La información sobre consumo, manufacturas y servicios apuntan a que el crecimiento se mantuvo en abril. De igual forma, el mercado de vivienda continuó recuperándose y los precios de otros activos financieros, valorizándose. En China, la economía se ha expandido a un ritmo menor al esperado. La información a abril sobre exportaciones, actividad industrial y ventas al por menor, presentan crecimientos anuales que son inferiores a los de años atrás. De la misma manera el crecimiento de la inversión en activos fijos ha seguido moderándose. Para el caso de América Latina, en marzo la actividad real se desaceleró en México, Chile y Perú. Parte de este fenómeno puede estar asociado al efecto de menores días hábiles por la presencia de Semana Santa en el primer trimestre. En Brasil, aunque la recuperación de la actividad económica ha continuado, su expansión fue menor que la esperada por las autoridades económicas y por los analistas. En relación con los precios internacionales de bienes básicos, las cotizaciones del petróleo han disminuido en las últimas semanas. El precio promedio actual del petróleo se encuentra 3,5% por debajo del promedio de 2012. Para el caso de otras materias primas, como el cobre, el carbón y el níquel, los precios también se encuentran en niveles inferiores a los de 2012. De igual forma, las cotizaciones internacionales de los alimentos no han mostrado alzas significativas en lo corrido del año y para los próximos meses no se esperan aumentos gracias a que las condiciones climáticas han sido normales en las áreas productoras. Además, en Brasil se esperan cosechas agrícolas récord. Salvo en casos puntuales, la inflación al consumidor se encuentra en niveles bajos y estables, tanto en las economías avanzadas como en las emergentes. Para los próximos meses no se esperan riesgos alcistas. En un contexto de débil crecimiento económico y baja inflación, se espera que las medidas de estímulo monetario implementadas por los bancos centrales de las principales economías desarrolladas se mantengan en lo que resta del año. Finalmente, las menores cotizaciones de los bienes básicos frente al promedio observado en 2012, la desaceleración en el crecimiento económico en América Latina mayor a lo esperado y las conjeturas sobre la posibilidad de que Reserva Federal de los Estados Unidos comience a reducir su programa de compra de activos entre otros factores, afectaron las primas de riesgo y las tasas de cambio de la región. En síntesis, se continúa proyectando una actividad económica global más débil en 2013 frente a lo observado en 2012. El menor crecimiento de las economías emergentes hace prever una demanda de exportaciones colombianas que podría ser levemente menor a lo estimado anteriormente. En este contexto se siguen proyectando unos términos de intercambio inferiores al promedio observado en 2012. Si estas tendencias continúan, el impulso externo para la economía colombiana en 2013 podría ser menor que en años anteriores. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA La Junta Directiva tomó en consideración los siguientes aspectos relevantes: (i) Los datos recientes sugieren un crecimiento de las economías industrializadas similar al esperado un mes atrás. Estados Unidos crece a un ritmo moderado, Europa continúa contrayéndose y Japón pareciera estar empezando a reaccionar a las fuertes medidas de estímulo monetario. Sin embargo, varias economías de países emergentes de Asia y de América Latina se desaceleraron más de lo anticipado. (ii) El menor crecimiento de las economías emergentes hace prever una demanda de exportaciones colombianas levemente menor a la estimada antes y términos de intercambio inferiores al promedio observado en 2012. (iii) El peso colombiano, al igual que la moneda de varios países de América Latina, se ha depreciado frente al dólar. Esto podría estar asociado con la reducción en los precios internacionales de los bienes básicos que estos países exportan, con la desaceleración en sus crecimientos económicos, y con conjeturas sobre la posibilidad de que la Reserva Federal de los Estados Unidos comience a reducir su programa de compra de activos. Las intervenciones del Banco de la República en el mercado cambiario local, al igual que las medidas adoptadas por el gobierno, han reforzado la tendencia hacia la depreciación del peso. (iv) Los indicadores disponibles hasta el momento sugieren un crecimiento en el segundo trimestre superior al del primero. En abril, la confianza del consumidor mejoró de manera importante, al igual que los indicadores de expectativas empresariales en la industria y el comercio y el consumo de energía eléctrica. Asimismo, las reducciones en la tasa de referencia continúan transmitiéndose a las tasas de interés nominales y reales y el crédito total detuvo su desaceleración. (v) En general es de esperar que el crecimiento económico colombiano aumente a lo largo del año en la medida en que el gasto agregado reaccione a las medidas previas de política monetaria y a los programas anunciados durante el mes pasado por el gobierno nacional. El equipo técnico del Banco mantiene su pronóstico de crecimiento del PIB para 2013 entre 3,0% y 5,0%, con 4,3% como cifra más probable. (vi) En abril la inflación anual (2,02%) se aceleró. Las medidas de inflación básica no presentaron cambios importantes. Tanto el promedio de dichas medidas como las expectativas de inflación se encuentran en o por debajo de la meta (3%). En resumen, la economía colombiana habría crecido por debajo del 3% en el primer trimestre, pero es de esperar que las acciones de política monetaria y fiscal realizadas hasta el momento contribuyan a que en el transcurso del año el producto se sitúe cerca de su nivel potencial. De igual manera, la probabilidad de que la inflación culmine en el rango meta es elevada. En este contexto, y con la evaluación del balance de riesgos, la Junta Directiva consideró conveniente mantener la tasa de interés de intervención en 3,25%. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA De acuerdo con la evaluación del balance de riesgos la Junta Directiva acordó por unanimidad mantener inalterada la tasa de interés de intervención en 3,25%. La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo del comportamiento y proyecciones de la actividad económica e inflación en el país, de los mercados de activos y la situación internacional. Finalmente, reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible.
2013-06-01
- Minutas de la reunión de la JDBR del 28 de junio de 2013 El 28 de Junio de 2013 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores doctores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Enrique Meisel Roca, César Vallejo Mejía, Juan Pablo Zárate Perdomo. En las minutas se presenta un resumen de la situación inflacionaria y del crecimiento económico, y sus perspectivas, elaborada por el equipo técnico (sección 1) y se reseñan las principales discusiones y opciones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2). 1. SITUACIÓN INFLACIONARIA Y DE CRECIMIENTO ECONÓMICO Antecedentes a. Desarrollos recientes de la inflación En mayo la inflación anual al consumidor fue 2,00%, manteniéndose prácticamente estable frente al registro de abril (2,02%). Los aumentos de precios de algunos regulados, fueron compensados por reducciones de precios en alimentos procesados y en el IPC de no transables sin alimentos ni regulados. Dentro del IPC sin alimentos, en mayo sobresalió el aumento de la variación anual de regulados (1,25% frente a 0,9% en abril). Esta alza se centró en las tarifas de energía eléctrica de algunas ciudades, incluida Bogotá. En este mes se presentaron también aumentos en las tarifas de transporte público de otras ciudades como Medellín. Por otro lado, la variación anual de los combustibles continuó en terreno negativo (-3,5%). Se presentó un aumento moderado en la variación anual del IPC de transables sin alimentos ni regulados (1,06% frente a 0,98% de abril). La depreciación del peso en lo corrido del año (cerca del 9% entre el 31 de diciembre y el 24 de junio) no se ha trasmitido hasta el momento a esta subcanasta. Respecto a los no transables sin alimentos ni regulados, el resultado de mayo (3,7%) refleja una caída de 9 pb frente al mes anterior. El hecho más destacable fue la reducción de la variación anual de arriendos a 3,7% (frente a 3,8% de abril). Este indicador viene descendiendo muy lentamente, aunque con algunas interrupciones, desde octubre del año pasado. En el IPC de alimentos la variación anual en mayo (1,3%) cayó 28 pb después de aumentos consecutivos los dos últimos meses. Esta disminución fue explicada principalmente por la reducción de los precios de procesados (de 0,91% a -0,14%). En contraste, los precios de los perecederos aumentaron por segundo mes consecutivo (de 0,4% a 2,6%). La variación de los precios de comidas fuera del hogar no presentó cambios manteniéndose en 3,3%. En mayo el promedio de los cuatro indicadores de inflación básica monitoreados por el Banco descendió levemente, situándose en 2,44%, 4 pb menos que el registro de abril. Los cuatro indicadores se mantienen entre 2% y 3% desde enero de este año. El IPP mantuvo una variación anual negativa en mayo (-2,1%) aunque aumentó frente al mes pasado (-2,4%). Tanto la variación de los precios de los bienes consumidos y producidos como de los importados se mantuvo en terreno negativo. En mayo las expectativas de inflación se incrementaron levemente, pero siguieron en niveles compatibles con el cumplimiento de la meta. La encuesta mensual del Banco de la República indica que la inflación esperada a diciembre de este año es 2,6% (7 pb más que hace un mes) y la de doce meses se situó en 3,1% (aumentando 8 pb frente a abril). Por su parte, las expectativas derivadas de los TES a horizontes de 2, 3 y 5 años se mantuvieron entre 2,5% y 3,0%. b. Crecimiento El PIB se expandió 2,8% durante los primeros tres meses del año, en línea con el punto medio del rango de pronóstico presentado en el anterior informe trimestral sobre inflación. El resultado en parte está relacionado con la presencia de un menor número de días calendario y hábiles frente al mismo periodo del año pasado, aunque también por diversos choques de oferta en el sector minero. La mayoría de los componentes de la demanda interna se desaceleraron. Los rubros de inversión en maquinaria y equipo y consumo durable fueron los que más contribuyeron a este comportamiento. En contraste, la inversión destinada a construcción y edificaciones y obras civiles creció de manera significativa (17,5% y 14,4% respectivamente) compensando en parte la debilidad en el resto de componentes. Tanto las exportaciones como las importaciones decrecieron frente al mismo periodo de 2012. En el primer caso la variación anual fue de -1,2%. Diversos choques de oferta en la producción minera afectaron considerablemente las ventas al exterior, en especial las de carbón. En el segundo caso, la desaceleración del crecimiento anual a -0,2% se dio principalmente en las compras externas de bienes de capital. Por el lado de la oferta, la construcción y los servicios sociales, personales y comunales fueron las ramas que reportaron los mayores crecimientos anuales: 16,9% y 4,5%, respectivamente. La minería mantuvo un crecimiento bajo, 1,4%, debido a choques de oferta que afectaron la producción de carbón, que disminuyó anualmente 21% y contrarrestó el dinamismo del petróleo que creció 7,8%. La única gran rama que registró una contracción anual fue la industria (-4,1%). Respecto al segundo trimestre de 2013, los indicadores disponibles con información a abril muestran un repunte generalizado en las tasas de crecimiento. Es así como se espera que para el segundo trimestre el consumo privado muestre una mejor dinámica que en el primero. Esto se desprende del comportamiento de las ventas al por menor que según la Muestra Mensual de Comercio al por Menor (MMCM) publicada por el DANE, registraron una aceleración en abril frente a los registros de marzo y del promedio para los primeros tres meses: las ventas minoristas crecieron a una tasa anual de 5,7% (frente al 0,8% y 0,9% de marzo y primer trimestre, respectivamente). Para el bimestre marzo-abril, el crecimiento fue de 3,1%, mejor que lo observado en enero y febrero de este año y similar al registrado en el cuarto trimestre del año pasado. En la misma dirección apuntan los resultados de la Encuesta Mensual de Expectativas Económicas (EMEE) del Banco de la República que, con datos hasta abril, muestra que las expectativas de ventas son mayores que las registradas en promedio para el primer trimestre del año. Por su parte, según Econometría, las ventas de automóviles en abril crecieron 3,3% y en mayo cayeron 10,4%. Esta última caída es menos pronunciada que la observada en el primer trimestre. Por último, el índice de confianza del consumidor (ICC) publicado por Fedesarrollo muestra mayores niveles en abril y mayo que los observados en los primeros tres meses de 2013 y se encuentra por encima del promedio histórico de la serie (desde 2001). En cuanto a los indicadores asociados con la oferta, las señales fueron mixtas. En la industria, el índice de producción industrial creció 8,4% en abril. Sin embargo, el componente tendencial de la serie siguió cayendo lentamente. Así, para el bimestre marzo-abril continuó observándose una caída de 1,6% anual y para el año corrido de 2,7%. Por su parte, aunque los indicadores de pedidos y de existencias de la encuesta de Fedesarrollo para la industria mostraron un leve repunte en abril, siguieron presentando una tendencia decreciente. Algo similar ocurrió con el balance sobre las expectativas de producción a tres meses, el cual sugiere que la industria continuaría débil hacia adelante. En lo que respecta a la construcción, con información a abril, las licencias crecieron a una tasa de 36,4% (dividido entre 39,1% destinada a vivienda y 27,7% a otros destinos) y la producción y los despachos de cemento crecieron 4,2% y 16,4%. En el caso de estos dos últimos, no se observaba un crecimiento positivo desde noviembre del año pasado. Por su parte, en abril, las exportaciones de carbón se incrementaron 27,9% en volumen y 11,2% en valor (USD). La poca información disponible a mayo, muestra un comportamiento menos favorable que el de abril pero mejor que el de febrero y marzo. La producción de petróleo creció 8,3% anual y se mantuvo por encima del millón de barriles diarios mientras que la producción de café registró una expansión de 36% anual, luego del 67% de abril. La demanda de energía aumentó 2,6% anualmente. En general se espera que el crecimiento económico colombiano aumente a lo largo del año en la medida en que el gasto agregado reaccione a las medidas previas de política monetaria y a los programas que viene ejecutando el gobierno nacional. El equipo técnico del Banco mantiene su pronóstico de crecimiento del PIB para 2013 entre 3,0% y 5,0%, con 4,3% como cifra más probable. c. Variables Financieras En mayo, el crédito bancario (M/N y M/E) mantuvo el crecimiento anual del mes anterior (14,0%). La aceleración de la variación anual de la cartera en moneda nacional, que pasó de 12,58% en abril a 12,68% en mayo, fue compensada por la desaceleración de la cartera en moneda extranjera que pasó de crecer a una tasa de 36,26% a una de 34,67% en el mismo periodo. Por destinos, se observó un comportamiento mixto: el crecimiento anual del crédito de consumo pasó de 15,65% a 14,47% entre abril y mayo mientras que la variación anual de la cartera hipotecaria aumentó de 13,68% a 13,82% en el mismo periodo. Esto último asociado a la acogida del subsidio para compra de vivienda decretado por el gobierno a partir de abril. Por su parte, la cartera comercial, a diferencia de lo observado desde el cuarto trimestre del año anterior, experimentó un incremento en la tasa de crecimiento anual en su componente en moneda nacional de 10,97% a 11,16% en este periodo, lo que significó una leve recuperación en el total de 13,46% a 13,51%. Las tasas de interés nominales aplicadas por los establecimientos de créditos en todas las modalidades de préstamo continuaron la tendencia decreciente iniciada con los recortes en la tasa de política iniciados en julio de 2012. Hasta mayo, se destaca la respuesta en las tasas de los créditos preferencial (-238 pb), hipotecario (-203 pb) (que en parte, se explica por la cobertura del gobierno para la compra de vivienda), comercial ordinario (-201 pb) y para construcción de vivienda (-190 pb). Seguidas por la reducción en las tasas de consumo (-177 pb), microcrédito (-174 pb) y tarjeta de crédito (-134 pb). El descenso de las tasas de interés también se aprecia en términos reales, pero en menor magnitud por el efecto de la baja en la tasa de inflación. Desde julio de 2012, la disminución ha sido: -185 pb en créditos preferenciales, -150 en créditos hipotecarios, -148 pb en créditos comerciales ordinario, -138 pb en créditos para construcción, -122 pb en créditos de consumo, y -112 pb en microcréditos. En mayo la tasa de interés real para los créditos de consumo fue de 15,3%, para los hipotecarios de 8,5%, para los preferenciales de 4,5% y para el comercial ordinario de 7,8%. Estos niveles se encuentran por debajo de sus promedios históricos calculados desde 2000. Por el contrario, para los créditos otorgados con tarjeta de crédito la tasa real de 26,1% fue mayor a su promedio. Por su parte, la tasa de tesorería iguala su promedio con 5,0%. d. Contexto Externo La economía mundial continúa mostrando señales mixtas. Mientras la contracción europea persiste, las perspectivas en Estados Unidos y Japón lucen más favorables. El crecimiento de buena parte de las economías emergentes de Asia y América Latina es robusto pero menor a lo proyectado en informes anteriores. En los Estados Unidos el dinamismo del sector privado ha compensado los efectos contractivos del ajuste fiscal y ha permitido que el crecimiento de la economía esté alrededor de 2%. Con cifras a mayo, los indicadores de consumo de este país, incluida la confianza de los hogares, continuaron apoyando una recuperación gradual. Por su parte, la industria mostró algún debilitamiento en ese mes, aunque las cifras adelantadas a junio sugieren que éste no habría continuado. En contraste con lo anterior, la recuperación en los mercados de vivienda y de trabajo se mantiene. En la zona del euro la actividad real ha seguido deteriorándose, aunque a un ritmo menor. En este sentido, los indicadores de confianza, tanto de los empresarios como de los consumidores, han mostrado algún repunte en los últimos meses pero todavía en un nivel muy bajo. Por el lado menos favorable, las ventas al por menor continúan deteriorándose, al igual que los mercados de trabajo, en especial los de las economías de la periferia. En Alemania la actividad real parece estar ganando dinamismo: tanto los indicadores de confianza como los de actividad manufacturera llevan varios meses al alza. Esta situación contribuiría a la recuperación de la región. Las economías emergentes se expanden a un ritmo menor que en el periodo 2011-2012. En relación con los precios internacionales, las cotizaciones del petróleo han permanecido relativamente estables en las últimas semanas. Para el caso de otros bienes exportados por Colombia, como el carbón, café y ferroníquel, los precios continúan por debajo de los niveles promedio observados en 2012. Por el lado de los precios de los bienes básicos importados, las cotizaciones internacionales de los alimentos también se encuentran en niveles inferiores a los del año anterior. Esto sugiere que en el presente año el nivel de términos de intercambio será favorable pero inferior al promedio observado en 2012. En un contexto de pocas presiones sobre la inflación global y un crecimiento débil, la política monetaria expansiva ha continuado en la mayoría de países desarrollados y emergentes. Recientemente, el anuncio de la Reserva Federal sobre la posible disminución en los montos de compras de activos ante el mejor comportamiento de la economía, incrementó la volatilidad en los mercados financieros internacionales. Las tasas de largo plazo de los bonos de las economías avanzadas y emergentes han subido, partiendo de un nivel bajo. Los precios de las acciones han caído y el dólar se ha fortalecido. La reacción de los mercados ha sido más acentuada en los países emergentes que han visto un aumento de la prima de riesgo. Si el menor estímulo monetario se da en un contexto de recuperación gradual en los Estados Unidos, como lo ha anunciado la FED, los efectos sobre las economías emergentes, y en especial sobre América Latina, podrían ser de bajo impacto. Un mayor dinamismo de la economía estadounidense implicaría una mayor demanda externa al igual que unos precios internacionales favorables. De materializarse este escenario, los fundamentales de las economías de la región no deberían modificarse sustancialmente, los términos de intercambio continuarían en niveles relativamente altos y los flujos de inversión extranjera directa se mantendrían. Es probable entonces que se de una reducción de las inversiones de portafolio, debido a unas expectativas de menor crecimiento de la liquidez global. Esto no necesariamente implica una reducción sustancial del financiamiento interno y externo de la región. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA La Junta Directiva tomó en consideración los siguientes aspectos relevantes: (i) La economía mundial continúa mostrando señales mixtas. Mientras la contracción europea probablemente persista más de lo esperado antes, las perspectivas en Estados Unidos y Japón lucen más favorables. El crecimiento de buena parte de las economías emergentes de Asia y América Latina es robusto pero menor a lo proyectado meses atrás. (ii) El anuncio de la Reserva Federal sobre la posible disminución en los montos de compras de activos incrementó la volatilidad en los mercados financieros internacionales. Las tasas de largo plazo de los bonos de las economías avanzadas y emergentes han subido, partiendo de un bajo nivel anterior. Los precios de las acciones han caído y el dólar se ha fortalecido. La reacción de los mercados ha sido más acentuada en los países emergentes. (iii) El comportamiento de los precios de los principales productos básicos que exporta Colombia sugiere que en el presente año el nivel de términos de intercambio será favorable pero inferior al promedio observado en 2012. (iv) En el contexto interno, el crecimiento del PIB del primer trimestre de 2013 (2,8%) resultó igual al estimado por el equipo técnico. La demanda interna se desaceleró, hecho explicado por un menor crecimiento del consumo que fue parcialmente compensado por un mayor dinamismo de la inversión en construcción de edificaciones y obras civiles. Para el segundo trimestre, las cifras de industria y comercio, de confianza del consumidor, así como las de producción de petróleo y café sugieren un crecimiento superior al observado en los tres primeros meses del año. (v) En materia de crédito y costos de financiamiento, la volatilidad de los mercados internacionales se ha reflejado en un incremento en las tasas de interés de los títulos de deuda pública y de los bonos privados. El crecimiento del crédito bancario, en moneda nacional y extranjera, da señales de estabilizarse a una tasa mayor que el crecimiento del PIB nominal. Las tasas de interés del crédito siguen descendiendo y en términos reales se encuentran por debajo de sus promedios históricos (exceptuando tarjetas de crédito). (vi) En general es de esperar que el crecimiento económico colombiano aumente a lo largo del año en la medida en que el gasto agregado reaccione a las medidas previas de política monetaria y a los programas que viene ejecutando el gobierno nacional. El equipo técnico del Banco mantiene su pronóstico de crecimiento del PIB para 2013 entre 3,0% y 5,0%, con 4,3% como cifra más probable. (vii) En mayo la inflación anual (2%) fue similar a la de abril. El promedio de inflaciones básicas descendió y se situó en 2,4%. El promedio de las expectativas de inflación de los analistas y de las que resultan de los títulos de deuda pública es similar a la meta de inflación de 3%. En resumen, el crecimiento de la economía colombiana en el primer trimestre fue bajo e igual a lo proyectado. Es de esperar que las acciones de política monetaria y fiscal realizadas hasta el momento contribuyan a que en el transcurso del año el producto se sitúe cerca de su nivel potencial. De igual manera, la probabilidad de que la inflación culmine en el rango meta es elevada. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA De acuerdo con la evaluación del balance de riesgos la Junta Directiva acordó por unanimidad mantener inalterada la tasa de interés de intervención en 3,25%. La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo del comportamiento y proyecciones de la actividad económica e inflación en el país, de los mercados de activos y la situación internacional. Finalmente, reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible. Bogotá, D. C.
2013-07-01
- Minutas de la reunión de la JDBR del 26 de julio de 2013 El 26 de Julio de 2013 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas Santamaria, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores doctores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Enrique Meisel Roca, César Vallejo Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo. En las minutas se presenta un resumen de la situación inflacionaria y del crecimiento económico, y sus perspectivas, elaborada por el equipo técnico (sección 1) y se reseñan las principales discusiones y opciones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2). 1. SITUACION INFLACIONARIA Y DE CRECIMIENTO ECONÓMICO a. Desarrollos recientes de la inflación En junio, la inflación anual al consumidor se situó en 2,16%, 16 puntos base (pb) por encima del registro de mayo. El aumento de la inflación total en junio se concentró en el IPC de regulados, pues los aumentos en los precios de las otras subcanastas fueron moderados. La variación anual del IPC de regulados en junio fue 1,98% lo que representa un aumento de 73 pb frente al registro del mes anterior. El mayor incremento se originó en las tarifas de energía eléctrica, principalmente en Bogotá. Hay que anotar que en los últimos tres meses los precios de esta subcanasta han aumentado de manera importante. Sin embargo, los niveles continúan siendo bajos comparados con los otros componentes del IPC y con el registro histórico de la serie. Los otros dos componentes del IPC sin alimentos – transables y no transables – variaron poco en el último mes. En transables (sin alimentos ni regulados), la variación anual aumentó a 1,1%, 4 pb más que el registro de mayo, como viene sucediendo desde abril. Esto podría estar relacionado con la depreciación del peso en los últimos meses. Por otra parte, la variación anual del IPC de no transables (sin alimentos ni regulados) aumentó a 3,78%, 4 pb más que el registro de mayo, reflejando escasas presiones de demanda. Arriendos, su principal componente, se situó cerca de 3,7%, levemente por debajo del registro de mayo. Este ítem ha mostrado un descenso lento desde el cuarto trimestre del año pasado. Respecto al IPC de alimentos, en junio se mantuvo un bajo registro en la variación anual (1,34%), tal como se ha observado en lo transcurrido del año. Se observó una ligera disminución de la variación anual del IPC de alimentos perecederos (2,4% en junio frente a 2,6% en mayo) mientras que la del IPC de procesados (-0,11% en junio) se mantuvo estable frente al mes anterior. Por su parte, la variación anual del IPC de comidas fuera del hogar (3,5%) aumentó en junio 20 pb respecto al mes anterior. En junio el promedio de los cuatro indicadores de inflación básica monitoreados por el Banco aumentó levemente situándose en 2,52%, 8 pb más que el registro de abril. Los cuatro indicadores se mantienen entre 2% y 3% desde enero de este año. El IPP mantuvo una variación anual negativa en junio (-0,2%) aunque aumentó frente al mes pasado (-2,1%). Esta tendencia obedece en parte a la trasmisión de la depreciación nominal al cambio anual del IPP de importados que está en terreno positivo (0,6%) por primera vez en varios meses. El componente local también aumentó. En junio las expectativas de inflación aumentaron levemente, pero siguieron en niveles compatibles con el cumplimiento de la meta. Las medidas obtenidas a partir de la encuesta mensual del Banco de la República realizada a analistas del mercado financiero están cerca de 2,6% para diciembre de este año (7 pb más que hace un mes) y en 3,1% para junio de 2014 (8 pb más que hace un mes). Por su parte, las expectativas de inflación derivadas de la curva de rendimientos de los TES variaron menos y se mantuvieron en un rango entre 2,3% y 3,1% para varios horizontes. b. Crecimiento Los indicadores de actividad económica del segundo trimestre sugieren que el PIB crecería a una mayor tasa que la registrada en los primeros tres meses del año. Una parte importante de esta aceleración se debe al mayor número de días hábiles en abril y a la superación de algunos choques de oferta que se presentaron entre febrero y marzo de este año. Por componentes del gasto se espera que el consumo y las exportaciones sean más dinámicas, mientras que la inversión podría desacelerarse. El consumo de los hogares tendría un mejor desempeño que el observado en el primer trimestre. Esto se desprende de lo observado en materia de confianza del consumidor y en las ventas minoristas. En el primer caso, en junio el índice de confianza de los consumidores (ICC) publicado por Fedesarrollo repuntó de manera importante, ubicándose en niveles similares a los registrados a finales de 2011 y por encima del nivel promedio para 2012 e histórico desde 2001. Por otro lado, según los últimos resultados de la Muestra Mensual de Comercio al por Menor (MMCM) publicada por el DANE, en mayo las ventas minoristas crecieron 6,5% en términos anuales frente al mismo periodo de 2012. Al descontar el segmento de ventas de vehículos automotores y motocicletas (que crecieron 5,3%) el agregado resultante se expandió 6,8%, dato mayor que el 3,4% registrado para el mes de abril. En la formación bruta de capital se espera un menor dinamismo durante el segundo trimestre. En lo que respecta a la inversión, distinta de construcción de edificaciones y de obras civiles, se prevé un débil desempeño. Lo anterior se desprende de las cifras de importaciones de bienes de capital (en especial las de equipo de transporte) que registraron caídas. Adicionalmente, la Encuesta Mensual de Expectativas Económicas (EMEE) del Banco de la República no registra alguna recuperación en la intención de los empresarios de invertir en capital fijo. Para la inversión en construcción de edificaciones y obras civiles se esperan unas tasas de crecimiento menores que las observadas durante el primer trimestre. El nivel de las exportaciones totales en dólares en abril y mayo se recuperó aunque continúa presentando crecimientos anuales negativos (-2,5% en mayo). Esto se explicó por mayores cantidades exportables de algunos bienes básicos (principalmente petróleo y derivados, ferroníquel y café). Se destaca el caso de las exportaciones de bienes industriales y otros, que registró un crecimiento en términos anuales de 6,7%, principalmente por las mayores ventas externas de vehículos (256%), carne (202%) y productos químicos (5,4%). Para lo que resta del año se prevé que las exportaciones crezcan a mayores tasas luego de la superación de los distintos choques de oferta que ocurrieron entre enero y marzo de este año. En mayo, las importaciones CIF en dólares disminuyeron 6,6% respecto al mismo mes de 2012. Este comportamiento se explica por las caídas de 12,8% en las importaciones de bienes de capital y de 5,7% en las de bienes intermedios. Por su parte, las compras externas de bienes de consumo aumentaron 2,7%. El componente tendencial de la serie de importaciones totales muestra aumentos graduales desde hace varios meses aunque con tasas de crecimiento anuales muy bajas. En lo que respecta a las distintas ramas de actividad económica, se espera que la industria continúe contrayéndose aunque de forma menos acentuada, mientras que la minería, la construcción, la agricultura y el comercio presentarían un buen comportamiento. Los indicadores disponibles sugieren que el PIB de la industria retrocedería en términos anuales en el segundo trimestre. En mayo, el índice de producción industrial sin trilla de café se contrajo 3,1%; en niveles se aprecia un estancamiento y el componente tendencial dejó de caer. Otros indicadores del sector como el indicador de pedidos y el de expectativas a tres meses de empresarios de la encuesta de Fedesarrollo, así como la demanda de energía eléctrica industrial, señalan un comportamiento débil en el sector. No obstante, el índice de confianza de los industriales se recuperó levemente y su componente tendencial muestra un aumento por primera vez desde hace un año. En lo que respecta a la minería, se espera un crecimiento mayor para el segundo trimestre gracias al aumento que se ha observado en la producción de carbón y petróleo, pese a que en este último caso hubo una caída en el mes de junio debido a choques de oferta. La producción de petróleo en lo corrido del año a junio está por encima del millón de barriles y las exportaciones de carbón han mostrado un notable desempeño en el bimestre abril-mayo, luego de los problemas que enfrentaron Cerrejón y Drummond en los meses de febrero y marzo. En el sector de la construcción, los indicadores disponibles sugieren que el buen desempeño observado en el primer trimestre continuaría en los siguientes tres meses. En particular, la producción de cemento creció anualmente 1,0% en mayo y 2,6% en promedio entre abril y mayo, luego de haber registrado una caída anual entre enero y marzo de 6,4% en promedio. Las licencias de construcción crecieron 28,9% en el bimestre abril-mayo, manteniendo la fuerte recuperación que se apreció en los primeros tres meses del año (31,9%). Por su parte en el sector agropecuario, la recuperación de la producción de café, que creció alrededor de 40% anual en el segundo trimestre de acuerdo a la Federación de cafeteros, así como el aumento en el sacrificio de ganado en los meses de abril y mayo (alrededor de 5%), permiten esperar que el sector revierta los bajos registros de crecimientos de la segunda mitad de 2012. Todo lo anterior permite prever que el crecimiento de la economía colombiana en el segundo trimestre de 2013 se ubicaría alrededor de 3,4% como cifra más probable dentro de un intervalo entre 2,5% y 4,0%, cuya amplitud está determinada por la incertidumbre del comportamiento de la inversión en obras civiles y el consumo público. Para todo 2013 se revisó levemente a la baja el pronóstico de crecimiento frente a lo reportado en el pasado Informe sobre inflación. El nuevo rango de pronóstico se ubica entre 3,0% y 4,5%, con 4,0% como cifra más probable. Esta revisión se explica en parte por el comportamiento observado de la economía mundial y el gasto privado, el cual ha sido más débil de lo previsto. c. Variables Financieras El crédito bancario (M/N y M/E) en junio registró una tasa anual de crecimiento de 14,06%, similar a lo observado en los últimos meses. Entre mayo y junio, el crecimiento anual de la cartera en moneda nacional pasó de 12,67% a 12,86%, mientras que el de moneda extranjera lo hizo de 34,53% a 33,23%. Por destinos, la variación anual del crédito de consumo en junio fue 13,66% frente a 14,40% en mayo. EL crecimiento anual de la cartera hipotecaria, por el contrario, se incrementó de 13,73% en mayo a 13,95% en junio. Por otra parte, la cartera comercial, continúa consolidando la recuperación iniciada en marzo, con un incremento mensual de 46 pb en la tasa anual de crecimiento en junio (13,96%). En junio, las tasas de interés de los préstamos desembolsados por los establecimientos de crédito continuaron descendiendo para todas las modalidades, con excepción de las aplicadas para tarjeta de crédito y microcrédito. Así, desde que se iniciaron los recortes en la tasa de política en julio de 2012, se han acumulado hasta junio de 2013, reducciones en las tasas de interés de: -251 pb para los créditos preferenciales, -228 pb para los hipotecarios y -203 pb para los comerciales ordinarios. Variaciones a las que en menor cuantía siguieron: -187 pb para los créditos de construcción de vivienda, -179 pb para los de consumo, -156 pb para los de microcrédito, -144 pb para los de tesorería y -101 pb para las tarjetas de crédito. La magnitud del descenso de las tasas de interés reales ha sido inferior por el efecto de la menor tasa de inflación. En términos reales la reducción desde julio de 2012 ha sido de: -219 pb para los créditos preferenciales, -195 pb para los créditos hipotecarios, -183 pb para los créditos comerciales ordinarios, -155 pb para los créditos para construcción, -146 pb para créditos de consumo, y -119 pb para microcréditos. Los niveles de las tasas de interés reales a junio de los créditos de consumo (15,0%), hipotecarios (8,1%), preferenciales (4,2%), comercial ordinario (7,5%) y comercial de tesorería (4,5%), se situaron por debajo de sus promedios históricos calculados desde 2000. Por el contrario, para los créditos otorgados con tarjeta de crédito la tasa real de 26,1% fue mayor a su promedio. d. Contexto Externo Durante el primer semestre de 2013 la economía mundial continuó expandiéndose a un ritmo lento. La debilidad de la demanda mundial continuó afectando el comportamiento de la industria y del comercio global. Aunque en la zona del euro los indicadores de actividad, permanecieron en terreno contractivo, evidenciaron un menor deterioro que en los trimestres anteriores. Estos resultados estarían explicados en parte por un mayor dinamismo de la economía alemana. En Estados Unidos, las ventas al por menor, la industria y los servicios mostraron señales de crecimiento moderado. La desaceleración de algunos indicadores responde al mayor impacto del ajuste fiscal. En Japón se observa una recuperación de las exportaciones, ayudadas por un yen más débil, y una amplia recuperación del gasto de los consumidores, de la inversión de las grandes corporaciones y de las expectativas de los hogares y firmas. Los países emergentes fueron nuevamente el motor de la economía mundial. No obstante su crecimiento sería inferior al esperado en el Informe sobre Inflación de marzo. El menor impulso del sector externo junto con una moderación en la demanda interna parecen explicar la desaceleración en sus tasas de expansión. En China se ha observado una desaceleración de la producción mayor que la esperada que se puede explicar por un menor crecimiento del sector externo y algunos componentes de la demanda interna. El crecimiento anual durante el segundo trimestre (7,5%), fue menor al observado en los primeros tres meses del año (7,7%). En América Latina los indicadores de actividad real evidencian que en el segundo trimestre el crecimiento ha seguido moderándose frente a lo observado en 2011-2012. Las exportaciones y la actividad industrial de la región no muestran un comportamiento favorable. La debilidad de la demanda global junto con algunas condiciones de oferta favorables mantuvieron los precios internacionales de los principales bienes básicos en niveles inferiores a los observados en 2012. En este contexto, y a pesar del incremento en las tensiones geopolíticas que han llevado a un aumento reciente en el precio del petróleo, la cotización para la referencia Brent aún permanece por debajo del promedio de 2012 y ligeramente por encima de lo estimado en el escenario central del Informe sobre Inflación de marzo. Los precios de otros bienes básicos exportados por Colombia siguieron reduciéndose en los últimos meses y se ubican por debajo de lo estimado en el Informe sobre Inflación anterior. Esta situación estaría explicando el comportamiento reciente de los términos de intercambio del país, cuya caída ha sido compensada de manera parcial por las menores cotizaciones internacionales de algunos bienes importados, como los alimentos. Los niveles actuales de los precios de estos últimos bienes son inferiores a los de 2012 pese a que en las últimas semanas han registrado un ligero aumento. La inflación en las principales economías desarrolladas continúa siendo baja, lo que facilita las posturas monetarias expansivas. Para el caso de los países emergentes la situación es similar, con algunas excepciones como Brasil, India e Indonesia países en los que los bancos centrales se han visto en la necesidad de incrementar sus tasas de intervención ante la rápida subida de sus niveles de precios. En los mercados financieros internacionales, las tasas de interés que habían subido en meses anteriores como consecuencia del anuncio del posible retiro del programa de estímulo de la FED, han presentado descensos parciales en las últimas semanas. Algo similar ha sucedido con los indicadores de volatilidad, los indicadores de riesgo y los tipos de cambio. En resumen, se anticipa para este año un crecimiento de los socios comerciales del país y un nivel de términos de intercambio menores a los de 2012. Se espera que la demanda mundial tenga una mejoría a partir de la segunda mitad de este año y durante 2014 aunque a un menor ritmo que el estimado en el último informe. Los costos de financiamiento externo se mantendrían en niveles bajos pero podrían aumentar gradualmente si se concreta el inicio del retiro gradual de las compras de activos por parte de la FED. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA La Junta Directiva tomó en consideración los siguientes aspectos relevantes: (i) El crecimiento económico mundial continúa siendo modesto y con diferencias importantes entre países. Mientras que la contracción europea persiste, en Japón se observa una rápida recuperación de la actividad productiva. En los Estados Unidos, el fortalecimiento de la demanda privada está siendo parcialmente compensado por la consolidación fiscal y ha llevado a una leve disminución en la proyección de crecimiento. La expansión de buena parte de las economías emergentes de Asia y América Latina continúa siendo robusta aunque menor a la prevista. En consecuencia, se espera para este año un crecimiento de nuestros socios comerciales y un nivel de términos de intercambio menores a los de 2012. (ii) El fortalecimiento del dólar y el incremento en las tasas de interés externas de largo plazo observadas en mayo y junio, se revirtieron parcialmente en julio. Lo mismo se observó en las primas de riesgo y en las tasas de interés de los papeles de deuda pública de la región. (iii) En el segundo trimestre de 2013, la mayor producción de petróleo, ferroníquel y café y el aumento en la tasa de crecimiento de las ventas externas industriales en dólares sugieren un mejor desempeño de las exportaciones. El incremento en la confianza del consumidor y el mayor ritmo de aumento del comercio al por menor también indican alguna aceleración del consumo privado. Por el lado de la oferta, la aceleración de la economía se origina principalmente en minería, agricultura y comercio. La industria se contraería nuevamente, aunque de forma menos acentuada. Con lo anterior, el equipo técnico estima que el crecimiento del segundo trimestre se situará entre 2,5% y 4,0%, con 3,4% como cifra más probable. (iv) El equipo técnico del Banco redujo su pronóstico de crecimiento más probable para 2013 desde 4,3% a 4%, con un rango entre 3,0% y 4,5%. Dicha revisión se explica en parte por el comportamiento observado de la economía mundial y el gasto privado, el cual ha sido más débil de lo previsto. Es de esperar que el crecimiento económico colombiano aumente a lo largo del año en la medida en que el gasto agregado reaccione a las medidas previas de política monetaria y a los programas que viene ejecutando el gobierno nacional. (v) El crecimiento del crédito bancario, en moneda nacional y extranjera, da señales de estabilizarse a una tasa mayor que el crecimiento del PIB nominal. Las tasas de interés del crédito siguen descendiendo y en términos reales se encuentran por debajo de sus promedios históricos (exceptuando tarjetas de crédito). (vi) En junio la inflación anual (2,16%) y el promedio de las inflaciones básicas (2.5%) fueron levemente superiores a las del mes anterior. El promedio de las expectativas de inflación de los analistas y las calculadas a partir de las tasas de los títulos de deuda pública es similar a la meta de inflación de 3%. En resumen, los indicadores de actividad económica y sus proyecciones muestran un nivel de producto inferior al que se puede generar con la capacidad instalada. Es de esperar que las acciones de política monetaria y fiscal realizadas hasta el momento contribuyan a que en el transcurso del año el producto crezca a un ritmo mayor. La inflación es baja y sus expectativas se encuentran ancladas en la meta de largo plazo (3%). 3. DECISIÓN DE POLÍTICA De acuerdo con la evaluación del balance de riesgos la Junta Directiva acordó por unanimidad mantener inalterada la tasa de interés de intervención en 3,25%. La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo del comportamiento y proyecciones de la actividad económica e inflación en el país, de los mercados de activos y la situación internacional. Finalmente, reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible. Bogotá, D. C.
2013-08-01
- Minutas de la reunión de la JDBR del 30 de agosto de 2013 El 30 de Agosto de 2013 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores doctores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Enrique Meisel Roca, César Vallejo Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo. En las minutas se presenta un resumen de la situación inflacionaria y del crecimiento económico, y sus perspectivas, elaborada por el equipo técnico (sección 1) y se reseñan las principales discusiones y opciones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2). 1. SITUACION INFLACIONARIA Y DE CRECIMIENTO ECONÓMICO a. Desarrollos recientes de la inflación En julio la inflación anual al consumidor fue 2,22%, 6 pb más que el registro del mes anterior. En los primeros siete meses, el cambio acumulado en el IPC ascendió a 1,77%, inferior a la variación acumulada en igual lapso de 2012 (1,98%). La variación anual del IPC de alimentos en julio fue de 1,6%, 30 pb más respecto a junio. El aumento se concentró en la canasta de alimentos perecederos (4,0% frente a 2,4% en junio), cuya variación anual ha venido acelerándose desde una tasa negativa en febrero. Para los alimentos procesados, el cambio anual en los precios (0,06%) se mantuvo cercano a cero por tercer mes consecutivo después de haber descendido entre mediados del año pasado y comienzos del actual. En este caso, los descensos en los precios internacionales de productos como el trigo, el maíz y la soya habrían contrarrestado el efecto de la depreciación nominal reciente del peso. Por otra parte, en las comidas fuera del hogar la variación anual se mantuvo estable en 3,5%. Dentro del IPC sin alimentos ni regulados, en julio se registraron aumentos en las variaciones anuales de transables y no transables. En el caso del primero, el aumento (a 1,3% desde 1,1% en junio) se suma a los observados en meses anteriores y estaría en parte relacionado con la depreciación del peso registrada en lo corrido del año. Respecto a los no transables, la variación anual (3,9%) significó un aumento de 12 pb frente al mes anterior. En el caso de arriendos, el ajuste anual aumentó 7 pb respecto a junio, situándose en 3,8%. En julio se presentó un descenso significativo (de 61 pb) en la variación anual de la canasta de regulados (a 1,4%) después de tres meses consecutivos de crecimiento. Esta caída se concentró en las tarifas de energía principalmente y en menor medida en el transporte público. Según el DANE la energía eléctrica tuvo un descenso mensual de 5,5%. El promedio de los cuatro indicadores de inflación básica monitoreados por el Banco de la República, se situó en 2,54% en julio, valor similar al del mes anterior (2,52%). Este indicador ha mostrado una gran estabilidad en torno a 2,5% desde febrero de este año. La variación anual del IPP se mantuvo en terreno negativo en julio (-0,03%), aunque con una tendencia ascendente que inició en abril. Tanto el componente local como el importado aumentaron frente al mes pasado (19 pb en ambos casos). Las expectativas de inflación no registraron cambios importantes en el último mes. Según la encuesta mensual del Banco a los analistas del mercado financiero, la inflación esperada a diciembre de este año se mantuvo en 2,6% mientras que la de 12 meses se volvió a situar en 3,1%. Por su parte, las expectativas de inflación derivadas de la curva de rendimiento de los TES a horizontes de 2, 3 y 5 años, se mantienen entre 2,4% y 3,0%, niveles similares a los observados en junio. b. Crecimiento La última información sugiere que el consumo de los hogares se habría expandido a una mayor tasa durante el segundo trimestre que en el primero. Tanto los buenos niveles en el indicador de confianza de los consumidores, que entre abril y junio se situó en niveles similares a los registrados a finales de 2011 y por encima del nivel promedio para 2012, como la mejor dinámica del comercio justifican este pronóstico. En referencia a este último, según la información más reciente reportada por el DANE, en junio las ventas del comercio minorista aumentaron 4,1% anual frente al mismo mes de 2012. Para el total del segundo trimestre el índice de ventas del comercio creció anualmente 4,9%, cifra mayor que la registrada para el agregado de los primeros tres meses de 2013 (0,8%). Otro indicador que sugiere la aceleración del consumo es el balance de ventas totales de la Encuesta Mensual de Expectativas Económicas (EMEE) del Banco de la República que se ubicó en niveles superiores al promedio del primer trimestre. Para la inversión, las caídas en las importaciones de bienes de capital y en el balance de las expectativas de inversión de corto y mediano plazos de la EMEE siguen indicando que aquella distinta a la destinada a construcción de edificaciones y de obras civiles continuaría con un desempeño mediocre. En lo referente a las exportaciones, durante el primer semestre del año las totales en dólares cayeron 4% respecto al mismo período del año anterior. Dicho comportamiento se explica, principalmente, por la disminución de 8% en las exportaciones de productos de origen minero, dada la caída de 29% en las de carbón y de 12,6% en las de oro. Las exportaciones de bienes agrícolas también cayeron, aunque en menor magnitud (-2%). Por su parte, las exportaciones de bienes industriales y otros registraron un crecimiento anual de 9%. Durante el primer semestre de 2013, el valor total en dólares de las importaciones CIF cayó 1% anual, dadas las menores compras de materias primas (-2,7%) y de bienes de capital (-1,7%). Por su parte, las importaciones de bienes de consumo crecieron en el período 4,2%. En lo que respecta a las distintas ramas de actividad económica, se sigue esperando que la industria continúe contrayéndose aunque de forma menos acentuada, mientras que la minería, la construcción, la agricultura y el comercio presentarían un buen comportamiento. El índice de producción industrial sin trilla de café cayó en términos anuales 5,5% en junio. Con este dato, el segundo trimestre se contrajo 0,3% (luego de -6,6% en los tres primeros meses del año), mientras que el año corrido se ubicó en -3,4%. En el sector de la construcción la información para el segundo trimestre sugiere que la expansión se mantendría. La producción de cemento mostró un crecimiento anual de 0,71% mientras que los despachos lo hicieron en 4,3%. Por su parte, aunque las licencias de construcción registraron una contracción en junio, el acumulado de doce meses continúa creciendo alrededor de 7,6%. Por último, en el sector agropecuario, la recuperación de la producción de café, que creció alrededor de 40% anual en el segundo trimestre, así como la expansión registrada en el sacrificio de ganado (3,3%), permiten esperar que el sector registre una aceleración frente al primer trimestre. Dado todo lo anterior, no se realizaron revisiones al rango de pronóstico de crecimiento del PIB para el segundo trimestre del equipo técnico expuesto en el anterior Informe sobre Inflación (entre 2,5% y 4,0%, con cifra más probable en 3,4%). Es importante resaltar nuevamente que los datos aún no publicados de obras civiles y de consumo público presentan una alta volatilidad por lo que se justifica un rango de pronóstico amplio. Para el tercer trimestre de 2013 la información disponible es escasa pero podría sugerir que el consumo privado mantendría o incluso mejoraría el dinamismo alcanzado durante el segundo trimestre. Por un lado, en julio la confianza de los consumidores fue menor que la reportada para el mes de junio, aunque se ubicó por encima de los demás registros de lo corrido de 2013 y del promedio desde 2001. Al desagregar por componentes, se observó que la percepción sobre las condiciones económicas actuales de los hogares sigue en un nivel relativamente alto y que las expectativas de mediano y largo plazos de los consumidores siguen estables. Por el lado de la oferta, los indicadores líderes, como los de pedidos y los de existencias de la encuesta de Fedesarrollo señalan alguna mejoría, mientras que las expectativas de producción de los industriales para los próximos tres meses (EOE) se mantuvieron en niveles similares a los de meses anteriores. La confianza de los empresarios de la manufactura también mostró una mejoría. La demanda de energía total en julio aumentó 3,4% anualmente. La demanda de energía no regulada industrial, que está altamente correlacionada con la industria, creció 1,1% anualmente (frente -1,2% de junio), lo que podría sugerir que el crecimiento del sector se contraería en julio menos que en meses anteriores. La producción de petróleo superó el millón de barriles diarios (1.002 Mbd) en julio, frente a los 974.000 del mes de junio. En lo corrido del año, la producción ha crecido 7,2%. De mantenerse este comportamiento favorable, esta sub-rama reportaría una aceleración frente a 2012. Dado todo lo anterior, el equipo técnico mantiene el pronóstico de crecimiento para todo 2013 entre 3,0% y 4,5% con 4% como cifra más probable. Se espera que el crecimiento económico del país aumente a lo largo del año en la medida en que el gasto agregado reaccione a las medidas previas de política monetaria y a los programas que viene ejecutando el gobierno nacional. c. Variables Financieras El crédito bancario (M/N y M/E) en julio registró una tasa anual de crecimiento de 13,71%, ligeramente inferior al observado el mes pasado (14,05%). El crecimiento anual de la cartera en moneda nacional se desaceleró de 12,85% a 12,45% entre junio y julio mientras que la de moneda extranjera se aceleró pasando de 35,56% a 37,07% en el mismo periodo. Por destinos, la cartera a los hogares se desaceleró, con una tasa anual a julio de 13,27%, inferior 44 pb al mes anterior. Esto se explicó principalmente por la moderación de la variación del crédito de consumo (de 13,66% en junio a 12,90% en julio) pues la cartera para compra de vivienda se aceleró con una tasa de crecimiento anual de 14,28% frente a 13,86% el mes pasado. En cuanto a la cartera hacia las empresas, la tasa de crecimiento anual disminuyó 27 pb entre junio (13,95%) y julio (13,70%). En lo referente a las tasas de interés de los préstamos desembolsados por los establecimientos de crédito, desde el inicio los recortes en la tasa de política en julio de 2012, se han acumulado reducciones en las tasas de interés de 230 pb para los créditos hipotecarios; 209 pb para los de construcción y; 200 pb para los de consumo. Los niveles de las tasas de interés reales a julio de los créditos de consumo, hipotecarios, preferenciales, comercial ordinario y comercial de tesorería se situaron por debajo de sus promedios históricos calculados desde 2000. Por el contrario, para los créditos otorgados con tarjeta de crédito la tasa real fue mayor a su promedio. La magnitud del descenso de las tasas de interés reales ha sido inferior por efecto de la menor tasa de inflación, con rebajas durante el período de estímulo monetario de: 194 pb en créditos hipotecarios, 174 pb en créditos para construcción y 163 pb en créditos de consumo. d. Contexto Externo En el segundo trimestre del año, el crecimiento del PIB de la zona del euro estuvo por encima de lo esperado por el equipo técnico. El mayor dinamismo de Alemania y Francia, junto con un menor deterioro de la actividad real en las economías de la periferia, explican este resultado. Los indicadores de confianza de empresarios y consumidores, al igual que los índices de opinión en los sectores de manufacturas y servicios mantienen una tendencia favorable en lo corrido del tercer trimestre. De continuar este comportamiento, la recuperación de la actividad real debería proseguir en el segundo semestre del año. No obstante, el mercado laboral continúa débil y el crédito al sector privado se mantiene deprimido. En los Estados Unidos, de acuerdo con la más reciente revisión metodológica de las cuentas nacionales, el crecimiento del PIB para 2011 y 2012 fue superior al previamente estimado. En contraste, las cifras para el primer trimestre de 2013 evidenciaron una expansión de la actividad real menor que la inicialmente estimada. Para el segundo trimestre se presentó un mejor crecimiento que debería mantenerse en la segunda mitad del año si los efectos del ajuste fiscal no lo impiden. La información parcial para el tercer trimestre muestra que la economía ha seguido expandiéndose a un ritmo modesto. Las ventas al por menor y la confianza de los consumidores mantienen una tendencia favorable. Aunque la producción industrial se encuentra prácticamente estancada, los indicadores de opinión del sector apuntan a una recuperación en los próximos meses. Para el caso de las economías emergentes, con información al segundo trimestre, el crecimiento de los países de Asia fue modesto, con alguna desaceleración en Tailandia e Indonesia. Los datos de actividad económica para el tercer trimestre no muestran que el deterioro de la actividad económica en China haya continuado. Por su parte, en América Latina el crecimiento estaría siendo un poco inferior al esperado. Las cifras del PIB para el segundo trimestre muestran una fuerte desaceleración en México y alguna moderación en Chile. Para el caso de Perú y Venezuela el crecimiento se aceleró, aunque en este último país continúa en un nivel muy bajo. Por último, en Brasil, la economía ha seguido expandiéndose, aunque a un ritmo moderado. En relación con los precios internacionales de los bienes básicos, las tensiones geopolíticas de Medio Oriente y del Norte de África incrementaron las cotizaciones del petróleo, que se ubican en niveles superiores a los previstos por el equipo técnico. Para el caso de otros bienes exportados por Colombia, como el carbón y el café, se ha evidenciado una relativa estabilidad en las últimas semanas. El panorama es menos favorable para otros bienes básicos y minerales como el cobre, la plata y el oro, al igual que para algunos alimentos, en donde recientemente se han observado caídas. Es así como, gracias al comportamiento del precio del petróleo y el menor precio de los alimentos que el país importa, no se esperan reducciones adicionales en los términos de intercambio de Colombia a diferencia de lo que podría estar sucediendo en otros países de la región. En cuanto a los mercados financieros, las expectativas sobre el desmonte gradual del programa de estímulo de la FED continúan afectando las economías emergentes. En las últimas semanas los precios de los activos financieros de este grupo de países mantuvieron una tendencia a la baja, en un entorno de salidas de capital y de depreciaciones en sus tasas de cambio. La depreciación de la tasa de cambio ha sido mayor en aquellas economías emergentes con amplios déficits en la cuenta corriente financiados con deuda externa de corto plazo y con tasas de inflación elevadas. Por lo anterior, varios países emergentes han vendido reservas internacionales en cuantías importantes. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA La Junta Directiva tomó en consideración los siguientes aspectos relevantes: (i) El crecimiento económico de las economías avanzadas en el segundo trimestre del año fue un poco mejor que el esperado. En contraste, la expansión de buena parte de las economías emergentes de Asia y América Latina ha sido menor a la prevista. El crecimiento agregado de los socios comerciales de Colombia probablemente será menor que el valor observado en 2012. Algo similar se espera para los términos de intercambio, salvo si la tendencia alcista reciente de los precios del petróleo se mantuviera por un período prolongado. (ii) La volatilidad en los mercados financieros mundiales ha aumentado y ha afectado a algunas economías emergentes en particular. Las expectativas de una expansión monetaria menos amplia en los Estados Unidos incrementaron considerablemente las tasas de interés de los bonos soberanos, partiendo de niveles muy bajos. Las monedas de las economías emergentes se han devaluado frente al dólar, incluyendo el peso colombiano. Es posible que esta tendencia continúe y contribuya a un mejor desempeño de los sectores transables de la economía y, por ende, a un crecimiento más balanceado de la misma. (iii) En el país, la nueva información de comercio exterior y de demanda interna sugieren un crecimiento del PIB en el segundo trimestre de 2013 mayor que en el primero. El consumo de los hogares y la inversión en obras civiles y edificaciones probablemente crecieron a una tasa algo mayor. Por el lado de la oferta, la aceleración del crecimiento se daría en la minería, la agricultura y el comercio, mientras que la industria se contraería nuevamente aunque de forma menos acentuada. (iv) Con lo anterior, el equipo técnico mantuvo su pronóstico de crecimiento en el segundo trimestre en un rango de 2,5% a 4,0%, con 3,4% como cifra más probable. Para todo 2013 el intervalo se mantiene entre 3,0% y 4,5%, con 4,0% como dato más factible. Es de esperar que el crecimiento económico colombiano aumente a lo largo del año en la medida en que el gasto agregado reaccione a las medidas previas de política monetaria y a los programas que viene ejecutando el gobierno nacional. No obstante, los riesgos a la baja de estas proyecciones se han incrementado recientemente. (v) Las tasas de crecimiento del crédito bancario se han estabilizado en niveles superiores al crecimiento del PIB nominal. En términos reales, las tasas de interés de las distintas modalidades del crédito se encuentran por debajo de sus promedios históricos (exceptuando la de las tarjetas de crédito). Las condiciones financieras generales, sin embargo, pueden haberse ajustado como resultado del encarecimiento del financiamiento externo. (vi) En julio la inflación anual (2,2%) resultó algo menor a lo estimado por el equipo técnico y el promedio de inflaciones básicas se mantuvo relativamente estable en 2,5%. El promedio de las expectativas de inflación de los analistas y las calculadas a partir de las tasas de los títulos de deuda pública es similar a la meta de inflación de 3%. La mayoría de los miembros consideró conveniente mantener la tasa de intervención en 3,25%, teniendo especialmente en cuenta los siguientes factores: (i) Hay información que sugiere una recuperación de la demanda agregada durante lo que resta del año, en gran parte debido a la actual postura expansionista de la política monetaria y a los programas que viene ejecutando el gobierno nacional. Así lo indica el comportamiento de variables de producción, como ventas al por menor y despachos de cemento; los resultados de las encuestas de expectativas de consumidores y empresarios; y los principales indicadores del mercado laboral; (ii) Las señales de la economía mundial son mixtas. Mientras las economías desarrolladas muestran signos de recuperación, el crecimiento de algunas economías emergentes ha sido menor que el esperado; (iii) Los niveles de los términos de intercambio para Colombia siguen siendo altos; (iv) El balance de riesgos debe tener en cuenta el efecto de una expansión monetaria adicional sobre la vulnerabilidad de la economía a choques negativos, en especial en el actual contexto de futura normalización de las condiciones financieras externas; (v) En el siguiente mes se tendrá información relevante sobre el crecimiento de la economía colombiana en el segundo trimestre y sobre decisiones de política monetaria en los Estados Unidos. Otros miembros consideraron que debía reducirse la tasa de interés de intervención teniendo en cuenta: (i) los riesgos a la baja de las proyecciones de crecimiento económico se han incrementado. El crecimiento agregado de los socios comerciales de Colombia probablemente será menor que el valor observado en 2012 y algo similar se espera para los términos de intercambio, mientras que el comportamiento reciente de la demanda interna no permite prever un cierre de la brecha del producto en el horizonte de política y; (ii) Las proyecciones y las expectativas de inflación no muestran que existan riesgos importantes de que esta sobrepase la meta del 3%. En estas condiciones es posible y deseable llevar una política monetaria más expansiva que reduzca la brecha esperada del producto en un contexto en que no se presentan riesgos inflacionarios. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA Hecha la evaluación del balance de riesgos la Junta Directiva por mayoría consideró apropiado mantenerla en 3,25%. La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo del comportamiento y proyecciones de la actividad económica e inflación en el país, de los mercados de activos y la situación internacional. Finalmente, reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible.
2013-09-01
- Minutas de la reunión de la JDBR del 27 de Septiembre de 2013 El 27 de Septiembre de 2013 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores doctores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Enrique Meisel Roca, César Vallejo Mejía, Juan Pablo Zárate Perdomo. En las minutas se presenta un resumen de la situación inflacionaria y del crecimiento económico, y sus perspectivas, elaborada por el equipo técnico (sección 1) y se reseñan las principales discusiones y opciones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2). 1. SITUACION INFLACIONARIA Y DE CRECIMIENTO ECONÓMICO a. Desarrollos recientes de la inflación En agosto la inflación anual al consumidor fue 2,27%, 5 puntos base (pb) más que el registro del mes anterior. En los primeros ocho meses, el cambio acumulado en el IPC ascendió a 1,86%, inferior a la variación acumulada en igual lapso de 2012 (2,03%). La variación anual del IPC de alimentos en agosto fue de 1,8%, 13 pb más respecto a julio. El aumento se concentró en la canasta de alimentos perecederos (5,5% frente a 4,0% en julio), lo que puede ser explicado por una disminución del abastecimiento de estos productos por los bloqueos experimentados durante este mes. La variación de los precios de las comidas fuera del hogar aumentó ligeramente de 3,5% en julio a 3,6% en agosto. Para los alimentos procesados, el cambio anual en los precios (-0,1%) disminuyó frente a julio (0,1%). Dentro del IPC sin alimentos, en agosto la variación anual (2,45%) no cambió frente a lo observado el mes anterior. En esta canasta se registraron aumentos en las variaciones anuales de los precios de los transables y de los de regulados. En el caso del primero, el aumento (de 1,3% a 1,4% en agosto) se suma a los observados en meses anteriores y estaría en parte relacionado con la depreciación del peso registrada en lo corrido del año. Respecto a los regulados, la variación anual (1,5%) significó un aumento de 9 pb frente al mes anterior. Dicha aceleración se concentró en las tarifas del transporte público que pasaron de crecer anualmente 1,7% en julio a 2,5% en agosto (el impulso se presentó en parte por un efecto de base de comparación estadística en la variación anual, la cual recogió la caída en las tarifas en Transmilenio decretadas en agosto de 2012). Los otros dos componentes de regulados, servicios públicos y combustibles cayeron. Durante el mes se presentó un descenso de 12 pb en la variación anual de la canasta de no transables sin alimentos ni regulados (3,8%), nivel similar al de junio. En julio se había presentado una aceleración de 12 pb. Esta volatilidad se explica esencialmente por el rubro diversión, cultura y esparcimiento (específicamente boletas de fútbol). Por su parte, el ajuste anual de los arriendos (3,7%) se mantuvo estable. El promedio de los cuatro indicadores de inflación básica monitoreados por el Banco de la República se situó en agosto en 2,54%, valor igual al del mes anterior. Este indicador ha mostrado una gran estabilidad en torno a 2,5% desde febrero de este año. La variación anual del IPP se mantuvo en terreno negativo en agosto (-0,5%). Tanto el componente local como el importado disminuyeron frente al mes pasado (52 pb en el primer caso y 33 pb en el segundo). Las expectativas de inflación no registraron cambios significativos en el último mes. Según la encuesta mensual del Banco a los analistas del mercado financiero, la inflación esperada a diciembre de este año se mantuvo en 2,6% mientras que la de 12 meses se situó en 3,0%, 7 pb menos que el mes anterior. Por su parte, las expectativas de inflación derivadas de la curva de rendimiento de los TES a horizontes de 2, 3 y 5 años, se mantienen entre 2,3% y 2,8%, niveles ligeramente inferiores a los observados el mes pasado. b. Crecimiento Durante el segundo trimestre de 2013 la economía colombiana creció 4,2% frente al mismo periodo de 2012. Este registro fue superior al de los primeros tres meses del año (2,7%). Aunque parte de esta aceleración se esperaba, el resultado fue superior al rango proyectado por el equipo técnico (2,5% a 4,0%). Por componentes del gasto, el mayor ritmo de crecimiento se originó en el consumo privado (4,4% anual), en el público (5,0% anual) y en las exportaciones netas. La contribución de estas últimas al crecimiento del PIB fue positiva, hecho que no se registraba desde el cuarto trimestre de 2009. Esto obedeció a la importante aceleración observada en las exportaciones, que pasaron de caer 2,7% anual en los primeros tres meses del año a crecer 7,6%; mientras que las importaciones lo hicieron a un menor ritmo (de -0,2% a 1,3% respectivamente). Por ramas de actividad, con excepción de la construcción, todos los sectores económicos presentaron una mayor tasa de crecimiento anual en el segundo trimestre que en el anterior. Los sectores que más crecieron fueron la agricultura (7,6%) y la construcción (6,4%). La minería mostró un desempeño favorable (4,3%) pero continúa por debajo del promedio de los últimos cinco años (10,3%). La industria, que incluye trilla de café, registró un crecimiento positivo (1,2%) luego de haberse contraído en los últimos tres trimestres. Para el tercer trimestre algunos indicadores de julio sugieren que la actividad económica sigue recuperándose. El consumo privado podría continuar registrando tasas de crecimiento similares a las observadas en la primera mitad del año. De acuerdo a la Muestra Mensual de Comercio al por Menor (MMCM) del DANE, las ventas minoristas de los establecimientos comerciales se expandieron 5,4% en términos anuales durante julio (frente al 5,2% registrado en el segundo trimestre del año). Al descontar el efecto de las ventas de vehículos automotores y motocicletas, las ventas crecieron 3,2% durante el mismo periodo y mantienen su tendencia creciente. Otro indicador que apunta a un buen dinamismo del consumo privado es la Encuesta Mensual de Expectativas Económicas (EMEE) del Banco de la República que en julio muestra que las condiciones y expectativas de ventas de los comerciantes fueron favorables pues el balance se ubicó por encima del promedio del segundo trimestre. Las variables del mercado laboral también brindan una perspectiva de un mejor desempeño del consumo privado durante el tercer trimestre. El empleo asalariado, que ha mostrado una alta correlación con el consumo privado, crece a buen ritmo (5,8% anual). Por último, el crédito de consumo ha mantenido un buen ritmo de expansión (12,9% anual en agosto) apunta también a un buen comportamiento de este gasto en el tercer trimestre. Para la inversión, con información a julio, la estabilidad en el balance de las expectativas de inversión de corto y mediano plazos de la EMEE indicaría que aquella distinta a la destinada a construcción de edificaciones y de obras civiles se podría estar estabilizando en el tercer trimestre. Además se espera que la inversión en edificaciones y obras civiles crezca a buen ritmo durante la segunda mitad del año, en parte por un efecto estadístico de una baja base de comparación en el 2012. Por otra parte, en el mes de julio se observó una disminución anual del valor de las exportaciones totales en dólares de 6,6%. La caída se explica, en gran parte, por la variación de -7,4% en las exportaciones de origen minero (carbón y oro principalmente). Asimismo, las ventas externas agrícolas registraron una caída anual de 8,8%. En el caso de las exportaciones de bienes industriales y otros, en julio se observó una reducción de 3,2%. Las importaciones totales en dólares en julio disminuyeron 1,6% anual. Estas menores compras externas se explican por la caída de 11,5% en las de bienes de capital, ya que las de bienes de consumo y materias primas crecieron 4,2% y 3,9%, respectivamente. La disminución en las importaciones de bienes de capital se asocia, en gran medida, a aquellas de equipo de transporte (- 35,1%), cuyo descenso se debe, principalmente, a la variación de -50,5% en equipo rodante de transporte. Por el lado de la oferta, los pocos indicadores disponibles para el tercer trimestre de 2013 sugieren una mejora del comercio, de la construcción y de la industria. En julio, en el caso del comercio, además del dinamismo de las ventas al por menor antes mencionado, se destaca la mejor percepción actual y a futuro que arroja la encuesta de Fedesarrollo. En el caso de la construcción, aunque en julio las licencias registraron una caída de 11,4%, el acumulado de doce meses continúa mostrando crecimientos (alrededor de 6,2%). Por su parte la producción y despachos de cemento crecieron en julio 6,2% y 11,5%, respectivamente. En el caso de la industria, en julio el crecimiento anual de la producción fue ligeramente positivo (0,2%). Se destaca que el componente tendencial de la serie por primera vez en el año tiene una pendiente ascendente. Cabe señalar que el crecimiento para el año corrido a julio todavía se ubica en terreno negativo (pasó de -3,4% en junio a -2,9% en julio). Otras variables relacionadas con el sector como los indicadores de pedidos, existencias, expectativas a tres meses de la producción y de confianza industrial de Fedesarrollo con información a julio confirman el cambio en la tendencia y muestran una mejoría respecto a los meses anteriores. Es así como la más reciente información aumentó la probabilidad de que el PIB crezca este año a una tasa similar a la de 2012. Los indicadores de actividad económica y sus proyecciones muestran que el nivel del producto que va convergiendo hacia su potencial. Es de esperar que las acciones de política monetaria y fiscal realizadas hasta el momento contribuyan a consolidar esta tendencia. c. Variables Financieras El crédito bancario (M/N y M/E) en agosto registró una tasa anual de crecimiento de 13,9%, ligeramente superior al observado el mes pasado (13,8%). El crecimiento anual de la cartera en moneda nacional se aceleró de 12,45% a 12,91% entre julio y agosto mientras que la de moneda extranjera se desaceleró de 37,07% a 30,66% en el mismo periodo. Por destinos, la cartera a los hogares presentó una tasa anual de crecimiento de 13,21%, inferior en 6 pb al mes anterior. Esto se explicó por la estabilidad en la variación del crédito de consumo (12,90% en julio y en agosto) y la leve desaceleración en la cartera para compra de vivienda de 14,28% en julio a 14,06% en agosto. En cuanto a la cartera hacia las empresas, la tasa de crecimiento anual aumentó 26 pb entre julio (13,79%) y agosto (14,05%). Las tasas de interés de los préstamos desembolsados por los establecimientos de crédito desde el inicio de los recortes en la tasa de política en julio de 2012, han acumulado reducciones de: -224 pb para los créditos hipotecarios, -210 pb para los de consumo y -194 pb en los créditos para construcción. Los niveles de las tasas de interés reales en agosto de los créditos de consumo, hipotecarios, preferenciales, comercial ordinario y comercial de tesorería, se sitúan por debajo de sus promedios históricos calculados desde 2000. Por el contrario, la tasa real de los créditos otorgados con tarjeta de crédito se encuentra por encima de su promedio. La magnitud del descenso de las tasas de interés reales desde el inicio de los recortes de la tasa de referencia ha sido inferior por efecto de la menor tasa de inflación, con rebajas durante este mismo período de: -190 pb en créditos hipotecarios, -174 pb en créditos de consumo y -160 pb en créditos para construcción. d. Contexto Externo La economía mundial continuó recuperándose, hecho explicado principalmente por los países desarrollados. En la zona del euro las cifras de actividad económica han sido mejores a lo esperado mientras que en Estados Unidos el crecimiento sigue siendo modesto. Como se proyectaba, las grandes economías emergentes registran un ritmo de actividad económica más débil que en 2012 y en algunas de ellas la actividad se ha desacelerado más de lo previsto. En la zona del euro, los indicadores recientes sobre actividad real y confianza, evidencian que la recuperación económica observada en la primera parte del año estaría continuando. Pese a ello, el ritmo de expansión de toda la región siendo muy bajo (-0,7% anual en el segundo trimestre de 2013) y la debilidad se mantiene pues los mercados laborales permanecen todavía vulnerables y el crédito aún no muestra señales de recuperación. En los Estados Unidos, la expansión de la economía continúa con un ritmo modesto. Durante el segundo trimestre la economía se expandió a una tasa anual de 1,6% lo que significó una leve aceleración frente a lo observado en el primer trimestre (1,3%). Las cifras recientes sobre ventas al por menor y actividad industrial mostraron un buen comportamiento. Por otra parte, aunque la tasa de desempleo sigue con una tendencia decreciente, la creación de empleo continúa baja. Los incrementos recientes en las tasas de interés de largo plazo se han transmitido a las tasas de interés de los créditos hipotecarios. Este fenómeno se ha dado al tiempo con una leve desaceleración en algunas cifras del mercado de vivienda (inicios y permisos de construcción, precios de la vivienda). Estos hechos han generado alertas sobre la sensibilidad de la recuperación del mercado de vivienda a una menor expansión de la política monetaria en ese país. En cuanto a las economías emergentes el crecimiento del primer semestre fue inferior al observado el año pasado; sin embargo este sigue siendo favorable. En China, la producción industrial, las ventas al por menor y algunos indicadores de comercio internacional repuntaron nuevamente en agosto lo que indicaría que la actividad real se estaría dinamizando en el tercer trimestre. Para los países de América Latina los resultados de la primera mitad del año fueron mixtos. La actividad real se desaceleró fuertemente en México, pasando de una tasa de expansión anual de 2,6% en el primer trimestre a 0,3% en el segundo. En Chile se observó igualmente una menor tasa de expansión en el segundo trimestre (4,0% anual) que en el primero (5,1% anual). Por otra parte, en Brasil, la actividad económica repuntó en el segundo trimestre con una tasa de crecimiento anual de 3,3% frente a 1,9% registrado en el primero. En Perú se observó igualmente un mejor crecimiento anual en el segundo trimestre (5,6% frente a 4,5% en el primero). Para el tercer trimestre, la información más reciente evidencia que la actividad económica en México crecería a un ritmo moderado, mientras que en Chile y Perú la actividad continuaría expandiendo a un ritmo favorable. En relación con los precios internacionales de los bienes básicos, las tensiones geopolíticas en Medio Oriente incrementaron nuevamente las cotizaciones externas del petróleo. Anuncios recientes ayudaron a reducir de manera parcial dichos aumentos. En este contexto, los precios del crudo se estarían ubicando en el límite superior del rango de pronóstico establecido en el Informe sobre Inflación pasado (110 USD/barril). Las cotizaciones externas de otros bienes exportados por Colombia, como el carbón y el níquel, evidenciaron alguna estabilidad en las últimas semanas; las cotizaciones del café se redujeron nuevamente. Para el caso de algunos alimentos importados, como el trigo y el maíz, las condiciones favorables de oferta han reducido los precios internacionales. Con ello, los términos de intercambio del país dejaron de caer y se mantienen en niveles históricamente elevados. La inflación de las principales economías desarrolladas se mantiene en niveles relativamente estables. Es de destacar el comportamiento de los precios en Japón, país en el que las políticas económicas expansionistas estarían propiciando un aumento en el nivel de precios. Para las economías emergentes la situación es menos homogénea, en tanto, países como Brasil, India e Indonesia continúan experimentando inflaciones elevadas; mientras que economías como Chile, Colombia y Perú han presentado un incremento moderado en su inflación, aunque todavía desde niveles bajos. Es importante notar que economías con fuertes presiones inflacionarias y cambiarias como India e Indonesia incrementaron sus tasas de interés de referencia en las últimas semanas. Otros países, con menores variaciones de precios y preocupaciones por la actividad real las redujeron (México y Hungría). Respecto a los mercados financieros globales, la decisión de la FED de no iniciar todavía el retiro del estímulo monetario contribuyó a la valorización de los bonos públicos y privados y a la apreciación de las monedas de la mayoría de los países emergentes. Pese a ello, esta corrección ha sido parcial y los precios de estos activos son todavía mayores que los observados antes de mayo. Adicionalmente, es probable que la incertidumbre sobre cuándo, cómo y en cuánto sería el desmonte del programa de estímulo monetario continúe presionando los mercados de capital en las próximas semanas. Es de resaltar que en los próximos días se deberá negociar en el Congreso americano, el presupuesto del nuevo año fiscal y el límite de endeudamiento del gobierno. En los últimos años estas discusiones entre demócratas y republicanos, han sido muy complejas y polarizadas. Esto ha generado una alta incertidumbre que ha afectado la confianza de los consumidores y empresarios americanos, y ha producido un aumento de la volatilidad en los mercados financieros internacionales. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA La Junta Directiva tomó en consideración los siguientes aspectos relevantes: (i) Las cifras de tercer trimestre indican que el crecimiento de un buen número de economías avanzadas ha mejorado, al tiempo que las economías emergentes crecen menos que el año anterior. El crecimiento promedio de los socios comerciales de Colombia probablemente será menor en 2013 que en 2012. (ii) El precio internacional del petróleo continúa en niveles altos y las cotizaciones de algunos productos básicos que importa Colombia han caído, con lo cual los términos de intercambio del país se mantienen en niveles altos. (iii) La decisión de la Reserva Federal de los Estados Unidos de mantener inalterado el programa de compras mensuales de activos contribuyó a la valorización de los activos financieros internacionales y a la apreciación de las monedas de la mayoría de los países emergentes. (iv) El crecimiento del PIB de Colombia en el segundo trimestre fue superior al proyectado. Por el lado de la demanda interna, tanto la inversión como el consumo de los hogares y el gobierno mostraron un mayor dinamismo. Asimismo, el crecimiento real de las exportaciones superó al de las importaciones, hecho que no se registraba desde el segundo trimestre de 2009. Por el lado de la oferta, con excepción de la construcción, todos los sectores económicos se expandieron a un mayor ritmo que en el trimestre anterior, destacándose el sector agropecuario. La industria, con trilla de café, creció a una tasa positiva luego de haberse contraído durante tres trimestres consecutivos. (v) Los indicadores del tercer trimestre sugieren que el PIB se expande a tasas anuales mayores que las observadas en el primer semestre del año. La inversión, especialmente en edificaciones, crecería a tasas elevadas mientras que el consumo probablemente lo hará a una tasa similar a la observada en la primera mitad del año. Así lo sugieren las cifras de comercio al por menor, las encuestas mensuales de expectativas económicas al comercio, el crédito de consumo y los datos de empleo asalariado. (vi) El crédito bancario crece a tasas estables superiores a las del PIB nominal. En términos reales, las tasas de interés de las distintas modalidades del crédito se encuentran por debajo de sus promedios históricos (exceptuando la de las tarjetas de crédito). Las condiciones financieras generales, sin embargo, pueden haberse ajustado como resultado del encarecimiento del financiamiento externo. (vii) La nueva información aumentó la probabilidad de que el PIB crezca este año a una tasa similar a la de 2012. No obstante, si bien los riesgos provenientes de las economías avanzadas probablemente son ahora menores que antes, los de algunas economías emergentes pueden estar aumentando. (viii) En agosto la inflación anual (2,27%) estuvo en línea con lo estimado por el equipo técnico y el promedio de inflaciones básicas se mantuvo estable en 2,5%. El promedio de las expectativas de inflación de los analistas y las calculadas a partir de las tasas de los títulos de deuda pública es similar a la meta de inflación de 3%. Los miembros de la Junta resaltaron el crecimiento del producto en el segundo trimestre del año, superior al estimado, como reflejo del mayor dinamismo de la demanda interna y, por primera vez desde 2009, un dato positivo de las exportaciones netas. Así mismo, los datos favorables del mercado laboral y el crecimiento del empleo asalariado (5,8%). Adicionalmente, si bien en el mes de agosto el índice de confianza del consumidor (ICC) publicado por Fedesarrollo presentó una caída, es de esperarse que ésta sea transitoria, y que el crecimiento económico siga fortaleciéndose en parte impulsado por la inversión en construcción de edificaciones y obras civiles. No obstante, continúan elementos de incertidumbre en el contexto externo, tanto en las economías avanzadas como en algunas emergentes. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA Hecha la evaluación del balance de riesgos, la Junta Directiva por unanimidad consideró apropiado mantener la tasa de interés de intervención en 3,25%. La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo del comportamiento y proyecciones de la actividad económica e inflación en el país, de los mercados de activos y la situación internacional. Finalmente, reitera que la política monetaria dependerá de la nueva información disponible.
2013-10-01
- Minutas de la reunión de la JDBR del 25 de octubre de 2013 El 25 de Octubre de 2013 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores doctores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Enrique Meisel Roca, César Vallejo Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo. En las minutas se presenta un resumen de la situación inflacionaria y del crecimiento económico, y sus perspectivas, elaborada por el equipo técnico (sección 1) y se reseñan las principales discusiones y opciones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2). 1. SITUACIÓN INFLACIONARIA Y DE CRECIMIENTO ECONÓMICO a. Desarrollos recientes de la inflación En septiembre la inflación anual al consumidor fue 2,27%, igual al registro del mes anterior. En los primeros nueve meses del año, el cambio acumulado en el IPC ascendió a 2,16%, inferior a la variación acumulada en igual lapso de 2012 (2,32%). La estabilidad del indicador en el último mes fue el resultado de una aceleración en la variación anual del IPC de alimentos que fue compensada por reducciones en las variaciones anuales de los IPC de los otros tres grandes componentes (regulados y transables y no transables, sin alimentos ni regulados). La variación anual del IPC de alimentos en septiembre fue de 2,1%, 28 puntos base (pb) más respecto a agosto. La tendencia ascendente en este indicador ha sido continua desde mediados del segundo trimestre. Los precios de los productos perecederos explican buena parte de este comportamiento (aumentaron 40 pb frente al mes anterior situándose en 5,9%). Por el lado de los alimentos procesados se observaron presiones al alza muy moderadas (0,18% de variación anual). En esta subcanasta, la depreciación de los últimos meses no se ha transmitido a los precios internos lo que puede obedecer a que los precios internacionales de cereales, oleaginosas y aceites han caído de manera importante. Finalmente, la variación anual del IPC de comidas fuera del hogar aumentó a 3,7% desde 3,6% en agosto. La variación anual del IPC sin alimentos se situó en 2,4% en este mes, 10 pb menos que el dato de agosto. Después de los aumentos observados entre enero y junio esta variable ha mostrado una tendencia levemente decreciente. El mayor descenso se dio en la variación anual del IPC de regulados (1,2% en septiembre frente a 1,5% en agosto) y se explica principalmente por la estabilidad del precio de los combustibles frente a los aumentos registrados en igual mes del año pasado. La variación anual del IPC de regulados se ha mantenido por debajo de la inflación anual desde mediados de 2012, gracias a las menores alzas en los precios internacionales del petróleo, a las rebajas en las tarifas de acueducto y servicios de recolección de basuras y otras disminuciones asociadas con la reforma tributaria a comienzos de este año. En el caso del IPC de no transables sin alimentos ni regulados, el cambio anual fue 3,7% 8 pb menos que el observado en agosto. Este indicador muestra, con algunas interrupciones, una leve tendencia decreciente desde hace tres trimestres que ha sido posible por el comportamiento del rubro de arriendos, su componente más importante. En el último mes la variación anual de arriendos se situó en 3,6% frente a 3,7% en agosto e inferior a los registros de junio y marzo. En los demás subgrupos de la canasta de no transables se observan ajustes cercanos a 3,0%, excepto por el caso de educación que se sitúa en 4,9%. Respecto a los transables sin alimentos ni regulados, el dato de septiembre fue 1,3%, 5 pb por debajo del registro de agosto. Aunque la depreciación de los meses anteriores se ha transmitido a dichos precios, esto ha sucedido de forma lenta y no continua. El promedio de los cuatro indicadores de inflación básica monitoreados por el Banco de la República se situó en septiembre en 2,51%, 3 pb menos que el del mes anterior. Este indicador ha mostrado estabilidad en torno a 2,5% desde febrero de este año. La variación anual del IPP descendió en septiembre a -1,3% de -0,5% en agosto. El componente local disminuyó frente al mes pasado (122 pb), gracias a los menores ajustes en los precios de los productos agropecuarios y manufacturados. El componente importado aumentó 1,6% anual en septiembre, influenciado por la depreciación del peso reciente. En lo referente a las expectativas de inflación, según la encuesta mensual del Banco a los analistas del mercado financiero, la inflación esperada a diciembre de este año es 2,6% mientras que la de 12 meses es 3,0%, iguales a los registros del mes pasado. Por otra parte, las expectativas de inflación derivadas de la curva de rendimiento de los TES a horizontes de 2, 3 y 5 años, se encuentran entre 2,6% y 2,7%, lo que representó un ligero aumento a lo observado un mes atrás. b. Crecimiento Los indicadores de demanda disponibles para el tercer trimestre sugieren una expansión del PIB superior a la registrada durante la primera mitad del año. Esta aceleración se explica en gran medida por el desempeño de la demanda interna, rubro que habría sido impulsado principalmente por un buen comportamiento de la inversión. El consumo de los hogares se habría expandido a una tasa cercana a la observada en el primer semestre. La aceleración esperada en la inversión para el tercer trimestre, se daría principalmente por el buen comportamiento que se espera en construcción de edificaciones. La mayor expansión esperada en este rubro está asociada en gran medida a la baja base de comparación en el mismo periodo del año pasado, al efecto de la política de vivienda de interés prioritario del Gobierno y a las buenas perspectivas generales del mercado de vivienda que se reflejaron en un aumento de la aprobación de licencias de construcción durante el tercer trimestre. En la inversión en obras civiles, se espera que crezca a tasas ligeramente mayores que las registradas durante el segundo trimestre. Es importante resaltar que la incertidumbre que rodea el comportamiento de la inversión en obras civiles es muy alta. Para la inversión distinta de construcción de edificaciones y de obras civiles se espera que tenga un desempeño ligeramente mejor a lo registrado durante el segundo trimestre. Esto se basa en el balance de expectativas de inversión de los empresarios reportado en la Encuesta Mensual de Expectativas Económicas del Banco de la República (EMEE) y en los resultados (en términos de pesos reales) de las importaciones de bienes de capital y de maquinaria para la industria. Para el consumo de los hogares, en el tercer trimestre se espera un comportamiento similar al observado en el primer semestre del año. Según la información de la Muestra Mensual de Comercio al por Menor (MMCM) publicada por el DANE, las ventas minoristas crecieron 6,9% en términos anuales durante agosto. Esta cifra es mayor que el 5,8% registrado para el segundo trimestre y que el 2,8% de la primera mitad del año. Al descontar el segmento de ventas de vehículos, estas se expandieron 8,6% en términos anuales durante el mismo periodo, lo que significa una aceleración frente al 5,2% del segundo trimestre y al 4,3% del primer semestre. Las tasas de crecimiento del bimestre julio-agosto confirman la perspectiva del buen desempeño del consumo privado durante el tercer trimestre (6,2% de crecimiento en ventas totales, 5,9% al descontar vehículos). En línea con lo anterior, el balance de ventas de la EMEE sugiere que durante julio y agosto los comerciantes percibieron una demanda ligeramente más dinámica que la observada durante el segundo trimestre. No obstante, hay indicadores que apuntan a que la dinámica del consumo en el tercer trimestre podría ser menor a lo que se desprende de los indicadores descritos anteriormente. Por una parte, en septiembre el índice de confianza del consumidor de Fedesarrollo se ubicó en niveles similares a los registrados en el mes de agosto, el cual cayó de manera significativa con respecto al observado en el segundo trimestre del año y por otra parte, la cartera de consumo registró nuevas desaceleraciones (en términos reales) al expandirse 10,0% en términos anuales durante el trimestre julio-septiembre frente a 11,7% del segundo trimestre y 12,9% de la primera mitad del año. En lo referente a las ventas externas del país, en el mes de agosto el valor total exportado en dólares presentó un aumento anual de 8,9%. Este incremento se explica por el crecimiento de 19,3% en las exportaciones de origen minero (gracias a las mayores ventas externas de petróleo y derivados y carbón). En este mes las exportaciones agrícolas registraron una caída de 0,8%, asociada a la variación negativa de las exportaciones de banano y café. Las exportaciones de bienes industriales y otros cayeron 16,4%, principalmente por las menores ventas de productos químicos, otros agrícolas, caucho y plásticos y vehículos. Para el tercer trimestre, se espera que las exportaciones crezcan a un ritmo modesto, esto principalmente por el efecto que pueda tener los distintos paros presentados en el sector carbonífero. En el mes de agosto las importaciones totales en dólares disminuyeron 5%, respecto al mismo mes del año anterior. Este comportamiento se explica por la caída conjunta de las importaciones de bienes de capital (-6,1%), materias primas (-3,9%) y bienes de consumo (-5,4%). Para el tercer trimestre se proyecta que este rubro se expanda a una tasa mayor que la de las exportaciones, aunque por debajo de la tasa registrada en 2012. Por el lado de la oferta, los indicadores disponibles sugieren que el sector de la construcción sería la principal fuente de crecimiento del producto, seguido por la agricultura, la minería y el comercio. La industria continuaría con un desempeño bajo. El PIB de la industria mostraría un crecimiento anual nulo o levemente positivo en el tercer trimestre. Si bien se puede esperar una caída adicional del índice de producción industrial sin trilla de café, el comportamiento del sector cafetero compensaría las caídas de algunas ramas de la industria, ya que la trilla estaría creciendo muy por encima del promedio de toda la economía. Es así como en agosto el índice de producción industrial sin trilla de café cayó 3,9% anual (en julio había crecido 0,2%), mientras que hubo un crecimiento importante de la trilla de café, (aumentó 12,7% anual en agosto y en julio fue de 15,1%). Aunque otros indicadores de la industria mostraron leves deterioros frente al mes anterior, al realizar un análisis de sus tendencias se observa que sus componentes de largo plazo podrían estarse estabilizando. Esto es el caso para el indicador de pedidos, el indicador de existencias y las perspectivas a seis meses de los industriales obtenidos de la encuesta de Fedesarrollo. En lo que respecta a la minería, pese a la caída que podría observarse en la producción de carbón debido al paro en la Drummond, se espera un crecimiento mayor para este trimestre gracias al aumento que se ha observado en la producción de petróleo. En este último sector, el crecimiento anual del trimestre julio-septiembre fue de 8,7%. En el sector de la construcción, los indicadores disponibles sugieren que el buen desempeño observado en el primer semestre continuaría en los siguientes tres meses. Las licencias de construcción crecieron 18,7% en agosto, principalmente por un incremento de 33,1% en el área aprobada para vivienda. Respecto a otros sectores, en el sector de transporte el menor desempeño de la industria junto con el paro de agosto pudo haber tenido efectos negativos. De todas maneras se espera que se mantengan una tasa de crecimiento para el tercer trimestre levemente inferior a la del segundo. Por otra parte, en el caso del comercio, la información de Fedesarrollo y Fenalco muestra un debilitamiento en las perspectivas de los comerciantes hacia el futuro. Sin embargo, como se mencionó anteriormente, las ventas al por menor mostraron un buen desempeño en agosto. Por último, la agricultura tendría un desempeño favorable sustentado principalmente en el dinamismo de la producción de café que de acuerdo con la Federación de Cafeteros está creciendo por encima del 40% en el tercer trimestre. Todo lo anterior permite prever que el crecimiento de la economía colombiana en el tercer trimestre de 2013 se ubicaría en un intervalo entre 3,8% y 5,2%. Es importante resaltar que la amplitud de este rango está determinada en gran medida por la incertidumbre que rodea el comportamiento de la inversión en obras civiles y del consumo público. Para todo 2013 se tiene un rango de pronóstico entre 3,5% y 4,5%. El anterior pronóstico supone que durante la segunda mitad del año el consumo de los hogares crecería a tasas cercanas a las observadas en la primera mitad del año, mientras que la inversión en construcción se aceleraría de manera importante. Por ramas de actividad, los sectores más dinámicos serían la construcción y la agricultura, mientras que el desempeño más bajo sería el de la industria. Para 2014, se estima que el crecimiento de la economía colombiana se ubicaría entre 3,0% y 5,0%. c. Variables Financieras El crédito bancario (M/N y M/E) en septiembre registró una tasa anual de crecimiento de 13,94%, cercano al promedio observado desde abril (13,97%). La cartera en moneda nacional se aceleró de 12,90% en agosto a 13,18% en septiembre y la de moneda extrajera se desaceleró de 30,91% a 27,25% en el mismo periodo. Por destinos, la cartera a los hogares registró un crecimiento anual en septiembre de 12,80%, menor al del mes anterior (13,19%). Esto fue explicado por el comportamiento del crédito de consumo que disminuyó de 12,90% a 12,37%, mientras que el hipotecario mantuvo un crecimiento anual de 14,0% en septiembre. En cuanto a la cartera comercial, la tasa de crecimiento con respecto al mismo mes del año pasado aumentó 36 pb en septiembre (14,41%), explicado por la aceleración en el componente de moneda nacional (de 12,33% en agosto a 13,13% en septiembre). Las tasas de interés de los préstamos desembolsados por los establecimientos de crédito desde el inicio de los recortes en la tasa de política en julio de 2012, han acumulado reducciones de: -223 pb para los créditos hipotecarios, -206 pb para los de consumo, -185 pb para los créditos de construcción. La magnitud del descenso de las tasas de interés reales ha sido inferior por el efecto de la menor tasa de inflación, con rebajas durante este mismo período de: -189pb para créditos hipotecarios, - 170 pb para créditos de consumo y -141 pb para créditos para construcción. Los niveles de las tasas de interés reales en septiembre de los créditos de consumo, hipotecarios, preferenciales, comercial ordinario y comercial de tesorería y de construcción se sitúan por debajo de sus promedios históricos calculados desde 2000. Por el contrario, los créditos otorgados con tarjeta de crédito se encuentran por encima de su promedio. d. Contexto Externo La información disponible para el tercer trimestre evidencia que la actividad global ha seguido recuperándose, lo que se explica por indicadores de crecimiento positivo que empiezan a registrarse en la zona del euro, luego de un prolongado período de contracción, como también por crecimientos moderados en los Estados Unidos y Japón. Por su parte, las grandes economías emergentes de Asia y de América Latina crecen de forma heterogénea, aunque en su mayoría presentan ritmos de expansión inferiores a los observados el año pasado. En el caso de la zona del euro los índices de confianza de empresarios y consumidores, junto con los indicadores de actividad en los sectores de manufacturas y servicios, siguieron mostrando con datos a septiembre un comportamiento alentador. De igual forma, con cifras a agosto, las ventas al por menor completaron varios meses creciendo en términos mensuales y desacelerando su caída anual. Es importante destacar, sin embargo, que la economía de esta región continúa vulnerable: La tasa de desempleo se mantiene en niveles elevados, principalmente en las economías de la periferia, el crédito sigue contrayéndose y la fragmentación financiera continúa afectando a las economías más vulnerables de la región. En el caso de Japón, el fuerte estímulo provisto por la política monetaria comienza a manifestarse en indicadores positivos de actividad económica en ese país, los cuales muestran que las exportaciones han seguido expandiéndose al igual que la actividad industrial. En este contexto, la confianza de los empresarios ha aumentado en los últimos meses, caso contrario a la de los consumidores que lleva varios meses deteriorándose. En relación con los Estados Unidos, con cifras a agosto, las ventas al por menor y la industria crecieron tanto en términos mensuales como anuales; de forma similar, en septiembre, los indicadores de actividad en los sectores de manufacturas y servicios se mantuvieron en terreno expansivo. Esta información apunta a que la actividad real se expandió a un ritmo moderado en el tercer trimestre. Cabe notar que en los primeros días de octubre el Congreso de los Estados Unidos no logró llegar a un acuerdo sobre el presupuesto para el año fiscal, por lo que se declaró un cierre administrativo. Las discusiones sobre el presupuesto coincidieron con la negociación sobre el límite de endeudamiento. El 16 de octubre el Congreso llegó a un acuerdo que evitó una cesación de pagos de la economía (se autorizó el endeudamiento hasta febrero de 2014) y permitió la reapertura del gobierno hasta enero de 2014. En este lapso se deberán efectuar negociaciones para acordar nuevos ajustes fiscales. Por el lado de las economías emergentes, el crecimiento económico de China se aceleró levemente durante el tercer trimestre del año. El mayor crecimiento se reflejó en una recuperación de la demanda interna y de la actividad industrial. Durante este periodo el Gobierno implementó algunas medidas de estímulo que contribuyeron al crecimiento de la inversión. Para el caso de América Latina, con información preliminar al tercer trimestre, se observa que el comportamiento de la actividad real continúa siendo heterogéneo. Así, mientras en Perú los indicadores mensuales evidencian alguna aceleración, en Chile el crecimiento parece estabilizarse en 4,5%, tasa inferior a su potencial. Por su parte en Brasil, la economía pareciera estar perdiendo dinamismo. En relación con los precios internacionales de los bienes básicos, el incremento en las tensiones geopolíticas aumentó las cotizaciones externas del petróleo durante el tercer trimestre y las ubicó por encima de lo estimado por el equipo técnico en el Informe sobre inflación de junio. Para el caso de otros bienes exportados por Colombia, el carbón y el níquel interrumpieron sus caídas y en las últimas semanas evidenciaron alguna estabilidad; sin embargo, los precios externos del café continuaron cayendo, aunque a un menor ritmo. Por su parte, se observaron caídas en los precios internacionales de algunos granos y cereales (exceptuando el trigo). La inflación de las principales economías desarrolladas ha permanecido relativamente estable en los últimos meses. En cuanto a la inflación en las economías emergentes, el panorama es heterogéneo. En este sentido, se observan países como Brasil, India e Indonesia con inflaciones relativamente altas y en algunos casos superiores a las metas fijadas por sus bancos centrales. Por otra parte, se encuentran economías, como Chile, Colombia y Perú, con inflaciones bajas pero acelerándose. Otras economías asiáticas evidencian inflaciones bajas e incluso decrecientes (Taiwán y Corea). Respecto a los mercados financieros globales, los últimos eventos en los Estados Unidos han llevado a que el mercado haya reducido la probabilidad de que la FED empiece este año a disminuir el monto de las compras mensuales de activos, lo que ha revertido parcialmente los aumentos en las tasas de interés de largo plazo que se registraron a partir de mayo. Asimismo, se produjo una disminución de los indicadores de riesgo país en América Latina y una leve apreciación de sus monedas. Teniendo en cuenta este entorno internacional, el equipo técnico sigue previendo un crecimiento de la demanda externa de los productos colombianos para el presente año por debajo de lo observado el año anterior. Es de esperar que en lo que resta de este año y en el siguiente, los términos de intercambio permanezcan en niveles relativamente altos, aunque inferiores a los registrados a comienzos de 2012. Hay que resaltar que los riesgos externos sobre la actividad económica mundial aumentaron respecto al informe trimestral anterior. Por una parte, la incertidumbre sobre los acuerdos fiscales en los Estados Unidos podría repercutir negativamente sobre la confianza de los consumidores y de los mercados financieros, lo que impactaría el crecimiento económico en este país tanto en 2013 como en 2014. Por otra parte, se podría dar una mayor desaceleración en 2014, incluso con riesgos a la estabilidad financiera, en las economías emergentes más vulnerables a los cambios en los flujos financieros que resultarían del inicio del retiro del estímulo monetario en Estados Unidos. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA La Junta Directiva tomó en consideración los siguientes aspectos relevantes: (i) La economía mundial se expande a un ritmo moderado y su dinámica de corto plazo ha cambiado un poco frente a lo observado en trimestres anteriores. Según indicadores del tercer trimestre, en la Zona Euro se observa una incipiente recuperación. No obstante, el crecimiento de los Estados Unidos puede haberse resentido como consecuencia del cierre parcial del gobierno federal y la mayor incertidumbre. El conjunto de las economías emergentes se expande a un menor ritmo, aunque el dato de crecimiento del PIB de China fue más alto que el esperado por el mercado. (ii) Adicionalmente, ha caído la probabilidad de que la FED empiece este año a disminuir el monto de las compras mensuales de activos, lo que revirtió parcialmente los aumentos en las tasas de interés de largo plazo que se registraron a partir de mayo. Así mismo se produjo una disminución de los indicadores de riesgo país en América Latina y una leve apreciación de sus monedas. (iii) Por otro lado, el precio internacional del petróleo y de algunas materias primas importadas por Colombia presentaron caídas. (iv) En Colombia, los datos disponibles para el tercer trimestre sugieren una actividad económica que se expande a un ritmo mayor que en la primera mitad del año, impulsado por la inversión. El consumo habría crecido a una tasa similar a la del primer semestre. Por el lado de la oferta, el sector de la construcción sería la principal fuente de crecimiento, seguido por la agricultura, la minería y el comercio. Para todo el año 2013, el equipo técnico proyecta una tasa de crecimiento entre el 3,5% y el 4,5%. (v) El crédito bancario crece a tasas estables superiores a las del PIB nominal. En términos reales, las tasas de interés de las distintas modalidades de crédito se encuentran por debajo de sus promedios históricos (exceptuado las de tarjetas de crédito) e impulsan el crecimiento económico. (vi) En septiembre la inflación anual (2,27%) se mantuvo estable con respecto al mes anterior y lo mismo se observó con el promedio de las medidas de inflación básica. Las expectativas de inflación de los analistas a doce meses y las calculadas a partir de los títulos de deuda pública a horizontes más largos son consistentes con la meta de inflación de largo plazo. Unos miembros consideraron que la brecha del PIB es levemente negativa y, a juzgar por el comportamiento de los indicadores de inflación básica y de los precios de los no transables, pareciera estar en un nivel estable desde hace un buen número de meses. Adicionalmente, el 3,25% de tasa de interés de intervención está por debajo de cualquier estimación razonable del nivel "natural" de tasa de interés nominal, indicando una postura monetaria expansiva. Esta postura se justifica por los efectos negativos sobre la demanda agregada de choques financieros y reales externos, y algo por la precaria recuperación en algunos indicadores de confianza o expectativas. Sobre el futuro de estas variables hay gran incertidumbre y por ello se considera apropiado mantener el nivel actual de tasa de interés de intervención. Otro grupo de directores consideró que es posible que la brecha del producto sea más negativa que lo mencionado anteriormente, si se tiene en cuenta que tanto la inflación básica como el punto medio de las proyecciones de inflación, se mantiene alrededor de 2,5%, por debajo de la meta de largo plazo. Así mismo, la evolución de diversos indicadores sectoriales y de demanda ha sido errática, sin presentar señales contundentes respecto de la magnitud y sostenibilidad del proceso de cierre de esta brecha. Finalmente, las proyecciones sobre el contexto global, a pesar de algunas mejoras, no parecen indicar que la demanda externa sea una fuente que promueva un mayor crecimiento del producto. En estas circunstancias es conveniente continuar con el impulso que la política monetaria está aportando a la demanda agregada, manteniendo la actual postura expansionista. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva por unanimidad consideró apropiado mantener la tasa de interés de intervención en 3,25%. La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo del comportamiento y proyecciones de la actividad económica e inflación en el país, de los mercados de activos y de la situación internacional. Finalmente, reitera que la política monetaria dependerá de la información disponible.
2013-11-01
- Minutas de la reunión de la JDBR del 29 de noviembre 2013 El 29 de noviembre de 2013 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores doctores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca, César Vallejo Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo. En las minutas se presenta un resumen de la situación inflacionaria y del crecimiento económico, y sus perspectivas, elaborada por el equipo técnico (sección 1) y se reseñan las principales discusiones y opciones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2). 1. SITUACIÓN INFLACIONARIA Y DE CRECIMIENTO ECONÓMICO a. Desarrollos recientes de la inflación En octubre, la inflación anual al consumidor presentó un descenso importante y significativamente mayor que el esperado. El resultado de este mes fue 1,84%, 43 puntos base (pb) menos que el registro de septiembre. Para el año corrido el dato asciende a 1,89%, menor que el incremento acumulado en igual período del año pasado (2,48%). El descenso de la inflación en octubre se concentró principalmente en alimentos y en segundo lugar en el componente de regulados. En alimentos, la variación anual se desaceleró de manera importante (139 pb frente al registro de septiembre) cerrando el mes en 0,7%. El descenso se concentró en los alimentos perecederos, donde se observaron caídas importantes en los precios de la papa y una gran variedad de otros productos (tubérculos, hortalizas y frutas). Una buena oferta agrícola junto con pocas alzas en los costos de producción y de transporte seguirían explicando los pocos aumentos relativos en estos precios en octubre al igual que en meses anteriores. Otro rubro que presentó un descenso en el mes fue el de comidas fuera del hogar (de 3,7% a 3,3% anual). Por último, los precios de los bienes procesados tampoco variaron de manera relevante en el último mes y su variación anual se mantuvo en 0,0%. En meses recientes los precios internacionales de cereales, aceites y otros alimentos han descendido, lo que explica en parte las escasas presiones alcistas que se observan en este grupo de bienes. La variación anual del IPC sin alimentos en octubre se situó en 2,31%, 5 pb menos que el mes anterior. Es de destacar el descenso de 17 pb en la variación anual del IPC de regulados en octubre (1,1%). Esta variable ha presentado disminuciones desde julio explicadas por escasas alzas o caídas en los precios de los combustibles primordialmente y en menor medida en las tarifas de diversos servicios públicos. En el caso de los combustibles, las rebajas recientes, que en el último mes fueron de -3,6% anual, están en parte relacionadas con los pocos aumentos que se han registrado en los precios internacionales desde hace varios trimestres y sobre todo con las reducciones a partir de agosto. En cuanto a las tarifas de servicios públicos, en octubre se presentaron ajustes pequeños en gas y acueducto y reducciones en energía eléctrica. Año corrido, el aumento de estos rubros ha sido de 2,5%, lo que es bajo comparado con los registros de años anteriores. Esto podría explicarse por las decisiones de reducción de tarifas de acueducto y aseo en algunas ciudades, por el comportamiento de los precios internacionales de los combustibles y por la reducción en el IPP entre otros. En octubre, la variación anual del IPC de no transables sin alimentos ni regulados se mantuvo casi inalterada alrededor de 3,7%. La variación anual de arriendos descendió levemente (3 pb) como viene sucediendo desde comienzos de año, mientras que no se registraron cambios de importancia en los otros componentes de la canasta. Por otra parte, en el IPC de transables sin alimentos ni regulados, la variación anual se mantuvo en octubre en 1,3%. En los meses recientes la depreciación del peso se ha reflejado en una aceleración moderada de este indicador y en aumentos (aunque leves) en los precios de algunos bienes importados. La inflación básica disminuyó en octubre nuevamente. El promedio de los cuatro indicadores monitoreados por el Banco se situó en 2,44% frente al 2,51% del mes anterior. Desde febrero del año en curso esta medición presenta muy pocas variaciones. La variación anual del IPP descendió en octubre a -1,9% de -1,3% en septiembre. El componente local disminuyó frente al mes pasado (56 pb), en un conjunto amplio de bienes. El componente importado aumentó 0,9% anual, cifra inferior a la registrada el mes pasado (1,6%). En lo referente a las expectativas de inflación, según la encuesta mensual del Banco a los analistas del mercado financiero, la inflación esperada a diciembre de este año es 2,2% mientras que la de 12 meses es 2,9%, registros inferiores a los del mes pasado. Por otra parte, las expectativas de inflación derivadas de la curva de rendimiento de los TES a diferentes plazos se encuentran en niveles inferiores al 3%. Frente al mes anterior, las derivadas de los papeles de 2 y 3 años disminuyeron, mientras que las de 5 años subieron. b. Crecimiento La última información disponible señala que en el tercer trimestre, algunos rubros de la demanda interna se estarían expandiendo a una tasa positiva moderada. El consumo de los hogares continúa dinámico mientras que la inversión en maquinaria y equipo, podría haber presentado un buen desempeño en el período. Persiste la incertidumbre en relación con la información de construcción de edificaciones, de obras civiles y el consumo público. Según la información más reciente reportada por el DANE, entre julio y septiembre el índice de ventas totales del comercio creció 4,9% en términos anuales, cifra similar a la registrada para el agregado del segundo trimestre (5,1%). El balance de ventas de la encuesta regional del Banco de la República (EMEE) también sugiere que la expansión del consumo de los hogares se habría dado a un buen ritmo durante el tercer trimestre. Con respecto a la inversión distinta de aquella realizada en construcción de edificaciones y de obras civiles, tanto el balance de expectativas de inversión de la EMEE, como las expansiones de las importaciones de bienes de capital en pesos reales sugieren que su comportamiento habría sido algo mejor que lo registrado en el segundo trimestre de 2013. Por otra parte, en el mes de septiembre las exportaciones totales en dólares registraron una caída anual de 1,2%, obedeciendo a las menores ventas externas de bienes de origen minero (-2,4%). Esta disminución fue compensada levemente por el crecimiento de 10% en las exportaciones agrícolas y de 0,1% en las exportaciones industriales. Las importaciones totales (CIF) en dólares aumentaron 10% respecto al mismo mes del año anterior. Este comportamiento se explica por las mayores compras de bienes de capital (15%) y de materias primas (13%), ya que las de bienes de consumo cayeron 1,1%. Por el lado de la oferta, los indicadores más recientes para el tercer trimestre sugieren comportamientos mixtos. Para el caso de la industria en septiembre la variación anual del IPI sin trilla de café fue de -1,8%, en línea con lo esperado. Con esto, el tercer trimestre registró una disminución de 1,9% y el año corrido se ubicó en -2,7%. Sin embargo, en septiembre las licencias de construcción aumentaron frente al mes anterior (18,9%) y el crecimiento acumulado doce meses se situó en 10,6% (en junio fue 7,3%). A su vez, la producción de cemento y los despachos se aceleraron entre el segundo y tercer trimestre: la producción de cemento pasó de crecer de 0,7% anual en junio a 5,9% en septiembre. Los despachos pasaron a crecer en el tercer trimestre a una tasa anual de 6,9% frente a 4,3% en el segundo trimestre. Es así como se espera que los sectores más dinámicos en el tercer trimestre hubieran sido la construcción y la agricultura. Otros que podrían haber contribuido de manera importante al crecimiento serían los servicios financieros, el comercio y la minería. Por el contrario, el sector industrial (con trilla de café) sería el de menor aporte al crecimiento del producto. Lo anterior permite continuar conservando un rango de pronóstico para el crecimiento del PIB en el tercer trimestre entre 3,8% y 5,2%. Hay que señalar que la incertidumbre en la inversión en obras civiles, el consumo público y de construcción de vivienda sigue siendo alta por falta de información. Para el cuarto trimestre aún se dispone de muy poca información. Durante el mes de octubre se destaca el repunte del índice de confianza del consumidor (ICC) publicado por Fedesarrollo y la aceleración de las ventas de vehículos. En el primer caso, el ICC se ubicó nuevamente por encima de su promedio desde 2001, al haberse superado los choques que en el mes de agosto afectaron de manera importante la percepción y las expectativas de los hogares. Por otra parte, en octubre las ventas de vehículos se expandieron 10,2% frente al mismo mes del año pasado, lo que significa una aceleración frente a lo registrado en promedio para el tercer trimestre (-0,6%). Para el cuarto trimestre, las noticias más favorables provienen de los sectores de agricultura y energía. En particular, de acuerdo con cifras de la Federación Nacional de Cafeteros, la producción de café mostró una expansión de 62% en octubre, luego de haber crecido alrededor de 52% durante el tercer trimestre. Adicionalmente, se destaca el repunte en la variación anual de la demanda de energía total, la cual pasó de 1,2% en septiembre a 3,5% en octubre. Para la industria, con información a octubre, la encuesta de opinión empresarial (EOE) de Fedesarrollo señala una mejoría de los indicadores de confianza, pedidos, existencias y expectativas a tres meses. Además, la demanda de energía no regulada para la industria, variable que está altamente correlacionada con el IPI, reportó una expansión de 5,4% en octubre (frente a -0,8% en septiembre). Lo anterior, podría sugerir un mejor comportamiento para el sector en el siguiente mes y perspectivas más favorables hacia final de año. Con todo lo anterior, para todo el año 2013 se mantiene el rango de pronóstico entre 3,5% y 4,5%. Se debe señalar que el comportamiento de la inversión en obras civiles, de la construcción de vivienda y del consumo público es una fuente de alta incertidumbre sobre estas proyecciones. c. Variables Financieras El crédito bancario (M/N y M/E) en octubre registró una tasa anual de crecimiento de 14,13%, cercano al promedio observado desde marzo (14,02%). La cartera en moneda nacional se aceleró de 13,18% en septiembre a 13,74% en octubre y la de moneda extranjera se desaceleró de 26,91% a 20,61% en el mismo periodo. Por destinos, la cartera a los hogares registró un crecimiento anual en octubre de 13,07%, mayor al del mes anterior (12,81%). Esto fue explicado por el comportamiento del crédito de consumo que aumentó de 12,37% a 12,61%, como por el hipotecario que aumentó el crecimiento anual de 14,05% en septiembre a 14,37% en octubre. En cuanto a la cartera comercial, la tasa de crecimiento anual en octubre (14,45%) fue similar a la del mes anterior, explicado por una aceleración en el componente de moneda nacional (de 13,13% en septiembre a 13,99% en octubre) que compensó la desaceleración en el componente en moneda extranjera (de 27,02% a 18,85%). Las tasas de interés de los préstamos desembolsados por los establecimientos de crédito desde el inicio de los recortes en la tasa de política en julio de 2012, han acumulado reducciones de: -222 pb para los créditos hipotecarios, -221 pb para los de consumo y -185 pb para los créditos de construcción. La magnitud del descenso de las tasas de interés reales ha sido inferior por el efecto de la menor tasa de inflación, con rebajas durante este mismo período de: -171 para créditos hipotecarios, -167 pb para créditos de consumo y -136 pb para créditos para construcción. Los niveles de las tasas de interés reales en septiembre de los créditos de consumo, hipotecarios, preferenciales, comercial ordinario y comercial de tesorería y de construcción se sitúan por debajo de sus promedios históricos calculados desde 2000. Por el contrario, los créditos otorgados con tarjeta de crédito se encuentran por encima de su promedio. d. Contexto Externo En los últimos meses la actividad económica en las economías desarrolladas ha continuado recuperándose. En las economías emergentes por su parte, las tasas de crecimiento se han estabilizado pero en algunos casos en niveles inferiores a sus potenciales. En Estados Unidos, la información al tercer trimestre muestra que el crecimiento económico se aceleró y fue superior al esperado. Pese a ello, los datos evidencian una desaceleración en el consumo y en las exportaciones. El mayor crecimiento fue explicado principalmente por el incremento de los inventarios, lo que podría afectar el crecimiento del último trimestre del año. Las cifras para el cuarto trimestre muestran que la actividad real ha seguido expandiéndose. En este sentido el mayor impacto del cierre del gobierno federal de octubre ha sido sobre la confianza de los consumidores y no sobre la actividad privada, en tanto, la industria y los indicadores de opinión empresarial continúan expandiéndose. En la zona del euro, el crecimiento se mantuvo en terreno positivo en el tercer trimestre. No obstante, la expansión fue inferior a la observada en el segundo. Tanto en Alemania como en Francia se observaron menores tasas de crecimiento que el trimestre anterior (en el caso de Francia hubo una contracción). Se evidencian algunos síntomas de reactivación en algunas de las economías de la periferia, aunque todavía a un ritmo muy bajo. Por otra parte, los indicadores de confianza, tanto de empresarios como de consumidores, al igual que los índices de opinión empresarial han seguido recuperándose en los últimos meses. Pese a ello, la vulnerabilidad de la economía, en términos de estabilidad financiera y de actividad económica se mantiene. En las economías emergentes, el crecimiento fue positivo en el tercer trimestre aunque inferior al observado en los años anteriores. El crecimiento en China estuvo en línea con lo esperado y las cifras preliminares para el cuarto trimestre muestran alguna estabilidad. Otras economías asiáticas mantienen un crecimiento inferior al observado en años anteriores. Por otra parte, en América Latina se evidenció una leve desaceleración de la tasa de crecimiento en Perú mientras se vio alguna estabilidad en la tasas de crecimiento de Chile; para los dos casos los últimos datos muestran niveles inferiores a los estimados como potenciales. En Venezuela se observó una desaceleración. En relación con los precios internacionales del petróleo, las menores tensiones geopolíticas y el menor crecimiento esperado de las economías emergentes han permitido un descenso en sus cotizaciones desde agosto. Sin embargo, en los últimos días ha habido un ligero aumento atribuido a algunos problemas de orden público en Libia. Para el caso de otros bienes exportados por Colombia, como el carbón y el níquel, los precios se han mantenido relativamente estables en las últimas semanas. Por su parte, los precios de los alimentos permanecen por debajo de los niveles observados en 2012 y en algunos casos se han presentado descensos adicionales en las últimas semanas. Por todo lo anterior, la inflación en las principales economías desarrolladas y en un grupo considerable de emergentes se ha reducido en los últimos meses. Esta situación, junto con un crecimiento por debajo del potencial, ha incentivado a diversos bancos centrales a reducir sus tasas de intervención. Los bancos centrales de otras economías con mayores presiones inflacionarias, como Brasil, India e Indonesia, han aumentado sus tasas en los últimos meses. Los términos de intercambio del país continúan altos, pero inferiores a los de años anteriores. Hacia adelante no se espera un alza de los mismos, en un escenario de recuperación pausada de la economía mundial y de mejores condiciones esperadas de oferta mundial de petróleo. En relación con los anuncios sobre la política monetaria por parte de la Reserva Federal de los Estados Unidos, parece que los mercados han incorporado la idea de que el desmonte del programa de estímulo comenzaría un poco más tarde de lo que anticipaban hace algunos meses. Esta situación ha generado alguna calma en los mercados financieros, que se ha reflejado en una estabilidad de la percepción de riesgo de las economías emergentes. Igualmente se ha observado cierta reactivación de los flujos de capital, lo que ha contribuido a reducir las presiones cambiarias. Sin embargo, la incertidumbre sobre el comienzo y la velocidad de la normalización de la política monetaria en los Estados Unidos, así como los efectos que pueda tener en los mercados financieros sigue siendo alta. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA La Junta Directiva tomó en consideración los siguientes aspectos relevantes: (i) Los resultados de crecimiento mundial para el tercer trimestre muestran una demanda externa global que se recupera de forma lenta, jalonada principalmente por los países desarrollados. Tanto el crecimiento en los Estados Unidos como la recuperación de la actividad económica en la zona del euro resultaron algo mejor a lo proyectado. Las grandes economías emergentes de Asia y de América Latina crecen de forma heterogénea y en su mayoría presentan ritmos de expansión inferiores a sus potenciales. (ii) Las tasas de interés de los bonos del tesoro americano han estado relativamente estables, pero en niveles superiores a los observados antes de mayo, mes en el que se anunció una posible disminución del estímulo monetario por parte de la FED. No obstante, la incertidumbre sobre el comienzo y la velocidad de la normalización de la política monetaria en los Estados Unidos es alta. (iii) Los términos de intercambio del país continúan altos, pero inferiores a los de años anteriores. Hacia adelante no se espera un alza de los mismos, en un escenario de recuperación pausada de la economía mundial y de mejores condiciones esperadas de oferta mundial de petróleo. (iv) En septiembre la producción industrial sin trilla de café volvió a presentar una caída en términos anuales. El crecimiento anual de las ventas del comercio al por menor fue bajo, aunque para el tercer trimestre registró una tasa de aumento similar a la observada en el segundo. (v) Las cifras a octubre dan cuenta de una recuperación de la confianza de los hogares y de una mejora en la dinámica de las ventas de bienes durables y en la percepción de ventas de los comerciantes. El crecimiento de la demanda de energía de la industria aumentó y las encuestas sugieren un repunte en los despachos y en las expectativas de producción a tres meses del sector manufacturero. (vi) Por lo anterior, el equipo técnico no modificó su estimación de crecimiento para el tercer trimestre (entre 3,8% y 5,4%) ni para todo 2013 (entre 3,5% y 4,5%). (vii) En octubre el crecimiento del crédito total se desaceleró, aunque continúa siendo superior al aumento del PIB nominal. La mayoría de tasas de interés nominales de crédito se redujeron en el mes. En términos reales se mantienen por debajo de sus promedios históricos (exceptuando las de tarjetas de crédito) e impulsan el crecimiento económico. (viii) La inflación anual al consumidor presentó un fuerte descenso no esperado, de 2,27% en septiembre a 1,84% en octubre, explicado principalmente por una caída transitoria en el ritmo de aumento de los precios de los alimentos. (ix) Las expectativas de inflación a un año de los analistas económicos, así como las derivadas de los papeles de deuda pública con plazos menores a cinco años, disminuyeron y se sitúan por debajo de 3%. En la medida en que los choques de oferta se diluyan y la demanda agregada continúe impulsada por la política monetaria expansiva es de esperar que las expectativas converjan hacia la meta de largo plazo. En resumen, se prevé que el crecimiento económico en 2013 sea similar al observado en el año anterior. En la medida en que el choque de oferta de alimentos se diluya, la inflación y sus expectativas deberían volver al rango objetivo y retomar su convergencia hacia la meta de largo plazo (3%). Las tasas de interés se mantienen en niveles que estimulan el gasto agregado de la economía. Los miembros de la Junta coincidieron en la conveniencia de mantener inalterada la tasa de interés de intervención. Algunos enfatizaron que la información disponible a partir de la reunión de Junta anterior mostró señales mixtas; con variables que se comportaron mejor a lo esperado y otras por debajo de las expectativas. Consideraron además que si en el futuro la información disponible sugiere una consolidación de las expectativas de inflación a la baja, con un crecimiento igual o menor de lo esperado, podría haber espacio para un impulso monetario aún mayor al actual. Habría también que tener en cuenta los posibles efectos de una disminución en la compra de activos por parte de la FED (“tapering”) sobre las variables financieras del país. Además, otros miembros añadieron que es necesario tener una respuesta simétrica frente a las desviaciones de la inflación proyectada frente a la meta. Esto significa que es tan poco deseable superar el techo del rango meta, como estar por debajo del mismo. Finalmente se discutió sobre la necesidad de evaluar los indicios de que el PIB potencial sea mayor que el estimado, al igual que la permanencia de éste fenómeno y los efectos que ello tenga lugar en la senda de política, por lo que podría ser necesario hacer ajustes con el propósito de acelerar la convergencia de la inflación a la meta y el cierre de la brecha del producto. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva por unanimidad consideró apropiado mantener la tasa de interés de intervención en 3,25%. Adicionalmente la Junta ratificó su compromiso con la meta de inflación de largo plazo de 3% y reitera que las acciones de política monetaria continuarán dirigidas a que la inflación converja a dicho valor. De esta forma, definió una meta de inflación de 3% para efectos legales en 2014, con un rango de +/- 1 pp. Una inflación baja y estable es la mejor contribución que puede hacer la política monetaria al crecimiento sostenible del producto y del empleo. La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo del comportamiento y proyecciones de la actividad económica e inflación en el país, de los mercados de activos y de la situación internacional. Finalmente, reitera que la política monetaria dependerá de la información disponible.
2013-12-01
- Minutas de la reunión de la JDBR del 20 de diciembre de 2013 El 20 de diciembre de 2013 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores doctores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca, César Vallejo Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo. En las minutas se presenta un resumen de la situación inflacionaria y del crecimiento económico, y sus perspectivas, elaborada por el equipo técnico (sección 1) y se reseñan las principales discusiones y opciones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2). 1. SITUACIÓN INFLACIONARIA Y DE CRECIMIENTO ECONÓMICO a. Desarrollos recientes de la inflación En noviembre, la inflación anual al consumidor fue 1,76%, 8 puntos base (pb) menos que en octubre. Para el año corrido, el dato asciende a 1,67%, menor que el incremento acumulado en igual período del año pasado (2,34%). El descenso de la inflación en noviembre se explicó principalmente por el componente de regulados. En la canasta de alimentos, la variación anual cerró el mes en 0,62%, 4 pb menos que el mes pasado. El cambio anual en los precios de las comidas fuera del hogar y en el de los alimentos procesados presentó caídas de 23 pb y 15 pb, respectivamente. Dentro de este segundo grupo, los precios de los productos de origen importado o de otros producidos en el país pero altamente transables, se han mantenido sin cambios o incluso han continuado cayendo, en consonancia con los menores precios internacionales y con las pocas presiones provenientes del tipo de cambio. Por su parte, los precios de los alimentos perecederos cayeron 2,1%, caída menor a la observada en octubre (-2,8%). La variación anual del IPC sin alimentos en noviembre se situó en 2,21%, 10 pb menos que el mes anterior. Es de destacar el descenso de 62 pb en la variación anual del IPC de regulados (0,5% anual), que nuevamente es atribuible a los servicios públicos (tarifas de energía eléctrica) y al descenso en los precios de los combustibles, que en el último mes fue de -3,95% anual. La depreciación acumulada del peso en lo corrido del año y aumentos leves en los precios de algunos bienes importados mantienen la variación anual de los precios de los bienes transables sin alimentos en 1,4%. Por otra parte, los no transables sin alimentos presentaron una variación anual de 3,7%, 6 pb por encima del registro anterior. La variación anual de arriendos, el principal componente del grupo, se mantuvo en 3,6%. El promedio de los cuatro indicadores de inflación básica monitoreados por el Banco de la República se situó en noviembre en 2,46%, 2 pb más que el mes anterior. Este indicador ha mostrado estabilidad en torno a 2,5% desde febrero de este año. El IPP cayó en noviembre frente al mismo mes del año anterior 1,3%, caída inferior a la de octubre (1,9%) El componente local aumentó frente al mes pasado (57 pb). El componente importado aumentó 1,2% anual, cifra superior a la registrada el mes pasado (0,95%). En noviembre, las expectativas de inflación continuaron situándose por debajo de la meta de largo plazo aunque en el rango establecido por la Junta Directiva. La encuesta mensual efectuada a analistas del mercado financiero muestra una inflación esperada a 12 meses de 2,89%, 3 pb menos que lo obtenido hace un mes; para diciembre de este año el mercado espera una cifra de 1,86%. Por su parte, las expectativas derivadas de los TES a horizontes de 2 y 3 años se mantuvieron relativamente estables ubicándose entre 2,3% y 2,6%. Las de horizontes a 5 años aumentaron un poco situándose cerca de 2,8%. b. Crecimiento Según la información publicada por el DANE, la economía colombiana se expandió 5,1% en términos anuales durante el tercer trimestre de 2013. Esta cifra, que significó una aceleración importante frente a los registros de la primera mitad del año, se ubicó en la parte superior del intervalo de pronóstico presentado en el anterior Informe sobre Inflación (entre 3,8% y 5,2%). En lo corrido del año a septiembre el crecimiento del PIB (3,9% anual) fue similar a la proyección central del equipo técnico del Banco de la República. Durante el trimestre julio – septiembre la demanda interna creció a buen ritmo (6,0% anual). Esto gracias a un muy buen desempeño de la construcción de edificaciones (26,7% anual) y de obras civiles (18,2% anual), a una fuerte expansión del consumo público (5,7% anual) y a un crecimiento del consumo de los hogares (4,0% anual) cercano a su promedio histórico. En lo que respecta a las cuentas de comercio exterior, las exportaciones se desaceleraron en términos anuales frente al segundo trimestre (1,9% vs 7,8%) por cuenta de diversos choques de oferta en la producción minera que afectaron considerablemente las ventas al exterior. En el caso de las importaciones, se reportaron mayores tasas de crecimiento anual frente al segundo trimestre de 2013 (2,9% vs 1,3%). Por el lado de la oferta, los sectores que mayor crecimiento anual registraron durante el tercer trimestre fueron la construcción (21,3%), la agricultura (6,6%) y explotación de minas y canteras (6,1%). La industria continuó siendo la rama de peor desempeño (-1,0%). Otros sectores como el comercio y el financiero mantuvieron un ritmo de expansión favorable creciendo a tasas anuales de 4,3% y 4,9% respectivamente. En el cuarto trimestre de 2013, el consumo de los hogares podría continuar dinámico. Esto se desprende de indicadores como las ventas al por menor publicadas por el DANE que muestran que en octubre crecieron a una tasa anual de 6,6% y excluyendo vehículos a 4,5%. Parte de este crecimiento es explicado por una baja base de comparación el año pasado. La Encuesta Mensual de Expectativas Económicas (EMEE) del Banco de la República revela igualmente que con datos a octubre, las expectativas de ventas son mayores que las registradas en promedio para el tercer trimestre del año. Por otra parte, en noviembre el índice de confianza del consumidor (ICC) publicado por Fedesarrollo muestra registros similares a los observados en el mes de octubre y mejoras leves en los indicadores de expectativas. Igualmente el crecimiento de las importaciones de bienes de consumo (8,4% real) así como la estabilidad del crecimiento anual de la cartera de consumo (12,7%), apuntan a que el consumo mantenga el dinamismo observado en los últimos trimestres. En lo referente a la inversión, la Encuesta Mensual de Expectativas Económicas (EMEE) del Banco de la República con datos a octubre, sugiere un buen comportamiento de la inversión distinta de aquella realizada en construcción de edificaciones y de obras civiles en el último trimestre del año. La información de importaciones de bienes de capital muestra que en el mes de octubre las compras de ese tipo de bienes continúan en niveles elevados creciendo 5,3% en pesos reales (según estimaciones del equipo técnico). Para las exportaciones totales en dólares, la variación anual en octubre fue de -11%. Esta disminución obedece a la caída conjunta de las ventas externas de bienes mineros (-14,4%), agrícolas (-7,4%) y del rubro de industriales y otras (-0,4%). Por otra parte, las importaciones totales en dólares crecieron 2,7% respecto al mismo período del año anterior. Por el lado de la oferta, los pocos indicadores disponibles muestran que sectores como la minería, el comercio y la construcción continuarían mostrando crecimientos altos en el cuarto trimestre del año. El ministerio de Minas y Energía informó que la producción de petróleo en noviembre alcanzó el millón doce mil barriles diarios (1.012 MBD), lo cual implica un crecimiento de 2,63% respecto a octubre y de 4,3% frente al mismo mes de 2012. En el caso del comercio, además de los resultados de la muestra mensual manufacturera del DANE mencionados anteriormente, la encuesta de FENALCO a noviembre mostró que la percepción de los comerciantes sobre la situación de las ventas actuales y sobre las expectativas de ventas a 6 meses mantuvo una tendencia ascendente. Para la construcción, con cifras a octubre, la producción y los despachos de cemento crecieron anualmente 18,4% y 13,9%, respectivamente. Para la industria, las cifras publicadas por el DANE para el mes de octubre, reportan un crecimiento anual negativo aunque cercano a cero (-0,1%). En el año corrido cae 2,4%. El debilitamiento de la industria continúa, pero a un menor ritmo comparado con meses anteriores (en agosto y septiembre había caído 3,9% y 1,8%, respectivamente). En noviembre la demanda de energía de la industria creció 3,1% anualmente y el componente tendencial comenzó a mostrar una pendiente positiva. Esto tiene una alta correlación con la producción industrial, por lo que su dinámica reciente sugiere recuperaciones de la industria hacia el cuarto trimestre. Igualmente, la importación de materias primas en el mes de octubre sugiere que la actividad productiva se expande al inicio del cuarto trimestre a un buen ritmo. Para ese mes el nivel de esas importaciones continuó alto, con una tasa de crecimiento de 10,2% en pesos reales (según estimaciones del equipo técnico). Con los anteriores resultados, el equipo técnico no modificó el rango estimado de crecimiento para todo 2013 (entre 3,5% y 4,5%). Esto implica que el crecimiento económico en el segundo semestre sería considerablemente mayor al observado en el primero. Se debe señalar que el comportamiento de la inversión en obras civiles, de la construcción de vivienda y del consumo público es una fuente de alta incertidumbre sobre estas proyecciones. c. Variables Financieras El crédito bancario (M/N y M/E) en noviembre registró una tasa anual de crecimiento de 13,30%, nivel inferior al observado el mes anterior (14,03%). La cartera en moneda nacional se desaceleró de 13,74% en octubre a 13,48% en noviembre y la de moneda extranjera también lo hizo de 19,35% a 11,10%. Por destinos, la cartera a los hogares registró un crecimiento anual en noviembre de 13,51%, levemente mayor al del mes anterior (13,28%). Esto fue explicado por el comportamiento del crédito de hipotecario que aumentó entre octubre y noviembre de 14,37% a 14,80%; por su parte el crédito de consumo se desaceleró ligeramente pasando de crecer a una tasa anual de 12,66% a 12,45% en el mismo periodo. En cuanto a la cartera comercial, la tasa de crecimiento anual en noviembre (13,32%) fue inferior a la del mes anterior (14,45%), explicado por la moderación en el componente de moneda nacional (de 13,99% en octubre a 13,65% en noviembre) y por la desaceleración en el componente en moneda extranjera (de 18,85% a 10,16%). Las tasas de interés de los préstamos desembolsados por los establecimientos de créditos desde el inicio de los recortes en la tasa de política en julio de 2012, han acumulado reducciones de: -224 pb para los créditos hipotecarios, -206 pb para los de consumo y -184 pb para los créditos de construcción. La magnitud del descenso de las tasas de interés reales ha sido inferior por el efecto de la menor tasa de inflación, con rebajas durante este mismo período de: -163 pb para créditos hipotecarios, - 141 pb para créditos de consumo y -124 pb para créditos para construcción. Los niveles de las tasas de interés reales en septiembre de los créditos de consumo, hipotecarios, preferenciales, comercial ordinario y comercial de tesorería y de construcción se sitúan por debajo de sus promedios históricos calculados desde 2000. Por el contrario, los créditos otorgados con tarjeta de crédito se encuentran por encima de su promedio. d. Contexto Externo En los últimos meses la actividad global ha seguido recuperándose, principalmente en las economías avanzadas y en menor medida en algunos países emergentes de Asia. En general, los indicadores de actividad globales en los sectores de manufacturas y servicios se mantienen en terreno expansivo y el comercio global presenta síntomas de reactivación. En los Estados Unidos, las más recientes cifras sobre crecimiento económico muestran que la economía se expandió en el tercer trimestre del año a una tasa superior a la pronosticada por los analistas. Con información a noviembre, las ventas al por menor y la producción industrial sorprendieron al alza y mostraron que la economía seguiría expandiéndose a un ritmo modesto en el último trimestre del año. De igual forma, las cifras de empleo para este mismo mes fueron alentadoras y presentaron un ritmo de contratación favorable. Por otra parte, es de anotar que recientemente el Congreso de los Estados Unidos aprobó un plan que evitaría la implementación de ciertos recortes automáticos en 2014 y 2015 y que daría algún alivio a las discusiones fiscales en los próximos años. Así en los siguientes trimestres la economía enfrentaría un menor retroceso por el lado fiscal y quizás alguna menor incertidumbre proveniente de este frente. En la zona del euro, con cifras a noviembre, los indicadores de confianza empresarial y los de actividad en los sectores de manufacturas y servicios muestran señales de una expansión de la economía a un ritmo modesto. Igualmente se evidencia alguna divergencia en las cifras de actividad real en los países de la región. En particular mientras Alemania se expande a un ritmo favorable, en Francia se percibe algún debilitamiento de la actividad real. A pesar de la mejoría de los indicadores de confianza, las ventas al por menor siguen deprimidas, el mercado laboral presenta altas tasas de desempleo, la fragmentación financiera continúa y el crédito no muestra señales favorables. En este sentido, la región sigue siendo vulnerable a choques tanto internos como externos. Para el caso de las economías emergentes, en China la actividad real continúa expandiéndose a un ritmo favorable aunque inferior al observado en los últimos 5 años. Con información a noviembre el comportamiento de las ventas al por menor, de las exportaciones y de la producción fue mejor que lo esperado. Por su parte, en América Latina, la actividad real ha seguido desacelerándose en Chile, mientras que en Brasil se expande a un rimo modesto. En relación con los precios internacionales del petróleo, éstos se han mantenido en niveles relativamente altos frente a lo observado en la primera mitad del año, lo que ha estado un poco por encima de lo esperado. Para el caso de las cotizaciones externas del carbón y del níquel se ha observado alguna estabilidad. Los precios del café han seguido cayendo. Por su parte, los precios externos de los alimentos continuaron en niveles relativamente bajos, con algunos repuntes menores. En este contexto, la inflación en las principales economías desarrolladas continuó en niveles bajos, que junto a una actividad económica que crece por debajo de su potencial, explica la postura monetaria de sus bancos centrales. En el caso de las economías emergentes la situación es más heterogénea, pues mientras algunos países como Colombia, Taiwán y Corea presentan inflaciones bajas y decrecientes; otros, como Brasil, India e Indonesia, evidencian mayores incrementos en sus niveles de precios. Los términos de intercambio bajaron en octubre pero continúan en niveles altos. No se espera un alza de términos de intercambio, en un escenario de recuperación pausada de la economía global y de mejores condiciones esperadas de oferta mundial de petróleo. Finalmente, la Reserva Federal de los Estados Unidos (FED) en su reunión del 17-18 de diciembre decidió reducir sus compras de activos financieros en 10 mil millones de USD comenzando en enero de 2014. De esta forma, la FED compraría 40 mil millones en bonos del tesoro y 35 mil millones en MBS. La evolución favorable del mercado laboral y de otras variables económicas y financieras motivaron esta decisión. El forward guidance sobre las condiciones bajo las cuales la tasa de fondos federales subiría, se modificó afirmando que esta tasa se mantendría en niveles bajos más allá del momento en que la tasa de desempleo se ubique por debajo de 6,5%, especialmente si las proyecciones de inflación continúan por debajo de la meta de largo plazo (2%). La FED insistió en que la postura de la política monetaria sigue dependiendo de la evolución de la economía, en particular del mercado laboral y de la inflación. En relación con las proyecciones de crecimiento y de tasa de desempleo se presentaron algunas mejoras para 2013 y 2014. Hasta el momento, la reacción de algunos indicadores del mercado no ha sido muy fuerte ante el anuncio. Las tasas de interés de los títulos de deuda pública de los Estados Unidos, el VIX y la cotización del dólar frente a las principales monedas no han presentado cambios significativos en sus niveles. Similar conclusión se puede derivar de los indicadores financieros en los mercados emergentes: las primas de riesgo, el precio del dólar en moneda local y las tasas de interés de los títulos de deuda pública no han variado sustancialmente. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA La Junta Directiva tomó en consideración los siguientes aspectos relevantes: (i) La nueva información sugiere que la economía mundial se recupera de forma lenta y algo mejor a lo previsto. En los Estados Unidos el crecimiento del PIB del tercer trimestre fue revisado al alza y las cifras a noviembre siguen mostrando recuperación aunque a una tasa modesta. La zona del euro probablemente está creciendo de nuevo y las grandes economías emergentes de Asia y de América Latina crecen de forma heterogénea. (ii) En los Estados Unidos la Reserva Federal anunció que en el mes de enero comprará un monto inferior de activos financieros y ratificó su compromiso de mantener el actual nivel de tasa de interés por un periodo prolongado. (iii) Los términos de intercambio bajaron en octubre pero continúan en niveles altos. No se espera un alza de términos de intercambio, en un escenario de recuperación pausada de la economía global y de mejores condiciones esperadas de oferta mundial de petróleo. (iv) En Colombia, el crecimiento económico del tercer trimestre fue superior al estimado, debido principalmente al dinamismo de la construcción. El gasto público se aceleró y el consumo de los hogares creció a buen ritmo. Las exportaciones tuvieron un crecimiento bajo e inferior al de las importaciones. En lo corrido del año a septiembre el crecimiento del PIB (3,9%) fue similar a lo proyectado por el equipo técnico del Banco de la República. (v) Para el cuarto trimestre de 2013, los indicadores de confianza del consumidor, de expectativas económicas, de comercio al por menor y de ventas de automóviles, sugieren que el consumo de los hogares crece a buen ritmo. La aceleración en el crédito hipotecario también indica una dinámica favorable en la inversión en edificaciones. Por el lado de la oferta, en octubre la industria sin trilla de café volvió a descender (-0,1%) aunque a un menor ritmo que el registrado un mes atrás. (vi) Con los anteriores resultados, el equipo técnico no modificó el rango estimado de crecimiento para todo 2013 (entre 3,5% y 4,5%), el cual contiene 4,1% como cifra más probable. Esto significa que el crecimiento económico en el segundo semestre será considerablemente mayor al observado en el primero. (vii) En noviembre el crecimiento del crédito total se desaceleró, aunque continúa siendo superior al aumento del PIB nominal. La mayoría de tasas de interés nominales de crédito se redujeron en el mes. En términos reales se mantienen por debajo de sus promedios históricos (exceptuando las de tarjetas de crédito) e impulsan el crecimiento económico. (viii) La inflación anual al consumidor en noviembre se situó en 1,76%, cifra inferior a la esperada. Este hecho fue explicado principalmente por una desaceleración en la variación anual de los precios de los regulados y de los alimentos. El promedio de inflaciones básicas se mantuvo estable en 2,46%. (ix) Las expectativas de inflación a un año de los analistas económicos, así como las derivadas de los papeles de deuda pública con plazos menores a cinco años se mantuvieron relativamente estables y se sitúan por debajo de 3%. En resumen, se prevé que el crecimiento económico en 2013 sea similar al observado en el año anterior. Las tasas de interés se mantienen en niveles que estimulan el gasto agregado de la economía. Hecha la evaluación del balance de riesgos, la Junta Directiva consideró apropiado mantener inalterada la tasa de interés de referencia. Los miembros de la Junta coincidieron en la conveniencia de mantener inalterada la tasa de interés de intervención. Algunos enfatizaron la información reciente sobre la dinámica de la demanda interna y el crecimiento del producto y el hecho de que la actual postura monetaria es expansiva y las expectativas de inflación a doce meses se encuentran ancladas a niveles cercanos a la meta. Además, que el bajo nivel de inflación obedece fundamentalmente a choques de oferta con algunos componentes transitorios. Otro codirector expresó que la información contenida en el informe indica un buen comportamiento tanto de la oferta como de la demanda agregada. Por el lado de la oferta, el comportamiento de la producción, los precios, el empleo y los salarios muestra un buen crecimiento del PIB potencial que muy probablemente se mantendrá en el horizonte de política, gracias a las altas tasas de inversión y a los efectos de las reducciones en los impuestos a la nómina sobre el mercado laboral. Desde el punto de vista de la demanda agregada, la información reciente muestra un incremento en el dinamismo tanto público como privado, lo que aumenta la probabilidad de que, con la actual postura de política monetaria, se vayan cerrando paulatinamente las brechas de producto e inflación. Adicionalmente, otro miembro consideró que el hecho de que la tasa de crecimiento del PIB esté aumentando en tanto que la tasa de inflación está por debajo de la meta y cayendo, arroja indicios de que el PIB potencial puede ser mayor al estimado, la NAIRU inferior, y la brecha del producto más negativa que lo indicado por los índices que hasta ahora se vienen calculando. Por tanto, lo apropiado es asumir y comunicar el compromiso de mantener inalterada la tasa de interés por un período prolongado, al menos hasta la mitad del próximo año, o aún más allá, hasta que sea evidente la convergencia de la inflación hacia la meta y el cierre de la brecha del producto. Finalmente, otros miembros añadieron que considerando que el nivel actual de inflación ha estado por debajo de la meta durante varios meses es necesario evaluar la coherencia de la tasa de política monetaria ante los indicios de que el PIB potencial sea mayor que el estimado. Por lo anterior, podría llegar a ser necesario hacer ajustes con el propósito de acelerar la convergencia de la inflación a la meta y el cierre de la brecha del producto. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva por unanimidad consideró apropiado mantener la tasa de interés de intervención en 3,25%. La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo del comportamiento y proyecciones de la actividad económica e inflación en el país, de los mercados de activos y de la situación internacional. Finalmente, reitera que la política monetaria dependerá de la información disponible. Bogotá DC, enero 03 de 2014.
2014-01-01
- Minutas de la reunión de la JDBR del 31 de enero de 2014 El 31 de enero de 2014 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores doctores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca, César Vallejo Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo. En las minutas se presenta un resumen de la situación inflacionaria y del crecimiento económico, y sus perspectivas, elaborada por el equipo técnico (sección 1) y se reseñan las principales discusiones y opciones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2). 1. SITUACIÓN INFLACIONARIA Y DE CRECIMIENTO ECONÓMICO a. Desarrollos recientes de la inflación En diciembre, la inflación anual al consumidor (1,94%) registró una aceleración de 18 puntos base (pb) frente al registro de noviembre. Este aumento se concentró en los índices de regulados y de alimentos. De esta manera, la inflación al consumidor en 2013 fue 50 pb menos que lo registrado durante 2012. En la canasta de alimentos, la variación anual cerró el mes en 0,86%, 24 pb más que noviembre. En términos de variaciones anuales, la aceleración se concentró en los alimentos primarios (de -2,09% a -0,16%). De la misma manera, en diciembre se presentó una aceleración moderada en comidas fuera del hogar (de 3,08% a 3,26%) mientras que en alimentos procesados se observó una ligera desaceleración frente al mes anterior (de -0,10% a -0,24%). La variación anual del IPC sin alimentos en diciembre se situó en 2,36%, 15 pb más que el mes anterior. Es de destacar el aumento de 60 pb en la variación anual del IPC de regulados (1,05% anual), atribuible principalmente a los servicios públicos (tarifas de energía eléctrica). En los otros rubros de la sub canasta, los cambios que se dieron en la variación anual fueron menores. La de combustibles terminó en el año en terreno negativo (-3,2%). Las otras subcanastas del IPC sin alimentos, transables y no transables no presentaron cambios de importancia. En el primer caso, la variación anual en diciembre mantuvo el nivel del mes pasado (1,4%). Los precios de esta canasta se vienen acelerando desde niveles muy bajos a lo largo del año siguiendo la depreciación de la tasa de cambio. Por otra parte, los no transables presentaron una variación anual de 3,76%, 3 pb por encima del registro anterior. La variación de los precios de esta canasta ha permanecido estable en los últimos meses lo que sugiere que las presiones originadas en la demanda continúan siendo moderadas. El promedio de los cuatro indicadores de inflación básica monitoreados por el Banco de la República se situó en diciembre en 2,51%, 5 pb más que el mes anterior. Esta medición ha presentado pocos cambios después del descenso de comienzos de año, fluctuando alrededor de 2,5%. La variación anual del IPP aumentó en diciembre a -0,5% de -1,3% en noviembre. Tanto el componente local como el componente importado aumentaron frente al mes pasado. (En el primer caso el aumento fue de 90 pb mientras que para el segundo fue de 55 pb). Las expectativas de inflación a diferentes horizontes no presentaron cambios importantes en el último mes. Según la encuesta mensual del Banco de la República efectuada a analistas del mercado financiero, la inflación esperada a doce meses es de 2,85%, solo 4 pb menos que la obtenida el mes pasado. En esta misma encuesta, la inflación prevista para diciembre de 2014 es de 2,80%. Por su parte, la encuesta trimestral del Banco efectuada a empresarios muestra unas expectativas de inflación a doce meses de 2,7%, un poco menos que la medición de octubre (2,9%). Finalmente, las expectativas obtenidas de la curva de TES a 2, 3 y 5 años aumentaron un poco en lo corrido de enero, para converger al 3,0%. b. Crecimiento Los indicadores disponibles para el último trimestre de 2013 sugieren que el PIB se habría expandido a una tasa por debajo de la registrada para el tercer trimestre. Sin embargo, es de esperar que esta se ubique por encima del promedio de la primera mitad del año. En lo que respecta el consumo privado, se espera que este crezca a una tasa similar a la del trimestre anterior. Esto se desprende del comportamiento de las ventas al por menor de la Muestra Mensual de Comercio al por Menor (MMCM) que muestran que en noviembre crecieron anualmente 5,3% (5,9% para el bimestre octubre-noviembre), cifra mayor que la registrada para el tercer trimestre (4,9%). Al descontar el segmento de ventas de vehículos y automotores, las ventas minoristas crecieron 8,7% (6,7% en el bimestre), lo que significó una aceleración frente a lo registrado para el tercer trimestre (4,0%). En línea con lo anterior, el balance de ventas de la Encuesta Mensual de Expectativas Económicas del Banco de la República (EMEE) muestra que durante octubre y noviembre los comerciantes percibieron una demanda ligeramente mayor que la observada durante el tercer trimestre. Por su parte, el índice de confianza del consumidor a diciembre no mostró variaciones importantes con respecto a los niveles de noviembre y octubre. De igual manera, el buen desempeño del mercado laboral así como la estabilidad en la tasa de crecimiento de la cartera de los hogares apuntan a que el consumo de los hogares mantenga la dinámica observada en el tercer trimestre. En lo referente a la inversión, de acuerdo al balance de expectativas de inversión de la Encuesta Mensual de Expectativas Económicas del Banco de la República (EMEE), la formación bruta de capital sin inversión en obras civiles ni construcción habría crecido a tasas importantes y mayores en el cuarto trimestre que las observadas en el tercero. Las cifras de importación de bienes de capital para la industria en términos reales confirman esto. La inversión en equipo de transporte seguiría cayendo en términos anuales, aunque a un ritmo cada vez menor. Para la inversión en obras civiles se supone que se mantendrían los altos niveles observados en el tercer trimestre. Lo mismo se puede esperar de la inversión en construcción. En materia de comercio exterior, en noviembre, la variación anual de las exportaciones totales fue de 2,6%. Este crecimiento es el resultado de mayores exportaciones de bienes mineros (5,7%) y agrícolas (1%). El aumento de las exportaciones mineras se explica por el incremento de las ventas externas de crudo (15,9%) y derivados (15,2%). Del lado de las exportaciones agrícolas solo se registró crecimiento en café (21,1%). Las exportaciones de bienes industriales y otros disminuyeron 6,1%, en gran medida por las caídas en los rubros de resto de industriales (-27,9%), resto de agrícolas (-56%) y vehículos (-19,6%). Por su parte, las importaciones totales en noviembre registraron un retroceso de 1,8% respecto al mismo mes del año anterior. Dicho comportamiento se explica por la disminución en las importaciones de bienes de capital (-6,8%) y de bienes de consumo (-3%), compensadas parcialmente por el aumento de las importaciones de materias primas (3,3%). Por el lado de la oferta, los indicadores disponibles para la industria muestran que el estancamiento del sector no ha sido superado aún. La variación anual del IPI sin trilla de café para el mes de noviembre fue de -0,6%. El componente tendencial se aplanó nuevamente. Adicionalmente, de acuerdo con Fedesarrollo la confianza industrial disminuyó en noviembre. El indicador de pedidos registró una caída, mientras que el indicador de existencias (contra-cíclico a la producción) no reportó cambios. Sin embargo, en este caso el componte tendencial continúa mostrando un comportamiento favorable para las dos variables. Por su parte, las expectativas de la producción a tres meses disminuyeron significativamente. En contraste, la demanda de energía no regulada industrial, la cual tiene una alta correlación con el IPI, creció en diciembre a una tasa anual de 6,4%. En el caso del comercio, en la encuesta de Fedesarrollo para noviembre los empresarios señalaron algunas mejorías, tanto en su percepción de la situación actual del negocio como de su situación futura. Algunas cifras asociadas con la minería, en particular con el petróleo, continuaron mostrando crecimiento en el cuarto trimestre de 2013, aunque a un menor ritmo frente al tercero. De acuerdo con la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), la producción de petróleo en diciembre se ubicó en un millón catorce mil barriles diarios. Durante el cuarto trimestre, se produjo un millón cuatro mil barriles diarios en promedio, con lo cual se registró una desaceleración (a 3,3% desde el 8,8% del tercer trimestre). Todo lo anterior permite fijar el rango de pronóstico de crecimiento anual del PIB para el cuarto trimestre entre 4,0% y 5,0%, con una tasa más probable de 4,5%. De esta manera, el rango de pronóstico para el crecimiento de la economía en 2013 se ubicaría entre 3,7% y 4,3%. Se debe señalar que el comportamiento de la inversión en obras civiles, de la construcción y del consumo público es una fuente de alta incertidumbre sobre estas proyecciones. La situación para 2014 es aún incierta, pero se calcula que el PIB se expandiría a tasas similares a las registradas para todo 2013. Dentro de los factores que mantendría la dinámica del crecimiento en Colombia están i) un mayor dinamismo de la demanda externa y de los socios comerciales, ii) un flujo de IED que seguirá siendo favorable, iii) una política monetaria que seguiría teniendo efectos expansivos sobre la actividad real, iv) una inflación baja que favorecería el poder adquisitivo del ingreso de los hogares, y v) un mercado laboral que seguiría mostrando un dinamismo importante. Por otro lado, se esperan niveles favorables de los términos de intercambio, aunque por debajo de lo observado en 2013. En materia de inversión en obras civiles y construcción de edificaciones se supone una expansión menor que la del año pasado, pero todavía significativa. Lo anterior permitiría fijar un rango de pronóstico para la expansión del PIB en 2014 entre 3,3% y 5,3%, con 4,3% como cifra más probable. c. Variables Financieras El crédito bancario (M/N y M/E) en diciembre registró una tasa anual de crecimiento de 12,19%, nivel inferior al observado el mes anterior (13,30%). La cartera en moneda nacional se desaceleró de 13,48% en noviembre a 12,91% en diciembre y la de moneda extranjera también lo hizo de 11,10% a 1,65%. Por destinos, la cartera a los hogares registró un crecimiento anual en diciembre de 13,16%, levemente inferior al del mes anterior (13,51%). Esto fue explicado por el comportamiento del crédito de consumo que disminuyó entre noviembre y diciembre de 12,45% a 11,95%; por su parte el crédito para adquisición de vivienda se aceleró ligeramente pasando de crecer a una tasa anual de 14,80% a 15,37% en el mismo periodo. En cuanto a la cartera comercial, la tasa de crecimiento anual en diciembre (11,55%) fue inferior a la del mes anterior (13,32%), explicado por la moderación en el componente de moneda nacional (de 13,65% en noviembre a 12,76% en diciembre) y por la desaceleración en el componente en moneda extranjera (de 10,16% a 1,30%). Las tasas de interés de los préstamos desembolsados por los establecimientos de créditos desde el inicio de los recortes en la tasa de política en julio de 2012, han acumulado reducciones de: -226 pb para los créditos hipotecarios, -203 pb para los de consumo y -215 pb para los créditos de construcción. La magnitud del descenso de las tasas de interés reales ha sido inferior por el efecto de la menor tasa de inflación, con rebajas durante este mismo período de: -181pb para créditos hipotecarios, - 156 pb para créditos de consumo y -170 pb para créditos para construcción. Los niveles de las tasas de interés reales en septiembre de los créditos de consumo, hipotecarios, preferenciales, comercial ordinario y comercial de tesorería y de construcción se sitúan por debajo de sus promedios históricos calculados desde 2000. Por el contrario, los créditos otorgados con tarjeta de crédito se encuentran por encima de su promedio. d. Contexto Externo Durante el cuarto trimestre de 2013 la actividad económica global continuó recuperándose gracias al mayor dinamismo de las economías desarrolladas, con los Estados Unidos a la cabeza. Las grandes economías emergentes de Asia y América Latina crecen de forma heterogénea con tasas inferiores o cercanas a las potenciales. Durante el mismo periodo, a nivel global los índices de actividad manufacturera y de comercio tuvieron un comportamiento favorable. En los Estados Unidos, la confianza de los consumidores se ha recuperado tras las caídas producidas por la incertidumbre fiscal de meses anteriores. De igual forma, con información a diciembre, los indicadores sobre industria y ventas al por menor tuvieron un comportamiento favorable. En relación con el mercado laboral, la tasa de desempleo siguió cayendo; sin embargo el ritmo de creación de empleo se ha desacelerado, lo que hace presumir que la tasa de participación también se ha reducido. Los indicadores del mercado de vivienda evidenciaron un mejor comportamiento en los últimos meses, después de la desaceleración observada en el tercer trimestre. En relación con la política fiscal, en los dos últimos meses se llegó a importantes acuerdos en el frente fiscal que reducen la incertidumbre en el mediano plazo, al igual que parte del impacto contractivo del ajuste en las finanzas públicas. En las próximas semanas se deberá nuevamente discutir en el congreso el límite de endeudamiento del gobierno, pero se espera que dicha negociación se haga en esta ocasión con menos sobresaltos que los observados en los episodios anteriores, por lo que no debería afectar de manera significativa la confianza. Por su parte, en la zona del euro las cifras sobre actividad real para el cuarto trimestre muestran que la recuperación se habría mantenido en las últimas semanas del año. En este sentido, las ventas al por menor y la industria repuntaron levemente en los últimos meses. De igual forma, los índices de opinión empresarial en los sectores de manufacturas y servicios permanecieron en terreno positivo, mientras que la confianza de empresarios y consumidores mostró señales favorables. A pesar de los síntomas alentadores en la economía europea, es importante notar que la vulnerabilidad de la región se mantiene, en la medida en que la tasa de desempleo permanece en máximos históricos (en particular en las economías de la periferia), los mercados financieros continúan fragmentados y el crédito sigue contrayéndose (aunque a un menor ritmo). En relación con las economías emergentes, el crecimiento en China se aceleró en la segunda mitad del año debido al mayor dinamismo de la inversión. Esta economía tuvo en 2013 una tasa de crecimiento de 7,7% (igual a la de 2012). Para el caso de los países de América Latina, las cifras para el cuarto trimestre evidencian que la actividad real se debilitó en Brasil y Chile, mientras que en Perú mantuvo su ritmo de crecimiento; para el caso de México se observó alguna recuperación. En relación con los precios internacionales de los bienes básicos exportados por Colombia, durante el cuarto trimestre los precios internacionales del petróleo, del carbón y del níquel permanecieron relativamente estables, mientras que los del café continuaron mostrando una tendencia decreciente. Los precios de los alimentos no presentaron cambios significativos en los últimos meses del año y permanecieron en niveles inferiores a los observados en 2012. En este contexto, los términos de intercambio del país se mantuvieron por debajo de los niveles alcanzados en 2011 y 2012. En relación con la inflación, la variación en el nivel general de precios en las principales economías desarrolladas se situó por debajo de las metas de largo plazo fijadas por sus bancos centrales. En el caso particular de la zona del euro, la inflación total y básica llevan varios trimestres reduciéndose y en diciembre se ubicaron por debajo del 1%. En contraste, los precios siguieron aumentando en Japón. En las economías emergentes, el panorama inflacionario continuó siendo desigual; así, mientras en países como Chile, Colombia y Perú, la inflación fue relativamente baja; otras economías, como Brasil, India e Indonesia, siguieron presentando presiones alcistas. En el cuarto trimestre del año la percepción de riesgo hacia las economías de América Latina se mantuvo relativamente estable, aunque en un nivel mayor que el observado en la primera mitad del año. Una excepción fue Brasil, en donde la debilidad económica y la caída de la confianza afectaron las expectativas de crecimiento para los próximos trimestres, por lo que se vio un mayor aumento en las primas de riesgo. No obstante, en la última semana en las economías emergentes se ha observado una marcada depreciación de las monedas frente al dólar y desvalorizaciones en sus mercados accionarios y de deuda pública. La continuación del desmonte del estímulo monetario por parte de la FED en momentos en que se hacen evidentes menores perspectivas de crecimiento en algunas economías, parecen ser las causas del aumento de la percepción de riesgo. Las presiones han sido mayores en aquellos países con fundamentales de crecimiento más débiles: alta inflación, amplios déficits en cuenta corriente, reservas internacionales decrecientes, y alta dependencia de los flujos de capital de corto plazo. En este contexto, algunos bancos centrales como los de Brasil, Turquía, India y Sudáfrica incrementaron sus tasas de interés con el fin de aliviar las presiones cambiarias. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA La Junta Directiva tomó en consideración los siguientes aspectos relevantes: (i) En el cuarto trimestre de 2013 la actividad económica mundial continuó recuperándose gracias al mayor dinamismo de las economías desarrolladas, en especial de Estados Unidos. En la zona del euro los indicadores económicos sugieren un crecimiento trimestral bajo pero positivo. Las grandes economías emergentes de Asia y América Latina crecen de forma heterogénea con tasas cercanas o inferiores a las potenciales. Para 2014, las estimaciones sugieren que la recuperación global continuaría y que los socios comerciales del país tendrían un crecimiento promedio superior al registrado en 2013. (ii) La Reserva Federal de los Estados Unidos anunció que en febrero reducirá de nuevo el monto de compras de activos financieros y ratificó su compromiso de mantener el actual nivel de tasa de interés por un periodo prolongado. De esta forma, en la medida que los niveles de liquidez continúen siendo menos expansivos, el costo de financiación internacional puede aumentar. (iii) La mejora en las perspectivas de la economía de los Estados Unidos y sus implicaciones de política monetaria en ese país están afectando los mercados de bonos, acciones y monedas. El peso colombiano se ha devaluado frente al dólar. Por su parte, el precio internacional del petróleo continúa en niveles altos y los del carbón, níquel y café dejaron de descender. Con ello, es probable que los términos de intercambio se mantengan en niveles favorables. (iv) Para el cuarto trimestre de 2013, el equipo técnico proyecta un crecimiento económico entre 4% y 5%, con 4,5% como cifra más probable. El consumo de los hogares crecería a tasas similares a la de su promedio histórico. El mayor aumento lo presentaría la inversión. Las exportaciones se acelerarían pero con una dinámica inferior al de las importaciones. Por el lado de la oferta, los mayores crecimientos se presentarían en la construcción (edificaciones y obras civiles) y la agricultura. El sector minero se desaceleraría y el crecimiento de la industria (que incluye trilla de café) sería casi nulo. Con esta información se calcula que la economía colombiana creció en 2013 entre 3,7% y 4,3%. (v) Para el año 2014 se proyecta un crecimiento económico entre 3,3% y 5,3%, con 4,3% como cifra más probable. (vi) En diciembre el crecimiento del crédito total se desaceleró, aunque continúa siendo superior al aumento del PIB nominal. Las tasas de interés nominales de crédito se redujeron y las de consumo e hipotecarias permanecieron relativamente estables. En términos reales se mantienen por debajo de sus promedios históricos (exceptuando las de tarjetas de crédito) e impulsan el crecimiento económico. (vii) La inflación anual en diciembre fue de 1,94%, cifra similar a la proyectada y por debajo del límite inferior del rango meta establecido para 2013 (3% ± 1 pp.). El promedio de las medidas de inflación básica se situó en 2,5% y las expectativas de inflación a un año de los analistas económicos, así como las derivadas de los papeles de deuda pública con plazos menores a cinco años, son cercanas al 3%. Los miembros de la Junta Directiva consideraron que hay claros indicios de que la brecha del producto y la actual desviación de la inflación observada frente a la meta (brecha de inflación) se irán cerrando a lo largo de 2014. Sobre la magnitud, la velocidad del cierre de estas brechas y su relación con la actual brecha de inflación, persisten diferencias entre los miembros de la Junta. Asimismo, destacaron la incertidumbre existente sobre el efecto en la economía colombiana que pueda tener la normalización de la política monetaria de los Estados Unidos, directamente y a través de su impacto en otras economías emergentes. Finalmente, la junta recalcó el buen funcionamiento del marco de política monetaria, compuesto por el esquema de inflación objetivo y la flotación cambiaria, para afrontar los choques externos. Así, la brecha presente entre la inflación observada y la meta del Banco, el débil traspaso de la depreciación nominal al nivel de precios al consumidor, y un bajo nivel de descalces cambiarios en la economía, permiten que el tipo de cambio absorba los efectos de la coyuntura internacional, sin generar traumatismos a la economía colombiana y sin poner en riesgo el cumplimiento de la meta de inflación. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva por unanimidad consideró apropiado mantener la tasa de interés de intervención en 3,25%. La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo del comportamiento y proyecciones de la actividad económica e inflación en el país, de los mercados de activos y de la situación internacional. Finalmente, reitera que la política monetaria dependerá de la información disponible.
2014-02-01
- Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 28 de febrero de 2014 El 28 de febrero de 2014 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores doctores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca, César Vallejo Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo. En las minutas se presenta un resumen de la situación inflacionaria y del crecimiento económico, y sus perspectivas, elaborada por el equipo técnico (sección 1) y se reseñan las principales discusiones y opciones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2). 1. SITUACIÓN INFLACIONARIA Y DE CRECIMIENTO ECONÓMICO a. Desarrollos recientes de la inflación En enero, la inflación anual al consumidor (2,13%) registró una aceleración de 19 puntos base (pb) frente al registro de diciembre. Se observó un aumento tanto en la variación anual de los precios de los alimentos (1,2% anual) como en los de la canasta de sin alimentos (2,5% anual). En la canasta de alimentos, la variación anual cerró el mes en 1,20%, 34 pb más que diciembre. La aceleración se concentró en los precios de los alimentos perecederos (de -0,2% a 2,1% anual). Por otra parte, el ajuste en los precios de los alimentos procesados (-0,2% anual) continuó en terreno negativo sin mayores cambios, mientras que el componente de comidas fuera del hogar se mantuvo estable (3,3% anual). Dentro del IPC sin alimentos, las principales presiones al alza se originaron en el grupo de regulados y en el de transables. En regulados (1,7% anual) se registró un aumento de 61 pb en la variación anual frente al mes anterior. Sobresale el aumento en el precio de los combustibles en enero, después de 5 meses consecutivos de ajustes negativos; igualmente se dio un mayor ajuste en los precios de transporte público explicado por los cambios en las tarifas de Bogotá. Por su parte, la variación anual del IPC de transables sin alimentos ni regulados pasó de 1,4% en diciembre a 1,6% enero lo que podría explicarse por el comportamiento reciente del tipo de cambio. En enero se presentó un descenso de 15 pb en la variación anual del IPC de no transables sin alimentos ni regulados (3,6% anual), siendo este el nivel más bajo desde junio de 2012. El comportamiento de este indicador sugeriría escasas presiones de demanda sobre los precios al consumidor a comienzos de año. En el caso de arriendos, la variación anual siguió cayendo muy lentamente y se situó en 3,5%. El promedio de los cuatro indicadores de inflación básica monitoreados por el Banco de la República se situó en enero en 2,55%, 5 pb más que el mes anterior. Esta medición ha presentado pocos cambios desde comienzos de 2013 fluctuando alrededor de 2,5%. La variación anual del IPP aumentó 72 pb en enero y se situó en terreno positivo (0,2%) por primera vez desde septiembre de 2012. En buena parte este cambio en las tendencias se podría relacionar con la depreciación del peso y se da principalmente en el IPP importado (la variación anual aumentó 121 pb en enero frente a diciembre), aunque también en el IPP de producidos y consumidos se observó una aceleración (la variación anual aumentó 61 pb durante el último mes). En enero las diferentes medidas de expectativas de inflación se mantuvieron cerca de 3,0%. La cifra derivada de la encuesta mensual efectuada a los analistas de las entidades financieras se situó en 2,9% para un horizonte a doce meses y en 2,8% para diciembre de 2014. Las expectativas derivadas de la curva de rendimientos de los TES a 2, 3 y 5 años aumentaron en enero y en lo corrido de febrero (en promedio) y se situaron alrededor de 3,0%. b. Crecimiento La información reciente para el último trimestre de 2013 indica que la actividad real se habría expandido a una tasa por debajo de la registrada para el tercer trimestre. Sin embargo, es de esperar que ésta se ubique por encima del promedio de la primera mitad del año. Por su parte, los indicadores de coyuntura disponibles para enero 2014, aunque todavía muy escasos, sugieren que ese dinamismo se habría mantenido. Para diciembre de 2013, según el índice de la Muestra Mensual de Comercio al por Menor (MMCM) publicado por el DANE, las ventas minoristas crecieron anualmente 4,1%, registro menor que el reportado en los dos meses anteriores. Sin embargo, el promedio del cuarto trimestre de este indicador se expandió 5,0% frente al mismo periodo de 2012. Este dato es cercano al observado para el tercer trimestre (4,9%). Al descontar las ventas de vehículos, el crecimiento en diciembre fue 4,6%, mientras que el promedio del cuarto trimestre se expandió a una tasa de 5,7%. Esta última cifra representa una aceleración frente al registro del tercer trimestre (4,0%). Adicionalmente, en diciembre el balance de ventas de la Encuesta Mensual de Expectativas Económicas (EMEE) del Banco de la República también sugiere que la expansión del consumo interno de los hogares durante el cuarto trimestre se habría dado a un ritmo similar al registrado para el tercero. Con respecto a la inversión distinta de la realizada en la construcción de edificaciones y de obras civiles, tanto el balance de expectativas de inversión de la EMEE como el crecimiento en términos reales de las importaciones de bienes de capital apuntarían a una mejor dinámica que la registrada en el tercer trimestre de 2013. En el primer caso se observa una recuperación del nivel del balance con respecto al registrado en el tercer trimestre. En el segundo, la expansión del cuarto trimestre fue de 8,5%, muy superior al 2,1% registrado en promedio para el tercero. Respecto al comercio exterior, en diciembre las exportaciones totales en dólares aumentaron 6,5%, gracias al aumento conjunto de las mineras (3,6%), agrícolas (18,4%) y del resto de exportaciones (5,5%). El aumento de las mineras se dio por las mayores ventas externas de carbón (36,2%) y crudo (7,2%). En el caso de las agrícolas se registraron crecimientos en café (16,9%), banano (21,3%) y flores (18,6%). Por su parte, las exportaciones de bienes industriales y otros aumentaron 5,5%, en mayor parte por los crecimientos en los rubros de alimentos y bebidas, vehículos y autopartes y productos químicos que compensaron las caídas en confecciones y máquinas y aparatos eléctricos. Para todo el 2013, las exportaciones totales en dólares tuvieron una caída de 2,2% frente al año anterior. Esta caída, asociada principalmente a menores precios, se debe a las menores ventas de bienes mineros (-3,6%) y agrícolas (-0,5%). Del lado de las exportaciones de bienes industriales y otros, hubo un aumento de 2,2%. Por su parte, en diciembre las importaciones totales en dólares registraron un crecimiento de 8,6% respecto al mismo mes del año anterior. Esta dinámica se explica fundamentalmente por las mayores compras de bienes de capital (23%), vinculadas a un aumento de las de equipo rodante de transporte. Las importaciones de materias primas crecieron 1,2% y las de consumo presentaron una caída de 1%. Durante todo 2013, el valor total de las importaciones en dólares creció 0,5% frente al año anterior. Este comportamiento se explica por las mayores importaciones de bienes de consumo (1,5%) y materias primas (0,5%), compensadas en parte por las disminuciones en las compras de bienes de capital (-0,1%). En general, el bajo crecimiento de las importaciones estuvo asociado con menores precios. Por el lado de la oferta, el índice de producción industrial (IPI) sin trilla de café medido por el DANE creció 1,5% en diciembre. En términos trimestrales, durante el periodo octubre-diciembre de 2013, la caída del IPI sin trilla de café (-0,3%) fue compensada por un crecimiento significativo de la trilla de café (55%). Como resultado, el total de la industria creció 1,0% en el cuarto trimestre de 2013, lo que implica una recuperación luego del registro negativo de 1,0% en el trimestre anterior. Con respecto a la construcción, con información a noviembre, el licenciamiento continuó reportando un importante dinamismo al crecer 21,7%. El acumulado a doce meses mostró una expansión de 15%. Con información a diciembre, la producción y los despachos de cemento crecieron 7,3% y 8,9% respectivamente, conservando niveles bastante favorables e históricamente altos. Frente al trimestre anterior, tanto la producción (que pasó de 6,0% a 11,7%) como los despachos (pasaron de 7,1% a 9,9%) se aceleraron. El comportamiento de dichos indicadores sugiere que el dinamismo del sector habría continuado. Lo anterior permite tener un rango de pronóstico para el crecimiento del PIB en el cuarto trimestre entre 4,0% y 5,0%, con 4,6% como cifra más probable. El consumo de los hogares crecería a tasas similares a la de su promedio histórico. El mayor aumento lo presentaría la inversión. Las exportaciones se acelerarían pero con una dinámica inferior a la de las importaciones. Por el lado de la oferta, los mayores crecimientos se presentarían en la construcción (edificaciones y obras civiles) y la agricultura. El sector minero se desaceleraría y el crecimiento de la industria (que incluye trilla de café) sería casi nulo. Con esta información se calcula que la economía colombiana creció en 2013 entre 3,7% y 4,3%, con 4,1% como cifra más probable. La información para el 2014 es todavía muy escasa y preliminar. Por el lado de la demanda, el índice de confianza del consumidor (ICC) publicado por Fedesarrollo, que está altamente correlacionado con el consumo privado, repuntó en enero frente a los niveles del trimestre anterior y se ubicó por encima de su promedio para todo 2013. El componente de expectativas continúa mostrando un dinamismo importante, lo que muestra posiblemente un desempeño favorable de este rubro hacia futuro. Para indicadores por el lado de la oferta, la encuesta de opinión de Fedesarrollo a los empresarios muestra que en enero el indicador de pedidos mantuvo sus niveles y su componente tendencial continúa creciendo pero a un menor ritmo. El indicador de existencias mejoró frente al mes anterior. Por último, las expectativas de producción a tres meses aumentaron significativamente y el componente tendencial mostró una pendiente positiva. Como resultado, la confianza de los industriales mejoró frente a los dos meses anteriores. En el caso del comercio, la encuesta de Fedesarrollo arrojó resultados bastante positivos para la percepción actual de las ventas, en donde la tendencia de la series tiene una pendiente positiva que indicaría que el comportamiento de estas continuaría con el dinamismo registrado de los últimos meses. Por su parte, las perspectivas a seis meses no presentaron cambios significativos y se mantuvieron en niveles similares a los de los últimos dos meses. Pese a ello, los valores actuales son relativamente altos frente al promedio histórico de la serie. Otros indicadores disponibles con información a enero son: i) la demanda de energía total, que aumentó 2,9% anualmente. En niveles, se expandió y su componente tendencial muestra una pendiente positiva, ii) la producción de petróleo fue de un millón catorce mil barriles diarios en promedio, que pese a mostrar un bajo crecimiento de 0,3%, implica un incremento frente a los últimos cuatro meses. Así, para todo el año 2014 el pronóstico de crecimiento se mantiene en un rango entre 3,3% y 5,3%, con 4,3% como cifra más probable. c. Variables Financieras El crédito bancario (M/N y M/E) en enero registró una tasa anual de crecimiento de 12,2%, nivel similar al observado el mes anterior. La cartera en moneda nacional se aceleró levemente de 12,9% en diciembre a 13,0% en enero, mientras que la de moneda extranjera se desaceleró pasando de una tasa de crecimiento anual de 1,5% a 0,4%. Por destinos, la cartera a los hogares registró un crecimiento anual en enero de 13,5%, levemente mayor al del mes anterior (13,2%). Esto fue explicado por el comportamiento del crédito de consumo que aumentó marginalmente entre diciembre y enero (de 11,95% a 12,05%); por su parte el crédito para adquisición de vivienda se aceleró igualmente pasando de crecer a una tasa de 15,37% a 15,59% en el mismo periodo. En cuanto a la cartera comercial, la tasa de crecimiento anual en enero (11,51%) fue similar a la del mes anterior (11,55%), explicado por la aceleración en el componente de moneda nacional (de 12,76% en diciembre a 12,92% en enero) y por la desaceleración en el componente en moneda extranjera (de 1,30% a -0,04%). Las tasas de interés de los préstamos desembolsados por los establecimientos de créditos desde el inicio de los recortes en la tasa de política en julio de 2012, han acumulado reducciones de: -213 pb para los créditos hipotecarios, -144 pb para los de consumo y -236 pb para los créditos de construcción. La magnitud del descenso de las tasas de interés reales ha sido inferior por el efecto de la menor tasa de inflación, con rebajas durante este mismo período de: -182 para créditos hipotecarios, -114 pb para créditos de consumo y -205 pb para créditos para construcción. Los niveles de las tasas de interés reales en septiembre de los créditos de consumo, hipotecarios, preferenciales, comercial ordinario y comercial de tesorería y de construcción se sitúan por debajo de sus promedios históricos calculados desde 2000. Por el contrario, los créditos otorgados con tarjeta de crédito se encuentran por encima de su promedio. d. Contexto Externo De acuerdo con las cifras para el cuarto trimestre, el PIB de las principales economías desarrolladas siguió expandiéndose a un ritmo modesto, aunque con alguna aceleración en la zona del euro y en el Reino Unido. Por otra parte, el crecimiento de algunas economías emergentes mostró una desaceleración respecto a lo observado en el 2012. En Estados Unidos, los datos preliminares del cuarto trimestre de 2013 revelan un crecimiento favorable, liderado por el consumo privado y las exportaciones. Sin embargo, las primeras cifras conocidas para enero de 2014 de la actividad real (industria y ventas al por menor) evidenciaron una desaceleración en su ritmo de expansión anual y registraron caídas mensuales. Es importante resaltar que estas cifras pueden estar afectadas por la fuerte temporada invernal de comienzos del año por lo que se podría esperar que en los próximos meses la actividad repunte. Por ejemplo, datos preliminares de manufactura en febrero sugieren alguna recuperación. En este contexto, diversos analistas han reducido sus pronósticos de crecimiento para el primer trimestre, sin embargo, han dejado inalteradas sus proyecciones para todo el 2014. En la zona del euro, durante el cuarto trimestre, hubo una aceleración en el crecimiento explicada por el mejor comportamiento de Alemania y Francia, al igual que por la salida de la recesión de algunas economías de la periferia. Las cifras de enero muestran que la confianza de los consumidores siguió recuperándose, mientras que para el caso de los empresarios se mantuvo en un nivel favorable. De igual forma, los índices de sentimiento empresarial en los sectores de manufacturas y servicios permanecieron en terreno expansivo. En relación con las economías emergentes, en América Latina, la información a diciembre de 2013 muestra que la actividad real siguió desacelerándose en Brasil y en Chile, mientras que en Perú se mantuvo estable y en México presentó un ligero repunte. Para el comienzo del año se tiene información muy parcial que muestra algún deterioro de la confianza de los agentes en varias economías de la región. En China, en enero la actividad manufacturera siguió moderándose; en contraste, las exportaciones se aceleraron. En relación con los precios internacionales de los bienes básicos exportados por Colombia, las cotizaciones para el petróleo (de referencia Brent), el carbón y el níquel han permanecido relativamente estables en las últimas semanas; las del café han repuntado debido a las sequías en Brasil. Las condiciones climáticas adversas en este país también han afectado los precios de otros alimentos, como la soya. En cuanto a la inflación, en enero la variación de precios en las principales economías desarrolladas permaneció por debajo de las metas de largo plazo fijadas por sus bancos centrales. En Japón continuó la tendencia ascendente que se observa desde el año pasado. Dada esta coyuntura y con unas brechas del producto todavía ampliamente negativas, los principales bancos centrales mantuvieron sus políticas de estímulo monetario. Sin embargo, en los Estados Unidos se anunció un nuevo recorte de las compras de activos mensuales a partir de febrero. Por otra parte, de acuerdo con las más recientes minutas sobre las reuniones de la FED, algunos miembros han empezado a considerar que el incremento en la tasa de interés de política podría darse incluso antes de mediados de 2015, si las condiciones económicas continúan de acuerdo con lo previsto. Por el lado de las economías emergentes el panorama inflacionario continúa siendo heterogéneo, con algunos repuntes en América Latina e inflaciones todavía elevadas en algunos países de esta región (Brasil, Argentina y Venezuela) y de Asia. En relación con los mercados financieros, en enero se observó un incremento en la incertidumbre global, en particular en algunas economías emergentes. La continuación del desmonte del programa de estímulo en los EEUU, la reducción en las proyecciones de crecimiento para los emergentes y algunos eventos políticos en estos países, elevaron la percepción de riesgo hacia estas economías, por lo que se observaron depreciaciones en sus monedas y desvalorizaciones en sus mercados bursátiles. En las últimas semanas la situación ha tendido a normalizarse. Vale la pena señalar que los países más afectados con la incertidumbre global fueron aquellos con mayores vulnerabilidades externas y menores espacios para implementar políticas de estímulo. En resumen, las perspectivas del crecimiento mundial en 2014 se mantienen sin mayores cambios. Se proyecta que el crecimiento mundial en 2014 supere en algo más de medio punto porcentual al de 2013. Para 2014 los socios comerciales de Colombia tendrían un crecimiento promedio superior al registrado en 2013. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA La Junta Directiva tomó en consideración los siguientes aspectos relevantes: (i) Las perspectivas del crecimiento mundial en 2014 se mantienen sin mayores cambios frente a las descritas en el Informe sobre Inflación publicado recientemente. Se proyecta que el crecimiento mundial en 2014 supere en algo más de medio punto porcentual al de 2013. La recuperación gradual de las economías avanzadas continúa y los nuevos datos de países emergentes confirman la desaceleración esperada en su tasa de crecimiento. Para 2014 los socios comerciales de Colombia tendrían un crecimiento promedio superior al registrado en 2013. (ii) Las tasas de interés externas y la cotización del dólar superan los promedios observados en 2013. Es probable que una parte importante de estos aumentos sea permanente en la medida que obedece a niveles de liquidez global menos expansivos. (iii) El precio internacional del petróleo continúa en niveles altos y el del café colombiano ya superó el registro medio de 2013. Los precios del carbón y níquel dejaron de descender. Con ello, es probable que los términos de intercambio se mantengan en niveles favorables. (iv) Para el cuarto trimestre de 2013, el equipo técnico proyecta un crecimiento económico entre 4% y 5%, con 4,6% como cifra más probable. El consumo de los hogares crecería a tasas similares a la de su promedio histórico. El mayor aumento lo presentaría la inversión. Las exportaciones se acelerarían pero con una dinámica inferior a la de las importaciones. Por el lado de la oferta, los mayores crecimientos se presentarían en la construcción (edificaciones y obras civiles) y la agricultura. El sector minero se desaceleraría y el crecimiento de la industria (que incluye trilla de café) sería casi nulo. Con esta información se calcula que la economía colombiana creció en 2013 entre 3,7% y 4,3%, con 4,1% como cifra más probable. (v) Para el año 2014 se proyecta un crecimiento económico entre 3,3% y 5,3%, con 4,3% como cifra más probable. (vi) En enero el crecimiento del crédito total se desaceleró, aunque sigue mostrando tasas superiores al aumento del PIB nominal. Las tasas de interés nominales de crédito aumentaron pero en términos reales permanecieron estables y se encuentran en niveles que impulsan el crecimiento económico. (vii) La inflación anual en enero fue de 2,13%, ubicándose dentro del rango meta, y el promedio de las medidas de inflación básica se situó en 2,55%. Las expectativas de inflación a un año de los analistas económicos, así como las derivadas de los papeles de deuda pública con plazos menores a cinco años, se encuentran alrededor de 3%. Los miembros de la Junta Directiva destacaron que la información disponible sobre las variables internas de demanda, confianza, crecimiento del producto, crédito e inflación indica que la brecha del producto y la actual desviación de la inflación observada frente a la meta (brecha de inflación) se han ido cerrando y se espera que continúe haciéndolo a lo largo del año. Reiteraron la incertidumbre existente sobre el efecto en la economía colombiana que pueda tener la normalización gradual de la política monetaria de la Reserva Federal de los Estados Unidos, vía contagio de los países emergentes con mayores vulnerabilidades. Asimismo, destacaron otros riesgos, en especial los provenientes de la situación de Venezuela; la moderación del crecimiento en la actividad económica en China y el comportamiento reciente de algunos indicadores asociados al ritmo de expansión de la economía norteamericana. Comentaron también que a pesar de que la inflación de alimentos continua siendo muy baja comparada con los registros históricos, dicho comportamiento obedece parcialmente a factores transitorios y podría revertirse si cambia la tendencia de los precios internacionales de alimentos. La proyección de una gradual convergencia de la inflación a la meta y del producto a su valor potencial, en conjunto con los riesgos anotados antes, sugirió a los miembros de la Junta que era prudente mantener la postura expansiva actual de política monetaria. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva por unanimidad consideró apropiado mantener la tasa de interés de intervención en 3,25%. La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo del comportamiento y proyecciones de la actividad económica e inflación en el país, de los mercados de activos y de la situación internacional. Finalmente, reitera que la política monetaria dependerá de la información disponible.
2014-03-01
- Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República de 21 de marzo de 2014 El 21 de marzo de 2014 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores doctores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca, César Vallejo Mejía, Juan Pablo Zárate Perdomo. En las minutas se presenta un resumen de la situación inflacionaria y del crecimiento económico, y sus perspectivas, elaborada por el equipo técnico (sección 1) y se reseñan las principales discusiones y opciones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2). 1. SITUACION INFLACIONARIA Y DE CRECIMIENTO ECONÓMICO a. Desarrollos recientes de la inflación En febrero, la inflación anual al consumidor (2,32%) registró una aceleración de 19 puntos base (pb) frente al registro de enero. La aceleración se originó principalmente en las canastas de alimentos y regulados. En la canasta de alimentos, la variación anual cerró el mes en 1,78%, 58 pb más que enero. La aceleración se dio en los tres principales componentes de la subcanasta: perecederos (de 2,1% a 2,6% anual), procesados (de -0,2% a 0,4% anual) y comidas fuera del hogar (de 3,3% a 3,9% anual). Dentro del IPC sin alimentos (2,53% anual), las principales presiones al alza se originaron en los grupos de regulados y transables. En regulados (1,8% anual) se registró un aumento de 10 pb en la variación anual frente al mes anterior que obedeció principalmente a incrementos en las tarifas de gas domiciliario. Por su parte, la variación anual del IPC de transables sin alimentos ni regulados (1,6% anual) aumentó 4 pb frente al mes anterior. La depreciación desde comienzos del año pasado explicaría la tendencia ascendente en el IPC transable, cuya variación anual acumula 90 pb en los últimos doce meses. La variación anual de no transables sin alimentos ni regulados se mantuvo en 3,6%, destacándose el aumento de 10 pb en la variación anual del IPC de arriendos, interrumpiendo la tendencia descendente que se observaba desde hace dos trimestres. El promedio de los cuatro indicadores de inflación básica monitoreados por el Banco de la República se situó en febrero en 2,63%, 8 pb más que el mes anterior. Así, se completan cuatro meses seguidos de leves aumentos en dicha variable. La variación anual del IPP aumentó 104 pb en febrero (1,3% anual). Una parte importante de estas alzas está relacionada con la depreciación acumulada del tipo de cambio y se refleja sobre todo en una aceleración del IPP importado (de 2,95% a 4,28% anual). Sin embargo también en los últimos meses se ha observado un mayor crecimiento del IPP de producidos y consumidos localmente (de - 0,35% a 0,63% anual), que se concentra en bienes de origen agropecuario y minero. En cuanto a las expectativas de inflación, en febrero tendieron a aumentar, aunque se mantuvieron cercanas al punto medio del rango meta. Las obtenidas a partir de la encuesta mensual de expectativas a analistas del mercado financiero se situaron en 2,85% y 2,90% a fin de año y a doce meses respectivamente. Las mediciones derivadas de la curva de rendimientos de los TES para horizontes de 2, 3 y 5 años se mantuvieron alrededor de 3,0%. b. Crecimiento De acuerdo con el DANE, la economía colombiana se expandió 4,9% en términos anuales durante el cuarto trimestre de 2013. De esta manera, la expansión anual de la economía colombiana para 2013 fue 4,3%. Adicionalmente, se revisó a la baja la dinámica de crecimiento económico para el año 2012 (pasó de 4,2% a 4,0%). Por el lado de la demanda se destacó el aumento significativo del consumo de los hogares y del gobierno hacia el final del año. El consumo de los hogares creció al 4,5%, manteniendo el ritmo que se observó en 2012. Con respecto al consumo del Gobierno la expansión anual fue de 6,0% para todo el año. Para el caso de la inversión, en 2013 creció anualmente 5,7%, cifra mayor que la de 2012 (4,6%). Los renglones que más contribuyeron a la expansión de la inversión fueron aquellos relacionados con la construcción de obras civiles y de edificaciones. El gasto dedicado a la inversión en maquinaria y equipo se desaceleró de manera importante, mientras que el de equipo de transporte se contrajo. Así las cosas, la demanda interna contribuyó activamente al crecimiento de la actividad económica, sobre todo en los últimos meses de 2013 (6,2% en el cuarto trimestre vs 3,4% primer semestre). Los rubros de comercio exterior mostraron desaceleraciones entre 2012 y 2013, que fueron mayores para el caso de las importaciones que para el de las exportaciones. Para las primeras, el crecimiento pasó de 8,9% en 2012 a 2,1% en 2013, mientras que para las segundas pasó de 6,1% a 5,3% respectivamente. Por el lado de la oferta, los sectores que mostraron crecimientos por encima de la economía en su conjunto durante 2013 fueron la construcción (9,8%), los servicios sociales (5,3%) y la agricultura (5,2%). En el primer caso, tanto en el sub-grupo de construcción de edificaciones como en el de obras civiles se observó un fuerte dinamismo. En el último, la expansión se explicó principalmente por el significativo impulso que tuvo la producción de café. La minería (4,9%) presentó un comportamiento dispar: mientras que la producción de petróleo creció anualmente a una tasa por encima del resto de sectores (7,8%), la de carbón se contrajo (-4,0%), producto de varios choques de oferta que ocurrieron a lo largo del año. Por último, la industria mostró una disminución del valor agregado por segundo año consecutivo (-1,2%). Para el primer trimestre de 2014, la información disponible arroja resultados mixtos sobre el desempeño de la economía. Para el consumo privado, las cifras en materia de ventas minoristas y de automóviles apuntan a un buen comportamiento. Según las cifras de la Muestra Mensual de Comercio al por Menor (MMCM) publicada por el DANE, en enero las ventas se incrementaron 6,5% anual, lo que implica una aceleración frente al registro del cuarto trimestre de 2013 (5,3% anual). El componente más dinámico fue el de las ventas de vehículos, que creció 19,9% anual. Al excluir estas últimas del total, la expansión anual fue 4,0%. Por otra parte, el Índice de Confianza del Consumidor de Fedesarrollo (ICC) presentó un importante retroceso en febrero, luego de haber mostrado un incremento significativo durante el mes anterior. Tanto en el componente de expectativas como en el de condiciones económicas se registraron caídas, mayores en el primer caso que en el segundo. A pesar de lo anterior, el promedio para el primer bimestre del año se ubicó cerca de su media desde 2001. En lo referente a las exportaciones, las totales en dólares cayeron 1,5% en enero de 2014, debido a la disminución conjunta de las exportaciones mineras (-1,6%), industriales y otras (-1,1%) y agrícolas (-2,1%). El comportamiento de las exportaciones mineras se explica en gran medida por las menores ventas externas de oro, derivados de petróleo y carbón. En el caso de las exportaciones agrícolas, la caída se explica por las menores exportaciones de café. La menor dinámica de las exportaciones de bienes industriales y otros se explica principalmente por las reducciones en vehículos, caucho y plástico y productos químicos. Estas caídas fueron parcialmente compensadas por el aumento en las exportaciones de alimentos y bebidas. Por otra parte, en enero de 2014 las importaciones totales en dólares (CIF) registraron una disminución de 6,6% respecto al mismo mes del año anterior. Este comportamiento se debió a una caída generalizada de los principales rubros, con descensos de 12,6% en bienes de capital, de 6,3% en bienes de consumo y de 1,9% en materias primas. Por el lado de la oferta, los indicadores disponibles para el primer trimestre del año también muestran señales mixtas. Se destaca el desempeño de la demanda de energía total y el de la producción de café en el mes de febrero. En el primer caso, la demanda creció 6,4% anual, y su nivel superó los registros de los últimos seis meses. En el segundo caso, de acuerdo con cifras de la Federación de Cafeteros, la producción aumentó 39,8% frente al mismo mes del año pasado. En contraste, la industria continuó mostrando un desempeño débil. De acuerdo con el DANE, en enero el índice de producción manufacturera creció en enero 0,1%. El componente tendencial de la serie sigue mostrando un estancamiento. Cabe señalar que el comportamiento sectorial es bastante dispar: mientras que sub-ramas como ingenios, molinería y almidones, confecciones, otros productos alimenticios y elaborados de metal mostraron crecimientos elevados, otras sub-ramas registraron caídas importantes, como es el caso de la de vehículos automotores, otros productos químicos y actividades de edición. Por último, aunque en febrero la producción de petróleo mantuvo niveles superiores al millón de barriles diarios (1,002mbd), se ha desacelerado de manera considerable en los últimos cuatro meses. La variación anual se ubicó en 0,5%. De esta manera, para el 2014 el equipo técnico del Banco mantiene un pronóstico de crecimiento económico entre 3,3% y 5,3%, con 4,3% como cifra más probable. c. Variables Financieras. El crédito bancario (M/N y M/E) en febrero registró una tasa anual de crecimiento de 12,4%, nivel ligeramente mayor al observado el mes anterior (12,2%). La cartera en moneda nacional mostró una tasa de expansión de 13,2% ligeramente mayor a la del mes pasado, mientras que la de moneda extranjera se aceleró pasando de una tasa de crecimiento anual de 0,4% a 1,9%. Por destinos, la cartera a los hogares registró un crecimiento anual en febrero de 13,2%, levemente inferior a la del mes anterior (13,5%). Esto fue explicado por el comportamiento del crédito de consumo que se moderó entre enero y febrero (de 12,1% a 11,6%); por su parte el crédito para adquisición de vivienda se aceleró pasando de crecer a una tasa de 15,6% a 16,1% en el mismo periodo. En cuanto a la cartera comercial, la tasa de crecimiento anual en febrero (12,0%) fue mayor a la del mes anterior (11,5%), explicado por la aceleración en el componente de moneda nacional (de 12,9% en enero a 13,3% en febrero) y en el componente en moneda extranjera (de - 0,04% a 1,7%). Las tasas de interés de los préstamos desembolsados por los establecimientos de créditos desde el inicio de los recortes en la tasa de política en julio de 2012, han acumulado reducciones de: -209 pb para los créditos hipotecarios, -199 pb para los de consumo y -215 pb para los créditos de construcción. La magnitud del descenso de las tasas de interés reales ha sido inferior por el efecto de la menor tasa de inflación, con rebajas durante este mismo período de: -182 pb para créditos hipotecarios, - 171 pb para créditos de consumo y -188 pb para créditos para construcción. Los niveles de las tasas de interés reales en septiembre de los créditos de consumo, hipotecarios, preferenciales, comercial ordinario y comercial de tesorería y de construcción se sitúan por debajo de sus promedios históricos calculados desde 2000. Por el contrario, los créditos otorgados con tarjeta de crédito se encuentran por encima de su promedio. d. Contexto Externo. La más reciente información muestra que la recuperación en la zona del euro ha continuado a un ritmo modesto tal como se esperaba. En febrero, los indicadores de actividad en los sectores de manufacturas y servicios permanecieron en terreno expansivo, mientras que la confianza de empresarios y consumidores se sostuvo en niveles favorables, aunque en esta última se observó un ligero deterioro. En los Estados Unidos durante los dos primeros meses del año algunos indicadores evidenciaron un comportamiento inferior al esperado. Tal es el caso de las ventas al por menor, las cuales se redujeron en términos mensuales y se desaceleraron en la comparación anual. Lo anterior podría estar parcialmente explicado por el fuerte invierno experimentado en ese país. Por el contrario, en febrero la industria se expandió y el mercado laboral continuó mostrando señales de mejoría pues el ritmo de contratación se aceleró frente a lo observado en los últimos meses. Para las economías emergentes, la información disponible apunta a una desaceleración en varias de ellas. En China, los indicadores de ventas al por menor, de la industria, de la inversión en activos fijos y de comercio internacional mostraron un comportamiento por debajo del esperado por el mercado. Si bien estas cifras están afectadas por las festividades del año nuevo chino, las tendencias son hacia una moderación en el crecimiento económico. Algo similar ocurre en América Latina donde las últimas cifras de actividad económica también muestran un deterioro en el crecimiento de la región, más allá del esperado. En Chile, el índice de actividad económica mensual en enero completó varios meses desacelerándose, mientras que en Brasil la industria se contrajo nuevamente en términos anuales. Por otra parte, las exportaciones de la región permanecieron débiles y la confianza de los consumidores disminuyó en varios países. En relación con los precios internacionales de los bienes básicos exportados por Colombia, las cotizaciones del petróleo para la referencia Brent permanecieron en febrero alrededor de los 108 dólares por barril, nivel mayor que el anticipado (105 dólares/barril en promedio). El precio del carbón cayó levemente mientras que el del níquel mostró un ligero incremento. Las sequías en Brasil impulsaron nuevamente las cotizaciones del café, las cuales se encuentran muy por encima de lo previsto. Para el caso de los alimentos importados, en las últimas semanas se han observado repuntes en los precios de la soya, el maíz y el trigo. Por su parte, la inflación en las principales economías desarrolladas se mantuvo en un nivel relativamente bajo. En particular, en febrero, en la zona del euro la variación en el nivel general de precios siguió reduciéndose y completó varios meses por debajo del 1%. En los Estados Unidos los indicadores mostraron estabilidad. En las economías emergentes, la inflación repuntó en varios países de América Latina, situación que estaría asociada con la depreciación de sus monedas. Por el contrario, en Asia se observó alguna desaceleración. En términos de política monetaria, los bancos centrales de las principales economías avanzadas, exceptuando los Estados Unidos, continuaron con sus políticas de estímulo y no anunciaron nuevas medidas. En el caso de la FED, en la reunión de marzo, continuó recortando sus compras de activos en diez mil millones de dólares adicionales. De igual forma anunció que, dadas las condiciones actuales de la economía, era apropiado mantener la política de estímulo. Igualmente la FED descartó una meta puntual en la tasa de desempleo y condicionó su política a un rango más amplio de indicadores del mercado laboral, la inflación y los mercados financieros. En concepto de muchos analistas ha aumentado la probabilidad de que se anticipen los incrementos en las tasas. En las economías emergentes, algunos países como Chile, Hungría y Rumania recortaron sus tasas de intervención ante la desaceleración de sus indicadores de actividad real. Otros países con mayores presiones inflacionarias, como Brasil e India, las aumentaron. Finalmente, en lo corrido del año las medidas de riesgo país y la tasa de cambio se mantienen en niveles superiores al promedio observado en 2013. De confirmarse la normalización de la política monetaria en los Estados Unidos, es probable que estos niveles de tasa de cambio y de riesgo se conserven o se incrementen levemente. No obstante el reciente anuncio de JP Morgan, sobre el incremento de la participación de los TES en su portafolio de referencia para mercados emergentes (en monedas locales) puede compensar significativamente estos efectos. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA La Junta Directiva tomó en consideración los siguientes aspectos relevantes: (i) Los datos recientes de actividad económica en varias regiones del mundo sugieren que la recuperación del crecimiento continuará en 2014, pero con una ligera desaceleración en relación con las previsiones anteriores. La recuperación en la zona Euro ha continuado a un ritmo modesto, al tiempo que la desaceleración de algunas economías emergentes se ha acentuado. (ii) Las tasas de interés externas y la cotización del dólar superan los promedios observados en 2013. Es probable que una parte importante de estos aumentos sea permanente en la medida en que obedece a niveles de liquidez global menos expansivos. La reciente decisión de la Reserva Federal y los pronósticos de sus miembros sobre la tasa de interés de referencia reafirman esta tendencia. (iii) El aumento de la ponderación de los títulos de deuda pública colombianos en los portafolios de referencia de algunos inversionistas internacionales puede compensar en algún grado los efectos que el ajuste de la liquidez global tiene sobre la tasa de cambio y las tasas de interés del mercado en Colombia. (iv) En el cuarto trimestre de 2013 el crecimiento anual del producto fue 4,9%. Para el año completo fue 4,3%, por encima de una tasa revisada de 4% para 2012. El crecimiento se aceleró en el segundo semestre, impulsado especialmente por la inversión. El consumo de los hogares se mantuvo a tasas de crecimiento cercanas a su promedio histórico a lo largo del año, mientras que el público creció por encima del producto en todos los trimestres. Por el lado de la oferta, los mayores crecimientos en el trimestre se presentaron en los sectores minero, agrícola, de la construcción y de servicios sociales y personales. La industria mantuvo un débil desempeño. Para el año completo se observaron tendencias similares. (v) La información reciente sobre el crecimiento de las ventas minoristas, la producción cafetera, el consumo de energía y el descenso continuado del desempleo sugieren un fuerte dinamismo de la economía en lo corrido del año. No obstante, el retroceso de la confianza del consumidor en febrero, la debilidad de las exportaciones y de la industria manufacturera, apuntan en sentido contrario. Para el año 2014 el equipo técnico del Banco mantiene un pronóstico de crecimiento económico entre 3,3% y 5,3%, con 4,3% como cifra más probable. (vi) En febrero el crecimiento del crédito total se estabilizó en tasas superiores al aumento del PIB nominal. El crecimiento del crédito de consumo se ha moderado, pero el crédito hipotecario se ha acelerado. Las tasas de interés reales de crédito continúan en niveles que impulsan el crecimiento económico. (vii) La inflación anual aumentó en febrero por tercer mes consecutivo y se situó en 2,32%, dentro del rango meta. El promedio de las medidas de inflación básica también continuó aumentando y alcanzó 2,63%. Las expectativas de inflación a un año de los analistas económicos, así como las derivadas de los papeles de deuda pública con plazos menores a cinco años, se mantienen alrededor de 3%. En resumen, el crecimiento económico se aceleró en el segundo semestre de 2013 y la inflación continuó aumentando en febrero. Las tasas de interés se mantienen en niveles que estimulan el gasto agregado y es de esperar que contribuyan a que en 2014 el producto se acerque a la capacidad productiva de la economía y a que la inflación converja hacia la meta de 3%. Los miembros de la Junta Directiva destacaron el dinamismo de la demanda interna, tanto del consumo como de la inversión, observado en el segundo semestre de 2013 y comienzos del presente año. Así mismo, la inflación ha aumentado de acuerdo con lo previsto. Lo anterior indicaría que la brecha del producto y la actual desviación de la inflación observada frente a la meta (brecha de inflación) continuará cerrándose a lo largo de 2014. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva por unanimidad consideró apropiado mantener la tasa de interés de intervención en 3,25%. La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo del comportamiento y proyecciones de la actividad económica e inflación en el país, de los mercados de activos y de la situación internacional. Finalmente, reitera que la política monetaria dependerá de la información disponible.
2014-04-01
- Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 25 de abril de 2014 El 25 de abril de 2014 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas Santamaria, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca, César Vallejo Mejía, Juan Pablo Zárate Perdomo. En las minutas se presenta un resumen de la situación inflacionaria y del crecimiento económico, y sus perspectivas, elaborada por el equipo técnico (sección 1) y se reseñan las principales discusiones y opciones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2). 1. SITUACIÓN INFLACIONARIA Y DE CRECIMIENTO ECONÓMICO a. Desarrollos recientes de la inflación En marzo de 2014 la inflación anual al consumidor volvió a aumentar, por cuarto mes en línea. El dato reportado por el DANE fue de 2,51%, 19 puntos base (pb) más que lo observado en febrero. Para lo corrido del año, el IPC acumula un aumento de 1,52%, superior al registrado en igual período de 2013 (0,95%). Al igual que en los dos meses anteriores, las presiones alcistas se concentraron principalmente en los precios de los alimentos y regulados aunque también se vio un ligero aumento en la canasta de transables. En la canasta de alimentos, la variación anual cerró el mes en 2,2%, 45 pb más que febrero. La aceleración se dio en los tres principales componentes de esta canasta: perecederos (de 2,6% a 3,2% anual), procesados (de 0,4% a 0,9% anual) y comidas fuera del hogar (de 3,9% a 4,1% anual). En el caso del componente de alimentos perecederos los precios estarían normalizándose después de los bajos niveles de final del año pasado. Las alzas en los precios de los procesados estarían asociadas con la depreciación del peso. Dentro del IPC sin alimentos (2,6% anual, 9 pb más que el mes pasado), las principales presiones al alza se originaron en el grupo de regulados. Esta canasta (2,2% anual) registró un aumento de 45 pb en la variación anual frente al mes anterior que obedeció a incrementos en las tarifas de gas domiciliario. En el IPC de energía eléctrica también se observó una aceleración importante en la variación anual, pero en este caso ello obedece más a una baja base de comparación (en marzo de 2013 estas tarifas cayeron). Para el IPC de transables sin alimentos ni regulados la variación anual (1,6%) aumentó 4 pb frente al mes anterior. La tendencia ascendente en esta canasta sigue estando relacionada con la depreciación acumulada del tipo de cambio. Por otra parte, la variación anual de no transables sin alimentos ni regulados (3,55%) disminuyó 6 pb frente al mes anterior; se destaca la variación anual de arriendos (3,5%) que disminuyó ligeramente luego de los leves aumentos de los dos meses anteriores. El promedio de los cuatro indicadores de inflación básica monitoreados por el Banco de la República se situó en marzo en 2,69%, 6 pb más que el mes anterior y 19 pb más que lo observado a finales del año pasado. Así, se completan cinco meses seguidos de leves aumentos en dicha variable. La variación anual del IPP aumentó por quinto mes consecutivo a 2,6%, frente a 1,3% del mes anterior. Esto se explica principalmente por el mayor ajuste en el componente local (de 0,6% a 2,3% anual). La variación anual del IPP importado aumentó poco (de 4,28% a 4,34%). La depreciación del peso, el aumento de los precios de productos perecederos y el del café explican este comportamiento. Las expectativas de inflación continuaron aumentando gradualmente. Según la encuesta mensual efectuada por el Banco de la República a los analistas del mercado financiero, la inflación esperada para diciembre de este año ascendió a 3,04%, frente a 2,90% del mes anterior. Algo similar sucedió con la expectativa a doce meses, la cual pasó de 3,0% a 3,1%. Para las expectativas derivadas de la curva de rendimiento de los TES en las últimas 4 semanas (terminadas el 21 de abril) se dio un aumento en los horizontes de 2, 3 y 5 años situándose muy cerca a la meta de inflación de largo plazo. b. Crecimiento La información disponible sugiere que durante los primeros meses de 2014 la actividad económica se habría expandido a una tasa similar a la registrada hacia finales del año pasado. El consumo privado habría crecido a un buen ritmo, mientras que la inversión, sobre todo aquella relacionada con equipo de transporte y construcción de obras civiles, habría tenido un dinamismo más moderado. Cabe resaltar que el desempeño del aparato productivo habría sido influenciado por un mayor número de días hábiles por la presencia de Semana Santa en abril (y no en marzo, como sucedió en 2013). Los hechos que confirman las buenas perspectivas para el consumo de los hogares son: La Muestra Mensual de Comercio al por Menor (MMCM) del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE) muestra que en febrero las ventas crecieron 6,7% anual, una de las cifras más altas de los últimos 24 meses. Al descontar las ventas de vehículos, el incremento fue 4,6%. El comportamiento de las ventas de vehículos también sugiere un buen desempeño del gasto en bienes durables. Por otra parte, en los primeros tres meses del año el índice de confianza del consumidor publicado por Fedesarrollo se ubicó, en promedio, por debajo del dato para el cuarto trimestre de 2013. A pesar de lo anterior, esta serie se situó por encima del promedio histórico desde 2001. En línea con lo anterior, el balance de ventas de la Encuesta Mensual de Expectativas Económicas (EMEE) del Banco de la República muestra que durante enero y febrero los comerciantes percibieron una demanda levemente mayor que la observada durante el cuarto trimestre de 2013. Por último, el buen comportamiento del mercado laboral, en particular el mayor crecimiento del empleo asalariado, al igual el hecho que el financiamiento del consumo de los hogares, pese a que se ha desacelerado levemente en lo corrido del año, continúa creciendo a un buen ritmo también, contribuirían a un buen comportamiento del rubro. Con respecto a la inversión, la información es escasa. De acuerdo al balance de expectativas de inversión de la EMEE, la formación bruta de capital sin obras civiles ni construcción habría mantenido su dinámica durante el primer trimestre del año. Respecto a las exportaciones, en febrero, las totales registraron una disminución de 8,5%, debido a la caída conjunta de las de bienes mineros (-10,3%) y de las industriales y otros (-15,1%). En el primer grupo, la reducción se explica por las menores ventas externas de crudo (-12,2%), oro (- 48%) y carbón (-6,6%). En el segundo, principalmente por la caída de las exportaciones de vehículos (-67,5%). Por su parte, las exportaciones de los principales bienes agrícolas crecieron en conjunto 34,4% (banano 90,1%, café 20% y flores 31,8%). Por el lado de la oferta, los indicadores disponibles para el primer trimestre de 2014 manifiestan comportamientos dispares. Cifras relacionadas con sectores como la industria, la energía y el comercio muestran un desempeño favorable respecto a lo observado en el último trimestre de 2013, mientras que algunos indicadores asociados a ramas de actividad como la construcción, la minería y la agricultura reportaron algunas desaceleraciones. La industria presenta una expansión positiva pero moderada. La variación anual del IPI sin trilla de café para el mes de febrero fue de 2,8%. Dentro de la industria, se mantienen las disparidades sectoriales. De acuerdo con la encuesta de opinión empresarial de Fedesarrollo a marzo, el indicador de pedidos y su componente tendencial continuaron aumentando lentamente. El indicador de existencias (contra-cíclico a la producción) subió un poco pero su componente tendencial se mantuvo en descenso. Las expectativas de producción a tres meses permanecieron en niveles aceptables y similares a los del mes anterior. Todo esto apuntaría a un buen comportamiento en ese mes. La demanda de energía no regulada de la industria siguió creciendo con bastante dinamismo en marzo (22,1% frente al 15,2% de febrero). Es importante señalar que parte de esto podría explicarse por una baja base de comparación del mismo mes del año anterior debido al efecto de Semana Santa. Para otros sectores, los indicadores que tuvieron un buen comportamiento fueron: la demanda de energía total que creció 5,7% en marzo y 5,0% en el primer trimestre; la producción de cemento que aumentó a un ritmo anual de 10,2% en febrero y 6,1% en el primer bimestre; y la producción de café que continuó expandiéndose a tasas significativas en los primeros tres meses del año (29%). En el caso de la producción de petróleo, sin embargo, se observó una desaceleración significativa en el primer trimestre y en marzo su nivel cayó por debajo de un millón de barriles diarios. Todo lo anterior, permite fijar el rango de pronóstico de crecimiento anual del PIB para el primer trimestre de 2014 entre 4,2% y 5,4%. Para todo el 2014 se mantiene el rango de crecimiento del producto entre 3,3% y 5,3%, con 4,3% como cifra más probable. c. Variables Financieras El crédito bancario (M/N y M/E) en marzo registró una tasa anual de crecimiento de 12,8%, nivel ligeramente mayor al observado el mes anterior (12,4%). La cartera en moneda nacional mostró una tasa de expansión anual de 13,5% ligeramente mayor a la del mes pasado (13,1%), mientras que la de moneda extranjera se aceleró pasando de una tasa de crecimiento anual de 2,0% a 2,5%. Por destinos, en marzo la cartera a los hogares registró un crecimiento anual de 12,9%, levemente inferior a la del mes anterior (13,3%). Esto fue explicado por el comportamiento del crédito de consumo que se moderó entre febrero y marzo (de 11,6% a 11,3%); por su parte la tasa de crecimiento del crédito para adquisición de vivienda (16,2%) no varío entre estos dos meses. En cuanto a la cartera comercial, la tasa de crecimiento anual en marzo (12,8%) fue mayor a la del mes anterior (12,0%), explicado por la aceleración en el componente de moneda nacional (de 13,3% en febrero a 14,1% en marzo) y en el componente en moneda extranjera (de 1,7% a 2,3%). Las tasas de interés de los préstamos desembolsados por los establecimientos de créditos desde el inicio de los recortes en la tasa de política en julio de 2012, han acumulado reducciones de: -205 pb para los créditos hipotecarios, -221 pb para los de consumo y -210 pb para los créditos de construcción. La magnitud del descenso de las tasas de interés reales ha sido similar debido a que el reciente incremento de la inflación la acerca al nivel de julio 2012. Así durante este mismo período la disminución ha sido de: -188 pb para créditos hipotecarios, -203 pb para créditos de consumo y - 193 pb para créditos para construcción. Los niveles de las tasas de interés reales en septiembre de los créditos de consumo, hipotecarios, preferenciales, comercial ordinario y comercial de tesorería y de construcción se sitúan por debajo de sus promedios históricos calculados desde 2000. Por el contrario, los créditos otorgados con tarjeta de crédito se encuentran por encima de su promedio. d. Contexto Externo Durante el primer trimestre de 2014, la actividad económica siguió expandiéndose en los principales países desarrollados. Por su parte, en los países emergentes el ritmo de crecimiento continuó moderándose. En los Estados Unidos, las condiciones invernales extremas de enero y febrero afectaron la actividad económica; sin embargo, información reciente evidencia que la economía se expande a un ritmo favorable. Con cifras a marzo, la producción industrial y las ventas al por menor repuntaron tanto en términos anuales como mensuales. En relación con el mercado laboral la tasa de desempleo aumentó levemente en los últimos meses; sin embargo, el ritmo de creación de trabajos se aceleró. Por su parte, en la zona del euro la actividad económica continúa recuperándose a un ritmo modesto. Con cifras a marzo, los indicadores de opinión en los sectores de manufacturas y servicios permanecieron en terreno expansivo, mientras que los índices de confianza de empresarios y consumidores mostraron de nuevo una tendencia positiva. Otros indicadores, como las ventas al por menor y la producción industrial, también muestran mejoras. Para el caso de las economías emergentes, en China el crecimiento del PIB se desaceleró en el primer trimestre del año, pasando de 7,7% a 7,4% anual. Las exportaciones y la demanda interna crecieron menos que en el periodo anterior, lo que muestra que el efecto de la pérdida de dinamismo de la demanda mundial sobre el crecimiento de la economía china no está siendo compensado por la expansión de su mercado interno, como muchos analistas esperaban. En América Latina los indicadores de actividad real siguieron expandiéndose a un ritmo menor que en años anteriores, en particular se destaca el bajo ritmo de crecimiento en Brasil y la desaceleración de la economía chilena. En relación con los precios internacionales de los bienes básicos exportados por Colombia, las cotizaciones del petróleo se mantuvieron en niveles favorables, ligeramente por debajo al promedio observado en 2013. Los precios del café y del níquel aumentaron nuevamente en el último mes. Por su parte, las cotizaciones de algunos alimentos importados siguieron creciendo. En cuanto a la inflación en las principales economías desarrolladas, la variación de precios se mantuvo baja en Europa; mientras que en los Estados Unidos presentó un leve repunte aunque se mantiene por debajo de la meta de las autoridades. En el caso de Japón la relajación de la política monetaria continúa reflejándose en una inflación creciente. Con bajas presiones inflacionarias y con crecimientos por debajo del potencial, los principales bancos centrales han mantenido una postura monetaria expansiva. En el caso de la Reserva Federal de los Estados Unidos, los recortes en las compras mensuales de activos se mantuvieron en línea con lo esperado por el mercado y se espera que el primer aumento en la tasa de referencia se dé hacia mediados de 2015. Las tasas de largo plazo han permanecido relativamente estables. En el caso de la zona del euro, ante los temores de deflación, los analistas prevén la implementación de nuevas medidas de estímulo monetario, como la compra de activos financieros. En las economías emergentes el panorama inflacionario continúa siendo heterogéneo, al igual que las respuestas de política monetaria. En América Latina algunos países han evidenciado aumentos en la variación de precios. En el caso de Brasil el banco central incrementó nuevamente sus tasas, mientras que el de Chile las redujo. En otros países de la región las tasas de interés han permanecido estables. En lo corrido del año la aversión al riesgo global se ha moderado y las primas de riesgo en los principales países de la región han descendido. En estas economías emergentes, ello se ha reflejado en una valorización de los activos financieros en moneda local y en una apreciación de las monedas frente al dólar. Los anteriores cambios han sido más acentuados en Colombia, especialmente en el mercado de deuda pública, como resultado de los mayores ingresos de capital extranjero. Las tasas de interés externas no han presentado cambios significativos y se mantienen en niveles bajos aunque superiores al promedio observado en 2013. En resumen, los anteriores hechos apuntan a que en 2014 el crecimiento promedio de los socios comerciales de Colombia sea similar al registrado en 2013 y que el promedio de los términos de intercambio se mantenga en niveles favorables. Las expectativas sobre un ajuste pausado de la liquidez en los Estados Unidos se mantienen. Asimismo, se espera que la postura monetaria expansiva en otras economías avanzadas persista por un período prolongado. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA La Junta Directiva tomó en consideración los siguientes aspectos relevantes: (i) En marzo, la inflación y el promedio de las cuatro medidas de inflación básica continuaron su proceso de convergencia al 3%. Por su parte, las expectativas de inflación a un año de los analistas económicos y las implícitas en los papeles de deuda pública, han fluctuado alrededor de la meta de inflación de largo plazo. (ii) El pronóstico macroeconómico indica que la demanda interna continuará creciendo a buen ritmo y que la economía se acercará al uso pleno de su capacidad productiva en 2014. Al mismo tiempo, la tasa de desempleo desestacionalizada ha mantenido una tendencia decreciente y alcanza el menor nivel observado en lo corrido de este siglo. (iii) En la medida que la inflación ha ido convergiendo a su meta de 3%, las diferentes tasas de interés reales han descendido. En marzo, el crecimiento del crédito total se aceleró levemente, impulsado por el comportamiento del crédito comercial e hipotecario. (iv) Las primas de riesgo de varias economías emergentes han descendido recientemente, los activos financieros en moneda local se han valorizado y sus monedas se han apreciado frente al dólar. Los anteriores cambios han sido más acentuados en Colombia, especialmente en el mercado de deuda pública, como resultado de los mayores ingresos de capital extranjero. (v) Los datos recientes de actividad económica global sugieren que la recuperación mundial continuará en 2014. En Estados Unidos las últimas cifras indican que su actividad económica podría mantener una recuperación gradual, mientras que la expansión en la zona Euro continuaría a un ritmo modesto. La desaceleración de algunas economías emergentes podría acentuarse. Con ello, es probable que en 2014 el crecimiento promedio de los socios comerciales de Colombia sea similar al aumento registrado en 2013 y que el promedio de los términos de intercambio se mantenga en niveles altos. (vi) Las expectativas sobre un ajuste pausado de la liquidez en los Estados Unidos se mantienen. Asimismo, se espera que la postura monetaria expansiva en otras economías avanzadas persista por un período prolongado. Las tasas de interés externas no han presentado cambios significativos y se mantienen en niveles bajos aunque superiores al promedio observado en 2013. La mayoría de los miembros de la Junta consideró que la estabilidad macroeconómica y la actual convergencia de la inflación hacia la meta de largo plazo, son compatibles con una postura de la política monetaria un poco menos expansiva que la actual. Considera además que un ajuste gradual y oportuno de esta última reduce la necesidad de ajustes bruscos en el futuro y asegura la estabilidad macroeconómica. Teniendo en cuenta todo esto y los rezagos con que las acciones de política monetaria afectan la inflación y el crecimiento, se consideró prudente aumentar en 25 puntos básicos la tasa de interés de intervención. Un miembro de la Junta manifestó la necesidad de mantener inalterada la tasa de intervención, teniendo en cuenta que las expectativas de inflación se encuentran perfectamente alineadas con la meta de 3% fijada por la Junta Directiva del Banco de la República. Adicionalmente, el dato más probable de crecimiento para 2014 según el equipo técnico del Banco, 4,3%, implica que la brecha del producto permanecerá en terreno negativo a lo largo del año. Estas consideraciones sugieren la necesidad de mantener inalterada la postura de la política monetaria hasta cuando se cuente con mayor información sobre la evolución de la actividad económica en el primer trimestre del año. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva por mayoría consideró apropiado incrementar la tasa de interés de intervención en 25 pb, y la situó en 3,5%. La Junta seguirá haciendo un cuidadoso monitoreo del comportamiento y proyecciones de la actividad económica e inflación en el país, de los mercados de activos y de la situación internacional. Finalmente, reitera que la política monetaria dependerá de la información disponible.
2014-05-01
- Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República de 30 de mayo de 2014 El 30 de mayo de 2014 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca, César Vallejo Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo. A continuación se presenta una síntesis de la visión del equipo técnico del Banco de la República sobre la situación macroeconómica (sección 1) y posteriormente se reseñan las principales discusiones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2). Un mayor detalle de la situación macroeconómica elaborada por el equipo técnico del Banco de la República se presenta en la sección de datos del informe sobre Inflación de abril de 2014 y el anexo estadístico. 1. CONTEXTO MACROECONÓMICO Con respecto al informe trimestral de inflación publicado en marzo de 2014 y teniendo en cuenta la información disponible a la fecha de la reunión, el equipo técnico encuentra que no se han presentado cambios significativos en el contexto macroeconómico: En particular resalta los siguientes elementos: i. El crecimiento oficial de los Estados Unidos para el primer trimestre fue revisado a la baja. Esta caída en la actividad económica, que se atribuye a los efectos del fuerte invierno, podría implicar menores pronósticos en el mercado para todo el año. Pese a ello, es probable que tales revisiones a la baja no sean significativas, ya que el comportamiento favorable más reciente sugiere que el choque del primer trimestre fue transitorio. Por otra parte, los principales países emergentes se han desacelerado, pero mantienen un crecimiento moderado. En este contexto, el DPI estima para 2014 un crecimiento promedio de los socios comerciales de Colombia similar al de 2013. ii. La Fed volvió a reducir sus compras de activos financieros. Las tasas de interés externas se redujeron y el mercado espera que el primer incremento en la tasa de interés de referencia de la Fed ocurra en la segunda mitad de 2015. En la zona del euro el BCE estaría considerando implementar nuevas medidas de estímulo monetario. iii. En mayo las medidas de aversión al riesgo global y las primas de riesgo de los principales países de la región se redujeron levemente y se mantienen por debajo de los promedios observados en lo corrido del año y de 2013. iv. En los primeros tres meses de 2014 los precios de las exportaciones han descendido más que el de las importaciones, por lo que los términos de intercambio (TI) se deterioraron. Entre febrero y marzo los TI se recuperaron debido a los mejores precios del café y el níquel. Se estima que en todo 2014 su promedio sea inferior a la media observada en 2013, pero sus niveles seguirán siendo favorables. v. El deterioro en los TI contribuyó a que en el primer trimestre de 2014 se registrara un déficit comercial externo. En lo corrido del año, y en términos anuales, las exportaciones descendieron debido a la caída de las ventas externas de origen minero e industrial (las agrícolas aumentaron). En el mismo período las importaciones crecieron debido a las mayores compras internacionales de materias primas. El valor de las importaciones de consumo fue similar al de un año atrás, mientras que el de los bienes de capital cayó. Con todo esto se incrementó la probabilidad de que en el presente año se registre una ampliación en el déficit de la cuenta corriente. vi. Las nuevas cifras para el primer trimestre del año del comercio al por menor y de expectativas económicas del Banco ratifican el buen comportamiento proyectado del gasto de los hogares, en especial en bienes durables. Por el lado de la oferta, al corregir por días hábiles, las cifras de industria indican un crecimiento bajo del sector, similar al estimado. vii. En abril la confianza de los consumidores se mantuvo en niveles por encima de su promedio histórico. Según la encuesta de Fedesarrollo, la confianza de industriales y comerciantes continúa al alza (series desestacionalizadas). En el mismo mes, las ventas de vehículos retrocedieron, pero su componente tendencial volvió a crecer. De todos modos, hay que advertir que las cifras del segundo trimestre estarán afectadas por los menores días hábiles, y por ello, el desempeño de la economía en este período puede ser menor al del primero. viii. En abril el crédito bancario presentó de nuevo mayores ritmos de aumento, como consecuencia de una mejor dinámica de los préstamos comerciales (en pesos) e hipotecarios y por una cartera de consumo que dejó de desacelerarse. Las tasas de interés reales de los diferentes tipos de créditos volvieron a descender, debido al aumento de la inflación sin alimentos. ix. Con todo lo anterior, el crecimiento proyectado más probable para los primeros tres meses de 2014 (4,8%) no cambió frente a la estimación del informe pasado. De esta forma, las estimaciones sugieren que en 2014 la brecha del producto sería negativa, pero cercana a cero, y que en 2015 se situaría por encima de este valor. x. En materia de precios, la inflación en abril fue de 0,46%, superior al promedio estimado por el mercado y al pronóstico de la SGEE. Con ello, la inflación anual se situó en 2,72%. Asimismo, el promedio de las cuatro medidas de inflación básica continuó con su tendencia creciente y se situó en 2,75%. Al igual que en el mes anterior, la variación anual de los no transables se desaceleró levemente, mientras que los otros grupos registraron mayores ritmos de aumento. xi. Ante estos resultados, las expectativas de inflación a un año de los analistas aumentaron a 3,2%. Las que surgen de los títulos de deuda pública a 2, 3 y 5 años han sido volátiles y se sitúan alrededor de 3%. En cuanto a los costos, en abril los salarios de la industria y el comercio volvieron a registrar mayores ritmos de aumento, con variaciones anuales superiores al límite superior del rango meta. Esto, en un contexto de una tasa de desempleo con tendencia decreciente y que se sitúa en un nivel similar a la estimación de la Nairu. El costo de las materias primas en la industria se habría acelerado, a juzgar por el aumento del IPP (consumo intermedio: 4,8%). En resumen, para el equipo técnico del Banco de la República el contexto macroeconómico se caracteriza por una brecha de producto ligeramente negativa, una inflación que converge más rápido hacia el punto medio del rango meta, unas expectativas de inflación de los analistas que aumentaron y superan el 3%, un nuevo descenso en las tasas de interés reales desde niveles bajos con respecto a los promedios históricos y una aceleración del crecimiento del crédito. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA Los miembros de la Junta Directiva coinciden en que las expectativas de inflación se encuentran ancladas en la meta de mediano plazo del Banco, y que los datos recientes de inflación observada, si bien muestran una aceleración mayor a la esperada, forman parte del proceso de convergencia hacia la meta. Además mencionaron que una parte de este fenómeno obedece a la corrección de la reducción que tuvo el índice de ciertas subcanastas durante 2013, y que por su naturaleza, era transitoria. En cuanto al producto, los miembros de la Junta Directiva coincidieron en que la economía crecerá en 2014 al menos 4,3%, que es el pronóstico central del equipo técnico. Existen algunas diferencias en el grupo sobre cuál sería el crecimiento del PIB potencial, de la demanda agregada y de la velocidad del cierre de la brecha del producto. En particular, algunos miembros esperan que tanto el crecimiento del PIB potencial como el observado, sean superiores a los proyectados por el equipo técnico del Banco. En el marco de análisis que se lleva a cabo en la determinación de la postura de la política monetaria, también se hace un seguimiento a las variables financieras. En este sentido, varios directores mencionaron que el crecimiento del endeudamiento de los hogares y de las empresas y la evolución de los indicadores de carga financiera representan una acumulación de riesgos en los balances de los agentes de la economía. Resaltaron que en la actualidad un aumento en la tasa de interés de intervención es coherente con el objetivo de reducir el estímulo a la acumulación de dichos riesgos, aún más si se tiene en cuenta que la tasa de interés real de la economía ha estado baja por un período prolongado de tiempo. Los miembros de la Junta Directiva consideraron que en el contexto anteriormente descrito, es deseable continuar con el retiro gradual del estímulo monetario, lo que implica un incremento en la tasa de interés de intervención. Esta opción de política recoge el hecho de que tanto la brecha del producto como de la inflación se irán cerrando a lo largo del año, y contrarresta las presiones a la baja que el aumento en la inflación genera en las tasas de interés reales, al tiempo que contribuye a moderar una acumulación excesiva de riesgos en los balances de la economía. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva por unanimidad consideró apropiado incrementar la tasa de interés de intervención en 25 pb, y la situó en 3,75%.
2014-06-01
- Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 20 de junio de 2014 El 20 de Junio de 2014 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca, César Vallejo Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo. A continuación se presenta una síntesis de la visión del equipo técnico del Banco de la República sobre la situación macroeconómica (sección 1) y posteriormente se reseñan las principales discusiones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2). Un mayor detalle de la situación macroeconómica elaborada por el equipo técnico del Banco de la República se presenta en la sección de datos del informe sobre Inflación de abril de 2014 y el anexo estadístico. 1. CONTEXTO MACROECONÓMICO En relación con el contexto macroeconómico el equipo técnico resalta los siguientes elementos: i. La información disponible señala que los principales países desarrollados siguen expandiéndose a un ritmo moderado. En el caso de los Estados Unidos el repunte de la actividad manufacturera, las ventas al por menor, la creación de empleo y la confianza del consumidor, según indicadores a mayo, parecen sugerir una recuperación de la actividad económica frente al primer trimestre. Pese a ello, el Banco Mundial y algunos analistas redujeron recientemente sus pronósticos de crecimiento de esta economía para 2014. En cuanto a la economía de la Zona Euro, ésta continúa creciendo a un ritmo modesto, a pesar de la mejoría en la confianza de consumidores y productores. El crecimiento de las economías emergentes de Asia se ha estabilizado, en tanto que en diversos países de América Latina ha predominado la desaceleración, con excepción de Colombia. ii.El comportamiento de los precios de los bienes básicos ha sido dispar. La cotización del petróleo continúa por encima del pronóstico del equipo técnico del Banco para 2014 y en las últimas semanas ha repuntado por factores geopolíticos; la del carbón permaneció estable, la del níquel presentó una tendencia alcista en lo corrido del año, a pesar de alguna caída durante las últimas cuatro semanas y la del café mostró cierto retroceso. Para el caso de los precios de los alimentos importados como el trigo y el maíz, en las últimas semanas se observaron descensos. iii. En la zona del euro persisten riesgos de deflación, lo que ha llevado al Banco Central Europeo a anunciar nuevas medidas de estímulo monetario. En Japón y los Estados Unidos la inflación ha aumentado recientemente, al igual que en varias economías de América Latina. En Asia se observa estabilidad. iv.Los mercados financieros globales han presentado un desempeño favorable durante las últimas semanas. Los índices de actividad bursátil se valorizaron y la percepción de riesgo se redujo. En América Latina las primas de riesgo continuaron descendiendo, en tanto que las tasas de cambio respecto al dólar de las principales monedas han mostrado comportamientos disímiles. En los casos de Chile y Perú se ha presentado cierta estabilidad, que contrasta con los altibajos que se observan en Brasil y la tendencia decreciente de Colombia. En este último caso como resultado de las entradas de capital relacionadas con los cambios en los portafolios de referencia de JP Morgan. No obstante, los síntomas de un mejor desempeño de la economía de los EEUU y su efecto sobre las expectativas de un ajuste de las tasas de interés de política en ese país, hacen que la tendencia futura de las tasas de cambio en la región sea particularmente incierta. v.En abril el valor en dólares de las exportaciones colombianas disminuyó frente a igual mes del año anterior. Esto se explica por la caída generalizada de los principales rubros (productos mineros, industriales y principales bienes agrícolas). En el acumulado enero-abril se redujeron las ventas externas de productos mineros por efecto de los menores precios, mientras que las agrícolas crecieron. Para las exportaciones no tradicionales, la contracción se explica, en gran medida, por las disminuciones registradas en las ventas externas de vehículos y de bienes agrícolas distintos a café, banano y flores. vi.El crecimiento anual del PIB del primer trimestre de 2014 fue 6,4% y se revisó al alza el de 2013. Por el lado de la oferta se destaca la dinámica positiva de todas las ramas de actividad, en particular los sectores de construcción, servicios sociales, el sector agropecuario y el financiero. Es importante resaltar que la industria registró un crecimiento de 3.3%, luego de dos años de tasas negativas. vii.Aunque aún no se han publicado las cifras del PIB por el lado de la demanda, la información disponible sugiere que la aceleración de la actividad económica se habría explicado por el dinamismo de la demanda interna, y en especial por el componente de inversión (según lo muestra el crecimiento del sector de la construcción y los datos de importaciones de bienes de capital para la industria y para la agricultura). viii.Para el segundo trimestre los indicadores de ventas y confianza del consumidor señalan que el consumo de los hogares mantiene su dinámica. En particular, las cifras de ventas de vehículos publicadas por Fenalco y Econometría sugieren que el consumo durable habría registrado un comportamiento favorable durante el segundo trimestre. ix.Lo anterior es coherente con el comportamiento de la cartera de consumo en el mes de mayo, la cual dejó de desacelerarse y registró un aumento leve en su ritmo de crecimiento. Por otro lado, los indicadores del mercado laboral continúan sugiriendo mejoras en las condiciones de trabajo. El crecimiento del empleo se ha mantenido en tasas aceptables en los últimos meses, y está concentrado principalmente en el componente asalariado. x.A lo anterior se suma que las tasas de interés reales de los hogares al igual que las comerciales están descendiendo y ambas se ubican por debajo de su promedio desde 2000, como resultado del aumento de la inflación y su efecto sobre las expectativas. Esto puede ser un factor que explique el repunte que se observa en el crecimiento de las carteras comercial y de consumo. Igualmente, la cartera hipotecaria ha venido acentuando su tendencia positiva. xi.En mayo la inflación anual al consumidor continuó con la tendencia ascendente que trae desde el comienzo del año. Este aumento se explica principalmente por el comportamiento de los precios de los alimentos. En el año corrido los alimentos también fueron el rubro que más contribuyó al aumento de la inflación. xii.Cabe destacar dos aspectos sobre el comportamiento reciente de la variación de los precios al consumidor: i) El IPC sin alimentos fue el único indicador de inflación básica que se redujo, y ii) los indicadores de expectativas muestran alzas y algunos empiezan a sobrepasar el punto medio del rango meta. xiii.El estado de la economía descrito por la información de crecimiento para el primer trimestre, los indicadores positivos que se conocen para el segundo trimestre, y la posible revisión al alza del pronóstico del PIB para el año completo que esto podría significar, sugieren que la demanda crece a un ritmo superior que el PIB potencial. Lo anterior, combinado con el registro de unas expectativas de inflación al alza, aumenta la probabilidad de que las presiones inflacionarias puedan estar propagándose a toda la economía. xiv.En síntesis, se podría afirmar que los datos más recientes muestran una economía y una inflación creciendo más rápido de lo previsto, con lo cual las expectativas han sido presionadas al alza. La tasa de interés real se mantiene en un nivel bajo (frente a su promedio desde el año 2000) y puede continuar estimulando la demanda interna. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA La Junta Directiva coincidió en que la economía creció en el primer trimestre del año con una dinámica mayor a la esperada y a la que había tomado en consideración los modelos del equipo técnico del Banco. Además, en que, independientemente de las diferentes opiniones que existen sobre el crecimiento del PIB potencial, la brecha se está cerrando a una tasa más acelerada que la antes prevista o incluso, en opinión de algunos miembros, ya se cerró. En cuanto a la inflación, los miembros de la Junta coincidieron en que las expectativas a pesar de haberse incrementado recientemente, se encuentran ancladas en la meta. Así mismo, coincidieron en que buena parte del aumento de la variación anual del los precios al consumidor se debe a la reversión esperada en algunos alimentos perecederos, así como en la reducción en los aumentos de precios de algunos bienes y servicios regulados. Varios miembros de la Junta manifestaron que podrían existir presiones inflacionarias surgidas de la aceleración de la demanda. Otro agregó que durante el pasado reciente las variaciones de la tasa de inflación han sido determinadas fundamentalmente por el comportamiento de los precios de los alimentos, en especial de los perecederos, y que dicho comportamiento, a su vez, ha sido el resultado de factores climáticos, esto es de choques de oferta, en vez de excesos de demanda. La Junta señaló que un ajuste gradual de la tasa de interés de intervención se justifica teniendo en cuenta los siguientes aspectos: (i) la volatilidad e incertidumbre de los datos de inversión pública, que han constituido la principal sorpresa en el crecimiento; (ii) el debilitamiento del comercio internacional, y (iii) los impactos de la política monetaria de los Estados Unidos. Los miembros de la Junta Directiva consideraron que en el contexto anteriormente descrito, es necesario continuar con el proceso de normalización de la política monetaria y monitorear de cerca la reacción de los balances del sistema financiero. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva por unanimidad consideró apropiado incrementar la tasa de interés de intervención en 25 pb, y la situó en 4%.
2014-07-01
- Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 31 de julio de 2014 El 31 de julio de 2014 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca, César Vallejo Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo. A continuación se presenta una síntesis de la visión del equipo técnico del Banco de la República sobre la situación macroeconómica (sección 1) y posteriormente se reseñan las principales discusiones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2). Un mayor detalle de la situación macroeconómica elaborada por el equipo técnico del Banco de la República se presenta en la sección de datos del informe sobre Inflación de junio de 2014 y en el anexo estadístico. 1. CONTEXTO MACROECONÓMICO En relación con el contexto macroeconómico el equipo técnico resalta los siguientes elementos: i. En el informe del mes de junio de 2014 se redujo el pronóstico de crecimiento promedio de los principales socios comerciales de Colombia para todo 2014. Ello como consecuencia de la caída del producto de los Estados Unidos registrada a comienzo de año y por la desaceleración más acentuada que la estimada en algunos países de la región. El nuevo pronóstico tiene implícita una demanda externa más dinámica en el segundo semestre, debido al repunte esperado en la actividad económica de los Estados Unidos. ii. En Estados Unidos las tasas de interés de largo plazo descendieron a lo largo del segundo trimestre, pero se mantienen por encima del promedio observado en 2013. El promedio del mercado proyecta que las compras de activos financieros por parte de la Reserva Federal (FED) culminen en octubre de 2014. También, que el primer incremento en su tasa de interés de referencia se dé a mediados de 2015. iii. En la economía global persisten algunos riesgos asociados a la dinámica de la economía China y otros países emergentes, así como al temor de deflación en la zona del euro. No obstante, la información más reciente de crecimiento del segundo trimestre para China y España resultó mejor que la esperada. iv. En lo corrido del año las medidas de riesgo país de Colombia presentaron una tendencia decreciente y a finales de julio se situaron en niveles bajos e inferiores al promedio de 2013. Los términos de intercambio han estado relativamente estables, con niveles algo inferiores al promedio registrado el año pasado. Es probable que en la segunda mitad del año los términos de intercambio continúen siendo favorables y contribuyan a sostener el ingreso nacional en niveles que se pueden calificar como históricamente altos. v. En el bimestre abril- mayo de 2014 el valor de las exportaciones en dólares resultó menor que el observado un año atrás. El mayor deterioro lo presentaron las ventas externas mineras seguidas de las industriales. Las exportaciones de los principales productos agrícolas siguen muy dinámicas impulsadas por las ventas externas de café y banano. De esta forma, en lo corrido del año hasta abril el valor de las exportaciones totales en dólares acumula una caída de 4,6% anual. vi. Por el contrario, en abril el valor de las importaciones en dólares se incrementó en términos anuales, jalonado por las compras externas destinadas al consumo final e intermedio y, en menor medida, por las de bienes de capital. En lo corrido del año hasta abril las importaciones totales crecieron a una tasa del 4,5% respecto al mismo período del año anterior. vii. De acuerdo con las anteriores tendencias de comercio exterior, es probable que en todo 2014 la balanza comercial sea negativa y que el déficit en la cuenta corriente sea mayor que el registrado en 2013. viii. En el contexto interno, la recuperación de la confianza del consumidor, el aumento del crédito de consumo, el buen crecimiento de las ventas al por menor y las constantes mejoras del mercado laboral sugieren que en el segundo trimestre el gasto real de los hogares mantendría un buen ritmo de crecimiento, aunque algo inferior al observado a comienzos de año. También se espera que la inversión crezca a un menor ritmo, más cercano al de su tasa histórica de crecimiento. Lo anterior, a juzgar por el comportamiento de las expectativas de inversión de las empresas (EMEE) y de las importaciones de bienes de capital, principalmente las destinadas al transporte. ix. Por el lado de la oferta, se espera que en el segundo trimestre la inversión en obras civiles y en construcción de edificaciones registre un crecimiento alto, pero inferior al observado en el primero. La industria no crecería, en parte afectada por un choque de oferta transitorio en el sector de derivados del petróleo y por el menor número de días hábiles observados en abril (semana santa). x. En el segundo trimestre de 2014 los depósitos bancarios crecieron a un menor ritmo anual. En el mismo periodo también se presentó una recomposición de los activos de los establecimientos de crédito a favor de la cartera, principalmente hacia la comercial. La venta de parte de las inversiones (TES) de dichos establecimientos a agentes extranjeros fue la principal fuente de financiación del crecimiento del crédito. Así, la cartera bancaria en moneda nacional se aceleró y registra tasas de aumento superiores al crecimiento del PIB nominal estimado para el presente año. xi. El incremento en las tasas de interés de referencia se ha transmitido hacia las tasas de interés de crédito, a una velocidad similar a la observada en los últimos diez años. xii. En términos reales, todas las tasas de interés de crédito (exceptuando tarjetas de crédito) se encuentran por debajo del promedio calculado desde 2000. xiii. Con todo lo anterior, para el segundo trimestre de 2014 el equipo técnico proyecta una tasa anual de crecimiento entre 3,6% y 5,0%, con 4,3% como cifra más probable. Ello representaría una desaceleración con respecto al primer trimestre, en parte explicada por el menor número de días hábiles. Si dicho pronóstico se materializa, en la primera mitad de 2014 la economía crecería a una tasa similar a la registrada en el segundo semestre de 2013. xiv. Para todo 2014 el equipo técnico revisó al alza el rango de pronóstico y lo situó en un intervalo entre 4,2% y 5,8%, con 5% como cifra más probable. xv. En junio la inflación anual se situó en 2,79%, cifra inferior al registro de mayo y menor al pronóstico promedio del mercado y del equipo técnico. Esta pausa en la aceleración de la inflación se dio después de seis meses de continuo incremento y se explicó principalmente por los grupos de alimentos y no transables sin alimentos ni regulados. El promedio de las medidas de inflación básica ha presentado un comportamiento similar y se situó en 2,76%. xvi. Las expectativas de inflación de los analistas a un año, al igual que las que resultan de los papeles de deuda pública a dos, tres y cinco años se mantienen cerca de la meta de largo plazo (3%). En síntesis, la demanda agregada en Colombia ha mantenido un fuerte crecimiento en el contexto de un uso de la capacidad productiva cercano al pleno empleo. Se espera que el gasto interno mantenga un ritmo de crecimiento dinámico, acompañado de una recuperación de la demanda externa. La aceleración de la inflación presentó una pausa en junio, pero los pronósticos de corto plazo (PCP) sugieren que a diciembre se situará algo por encima del 3%. Las expectativas de inflación se han situado cerca o levemente por encima del 3%. Todo esto ocurre en un ambiente en el cual el crecimiento del crédito ha aumentado y las tasas de interés reales de los préstamos se sitúan en niveles que impulsan el gasto. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA En materia de inflación los miembros de la Junta destacaron que las expectativas se ubican alrededor de la meta, y que se espera que continúen con dicha dinámica. En cuanto a la inflación, esperan que haya algunos choques adicionales de oferta, en particular en alimentos y regulados, que impacten datos puntuales del dato total de inflación y se espera que éstos no contaminen las expectativas generales, por su naturaleza y transitoriedad. La mayoría de los miembros de la Junta consideran que la brecha del producto se cerró debido a la fuerte dinámica de la demanda interna y al crecimiento del PIB. Además, que de mantenerse inalterada la tasa de interés, podría llegar a generarse un exceso de demanda que comprometería la estabilidad del crecimiento y la inflación. Coincidieron también en que existen riesgos de choques exógenos a la política monetaria relacionados con el comportamiento de la demanda externa y el impacto en la demanda interna de la política fiscal y resaltaron que la nueva información será especialmente relevante para definir la necesidad de movimientos posteriores de la tasa de interés de intervención. Otro miembro de la Junta manifestó que, aunque en su opinión la brecha del producto aún no se halla cerrada, resulta clara la convergencia tanto de la inflación total y de las expectativas hacia la meta, y del crecimiento del PIB hacia su potencial, que es precisamente lo que desde el inicio del ciclo de normalización de la política a partir de abril se buscaba. Por tanto, no cree conveniente hacer una pausa en el reajuste de la tasa de interés antes de llegar a su rango de normalización donde debería culminar este ciclo de reajustes, del cual el actual nivel de la misma se halla muy cercano. Un miembro de junta considera que la economía se encuentra cerca al equilibrio y que ante los riesgos de reducción de la demanda agregada no resulta apropiado incrementar la tasa de interés. En efecto, factores exógenos como un deterioro de la confianza externa o una caída en el precio de los commodities podrían desacelerar la dinámica que la economía ha presentado en la primera mitad del año, con lo cual una tasa de interés de intervención del 4% sería consistente con una economía creciendo a su ritmo potencial pero con riesgos de desaceleración en el corto plazo. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva por mayoría consideró apropiado incrementar la tasa de interés de intervención en 25 pb, y la situó en 4,25%.
2014-08-01
- Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 29 de agosto de 2014 El 29 de agosto de 2014 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca, César Vallejo Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo. A continuación se presenta una síntesis de la visión del equipo técnico del Banco de la República sobre la situación macroeconómica (sección 1) y posteriormente se reseñan las principales discusiones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2). Un mayor detalle de la situación macroeconómica elaborada por el equipo técnico del Banco de la República se presenta en la sección de datos del informe sobre Inflación de junio de 2014 y en el anexo estadístico. 1. CONTEXTO MACROECONÓMICO En relación con el contexto macroeconómico el equipo técnico resalta los siguientes elementos: En el presente informe, la nueva información disponible sugiere que el pronóstico de crecimiento para 2014 del promedio de los socios comerciales de Colombia podría ser algo menor frente al pasado informe. Ello, como consecuencia del crecimiento nulo en la zona del euro en el segundo trimestre y por una desaceleración más acentuada que la estimada en algunos países de la región. En el mismo periodo, el aumento del PIB de los Estados Unidos estuvo en línea con lo proyectado y es coherente con la estimación anual. Para el segundo semestre se espera una demanda externa más dinámica, debido al repunte proyectado en la actividad económica de los Estados Unidos. En lo corrido de agosto las tasas de interés de largo plazo en los Estados Unidos continuaron con su tendencia decreciente, pero se mantienen por encima del promedio observado en 2013. Se espera que las compras de activos financieros por parte de la Reserva Federal (FED) culminen en octubre de 2014. En general, el mercado proyecta que el primer incremento en su tasa de interés de referencia ocurra a mediados de 2015. Las tensiones geopolíticas mundiales y los problemas de deuda pública en Argentina han generado volatilidad en las medidas de riesgo mundial y en los países de la región. Pese a ello, en agosto dichas medidas para Colombia se mantienen en niveles bajos e inferiores al promedio de 2013. En el segundo trimestre de 2014 el nivel de los términos de intercambio ha sido algo inferior al registrado un año atrás. Es probable que en lo que resta del año continúen con una leve tendencia decreciente, pero contribuyendo a mantener el ingreso nacional en niveles que se pueden calificar como históricamente altos. En el segundo trimestre de 2014, la caída anual en el valor de las exportaciones en dólares fue similar a la observada en los primeros tres meses del año. En esta oportunidad el mayor deterioro lo presentaron las ventas externas de bienes industriales, mientras que las mineras registraron una caída menor que la observada en el primer trimestre. Las exportaciones de los principales productos agrícolas siguen muy dinámicas, impulsadas por las ventas externas de café y banano. De esta forma, en el primer semestre el valor de las exportaciones totales en dólares acumuló una caída de 4,5% anual. Con respecto a las importaciones en dólares, en el segundo trimestre su valor creció a un mayor ritmo anual que el observado en el primer trimestre. La aceleración en las compras externas se registró tanto en las destinadas al consumo final como en las dirigidas a bienes de capital. Con ello, en el primer semestre las importaciones totales crecieron 6,1% anual. De acuerdo con las anteriores tendencias de comercio exterior, es probable que en todo 2014 la balanza comercial sea negativa y que el déficit en la cuenta corriente sea mayor que el registrado en 2013. De todas maneras hay que advertir que el choque de oferta ocasionado por el cierre temporal de la refinería de Cartagena podría explicar parte de la ampliación de este déficit. En el contexto interno, la nueva información con cierre a junio sugiere que el crecimiento del segundo trimestre estaría en línea con lo proyectado en el Informe sobre Inflación trimestral pasado. El gasto real de los hogares mantendría un buen ritmo de expansión, aunque algo inferior al observado a inicios de año. También, se espera que la inversión crezca un ritmo menor y más cercano al de su tasa histórica de crecimiento. Por el lado de la oferta, se espera que en el segundo trimestre la inversión en obras civiles y en construcción de edificaciones registre un crecimiento alto, pero inferior al observado en el primero. La producción industrial (incluye trilla de café) podría ser algo menor al registro de un año atrás, en parte afectada por un choque de oferta transitorio en el sector de derivados del petróleo y por el menor número de días hábiles observados en abril (Semana Santa). Para el tercer trimestre las cifras económicas son escasas y sugieren señales mixtas. Por un lado, la nueva información a julio del Índice de Confianza del Consumidor, de las expectativas de los comerciantes, de las ventas de automóviles y del crédito de consumo, indican que el gasto de los hogares continuó expandiéndose de manera satisfactoria. De igual forma, la encuesta de Fedesarrollo aplicada a la industria apunta a que el proceso de recuperación de este sector continuó. Por el contrario, en julio la producción de petróleo retrocedió y volvió a situarse por debajo del millón de barriles diarios. En julio y lo corrido de agosto la cartera bancaria en moneda nacional se desaceleró frente al primer semestre del año. La menor dinámica de la cartera comercial y, en menor medida, de la hipotecaria, explicaron dicha desaceleración. La cartera de consumo continúa creciendo a una tasa estable. Todas las modalidades registran aumentos anuales superiores al crecimiento del PIB nominal estimado para el presente año. En julio se debilitó el traspaso de los incrementos de la tasa de interés de referencia hacia las tasas de interés de los créditos. En términos reales, todas las tasas de interés de crédito (exceptuando las de tarjetas) se encuentran por debajo del promedio calculado desde 2000. Con todo lo anterior, para el segundo trimestre de 2014 el equipo técnico mantuvo la proyección de crecimiento entre 3,6% y 5,0%, con 4,3% como cifra más probable. Para todo 2014 se sigue estimando un rango entre 4,2% y 5,8%, con 5% como cifra más factible. Los modelos sugieren que la brecha de producto podría ser levemente positiva en el presente año. En julio la inflación anual retomó su convergencia hacia la meta de largo plazo y se situó en 2,89%. Como ha sido frecuente en lo corrido del año, la tendencia creciente en la variación anual de los precios regulados y de los alimentos explicó la aceleración de la inflación del mes pasado. En los últimos dos meses el promedio de las medidas de inflación básica descendió y en julio se situó en 2,58%. Esta desaceleración también se observó en los grupos de transables y no transables sin alimentos ni regulados. Las expectativas de inflación de los analistas a un año, al igual que las que resultan de los papeles de deuda pública a dos, tres y cinco años, se mantienen cerca o levemente por encima de la meta de largo plazo (3%). En síntesis, la nueva información disponible indica que la demanda agregada del país mantiene su dinamismo. Los pronósticos apuntan a que el gasto interno continuará creciendo a buen ritmo junto a una recuperación de la demanda externa más lenta de lo proyectado. Si bien la tendencia decreciente de la tasa de desempleo podría reflejar factores estructurales, la fortaleza de la demanda agregada podría llevarla a niveles que generen presiones de costos salariales sobre los precios. La inflación retomó su sendero de convergencia hacia la meta de largo plazo y las proyecciones de corto plazo y las expectativas de inflación continúan algo por encima del 3%, aunque las medidas de inflación básica han disminuido en los dos últimos meses. La transmisión de las alzas de la tasas de interés de intervención a las tasas de interés del sistema financiero se ha debilitado, al tiempo con una reducción del crecimiento del crédito. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA La Junta Directiva por mayoría consideró apropiado incrementar la tasa de interés de intervención en 25 pb, y la fijó en 4,5%. Unos directores coincidieron en la decisión de incrementar la tasa considerando que la información de la dinámica económica continúa siendo positiva en la mayoría de sectores analizados; además, la tasa de interés real sigue estimulando la actividad económica. Por su parte, otro director afirmó que con este incremento de 25 pb se culminaría el proceso de normalización de la política monetaria que se inició en abril de este año. Unos miembros consideraron que existe evidencia de ajuste en algunas variables económicas claves, con lo que se considera que la política monetaria está logrando sus efectos tanto en crecimiento como en inflación, particularmente en los indicadores de inflación básica. Para algunos de ellos, el balance de riesgos sugiere incrementar la tasa de intervención en 25 puntos básicos con el fin de asegurar la consolidación del proceso de normalización de la postura monetaria y el anclaje de las expectativas de inflación a la meta. Para otros, teniendo en cuenta el rezago con que actúa la política monetaria, no es necesario incrementar más la tasa de intervención, por lo que votaron en favor de mantener la tasa en 4,25%. Estos últimos resaltaron que existen factores exógenos que estarían contribuyendo a desacelerar la actividad económica. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva por mayoría consideró apropiado incrementar la tasa de interés de intervención en 25 pb, y la fijó en 4,5%.
2014-09-01
- Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 26 de septiembre de 2014 El 26 de septiembre de 2014 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca, César Vallejo Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo. A continuación se presenta una síntesis de la visión del equipo técnico del Banco de la República sobre la situación macroeconómica (sección 1) y posteriormente se reseñan las principales discusiones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2). Un mayor detalle de la situación macroeconómica elaborada por el equipo técnico del Banco de la República se presenta en la sección de datos del informe sobre Inflación de junio de 2014 y en el anexo estadístico. 1. CONTEXTO MACROECONÓMICO En relación con el contexto macroeconómico el equipo técnico resalta los siguientes elementos: La nueva información de la actividad económica mundial sugiere que el crecimiento promedio de nuestros socios comerciales para 2014 podría ser algo menor que lo estimado en el escenario central del informe trimestral pasado (2,5%). Ello, como consecuencia de la pérdida de dinamismo en la zona del euro y por una desaceleración más acentuada en China y en algunos países de la región. Por el contrario, en los Estados Unidos se ha observado un desempeño en su actividad económica algo mayor que lo estimado. De esta forma, es probable que en el segundo semestre la recuperación de la demanda externa por los productos colombianos sea más lenta de lo pronosticado en informes anteriores. Se espera que las compras de activos financieros por parte de la Reserva Federal (FED) culminen en octubre de 2014. También, se sigue proyectando que el primer incremento en la tasa de interés de referencia de la FED ocurra a mediados de 2015, pero con ajustes algo más rápidos a los esperados en meses anteriores. Ante este escenario, las tasas de interés de largo plazo de los bonos del gobierno de Estados Unidos dejaron de descender en las últimas semanas y se situaron en niveles superiores al promedio observado en 2013. En las últimas semanas las primas de riesgo de varios países de la región se han incrementado, pero se mantienen en niveles bajos e inferiores al promedio registrado en 2013. El precio internacional del petróleo, al igual que las cotizaciones de algunos bienes básicos que importa Colombia, descendieron. Cálculos preliminares indican que el deterioro en los términos de intercambio podría ser mayor que lo estimado en el informe trimestral pasado. En julio el valor de las exportaciones en dólares se recuperó y se situó por encima del promedio registrado en el primer semestre del año. La recuperación fue más acentuada en las ventas externas de bienes de origen minero y agrícola. En los primeros siete meses del año, el valor de las exportaciones totales en dólares acumuló una caída de 2,6% (en el primer semestre fue de -4,5%). Las importaciones en dólares se aceleraron y en julio registraron su mayor valor mensual histórico. El crecimiento anual más alto se dio en las destinadas a bienes de capital, principalmente por compras de aviones. Las importaciones de bienes de consumo e intermedios también registraron crecimientos importantes. En lo acumulado entre enero y julio, las importaciones totales crecieron 8,1%, 2 pp más que lo registrado en el primer semestre del año. Las anteriores tendencias de comercio exterior aumentaron la probabilidad de que en todo 2014 la balanza comercial sea negativa y que se presente una ampliación en el déficit de la cuenta corriente frente a 2013. El choque de oferta ocasionado por el cierre temporal de la refinería de Cartagena explica parte de la ampliación de este déficit. En el contexto interno, el crecimiento económico del segundo trimestre de 2014 (4,3%) estuvo en línea con lo proyectado. La demanda interna y sus principales componentes (consumo e inversión) se desaceleraron, pero mantienen aumentos superiores a los del PIB total. Las exportaciones cayeron mientras que las importaciones se desaceleraron. Por el lado de la oferta, los sectores económicos más dinámicos fueron las obras civiles, seguido de servicios financieros, inmobiliarios y a las empresas, y servicios sociales comunales y personales. Además del minero, el otro sector que presentó una caída fue la industria, en parte explicada por el cierre temporal de la refinería de Cartagena. Para el tercer trimestre, las nuevas cifras de actividad económica sugieren que el crecimiento en este período podría ser algo mayor que el registrado en el segundo. Esto se observa en el comportamiento, a julio, del comercio al por menor, de la producción industrial, de las licencias de construcción y producción de cemento, y en las cifras de café y demanda de energía a agosto. No obstante, la producción de petróleo continuó contrayéndose en el bimestre julio-agosto. En agosto y lo corrido de septiembre, el crecimiento de la cartera bancaria en moneda nacional continuó con su tendencia decreciente. La menor dinámica de la cartera comercial y, en menor medida, de la hipotecaria, explicaron dicha desaceleración. La cartera de consumo continúa creciendo a una tasa estable. Todas las modalidades registran aumentos anuales superiores al crecimiento del PIB nominal estimado para el presente año. 10. En agosto el traspaso de los incrementos de la tasa de interés de referencia hacia las tasas de interés de los créditos se deterioró. Algunos indicadores sugieren que dicho comportamiento se debe a una mayor oferta de crédito. En términos reales, todas las tasas de interés de crédito (exceptuando las de tarjetas) se encuentran por debajo del promedio calculado desde 2000. Con todo lo anterior, para 2014 el equipo técnico sigue estimando un rango de crecimiento entre 4,2% y 5,8%, con 5% como cifra más factible. Esta última cifra implica un aumento del PIB para el segundo semestre algo menor que el registrado en el primero. En agosto la inflación anual aumentó y se situó en 3,02%, en línea con lo estimado por el equipo técnico. Los mayores ajustes en los precios de los alimentos, regulados y no transables sin alimentos ni regulados, explicaron dicho comportamiento. El promedio de las medidas de inflación básica retomó su convergencia hacia la meta y se ubicó en 2,7%. Las expectativas de inflación de los analistas a un año, al igual que las que resultan de los papeles de deuda pública a dos, tres y cinco años, se mantienen cerca o levemente por encima de la meta de largo plazo (3%). En síntesis la demanda agregada continúa mostrando un fuerte crecimiento en un contexto cercano a la plena utilización de la capacidad productiva. Al tiempo, las expectativas de inflación se mantienen cerca del 3%. Lo anterior se presenta en un entorno de deterioro de los términos de intercambio y de mayor incertidumbre sobre la recuperación de la actividad económica mundial y del costo del financiamiento externo, factores que pueden incidir tanto en la demanda agregada como en la tasa de cambio. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA La Junta Directiva por mayoría consideró apropiado mantener inalterado el nivel de la tasa de interés de intervención en 4,5%. Algunos integrantes de la Junta coinciden con los elementos principales del diagnóstico de corto y mediano plazo del documento del equipo técnico. Las consideraciones relevantes en el horizonte tradicional del esquema de inflación objetivo (uno a dos años) son la existencia de una brecha del producto levemente positiva, una demanda interna que crece a tasas altas y superiores a la esperada, una inflación que estará en los próximos meses ligeramente por encima del 3% pero unas expectativas de inflación que hasta ahora muestran señales de estar ancladas a la meta del 3%, y una tasa de interés de política que lleva implícita una postura monetaria levemente expansiva. Sin embargo, en la medida que la política monetaria actúa con rezago, es necesario considerar los riesgos que podrían afectar la confianza y el comportamiento futuro de la economía real, en particular los inherentes al entorno internacional y la política fiscal. En esa medida consideraron prudente mantener inalterada en esta ocasión la tasa de intervención en 4,5% y enfatizaron la importancia de seguir evaluando el desempeño de la economía en la próxima reunión para definir el futuro de la política monetaria. Por su parte, otros integrantes de la Junta afirmaron que la información más reciente sobre el crecimiento del PIB en el segundo trimestre por el lado de la demanda interna, indica una moderación de la misma, a pesar de que conserva su dinamismo especialmente debido al rubro de obras civiles. No obstante, dado el rezago entre los movimientos de la tasa de interés de política y sus efectos plenos sobre la demanda, sus mayores efectos no se sentirán antes del segundo semestre de 2015 y el primero de 2016. De otra parte, el impulso originado en el comportamiento del sector minero-energético se ha moderado, al igual que la tendencia descendente de los términos de intercambio, a lo que se suma la debilidad del sector externo, particularmente de nuestros vecinos de la región. Finalmente, tanto la inflación total como las expectativas se hallan ancladas en la meta, lo cual es el objetivo esencial de la política monetaria, en tanto que el promedio de las básicas como la inflación sin alimentos aún se encuentran por debajo del punto medio del rango meta. Por consiguiente, se debe mantener la actual tasa de 4,5%. Otro integrante de la Junta consideró que, con una brecha positiva del producto y una inflación que continua elevándose en sus expectativas, es prudente continuar aumentando la tasa de interés de intervención en 25 pb a 4,75% dados los datos de crecimiento de la demanda interna en el segundo trimestre, los pertinentes al mercado laboral y los indicadores de confianza de empresarios y consumidores. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA Por mayoría, la Junta Directiva decidió mantener la tasa de interés de intervención en 4,5%. Bogotá DC, octubre 10 de 2014.
2014-10-01
- Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 30 de octubre de 2014 El 30 de octubre de 2014 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca, César Vallejo Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo. A continuación se presenta una síntesis de la visión del equipo técnico del Banco de la República sobre la situación macroeconómica (sección 1) y posteriormente se reseñan las principales discusiones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2). Un mayor detalle de la situación macroeconómica elaborada por el equipo técnico del Banco de la República se presenta en la sección de datos del informe sobre Inflación de septiembre de 2014 y en el anexo estadístico. 1. CONTEXTO MACROECONÓMICO En relación con el contexto macroeconómico el equipo técnico resalta los siguientes elementos: En el presente informe se redujo el pronóstico de crecimiento de la demanda externa para este y el siguiente año frente a lo estimado un trimestre atrás. Las nuevas proyecciones sugieren que en 2015 la recuperación promedio de nuestros socios comerciales sería más lenta e impulsada principalmente por la economía estadounidense. La zona del euro registraría un bajo crecimiento en su PIB, pero algo superior al estimado para 2014. China continuaría con su desaceleración, mientras que la mayoría de países socios de la región se recuperarían en el siguiente año pero presentarían tasas de crecimiento menores que sus respectivos potenciales. Las medidas de prima de riesgo de varios países de la zona del euro y de algunas economías emergentes se han incrementado, aunque de forma moderada. El deterioro observado en la actividad económica de varios de ellos, así como la mayor incertidumbre sobre su recuperación, explican parte de este comportamiento. Adicionalmente, las caídas en los precios de los bienes básicos que exportan algunas de estas economías, principalmente del petróleo, también contribuyeron a incrementar las medidas de riesgo. Con ello, sus monedas se han depreciado frente al dólar. En los Estados Unidos, la apreciación del dólar y la caída en los precios internacionales energéticos contribuirían a aminorar los costos de producción y a reducir la inflación. La tasa de desempleo volvió a descender pero a niveles que todavía no generan presiones de costos salariales sobre los precios. La menor cotización de la gasolina también sería un incentivo para que los hogares incrementen su gasto. No obstante, la recuperación más débil de sus socios comerciales y los riesgos de una desaceleración en la demanda externa incrementó la incertidumbre sobre el desempeño de su sector exportador. Ante la perspectiva de una inflación baja en los Estados Unidos y los mayores riesgos de una desaceleración en el comercio global, el promedio del mercado espera que el primer incremento en la tasa de interés de la FED se dé hacia finales de 2015, en lugar de junio del mismo año como lo proyectaban un trimestre atrás. Este horizonte más lejano en dicho incremento contribuyó al descenso en las tasas de interés de largo plazo. Los actuales niveles en el precio internacional del petróleo se sitúan muy por debajo del pronóstico que tenía el equipo técnico, mientras que los del café siguen en niveles altos. Otros bienes básicos que importa Colombia, como el maíz, el trigo y la soya también han presentado descensos importantes en sus cotizaciones internacionales. En el neto, los términos de intercambio han descendido más de lo previsto, situación que de mantenerse, se verá reflejada en un menor ingreso nacional. La debilidad en la demanda externa y los menores precios internacionales de los bienes básicos mineros se han reflejado en el comportamiento de las ventas externas del país. En lo corrido de 2014 hasta agosto, las exportaciones totales en dólares han caído 2,7% anual. En dicho periodo las de origen agrícola han presentado altos incrementos debido a las exportaciones de café y banano, mientras que las de origen minero y del resto de sectores han descendido. En el margen, bimestre julio-agosto, las agrícolas y de resto de sectores presentaron altos crecimientos anuales mientras que las mineras descendieron pero con menor intensidad. En lo corrido hasta agosto, las importaciones en dólares han crecido 6,8%, explicadas por el aumento de las destinadas a materias primas, a consumo y en menor medida a bienes de capital. En el bimestre julio-agosto las compras externas se aceleraron, tanto las dirigidas al consumo como a bienes de capital; las de materias primas presentaron un menor ritmo de aumento. Con el anterior contexto externo y las nuevas cifras de comercio exterior, el equipo técnico incrementó la proyección del déficit en la cuenta corriente para 2014, el cual estaría contenido en un rango entre 4,4% y 4,8% del PIB. Estas cifras tienen implícito un menor superávit corriente del sector minero debido a la caída en los ingresos petroleros. También, supone que el amplio uso del ahorro externo por parte del resto de sectores habría continuado en la segunda mitad del año. En cuanto al crecimiento interno, los nuevos indicadores de oferta y demanda para el tercer trimestre de 2014 sugieren que en dicho periodo el PIB crecerá a buen ritmo, aunque menor que el registrado en el primer semestre del año. El comportamiento de las ventas al por menor, del crédito de consumo, del índice de confianza del consumidor y del mercado laboral, indican que el consumo mantendría una fuerte dinámica. El aumento de las compras externas de maquinaria y equipo de transporte, y la tendencia registrada por las obras civiles, prevén un buen desempeño de la inversión, aunque a tasas menores. Con todo ello, la demanda interna crecería a un ritmo menor que el del semestre anterior, aunque a una tasa alta y superior a la del producto. Las cifras de comercio exterior indican que las importaciones aumentarían más que las exportaciones, y con ello la balanza comercial tendría un aporte negativo al crecimiento. En el tercer trimestre el crédito bancario continuó desacelerándose y registró tasas anuales superiores al PIB nominal estimado para el presente año. La menor dinámica se ha presentado en el dirigido a las empresas. En el mismo periodo, la desaceleración en los préstamos hipotecarios fueron compensados por el leve repunte de la cartera de consumo y con ello el crecimiento del crédito a los hogares se estabilizó. Todo ello en un contexto de débil transmisión de los aumentos de la tasa de interés de referencia hacia las tasas de interés de los préstamos. Con todo lo anterior, el equipo técnico estima un intervalo de crecimiento económico para el tercer trimestre entre 4,0% y 5,2%. Para todo 2014 el rango de pronóstico se sitúa entre 4,5% y 5,5% con 5% como cifra más probable. Según las estimaciones, en 2015 la economía se desaceleraría y el PIB presentaría una tasa de aumento alrededor de 4,3%, contenida en un intervalo entre 3,0% y 5,3%. Las nuevas estimaciones de brecha de producto para 2014, indican que esta sería levemente positiva y más cerrada que el pronóstico realizado el trimestre pasado. En 2015 la brecha continuaría cerrándose pero se mantendría positiva. En materia de inflación, el resultado de septiembre de 2,86% anual, estuvo en línea con lo esperado por el equipo técnico. El grupo de alimentos presentó menores ritmos de aumento, y al excluirlos del IPC, su complemento también se desaceleró en el último mes. Las otras tres medidas de inflación básica también disminuyeron y el promedio de los cuatro indicadores se situó en 2,63%. En lo corrido del año hasta septiembre se ha acumulado una inflación de 3,08%, cifra que ya supera la meta de largo plazo (3,0%). Con este resultado y dada la baja base de comparación del IPC en el último trimestre de 2013, es probable que al finalizar el año la inflación se sitúe en la parte alta del rango meta establecido para el presente año (entre 2% y 4%). Las expectativas de inflación a un año de los analistas y las de 2, 3 y 5 años derivadas de los papeles de deuda pública permanecen relativamente estables y algo por encima del 3%. En síntesis, la demanda agregada continúa mostrando un fuerte crecimiento en un contexto cercano a la plena utilización de la capacidad productiva. Al tiempo, las expectativas de inflación se mantienen cerca del 3%. Lo anterior se presenta en un entorno de deterioro de los términos de intercambio y de creciente incertidumbre sobre la recuperación de la actividad económica mundial y el costo del financiamiento externo, factores que pueden incidir en la demanda agregada y en la tasa de cambio. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA La decisión por unanimidad de los miembros de la Junta Directiva fue la de mantener la tasa de interés de intervención en 4,5%. Los miembros de la Junta Directiva destacaron que la economía exhibe una fuerte dinámica pero existen riesgos de choques negativos en el horizonte tradicional de política que podrían resultar en una desaceleración de la actividad. En particular el entorno externo sigue exhibiendo síntomas de debilidad y los términos de intercambio para Colombia se han deteriorado. De mantenerse esta tendencia se afectará el crecimiento del ingreso nacional y el gasto agregado. De otro lado, las expectativas de inflación se encuentran ancladas en niveles cercanos al 3%. El promedio de los indicadores de inflación básica y la inflación total converge hacia su meta. En estas condiciones, los miembros de la Junta coincidieron en mantener inalterada la tasa de interés de intervención y continuar monitoreando el desempeño de la economía. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva por unanimidad consideró mantener la tasa de interés de intervención en 4,5%.
2014-11-01
- Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 28 de noviembre de 2014 El 28 de noviembre de 2014 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca, César Vallejo Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo. A continuación se presenta una síntesis de la visión del equipo técnico del Banco de la República sobre la situación macroeconómica (sección 1) y posteriormente se reseñan las principales discusiones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2). Un mayor detalle de la situación macroeconómica elaborada por el equipo técnico del Banco de la República se presenta en la sección de datos del informe sobre Inflación de octubre de 2014 y en el anexo estadístico. 1. CONTEXTO MACROECONÓMICO En relación con el contexto macroeconómico el equipo técnico resalta los siguientes elementos: La información ratificó el débil crecimiento de la economía mundial. Estados Unidos presentó un buen desempeño mientras que en la zona del euro el producto registró un aumento modesto. En la mayoría de países de Latinoamérica los crecimientos del PIB fueron inferiores a sus promedios históricos. Con todo lo anterior, se mantuvo el pronóstico de un débil crecimiento del promedio de nuestros socios comerciales para 2014 y 2015. La demanda externa en el siguiente año seguirá lenta con excepción de la economía estadounidense. Los precios del petróleo descendieron fuertemente. Este comportamiento, que presiona a la baja la inflación mundial, también podría contribuir a incentivar el gasto, especialmente en aquellos países importadores de crudo. Para las economías exportadoras de petróleo, la caída en estas cotizaciones genera una caída de los términos de intercambio y por ende una reducción en el ingreso nacional. Ante la perspectiva de una inflación baja en los Estados Unidos y los mayores riesgos de una desaceleración en el comercio global, el promedio del mercado espera que el primer incremento en la tasa de interés de la FED se dé hacia finales de 2015. Lo anterior se ha presentado junto con una leve tendencia decreciente en las tasas de interés de largo plazo. Las medidas de prima de riesgo de varios países de la zona del euro y de algunas economías emergentes continuaron incrementándose aunque de forma moderada. Los flujos de capitales hacia estos países se han reducido y sus monedas se han depreciado frente al dólar. En Colombia la caída del precio internacional del petróleo ha implicado un deterioro de los términos de intercambio, a pesar de que las cotizaciones internacionales del café se mantienen altas. De mantenerse esta tendencia se seguirá afectando negativamente el ingreso nacional. La debilidad en la demanda externa y los menores precios internacionales de los bienes básicos mineros se han reflejado en el comportamiento de las exportaciones en dólares del país. En lo corrido de 2014 hasta septiembre, las ventas externas totales han caído 1,9% anual. Las de origen agrícola han presentado altos incrementos debido a las exportaciones de café y banano, mientras que las de origen minero y del resto de sectores han descendido. En el acumulado enero-septiembre, las importaciones en dólares han crecido 7,4%, explicadas por el aumento de las de materias primas, de las destinadas a consumo, y en menor medida a las de bienes de capital. Las nuevas cifras de comercio exterior validan la proyección de un mayor déficit en la cuenta corriente para 2014: entre 4,4% y 4,8% del PIB. Esta ampliación tiene implícito un menor superávit corriente del sector minero y supone que el amplio uso del ahorro externo por parte del resto de sectores habría continuado en la segunda mitad del año. En cuanto al crecimiento en Colombia, los indicadores más recientes de oferta y demanda sugieren que en el segundo semestre de 2014, el PIB crecería a buen ritmo, aunque menor que el registrado en la primera mitad del año. El principal impulso provendría de la demanda interna. Así lo sugiere el comportamiento de las ventas al por menor, del crédito de consumo, del índice de confianza del consumidor y del mercado laboral, los cuales indican que el consumo mantendría una fuerte dinámica. El aumento de las compras externas de maquinaria y equipo de transporte, y la tendencia registrada por las obras civiles, prevén un buen desempeño de la inversión, aunque a tasas menores a las observadas en la primera mitad del año. Las cifras de comercio exterior indican que las importaciones aumentarían más que las exportaciones, y con ello la balanza comercial tendría un aporte negativo al crecimiento. En octubre el crédito bancario continuó desacelerándose y registró tasas anuales superiores al PIB nominal estimado para el presente año. La menor dinámica la presentó el dirigido a las empresas. En el mismo periodo, la desaceleración en los préstamos hipotecarios fue más que compensada por el repunte de la cartera de consumo por lo que el crédito a los hogares se aceleró. Todo ello en un contexto de débil transmisión de los aumentos de la tasa de interés de referencia hacia las tasas de interés de los préstamos. Dado lo anterior, el equipo técnico mantuvo la proyección del rango de crecimiento económico para todo 2014 entre 4,5% y 5,5%, con 5% como más probable. En materia de precios, como lo esperaba el equipo técnico, la inflación anual aumentó de 2,86% en septiembre a 3,29% en octubre. Ello se explicó por una aceleración en el grupo de alimentos y regulados y por la baja base de comparación del IPC un año atrás. Las cuatro medidas de inflación básica aumentaron y su promedio se situó en 2,76%. En lo corrido del año hasta octubre se ha acumulado una inflación de 3,25%. Con este resultado al finalizar el 2014 la inflación se situará en la parte superior del rango meta para éste año (entre 2,0% y 4,0%). Las expectativas de inflación a un año de los analistas y las de 2, 3 y 5 años derivadas de los papeles de deuda pública se encuentran ancladas alrededor de la meta. Hasta el momento la depreciación del peso se ha traspasado parcialmente al IPC de transables sin alimentos ni regulados. No obstante, si persiste la depreciación, ello podría trasmitirse en mayor medida a los precios internos y generar mayores expectativas de inflación. En síntesis, la demanda agregada continúa mostrando un fuerte crecimiento en un contexto cercano a la plena utilización de la capacidad productiva. Como se proyectaba, la inflación se incrementó, hecho explicado por el mayor ritmo de aumento en los precios de los alimentos, el cual se espera sea transitorio. Al tiempo, las expectativas de inflación se mantienen estables y son algo superiores al 3%. Lo anterior se presenta en un entorno de caída en los términos de intercambio, de débil crecimiento de la demanda mundial y de incertidumbre sobre el costo del financiamiento externo. Si estos factores externos continúan deteriorándose, ellos pueden incidir sobre la demanda agregada, la tasa de cambio y las expectativas de inflación. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA La Junta Directiva por unanimidad decidió mantener la tasa de interés de intervención en 4.5%. Los miembros de la Junta Directiva destacaron el fuerte dinamismo de la economía colombiana y un ambiente externo cada vez más adverso en el horizonte de política. La fuerte caída en los precios internacionales del petróleo y otros productos básicos consolida un escenario de debilidad del entorno externo colombiano que afectará de manera negativa su desempeño a lo largo de 2015. Como era de esperar, el peso se ha devaluado, lo cual puede amortiguar los efectos de la debilidad en las variables externas sobre la brecha del producto, e incidir en el nivel de inflación de corto plazo. La flotación cambiaria ha mostrado ser un mecanismo eficaz que permite absorber los choques externos. Las expectativas de inflación se encuentran ancladas en niveles cercanos a la meta. El promedio de los indicadores de inflación básica converge hacia la misma, en tanto que la inflación total se halla por encima, debido a choques transitorios de oferta. En estas condiciones, los miembros coincidieron en mantener inalterada la tasa de interés de intervención y continuar monitoreando el desempeño de la economía. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva por unanimidad consideró mantener la tasa de interés de intervención en 4,5%.
2014-12-01
- Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 19 de diciembre de 2014 El 19 de diciembre de 2014 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca, César Vallejo Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo. A continuación se presenta una síntesis de la visión del equipo técnico del Banco de la República sobre la situación macroeconómica (sección 1) y posteriormente se reseñan las principales discusiones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2). Un mayor detalle de la situación macroeconómica elaborada por el equipo técnico del Banco de la República se presenta en la sección de datos del informe sobre Inflación de noviembre de 2014 y en el anexo estadístico. 1. CONTEXTO MACROECONÓMICO En relación con el contexto macroeconómico el equipo técnico resalta los siguientes elementos: En el presente mes el precio internacional del petróleo continuó descendiendo y se situó en niveles que no se observaban desde 2009. Al parecer, algunos factores de oferta y demanda sugieren que gran parte de este descenso es de carácter estructural. Pese a ello, la incertidumbre sobre el nivel futuro del precio del petróleo sigue siendo elevada. Las monedas de varios países emergentes se siguen depreciando, sus primas de riesgo país se han incrementado y el precio de los activos financieros se ha deteriorado. Este comportamiento ha sido mucho más acentuado en los países productores del crudo como Colombia. Lo anterior se ha dado en un contexto de débil actividad económica mundial, en la cual el principal impulso es generado por la economía de los Estados Unidos. La zona del euro mantiene bajos crecimientos en su PIB mientras que el de las principales emergentes se sigue desacelerando o presenta aumentos históricamente bajos. Con este panorama es factible que la recuperación promedio de nuestros socios comerciales en 2015 sea más débil de lo estimado en el pasado informe trimestral. Las tasas de interés de largo plazo en los Estados Unidos volvieron a descender y la Reserva Federal dio indicios de que el primer incremento en la tasa de referencia se daría a comienzos del segundo semestre y continuaría de manera gradual. La caída en el precio del petróleo y el incremento en las cotizaciones internacionales de algunos alimentos que importa Colombia se verán reflejados en un descenso, mayor que el esperado, en los términos de intercambio del país. De mantenerse estos niveles, ello generará un menor ingreso nacional en 2015. El descenso en el precio del petróleo volvió a afectar las exportaciones del país. En octubre, las ventas externas cayeron, hecho explicado principalmente por los menores valores exportados de crudo. Las ventas de los principales productos agrícolas siguieron registrando altos incrementos, mientras que las exportaciones del resto de sectores cayeron, pero en menor medida que las mineras. En el contexto interno, el crecimiento del PIB del tercer trimestre de 2014 (4,2%) se situó dentro del rango estimado por el equipo técnico, aunque resultó algo inferior al punto medio de dicho intervalo. Como se esperaba, este resultado implicó una desaceleración con respecto al primer semestre del año. Los sectores económicos con mayor dinámica fueron la construcción, el comercio y las actividades de servicios sociales, comunales y personales. La minería y la industria fueron los únicos sectores que presentaron descensos. Los nuevos datos de actividad económica para el último trimestre de 2014 muestran un comportamiento mixto. Por un lado algunos indicadores de demanda interna sugieren que ésta sigue dinámica. Al menos así lo indican los resultados de confianza del consumidor, del comercio al por menor, de ventas de automóviles y de crédito de consumo. Por otra parte, otros indicadores por el lado de la oferta, como la industria y la producción de petróleo registran aumentos anuales bajos. En noviembre el crecimiento anual del endeudamiento de las empresas se ha desacelerado, hecho explicado principalmente por el menor ritmo de aumento del endeudamiento externo directo. Por el contrario, la cartera de consumo presentó una mayor dinámica y más que compensó la desaceleración registrada en los créditos hipotecarios. Lo anterior se ha dado junto con unas tasas de crédito que permanecieron relativamente estables, las cuales en lo corrido del segundo semestre sólo han reflejado de forma parcial el incremento registrado en la tasa de interés de referencia. En los resultados del mercado laboral a octubre, al descontar el componente estacional de la tasa de desempleo, dicho indicador da señales de estabilizarse en niveles históricamente bajos. El número de empleados asalariados se ha estabilizado mientras que los no asalariados presentan una tendencia creciente. El rango de pronóstico de crecimiento para 2014 presentado en los informes anteriores se situaba entre 4,5% y 5,5%, con 5% como cifra más probable. No obstante, todo lo anterior sugiere que los riesgos a la baja han aumentado y que la probabilidad de que el crecimiento para todo 2014 esté por debajo de 5% es ahora mayor. La inflación anual de noviembre (3,65%) resultó igual a la estimada por el equipo técnico del Banco y algo superior a la proyectada por el promedio del mercado. El incremento de la inflación registrado en noviembre se explicó por la aceleración del IPC de regulados y de alimentos. El promedio de las cuatro medidas de inflación básica también se incrementó y se situó en 2,85%. La probabilidad de que a diciembre de 2014 la inflación anual permanezca alrededor de los actuales niveles y se sitúe dentro del rango meta es elevada. Las expectativas de inflación de los analistas a un año y las que se infieren de los papeles de deuda pública a mayores plazos se incrementaron y se sitúan alrededor de 3,4%. Se espera que el mayor nivel de la tasa de cambio se transmita a los precios internos, aunque la magnitud de dicha transmisión depende de muchos factores, lo que la hace incierta. En este contexto, dada la depreciación acumulada hasta mediados de diciembre, existe el riesgo de que la inflación al consumidor siga aumentando en 2015. Una alta transmisión podría afectar las expectativas y tener efectos más persistentes sobre la inflación. En resumen, la demanda interna sigue dinámica en un contexto cercano a la plena utilización de la capacidad productiva. Al mismo tiempo, la inflación y sus expectativas se sitúan por encima del 3%. Lo anterior se presenta en un entorno de deterioro de los términos de intercambio, de depreciación del peso y de creciente incertidumbre sobre la recuperación de la actividad económica mundial y del costo de financiamiento externo, factores que pueden incidir en el comportamiento futuro de la demanda agregada. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA La Junta Directiva por unanimidad decidió mantener la tasa de interés de intervención en 4.5%. Resaltó que, como ya se ha mencionado, la economía enfrentará en el horizonte de política una desaceleración en su ritmo de crecimiento, como resultado del choque de términos de intercambio y el débil entorno externo. Algunos de sus miembros subrayaron los riesgos del impacto en la caída en los precios del petróleo en socios comerciales importantes para Colombia, como Venezuela y Ecuador. En cuanto a la inflación, los miembros de la Junta mencionaron que, al finalizar 2014, ésta se situará en la mitad superior del rango meta. La desviación respecto al punto central de 3% es temporal y se explica fundamentalmente por la corrección de caídas transitorias en algunos precios en el pasado y por aumentos temporales en otros. La inflación básica se sitúa por debajo del 3% y se espera que la inflación general converja a dicho valor. Uno de sus miembros opinó que, en un contexto de brecha del producto cerrada, el fuerte dinamismo actual de la economía puede generar presiones inflacionarias. Por último la Junta es consciente que la devaluación reciente del peso podría traer un aumento en el IPC. Esto no debería afectar las expectativas de inflación en la medida en que la devaluación se traslada a los precios por una sola vez y, por lo tanto, la inflación presenta aumentos que posteriormente se revertirán. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva por unanimidad consideró mantener la tasa de interés de intervención en 4,5%. Bogotá, D. C.
2015-01-01
- Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 30 de Enero de 2015 El 30 de Enero de 2015 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca, César Vallejo Mejía y Juan Pablo Zárate A continuación se presenta una síntesis de la visión del equipo técnico del Banco de la República sobre la situación macroeconómica (sección 1) y posteriormente se reseñan las principales discusiones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2). Un mayor detalle de la situación macroeconómica elaborada por el equipo técnico del Banco de la República se presenta en la sección de datos del informe sobre Inflación de diciembre de 2014 y en el anexo estadístico. 1. CONTEXTO MACROECONÓMICO En el presente informe los precios del petróleo continuaron descendiendo y se situaron en niveles que no se observaban desde 2009. La probabilidad de que gran parte de este descenso sea estructural es elevada y debido a ello los pronósticos del precio del petróleo se redujeron significativamente respecto a lo estimado un trimestre atrás. Otros productos que exporta Colombia, como el carbón y el níquel, también registraron caídas en sus cotizaciones internacionales. Las primas de riesgo de varios países emergentes se han incrementado, sus monedas se han depreciado y el precio de algunos activos financieros se ha deteriorado. Este comportamiento ha sido mucho más acentuado en los países productores del crudo como Colombia. Lo anterior se ha dado en un contexto de débil actividad económica mundial, en el cual el principal impulso es generado por la economía de los Estados Unidos. La zona del euro mantiene bajos crecimientos en su PIB mientras que el de las principales emergentes se sigue desacelerando o presenta aumentos históricamente bajos. Con este panorama, el equipo técnico redujo el crecimiento promedio de nuestros socios comerciales para 2015, hecho que refleja una recuperación más débil de lo estimado en el pasado informe trimestral. En los Estados Unidos las tasas de interés de largo plazo volvieron a descender y es probable que el primer incremento en la tasa de referencia de la Reserva Federal se dé a comienzos del segundo semestre y que continúe de manera gradual. En la zona del euro, el Banco Central Europeo inició su programa de compras de títulos financieros, la cual se extenderá por lo menos hasta septiembre de 2016. La caída en el precio del petróleo, que supera ampliamente las reducciones en las cotizaciones internacionales de algunos alimentos que importa Colombia, se verán reflejados en un descenso, mayor que el esperado, en los términos de intercambio del país. De mantenerse estos niveles, ello generará una caída del ingreso nacional en 2015. El descenso en el precio del petróleo sigue afectando el valor de las exportaciones del país. En noviembre, las ventas externas cayeron, hecho explicado principalmente por los menores valores exportados de crudo. Las ventas de los principales productos agrícolas siguieron registrando altos incrementos, mientras que las exportaciones del resto de sectores cayeron, pero en menor medida que las mineras. Con lo anterior, para todo 2014 la proyección más probable del déficit de la cuenta corriente como proporción al PIB se incrementó y se situó en el límite superior del rango estimado un trimestre atrás (5%). Se estima que en 2015 el déficit y su financiamiento sean menores, en parte como resultado de una reducción esperada en la inversión extranjera directa (especialmente la dirigida a petróleo), y por una inversión de cartera menos dinámica. En el contexto interno, la nueva información para el cuarto trimestre de 2014 sugieren que la demanda interna continuó muy dinámica y que las exportaciones netas habrían restado más de lo esperado al producto. Con esta información, el equipo técnico proyecta que el crecimiento económico para 2014 se sitúe entre 4,5% y 5%, con 4,8% como cifra más probable. En el mercado laboral, con cifras desestacionalizadas, a diciembre la tasa de desempleo sigue en niveles bajos, con una tasa de ocupación en el máximo de los últimos 14 años, impulsada principalmente por el empleo asalariado. En diciembre el crecimiento anual del endeudamiento de las empresas se ha desacelerado, hecho explicado principalmente por el menor ritmo de aumento del endeudamiento externo directo. Por el contrario, la cartera de consumo presentó una mayor dinámica y más que compensó la desaceleración registrada en los créditos hipotecarios. Lo anterior se ha dado junto con unas tasas de crédito que permanecieron relativamente estables, las cuales en lo corrido del segundo semestre de 2014 sólo han reflejado de forma parcial el incremento registrado en la tasa de interés de referencia. Para 2015 el equipo técnico redujo el rango de crecimiento económico proyectado a un intervalo entre 2% y 4%, con 3,6% como cifra más probable. Dicha estimación más factible tiene en cuenta una caída en el ingreso nacional y una menor financiación externa, las cuales podrían generar una moderación del gasto, especialmente por un menor nivel de inversión privada. No obstante, es importante mencionar que la incertidumbre del anterior rango de pronóstico es elevada, y dependerá del tamaño del descenso esperado en los términos de intercambio, del costo y nivel del financiamiento externo, y del efecto que tendría la caída en el ingreso nacional sobre las decisiones de gasto privado y público. Si los pronósticos más probables de crecimiento se cumplen, la brecha de producto podría ser positiva en 2014 y tornarse levemente negativa en el presente año (antes se estimaba podría ser positiva). En materia de precios, en diciembre de 2014 la inflación culminó en 3,66%, cifra similar a la proyectada por el equipo técnico del Banco, y superior en 80 puntos base (pb) al registro de septiembre. En el pasado trimestre, el mayor ritmo de aumento en los precios de los alimentos y de los regulados explicaron un gran porcentaje de la aceleración de la inflación. En el mismo periodo, el promedio de las cuatro medidas de inflación básica se incrementó 43 pb y se situó en 3,06% en diciembre. Las expectativas de inflación de los analistas a un año y las que resultan de los papeles de deuda pública a mayores plazos se incrementaron y se mantienen por encima de 3%. Se espera que el mayor nivel de la tasa de cambio se transmita a los precios internos, aunque la magnitud de dicha transmisión depende de muchos factores, lo que la hace incierta. En este contexto, dada la depreciación acumulada hasta enero de 2015, existe el riesgo de que la inflación al consumidor siga aumentando en este año. Una alta transmisión podría afectar las expectativas y tener efectos más persistentes sobre la inflación. En resumen, la demanda interna sigue dinámica en un contexto cercano a la plena utilización de la capacidad productiva, junto a una inflación y sus expectativas que se sitúan por encima del 3%. Lo anterior se ha dado en un entorno de fuerte deterioro de los términos de intercambio y con elevada incertidumbre sobre su comportamiento futuro. La actividad económica mundial se recupera de forma más lenta a lo esperado y la evolución del costo de financiamiento también es incierta. Todos estos factores pueden incidir en el comportamiento futuro de la demanda agregada. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA Los miembros de la Junta concuerdan en que la economía colombiana se ajustará a la caída en los términos de intercambio creciendo en 2015 y 2016 menos que en los años 2013 y 2014. La dinámica de la inflación en 2015 estará principalmente afectada por el menor crecimiento económico y por los posibles efectos de corto plazo de la devaluación del peso sobre la inflación del consumidor. Algunos miembros de la Junta consideran que el efecto de la devaluación puede inicialmente primar sobre el del menor crecimiento y desviar transitoriamente la inflación de la meta. En la medida que las expectativas permanezcan ancladas a la meta de mediano plazo (3%) este efecto sobre la inflación se desvanecería en el horizonte de política. Por su parte, un miembro de la junta espera un crecimiento del PIB entre 3% y 3.5%, con lo cual la brecha negativa del producto sería mayor a lo esperado por el equipo técnico y su efecto mitigador sobre el nivel de precios sería aún más fuerte. En este contexto lo apropiado es que la autoridad monetaria continúe manteniendo inalterada la tasa de interés de intervención. Otro miembro de la junta consideró necesario contemplar, con criterio anticíclico, escenarios de menores tasas de interés de intervención. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva por unanimidad consideró mantener la tasa de interés de intervención en 4,5%. Bogotá DC.
2015-02-01
- Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 20 de Febrero de 2015 El 20 de Febrero de 2015 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca, César Vallejo Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo. A continuación se presenta una síntesis de la visión del equipo técnico del Banco de la República sobre la situación macroeconómica (sección 1) y posteriormente se reseñan las principales discusiones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2). Un mayor detalle de la situación macroeconómica elaborada por el equipo técnico del Banco de la República se presenta en la sección de datos del informe sobre Inflación de diciembre de 2014 y en el anexo estadístico. 1. CONTEXTO MACROECONÓMICO 1. A finales de 2014 los términos de intercambio descendieron de forma significativa y se situaron en niveles no vistos desde inicios de 2009. A comienzos de 2015 cabe esperar caídas adicionales en este indicador, a pesar de la recuperación observada en los últimos días en la cotización del crudo. 2. En las últimas semanas las primas de riesgo de Colombia y de varios países de la región se redujeron pero se mantienen en niveles mayores que el promedio registrado en 2014. En lo corrido a febrero la cotización del peso frente al dólar ha sido volátil aunque sin tendencia definida. 3. La recuperación de la economía mundial sigue débil aunque en algunos países desarrollados ha sido algo mejor que lo proyectado. En los Estados Unidos los indicadores de actividad real apuntan a un buen resultado en el presente trimestre. El crecimiento de Alemania para final de 2014 resultó mejor a lo estimado y en enero los indicadores de confianza e industria de la zona del euro mostraron tendencias positivas. Las principales economías emergentes se siguen desacelerando o presentan aumentos históricamente bajos. Ante este contexto, el equipo técnico mantuvo la proyección de crecimiento promedio de nuestros socios comerciales para 2015 presentado en el anterior informe. 4. En los Estados Unidos las tasas de interés de largo plazo de los papeles de deuda pública dejaron de caer y se sitúan por debajo del promedio registrado en 2014. Es probable que el primer incremento en la tasa de referencia de la Reserva Federal se dé a comienzos del segundo semestre y que continúe de manera gradual. Los problemas de financiamiento de Grecia y la incertidumbre sobre su permanencia en la zona del euro incrementaron la volatilidad en los mercados accionarios en esa región. 5. En Colombia, el aumento de las importaciones y la caída de las exportaciones en diciembre resultaron algo mayores que las proyectadas. Estos registros sugieren que en el cuarto trimestre de 2014, el déficit de la balanza comercial de bienes podría ser mayor que lo estimado. Por el lado del financiamiento, en enero continuó el ingreso de capitales dirigido a la compra de portafolio, sin embargo, los nuevos anuncios acerca de los planes de inversión extranjera directa en el sector petrolero siguen reflejando una caída importante en este tipo de financiamiento externo. 6. En el mercado laboral las cifras a diciembre muestran una tasa de desempleo desestacionalizada que sigue en niveles bajos, con una tasa de ocupación dinámica que se explica principalmente por el empleo asalariado. 7. La nueva información para el cuarto trimestre de 2014 sugiere que la demanda interna continuó dinámica y que las exportaciones netas habrían restado más de lo esperado al producto. Con esta información, se mantuvo el pronóstico de crecimiento económico para 2014 entre 4,5% y 5%, con 4,8% como cifra más probable. 8. Las pocas cifras de actividad real para el primer trimestre de 2015 dan señales mixtas. Por el lado de la oferta, la producción de petróleo y de café de enero mostraron un crecimiento superior al estimado. Por el lado de la demanda, el descenso en las ventas de automóviles sugiere una desaceleración en el consumo durable para ese mes. 9. En enero el crecimiento anual del endeudamiento de las empresas volvió a desacelerarse, debido al menor ritmo de aumento del crédito externo directo. El crédito a los hogares mantiene tasas de crecimiento relativamente estables. Los aumentos de ambos tipos de cartera superan el incremento del PIB nominal estimado para el presente año. Lo anterior se dio junto con unas tasas de interés del crédito que se incrementaron, aunque en términos reales siguen en niveles inferiores a sus promedios históricos (exceptuando tarjetas de crédito). 10. Con todo lo anterior, para 2015 el equipo técnico mantuvo la cifra más probable de crecimiento en 3,6%, contenida en un rango entre 2% y 4%. La amplitud del intervalo refleja la incertidumbre que se tiene sobre los supuestos hechos en los posibles escenarios extremos. Por su parte, la cifra más factible tiene en cuenta una menor dinámica en el ingreso nacional y una reducción de la financiación externa, las cuales podrían generar una moderación del gasto, especialmente por un menor nivel de inversión privada. 11. En materia de precios, la inflación en enero se incrementó y se situó en 3,82%, cifra superior a la proyectada por el equipo técnico del Banco y por el promedio del mercado. La aceleración en la inflación se explicó principalmente por el mayor ritmo de aumento en los precios de los alimentos. El promedio de las medidas de inflación básica completó cuatro meses con incrementos y se situó en 3,22%. 12. Las medidas de expectativas de inflación de los analistas y las que se derivan de los TES se encuentran en promedio en la mitad superior del rango meta. 13. Aunque el mayor nivel de la tasa de cambio se ha transmitido de forma parcial a los precios internos, esta probablemente no se ha completado. Por otro lado, la magnitud de dicha transmisión depende de muchos factores, lo que la hace incierta. En este contexto, dada la depreciación acumulada hasta febrero de 2015, existe el riesgo de que la variación anual del grupo de transables sin alimentos ni regulados aumente más de lo proyectado. Una alta transmisión al grupo de transables podría afectar las expectativas y tener efectos más persistentes sobre la inflación. En resumen, a finales de 2014 la demanda interna mostró dinamismo en un contexto cercano a la plena utilización de la capacidad productiva. La inflación y sus expectativas se sitúan un poco por encima del 3%. Lo anterior se presenta en un entorno de deterioro de los términos de intercambio y de incertidumbre sobre su evolución futura e impacto sobre la demanda agregada. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA Los miembros de la Junta esperan un ajuste de la tasa de crecimiento de la economía a los cambios de las condiciones externas y un aumento transitorio de la inflación total, que podría desviarla temporalmente de su meta. Las expectativas de inflación se encuentran ancladas en la meta a pesar del incremento de la inflación observada en los últimos meses. Para algunos miembros de la Junta, en la medida en que el efecto de la disminución de los términos de intercambio tiene un componente permanente, el ingreso nacional cae en forma estructural y, por lo tanto, no es pertinente tratar de sustituir esa pérdida de ingreso a través de una política monetaria más expansiva. Uno de los miembros opinó que, no obstante la ostensible desaceleración proyectada de la economía, que provocaría el retorno de la brecha del producto a terreno negativo como mínimo durante el presente año, la tasa de interés de intervención debería mantenerse inalterada al menos durante lo que resta del mismo, excepto en el caso de que se sucedan eventos extraordinarios o no previstos que alteren significativamente los fundamentales de la economía. Finalmente los miembros de la Junta mencionaron que si se presenta un sobre ajuste en el gasto del sector privado en relación con el nuevo PIB potencial de la economía, la autoridad monetaria debe estar abierta a una política contra cíclica 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva por unanimidad consideró mantener la tasa de interés de intervención en 4,5%. Bogotá D.C. marzo 6 de 2015.
2015-03-01
- Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 20 de Marzo de 2015 El 20 de Marzo de 2015 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca, César Vallejo Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo. A continuación se presenta una síntesis de la visión del equipo técnico del Banco de la República sobre la situación macroeconómica (sección 1) y posteriormente se reseñan las principales discusiones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2). Un mayor detalle de la situación macroeconómica elaborada por el equipo técnico del Banco de la República se presentará en el Informe sobre Inflación del primer trimestre de 2015 y en el anexo estadístico. 1. CONTEXTO MACROECONÓMICO En lo corrido de 2015, el comportamiento de los precios del petróleo y de otros productos básicos que exporta e importa Colombia, sugieren que el deterioro de los términos de intercambio ha continuado pero a un ritmo más lento. De esta forma, es probable que en el primer trimestre de 2015, los términos de intercambio se ubiquen cerca de los niveles observados a inicios de 2009. En marzo de 2014 continuó la apreciación del dólar frente a la mayoría de monedas y las medidas de primas de riesgo se incrementaron. Dentro de los países de la región, este comportamiento ha sido más acentuado en Brasil, seguido por Colombia. La recuperación de la economía mundial sigue débil y dispar. En Estados Unidos los indicadores de actividad real indican que la recuperación continúa y que el crecimiento del presente trimestre será similar al registrado a finales de 2014. La actividad económica en la zona del euro sigue frágil y el bajo estimativo de crecimiento para 2015 no ha cambiado. Las principales economías emergentes continúan desacelerándose o presentan aumentos históricamente bajos. Ante este contexto, el equipo técnico mantuvo la proyección de crecimiento promedio de nuestros socios comerciales para 2015 en 2%, cifra algo superior a la de 2014 (1,7%). En los Estados Unidos las tasas de interés de largo plazo de los papeles de deuda pública dejaron de caer y se sitúan por debajo del promedio registrado en 2014. Según el último anuncio de la Reserva Federal, es probable que el primer incremento en su tasa de interés de referencia se dé a comienzos del segundo semestre y que el aumento en todo el año sea menor que el proyectado en meses anteriores. En Colombia la fuerte caída de las exportaciones y el alto incremento de las importaciones registradas en diciembre sugieren que el déficit en la cuenta corriente para todo 2014 puede ser algo superior al proyectado en el informe pasado. En enero las exportaciones totales en dólares volvieron a caer a una tasa similar al descenso registrado en el precio del petróleo. Las de origen agrícola presentaron altos crecimientos mientras que el resto de sectores descendieron de forma significativa. El crecimiento económico del último trimestre de 2014 (3,5%) se situó en la parte baja del rango estimado por el equipo técnico (3,3% - 4,7%). Por el lado de la oferta, la minería e industria registraron caídas, mientras que la agricultura presentó un bajo dinamismo. El resto de sectores crecieron de manera similar o más que el aumento del producto. Durante todo 2014 el PIB real se expandió 4,6%, cifra inferior al punto medio del intervalo proyectado para el año (4,8%). Las cifras de actividad de enero y febrero de 2015 sugieren que la desaceleración del PIB, observada desde el segundo trimestre de 2014, se mantiene. Los registros de comercio al por menor, de confianza al consumidor y de expectativas de ventas así lo sugieren. Por el lado de la oferta, la producción de petróleo ha presentado crecimientos mayores que los previstos pero bajos, mientras que la producción industrial volvió a descender. En el mercado laboral, las cifras a enero muestran una tasa de desempleo desestacionalizada que sigue en niveles bajos, con una tasa de ocupación dinámica que se explica principalmente por el empleo asalariado. Hasta el momento, los incrementos salariales no sugieren presiones de costos laborales sobre los precios. En febrero el crecimiento anual del endeudamiento de las empresas volvió a desacelerarse, debido al menor ritmo de aumento del crédito externo directo. El crédito a los hogares también presentó una reducción en su dinámica. Pese a lo anterior, los aumentos de ambos tipos de cartera superan el crecimiento del PIB nominal estimado para el presente año. Lo anterior se ha dado junto con unas tasas de interés del crédito que en términos reales siguen en niveles inferiores que sus promedios históricos (exceptuando tarjetas de crédito). Con todo lo anterior, si se confirman las últimas tendencias, la estimación del crecimiento proyectado más probable para 2015 (3,6%) podría reducirse. Esta revisión, tendría en cuenta un mayor deterioro del ingreso nacional y de las exportaciones, una menor financiación externa, así como los recortes de gasto público anunciado por el Gobierno. Todo ello generará una moderación de la demanda, especialmente por un menor nivel de inversión privada. La amplitud del intervalo (entre 2% y 4%), refleja la incertidumbre que se tiene sobre los supuestos hechos en los escenarios extremos. En materia de precios, en febrero la inflación se incrementó y se situó en 4,36%, cifra superior a la proyectada por el promedio del mercado y por el equipo técnico del Banco. La aceleración de la inflación se explicó principalmente por el mayor ritmo de aumento en los precios de los alimentos, y en segundo lugar, por el incremento en el cambio anual del grupo de transables sin alimentos ni regulados. El promedio de las medidas de inflación básica completó cinco meses con incrementos y se situó en 3,53%. Las expectativas de inflación de los analistas para diciembre se incrementaron desde 3,3% a 3,6%, mientras que a uno y dos años permanecieron relativamente estables y se situaron en su orden en 3,2% y 3,1%. Las que se derivan de los TES a dos, tres y cinco años aumentaron y se encuentran en la mitad superior del rango meta. Buena parte de este último incremento estaría relacionado con el aumento de la prima de riesgo inflacionario. La depreciación del peso frente al promedio de monedas con las cuales comercia el país se incrementó y su transmisión hacia el sector transable del IPC se aceleró. Pese a ello, su impacto sobre la inflación total ha sido bajo y similar al promedio observado en los periodos pasados de depreciación nominal. En los próximos meses, cabe esperar que esta transmisión continúe aunque su magnitud es incierta y depende de muchos factores. En este contexto, persiste el riesgo de que el sector transable del IPC aumente más de lo proyectado, contagie las expectativas y tenga un efecto más persistente sobre la inflación. En resumen, a finales de 2014 la economía colombiana se desaceleró, partiendo de un nivel de producto cercano a la plena utilización de la capacidad productiva. La inflación aumentó principalmente por factores transitorios y sus expectativas se sitúan por encima del 3%. Debido a que parte de la reducción de los precios del petróleo y del ingreso nacional es duradera, es necesario un ajuste permanente del gasto interno de la economía. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA Los miembros de la Junta resaltan que en 2014 el crecimiento de la economía colombiana (4.6%) fue menor que el proyectado por el Banco de la República (4.8%), mientras que el de 2013 fue revisado de 4.7% a 4.9%. Esperan que el crecimiento en 2015 sea inferior al registrado el año anterior y coinciden en que dicha desaceleración representa un ajuste necesario ante las nuevas condiciones externas que llevaron a una disminución significativa de los términos de intercambio. Para algunos miembros de la Junta esto último podría tener un impacto negativo fuerte en el ingreso nacional. Adicionalmente, mencionaron que la devaluación representa un estímulo para las exportaciones y los sectores que compiten con importaciones, y contribuye a moderar el impacto negativo del precio del petróleo sobre las cuentas fiscales y externas; así mismo, incrementa los precios en el corto plazo, en especial de los bienes transables. Los miembros de la Junta reafirman el compromiso de mantener la inflación y sus expectativas ancladas en la meta. Coinciden en que en el corto plazo la inflación total al consumidor continuará mostrando presiones al alza generadas por aumentos temporales en los precios de los alimentos y, en una menor proporción, por el traspaso de la devaluación a los precios de los bienes transables de la canasta familiar. Se espera que la presión empiece a ceder en el segundo semestre y que la inflación vaya convergiendo a la meta (3%) en el horizonte de política. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva por unanimidad consideró mantener la tasa de interés de intervención en 4,5%. Bogotá DC.
2015-04-01
- Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 24 de abril de 2015 El 24 de abril de 2015 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca, César Vallejo Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo. A continuación se presenta una síntesis de la visión del equipo técnico del Banco de la República sobre la situación macroeconómica (sección 1) y posteriormente se reseñan las principales discusiones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2). Un mayor detalle de la situación macroeconómica elaborada por el equipo técnico del Banco de la República se presentará en el Informe sobre Inflación del primer trimestre de 2015 y en el anexo estadístico. 1. CONTEXTO MACROECONÓMICO En el presente informe se redujo el crecimiento promedio estimado de los socios comerciales de Colombia para 2015. La recuperación económica en los Estados Unidos sería más lenta que lo proyectado, mientras que el producto de la zona del euro se expandiría a una tasa baja. China continuaría desacelerándose y los países de la región registrarían tasas de crecimiento débiles o negativas. Si estos pronósticos se materializan, en 2015 la demanda externa relevante para Colombia crecería a una tasa baja y algo menor que la observada en 2014. Los menores precios internacionales del petróleo y de otros bienes básicos han presionado a la baja la inflación mundial. Ello ha contribuido a que en algunos países desarrollados los precios al consumidor no aumenten o se registre deflación. El banco central de la zona del euro continuó realizando estímulos monetarios, mientras que la Reserva Federal, en su última reunión, sugirió que el posible incremento en su tasa de interés sería de forma más gradual que lo anunciado a finales de 2014. En este contexto, las tasas de interés de largo plazo en dichos países han descendido y se mantienen en niveles bajos. La apreciación del dólar frente a la mayoría de monedas se ha revertido de forma parcial. En la región, las medidas de primas de riesgo descendieron, después de los incrementos registrados a inicios del año. En el primer trimestre de 2015, el precio promedio del petróleo se situó algo por debajo de los niveles registrados a finales de 2014. En el mismo periodo, otros bienes básicos que exporta e importa Colombia descendieron. Si todos estos precios se mantienen, en 2015 los términos de intercambio registrarían niveles bajos similares a los registrados a inicios de 2009. Esta caída en los términos de intercambio generaría una pérdida significativa en la dinámica del ingreso nacional. El anterior comportamiento de la demanda externa y de los precios de los bienes básicos se ha visto reflejado en los resultados de comercio exterior. En los dos primeros meses del año las exportaciones en dólares descendieron 34%, caída explicada principalmente por las de origen minero (-47%), especialmente por el menor precio del petróleo. En el mismo periodo las ventas externas de los principales productos agrícolas aumentaron 22,5%, mientras que las del resto de sectores descendieron 11%. En lo corrido del año, las importaciones totales acumulan una caída de 3,8%, debido a las menores compras externas de bienes intermedios (-18,4%). Las de bienes de capital aumentaron 13,9% y las de consumo lo hicieron en 1,3%. El aumento en bienes de capital se explica por los incrementos de 63,9% en equipo de transporte y de 4,1% en materiales de construcción. Dentro de los bienes de consumo, se registró una caída de 3,2% en los bienes durables y un aumento de 6,2% en los no duraderos. Con la anterior información, el equipo técnico incrementó la proyección del déficit de la cuenta corriente como porcentaje del PIB para 2015, desde un rango entre 3,3% y 5,5%, a uno entre 4,2% y 6,1%. El nuevo registro más probable para 2015 (5,3%) sería similar al déficit observado en 2014 (5,2%). Cerca de 0,9 puntos porcentuales de la estimación de 2015 se explicaría por el menor PIB en dólares debido al mayor nivel de la tasa de cambio. En dólares, el déficit en la cuenta corriente se reduciría ya que supone que el menor nivel de renta de factores y la reducción del déficit comercial de servicios superaría la ampliación del déficit de la balanza comercial de bienes. Por el lado del financiamiento, las proyecciones contemplan un descenso de la inversión extranjera directa, especialmente en el sector minero-energético, y menores entradas por inversión de portafolio. Esto último se desprende de una mayor base de comparación en 2014, cuando se presentaron flujos significativos de esta índole como resultado del aumento de la ponderación de los bonos públicos colombianos en algunos índices de referencia de mercados emergentes. En el contexto interno, la nueva información para el primer trimestre de 2015 indica que la actividad económica sería menos dinámica que la registrada en el último trimestre de 2014. La información de comercio al por menor, de confianza del consumidor y la encuesta de expectativas económicas, indican una desaceleración del consumo y la inversión privada. Por el lado de la oferta, la caída de la producción industrial y del sacrificio de ganado, el menor crecimiento de la demanda de energía no regulada, y el descenso en la percepción presente y futura del comercio indican que el crecimiento económico seguirá desacelerándose. Otra información como la producción de petróleo, café y cemento sugieren buenos comportamientos. En el mercado laboral, las cifras a febrero de 2015 muestran que la tasa de desempleo (desestacionalizada) sigue en niveles bajos históricamente, con una tasa de ocupación dinámica que se explica principalmente por el empleo asalariado. En el primer trimestre de 2015, la deuda total de las empresas y los hogares creció a una tasa similar a la registrada en diciembre pasado, tasas que superan el aumento del PIB nominal estimado para el presente año. El endeudamiento de las empresas en moneda extranjera (directo y bancario) volvió a desacelerarse, hecho que ha sido compensado por el mejor ritmo de aumento del crédito comercial en pesos y bonos. La cartera de los hogares se desaceleró levemente, principalmente por la menor dinámica del crédito hipotecario. Lo anterior se dio junto con unas tasas de interés del crédito que se incrementaron, aunque en términos reales siguen en niveles inferiores a sus promedios históricos (exceptuando tarjetas de crédito). Con todo lo anterior, el equipo técnico estima que el crecimiento del primer trimestre estaría entre 2% y 3,5%, con 2,7% como cifra más factible. Para todo 2015, la cifra más probable de crecimiento se revisó a la baja, desde 3,6% a 3,2%, contenida en un rango entre 2% y 4,0%. La amplitud del intervalo refleja la incertidumbre que se tiene sobre los supuestos hechos en los posibles escenarios extremos. Por su parte, la cifra más factible tiene en cuenta una menor dinámica en el ingreso nacional y una reducción de la financiación externa, las cuales podrían generar una moderación del gasto, especialmente por un menor nivel de inversión privada. En materia de precios, la inflación en marzo se incrementó y se situó en 4,56%, algo superior a la proyectada por el promedio del mercado y por el equipo técnico. La aceleración en la inflación se explicó principalmente por el mayor ritmo de aumento en los precios de los alimentos y de los transables sin alimentos ni regulados. El promedio de las medidas de inflación básica completó un semestre con incrementos y se situó en 3,65%. Las medidas de expectativas de inflación de los analistas a un año y las que se derivan de los TES a 2, 3 y 5 años en un rango entre 3,1% y 3,6%. En resumen, se espera que la desaceleración que se inició a finales de 2014, a partir de un nivel de actividad cercano a la plena utilización de la capacidad productiva, continúe en 2015. La inflación aumentó principalmente por factores transitorios y sus expectativas se sitúan por encima del 3%. Puesto que parte de la menor dinámica del ingreso nacional es de naturaleza permanente, el gasto interno de la economía debe ajustarse para reducir las vulnerabilidades y generar así las condiciones de un crecimiento sostenido en el futuro. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA Los miembros de la Junta concuerdan en que el 2015 traerá una desaceleración en el crecimiento del producto, pero difieren en la magnitud de dicha desaceleración. Mientras que algunos miembros esperan un crecimiento del PIB cercano a 3%, otros creen que estará más próximo a 3,5% o incluso por encima de esa cifra. Destacaron que el menor crecimiento del gasto interno, complementado por la sustitución de importaciones, y, con mayor rezago, por las mayores exportaciones, inducidas por la depreciación real del peso, hacen parte de un ajuste necesario de la economía colombiana a las nuevas condiciones externas. Dicho ajuste traerá con el tiempo un menor desequilibrio externo y, en consecuencia, contribuirá a preservar las condiciones necesarias para un crecimiento económico sostenido. Los miembros de la Junta concordaron en que la inflación total al consumidor ha mostrado presiones al alza generadas por aumentos temporales en los precios de los alimentos y, en menor medida, por el traspaso de la devaluación a los precios de los bienes transables de la canasta familiar. Se prevé que la presión empiece a ceder en el segundo semestre y que la inflación vaya convergiendo a la meta (3%) en el horizonte de política. Se resalta además la importancia de que las expectativas de inflación de mediano plazo continúen ancladas a la meta mencionada, como ha sido el caso hasta ahora. Para algunos miembros de la Junta el crecimiento en 2015 alcanzaría niveles cercanos al 3%, debido a una desaceleración de la demanda interna y a una recuperación leve en las exportaciones no petroleras. Las proyecciones previas incluían un crecimiento en dichas exportaciones que hasta el momento no parece consolidarse, resultando más probable un aumento en este rubro consistente con un crecimiento del PIB total de 3%. Teniendo en cuenta la magnitud del choque externo, un crecimiento del PIB de 3% sería un resultado positivo para la economía en la medida que venga acompañado con una reducción de las vulnerabilidades externas. Otros miembros consideran que el crecimiento del PIB en el 2015 estará más próximo al 3,5% o incluso por encima. El aumento de la demanda externa que se dará con la recuperación de los Estados Unidos y Europa principalmente, los efectos positivos de la devaluación sobre los sectores industrial y agropecuario, la contribución del consumo y la inversión pública, ya financiados por el gobierno, y la dinámica mostrada por el empleo y el crédito, entre otros, permiten prever que la desaceleración y el necesario ajuste de la economía, asociado con la caída en los términos de intercambio, se darán en forma ordenada y permitirán alcanzar una tasa de crecimiento destacable en el contexto latinoamericano. Un miembro de la Junta reiteró su pronóstico de crecimiento del 3% del PIB para 2015, con un sesgo a la baja. Señaló que la fuente principal del incremento de la inflación, que ha llevado la tasa de interés real de política a terreno negativo, ha sido la inflación de alimentos, producida por un choque de oferta transitorio. Agregó, que es de esperar que a finales de 2015 la inflación total termine cerca del límite superior del rango meta, y que a lo largo de 2016 converja hacia el 3%. Por tanto, no obstante la ostensible desaceleración de la economía y el retorno de la brecha del producto a signo negativo, la tasa de interés nominal de política debería mantenerse inalterada al menos durante lo que resta del año. Lo anterior, siempre y cuando las expectativas de inflación no se desanclen de la meta, caso en el cual habría que considerar el cambio de postura de la política monetaria. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva por unanimidad consideró mantener la tasa de interés de intervención en 4,5%. Bogotá.
2015-05-01
- Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 22 de mayo de 2015 El 22 de mayo de 2015 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca, César Vallejo Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo. A continuación se presenta una síntesis de la visión del equipo técnico del Banco de la República sobre la situación macroeconómica (sección 1) y posteriormente se reseñan las principales discusiones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2). Un mayor detalle de la situación macroeconómica elaborada por el equipo técnico del Banco de la República se presentará en el Informe sobre Inflación del segundo trimestre de 2015 y en el anexo estadístico. 1. CONTEXTO MACROECONÓMICO Las nuevas cifras de actividad económica mundial para el primer trimestre de 2015 ratificaron la debilidad de la demanda externa. En ese periodo el crecimiento de los Estados Unidos fue bajo e inferior a lo estimado, mientras que la expansión de la zona del euro fue débil aunque algo mayor que lo proyectado. El PIB de China volvió a desacelerarse mientras que las cifras de actividad económica de los principales países de la región sugieren que su producto se expandirá a tasas bajas o negativas. Con ello, es factible que en 2015 el crecimiento económico promedio de nuestros socios comerciales sea menor que el observado un año atrás. En los Estados Unidos se espera que el incremento en la tasa de interés de referencia de la Reserva Federal se inicie hacia finales del presente año. Por su parte, el banco central de la zona del euro y el de Japón continuaron su política de fuerte estímulo monetario. En la zona del euro y en menor medida en los Estados Unidos, aumentaron las tasas de interés de largo plazo de los títulos de deuda pública, pero se mantienen en niveles menores que el promedio registrado en 2014. El dólar, que en abril y comienzos de mayo se había depreciado frente a la mayoría de monedas, en la última semana cambió dicha tendencia. Dentro de los principales países de la región, la depreciación del peso frente al dólar ha sido de las más acentuadas en la última semana. Los precios del petróleo se han recuperado parcialmente pero siguen con niveles muy inferiores al promedio observado en el último lustro. Este comportamiento y el de otros precios de bienes básicos que exporta e importa Colombia indican que en 2015 los términos de intercambio registrarían niveles bajos y similares a los observados a inicios de 2009. Esta caída en los términos de intercambio genera una pérdida significativa en la dinámica del ingreso nacional. El anterior comportamiento de la demanda externa y de los precios de los bienes básicos se ha visto reflejado en los resultados de comercio exterior en dólares. En el primer trimestre de 2015 las exportaciones descendieron 30,2%, caída explicada principalmente por las de origen minero (- 41,8%), especialmente por el menor precio del petróleo. En el mismo periodo las ventas externas de los principales productos agrícolas aumentaron 24,5%, mientras que las del resto de sectores descendieron 11,6%. En el mismo periodo, las importaciones totales CIF acumularon una caída de 4,4%. En el contexto interno, la nueva información para el primer trimestre y abril de 2015 indican que en ese periodo la actividad económica habría sido menos dinámica que la registrada en el último trimestre de 2014. Los datos de comercio al por menor, de confianza del consumidor y la encuesta de expectativas económicas del Banco de la República, sugieren una desaceleración del consumo y la inversión privada. Por el lado de la oferta, la caída de la producción industrial, el menor crecimiento de la demanda de energía no regulada, y el descenso en la percepción presente y futura del comercio indican que el crecimiento económico seguirá desacelerándose. Otra información como la producción de petróleo, café y cemento sugiere buenos comportamientos. En el mercado laboral, las cifras a marzo de 2015 muestran que la tasa de desempleo (desestacionalizada) sigue en niveles históricamente bajos, con una tasa de ocupación dinámica que se explica principalmente por el empleo asalariado. En abril la deuda total de las empresas y los hogares creció a una tasa menor que la registrada en el primer trimestre, pero mayor que el aumento del PIB nominal estimado para el presente año. Lo anterior se dio junto con unas tasas de interés (comercial y consumo) que disminuyeron y que en términos reales siguen en niveles inferiores a sus promedios históricos (exceptuando tarjetas de crédito). Con todo lo anterior, el equipo técnico estima que el crecimiento del primer trimestre estaría entre 2% y 3,5%, con 2,7% como cifra más factible. Para todo 2015, la cifra más probable de crecimiento sería 3,2%, contenida en un rango entre 2% y 4,0%. La amplitud del intervalo refleja la incertidumbre que se tiene sobre los supuestos hechos en los posibles escenarios extremos. En materia de precios, en abril la inflación se incrementó y se situó en 4,64%, cifra superior a la proyectada por el promedio del mercado y por el equipo técnico. La aceleración en la inflación se explicó principalmente por el mayor ritmo de aumento en los precios de los alimentos, y en menor medida, por el incremento en los precios de los transables y no transables sin alimentos ni regulados. El promedio de las medidas de inflación básica completó siete meses con incrementos y se situó en 3,84%. Las medidas de expectativas de inflación de los analistas a uno y dos años y las que se derivan de los TES a 2, 3 y 5 años están en un rango entre 3,1% y 3,5%. En resumen, el aumento observado de la inflación ha obedecido a factores transitorios y sus expectativas a mediano plazo se mantienen cerca del 3% en un contexto de desaceleración de la demanda agregada. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA Los miembros de la Junta coincidieron en que la reducción de los términos de intercambio tiene un componente permanente que afecta negativamente el ingreso nacional, por lo que la demanda interna debe ajustarse. Este proceso de ajuste a las nuevas condiciones externas se está dando de manera ordenada. Igualmente, estuvieron de acuerdo en que, como parte de este proceso, se desacelerará el crecimiento del producto. Sin embargo, difieren en la magnitud de la desaceleración y de la brecha del producto resultante de este comportamiento. Aun así, todos los pronósticos de crecimiento de los miembros de la Junta se encuentran dentro del rango de pronóstico del equipo técnico del Banco (entre 2% y 4%). Los miembros de la Junta coinciden en que la desaceleración del gasto agregado impedirá que se presenten presiones inflacionarias por excesos de demanda y que las expectativas de inflación de mediano plazo están ancladas en niveles coherentes con la meta. El anclaje de las expectativas y la inexistencia de excesos de demanda son elementos fundamentales para que la inflación converja a la meta en el horizonte de política. Concuerdan también en que, de presentarse fenómenos que pongan en riesgo el cumplimiento de la meta de inflación en el horizonte de política, la autoridad monetaria deberá reaccionar para conjurar dicho riesgo. Con respecto al nivel alcanzado por el déficit en la cuenta corriente de la balanza de pagos, señalaron que ésta es una de las fuentes de mayor vulnerabilidad para la economía colombiana y que, en esa medida, el menor crecimiento de la demanda interna y la devaluación real del peso son elementos necesarios para reducirla paulatinamente. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva por unanimidad consideró mantener la tasa de interés de intervención en 4,5%.
2015-06-01
- Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 24 de junio de 2015 El 24 de Junio de 2015 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca, César Vallejo Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo. A continuación se presenta una síntesis de la visión del equipo técnico del Banco de la República sobre la situación macroeconómica (sección 1) y posteriormente se reseñan las principales discusiones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2). Un mayor detalle de la situación macroeconómica elaborada por el equipo técnico del Banco de la República se presentará en el Informe sobre Inflación del segundo trimestre de 2015 y en el anexo estadístico. 1. CONTEXTO MACROECONÓMICO 1. Las nuevas cifras de actividad económica global sugieren que el crecimiento promedio de los socios comerciales de Colombia para 2015 podría ser algo menor que lo estimado en el informe trimestral pasado (1,3%). La recuperación económica en los Estados Unidos estaría siendo más lenta de lo proyectado, mientras que la zona del euro y Japón siguen presentando crecimientos bajos. La economía China continúa desacelerándose, y las cifras de actividad económica de los principales países de la región sugieren que su producto se expandirá a tasas bajas o negativas. Con ello, es factible que en 2015 el crecimiento económico promedio de nuestros socios comerciales sea menor que el observado un año atrás. 2. En los Estados Unidos se espera que el incremento en la tasa de interés de referencia de la Reserva Federal se inicie hacia finales del presente año. Por su parte, el banco central de la zona del euro continuó realizando estímulos monetarios, en medio de una elevada incertidumbre sobre la permanencia de Grecia en la zona. 3. En los Estados Unidos y en la zona del euro aumentaron las tasas de interés de los títulos de largo plazo de la deuda pública, pero se mantienen en niveles menores que el promedio registrado en 2014. El dólar retomó su tendencia hacia la apreciación, pero con una pendiente menos marcada que la observada a inicios de año. En lo corrido del año y dentro de los principales países de la región con un esquema de inflación objetivo, el real brasileño y el peso colombiano han sido las monedas más depreciadas frente al dólar. 4. En lo corrido del mes de junio, los precios del petróleo presentaron niveles superiores a lo proyectado para todo 2015, pero sus cotizaciones siguen siendo muy inferiores al promedio observado en el último lustro. El promedio de los precios de los bienes que importa Colombia ha descendido, pero a un menor ritmo que la caída de los precios exportados. Este comportamiento indica que en 2015, el nivel de los términos de intercambio será bajo y similar al registrado a inicios de 2009, y que se presentará una pérdida significativa en la dinámica del ingreso nacional. 5. El anterior comportamiento de la demanda externa y de los precios de los bienes básicos se ha visto reflejado en los resultados de comercio exterior en dólares. En términos anuales, el valor de las exportaciones volvió a descender en abril, caída explicada principalmente por las de origen minero, especialmente por el menor nivel del precio del petróleo respecto a un año atrás. En el mismo mes, las ventas externas de los principales productos agrícolas y del resto de sectores también descendieron. En el acumulado de los cuatro primeros meses del año, las exportaciones totales en dólares han caído 29%; las de origen minero han descendido 40,2% y las del resto de sectores -9,4%; las ventas externas agrícolas aumentaron 16,9%. 6. En abril las importaciones totales en dólares cayeron 18,2% anual. El mayor descenso presentado por las destinadas a bienes de capital (-23,2%), seguidas de materias primas (-17,5%) y bienes de consumo (-12,3%). Con ello, en los cuatro primeros meses de 2015 las compras totales externas acumulan una caída de 8,1%, hecho explicado por el descenso de las importaciones de materias primas (-16%), de consumo (-2%) y en menor medida de capital (-1%). 7. El comportamiento de las exportaciones e importaciones y el de otros rubros de la balanza de pagos indican que en el primer trimestre de 2015, el déficit de la cuenta corriente relativo al PIB sería mayor que el registrado en todo 2014. 8. En el contexto interno, el crecimiento del primer trimestre de 2015 (2,8%) se desaceleró en línea con lo estimado por el equipo técnico. La demanda interna creció a menor ritmo que un trimestre atrás, pero a una tasa mayor que la proyectada debido a la dinámica de la inversión. Las exportaciones netas cayeron, y su aporte negativo al crecimiento resultó superior a lo estimado, debido al fuerte aumento de las importaciones reales. 9. Por el lado de la oferta, en el primer trimestre de 2015 los sectores más dinámicos fueron las obras civiles; comercio, reparación, restaurantes y hoteles; establecimientos financieros, seguros y actividad inmobiliaria. Por su parte, la industria manufacturera y la explotación de minas y canteras fueron los únicos sectores que presentaron un descenso en su actividad. 10. La nueva información para el segundo trimestre de 2015, de comercio al por menor, de confianza del consumidor y la encuesta de expectativas económicas del Banco de la República, sugieren que el consumo privado crece a una tasa algo menor que la registrada a inicios de año. Por el lado de la oferta, en abril la producción industrial manufacturera volvió a contraerse. 11. En el mercado laboral, las cifras a abril de 2015 registraron un leve incremento de la tasa de desempleo (desestacionalizada), pero sus niveles siguen siendo históricamente bajos. 12. En mayo la deuda total de las empresas creció a una tasa algo superior que la registrada en el primer trimestre, mientras que la de los hogares continúa desacelerándose. Ambos saldos crecen a una tasa mayor que el aumento del PIB nominal estimado para 2015. Lo anterior se ha dado junto con unas tasas de interés (comercial y consumo) que en términos reales siguen en niveles inferiores a sus promedios históricos (exceptuando tarjetas de crédito). 13. En materia de precios, en mayo la inflación descendió y se situó en 4,41%, cifra algo menor que la proyectada por el promedio del mercado y por el equipo técnico. La desaceleración de la inflación se explicó por el menor ritmo de aumento en los precios de los alimentos. Los demás grupos: regulados y transables y no transables sin alimentos ni regulados se aceleraron y sus tasas de aumento se sitúan en la parte superior del rango meta. 14. El promedio de las medidas de inflación básica completó ocho meses con incrementos y se situó en 3,99%. Las medidas de expectativas de inflación de los analistas a uno y dos años y las que se derivan de los TES a 2, 3 y 5 años se mantienen en un rango entre 3,0% y 3,5%. En resumen, la desaceleración que se inició a finales de 2014 continúa en 2015. La inflación disminuyó y sus expectativas continúan cerca del 3%. El gasto interno de la economía continua su proceso de ajuste debido a la menor dinámica del ingreso nacional. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA En opinión de los miembros de la Junta, la nueva información disponible corrobora que continúa el proceso de ajuste ordenado al que se habían referido en reuniones anteriores, marcado por una reducción gradual en el crecimiento de demanda interna y del producto. Todo ello va en línea con la convergencia de la inflación a la meta de largo plazo y contribuye a la reducción en el déficit en la cuenta corriente de la balanza de pagos. En materia de precios, destacaron que la inflación anual se redujo, pero aumentaron las inflaciones básicas. El incremento en los precios de algunos bienes y servicios ha tenido una persistencia mayor a la esperada, lo que ha elevado las proyecciones de inflación para el 2015. Sin embargo, el buen anclaje de las expectativas de inflación y los excesos de capacidad instalada que se generarán como consecuencia de la desaceleración del producto permiten prever que la inflación convergerá a la meta en el horizonte de política. Señalaron también que el déficit en la cuenta corriente de la balanza de pagos es una vulnerabilidad para la economía colombiana. El menor crecimiento de la demanda interna y la devaluación real del peso son elementos necesarios para reducirlo paulatinamente. Finalmente, subrayaron que la flexibilidad cambiaria es un elemento fundamental del esquema de inflación objetivo, que permite que la tasa de cambio absorba choques externos. Este marco de política le ha permitido a la economía colombiana afrontar los choques de términos de intercambio y la volatilidad de los mercados financieros internacionales. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva por unanimidad consideró mantener la tasa de interés de intervención en 4,5%. Bogotá D. C.
2015-07-01
- Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 31 de Julio de 2015 El 31 de Julio de 2015 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca, César Vallejo Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo. A continuación se presenta una síntesis de la visión del equipo técnico del Banco de la República sobre la situación macroeconómica (sección 1) y posteriormente se reseñan las principales discusiones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2). Un mayor detalle de la situación macroeconómica elaborada por el equipo técnico del Banco de la República se presentará en el Informe sobre Inflación del segundo trimestre de 2015 y en el anexo estadístico. 1. CONTEXTO MACROECONÓMICO En el presente informe el crecimiento proyectado para 2015 de la mayoría de los socios comerciales de Colombia fue revisado a la baja por el equipo técnico. De esta forma, para 2015 se estima una demanda externa más débil con una dinámica inferior a la registrada en 2014. En Estados Unidos el PIB del primer y segundo trimestre de 2015 muestran una moderación en su crecimiento. La zona del euro mantiene una lenta recuperación mientras que en China se aumentó la probabilidad de que su desaceleración sea más fuerte que la esperada. Los principales países socios de Colombia en América Latina siguen registrando bajos crecimientos y algunas caídas en su actividad económica. En los mercados financieros internacionales, el acuerdo entre Grecia y sus acreedores redujo de forma importante la aversión al riesgo global. En China los malos resultados registrados por las empresas generaron caídas importantes en el mercado bursátil desde niveles históricamente altos. En Estados Unidos aumentó la probabilidad de que se presente un incremento en la tasa de interés de referencia por parte de la Reserva Federal y con ello las tasas de interés de mercado han aumentado y el dólar se sigue fortaleciendo. Las menores perspectivas de crecimiento mundial, los altos niveles de producción de crudo y las mayores perspectivas de oferta de este bien básico, generaron en las últimas semanas una caída en los precios internacionales del petróleo. Estos nuevos niveles se situaron por debajo de la estimación que tiene el equipo técnico para el promedio de 2015. Algo similar ocurrió con las cotizaciones de otros bienes básicos mineros que exporta Colombia. De esta forma, en el presente año la caída de los términos de intercambio seguirá teniendo un efecto negativo significativo sobre el ingreso nacional. Los menores precios de los bienes básicos y la debilidad en la demanda externa se ha reflejado en el comportamiento de las ventas externas en dólares de Colombia. En el bimestre abril-mayo, las exportaciones continuaron registrando caídas anuales importantes. Los mayores descensos se presentaron en las ventas externas de origen minero, seguidas por las caídas en las exportaciones de bienes agrícolas y del resto de sectores. En abril-mayo el descenso anual en el valor en dólares de la importaciones también fue importante, aunque menor que el registrado por las exportaciones. Las mayores caídas se presentaron en las compras externas de bienes de capital, seguidas por los descensos en las importaciones de materias primas y para consumo. Con la nueva información, el equipo técnico revisó al alza la proyección que se tiene para 2015 del déficit en la cuenta corriente relativo al PIB. El nuevo intervalo se sitúa entre 4,8% y 6,4%, con 5,6% como cifra más factible. Esta revisión tiene en cuenta un balance más negativo en el comercio de servicios no factoriales, compensado parcialmente por unas exportaciones netas menos deficitarias y unos menores egresos netos por renta de factores. En el contexto interno, los indicadores de comercio al por menor, de confianza al consumidor y del comercio, de expectativas económicas de la encuesta mensual del Banco de la República, de importaciones de bienes de capital y de consumo, indican que en el segundo trimestre de 2015 la absorción se habría desacelerado nuevamente. El déficit comercial medido en pesos constantes se habría reducido. En el mercado laboral, la tendencia decreciente de la tasas de desempleo (desestacionalizada) muestra señales de interrumpirse. En los últimos meses, la tasa global de participación se ha mantenido relativamente estable mientras que la de ocupación ha disminuido. Las tasas reales de interés se han reducido y se sitúan por debajo de sus promedios históricos calculados desde el 2000 (exceptuando tarjetas de crédito). El crédito total se ha desacelerado pero crece a tasas superiores que el aumento del PIB nominal. Con todo lo anterior, el equipo técnico estima que el crecimiento de la economía para el segundo trimestre de 2015 habría sido similar al registrado en el primero. Para todo 2015, la cifra más probable se revisó desde 3,2% a 2,8%, contenida en un rango entre 1,8% y 3,4%. En junio la inflación anual se mantuvo relativamente estable y situó en 4,42%, cifra algo inferior a lo estimado por el equipo técnico y por el promedio del mercado. En esta oportunidad el menor ritmo de aumento del IPC de regulados compensó los aumentos registrados en los otros grupos. El promedio de las cuatro medidas de inflaciones básicas volvió a incrementarse y se situó en 4,14%. Las expectativas de inflación a uno y dos años de los analistas financieros permanecieron relativamente estables. Las que se calculan con los papeles de deuda pública a más de dos años re redujeron. Todas se sitúan alrededor del 3%. En resumen, la inflación se mantiene por encima del límite superior del rango meta, las expectativas de inflación se encuentran alrededor de 3% y el gasto interno de la economía continúa ajustándose a la menor dinámica del ingreso nacional. Se espera que en el horizonte de acción de la política monetaria los choques temporales de precios se reviertan en un entorno de expectativas de inflación ancladas en la meta. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA Los miembros de la Junta resaltaron el ajuste gradual del gasto interno de la economía a la menor dinámica del ingreso nacional y la existencia de un nivel de inflación que se encuentra por encima del límite superior del rango meta. Se espera que en el horizonte de acción de la política monetaria los choques temporales de precios se reviertan en un entorno de expectativas de inflación ancladas en la meta. Para algunos, existen factores que aumentan el riesgo de que en un futuro las expectativas de inflación se desvíen de la meta, lo cual podría ser argumento para un incremento preventivo de la tasa de interés. Sin embargo, ante la magnitud del choque de términos de intercambio, existen también riesgos elevados de que la economía crezca por debajo de lo previsto en los modelos estimados por el equipo técnico. En esta medida consideran apropiado no aumentar la tasa de interés de intervención de forma pro cíclica a menos que la probabilidad de que se comprometa la credibilidad de la política monetaria se incremente o de que el ajuste en el gasto esté siendo insuficiente para guiar la inflación a su meta de largo plazo. Otros consideraron que, dado que la inflación se mantuvo relativamente estable en 4,42% y sus expectativas continúan dentro del rango meta y se espera que la demanda interna sufra un choque significativo, es prudente esperar y obtener mayor información relacionada con el comportamiento de los precios, en especial el impacto del pass through. Un aumento de la tasa de interés de intervención en este momento sería inapropiado, porque la inflación sigue presentándose por fenómenos temporales, y un cambio en la señal de política podría afectar las expectativas en un contexto donde estas se encuentran ancladas. Un tercer grupo manifestó su preocupación por el persistente ascenso del promedio de los indicadores de inflación básica durante nueve meses consecutivos, el cual además ya superó el límite superior del rango meta (4%), y por la probabilidad consiguiente de que las expectativas se desanclen de aquella. Opinó adicionalmente que, en la coyuntura actual, parece más probable el riesgo de mayor inflación que el de una desaceleración excesiva y subrayó que la clave de una buena política monetaria yace en la capacidad de anticipación de sus autoridades. Un menor estímulo monetario en 25 p.b. no debería tener un excesivo impacto adicional en la desaceleración de la economía y en el empleo. Tendría la ventaja de reforzar el anclaje de las expectativas de inflación a la meta, reducir la presión devaluacionista y contribuir a corregir el déficit en cuenta corriente. Sería además una señal del compromiso del Banco con el control de la inflación y aumentaría la credibilidad de la autoridad monetaria. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva por mayoría consideró mantener la tasa de interés de intervención en 4,5%.
2015-08-01
- Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 21 de agosto de 2015 El 21 de Agosto de 2015 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca, César Vallejo Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo. A continuación se presenta una síntesis de la visión del equipo técnico del Banco de la República sobre la situación macroeconómica (sección 1) y posteriormente se reseñan las principales discusiones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2). Un mayor detalle de la situación macroeconómica elaborada por el equipo técnico del Banco de la República se presentará en el Informe sobre Inflación del segundo trimestre de 2015 y en el anexo estadístico. 1. CONTEXTO MACROECONÓMICO 1. En el presente informe las cifras de actividad económica mundial continúan reflejando una débil dinámica de la demanda externa e inferior a la registrada en 2014. En los Estados Unidos la economía habría seguido creciendo a tasas favorables mientras que la zona del euro se recupera aunque a una tasa algo inferior a la prevista. En China, la actividad económica continúa desacelerándose y las principales economías de América Latina registran bajos aumentos o retrocesos del producto. 2. En Estados Unidos y en la zona del euro las tasas de interés de largo plazo han disminuido pero se mantienen en niveles superiores al promedio registrado en 2014. En China, el yuan se devaluó y persisten las caídas en el mercado bursátil desde niveles históricamente altos. En Estados Unidos se mantiene elevada la probabilidad de que se presente un incremento en la tasa de interés de referencia de la Reserva Federal y el dólar se sigue fortaleciendo. 3. Las menores perspectivas de crecimiento mundial, los altos niveles de producción de crudo y las mayores perspectivas de oferta de este bien básico, volvieron a generar caídas en los precios internacionales del petróleo. Estos nuevos niveles de precios se sitúan por debajo de la estimación que tiene el equipo técnico para el promedio de 2015. Algo similar ocurrió con las cotizaciones de otros bienes básicos mineros que exporta Colombia. De esta forma, en el presente año la caída de los términos de intercambio seguirá siendo importante con un efecto negativo y significativo sobre el ingreso nacional. 4. Los menores precios de los bienes básicos y la debilidad en la demanda externa se ha reflejado en el comportamiento de las ventas externas en dólares de Colombia. En el segundo trimestre las exportaciones continuaron registrando caídas anuales importantes (-32,6%). En ese periodo los mayores descensos se presentaron en las ventas externas de origen minero (-43,3%), seguidas por las caídas en las exportaciones de bienes agrícolas (-13,9%) y del resto de sectores (-3%). 5. La nueva información de comercio exterior continúa sugiriendo que en el presente año el déficit de la cuenta corriente relativo al PIB será mayor que el registrado en 2014. Para el presente año el intervalo de pronóstico se mantiene entre 4,8% y 6,4%, con 5,6% como cifra más factible. 6. En el contexto interno, los indicadores para el segundo trimestre de comercio al por menor, de confianza al consumidor y del comercio, y de expectativas económicas del Banco de la República, indican que la absorción continúa desacelerándose. Por el lado de la oferta, en el mismo periodo, la industria se contrajo y los indicadores de construcción sugieren una desaceleración en el sector. Las cifras de julio muestran una caída en la confianza del consumidor y en la producción de petróleo, mientras que la producción de café registró un aumento importante. 7. En el mercado laboral, la tasa de desempleo (desestacionalizada) dejó de caer y en términos anuales la creación de empleo se ha desacelerado. En junio, al descontar los efectos estacionales, la tasa global de participación y la tasa de ocupación descendieron. 8. Las tasas reales de interés se redujeron y se sitúan por debajo de sus promedios históricos calculados desde el 2000 (exceptuando tarjetas de crédito). El crédito comercial se ha desacelerado mientras que el dirigido a los hogares mejoró su dinámica. Ambos tipos de crédito crecen a tasas superiores que el aumento del PIB nominal. 9. Con todo lo anterior, el equipo técnico mantuvo su estimación de crecimiento económico para el segundo trimestre de 2015 entre 2,0% y 3,5%, con 2,7% como cifra más probable. Para todo 2015, la cifra más factible sigue en 2,8%, contenida en un rango entre 1,8% y 3,4%. 10. En julio la inflación anual se incrementó levemente y situó en 4,46%, cifra algo superior a lo estimado por el equipo técnico y por el promedio del mercado. En esta oportunidad la aceleración del IPC sin alimentos explicó el mayor ritmo de aumento de la inflación. Las otras medidas de inflación básica también se incrementaron y su promedio se situó en 4,29% y acumuló diez meses con aumentos consecutivos. 11. Las expectativas de inflación de los analistas financieros a uno y dos años y las que se calculan con los papeles de deuda pública a más de dos años se incrementaron. Todas estas medidas son inferiores que el actual registro de inflación y se sitúan en la parte superior del rango meta. En resumen, la inflación se mantiene por encima del límite superior del rango meta y el gasto interno de la economía continúa ajustándose a la menor dinámica del ingreso nacional. Las proyecciones indican que en el horizonte de acción de la política monetaria los choques temporales de precios se revertirán y los probables excesos de capacidad contribuirán a que la inflación converja a la meta en un entorno de expectativas de inflación ancladas. No obstante, el traslado parcial de la devaluación del peso a los precios y una eventual intensificación del fenómeno de El Niño podrían hacer más lenta dicha convergencia. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA Los miembros de la Junta resaltaron que la economía colombiana ha recibido un choque muy fuerte asociado a la caída de los precios del petróleo, que reduce el crecimiento y aumenta la inflación en el corto plazo -en la medida que la devaluación se traslada parcialmente a los precios-. Ese incremento de la inflación es temporal siempre y cuando las expectativas de inflación se mantengan ancladas cerca de la meta del Banco de la República. Por su parte, el menor crecimiento es la respuesta de la economía al ajuste necesario de la demanda interna ante un menor ingreso nacional, fruto del choque negativo de términos de intercambio. Para algunos miembros de la Junta, la información reciente podría estar sugiriendo un crecimiento del producto menor al esperado por el equipo técnico y, dado el anclaje actual de las expectativas de inflación, consideraron apropiado esperar a tener mayor información sobre la evolución de variables que pueden incidir de manera significativa en el comportamiento futuro de la actividad productiva y las expectativas de inflación. Para ellos, esa nueva información contribuirá a balancear de mejor manera los riesgos entre una mayor inflación y un ajuste excesivo del crecimiento económico, que en el corto plazo se contraponen para la decisión de la postura de política. Otros miembros concuerdan en que la información reciente apunta a un menor crecimiento. Este grupo opinó que en estas condiciones, el escenario más probable es uno en el que se genere un exceso de capacidad productiva en el horizonte de política. Esto apuntalaría la convergencia de la inflación hacia la meta, y dado el anclaje actual de las expectativas de inflación, hace que la postura de política existente lleve al cumplimiento de sus objetivos. Así mismo señalaron que, si bien las expectativas de inflación se encuentran ancladas a la meta, los riesgos de que dejen de estarlo están asociados principalmente a la dinámica de corto plazo del tipo de cambio, la cual tiene una relación débil con la tasa de interés de intervención. Por lo tanto consideran fundamental fortalecer la comunicación con el público respecto de la naturaleza de la inflación y los mecanismos de convergencia de la misma hacia la meta de mediano plazo. Otro grupo manifestó que la presión al alza de la inflación, proveniente del traslado de la devaluación a los precios, si bien es temporal, se manifiesta más rápidamente que la presión desinflacionaria proveniente de la desaceleración de la demanda interna y los excesos de capacidad productiva. Esto puede desanclar las expectativas de inflación, produciendo un espiral de precios y una situación de inestabilidad que haga inevitables drásticas medidas de política en el futuro. Ese riesgo de desancle ha crecido significativamente en un escenario en el que la inflación completa medio año por encima del límite superior del rango meta, que ha seguido subiendo aun sustrayéndole la inflación de alimentos, y en el que el promedio de los indicadores de inflación básica ha aumentado por décimo mes consecutivo y se sitúa también por encima del límite superior de dicho rango. Consideran además que, dado lo anterior y una tasa de interés real cercana a cero en los últimos meses, reajustes tempranos de la tasa de referencia podrían evitar posteriores alzas de mayor magnitud. En su opinión, un aumento de 25 p.b. sería una señal que contribuiría a que no se desanclen las expectativas a través del fortalecimiento de la credibilidad del Banco. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva por mayoría consideró mantener la tasa de interés de intervención en 4,5%.
2015-09-01
- Minutas de la reunión de la Junta Directiva del Banco de la República del 25 de Septiembre de 2015 El 25 de Septiembre de 2015 se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá D.C. la reunión ordinaria de la Junta Directiva del Banco de la República con la presencia del Ministro de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, el Gerente General, José Darío Uribe Escobar y los Directores, Carlos Gustavo Cano Sanz, Ana Fernanda Maiguashca Olano, Adolfo Meisel Roca, César Vallejo Mejía y Juan Pablo Zárate Perdomo. A continuación se presenta una síntesis de la visión del equipo técnico del Banco de la República sobre la situación macroeconómica (sección 1) y posteriormente se reseñan las principales discusiones de política consideradas por la Junta Directiva (sección 2). Un mayor detalle de la situación macroeconómica elaborada por el equipo técnico del Banco de la República se presentará en el Informe sobre Inflación del tercer trimestre de 2015 y en el anexo estadístico. 1. CONTEXTO MACROECONÓMICO Las cifras de actividad económica mundial continúan reflejando una débil dinámica de la demanda externa e inferior a la registrada en 2014. En los Estados Unidos la economía habría seguido creciendo a tasas favorables mientras que la zona del euro se recupera lentamente. En China, continúa la desaceleración, y su banco central implementó nuevas medidas de estímulo. Las principales economías de América Latina registran bajos aumentos y en algunos casos retrocesos. En su reunión de septiembre la Reserva Federal de los Estados Unidos decidió no incrementar su tasa de interés. Según su comunicado, esta decisión obedeció a la mayor incertidumbre en el panorama internacional y a presiones inflacionarias menores a las esperadas. A pesar de ello, las proyecciones de los miembros del Comité Federal de Operaciones de Mercado Abierto (FOMC) de la Fed sugieren que subirían su tasa de política en la última parte del año y que continuarían con alzas graduales a futuro. En lo corrido del presente mes los indicadores de volatilidad de los mercados financieros se redujeron desde los elevados niveles que presentaron a finales de agosto. Las primas de riesgo de las economías más grandes de la región han permanecido en niveles superiores a los de 2014 y las cotizaciones de las monedas respecto al dólar mantienen una alta volatilidad. En las últimas semanas, el precio internacional del petróleo tuvo una leve recuperación pero se mantiene bajo (menos de USD 50 para la referencia Brent) y con alta volatilidad. Las cotizaciones internacionales de otros bienes básicos continúan siendo muy inferiores a los niveles registrados en los últimos años. Esto ha generado una caída en los términos de intercambio de los países que los exportan y ha deteriorado su ingreso nacional. En el presente año, esta tendencia ha sido especialmente acentuada en Colombia. Las cifras del segundo trimestre de 2015 muestran que el ajuste del déficit externo del país estaría ocurriendo de forma más lenta que la esperada, hecho explicado principalmente por el comportamiento de la balanza comercial de bienes. Los bajos precios de los bienes básicos y la debilidad en la demanda externa relevante para el país se han reflejado en un deterioro de las ventas externas (-32,6% acumulado a julio) superior que el proyectado. Las importaciones han caído a una tasa más lenta que lo pronosticado (-12,1% acumulado a julio). En el contexto interno, los resultados del PIB del segundo trimestre revelados por el DANE mostraron un crecimiento de la economía (3% anual) un poco mejor que lo proyectado. La demanda interna se desaceleró de manera significativa, en línea con lo esperado. El ajuste se dio principalmente por el rubro de inversión en maquinaria y equipo de transporte, mientras que el consumo privado se desaceleró a una tasa más lenta. Tanto las exportaciones como las importaciones cayeron en términos reales, pero su contribución neta al crecimiento del PIB fue positiva. Por el lado de la oferta, los sectores que más crecieron fueron la construcción y la minería (8,7% y 4,2%, respectivamente), y la única rama que reportó una disminución en su producción fue la industria (-1,3%). La información disponible para el tercer trimestre no muestra cambios en estas tendencias. Para todo 2015, el equipo técnico mantuvo su estimación de crecimiento económico en 2,8% como cifra más probable, contenida en un rango entre 1,8% y 3,4%. En el mercado laboral, la tasa de desempleo descendió en julio, lo cual se explica por un menor nivel de la participación laboral y no por un aumento de la contratación. Adicionalmente, el empleo asalariado y formal se ha desacelerado en los últimos meses. Las tasas reales de interés se mantienen por debajo de sus promedios históricos calculados desde el 2000 (exceptuando tarjetas de crédito). El crédito a las empresas y a los hogares continúa creciendo por encima del PIB nominal. En agosto la inflación anual se incrementó y se situó en 4,74%. En lo corrido del año se acumuló una inflación de 4,02%. La mayor parte del aumento se explica por el componente del IPC transable sin alimentos ni regulados y por los alimentos. Los cuatro indicadores de inflación básica también superaron el techo del rango meta y su promedio se situó en el máximo desde junio de 2009. En términos mensuales y con series desestacionalizadas, más del 80% de los ítems de la canasta del IPC mostraron incrementos en sus precios. Las expectativas de inflación de los analistas financieros y las que se calculan a partir de los papeles de deuda pública se incrementaron significativamente en septiembre. Estas últimas, calculadas a 2, 3, 5 y 10 años, se ubicaron, en promedio al 22 de septiembre, por encima del techo del rango meta. En resumen, la nueva información disponible muestra un aumento continuo y mayor al esperado de la inflación y de las medidas de inflación básica, así como la aparición de señales de posible "desanclaje" de las expectativas de inflación. Los fuertes aumentos de los precios de los bienes que se ven más afectados por la depreciación del peso han continuado presionando la inflación al alza. Los precios de los otros bienes y servicios también muestran variaciones crecientes, lo cual puede reflejar la presencia de indexación, la expectativa de mayor inflación en el futuro o presiones de costos en esos sectores. El fenómeno de El Niño se intensificó y aumentó el riesgo de incrementos adicionales en los precios de los alimentos y la energía. Los datos recientes de crecimiento y actividad económica confirman una desaceleración de la producción y el gasto en línea con las proyecciones del equipo técnico del Banco y compatible con la corrección del déficit externo del país. Así, el riesgo de un aumento duradero de la inflación y de un desanclaje de las expectativas de inflación se incrementó, mientras que el riesgo de una desaceleración excesiva de la actividad económica no ha presentado un cambio notorio. 2. DISCUSIÓN Y OPCIONES DE POLÍTICA La Junta en el mes de septiembre de 2015 decidió aumentar la tasa de interés en 25 puntos básicos, después de 13 meses de haber mantenido dicha tasa estable, al percibir un cambio en el balance de riesgos que enfrenta la economía. Todos los miembros de la Junta concuerdan que la economía colombiana se está ajustando al fuerte choque de ingreso derivado de la caída del precio internacional del petróleo que ha generado una depreciación sustancial del peso, la cual es necesaria para lograr una reorientación sectorial del gasto y la producción, conducente al ajuste de las cuentas externas del país. Por su gran magnitud, la devaluación ha elevado la inflación de los precios al consumidor, y dicho aumento se ha visto reforzado por otras presiones de oferta sobre los alimentos especialmente. Sin embargo, consideran que este choque es transitorio, puesto que no se espera una depreciación adicional, fuerte y continua, y así mismo esperan que los fenómenos que están afectando los precios de los alimentos desaparezcan en el horizonte de política. Aunque ha habido diferentes percepciones de los riesgos existentes a la baja en términos de crecimiento y en consecuencia de la posibilidad de que se dé un ajuste mayor al necesario, en particular en un contexto de débil demanda externa, esa percepción se ha reducido. Por el contrario, han aumentado los riesgos de "desanclaje" de las expectativas de inflación en presencia de un aumento continuo y mayor al esperado de la inflación y de las medidas de inflación básica. Los indicadores de expectativas de inflación aumentaron y aquellos derivados de los precios de la deuda pública a corto y largo plazo se sitúan por encima de 4%. Ante este cambio en el balance de riesgos que enfrenta la economía, con mayores riesgos de un aumento duradero de la inflación y de un desanclaje de las expectativas de inflación, la Junta Directiva decidió aumentar en 25 pbs la tasa de interés de referencia del Banco de la República. Con la información actual considera que este aumento es coherente con la convergencia de la inflación hacia la meta del 3%. 3. DECISIÓN DE POLÍTICA La Junta Directiva por unanimidad decidió incrementar la tasa de interés de intervención en 25 pb y la situó en 4,75%.